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JJV Tesis
JJV Tesis
TESIS DOCTORAL
Presentada por:
CODIRIGIDA POR:
Julio, 2012
A mis padres, Mercedes y José,
por darnos a mí y a mis hermanas todo
sin devolución, y ayudarnos a ser
quienes somos hoy, os quiero.
A mis hermanas, Esther y Sonia,
por apoyarme siempre en los momentos
duros que he pasado en este periodo y
en otros.
A Raquel,
mi pareja y mi amor, por ser como eres,
y por estar siempre ahí.
AGRADECIMIENTOS
En este momento final en el que ves el proyecto en el que has dedicado mucho
tiempo y esfuerzo acabado, no queda más que echar la vista atrás y recordar
que, sin muchas personas que me han acompañado en este recorrido no
hubiera sido posible estar aquí, delante del ordenador, pensando y
confirmando que esto ya llegó a su fin, que lo hemos conseguido. Por ello
quiero que quede constancia mi agradecimiento a todas las personas que de
una u otra forma han sido partícipes de esta tesis que hoy doy por acabada.
En primer lugar a mis tutores, Dr. Gerard Moras y Dr. Julio Tous, por
enseñarme a desarrollar una tesis y acompañarme en este proceso
ayudándome y animándome en todo momento.
A mis amigos Jose Mª Marull y Xavi Álvaro, que no han tenido un no para dejar
lo que estuvieran haciendo y ayudarme en los momentos que he necesitado su
ayuda.
A Jorge García, Xavi Haro, Víctor Vila, Fernando Maniega, Jorge Dorado
amigos, preparadores físicos y/o entrenadores que me permitieron trabajar con
sus jugadores, no poniendo reparos en ningún momento para modificar
algunos de sus entrenamientos para que los estudios se pudieran realizar en
las mejores condiciones.
A los 56 jugadores con los que hemos podido contar como muestra, que se
implicaron al máximo, desinteresadamente, para poder llevar a cabo los
estudios.
1.5 CONCLUSIONES 22
EL CAMBIO DE DIRECCIÓN…………………………87-104
OBJETIVOS 111
1 ESTUDIO 1..................................................................................117-134
2 ESTUDIO 2…………………………………………………………...135-158
“Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta
intensidad (sprint lineal vs. Cambios de dirección) en la
fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica
y la tensiomiografía”
3 ESTUDIO 3..................................................................................159-174
“Especificidad en dos métodos de entrenamiento de
CRS con patrones de movimiento diferentes”
4 ESTUDIO 4…………………………………………………………...175-199
“Relaciones entre CRCD y manifestaciones de PMAX en
deportistas de equipo”
CONCLUSIONES 200
BIBLIOGRAFÍA 209
ACRÓNIMOS
[HHb]]: Desoxihemoglobina
[La]]: concentración de Lactato
ADP: Adenosindifosfato
ATP: Adenosintrifosfato
Ca2+: Calcio
CCI: Coeficiente de correlación intraclase
CEA: Ciclo estiramiento-acortamiento
CK: Creatinkinasa
CMJ: Countermovement jump traducido como salto con contramovimiento
CO2: Dióxido de Carbono
CRCD: Capacidad de repetir cambios de dirección.
CRS: Capacidad de repetir esprints
CVM: contracción Voluntaria máxima
DJ: Drop Jump traducido como salto en caída
Dm: Desplazamiento máximo radial
EIAI: Entrenamiento Interválico de alta intensidad
EICD: Entrenamiento interválico de corta duración
EILD: Entrenamiento Interválico de larga duración
EMI: Entrenamiento muscular inspiratorio
EPO: Eritropoyetina
ERCD: Entrenamiento de repetir cambios de dirección
ERS: Entrenamiento de repetir sprints
GPS: Global Positioning Systems (sistemas de posicionamiento global)
H+ : Hidrogeniones
IRMf: Resonancia magnética funcional
K+: Potasio
LCA: Ligamento cruzado anterior
NaHCO3: Bicarbonato sódico
NIRS: Espectometria de infrarrojo cercano
O2: Oxígeno
PC: Fosfocreatina
Pi: Fosfato inorgánico
PO2: Presión parcial de Oxígeno
r: Correlación de Pearson
r2: Coeficiente de determinación
RAT: Reactive agility tests traducido como tests de agilidad reactiva
RCD: Ejercicio de repetir cambios de dirección
RFD: Rate of force development traducido como gradiente de fuerza
RMS/Onda-M: Relación entre root mean square y la onda-M
RMS: Root mean square traducido como raíz media cuadrada.
RPA: Repeated power ability traducido como capacidad de repetir potencia
RS: Ejercicios de sprint repetidos
RSA: Repeated sprint ability traducido como capacidad de repetir sprints
RST: Repeated sprint training traducido como entrenamiento de repetir sprints
SAQ: Sprint, Agility and Quickness traducido como sprint, agilidad y rapidez
SET: Speed endurance training traducido como entrenamiento de resistencia a la
velocidad
SIT: Sprint Interval training traducido como entrenamiento de sprint interválico
SJ: Squat jump traducido como salto vertical sin contramovimiento
SNC: Sistema Nervioso Central
SO2: Desaturación arterial
ST: Sprint training traducido como entrenamiento de sprint
Tc: Tiempo de contracción
TD: Tiempo de decisión
TMG: Tensiomiografía
TRM: Tiempo de respuesta del movimiento
VL: vasto lateral
VO2 max: Consumo máximo de oxígeno
vOBLA: Velocidad del umbral anaeróbico
Vp: Versa-Pulley (polea cónica)
WAT: “Wingate anaerobic test” traducido como test anaeróbico de Wingate
RESUMEN
Los profesionales del deporte, entrenadores, preparadores físicos y científicos,
continuamente se esfuerzan por incorporar las mejores prácticas basadas en
evidencias científicas.
Los deportes de equipo, tanto de campo como de cancha, así como los
deportes de raqueta son muy practicados en la gran mayoría de países del
mundo. De cara a comprender mejor los factores que determinan su
complejidad intrínseca han sido investigados exhaustivamente tanto en
situación real como simulada para así poder diseñar los mejores métodos de
trabajo para su mejora.
1
esta capacidad en estos deportes. En la tercera sección se trata el cambio de
dirección en sí. Un patrón de movimiento fundamental en los deportes
analizados. Aunque en esta tesis el interés se centra fundamentalmente en el
rendimiento de los cambios de dirección, también abordaremos la incidencia de
este tipo de acciones en el riesgo de lesión. En la última sección, se presentan
los estudios que han planteado las diferencias entre las acciones intermitentes
de alta intensidad según el patrón de movimiento realizado. En esta sección se
presentan las investigaciones que nos han llevado a plantearnos las preguntas
de esta tesis, asi como otros estudios paralelos que refuerzan aun más nuestro
interés en el objetivo de esta tesis
2
En el tercer estudio que cierra esta primera hipótesis, que estudia la
independencia de naturaleza entre acciones intermitentes lineales y con
cambios de dirección, se valora una intervención longitudinal de 6 semanas de
duración. Comparando dos entrenamientos específicos de acciones
intermitentes (lineal vs. cambios de dirección) suplementando a un
entrenamiento regular de hockey.
3
4
II.MARCO TEÓRICO
- EL CAMBIO DE DIRECCIÓN
5
6
II . MARCO TEÓRICO ANÁLISIS DEL RITMO DE JUEGO
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II . MARCO TEÓRICO ANÁLISIS DEL RITMO DE JUEGO
En las últimas dos décadas, junto a esta evolución tecnológica, ha habido un interés
creciente en el análisis del juego en el fútbol (Di Salvo, Gregson, Atkinson, Tordoff, &
Drust, 2009; Mohr, Krustrup, & Bangsbo, 2003; Reilly, Drust, & Clarke, 2008),
baloncesto (Scanlan, et al., 2011; Scanlan, Dascombe, Reaburn, & Dalbo, 2012; Ben
Abdelkrim, Chaouachi, Chamari, Chtara, & Castagna, 2010; McInnes, Carlson,
Jones, & McKenna, 1995; Narazaki, Berg, Stergiou, & Chen, 2009), balonmano
(Chelly, Hermassi, Aouadi, Khalifa, Van den Tillaar, Chamari & Shephard, 2011;
Povoas, Seabra, Ascensao, Magalhaes, Soares & Rebelo, 2012; Barbero-Alvarez,
Soto, Barbero-Alvarez, & Granda-Vera, 2008; Castagna, D'Ottavio, Granda Vera, &
Barbero Alvarez, 2009; Sheppard, Gabbett, & Stanganelli, 2009), voleibol (Marques,
van den Tillaar, Gabbett, Reis, & Gonzalez-Badillo, 2009; Sheppard, et al., 2009),
rugby (Duthie, Pyne, & Hooper, 2005; Gabbett, Kelly, Ralph, & Driscoll, 2009;
Gabbett, 2010; Meir, Newton, Curtis, Fardell, & Butler, 2001), hockey (Gabbett, 2010;
Spencer, Lawrence, et al., 2004) y waterpolo (D'Auria & Gabbett, 2008) empleando
los datos obtenidos por algunos de los sistemas citados anteriormente. Sin embargo,
debido a la naturaleza de este tipo de deportes, no se ha conseguido estandarizar
un método óptimo para determinar los patrones de actividad y movimiento, así como
la carga de trabajo. Generalmente, tanto el análisis del ritmo de juego como la carga
de trabajo se ha expresado valorando la distancia recorrida total (Bangsbo, Iaia, &
Krustrup, 2007; Krustrup, Mohr, Ellingsgaard, & Bangsbo, 2005). En cuanto a las
acciones discretas realizadas en diferentes categorías de velocidad se acostumbra a
valorar el porcentaje, tiempo o distancias en cada una de las categorías (Ben
Abdelkrim, et al., 2010; King, Jenkins, & Gabbett, 2009; Reilly, Bangsbo, & Franks,
2000), lo mismo ocurre en cuanto a la evolución de estas variables a lo largo del
partido (Di Salvo, et al., 2009; Mohr, et al., 2003; Reilly, 1997) o en fases
determinadas (Mohr, Krustrup, & Bangsbo, 2005), así como la diferenciación entre
posiciones (Di Salvo, et al., 2007), niveles (Bradley, Mascio, Peart, Olsen, &
Sheldon, 2009; Rampinini, Impellizzeri, Castagna, Coutts, & Wisloff, 2009) y
poblaciones (Gabbett, 2002; Sirotic, Coutts, Knowles, & Catterick, 2009).
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II . MARCO TEÓRICO ANÁLISIS DEL RITMO DE JUEGO
Son numerosos los estudios llevados a cabo acerca de las distancias recorridas en
función de la posición de juego (Bangsbo, Norregaard, & Thorso, 1991; Di Salvo, et
al., 2007; Mohr, et al., 2003). Como consecuencia, se ha propuesto que el mayor
esfuerzo físico durante un partido de fútbol lo realizan los jugadores del centro del
campo debido a que el rol que desarrollan se relaciona tanto con acciones de ataque
como de defensa (Rienzi, Drust, Reilly, Carter, & Martin, 2000). Como era de
esperar, estos jugadores cubren más distancia a baja y media intensidad (Rienzi, et
al., 2000) que los delanteros y defensores. Sin embargo, es obvio que el rol táctico
que desempeñen condicionará el análisis. Por ejemplo, el centrocampista de
contención que desarrolla principalmente tareas defensivas, sin duda cubrirá menos
distancia que otros centrocampistas, como los extremos, cuando su equipo esté
atacando. Este patrón de actividad también se ha encontrado en otros deportes de
campo como el rugby (Gabbett, King, & Jenkins, 2008) o el hockey (Spencer,
Lawrence, et al., 2004).
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II . MARCO TEÓRICO ANÁLISIS DEL RITMO DE JUEGO
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II . MARCO TEÓRICO ANÁLISIS DEL RITMO DE JUEGO
1.2.1 Frecuencia
1-. El área de juego de los deportes. Un área pequeña reduce necesariamente las
duraciones empleadas en la realización de un movimiento en particular, por ejemplo,
correr a una determinada velocidad (McInnes, Carlson, Jones, & McKenna, 1995).
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II . MARCO TEÓRICO ANÁLISIS DEL RITMO DE JUEGO
AREA
AREA DEDE JUEGO
JUEGO (m(M2)
2
) (11x11)
9000
8250
(15x15)
8000 375m2 x jug.
*
7000
7000
233m2 x jug.
(11x11)
6000
5027
5000
251m2 x jug
4000
3000
(5x5)
2000 (5x5)
(6x6)** (1-2x1-2)**
800
1000 420
81 98 80m2 x jug.
42m2 x jug.
0 13.5m2 x jug.
VOLEY TENIS BASKET FUTBOL HOQUEI RUGBI FUTBOL
SALA HIERBA
Figura 1. Comparación de areas de juego para diferentes deportes multisprint
*
Excluyendo las areas de gol
**
Area de juego de desplazamiento de equipo y nº de jugadores por equipo
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II . MARCO TEÓRICO ANÁLISIS DEL RITMO DE JUEGO
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II . MARCO TEÓRICO ANÁLISIS DEL RITMO DE JUEGO
Por otro lado si focalizamos nuestra atención en la relación entre acciones de alta
intensidad con actividad de intensidad baja vemos que es aproximadamente de 1:7 a
1:12 (Bangsbo, 1994b), lo que significa que de cada cuatro segundos a intensidades
máximas, alrededor de 28 s el jugador realiza acciones de baja intensidad o de
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II . MARCO TEÓRICO ANÁLISIS DEL RITMO DE JUEGO
Las actividades a alta intensidad son un elemento crucial del rendimiento en el fútbol
(Mohr, Krustrup, & Bangsbo, 2003). Dichos esfuerzos son críticos para el resultado
de los partidos, en lo que se refiere a las actividades que son fundamentales para el
resultado final, como los movimientos para ganar el balón y las acciones de agilidad
para desmarcarse de los defensores (Stolen, Chamari, Castagna, & Wisloff, 2005).
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II . MARCO TEÓRICO ANÁLISIS DEL RITMO DE JUEGO
Por otro lado, las actividades de alta intensidad parecen constituir una medida válida
del rendimiento físico en el fútbol (Krustrup, et al., 2006; Mohr, et al., 2003). Además,
son sensibles a los cambios fisiológicos asociados con la realización de un programa
de entrenamiento (Krustrup, Mohr, Ellingsgaard, & Bangsbo, 2005), a las variaciones
en las fases de la temporada de competición y al papel táctico de los jugadores
(Mohr, et al., 2003; Rampinini, Coutts, et al., 2007).
Los periodos de alta intensidad incluyen por lo general sprints en todas las
direcciones, pero también puede incluir acciones de intensidad cercana a la máxima
como saltos repetidos, aceleraciones y desaceleraciones. Los jugadores de fútbol
tienden a realizar un gran número de acciones cortas a alta intensidad,
concretamente de 125 a 250 en cada partido (Krustrup, et al., 2005; Mohr, et al.,
2003). Esto equivale aproximadamente a 1 sprint cada 90 segundos o una acción de
alta intensidad cada 30 segundos (Bangsbo, Norrgaard, & Thorso, 1991). Muy
similar al fútbol es el baloncesto, donde se observa que los jugadores realizan de
105 a 242 acciones intensas durante un partido (Ben Abdelkrim, et al., 2007;
McInnes, et al., 1995). La evolución del juego en los últimos años sugiere que hay
una tendencia marcada a un aumento de las acciones de muy alta intensidad (Di
Salvo, et al., 2009).
decir que, en los momentos más importantes de los partidos, se producen diferentes
esfuerzos de alta intensidad, de manera repetida, intercalados con periodos de
recuperación incompleta.
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II . MARCO TEÓRICO ANÁLISIS DEL RITMO DE JUEGO
También parece ser que la intensidad de juego viene condicionada por el perfil de
actividad de los oponentes. Rampinini (2007) muestra que la cantidad de tiempo en
alta intensidad y la distancia total recorrida durante los partidos es mayor cuando se
juega contra equipos de mayor nivel con respecto a los de menor nivel. Esto implica
que los jugadores pueden aumentar o disminuir su contribución de trabajo de
acuerdo tanto a las demandas individuales de los partidos como a la calidad del
oponente. Lo mismo sucede cuando el resultado es a favor o en contra
(O’Donoghue, Boyd, Lawlor, & Bleakley, 2001) lo que refleja un componente
motivacional en la implicación en la carga de trabajo (Carling & Bloomfield, 2010).
2010).
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II . MARCO TEÓRICO ANÁLISIS DEL RITMO DE JUEGO
1.5 CONCLUSIONES
Por otro lado, cada posición de juego está caracterizada por su propio perfil de
actividad y diferentes requerimientos tácticos en relación con el movimiento de
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II . MARCO TEÓRICO ANÁLISIS DEL RITMO DE JUEGO
balón. Aquellas posiciones que intervienen más en el juego, por disponer de más
posesión del balón o por participar tanto en la fase de juego ofensiva como
defensiva parece ser que recorren más distancia y con un mayor porcentaje del
tiempo en acciones de alta intensidad. Además, la carga de trabajo se puede ver
comprometida por el nivel de los oponentes, la disminución de jugadores por
eliminación, las dimensiones del campo, el reglamento, el estilo de juego, la
motivación y la fatiga.
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II . MARCO TEÓRICO ANÁLISIS DEL RITMO DE JUEGO
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II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
sino que ésta puede venir asociada a fallos en diferentes niveles del mecanismo de
contracción muscular.
Por otra parte, los componentes de la tarea determinarán los mecanismos y lugares
asociados con la fatiga (es decir, “task dependency”) (Enoka & Stuart, 1992; Hunter,
Duchateau, & Enoka, 2004).
En los ejercicios de repetir sprints (RS), el rendimiento puede ser definido como la
capacidad de mantener el nivel de una acción máxima de forma repetida. El grado
de fatiga experimentada durante el rendimiento puede variar considerablemente
dependiendo de factores tales como: la intensidad y la duración de cada período de
ejercicio, el tiempo de recuperación, la intensidad durante el tiempo de recuperación,
y el número de repeticiones (Balsom, et al., 1992a; Billaut, Giacomoni, & Falgairette,
2003). Esta variabilidad impone demandas fisiológicas singulares y es probable que
los mecanismos que subyacen a la fatiga puedan ser diferentes (Enoka & Stuart,
1992).
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II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
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II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
MOTIVACIÓN
Hipertermia/
Deshidrtación
SUPRASPINAL
Feedback
sensorial
aferente
(grupos
III, IV)
Inhibición de la excitabilidad de las
motoneuronas (ajustes reflejos)
PERIFÉRICO
Acumulación
metabólica
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II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
En este capítulo, sólo se desarrollan aquellos factores que están considerados como
más importantes a la hora de poder desarrollar medios de entrenamiento para la
mejora de la CRS.
Por lo tanto, es de esperar que distintas variables estructurales como la distancia y/o
duración de los sprints, el número de repeticiones de los sprints y su duración
(Balsom, Gaitanos, Ekblom, & Sjodin, 1994; Glaister, Stone, Stewart, Hughes, &
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II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
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II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
Otros estudios sobre ejercicios de RS con protocolos más específicos a los patrones
de los deportes de situación, también muestran que la contribución del metabolismo
aeróbico puede ser la protagonista de la resíntesis de la PC durante la recuperación
(Bogdanis, et al., 1995; Gaitanos, et al., 1993).
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II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
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II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
Por otro lado, parece ser que la capacidad de producir altos niveles de potencia
(menores tiempos en el sprint) está directamente relacionada con la resíntesis de
PC. Bogdanis et al (1995), en sus resultados, reflejaron una alta correlación entre el
porcentaje de la resíntesis de la PC y el porcentaje de potencia recuperado durante
los 10 primeros segundos en la segunda repetición de 30 s (cicloergómetro) con 4
min de recuperación. Además, esto se ve apoyado por el hecho de que varias
investigaciones sobre los ejercicios de RS hayan encontrado que siguiendo una
suplementación de creatina aumenta la tasa de resíntesis de PC. Esto se relaciona
además con una reducción de fosfato inorgánico y un mayor pH muscular, lo que
resulta en un aumento de la potencia media (reducciones en la fatiga) durante un
ejercicio de RS (Ahmun, Tong, & Grimshaw, 2005; Yquel, Arsac, Thiaudiere,
Canioni, & Manier, 2002).
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II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
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II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
CONCLUSIONES
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II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
El lactato se cree que tiene un bajo efecto en la capacidad contráctil del músculo
(Balsom, et al., 1992b), mientras que el aumento de H+ se considera como un factor
importante de la fatiga muscular, al producir una disminución del pH intracelular
hasta valores inferiores a 6 provocando un estado de acidosis (Westerblad, Allen, &
Lannergren, 2002).
Una limitada acumulación de H+, lo que supone una mejor capacidad de regular los
H+ durante los ejercicios de RS podría beneficiar a aquellos deportistas que
participan regularmente en ejercicios de máxima intensidad repetidos, como es el
caso de los deportes que aquí tratamos (Bishop, et al., 2004; Edge, et al., 2006).
Además, una mejor capacidad tampón podría mejorar el rendimiento en los RS al
permitir que la glucólisis anaeróbica continúe dando como resultado una mayor
producción de lactato sin un aumento concomitante en la acumulación de H+.
Bishop et al (2004), mostraron que los deportistas de equipo con mejor CRS
producían menos H+, encontrando pequeños cambios de H+ en el plasma. Los
cambios en el nivel de H+ a nivel plasmático tienen una relación significativa con la
disminución de la potencia. En un estudio posterior, el mismo grupo de investigación
encontró una relación significativa entre la capacidad tampón y la CRS (Bishop,
Edge, & Goodman, 2004).
Los cambios en la capacidad tampón parece ser que dependen de las demandas
metabólicas musculares de la especialidad deportiva. Diferentes estudios han
mostrado que la capacidad tampón es mayor en jugadores de deportes de equipo
altamente entrenados, velocistas y remadores con respecto a maratonianos y
personas no entrenadas (Edge, et al., 2006). Esto hecho sugiere que dicha
capacidad podría estar asociada con el entrenamiento.
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II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
CONCLUSIONES:
Por otro lado encontramos un mayor consenso entre los autores en afirmar que la
capacidad tampón puede ser mejorada mediante el entrenamiento y que el
entrenamiento de alta intensidad interválico produce mejoras tanto en la capacidad
tampón como en el rendimiento en la CRS.
Para tener una mejor comprensión de las situaciones fisiológicas que se dan en los
RS dependientes de la participación de este mecanismo es necesario clarificar
algunos términos:
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II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
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II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
- La pulsioximetria:
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II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
Algunos estudios muestran que junto al aumento del consumo de O2 durante los RS
existe un aumento de la desoxigenación del músculo durante las repeticiones
(Billaut, Davis, Smith, Marino, & Noakes, 2010; Buchheit, et al., 2009; Racinais, et
al., 2007). Este aumento de la desoxigenación del músculo sugiere que los ajustes
homeostáticos eran insuficientes para mantener la concentración de oxígeno capilar
durante RS, provocando un desajuste entre la disponibilidad de oxígeno y el
aumento de la demanda muscular.
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II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
de PC durante los últimos sprints, un proceso que, tal y cómo vimos, es dependiente
exclusivamente del aporte de O2 a los músculos activos (Bogdanis, Nevill, Boobis, &
Lakomy, 1996).
El consumo máximo de oxígeno (VO2 max) está considerado como el mejor índice en
la valoración de la capacidad de resistencia del organismo (Sutton, 1992). Esta
relación ha hecho que muchos autores consideren que disponer de unos valores
altos de VO2 max sea un factor importante para el rendimiento en los RS.
46
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
Millet, Guinhouya, & Berthoin, 2005; Hamilton, et al., 1991; Tomlin & Wenger, 2002)
justificando los resultados a una posible relación existente entre el VO2max y la tasa
de resíntesis de PC. De esta forma, se sugiere que un deportista con mayor VO2max
tendrá mayor facilidad para resintetizar la PC, aumentará la oxidación de los
metabolitos y, por lo tanto, conseguirá una menor dependencia de la glucólisis
anaeróbica en la siguiente repetición disminuyendo el decrecimiento del rendimiento
en la CRS. Otros autores no encontraron correlaciones (Aziz, et al., 2007; Castagna,
et al., 2007; Wadley & Le Rossignol, 1998) o fueron moderadas (Bishop, et al., 2004;
Bishop, Lawrence, & Spencer, 2003) .
Bishop y Spencer (2004) compararon dos grupos, uno de atletas de fondo y otro de
deportistas de equipo con un nivel de VO2max homogéneo, mostrando que los
deportistas de equipo son capaces de generar un mayor pico de potencia en el
primer sprint y realizar más trabajo total durante un test de 5 x 6 s que los atletas de
fondo. Además, observaron que los jugadores de deportes de equipo tuvieron un
mayor decrecimiento del rendimiento que los atletas de fondo. Esta observación
concuerda con la comentada por otros autores en referencia a la relación existente
entre el rendimiento del primer sprint y el % de disminución del rendimiento de la
CRS (Bishop, et al., 2003; Hamilton, et al., 1991; Wadley & Le Rossignol, 1998). La
menor tasa en disminución de rendimiento en los atletas de fondo podría explicarse,
en parte, por su bajo rendimiento en el primer sprint y el menor nivel de residuos
metabólicos (i.e. concentración de H+) más que por el nivel de VO2max. Bajo esta
premisa, podríamos decir que es posible que el VO2max no sea un factor
determinante en los RS.
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II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
Una variable que ha estado también asociada al rendimiento aeróbico, siendo en los
últimos años relacionada con el rendimiento en los RS, es la cinética del VO2
(Dupont, McCall, Prieur, Millet, & Berthoin, 2010; Dupont, et al., 2005). Parece ser
que una mejor cinética del consumo de oxígeno, tanto al inicio del sprint (Dupont, et
al., 2005), como al final (Dupont, McCall, Prieur, Millet, & Berthoin, 2010), puede ser
un factor importante en el rendimiento de la CRS. Esto se debe a una reducción del
déficit de oxígeno, lo que implica una mayor contribución de la fosforilación oxidativa
y una rápida disminución del consumo de oxígeno lo que se asocia a una rápida
recuperación de las variables que contribuyen a la fatiga durante la CRS. Sin
embargo, recientemente se han encontrado datos contradictorios, observándose
correlaciones pequeñas (%Dec con VO2on) o nulas (media CRS con VO2on y
VO2off) entre variables de rendimiento de la CRS y la cinética del VO2 en un grupo
de jugadores de deportes de equipo (Buchheit, Abbiss, Peiffer, & Laursen, 2012).
CONCLUSIONES
A pesar de que existen estudios que han trabajado en la búsqueda de los factores
limitantes del consumo de oxígeno en los RS, como pueden ser la oxigenación
muscular, la saturación de oxígeno arterial, o la oxigenación cerebral, los factores
implicados en el transporte de oxígeno, desde el sistema respiratorio, pulmonar,
cardiovascular al muscular, están estrechamente interrelacionados siendo posible
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II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
Por otro lado, la importancia del metabolismo aeróbico en los RS podría permitir la
consideración de que disponer de un buen nivel de capacidad aeróbica predeciría un
buen nivel de rendimiento en la CRS. No obstante, la variable más utilizada en la
medición de la resistencia aeróbica, el valor del VO2max, no tiene el consenso de
todos los investigadores como valor predictor.
En los últimos años, han ido creciendo los estudios que analizan el rol de los
factores neuromusculares en la etiología de la fatiga muscular durante los RS,
utilizando como medios de medición la electromiografía de superficie (EMGs), la
técnica de contracciones interpoladas con estímulos eléctricos evocados (“switch
interpolated technique”) y la imagen por resonancia magnética funcional (IRMf). Sin
embargo, se mantiene cierta controversia tanto acerca de la idoneidad de estos
sistemas de medición en la interpretación de estos aspectos (Perrey, et al., 2010),
como en el rol que juegan los factores neuromusculares en la etiología de la fatiga
en los RS.
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II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
Sin embargo, cada vez hay más evidencias que reflejan la probabilidad de que la
reducción de la activación neural de los músculos contráctiles comprometa el
rendimiento durante ejercicios intermitentes de alta intensidad (Drust, Rasmussen,
Mohr, Nielsen, & Nybo, 2005; Mendez-Villanueva, Hamer, & Bishop, 2007; Mendez-
Villanueva, et al., 2008). Éstas se basan en una disminución de la amplitud de la
señal electromiográfica durante la actividad muscular a lo largo de los RS (Mendez-
Villanueva, et al., 2007, 2008) o por variaciones del ratio RMS/Onda-M.
Concretamente el cálculo de este ratio se realiza para minimizar el posible error de
utilizar la EMG como método de evaluación de la actividad neural del músculo, al
poder relacionarse también con cambios en la excitabilidad del sarcolema. Para
evitar esta limitación metodológica, se realiza una electroestimulación sobre el
nervio, que normalmente en valoraciones de pierna se realiza en el nervio femoral.
La onda-M valora las amplitudes pico a pico de la acción evocada eléctricamente,
dando como resultado de la operación un ratio de activación muscular (Racinais, et
al., 2007).
50
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
Finalmente, (Nybo & Secher, 2004) argumentan que, debido a la interacción mutua
de los mecanismos centrales y periféricos, esta dicotomía no es particularmente útil
y debería ser evitada.
51
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
el nivel de entrenamiento y la posición de juego del jugador, sino también con su rol
táctico específico.
52
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
simultáneamente) para su mejora (Buchheit, et al., 2008; Dawson, et al., 1998; Hill-
Haas, Coutts, Rowsell, & Dawson, 2009).
53
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
En los últimos años, se han realizado varios estudios que demuestran la efectividad
de diferentes formas de EIAI para la mejora de varios componentes del rendimiento
físico (Ferrari Bravo, et al., 2008; Gibala, et al., 2006; Midgley & Mc Naughton, 2006;
Mohr, et al., 2007).
54
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
Una amplia gama de intensidades son reflejadas en las investigaciones de los EIAI,
la duración de los ejercicios van desde los 6 s o menos hasta 4 min e incluso a
veces más. Además el tiempo de recuperación entre repeticiones también puede
variar considerablemente.
55
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
56
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
2.2.1.1.2 ENTRENAMIENTO DE RS
57
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
Otros estudios, han encontrado mejoras en los tests específicos, pero sin mejoras en
el VO2max (Hill-Haas, et al., 2009; Ortenblad, Lunde, Levin, Andersen, & Pedersen,
2000) respaldando la actual tendencia a cuestionar la importancia del VO2max en los
deportes de sprints múltiples (Hoffman, Epstein, Einbinder, & Weinstein, 1999; Aziz,
Chia, & Teh, 2000; Bishop, et al., 2004), restringiendo su interés al perfil de
jugadores jóvenes o con una capacidad aeróbica baja (Hoffman, et al., 1999).
Aunque, este tipo de entrenamiento produce una mejora del rendimiento y una
reducción de la fatiga en 2-8 semanas, sería necesario tener en cuenta la
distribución de las sesiones para minimizar el riesgo de lesiones, cuando la carga de
entrenamiento de RS aumenta, ya que si no se tienen en consideración las bases de
prevención y control del entrenamiento el riesgo de lesión también aumenta.
58
Tabla 2. Efecto de entrenamiento de alta intensidad intermitente en las adaptciones fisiológicas y el rendimiento
Bishop et al Mujeres 6 Cicloergómetro 6-12x2’,1’ rec 100% VO2max 5 sem ↑9,7% Vo2max*
(2008) activas 3 x sem ↑12.9%Uan
↓11%Bminvitro
Edge et al Mujeres 16 Fuerza 3-5 x 15-20 s Max intensidad 5 sem ↑8% LTdmax ↑23% 3R Press de
(2006) activas 20 s rec ↑15% LT4mM* piernas*
II. MARCO TEÓRICO
Edge et al Mujeres 10 Cicloergómetro 6-12x2min 120-140 % UAN 5 sem ↑12% VO2max* ↑13% trabajo total
(2005) activas 1 min rec ↑8% Uan* CRS (5x6”(30”))*
3xsem
Edge et al Mujeres 10 Cicloergómetro 20 min 80-95% UAN 5 sem ↑10% VO2max* ↑8% trabajo total
(2005) activas ↑10% Uan* CRS (5x6”(30”))*
59
Gibala et al Hombres 8 Cicloergómetro 4-6x30 s Máximo esfuerzo 2 sem ↑7,6%Cap tampón ↓10.1%Tiempo a
(2006) activos 4 min rec. ↑28% Cont glucogeno completar 750Kj
3xsem
Gibala et al Hombres 8 Cicloergómetro 90-120 min 65% VO2max 2 sem ↑4,2%Cap tampón ↓7.5%Tiempo a
(2006) activos 3xsem ↑17% Cont glucógeno completar 750Kj
Mohr et al Hombres 6 15x6 s 95% velocidad max 8 sem ↑11% Yo-yo IR-2*
(2007) activos 1 minrec ↑5,8% 50m*
↑media tiempo
sprint CRS (5x30m
(25”))
↔IF RSA
Mohr et al Hombres 7 8x30 s 130% VO2max 8 sem ↑75%% Bomba Na, k+ ↑32% Yo-yo IR-2*
(2007) activos 1,5 min rec α2 ↑media tiempo
↑31%NHE1 sprint CRS (5x30m
↑28% MCT1(cap (25”))
tampón) ↓55% IF CRS*
CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
ESTUDIO NIVEL N MODO DE PROTOCOLO NTENSIDAD DURACIÓN ADAPTACIONES CAMBIOS EN EL
EJERCICIO FISIOLÓGICAS RENDIMIENTO
Bailey et al Hombres activos 5+3 Cicloergómnetro 4-7x30 s Max 6 sem ↑cinetica VO2
(2009) Mujeres activas 4 min rec
Bailey et al Hombres activos 5+3 Cicloergómnetro continuo 90% GET 6 sem ↔cinetica VO2
(2009) Mujeres activas (U. cambio
gases)
Hill-Haas et Mujeres activas 9 Fuerza resistencia 15-20 rep para cada ej 15-20 RM 5 sem ↑12.5%Trabajo total
60
al (2007) y rep (20 s rec entre CRS (5x6 s(30 s))*
ejercicios)
Hill-Haas et Mujeres activas 9 Fuerza resistencia 15-20 rep para cada ej 15-20 RM 5 sem ↑5.4%Trabajo total
al (2007) y rep (80 s rec entre CRS (5x6 s(30 s))*
ejercicios)
Buchheit et Jovenes 9 Velocidad y 3-4 series x 4-6 ejerc. 4 sem ↑3,3% Tiempo medio
al (2010) agilidad <5 s (30 s/3 min) de sprint CRS
2xsem (6x(2x15m), 20 s rec)
Ortenblad et Hombres 9 Cicloergómetro 20x10 s Máxima 5 sem ↔ VO2max ↑12% Trabajo total
al (2000) Activos 50 s rec. ↑9% tasa pico de CRS 10x 8 s(32 s)*
3xsem liberación AgNo3
↑pico liberación Ca
SR
carrera (gasto
energético en
velocidades
submaximas
Ferrari et al Hombres 13 Carrera 4x4 min 90-95% FC 8 sem ↑6.6% VO2max ↔CRS
(2007) subelite 3 min rec max ↑3.7% Vo2 RCP 6x40(20+20m) (20 s
2xsem rec)
↑12.5% yo-yo IR1
↔10-m sprint: SJ,
CMJ
61
Ferrari et al Hombres 13 Carrera 3x (6x40 m) Máxima 8 sem ↑5% VO2max ↑2.1% CRS
(2007) subelite 20 s rec ↑2.9% Vo2 RCP ↑28.1% yo-yo IR1
3 min rec serie ↔10-m sprint: SJ,
2xsem CMJ
Bishop, et al Mujeres Sub 11 Cicloergómetro 4-12x 2 min 130-180 Uan 6 sem ↑26.5% trabajo total
(2005) elite 1 min rec CRS 5x6 s(30 s)
3xsem ↓33% 10 dias ↑4.4% CRS tiempo
tapering
Buchheit et jovenes Carrera HIT 6-12 min (15 sx15 s 95% Vift ↑5%Tiempo
al (2009) rec) medioCRS 2x30m
2xsem (15+15), 20 s
Tomassen Profesionale 7 Small side games 5 (4x4 small side games 90% HR 2 sem ↑14.5% Bomba ↑1.8% tiempo total
et al (2010) s futbol Ejercicios carrera cambios 8x2 min , 1 min rec) + 4 10 sesiones Na+, k+ α2 CRS (10x20”(15” rec)
de dirección y conducción SET (10-12x 25-30”, 25-
balón 30” rec + 1 SET 16x40- ↔ yo-yo IR2
60”, 40-60” rec
CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
ESTUDIO NIVEL N MODO DE PROTOCOLO NTENSIDAD DURACIÓN ADAPTACIONES CAMBIOS EN EL
EJERCICIO FISIOLÓGICAS RENDIMIENTO
rec activa
Buchheit et al 8 Carrera HIT 9-24x15-20 s 90-95%Vift 9 sem ↑Reactivación ↑CRS 6x2x15m (20 s)
(2008) 15-20 s rec (120%VAM) parasimpático ↑Cmj, ↑Vift, 10 m
2x sem postesfuerzo. %Fc 6 min submaximo
62
Hill-Haas et al Jóvenes 10 Small side 3-6x6-13 min > 80% FCmax 7 sem ↔ VO2max ↑17% yo-yo IR1*
(2009) games 1-2 min rec ↔CRS; 5m; 20m sprint
2x sem
Hill-Haas et al Jóvenes 9 SIT 18-20x30-90 s 90-95%FCmax 7 sem ↔ VO2max ↑22 % yo-yo IR1*
(2009) CRS 60-90 s rec máximo ↔CRS; 5m; 20m sprint
1x sem
10-30x10-34m
10-40 s rec
1x sem
Dawson et al hombres sanos 9 carrera 22-42x30-80m maximo 6 sem ↑6.1% VO2max ↑2,4% 40m
(1998) 1:6,1:4 rec ↓36% CS ↔10m
2x sem ↑40% PHOS ↑2.20% CRS tiempo total
↑10% fibra tipo II ↑16.9% CRS %dec
Spencer et al Mujeres alto 18 Entrenamient Entrenamiento 70-90% 6 sem ↓24%Concentración en ↑2% Trabajo total CRS
(2004) nivel o en campo FCmax plasma de Hipoxantina 5x6 s (30 s)
↓4.5% concentración H+ ↑5%Course navettte
CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
ESTUDIO NIVEL N MODO DE EJERCICIO PROTOCOLO NTENSIDAD DURACIÓN ADAPTACIONES CAMBIOS EN EL
FISIOLÓGICAS RENDIMIENTO
Hazell et al Jóvenes Cicloergómetro 30 s 4 min rec Máximo 2 sem ↑9,3% VO2max* ↑5,2% 5km*
(2010) activos 3xsem ↑9.5%Pmax
↑58%mantPmed
Hazell et al Jóvenes Cicloergómetro 10 s, 4 min rec Máximo 2 sem ↑9,2% VO2max* ↑3,5% 5km*
(2010) activos 3xem ↑8,5% Pmax
↑84% mantPmed
Sporis et al Jóvenes elite 24 Carrera ejercicios 3x20m, 3x40m, 3x60m 90-95% FC 4 sem ↑5.2% VO2max ↑6% 200m
(2008) específicos 3xsem max ↑4.2% 400m
↑7.9% 800m
↑6.7% 1200m
↑7.3% 2400m
63
Dupont et al Hombres 22 Carrera 2x12-15x15 s 90-95% 7 sem ↑8.1 VAM ↑3.5% 40m
(2004) Profesional Resitencia velocidad 15 s rec FCmax
CRS 1xsem maximo
12-15x40m
30 s rec
Harmer et al Hombres 7 Cicloergómetro 4-10x30 s maximo 7 sem ↑9.4% Pico de
(2000) activos 3-4 min rec potencia
3xsem ↑10.6%Trabajo total
↑21%tiempo maximo a
130% pico Vo2
Wong et al Profesionales 20 Fuerza y carrera Fuerza: 4 ejercicio 120% VAM 8 sem ↑19%Yo-yo 1R
(2010) futbol japones 4x6rm (3 min rec) ↑3.1%VAM
+ (12-15x15 s+ ↑9.2% Distancia VAM
15 s rec ↑4% CMJ,↑5.8%10m.
↑
CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
ESTUDIO NIVEL N MODO DE PROTOCOLO INTENSIDAD DURACIÓN ADAPTACION CAMBIOS EN EL
EJERCICIO ES RENDIMIENTO
FISIOLÓGICAS
Tomassen et Profesionales futbol 7 Small side games 5 (4x4 small side 90% HR 2 sem ↑14.5% Bomba ↑1.8% tiempo total
al (2010) Ejercicios cambios de games 8x2 min , 1 10 sesiones Na+, k+ α2 CRS (10x20”(15”
dirección y min rec) + 4 SET rec)
conducción balón (10-12x 25-30 s
25-30 s rec + 1 SET ↔ yo-yo IR2
16x40-60 s, 40-60
srec
II. MARCO TEÓRICO
Iaia et al Hombres activos 8 carrera 8-12x30 s 95% vel Max 4 sem ↑29% Bomba ↑20% Yo-yo IR2
(2008) 3 min rec 30 s Na+, k+ α2 tiempo a límite
3-4x sem ↑5.5% Test
incremental
↑20% 130% VO2max
↑7% distancia 30 s
64
Buchheit et al jovenes Small side games HBT 2-4x 2 min 30 s ↑5%Tiempo
(2009) a 4 min medioCRS 2x30m
2xsem (15+15), 20 s
Romer et al Hombres deportistas 12 Fuerza musculos 30 esfuerzos 50% MIP 6 sem ↑31%MIP ↔tiempo total RSA
(2002) de equipo (subelite) inspiratorios inspiratorios 2 veces ↑21% PIF (15x20m (30 s))
al dia ↓7% tiempo
recuperación CRS*
CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
Aunque cada vez es más normal encontrar equipos que utilizan tests para
analizar la CRS aún hay muy poco escrito sobre los mejores medios para su
mejora.
65
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
Hasta la fecha, la gran mayoría de los estudios que han investigado las
adaptaciones del entrenamiento en los RS, han utilizado sprints cortos
inferiores a 10 s con recuperaciones entre repeticiones de 20-30 s,
considerando que pueden ser los más beneficiosos para mejorar la CRS.
Distintas propuestas específicas dirigidas tanto a los factores neuromusculares
como a factores metabólicos mediante protocolos de RS muestran mejoras
significativas, entre un 2% y un 5%, en el rendimiento de la CRS (Tabla 3).
14
8
12
10
% mejora CRS
8 6
6 1
5
4 1 4
2 1 7
2 1 1
3
0
66
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
Por ejemplo las diferencias entre los estudios de Buchheit (Buchheit, Laursen,
et al., 2009; Buchheit, et al., 2008) con dos protocolos similares de
entrenamiento (9-24 acciones de 15 s-20 s x15 s-20 s 6-12 min 15 s+15 s)
pueden quedar expresadas por la diferencia en los tests utilizados para evaluar
la CRS; un 2% en el estudio que evaluó la CRS con un test de esfuerzos de
duración de 6 s (6 x (15+15) con 20s de recuperación y un 5% en un test
idéntico al protocolo de entrenamiento (2 x 15 s+15 s).
67
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
CRS
Sprint Recuperación
entre sprints
Longitud
Frecuencia
Zancada
Zancada
Capacidad
Aeróbica
Capacidad
Suministro Potencia Flexibilidad Tampón
ATP Co-coordinación Resíntesis
neural PC
Fuerza Fuerza
Elástica
Figura 4. Resumen de los factores que deben ser objeto de entrenamiento para la mejora
de la CRS. Adaptado de (Bishop, Girard, & Mendez-Villanueva, 2011)
ATP= Adenosintrifosfato; PC= Fosfocreatina
69
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
(Helgerud, Engen, Wisloff, & Hoff, 2001). Por ello, este método de
entrenamiento podría ser un buen medio para mejorar la CRS. Aunque se ha
sugerido que cualquier densidad e intensidad utilizada en estas estructuras de
entrenamiento es suficiente estímulo como para mejorar la resistencia aeróbica
y la CRS (Buchheit, Cormie, et al., 2009) parece ser más efectivo un
entrenamiento de alta intensidad aeróbico con repeticiones de 2 min al 90% de
VO2max con 1 min de recuperación (Edge, et al., 2005).
70
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
2.2.3 CONCLUSIONES
71
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
72
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
juego para poder ofrecer una valoración objetiva (Impellizzeri, et al., 2008).
Encontramos estudios que han valorado la fiabilidad de algunos de estos tests,
tanto fiabilidad de corta duración (Bishop & Edge, 2006; Wragg, Maxwell, &
Doust, 2000), como la fiabilidad a largo plazo, valorando, por ejemplo, los
cambios acaecidos como consecuencia de un partido (Meckel, Gottlieb, et al.,
2009) o a lo largo de una temporada (Impellizzeri, et al., 2008). Sin embargo,
no son muchos los autores que muestren la validez de los tests empleados.
Para determinar si un test es válido, el test debe mostrar validez lógica, validez
de constructo y validez de criterio (Aziz, et al., 2008). La validez lógica indica
que el test es apropiado para aquello que se quiere medir. En este contexto los
protocolos de valoración de la CRS derivan directamente del análisis del perfil
de actividad y/o ritmo de juego de los deportes de equipo y raqueta (Spencer,
Bishop, et al., 2004). Teniéndose en cuenta el tiempo de sprint y el tiempo de
recuperación del deporte en el momento de diseñar la prueba (Rampinini,
Bishop, et al., 2007b).
75
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
Peyrebrune, Lakomy, & Nevill, 2008; Wakefield & Glaister, 2009) mostrando, la
gran mayoría, una reducción del rendimiento mayor en RS con recuperación
activa (Billaut & Basset, 2007; Bishop, Ruch, & Paun, 2007; Castagna, et al.,
2008). En los análisis de ritmo de juego, de los deportes de sprints múltiples, se
refleja que, después de trabajos intensos, las recuperaciones son
principalmente activas, con desplazamientos a baja intensidad, pero
prácticamente en ninguna ocasión el sujeto permanece totalmente parado. Es
por ello que un test, con mayor validez lógica, sería aquel que contemplara
recuperaciones activas (Spencer, et al., 2006; Wragg, et al., 2000).
76
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
tiempo total durante los tests de CRS. Aunque pueden encontrarse varios tests
de CRS en la literatura científica, la mayoría se estructuran bajo la premisa de
realizar un número de sprints similar a los descritos en el perfil de actividad en
los deportes de equipo (Spencer, et al., 2005b), donde se muestra que los
intervalos del juego en donde se encuentran acciones máximas repetidas
tienen una media de 5 bloques de acciones máximas y, encontrando como
máximo, bloques de 7 hasta 11 acciones máximas repetidas durante el juego
(Carling, et al., 2012; Ferrari Bravo, et al., 2008a; Impellizzeri, et al., 2008;
Krustrup, et al., 2006). Sin embargo, en un estudio reciente, se ha observado
una media de sprints de 2 a 4, cuestionando el contenido y la validez lógica de
los protocolos de 6 sprints (Buchheit, Mendez-Villanueva, Simpson, & Bourdon,
2010). Sólo un estudio sugiere que un test de CRS no debería envolver más
de 8-10 repeticiones de sprint cuando el tiempo de recuperación utilizado sea
de 20-30 s (Fitzsimons, et al., 1993). Las razones que justifican esta sugerencia
práctica está basada en la recurrentemente observada estrategia de regulación
(“pacing strategy”) que utilizan los sujetos cuando realizan numerosos sprints
repetidos (Spencer, et al., 2005b). Aunque la distancia de sprint sea corta, la
familiarización se muestra como necesaria para reducir estas estrategias de
regulación (Impellizzeri,et al., 2006; Spencer, et al., 2005b; Wragg, et al., 2000).
Así, parece ser que aunque se utilicen los mismos ratios de trabajo-descanso y
patrones de actividad, los tests pueden ser diferentes entre ellos y pueden
representar diferentes respuestas fisiológicas (Balsom, et al., 1992b; Billaut &
Basset, 2007).
77
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
78
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
Por todo ello y al reconocerse a estas acciones como requisito para participar
con éxito en los deportes de equipo, van apareciendo protocolos de valoración,
en los últimos años que incluyen giros, la gran mayoría de 180º (ida y vuelta)
(Buchheit, Bishop, Haydar, Nakamura, & Ahmaidi, 2010; Ferrari Bravo, et al.,
2008b; Nakamura, et al., 2009; Wragg, et al., 2000) , saltos (Buchheit, Spencer,
et al., 2010) y desplazamientos en relación a movimientos técnicos como el
dribbling (Meckel, Machnai, & Eliakim, 2009) (tabla 4).
79
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
Impellizeri (2008)
Rampinini (2007)
Bravo (2007)
Buchheit (2008, 2009,
2010)*
Baker (1993)
Glaister (2007)
Bangsbo (1994)
Wragg (2000)
Kaplan (2010)
80
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
Spencer (2006)
Gabbet (2010)*
Buchheit (2010)
Buchheit (2010)
81
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
2.3.2 VALORACIÓN
2 -.La capacidad para resistir a la fatiga y por lo tanto mantener una alta
velocidad de sprint durante las repeticiones de la prueba (Fitzsimons, et al.,
1993; Glaister, et al., 2009).
82
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
83
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
Tabla 5. Fórmulas para la evaluación de Índice de Fatiga (IF) del rendimiento en CRS
• Fórmula 1:
Fatiga= El porcentaje de aumento en tiempo entre el primer y último sprint.
Cálculo: Fatiga = ((sprint último – sprint 1) /sprint 1)*100 (Brooks et al 1990)
• Fórmula 4:
Fatiga= el porcentaje de aumento entre el promedio de los 2 sprints más rápidos y los dos más
lentos.
Cálculo: fatiga=(((dos tiempos más lentos/2)-(los dos tiempos más rápidos/2))*100
(J. Baker, Ramsbottom, & Hazeldine, 1993)
• Fórmula 5:
Fatiga= El pocentaje de aumento entre el promedio de los dos primeros sprints y los dos
últimos sprints
Cálculo: fatiga= (((sprint 1 + sprint 2)/2)-(sprint penúltimo + sprint último/2))*100
(Wragg, et al., 2000)
84
II. MARCO TEÓRICO CAPACIDAD DE REPETIR SPRINTS
Uno de los temas más debatidos en las ciencias del deporte en relación a la
CRS es determinar la mejor manera de expresar su rendimiento para aportar
información importante al entrenador y a los preparadores físicos (Glaister,
Howatson, et al., 2007; Glaister, Howatson, Pattison, & McInnes, 2008; Oliver,
Armstrong, & Williams, 2009).
Aunque la fiabilidad (Spencer, et al., 2006; Wragg, et al., 2000) y validez (Aziz,
et al., 2008; Bishop, et al., 2001; Impellizzeri, et al., 2008; Wragg, et al., 2000)
de los tests de sprint repetidos ha sido establecida, los diferentes métodos de
análisis de datos propuestos tanto en la investigación como en la práctica
pueden ofrecer diferentes resultados.
2.3.3 CONCLUSIONES
86
II. MARCO TEÓRICO EL CAMBIO DE DIRECCION
EL CAMBIO DE DIRECCIÓN
Las características del juego en los deportes de equipo y de raqueta, requieren
la realización de frecuentes cambios rápidos de las maniobras de dirección,
como correr en zig-zag, salidas abiertas y cruzadas o carreras de ida y vuelta
en respuesta a un estímulo, como pueden ser los movimientos de un jugador
contrario o el movimiento del balón (Markovic, Sekulic, & Markovic, 2007). Por
ejemplo, (Withers, Maricic, Wasilewski, & Kelly, 1982) mostraron que los
jugadores de fútbol australiano realizaban un promedio de 50 giros por partido.
87
II. MARCO TEÓRICO EL CAMBIO DE DIRECCION
88
II. MARCO TEÓRICO EL CAMBIO DE DIRECCION
AGILIDAD
REACTIVA
ESCANEO COORDINACIÓN
SPRINT
FUERZA POTENCIA Y
REACTIVA FUERZA
CONCENTRICA
DEFICIT
BILATERAL
IZQ-DER
Figura 5. Modelo teórico indicando los principales factores que determinan la agilidad reactiva
(adaptado de Young WB 2006)
90
II. MARCO TEÓRICO EL CAMBIO DE DIRECCION
Así, los tests de agilidad reactiva requieren que los jugadores cambien de
dirección con velocidad y respondan a un estímulo impredecible. Las variables
utilizadas en este tipo de test han sido el tiempo total del test, el tiempo de
decisión (TD) y el tiempo de respuesta del movimiento (TRM) (Sheppard,
Young, Doyle, Sheppard, & Newton, 2006; Young & Willey, 2010) (Figura 6).
Figura 6: Ilustración
esquemática del test de
Agilidad Reactiva (RAT)
Los tests de agilidad reactiva más utilizados dan información relevante a la que
reaccionar midiendo el tiempo de respuesta y el tiempo total, lo que permite
determinar qué factores de la agilidad reactiva deben ser más entrenados
(Gabbett, Kelly, et al., 2008; Sheppard, et al., 2006; Young & Willey, 2010). De
esta manera, se podrían identificar los déficits del jugador y, crear los
protocolos más adecuados a sus necesidades, sean condicionales y/o
perceptivos y/o de toma de decisiones.
93
II. MARCO TEÓRICO EL CAMBIO DE DIRECCION
Durante mucho tiempo y aún hoy en día, son muchos los entrenadores que
consideran que el éxito en las acciones con cambios de dirección está
influenciado por la velocidad lineal y la aceleración en base a tests de máxima
intensidad en desplazamiento lineal. Sin embargo, en los últimos años,
encontramos un creciente interés por considerar la posibilidad de que los
desplazamientos con cambios de dirección o lineales puedan ser capacidades
diferentes y que, por lo tanto, no sea recomendable evaluar los primeros con
tests de desplazamiento lineal.
94
II. MARCO TEÓRICO EL CAMBIO DE DIRECCION
Por otro lado, Nimphius et al. (2010) encontraron altas correlaciones (0.73-
0.98) entre los test de velocidad y de agilidad (505 test) realizados en
jugadoras de softball, excepto para el test 505 llevado a cabo con la pierna
dominante. Además, estas correlaciones, se mantuvieron durante los tres
momentos de la temporada en los que fueron realizados los tests. Estos
resultados son similares a los obtenidos por Buchheit et al. (2012) en jugadores
franceses de deportes de equipo. Dichos autores encontraron correlaciones
moderadas y altas (0.63-0.76) entre un sprint de 30 metros y un sprint con dos
cambios de dirección, en diferentes ángulos (45º-90º-135º). No obstante, es
necesario resaltar que las correlaciones, entre los sprints con cambios de
dirección en las diferentes angulaciones, fueron inferiores (0.45-0.56). Por el
contrario, Salaj & Markovic (2011) obtuvieron resultados contrarios,
concluyendo que las habilidades de cambiar de dirección y de velocidad debían
ser entrenadas de manera independiente, ya que las correlaciones observadas
fueron muy bajas (0.18-0.43).
95
II. MARCO TEÓRICO EL CAMBIO DE DIRECCION
Esto sugiere que la velocidad lineal y la que incluye cambios de dirección son
capacidades diferentes y por consiguiente, han de ser valoradas y entrenadas
específicamente.
Muchos son los estudios que se han preocupado por encontrar las variables de
fuerza que mejor correlacionan con
estas acciones, como por ejemplo
valorando la fuerza isocinética (Graham-
Smith & Lees, 2005; Jones, et al., 2009),
la fuerza reactiva medida con test de
salto con contramovimiento (“CMJ”)
(Barnes, et al., 2007) o con un test de
salto en caída (“DJ) (Hoffman,
Ratamess, Klatt, Faigenbaum, & Kang,
2007) pero en todos ellos las
Figura 7. Ejercicio One-leg rising
correlaciones han resultado ser bajas.
96
II. MARCO TEÓRICO EL CAMBIO DE DIRECCION
Valorando los estudios anteriores, parece ser que aquellas acciones reactivas
con alta sobrecarga excéntrica de forma unilateral con una aplicación de la
97
II. MARCO TEÓRICO EL CAMBIO DE DIRECCION
Algunos autores hablan de que una disminución del centro de gravedad y una
mayor inclinación del cuerpo hacia delante puede ayudar en las acciones de
aceleración y deceleración posteriores y previas al cambio de dirección
(Sayers, et al., 2000; Sheppard & Young, 2006). Además, (Tominaga, et al.,
2010) aprecian que los jugadores de fútbol con mayor rendimiento en estas
acciones muestran un menor ángulo de la rodilla de la pierna de apoyo en un
periodo corto de tiempo y una disminución del ángulo de la articulación del
tobillo, lo que podría producir una mayor potencia horizontal para el cambio de
dirección.
100
II. MARCO TEÓRICO EL CAMBIO DE DIRECCION
101
II. MARCO TEÓRICO EL CAMBIO DE DIRECCION
102
II. MARCO TEÓRICO EL CAMBIO DE DIRECCION
Otro aspecto importante que podría ser perfectamente un tema único a tratar
es la especificidad del entrenamiento. Así, encontramos en la literatura estudios
que han analizado la transferencia específica al deporte de entrenamientos que
utilizan cambios de dirección y acciones lineales.
Young et al (2001) realizaron un estudio donde generaron dos grupos que
realizaban dos entrenamientos específicos diferentes, un grupo solo entrenaba
con desplazamientos lineales a máxima intensidad, y el otro grupo entrenaba
con desplazamientos con cambios de dirección.
103
II. MARCO TEÓRICO EL CAMBIO DE DIRECCION
Los factores que determinan la velocidad del cambio de dirección son varios: la
velocidad lineal, la fuerza, la potencia y la técnica. Sin embargo, ninguno de
ellos presenta una característica clara y jerárquica. Debido a esto, se
encuentran diferentes medios para la mejora de esta capacidad. A pesar de no
estar corroborado científicamente parece ser que el mejor medio de
entrenamiento sería un trabajo excéntrico que incluyese acciones unilaterales
multidireccionales, preferentemente laterales y/o horizontales. Además, el
factor de imprevisibilidad también se debería de considerar a la hora de diseñar
las tareas.
104
II. MARCO TEÓRICO LA CAPACIDAD DE REPETIR CAMBIOS DE DIRECCION
105
II. MARCO TEÓRICO LA CAPACIDAD DE REPETIR CAMBIOS DE DIRECCION
Por otro lado, también se han abierto diferentes líneas de investigación con la
intención de valorar la correlación existente entre la capacidad de repetir
cambios de dirección con otras capacidades para valorar su potencial como
medio de entrenamiento y test de valoración. Así aparecen resultados que
indican una correlación significativa entre la CRCD y el test de valoración
anaeróbica WINGATE y con diferentes tipos de saltos como los horizontales
(“five jump test”) o el DJ con la pierna dominante (Haj-Sassi, et al., 2011; Haj-
Sassi, et al., 2009b).
Varliette, Owen, Chirico, & Pialoux, 2011a) pueden ser igual de efectivos que
métodos de entrenamiento de alta intensidad continua para la mejora de la
capacidad aeróbica. Además, se ha encontrado que suplementando un
entrenamiento específico de CRCD a un entrenamiento regular puede
obtenerse un aumento adicional de esta capacidad superior al de un
entrenamiento regular pudiendo considerarse como una buena estrategia para
la mejora del rendimiento (Dellal, et al., 2011a)
107
II. MARCO TEÓRICO LA CAPACIDAD DE REPETIR CAMBIOS DE DIRECCION
108
III. PARTE EXPERIMENTAL
- OBJETIVOS
- ESTUDIOS
ESTUDIO 1
ESTUDIO 2
ESTUDIO 3
ESTUDIO 4
- CONCLUSIONES
- PERSPECTIVAS DE FUTURO
109
110
III. PARTE EXPERIMENTAL OBJETIVOS
OBJETIVOS
OBJETIVO GENERAL:
ESTUDIO 1:
ESTUDIO 2:
111
III. PARTE EXPERIMENTAL OBJETIVOS
ESTUDIO 3:
ESTUDIO 4:
112
III.PARTE EXPERIMENTAL RESUMEN ESTUDIOS
RESUMEN ESTUDIOS
ESTUDIO 1:
ESTUDIO 2:
113
III.PARTE EXPERIMENTAL RESUMEN ESTUDIOS
de las dos series, el desplazamiento máximo radial (Dm) del vasto lateral de
cada una de las piernas con tecnología TMG, antes, después y entre series de
carrera y la potencia mecánica de cada una de las piernas en un ejercicio de
“leg-press”, antes y después de finalizado el ejercicio. Los cambios pre y post
ejercicios fueron valorados empleando pruebas t-test de muestras pareadas y
para evaluar las interacciones entre las diferentes variables (Dm y potencia) se
utilizó un diseño mixto ANOVA de medidas repetidas. Los resultados nos
indican que la evolución de la disminución del rendimiento (aumento del tiempo
y decrecimiento potencia) tanto en los desplazamientos lineales como en
aquellos que incluían cambios de dirección fue similar. Sin embargo, la
repetición de series RCD provocó una mayor disminución del rendimiento
(fatiga) en la pierna dominante en comparación con la misma pierna en el
ejercicio RS y también en comparación con la pierna no dominante del ejercicio
RCD (en los valores de potencia y Dm). En conclusión, los ejercicios RS o RCD
tienen respuestas agudas diferentes sobre las propiedades mecánicas y
contráctiles de los músculos implicados y que estas diferencias en las
respuestas agudas se acentúan sobre la pierna dominante. Es por ello que es
recomendable tener en cuenta estas consideraciones en el análisis del
rendimiento de los jugadores de baloncesto.
ESTUDIO 3:
114
III.PARTE EXPERIMENTAL RESUMEN ESTUDIOS
Se realizaron tests específicos de los dos tipos de ejercicios en los dos grupos,
antes y después de la intervención. Sin embargo, no se encontraron diferencias
significativas entre ambos tipos de entrenamiento. Ninguno de los programas
produjo mejoras significativas en el rendimiento del ejercicio RS, mientras que
en el ejercicio RCD los dos métodos obtuvieron cambios significativos
encontrándose en el ERCD las diferencias más elevadas (11,5% vs 3,6 en
mejor tiempo y 12,6% vs 7,8% en tiempo total). Estos resultados sugieren que
el ERCD añadido a un programa de entrenamiento específico de hockey
produce un aumento considerable en la CRCD.
ESTUDIO 4:
115
III.PARTE EXPERIMENTAL RESUMEN ESTUDIOS
116
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 1
Análisis comparativo de la capacidad de repetir cambios de dirección y la capacidad de repetir
sprints
ESTUDIO 1
117
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 1
Análisis comparativo de la capacidad de repetir cambios de dirección y la capacidad de repetir
sprints
118
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 1
Análisis comparativo de la capacidad de repetir cambios de dirección y la capacidad de repetir
sprints
1.1 INTRODUCCIÓN
Por otro lado, desde hace varias décadas se conoce que la distancia recorrida
en el juego en los deportes de equipo y de raqueta se realiza bajo un patrón de
movimiento intermitente. Concretamente, la capacidad de repetir esfuerzos de
alta intensidad y corta duración, con cortos periodos de recuperación, se ha
mostrado como un buen predictor del rendimiento físico en los partidos en
futbolistas profesionales (Rampinini, Bishop, et al., 2007a). Así, la denominada
CRS también ha sido considerada como un componente importante de
rendimiento en los deportes de equipo. (Glaister, 2005; Spencer, et al., 2005).
Sin embargo, no hay que olvidar que la naturaleza de estos deportes implica
que tanto la intensidad como la duración de las acciones o los periodos de
recuperación sea variable (Lakomy & Haydon, 2004) por lo que, si tenemos en
cuenta la complejidad de las demandas fisiológicas, se hace difícil discernir
cuáles son los factores determinantes del rendimiento.
119
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 1
Análisis comparativo de la capacidad de repetir cambios de dirección y la capacidad de repetir
sprints
120
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 1
Análisis comparativo de la capacidad de repetir cambios de dirección y la capacidad de repetir
sprints
et al., 2010; Buchheit, Haydar, et al., 2012; Haj-Sassi, et al., 2009b; Wilkinson,
et al., 2010; Wong, et al., 2011b). Por ejemplo, Buchheit (2010) y Sajah (2009)
emplearon dos tests similares (6 x 2 x 12,5 m y 6 x 2 x 15 m) que incluían un
giro de 180º llegando a conclusiones opuestas. Buchheit (2010) considera a la
CRS como una capacidad general, mientras que Sajah (2009) considera que el
rendimiento en la CRS es independiente del obtenido en los sprints con giros
de 180º.
1.2.1 SUJETOS
122
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 1
Análisis comparativo de la capacidad de repetir cambios de dirección y la capacidad de repetir
sprints
Los sujetos fueron instruidos para realizar las pruebas con un esfuerzo
máximo, siendo animados verbalmente durante cada repetición.
El tiempo realizado en cada una de las repeticiones de los dos ejercicios fue
registrado colocando dos fotocélulas al inicio y al final del recorrido, conectadas
al laboratorio portátil Musclelab (ergotest, langesund: Noruega) y éste a su vez
al ordenador. Todos los tiempos fueron grabados a una resolución de 0,01s.
Los sujetos realizaron las pruebas a la misma hora del día, solicitándoles que
no modificaran su dieta habitual y que no realizaran ningún tipo de ejercicio de
alta intensidad 24 h antes de las sesiones de intervención. Además, todos los
tests fueron realizados en una pista de hierba artificial, superficie donde
habitualmente los jugadores evaluados realizan sus entrenamientos y partidos.
Los datos fueron analizados con el paquete estadístico SPSS versión 15 para
Windows (SPSS inc., Chicago IL, USA). Se calculó las medias y la desviación
estándar (DS) para todas las variables de los ejercicios analizados.
123
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 1
Análisis comparativo de la capacidad de repetir cambios de dirección y la capacidad de repetir
sprints
1.4 RESULTADOS
124
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 1
Análisis comparativo de la capacidad de repetir cambios de dirección y la capacidad de repetir
sprints
125
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 1
Análisis comparativo de la capacidad de repetir cambios de dirección y la capacidad de repetir
sprints
Figura 1.2. Relación entre tiempo medio (izq.) y mejor tiempo (der.) de los ejercicios RS y RCD. La
línea discontinua representa el intervalo de confianza 0.95%
126
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 1
Análisis comparativo de la capacidad de repetir cambios de dirección y la capacidad de repetir
sprints
1.5 DISCUSIÓN
Los resultados obtenidos en nuestro estudio indican que tanto el tiempo mínimo
como el tiempo medio entre los dos ejercicios analizados presentan una
varianza compartida por debajo del mínimo aceptado del 50% (43% en el mejor
tiempo y 45% en el tiempo medio) lo que implica que ambas capacidades
pueden considerarse independientes. Asimismo, a pesar de que se
encontraron correlaciones significativas entre ambas pruebas (0,65 en el mejor
tiempo y 0,67 en el tiempo medio), estos valores son inferiores al valor mínimo
de 0.71 establecido por Thomas (1990), por lo que la CRCD puede
considerarse una cualidad diferente a la CRS.
Las diferencias existentes entre estudios (Gabbett, Kelly, et al., 2008; Graham-
Smith & Lees, 2005; Vescovi, et al., 2007) pueden deberse a las diferentes
poblaciones testadas, tipo de ejercicio, número de cambios de dirección o
ángulos de giro empleados, aunque en general se sugiere que a mayor nivel de
los jugadores, mayores diferencias entre las cualidades (Jones, et al., 2009).
Esto refuerza el criterio de que la especificidad de las acciones del juego
(Cowley, Ford, Myer, Kernozek, & Hewett, 2006; Herrington, Hatcher, Hatcher,
& McNicholas, 2009) y el nivel de experiencia (Wilkinson, McCord, & Winter,
2010) acentúan esas diferencias.
Por otro lado, Young et al (2001) muestran que los métodos específicos de
entrenamiento de la velocidad lineal y la velocidad de cambio de dirección son
específicos y tienen una limitada transferencia entre ellos. Por lo tanto, es
posible que la especificidad de las relaciones entre estas cualidades pueda
también aplicarse a los efectos de aquellos entrenamientos que las incluyan.
129
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 1
Análisis comparativo de la capacidad de repetir cambios de dirección y la capacidad de repetir
sprints
El tiempo medio y el IF son dos de los indicadores más utilizados para medir el
rendimiento de la capacidad para realizar ejercicios intermitentes a la máxima
intensidad. Sin embargo, mientras los índices de mejor tiempo de sprint y
tiempo total o tiempo medio han demostrado ser reproducibles durante los
ejercicios de sprint repetidos, ninguno de los índices de fatiga o porcentaje de
decrecimiento ha mostrado una reproducibilidad aceptable. Esto ha llevado a
varios autores a sugerir que cualquier índice de fatiga debe ser analizado con
precaución (Aziz, Mukherjee, Chia, & Teh, 2008; Impellizzeri, et al., 2008; Pyne,
130
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 1
Análisis comparativo de la capacidad de repetir cambios de dirección y la capacidad de repetir
sprints
Sin embargo, nuestros resultados son contrarios a los obtenidos por Buchheit
(2010) que empleó un protocolo diferente. En su estudio comparó dos
ejercicios de RS, uno lineal (6 x 25 m) y otro con un cambio de dirección de
180º (6 x 12,5 m ida y vuelta), encontrándose una correlación significativa
(r=0.78) que sugiere que la CRS puede considerarse como una capacidad
general que integra a los cambios de dirección. Las diferencias en cuanto a los
resultados obtenidos con respecto a nuestro estudio las atribuimos
principalmente a las diferencias en el número de cambios de dirección (4 y 1 y
2 respectivamente) y a la homogeneidad de la muestra (nuestro estudio incluyo
a jugadores de un mismo deporte (hockey) y en los estudios de Buchheit se
trata de jugadores pertenecientes a diferentes deportes de equipo), pudiendo,
este aspecto, derivar en variaciones de nivel entre jugadores (Wilkinson, et al.,
2010), que expliquen estas diferencias ya que la distancia valorada es la
misma. Sin embargo, los estudios tanto de Haj-Sassi (2009) como de Wong
(2011) sugieren una independencia entre las capacidades, al igual que nuestro
estudio.
131
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 1
Análisis comparativo de la capacidad de repetir cambios de dirección y la capacidad de repetir
sprints
Pocos son los estudios que han analizado los efectos de los cambios de
dirección en ejercicios intermitentes de alta intensidad y sólo Buchheit et al.,
(2012) y Wong, et al. (2011b) lo han hecho en acciones de cambios de
dirección enlazados en zig-zag. Lakomy (2004) confirma que la rápida
desaceleración entre múltiples sprints tiene un efecto negativo sobre el
rendimiento. Además, aquellos estudios que han valorado variables fisiológicas
internas como (frecuencia cardiaca, Lactato [La]) y/o valoraciones subjetivas de
los sujetos (RPE) encuentran generalmente valores superiores en los ejercicios
intermitentes con cambios de dirección (Buchheit, Bishop, et al., 2010; Dellal, et
al., 2009) aunque el estudio de Buchheit (2012) contrasta con los anteriores
porque no obtuvo diferencias substanciales, salvo en la concentración de
lactato atribuible a una mayor intensidad de la carrera y una superior actuación
del metabolismo anaeróbico.
132
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 1
Análisis comparativo de la capacidad de repetir cambios de dirección y la capacidad de repetir
sprints
133
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 1
Análisis comparativo de la capacidad de repetir cambios de dirección y la capacidad de repetir
sprints
134
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
ESTUDIO 2
135
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
136
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
2.1 INTRODUCCIÓN
Los jugadores para ser competitivos deben poder limitar el impacto de la fatiga
neuromuscular y metabólica en estas secuencias y recuperarse
adecuadamente. Por lo tanto, la capacidad de recuperar y reproducir el
rendimiento en el siguiente sprint es un requerimiento importante en los
deportes de equipo y de raqueta, especialmente al más alto nivel. Existen
varios estudios donde se valoran tanto los factores determinantes (Bishop &
Spencer, 2004; Edge, et al., 2006) como los mecanismos de fatiga de la CRS,
137
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
138
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
En esta línea, una técnica relativamente nueva para medir las propiedades
contráctiles de los músculos esqueléticos es la tensiomiografía (TMG). Se trata
de una prueba no invasiva que no requiere ningún esfuerzo por parte del sujeto
evaluado que proporciona una información rápida y precisa. Mediante este
método se registran las oscilaciones del vientre muscular en respuesta a un
impulso eléctrico bipolar aplicado al músculo, por medio de un sensor de
desplazamiento de alta sensibilidad. La TMG se ha utilizado para medir las
características de la acción muscular (tiempo de contracción y desplazamiento)
(Dahmane, Valen i, Knez, & Er en, 2001), el tono muscular (Valencic & Knez,
1997), la rigidez muscular (Pisot, et al., 2008) y el tipo de fibra muscular
(Dahmane, Djordjevic, Simunic, & Valencic, 2005; Dahmane, et al., 2001;
Simunic, et al., 2011). Asimismo, ha sido descrito como un herramienta útil en
la prevención de lesiones y la detección de desequilibrios musculares y
asimetrías (Tous-Fajardo, et al., 2010) así como para evaluar los procesos de
adaptación de las propiedades contráctiles musculares en sujetos sometidos a
un programa de entrenamiento (Djordjevic, et al., 2000; Kersevan, Valencic,
Djordjevic, & Simunic, 2002).
139
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
2.2.1 SUJETOS
10 sujetos diestros de sexo masculino, entre 17-21 años, con una media ±
desviación estandar de edad, altura y peso de 19±2 años, 1,93±0,07m y 75,5 ±
10 kg, respectivamente tomaron parte en el estudio. Todos los sujetos son
jugadores de baloncesto experimentados, habiendo entrenado y jugado
regularmente durante la temporada. La experiencia de los jugadores no fue en
ningún caso inferior de 5 años.
Todos los sujetos fueron informados previamente de todos los detalles de las
pruebas y de los posibles riesgos y beneficios asociados a su participación en
ellas. Cada uno de ellos dio su consentimiento firmado para voluntariamente
participar en el estudio.
140
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
Las recuperaciones entre las repeticiones y los bloques para los dos ejercicios
se realizaron de forma pasiva. Los sujetos volvían caminando lentamente y
esperaban en la línea de salida hasta la siguiente repetición (Castagna, et al.,
2008; Dupont, et al., 2003).
Los sujetos realizaron las pruebas a la misma hora del día y se les solicitó que
no modificaran su dieta habitual ni realizaran ningún tipo de ejercicio de alta
intensidad 24 h antes de las sesiones de evaluación.
El tiempo realizado en cada una de las repeticiones de los dos ejercicios fue
registrado colocando dos fotocélulas (Musclelab, bosco system, Rieti, Italia) al
141
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
inicio y al final del recorrido. Todos los tiempos fueron grabados a una
resolución de 0,01 s.
Procedimiento Valoración
142
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
143
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
Una vez finalizado el ejercicio principal (RS Y RCD) se les valoró de nuevo
realizando el test de carga progresiva con cada pierna de forma aleatorizada
para valorar la fatiga neuromuscular que provocaba cada uno de dichos
esfuerzos.
Los análisis estadísticos se llevaron a cabo con el SPSS v15,0.Todos los datos
se presentan como media ± DS. Para todos los tests estadísticos, el nivel alfa
fue establecido en p< 0,05.
144
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
2.4 RESULTADOS
145
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
En la tabla 2.2 pueden verse las correlaciones entre los tiempos medios totales
y el mejor tiempo entre el ejercicio RS y el RCD.
Tabla 2.2. Relaciones entre los valores de valoración del ejercicio RS y RCD
8,86 %
7,57 % 7,79 %
10,90 %
146
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
RS
SR
RCD
147
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
148
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
2.5 DISCUSIÓN
Sin embargo, las razones que nos llevaron a mantener esta reducida muestra
fueron por una parte el no tener la disposición de contar con más de un equipo
de baloncesto de la misma edad y nivel, y por otra no querer incorporar grupos
de diferentes deportes por considerar que la especificidad de las acciones del
deporte puede ser una de las razones que distorsiona los resultados. En este
150
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
Las variables analizadas para evaluar la respuesta aguda durante las dos
series fueron el tiempo en las repeticiones, la potencia máxima mecánica en
prensa de piernas en el espectro de toda la curva potencia-carga y el
desplazamiento radial máximo del vientre muscular del vasto lateral, inducida
eléctricamente. De acuerdo con nuestra primera hipótesis, los dos ejercicios
provocaron una disminución del rendimiento, tanto en el tiempo requerido para
las repeticiones, como en el pico de potencia antes y después de las dos
series. Además, se encontraron diferencias en el comportamiento de las
capacidades contráctiles a lo largo de las series entre los dos ejercicios.
151
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
153
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
Por otro lado, el hecho de que las contracciones excéntricas máximas tengan
una menor demanda energética (Dudley, Tesch, Harris, Golden, & Buchanan,
1991) y hayan demostrado ser extremadamente resistentes a la fatiga a pesar
de proporcionar una alta producción de fuerza (Hortobagyi, Tracy, Hamilton, &
Lambert, 1996; Pasquet, Carpentier, Duchateau, & Hainaut, 2000; Tesch,
154
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
Dudley, Duvoisin, Hather, & Harris, 1990) puede hacernos entender que
aunque el tiempo total del ejercicio RCD fue un 80% superior, el rendimiento
fuera similar. Por el contrario, otros estudios de ejercicios con cambios de
dirección sugieren un aumento del gasto energético asociado a la necesidad de
una mayor potencia muscular requerida para vencer la inercia del cuerpo
aunque en estos casos solo se realiza un cambio de dirección cada 20 m
(Buchheit, Bishop, et al., 2010; Dellal, et al., 2009). Se hace difícil la
comparación con este estudio al no haberse podido medir estas variables.
155
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
(Kay, St Clair Gibson, Mitchell, Lambert, & Noakes, 2000), debido a un orden
neural singular (Enoka, 1996) y diferente (Nardone, Romano, & Schieppati,
1989) y por lo tanto a una estrategia motriz diferente.
156
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
Parece ser que hay una tendencia a la dominancia derecha de piernas durante
los movimientos que requieren control de potencia (Miyaguchi & Demura,
2010), como es el caso del cambio de dirección. Young et al (2002)
encontraron una clara dominancia al realizar los cambios de dirección. En su
estudio comprobaron que en un cambio de dirección único la fuerza reactiva de
la pierna derecha correlacionaba de forma más potente que la pierna izquierda
en el rendimiento para girar hacia la izquierda, no siendo así al contrario.
Esto nos puede llevar a pensar que el jugador ante la necesidad de mantener
un rendimiento, en este estudio eran 20 repeticiones con 4 cambios de
dirección en cada repetición, ajustaba la coordinación de las acciones para
mantenerlo, implicando de forma más activa la pierna dominante y por lo tanto
provocándole una mayor fatiga.
157
II.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 2
Efectos de dos esfuerzos intermitentes de alta intensidad (sprint lineal vs cambios de dirección)
en la fatiga muscular valorada mediante la potencia mecánica y la tensiomiografia
158
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 3
Especificidad en dos métodos de entrenamiento de CRS con patrones de movimiento
diferentes
ESTUDIO 3
159
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 3
Especificidad en dos métodos de entrenamiento de CRS con patrones de movimiento
diferentes
160
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 3
Especificidad en dos métodos de entrenamiento de CRS con patrones de movimiento
diferentes
3.1 INTRODUCCIÓN:
Aunque cada vez es más normal encontrar equipos que incorporan tests de
CRS en sus evaluaciones de rendimiento, aún hay muy poca bibliografía
especializada en determinar la carga de entrenamiento más adecuada para
mejorarla. Dada la fuerte correlación entre la CRS y la distancia recorrida a alta
intensidad durante el juego (Rampinini, Bishop, et al., 2007a), sorprende que se
haya estudiado muy poco la eficacia del ERS para mejorar el rendimiento de
esta capacidad. Concretamente las investigaciones se han centrado en la
incidencia del entrenamiento específico y juegos reducidos (Buchheit, Laursen,
et al., 2009; Dellal, Varliette, Owen, Chirico, & Pialoux, 2011b; Hill-Haas, et al.,
2009), el entrenamiento continuo e interválico (Bishop & Claudius, 2005;
Buchheit & Ufland, 2010; Edge, et al., 2005; Fernandez-Fernandez, et al.,
2012b; Ferrari Bravo, et al., 2008a; Glaister, Stone, et al., 2007), y
entrenamiento de fuerza (Bogdanis, et al., 2011a; Edge, Hill-Haas, et al., 2006;
Hill-Haas, et al., 2007).
Los jugadores de los dos grupos, además del entrenamiento ERCD y ERS
correspondiente, siguieron su programa normal de entrenamientos en su club.
El contenido y volumen semanal del programa de entrenamiento queda
explicado y desarrollado en la tabla 3.1. En un primer momento se intentó
incluir un grupo control que tuvo que ser desestimado por las múltiples
dificultades que fueron apareciendo.
164
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 3
Especificidad en dos métodos de entrenamiento de CRS con patrones de movimiento
diferentes
Los tests fueron realizados siempre a la misma hora del día y en la misma
superficie de césped artificial donde se entrenaban los jugadores.
Se asignó de forma aleatoria a cada sujeto a cada uno de los dos grupos de
entrenamiento (ERCD y ERS). Para organizar las sesiones de valoración se
utilizó un diseño cruzado donde los dos grupos realizaron de forma aleatoria los
dos ejercicios de acciones repetidas, uno implicando cambios de dirección
(RCD) y el otro sin cambios de dirección (RS). El ejercicio RS consistía en
realizar 15 repeticiones de sprints lineales de 25 m con una recuperación de 20
s entre repeticiones. El ejercicio RCD consistía en realizar 15 repeticiones de
sprints de 25 m con 4 cambios de dirección intermedios cada 5m con un ángulo
de salida de 135º y con 20 s de recuperación entre repeticiones.
165
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 3
Especificidad en dos métodos de entrenamiento de CRS con patrones de movimiento
diferentes
Los dos grupos (ERCD y ERS) fueron requeridos para participar en dos
sesiones de entrenamiento semanal durante un periodo de 6 semanas con un
mismo volumen total de trabajo (tabla 3.1). Los jugadores realizaron durante la
temporada 2-3 entrenamientos técnico-tácticos de una duración de entre 90
min y 120 min. Los ejercicios RS y RCD se realizaron siempre antes de dicho
entrenamiento y nunca en dos dias consecutivos. Se realizaron 12 sesiones de
entrenamiento, todas ellas supervisadas por el autor de esta tesis,
incluyéndose en el análisis final sólo a aquellos sujetos que completaron un
mínimo de 10 sesiones. Los jugadores de los dos grupos realizaron el mismo
volumen total de entrenamiento con la misma distancia final total recorrida. La
diferencia entre los dos grupos se ciñó a las características de los
desplazamientos siendo lineales en el grupo ERS y con cambios de dirección
en el grupo ERCD.
166
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 3
Especificidad en dos métodos de entrenamiento de CRS con patrones de movimiento
diferentes
El tiempo realizado en cada una de las repeticiones en los dos ejercicios fue
registrado mediante dos fotocéluas del Musclelab (Musclelab, Bosco System,
Rieti, Italia) colocadas al inicio y al final del recorrido. Todos los tiempos fueron
grabados a una resolución de 0,01 s.
3.4 RESULTADOS
Los resultados para todas las variables analizadas se presentan en la tabla 3.2.
167
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 3
Especificidad en dos métodos de entrenamiento de CRS con patrones de movimiento
diferentes
RCD
Minimo 7,04±0,44 6,23±0,33*** 6,83±0,62 6,58±0,63**
promedio 7,44±0,48 6,50±0,31*** 7,41±0,90 6,83±0,67**
ERCD= grupo entrenamiento de repetir cambios de dirección; ERS= grupo entrenamiento de repetir
sprints; RS= Ejercicio de repetir sprints; RCD= Ejercicio de repetir cambios de dirección
A C
B D
Figura 3.1. Evolución del mínimo tiempo y tiempo promedio de los ejercicios RS y RCD
después de las intervenciones ERCD y ERS
168
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 3
Especificidad en dos métodos de entrenamiento de CRS con patrones de movimiento
diferentes
12,6
11,5
7,8
3,6
1,2
0,9
Figura 3.2. Porcentaje de mejora del mejor tiempo y tiempo total en los dos
ejercicios, RS y RCD después de las intervenciones del grupo ERCD y
ESR
169
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 3
Especificidad en dos métodos de entrenamiento de CRS con patrones de movimiento
diferentes
3.5 DISCUSIÓN
Acorde con nuestra hipótesis los resultados destacan que el ERCD tiene un
mayor efecto en el ejercicio de CRCD en comparación con el ERS, en el tiempo
total (12,6% vs 7,8%) y el mejor tiempo (11,5% vs 3,6%). Reilly (2000) sugirió
que la capacidad de cambiar de dirección (agilidad) es un prerrequisito
fisiológico en el fútbol, dado que los jugadores están frecuentemente envueltos
en rápidos cambios de dirección para ser eficaces durante el partido. En este
sentido, varios estudios han destacado que el rendimiento de esta capacidad
es una variable fisiológica independiente en este deporte (Little & Williams,
2005; Mujika, Santisteban, et al., 2009; Wisloff, Castagna, Helgerud, Jones, &
Hoff, 2004). Sin embargo este es el primer estudio que valora la respuesta de
una intervención de CRCD en la capacidad de cambiar de dirección
obteniéndose como resultado un aumento por encima del 10% tanto en el
mínimo tiempo como en el tiempo medio. Atribuimos estas mejoras a un
supuesto incremento de la potencia y la fuerza reactiva, ambas determinantes
en las fases de frenada y aceleración durante los cambios de dirección.
Estudios previos (Haj-Sassi, et al., 2009a; Wong, et al., 2011a) han sugerido
que la CRCD es una capacidad independiente de la CRS y que la primera se
esgrime como una variable determinante en el rendimiento en los deportes de
raqueta y en los deportes de equipo por sus características de intermitencia y
multidireccionalidad en el juego (Walklate, et al., 2009; Wilkinson, et al., 2012a;
Wilkinson, et al., 2010).
171
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 3
Especificidad en dos métodos de entrenamiento de CRS con patrones de movimiento
diferentes
Otra explicación a esta mejora por parte del programa ERS puede ser una
mejora en la aceleración en los primeros pasos del sprint. No obstante, aunque
Serpiello (2011) encontró mejoras significativas de la aceleración en el
desplazamiento (16% de media en las tres series analizadas) de un ejercicio
RS después de un entrenamiento específico de bloques de RS, el estudio de
Little (2005) difiere sustancialmente de éste, defendiendo que la velocidad en
172
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 3
Especificidad en dos métodos de entrenamiento de CRS con patrones de movimiento
diferentes
173
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 3
Especificidad en dos métodos de entrenamiento de CRS con patrones de movimiento
diferentes
174
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
ESTUDIO 4
175
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
176
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
4.1 INTRODUCCIÓN
Aunque muchos son los estudios que se han preocupado por encontrar las
variables de fuerza que mejor correlacionan con los ejercicios de cambio de
dirección como ha sido la valoración de fuerza isocinética (Graham-Smith &
Lees, 2005; Jones, et al., 2009), la fuerza reactiva evaluada mediante test de
salto con contramovimiento (CMJ) (Barnes, et al., 2007) o con test de salto en
caída (DJ) (Hoffman, et al., 2007), muy a menudo las conclusiones derivadas
de estas investigaciones han sido contradictorias.
177
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
178
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
Young et al. (2006) en las conclusiones de sus estudios apuntan la idea de que
se deberían considerar otros factores además de la fuerza y potencia en el
momento de valorar los ejercicios de cambio de dirección. En este sentido,
dichos autores creen que las acciones reactivas con alta sobrecarga excéntrica
unilateral con dirección de la aplicación de la fuerza preferentemente horizontal
podrían ser una variable a tener en cuenta que puede condicionar el
rendimiento en el cambio de dirección.
179
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
4.2.1 SUJETOS
4.2.2 MATERIAL
Un cono está unido al volante y en el punto más alto de este cono se encuentra
el punto de anclaje de una cuerda. Cuando el cono gira, la cuerda se enrolla al
cono provocando el acortamiento de la cuerda. Por otro lado cuando una parte
suficiente de la cuerda está enrollada al cono éste se frena y se invierte el
sentido de giro permitiendo desenrollar la cuerda gracias a la fase concéntrica
del movimiento. Una vez la cuerda está completamente desenrollada el cono
de sujeción continúa girando obligando a la cuerda a enrollarse alrededor del
181
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
Las salidas del encoder lineal, galga de fuerza y goniómetro fueron conectadas
a la unidad Musclelab conectada a su vez a un PC con un software de
182
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
Todos los sujetos pasaron por una fase de familiarización que consistió en
practicar durante una semana y como mínimo dos sesiones de entrenamiento
el ejercicio de lunge lateral a realizar en los diferentes tests. En concreto se
realizaron 10 series de entre 5 y 15 repeticiones del ejercicio definido con
descanso completo. El tiempo definido de descanso de todos los jugadores
antes de repetir una serie fue de 5 min.
Como los jugadores entrenaban con sus equipos se les pidió que no realizaran
ningún tipo de actividad física 48h antes de realizar los tests. El orden de los
tests fue aleatorio para evitar posibles adaptaciones. Para una óptima
recuperación entre los tests se dejaron un mínimo de dos días de descanso.
183
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
185
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
186
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
Los datos fueron analizados con el paquete estadístico SPSS versión 15 para
Windows (SPSS inc., Chicago IL, USA). Se calcularon las medias y la
desviación estandar (DS) para todas las variables de los ejercicios analizados.
187
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
4.4 RESULTADOS
4.4.1 EJERCICIOS DE POTENCIA
CURVA CARGA-POTENCIA
B
B
189
Tabla 4.2. Relación entre las estructuras de ejercicios de potencia analizados (correlaciones)
RPA_Promedio_con 1
RPA_Promedio_exc -,839(**) 1
III.PARTE EXPERIMENTAL
190
Pmed_con ,758(**) -,716(**) ,780(**) -,706(**) 0,178 0,414 1
RPA_promedio_con= Potencia promedio de las 15 series en la fase concéntrica en el test RPA;RPA_Promedio_exc= Potencia promedio de las 15 series en la fase excéntrica en el
test RPA; RPA_Min_con= Valor máximo de potencia de las 15 series en la fase concéntrica en el test RPA;RPA_Min_exc= Valor máximo de potencia de las 15 series en la fase
concéntrica en el test RPA;mant_Pmed= Nº repeticiones por encima del 90% de la Pmed en el test de mantenimiento de potencia; mant_Pmax= Nº repeticiones por encima del 90%
de la Pmax en el test de mantenimiento de potencia; Pmed_con= Valor máximo de Pmed en la fase concéntrica del test de valoración de Potencia Máxima;Pmed_exc= Valor
máximo de Pmed en la fase excéntrica del test de valoración de Potencia Máxima
191
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
192
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
4.5 DISCUSIÓN
193
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
194
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
195
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
Tampoco nosotros hemos encontrado una relación clara entre el ejercicio lunge
lateral con VP realizado con diferentes niveles de resistencia y el mejor tiempo
en el ejercicio de RCD.
Por otro lado Hill-Haas (2007) describieron que el tiempo de recuperación entre
series de ejercicios de resistencia a la fuerza podían condicionar las
adaptaciones en un ejercicio de CRS. Detectaron que aún encontrando
mejoras de fuerza de piernas significativas en el protocolo de entrenamiento
con recuperaciones largas (80 s) las mejoras en la CRS fueron relevantes
cuando el tiempo de recuperación entre series fue reducido (20 s). Aunque
estos resultados no pueden ser comparables directamente con nuestro estudio,
ya que como se describe en estudios anteriores la CRCD y CRS son
capacidades independientes y las variables analizadas son diferentes,
podemos relacionarlos cuando la densidad de trabajo es similar. En nuestro
caso se creó un protocolo de ejercicio RCD buscando la simultaneidad entre la
fuerza muscular y el desarrollo de la resistencia. No obstante, no se
encontraron correlaciones altas entre diferentes manifestaciones de potencia
con el ejercicio de RCD diseñado. Por otro lado Bogdanis (2011) analizando la
las mejoras de la CRS después de comparar dos entrenamientos de fuerza
para el tren inferior, encontraron que el entrenamiento con cargas altas
mejoraba más, sobretodo al final del test, que el entrenamiento con cargas
moderadas. Esto no excluye que un protocolo de entrenamiento con
197
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
Aún teniendo en cuenta estas limitaciones las conclusiones de este estudio nos
permiten confirmar que la manifestación de mantener la potencia y la
valoración de la potencia máxima a diferentes cargas se pueden considerar
capacidades independientes.
198
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
199
III.PARTE EXPERIMENTAL ESTUDIO 4
Relaciones entre la CRCD y diferentes manifestaciones de potencia en deportistas de equipo
200
III.PARTE EXPERIMENTAL CONCLUSIONES
CONCLUSIONES ESTUDIOS
201
III.PARTE EXPERIMENTAL CONCLUSIONES
202
III.PARTE EXPERIMENTAL CONCLUSIONES
203
III.PARTE EXPERIMENTAL CONCLUSIONES
204
III. PARTE EXPERIMENTAL PERSPECTIVAS DE FUTURO
PERSPECTIVAS DE FUTURO
205
III. PARTE EXPERIMENTAL PERSPECTIVAS DE FUTURO
206
III. PARTE EXPERIMENTAL PERSPECTIVAS DE FUTURO
Por otra parte, el hecho de que se considere la CRCD como una capacidad y a
su vez como un posible método de entrenamiento eficaz para estos deportes
de situación, hace necesario ampliar por un lado las mejoras asociadas al
entrenamiento de esta capacidad y por otro lado ampliar la investigación
acerca de las variables que condicionan su mejora.
207
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