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AURELIO FERNANDEZ TEOLOGIA MORAL CURSO FUNDAMENTAL DE LA MORAL CATOLICA CUARTA EDICION REVISADA Y AMPLIADA Pelicano Capitulo XII EL REVERSO DE LA EXISTENCIA CRISTIANA, PECADO Y CONVERSION (I, 747-834) Como queda consignado en el capitulo IV, define como una la moral cristiana se auto- Pero el realismo cristiano sabe por la Biblia y por la experiencia que el hombre es un. , pues en su vida aparece con excesiva frecuencia, ademas del mal fisico, el mal moral. Por eso, el pecado es un tema central en la ética teolégica, pues con- culca el amor, y, si el hombre ha de identificarse con Cristo, necesaria- mente ha de evitarlo porque se opone a la vocacién originaria al amor de Dios. Ahora bien, la comprensién del pecado en la historia del cristia- nismo sigue diversos ritmos: Seguin re- Pite el Magisterio, la nuestra se encuentra més cerca de esta segunda si- tuacion. Pero el tema del pecado no solo es importante en si mismo, sino que en él repercuten los diversos problemas de la teologia moral, hasta el Punto que, del concepto y valoracién que se haga del pecado, depende en 8ran medida la interpretacién de la moral catélica. Este dato se com- Prueba en el tratamiento de los capitulos precedentes: las cuestiones de la Moral Fundamental se cifran, en ultimo extremo, en buscar un juicio objetivo que interprete el mal moral, que denominamos «pecado». De ahi que los vaivenes de la teologia moral se reflejen en la concepcién que se tenga de él, Con el fin de evitar una excesiva racionalizacién, aqui elegimos el mé- ‘odo histérico. Se trata de descubrir, a través de la literatura erisHams, la cxistencia, la nocién y la valoracién que el cristianismo ha hecho del pe- ‘ado a lo largo de su historia. Teologia Moral 204 I. LA REALIDAD DEL PECADO El Magisterio desde el Papa Pio XII, denuncia Del aaa Poca ha perdido sensibilidad por el pecado. El hecho es en s ka Porque gj una idea bfblica clave es'la Hamada ala «conversion», el hombre n,, sentiré la necesidad de convertirse si no tiene conciencia del mal come. tido. Pero, en este supuesto, tampoco apreciara la obra redentora de Je. stis ni valoraré lo que significa el nervio cristiano que entrafia Ja histo. ria salutis. 1, Diversas consideraciones acerca del pecado El tema del pecado y sus repercusiones en la vida humana es tratado habitualmente en las Ciencias del Hombre. En efecto, la literatura, ¢] arte, la filosoffa, el derecho, la psicologia, etc., hacen continuas cias al i Pero han sido precisamente algunas de estas corrientes culturales las que han desvirtuado su verdadero sentido (I, 752-755). Como es légico, la realidad del pecado es tema muy recurrido en las distintas religiones, sin excluir, por supuesto, el cristianismo, pues se ha dicho (K. Barth) que las dos palabras clave que resumen la historia de la salvacién son «gracia» y «pecado». Pues bien, tampoco las concepciones religiosas se han visto libres de interpretar parcialmente la realidad y el sentido del pecado. 2. El pecado en la teologia catélica, Inculpaciones vee crPosicion manualistica de la teologia moral escolar a partir del siglo xv gird marcadamente en torno al Pecado: se trataba de preparar al sacerdote para el ejercicio de la confesién sacramental. Ello demam daba una valoracién de los casos concretos para orient al penitente. Es pe comin due, fruto de esa coyuntura, fue una moral ca en exceso, i: Be __ Pues bien, estos excesos estan siendo criticados de continuo, con ca se0 de inclinarse pendularmente al extrema opuesto. Por ejemplo, 5° aoe que la exposicién de la moral Catdlica de ese perfodo, que co teed ie el Vaticano Il, ha deformado el sentido de culpabilidad = ha privatizado 1a nia Ue ha fomentado un legalismo exageradd! a “ado la penitencia con la practica exclutiva de la confesion PE? Elreverso de la existencia cristiana, Pecado y conversion 205 sonal; que ha caido en un reduccionismo moral al insistir solo en algunos pecados silenciando otros de graves repercusiones sociales e incluso le acusa de haber cafdo en un lenguaje mitico al hablar del pecado y al su- brayar sus consecuencias, etc. Es claro que estas criticas sefialan peligros reales, Pero exageran de- formando dichos males. Ademés no ofrecen los remedios convenientes para evitar los errores que censuran (I, 755-758). I. EL PECADO EN LA REVELACION Para conocer el origen, el sentido y la valoracién del pecado, el re- curso a ¢ hace imprescindible, dado que los datos revelados so- bre el tema son muy abundantes. 5 ee de la condena de los pecados, la Biblia distingue entre el pe- cado de origen y los demas pecados cometidos por el pueblo o por las personas singulares. Asimismo repite de una forma u otra qué Los tres influyen decididamente en que ee) el hombre haga En todo caso, el pecado en la Biblia tiene un sentido especificamente religioso, por cuanto en todo momento destaca las relaciones amorosas del hombre con Dios y no solo se considera como una accién exclusiva del hombre. As{ se expresa el exegeta Ceslas Spicq: «Mientras que la ética griega, antropocéntrica, se basa en la areté (ho- nor, medida y belleza) -fruto de la paideia y, por tanto, penetrada por la ra- 26n-, la moral biblica, teocéntrica, busca la rectitud del hombre en su con- formidad con Dios y concibe la virtud esencialmente como justicia. Sin duda, la justicia es la perfecta correccién moral, la honradez, 0, mejor atin, la practica de la sabidurfa; pero, como su nombre sugiere, implica relacién a Dios y obediencia a su voluntad; el justo es un santo 0, si se quiere, un hombre religioso, fiel al cumplimiento de sus deberes» (Teologia moral del Nuevo Testamento, I, 159-160). 1. Antiguo Testamento (I, 758-765) El estudio se reparte en tres breves apartados: terminologia, actitudes Yensefianzas concretas. Teologia Moral 206 a) qerminologia te ‘til . 130 a la filologfa es Ut! para conocer el verg, es sabido, el recu el A. T. contiene una terminolo, Como i ino. Pues bien, to de un término. * US" : dero eee yrica en significacion para mencionar el pecado. Los té. al gia : entes Son : minos mts rita , «separarse del camino o de la norma, lai en falso». Aparece 523 veces, bien en la forma verbal (232 «dar un paso ot is oel sustantivo veces). ' ad significa » o «sublevarse», por ello quien peca comete i infi 135 textos. un «delito» y «es infiel». Se encuentra en 19> Tex ‘Awon se menciona 244 veces con la significaci6n de «equivocarse cul- pablemente, por ello significa también «iniquidad», «delito» y «culpa». ‘Ademis de esta trilogia se mencionan otros términos, como nebalah= «infamia», «locura»; n'balah= «crimen» € «impiedad»; asam= «delito»; ma’al= «accion mala», «perfidia»; ra'ah= «mal», «maldad»; sik’lut= «nece- lO: dad». El simple recuento de la significacién etimoldgica da este resultad . El que peca comete un de- lito, una i ia, una locura, un crimen, una impiedad, una accién mala, una perfidia, un mal, una maldad, una necedad. El balance de tantos ma- les indica la gravedad del pecado en el A.T. b) Actitudes ante el pecado Si la historia salutis discurre entre la ii i : uti gracia de Dios y el pecado del ae la actitud divina frente al pecado es la alternancia entre castig opel o segtin sea la reaccién del hombre. ae uae) capitulos del Génesis narran el origen y desarrollo de i Balen cee aes es la actitud de Dios frente a la com” ake) ien, el Paraiso, Cain y Abel jluvio consta- tan la extensién mi hasta el punto de ne 1, Noé y el 01 Gn 6, 6), : ' i dad después del castigo a los y como conclusién la dispersi6n de la humant- meee pened a los constructores de la Tae de Babel concreta la La eleccién de oan a Ténica de los pecados del hombre. trupci6n del resto de |: fe ‘4 constancia de su fidelidad frente @ Ja co” Sodoma y Gomorra (ee eer de ahi el castigo a las ciudades ¢° relaciones de Dios con su pee ee Pero, constituido Israel, Ce miden por la Alianza y ante ella des taca en todo mor 4 mento la fideli ; Promiso por parte del homeo oe Dios y el incumplimiento del com El reverso de la existencia cristiana. Pecado y conversié m 207 En resumen, la colosal historia del A.T. entre Dios y el hombre se re sume siempre en una contradiccién: gracia y pecado, fidelidad-infideli si jamada amorosa-desobediencia infel. ee c) Ensefianzas sobre el pecado pero esos hechos van cargados de ensefianzas biblicas. Estas son las que mas se subrayan: — El pecado supone la'transgresién de un precepto de Yahvé. — Los pecados despiertan siempre el celo de Dios. — La lista de pecados es muy variada. Los mas mencionados son: la idolatria y el alejamiento de Yahvé; posponer a Dios por motivos politi- cos o prosperidad temporal; los desérdenes sexuales; la injusticia contra el pobre y el desamparado. _ Yahvé exige siempre la/éxpiacion\y laypenitenciaypor los pecados cometidos. — Ademés de los pecados personales, se mencionan los pecados co- lectivos del pueblo. — En toda ocasién, el pecado en el A.T. tiene siempre una connota- cion religiosa: se refiere como ofensa a Dios. — Dios esté siempre dispuesto al perdén: en toda circunstancia, cuando el pueblo o la persona singular reconocen su pecado y le piden perdén, se manifiesta de modo inmediato el atributo esencial de Dios, 0 sea, su misericordia, tal como subraya el exegeta Spadafora: «

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