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Medicina Interna Oxford 10a Ed PDF
Medicina Interna Oxford 10a Ed PDF
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MA DICI
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ISBN 978-84-7885-631-2
MA DICI
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Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 01.qxd:Oxford 27/04/18 16:33 Página b
Gases sanguíneos
pH 7,35-7,45 p. 670
PaO2 > 10,6 kPa p. 670
PaCO2 4,7-6 kPa p. 670
Exceso de bases ±2 mmol/L p. 670
U y E (urea y electrolitos)
Sodio 135-145 mmol/L p. 672
Potasio 3,5-5,3 mmol/L p. 674
Creatinina 70-100 µmol/L p. 298-301
Urea 2,5-6,7 mmol/L p. 298-301
eTFG > 60 p. 669
Enzimas cardíacas
Troponina T < 99 límite de referencia p. 119
del percentil superior: el valor
depende del ensayo local
movió N. 48
MANUAL OXFORD® DE
MEDICINA
INTERNA
DÉCIMA EDICIÓN
Ian B. Wilkinson
Tim Raine
Kate Wiles
Anna Goodhart
Catriona Hall
Harriet O’Neill
Fármacos
Excepto donde se indique de otra forma, las recomendaciones son para adultos no
embarazados, que no están dando el pecho y que tienen una razonable función renal
y hepática.
Nos hemos esforzado para comprobar el texto, pero todavía es posible que los
fármacos u otros errores se hayan pasado por alto. OUP no respalda, expresa o
implícitamente, que las dosis sean correctas. Se ruega a los lectores que confirmen
con las informaciones de los productos más actualizadas, con los códigos de
conducta y con las regulaciones de seguridad. Los autores y los editores no aceptan
responsabilidad o responsabilidades legales por cualquier error en el texto, o por el
uso inadecuado del material de este trabajo.
Para actualizaciones/correcciones, ver http://www.oup.co.uk/academic/series/
oxhmed/updates/
Contenido
1 Pensando en la medicina 0
2 Historia y exploración 24
3 Medicina cardiovascular 92
4 Neumología 160
5 Endocrinología 202
6 Gastroenterología 242
7 Nefrología 292
8 Hematología 322
9 Enfermedades infecciosas 378
10 Neurología 444
11 Oncología y cuidados paliativos 518
12 Reumatología 538
13 Cirugía 564
14 Química clínica 662
15 Síndromes epónimos 694
16 Radiología 718
17 Intervalos de referencia, etc. 750
18 Procedimientos prácticos 758
19 Emergencias 778
20 Bibliografía 852
Índice 868
Early warning score 892
Parada cardiaca 894
Agradecimientos
Gracias de todo corazón a nuestros consejeros en secciones específicas –cada uno es
citado en la primera página de cada capítulo. Gracias también a nuestros residentes,
Charles Badu-Boateng, Clare Coggins y Luke Walls. Agradecemos muy especialmente a
todos nuestros mentores y profesores, y pacientes que aportan nuestra inspiración y nos
recuerdan que uno nunca deja de aprender. Agradecemos al Departamento de Radio-
logía de los Leeds Teaching Hospitals NHS Trust y Norfolk and Norwich University Hos-
pital por su amable ayuda aportando muchas imágenes, particularmente el Dr. Edmund
Godfrey, cuya incansable caza de imágenes perfectas ha mejorado tantos capítulos.
Comentarios de los lectores. Han formado una parte vital de nuestra tarea de
aportar un texto preciso, entendible y actualizado. Agradecemos muy sinceramente a
todos los estudiantes, doctores y otros profesionales sanitarios que han tenido el tiem-
po y la generosidad de escribirnos en nuestras Tarjetas de Comentarios de los Lectores,
en pasadas ediciones, y en los tiempos más actuales, a través de la web. Han llegado a
ser tan numerosas para las ediciones anteriores que no podemos enumerarlas. Ver
http://oup.com/uk/academic/series/oxhmed/links para una lista completa y para nuestras
sentidas señales de agradecimiento hacia ellos.
Dirección web de terceros. Declinamos cualquier responsabilidad sobre el conteni-
do de terceras partes.
Símbolos y abreviaturas
䊳
䊳䊳
么乆 么乆
«El que estudia medicina sin libros navega por un mar desconocido,
pero el que estudia medicina sin pacientes no sale ni tan siquiera al mar»
William Osler, 1849-1919
1 Pensando en la medicina
Contenido
El juramento hipocrático 1
Cuidados médicos 2
Compasión 3
El rompecabezas del diagnóstico 4
Estar equivocado 5
El deber de la sinceridad 5
Formas fundamentales y
habilidades de comunicación 6 Fig. 1.1. Asclepio, el dios de la medicina y la
Prescribiendo medicamentos 8 curación y sus tres hijas, Meditrina (medicina),
Sobreviviendo en la planta 10 Hygieia (higiene) y Panacea (curación). No deben
Muerte 12 confundirse el bastón y la única serpiente de
La ética médica 14 Asclepio con las serpientes gemelas y el caduceo
Psiquiatría en las consultas médicas de Hermes, el embaucador que fue deificado y
y los quirófanos 15 considerado dios del comercio, quien suele ser
La persona mayor 16 visto con desdén.
La mujer embarazada 17 Placa de Aubin L Millin, Galerie Mythologique (1811).
Epidemiología 18
Los ensayos controlados
aleatorizados 19
Matemáticas médicas 20
Medicina basada en la
evidencia (MBE) 22
Medicalización 23
Nuestro agradecimiento a la Dr. Kate Mansfield, nuestra lectora especialista, por su contrbución a
este capítulo.
J uro por Apolo el médico y Asclepius e Hygieia y Panacea y todos los dioses y diosas, hacién-
dolos testigos, que cumpliré, según mi capacidad y mi juicio, este juramento y estipulación.
A tribuir al que me enseñó este Arte el mismo valor para mí que mis padres y a vivir
mi vida en comunión con él y si necesitara dinero dar una parte mía, a tratar a sus
Pensando en la medicina
hijos igual que mis propios hermanos y enseñarles este Arte si desean aprenderlo, sin
pago ni estipulación. Lo impartiré por mandato superior, por conferencia y por cualquier
otra forma de enseñanza, no solo a mis propios hijos, sino también a los hijos de los que
me han enseñado, y a los discípulos, obligados por el pacto y juramento según la ley de
los médicos, pero no a cualquier otro.
E l tratamento que aplicaré será siempre en beneficio de los pacientes según mi mejor
juicio y ciencia, y nunca para producir daño o con cualquier otro propósito ilícito.
N o daré una droga letal a nadie aunque me lo pida, ni sugeriré tal consejo1, y de forma
similar no daré a una mujer un pesario para procurar aborto2. Pasaré mi vida y prac-
ticaré mi arte con pureza y santidad. Tampoco practicaré operaciones3 para extraer la pie-
dra a los pacientes de cálculos, sino que dejaré operar a los cirujanos expertos en tal arte.
E n cualquier casa en que entre iré en beneficio de los enfermos, absteniéndome de todo deli-
to voluntario y corrupción, sobre todo la seducción de mujeres u hombres libres o esclavos.
T odo lo que se ve o lo que se escucha acerca de la vida común de las personas, aun-
que no se refiera al arte médico, mientras no se me autorice a contarlo lo callaré y
guardaré con celoso secreto.
1 Es poco probable que sea un comentario sobre la eutanasia (muerte facilitada) dado que el jura-
mento antecede a esta palabra. Por el contrario, se piensa que alude a la práctica común de utilizar a
los médicos como asesinos políticos.
2 El aborto por métodos orales era una práctica normal en la antigua Grecia. El juramento advierte
2 Cuidados médicos
Consejos para los médicos
• No culpe a los enfermos por estar enfermos.
• Busque descubrir los deseos de su paciente y cumplir con ellos.
• Aprenda.
• Trabaje para sus pacientes, no para otros.
• Respete sus opiniones.
Pensando en la medicina
Pensando en la medicina
1 QALY, considerando que un año de esperanza de vida no saludable vale menos de un
QALY, cayendo progresivamente el empeoramiento de la calidad de vida. Si una inter-
vención significa que son valor de 8 años saludables, entonces esa mediación tendrá un
valor QALY de 8. Si un nuevo medicamento mejora su calidad de vida desde 0,5 a 0,7
por cada 25 años, entonces se tiene un valor QALY de (0,7-0,5) x 25 = 5. Basándose en
el coste de intervención, se puede calcular el valor de un QALY. Las prioridades de aten-
ción sanitaria pueden entonces ser dirigidas hacia QALYs de bajo coste. El Instituto
Nacional para la Salud y Cuidados de Excelencia (NICE) considera que las intervencio-
nes para las cuales 1 QALY es igual o menor de 30.000 libras esterlinas son rentables.
Sin embargo, como aplicación práctica desde una teoría utilitarista, los QALY permane-
cen abiertos a la crítica (tabla 1.1). Recuerde que aunque para un clínico el tiempo es
exacto y cuantificable, para los pacientes es más parecido a la literatura que a la ciencia:
un minuto puede ser un episodio, un año o una simple oración.
Tabla 1.1. Ventajas y desventajas de QALY
Ventajas Desventajas
• Toma transparente ante la sociedad • Se enfoca a la enfermedad y no la salud
• Una unidad común frente a • Se basa en el paradigma de que vivir más
intervenciones diferentes tiempo es un éxito
• Permite el análisis coste-eficacia • La evaluación de la calidad de vida se
• Permite una comparación mide a través de la población general y
internacional no de los enfermos
• Potencialmente los ancianos ganarían menos
esperanza de vida
• Se enfoca en los resultados y no el proceso,
es decir, los cuidados, la compasión
Compasión
La importancia de la compasión en la medicina es indiscutible. Es una respuesta emo-
cional a la negatividad o el sufrimiento que motiva el deseo de ayudar. Es más que
«piedad», que tiene connotaciones de inferioridad; y diferente de la «empatía», que
es una experiencia vicaria del estado emocional de otro. Requiere la existencia ima-
ginativa en la condición de otro. El ficticio Jules Henri experimenta una pérdida de
sentido de la segunda persona; la desesperación de otra persona altera su percep-
ción del mundo para que estén «conectados en algún patrón universal, aunque invisible,
de la humanidad»4. Con compasión, el dolor de otro es «intensificado por la imagina-
ción y prolongado por cien ecos»5. La compasión no se puede enseñar; requiere com-
promiso con el sufrimiento, el entendimiento cultural y una mutualidad, más que el
paternalismo. Los ambientes políticos, excesivamente mecánicos, y de la alta gestión
desalientan su expresión. Cuando la compasión (lo que se siente) es difícil, la etique-
ta (lo que se hace) no debe fallar: la reflexión, la empatía, el respeto, la atención y las
costumbres cuentan: «Porque yo nunca podría haber rezado por esto: tener piedad de
mí y soportar las agonías y quedarse conmigo y ayudarme»6.
Escollos heurísticos
Los heurísticos son accesos cognitivos directos que permiten tomar decisiones rápidas
centrándose en predictores relevantes. Esté consciente de ellos para que pueda estar
alerta o pendiente de sus trampas.
Representatividad: El diagnóstico está impulsado por el «caso clásico». Pero no se olvide
de la variante atípica.
Disponibilidad: La enfermedad que recordamos, o ha sido tratada recientemente, tiene
más peso en nuestra jerarquía diagnóstica. Pregúntate si esta información está más fres-
ca o es verdaderamente relevante.
Confianza excesiva: ¿Estás estimulado por cuánto sabes y por lo bien que lo sabes? Pro-
bablemente.
Sesgo: La búsqueda y el recuerdo de información clínica que encaja con nuestras expec-
tativas.
Correlaciones ilusorias: Se supone que los eventos asociados son ocasionales. Pero, ¿fue el
tratamiento o el tiempo el que curó al paciente?
Estar equivocado 5
Siempre es posible estar equivocado porque usted permanece inconsciente ante
esto mientras sucede. Tal error de ceguera es porque se dice: «Yo estoy equivoca-
do»; esto es una declaración de imposibilidad. Una vez que sea consciente de que
está equivocado, ya no lo está, y por lo tanto solo puede declarar que «estaba equi-
Pensando en la medicina
vocado». Es también la razón por la cual la falibilidad debe ser aceptada como un
fenómeno universalmente humano. Por el contrario, ciertamente es la convicción de
la que no podemos estar equivocados porque nuestros sesgos y creencias deben
estar fundamentados en la realidad. Indudablemente produce la reconfortante ilu-
sión de que el mundo (y la medicina) es cognoscible. Sin embargo, hay que tener
cuidado porque implica un cambio de perspectiva hacia adentro, hacia nuestras pro-
pias convicciones. Esto significa que las historias de otras personas pueden dejar de
importarnos. Ciertamente se convierte en letal para la empatía.
Con el fin de determinar cómo y por qué se cometen errores, es necesario que
sea reconocido y aceptado. Estar a la defensiva es malo para el progreso. «Yo estaba
equivocado, pero...», es un análisis abierto y honesto del error lo que facilitará la
acción diferente y un mejor futuro. Es solamente con el escrutinio cercano de la equi-
vocación como usted puede ver la posibilidad del cambio en el centro del fallo.
Y sin embargo, la práctica médica está llena de ejemplos de resistencia a la revelación,
y recompensa a la ocultación del error. Esto debe cambiar. Recuerde la ceguera del
error y proteja sus denunciantes. Escuchar. Es un acto de humildad que reconoce la
posición de los demás y la posibilidad de error en uno mismo. El conocimiento per-
siste solo hasta que puede ser refutado. Mejor aspirar a la máxima de Sócrates:
«Al principio, él no sabía ... por lo tanto tampoco sabe la respuesta, pero creía que
sabía la respuesta, y respondió con confianza, como si tuviera conocimiento. Creo que
estaba bloqueado antes, pero ahora se da cuenta de que realmente lo está... En cual-
quier caso, parece que hemos aumentado sus posibilidades de descubrir la verdad del
asunto, porque ahora, dada su falta de conocimiento, él estará alegre de emprender la
investigación... ¿Crees que él habría intentado averiguar o aprender acerca de este
asunto cuando pensó que lo sabía (aunque no lo hiciera), hasta que se quedó atrapa-
do, y había llegado a apreciar esta ignorancia y a anhelar, conocimiento?».
Platón: Meno y otros diálogos, 402 a.C.; traducción al inglés de Waterfield, 2005.
El deber de la sinceridad
En un mundo en el que un «error» puede ser redefinido como una «complicación»,
es fácil ocultar la equivocación detrás de un velo de lenguaje técnico. En 2014, un
deber profesional de sinceridad se convirtió en ley en Inglaterra por incidentes que
causen muerte, daño severo, daño moderado o daño psicológico prolongado. Tan
pronto como sea posible, el paciente debe ser informado en persona de lo que suce-
dió, dándole los detalles de las investigaciones adicionales, y ofreciéndole disculpas.
Pero esto no debe conducir a una presentación tipo «casillas» de las disculpas con un
valor cuestionable. Tenga la seguridad de que una disculpa no es una responsabilidad
de admisión. El riesgo y las imperfecciones son inherentes a la medicina y usted tiene
la libertad de sentirse mal cada vez que ocurren. No se centran en la legislación, sino
en la transparencia y el aprendizaje. La ética del perdón requiere una respuesta com-
pleta en la que la voz del paciente se sitúe en el corazón del proceso.
Haciendo preguntas 7
Preguntas abiertas: «¿Cómo estás?». «¿Cómo te sientes?». La manera en la que
el paciente responde ofrece una información valiosa. «Cuéntame sobre el vómito».
«Estaba oscuro». «¿Cómo?» «Como trozos de tierra en él». Esta información es de
oro, aunque no se exprese en forma de «granos de café».
Pensando en la medicina
Preguntas centradas en el paciente: Los pacientes pueden tener sus propias
ideas sobre lo que está causando sus síntomas, cómo le influyen y qué se debe hacer.
Esto es más cierto cuando los pacientes consultan frecuentemente al Dr. Google
antes de a su médico de cabecera. A menos que se aclare sus ideas, preocupacio-
nes y expectativas, es posible que su paciente nunca esté plenamente satisfecho con
usted o pueda participar plenamente en su propio cuidado.
Considerando el conjunto: Los seres humanos no son unidades autosuficientes,
somos seres relacionales complejos, reaccionando constantemente ante eventos,
entornos y entre nosotros. Para entender las preocupaciones del paciente se debe
entender su contexto: la vida en el hogar, el trabajo, los sueños, los miedos. La infor-
mación de la familia y amigos puede ser muy útil para identificar los factores desen-
cadenantes, los que agravan y encontrar la verdadera causa subyacente. Un dolor de
cabeza causado por la ansiedad se trata mejor no con analgésicos, sino ayudando al
paciente a obtener apoyo.
Silencio y ecos: A menudo los detalles más valiosos son los más difíciles de decir.
Ayude a sus pacientes a expresar tales pensamientos dándoles tiempo: si pregunta
a un petirrojo, volará; el árbol, como el silencio, puede traerlo a su mano.
«Secreto del negocio: los mejores diagnosticadores en medicina no son los internistas,
sino los pacientes, si el médico se sienta, se calla y escucha, el paciente eventualmen-
te le dirá el diagnóstico»
Kill as Few Patients as Possible, Oscar London, 1987
Aunque potente, el silencio no debe ser opresivo, trate de repetir las últimas pala-
bras dichas para animar a su paciente a continuar hablando de un pensamiento en
particular.
Tratar de evitar
Preguntas cerradas: Estas no permiten ninguna oportunidad de negar suposiciones.
«¿Ha tenido dolor de cadera desde su caída?». «Sí, doctor». La búsqueda le hizo pen-
sar que el mismo dolor de cadera estaba presente durante muchos años, antes de
la caída.
Preguntas que sugieren la respuesta: «¿El vómito era negro, como el café molido?».
«Sí, como el café molido, doctor». Las expectativas del médico y las prisas para obte-
ner la evidencia en un formato pre-decidido ha condicionado como para hacer inútil
la información.
8 Prescribiendo medicamentos
䊳 Consulte la BNF (British National Formulary) o BNF para niños o similares antes de dar
cualquier medicamento con el que no esté completamente familiarizado.
䊳 Compruebe el estado alérgico del paciente y haga todos los intentos razonables para
calificar la reacción (tabla 1.2). La admisión de carga iatrogénica hospitalaria y las muer-
tes evitables relacionadas con las drogas es real. Igualmente, no niegue el tratamiento que
salve la vida basándose en una reacción leve y predecible.
Pensando en la medicina
Recuerde «primum non nocere»; primero, no hacer daño. Cuanto más leve es la enfer-
medad, más razón tiene esta frase. En general, los médicos tienden a prescribir demasia-
do o todo lo contrario.
Considere lo siguiente cuando prescriba cualquier medicamento:
1 La patología subyacente. No deje que la mejora de los síntomas le lleve al fracaso
de la investigación de las causas y el diagnóstico de la enfermedad.
2 ¿Es este medicamento según la mejor evidencia?
3 Reacciones de fármacos. Todos los medicamentos vienen con riesgos, posibles efec-
tos secundarios, inconvenientes para los pacientes y gastos.
4 ¿El paciente toma otros medicamentos?
5 Alternativas a la medicación. ¿El paciente realmente necesita o quiere medicamen-
tos? ¿Está dando medicamentos por un sentido de necesidad de hacer algo, o por-
que realmente siente que le ayudará al paciente? ¿Es más apropiado ofrecer infor-
mación, tranquilizar o modificar el estilo de vida?
6 ¿Existe riesgo de sobredosis o adicción?
7 ¿Puedes asistir al paciente? Una vez es mejor que cuatro veces. ¿Que sea tan fácil
como abrir una botella? ¿Existe una intervención que le pueda ayudar con el mane-
jo de medicamentos?, por ejemplo, una ayuda para el cumplimiento es una caja con
varios compartimentos, el asesoramiento de los pacientes, a través de las TIC como
una aplicación para los teléfonos inteligentes.
8 Planificación futura. ¿Cómo va a decidir si el medicamento ha funcionado? ¿Cómo se
encuentra para continuar, detener o cambiar el régimen prescrito?
La valoración del dolor
El dolor se ve a menudo como una cosa inequívocamente mala, y ciertamente muchos
pacientes sueñan con una vida sin dolor. Sin embargo, sin dolor somos vulnerables a nosotros
mismos y nuestros comportamientos, y el riesgo de ignorancia de las luchas subyacentes.
Mientras que la mayoría de los niños aprenden rápidamente que no deben tocar el
agua hirviendo porque su propio cuerpo disciplina su comportamiento con el castigo
del dolor, los niños nacidos con insensibilidad congénita al dolor (CIPA) pueden que-
marse, romper huesos y desgarrar la piel sin sentir ningún efecto inmediato. Su salud
está constantemente en riesgo por comportamientos de inconsciente automutilación
y trauma desprevenido. La CIPA es muy rara, pero los ejemplos de la tendencia huma-
na de autodaño sin el factor protector del dolor son comunes. ¿Alguna vez te has mor-
dido la lengua o la mejilla después de un anestésico dental? Los pacientes con neuro-
patía diabética corren el riesgo de osteomielitis y artropatía en sus pies sin dolor.
Si recibes un mensaje de malas noticias, no lo ocultas. Escuchar el dolor hace al
paciente que esté más protegido.
Cumplimiento y correspondencia 9
El cumplimiento personifica el desequilibrio de poder entre médico y paciente: el
médico conoce la mejor y la única responsabilidad del paciente, que es cumplir con
este monopolio del conocimiento del médico. El término «cumplimiento», que des-
precia a los pacientes y es éticamente dudoso, ha sido relegado de la práctica de la
Pensando en la medicina
prescripción moderna. La correspondencia es ahora lo fundamental: un acuerdo
de prescripción que incorpore las creencias y deseos del paciente.
Solo el 50-70% de los pacientes toman los medicamentos que les han sido rece-
tados. Esto lleva a la preocupación por el desperdicio de recursos y enfermedades
evitables. Las intervenciones que aumentan la correspondencia se promueven usan-
do la regla nemotécnica: Educating Patients Enhances Care Received (Educar a los
Pacientes Mejora el Cuidado Recibido).
• Explicación: discutir los beneficios y riesgos de tomar y no tomar medicamentos.
Algunos pacientes prefieren no ser tratados y si el paciente tiene capacidad y
entiende los riesgos, por tanto la decisión debe ser respetada.
• Problemas: hablan a través de la experiencia del paciente y de su tratamiento, ¿han
sufrido estos efectos secundarios que han provocado la no adherencia?
• Expectativas: discutir lo que deberían esperar de su tratamiento. Esto es impor-
tante especialmente en el tratamiento donde no hay ningún beneficio sintomáti-
co, por ejemplo, tratamiento antihipertensivo.
• Capacidad: hablar con ellos sobre la posología de la medicación y considerar las
maneras de reducir la complejidad de esta.
• Refuerzo: entregue por escrito lo que le ha comentado para que el paciente se lo lleve
a casa. A continuación compruebe cómo se están administrando sus medicamentos.
Pero recuerde que hay poca evidencia de que la incorporación de información mejo-
re la correspondencia. Y si la correspondencia se incrementa únicamente es por la
«educación» del paciente, y entonces comienza a parecerse mucho al cumplimiento.
Un acuerdo verdaderamente compartido no siempre «cumplirá» o «corresponderá»
con el prescriptor. La capacidad del individuo informado para consentir o no, significa
que en algunos casos, la correspondencia se parece más a divergencia informada.
El efecto placebo
Fenómeno bien reconocido por el cual los pacientes mejoran después de someterse a
una terapia en la que los médicos creen que no tienen un efecto directo sobre la pato-
fisiología de su enfermedad. La naturaleza de la terapia (píldoras, rituales, masajes) impor-
ta menos que si el paciente cree que la terapia le ayudará.
Ejemplos del efecto placebo en la medicina moderna incluyen a los participantes en el
grupo placebo de un ensayo clínico en los cuales se ven mejoras espectaculares en su
enfermedad refractaria, y en los pacientes con dolor severo asumiendo que el lavado sali-
no antes de su morfina IV es morfina y reportan alivio del dolor antes de que se le hayan
administrado opiáceos. Es probable que gran parte del alivio sintomático experimenta-
do con medicamentos «activos» resulte de un efecto placebo. La industria de terapias
complementarias tiene muchas formas ingeniosas de utilizar el efecto placebo. Estos pue-
den dar grandes beneficios a los pacientes, a menudo con un riesgo mínimo; pero sigue
existiendo el potencial de daño significativo, tanto financieramente como por disuadir a
los pacientes de buscar la ayuda médica necesaria.
El motivo por el que la evolución nos ha dado cuerpos con un grado de capacidad de
auto-sanación en respuesta a la creencia de que la sanación va a suceder, y no en res-
puesta a un deseo de curación, no está claro. Quizás la creencia de que una solución
pone en marcha los sistemas silentes de alarma interna que están diseñados para decir-
nos que hay un problema, y así mejorar los síntomas que resultan de la percepción del
cuerpo enfermo.
Muchos pacientes que reciben terapias no son conscientes de los efectos que se espe-
ra que produzcan, perdiendo así la creencia de que pueden darles una expectativa de
mejora. Trate de encontrar tiempo para discutir con sus pacientes la forma en que estos
esperan que el tratamiento mejore sus problemas.
10 Sobreviviendo en la planta
La ronda de visitas
• Todas las anotaciones en el expediente del paciente deben tener: fecha, hora, nombre,
el clínico que lidera la intervención, los hallazgos clínicos y el plan, su firma, nombre impre-
so y detalles de contacto. Asegúrese de que los detalles del paciente estén en la parte
superior de cada lado del papel. Escribir legible, esto puede ayudar más que el paciente.
• Una lista de problemas le ayudará a estructurar sus pensamientos y a guiar a otros.
Pensando en la medicina
Pensando en la medicina
Conscience and Conflict: A Biography of Sir Dominic Corrigan 1802-1880, E O´Brien, 1983
¿Estaba ocupado? En los inicios de su vida profesional le aconsejaron que la mejor
manera de llegar a tener una ocupación era fingir que la tenías. Le sugirieron que le
entregarían de forma ostentosa una nota acusada como «Urgente e Inmediata» cuan-
do estuviese sentado a la mesa durante la cena, pero a una hora apropiada para que
no se perdiese la mejor comida. No siguió el consejo. Corrigan aspiró a la lucha y ense-
ñó a sus estudiantes el valor «de no estar nunca haciendo nada». La ciudad en la cual
él practicó tenía «un grado de suciedad, hedor y oscuridad, inconcebible por los que
no los han experimentado», «y no bastantes camas de hospital para ocuparse por los
grandes números de necesitados». Y así la historia de una puerta secreta, hecha en su
consultorio, para evitar alguna vez la siempre creciente cola de pacientes ansiosos.
En el caos, lleno de pugnas, demandas urgentes, simultáneas, burocracia excesiva,
pocas camas, el desequilibrio entre la recompensa y el esfuerzo, el sacrificio perso-
nal, y la desesperación, necesitamos que Corrigan nos tome de la mano y pasee con
nosotros por una puerta secreta en un mundo interior tranquilo. Nuestra puerta
metafórica tiene cinco partes.
1 Por muy solitario que se sienta, usted no está solo. No se sienta orgulloso de
no pedir ayuda. Si una decisión es difícil, compártala con un colega.
2 Dese la posibilidad de sentarse y descansar. Tome una taza de té con otros
miembros de personal, o con un paciente amistoso (los pacientes son las fuen-
tes de renovación, no solamente los devoradores de su energía).
3 No eche de menos las comidas. Si no hay tiempo para ir a la cafetería, asegu-
rarse de que la comida está cerca para comer cuando usted pueda: el trabajo
y el insomnio son dos elementos que se llevan mal cuando se tiene hambre.
4 Evite hacer usted todo el trabajo. Es demasiado fácil para los médicos, atrapa-
dos en su imagen de trabajo excesivo, y chantajeado por una culpa inapropia-
da, quedarse en la planta visitanto de nuevo a los pacientes, volviendo a escri-
bir notas, o comprobando de nuevo los resultados, a una hora en la que la prio-
ridad debería ser cuidar de ellos mismos.
5 Mire hacia el futuro. Planifique pasar un buen tiempo después de un mal turno.
Los orígenes de la historia de la puerta secreta de Corrigan son desconocidos.
Puede que nunca haya existido en otro sitio que no sea en estas páginas benditas.
Pero cuando la leyenda se hace realidad, la leyenda se publica7.
Resiliencia y adaptación
«El agotamiento» es común en la práctica médica. Este es un síndrome que cursa con un entu-
siasmo que se ha perdido, una empatía reducida, un cinismo aumentado, y una disminución de
la obligación del trabajo. Los estilos que son adaptivos y que tienen resiliencia pueden proteger
a los médicos y a equiparlos mejor para encontrar y aprender los desafíos de la práctica clínica.
• El autodirigido se relaciona fuertemente con la resiliencia. Tiene un sentido personal de
la responsabilidad permitiendo el estudio de los errores y por tanto seguir adelante.
• El cooperativo tiene la capacidad de trabajar con opiniones y comportamientos dife-
rentes al suyo, previniéndolos ante situaciones de estrés.
• Los clínicos, que son tranquilos son los mejores en aceptar la incertidumbre y un grado
de riesgo. Esto facilita la toma de decisiones sin que se vea afectado por la ansiedad y
el pesimismo sobre los problemas potenciales. Una prueba controlada que esté fuera
de su zona de confort puede ayudarle a tratar con la incertidumbre.
• Sea persistente pero ponga objetivos realistas. El perfeccionismo puede ser perjudicial.
• La adaptación orientada hacia la tarea ocurre cuando una situación es vista como cam-
biable. Esto es asociado con menos agotamiento que la adaptación orientada por
emoción cuando las situaciones son consideradas inmodificables: no lo haga.
• Sea consciente de sí mismo. El desarrollo o la modificación de sus rasgos de persona-
lidad pueden reducir su vulnerabilidad.
7 El hombre que mató a Liberty Valance, 1962. Ransom Stoddard (Jimmy Stewart) se convirtió en una
leyenda después de matar a Liberty Valance en un duelo. No importa que el que realmente disparó
fue Tom Doniphon (Jonh Wayne).
12 Muerte
La sabiduría de la muerte
La muerte es el golpe maestro y cruel de la naturaleza, permitiendo a los genotipos
el espacio para intentar nuevos fenotipos. Llega un momento en la vida de cualquier
órgano o persona en el que es mejor comenzar desde el principio, en lugar de lle-
var la carga y el desorden aumentándolo infinitamente. Nuestros cuerpos y mentes
Pensando en la medicina
son los fenotipos perecederos sobre la guía de nuestros genes. Pero nuestros genes
no son realmente nuestros genes. Somos nosotros quienes les pertenecemos duran-
te unas décadas. Y la muerte es el gran insulto de la naturaleza. Que ella prefiera
poner todos sus huevos en la cesta de un recién nacido indefenso, incompetente,
más que en la custodia probada de nuestras propias mentes magníficas. Pero como
nuestras neurofibrillas comienzan a enredar, y el recién nacido camina a una sabidu-
ría que nos elude, estamos obligados a dar a la naturaleza crédito por su atrevida
idea. Desde luego, la naturaleza, con su modo descuidado, puede conseguirlo de mala
manera: la gente a menudo muere de una forma incorrecta y una de nuestras res-
ponsabilidades debe ser prevenir hacerlo de esa forma, no el fenómeno de la muer-
te en sí mismo. Con esa excepción, debemos admitir que el morir es una idea bri-
llante, y una que es poco probable que hubiéramos ideado por nuestra cuenta.
Diagnóstico muerte
¿Estaría sorprendido si un paciente muriera a los pocos días, semanas, o meses? Si la res-
puesta es «No» entonces el final de la vida, las decisiones y el cuidado deberían ser guiados.
Considere: la disminución de la capacidad funcional, por ejemplo estar en la cama o la
silla al menos el 50% del día, con una dependencia creciente, la gravedad de co-morbili-
dades, el aumento de un síntoma inestable o que se deteriora, que la respuesta al trata-
miento se vea disminuida, la pérdida de peso de un 10% en 6 meses, reingresos por cri-
sis, albúmina en suero < 25 g/L, un suceso de alerta, por ejemplo una caída y la intro-
ducción de una enfermera en casa.
Diagnosticando la muerte
La muerte es la pérdida irreversible de las características esenciales que son nece-
sarias para la existencia de un ser humano.
La muerte tras el cese de la función cardiorrespiratoria
䊳 Inicio simultáneo e irreversible de apnea, ausencia de circulación, e inconsciencia.
La parada cardiorrespiratoria es confirmada por la observación de lo siguiente:
• Ausencia de pulso central mediante la palpación.
• Ausencia de latidos cardíacos mediante la auscultación.
• Después de que se confirman 5 minutos de parada cardiorrespiratoria se examina
la actividad cerebral mediante la ausencia de respuestas pupilares a la luz, el reflejo
corneal ausente, y ninguna respuesta motora superior a la presión supraorbitaria.
La hora de la muerte es el momento en el cual estos criterios se cumplen por com-
pleto.
Muerte cerebral
䊳 Una lesión cerebral causa un daño irreversible al sistema nervioso que controla
el aparato cardiorrespiratorio y el conocimiento.
Diagnosticado por la ausencia de reflejos cerebrales.
• Ninguna respuesta de la pupila a la luz.
• Ningún reflejo corneal (parpadea para tocar).
• Ausencia de reflejos oculo-vestibulares (ningún movimiento de ojos, en cada mea-
tus externo auditivo, viendo el tímpano tras la inyección de agua helada).
• Ninguna respuesta motora tras un estímulo del sistema nervioso central (presión
supraorbital).
• Ausencia de tos y de reflejo nauseoso.
• Ninguna respuesta respiratoria a la hipercarbia: la oxigenación se mantiene (Sp O2
> 85 %) pero la ventilación se reduce para alcanzar PCO2 6 kPa, con un pH
7,4. Ninguna respuesta respiratoria es observada dentro de 5 minutos y subidas
de PCO2 > 0,5 kPa.
El diagnóstico se hace por dos médicos competentes colegiados > 5 años confir-
mándolo total y satisfactoriamente en dos consultas separadas.
Administrando la muerte 13
La muerte puede ser considerada como un fracaso médico o más bien como una
consecuencia inevitable de la vida. Pero cuando los tratamientos médicos más pue-
den ofrecer una cura, y un paciente entra en el final de la vida, la dirección activa de
la muerte es vital. Recuerde que el objetivo de la medicina es estrecho y se preo-
cupa más por la reparación de la salud que por el sustento del alma. Este imperati-
Pensando en la medicina
vo médico no puede fallar en su deber hacia la vida; en la muerte mejor. Las priori-
dades al final de la vida incluyen la ausencia del dolor, tratando al hombre comple-
tamente, alcanzándolo en el más amplio sentido y encontrando la paz con Dios.
La muerte rápida debido a un acontecimiento catastrófico es rara. La mayoría de
las muertes son el producto final de una lucha contra una enfermedad a largo plazo,
progresiva: cáncer, EPOC, enfermedad vascular, deterioro neurológico, fragilidad o
demencia. Aunque la muerte sea inevitable, el pronóstico es difícil e inexacto, con
una variación notable de la duración hasta la fecha de la muerte. El paciente que está
delante de usted puede estar en la mediana, por debajo, o sobre el percentil 99.
Atrévase a tener esperanza, pero prepárese para lo peor. Priorice en función de la
preferencia y el objetivo de encontrar las necesidades individuales.
Busque la ayuda de los miembros de personal experimentados, incluyendo los equi-
pos de cuidados paliativos.
• Provoque las necesidades: fisiológicas, social y espiritualmente. Hable de los miedos.
• Establezca los deseos del paciente. ¿Qué compensaciones están ellos dispuestos a
aceptar? Por ejemplo, la toxicidad de un tratamiento a cambio del tiempo poten-
cial de vida que le puede dar. ¿Cuál es inaceptable para ellos?
• Considere los puntos de vistas importantes para el paciente.
• Hidratación: darle apoyo para permitir a los moribundos poder beber, ofrecerle el
cuidado de la boca. Considere la hidratación clínicamente como una ayuda (paren-
teral, enteral, intravenoso), acorde a los deseos y si los signos/síntomas de la des-
hidratación son posiblemente penosos. Párese según el deseo y el daño.
• Maneje el dolor puntualmente y con eficacia. Trate cualquier causa para revertir el
dolor.
• Considere una bomba de infusión para el control de los síntomas si se requirió
medicación dos veces en 24 horas.
• Espere síntomas probables: la parte PRN (a voluntad del paciente) del gráfico de
medicamentos debería cubrir todas las posibilidades.
La muerte puede o no venir en paz y aceptación. Los pacientes pueden quizás irri-
tarse contra la luz de la muerte. Dele testimonio: escuche y sostenga su mano.
Donación de órganos
Más de 6.000 personas esperan un trasplante en el Reino Unido y aproximadamente 1.000
personas necesitan un trasplante o morirán cada año (p. 308). Cualquier paciente que es
un donante potencial puede remitirse a un servicio especialista de donación de órganos.
Este departamento proporcionará el consejo en cuanto a la conveniencia para el trasplan-
te y coordinará el acercamiento a familias. Se puede contactar con ellos las 24 horas del
día y sus detalles serán proporcionados en nuestros departamentos A*E y/o ITU.
Los órganos pueden ser extraídos de:
• Donante después de la muerte cerebral o donante con corazón latiendo.
• Donante después de muerte cardiaca o donante con corazón parado o en asistolia. Inclu-
ye la muerte después de la resucitación cardiopulmonar fracasada y pacientes para
quien la muerte es inevitable, pero no concurren los criterios de la muerte clínica.
Hay dos marcos legislativos para la donación de órganos:
• Opción incluyente. Los donantes dan su consentimiento explícito.
• Opción excluyente. Cualquiera que activamente no ha rechazado el consentimiento,
es un donante.
La asociación entre la opción excluyente y unas tasas de donación más elevadas se ve
complicada por la presencia de múltiples factores de confusión. El cambio no legislativo,
incluyendo la coordinación nacional, el apoyo y el grupo de clínicos expertos, la discu-
sión rutinaria de los cuidados paliativos, y la recuperación eficiente del órgano también
aumentan las tasas de donación. La ética del supuesto consentimiento también debería
ser considerada: la ausencia de una objeción no sería un sustituto aceptable del consen-
timiento informado en otras áreas de la práctica clínica.
En el Reino Unido, aunque el consentimiento para trasplante descansa en el difunto, si
la familia del paciente o el representante no pueden dar el consentimiento, la donación
entonces no seguirá adelante. Registre la decisión sobre sus deseos.
14 La ética médica
«Nuestra práctica clínica está dirigida por principios éticos. Ellos orientan las decisiones que
hacemos en nuestras consultas y rondas de visitas del hospital, lo que manifestamos a nues-
tros pacientes, y lo que omitimos decirles».
Tony Lopez. Journal of Royal Society of Medicine 2001, 94; 603-4
En los silencios de nuestras consultas somos nosotros quienes estamos bajo el microscopio,
y no podemos evitar nuestro destino ético. Para darnos el coraje para conseguir este obje-
Pensando en la medicina
tivo, podemos recordar la ley del aviador y la gaviota: Solo enfrentándonos al viento domi-
nante podemos ser llevados por el aire, y alcanzar una nueva posición superior desde la cual
podamos estudiar nuestro mundo. Esperamos la sensibilidad moral: estaremos dispuestos
para observar las características moralmente importantes de una situación. Ya que sin esto,
las cuestiones éticas pueden ser emitidas por adelantado para nunca ser resueltas. Esté aten-
to a las palabras que pueden llevar suposiciones ocultas; «la inutilidad», «el consentimiento»,
«mejores intereses». Considere estos aspectos en su revisión rutinaria del paciente:
• Los deseos del paciente: ¿ellos lo saben o le son desconocidos?
• Las cuestiones de confidencialidad/descubrimiento.
• Los objetivos de la asistencia: ¿los de ellos son claros? ¿Cuáles son los tuyos o de los
pacientes?.
• Quiere rehusar el tratamiento o irse de alta voluntaria.
• Discusiones entre familia/amigos/médicos.
• Dinero: las preocupaciones del paciente, las preocupaciones del seguro médico.
Marcos éticos
Los marcos éticos ofrecen la estructura comprensiva y la transparencia en la delibera-
ción ética.
Cuatro principios
Autonomía: El autogobierno: la capacidad de elegir una opción basada en sus propios valo-
res y creencias. Beneficencia: La obligación de beneficiar a los pacientes. Unido con la auto-
nomía como una prestación dependiente del punto de vista del paciente. La no malefi-
ciencia: No dañar. O de una manera más apropiada, no haga ningún daño total: usted
debería clavar una aguja en alguien cuando necesite la diálisis. Justicia: Una serie de obli-
gaciones incluyendo legalidad, derechos humanos, imparcialidad y distribución de recursos.
El método de los cuatro sectores
Indicaciones médicas: Identifique el problema clínico, opciones de tratamiento, objetivos
de este, y la probabilidad de éxito. Preferencias del paciente: ¿Cuál es la decisión autóno-
ma del paciente? ¿(El paciente es capaz de actuar? Si no, busque sus deseos anterior-
mente expresados en directrices anticipadas, familia, amigos, GP). Calidad de vida: ¿Cómo
afectará el tratamiento propuesto a la calidad de vida? Esto es subjetivo: reconozca sus
propias preferencias y adáptelas a las del paciente. Factores contextuales: El más amplio
contexto: legal, cultural, religioso, familiar, y algo más qué pueda hacer impacto.
Estos escenarios de trabajo describen voces individuales dentro del coro de la ética. A
veces hay una armonía hermosa, ¿pero cómo debería actuar usted cuando haya discon-
formidad?. No hay ninguna jerarquía dentro de estos marcos de trabajo. Cada compo-
nente espera a no ser que sea superado por un principio más fuerte. Como usted sope-
sa y equilibra los componentes éticos de una situación no es fácil, pero debería estar
claro y justificado. Conozca al paciente. Consulte a otros, sobre todo, cuyas opiniones
sean diferentes a las suyas. ¿Es suficientemente sólida para que pueda usted defender su
decisión ante el paciente? ¿Su familia? ¿Su asesor? ¿Otro asesor? ¿Un abogado? ¿Y si un
periodista de investigación actuara sobre sus acciones, teniendo el pleno conocimiento
de todos los pensamientos y acciones, se establecería una hostilidad en el diario de
mañana? Y si es así, podría contestarle, punto por punto.
Más allá del marco ético
Forzar un problema ético encajándolo en un marco de trabajo puede ser inadecua-
do, reduccionista, e inconsistente. Potencialmente es influido por la cultura occiden-
tal, reduce la no autonomía, y es vulnerable al énfasis poco considerado y al error.
«Haciendo» la ética puede crear una de lista de comprobación donde el pensa-
miento está perdido. Pero los médicos no son filósofos morales, sino clínicos. Los
marcos, por lo tanto, proporcionan un punto de partida para poder trabajar. Esto es
de poco calado en la deliberación moral. Sea consciente del entorno cultural de su
problema y considere con cuidado el valor de la síntesis. Hay que estar preparado
para vadear lo más profundo si fuera necesario. Pero reconozca que la sabiduría
moral bien puede estar fuera de su alcance.
Pensando en la medicina
• Aspecto y comportamiento: el vestido, la higiene, el contacto visual, la relación.
• Discurso: el volumen, la velocidad de las palabras, el tono.
• Emoción: estado de ánimo (subjetivo y objetivo), afecto (¿cómo expresa el humor, con
comportamiento apropiado o incongruente?).
• Percepción: ¿alucinaciones auditivas (en la segunda o tercera persona)?, ¿visuales?.
• Pensamiento:
– Forma: bloqueo, inserción, difusión, ideas evasivas, movimientos amables.
– Contenido: delirios, obsesiones, fobias, preocupaciones, autolesiones, suicidio.
• Percepción: pregunte al paciente por qué se ha presentado hoy.
• Cognición: orientación, registro, recuerdo, concentración, conocimiento.
No tenga miedo de preguntar sobre los pensamientos y los planes suicidas. Quítese de
enmedio si se siente amenazado.
Depresión
Dos preguntas que se pueden utilizar para identificar la depresión:
1 Durante el último mes, ¿le ha molestado sentirse deprimido o desesperado?
2 Durante el último mes, ¿le ha molestado tener poco interés a menudo o placer en hacer
las cosas?
Si una persona contesta «sí» a cualquiera de las preguntas, debe someterse a una eva-
luación de salud mental, incluida una evaluación del riesgo de autolesión y suicidio. Los
tratamientos apropiados incluyen intervención psicosocial (autoayuda guiada, terapia
cognitiva conductual, actividad física estructurada) y medicación. La elección del trata-
miento depende de la gravedad de la enfermedad, la historia psiquiátrica previa, la res-
puesta al tratamiento y la preferencia del paciente. Si se indica la medicación, un ISRS
genérico debe considerarse primero después de evaluar el riesgo de hemorragia gas-
trointestinal, las interacciones medicamentosas, la toxicidad, la sobredosis y los síntomas
intermitentes. El efecto completo de la medicación es gradual, durante 4-6 semanas.
La capacidad
La ley de capacidad mental (MCA, por sus siglas en inglés) 2005 se basa en una prueba
en dos etapas para valorar la falta de facultad:
1 Hay un deterioro o funcionamiento alterado de la mente.
2 El paciente es incapaz de tomar una decisión.
Incapaz de: comprender la información relevante, retenerla durante el tiempo suficiente
para tomar una decisión, sopesar la información, comunicar su decisión. La facultad es
específica de la decisión y no específica del paciente. Cuando se propone un tratamien-
to serio a quienes carecen de la facultad, se debe proporcionar un defensor de esa facul-
tad. Incluso sin capacidad, los pacientes deben seguir participando en la posible toma de
decisiones.
La Ley de Salud Mental (MHA) y el derecho común
Pueden ser detenidos bajo el derecho corriente (sujeto a una prueba de razonabilidad)
o bajo la MHA solo si carecen de capacidad para permanecer de manera informal y son
un peligro para ellos mismos o para otros. Usted tendrá más pruebas en la comunica-
ción verbal y no verbal, que en la detención en virtud de la MHA, por lo que se deben
utilizar estas habilidades en primer lugar para tratar de reducir la situación. Si se necesi-
ta una rápida tranquilización, esté familiarizado con la dosificación, los efectos secunda-
rios y la necesidad de la observación continua. Si no hay historia para guiar la elección
de la medicación, se puede utilizar lorazepam intramuscular.
Los médicos y la salud mental
Las tasas de suicidio son tres veces más altas en los médicos en comparación con la
población general. Hasta el 7% de los médicos tendrá un problema de abuso de sustan-
cias dentro de su vida. No ignore el sentirse bajo, una baja concentración, y los niveles
bajos de energía. No se auto-diagnostique y administre ningún medicamento. Evite las
«consultas de pasillo». Confíe en su médico de atención primaria. Busque apoyo en las
organizaciones y asociaciones de referencia en su país.
16 La persona mayor
«Saber envejecer es una obra maestra de la sabiduría y uno de los capítulos más difíciles
del gran arte de vivir». Henri Amiel, diario Intime, 21 de septiembre de 1874
El envejecimiento es una disminución inevitable e irreversible de la función de los órga-
nos que se produce con el tiempo, en ausencia de lesión o enfermedad, y a pesar de la
existencia de las vías complejas de mantenimiento y reparación.
El envejecimiento saludable es el mantenimiento de las capacidades físicas y mentales que
Pensando en la medicina
Caídas
El 50% de los ancianos de más de 80 años se caerán al menos una vez al año. Las caídas
causan lesiones, dolor, angustia, pérdida de confianza, pérdida de independencia y mor-
talidad. El costo para el NHS es de £ 2.3 billones/año.
• Historia: frecuencia, contexto y circunstancias, gravedad, lesiones.
• Evaluación del riesgo multifactorial: marcha, equilibrio, fuerza muscular, riesgo de osteopo-
rosis, capacidad funcional percibida, miedo a caídas, visión, cognición, examen neurológico,
continencia, hogar y peligros, examen cardiovascular, reexaminación de medicamentos.
• Intervenciones: entrenamiento de fuerza y equilibrio, intervención de riesgo en el
hogar, visión correcta, modificación/retirada de la medicación (cardiovascular, psicotró-
pica), manejo integrado de las morbilidades contribuyentes. Considerar las barreras
para el cambio, por ejemplo, temor, preferencias del paciente.
La mujer embarazada 17
䊳 Las condiciones preexistentes y las enfermedades no obstétricas causan más muertes
maternas en el Reino Unido que las complicaciones obstétricas.
䊳 Las mujeres embarazadas deben recibir las mismas atenciones y el mismo tratamien-
to que las pacientes no embarazadas, evitando el dolor o daño potencial al feto siempre
Pensando en la medicina
que sea posible.
䊳 La mayoría de los errores cometidos en la gestión médica de las mujeres embaraza-
das se deben a actos de omisión causados por la valoración inadecuada del riesgo y el
beneficio.
Cambios fisiológicos en el embarazo
La evaluación clínica durante el embarazo requiere el conocimiento de los cambios fisio-
lógicos asociados con el estado de gravidez. En la tabla 1.3 se presentan los cambios
esperados y una guía sobre cuándo investigar una posible patología subyacente.
Radiología
Si el útero está situado fuera del campo de imagen, la dosis de radiación para la valora-
ción es mínima. La exposición de las siguientes investigaciones está muy por debajo del
umbral de riesgo para el feto.
• Radiografía simple: tórax, extremidades, columna vertebral.
• TC: cabeza, pecho (pero considere radiación a la mama materna en el embarazo/lactancia).
El ultrasonido y la RM se utilizan preferentemente cuando se realiza la imagen del abdomen.
䊳 Tranquilice a la embarazada diciéndole que una radiografía de tórax es segura. Es el
equivalente a tres días de radiación de fondo. Es necesaria, ¿de qué otra manera verá el
mediastino ensanchado como causa de su dolor en el pecho?
Medicamentos
Para los fármacos prescritos en el embarazo, el beneficio debe estar equilibrado frente
al riesgo (tabla 1.4). Para obtener información sobre las drogas en la lactancia, consulte:
https://toxnet.nlm.nih.gov/newtoxnet/lactmed.htm
Tabla 1.4. Medicamentos durante el embarazo
Considerados seguros Contraindicados
Penicilinas Tetraciclinas/Doxiciclinas
Macrólidos Ciprofloxacino
Heparinas de bajo peso molecular Trimetoprim (primer trimestre)
Aspirinas AINE (tercer trimestre)
Labetalol IECA
Nifedipino ARA
Prednisolona Micofenolato
Tratamientos para el asma: salbutamol, ipratropio, Warfarina y vacunas vivas
aminofilina, antagonista de los leucotrienios
Sepsis
䊳䊳 No subestime la sepsis durante el embarazo. El choque séptico puede ser rápido. No
ignore la taquipnea. Todas las mujeres embarazadas deben recibir la vacuna contra la gripe.
18 Epidemiología
«El trabajo de la epidemiología está relacionado con preguntas sin respuesta, pero también
con respuestas no cuestionadas».
Patricia Buffler, Congreso Norteamericano de Epidemiología, 2011
䊳 ¿Quién, qué, cuándo, dónde, por qué y cómo?
La epidemiología es el estudio de la distribución de los fenómenos clínicos en las pobla-
ciones. Analiza la enfermedad en términos de huésped, agente y medio ambiente (la
Pensando en la medicina
«tríada del epidemiólogo»). Aclara los riesgos y los mecanismos para el desarrollo de
la enfermedad, y reaviva los objetivos potenciales para la prevención y el tratamiento de la
enfermedad. La epidemiología no mira al paciente en particular, sino que examina una
población definida. La aplicabilidad de sus hallazgos depende de cuán bien la población
de la muestra refleje la población estudiada, que a su vez debe reflejar la población obje-
tivo. ¿Su paciente encaja en este ‘objetivo’? En caso afirmativo, los hallazgos epidemiológi-
cos pueden ser aplicables.
Medidas de la frecuencia de la enfermedad
La proporción de la incidencia es el número de nuevos casos de enfermedad en propor-
ción a la población.
La tasa de incidencia es el número de nuevos casos (incidencia) por unidad de tiempo-
persona (tasa), es decir, una persona observada durante 5 años aporta 5 años-persona
de seguimiento.
Prevalencia es el número de casos que existen en un tiempo dado (prevalencia puntual) o
en el tiempo (prevalencia del período), dividido entre la población total estudiada. Por
ejemplo, la prevalencia durante la vida del hipo es ~100% y la incidencia es de millones/año.
Sin embargo, la prevalencia a las 3 de la mañana puede ser 0 si nadie está teniendo hipo.
Comparaciones de la frecuencia de los resultados
Las diferencias en las tasas de resultado entre las poblaciones indican una asociación entre
el resultado y los factores que distinguen a las poblaciones (por ejemplo, una población
fumadora en comparación con una población no fumadora). Los desafíos surgen a medi-
da que las poblaciones tienden a diferir entre sí de muchas maneras, por lo que puede no
estar claro qué factor o factores afectan a la frecuencia de los resultados. Esto conduce a
la confusión. Por ejemplo, podríamos encontrar que la enfermedad cardíaca es más común
en los que usan bastones. Pero no podemos concluir que los bastones causan enfermeda-
des del corazón como la edad es un factor de confusión: la edad es causal, no el bastón.
Formas de contabilidad de las asociaciones: A puede causar B (los antiácidos causan cán-
cer), B puede causar A (el cáncer causa el uso de antiácidos), un tercer agente desco-
nocido X (por ejemplo, la edad) puede causar A y B, o la asociación puede ser una casua-
lidad. Al considerar las opciones, es útil tener en cuenta los «criterios» de Bradford Hill
para la causalidad (NB, él no afirmó que ninguno fuera esencial).
1 Consistencia de hallazgos: entre diferentes poblaciones, estudios, períodos de tiempo.
2 Temporalidad: el efecto debe ocurrir después de la causa.
3 Gradiente biológico: una dosis respuesta por la que más exposición = más efecto.
4 Especificidad: la exposición causa un solo resultado (¡fumar no se ajusta!)
5 Fuerza de la asociación: las asociaciones fuertes tienen más probabilidades de ser
causales.
6 Plausibilidad biológica: hay un mecanismo que une la causa y el efecto.
7 Coherencia: la relación es apoyada por el conocimiento actual de la enfermedad.
8 Experimento: ¿la eliminación de la exposición reduce la frecuencia de los resultados?
Estudios epidemiológicos
Los estudios deben diseñarse para dar una respuesta adecuada a una pregunta específi-
ca de investigación. Las muestras deben ser representativas y de tamaño suficiente para
responder a la pregunta.
Estudios ecológicos: Las tasas del resultado se examinan en diferentes poblaciones, por
ejemplo, tendencia a lo largo del tiempo, grupos geográficamente distintos, clase social.
Estudios longitudinales (cohorte): Los sujetos son seguidos a lo largo del tiempo con la
medida de la exposición y el resultado.
Estudios de casos y controles: Los pacientes con el resultado de interés se identifican y la
exposición pasada se evalúa en comparación con «controles» que no desarrollaron el resul-
tado. Los casos y los controles deben estar adecuadamente adaptados a otros factores que
pueden afectar al resultado, o estas diferencias deben corregirse (asunción matemática).
Estudios experimentales: La exposición se asigna a un grupo de estudio y se compara con
aquellos que no están expuestos, por ejemplo, estudios aleatorizados controlados.
Pensando en la medicina
estudio. El objetivo es minimizar el sesgo (la exposición/intervención está controlada) e
intentar averiguar si la intervención es buena o no. Ambos grupos son seguidos y anali-
zados en contra de los puntos finales predefinidos.
Aleatorización. Se hace con el objetivo de eliminar los efectos de factores no estu-
diados. Con la aleatorización (y el tamaño de estudio suficiente) los dos brazos del estu-
dio serán idénticos (en promedio), con la excepción de la intervención.
Cegamiento. Existe el riesgo de que los factores durante el ensayo puedan afectar al
resultado, por ejemplo, el optimismo del participante o del clínico si saben que el pacien-
te está en tratamiento activo, o que no están dispuestos a exponer la enfermedad más
grave al placebo. Si el sujeto no sabe qué intervención están teniendo, el estudio es sim-
ple ciego. Idealmente, el investigador no debe saber tampoco, y el estudio debe ser doble
ciego.
䊳 En un buen ensayo, un ciego lleva a otro ciego.
20 Matemáticas médicas
«Cuando puedes medir de lo que estás hablando y expresarlo en números, sabes algo al
respecto. Pero cuando no se puede medir, cuando no se puede expresar en números, su
conocimiento es de un tipo pobre e insatisfactorio». Lord Kelvin, 1883
Medidas de comparación
Las comparaciones entre poblaciones Tabla 1.5. Análisis mediante tabla 2 x 2
«expuestas» y «no expuestas» se hacen Resultado
en términos del riesgo o probabilidad de
Pensando en la medicina
un resultado. Esto se puede apreciar tra- Exposición Efecto Sin efecto Total
zando una tabla 2 x 2. Sí 70 20 90
• Diferencia de riesgo absoluto (riesgo atri- No 120 450 570
buible) igual a la frecuencia de exposi-
ción de la enfermedad (véase p. 18) Total 190 470
menos a la frecuencia de la enfermedad
en los no expuestos. Ejemplo (tabla 1.5): (70/90) – (120/570) = 0,57 riesgo de aumen-
to de la exposición en un 57%.
• Riesgo relativo = la proporción de resultado en la población expuesta comparada con
la no expuesta. El riesgo relativo de 1 significa que el riesgo es el mismo en ambas pobla-
ciones. Riesgo relativo > 1 significa que la exposición aumenta el riesgo. Riesgo relativo
< 1 significa que la exposición reduce el riesgo, por ejemplo, la vacunación. Ejemplo (tabla
1.5): (70/90) ÷ (120/570) = 3,69 el riesgo es 3,69 más alto con la exposición.
• Odds ratio = la relación entre la probabilidad de que se produzca un resultado y la pro-
babilidad de que no se produzca un resultado. Ejemplo (tabla 1.5): (70/20) ÷ (120/450)
= 13,13 las probabilidades de resultado 13,13 x más alto con la exposición.
El riesgo relativo es más intuitivo y más fácil de interpretar que la odds ratio, pero se basa
en una prevalencia/incidencia significativa. Esto no siempre está disponible, por lo que se
informan proporciones tan extrañas. De hecho, la diferencia de riesgo absoluto puede
ser relevante para el individuo.
Valor p e intervalo de confianza
En un estudio de dos grupos (por ejemplo, nuevo tratamiento versus placebo), es
posible que no haya diferencia (el nuevo tratamiento no tiene ningún beneficio). Esta
es la hipótesis nula.
Un valor p mide la fuerza de la evidencia en relación con la hipótesis nula:
• P-valor bajo: datos improbables si la hipótesis nula es verdadera.
• Alto valor de p: es probable que la hipótesis nula sea verdadera.
Un valor de p no es la probabilidad de que sus resultados se hayan producido por
casualidad y no puede decirle cuán bueno es un estudio. Habrá muchos supuestos
en el modelo estadístico. Observe los detalles: ¿el resultado ha sido confundido o
sesgado? No considere p < 0,05 como «estadísticamente significativo»: un pequeño
valor de p simplemente hace que los datos sean inusuales. Debe preguntarse por
qué y decidir si esto es clínicamente importante.
Los intervalos de confianza (CI) dan una guía para el tamaño y dirección del efecto
(por ejemplo, beneficio/daño). Ellos dan un margen de error que indica la cantidad
de incertidumbre en la estimación estadística.
Evaluando la validez
La validez de una prueba que divide a los participantes del estudio y puede ser evalua-
da examinando los resultados de la prueba frente a una referencia estándar (o resulta-
do: ¿el participante realmente tuvo la enfermedad?) (Ver tabla 1.6).
SensibilidadVP / (VP + FN) es igual a las personas con la enfermedad, ¿cuántas pruebas posi-
tivas? Una prueba sensible es capaz de identificar correctamente a aquellos con la dolencia.
Especificidad VN / (VN + FP) = de aquellos que no tienen la condición de cuántos test
negativos. Una prueba específica es capaz de identificar correctamente a aquellos que no
tienen una enfermedad. «¿Tienen dolor abdominal?», ya que para diagnosticar apendicitis
tiene una alta sensibilidad (la mayoría de los casos tienen dolor), pero tiene una baja
especificidad (muchos pacientes con dolor no tienen apendicitis).
El valor predictivo positivo (VP / (VP + FP) indica la probabilidad de que alguien con un
resultado positivo tenga la enfermedad.
El valor predictivo negativo (VN / (VN + FN) indica la probabilidad de que alguien con un
resultado de prueba negativo (VP / (VP + FP) indique la probabilidad de que alguien con
un resultado positivo de la prueba tenga la condición. Cuando se recibe el resultado de
una prueba, se necesita saber la probabilidad de que sea correcto.
Tabla 1.6. Tabla de posibles resultados de las pruebas
Resultado de la prueba Paciente con la enfermedad Paciente que no tienen la enfermedad
Positiva Verdadero positivo Falso positivo
Negativa Falso negativo Verdadero negativo
Pensando en la medicina
bo o atención habitual), el resultado medido (por ejemplo, la muerte, la caída de la pre-
sión arterial) y la duración del seguimiento del tratamiento utilizado en el estudio. Mire
cuidadosamente los detalles de la pregunta que el NNT está tratando de cuantificar.
• Ventajas: se calcula fácilmente, valor numérico único para la eficacia, puede ser utilizado
para examinar el daño (se convierte en el número necesario para prevenir el daño).
• Desventajas: los intervalos de confianza son difíciles cuando las diferencias entre trata-
mientos no son estadísticamente significativas (valores negativos, incluyen el infinito).
El médico como un apostante
¿Sí o no? Tu tutor pregunta si la enfermedad de Gobble es más común en muje-
res o hombres. Usted no tiene ni idea, y adivina. ¿Cuál es la posibilidad de hacerlo
bien? El sentido común dice que tiene una probabilidad del 50%. La ley de Sod pre-
dice que cualquier cosa que adivine, siempre estará equivocado. En algún lugar entre
las dos está la opinión de Damon Runyon de que «toda la vida es de un 6 a 5 en
contra»: ¿Va a elegir la respuesta correcta? Tal vez, pero no apueste en ello.
¿Enfermedad nueva o existente? Supongamos que el singultus es un síntoma
raro de la enfermedad de Gobble (visto en el 5% de los pacientes), pero que es un
síntoma muy común de la enfermedad de Kobble (observada en el 90%). Si tene-
mos a un hombre que ya sabemos que tiene la enfermedad de Gobble, que des-
arrolla singultus, ¿es más probable que se deba a la enfermedad de Kobble, en lugar
de a la de Gobble? La respuesta suele ser no: generalmente la mayoría de los sínto-
mas se deben a una enfermedad que ya se conoce, y no implican una nueva enfer-
medad (navaja de Occam, p. 4). Queda más claro con la odds ratio, es decir, la ratio
entre [la probabilidad de un síntoma, dada la enfermedad conocida] y la [la proba-
bilidad del síntoma debido a una nueva enfermedad x la probabilidad de desarrollar
una nueva enfermedad]. Normalmente, esto está ligeramente a favor de que los sín-
tomas se deban a la enfermedad ya conocida, debido a las probabilidades previas de
ambas enfermedades. Esto funcionará hasta que la enfermedad de Kobble aumente
en la prevalencia a fin de aumentar las probabilidades de una segunda enfermedad
(entonces Hickam triunfa sobre Occam, p. 4).
Cómo juegan las probabilidades. Es desagradable pensar que los médicos pue-
den jugar con las vidas de los pacientes.También es feo pensar en enfermedades gra-
ves que se «pierden», y los procedimientos invasivos que se hacen innecesariamen-
te. Sin embargo, no tenemos una base de evidencia o una base de experiencia que
pueda decirnos definitivamente que la tos o la somnolencia o el dolor en el dedo
del pie es solo «es una de esas cosas», y que no es el resultado de cáncer no diag-
nosticado o VIH u osteomielitis.
La medicación no es para los pesimistas, casi cualquier cosa puede hacerse pare-
cer fatal, de modo que un médico pesimista nunca dormiría por la noche debido a
preocuparse por el significado de los síntomas de sus pacientes. La medicina tam-
poco es para los ciegos optimistas, que demasiado fácilmente abrazan el paraíso de
la confianza falsa como un tonto. Más bien, la medicina es para los participantes
informados: los colaboradores que están contentos de usar pistas sutiles para cam-
biar su perspectiva de pesimismo a optimismo y viceversa. A veces el juego es cien-
tífico, racional, metódico y reproducible (odds ratio); a veces instintiva, debido a la
intuición clínica (vital, pero mal definida). Por supuesto, el juego inevitablemente da
lugar a pérdidas, y en la medicina las piezas no son solo financieras. Ellos indican la
salud de su paciente, su reputación y su confianza. Quizás la parte más difícil de la
medicina es la inevitabilidad de cometer errores mientras se trata de ayudar (véase
«Estar equivocado», p. 5). Pero no se preocupes por los juegos de azar: el juego es
su trabajo. Si no puede apostar, no puede caminar por la línea delgada entre abor-
dar con éxito las necesidades de salud y causar una excesiva medicalización (p. 23).
Pero trate de reunir pruebas suficientes para maximizar las posibilidades de tener
suerte. El juego afortunado es un requisito para curar y el «casino» de la práctica
médica celebra el carnet de socio. Pero la virtud clínica principal es el coraje: sin ella
no seguiríamos nuestra intuición y tomaríamos un riesgo justificado.
6 Evaluación.
La cantidad de pruebas
Cada año se publican más de 2 millones de nuevos documentos biomédicos, incluidos
mas de 20.000 nuevos ensayos aleatorios. Los pacientes se benefician directamente de
una pequeña fracción de
estos documentos. ¿Cómo
los encontramos?.
• Se utiliza una jerarquía de
evidencia (fig. 1.3) para Revisiones
identificar la mejor inves-
a
nci
Sistemáticas
tigación disponible para e
vid
responder a nuestra pre- Temas evaluados
la E
críticamente INFORMACIÓN
gunta de investigación.
de
FILTRADA
(Síntesis de la evidencia)
• Las revistas especializadas
ad
lid
Medicalización 23
«La enfermedad es el lado nocturno de la vida, una ciudadanía más onerosa. Todo el que
nace tiene doble ciudadanía, en el reino de la salud y en el reino de la enfermedad. Aunque
todos preferimos usar solo el buen pasaporte, tarde o temprano cada uno de nosotros está
obligado, al menos por un hechizo, a identificarnos como ciudadanos de ese otro lugar».
Pensando en la medicina
Susan Sontag, 1978
La medicalización es la erosión de la frontera entre el reino de la salud de Sontag y el
reino de los enfermos. «Demasiada medicina» ocurre como resultado de:
• Sobrediagnóstico: Etiquetar a una persona (asintomática) como «enferma» a pesar de
que el tratamiento posterior, el consejo sobre el estilo de vida o el monitoreo no
benefician su resultado (y potencialmente causa daño), por ejemplo, cáncer de mama
no progresivo.
• Detección excesiva: Las pruebas cada vez más sensibles identifican una patología insufi-
ciente o no progresiva, por ejemplo, embolia pulmonar subsegmentaria diagnosticada
en la angiografía por TC.
• Definición excesiva: La expansión de definiciones de la enfermedad o la disminución de
los umbrales de la enfermedad, por ejemplo, un diagnóstico de enfermedad renal cró-
nica por eGFR ahora significa que 1 de cada 8 adultos están etiquetados con la enfer-
medad, muchos de los cuales nunca progresarán a insuficiencia renal sintomática; el
15% de las mujeres embarazadas tienen hipotiroidismo subclínico sin evidencia de que
el reemplazo de tiroxina sea beneficioso.
• Tráfico de enfermedad: La creación de pseudo-enfermedades que no representan una
amenaza para la salud, por ejemplo, piernas inquietas, disfunción de la salud sexual, sen-
sibilidad química múltiple.
• Sobreutilización: Práctica de atención médica que no proporciona ningún beneficio
neto, por ejemplo, una RM de rutina para el dolor lumbar
• Tratamiento excesivo: Tratamiento que no es benéfico (y puede causar daño), por ejem-
plo, antibióticos para infecciones virales.
Demasiada medicina surge del temor de perder un diagnóstico, y la preocupación por la
morbilidad o mortalidad evitable. Una sociedad punitiva significa que hay una necesidad
percibida de más pruebas, para buscar más certeza. Pero la certeza es el santo grial del
mito y la leyenda. El paciente individual es un conjunto único de síntomas, estoicismo, expe-
riencia y necesidad. Y por la naturaleza de la vida, toda curación solo puede ser temporal.
Elegir sabiamente
ELEGIR INTELIGENTEMENTE es una iniciativa para cambiar la práctica de los médicos
lejos de las intervenciones que no son:
• Apoyada por pruebas.
• Libre de daños.
• Verdaderamente necesarias (incluyendo pruebas duplicadas).
Hay 5-10 intervenciones muy frecuentes que no deberían usarse de forma rutinaria en
cada especialidad. Busque los correspondientes a su publicación actual en: www.choo-
singwisely.org/doctor-patient-list/.
Cribado
Considerar la medicalización cuando se realiza el cribado de la enfermedad. Recuer-
de que todos los programas de cribado perjudican, pero algunos son útiles. Los cri-
terios de Wilson para el cribado enumeran las características importantes necesa-
rias para un programa de cribado y utiliza la regla nemotécnica
IATROGENIC; recuerde, nuestro deber principal es no hacer daño:
1 La patología examinada debe ser importante.
2 Debe haber un tratamiento aceptable para la enfermedad.
3 Debería disponerse de instalaciones de diagnóstico y tratamiento.
4 Se requiere un estadio latente o temprano sintomático reconocible.
5 Las opiniones sobre quién tratar deben ser acordadas.
6 La prueba debe ser buena: alta potencia discriminatoria, válida y reproducible
con seguridad garantizada.
7 El examen debe ser aceptable para el paciente.
8 La historia natural no tratada de la enfermedad debe ser conocida.
9 Debe ser barato (inexpensive).
10 El cribado debe ser continuo (es decir, no «uno por casualidad»).
8 Susan Sontag, Enfermedad y sus metáforas, 1978.
2 Historia y exploración
Contenido
Haciendo la historia clínica 26
Síntomas 28
Interrogatorio metódico 30
Exploración física 32
Signos 34
El sistema cardiovascular:
Historia 36
Exploración 38-41
Pulsos 42
Presión venosa yugular (PVY) 43
Los ruidos del corazón 44
Soplos cardíacos 46
El sistema respiratorio:
Historia 48
Examen 50-53
Presentaciones importantes 54
El sistema gastrointestinal: Fig. 2.1. William Osler (1849-1919) era un gran
educador médico que amó otras formas de ense-
Historia 56 ñar. Introdujo muchas novedades en las aulas, in-
Síntomas gastrointestinales 58 cluyendo, en una ocasión, un grupo de gansos.Todos
Examen del abdomen 60 podemos identificarnos con sus gansos, porque
Examen 62 estas aves muestran una capacidad excepcional
El sistema neurológico: de aprendizaje y resiliencia.
Historia 64 Osler no estuvo de acuerdo con la alimentación
Exploración neurológica de los forzada, un método por el cual los gansos (y los
miembros superiores 66 estudiantes de medicina) son forzados con un
Exploración neurológica de los embudo a ser engordados con el objetivo del dis-
miembros inferiores 68 frute de los sibaritas. Estamos muy familiarizados
Exploración de los pares con las tres R de la educación médica: Machaca
craneales 70 (ram), Recuerda y Regurgita, una secuencia que
Lesiones de los nervios craneales convierte a los estudiantes de medicina, de bri-
del ojo 72 llantes, a un fracaso irritante. Afortunadamente,
con respecto a la Historia y la Exploración, pode-
Exploración músculo-esquelética mos escapar de la biblioteca y detenernos a la
de la mano 74-77 cabecera de la cama, teniendo en cuenta otro de
El sistema vascular periférico: los aforismos de Osler: «El que estudia medicina
Exploración 78 sin libros navega por un mar desconocido, pero el
Arterial 79 que estudia medicina sin pacientes no va al mar en
Venoso 79 absoluto».
El sistema genitourinario:
Historia 80
La mama:
Historia 82
Exploración 83
El tiroides:
Exploración 84
Habla y función mental
superior 86
Trastornos del movimiento 87
Evaluación psiquiátrica 88
Método y orden del examen de
rutina 90
Agradecimientos a la Dr. Petra Sulentic, Lectora Especialista, por su contribución a este capítulo.
Asesoramiento y experiencia 25
1. La manera de aprender los signos físicos es estar al lado de la cama, con la guía
de un médico o un colega experimentado. Este capítulo no es un sustituto de
este proceso: es simplemente una lista de verificación para las consultas o para
cuando se prepara para los exámenes.
2. Hacemos preguntas para obtener información que ayude con el diagnóstico dife-
rencial. Pero también hacemos preguntas para averiguar sobre las vidas de nues-
Historia y exploración
tros pacientes para que podamos respetarlos como individuos. El paciente es
probable que observe y corresponda a este respeto, y la relación que usted
construye con su paciente de esta manera es un componente clave para diag-
nosticar y manejar su enfermedad.
3. Los pacientes (y las enfermedades) raramente leen libros de texto, así que no se
sorprendan de que algunos síntomas sean ambiguos y otros carezcan de senti-
do. Sea bueno en reconocer de los patrones, pero no tan bueno que los cree
cuando no existen. Todos caemos en esta trampa.
4. Los signos pueden ser fáciles o sutiles de detectar. Algunos serán encontrados por
todos los nuevos estudiantes de medicina, otros requieren oídos u ojos experi-
mentados. Recuerde, usted puede ser un buen médico sin ser capaz de obtener
todos los signos. Sin embargo, encontrar signos y juntar las pistas que nos dan para
encontrar un diagnóstico es una de las mejores partes de ser médico. También es
esencial que aprendamos los signos que definen las enfermedades y que nunca
debemos perder. Sin embargo, en una exploración, si usted no puede encontrar
un signo, nunca se sienta tentado a inventar algo que usted piensa que debe estar
allí. Si el examinador le empuja a describir algo que no puede ver, sea honesto y
admita que no puede verlo. El aprendizaje es un proceso que dura toda la vida, y
nadie se convierte en especialista de la noche a la mañana.
Historia y exploración
una mujer. Agregar una pequeña flecha (ver fig. 2.2) para mostrar que esta persona
es el propositus (la persona a través de la cual se determina el árbol genealógico).
2. Añada los padres, hermanos y hermanas de su paciente. Registro de información
básica, solo, p. ej., la edad, y si está vivo y en qué estado de salud (vivo y sano). Si
está muerto, anote la edad y la causa de la muerte, y dibuje una línea oblicua por
encima del símbolo de esa persona.
3. Haga la pregunta clave «¿Alguien más en su familia tuvo un problema similar a
usted?», p. ej., ataque al corazón/angina/accidente cerebrovascular/cáncer. Pregun-
te solo sobre la familia de enfermedades que se relacionan con el problema prin-
cipal de su paciente. No registre un historial médico resumido para cada miem-
bro de la familia: el tiempo es demasiado corto.
4. Extienda el árbol genealógico hacia arriba para incluir a los abuelos. Si usted no ha
encontrado un problema, no vaya más allá, es poco probable que se pierda una enfer-
medad familiar importante. Si su paciente es anciano puede ser imposible obtener
buena información acerca de los abuelos. Si es así, llene el árbol genealógico con los
tíos y tías de su paciente, tanto en el lado de la madre como del padre.
5. Sombree en el árbol genealógico a los afectados por la enfermedad. • para una
mujer afectada; ▪ para un hombre afectado. Esto ayuda a mostrar cualquier pro-
blema genético y, si lo hay, ayudará a demostrar el patrón de herencia.
6. Si ha identificado una sensibilidad familiar, o su paciente tiene una enfermedad
genética reconocida, extienda el árbol genealógico para incluir a los niños, para
identificar a otros que pueden estar en riesgo y que pueden beneficiarse de la
detección. 䊳 Debe averiguar quién está embarazada en la familia, o puede que
pronto lo esté, y organizar el asesoramiento genético apropiado (OHCS p. 154).
Refiéralo para evaluación genética.
El árbol familiar (fig. 2.2) muestra estas ideas en marcha e indica que hay evidencia
de riesgo genético de cáncer de colon, merecedor de la evaluación de un genetista.
N.B: utilice un enfoque diferente en pediatría y para enfermedades autosómicas o
ligadas al sexo. Pregunte si los padres están relacionados (la consanguinidad de
enfermedades recesivas). El dibujo de árboles genealógicos sirve para revelar enfer-
medades predominantes heredadas.
Leyenda
Hombre Mujer 54; c. colon 73; edad avanzada
(= hombre que murió (= mujer que murió
a los 54 años y tuvo a los 73 años por
cáncer de colon) ser de edad avanzada)
Fig. 2.2. Riesgo genético de padecer cáncer de colon en un árbol genealógico.
Agradecimientos
El recuadro de esta sección debe mucho a la Dr. Helen Firth, a quien agradecemos.
28 Síntomas
Los síntomas son características que los pacientes informan. Los signos físicos se obtienen
junto a la cama. Juntos, constituyen las características de la enfermedad de ese paciente.
Su evolución en el tiempo y la interacción con las esferas física, psicológica y social com-
prenden la historia natural de cualquier enfermedad. A lo largo de este capítulo discuti-
mos los síntomas de forma aislada e intentamos clasificarlos en un «sistema» o presen-
tarlos en los siguientes RECUADROS como «no específicos». Esto no es natural, pero es un
primer paso para aprender a diagnosticar. Todos los médicos tienen que saber acerca de
Historia y exploración
los síntomas y su alivio. Una forma de convertirse en un buen médico es aprender a vin-
cular los síntomas juntos, para identificar aquellos que pueden ser normales, y los que
son preocupantes. Hay muchas páginas webs y libros que pueden ayudar con esto, pero
no hay sustituto para la experiencia. Si no está seguro, pida consejo a un especialista en
esa área. A continuación se presentan las tablas «no específicas».
Picor
Prurito. Común y si es crónico es más desagradable.
Tabla 2.1. Etiología del prurito
Causas locales Causas sistémicas
Urticaria, eccema, atopia Enfermedad del hígado Mujer gestante mayor
(sales biliares)
Sarna Uremia Medicamentos (morfina)
Liquen plano Malignidad (linfoma) Diabetes mellitus
Dermatitis herpetiforme Policitemia Enfermedad tiroidea
Tumores de la médula espinal Anemia ferropénica VIH
(raro)
Fatiga 29
Es tan común que es una variante de la normalidad. Solo 1 de cada 400 episodios
de fatiga se consulta al médico. 䊳 No olvide la depresión (p. 15). Incluso si el pacien-
te está deprimido, debe descartar causas comunes tratables, p. ej., anemia, hipotiroi-
dismo, diabetes. Después de la historia clínica y de la exploración médica: sistemáti-
co de sangre, VSG, urea y electrolitos, glucosa plasmática, pruebas tiroideas ± RXT.
Realice seguimiento para ver lo que se desarrolla, y para abordar los problemas
Historia y exploración
emocionales. Incluya el sueño en la historia clínica.
Insomnio
Parece trivial hasta que nosotros mismos pasamos alguna noche sin dormir. Enton-
ces el sueño se convierte en lo más deseable que se pueda imaginar, y tenerlo lo
mejor que podemos hacer, es como aliviar el dolor. Pero no dé fármacos sin buscar
una causa.
• Autolimitados: Jet-lag; estrés; trabajo por turnos; en el hospital. Necesitamos dormir
menos a medida que envejecemos.
• Psíquico: Depresión; ansiedad; manía; dolor; agitación psicomotora/psicosis.
• Orgánico: Drogas (muchas, p. ej., cafeína, mefloquina, abstinencia de nicotina); nic-
turia; alcohol; dolor (p. ej., reflujo gástrico que empeora al acostarse); picores; tinni-
tus; asma; distonías; apnea obstructiva del sueño (p. 194); demencia; síndrome de
piernas inquietas (p. 698, comprobar la ferritina). Raras: encefalitis (p. ej., virus del
Nilo occidental) y encefalopatía (Whipple, pelagra, VIH, enfermedades priónicas,
p. ej., CJD, p. 696 e insomnio familiar fatal).
Tratamiento. Higiene del sueño: No hacer siesta diurna; no acostarse hasta tener
sueño; mantener rutinas regulares de la hora de acostarse. Reservar una habitación
para dormir; no comer ni trabajar en ella (no es viable para gran parte del mundo).
Menos cafeína, nicotina, ejercicio tardío (¡pero la actividad sexual puede dar un exce-
lente letargo!) y alcohol (su abuso causa un temblor y un síndrome paradójico pro-
adrenérgico). Trate de monitorizar la calidad con un diario de sueño (a menos que
ya sea demasiado obsesivo). La música y la relajación pueden hacer el sueño más
restaurador y aumentar los recursos personales.
Los hipnóticos: Tomarlos solo algunas noches (son adictivos, causan somnolencia
durante el día y pueden producir más o menos insomnio de rebote cuando se sus-
penden). Advertir sobre la conducción/uso de maquinaria. Ejemplo: zopiclona 3,75-
7,5 mg. Apnea obstructiva del sueño, p. 194. Parasomnias, parálisis del sueño, etc. OHCS
p. 371. Narcolepsia, p. 700.
30 Interrogatorio metódico
Así como los acróbatas expertos quieren trabajar sin redes de seguridad, los médicos
experimentados pueden actuar sin una exploración metódica. Pero para hacer esto
usted debe ser lo suficiente experimentado como para entender todos los matices de
la consulta.
Preguntas generales
Pueden ser las más significativas, p. ej., en TB, problemas endocrinos o cáncer:
• Pérdida de peso.
Historia y exploración
• Sudores nocturnos.
• Cualquier bulto.
• Fatiga/malestar/somnolencia.
• Patrón de sueño
• Apetito.
• Fiebre.
• Picor o sarpullido.
• Un Trauma reciente.
Síntomas cardiorrespiratorios
• Dolor en el pecho (p. 94).
• Disnea excesiva (dificultad para respirar): cuantificar la tolerancia al ejercicio y cómo ha
cambiado, p. ej., subir escaleras, o caminar a pie, antes del comienzo de la falta de aire.
• Disnea paroxística nocturna (DPN). Ortopnea, es decir, dificultad para respirar en la
cama (síntoma de la insuficiencia ventricular izquierda): cuantificar el número de almo-
hadas que el paciente debe utilizar para prevenir la disnea.
• Edema: tobillos, piernas, espalda baja (áreas dependientes).
• Palpitaciones (conciencia de los latidos del corazón): ¿pueden tocar el ritmo?
• Tos: esputo, hemoptisis (tos con sangre).
• Sibilancias.
Síntomas gastrointestinales
• Dolor abdominal (constante o cólicos, agudo o apagado, sitio, radiación, duración, ini-
cio, gravedad, relación con la alimentación y la acción intestinal, alivio o exacerbación o
características asociadas).
• Otras preguntas: pensar en los síntomas en todo el tracto gastrointestinal, desde la
boca hasta el ano:
– Tragar (p. 250).
– Indigestión (p. 252).
– Náuseas y vómitos; ¿sangre? (p. 250).
– Hábito intestinal (p. 258 y 260).
– Heces: color, consistencia, sangre, moco; difıcultad en la expulsión (p. 266); tenesmo
o urgencia.
El tenesmo es la sensación de evacuación incompleta de los intestinos (p. ej., debido a un
tumor o síndrome del intestino irritable). Hematemesis es vomitar sangre. Las melenas
cambian el color (negro) de la sangre cuando pasa por el recto (p. 256), con unas carac-
terísticas de olor desagradable y apariencia de alquitrán.
Síntomas genitourinarios
• Incontinencia (estrés o urgencia, p. 648).
• Disuria (micción dolorosa).
• Anormalidades urinarias: ¿color? hematuria (¿rayas u orina rosa?) ¿espumosa?
• Nicturia (que necesita miccionar por la noche).
• Frecuencia (micción frecuente) o poliuria (el paso frecuente de grandes volúmenes de
orina).
• Indecisión (dificultad para iniciar la micción).
• Goteo terminal.
• Secreción vaginal (olor, color); dolor en el coito (dispareunia) (p. 412).
• Menstruaciones: frecuencia, regularidad, pesada o ligera, duración, ¿dolorosa? Primer día
del último período menstrual (LMP). Número de embarazos y nacimientos. Menarquia.
Menopausia. ¿Alguna posibilidad de embarazo ahora?.
1¿Está demasiado cansado? Considera un mixedema o la narcolepsia. ¿Se despierta temprano? Consi-
dera una depresión. Mantenerse despierto a causa del dolor siempre es una señal importante. 䊳 Para
hallar el significado de otras de las cuestiones aquí planteadas, véase Capítulo 3.
Síntomas neurológicos
• Sentidos especiales: vista, audición, olfato y gusto. 31
• Convulsiones, desmayos, «giros divertidos».
• Dolor de cabeza.
• «Pinchar con agujas» (parestesias) o entumecimiento.
• La debilidad de las extremidades («¿Son los brazos y las piernas más débiles de lo nor-
mal?»), mal equilibrio.
Historia y exploración
• Problemas de voz (p. 86).
• Alteración de los esfínteres.
• Funciones mentales superiores y síntomas psiquiátricos (p. 86-89). Lo importante es
evaluar la función: lo que el paciente puede y no puede hacer en el hogar, el trabajo, etc.
Síntomas musculo-esqueléticos
• Dolor, rigidez, hinchazón de las articulaciones.
• Variación diurna de los síntomas (es decir, peor en las mañanas).
• Déficit funcional.
• Signos de enfermedad sistémica: erupciones cutáneas, úlceras en la boca, congestión
nasal, malestar general y síntomas constitucionales.
Síntomas de la glándula tiroides
• Hipertiroidismo: Prefiere el clima frío, mal templado, sudoroso, diarrea, oligomenorrea,
peso (aunque a menudo apetito), temblor, palpitaciones, problemas visuales.
• Hipotiroidismo: Deprimido, lento, cansado, cabello fino, voz ronca, hipermenorrea, estre-
ñimiento, piel seca, prefiere el clima cálido.
32 Exploración física
La exploración física no es tanto una extensión de la historia, sino más bien la primera
investigación realizada para confirmar, excluir, definir o mostrar si se confirma o modifica
el diagnóstico provisional revelado en la historia clínica. Incluso en el servicio de urgen-
cias, donde la historia puede ser breve, p. ej., «trauma», la exploración sirve para confir-
mar una fractura o para decidir que hay menos probabilidad de que lo sea. La explora-
ción física arroja luz sobre la historia. A medida que se mejora, el examen físico se hace
más breve. Establecer una propia rutina con la práctica, es la clave.
Historia y exploración
A pie de cama
• Mire al paciente, ¿están bien o in extremis? ¿Qué le hace pensar esto? ¿Tiene dolor? Si
es así, ¿le hace permanecer acostado (p. ej., peritonitis) o retorcerse (p. ej., cólicos)?
¿Cuál es el patrón de respiración: trabado, rápido, superficial, irregular, ¿afligido? ¿Es
obeso o está caquéctico? ¿Es normal su comportamiento? ¿Puede usted detectar cual-
quier olor inusual, p. ej., hedor hepático (p. 274), tabaquismo, alcoholismo?
• También tómese un momento para observar alrededor de la cama y buscar otras pis-
tas, p. ej., inhaladores, kit de administración de insulina, ayudas para caminar, etc.
Aspecto de la cara y del cuerpo
• ¿La apariencia del paciente sugiere alguna enfermedad en particular, p. ej., acromegalia,
tirotoxicosis, mixedema, síndrome de Cushing o hipopituitarismo? Véase p. 202.
• ¿Existe una distribución anormal del vello corporal (p. ej., barbuda 乆 o sin pelo 么) que
sugiere una enfermedad endocrina?
• ¿Hay algo en el paciente que haga sospechar enfermedad de Paget, miopatía, miotonía
o síndrome de Parkinson? Busque erupciones cutáneas, p. ej., las chapetas malares de
la enfermedad mitral y la erupción de la mariposa del LES.
Estigmas periféricos de la enfermedad
Los signos específicos están asociados con diferentes enfermedades: considerar las uñas
(coiloniquia= deficiencia de hierro), nódulos subcutáneos (¿reumatoide, neurofibroma?),
y busque ganglios linfáticos (cervicales, axilares, inguinales). Vea sistemas específicos para
evaluar sus características, pero para todos los sistemas considere:
Color de piel
• Azul/morado: cianosis (también puede ser central solamente, p. 34).
• Amarillo: ictericia (la piel amarilla también puede ser causada por uremia, anemia per-
niciosa, carotenemia; comprobar las escleróticas: si también son amarillas es ictericia).
• Palidez: no es específico. La anemia se evalúa a partir de los pliegues palmares de la
piel (cuando se extienden) y de las conjuntivas (fig. 8.4) —normalmente pálido si Hb
< 80-90 g/L: no se puede concluir nada con el color normal de la conjuntiva, pero si
están pálidas el paciente está probablemente anémico.
• Hiperpigmentación: Addison, hemocromatosis (gris pizarra) y terapia con amiodarona,
oro, plata y minociclina.
Gráficos
• Temperatura: varía durante el día; una temperatura oral por la mañana > 37,2 °C o
por la noche > 37,7 °C constituye fiebre3. Las temperatura rectal suele estar 0,6 °C
por encima de la temperatura oral. Recuerde que la temperatura es generalmente más
baja en los pacientes de edad avanzada y, por lo tanto, la fiebre puede no ser tan pro-
nunciada. Una temperatura central < 35 °C indica hipotermia; pueden ser necesarios
termómetros especiales de baja lectura.
• Presión arterial y pulso: las tendencias son más importantes que los valores únicos;
repetir si está interesado.
• Orina: revise los análisis de orina y los gráficos de entrada/salida si están disponibles.
El nivel de hidratación. Cuando se ingrese a un paciente con malestar, no olvide eva-
luar su hidratación, revisar la turgencia de la piel y las membranas mucosas, buscar los
ojos hundidos y comprobar el reflujo capilar (si está bien perfundido < 2 s) y PVC.
Historia y exploración
se marche. No se deje intimidar, y siga estas sencillas reglas:
• Conozca la historia y los hallazgos de las exploraciones (idealmente los suyos), y
tenga a mano las notas del paciente, las observaciones, los resultados de las prue-
bas recientes y los tratamientos.
• Al principio, indique si está buscando consejo o si está preguntando y si el pacien-
te podría ser visto. Deje claro exactamente cuál es la pregunta que desea hacer,
permitiendo al oyente enfocar sus pensamientos y hacer preguntas relevantes.
• Proporcionar la edad del paciente y una breve historia que incluyendo los ante-
cedentes médicos pertinentes anteriores. Si desea que el paciente sea visto, avise
si va a salir de la sala para una prueba en un momento determinado.
• El médico visitante puede no estar familiarizado con su consulta. Cuando llegue,
preséntese usted, obtenga las notas y gráficos, y facilite sus datos de contacto en
caso de que tengan más preguntas.
Tabla 2.2. Solicitar una opinión especializada
Servicio Preguntas claves
Anestesiología ¿Anestesia anterior? ¿Tuvo algún tipo de reacción? ¿Cuándo
comió o bebió por última vez?
Cardiología ¿CI conocida? ¿Presión arterial? ¿Hallazgos ECG? ¿Hallazgos de
eco? Soplos ¿Troponina? ¿Temperatura/posibilidad de
endocarditis? (VSG, hematuria microscópica, etc. p. 150)
Dermatología ¿Lugar, inicio y aparición de la erupción cutánea? ¿Qué
medicamentos toma? ¿Enfermedad sistémica? ¿Historia de la
atopia?
Endocrinología Diabetes: glucemia, titulación de insulina habitual, complicaciones.
¿Otros: resultados de sangre? Estable/inestable; p. ej., crisis de
Addison. ¿Dosis de esteroides?
Gastroenterología/ Sangrado: ¿Puntuación de Rockall (p. 257)? ¿Shock? Diarrea:
Hepatología ¿Frecuencia diaria? ¿Sangrado? ¿Viaje al extranjero? ¿Enfermedad
hepática: signos de descompensación (p. 274)? Ascitis. Grado de
encefalopatía
Ginecología/ ¿Posibilidad de embarazo? ¿Embarazos previos? ¿Secreción
Obstetricia vaginal? ¿A los anticonceptivos hormonales? STIS
Hematología ¿Resultados de la sangre? ¿Esplenomegalia? ¿Fiebre?
¿Linfadenopatía? ¿Sangrado: anticoagulantes? ¿Resultados de la
coagulación?
Enferm. infecciosas/ ¿Fuente posible? ¿Antibióticos (actual/reciente/anterior)? ¿Viaje al
Microbiología extranjero? ¿Factores de riesgo para el VIH?
Nefrología ¿Creatinina (actual, antigua)? Coagulación ¿Producción de orina?
¿Potasio? ¿Presión arterial? ¿Estado del fluido? ¿Medicación?
¿Enfermedad renal conocida?
Neurología/ACV ¿Examen neurológico?* ¿Hallazgos de la exploración TC/RM?
Radiología Véase p. 720. ¿Contraste o no? Creatinina Coagulación ¿Cánula in
situ? ¿Implantes metálicos?
Neumología ¿SaO2? ¿Frecuencia respiratoria? ¿GAB? ¿RXT?
¿Inhaladores/nebulizadores? ¿Necesita O2 domiciliario?
¿Respiración asistida, p. ej., VNI/CPAP?
Cirugía (General) ¿Dolor? ¿Averiguar los hallazgos? ¿Se encuentra mal de forma
aguda? ¿Coagulación?
Urología ¿Historia de los STUI (síntomas del tracto urinario inferior) p.
642? ¿Catéter? ¿Historia de hematuria con el cólico nefrítico?
¿Qué se ha encontrado con la exploración (ultrasonido, TC)?
* Usted se sorprendería de cuántas personas refieren a un paciente a neurología/ictus sin haber
hecho un examen neurológico. No sea uno de ellos...
34 Signos
Los siguientes signos no son específicos de un sistema particular:
Cianosis
La piel azul oscura (periférica: de los dedos) o las mucosas (central: de la lengua), que
representa 50 g/L de Hb en su forma reducida (por lo tanto, hipóxico), se produce más
fácilmente en la policitemia que en la anemia.
Causas
• Enfermedad pulmonar con transferencia inadecuada de oxígeno, p. ej., obstrucción lumi-
Historia y exploración
nal, asma, EPOC, neumonía, TEP, edema pulmonar –puede corregirse por O2 inspi-
rado.
• Enfermedad cardíaca cianótica congénita, donde hay mezcla, p. ej., transposición de las
grandes arterias o cortocircuito derecha-izquierda (p. ej., CIV con síndrome de Eisen-
menger, véase p. 156); la cianosis no se reduce aumentando el oxígeno inspirado.
• Causas raras: metahemoglobinemia, un trastorno congénito o adquirido de glóbulos
rojos.
䊳 Una cianosis aguda es una emergencia. ¿Hay asma, un cuerpo extraño inhalado, un
neumotórax (p. 749, fig. 1) o un edema pulmonar? Ver p. 814.
La cianosis periférica se produce por una cianosis central, pero también puede ser indu-
cida por cambios en los sistemas vasculares periféricos y cutáneos en pacientes con satu-
raciones normales de oxígeno. Ocurre en el frío, en la hipovolemia y en la enfermedad
arterial y, por lo tanto, no es un signo específico.
Palidez
Puede ser racial o familiar, o de anemia, shock/desmayos, ataque de Stokes-Adams
(p. 460, pálido primero y posteriormente rubor), hipotiroidismo, hipopituitarismo y albi-
nismo.
La anemia es la concentración de hemoglobina < 130 g/L en hombres y < 120 g/L en
mujeres no embarazadas (p. 324). Puede evaluarse desde la conjuntiva y las arrugas de
la piel. Coiloniquia y estomatitis (p. 32) sugieren deficiencia de hierro. La anemia con icte-
ricia sugiere hemólisis. 䊳䊳 Si es solo palidez en una extremidad o dedo, pensar en una
embolia.
Decoloración de la piel
La hiperpigmentación generalizada puede ser genética (racial) o debida a la radiación;
ACTH (reacciones cruzadas con los receptores de melanina, p. ej., enfermedad de
Addison (p. 226), síndrome de Nelson (p. 76), ACTH ectópica en el carcinoma bron-
quial); enfermedad renal crónica (urea, p. 302); malabsorción; cloasma (observado duran-
te el embarazo o con la píldora anticonceptiva oral); cirrosis biliar; hemocromatosis
(«diabetes bronceada»); carotenemia; o fármacos (p. ej., clorpromazina, busulfán, amio-
darona, oro).
Obesidad
Definido por la Organización Mundial de la Salud como un IMC de más de 30 kg/m2.
Una mayor relación entre la cintura y la cadera, que indica la distribución central de grasa,
es más frecuente y está asociada con mayores riesgos para la salud, que incluyen la dia-
betes mellitus tipo 2, CI, la dislipidemia, PA, la osteoartritis de las articulaciones que
soportan peso y el cáncer (mama e intestino); ver p. 206. La mayoría de los casos no se
deben a trastornos metabólicos específicos. El cambio en el estilo de vida es clave para
el tratamiento, para aumentar el gasto energético y reducir la ingesta (p. 244). Pueden
considerarse medicación ± cirugía si el paciente cumple criterios estrictos (IMC de 40
kg/m2 o más, o entre 35 kg/m2 y 40 kg/m2 y otras enfermedades significativas que po-
drían mejorar con la pérdida de peso, se han probado medidas no quirúrgicas y han fra-
casado, el paciente recibe tratamiento intensivo en un servicio de nivel 3, y es adecuado
para anestesia y cirugía). Las patologías asociadas con la obesidad incluyen: genética (sín-
drome de Prader-Willi, síndrome de Lawrence-Moon), hipotiroidismo, síndrome de Cus-
hing y daño hipotalámico (p. ej., daño tumoral o traumático al área de la saciedad).
Linfadenopatía
Las causas de la linfadenopatía son reactivas o infiltrativas: 35
Reactiva
Infecciosa:
• Bacterias: p. ej., piógeno, TB, brucelosis, sífilis.
• Virales: VEB, VIH, CMV, hepatitis infecciosa.
• Otros: toxoplasmosis, tripanosomiasis.
Historia y exploración
No infecciosa: sarcoidosis, amiloidosis, beriliosis, enfermedad del tejido conectivo (p. ej.,
reumatoide, LES), dermatológica (eccema, psoriasis), fármacos (p. ej., fenitoína).
Infiltrativa
Histiocitosis benigna: OHCS p. 644, lipoidosis.
Maligna:
• Hematológica: linfoma o leucemia: LLA, LLC, LMA (p. 356).
• Carcinoma metastásico: de cánceres de mama, pulmón, intestino, próstata, riñón o
cabeza y cuello.
Edema
(Ver p. 579.)
Edema con fóvea: El líquido puede extravasarse de las venas (aumento de la presión
hidrostática, p. ej., TVP, insuficiencia cardíaca derecha) o difundir debido a la reducción de
la presión oncótica (proteínas plasmáticas bajas, p. ej., cirrosis, síndrome nefrótico, ente-
ropatía pierde proteínas) produciendo un gradiente osmótico con los tejidos (fig. 2.4, p.
39, p. 579). La causa del edema todavía no se entiende completamente5.
Edema periorbitario: El edema alrededor de la cara tiene un diagnóstico diferencial muy
distinto; la piel del párpado es muy delgada, por lo que el edema periorbitario suele ser
el primer signo de las alergias (dermatitis de contacto, p. ej., de maquillaje de ojos, pica-
duras), angioedema (puede ser hereditario), infección (䊳 la celulitis orbital puede poner
en peligro la vida, derivar inmediatamente al hospital si incluye otras infecciones incluyen
(VEB y sinusitis); si hay proptosis (p. 219) pensar en enfermedad de Graves, enfermeda-
des del tejido conectivo (p. ej., dermatomiositis, LES, sarcoide, amiloide); y muchos otros.
Descartar primero la enfermedad sistémica antes de atribuirlo a alergias.
Edema sin fóvea: Es decir, no comprimible, es un linfedema debido a un drenaje linfático
deficiente. Puede deberse a radioterapia, infiltración oncológica, infección, filariasis o rara
vez linfedema primario (síndrome de Milroy p. 706).
Pérdida de peso
La pérdida de peso puede ser tanto un síntoma (es decir, informado por el paciente)
como un signo (identificado por el médico). Una característica de una enfermedad cró-
nica, depresión, malnutrición, cáncer, infecciones crónicas (p. ej., tuberculosis, VIH/sida
enteropático), diabetes mellitus e hipertiroidismo (normalmente en presencia de un
aumento del apetito). La pérdida severa y generalizada de músculo también se ve como
parte de una serie de enfermedades neurológicas degenerativas y en la insuficiencia car-
díaca (caquexia cardíaca), aunque en esta última, en la insuficiencia cardíaca derecha la
pérdida de peso no suele ser una queja importante. No olvide la anorexia nerviosa
(OHCS p. 382) como causa subyacente de la pérdida de peso.
Excluya las causas tratables, p. ej., la diabetes es fácil de diagnosticar, mientras que la
tuberculosis puede ser muy difícil. Por ejemplo, en la RXT puede parecerse al cáncer, así
que no se olvide enviar muestras de broncoscopia para la tinción de ZN y el cultivo de
TB. La pérdida involuntaria de peso siempre debe alertar, por lo que hay que evaluar a
los pacientes con cuidado.
Caquexia
Deterioro del músculo general por hambruna o por comer (demencia; ictus; MND,
p. 506; anorexia nerviosa), malabsorción (sida enteropático/enfermedad delgada/
Cryptosporidium; Whipple) o catabolismo (neoplasia; IC; TB; enfermedad renal crónica;
leptina).
Historia y exploración
Anote específicamente sobre el uso de aspirina/NTG/-bloqueantes/diuréticos/digoxina/
estatina/anticoagulantes.
Historia familiar
Pregunte específicamente si algún familiar de 1er grado tiene enfermedades cardiovascu-
lares (especialmente si < 60 años).
Historia social
Tabaquismos, impacto de los síntomas en la vida social, alcohol (determinar el número
de unidades), aficiones, ejercicio.
Palpitaciones
Por la noche en mi almohada, el sincopado tambalear
Del pulso en mi oído. La ruleta rusa:
Cada latido cardíaco una nueva tirada del dado…
La hipocondría caminó, sujetando mi brazo
Como una enfermera, sus dedos sobre mi pulso…
La súbita presión en mi garganta de sangre desbocada.
Ted Hughes, Cartas de cumpleaños
1. Inspección general
• Evaluar el estado general (enfermedad /bienes-
Historia y exploración
tar)
• Busque pistas (oxígeno, spray NTG)
• Color (pálido, cianosis, rubor)
• ¿Dificultad para respirar?
• ¿Cicatrices en la pared torácica (fig. 2.3)?
Fig. 2.3. Cicatriz de cirugía de
derivación aortocoronaria con
injerto (CABG por sus siglas en
inglés: Coronary Artery Bypass
2. Manos Graft Surgery).
• Temperatura: tiempo de reflujo capilar
• Inspeccionar: Piel: tinción del tabaco, cianosis peri-
férica (fig. 2.4), xantomas tendinosos, lesiones de
Janeway, nódulos de Osler (signos de endocardi-
tis infecciosa). Uñas: dedos en palillo de tambor,
hemorragias en astilla, pulsos del lecho ungueal
(signo de Quinke de regurgitación aórtica)
5. Cuello
• PVC: Pida al paciente que gire la cabeza hacia la
izquierda y observe la fosa supraclavicular (ver
fig. 2.6 y p. 43). Evalúe la altura de la PVY y la
forma de onda. Presione sobre el abdomen para
comprobar el reflejo abdómino-yugular. Fig. 2.6. PVY.
• Pulso carotídeo: inspeccionar (carótida visible = Tomada de Thomas J. y cols. (edit.)
signo de insuficiencia aórtica de Corrigan) y pal- Oxford Handbook of Clinical Exami-
par el volumen y el carácter de un lado y luego nation and Practical Skills (2014),
del otro con autorización de Oxford Uni-
versity Press.
6. Cara 39
• Color: Pálido, enrojecido, cianosis central
• Características: Arco corneal/senil (fig. 2.7), xan-
telasma (ver fig.. 2.29, p. 60)
• Palidez de la conjuntiva (anemia)
• Enrojecimiento (chapetas) malares (estenosis mitral)
• Higiene dental
Historia y exploración
Fig. 2.7. Arco corneal/senil.
7. El Precordio
Inspeccionar
• Cicatrices: esternotomía de línea media, toraco-
tomía lateral (valvulotomía de estenosis mitral).
Palpar
• Latido apical (pulsación lateral más baja) usual-
mente 5º espacio intercostal en la línea media-
clavicular; medir la posición contando los espa-
cios intercostales (muesca esternal = 2º espacio
intercostal). ¿No desplazado/desplazado? Carác-
ter: impalpable (? dextrocardia/EPOC), toque (S1
palpable), doble impulso, sostenido/fuerte. Cuen-
te la frecuencia si el pulso es irregular (FA, p. 130).
• «Impulsos» y «frémitos»: coloque la parte proximal
de la palma de la mano plana en el tórax, en el
lado izquierdo y luego a la derecha del esternón.
Impulso: sostenido, empuje normalmente sentido Fig. 2.8. Precordio.
en el borde esternal izquierdo (= crecimiento Tomada de Thomas J. y cols. (edit.)
ventricular derecho). Frémito: el soplo palpable se Oxford Handbook of Clinical Exami-
siente como una vibración bajo su mano. nation and Practical Skills (2014),
con autorización de Oxford Uni-
Auscultar: (palpar el pulso carotídeo simultáneamente). versity Press.
• Ápex (área mitral): escuche con la campana y dia-
fragma. Identifique los ruidos cardíacos primero y
segundo: ¿son normales? Escuche los ruidos aña-
didos (p. 44) y los soplos (p. 46); con el diafragma
escuche por si hay un soplo pansistólico irradia-
do a la axila: regurgitación mitral.
• En el ápex, con la campana, pídale al paciente
que se ponga sobre su lado izquierdo, solicitán-
dole una exhalación sostenida (un retumbo
medio-diastólico: estenosis mitral).
• Borde esternal izquierdo inferior (área tricúspide) y
área pulmonar (a la izquierda del manubrio en el
segundo espacio intercostal): si sospecha un
soplo derecho, ausculte con el paciente en inspi-
ración mantenida.
• A la derecha del manubrio en el 2º espacio inter-
costal (área aórtica): soplo sistólico irradiado
hacia las carótidas: estenosis aórtica.
• Siente al paciente y ausculte en el borde esternal
izquierdo inferior con el paciente en espiración man-
tenida (soplo diastólico precoz: ¿regurgitación aórtica?).
sensibles, p. ej., en las pulpas de los dedos) y las lesiones de Janeway (máculas rojas en
las palmas, fig. 3.35, p. 151) son signos de endocarditis infecciosa. Si se encuentra, exami-
ne el fondo de ojo para las manchas de Roth (infartos retinales, p. 560, fig. 9.5). ¿Existen
infartos en los pliegues de las uñas (vasculitis, p. 556) o pulsación capilar de las uñas (signo
de Quincke en la regurgitación aórtica)? ¿Hay aracnodactilia (Marfan) o polidactilia (CIA)?
¿Hay xantomas tendinosos? (Ver RECUADRO «Hiperlipidemia»).
Pulso. Ver p. 42. Palpe buscando retraso radiofemoral (coartación de la aorta) y retraso
radiorradial (p. ej., por un aneurisma de arco aórtico).
Presión arterial (ver RECUADRO «Una medida inusual de PA»). PAS es la presión a la
cual se escucha el pulso por primera vez cuando se desinfla el manguito (sonidos de
Korotkoff); la diastólica es cuando los ruidos cardíacos desaparecen o se amortiguan (p.
ej., en los jóvenes). La presión del pulso es la diferencia entre las presiones sistólica y dias-
tólica. Es estrecha en la estenosis aórtica y la hipovolemia, y ancha en la regurgitación aór-
tica, la arteriosclerosis y el shock séptico. Definición de la hipertensión: ver p. 138. Exa-
minar el fondo de ojo buscando cambios hipertensivos (p. 138). El shock puede ocurrir
si la presión sistólica es < 90 mmHg (p. 790). La hipotensión postural se define como una
disminución de la presión sistólica > 20 mmHg o diastólica > 10 mmHg al estar en bipe-
destación durante 3-5 min (ver «Hipotensión postural»).
Pulso carotídeo (ver p. 42).
Presión venosa de la yugular (ver p. 43).
Cara. ¿Hay arco corneal (fig. 2.8, p. 39) o xantelasma (fig. 2.29, p. 60, que significa disli-
pidemia, p. 690)? ¿Hay enrojecimiento –chapetas– malares (estenosis mitral, bajo gasto
cardíaco)? ¿Hay signos de enfermedad de Graves, p. ej., ojos protruyentes (exoftalmos)
o bocio-p. 218)? ¿Es la cara dismórfica, p. ej. síndrome de Down, síndrome de Marfan
(p. 706) o los síndromes de Turner, Noonan o Williams (p. 149)?.
Precordio. Palpar el latido apical. Posición normal: 5º espacio intercostal en la línea
medioclavicular. ¿Se desplaza lateralmente? ¿Es anormal en la naturaleza: sostenido (cau-
sado por la obstrucción de salida, p. ej., estenosis aórtica o hipertensión sistémica), hiper-
dinámico (causado por sobrecarga de volumen, p. ej., insuficiencia mitral o aórtica), gol-
peante (estenosis mitral, esencialmente un primer tono palpable), difuso (insuficiencia del
VI, cardiomiopatía dilatada) o doble impulso (MCH(O), p. 152)? ¿Hay dextrocardia? Pal-
par para detectar impulso parasternal izquierdo (dilatación del VD, p. ej., estenosis pulmo-
nar, cor pulmonale, CIA) o frémitos (soplos transmitidos).
Ausculte el corazón. También ausculte soplos en las carótidas y en todas partes, par-
ticularmente si hay desigualdad entre los pulsos o la ausencia de un pulso. Causas: ate-
rosclerosis (ancianos), vasculitis (jóvenes, p. 556).
Pulmones. Examine las bases buscando crepitantes y derrames pleurales, indicativos de
insuficiencia cardíaca.
Edema. Examine tobillos, piernas, sacro y torso para detectar edema. (Es posible que
prefiera examinar los tobillos mientras está de pie a los pies de la cama, ya que es una
buena y precoz pista para encontrar patología).
Abdomen. Hepatomegalia y ascitis en la insuficiencia cardíaca derecha; hepatomegalia
pulsátil con regurgitación tricuspídea; esplenomegalia con endocarditis infecciosa.
Fondo de ojo. Manchas Roth (endocarditis infecciosa).
Reactivo medidor de la hematuria.
Historia y exploración
vación para lecturas anteriores y otros signos vitales. Considere la posibilidad de
tomar una lectura manual usted mismo con un tensiómetro diferente.
A menudo una charla tranquila reducirá la PA (la suya y la de su paciente: escuche aten-
tamente al paciente, ya que puede revelar un nuevo hecho tangencial pero vital para
explicar la historia clínica). Muchas cosas afectan a las lecturas de PA, desde el ruido de
fondo hasta cuánto se toca al paciente. Si PA, p. ej. 150/90, revise ambos brazos.
Si la diferencia sistólica es > 10 mmHg, considere la enfermedad vascular periférica, y si
el paciente podría tener un aneurisma aórtico torácico o coartación (rara). NB: la dias-
tólica del brazo derecho es normalmente 2,4-5 mmHg más alta que la izquierda.
Hipotensión postural
Esta es una causa importante de caídas y mareos en los ancianos. Se define como
una disminución de la PA sistólica > 20 mmHg o diastólica > 10 mmHg después de
permanecer 3 min de pie (tras estar tumbado).
Causas: hipovolemia (signo temprano); medicación, p. ej. nitratos, diuréticos, antihi-
pertensivos; antipsicóticos; Addison (p. 226); hipopituitarismo (ACTH), neuropatía
autonómica (p. 505, DM, atrofia multisistémica, p. 494), después de una maratón (la
resistencia periférica es baja durante algunas horas); idiopática.
Tratamiento:
• Acuéstese si se siente mareado.
• Póngase de pie lentamente (con vía de escape: ¡no se aleje de la silla demasiado rápido!).
• Considerar la derivación a una «unidad de síncope», donde hay equipo especial
disponible para monitorizar al paciente bajo varias inclinaciones.
• Manejar la neuropatía autonómica, p. 505.
• Ingestión de agua y sal puede ayudar (p. ej., 150 mmol Na+/d), pero el Na+ tiene
sus problemas.
• Medidas físicas: cruzar las piernas, ponerse en cuclillas, medias elásticas de com-
presión (compruebe que el pulso de dorsalis pedis está presente), y un ejercicio
cuidadoso puede ayudar.
• Si el mareo es postprandial, coma poco y a menudo; carbohidratos y consumo
de alcohol.
• Elevar el cabecero de la cama hacia arriba durante la noche liberación de reni-
na, lo que pérdida de fluidos y PA en bipedestación.
• Medicamentos de primera línea: fludrocortisona (reduce la diuresis) 50 mcg/d;
aumentar hasta 300 mcg/24 h VO solo si se tolera. Controlar el peso; tenga cuidado
si IC, insuficiencia renal o albúmina, dado que fludrocortisona empeora el edema.
• Medicamentos de segunda línea: simpaticomiméticos, p. ej., midodrina (no siempre
disponible) o efedrina; piridostigmina (p. ej., si también hipofunción del detrusor).
• Si estos fallan, plantéeselo todo de nuevo y pregúntese: ¿es realmente hiperten-
sión supina?
Hiperlipidemia
Los xantomas son depósitos localizados de grasa debajo de la piel, que se producen
sobre las articulaciones, los tendones, las manos y los pies. Xantelasma se refiere al
xantoma en el párpado (p. 691, fig. 14.13). Arco corneal (fig. 2.8, p. 39) es una opaci-
dad de forma semilunar en la periferia de la córnea. Común en los mayores de 60
años, puede ser normal, pero puede representar hiperlipidemia, especialmente en
los menores de esta edad.
Consejos
La mano se puede utilizar como un manómetro para estimar PVY/PVC si no puede
ver el cuello correctamente (p. ej., línea central in situ). Sostenga la palma de la mano
hacia abajo por debajo del nivel del corazón hasta que las venas se dilaten (¡el pacien-
te debe estar caliente!), luego levántela lentamente, manteniendo el brazo horizontal.
Las venas deben vaciarse cuando se levanta la mano. Venas vacías por debajo del nivel
del corazón sugieren una PVC baja, si permanecen llenas sugiere una PVC normal/alta.
42 Pulsos
䊳 Evaluar el pulso radial para determinar la frecuencia y el ritmo. El carácter y el volu-
men se valoran mejor en las arterias braquial o carótida. También se puede sentir un
pulso colapsante en la arteria radial cuando el brazo del paciente está elevado por enci-
ma de su cabeza. Véase fig. 2.10.
¿Es el pulso rápido ( > 100 lpm, p. 126) o lento ( < 60 lpm, p. 124)?
Ritmo. Un pulso irregularmente irregular ocurre en FA o con múltiples extrasístoles. Un
pulso regularmente irregular ocurre en el bloqueo de 2º y con un bigemisno ventricular.
Historia y exploración
Carácter y volumen
• Los pulsos saltones son causados por retención de CO2, insuficiencia hepática y sepsis.
• Los pulsos de pequeño volumen ocurren en la estenosis aórtica, shock y derrame peri-
cárdico.
• Los pulsos colapsantes («martillo de agua») son causados por insuficiencia aórtica, mal-
formaciones AV, y un conducto arterioso persistente.
• Los pulsos anácrotos (aumento lento) se producen en la estenosis aórtica.
• Los pulsos de bisferiens ocurren en estenosis e insuficiencia aórticas combinadas.
• Pulsus alternans (alternando latidos fuertes y débiles) sugiere IC, miocardio o esteno-
sis aórtica.
• Los pulsos entrecortados se producen en MCH(O).
• Pulsus paradoxus (la presión sistólica disminuye en la inspiración por > 10 mmHg) ocu-
rre en el asma grave, la constricción pericárdica o el taponamiento cardíaco.
Pulsos periféricos (Ver p. 36). Ver p. 771 para el muestreo de gases sanguíneos arte-
riales (GAB).
El martillo acuático
El martillo acuático era un juguete popular que consistía en un tubo de vacío medio
lleno de agua. Cuando se invertía, el desplazamiento del agua de su interior de un
extremo al otro del tuvo producía un intrigante ruido similar al golpe de un marti-
llo. Este es el nombre alternativo para el pulso colapsante de Corrigan –es decir, el
latido es ascendente, brusco y abrupto, cuyo pico se alcanza tempranamente y con
fuerza anormal– antes de una rápida bajada (cuando la sangre regresa al ventrículo
izquierdo a través de una válvula aórtica incompetente).
Normal
Historia y exploración
Vena maxilar
patrones que usted ve, así posterior
puede comenzar lentamen- Vena facial
te a adquirir conocimiento; Vena retro-
vea la fig. 2.11 para la ana- mandibular Cartílago
tomía venosa local. Palpar Vena yugular tiroideo
concomitantemente el externa
pulso arterial para ayudar a Vena yugular Vena yugular
descifrar los patrones. interna anterior
La altura
Observe al paciente a 45º,
con la cabeza ligeramente
hacia la izquierda y el cuello Fig. 2.11. Sistema venoso yugular.
relajado. Buena iluminación
y correcto posicionamiento son clave. Busque la vena yugular interna derecha que pasa
justo medial a la cabeza clavicular del esternocleidomastoideo detrás del ángulo de la man-
díbula y los lóbulos de las orejas. La PVY se evalúa midiendo la altura vertical desde el ángu-
lo manubriosternal (no la muesca esternal) hasta la parte superior del pulso. La presión a
cero (en el ángulo esternal) es de 5 cm, así que añada la altura de la PVY a 5 cm para obte-
ner la presión correcta de llenado del corazón derecho en cm de agua. Se considera ele-
vada una presión superior a 9 cm (4 cm por encima del ángulo esternal a 45º).
¿Es el pulso venoso (y no arterial)?
• Usualmente impalpable y obliterado por la presión del dedo en el vaso.
• Se eleva transitoriamente con la presión sobre el abdomen (reflujo abdomino-yugu-
lar)2 o sobre el hígado (reflujo hepatoyugular), y se altera con la postura y la respira-
ción (desaparece cuando el paciente se sienta tras estar tumbado).
• Normalmente tiene un pulso doble por cada pulso arterial. Véase fig. 2.12.
Anormalidades de la PVY
• PVY elevada con forma de onda normal: Sobrecarga de líquidos, insuficiencia cardíaca
derecha.
• PVY elevada fija con pulsación ausente: Obstrucción de VCS (p. 528).
• Onda a grande: Hipertensión pulmonar, estenosis pulmonar.
• Onda a cañón: Cuando la aurícula derecha se contrae contra una válvula tricúspide
cerrada, se producen grandes ondas a «cañón». Causas: bloqueo cardíaco completo,
estimulación ventricular de una sola cámara, arritmias ventriculares/extrasístoles.
• Ausencia de onda a: Fibrilación auricular.
• Ondas V grandes: Regurgitación tricuspídea: mire si hay movimiento del lóbulo de la oreja.
• Pericarditis constrictiva: Plateau alto de la PVY (que asciende con la inspiración: signo de
Kussmaul) con profundos descensos x e y.
• Ausencia de PVY: Cuando se está acostado, la vena yugular debe estar llena. Si hay un volu-
men circulatorio reducido (p. ej., deshidratación, hemorragia), la PVY puede estar ausente.
a a
Onda A: Sístole auricular
Onda C: Cierre de la válvula tricúspide, normal-
v mente no es perceptible
c X descendente: Caída de la presión auricular durante
y la sístole ventricular
Onda V: Llenado auricular mientras permanece
cerrada la válvula tricúspide
Diástole x Diástole Y descendente: Apertura de la válvula tricúspide
Sístole
ventricular
Fig 2.12. La onda de presión venosa yugular. El PVY cae como el descenso de X durante la
sístole ventricular porque la aurícula derecha ya no se contrae. Esto significa que la presión en
la aurícula derecha está disminuyendo, lo que se refleja por el PVY.
Tomado de Clinical Examination, Macleod, Churchill y ayudas a la medicina del graduado, J Burton, Churchill.
2 Este signo fue descrito por primera vez por Pasteur en 1885 en el contexto de la insuficiencia tricúspide.
• S1 intenso: En la estenosis mitral, debido a que el orificio estrechado por la válvula limi-
ta el llenado ventricular, no hay disminución gradual del flujo hacia el final de la diásto-
le. Las válvulas están, por lo tanto, en su máxima apertura al final de la diástole y se cie-
rran rápidamente produciendo un S1 fuerte (el golpe del ápex en la palpación). S1 tam-
bién es fuerte si se acorta el tiempo de llenado diastólico, p. ej., si el intervalo PR es
corto y en la taquicardia.
• S1 suave: Se produce si el tiempo de llenado diastólico es prolongado, p. ej., un inter-
valo PR prolongado o si las valvas de la válvula mitral no se cierran adecuadamente (es
decir, insuficiencia mitral). La intensidad de S1 es variable en el bloqueo AV, la FA y en
la taquicardia nodal o ventricular.
El segundo ruido cardíaco (S2). Representa el cierre de las válvulas aórtica (A2) y pul-
monar (P2). La anomalía más importante de A2 es su disminución en la estenosis aórtica.
• A2 es intenso en taquicardia, hipertensión y transposición, pero esto probablemente no
sea una entidad clínica útil.
• P2 es intenso en la hipertensión pulmonar y disminuye en la estenosis pulmonar.
• Desdoblamiento de S2 en la inspiración es normal y se debe principalmente a la varia-
ción del retorno venoso del corazón derecho con la respiración, retrasando el com-
ponente pulmonar.
– Desdoblamiento amplio: ocurre en el bloqueo de la rama derecha (BRD), esteno-
sis pulmonar, inspiración profunda, regurgitación mitral y CIV.
– Desdoblamiento amplio fijo: ocurre en la comunicación interauricular (CIA).
– El desdoblamiento invertido (es decir, A2 después de P2, con aumento del desdo-
blamiento en espiración): se produce en el bloqueo de la rama izquierda, estenosis
aórtica, conducto arterioso persistente y estimulación ventricular derecha.
– Un único S2: se produce en la tetralogía de Fallot, estenosis aórtica o pulmonar grave,
atresia pulmonar, síndrome de Eisenmenger (p. 156), CIV grande o hipertensión.
NB: desdoblamiento y P2 se auscultan mejor en el área pulmonar.
Ruidos adicionales
Tercer ruido cardíaco (S3) puede ocurrir justo después de S2. Es de tono bajo y se escu-
cha mejor con la campana del estetoscopio. S3 es patológico en los mayores de 30 años.
Un S3 intenso ocurre en un ventrículo izquierdo dilatado con llenado ventricular rápido
(regurgitación mitral, CIV) o una mala función del ventrículo izquierdo (post-MI, miocar-
diopatía dilatada). En la pericarditis constrictiva o miocardiopatía restrictiva ocurre pre-
cozmente y es más aguda («knock pericárdico»).
Cuarto ruido cardíaco (S4) ocurre justo antes de S1. Siempre anormal, representa la con-
tracción auricular contra un ventrículo rígido por cualquier causa, p. ej., estenosis aórtica
o cardiopatía hipertensiva.
Ritmos triples y de galope: Un 3er o 4º ruido cardíaco que ocurre con una taquicardia sinu-
sal puede dar la impresión de unos cascos al galope. Un galope por S3 tiene el mismo
ritmo que «Ken-tucky». mientras que un galope por S4 tiene el mismo ritmo que «Tenne-
ssee». Cuando S3 y S4 ocurren en una taquicardia, p. ej., con embolismo pulmonar, pue-
den sumar y aparecer como un solo ruido, un galope de suma.
Un chasquido sistólico de eyección se escucha a principios de la sístole con las válvulas aór-
ticas bicúspides, y si la PA. Las lesiones equivalentes del corazón derecho también pue-
den causar chasquidos.
Los chasquidos mesosistólicos ocurren en el prolapso de la válvula mitral (p. 144).
El chasquido de apertura precede al soplo medio-diastólico de la estenosis mitral (y tri-
cuspídea). Indica una válvula flexible (no calcificada).
Los ruidos protésicos son causados por válvulas no biológicas, al abrir y cerrar: son ruidos
estrepitosos válvulas de bola y jaula (p. ej., Starr-Edwards); chasquidos simples válvu-
la de disco basculante (p. ej., disco simple: Bjork Shiley, doble disco: St Jude –a menudo
más silencioso). Los ruidos de la válvula mitral protésica ocurren en el tiempo del S1,
mientras que los de la válvula aórtica en el tiempo del S2.
QRS
45
P T ECG
4º 1º 2º 3º
Tonos
A P cardiacos
Historia y exploración
110
Presión (mmHg)
Presión aórtica
50
46 Soplos cardíacos
䊳 Siempre considere otros síntomas y signos antes de la auscultación y piense: «¿Qué
espero escuchar?». Pero no deje que sus expectativas determinen lo que usted oye.
䊳 Utilice el estetoscopio correctamente: recuerde que la campana es buena para los rui-
dos graves (p. ej., estenosis mitral) y debe aplicarse suavemente. El diafragma filtra los
tonos bajos, lo que facilita la detección de los soplos más agudos (p. ej., la regurgitación
aórtica). NB: una campana aplicada firmemente a la piel se convierte en un diafragma.
䊳 Considere cualquier soplo en términos de su naturaleza, tiempo, intensidad, área
Historia y exploración
S1 S2 S3 S1 S2 S3
47
Historia y exploración
Chasquido de
S1 S2 S3 S1 S2 apertura S3
Acento
presistólico
48 El sistema respiratorio
Tabla 2.5. Presentación de síntomas y preguntas a hacer
Presentación
de síntomas Preguntas directas
Tos (ver RECUADRO ¿Duración? ¿Carácter (p. ej., ladrido/hueco/seco)? Nocturno
«Características de ( asma, preguntar acerca de otros síntomas atópicos, es decir
la tos») ¿eccema, fiebre del heno? ¿Factores irritativos? Esputo (¿color?
¿Cuánto?) ¿Alguna sangre/hemoptisis?
Historia y exploración
Características de la tos
La tos es relativamente poco específica, y se debe a irritación en cualquier sitio
desde la faringe hasta los pulmones. El carácter de una tos puede, sin embargo, dar
pistas sobre la causa subyacente:
• Tos intensa metálica: sugiere presión sobre la tráquea, p. ej., por un tumor.
• Tos vacuna y hueca: se asocia con parálisis recurrente del nervio laríngeo.
• Tos perruna: se produce en la diferia.
• Tos crónica: piense en la tosferina, tuberculosis, cuerpo extraño, asma (p. ej., nocturna).
• Tos seca y crónica: puede ocurrir después de la irritación ácida de los pulmones por
el reflujo esofágico y como un efecto secundario de los inhibidores de la ECA.
䊳 No ignorar un cambio en el carácter de una tos crónica; puede significar un nuevo
problema, p. ej., infección, cáncer.
3 La atopia implica predisposición o asociación de asma, fiebre del heno y eccema con producción de
IgE específica en la exposición a alérgenos comunes (p. ej., ácaros del polvo doméstico, hierba, gatos).
Hemoptisis 49
Sangrar cuando se tose, p. ej., sangre espumosa, alcalina y de color rojo brillante, a
menudo en un entorno de enfermedad conocida en el pecho (al vomitar sangre,
esta es ácida y oscura).
Tabla 2.6. Causas respiratorias de hemoptisis
1. Infecciosa TB; bronquiectasia; bronquitis; neumonía; absceso pulmonar; EPOC;
hongos (p. ej., aspergilosis); virus (de neumonitis, crioglobulinemia,
Historia y exploración
p. ej., con virus de la hepatitis, neumocistosis asociada al VIH, o
infección por Mycobacterium avium-intracellulare, p. 400). Helmintos:
paragonimiasis (p. 400); hidátide (p. 435); esquistosomiasis
2. Neoplásica Primaria o secundaria
3. Vascular Infarto pulmonar (TEP); vasculitis (asociada a ANCA, AR, LES);
telangiectasia hemorrágica hereditaria; malformación AV; capilaritis
4. Parenquimatosa Fibrosis intersticial difusa; sarcoidosis; hemosiderosis; síndrome de
Goodpasture; fibrosis quística
5. Hipertensión Idiopática, tromboembólica, cardiopatía cianótica congénita (p. 156),
pulmonar fibrosis pulmonar, bronquiectasias
6. Coagulopatías Cualquiera; p. ej., trombocitopenia, p. 344; CD; exceso de warfarina
7. Traumatismo/ P. ej., después de la intubación, o una erosión provocada por un
cuerpo extraño desfibrilador implantado
8 Pseudohemoptisis Munchausen (p. 706); hematemesis aspirada; pigmento rojo (prodigiosin)
de Serratia marcescens (bacteria gram-negativa) en el esputo
Es difícil clasificar con precisión a las que se deben a causas raras: las causas vascula-
res pueden tener orígenes infecciosos, p. ej., el quiste hidatídico puede contarse
como un cuerpo extraño, como infección, y también como vascular, si se fistula con
la aorta; lo mismo para la ruptura de un aneurisma (micótico) infectado, o aortitis
por TB. Causas infecciosas que implican coagulopatía: dengue; leptospirosis. En la
hemoptisis mensual, piense en la endometriosis pulmonar.
Rx. La hemoptisis puede necesitar tratamiento por sí misma, si es masiva (p. ej., trauma,
TB, quiste hidatídico, cáncer, malformación AV): llamar al servicio de neumología, consi-
derar la ayuda de radiología intervencionista (peligro de ahogamiento: pueden requerir-
se resección del lóbulo, taponamiento endobronquial o embolización arterial). Establecer
vía IV, hacer RXT, gases en sangre, sistemático de sangre, INR/APTT, cruzar sangre. Si es
angustiante, administre rápidamente morfina IV, p. ej., si es un cáncer inoperable.
Disnea
Sensación subjetiva de dificultad para respirar, a menudo exacerbada por el esfuerzo.
• Pulmón: enfermedad de vías respiratorias e intersticial. Puede ser difícil de separar
de las causas cardíacas; el asma puede despertar al paciente y a primera hora de
la mañana puede causar disnea y sibilancias.
• Cardíaca: p. ej., cardiopatía isquémica o insuficiencia ventricular izquierda (IVI), este-
nosis mitral, de cualquier causa. La IVI se asocia con ortopnea (disnea más aguda
en decúbito, «¿Cuántas almohadas?») y disnea paroxística nocturna (DPN, disnea
que despierta al paciente). Otras características incluyen edema de tobillo, crepi-
tantes pulmonares y aumento de la PVY.
• Anatómicas: p. ej., enfermedades de la pared torácica, músculos, pleura. La ascitis
puede causar disnea al fijar el diafragma, restringiendo su movimiento.
• Otros. 䊳 Cualquier paciente en shock puede también presentar disnea (p. 790 y p.
607): la disnea puede ser la forma de presentación del shock. También anemia o aci-
dosis metabólica que causa descompensación respiratoria, p. ej., cetoacidosis, enve-
nenamiento por aspirina. Busque otras pistas: disnea en reposo no asociado con el
esfuerzo, puede ser psicógena: la hiperventilación prolongada provoca alcalosis respi-
ratoria. Esto provoca una caída en el calcio ionizado que conduce a hipocalcemia
aparente. Las características incluyen parestesias periféricas y alrededor de la boca
con más o menos espasmo carpopedal. La velocidad de inicio ayuda al diagnóstico.
Tabla 2.7. Etiología de la disnea según el momento del debut
Agudo Subagudo Crónico
Cuerpo extraño Asma EPOC y enfermedad
Neumotórax Enfermedad parenquimatosa crónica
Embolismo pulmonar parenquimatosa Causas no respiratorias, p. ej.,
Edema agudo de pulmón Derrame insuficiencia cardíaca
Psicógena Psicógena Anemia
1. Inspección general
Historia y exploración
2. Manos
• Inspeccione:
Tinción por el tabaco (fig. 2.16), cianosis periférica,
rubor, dedos en palillo de tambor, signos de enfer-
medad sistémica (esclerosis sistémica, artritis reu-
matoide)
• Asterixis: Fig. 2.16. Tinción por el ta-
Pídale al paciente que sostenga sus manos hacia baco.
adelante y que flexione las muñecas hacia atrás
3. Brazos
• Compruebe la frecuencia cardíaca, y con los dedos
todavía sobre el pulso, cuente la frecuencia respira-
toria (puede aumentar si el paciente es consciente
de que está sincronizando) y el patrón (p. 53)
• Pulso saltón (retención de CO2)
• Mida la presión arterial
4. Cuello
• Tráquea: ¿Palpe la muesca esternal (fig. 2.17, ¿está
desviada?). Evalúe la distancia cricosternal en
anchura de dedos y sienta el tirón traqueal Fig. 2.17. Muesca esternal.
• Linfadenopatía: Por detrás con el paciente, con este Tomada de Thomas J. y cols.
sentado hacia delante, palpe los ganglios linfáticos (edit.) Oxford Handbook of Clini-
de la cabeza y el cuello cal Examination and Practical
Skills (2014), con autorización de
• PVY: Elevado en cor pulmonale, fijo y elevado en la Oxford University Press.
obstrucción de la vena cava superior.
5. Cara
• Inspeccione: Para detectar signos de Horner
(fig. 2.18), palidez conjuntival, cianosis central (pida
al paciente que saque la lengua), respiración con
labios fruncidos
Fig. 2.18. Síndrome de Hor-
ner.
Historia y exploración
pecho
• Frémito vocal táctil: Palpar la pared torácica con las
yemas de los dedos y pida al paciente que repita
«99», cada vez que sienta su mano, comparando Fig. 2.19. Colocación de las
de derecha a izquierda. Esto se utiliza raramente manos para la comprobación
• Percusión: Percuta sobre diferentes segmentos res- de una expansión del pecho:
piratorios, comparando derecha e izquierda (ver ancle los dedos en los costa-
fig. 2.21, p. 53) dos dejando los pulgares
• Auscultación: Pídale al paciente que «respire de libres y sin presionar.
forma continuada por la boca» y ausculte con el Tomada de Thomas J, et al. (edit.)
diafragma del estetoscopio desde los ápices hasta Oxford Handbook of Clinical Exa-
las bases, comparando derecha e izquierda (ver mination and Practical Skills
tabla 2.8, p. 52) (2014), con autorización de
Oxford University Press.
• Resonancia vocal: Repetir la auscultación, pidiendo
al paciente que repita «99» cada vez que sienten el
estetoscopio. Si se escucha un resonancia, pídale
al paciente que susurre «99»; si se oye claramente
esto se denomina «pectoriloquia con susurro» y es
un signo sensible para la consolidación. Fuera de
los exámenes, la elección de la resonancia vocal o
frémito vocal táctil es una preferencia personal.
Muchos clínicos prefieren la resonancia vocal, ya
que proporciona más información que el frémito
vocal táctil
7. Espalda
• Expansión
• Frémitos vocales táctiles
• Percusión
• Auscultación
• Resonancia vocal
Consejos
• El pectoriloquio susurrante es un signo clásico y específico de consolidación.
• Si no expone adecuadamente el tórax, es posible que pase por alto pequeñas
cicatrices, p. ej., por videotoracoscopia.
• Si observa síndrome de Horner, compruebe que no haya atrofia de los pequeños
músculos de la mano; ver p. 702 y 708
Historia y exploración
• Pulso paradójico (p. 42).
Patrones respiratorios
Hiperventilación:Taquipnea (> 20 respiraciones/min) o profunda (hiperpnea, es decir,
volumen circulante). La hiperpnea no es desagradable, a diferencia de la disnea.
Puede causar alcalosis respiratoria, por lo tanto parestesia ± espasmo muscular
(Ca2+). La causa principal es la ansiedad: asociada a mareos, opresión/dolor en el
pecho, palpitaciones y pánico. Causas raras: respuesta a la acidosis metabólica; lesio-
nes del tronco encefálico.
• Respiración de Kussmaul es una respiración profunda y suspirante en acidosis
metabólica severa (expulsando CO2), p. ej., cetoacidosis diabética o alcohólica,
insuficiencia renal.
• Hiperventilación neurogénica está producida por lesiones pontinas.
• Síndrome de hiperventilación implica ataques de pánico asociados con hiperventi-
lación, palpitaciones, mareos, desmayos, tinnitus, dolor/opresión torácica alarman-
te, hormigueo alrededor de la boca y periférico (Ca2+ plasmático). Tratamiento:
técnicas de relajación y respiración en una bolsa de papel (CO2 inspirado corrige
la alcalosis). NB: el paciente ansioso en urgencias con hiperventilación y alcalosis
respiratoria puede presentar una sobredosis de aspirina (p. 844).
Respiración de Cheyne-Stokes: La respiración se hace progresivamente más profunda, y
después progresivamente más superficial (± apnea episódica) en ciclos. Causas: lesiones
del tronco cerebral o compresión (accidente cerebrovascular, PIC). Si el ciclo es largo
(p. ej., 3 min), la causa puede ser un largo tiempo de circulación de pulmón a cerebro
(p. ej., en edema pulmonar crónico o gasto cardíaco). Es potenciado por los opioides.
ANTERIOR POSTERIOR
Apical Apical
Apical Apical
+
Posterior Posterior
r
erio
Anterior (Lóbulo
inferior) inferior)
Lingular
superior
Basal lateral
medial
ior
an Bas
Ba terio
an
sal r
Expansión
Nota de percusión
Resonancia vocal
Murmullo vesicular ± crepitantes CONSOLIDACIÓN
gruesos (con pectoriloquia
susurrante)
Tráquea + mediastino central
COLAPSO
Expansión ESPONTÁNEO
Nota de percusión NEUMOTÓRAX/
Sonidos de la respiración EXTENSIVO
Tráquea + mediastino desplazado (LOBECTOMÍA/
hacia el lado afectado NEUMONECTOMÍA)
Expansión TENSIÓN
Señal de percusión NEUMOTORÁCICA
Sonidos de la respiración (Véase fig. 16.43, p. 749
Tráquea + mediastino se desplaza para la imagen de
desde el lado afectado radiografía de tórax)
Expansión
Nota de percusión
Murmullo vesicular ± crepitantes FIBROSIS
Tráquea + mediastino central o
tirada hacia el área de fibrosis
Historia y exploración
• Escoliosis: Curvatura lateral (OHCS p. 674); Todos estos pueden causar un defecto
ventilatorio restrictivo.
Fig. 2.23. Pectus carinatum (pecho de paloma). Fig. 2.24. Pectus excavatum, pecho en
Esternón prominente de la hiperinflación pul- embudo o pecho hundido. A menudo es
monar, mientras que el tórax óseo todavía está asintomática, pero puede causar desplaza-
en desarrollo, p. ej., en el asma infantil crónica. A miento del corazón a la izquierda, y restric-
menudo se ve con el surco de Harrison, una ción de la capacidad ventilatoria ± atrapa-
deformidad en forma de surco causada por la miento aéreo leve. Asociaciones: escoliosis,
tracción del diafragma sobre su punto de unión Marfan, síndrome de Ehlers-Danlos.
con las costillas inferiores que se desplazan
hacia dentro. Esto generalmente tiene poco sig-
nificado funcional en términos de respiración,
pero puede tener efectos psicológicos significa-
tivos: véase el recuadro.
Dolor abdominal
El carácter depende de la causa subyacente. Ejemplos: irritación de la mucosa (gastritis 57
aguda), espasmo muscular liso (enterocolitis aguda), estiramiento capsular (congestión
hepática en IC), inflamación peritoneal (apendicitis aguda) y estimulación directa del ner-
vio esplácnico (extensión peritoneal retro del tumor). El carácter (constante o cólicos,
agudo o aburrido), la duración y la frecuencia dependen del mecanismo de producción.
La ubicación y distribución del dolor referido dependen del sitio anatómico. El tiempo tras-
Historia y exploración
currido del acontecimiento y los factores agravantes o de alivio tales como comidas, defe-
cación y sueño también tienen un significado especial relacionado con el proceso de la
enfermedad subyacente. El sitio del dolor puede proporcionar una pista:
• Epigástrico: Pancreatitis, gastritis/duodenitis, úlcera péptica, enfermedad de la vesícula
biliar, aneurisma aórtico.
• Cuadrante superior izquierdo: Úlcera péptica, cáncer gástrico o colónico (flexión esplé-
nica), rotura esplénica, absceso subfrénico o perinefrítico, renal (cólico, pielonefritis).
• Cuadrante superior derecho: Colecistitis, cólico biliar, hepatitis, úlcera péptica, cáncer de
colon (flexión hepática), renal (cólico, pielonefritis), absceso subfrénico/perinefrítico.
• Lomo: Tercio lateral de la espalda entre el tórax y la pelvis; se funde con el costado,
p. 565): Cólico renal, pielonefritis, tumor renal, absceso perinefrítico, dolor referido
desde la columna vertebral. Las causas del dolor en el flanco son similares (vea el índi-
ce para una lista más completa).
• Fosa ilíaca izquierda: Diverticulitis, vólvulo, cáncer de colon, absceso pélvico, enferme-
dad inflamatoria intestinal, patología de la cadera, cólico renal, infección del tracto uri-
nario (ITU), cáncer en testículos no descendidos; zóster: espere para la erupción!
(p. 454). Ginecológico: torsión de quiste ovárico, salpingitis, embarazo ectópico.
• Dolor en la fosa ilíaca derecha: Todas las causas del dolor de la fosa ilíaca izquierda, ade-
más de apendicitis e ileítis de Crohn, pero excluyendo por lo general la diverticulitis.
• Pélvico: Urológico: ITU, retención, piedras. Ginecológicas: menstruación, embarazo,
endometriosis (OHCS, p. 288), salpingitis, endometritis (OHCS, p. 274), torsión de quis-
tes ováricos.
• Generalizado: Gastroenteritis, síndrome del intestino irritable, peritonitis, estreñimiento.
• Central: Isquemia mesentérica, aneurisma abdominal, pancreatitis.
Recuerde el dolor referido: Infarto de miocardio epigastrio; patología pleural.
La distensión abdominal (masas y las «famosas cinco F»)
Los famosos «Cinco» de Enid Blyton pueden resolver cualquier problema de crimen o
diagnóstico usando metodologías de los años cincuenta impregnadas de interminables
vacaciones escolares, fiestas de medianoche cargadas de dulces y montones de cerveza
de jengibre casera.
Vamos a hablar del problema de la distensión abdominal. Los dulces y las bebidas utili-
zados por los Famosos Cinco realmente contribuyen a la distensión: la grasa (fat), el líqui-
do (fluid), las heces (faeces), la flatulencia (flatus) y el feto. Si usted piensa que es exage-
rado implicar a la cerveza de jengibre en la génesis de las criaturas, tenga en cuenta que
debido a que era casera, como la diversión, no había límite a sus poderes intoxicantes en
los veranos de aquellos viejos tiempos. Lo ideal es pensar en preguntar «¿Cuándo fue su
última menstruación?» siempre que se enfrente a un abdomen dilatado.
La flatulencia será resonante en la percusión. El fluido será mate y puede ser de asci-
tis (p. ej., cáncer o cirrosis: buscar sensación de opresión), vejiga distendida (no puede lle-
gar por debajo de ella) o un aneurisma aórtico (expansivo). Las masas pueden ser pél-
vicas (piense en fibromas uterinos u patología ovárica) o tumores de colon, estómago,
páncreas, hígado o riñón. También ver causas de ascitis con hipertensión portal (p. 604),
hepatomegalia (p. 61), esplenomegalia y otras masas abdominales (p. 604).
58 Síntomas gastrointestinales
Incontinencia fecal.
Esto es común en los ancianos. Haga todo lo posible para ayudarles, y consiga que se
impliquen los servicios sociales si lo cree necesario. La continencia depende de muchos
factores: función mental, heces (volumen y consistencia), anatomía (función del esfínter,
distensibilidad rectal, sensación anorrectal y reflejos). Los defectos en cualquier área pue-
den causar pérdida de continencia fecal.
Causas: A menudo es multifactorial. ¿Es un descuido fecal pasivo o pérdida de heces rela-
Historia y exploración
Tenesmo
Es la sensación de un recto con un vaciado incompleto después de la defecación. Es 59
común en el síndrome del intestino irritable (p. 266), pero puede ser causada por tumo-
res.
Regurgitación
Los contenidos gástricos y esofágicos se regurgitan sin esfuerzo en la boca sin contrac-
ción de los músculos abdominales y el diafragma (lo que lo distingue del verdadero vómi-
Historia y exploración
to). Puede empeorar al estar acostado, y puede causar tos y asma nocturna. La regurgi-
tación raramente es precedida por náuseas, y se debe al reflujo gastroesofágico, a menu-
do se asocia con acidez estomacal. Un divertículo esofágico puede causar regurgitación.
Las obstrucciones gastrointestinales muy altas (p. ej., el vólvulo gástrico, p. 611) causan un
vómito no productivo en lugar de una verdadera regurgitación.
Esteatorrea
Estas son heces pálidas que son difíciles de limpiar, y son causadas por la mala absorción
de grasa en el intestino delgado y por lo tanto un mayor contenido de grasa en las heces.
Causas: Enfermedad ileal (p. ej., resección de Crohn o ileal), enfermedad pancreática e
ictericia obstructiva (debido a la excreción de sales biliares de la vesícula biliar).
Dispepsia
La dispepsia y la indigestión (p. 252) son términos generales. La dispepsia se define como
la plenitud postprandial, o saciedad temprana (incapaz de terminar la comida) y/o dolor
epigástrico o retroesternal y también ardor. La «indigestión» notificada por el paciente
puede referirse a dispepsia, hinchazón abdominal, náuseas y vómitos. Trate de averiguar
exactamente lo que para su paciente significa y cuándo estos síntomas ocurren en rela-
ción con las comidas, p. ej., los síntomas clásicos de las úlceras pépticas ocurren 2-5 horas
después de una comida y con el estómago vacío. Busque síntomas de alarma (ver p. 248);
estos tienen un alto valor predictivo negativo. Si todos los pacientes con dispepsia se
someten a endoscopia, < 33% tienen hallazgos clínicamente significativos. El infarto de
miocardio puede presentarse como una «indisposición».
Halitosis
La halitosis (fetor oris, mal olor oral) es el resultado de la gingivitis (pocas veces severa
para causar la angina de Vincent, p. 712), la actividad metabólica de las bacterias en la
placa, o el sulfuro que produce putrefacción alimenticia, p. ej., en las cavidades gingivales
y las criptas tonsilares. Los pacientes a menudo pueden estar ansiosos y convencidos de
halitosis cuando no es real (y viceversa).
Factores contribuyentes:
Fumar, medicamentos (disulfuro, isosorbida), enfermedad pulmonar, resaca alcohólica.
Tratamiento:
Trate de eliminar anaerobios:
• Buena higiene dental, hilo dental, raspado de la lengua.
• Gluconato de clorhexidina acuoso al 0,2%.
La halitosis es muy común que surja en el dorso de la lengua y es secundaria a la sobre-
población de bacterias productoras de compuestos de azufre volátiles. Estas están rete-
nidas localmente y metabolizan aminoácidos que contienen azufre para producir sulfuro
de hidrógeno muy volátil y maloliente, además del metilmercaptano, que perpetúan la
enfermedad períodontal. Por la noche y entre las comidas, las condiciones son óptimas
para la producción de olores, así que comer regularmente puede ayudar. Tratar con una
buena limpieza mecánica/raspado con cepillos de la lengua o enjuagues bucales. Los pro-
ductos para el cuidado oral que contienen iones metálicos, especialmente Zn, inhiben la
formación de olores, se cree, debido a la afinidad del ion metálico con el azufre. Es posi-
ble medir el nivel de compuestos volátiles que contienen azufre en el aire de la boca
directamente por medio de un monitor portátil de sulfuro.
1. Inspección general
• Evaluar el estado general (mal/ bien
Historia y exploración
/caquexia)
• Pistas (cuenco de vómito, bolsas de
estoma, catéter, color de orina)
• Color (pálido, ictérico, urémico)
• ¿Índice de masa corporal? Fig. 2.25. Estoma.
• ¿Cicatrices en el abdomen? Estomas Reproducido a partir de MacKay G, et al.
(fig. 2.25)? (eds). Oxford Specialist Handbook of Colorectal
Pídale al paciente que levante la cabeza Surgery (2010), con autorización de Oxford
de la cama o tosa, buscando abultamien- University Press.
to, distensión o dolor
2. Manos
• Inspeccionar: Dedos en palillo de tam-
bor, coiloniquia, leuconiquia, líneas de
Muehrcke, eritema palmar, contractura
de Dupuytren (fig. 2.26), pigmentación
de los pliegues palmares
• Asterixis (Ver fig. 2.17, p. 50)
A = Supraclavicular
4. Cuello B = Triangulo posterior
• Examine los nódulos linfáticos cervical C = Cadena yugular
y supraclavicular (véase fig. 2.28) D = Preauricular
• PVY elevada en la sobrecarga de flui- E = Postauricular
dos (disfunción renal, disfunción hepá- F = Submandibular
tica), regurgitación tricuspídea (puede G = Submental
H = Occipital
causar hepatomegalia pulsátil)
• Cicatrices de catéteres tunelizados
para hemodiálisis (véase p. 303) u Fig 2.28. Nódulos cervicales y supracla-
viculares.
otros accesos venosos centrales Reproducción de Thomas J, et al. (eds). Oxford
Manual de Examen Clínico y Habilidades Prácti-
cas (2014), con autorización de Oxford Uni-
5. Cara versity Press.
• Piel y ojos: Ictericia, palidez conjuntival,
anillos de Kayser-Fleischer, xantelasma
(ver fig. 2.29), ojos hundidos (deshidra-
tación)
• Boca: Estomatitis angular, pigmenta-
ción, telangiectasia, úlceras, glositis Fig. 2.29. Xantelasma.
Historia y exploración
paciente esté al nivel de sus ojos. Pregunte si hay
algún dolor y examine esta última parte. Observe la
cara del paciente para detectar signos de incomodi-
dad. Palpar todo el abdomen.
• Palpación ligera: si provoca dolor, compruebe si
hay dolor de rebote. ¿Alguna tensión involuntaria
en los músculos («defensa»)? Ver p. 606.
• Palpación profunda para detectar masas
• Hígado: utilice el borde radial del dedo índice ali-
neado con el margen costal y comience la palpa-
ción desde la fosa ilíaca derecha. Presione hacia
abajo y pida al paciente que respire profunda-
mente. Continúe hacia arriba hacia el margen cos-
tal hasta que sienta el borde del hígado.
• Bazo: comience palpando en la fosa ilíaca derecha
y suba hacia el margen costal izquierdo pidiendo
al paciente que inspire profundamente y palpe
hasta notar el borde del bazo
• Riñones: para cada riñón, coloque una mano
detrás de la parte inferior de la espalda del
paciente, presione hacia abajo en el abdomen con
su otra mano «pelotee» el riñón con su mano
inferior contra la mano superior. A menos que el
paciente esté delgado o presente patología,
puede no ser palpable
• Aorta: se palpa la línea media superior al ombligo,
¿es expansiva? (Fig. 2.16, p. 79)
Percusión:
• Hígado: para mapear los bordes superior e infe-
rior del hígado
• Bazo: percutir desde el borde del bazo palpado,
alrededor de la línea axilar media Fig. 2.30. «Peloteo» de los
• Vejiga: si está agrandada, la región suprapúbica riñones.
será mate Reproducción de Thomas J, et al.
• Ascitis: matidez cambiante: percutir centralmente (eds). Oxford Manual de Examen
a lateralmente hasta matidez, mantenga su dedo Clínico y Habilidades Prácticas
en el punto mate y pida al paciente que se apoye (2007), con autorización de
en el lado opuesto. Si la tonalidad fuese fluida, esta Oxford University Press.
ahora se habrá movido por la gravedad y el área
previamente mate será resonante
Auscultación:
• Sonidos intestinales: Escuche por debajo del ombligo
• Soplos: Escuche por encima de la aorta y las arte-
rias renales (a cualquiera de los lados de la línea
media por encima del obligo)
Percusión
Confirme el borde inferior y defina el borde superior del hígado y el bazo (mate en la 63
línea axilar media en el 10º espacio intercostal). Pulse por todas las regiones del abdo-
men. Si esto induce dolor, puede haber inflamación peritoneal debajo (p. ej., un apéndi-
ce inflamado). Algunos expertos percuten primero, antes de la palpación, porque inclu-
so los pacientes ansiosos no esperan que esto lastime, así que si le duele, este es un signo
muy valioso. Percutir para observar la oscilación cambiante de la ascitis (p. 61 y 604), aun-
Historia y exploración
que el ultrasonido es la forma más fiable de detectar la ascitis.
Auscultación
Los sonidos intestinales: la ausencia implica íleo; están realzados y con un tintineo en obs-
trucción intestinal. Escuche buscando soplos en la aorta, arterias renales y femorales.
Examen adicional. Compruebe las hernias (p. 612), realice un tacto rectal.
Exploración del recto y el ano
䊳 Es necesaria la presencia de un acompañante durante el examen. Explique lo que
va a hacer. Asegúrese de que las cortinas estén extendidas. Pida al paciente que se
acueste sobre su lado izquierdo, con las rodillas hacia el pecho. Utilice guantes y
lubricante. Parta de las nalgas e inspeccione el ano: • Un ano abierto sugiere una
neuropatía o megarectum. • Simetría (una protuberancia unilateral blanda sugiere un
absceso). • Prolapso hemorroidal. • Puede aparecer un coágulo subanodemal. • Pro-
lapso del recto (descenso > 3 cm cuando se le pide que se esfuerce, como si fuera
a defecar). • Anodermatitis (de suciedad frecuente). El reflejo ano-cutáneo evalúa la
inervación sensitiva y motora; al acariciar ligeramente la piel anal, ¿se contrae el esfín-
ter externo externamente?
Presione con su dedo índice contra el lado del ano. Pida al paciente que respire pro-
fundamente e inserte su dedo lentamente. Reconozca las masas (las hemorroides
no son palpables) o heces impactadas. Gire el brazo para que la yema de su dedo
sienta la cara anterior. Palpe el cuello uterino o la próstata. Observe la consistencia,
el tamaño y la simetría de la próstata. Si hay incontinencia fecal o preocupación por
la médula espinal, pídale al paciente que haga una contracción para apretar el dedo
y observe el tono. Esto se hace mejor con la yema de dedos hacia el lado posterior.
Observe las heces o la sangre en el guante y compruebe la sangre oculta.
Limpie el ano. Considerar la proctoscopia (para el ano) o la sigmoidoscopia (que
principalmente inspecciona el recto).
Causas de la hepatomegalia
Para la hepatoesplenomegalia, vere p. 604.)
Neoplasias: Metastásica o primaria (generalmente borde escarpado, irregular).
Congestión hepática: La insuficiencia cardíaca derecha puede ser pulsátil en la incom-
petencia tricúspide, trombosis de la vena hepática (síndrome de Budd-Chiari, p. 696).
Anatómico: Lóbulo de Riedel (variante normal).
Infección: Mononucleosis infecciosa (fiebre glandular), virus de la hepatitis, malaria,
esquistosomiasis, absceso amebiano, quiste hidatídico.
Hematológico: Leucemia, linfoma, trastornos mieloproliferativos (p. ej., mielofibrosis),
anemia falciforme, anemias hemolíticas.
Otros: Hígado graso, porfiria, amiloidosis, trastornos del almacenamiento de glucógeno.
Esplenomegalia
• Bazo anormalmente grande.
Causas: Véase p. 604. Si es masivo, piense en: leucemia mieloide crónica, mielofi-
brosis, malaria (o leishmaniasis).
Síntomas de presentación
• Dolor de cabeza: (p. 456 y 780.) ¿Diferente a los dolores de cabeza usuales? ¿Crónico o agudo?
¿Velocidad de inicio? ¿Único caso o recurrente? ¿Unilateral/bilateral? Síntomas asociados (p. ej.,
aura con migraña, p. 458)? ¿Cualquier meningitis (p. 822)? ¿Peor al despertar (aumento de PIC)?
¿Disminución del nivel de conciencia? 䊳 Tome muy en serio cualquier cefalea que es «peor que
nunca». (Ver pág. 749)
• Debilidad muscular: (p. 466.) ¿Qué velocidad tiene al iniciar la marcha? ¿Qué grupos musculares
están afectados? ¿Hay pérdida sensorial? ¿Hay alguna alteración del esfínter? ¿Hay pérdida del
equilibrio? ¿Hay un dolor en la columna vertebral asociado?
• Alteración visual: (OHCS, p. 410.) p. ej., visión borrosa, visión doble (diplopía), fotofobia, pérdida visual.
¿A qué velocidad ha sucedido? ¿Algún síntoma anterior? ¿Dolor en los ojos?
• Modificaciones en otros sentidos: ¿Audición (p. 464), olor, gusto? Las anomalías no siempre se
deben a una enfermedad neurológica, considere la enfermedad otorrinolaringológica.
• Mareos: (p. 462.) ¿Ilusión de que el entorno está en movimiento (vértigo)? ¿Pérdida auditiva/tin-
nitus? ¿Alguna pérdida de conciencia? ¿Es posicional?
• Trastornos del habla: (p. 86.) ¿Dificultad en la expresión, articulación o comprensión (puede ser
difícil de determinar)? ¿Aparición súbita o gradual?
• Disfagia: (p. 250.) ¿Sólidos y/o líquidos? ¿Es intermitente o constante? ¿Tiene dificultad en la
coordinación? ¿Doloroso (odinofagia)?
• Síncopes/desmayos/mareos/movimientos involuntarios: (p. 468.) ¿Con qué frecuencia? ¿Qué dura-
ción tiene? ¿Cómo comienza? ¿Fases de aura? ¿Pérdida de consciencia? ¿Se ha mordido la len-
gua? ¿Incontinencia? ¿Le queda alguna debilidad/confusión residual? Antecedentes familiares.
• Sensaciones anormales: p. ej., entumecimiento, «pinchazos de agujas» (parestesias), dolor, sensa-
ciones extrañas. ¿Cómo se distribuye? ¿A qué velocidad se inició? ¿Debilidad asociada?
• Temblor: (p. 65.) ¿Rápido o lento? ¿Presente en descanso? ¿Empeora en el movimiento delibe-
rado? ¿Toma -agonistas? ¿Algún problema con la tiroides? ¿Alguna historia familiar? ¿Fascicula-
ciones?.
Estado cognitivo. Si hay alguna duda sobre la cognición del paciente, se deben realizar prue-
bas cognitivas. Hay una serie de herramientas que incluyen MMSE (sujeto a estricto derecho de
autor), GPCOG,TYM y 6-CIT. El test mental abreviado (AMTS, por sus siglas en inglés) es un cues-
tionario de detección de deterioro cognitivo:
1. Diga al paciente una dirección para recor- Una puntuación de 6 sugiere un mal estado
dar al final (p. ej., 42 West Street) cognitivo, agudo (delirio) o crónico (demencia).
2. Edad AMTS se correlaciona bien con el Mini-Mental
3. ¿Qué hora es (a la hora más cercana)? State Examination (MMSE®) más detallado NB:
4. ¿Qué año es? los pacientes sordos, disfásicos, deprimidos y no
5. Reconocer a 2 personas (p. ej., doctor y cooperativos, así como aquellos que no entien-
enfermera) den inglés, también obtendrán puntuaciones
6. Saber su fecha de nacimiento bajas13 (prueba TYM: Véase p. 85).
7. Saber algún dato de la Segunda Guerra
Mundial
8. Nombre del actual monarca o primer
ministro
9. ¿Dónde estás ahora? (¿Qué hospital?)
10. Contar hacia atrás del 20 al 1
Historia médica pasada. Pregunte sobre meningitis/encefalitis, traumatismo de cabeza/colum-
na vertebral, convulsiones, operaciones previas, factores de riesgo de enfermedad vascular (p. 470,
FA, hipertensión, hiperlipidemia, diabetes, tabaquismo) y viajes recientes, especialmente destinos
exóticos. ¿Existe alguna posibilidad de que la paciente esté embarazada (eclampsia, OHCS p. 48)?.
Historial farmacológico. ¿Cualquier medicamento anticonvulsivo/antipsicótico/ antidepresivo?
¿Cualquier droga psicotrópica (p. ej., éxtasis)? ¿Cualquier medicamento con efectos secundarios
neurológicos (p. ej., isoniazida que puede causar una neuropatía periférica)?.
Historia social y familiar. ¿Qué puede o no hacer el paciente, es decir, de las actividades de
la vida diaria (AVD)? ¿Cuál es la puntuación del Índice de Barthel? ¿Alguna historia familiar
de enfermedad neurológica o psiquiátrica? ¿Alguna consanguinidad? Considere la historia sexual,
p. ej., sífilis.
Calambres
Esto es espasmo muscular doloroso. Los calambres en las piernas son comunes durante 65
la noche o después de un ejercicio intenso, y en pacientes con insuficiencia renal o en
diálisis. El calambre puede significar una depleción del sodio, y rara vez: isquemia muscu-
lar (claudicación, DM), miopatía (McArdle, p. 704) o distonía (calambre del escritor,
p. 469). Los calambres del antebrazo sugieren enfermedad de las motoneuronas. Los
calambres nocturnos pueden responder al bisulfato de quinina 300 mg por la noche VO.
Fármacos que causan calambres: Diuréticos (? Reducción del K+), domperidona, salbu-
Historia y exploración
tamol/terbutalina IV, IECA´s, telmisartán, celecoxib, lacidipina, alcaloides del cornezuelo de
centeno, levotiroxina.
Parestesia
«Alfileres y agujas», entumecimiento/hormigueo, que puede dañar o quemar (disestesia).
Causas:
Metabólico: Ca2+ (perioral); aumento Pa CO2; mixedema; neurotoxinas (picadura de
garrapata). Vascular: 䊳䊳 embolia arterial, Raynaud, TVP, alta viscosidad plasmática. Anti-
cuerpo mediador, paraneoplásico; LES; ITP. Infección, rara: enfermedad de Lyme; rabia.
Medicamentos (IECA). Cerebro, lesiones tálamo-parietales. Columna vertebral, EM; mieli-
tis/VIH; B12; 䊳䊳 fractura lumbar plexopatía/mononeuropatía (ver p. 502), vértebra cervical,
túnel carpiano; ciática. Neuropatía periférica, manguito y media, p. 504, p. ej., DM; ERC. Si
es paroxística, migraña; epilepsia; feocromocitoma. Si es viajero el paciente, haga un histo-
rial de sus viajes, considere la posibilidad de una infección, p. ej., estrongiloides.
Temblor
El temblor es una oscilación rítmica de las extremidades, tronco, cabeza o lengua. Hay
tres tipos:
1. Temblor en reposo –peor en reposo– p. ej., del parkinsonismo (± bradicinesia y rigidez,
el temblor es más resistente al tratamiento que otros síntomas). Por lo general es un
temblor lento (frecuencia de 3-5 Hz), típicamente «circular» del pulgar sobre un dedo.
2. Temblor postural –peor si los brazos están extendidos. Típicamente rápido (8-12 Hz).
Puede ser un temblor fisiológico exagerado (p. ej., ansiedad, hipertiroidismo, alcohol,
drogas), debido a daño cerebral (p. ej., enfermedad de Wilson, sífilis) o temblor esen-
cial benigno (TEB). Es el temblor de brazos y cabeza familiar más habitual (autosómi-
co dominante) y se muestra a cualquier edad. Puede ocurrir el fenómeno de la rueda
dentada pero no hay bradicinesia. Es suprimido por el alcohol, y los pacientes pueden
automedicarse en lugar de admitir el problema. Raramente progresivo (a menos que
el inicio sea unilateral). Propranolol (40-80 mg/8-12 h VO) puede ayudar, pero no en
todos los pacientes.
3. Temblor intencional –peor con el movimiento, visto en la enfermedad cerebelosa, con
prueba past-pointing positivo y disdiadococinesia (ver p. 499). No se ha encontrado
ningún medicamento efectivo.
Dolor facial
El SNC como causante: la migraña, neuralgia del trigémino o glosofaríngeo (p. 457) o de
cualquier otra estructura sensible al dolor en la cabeza o del cuello. Neuralgia post-her-
pética: el dolor punzante y quemazón que involucra a dermatomas afectados por el her-
pes zóster (p. 404); puede afectar a los nervios craneales V y VII en la cara. Con dema-
siada frecuencia se vuelve crónica e intratable (la piel afectada es extraordinariamente
sensible). El tratamiento es difícil. Siempre se necesita un fuerte apoyo psicológico. Se
aconseja la estimulación nerviosa transcutánea, el ungüento de capsaicina y un anestési-
co local infiltrante. Los agentes neuropáticos del dolor, como la amitriptilina, p. ej.,
10-25 mg/24 h por la noche, o la gabapentina (p. 504) pueden ayudar. Nota: el famci-
clovir o el valaciclovir administrado en el herpes agudo puede duración de la neuralgia.
Causas vasculares y no neurológicas:
• Cuello: enfermedad cervical del cuello.
• Hueso/senos: sinusitis ósea/senos paranasales; neoplasia.
• Ojos: glaucoma ocular; iritis; celulitis orbital; fatiga visual; malformación arteriovenosa.
• Articulación temporomandibular: artritis de la articulación temporomandibular o disfun-
ción idiopática (común).
• Dientes/encías: caries; dientes rotos; absceso; maloclusión.
• Oido: otitis media; otitis externa.
• Vascular/vasculitis: fístula vascular/vasculitis arteriovenosa; aneurisma; o malformación
arteriovenosa en el ángulo cerebelopontino; arteritis de células gigantes; LES.
cómodamente al paciente, sentarlo en 45° y descubrirle los brazos. El orden del examen
debe ser inspección, tono, potencia, reflejos, coordinación, percepción.
1. Inspección general
Postura anómala, asimetría, movimientos anor-
males (fasciculación/temblor/distonía/atetosis),
atrofia muscular (especialmente pequeños
músculos de la mano) ¿simétrico/asimétrico?
¿Local/general?.
2. Tono
Pida al paciente que «relaje y se quede flácido
como una muñeca de trapo». Pregunte si el
paciente tiene dolor en las manos, el brazo o el
hombro antes de flexionar y extender la extre-
midad mientras se prona y supina el antebrazo.
¿Tiene alguna espasticidad o rigidez?.
3. Potencia
Pídale al paciente que adopte cada posición
siguiendo sus órdenes mientras usted como
examinador estabiliza la articulación y analiza
el grado de fuerza que desarrolla en función
del nivel de resistencia que usted le opone
(ver RECUADRO «Graduación del nivel de debi-
lidad muscular» en p. 446). Pruebe cada grupo
muscular bilateralmente antes de pasar a la
siguiente posición.Véase p. 452-3 para los mio-
tomos.
• «Encoja los hombros y no me deje empu-
jarlos hacia abajo; empuje sus brazos hacia
afuera contra mí; intente meterlos de
nuevo».
• «Levante los brazos así y tire de mí hacia
usted, ahora empújeme lejos.»
• Sostenga su mano completamente extendi-
da, y no me deje empujarla hacia abajo;
ahora no me deje empujarla hacia arriba.
• Ofrézcale al paciente dos de sus dedos (cru-
zados) y pídale que los apriete todo lo que
pueda.
• Pida al paciente que extienda sus dedos y
que le pare cuando usted los empuje hacia
atrás, y luego entregue al paciente un peda-
zo de papel para agarrar con dos dedos.
Usted, como examinador, debe sujetar el
papel con los dedos correspondientes
mientras pide al paciente que «agarre el
papel y no me deje tirar de él».
4. Reflejos 67
Para cada reflejo, pruebe a la derecha, luego a
la izquierda y compare. Si está distraído, inten-
te provocarle con «un refuerzo» pidiendo al
paciente que apriete los dientes a la de tres,
mientras le golpea (maniobra Jendrassik).
¿Están los reflejos ausentes/presentes
Historia y exploración
(con refuerzo)/normal/enérgicos/exagerados?
• Bíceps (C5,6) • Tríceps (C7) • Supinador (C6)
5. Coordinación
Sosteniendo su dedo delante del paciente,
dígale «toque mi dedo y luego su nariz ... tan
rápido como pueda«. Busque el temblor inten-
cional y past pointing.
• Prueba de la disdiadococinesia: Pida al pacien-
te que repita el pronado y la supinación del
antebrazo, tocando las manos cada vez.
Pruebe ambas extremidades. Tal vez usted
deba hacer una demostración. La falta de
movimientos alternados rápidos es disdia-
dococinesia.
• Prueba de la desviación de la pronación: Con
los ojos del paciente cerrados y los brazos
Vista extendidos, toque hacia abajo en sus palmas
dorsal de las manos situadas hacia arriba y busque
un fracaso para mantener la supinación.
6. Sensación
• Toque suave: Use algodón, toque (no frote)
al esternón primero «esto es lo que debería
sentirse, dígame dónde lo siente y si se sien-
te diferente». Proceda con algodón en
todos los dermatomos (ver pág. 458), com-
parando izquierda y derecha.
• Pinchar con un alfiler: Repita lo anterior utili-
zando un alfiler neurológico, pidiendo al
paciente que le diga si se siente agudo o mate.
• Temperatura: Repetir como se indica arriba,
alternando sondas calientes y frías.
• Vibración: Utilizando un diapasón de 128 Hz
(128 vibraciones!), confirme con el paciente
que puede «sentir un zumbido» al colocar el
diapasón en su esternón. Proceda a la prue-
ba en la prominencia ósea más distal y mué-
Fig. 2.31. Dermatomas sensoriales. vase proximalmente colocando la bifurca-
Tomado de Harrison (edit.) Revision ción en la prominencia ósea y luego dete-
Notes for MCEM Part A (2011), con auto- niéndola con los dedos. Pida al paciente que
rización de Oxford University Press. le diga cuándo se detiene el zumbido.
• Propiocepción: Con los ojos cerrados del
paciente, sujete la falange distal del dedo
índice a los lados, no en la parte superior.
Estabilizar el resto del dedo. Flexionar y
extender la articulación, deteniéndose a
intervalos para preguntar si la punta del
dedo está hacia arriba o hacia abajo.
2. Tono
Pida al paciente que «relaje y se quede flácido como una
muñeca de trapo». Pregunte si tiene algún dolor en los pies,
las piernas o las caderas antes de flexionar y extender pasiva-
mente cada extremidad mientras están girando internamente
y externamente. Sostenga la rodilla del paciente y ruédela de
lado a lado. Ponga su mano detrás de la rodilla y levántela rápi-
damente. El talón debe levantar levemente de la cama si el
tono es normal. ¿Alguna espasticidad/rigidez?
Clonus: (fig. 2.31) Flexión plantar del pie luego rápidamente
dorsiflexión y mantener. Más de 3 «golpes« de flexión plantar
es clonus sostenido y es anormal. El clonus también puede ser
provocado por la rótula con un rápido movimiento hacia
abajo de esta. La hipertonía y el clonus sugieren una lesión de
la neurona motora superior.
3. Reflejos
Para cada reflejo, compruebe a la derecha, luego a la izquier-
da y compare. Si están ausentes, trate de obtenerlos con un
»refuerzo». Decidir si los reflejos están ausentes/presentes
(con refuerzo)/normal/vigoroso/exagerado.
• Rodilla: (L3,4.) Golpee el tendón de la rótula, justo debajo de
la rótula.
• Tobillo: (L5, S1.) Varios métodos aceptados; idealmente pedir al
paciente que doble ligeramente la rodilla, luego dejarlo lateral-
mente, agarrar el pie y pedirle una dorsiflexión, luego golpear
el tendón de Aquiles. Si la movilidad está limitada por dolor en
la cadera, realice la dorsiflexión del pie con una pierna recta y
golpee en su su mano, tratando de sentir un tirón de tobillo.
• Reflejos plantares: (L5, S1, S2.) Acariciar la planta del pie del
paciente con un bastón de color naranja o similar. El reflejo
normal es el movimiento descendente del dedo gordo. El
signo de Babinski es positivo si hay dorsiflexión del dedo
gordo (esto es anormal (lesión de la neurona motora supe-
rior) si el paciente tiene una edad > 6 meses).
4. Potencia 69
Pídale al paciente que adopte la posición y que siga sus órde-
nes mientras usted como examinador se opone a los movi-
mientos del paciente para observar si es apropiada y así poder
calificar su fuerza (p. 446). Pruebe cada grupo muscular bilate-
ralmente antes de pasar a la siguiente posición. Ver p. 452-3
para los miotomos.
Historia y exploración
• Flexión de cadera: «Manteniendo la pierna recta, puede levan-
tar la pierna de la cama, no me deje empujarla hacia abajo».
• Extensión de la cadera: «Y ahora usando su pierna, empuje
mi mano en la cama».
• Abducción de cadera: Coloque las manos en los muslos exte-
riores, «empuje las piernas hacia los lados».
• Aducción de la cadera: Coloque las manos en el interior de
los muslos y empuje las piernas juntas.
• Flexión y extensión de la rodilla: «Doble su rodilla y traiga su
talón hacia su glúteo, no me deje separarlo... y ahora extien-
da su pierna e intente alejarme de usted».
• Flexión plantar del tobillo: Con la mano en la parte inferior
del pie del paciente pídale que «doble el pie hacia abajo,
empujando mi mano».
• Dorsiflexión del tobillo: Ponga su mano sobre el dorso del pie
y pídale que «levante el pie, señale el techo con los dedos
de los pies, no me deje empujar el pie hacia abajo».
5. Coordinación
Prueba de talón: Colocando su dedo en la espinilla del pacien-
te, indíquele que «ponga el talón justo debajo de la rodilla y
luego deslícelo suavemente por la espinilla, levántelo y coló-
quelo en la rodilla. Otra vez», etc. Repita en el otro lado. Tam-
bién, rápidamente, golpee alternativamente las manos con el
paciente acostado.
6. Sensación
Miembros superiores (p. 67).
Fig. 2.32. Dermatomas de • Toque ligero: Dermatomos del miembro inferior (p. 454).
los miembros inferiores. • Pinchazo
Tomado de Harrison (edit.) • Temperatura
Revision Notes for MCEM Part • Vibración
A (2011), con autorización de • Sentido de la posición de la articulación: Con los ojos del
Oxford University Press. paciente cerrados, sujete la falange distal del dedo gordo a
los lados. Estabilizar el resto del pie. Muévale la articulación
hacia arriba y dígale al paciente «¿está hacia arriba?», y des-
pués bájela, preguntándole «¿está abajo?». Flexionar y exten-
der la articulación, deteniéndose a intervalos para preguntar
si el dedo está hacia arriba o hacia abajo.
Historia y exploración
pérdida visual (escotomas, p. ej., en glaucoma). Ceguera monocular: lesiones de un
ojo o nervio óptico, p. ej., EM, arteritis de células gigantes. Ceguera bilateral: cualquier
causa de mononeuritis, p. ej., diabetes, EM; raramente metanol, neurosífilis. Defectos
en el campo –hemianopia bitemporal– compresión del quiasma óptico, p. ej., ade-
noma hipofisario, craneofaringioma, aneurisma de la arteria carótida interna (fig. 1,
p. 451). Hemianopia homónima: afecta a la mitad del campo visual contralateral a la
lesión en cada ojo. Las lesiones se encuentran más allá del quiasma en las vías, radia-
ción, o corteza occipital, p. ej., accidente cerebrovascular, absceso, tumor. Neuritis
óptica (dolor en los ojos en movimiento, pérdida de la visión central, defecto pupi-
lar relativo aferente, edema de los discos por papilitis5): causas de desmielinización
(p. ej., EM); raramente sinusitis, sífilis, trastornos vasculares del colágeno. Papilopatía
isquémica: edema del disco óptico debido a estenosis de la arteria ciliar posterior
(p. ej., en la arteritis de células gigantes). Papiledema (discos bilateralmente edema-
tosos, fig. 3, p. 560), más frecuentemente por PIC (tumor, absceso, encefalitis, hidro-
cefalia, hipertensión intracraneal idiopática); más rara: lesión retroorbitaria (p. ej.,
trombosis del seno cavernoso, p. 480). Atrofia óptica (discos ópticos pálidos y agu-
deza reducida): EM; tumores frontales; ataxia de Friedreich; retinitis pigmentaria; sífi-
lis; glaucoma; atrofia óptica de Leber; compresión crónica del nervio óptico.
• IIIc: Soloc: causas «médicas» (preservación pupilar): diabetes; HTN; arteritis de célu-
las gigantes; sífilis; idiopáticas. Causas «quirúrgicas» (compromiso temprano de la
pupila debido a la compresión externa de las fibras parasimpáticas que dañan los
nervios): aneurisma de la arteria comunicante posterior (+ cirugía) PIC (si una
hernia uncal a través del tentorium comprime el nervio); tumores.
• IVc: Solo: rara y generalmente debido a un traumatismo en la órbita.
• Vc:: Sensorial: neuralgia del trigémino sensorial (dolor pero sin pérdida sensorial,
p. 457); herpes zóster, cáncer nasofaríngeo, neuroma acústico (p. 462). Motora: rara.
• VIc: Sola: EM, encefalopatía de Wernicke, signo falso de localización en PIC, ictus
pontino (se presenta con pupilas pequeñas fijas ± quadriparesia).
• VII: MNI: parálisis de Bell (p. 500), polio, otitis media, fractura de cráneo; tumores de
ángulo cerebelo-pontino, p. ej., neuroma acústico, tumores parotídeos malignos, her-
pes zóster (síndrome de Ramsay Hunt, p. 501, OHCS, p. 652). MNS (respeta la frente
debido a su representación cortical bilateral), accidente cerebrovascular, tumor.
• VIII: (p. 462 y 464.) Daño por ruido, enfermedad de Paget, enfermedad de Méniè-
re, herpes zóster, neuroma acústico, ictus del tronco encefálico, fármacos (p. ej.,
aminoglucósidos).
• IX, X, XI: trauma, lesiones del tronco encefálico, tumores del cuello.
• XII: es raro. Polio, siringomielia, tumor, ictus, parálisis bulbar, trauma, TB.
Grupos de nervios craneales:
VIII, entonces V, VI, IX y X: tumores del ángulo cerebelo-pontino, p. ej. neuroma acús-
tico (p. 462, la debilidad facial no es un signo destacado). III, IV y VI: accidente cere-
brovascular, tumores, encefalopatía de Wernicke; aneurismas, EM. III, IV, Va y VI: trom-
bosis del seno cavernoso, lesiones superiores de la fisura orbital (síndrome de Tolo-
sa-Hunt, OHCS, p. 654). IX, X y XI: lesión del foramen yugular. ⌬⌬: miastenia gravis,
distrofia muscular, distrofia miotónica, mononeuritis múltiple (p. 502).
4 Recuerde que la causa más común de ceguera monocular o binocular no es una lesión del nervio
craneal, sino un problema del propio ojo (cataratas, problemas retinianos). Los trastornos neurológicos
causan más comúnmente la pérdida de una parte del campo visual.
5 Edema unilateral del disco óptico = papilitis, papilitis bilateral/edema del disco = papiledema. ¡Com-
pruebe ambos ojos!.
c = estructuras que pasan a través del seno cavernoso; Ver RECUADRO «Síntomas psiquiátricos», p. 89.
NB: Va es la única división de V que lo hace.
P = Recuerde que estos nervios craneales llevan las fibras parasimpáticas. Las fibras simpáticas se ori-
ginan de la cadena torácica y acompañan al sistema arterial para distribuirse a lo largo del cuerpo
(véase también OHCS, fig. 9.6, p. 621).
Pupilas contraídas: Edad avanzada, daño al nervio simpático (Horner’s, p. 702 y ptosis,
p. 73), opiáceos, mióticos (gotas de pilocarpina para el glaucoma), daño pontino.
Pupilas desiguales (anisocoria): Puede deberse a una lesión unilateral, gotas oculares, ciru-
gía ocular, sífilis, o pupila de Holmes-Adie. Alguna desigualdad es normal.
Reacción a la luz: Prueba: cubrir un ojo y encender la luz en el otro oblicuamente. Ambas
pupilas deben contraerse, una directa, otra por reflejo luminoso consensual (fig. 2.33). El
sitio de la lesión se deduce conociendo la vía: desde la retina el mensaje pasa por el ner-
vio óptico (PCII) hasta el colículo superior (mesencéfalo) y desde allí a los núcleos del
PCIII de ambos lados. El III nervio craneal causa constricción pupilar. Si una luz en un ojo
causa solo constricción contralateral, el defecto es «eferente», ya que las vías aferentes
de la retina que se estimula deben estar intactas. Prueba de defecto pupilar aferente rela-
tivo: mover la luz rápidamente de una pupila a la otra. Si se ha producido un daño incom-
pleto en la vía aferente, la pupila afectada se dilatará paradójicamente cuando la luz se
traslada del ojo normal al ojo dañado. Esto se debe a que, ante un impulso aferente redu-
cido en el ojo afectado, predomina la respuesta de relajación pupilar consensual del ojo
normal. Este es el signo de Marcus Gunn, y puede ocurrir después de la recuperación apa-
rente completa de la lesión inicial.
Reacción de acomodamiento/convergencia: Si el paciente observa primero un dedo lejano
del doctor y luego este a unos cuantos centímetros, los ojos se contraerán y las pupilas
se contraerán. Las fibras aferentes de cada nervio óptico pasan a los cuerpos genicula-
dos laterales. Los impulsos luego pasan al núcleo pretectal y después a los núcleos para-
simpáticos de los III pares craneales, causando la constricción pupilar.
• Pupila (miotónica) de Holmes-Adie: La pupila afectada normalmente está moderada-
mente dilatada y es poco reactiva a la luz, si es que lo hace. Es lentamente reactiva a
la acomodación; espere y mire atentamente: puede llegar a contraer más que una pupi-
la normal. A menudo se asocia con reflejos disminuidos o ausentes del tobillo y la rodi-
lla, en cuyo caso el síndrome de Holmes-Adie está presente. Por lo general, una hallaz-
go benigno incidental. Causas raras: enfermedad de Lyme, sífilis, parvovirus B19, VHS,
autoinmunidad. Más frecuente en mujeres que en hombres.
• Pupila de Argyll Robertson: Esto ocurre en la neurosífilis. La pupila está contraída y no
es reactiva a la luz, pero reacciona a la acomodación. Otras posibles causas: enferme-
dad de Lyme; VIH; zóster; diabetes mellitus; sarcoidosis; SRA; paraneoplásico; B12. El
iris puede estar irregularmente atrofiado, irregular y despigmentado. El sitio de la lesión
no siempre está cerca del núcleo de Edinger-Westphal o incluso en el mesencéfalo. En
el síndrome de Parinaud (p. 708) se producen papilas de pseudo-Argyll Robertson.
• Pupila de Hutchinson: Esta es la secuencia de eventos que resultan del aumento rápido
de la presión unilateral intracraneal (p. ej., en la hemorragia intracerebral). La pupila del
lado de la lesión primero se contrae y luego se dilata ampliamente. La otra pupila pasa
después por la misma secuencia. 䊳 Ver p. 830.
Historia y exploración
derecho ción, causando debilidad en la
Al recto aducción del ojo ipsilateral con
lateral nistagmo del ojo contralateral
Lesión del izquierdo solo cuando se abduce. Puede
fascículo haber una abducción incompleta
longitudinal o lenta del ojo ipsilateral durante
medio derecho la mirada lateral. La convergencia
se conserva. Causas: EM o vascu-
lar (rara vez: VIH, sífilis, enferme-
Centro Centro dad de Lyme, tumores del tron-
para para
la mirada la mirada co encefálico, toxicidad por feno-
lateral lateral tiazina).
Ptosis
Caída del párpado superior. Se observa mejor con el paciente sentado, con la cabe-
za sostenida por el examinador. El nervio oculomotor (PC III) inerva al músculo prin-
cipal afectado (elevador palpebral), pero los nervios de la cadena simpática cervical
inervan el músculo tarsal superior y una lesión de estos nervios causa ptosis leve
que puede superarse al levantar la vista. Causas:
1. Las lesiones del PC III causan ptosis completa unilateral: buscar otra evidencia
de lesión del PC III: oftalmoplejia con desviación hacia abajo y hacia fuera del
ojo, pupila dilatada y no reactiva frente a la luz o acomodación. En caso de dolor
ocular también, infiltración sospechosa (p. ej., por linfoma o sarcoidosis). Si Tª
o conciencia, sospecha de infección (¿cualquier picadura de garrapata?).
2. Parálisis simpática generalmente causa ptosis parcial unilateral. Busque otra evi-
dencia de una lesión simpática, como en el síndrome de Horner (p. 702): pupi-
la estrechada es igual a miosis, falta de sudoración en el mismo lado de la cara
(= anhidrosis).
3. Miopatía, p. ej., distrofia miotónica, miastenia gravis (causa ptosis parcial bilateral).
4. Congénita; generalmente parciales y sin otros signos del SNC.
Pérdida de visión
䊳 Obtenga ayuda oftalmológica. Véase OHCS p. 434-455. Considerar:
• ¿Tiene el ojo rojo? (Glaucoma, uveítis, p. 561.)
• ¿Dolor? Arteritis de células gigantes: cefalea temporal severa, claudicación de la
mandíbula, tensión del cuero cabelludo, VSG: 䊳 esteroides urgentes (p. 556). Neu-
ritis óptica: p. ej., en la EM.
• ¿Está la córnea nublada: úlcera corneal (OHCS, p. 435), glaucoma (OHCS, p. 433)?
• ¿Existe un problema de lentes de contacto (infección)?
• ¿Hay flashes o moscas flotantes? (TIA, migraña, desprendimiento de retina?).
• ¿Existe algún problema en el campo visual (accidente cerebrovascular, ocupación
del espacio, glaucoma)?
• ¿Hay signos focales del SNC?
• ¿Alguna enfermedad cardíaca valvular/soplos carotideos (embolia)? ¿Hiperlipide-
mia (p. 690)?
• ¿Existe un defecto pupilar aferente relativo (p. 72)?
• Cualquier antecedente de trauma, migraña, hipertensión, enfermedad cerebro-
vascular, EM, diabetes o enfermedad del tejido conectivo.
• Cualquier signo distante: p. ej., ¿VIH (causa retinitis), LES, sarcoidosis?
Súbito: • Glaucoma agudo • Desprendimiento de retina • Hemorragia vítrea (p. ej.,
en retinopatía proliferativa diabética) • Oclusión de la arteria o vena central de la
retina • Migraña • SNC: TIA (amaurosis fugaz), accidente cerebrovascular, lesión ocu-
pante de espacio • Neuritis óptica (p. ej., EM) • Arteritis temporal • Medicamentos:
quinina/metanol • Apoplejía pituitaria.
Gradual: • Atrofia óptica • Glaucoma crónico • Cataratas • Degeneración macular
• Ambliopía del tabaco.
Piel
En la palma y el dorso comience por inspeccionar
la piel para:
1. Color: Pigmentación de pliegues, ictericia, eri-
tema palmar (fig. 2.44).
2. Consistencia: Rígida (esclerodactilia), gruesa
(DM, acromegalia) (fig. 2.39).
3. Lesiones características: Infartos de pulpa,
erupciones cutáneas, púrpura, angioma de
araña, telangiectasia, tofos (masa de origen
gotoso) (fig. 2.35), cicatrices (p. ej., liberación Fig. 2.35. Tofo de origen goto-
del túnel carpiano). so.
Uñas
Busque los mismos cambios de piel
que en la palma, además de xantomas
tendinosos, placas y cicatrices de
reemplazo de articulaciones, y exami-
ne las uñas para:
• Fóvea y onicólisis (p. 76).
• Dedos en palillo de tambor (p. 77).
• Infartos en el pliegue de las uñas y
hemorragias en astillas.
• Otras lesiones, p. ej., líneas de Beau
(fig. 2.41, p. 76), coiloniquia, leuconi- Fig. 2.36. Leuconiquia.
quia (fig. 2.36).
Músculos
Examinar los músculos para ver debilidades y fasci-
culaciones. En la superficie dorsal busque la atrofia,
particularmente de los dorsales interóseos. En la
palma mire particularmente a las eminencias tenar
e hipotenar.
• Atrofina tenar (fig. 2.37) = lesión del nervio
mediano.
• Debilidad generalizada, particularmente de los
interóseos del dorso, pero respetando la emi-
nencia del tenar = lesión del nervio cubital.
También busque la contractura de Dupuytren y
realice el test de Tinel (percusión sobre el pliegue Fig. 2.37. Atrofia tenar.
cutáneo distal de la muñeca). Prueba de Phalen (el
paciente mantiene las superficies dorsales de
ambas manos juntas durante 60 segundos, ambas
pruebas son positivas si se producen cosquilleos, lo
que sugiere síndrome del túnel carpiano.
Articulaciones 75
Examinar la inflamación aguda (articulacio-
nes hinchadas y rojas), así como las defor-
midades características de la artritis crónica,
p. ej., reumatoide, osteoartritis (fig. 2.38).
• Desviación ulnar en la muñeca.
• Deformidad en Z del pulgar.
Historia y exploración
• Cuello de cisne (interfalángica distal fle-
Fig. 2.38. Osteoartritis. xionada, interfalángica proximal hiperex-
tendido, fig. 12.2, p. 540).
• Boutonnière (interfalángica distal hipe-
rextendida, interfalángica proximal fle-
xionada).
• Nodos de Heberden (articulaciones
interfalángicas distales, p. 77).
• Nodos de Bouchard (articulaciones
interfalángicas proximales).
Mover y sentir
En este punto, usted debe saber el diag-
nóstico probable, así que evalúe la función
neurológica en busca del poder, la función,
y la sensación:
• Muñeca y antebrazo: Extensión (posición
de oración) y flexión (oración inversa),
supinación y pronación. Mire los codos.
• Músculos pequeños: Agarre de pinza, aga-
rre de fuerza (apriete fuerte mis dos
dedos), abducción del pulgar, abducción
(extensión de los dedos) y aducción
(agarre este pedazo de papel entre los
dedos) de los dedos. NB. Signo de Fro-
ment = flexión del pulgar durante el aga-
rre, ya que la lesión del nervio cubital
Fig. 2.39. Esclerosis. impide la aducción (p. 453).
• Función: Escriba una oración, desabroche
un botón, recoja una moneda.
• Sensación: Pruebe el dedo meñique
(cubital), el dedo índice (mediano) y la
caja de rapé anatómica (radial) usando
tacto ligero/pinchazo.
Cuando haya obtenido el diagnóstico y el
estado funcional, examine cada articula-
ción, palpando la sensibilidad, los derrames
y la crepitación. Pruebe la sensación (ver
p. 67) y examine los codos. Considerar el
examen de los miembros superiores y la
cara.
Nódulos y contracturas
• Contractura de Dupuytren (ver fig. 2.26, p. 60) fibro- 77
sis y contractura de la fascia palmar, p. 698) se obser-
va en enfermedades hepáticas, traumatismos, epilep-
sia y envejecimiento.
• Busque ganglios de Heberden (IFD) fig. 2.45 y Bou-
chard (IFP) –osteofitos (sobrecrecimiento óseo en
Historia y exploración
una articulación) visto con osteoartritis. Fig. 2.45. Heberden (DIP).
Tomado de Watts et al. (eds)
Oxford Textbook of Rheumatology
(2013), con autorización de
Oxford University Press.
Fig. 2.46. Aumento de la curvatura de las Fig. 2.47. Prueba de los dedos en palillos de
uñas. tambor.
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CAP. 02.qxd:Oxford 27/04/18 16:53 Página 78
Arterial 79
1. Inspección general. Presentación, consentimiento, paciente sentado a 45°. Inspec-
cione la piel (pérdida de cabello, etc.). Mire entre los dedos de los pies y levante los talones
para inspeccionar las úlceras.
Historia y exploración
2. Palpación
• Temperatura: Bilateralmente en los muslos, piernas y pies.
• Relleno capilar: Presione/exprima el dedo gordo
hasta que se ponga de color blanco, libere y mida el
tiempo para que el color regrese (normal < 2 s).
• Pulso periférico: radial, braquial (medial al tendón del
bíceps), carótida, femoral (punto medio inguinal),
poplítea (las rodillas del paciente ligeramente flexio-
nadas, presionar en el centro de la fosa poplítea, fig.
2.48), tibial posterior (justo inferior y posterior al Fig. 2.48. Pulso periférico: popli-
maléolo medial) y dorsalis pedis (entre las bases del teal.
1º y 2º metatarso, laterales al extensor hallulis longus); Tomada de Thomas J, et al. (edit.)
evaluar si es palpable bilateralmente. Detecte la fre- Oxford Handbook of Clinical Examina-
cuencia y el ritmo. Para braquial y carótida, determi- tion and Practical Skills (2014), con
ne la amplitud y el carácter. autorización de Oxford University
• Aorta abdominal: Palpar la línea media sobre el ombli- Press.
go; posicione los dedos a ambos lados de los márge-
nes externos más palpables (fig. 2.49).
5. Exploración completa con la sonda Doppler para detectar pulsos y medir el índice
de presión tobillo-brazo; realice el examen neurológico de los miembros inferiores.
Venoso
1. Inspección. Presentación, consentimiento. Inspeccione, inicialmente con el paciente de
pie, varices y cambios en la piel.
2. Palpitación • Temperatura de las varices. • Pida al paciente que tosa mientras palpa
el impulso en USF y USP.
3. Prueba del toque. Percuta en el límite inferior de la variz y palpe buscando la sensa-
ción del impulso en USF.
5. Doppler Coloque la sonda sobre USF, apriete y escuche. Repita con la sonda en USP.
6. Prueba de torniquete. Elevar las piernas y masajee las varices hasta vaciarlas. Apli-
que el torniquete en la parte superior del muslo. Pida al paciente que se ponga de pie. Si no
se controla, repita, colocando el torniquete debajo de la rodilla.
7. Terminar con exámenes del abdomen; recto; pelvis para las mujeres y genitales
para los hombres.
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CAP. 02.qxd:Oxford 27/04/18 16:53 Página 80
• ¿Es su flujo doloroso y lento/«gota a gota»? (p. ej., por litiasis vesical)
• ¿Siente que la vejiga no está vacía después de orinar?i
• ¿Alguna vez orina cuando no quiere? (Incontinencia, p. 648)
• Al sentir un impulso de orinar ¿tiene que ir inmediatamente? (Urgencia)i
• ¿Orina a menudo por la noche? (Nicturia)i ¿En el día? (Frecuencia)i ¿Con qué frecuen-
cia?
Historia clínica. Cólico renal, infección del tracto urinario, diabetes, PA, gota, uso anal-
gésico (p. 318), operaciones anteriores.
Antecedente farmacológico. Anticolinérgicos, antibióticos profilácticos.
Antecedentes familiares. ¿Carcinoma de próstata? ¿Enfermedad renal?
Historia social. Fumar, historia sexual.
Tabla 2.11. Síntomas de presentación y preguntas a realizar
Síntomas de presentación Preguntas directas
Disuria (ver RECUADRO «Disuria») Dolor: SOCRATES (p. 36). ¿Fiebre? Historia sexual
Síntomas del tracto tracto bajo ¿Orina de aspecto anormal? Problemas previos
Dolor en el escroto y en la zona lumbar Debe descartar la torsión testicular (p. 652)
Hematuria (p. 293/p. 647)
Secreción uretral y vaginal (p. 413)
Problemas sexuales; coito doloroso/
dispareunia (OHCS, p. 310)
Reglas (OHCS, p. 250) Preguntar sobre la menarquia, la menopausia, la
duración de los períodos, la cantidad, el dolor?
¿Pérdida intermenstrual? ¿1er día del último
período menstrual (UPM)?
Disuria
Asegúrese de decir lo mismo que su paciente y sus colegas, ya que la disuria se refie-
re tanto a la micción dolorosa («uralgia») como a la micción difícil (dificultad mic-
cional, p. 81). La uralgia es típicamente uretral, de la vejiga o por inflamación vaginal
(IUT, productos de baño perfumados, espermicidas, síndrome uretral, p. 300). Si se
produce después de la menopausia, buscar una carúncula uretral: crecimiento car-
noso de la mucosa uretral distal, 1 cm, por lo general se originan en el labio pos-
terior uretral. Pieles, lesiones uretrales (p. ej., cochecinoma, linfoma, papiloma), com-
plicaciones posparto (p. ej., productos retenidos de la concepción).
La dificultad de micción es un signo de obstrucción del flujo de salida, p. ej., de una
próstata agrandada, o estenosis uretral (comúnmente post-traumática, postgonocó-
cica). Otras características: dificultad para la micción, flujo pobre, retención urinaria e
incontinencia. La estranguria es el dolor uretral, por lo general se refiere a la base de
la vejiga, causando una constante angustia y un gran deseo de orinar, incluso si hay
poca orina. Causas: Litiasis, catéteres, cistitis, prostatitis, neoplasia vesical y raramente:
endometriosis vesical, esquistosomiasis.
Frecuencia
Trate de diferenciar producción de orina (p. ej., diabetes mellitus e insípida, polidip-
sia, diuréticos, alcohol, enfermedad tubular renal, insuficiencia adrenal) por el paso
frecuente de pequeñas cantidades de orina (p. ej., en cistitis, uretritis, vejiga neuro-
génica). Obstrucción (embarazo, tumor de la vejiga, agrandamiento de la próstata).
i = Síntomas irritativos (o «llenado»): pueden ser causados, p. ej., por IUT, así como obstrucciones.
Oliguria/anuria
La oliguria se define como una salida de orina de < 400 mL/24 h o < 0,5 mL/kg/h y 81
puede ser un signo de shock (p. ej., post-operatorio, p. 576) o lesión renal aguda: causas:
p. 298. Anuria se define como < 50 mL/24 h. En un paciente cateterizado con anuria
repentina, considere el bloqueo del catéter, con una disminución lenta de la oliguria a
anuria, la disfunción renal es más probable.
Poliuria
Historia y exploración
Aumento del volumen de orina, p. ej. > 3 L/24 h. Causas: Terapia de líquidos IV excesi-
va; diabetes mellitus e insípida (la palabra diabetes es de origen griego), aumento del
Ca2+; polidipsia psicogénica/síndrome PIP (p. 240); fase poliúrica de recuperación de la
necrosis tubular aguda.
Síntomas irritativos u obstructivos de la vejiga
(Véase también p. 642.). Los síntomas de agrandamiento de la próstata son mal llama-
dos «prostatismo»; es mejor hablar de síntomas de la vejiga irritativa u obstructiva, ya que
la obstrucción del cuello de la vejiga o una estenosis pueden ser las causas.
1. Síntomas irritativos de la vejiga: Urgencia, disuria, frecuencia, nicturia6 (los dos últimos
síntomas también se asocian con causas de poliuria).
2. Síntomas obstructivos: La reducción del tamaño y la fuerza del chorro urinario, la
vacilación y la interrupción de la corriente durante la micción y el goteo terminal:
la causa habitual es el agrandamiento de la próstata (hiperplasia prostática), pero
otras causas incluyen una estenosis uretral, un tumor uretral, contracción del cue-
llo. El caudal máximo de orina es normalmente ~ 18-30 mL/s.
Goteo terminal
Goteo al final de la micción, a menudo visto en conjunción con la incontinencia después
de la micción incompleta, asociada con el prostatismo.
Cambios urinarios
La orina turbia sugiere pus (ITU), pero a menudo es una precipitación normal de fosfa-
to en una orina alcalina. Pneumaturia (burbujas en la orina a medida que pasa) Se pro-
duce con ITU debido a organismos que forman gases o puede indicar una fiebre ente-
rovesical (vejiga intestinal) de diverticulitis, enfermedad de Crohn o enfermedad neoplá-
sica del intestino. Nicturia ocurre con «vejiga irritativa», diabetes mellitus, ITU, y ritmo
diurno invertido (observado en la insuficiencia renal y cardíaca). La hematuria (hematíes
en la orina) se debe a neoplasia o glomerulonefritis (p. 310) hasta que se demuestre lo
contrario. Descartar ITU.
Dificultad para miccionar.
Esto incluye flujo deficiente, dificultad para miccionar, vacilación, flujo intermitente, incon-
tinencia (p. ej., desbordamiento), retención (aguda o crónica), vaciado incompleto (± ITU
de la orina residual). 䊳 Recuerde la impactación fecal como causa de retención con des-
bordamiento. Causas: Obstructiva: hiperplasia prostática, edema temprano después de la
reparación del cuello de la vejiga, prolapso uterino, útero grávido retrovertido, fibromas,
quistes ováricos, cuerpo extraño uretral, ureterocele ectópico, pólipo vesical o cáncer.
Sobredistensión de la vejiga p. ej., después de la epidural por un parto. La debilidad o la
miopatía del detrusor provoca el vaciamiento incompleto + incontinencia de desborda-
miento por goteo (realice citometría/electromiografía; las causas incluyen enfermedad
neurológica y cistitis intersticial (OHCS p. 306), que puede conducir a una vejiga contraí-
da, p. ej., requiriendo enterocistoplastia de sustitución). Fármacos: anestesia epidural; tricí-
clicos, anticolinérgicos. SNC: suprapontina (accidente cerebrovascular); lesiones de la
columna vertebral (esclerosis múltiple); nervio periférico (disco prolapso, neuropatía dia-
bética u otra neuropatía); o reflejo, debido al dolor (p. ej., con infecciones por herpes).
6 En los ancianos, la nocturia (1-2/noche) puede ser «normal» debido a: i) pérdida de la capacidad de
concentrar la orina; ii) el líquido del edema periférico regresa a la circulación por la noche; iii) los rit-
mos circadianos pueden perderse; iv) se necesita menos sueño y el despertar puede ser interpretado
como una necesidad de orinar (una respuesta condicionada pavloviana).
82 La mama: historia
Ver tabla 2.12 para preguntas directas sobre los síntomas de presentación.
Tabla 2.12. Síntomas de presentación y preguntas a hacer
Síntomas de presentación Preguntas directas
Bulto en el pecho ¿Bultos anteriores? ¿Historia familiar? ¿Dolor? ¿Secreción
del pezón? ¿Inversión del pezón? ¿Cambios en la piel?
¿Cambio en el tamaño relacionado con el ciclo
Historia y exploración
La mama: exploración 83
1. Inspección. Evalúe el tamaño y la forma de cualquier masa, así como la superficie
superpuesta. ¿Qué cuadrante (ver fig. 2.51)? Obsérvese la afectación de la piel; Ulce-
ración, hoyuelos (piel de naranja) e inversión/descarga del pezón.
2. Palpación del pecho. Confirme el tamaño y la forma de cualquier bulto. ¿Está fijo
/conectado a la piel o a las estructuras subyacentes (véase el RECUADRO 2 «Palpa-
ción»)? ¿Es fluctuante/compresible/difícil? ¿Temperatura? ¿Sensible? ¿Móvil (más pro-
Historia y exploración
bable que sea un fibroadenoma)?.
3. Palpación de la axila para los ganglios linfáticos. ¿Se extensión metastásica?
Ipsilateral/bilateral? ¿Enmarañado? ¿Fijo?
4. Exámenes adicionales. Examine el abdomen para detectar hepatomegalia, espina
dorsal buscando sensibilidad, pulmones (diseminación metastásica).
1. Inspección general
䊳 Siempre debe haber un acompañante presente al examinar el seno.
Presentación, consentimiento, posición del paciente sentado en el borde de la cama
con las manos a un lado, descubrir hasta la cintura. Inspeccione ambos senos para
descubrir masas evidentes, anomalías en el contorno, asimetría, cicatrices, ulceración,
cambios en la piel, p. ej., piel de naranja (aspecto de piel de naranja resultante de
edema). Busque la inversión del pezón y secreción del pezón. Pídale que «presione
con las manos sus las caderas» y luego «manos en la cabeza» para acentuar cual-
quier cambio asimétrico. Mientras que el paciente tiene sus manos levantadas ins-
peccione las axilas para cualquier masa, así como bajo los pechos.
2. Palpación de la mama
Coloque a la paciente sentado a 45° con la
mano detrás de la cabeza (es decir, la mano
derecha detrás de la cabeza al examinar el
seno derecho, vea la fig. 2.50). Pregunte a la
paciente si tiene dolor o flujo. Examine las
áreas dolorosas y luego pídale que cuente si
tiene cualquier secreción. Examine cada
pecho con el lado «normal» primero. Exami- Fig. 2.50. Posición correcta de la
ne cada cuadrante, a su vez, así como la cola paciente para la exploración de pecho.
axilar de Spence (fig. 2.51) o utilice un méto- Tomada de Thomas J, et al. (edit.) Oxford
do en espiral concéntrico (fig. 2.52) usando Handbook of Clinical Examination and
una mano plana para enrollar el pecho con- Practical Skills (2014), con autorización de
tra la pared torácica subyacente. Defina cual- Oxford University Press.
quier grumo/área grumosa. Si descubre un Cola de
bulto, para examinar la fijación de los múscu- Spence
los pectorales pídale al paciente que empuje
contra su mano con el brazo extendido. Superior
interno
Superior
externo
3. Palpación de la axila Inferior
Examine ambas axilas. Al examinar la axila interno
derecha, sostenga el brazo derecho de la Inferior
paciente con la mano derecha y examine la externo
axila con la mano izquierda. Cinco grupos Fig. 2.51. Cuadrantes del pecho
de ganglios axilares: junto con la cola axilar de Spence.
i) Apical (palpar contra la articulación gle- Tomada de Thomas J, et al. (edit.) Oxford
nohumeral) Handbook of Clinical Examination and
ii) Anterior (palpar contra pectoral mayor) Practical Skills (2014), con autorización de
iii) Central (palpar contra la pared torácica Oxford University Press.
lateral)
iv) Posterior (palpar contra latissimus dorsi)
v) Medial (palpar contra el húmero)
4. Examen adicional
Examen completo palpando hacia abajo la Fig. 2.52. Métodos para la palpación
columna vertebral buscando sensibilidad, exami- sistemática del pecho.
nando el abdomen buscando hepatomegalia, y Tomada de Thomas J, et al. (edit.) Oxford
los pulmones para detectar signos de metástasis. Handbook of Clinical Examination and
Practical Skills (2014), con autorización de
Dé las gracias a la paciente y lávese las manos. Oxford University Press.
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CAP. 02.qxd:Oxford 27/04/18 16:53 Página 84
84 El tiroides: exploración
Para los síntomas de la enfermedad del tiroides, ver p. 218 y 220. Vea también bultos en
el cuello, p. 598-600.
1. Inspección. Las cuestiones clave cuando se le presenta un bulto en el cuello son:
¿Está este bulto relacionado con el tiroides o no? ¿Cuál es el estado del tiroides del
paciente? Inspeccione el cuello; el tiroides normal no suele ser visible ni palpable.
Una hinchazón de la línea media debe elevar su sospecha de patología tiroidea. Bus-
que cicatrices (p. ej., incisión en collar de la cirugía anterior de la tiroides). Examine
Historia y exploración
1. Inspección 85
Presentación, consentimiento, posición sentado del paciente en una silla (con espacio
detrás), exponga adecuadamente el cuello. Inspeccionar desde el frente y los lados de
cualquier bocio obvio o hinchazones, cicatrices, signos de hipo/hipertiroidismo.
2. Prueba de tragar
Historia y exploración
De pie delante del paciente, pídale que «beba agua ... mantenga en su boca ... y tra-
gue» para ver si alguna hinchazón de la línea media se mueve por la deglución.
5. Percusión
Percuta el esternón para la opacidad de la extensión retroesternal de un bocio.
6. Auscultación
Escuche el bocio buscando un soplo.
7. Manos
• Inspeccionar: Para acropaquia tiroidea (dedos en palillo de tambor) y eritema palmar
• Temperatura
• Pulso: tipo y ritmo
• Temblor fino: Pídale al paciente que «sostenga las manos» y coloque la hoja de
papel sobre las manos extendidas para ayudar.
8. Ojos
• Exoftalmos: Inspeccionar la retracción de los párpados y la proptosis (p. 219)
• Retraso del parpado: Pida al paciente que «mire hacia abajo siguiendo el dedo»
mientras mueve su dedo desde un punto por encima del ojo hacia abajo
• Movimientos de los ojos: Pídale al paciente que siga su dedo, manteniendo la cabe-
za inmóvil mientras hace una «H». ¿Alguna visión doble?.
9. Finalización
Pida al paciente que se levante de la silla para evaluar la miopatía proximal, busque
el mixedema pretibial, evalúe el reflejo del tobillo (pida al paciente que se aleje de
usted con la rodilla apoyada en la silla). Agradezca al paciente y lávese las manos.
Historia y exploración
bas de disfunción de conducción y disartria). Luego pídale al paciente que siga los
pasos de órdenes de uno, dos y tres pasos que aseguran que estos «cruzan la línea
media», p. ej., haga un puño con la mano derecha, luego extienda su dedo índice
derecho y toque su oído izquierdo.
88 Evaluación psiquiátrica
Preséntese, haga algunas preguntas relacionadas con su vida (nombre exacto, edad, tra-
bajo, y quién está en casa). Estas pueden ayudar a su paciente a relajarse, pero tenga cui-
dado de no ser muy osado, p. ej., si ha perdido recientemente el trabajo, si se ha divor-
ciado recientemente y ha terminado viviendo solo.
Motivo de consulta. Pregunte por los principales problemas que le han llevado a esta
consulta. Siéntese y escuche. No se preocupe si la información está en una forma con-
veniente o no, esta es una oportunidad para que el paciente salga de sus inquietudes,
Historia y exploración
ideas y preocupaciones sin verse defraudado por sus expectativas. Después > 3-5 min
es a bueno tener como objetivo una lista de todos los problemas (cada uno menciona-
do de una manera breve). Léalos de nuevo al paciente y pregunte si hay más. Luego pre-
gunte por:
Historia del problema de consulta. Para cada problema obtenga los detalles, tanto
el estado actual como la historia de cómo se inició, los factores precipitantes y los efec-
tos que ha tenido sobre su vida.
Compruebe los principales síntomas psiquiátricos. Compruebe los que aún no
han sido cubiertos: depresión; bajo estado de ánimo, anhedonia (incapacidad para sentir
placer), pensamientos de inutilidad/desesperanza, trastornos del sueño con un despertar
temprano por la mañana, pérdida de peso y apetito. Pregunte específicamente acerca de
pensamientos y planes suicidas: «¿Alguna vez ha estado tan bajo que pensó en hacerse daño
a sí mismo?», «¿Qué pensamientos ha tenido?» Revise las características hipomaníacas y
maníacas que pueden perderse en un paciente que se presenta como deprimido. Alucina-
ciones («¿Alguna vez ha oído voces o visto cosas cuando no ha habido nadie o nada allí?»)
y delirios («¿Alguna vez ha tenido pensamientos o creencias que con posterioridad le han
sorprendido por extraños?»); ansiedad y comportamiento evasivo (p. ej., evitar las compras
debido a ansiedad o fobias); pensamientos obsesivos y conducta compulsiva, trastornos ali-
mentarios, alcohol (ver pág. 283 para pruebas de detección de alcohol) y otras drogas.
Circunstancias actuales. Vivienda, finanzas, trabajo, relaciones, amigos.
Antecedentes familiares. Pregunte acerca de la salud, la personalidad y la ocupación
de los padres y hermanos, y la historia médica y psiquiátrica de la familia.
Historia de antecedentes. Trate de entender el contexto para tener una visión más
amplia.
• Biografía: Relaciones con la familia y compañeros cuando fue niño; historial escolar y
laboral; relaciones sexuales y relaciones actuales; y familia. Maneras previas de enfren-
tarse al estrés y si ha habido problemas y síntomas anteriormente similares a los que
se presentan actualmente.
• Personalidad enfermiza: estado de ánimo, carácter, pasatiempos, actitudes y creencias.
Historia médica y psiquiátrica pasada. Establezca cualquier comorbolidad pasada
o presente.
Examen del estado mental. Este es el estado ahora, en el momento de la entrevista.
Apariencia: ¿Ropa, gafas, sombreros?
Comportamiento observable: P. ej., lentitud excesiva, signos de ansiedad, gesto, mirada o evi-
tación de la mirada, lágrimas, risas, pausas (escuchando voces), actitud (p. ej., con dibujo).
Modo de hablar: Incluya el ritmo, p. ej., retraso o aceleración (presión del habla), ritmo y
tono de las palabras.
Humor: Tenga en cuenta pensamientos acerca de perjudicarse a sí mismo o a los demás.
Mida sus propias respuestas al paciente. La risa y las grandes ideas de los pacientes manía-
cos son contagiosas, cosa que ocurre en menor medida con los de una persona deprimida.
Pensamientos: Contenido: p. ej., sobre sí mismo, su propio cuerpo, sobre otras personas,
y el futuro, cualquier ideación suicida. Percibe creencias anormales (delirios), p. ej., los pen-
samientos que oye y las ideas ¿son anormales (p. ej. persecutorio, grandioso)? Forma:
¿ideas de fuga? ¿Está pensando en el «movimiento del caballo de ajedrez»? (ver RECUA-
DRO «Síntomas psiquiátricos»).
Experiencias inusuales o alucinaciones: mencionar, p. ej. visuales, auditivas.
Cognición: ¿Orientada en tiempo, lugar y persona? Memoria a corto plazo: dar un nombre
y dirección y probar a recuperarlos 5 min después. Dibujar la cara de un reloj (requiere
buena función frontal y parietal). Memoria a largo plazo: Recuerda los asuntos actuales.
Nombre de los líderes políticos actuales (p. 64). Esto prueba muchas otras funciones del
SNC, no solo la memoria.
Concentración: Meses del año hacia atrás.
Percepción: ¿El paciente cree que no están bien? ¿Cree que le pueden ayudar?
Síntomas psiquiátricos 89
Hay muchas maneras diferentes de pensar sobre los síntomas psiquiátricos. Un enfo-
que simple puede ser considerar los síntomas negativos y positivos. Los síntomas
negativos implican la ausencia de un comportamiento, pensamiento, sentimiento o
sensación (p. ej., falta de apetito, apatía y emociones insensibles en la depresión),
mientras que los síntomas positivos implican su presencia cuando no se esperan nor-
malmente (p. ej., «pensamientos en mi cabeza»). Comprender la diferencia entre la
Historia y exploración
psicosis y la neurosis es vital. La psicosis conlleva un trastorno del pensamiento (p.
ej., la reflexión de un pensamiento, las opiniones vertidas por los medios de comu-
nicación) ± delirios (creencias anormales que se mantienen a pesar de todos los
razonamientos y que van en contra de los antecedentes culturales del paciente) y
percepciones anormales (p. ej., alucinaciones). La neurosis implica entendimiento; si
hay ideas intrusivas o fenómenos experienciales, la persona sabe que son falsos o
ilusorios (y pueden ser desencadenados por el estrés, etc.).
Los desórdenes del pensamiento incluyen fuga de ideas, en la cual el discurso dis-
curre a través de temas, cambiando caprichosamente o a través de asociaciones, que
hacen una «explosión»: «Ayer bajé a la tienda. Yo no salté (explosión), pero sí cami-
né. Los canguros saltan, ¿no? Sin embargo, mi amigo Joey no estaba allí». El movi-
miento del caballo, un cambio inesperado en la dirección del habla o la conversación
(similar a la componente lateral del movimiento del caballo en el ajedrez) y el neo-
logismo es la formación de nuevas palabras. Pueden ser normales o indicar una con-
dición orgánica del cerebro o una psicosis.
Muchos síntomas psiquiátricos aislados, con un grado de gravedad menor, o inclu-
so una cultura diferente, pueden ser considerados parte del comportamiento «nor-
mal»; p. ej., una visión de una figura religiosa se puede considerar normal, mientras
que una de un extranjero no puede. Considere a su paciente en su contexto cultu-
ral y religioso. Como en muchos aspectos de la medicina, en psiquiatría hay un
amplio espectro de conductas pensamientos y percepciones, al menos un extremo
de los cuales se considera anormal. En parte nuestro desafío es tratar de interpre-
tar estos síntomas con interés, perspicacia e imparcialidad para que podamos bene-
ficiar mejor a nuestros pacientes y no formar opiniones inamoviles. En las consultas
médicas, los síntomas psiquiátricos se deben a menudo al estrés, la abstinencia de
drogas o alcohol, el desequilibrio de urea y electrolitos o la medicación. En caso de
duda, pida ayuda a un psiquiatra.
䊳 Cuidado con las formulaciones simplistas, p. ej., si usted habla con Dios, está
orando. Si Dios le habla, tiene esquizofrenia (Dr. Thomas Szasz). No es el fenómeno
auditivo lo que condiciona un diagnóstico de psicosis: lo que importa es lo que el
paciente cree sobre un fenómeno y si están asociados el trastorno del pensamien-
to o una ilusión.
4. Examine la boca y la lengua (cianótica, lisa, peluda, rolliza, p. ej., área romboidea des-
provista de papilas por cándida, después de uso prolongado de inhalador de este-
roides).
5. Examinar el cuello por detrás: los ganglios linfáticos, el bocio.
6. Asegúrese de que el paciente esté a 45° para iniciar el examen SVC en el cuello:
PVY; sentir el vaso y el volumen del pulso carotídeo.
7. El precordio. Busque pulsaciones anormales. Sienta las pulsaciones del ápex cardía-
co (carácter; posición). ¿Percibe impulso o frémito paraesternal? Ausculte (campana
y diafragma) ápex en la posición lateral izquierda, luego las otras tres áreas (p. 39) y
carótidas. Siente al paciente hacia adelante: ausculte durante la espiración.
8. Mientras está sentado hacia adelante, busque edema sacro.
9. Examen respiratorio con el paciente a 90°. Observe (y cuente). FR; Observe el
movimiento posterior de la pared torácica. Evaluar la expansión del tórax, percusión
y auscultación.
10. Siente al paciente de nuevo. Ausculte la tráquea. Inspeccionar de nuevo. Evaluar la
expansión del tórax anterior. Percusión y auscultación nuevamente.
11. Examine axilas y senos, si está indicado (tenga un compañero para que le acompa-
ñe en todos los exámenes íntimos).
12. Acueste al paciente en plano (una almohada) para inspeccionar, palpar, percutir y
auscultar el abdomen.
13. Mire las piernas: ¿hinchazones, perfusión, pulsos o edema? ¿Fóvea? ¿Qué nivel?
14. Examen del SNC: Nervios craneales: respuestas de las pupilas; fondo y campos visua-
les; agudeza visual. Considere los reflejos corneales. «Abra la boca; saque la lengua;
cierre sus ojos de una forma apretada; muéstrame sus dientes; levante las cejas».
Miembros (la mayoría de los signos se deben a lesiones centrales no nerviosas periféri-
cas): Busque debilidades y fasciculación. Pruebe el tono en todas las extremidades.
Sostenga las manos con las palmas de las manos hacia el techo y los dedos de par
en par. Ahora pídale que cierre los ojos. «Cuidado con la desviación del pronador.
«Mantenga los ojos cerrados y tóquese la nariz con cada dedo índice». «Levante la
pierna recta en el aire. Manténgala ahí. Ponga el talón en la rodilla opuesta (con los
ojos cerrados) y llévelo hasta su propia espinilla». Ahora ha probado la fuerza, la
coordinación y el sentido de la posición corporal. Ajuste del tenedor en los dedos
de los pies y los dedos índice para evaluar el sentido de la vibración.
15. Examine la marcha y el habla. ¿Alguna anomalía de la función mental superior?
16. Considere el examen rectal y vaginal (es esencial que esté presente un acompa-
ñante).
17. Examine la orina con una varilla de análisis rápida si es apropiado.
䊳 En general, entre en detalles donde encuentre (o sospeche) que algo está mal.
91
Historia y exploración
3 Medicina cardiovascular
Contenido
Salud cardiovascular 93
En la cabecera del enfermo (ver 40)
Síntomas cardiovasculares 94
Exploraciones:
ECG: una aproximación
metódica 96
ECG: anormalidades 98
ECG: puntos adicionales 100
Imagen cardíaca 108
Ecocardiografía 110
Cateterismo cardíaco 112
Fármacos y el corazón:
Fármacos cardiovasculares 114
Enfermedades y estados:
Angina pectoris 116
Síndromes coronarios agudos
(SCA) 118
Tratamiento del síndrome
coronario agudo (SCA) 120
Complicaciones del IM 122 Fig. 3.1. Helen Taussig (1898-1986) luchó contra
Arritmias: visión general 124 la dislexia, la sordera y contra un mundo domina-
Registro continuo del ECG 125 do por hombres para llegar a ser una líder de la
Taquicardia de QRS estrecho 126 cardiología. Observó que los «niños azules» que
Taquicardias de complejo tenían un ductus arterioso permeable (DAP) ten-
ancho 128 dían a sobrevivir más que los que no lo tenían. Se
Fibrilación auricular (FA) y debía a que muchos niños azules tenían obstruc-
flúter 130 ción congénita al flujo pulmonar (p. ej., estenosis
Marcapasos 132 pulmonar en tetralogía de Fallot, p. 157) y los DAP
Insuficiencia cardíaca: conceptos aumentaban el flujo pulmonar, con lo que se redu-
básicos 134 cía la cianosis. Ideó el cortocircuito de Blalock-
Insuficiencia cardíaca: Taussig que crea una conexión entre la arteria
tratamiento 136 subclavia o carótida y una de las arterias pulmo-
nares, imitando el DAP. Esto aumentó considera-
Hipertensión 138 blemente la supervivencia en los pacientes con
Hipertensión: tratamiento 140 tetralogía de Fallot.
Fiebre reumática (FR) 142 Una de las joyas de la cardiología es que con fre-
Enfermedad valvular mitral 144 cuencia las soluciones a los problemas existen en
Enfermedad valvular aórtica 146 la naturaleza y muchas de nuestras intervenciones
Enfermedades valvulares van dirigidas a tratar de reproducir circunstancias
derechas 148 que existen en la naturaleza. Así, una buena com-
Cirugía cardíaca 148 prensión de la fisiología es esencial para entender
El corazón en varias enfermedades la cardiología clínica, además de ser interesante
sistémicas raras 149 por sí misma.
Endocarditis infecciosa (EI) 150
Enfermedades del músculo
cardíaco 152
Enfermedades del pereicardio 154
Enfermedades congénitas del
adulto (CCA) 156
Conducción de vehículos y
corazón 158
Salud cardiovascular 93
La cardiopatía isquémica (CI) es la causa más frecuente de muerte a nivel mundial.
La promoción de la salud cardiovascular no consiste solo en la prevención de la CI:
la salud implica la capacidad para realizar ejercicio, una actividad vigorosa con la que
se disfruta (dentro de unos límites!) y es una de las mejores formas de alcanzar la
salud, no solo porque le gusta al corazón (
PA, lipoproteína de alta densidad
Medicina cardiovascular
«buena» (HDL); puede prevenir la osteoporosis, mejorar la tolerancia a la glucosa e
incrementar la función inmune (p. ej., en cáncer y en VIH positivo). Las personas que
mejoran y mantienen su forma física son más longevos. La mortalidad ajustada por
la edad por todas las causas se reduce > 40%. Evitar la obesidad también ayuda, pero
perder peso por sí mismo solo es útil reduciendo el riesgo cardiovascular y el ries-
go de desarrollar diabetes cuando se combina con ejercicio regular. La ingesta mode-
rada de alcohol también puede promover la salud cardiovascular.
La hipertensión es el principal factor de riesgo para la mortalidad cardiovascular,
seguido del tabaco. Dejar de fumar, incluso después de muchos años, produce bene-
ficios. Simplemente un consejo funciona. La mayoría de los fumadores quieren dejar
de fumar (a diferencia de las personas que comen una dieta insana que están atra-
pados en ella fundamentalmente por el hábito y por los placeres del paladar). No
deje de recomendar que dejen de fumar por el hecho de que el consejo no siem-
pre funciona. Pregunte sobre el hábito tabáquico en las consultas, especialmente en
las debidas a enfermedades relacionadas con el tabaco.
• Asegúrese de que el consejo es congruente con las creencias del paciente con
respecto al tabaco.
• Hacer que los pacientes enumeren las ventajas de dejar de fumar la motivación.
• Invitar al paciente a elegir una fecha (cuando tenga menos estrés) en la que él o
ella se convertirán en exfumadores.
• Sugerir que se deshagan de todos los accesorios (cigarrillos, pipas, ceniceros,
mecheros, fósforos) por adelantado; informar a los amigos del cambio; entrenar
diciendo «no» a sus ofertas de «solo un cigarrillo».
• Chicles de nicotina, masticados de forma intermitente para limitar la liberación de
nicotina: Se necesitarán 10 barras de 2 mg al día. Los parches transdérmicos de
nicotina puede que sean una opción más fácil. Un aumento de dosis la primera
semana puede ayudar. Los consejos recogidos por escrito no suponen mayor
beneficio que los ofrecidos por enfermería. Ofrecer siempre seguimiento.
• Vareniclina es un agonista parcial selectivo oral del receptor de la nicotina. Comen-
zar una semana antes de la fecha elegida para dejar de fumar e incremente la dosis
de forma gradual. Efectos adversos: cambios de apetito, boca seca, alteraciones del
gusto, cefalea, somnolencia, mareo, trastornos del sueño, sueños anormales, depre-
sión, pensamientos suicidas, pánico, disartria.
• Bupropión (= anfebutamona) la tasa de éxito al 30% en el primer año vs. 16%
con parches y 15,6% con placebo (parche + bupropion: 35,5%)1: considerar si falla
lo indicado anteriormente. Advertencia de efectos secundarios: convulsiones (ries-
go < 1:1000), insomnio, cefalea.
Lípidos y diabetes (p. 690, 206) son los otros factores de riesgo mayores modifica-
bles. En UK se utiliza el sistema de puntuación QRISK 2 (www.qrisk.org) para inte-
grar el riesgo cardiovascular del paciente con la intención de predecir la salud car-
diovascular futura2. Puede utilizarse como parte de una consulta sobre factores del
estilo de vida para mostrar a los pacientes que controlando ciertos factores de ries-
go (p. ej., tabaco, PA) reducirá su riesgo de IM e ictus.
䊳 Aplique medidas preventivas como una dieta sana (p. 244) pronto en la vida para
maximizar el impacto, cuando hay más años que salvar y antes de que los malos
hábitos se hayan enraizado.
El estudio aleatorizado
La medicina cardiovascular tiene una casa de tesoros de estudios aleatorizados que
no tiene rival. Uno de los principales placeres de la medicina cardiovascular es inte-
grar estos con el razonamiento clínico de una forma humana. Después de un even-
to cardíaco un protocolo puede «mandar» estatinas, aspirina, betabloqueantes, IECA
(p. 114) y un objetivo de PA y de colesterol LDL que hacen que su paciente se sien-
ta fatal. ¿Qué hacer? Informar, negociar y alcanzar un compromiso. Nunca rechace a
su paciente por su falta de compromiso siguiendo sus regímenes excesivos. Conti-
núe sonriendo, continúe comunicándose y manténgase al día: los últimos datos pue-
den mostrar que su paciente tenía razón después de todo3.
94 Síntomas cardiovasculares
Dolor torácico. 䊳 El dolor torácico que parece cardíaco puede no deberse a ninguna
causa importante, pero siempre debe pensar: ¿Puede esto ser un infarto de miocardio
(IM), una disección aórtica, una pericarditis o un tromboembolismo pulmonar?
Carácter: constrictivo sugiere angina, espasmo de esófago o ansiedad. Dolor punzante
puede ser por la pleura, pericardio o la pared torácica. Un dolor o presión central pro-
longado (> 1/2 h), sordo, aplastante, sugiere IM.
Irradiación: a los hombros, a uno o a ambos brazos, o cuello/mandíbula sugiere isquemia
Medicina cardiovascular
1 El 25% de los dolores torácicos no cardíacos son musculoesqueléticos: mire por dolor con posturas o
actividades específicas. Trate de reproducir el dolor por el movimiento, y, a veces, por palpación sobre
las estructuras que lo producen. La inyección local de un anestésico local ayuda a diagnosticar y es tera-
péutica. Síndrome de Tietze: osteocondritis autolimitada ± inflamación de articulación costoesternal.
Causas: idiopático; microtrauma; infección; artritis psoriásica/reumatoide. Tratamiento: AINE o inyección
de corticoides. La sensibilidad puede ser causada también por: fibrositis, linfoma, condrosarcoma, mie-
loma, metástasis, tuberculosis costal. Imagen: gammagrafía ósea, TC.
Medicina cardiovascular
raleza de los síntomas.
Un paciente vino a un autor previo de la serie Oxford Handbook Clinical Medi-
cine diciendo «La pasada noche soñé que había tenido un dolor en el pecho. Ahora
me he despertado y no estoy seguro; ¿tuve dolor torácico, doctor? ¿Qué piensa
usted?». Qué extraño fue que pidieran examinar a un paciente para descartar un
síntoma, no una enfermedad. (Resultó que tenía una patología torácica grave). Extra-
ño hasta que pensamos que los síntomas están con frecuencia a medio hacer, y que
es nuestro trabajo darles un lugar y un nombre. El diálogo puede transformar un sín-
toma de la nada insustancial a un hecho2.
Los pacientes evitan con frecuencia utilizar la palabra «dolor» para describir la
isquemia: «flato», «tirantez», «presión», «quemazón» o un «nudo en la garganta»
(angina quiere decir estrangular) pueden ser utilizados. Puede decir «punzante» para
transmitir gravedad y no el carácter. Así que sea en su interrogatorio tan vago como
su paciente es en sus respuestas. «Dígame algo más sobre lo que está sintiendo
(larga pausa)…¿como si alguien estuviera haciéndole qué a usted?» «Sentándose
sobre mí» o «como un calor» puede ser la respuesta (sugiriendo isquemia cardía-
ca). No pregunte ¿Se va hacia su brazo izquierdo? Trate de esta forma: ¿Algo más que
decirme? (pausa)…¿se va hacia algún lado? Anote las palabras exactas de su pa-
ciente.
Una buena historia, tomando nota de todos estos aspectos, es la mejor manera
de estratificar el riesgo de que el paciente tenga dolor de causa cardíaca. Si la histo-
ria es no específica, no existen factores de riesgo cardiovascular, y el ECG y la tro-
ponina T (p. 118) son normales 6-12 horas el inicio del dolor, el alta será probable-
mente correcta. Cuando tenga dudas, pida ayuda. Datos que hacen que el dolor car-
díaco sea improbable:
• Dolor como una puñalada o un disparo.
• Dolor que dura < 30 segundos, aunque sea intenso.
• Bien localizado, dolor submamario izquierdo («en mi corazón, doctor»).
• Dolores que cambian continuamente de localización.
• Juventud.
No crea que debe diagnosticar cualquier dolor. El dolor torácico sin causa es
común, incluso después de un estudio extenso. Algunos pacientes tienen un «sín-
drome de dolor crónico» similar a la neuralgia postherpética. Habitualmente estos
responden a un tricíclico, p. ej., dosis baja de aminotriptilina por la noche (esta dosis
no implica ninguna depresión).
Evite ser el doctor que triunfantemente le dice al paciente que está bien y que
puede marcharse a casa, para recibir una mirada furiosa, pues el molesto dolor
que trajo al paciente no ha mejorado con respecto a cuando llegó. Tómese tiempo
para explicar por qué no cree que el dolor se deba a ninguna patología peligrosa; dé
consejos sobre el dolor crónico y explique signos de alarma, y tranquilice al pacien-
te diciéndole que su problema muy probablemente se resolverá con el tiempo.
2 Los síntomas transformados por el diálogo explican una de las vejaciones de los residentes; cuando
los pacientes vuelven a contar los síntomas a los adjuntos a la luz del día, no guardan ninguna similitud
con lo que ellos escucharon originariamente. Pero no se sienta vejado: su diálogo ha podido ayudar al
paciente más que cualquier visita en la planta.
• Ritmo: Si los ciclos no son claramente regulares, utilice el «método de la tarjeta»: ponga
una tarjeta sobre el ECG y marque la posición de tres ondas R sucesivas. Deslice la
carta hacia delante y hacia atrás para comprobar que todos los intervalos son iguales.
Si no lo son, compruebe si:
– Hay un pequeño y regular aumento seguido de disminución (con la respiración):
arritmia sinusal, común en los jóvenes.
– Hay diferentes frecuencias que son múltiplos entre sí: bloqueo variable.
– Es 100% irregular: fibrilación auricular (FA) o fibrilación ventricular (FV)
El ritmo sinusal está constituido por una onda P seguida de un complejo QRS. La FA no
tiene ondas P discernibles y los complejos QRS son irregularmente irregulares. El flúter
auricular (p. 130, fig. 3.19, p. 131) tiene una línea basal de despolarización auricular «en
diente de sierra» (300/min) y complejos QRS regulares. El ritmo ventricular tiene com-
plejos QRS > 0,12 s con onda P que los siguen o están ausentes (fig. 3.12, p. 106).
• Eje: La dirección global de la despolarización a lo largo del plano anterior del tórax del
paciente. Ver el CUADRO «Determinando el eje del QRS». La desviación izquierda
del eje puede producirse en el hemibloqueo anterior izquierdo, IM inferior, TV con un
foco en el VI, WPW, HVI. La desviación derecha del eje puede producirse en HVD, TEP,
IM anterolateral, WPW y hemibloqueo posterior izquierdo.
• Onda P: Normalmente precede a cada complejo QRS y es positiva en II, III y aVF, pero
invertida en aVR. Onda P ausente: AF, bloqueo sinoauricular, ritmo de la unión (nodo AV).
P mitral: onda P bífida, indica hipertrofia de aurícula izquierda. P pulmonale: onda P picu-
da, indica hipertrofia de aurícula derecha. Pseudo-P-pulmonale puede verse en K+.
• Intervalo PR: Medida desde el inicio de la onda P al inicio del complejo QRS. Rango
normal: 0,12-0,2 s (3-5 cuadros pequeños). Un intervalo PR prolongado implica retra-
so en la conducción AV (bloqueo cardíaco de 1er grado). Un intervalo PR corto impli-
ca una conducción AV inusualmente rápida a través de una vía accesoria, p. ej., WPW,
p. 98 (ver fig. 3.26, p. 133).
• Complejo QRS: Ver fig. 3.2. Duración normal < 0,12 s. QRS > 0,12 s sugiere trastorno
de conducción intraventricular, p. ej. bloqueo de rama (p. 99, 100), trastornos metabó-
licos u origen ventricular (ectopia ventricular). Complejos ventriculares de amplitud
aumentada sugieren hipertrofia ventricular (p. 100). Ondas Q normales son < 0,04 s
de duración y < 0,02 mm de profundidad; se observan con frecuencia en I, aVL, V5 y
V6 y refleja la despolarización septal normal. Ondas Q patológicas (profundas y
anchas) pueden ocurrir a las pocas horas de un infarto.
Fig 3.2. Complejos «QRS». Si la primera deflexión de la línea de base es negativa, se trata de
una onda Q. Cualquier deflexión positiva es una onda R. Cualquier deflexión negativa después
de una R es una onda S.
• Intervalo QT: Medido desde el inicio del QRS al final de la onda T. Varía con la frecuencia.
El intervalo QT corregido (QTc) es el intervalo QT dividido entre la raíz cuadrada del
intervalo R-R, es decir QTc = QT/ÖRR. QTc normal 0,38-0,42 s. En la p. 711 se indican
las causas de intervalo QTc prolongado. QT largo puede producir TV y muerte súbita.
• Segmento ST: Habitualmente isoeléctrico. La elevación (> 1 mm) o depresión
(< 0,5 mm) del plano habitualmente implica infarto (p. 119, fig. 3.9, 3.10, p. 103-4) o
isquemia (p. 103), respectivamente.
• Onda T: Normalmente invertida en aVR, V1 y, ocasionalmente, V2. Normal si está inver-
tida de forma aislada en derivación III. Anormal si invertida en I, II, V4-V6. Picuda en
hipercaliemia (fig. 14.4, p. 675) y aplanada en hipocaliemia.
• Onda J: Ver p. 849. El punto J es donde termina la onda S y comienza el segmento ST.
Una onda J es una muesca en este punto. Visto en hipotermia, SAH y Ca2+.
R 97
1,0
Segmento PR Segmento ST
10 nm
0,5
T
P
Medicina cardiovascular
U
0,0
1 nm
Intervalo QRS
Intervalo QT
98 ECG: anormalidades
Taquicardia sinusal. Todos los impulsos se inician en el nódulo sinoatrial («ritmo sinu-
sal») y por tanto todos los complejos QRS van precedidos de una onda P con un inter-
valo PR normal. Taquicardia quiere decir una frecuencia < 100 lpm. Ver p. 127.
Bradicardia sinusal. Ritmo sinusal a una frecuencia < 60 lpm. Causas: entrenamiento
físico, ataques vasovagales, síndrome del seno enfermo, fármacos (-bloqueantes, digoxi-
na, amiodarona), hipotiroidismo, hipotermina, presión intracraneal, colestasis. Ver p. 122.
Medicina cardiovascular
99
Medicina cardiovascular
Bloqueo AV Mobitz tipo I (Wenckebach). Con cada QRS sucesivo,
el intervalo PR se prolonga hasta que hay una onda P que no se conduce.
Medicina cardiovascular
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Medicina cardiovascular
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Medicina cardiovascular
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Fig. 3.11. Cambios que se observan en hipertensión pulmonar (p. ej., después de un TEP):
• Desviación derecha del QRS (QRS más negativo que positivo en I) y complejos QRS positivos («ondas R dominantes») en V1 y V2, lo que sugiere
hipertrofia del ventrículo derecho.
Medicina cardiovascular
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Medicina cardiovascular
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Medicina cardiovascular
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zón. Por ejemplo, después de un IM la zona afectada puede estar hipocinética. Las técni-
cas de estrés nos permiten estudiar el corazón en reposo y después bajo situaciones de
estrés, comparando la perfusión y la función en los dos estados. La RM es un área que
se está expandiendo rápidamente, aunque no está todavía disponible en la mayoría de
los grandes hospitales.
Radiografía de tórax. La humilde RX de tórax nos ofrece una imagen estática del
corazón y poco detalle, aunque puede ser una fuente importante de información y es
con frecuencia la única técnica de imagen accesible para un paciente nuevo o que pre-
sente empeoramiento clínico. Un corazón agrandado (ratio cardiotorácica > 0,5) sugie-
re insuficiencia cardíaca congestiva; signos de edema pulmonar sugieren insuficiencia car-
díaca descompensada (ver fig. 3.38); un corazón globular puede indicar derrame peri-
cárdico (fig. 3.14); se observarán los cables y las válvulas metálicas, evidenciando cirugía
cardiotorácica previa; la dextrocardia puede explicar un ECG extraño; y las muescas cos-
tales pueden ser una clave importante en la coartación de la aorta (p. 156).
Ecocardiografía: Es la técnica de imagen esencial en cardiología. Se utiliza el ultrasoni-
do para obtener imágenes en vida real del corazón en movimiento. Puede ser transto-
rácico (ETT) o transesofágico (ETE), en reposo, durante ejercicio o tras la infusión de un
agente farmacológico estresor (p. ej., dobutamina). Si el paciente está tan malo como
para no desplazarlo, el ecocardiógrafo puede acercarse a la cabecera del enfermo; el
registro continuo de ETE puede utilizarse como una guía durante la cirugía. De manera
cada vez más frecuente, se están utilizando máquinas de eco de bolsillo para evaluar rápi-
damente a pacientes muy enfermos, realizándose posteriormente un ecocardiograma
formal. Ver p. 110.
TC cardíaco. Puede darnos información detallada sobre la estructura y función cardí-
aca. La angiografía con TC (fig 3.15) permite la visualización de las arterias coronarias
mediante el uso de contraste con una simple pausa de apnea y con una dosis de radia-
ción muy baja. Puede diagnosticar estenosis significativa (> 50%) en la enfermedad arte-
rial coronaria con una precisión del 89%. La TC coronaria tiene un valor predictivo nega-
tivo > 99%, lo que hace que sea una alternativa no invasiva a la coronariografía para des-
cartar enfermedad arterial coronaria. Se suele dar medicación para disminuir la frecuen-
cia cardíaca y la imagen puede ser sincronizada, lo que quiere decir que el escáner está
programado para obtener imágenes en determinados momentos que corresponden con
ciertos puntos del ECG del paciente. Permite caracterización del corazón en diferentes
puntos del ciclo cardíaco. Ver p. 740.
RM cardíaca. Un método libre de radiación que permite caracterizar la estructura y
función cardíaca, incluyendo la viabilidad del miocardio. Variando los ajustes pueden
hallarse diferentes defectos. La RM es el primer método de imagen para evaluar enfer-
medades que afectan directamente al miocardio (fig 3.16). En la actualidad hay disponi-
bles marcapasos que son seguros para la RM. Compruebe la seguridad de la RM con el
cardiólogo antes de solicitar una RM a un paciente con marcapasos. Ver p. 740.
Imagen nuclear. La perfusión es evaluada en reposo y con ejercicio, o con estrés indu-
cido farmacológicamente. Es particularmente útil en la evaluación de la viabilidad del
miocardio existente tras una estenosis coronaria, lo que permitirá evaluar si puede
implantarse un stent o realizar cirugía. Si la hipoperfusión es «fija», es decir, presente en
reposo o con estrés, la zona hipoperfundida es probablemente tejido cicatricial o no via-
ble. Si la perfusión es «reversible» en reposo, el miocardio puede beneficiarse de aumen-
to del aporte de flujo.
109
Medicina cardiovascular
Fig 3.14. Dos RX de tórax del mismo paciente; la de la derecha se realizó 6 meses tras la de
la izquierda. En la última imagen, un derrame pericárdico ha expandido la sombra cardíaca y le
ha dado una forma globular.
Reproducido de Leeson, Cardiovascular Imaging, 2011, con permiso de Oxford University Press.
110 Ecocardiografía
Esta técnica no invasiva utiliza la habilidad de las distintas estructuras cardíacas para refle-
jar de forma diferencial las ondas de ultrasonidos. No solo muestra la anatomía, sino que
también ofrece una representación continua del corazón funcionando durante su ciclo.
Tipos de estudio
Modo M (modo movimiento): Imagen de una única dimensión (tiempo) Ver fig. 3.17.
Bidimensional (tiempo real): Una imagen 2D, con forma de abanico de un segmento del
Medicina cardiovascular
corazón se muestra en la pantalla, que puede ser «congelada». Son posibles varias vistas
y las cuatro más comunes son: eje largo, eje corte, 4-cámaras y subcostales. La ecocar-
diografía 2D es buena para visualizar patologías como las cardiopatías congénitas, aneu-
rismas, trombo mural, mixoma de AI, defectos de los tabiques.
Ecocardiografía 3D: Ahora es posible con sondas matriciales y se denomina 4D (3D +
tiempo) si las imágenes se mueven.
Ecocardiografía Doppler y Doppler color: Diferentes chorros de colores ilustran el flujo y
los gradientes a través de las válvulas y de los defectos de los tabiques (p. 156). Efecto
Doppler (p. 736).
Imagen de Doppler tisular: Utiliza ultrasonido Doppler para medir la velocidad de los seg-
mentos miocárdicos a lo largo del ciclo cardíaco. Es particularmente útil para evaluar el
movimiento longitudinal, y por tanto la función ventricular a lo largo del eje largo, que es
un marcador sensible de insuficiencia cardíaca sistólica y diastólica.
Ecocardiograma transesofágico (ETE): Más sensible que el eco transtorático (ETT), dado
que el transductor está más próximo al corazón. Indicaciones: diagnóstico de disección
aórtica, evaluación de prótesis valvulares, buscar fuentes cardíacas de embolismo y endo-
carditis infecciosa. No realizar si existe enfermedad esofágica o inestabilidad de la colum-
na cervical.
Ecocardiografía de estrés: Se utiliza para evaluar la función ventricular, fracción de eyec-
ción, engrosamiento miocárdico, contractilidad segmentaria antes y después del ejercicio
y para caracterizar lesiones valvulares. Pueden utilizarse dobutamina y dipiridamol si el
paciente no puede realizar ejercicio. Económico y tan sensible/específico como el estu-
dio de perfusión con talio (p. 741).
Usos de la ecocardiografía
Cuantificación de la función global del VI: La insuficiencia cardíaca puede deberse a disfun-
ción ventricular sistólica o diastólica (o a ambas). El eco ayuda a medir el volumen tele-
diastólico. Si está aumentado, la causa probable es la disfunción sistólica. Si es pequeño,
diastólica. Las formas puras de disfunción diastólica son raras. La diferenciación es impor-
tante, dado que los vasodilatadores son menos útiles en la disfunción diastólica puesto
que se requiere unas presiones de llenado ventriculares elevadas.
El eco es también útil para la detección de hipocinesia focal o global. Aneurisma del VI,
trombo mural y HVI (el eco es 5-10 veces más sensible que el ECG en su detección).
Estimando la hemodinámica del ventrículo derecho: Los estudios de Doppler del flujo de
la arteria pulmonar y de la regurgitación tricúspide permiten la evaluación de la función
y presiones del VD.
Enfermedad valvular: La técnica de elección para medir los gradientes de presión y las
áreas de los orificios valvulares de las lesiones estenóticas. Detectar regurgitación valvu-
lar y estimar su significado es menos preciso. La evaluación de la función de las prótesis
valvulares es otro papel de la técnica.
Cardiopatías congénitas: Establece la presencia de lesión y su significado.
Endocarditis: Las vegetaciones pueden no ser vistas si < 2 mm en tamaño. ETT con Dop-
pler color es el mejor en la regurgitación aórtica (IA). El ETE es útil para visualizar las
vegetaciones valvulares mitrales, perforación de valvas y para buscar la existencia de abs-
cesos de la raíz aórtica.
Derrame pericárdico: El eco es la mejor técnica para su diagnóstico. El líquido puede acu-
mularse primero entre el pericardio posterior y el ventrículo izquierdo, después delante
de ambos ventrículos y anterior y lateral a la aurícula derecha.
MH (p. 152): Los datos del eco incluyen hipertrofia asimétrica del tabique, pequeña cavi-
dad del VI, AI dilatada y movimiento sistólico anterior de la válvula mitral.
(a)
111
Medicina cardiovascular
(b)
Septo
VD
Aorta
Pared ascendente
inferolateral
VI AD
Cúspide coronaria derecha
Cúspide no coronaria
AI
VM
Valva anterior Aorta
Valva posterior descendente
(c)
VI
VD
VM
VT Valva posterior
Valva lateral AD
AI Valva anterior
Valva septal
Fig. 3.17. Imágenes del eco. (a) Un corazón normal visto en el plano paraesternal de eje largo.
(b) Diagrama de lo que se puede ver en (a). (c) Un corazón normal visto en el plano apical de
4-cámaras. (d) Diagrama de lo que se ve en (c).
Reproducido de Leeson et al., Echocardiography, 2012, con permiso de Oxford University Press.
Medicina cardiovascular
Rama circunfleja
Arteria
coronaria
derecha Arteria descendente
anterior izquierda
Fig 3.18. (a) Anatomía de las arterias coronarias. (b) y (c) Imágenes de angiografías. (b) mues-
tra la arteria descendente anterior (DA). En (c) el mismo paciente después de haber coloca-
do una endoprótesis en la DA, lo que permite que el contraste fluya libremente en el vaso dis-
tal. La colocación de una endoprótesis es un tipo de angioplastia (un procedimiento para ensan-
char la luz de un vaso sanguíneo); en el contexto de las arterias coronarias, se llama ICP (inter-
vencionismo coronario percutáneo): ICPP (ICP primario) es un ICP realizado agudamente en
un paciente con síndrome coronario agudo); ver p. 120.
Imágenes (a) y (b) reproducidas de Ramrakha et al., Oxford Handbook of Cardiology, 2012, con permi-
so de Oxford University Press.
Medicina cardiovascular
repetida tras 12 horas, y seguida de 125 mcg (si anciano) a 250 mcg/d VO una vez al día
(62,5 mcg/d no es suficiente casi nunca). Dosis IV: 0,75-1 mg en 0,9% NaCl infundido en
2 horas. Riesgo de toxicidad si:
K+,
Mg+, o Ca2+. T1/2 36 h. Si ya está en tratamiento
con digoxina, utilizar menos energía con la cardioversión (comenzar con 5 J). 䊳 Si está
en tratamiento con amiodarona, divida entre dos la dosis de digoxina. ES: cualquier arrit-
mia (taquicardia supraventricular con bloqueo AV es sugestiva), náusea,
apetito, visión
de color amarillo, confusión, ginecomastia. Si se sospecha toxicidad, haga un ECG
(fig. 3.19), niveles de digoxina y mida K+, Mg2+ y Ca2+. Si se confirma la toxicidad, sus-
penda la digoxina, corrija los trastornos electrolíticos, trate las arritmias y considere Digi-
Fab® IV (p. 842). CI: MH, síndrome WPW (p. 133).
Fig 3.19. Este ECG muestra la clásica
marca inversa de la toxicidad digitálica:
segmento ST descendente con rápido
ascenso hacia la línea isoeléctrica. La
bradicardia es también sugestiva de into-
xicación digitálica.
noso.
Otros factores precipitantes: emoción, tiempo frío y comidas pesadas. Síntomas asociados:
disnea, nausea, sudoración, mareo. Datos que hacen la angina menos probable: dolor que
es continuo, pleurítico o que empeora con la deglución; dolor asociado con palpitacio-
nes, mareo o estremecimiento.
Causas. Ateroma. Rara vez: anemia; espasmo coronario; EAo; taquicarritmias; MCH;
arteritis/enfermedad de pequeño vaso (angina microvascular/síndrome cardíaco X).
Tipos de angina. Angina estable: inducida por ejercicio, aliviada por reposo. Buen pro-
nóstico. Angina inestable (progresiva o crescendo) La angina que aumenta en frecuencia
o severidad; ocurre con ejercicio mínimo o en reposo; asociada con riesgo de IM. Angi-
na de decúbito: Precipitada en decúbito supino. Angina variante (Prinzmetal): (RECUADRO:
«Angina vasoespástica») Producida por espasmo de la arteria coronaria (raro; puede
coexistir con estenosis fija).
Prueba ECG habitualmente normal, pero puede mostrar depresión del ST; ondas T
planas o invertidas; signos de IM previo. Análisis de sangre: Sistemático de sangre, siste-
mático de orina, test de función tiroidea, lípidos, Hba1c. Considerar eco y RX de tórax.
Investigación adicional suele ser necesaria para confirmar el diagnóstico de cardiopatía
isquémica –ver RECUADRO.
Tratamiento
Considere los factores desencadenantes: Anemia, taquicardia (p. ej., FA rápida), tirotoxicosis.
Prevención secundaria de enfermedad cardiovascular:
• Dejar de fumar; ejercicio; consejo dietético; optimizar hipertensión y control de diabetes.
• 75 mg de aspirina al día si no está contraindicado.
• Trate hiperlipidemia –vea p. 690.
• Considere inhibidores ECA, p. ej., si es diabético.
Alivio de síntomas: Trinitrato de glicerina (NTG) en pulverizador o tabletas sublinguales.
Recomiende al paciente repetir la dosis si el dolor no se ha ido tras 5 min y llamar a una
ambulancia si el dolor está presente 5 min tras la segunda dosis. ES: cefalea,
PA.
Medicación antianginosa: (p. 114) Primera línea: -bloqueante y/o calcioantagonistas
(䊳 no combine -bloqueantes con calcioantagonistas no dihidropiridínicos). Si estos
fallan en controlar los síntomas o no son tolerados, pruebe otros fármacos.
• -bloquenates: p. ej., atenolol 50 mg/12 horas o bisoprolol 5-10 mg/24 h.
• Antagonistas del calcio: amlodipino: comenzar con 5 mg/24 horas; diltiazem: la dosis
depende de la presentación.
• Nitratos de acción prolongada: p. ej., mononitrato de isosorbide: el régimen de inicio
depende de la presentación. Alternativamente: parches de NTG. EF: cefalea, PA.
• Ivabradina; reduce la frecuencia cardíaca con mínimo impacto en la PA. Los pacientes
deben estar en ritmo sinusal. Comenzar con 5 mg/12 horas (2,5 mg en ancianos).
• Ranolazina: inhibe la corriente de Na+ tardia. Comenzar con 375 mg/12 h. Precaución
si insuficiencia cardíaca, ancianos, peso < 60 kg o intervalo QT prolongado.
• Nicorandil: un activador del canal K+. Comenzar con 5-10/12 h. C: edema pulmonar
agudo, hipotensión severa, hipovolemia, insuficiencia VI.
Revascularización: Considérela cuando el tratamiento óptimo demuestra ser inadecuado.
• Intevencionismo coronario percutáneo (ICP): (p. 112) se infla un balón dentro del vaso
estenosado, abriendo la luz. Habitualmente se coloca una endoprótesis para reducir el
riesgo de reestenosis. Se recomienda terapia con doble antiagregación (habitualmente
aspirina y clopidogrel) durante al menos 12 meses tras la colocación de la endopró-
tesis para reducir el riesgo de trombosis intraprótesis. Debe buscarse el consejo de los
especialistas en pacientes con alto riesgo de sangrado o que requieren cirugía.
• Cirugía de revascularización coronaria: (p. 123) comparada con el ICP, los pacientes
sometidos a cirugía de revascularización suelen requerir menos repetición de la revas-
cularización. Sin embargo, la cirugía de revascularización es cirugía a corazón abierto,
la recuperación es más lenta y deja al paciente con dos grandes cicatrices (esternal y
de la safenectomía).
Medicina cardiovascular
• Imagen funcional (véase p. 108): gammagrafía de perfusión miocárdica, eco de
estrés (realización de la eco mientras se realiza ejercicio o se administra dobuta-
mina), MRI cardiaco.
El NICE recomienda realizar las siguientes pruebas cuando se esté considerando una
angina estable13.
Angina típica en un paciente con previa IHD confirmada
Tratar como una angina estable; si se requiere confirmación, use pruebas no invasi-
vas, ej. prueba de esfuerzo.
Angina típica y atípica
Angiografía TC, fig. 3.20. Si no es concluyente, use imagen funcional como 2ª opción
y angiografía transcatéter como 3ª.
Dolor de pecho no anginoso:
¿El paciente tiene cambios isquémicos en el ECG de 12 derivaciones?
• Sí: estudiar como si se tratase de anginas típica y atípica.
• No: no continúe estudiando si se trata de un IHD (a menos que haya alta sospe-
cha clínica de IHD por otras razones – consulte a un especialista). Asegúrese de
estudiar y explorar adecuadamente los diagnósticos alternativos de dolor toráci-
co.
Estas instrucciones deben ser interpretadas según el contexto clínico.
Investigaciones más avanzadas
Si el paciente tiene angina típica pero pocos factores de riesgo para IHD, asegúrese
de mirar los posibles factores precipitantes y agravantes, por ejemplo, anemia seve-
ra o cardiomiopatía.
Fig. 3.20. Se han utilizado los datos de un agiograma CT para construir esta imagen 3D.
La flecha blanca señala una obstrucción en la arteria coronaria derecha.
Tomado del Journal of the American College of Cardiology, 52(3), MM Henneman et al., Evaluación
No Invasiva Con Tomogragía Computerizada Multi-Corte para la Sospecha de Síndrome Coro-
nario Agudo, 216-22, 2008, con permiso de Elsevier.
ser un SCACEST: SCA con elevación del segmento ST (puede estar presente solo en V7-
8 si SCACEST posterio) o un BRI de nuevo inicio; o un SCASEST: SCA sin elevación del
segmento ST con Tn positivas, el ECG puede mostrar descenso del ST, inversión de la
onda T, cambios no específicos o puede ser normal. El grado de muerte irreversible de
miocitos varía, y puede ocurrir una necrosis significativa sin elevación del ST.
Factores de riesgo. No modificable: edad, sexo masculino, historia familiar de CI (IM
en familiares de primer grado < 55 años). Modificables: tabaco, hipertensión, DM, hiper-
lipidemia, obesidad, estilo de vida sedentario, uso de cocaína. Factores de riesgo contro-
vertidos incluyen: estrés, personalidad de tipo A, HVI, fibrinógeno, hiperinsulinemia,
niveles de homocisteína, genotipo ECA.
Incidencia. 5/1000 por año (RU) para elevación del ST (disminuyendo en RU&USA).
Diagnóstico. Un aumento en los marcadores cardíacos (p. ej., troponina) y cualquiera
de: síntomas de isquemia, cambios isquémicos nuevos en el ECG, desarrollo de ondas Q
patológicas, nueva pérdida de miocardio o anormalidades de la contractilidad segmenta-
ria en las técnicas de imagen.
Síntomas. Dolor centrotorácico agudo > 20 minutos de duración, con frecuencia aso-
ciado con náusea, sudoración, disnea, palpitaciones. SCA sin dolor torácico es llamado
«silente»; se ve con más frecuencia en ancianos y pacientes diabéticos. El IM silente
puede presentarse con: síncope, edema pulmonar, dolor epigástrico y vómito, hipoten-
sión postoperatoria y oliguria, estado confusional agudo, ictus y estados de hiperglicemia
diabética.
Signos. Distrés, ansiedad, palidez, sudoración, o
del pulso, o
de PA, 4º tono.
Puede haber signos de IC (PVC, 3er tono, crepitantes basales) o soplo pansistólico (dis-
función o rotura de papilares, CIV). Puede observarse febrícula. Posteriormente, pueden
aparecer roce pericárdico o edema periférico.
Pruebas. ECG: (Ver fig 3.21) IAMCEST: clásicamente, ondas T hiperagudas (altas), ele-
vación del ST o nuevo BRI ocurren en las primeras horas. En las horas o días siguientes
les siguen inversión de la onda T y ondas Q patológicas (p. 98). IAMSEST/Angina inesta-
ble: descenso del ST, inversión de la onda T, cambios no específicos o normal. 䊳 en 20%
de los IM, el ECG puede ser normal inicialmente. ECG en pacientes con marcapasos o
con bloqueos de rama crónicos no son útiles en el diagnóstico de IAMSEST14 y pueden
dificultar el diagnóstico de un IAMCEST15; en estos casos, la evaluación clínica y los nive-
les de troponina son especialmente importantes. RXT: mire por cardiomegalia, edema
pulmonar o ensanchamiento de mediastino. No retrase de forma rutinaria el tratamien-
to a la espera de la RXT. Sangre: Sistemático de sangre y de orina, glucosa, lípidos y enzi-
mas cardíacas. Enzimas cardíacas: (Ver fig. 3.17) Los niveles de troponina cardíaca (T e I)
son más marcadores más sensibles y específicos de necrosis miocárdicas. Los distintos
hospitales utilizan diferentes análisis: compruebe la pauta de muestras requeridas donde
trabaja (p. ej., dos muestras separadas por 3 h). Otras enzimas cardíacas (ver fig. 3.17)
son sensibles y menos específicas; su papel en el diagnóstico de SCA está disminuyendo
a medida que mejora el de las pruebas de troponina. Eco: alteraciones de la contractili-
dad segmentaria.
Diagnóstico diferencial (p. 94). Angina estable, pericarditis, miocarditis, miocardiopa-
tía de takotsubo (p. 145), disección aórtica (p. 655), TEP, reflujo/espasmo esofágico, neu-
motórax, dolor muscular, pancreatitis.
Tratamiento. Ver p. 120, p. 798-801.
Mortalidad. 50% de las muertes ocurren en las 2 primeras horas del inicio de los sín-
tomas. Hasta el 7% muere antes del alta. Peor pronóstico si: edad avanzada, fallo VI y cam-
bios del ST16.
119
Medicina cardiovascular
Normal Horas Días Semanas Meses
Fig. 3.21. Cambios secuenciales del ECG tras un IM agudo.
Enzimas cardíacas
x 50
Trop
CK Creatin quinasa
Nivel de enzimas en suero
Entrecruzamiento
Fig. 3.23. Diagrama de la unidad de contracción del miocardio. El complejo de la tropo-
nina controla cuándo pueden interactuar las cabezas de miosina con la cadena ligera para
producir la contracción de la fibra.
Fig. 3.24. IM agudo posterolateral. El infarto posterior es evidente por los cambios recíprocos vistos en V1-3: onda R dominantes (similar a ondas Q patológicas
Medicina cardiovascular
121
CAP. 03.qxd:Oxford 27/04/18 16:55 Página 122
3 La PVC aumenta con la inspiración. Adolf Kussmaul fue un destacado médico del siglo XIX y el pri-
mero que intentó hacer una gastroscopia. Inspirado por un tragador de sables, pasó un tubo rígido en
su estómago, aunque la tecnología de la luz era limitada y solo unos años después pudieron los gas-
troscopista visualizar el estómago.
Medicina cardiovascular
• Enfermedad de 3 vasos que afecta al segmento proximal de la DA.
Indicaciones para CRC: para mejorar los síntomas
• Angina que no responde a fármacos.
• Angina inestable (a veces).
• Si falla la angioplastia.
NB: cuando la CRC y el intervencionismo coronario percutáneo (ICP, p. ej., angio-
plastia) son dos opciones clínicas válidas, NICE recomienda que la disponibilidad de
la nueva tecnología de las endoprótesis debería inclinar la decisión hacia el ICP. En la
práctica, los pacientes con enfermedad de vaso único y función ventricular normal
deberían ser tratados con ICP, y los que tienen enfermedad de triple vaso y función
del VI anormal son tratados con cirugía con mayor frecuencia.
En comparación con el ICP, la CRC conlleva un tiempo de recuperación más largo
con mayor hospitalización del paciente. Los EAC recientes indican que la mortalidad
precoz y la supervivencia a 5 años son similares para ICP y CRC. Comparado con
ICP, CRC probablemente produce un alivio más completo de los síntomas y requie-
re repetir la revascularización con menos frecuencia.
Procedimiento: El corazón es habitualmente parado y la sangre es bombeada artifi-
cialmente por una máquina fuera del cuerpo (bypass cardíaco). Las toracotomías
mínimamente invasiva que no requiere esto están bien descritas21, pero los estudios
aleatorizados son escasos. La vena safena o la arteria mamaria interna del paciente
son utilizadas como injerto. Pueden colocarse varios injertos. > 50% de las venas
cierran a los 10 años (bajas dosis de aspirina ayudan a prevenirlo). La arteria mama-
ria interna dura más (pero puede producir adormecimiento de la pared torácica).
Con bomba o sin bomba
Parecen suponer poca diferencia22.
Después de la cirugía: Si la angina persiste o recurre (por poco flujo del injerto, enfer-
medad distal, nuevo ateroma u oclusión del injerto) reiniciar fármacos antianginosos
y considerar ICP. Asegure un tratamiento óptimo de la hipertensión, de la diabetes
y de la dislipemia, y de que se considera el tabaquismo. Continuar aspirina 75 mg/
24 h de forma indefinida; considere clopidogrel si la aspirina está contraindicada. Los
problemas de ánimo, sexuales e intelectuales son frecuentes al principio23. La reha-
bilitación ayuda.
• Ejercicio: caminar bicicleta nadar correr.
• Conducir al mes: no necesidad de comunicar a Tráfico si no tiene licencia profe-
sional, p. 158.
• Vuelta al trabajo, p. ej., a los 3 meses.
Medicina cardiovascular
Telemetría: Un paciente ingresado lleva electrodos cuyas señales son mostradas en
unas pantallas que son vistas por el personal. Así, si ocurre una arritmia peligrosa, la
ayuda está disponible inmediatamente. Este es un recurso intensivo que debe ser
reservado para pacientes con alto riesgo de arritmias peligrosas, p. ej., inmediata-
mente post-IM.
ECG de ejercicio: El paciente realiza ejercicio según un protocolo estandarizado (Bruce
en una cinta sin fin) mientras se vigila la PA y el ECG, mirando por cambios isquémi-
cos, arritmias y datos sugestivos de riesgo de arritmias, tales como onda delta.
Monitores Holter: El paciente lleva un monitor de ECG que registra su ritmo duran-
te 24 h-7 d mientras realiza su vida normal, el cual es posteriormente analizado. Pue-
den ser utilizados también para
detectar cambios sugestivos de
isquemia.
Registros en asa: Estos registran
solo cuando son activados por el
paciente –ellos inteligentemente
salvan una pequeña cantidad de
dato del ECG antes del evento–
útil si la arritmia produce pérdida
de conciencia: el paciente puede
presionar el botón cuando se des-
pierta. Los registros en asa pueden
implantarse debajo de la piel (p. ej.,
Reveal o el nuevo dispositivo,
inyectable LINQ), y son especial-
mente útiles en pacientes con epi-
sodios infrecuentes, dado que pue- Fig. 3.25. Este es un registro de un registrador en
den monitorizar continuamente asa, en el que cada línea continúa a la anterior. Este
durante meses o años a la espera trazado se registró en el momento de un episodio
de un evento (fig. 3.25). sincopal, y muestra enlentecimiento y una pausa de
Marcapasos y DAI: Estos registran 15 s: ¡suficientemente larga como para producir
detalles de la actividad eléctrica del síncope! Pero no lo suficientemente largo para
corazón y de la actividad del dis- permitir su registro en un ECG estándar, incluso si
positivo. Esta información puede el paciente estuviera en el hospital.
ser útil para establecer un origen Reproducido de Camm et al., ESC Textbook of Cardio-
arrítmico por los síntomas. vascular Medicine, 2009, con permiso de Oxford Uni-
versity Press.
• Variante de la normalidad: arritmia sinusal (la frecuencia cardíaca cambia con inspira-
ción/espiración); ritmo sinusal con extrasistolia frecuente.
• Fibrilación auricular (FA): p. 131, fig. 3.35.
• Flúter auricular con bloqueo variable: p. ej., P-P-P-QRS-P-P-QRS (bloqueo 3:1 seguido
de 2:1). El ritmo auricular es regular pero el ritmo ventricular (y, por tanto, el pulso) es
irregular.
• Taquicardia auricular multifocal: similar a la taquicardia auricular focal pero con múltiples
grupos de células auriculares que se alternan para iniciar el ciclo cardíaco. La morfología
de la onda P y los intervalos P-P son variables. Habitualmente asociado a EPOC.
Principio del tratamiento. Ver p. 807.
䊳䊳 Si el paciente está comprometido, utilice cardioversión CD (p. 770).
• Identifique y trate el ritmo subyacente: p. ej., trate la taquicardia sinusal secundaria a
deshidratación con líquidos IV; trate la taquicardia sinusal multifocal secundaria a EPOC
mediante la corrección de la hipoxia y la hipercapnia; trate la taquicardia auricular focal
secundaria a la toxicidad de la digoxina con fragmentos de anticuerpo específicos para
digoxina; trate la taquicardia reciprocante AV secundaria a WPW con flecainida, pro-
pafenona o amiodarona; para fibrilación o flúter auricular vea p. 130.
• Si se sospecha un ritmo de reentrada auriculoventricular (TRNAV o TRAV), conside-
re bloquear transitoriamente el nódulo AV. Esto debería romper el circuito de un ritmo
de reentrada auriculoventricular, permitiendo que se restablezca el ritmo sinusal. Si el
ritmo subyacente es actualmente auricular en origen (p. ej., flúter o taquicardia auricu-
lar), el bloqueo del nodo AV no tratará el ritmo pero el enlentecimiento del ritmo
auricular desenmascarará el ritmo auricular (fig. 3.28), ayudando en el diagnóstico y tra-
tamiento. El bloqueo del nódulo AV puede realizarse mediante:
1. Maniobras vagales: masaje del seno carotídeo, maniobra de Valsalva (p. ej., soplar en
una jeringa).
2. Adenosina IV: ver p. 806.
• En algunos casos, las taquiarritmias de complejo estrecho causan episodios sintomáti-
cos de suficiente severidad y frecuencia para recomendar la realización de un trata-
miento invasivo, p. ej., terapia de ablación de vías accesorias.
Fig 3.28. A este paciente se le trató con adenosina por una taquicardia que se pensó era debi-
da a reentrada auriculoventricular (TRAV o TRNAV). La adenosina ha enlentecido la frecuen-
cia ventricular, revelando la presencia de ondas de flúter (apariencia de dientes de sierra), y
demostrando que era erróneo el diagnóstico de TRAV o TRNAV.
Medicina cardiovascular
vidad, la enlentece, y después la AVN VM
conduce hacia abajo a través del
Haz de His
haz de His, que se divide en las VT
ramas izquierda y derecha. Esto Rama Rama
produce despolarización del mio- derecha izquierda
cardio desde abajo (ápex) hacia del haz del haz
arriba (tractos de salida). Hemi
fascículos
izquierdos
anterior y
posterior
Fig. 3.26. Conducción normal.
129
Medicina cardiovascular
Fig. 3.29. FV (p. 894).
Fig. 3.32. Un latido de fusión (*): un «latido normal» se fusiona con un complejo de TV crean-
do un complejo inusual.
Fig. 3.33. Un latido de captura (*): un complejo QRS normal entre rachas de TV. Esto no sería
esperado que ocurriera si el QRS ancho fuera debido a bloqueo de rama o a alteraciones
metabólicas.
Fig. 3.34. Bigeminismo: un QRS normal es seguido por un ectópico ventricular que es seguido
de una pausa compensadora; este patrón se repite posteriormente. Los latidos ectópicos tie-
nen la misma morfología, por lo que probablemente tienen el mismo origen.
Anticoagulación en FA 131
FA aguda: utilice heparina hasta que se realice una evaluación completa del riesgo de embolis-
mo (ver debajo) –p. ej., FA iniciada < 48 h antes y se está planeando una cardioversión electiva
(si > 48 h, asegure 3 semanas de anticoagulación terapéutica antes de cardioversión electiva; NB
la cardioversión guiada por eco transesofágico es una opción si se requiere cardioversión urgen-
te). Utilice ACOD (p. ej., apixabán) o warfarina (INR objetivo 2,3)) si riesgo elevado de embo-
Medicina cardiovascular
lismo (ictus isquémico previo, AIT, o embolismo periférico; 75 años con PA, DM, enfermedad
coronaria o arterial periférica; valvulopatía o
función VI/IC –solo realice eco si inseguro)30. No
utilice anticoagulación si se ha restaurado un ritmo sinusal estable, no existen factores de riesgo
tromboembólico y la recurrencia de la FA es poco probable (es decir, no cardioversiones pre-
vias fallidas, no cardiopatía estructural, no recurrencias previas, no FA sostenida por > 1 año).
FA crónica: La FA crónica puede ser paroxística (termina en < 7 d pero puede recurrir), persis-
tente (dura > 7 d, o permanente (FA continua, de largo plazo, ritmo sinusal no restaurable a pesar
de tratamiento). En todos los casos, la necesidad de anticoagulación debe evaluarse siguiendo el
sistema de puntuación CHA2DS2-VASc para evaluar el riesgo de ictus embólico (considerar anti-
coagulación si la puntuación es > 0 en hombres o > 1 en mujeres), y sopesar este con el riesgo
que supone la anticoagulación para el paciente, evaluado según el sistema de puntuación HAS-
BLED. La anticoagulación a largo plazo debe realizarse con ACOD (ver p. 350) o warfarina.
CHA2DS2-VASc: Insuficiencia cardíaca congestiva (1 punto), hipertensión (1), edad 65-74
años (1), edad > 74 años (2), diabetes (1), ictus/AIT/tromboembolismo previo (2), enferme-
dad vascular (2), sexo según categoría (1 si mujer). Una puntuación de 2 = riesgo anual de ictus
del 2,2%. Calculadoras online pueden ser útiles, p. ej., www.mdcalc.com
HAS-BLED: 1 punto por cada uno de: • INR lábil • edad > 65 • uso de medicación que
pueda predisponer al sangrado (p. ej., AINE, antiplaquetarios) • abuso de alcohol • hiperten-
sión incontrolada • historia de, o predisposición a, sangrado mayor • enfermedad renal • enfer-
medad hepática • historia de ictus.
FA preexcitada
En la FA preexcitada, vías accesorias que son capaces de conducir a rápidas velocidades (p. ej.,
a veces en síndrome WPW) pasan actividad eléctrica errática de las aurículas a los ventrículos,
no filtradas por el NAV. El ECG mostrará complejos QRS irregulares, anchos a > 200 lpm. Los
ventrículos no pueden mantener esta frecuencia por mucho tiempo; el paciente tiene un ries-
go elevado de TV o FV.
Fig. 3.35. (a) FA: note el espacio irregular entre los complejos QRS y la falta de ondas P. (b)
FA con respuesta ventricular rápida (a veces denominada como «FA rápida»). No existe patrón
para la separación de los QRS y la frecuencia > 100 lpm. (c) Flúter auricular con bloqueo 2:1
(2 ondas P por cada 1 complejo QRS). Las ondas P tienen la apariencia clásica de «dientes de
sierra». Las ondas P alternas se funden con el complejo QRS.
132 Marcapasos
En circunstancias normales el NAS juega el papel de marcapasos. En ocasiones, otras
áreas del miocardio marcan el ritmo (ver anteriormente en este capítulo). Si el corazón
no se está estimulando a si mismo con la frecuencia necesaria, puede ser preciso un mar-
capasos artificial. Entre las opciones se encuentran «estimulación por percusión» –gol-
pear el precordio con el puño, utilizado solo en situaciones preparada; estimulación
transcutánea –estimulación eléctrica vía parches de desfibrilador (p. 770); estimula-
Medicina cardiovascular
133
Medicina cardiovascular
Fig. 3.36. ECG de un ritmo marcado.
Algunos términos de marcapasos
Latido de fusión: Unión de la despolarización nativa y el impulso del marcapasos.
Latido de pseudofusión: El impulso de marcapasos ocurre justo antes de la despola-
rización cardíaca, así que es inefectivo pero distorsiona la morfología del QRS.
Latido de pseudopseduofusión: Si un marcapasos DVI produce una espícula auricular
dentro de un complejo QRS estrecho, la descarga auricular no es contributoria.
Síndrome del marcapasos: En el marcapasos de cámara única, la conducción retró-
grada a la aurícula hace que esta se contraiga durante la sístole ventricular. Esto pro-
duce flujo retrógrado a través de las venas pulmonares y
gasto cardíaco, disnea,
palpitaciones, malestar e incluso síncope.
Taquicardia mediada por marcapasos: La conducción retrógrada hacia las aurículas es
sensada por el marcapasos y se produce una estimulación ventricular. Esto produce
una nueva captura auricular retrógrada, lo que ocasiona asa repetitiva de sensa-
do/estimulación. Esto puede resolverse cambiando los parámetros de programación
del marcapasos.
Fig. 3.37. Este paciente tiene un síndrome de Wolff-Parkinson-White pues presenta ondas
delta (empastamiento del ascenso del QRS) de los latidos 1 a 4 de esta tira de ritmo. La onda
delta ensancha el complejo ventricular y acorta el intervalo PR. 䊳 Si el paciente con WPW pre-
senta FA, evite bloqueadores del nódulo AV como diltiazem, verapamilo o digoxina, pero puede
utilizarse flecainida.
Medicina cardiovascular
(a)
Vasos dilatados y
prominentes del
lóbulo superior
Edema alveolar
(«En alas de
murciélago»)
Cardiomegalia
Líneas B de Kerley
(edema intersticial)
Derrame pleural
Fig. 3.38. RX de tórax en insuficiencia cardíaca izquierda. Ver también (b). Estos hallazgos pue-
den ser recordados como A, B, C, D, E. Edema Alveolar, manifestado clásicamente como
sobra en «alas de murciélago». Líneas B de Kerley –ahora conocidas como líneas septales, atri-
buido de diversas maneras a edema intersticial y dilatación de los linfáticos periféricos. Car-
diomegalia –índice cardiotorácico > 50% en una imagen PA. Venas del lóbulo superior promi-
nentemente dilatadas (desviación al lóbulo superior). Derrame pleural. Otros datos incluyen
manguitos peribronquiales (engrosamiento de las paredes bronquiales) y líquido en las fisuras.
(b) «Alas de murciélago», edema pulmonar perihiliar indicando insuficiencia cardíaca y sobre-
carga de líquidos.
Medicina cardiovascular
deambula por los alrededores. Los pacientes con DAVI de flujos continuos (a dife-
rencia del pulsátil) no tienen pulso (fig. 3.39c) y la auscultación revelará un zumbido
mecánico, continuo e intenso. Si el paciente se colapsa y no hay zumbido, la resuci-
tación debe incluir controlar la fuente de energía del DAVI.
Péptidos natriuréticos
Durante tiempo se ha conocido que existen gránulos secretorios en la aurícula, y si
se inyecta tejido auricular homogeneizado en ratas, su volumen urinario (y la excre-
ción de Na+) aumenta; esto es debido al péptido natriurético auricular (ANP). El
BNP es una hormona similar originalmente identificada del cerebro de cerdo (de ahí
la B, de brain). Los niveles plasmáticos de BNP están estrechamente relacionados con
la presión del VI y en IM y disfunción del VI, estas hormonas pueden liberarse en
grandes cantidades. La secreción está también aumentada por taquicardia, glucocor-
ticoides y hormonas tiroideas.
Papel: Tanto ANP como BNP contrarrestan la distensión de la aurícula y de los ven-
trículos aumentando el GFR y disminuyendo la reabsorción renal de Na+, reducien-
do así la sobrecarga de volumen; y disminuyen la precarga mediante la relajación de
la fibra muscular lisa.
BNP es un biomarcador de insuficiencia cardíaca: BNP distingue la insuficiencia car-
díaca de otras causas de disnea de una forma más precisa que otros biomarcadores
y que la fracción de eyección del VI (sensibilidad > 90%; especificidad: 80-90%). El
aumento es mayor con la insuficiencia del ventrículo izquierdo que con la del ven-
trículo derecho, y con la disfunción sistólica que con la diastólica.
Niveles umbrales de BNP para el diagnóstico de insuficiencia cardíaca: Si el BNP > 100
ng/L, puede «diagnosticarse» insuficiencia cardíaca mejor que otras variables clínicas
o juicio clínico (historia, exploración física y RXT). BNP puede ser utilizado para des-
cartar insuficiencia cardíaca si < 50 ng/L. Un BNP > 50 ng/L no descarta otras enfer-
medades coexistentes; situaciones que pueden producir un aumento de BNP con:
taquicardia, isquemia cardíaca, EPOC, TEP, enfermedad renal, sepsis, cirrosis hepática,
diabetes y edad avanzada. También puede haber variaciones entre los distintos tipos
de ensayos, por lo que debe contactar con su laboratorio.
Pronóstico en insuficiencia cardíaca: Cuanto más elevado sea el nivel de BNP, mayo-
res serán la mortalidad cardiovascular y la mortalidad total (independientemente de
la edad, clase de la NYHA, IM previo y fracción de eyección del VI) y mayor el ries-
go de muerte súbita. Así, un paciente cuyos síntomas están actualmente bien con-
trolados puede beneficiarse de un tratamiento más agresivo si su BNP está persis-
tentemente elevado.
138 Hipertensión
La hipertensión44 es el factor de riesgo más importante para muerte prematura y ECV,
causando el ~50% de todas las muertes cardiovasculares (8 x 106/año). Es habitualmen-
te asintomática, por lo que el cribado regular (p. ej., 3 años) es una tarea vital –la mayo-
ría de las muertes cardiovasculares ocurren en áreas sin cribado universal45.
Definiendo hipertensión. La PA tiene una distribución sesgada en la población
(p. 751) y el riesgo se relaciona de forma continua con la PA, por lo que es imposible
Medicina cardiovascular
definir «hipertensión»46. Elegimos un valor por encima del cual el riesgo está significati-
vamente aumentado y los beneficios del tratamiento son claros, ver más abajo. No con-
fíe en una sola lectura –valore a lo largo de un período (la longitud del mismo depende
de la PA y de la presencia de otros factores de riesgo o lesión de órganos diana). Con-
firme con monitorización ambulatoria de la PA (MAPA) o una semana de lecturas en el
domicilio NB: el umbral diagnóstico es menos de ~ 135/85 mmHg.
A quién tratar. Todos los que tengan una PA 160/100 mmHg (mantenida, p. 133).
Para los que tienen una PA 140/90 mmHg, la decisión depende del riesgo de enfer-
medad coronaria, presencia de diabetes o lesión de órganos diana; ver fig 3.1044. El estu-
dio HYVET demostró que hay un beneficio sustancial incluso en tratar a pacientes de
más de 80 años47. Umbrales menores pueden ser apropiados para personas más jóve-
nes –la PA es en promedio menor en sujetos jóvenes (p. ej., 100-110/60-70 en los meno-
res de 18 años) y tienen por delante toda su vida con riesgo, aunque no existe la evi-
dencia que justifique tratarlos.
Hipertensión de bata blanca: Se refiere a una presión elevada en la clínica, pero normal
en el MAPA (promedio de día < 135/85). NICE dice que no debe tratarse; pero tienen
más riesgo de desarrollar hipertensión en el futuro y pueden tener riesgo de ECV. Hiper-
tensión enmascarada es lo opuesto.
Fase «maligna» o acelerada de la hipertensión: Un aumento rápido de PA que conduce a
daño vascular (la lesión patológica típica es la necrosis fibrinoide). Habitualmente una
hipertensión severa (p. ej., sistólica > 200, diastólica> 130) + hemorragias y exudados
retinianos bilaterales; el edema de papila puede estar presente o no. Los síntomas son
comunes, p. ej., cefalea ± trastornos visuales. Requiere tratamiento urgente, y puede pre-
cipitar también insuficiencia renal aguda, insuficiencia cardíaca o encefalopatía, las cuales
constituyen emergencias hipertensivas. Si no se trata, el 90% muere en 1 año; tratados,
el 70% sobrevive 5 años. Es más frecuentes en sujetos jóvenes y de raza negra. Busque
con insistencia por cualquier causa subyacente.
Hipertensión primaria o «esencial»: (Causa desconocida.) ~95% de los casos.
Hipertensión secundaria: ~5% de los casos. Entre las causas se encuentran:
• Enfermedad renal: la causa secundaria más común. El 75% se deben a enfermedades
renales intrínsecas: glomerulonefritis, poliarteritis nodosa (PAN), esclerosis sistémica,
pielonefritis crónica o riñones poliquísticos. El 25% son debidos a enfermedad vascu-
lorrenal, más frecuentemente a ateromatois (anciano, 么, fumador, p. ej., con enferme-
dad vascular periférica) o raramente a displasia fibromuscular (乆 joven).
• Enfermedad endocrina: síndromes de Cushing (p. 224) y Conn (p. 228), feocromocito-
ma (p. 228), acromegalia, hiperparatiroidismo.
• Otros: coartación (p. 156), embarazo (OHCS p. 48), regaliz, fármacos: esteroides, IMAO,
«la píldora» (anticonceptivos), cocaína, anfetaminas.
Signos y síntomas. Habitualmente asintomática (excepto hipertensión maligna, ver
antes en este tema). La cefalea no es más común que en la población general. Examine
siempre el SCV al completo y mire por si existe retinopatía. ¿Hay signos de alguna causa
subyacente (feocromocitoma, p. 228, etc.), signos de enfermedad renal, retraso entre los
pulsos radial y femoral o pulsos femorales débiles (coartación), soplos renales, riñones
palpables, o síndrome de Cushing? Mire por lesión de los órganos diana: HVI, retinopatía
y proteinuria –indican gravedad y duración de la hipertensión y se asocian con peor pro-
nóstico.
Pruebas. Para confirmar el diagnóstico: MAPA o control domiciliario de la PA. Para ayu-
dar a cuantificar el riesgo global: Glucosa en ayunas; colesterol. Para buscar lesión de órga-
nos diana: ECG o eco (¿cualquier grado de hipertrofia? ¿IM antiguo?). Para excluir causas
secundarias: Urea y electrolitos (p. ej.,
K+ en Conn); Ca2+ ( en hiperparatiroidismo).
Pruebas especiales: Ecografía/arteriografía renal (estenosis de la arteria renal); metaadre-
nalina en orina de 24 horas (p. 228); cortisol libre en orina (p. 225); renina; aldosterona;
RM aorta (coartación).
Medicina cardiovascular
4. Edema de papila.
Medir la PA con un esfigmomanómetro
• Use el manguito del tamaño correcto. La anchura del manguito debe ser > 40%
de la circunferencia del brazo. La porción hinchable debe centrarse sobre la arte-
ria braquial y el manguito debe aplicarse cómodamente. Apoye el brazo en posi-
ción horizontal al nivel esternal medio.
• Inflar el manguito mientras palpa la arterial braquial, hasta que el pulso desapa-
rezca. Esto da una estimación de la presión sistólica.
• Infle el manguito hasta 30 mmHg por encima de la presión sistólica, después sitúe
el estetoscopio sobre la arteria braquial. Desinfle el manguito a 2 mmHg/s.
• Presión sistólica: aparición de sonidos de golpeteo repetitivos sostenidos (Korotkoff I).
• Presión diastólica: habitualmente la desaparición de los sonidos (Korotkoff V). Sin
embargo, en algunos individuos (p. ej., mujeres embarazadas), los sonidos están
presentes hasta el punto cero. En este caso, debe usarse cuando se produce la
amortiguación de los sonidos (Korotkoff IV). Indique cuál se ha utilizado en cada
lectura. Para los niños, ver OHCS p. 157.
• Para consejo en el uso de esfigmomanómetros automáticos y una lista de los dis-
positivos validados, ver http://bhsoc.orf/how_to_measure_bloo_pressure.stm
Actuación ante la sospecha de hipertensión
Presión arterial clínica < Presión arterial clínica Presión arterial clínica
140/90 mmHg 140/90 180/100
Normotenso
Considerar iniciar
tratamiento anhipertensivo
inmediatamente.
Considerar referir
Ofrecer MAPA.
Calcular riesgo CV y mirar por lesión de órganos diana
Fig. 3.40. La presión objetivo es < 140/90 mmHg (150/90 si edad > 80), pero en diabe-
tes mellitus el objetivo es < 130/80 mmHg, y < 125/75 si proteinuria. Para cuantificar el
riesgo CV, ver www.hgsoc.org. NB: El umbral de riesgo CV de 20% 15% para CI solo. Ejem-
plos de lesión de órganos diana: • HVI • historia de IM o angina • historia de ictus/AIT
• enfermedad vascular periférica • insuficiencia renal.
na) con PA > 140/90 mmHg. La hipertensión «esencial» no es curable, por lo que se
requiere tratamiento a largo plazo.
Objetivo del tratamiento. < 140/90 mmHg (< 130/80 en diabeles, 150/90 si > 80).
Reduzca la presión arterial lentamente; las reducciones rápidas pueden ser fatales, espe-
cialmente en el contexto de ictus agudo. Esto puede disminuir –SPRINT49 ha demostra-
do que un objetivo de 120/80 es beneficioso.
Cambios en el estilo de vida.
Factores de riesgo concomitante: dejar de fumar; dieta
baja en grasas. Reduzca ingesta de alcohol y sal; aumento ejercicio; reduzca peso si obeso.
Fármacos. El estudio ALLHAT sugiere que una reducción adecuada de la PA es más
importante que el fármaco específico utilizado50. Sin embargo, los -bloqueantes pare-
cen menos efectivos que otros fármacos para reducir los eventos cardiovasculares mayo-
res, particularmente el ictus. -bloqueantes y tiazidas pueden incrementar el riesgo de
diabetes de nuevo inicio, los antagonistas del Ca2+ parecen neutrales e i-ECA y ARAII
pueden reducir el riesgo44.
Monoterapia: Si 55 años, y en pacientes de raza negra de cualquier edad, la 1ª elección
son los antagonistas del Ca o las tiazidas. Si < 55, 1ª elección es i-ECA (o ARAII si into-
lerante a i-ECA, p. ej., tos). Los -bloqueantes no son de 1ª línea en la hipertensión, pero
considérelos en pacientes jóvenes, particularmente: si intolerancia o contraindicación a
i-ECA (ARAII, si es una mujer en edad de procrear o si hay tono simpático.
Combinación de fármacos: iECA + antagonistas del Ca2+ o diuréticos es lógica, y ha sido
utilizada frecuentemente en los estudios. Hay poca evidencia utilizando los 3 fármacos
pero la recomendación actual es i-ECA, antagonista de los canales del Ca2+ y tiazina44.
Si la PA sigue todavía sin control con dosis adecuadas de los 3 fármacos, añada un 4ª
–considere: espironolactona 25-50 mg/24 h o tiazida a alta dosis, pero controle urea e
iones. De forma alternativa, -bloqueantes o un -bloqueante y obtenga ayuda. Com-
pruebe que el paciente toma la medicación (determinación de fármacos en orina, u
observe la respuesta al tratamiento).
Ejemplos de fármacos. Tiazidas: p. ej., clortalidona 25-50 mg/24 h VO una vez al día,
ES:
K+,
Na+, impotencia. CI: gota. Antagonistas canales Ca2+: p. ej., nifedipino MR, 30-60
mg/24 h VO. ES: sofocos, fatiga, hiperplasia gingival, edema maleolar; evitar las formas de
acción corta. I-ECA: p. ej., lisinopril 10-40 mg/24 h VO (máx 40 mg/d). i-ECA puede ser
1ª elección si coexiste HVI o en diabéticos (especialmente si microalbuminuria, p. 314) o
proteinuria. ES: tos, K+, insuficiencia renal, angioedema. CI: estenosis renal bilateral o este-
nosis aórtica; p. 114. ARAII: Candesartán (8-32 mg/d); precaución si enfermedad valvular
o miocardiopatía; monitorizar K+. ES: vértigo, urticaria, prurito. Útil si i-ECA producen tos.
-bloqueantes; p. ej., bisoprolol 2,5-5 mg/24 h VO. ES: broncoespasmo, insuficiencia cardí-
aca, frialdad periférica, adormecimiento, impotencia. CI; asma; precaución en insuficiencia
cardíaca. Considerar aspirina cuando la PA esté controlada si edad > 55 años. Añada
estatina si el colesterol está elevado. 䊳 La mayoría de los fármacos tarda 4-8 semanas en
producir el máximo efecto: no evalúe la eficacia con una única medida de la PA.
Hipertensión maligna (fig. 3.41). En general, utilice tratamiento oral, a no ser que
haya encefalopatía con IC. El objetivo es una reducción controlada de la PA en días, no
en horas. Evitar reducciones bruscas de la PA dado que la autorregulación cerebral es
pobre ( riesgo de ictus). Reposo en cama; no hay hipotensivo ideal, pero atenolol o blo-
queadores del Ca2+ de vida media larga pueden ser utilizados VO.
Encefalopatía: (Cefalea, signos de focalidad en SNC, convulsiones, coma) El objetivo es
reducir la PA a ~110 mmHg diastólica en unas 4 h. Ingrese en una zona monitorizada.
Inserte una línea arterial para control de la PA. Utilice labetalol IV (p. ej., 50 mg IV en 1
min, repetido cada 5 min; máx 200 mg) o infusión de nitroprusiato sódico (0,5
mcg/kg/min IV titulado hasta 8 mcg/kg/min, p. ej., 50 mg en 1 litro de glucosa 5%; espere
dar 100-200 ml/h durante unas pocas horas solo, para evitar el riesgo de la cianida).
䊳 Nunca use nifedipino sublingual para reducir la PA (disminuciones rápidas de la PA
pueden producir ictus)51.
Medicina cardiovascular
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Medicina cardiovascular
Fig. 3.42. Eritema marginado.
Imagen cortesía de Maria Angelica Binotto.
Síntomas: Disnea; fatiga; palpitaciones; síntomas del factor causal (p. ej., fiebre).
Signos: FA; ápex desplazado e hiperdinámico; soplo pansistólico en el ápex irradiado a la
axila; S1 suave; S2 desdoblado; P2 fuerte (hipertensión pulmonar). Gravedad: cuanto más
grave sea la lesión, mayor será el ventrículo izquierdo.
Pruebas: ECG: FA; P mitral si en ritmo sinusal (puede indicar tamaño aurícula izquierda);
HVI. RXT: AI y VI dilatados; calcificación del anillo mitral; edema pulmonar.
Ecocardiograma: Para evaluar la función del VI y la gravedad y etiología de la IM (transe-
sofágico para evaluar la gravedad y la idoneidad para la reparación valvular en lugar de
la sustitución). Cateterismo cardíaco: para confirmar el diagnóstico, excluir otras lesiones
valvulares y evaluar la presencia de enfermedad arterial coronaria (puede combinarse
revascularización miocárdica con cirugía valvular).
Tratamiento: Control de la frecuencia si FA rápida. Anticoagular si: FA; historia de embo-
lismo; prótesis valvular; estenosis mitral adicional. Los diuréticos mejoran los síntomas.
Cirugía4 cuando se deterioran los síntomas; el objetivo es reparar o reemplazar la válvu-
la antes de que se deteriore el VI de forma irreversible. Profilaxis de endocarditis infec-
ciosa para procedimientos GI/GU infectados.
Prolapso de la válvula mitral: Es la anormalidad cardíaca más frecuente (prevalencia ~5%).
Ocurre solo o asociada con CIA, ductus arterioso persistente, miocardiopatía, síndrome
de Turner, síndrome de Marfan, osteogénesis imperfecta, pseudoxantoma elasticum,
WPW (p. 133). Síntomas: Habitualmente asintomática. Puede desarrollar dolor torácico
atípico, palpitaciones o síntomas de disfunción autonómica. Signos: Chasquido mediosis-
tólico y/o soplo telesistólico. Complicaciones: IM, embolismo cerebral, arritmias, muerte
súbita. Pruebas: El eco es diagnóstico. El ECG puede mostrar inversión de la onda T en
cara inferior. Tratamiento: -bloqueantes pueden ayudar si hay palpitaciones y dolor torá-
cico. Cirugía si IM grave.
Estenosis mitral. Causas: Reumática, congénita, mucopolisacaridosis, fibroelastosis
endocárdica, carcinoide maligno (p. 271, raro), prótesis valvular.
Presentación: El área normal del orificio valvular es ~4-6 cm2. Los síntomas habitualmen-
te comienzan cuando el orificio es < 2 cm2. La hipertensión pulmonar produce disnea,
hemoptisis, cuadro similar a la bronquitis crónica, la presión de una aurícula izquierda dila-
tada sobre estructuras vecinas produce ronquera (nervio laríngeo recurrente), disfagia
(esófago), obstrucción bronquial; también fatiga, palpitaciones, dolor torácico, embolismo
sistémico, endocarditis infecciosa (rara).
Signos: Chapetas malares (debido a
gasto cardíaco); pulso de bajo volumen; FA común
(debido a dilatación de AI); latido del ápex no desplazado golpeante (S1 palpable); chas-
quido de apertura (válvula flexible); retumbo mesodiastólico (auscultado mejor en espi-
ración, con el paciente en decúbito lateral izquierdo). Se puede auscultar un soplo de
Graham Steel (p. 46). Gravedad: cuanto más grave sea la estenosis, más largo será el
retumbo diastólico y el chasquido de apertura estará más próximo a S2.
Pruebas: ECG: FA; P mitral; HVD, CAD progresivo. RXT: crecimiento de AI (doble con-
torno en la silueta del corazón derecho); edema pulmonar; calcificación de la valvular
mitral. Eco es diagnóstico. Existe estenosis significativa si el orificio de la válvula es
< 1 cm2/m2 de superficie corporal. Indicaciones para cateterismo cardíaco: valvulotomía
previa; signos de otra enfermedad valvular; angina; hipertensión pulmonar severa; válvu-
la mitral calcificada.
Tratamiento: Si en FA, el control de la frecuencia (p. 130) es crucial; anticoagular con warfa-
rina (p. 350). Diuréticos
precarga y la congestión venosa pulmonar. Si esto falla en contro-
lar los síntomas, valvuloplastia con balón (si válvula flexible, no calcificada), valvulotomía mitral
abierta o reemplazo valvular; profilaxis de EI para procedimientos GI/GU infectados (p. 144).
Penicilina oral como profilaxis contra las recurrencias de la fiebre reumática (p. 136).
4 En pacientes con síntomas graves en los que la cirugía cardíaca es muy peligrosa, considerar repara-
ción valvular percutánea, p. ej., MitraClip. Está disponible en centros especiales.
Medicina cardiovascular
Por estas experiencias, sentimos en nuestros corazones el trabajo de las Pasiones,
y por el ruido de su tumulto, entendemos el trabajo de su presencia»
Thomas Wright. The Passions of the Minde in Generall.1604
Desde los sacerdotes aztecas ofreciendo corazones humanos latiendo al dios Sol, a
las metáforas del corazón en las letras de las canciones de hoy en día, las ideas que
unen el corazón con la experiencia psicosocial humana personal, anímica y del ser
han impregnado el horizonte imaginativo de todas las culturas a través del tiempo.
Algunas de estas conexiones se relacionan con cambios psicosociales asociados
con elevaciones de adrenalina desencadenadas por las emociones –«mi corazón se
disparó», por ejemplo, es una frase que relacionamos tanto física como emocional-
mente. Otras frases relacionadas con el corazón resultan de extrapolaciones poéti-
cas de corazón/ideas del ser y no tienen explicación psicológica; p. ej., «lleva su cora-
zón en la manga».
Se está acumulando evidencia de que existe interacción entre el corazón y el yo
más allá de la metáfora y de la respuesta de «huir o atacar». Los trastornos afectivos,
algunos tipos de personalidad y experiencias personales traumáticas incrementan el
riesgo de enfermedades cardíacas, incluso cuando están controlados los factores del
estilo de vida54-56. En el «síndrome del corazón roto» (miocardiopatía de takotsubo),
la morfología de la contracción ventricular cambia en respuesta al estrés emocional
o físico (fig. 3.43). Semeja a un infarto de miocardio en términos de la historia clíni-
ca, cambios ECG y aumento de troponina, pero el pronóstico y el tratamiento pue-
den ser muy diferentes, por lo que un diagnóstico preciso es importante.
Como médicos, con frecuencia nos centramos en los aspectos físicos de la enfer-
medad, pero lo físico y lo psicológico están inconvenientemente relacionados y
ambos deben ser abordados para realizar el mejor tratamiento. ¿Debería ofrecerse
terapia conductual además de tratamiento con estatinas a un paciente afectado de CI?
¿Podría el IM que sufre un paciente en duelo tratarse de una miocardiopatía de
takotsubo? Para responder estas preguntas deberíamos mirar más allá del ECG y
de la troponina, al «dolor de corazón» del tipo indicado por los filósofos y literatos.
Fig. 3.43. (a) Ventriculograma izquierdo del corazón en diástole. (b) El mismo corazón en
sístole. El ápex se hincha con forma de globo, mientras que la base se contrae, lo que pro-
duce un bombeo ineficiente y un riesgo de ruptura. Este patrón es la clásica miocardiopa-
tía de Takotsubo.
pulso carotídeo de ascenso reducido y retrasado –parvus et tardus); latido apical no des-
plazado y sostenido; tirón del VI; frémito aórtico; soplo sistólico eyectivo (auscultado en
la base, borde esternal izquierdo y el área aórtica, irradiado a las carótidas). S1 es habi-
tualmente normal. A medida que empeora la estenosis, A2 se va retrasando de forma
progresiva, produciendo primero un tono único y después desdoblamiento invertido. Lo
más común es un A2 disminuido de intensidad. En la EA grave, A2 puede ser inaudible
(válvula calcificada), Puede haber un chasquido de eyección (válvula flexible) o un S4.
Pruebas: ECG: HVI con patrón de sobrecarga; P mitral; CAI; escasa progresión de la onda
R en cara precordial; BRI o bloqueo AV completo (anillo calcificado). RXT: HVI; válvula
aórtica calcificada (fig. 3.44); dilatación postestenótica de la aorta ascendente. Eco: diag-
nóstico (p. 110). El Doppler puede estimar el gradiente a través de las válvulas: esteno-
sis grave es un gradiente pico 40 mmHg (pero sea consciente de que un ventrículo
izquierdo con mala función ventricular no puede generar gradiente) y área valvular
< 1cm2. Si el chorro de velocidad aórtico es > 4 m/s (o aumento > 0,3 m/s por año) el
riesgo de complicaciones está aumentado57. El cateterismo puede evaluar: gradiente val-
vular; función del VI; enfermedad arterial coronaria; riesgos: generación de embolismo.
Diagnóstico diferencial: Miocardiopatía hipertrófica (MH, p. 152); esclerosis aórtica.
Tratamiento: Si sintomático, el pronóstico es malo sin cirugía: supervivencia de 2-3 años
si angina/síncope; 1-2 años si insuficiencia cardíaca. Si moderada-grave y tratada medica-
mente, la mortalidad puede ser de hasta el 50% a los 2 años, por lo que se recomienda
el reemplazo valvular rápido (p. 148). En pacientes asintomáticos con EA grave y un ECG
que se va deteriorando, también se recomienda el reemplazo valvular. Si el paciente es
de alto riesgo para cirugía, el tratamiento percutáneo de valvuloplastia/reemplazo valvu-
lar (TAVI: implantación de válvula aórtica percutánea) puede intentarse (fig. 3.45).
Esclerosis aórtica. Degeneración senil de la válvula. Hay un soplo sistólico eyectivo,
pero sin irradiación carotídea y con un pulso (carácter y volumen) y S2 normales.
Insuficiencia aórtica (IAo). Aguda: Endocarditis infecciosa, disección de aorta ascen-
dente, trauma torácico. Crónica: Congénita, enfermedades del tejido conectivo (síndrome
de Marfan, Ehlers-Danlos), fiebre reumática, arteritis de Takayasu, artritis reumatoide, LES,
pseudoxantoma elástico, supresores del apetito (p. ej., fenfluramina, fentermina), artritis
seronegativas (espondilitis anquilosante, síndrome de Reiter, artropatía psoriásica), hiper-
tensión, osteogénesis imperfecta, aortitis sifilítica.
Síntomas: Disnea de esfuerzo, ortopnea, DPN. También: palpitaciones, angina, síncope, IC.
Signos: Pulso colapsante (en martillo de agua) (p. 42); presión del pulso aumentada; lati-
do del ápex desplazado, hiperdinámico; soplo protodiastólico de alta frecuencia (mejor
ausculatado en espiración con el paciente sentado e inclinado hacia delante). Eponimos:
signo de Corrigan : pulsación carotídea; signo de Musset: la cabeza se mueve hacia delan-
te y hacia atrás con cada latido cardíaco; signo de Quincke: pulsaciones capilares en los
lechos ungueales; signo de Durozietz: en la ingle, un dedo que comprima la arteria femo-
ral 2 cm por encima del estetoscopio produce un soplo sistólico; si lo hace 2 cm distal,
produce un soplo diastólico dado que la sangre fluye retrógradamente; signo de Traube:
sonido de «tiro de pistola»: sobre las arterias femorales; soplo de Austin Flint (p. 46) indi-
ca IA severa.
Pruebas: ECG: HVI. RXT: cardiomegalia; dilatación de aorta ascendente; edema pulmonar.
Eco es diagnóstico. El cateterismo cardíaco para evaluar: severidad de la lesión; anatomía
de la raíz aórtica; función del VI, enfermedad arterial coronaria; otras valvulopatías.
Tratamiento: El principal objetivo del tratamiento médico es reducir la hipertensión sis-
tólica; los i-ECA son útiles. Eco cada 6-12 meses para monitorizar. Indicaciones de ciru-
gía: IAo grave con dilatación de la aorta ascendente, síntomas progresivos, VI que se va
dilatando o con deterioro de la función en el eco; o endocarditis infecciosa refractaria a
tratamiento médico. El objetivo es reemplazar la válvula antes de que ocurra disfunción
del VI. Los predictores de mal resultado tras la cirugía: fracción de eyección < 50%,
NYHA clases III o IV (p. 135), duración de IC > 12 meses.
147
Medicina cardiovascular
Fig. 3.44. Válvula aórtica gravemente calcificada.
Cirugía cardíaca
La cirugía cardíaca ha recorrido un largo camino desde 1923, cuando el Dr. Henry Sout-
tar58,59 utilizó su dedo para abrir una válvula mitral estenosada en un corazón latiendo.6
La circulación extracorpórea permite un acceso prolongado a un corazón estático y abier-
to, con lo que pueden realizarse reparaciones o reemplazos valvulares o de raíces aórti-
cas complejos y de alta precisión. Los procedimientos claves de cirugía valvular incluyen:
Reemplazo valvular. Válvulas mecánicas pueden ser de caja y bola (Starr-Edwards),
disco pivotante (Bjork-Shiley), o de doble disco pivotante (St Jude). Estas válvulas son
muy duraderas pero el riesgo de tromboembolismo es alto; los pacientes requieren anti-
coagulación durante toda la vida. Los xenoinjertos están hechos de válvulas de porcino o
pericardio. Son menos duraderas y pueden requerir sustitución a los 8-10 años, pero tie-
nen la ventaja de no necesitar anticoagulación. Los homoinjertos con válvulas de cadáver
son especialmente útiles en pacientes jóvenes y en la sustitución de válvulas infectadas.
Complicaciones de válvulas protésicas: embolismo sistémico, endocarditis infecciosa.
Hemólisis, fallo estructural, arritmias.
Cirugía de revascularización. Ver p. 123.
Trasplante cardíaco. Considerarlo cuando la cardiopatía está limitando severamente
la calidad de vida y no se espera supervivencia de más de 6-12 meses.
Cirugía para cardiopatías congénitas. Ver p. 156.
Cirugía de la raíz aórtica. Reemplazo/reparación si disección o aneurisma.
5 Recuerde que la válvula tricúspide es la más vulnerable a los eventos que lleguen por las venas, p. ej.,
patógenos en los adictos a drogas ilícitas vía IV u hormonas (particularmente 5-HT) en el síndrome
carcinoide.
6 La propia descripción de Souttar de este hecho histórico está diponible online: HS Souttar. The sur-
Medicina cardiovascular
ción aórtica; arteritis coronaria. Mire por signos de artritis, p. 546.
Ataxia de Friedreich: (p. 698) Miocardiopatía hipertrófica, dilatación a lo largo del
tiempo.
Distrofia miotónica: (p. 510) Enfermedad progresiva del sistema de conducción; arrit-
mias; disfunción del VI.
Enfermedad de Behçet: (p. 694) Insuficiencia aórtica; trombo arterial ± venoso.
Enfermedad de Kawasaki: (OHCS p. 646) Arteritis coronaria similar a la PAN; más fre-
cuente que la fiebre reumática (p. 142) como una causa de cardiopatía adquirida.
Esclerosis sistémica: (p. 552) Pericarditis; derrame pericárdico; fibrosis miocárdica;
isquemia miocárdica; trastornos de conducción; miocardiopatía.
Espondilitis anquilosante: (p. 560) Trastornos de conducción; Bloqueo AV; IAo.
Hemocromatosis: (p. 288) FA, miocardiopatía.
Hipotiroidismo: (p. 220) Bradicardia sinusal; presión del pulso baja; derrame pericár-
dico; enfermedad arterial coronaria; ECG de bajo voltaje.
Lupus eritematoso sistémico: (p. 554) Pericarditis/derrame; miocarditis; endocarditis de
Libman-Sacks; prolapso de la válvula mitral; arteritis coronaria.
Poliarteritis nodosa (PAN): (p. 556) Vasculitis de vasos pequeños y medios + angina;
IM; arritmias; IC; pericarditis y defectos de conducción.
Sarcoidosis: (p. 196) Granulomas infiltrativos pueden producir bloqueo AV comple-
to; taquicardia ventricular o supraventricular; miocarditis; IC; miocardiopatía restricti-
va. El ECG puede mostrar ondas Q.
Sífilis: (p. 412) Miocarditis; aneurismas de aorta ascendente.
Síndrome carcinoide: (p. 271) Insuficiencia tricúspide y estenosis pulmonar.
Síndrome de Cushing: (p. 224) Hipertensión.
Síndrome de Down: (OHCS p. 642) CIA; CIV; insuficiencia mitral.
Síndrome de Ehlers-Danlos: (OHCS p. 642) Prolapso de la válvula mitral; aneurisma y
disección aórtica; piel hiperelástica; sangrados GI. Articulaciones laxas e hipermóvi-
les; existen mutaciones, p. ej., en genes para el procolágeno (COL3A1); hay seis tipos.
Síndrome de Holt-Oram: CIA o CIV con defectos de los miembros superiores (p. ej.,
polidactilia y pulgar con tres falanges60.
Síndrome de Klinefelter 么: (OHCS p. 646) CIA; Psicopatía; dificultades del aprendiza-
je;
libido; ginecomastia; excesivo vello facial y testículos pequeños y firmes, XXY.
Síndrome de Marfan: (p. 706) Prolapso de la válvula mitral; IAo; disección aórtica. Mire
por dedos largos y un paladar ojival.
Síndrome de Nooman: (OHCS p. 650) CIA, estenosis pulmonar implantación ± baja
de orejas.
Síndrome de Turner 乆: coartación de la aorta. Mire por cuello ancho y membrano-
so, XO.
Síndrome de Williams: estenosis aórtica supraventricular (
IQ espaciovisual).
Talasemia beta: (p. 342) Miocardiopatía dilatada y restrictiva.
Tirotoxicosis: (p. 218) Pulso; FA ± émbolo; presión del pulso aumentado; ápex hiper-
dinámico; sonidos cardíacos aumentados; soplo sistólico eyectivo; roce pleuroperi-
cárdico; angina; insuficiencia cardíaca de alto gasto.
Virus de inmunodeficiencia humana: (p. 398) Miocarditis; miocardiopatía dilatada;
derrame; arritmias ventriculares; endocarditis infecciosa; endocarditis trombótica no
infecciosa (marántica); IC derecha (hipertensión pulmonar); sarcoma de Kaposi
metastásico.
riesgo; enfermedad valvular aórtica o mitral; válvulas tricúspide en usuarios de drogas ile-
gales IV; coartación; ductus arterioso persistente; CIV; válvulas protésicas. La endocardi-
tis en prótesis valvulares puede ser «precoz» (en los primeros 60 días de la cirugía, habi-
tualmente Staph. epidermidis, mal pronóstico) o «tardía».
Causas. Bacteria: Ocurren bacteriemias durante todo el tiempo, p. ej., cuando masticamos
(no solo durante intervenciones odontológicas o médicas –que es el motivo por el que la
profilaxis de rutina para dichos procedimientos no tiene sentido)61. Strep. viridans es el más
común (habitualmente subaguda) seguido de S. aureus, S. bovis (necesita colonoscopia
?tumor), Enterococo y Coxiella burnetti. Rara vez: HACEK Bacteria gramnegativa (Haemo-
philus-Actinobacillus-Cardiobacterium-Eikenella-Kingella); difteroides; Chlamydia. Hongos: Candi-
da; Aspergillus; Histoplasma. Habitualmente en usuarios de drogas ilícitas IV, pacientes inmu-
nocomprometidos o en los que tienen prótesis valvulares. Elevada mortalidad, necesidad de
tratamiento quirúrgico. Otros: LES (endocarditis de Libman-Sacks), tumores.
Signos. Signos sépticos: Fiebre, escalofríos, sudoración nocturna, malestar, pérdida de
peso, anemia, esplenomegalia y dedos en palillo de tambor (fig. 3.46). Lesiones cardíacas:
Cualquier nuevo soplo o un cambio en un soplo preexistente debe hacer surgir la sos-
pecha de endocarditis. La vegetaciones pueden producir destrucción de la válvula y
regurgitación grave u obstrucción valvular. Un absceso de la raíz aórtica produce pro-
longación del intervalo PR y puede conducir a un bloqueo AV completo. IC izquierda es
una causa común de muerte. Depósito de inmunocomplejos: La vasculitis (p. 556) puede
afectar a cualquier vaso. La hematuria microscópica es común; pueden darse glomerulo-
nefritis aguda o insuficiencia renal aguda. Manchas de Roth (hemorragias retinianas en
forma de barco con palidez central; fig. 3.46); hemorragias en astilla (fig. 3.47); nódulos
de Osler (infartos dolorosos en la pulpa de los dedos y de los dedos de los pies). Fenó-
menos embólicos: Los émbolos pueden producir abscesos en órganos relevantes, p. ej.,
cerebro, corazón, riñón, bazo, intestino (o pulmón si EI del lado derecho) o la piel: deno-
minadas lesiones de Janeway (fig. 3.48; máculas indoloras palmares o plantares), que,
junto con los nódulos de Osler, son patognomónicos.
Diagnóstico.62 Utilice los criterios de Duke modificados (RECUADRO «Terapia antibióti-
ca»)63. Hemocultivos: Haga tres juegos de extracciones en diferentes momentos y en dife-
rentes sitios con el pico de la fiebre. 85-90% son positivos desde los primeros 2 juegos;
el 10% tiene hemocultivos negativos. Análisis de sangre: Anemia normocítica, normocró-
mica, neutrofilia, alta VSG/PCR. Factor reumatoide positivo (un fenómeno inmunológico).
También controle urea e iones, Mg2+, test de función hepática. Urianálisis: Por hematuria
microscópica. RXT: cardiomegalia, edema pulmonar. ECG periódicos: Mirar por bloqueo
cardíaco. Ecocardiograma: ETT (p. 110) puede mostrar vegetaciones, pero solo si > 2 mm.
ETE (p. 110) es más sensible y mejor para visualizar lesiones mitrales y el desarrollo de
abscesos de la raíz aórtica. TC: para buscar trombos (hígado, cerebro, etc.).
Tratamiento. Busque pronto la colaboración del microbiólogo y del cardiólogo62. Anti-
bióticos: ver RECUADRO «Terapia antibiótica para la endocarditis infecciosa». Cirugía si:
Insuficiencia cardíaca; obstrucción valvular; embolismos de repetición; endocarditis micó-
tica; bacteriemia persistente; absceso miocárdico; válvula protésica infectada inestable64.
Pronóstico. El 50% requiere cirugía. 20% mortalidad hospitalaria (Staph. 30%: bacterias
del intestino 14%; Strep. 14%). 15% recurrencias a los 2 años.
Prevención. No se recomienda en la actualidad profilaxis antibiótica para los que están
en riesgo de EI y se someten a procedimientos invasivos. Sin embargo, si reciben anti-
bióticos durante el procedimiento por otro motivo, el antibiótico debería cubrir los orga-
nismos que con más frecuencia producen EI.
Recomendaciones. Dé claras recomendaciones para la prevención, incluyendo:
• La importancia de mantener buena salud bucal.
• Síntomas que pueden indicar EI y cuándo buscar consejo experto.
• Los riesgos de procedimientos invasivos, incluyendo procedimientos no médicos como
piercing y tatuajes.
7Historia pasada de EI o fiebre reumática; adicción a drogas ilícitas IV; válvula dañada o reemplazada;
marcapasos permanente o DAI; cardiopatía congénita (pero no CIA simple, o completamente repara-
dos CIV o ductus); miocardiopatía hipertrófica.
Medicina cardiovascular
– Un único hemocultivo positivo para Coxiella burnetti.
• Afectación del endocardio:
– Ecocardiograma positivo (vegetación, absceso, pseudoaneurisma, dehiscencia
de válvula protésica) o
– Actividad anormal alrededor de válvula protésica en PET/TC o SPECT/TC o
– Lesiones paravalvulares en TC cardíaco.
Criterios menores:
• Predisposición (lesiones cardíacas; adicción a drogas ilegales IV).
• Fiebre > 38 °C.
• Fenómenos embólicos (émbolos, lesiones de Janeway, etc.).
• Fenómenos inmunológicos (glomerulonefritis, nódulos de Osler, etc.).
• Hemocultivos positivos que no cumplen criterios mayores.
Cómo diagnosticarla: EI definitiva: 2 mayores o 1 mayor y 3 menores o los 5 criterios
menores.
Fig. 3.46. Dedos en palillo de Fig. 3.47. Hemorragias en asti- Fig. 3.48. Las lesiones de Jane-
tambor con endocarditis. lla se observan normalmente way son puntos no dolorosos
bajo las uñas de las manos y de eritematosos, hemorrágicos o
los pies. Son de un color rojo pustulosos, p. ej., en las palmas
oscuro. de las manos y en las plantas de
los pies.
8Si se obtiene en el cultivo Streptococcus bovis, realizar una colonoscopia, puesto que la probable de
entrada sea una neoplasia de colon (tabla 6.3., p. 249).
Medicina cardiovascular
brucelosis, psitacosis
Espiroquetas Leptospirosis, sífilis, enfermedad de Lyme
Protozoos Chagas (p. 423), Leishmania, toxoplasmosis
Fármacos Ciclofosfamida, Herceptin, penicilina, cloranfenicol, sulfonamidas,
metildopa, espironolactona, fenitoína, carbamazepina
Toxinas Cocaína, litio, alcohol, plomo, arsénico
Inmunlógica LES, sarcoide, Kawasaki, esclerodermia, rechazo de trasplante
cardíaco
Fig. 3.49. Ecocardiograma de un paciente de 35 años que consultó por disnea de esfuerzo
grave y varios episodios sincopales. Obsérvese la gran masa (mixoma cardíaco) en la aurícula
izquierda. Abreviaturas: Ao: aorta. VD: ventrículo derecho. VI: ventrículo izquierdo. VM: válvula
mitral. VAo: válvula aórtica.
Reproducido con permiso de Hamid Reza Taghipour.
Fig. 3.50. Ecocardiograma del mismo paciente de la fig. 3.49 durante la diástole. Note cómo la
gran masa del mixoma auricular protruye en el ventrículo izquierdo durante la diástole y obs-
truye la válvula mitral casi completamente. Abreviaturas VD: ventrículo derecho. VI: ventrículo
izquierdo.
Reproducido con permiso de Hamid Reza Taghipour.
Fig. 3.51. Pericarditis. Note la elevación del ST difusa «en silla de montar», particularmente clara en V5 y V6.
arritmias (p. 124), insuficiencia cardíaca (p. 134) y endocarditis infecciosa (p. 150).
Pruebas. Ecocardiografía (contraste de burbujas) está en primera línea. Cada vez con
mayor frecuencia se utilizan TC y RM para dar información anatómica y funcional preci-
sa. El cateterismo cardíaco ofrece información sobre saturación de oxígeno y presión en
diferentes vasos y cámaras. La prueba de esfuerzo evalúa la capacidad funcional.
A continuación se discuten algunas de las CCA:
Válvula aórtica bicúspide. Funciona bien al nacimiento y pasa desapercibida. Muchos
desarrollan al final estenosis aórtica (que necesita reemplazo valvular aórtico) ± regurgita-
ción aórtica, lo que predispone a EI/EBS. El ejercicio intenso puede acelerar la aparición de
complicaciones, así que debe hacerse un ecocardiograma anual en los atletas afectados70.
Comunicación interauricular (CIA). Un agujero conecta las aurículas entre sí.
• Defectos tipo ostium secundum: 80% de los casos; la comunicación está alta en el tabi-
que; con frecuencia asintomático hasta la edad adulta, cuando se desarrolla el cortocir-
cuito ID. El cortocircuito depende de la distensibilidad de los ventrículos. La distensi-
bilidad del VI disminuye con la edad (especialmente si está PA), incrementando así el
cortocircuito ID (por tanto, aparece disnea/IC, típicamente a la edad de 40-60 años).
• Defectos de tipo ostium primum. Asociado con anormalidades de la válvula AV, p. ej., sín-
drome de Down; está presente desde la infancia.
Signos y síntomas: Dolor torácico, palpitaciones, disnea. Arritmias incl. FA; PVY; S2 desdo-
blado fijo; soplo de flujo sistólico pulmonar. La hipertensión pulmonar puede producir
regurgitación pulmonar o tricúspide, disnea y hemoptisis. Frecuencia de migraña. Pruebas
simples: ECG: BRD con CAI (defecto primum) o CAD (defecto secundum). RXT: peque-
ño botón aórtico, plétora pulmonar, crecimiento auricular. Complicaciones: • Inversión del
cortocircuito izquierda-derecha, es decir complejo de Eisenmenger: el cortocircuito ID
inicial conduce a hipertensión pulmonar con aumento de las presiones en el corazón
derecho hasta que exceden las del corazón izquierdo, lo que invierte el flujo. Esto pro-
duce cianosis, dado que la sangre pobre en oxígeno entra en la circulación sistémica. •
Embolismo paradójico, p. ej. ictus (vena arteria vía CIA, raro). Tratamiento: Puede cerrar
espontáneamete. Si no, los defectos de tipo ostium primum son cerrados habitualmente
en la infancia. Los defectos de tipo ostium secundum deben ser cerrados si hay síntomas
o signos de sobrecarga del VD. El cierre percutáneo es más frecuente que el quirúrgico.
Comunicación interventricular (CIV). Un orificio conecta ambos ventrículos. Cau-
sas: Congénita (prevalencia 2:1000 nacimientos); adquirido (post-IM). Síntomas: Puede pre-
sentarse como IC grave en la infancia o permanece asintomático y es detectado acciden-
talmente más tarde en la vida. Signos: Clásicamente, se ausculta un soplo pansistólico rudo
en el borde esternal izquierdo, con un frémito sistólico ± desplazamiento paraesternal
izquierdo. Las comunicaciones más pequeñas, que son menos significativas hemodinámica-
mente, tienen soplos más intensos. Signos de hipertensión pulmonar. Complicaciones: IAo,
EI/ESB, hipertensión pulmonar, complejo de Eisenmenger (arriba), insuficiencia cardíaca por
sobrecarga de volumen. Pruebas: ECG normal, CAI, HVI, HVD, RXT: silueta cardíaca nor-
mal y plétora pulmonar ligera (CIV pequeña) o cardiomegalia, arterias pulmonares gran-
des y plétora pulmonar marcada (CIV grandes). Cateterismo cardíaco: salto en la satura-
ción de O2 en el ventrículo derecho. Tratamiento: Inicialmente médico, pues muchos cie-
rran espontáneamente. Indicaciones para cierre quirúrgico: fallos de terapia médica, CIV
sintomática, cortocircuito > 3:1, EI/EBS. El cierre endovascular puede ser posible71.
Coartación de la aorta. Estrechamiento congénito de la aorta descendente; habi-
tualmente ocurre distal al origen de la arteria subclavia izquierda. Más común en niños.
Asociación: Válvula aórtica bicúspide; síndrome de Turner. Signos: Retraso radiofemoral;
pulso femoral débil; PA; soplo escapular; soplo sistólico (se ausculta mejor sobre la escá-
pula izquierda). Complicaciones: Insuficiencia cardíaca por la elevada postcarga; EI; hemo-
rragia intracerebral. Pruebas: TC o MR-aortograma; RXT puede mostrar muescas costa-
les dado que la sangre alcanza el hemicuerpo inferior a través de las arterias intercosta-
les; estos vasos se dilatan y erosionan las costillas. Tratamiento: Cirugía o balón de dilata-
ción ± implantación de endoprótesis.
Medicina cardiovascular
La «tetralogía» de datos son:
1. Comunicación interventricular.
2. Estenosis pulmonar.
3. Hipertrofia ventricular derecha.
4. La aorta cabalga sobre la CIV, aceptando la sangre
del corazón derecho.
Unos pocos pacientes también tienen CIA, lo que
constituye la pentalogía de Fallot.
Presentación: La gravedad de la enfermedad depende
en gran medida del grado de estenosis pulmonar. Los
niños pueden ser acianóticos al nacimiento, con el
soplo de estenosis pulmonar como única manifesta-
ción inicial. Gradualmente (especialmente tras el cie-
rre del ductus arteriosus) se hacen cianóticos debido
a la disminución del flujo de sangre a los pulmones y
al aumento del flujo derecha-izquierda a través de la
Fig. 3.52. Tetralogía de Fallot.
CIV. Durante una crisis hipóxica, el niño está inquie- Reproducido de Thorne et al.,
to y ag itado. Los niños pequeños pueden ponerse en Adult Congenital Heart Disease,
cuclillas, lo cual es típico de la TF, dado que aumenta 2009, con permiso de Oxford
las resistencias vasculares periféricas y, con ello, dis- University Press.
minuye el grado de cortocircuito derecha-izquierda.
Los pacientes adultos están con frecuencia asintomáticos. En el paciente adulto no
operado, la cianosis es común aunque la cianosis grave o ponerse en cuclillas es
raro. En los pacientes con repar ación quirúrgica, los síntomas tardíos pueden ser dis-
nea de esfuerzo, palpitaciones, dedos en palillo de tambor, fallo del VD, síncope e,
incluso, muerte súbita. Estudios: ECG muestra hipertrofia del VD con un bloqueo de
rama derecha. RXT puede ser normal o mostrar la característica típica de la TF, que
es el clásico corazón con forma de bota (fig. 3.53). La ecocardiografía puede mos-
trar la anatomía y el grado de estenosis. El
TC y la RM cardíacos pueden dar informa-
ción muy importante para planificar la ciru-
gía.73
Tratamiento: La cirugía se realiza habitual-
mente antes del primer año de vida, con
cierre de CIV y corrección de estenosis
pulmonar.
Pronóstico: Sin cirugía, la tasa de mortalidad
es del 95% para la edad de 20 años. Tras la
reparación, el 85% de los pacientes sobre-
vive a los 35 años. Problemas comunes en
la edad adulta incluyen insuficiencia pulmo-
nar, lo que produce dilatación y fallo del
VD; obstrucción en el tracto de salida del Fig. 3.53. Corazón con forma de bota.
VD; IAo; disfunción del VI y arritmias. Cortesía de Edward Singleton.
Medicina cardiovascular
simples) o convulsiones solo durante la noche pueden conducir. La posibilidad de
conducir en esta situación es condicional a que el paciente esté bajo seguimiento
médico y de que no haya motivos para pensar que tiene alto riesgo de nuevas cri-
sis.
• AIT o ictus. Estos pacientes no deben conducir por lo menos durante 1 mes. No
hay necesidad de informar a la DVLA, a no ser que haya daño neurológico resi-
dual tras 1 mes, p. ej., defecto del campo visual. Si los AIT han sido recurrentes y
frecuentes, se requiere un período de 3 meses libre de ataques.
• Ataques súbitos de mareos, desmayos o síncopes.
• Patologías neurológicas crónicas incluyendo la esclerosis múltiple, Parkinson (cual-
quier fenómeno de rigidez o bloqueo intermitente) y enfermedades de la neuro-
na motora.
• Trastornos mentales severos; incluyendo problemas de memoria serios o enfer-
medades psiquiátricas serias. Los pacientes con demencia pueden conducir solo si
la patología es leve (no se fíe de las evaluaciones realizadas sentados: son mejores
las que se realizan mientras el paciente conduce). Dígale a los familiares que con-
tacten con la DVLA si un familiar con problemas mentales no debería conducir.
Los médicos generales pueden romper la confidencialidad (los Colegios de Médi-
cos lo aprueban) e informar a la DVLA sobre pacientes dementes o psicóticos
(tel. 017927836886). En muchos conductores ancianos (~1 de 3) que fallecen en
accidentes se descubre que padecen de Alzheimer.
• Se ha implantado un marcapasos, desfibrilador o dispositivo antitaquicardia.
• Diabetes mellitus controlada por insulina o pastillas. El principal problema que
puede producir prohibición de conducir son las pérdidas de conciencia por la
hipoglucemia o el empeoramiento de la visión.
• Angina mientras se conduce.
• Cualquier tipo de cirugía cerebral, tumor cerebral. Traumatismo craneoencefálico
severo que requiera ingreso hospitalario para el tratamiento.
• Dificultad continuada/permanente en el uso de brazos y piernas que afecta a la
habilidad para controlar el vehículo.
• Dependencia o abuso de alcohol, drogas ilícitas o sustancias químicas en los últi-
mos 3 años (no incluir delitos relacionados con la bebida y la conducción).
• Cualquier alteración visual que afecte a ambos ojos (no declare miopía/hiperme-
tropía o daltonismo).
La visión (nuevos conductores) debería ser 6/9 en la escala de Snellen en el mejor
ojo y 6/12 en la escala de Snellen en el otro ojo, llevando gafas o lentes de contac-
to si son necesarios, y 3/60 en cada ojo sin gafas o lentes de contacto.
Las reglas indicadas arriba aplican para licencias estándar solo, para las del grupo 2
(p. ej., conductores de vehículos pesados) ver www.dvla.gov.uk/medical/ataglance.aspx.
4 Neumología
Contenido
Salud pulmonar 161
Pruebas:
Pruebas del médico de cabecera
en enfermedades del pecho 162
Investigaciones adicionales en
neumología 164
Enfermedades pulmonares:
Neumonía 166 Fig. 4.1. El Consejo de Investigación Médica
Neumonías específicas 168 publicó un documento histórico en BMJ (British
Complicaciones de la Medical Journal) acerca de estreptomicina como
tratamiento para la tuberculosis. El papel fue con-
neumonía 170 siderado como un hito en los antecedentes de
Bronquiectasias 172 ensayos clínicos y sentó un precedente en el uso
Fibrosis quística (FQ) 173 de la aleatorización en ensayos controlados. Antes
Tumores pulmonares 174 de esto, solo el reposo en cama había sido el
Tumores pulmonares: estándar en tratamiento para pacientes con
estadificación y tratamiento 176 tuberculosis. Después de los éxitos de la penicili-
Micosis pulmonares 177 na, hubo emoción en el descubrimiento de que la
Asma 178 estreptomicina poseía efectos que combatían los
Tratamiento del asma crónica 182 bacilos tuberculosos. Pacientes con edades com-
Enfermedad pulmonar obstructiva prendidas entre 15 y 30 años que padecen
crónica (EPOC) 184 «tuberculosis pulmonar bilateral aguda progresiva
Síndrome de distrés respiratorio con un origen presumiblemente reciente, bacte-
agudo (SDRA) 186 riológicamente probada e inadecuada para la
Fallo respiratorio 188 terapia de colapso» fueron ingresados con el pro-
pósito de ensayo. La estreptomicina y el grupo de
Tromboembolismo pulmonar reposo en cama mejoró inicialmente, pero el des-
(TEP) 190 arrollo de la resistencia fue pronto reconocido.
Neumotórax 190 Este fue un nuevo fenómeno que no se había pro-
Derrame pleural 192 ducido con penicilina. Esto llevó a la noción de
Síndrome de apnea obstructiva que las terapias combinadas son necesarias para
del sueño 194 superar la tuberculosis. Por eso ante la resistencia
Cor pulmonale 194 a los medicamentos y «Método de Edimburgo»,
Sarcoidosis 196 descrito en 1957, abogó por el uso de la terapia
Enfermedad pulmonar triple.
intersticial (EPI) 198
Alveolitis extrínseca alérgica
(AEE) 198
Fibrosis pulmonar idiopática
(FPI) 200
Enfermedades por polvo
industrial 201
Agradecemos al Dr. Phillippa Lawson, nuestro profesor especialista, ya William Flowers, nuestro pro-
fesor adjunto, por su contribución a este capítulo.
Neumología
materializarán hasta dentro de muchos años.
Laringe
Fig. 4.2. Imagen de la anatomía de los pulmones y de los bronquios mas importantes, Nóte-
se que el pulmón izquierdo tiene dos lóbulos y el derecho tiene tres.
Neumología
FEV1 = 4,0 FEV1 = 1,3 FEV1 = 2,8
FEVC = 5,0 FEVC = 3,1 FEVC = 3,1
% = 80. % = 42. % = 90.
Fig. 4.3. Ejemplos de espirogramas.
Radiología. Radiografía de tórax: Ver p. 722. Ultrasonido: Se utiliza para diagnosticar y guiar
el drenaje de derrames pleurales, particularmente derrames loculados) y empiema. Las
gammagrafías pulmonares: Ventilación/perfusión (V/Q, p. 738) se utilizan ocasionalmente
para diagnosticar tromboembolia pulmonar (TEP) (se observan defectos de perfusión con
ventilación). Las exploraciones óseas se utilizan para diagnosticar metástasis óseas. PET esca-
nea para evaluar el cáncer y la inflamación. Tomografía computarizada: (TC, p. 730) Se utili-
za para diagnosticar y clasificar el cáncer de pulmón, ver los hilios, el mediastino y la pleura,
y guiar las biopsias. La TC de alta resolución de sección delgada (1-1,5 mm) se utiliza en el
diagnóstico de la enfermedad intersticial, el enfisema y la bronquiectasia. La angiografía pul-
monar por TC (CTPA) se utiliza en el diagnóstico de TEP. Angiografía pulmonar. Actualmen-
te es poco utilizada para diagnosticar la hipertensión pulmonar.
Broncoscopia fibroóptica. Realizada bajo anestesia local vía nariz o boca. Indicacio-
nes diagnósticas: Sospecha de carcinoma pulmonar, neumonía de lenta resolución, neu-
monía en la enfermedad pulmonar intersticial del inmunodeprimido. El líquido de lavado
broncoalveolar puede ser enviado al laboratorio para microscopia, cultivo y citología. Las
anormalidades mucosas pueden ser cepilladas (citología) y biopsiadas (histopatología).
Indicaciones terapéuticas: Aspiración de tapones mucosos que producen colapso lobar,
extracción de cuerpos extraños, colocación de endoprótesis o tratamiento de tumores,
por ejemplo láser. Investigaciones previas al procedimiento: FBC, coagulación, RXT,TC, espi-
rometría, oximetría de pulso y GAB (si se indica). Complicaciones: Hipoxia, sangrado, neu-
motórax (fig. 16.43, p. 749). Sensibilidad diagnóstica para el cáncer 50-90%, depende de
la localización del tumor; el perfil genético de la muestra celular puede mejorarlo2. Tam-
bién puede utilizarse para introducir una sonda de ultrasonido (ultrasonido endobron-
quial) y tratamientos, por ejemplo, endoprótesis o crioterapia.
Lavado broncoalveolar (LBA). Se realiza en el momento de la broncoscopia
mediante la instilación y la aspiración de un volumen conocido de solución salina calen-
tada, tamponada al 0,9% en la vía aérea distal. Indicaciones diagnósticas: Sospecha de neo-
plasia maligna, neumonía, inmunodepresión (especialmente VIH), bronquiectasias, sospe-
cha de tuberculosis (si esputo negativo), enfermedades pulmonares intersticiales (por
ejemplo, sarcoidosis, alveolitis alérgica extrínseca, histiocitosis X). Indicaciones terapéuti-
cas: Proteinosis alveolar1. Complicaciones: Hipoxia (dar O2 complementario), fiebre tran-
sitoria, sombra RXT transitoria, infección (rara).
Biopsia pulmonar. Puede realizarse de varias maneras. La biopsia percutánea con aguja se
realiza bajo guía radiológica y es útil para lesiones pulmonares y pleurales periféricas. La biop-
sia transbronquial realizada en la broncoscopia puede ayudar a diagnosticar enfermedades
pulmonares intersticiales, por ejemplo sarcoidosis, fibrosis pulmonar idiopática. Alternativas:
Si no tiene éxito, considere la biopsia de pulmón abierta o la toracoscopia videoasistida.
Procedimientos quirúrgicos. Se realizan bajo anestesia general. La broncoscopia rígi-
da proporciona una luz ancha, permite biopsias mucosas más grandes, control de san-
grado y extracción de cuerpos extraños. Mediastinoscopia y examen mediastinotomía
permiten examen y biopsia de los ganglios linfáticos/lesiones mediastínicos. La toracos-
copia permite el examen y biopsia de lesiones pleurales, drenaje de derrames pleurales
y pleurodesis de talco y pleurectomía.
1 La proteinosis alveolar pulmonar produce tos, disnea y espirometría restrictiva. Es causada por acu-
mulación de compuestos fosfolipídicos/proteicos acidófilos derivados de surfactantes que llenan los
alvéolos y los bronquiolos distales. El diagnóstico puede requerir una biopsia pulmonar. Causa: proble-
ma genético o de anticuerpos primarios, o secundario a la inflamación causada por la inhalación de síli-
ce, aluminio o titanio3.
CVF
CPT
Neumología
CPT
VR
CVF
VR CPT
VR
PFE
FEF25
75 50 25 75 50 25
% %
Inspiración
Inspiración
FIF50
PIF
Normal Flujo espiratorio en el enfisema
Espiración
Volumen
75 50 25 %
166 Neumonía
Infección aguda de las vías respiratorias inferiores asociada con fiebre, síntomas y signos
en el pecho y anomalías en la radiografía de tórax, fig. 16.2, p. 723. Incidencia:
5-11/1000, en muy joven o viejo (30% están debajo de los 65 años). Mortalidad: ~21%
en el hospital.
Clasificación y causas
Neumonía adquirida en la comunidad: (NAC) Puede ser primaria o secundaria a enfer-
medad subyacente. Organismos típicos: Streptococcus pneumoniae (más común), Haemo-
philus influenzae, Moraxella catarrhalis. Atípicos: Mycoplasma pneumoniae. Staphylococcus
aureus, Legionella species y Clamidia. Los bacilos gramnegativos, Coxiella burnetii y los anae-
robios son más raros (? Aspiración). Los virus producen hasta 15%. La gripe puede com-
plicarse por la neumonía SARM adquirida en la comunidad.
Adquirido en el hospital: Definida como > 48 h después del ingreso hospitalario. Más
Neumología
Neumología
claritromicina 500 mg/12 h (durante 7 días)
Severa Como en el apartado Co-amoxiclavulánico 1,2 g/8 h IV o
CURB3 anterior cefalosporina IV (p. ej., cefuroxima 1,5 g/8 h
IV) y claritromicina 500 mg/12 h IV durante
7 días
Añadir flucloxacilina ± rifampicina si se
sospecha estafilococo; vancomicina (o
teicoplanina) si se sospecha SAMR. Tratar
durante 10 d (14-21 d si se sospechan Staph,
legionela o enterobacterias gramnegativas
Panton-Valentine Busque ayuda urgente. Considere agregar
Leukocidin-producing linezolid, clindamicina y rifampicina IV
Staph. aureus productor de
leukocidina (SA-PL)
Atípico Legionella pneumophilia Fluoroquinolona combinada con
claritromicina o rifampicina, si es severo. Ver
p. 168
Chlamydophila especie Tetraciclina
Pneumocystis jirovecii Dosis alta de cotrimoxazol (p. 400-1)
Adquirido en el hospital
Bacilos gramnegativos Aminoglucósido IV + penicilina
Pseudomonas antipseudomona IV o cefalosporina
Anaerobios 3ª generación IV (p. 387)
Aspiración
Streptococcus pneumoniae Cefalosporina IV + metronidazol IV
Anaerobios
Pacientes neutropénicos
Cocos grampositivos Aminoglucósido IV + penicilina
Bacilos gramnegativos antipseudomona IV o cefalosporina de
3ª generación IV
Hongos (p.177) Considere antifúngicos después de 48 horas
Vacuna neumocócica
En los grupos de riesgo:
• Todos los adultos 65 años de edad.
• Problemas crónicos de corazón, hígado, renales o pulmonares.
• Diabetes mellitus no controlada por la dieta.
• Immunosupresion, p. ej., función esplénica, sida, en quimioterapia o prednisolona
> 20 mg/d, implante coclear, profesiones de riesgo (por ejemplo, soldadores), fugas
de LCR. Vacunar cada 5 años.
CI: Embarazo, lactancia, anafilaxis previa a la vacuna o uno de sus componentes.
Neumología
específicos para CON H5&N1. Tratamiento: 䊳 Obtenga ayuda. Contenga el brote2,
p. 397, en el Reino Unido, a través de su consultor en el control de enfermedades
transmisibles14. Puede ser necesario un soporte ventilatorio + O2 y antivirales. La
mayoría de los virus son susceptibles al oseltamivir, peramivir y zanamivir. Los nebu-
lizadores y las mascarillas de O2 de alto flujo están implicadas en la propagación
nosocomial12,15.
Precauciones para los contactos cercanos de los pacientes infectados:
Higiene de las manos, evitar utensilios compartidos y contacto facial, usar máscaras
de alta eficiencia y protección para los ojos. Iniciar tratamiento antiviral empírico
(oseltamivir dentro de las 48 horas de exposición y zanamivir dentro de las 36
horas). Vigile la presencia de fiebre, tos, dificultad para respirar, diarrea u otros sínto-
mas sistémicos en desarrollo.
2 Losantivirales terapéuticos o profilácticos se dice que son los más eficaces en una intervención única,
seguida de vacunas y medidas básicas de salud pública18. Pero la resistencia al oseltamivir y la falta de
disponibilidad de vacunas adecuadas durante las primeras etapas de una pandemia hacen que las inter-
venciones sin fármacos sean las más importantes.
Fibrilación auricular (p. 130). Común en los ancianos, que por lo general se resuel-
ve con el tratamiento de la neumonía. Puede ser necesario el -bloqueante o digoxina
para ralentizar la respuesta ventricular a corto plazo. La digoxina mejor para aquellos con
un estilo de vida más sedentario.
Derrame pleural. La inflamación de la pleura por neumonía adyacente puede causar
exudación en el espacio pleural. Si esto se acumula más rápido de lo que se reabsorbe,
se desarrolla derrame pleural. Si es pequeña, puede no tener ninguna consecuencia. Si es
más grande y se produce en un paciente sintomático o infectado (empiema), se requie-
re drenaje (p. 192, 766).
Empiema. Pus en el espacio pleural. Se debe sospechar en un paciente con una neu-
monía en resolución que desarrolla una fiebre recurrente. Características clínicas: RXT
indica un derrame pleural. El líquido aspirado es típicamente amarillo y turbio con un pH
< 7,2, glucosa y LDH. El empiema debe ser drenado usando un drenaje torácico,
insertado bajo guía radiológica. Las adherencias y los derrames loculados pueden hacer
esto difícil.
Absceso pulmonar. Un área cavitada de infección supurativa localizada dentro del pul-
món (ver fig. 4.6).
Causas: • Neumonía mal tratada. • Aspiración (por ejemplo, alcoholismo, obstrucción del
esófago y parálisis bulbar). • Obstrucción bronquial (tumor, cuerpo extraño). • Infarto
pulmonar. • Embolia séptica (septicemia, endocarditis del corazón derecho, consumo de
drogas ilegales IV). • Absceso subfrénico o hepático.
Características clínicas: Fiebre oscilante; tos; esputo purulento, maloliente; dolor pleurítico
de pecho; hemoptisis; malestar; pérdida de peso. Busque: dedos en palillo de tambor, ane-
mia; crepitantes. Se desarrolla empiema en el 20-30%.
Pruebas: Sangre: sistemático de sangre (anemia, neutrofilia), VSG, PCR, hemocultivos.
Microscopia de esputos, cultivo y citología. RXT: Cavidad con paredes, a menudo con un
nivel líquido. Considerar TC para excluir obstrucción y broncoscopia para obtener mues-
tras para diagnóstico.
Tratamiento: Antibióticos como se indica por las sensibilidades; continuar hasta que se
cure (4-6 semanas). Drenaje postural. Puede requerirse repetición de aspiración, instila-
ción de antibióticos o extirpación quirúrgica.
Septicemia. Puede ocurrir como resultado de la propagación bacteriana desde el
parénquima pulmonar en el torrente sanguíneo. Esto puede causar una infección metas-
tásica, por ejemplo endocarditis infecciosa, meningitis. Tratar con antibiótico IV según las
sensibilidades.
Pericarditis y miocarditis. También puede complicar la neumonía.
Ictericia. Esto suele ser colestático, y puede deberse a una sepsis o secundaria a la anti-
bio-terapia (particularmente flucloxacilina y co-amoxiclavulánico).
171
Neumología
Fig. 4.6. Radiografía PA de tórax mostrando múltiples lesiones anulares redondeadas de dife-
rentes tamaños en la zona inferior derecha, en el vértice derecho y en la zona inferior izquier-
da. Las lesiones más grandes están en la parte baja derecha, que es una zona donde se puede
ver que contienen niveles hidroaéreos, apariencia típica de la infección en un pneumatocele (=
quiste de aire) o lesión de cavitación. También puede apreciarse un hidroneumotórax modera-
do derecho, sugiriendo que una de estas lesiones puede haberse roto en la cavidad pleural. El
paciente también tiene un catéter venoso central subclavio derecho para la administración de
antibióticos. El diagnóstico en este caso fue el de múltiples abscesos pulmonares en un pacien-
te que era consumidor de drogas intravenosas.
Imagen cortesía de Derby Hospital NHS Foundation Trust Radiology Department.
172 Bronquiectasias
Patología. Inflamación crónica de los bronquios y bronquiolos que conduce a dilata-
ción y adelgazamiento permanente de estas vías aéreas.19 Principales organismos:
H. influenzae; Strep. pneumoniae; Staph. aureus; Pseudomonas aeruginosa.
Causas. Congénita: Fibrosis quística (FQ); síndrome de Young; discinesia ciliar primaria;
síndrome de Kartagener (OHCS p. 646). Postinfección: Sarampión; tos ferina; bronquiolitis;
neumonía; TB; HIV. Otros: Obstrucción bronquial (tumor, cuerpo extraño); aspergilosis
broncopulmonar alérgica (ABPA, p. 177); hipogammaglobulinemia; artritis reumatoide;
colitis ulcerosa; idiopática.
Datos clínicos. Síntomas: Tos persistente; esputo purulento copioso; hemoptisis inter-
mitente. Signos: Dedos en palillo de tambor; crepitaciones inspiratorias gruesas; sibilancias
(asma, EPOC, ABPA). Complicaciones: Neumonía, derrame pleural; neumotórax; hemop-
tisis; absceso cerebral; amiloidosis.
Neumología
Fig. 4.7. Radiografía PA de tórax de bonquiectasias que muestra una dilatación marcadamen-
te anormal de las vías aéreas en el lóbulo superior derecho, y cambios sutiles similares en el
resto del pulmón (particularmente en la periferia del lóbulo superior izquierdo). El patrón re-
ticular basal en los campos pulmonares sugiere que puede también haber alguna enfermedad
pulmonar intersticial.
Imagen cortesía de Nottingham University Hospital NHS Trust Radiology Department.
Neumología
Niños y adultos jóvenes: Respiratorio: tos; sibilancias; infecciones recurrentes; bronquiecta-
sia; neumotórax; hemoptisis; insuficiencia respiratoria; cor pulmonale. Gastrointestinal: Insu-
ficiencia pancreática (diabetes mellitus, esteatorrea); síndrome de obstrucción intestinal
distal (equivalente de íleo meconial); cálculos biliares; cirrosis. Otro: infertilidad masculina;
osteoporosis; artritis; vasculitis (p. 556); pólipos nasales; sinusitis; osteoartropatía pulmo-
nar hipertrófica (HPOA). Signos: cianosis; dedos en palillo de tambor; crepitantes grue-
sos bilaterales.
Diagnóstico. Prueba de sudor: Sodio y cloruro el sudor > 60 mmol/; habitualmente
cloro> sodio. Genética: Debe considerarse cribado para detectar mutaciones de FQ. La
elastasa fecal es una prueba de detección simple y útil para el diagnóstico de disfunción
del páncreas exocrino.
Pruebas. Análisis de sangre: Sistemático de sangre, urea y electrolitos, pruebas de fun-
ción hepática; coagulación; niveles de vitamina A, D, E; prueba anual de tolerancia a la glu-
cosa (p. 206). Bacteriología: Torunda de tos, cultivo de esputo. Radiología: RXT; hiperinfla-
ción; bronquiectasias. Ecografía abdominal: Hígado graso; cirrosis; pancreatitis crónica. Espi-
rometría: Defecto obstructivo. Aspergillus serología/prueba de la piel (20% desarrollan
aspergilosis broncopulmonar alérgica, p. 177). Bioquímica: Análisis de grasa fecal.
Tratamiento. El tratamiento debe ser multidisciplinario, por ejemplo, médico especialis-
ta, médico general, fisioterapeuta, enfermera especialista y dietista, con atención al bienes-
tar psicosocial y físico. Tórax: Fisioterapia (drenaje postural, técnicas de limpieza de las vías
respiratorias). Se administran antibióticos para las exacerbaciones infecciosas agudas y
profilácticamente. La infección crónica por Pseudomonas es un predictor importante de
supervivencia. Los mucolíticos pueden ser útiles (por ejemplo, DNase, es decir, Dornase
alfa, 2,5 mg al día nebulizado o solución salina hipertónica nebulizada). Broncodilatadores.
Se recomienda la vigilancia con RXT anual. Gastrointestinal: Mala absorción, reflujo gastro-
esofágico, síndrome de obstrucción distal. Reemplazo enzimático pancreático; suplemen-
tos de vitaminas liposolubles (A, D, E, K), ácido ursodesoxicólico para la función hepática
alterada; la cirrosis puede requerir trasplante hepático. Otros: Tratamiento de la diabetes
relacionada con la FQ (estudie anualmente con OGTT desde los 12 años); detección/tra-
tamiento de la osteoporosis (DEXA escaneo óseo); artritis, sinusitis y vasculitis; fertilidad
y asesoramiento genético. Enfermedad pulmonar avanzada: Oxígeno, diuréticos (cor pul-
monale) o ventilación no invasiva; pulmonar o corazón/trasplante de pulmón (superviven-
cia postrasplante 5 años). Pronóstico: La mediana de supervivencia es ahora de ~ 41 años
en el Reino Unido, aunque un bebé nacido hoy en día esperaría vivir más tiempo.
Terapias específicas de la mutación para la fibrosis quística
Ivacaflor y lumacaftor van dirigidos a la proteína CFTR. Ivacaflor es un potenciador de
CFTR que tiene efectos en el canal en las mutaciones de CFTR que producen la enfer-
medad, incluyendo G551D. Ivacaflor aumenta la probabilidad de que los canales de
CFTR estén abiertos y se ha demostrado que mejora los resultados clínicos (función
pulmonar, peso, estabilidad de las enfermedades CF en pacientes > 6 años20. Luma-
caftor es un corrector de CFTR y se ha demostrado que corrige F508 del micropro-
cesado del CFTR y aumenta la cantidad de la proteína localizada en la superficie celu-
lar. Ivacaflor y lumacaftor o terapia de combinación, para pacientes con F508, muestra
una mejor función pulmonar y una reducción de las exacerbaciones pulmonares21.
La terapia genética (transferencia del gen del CFTR usando vectores de liposomas
o adenovirus): estudios de fase 2b muestran mejoras modestas pero significativas del
FEV1 en aquellos que reciben terapia génica22. Se están desarrollando más trabajos
en vectores para la transferencia de genes.
nostican.
Síntomas: Tos (80%); hemoptisis 70%); disnea (60%); dolor de pecho (40%); neumonía
recurrente o de resolución lenta; letargo, anorexia; pérdida de peso.
Signos: Caquexia; anemia; dedos en palillo de tambor, HPOA (osteoartropatía pulmonar
hipertrófica, produciendo dolor de muñeca); ganglios supraclavicular o axilares. Signos del
pecho: Ninguno o consolidación; colapso; derrame pleural. Metástasis: dolorimiento óseo;
hepatomegalia; confusión; convulsiones; signos focales SNC; síndrome cerebeloso; mio-
patía proximal; neuropatía periférica.
Complicaciones: Local: Parálisis recurrente del nervio laríngeo; parálisis del nervio frénico;
obstrucción VCS; síndrome de Horner (tumor de Pancoast); erosión de las costillas; peri-
carditis; FA. Metastásico: cerebro; hueso (dolor óseo, anemia, Ca+); hígado; adrenales
(Addison). Neurológico no metastásico: confusión; convulsiones; síndrome cerebeloso;
miopatía proximal; neuropatía; polimiositis; síndrome de Lambert-Eaton (p. 512). Ver
tabla 4.3.
Pruebas: RXT: nódulo periférico; aumento hilar; consolidación; colapso pulmonar; derra-
me pleural; secundarios óseos. Citología: Esputo y líquido pleural (enviar al menos 20 ml).
Aspiración con aguja fina o biopsia (lesiones periféricas/ganglios linfáticos). TC para esta-
diaje el tumor (P170) y guiar la broncoscopia. Broncoscopia: para dar histología y evaluar
operabilidad, ± ecografía endobronquial para la evaluación y biopsia. 18F-desoxigluco-
sa PET o PET/TC EBUS escanear para ayudar en estadiaje. Gammagrafía ósea: si se sos-
pecha metástasis. Pruebas de función pulmonar: ayudar a evaluar la idoneidad para la
lobectomía.
Otros tumores pulmonares. Adenoma bronquial: Raro, de crecimiento lento. El 90%
son tumores carcinoides, 10% cilindromas. Tto: cirugía. Hamartoma: Raro, benigno; TC:
Masa lobulada ± puntos de calcificación; extirpar para excluir la malignidad.
Mesotelioma maligno. Un tumor de células mesoteliales que suele ocurrir en la pleu-
ra, y raramente en el peritoneo u otros órganos. Se asocia con la exposición ocupacio-
nal al amianto, pero la relación es compleja24. El 90% en un informe anterior explica que
frente a la exposición al amianto, solo del 20% de los pacientes tiene asbestosis pulmo-
nar. El período entre la exposición y el desarrollo del tumor puede ser de hasta 45 años.
Compensación a menudo está disponible.
Características clínicas: Dolor en el pecho, disnea, pérdida de peso, dedos en palillo de
tambor, derrames pleurales recurrentes. Signos de metástasis: linfadenopatía, hepatome-
galia, dolor óseo/dolor abdominal (mesotelioma maligno peritoneal).
Pruebas: RXT/TC: engrosamiento/derrame pleural. Líquido pleural hemático.
Diagnóstico: Hecho en histología, generalmente después de una toracoscopia. A menudo,
el diagnóstico solo se hace post mortem.
Administración: Pemetrexed + quimioterapia con cisplatino pueden mejorar la supervi-
vencia25. La cirugía es difícil de evaluar (pocos ensayos aleatorizados). La radioterapia es
controvertida. Pleurodesis y catéter permanente de drenaje pleural pueden ayudar.
Pronóstico: Pobre (especialmente sin pemetrexed, p. ej., < 2 años). > 650 muertes/año en
Reino Unido.
Fig. 4.8. Una densidad en forma de cuña en el lóbulo medio derecho. Observe también Neumología
una lesión de moneda en el ángulo costofrénico derecho. Linfadenopatía hiliar derecha.
Cortesía de Janet E. Jeddry, Escuela de Medicina de Yale.
Neumología
para ataques agudos; dosis de mantenimiento 5-10 mg/d. Itraconazol puede usarse
en combinación con corticosteroides. Broncodilatadores para el asma. A veces es
necesaria una broncoscopia y la aspiración de los tapones mucosos.
3. Aspergilloma (mycetoma): Una bola de hongo dentro de una cavidad preexistente
(a menudo causada por sarcoidosis de TB). Por lo general es asintomática, pero
puede causar tos, hemoptisis (puede ser torrencial), letargo ± pérdida de peso.
Pruebas: RXT (opacidad redonda dentro de una cavidad, generalmente en el vérti-
ce); cultivo de esputo; precipitinas séricas fuertemente positivas; prueba cutánea de
Aspergillus (30% positiva). Tratamiento (solo si es sintomático): considerar la extir-
pación quirúrgica para lesiones solitarias sintomáticas o hemoptisis grave. El itraco-
nazol oral y otros antifúngicos han sido probados con éxito limitado. La instilación
local de pasta de anfotericina bajo guía de TC obtiene un éxito parcial en pacien-
tes cuidadosamente seleccionados, p. ej., en hemoptisis masiva.
4. Aspergilosis invasiva: Factores de riesgo28: inmunodepresión, p. ej., VIH, leucemia, que-
maduras, Wegener (p. 714), y LES o tras tratamiento con antibióticos de amplio
espectro. Pruebas: cultivo de esputo; BAL; biopsia; precipitinas de suero; RXT (con-
solidación, absceso). Un TC torácico precoz y las mediciones en serie del suero de
galactomanano (un antígeno Aspergillus) pueden ser útiles. El diagnóstico solo
puede realizarse en la biopsia pulmonar o en la autopsia. Tratamiento: el voricona-
zol es superior a la anfotericina IV29. Alternativas: miconazol o ketoconazol (menos
eficaz) IV. Pronóstico: 30% de mortalidad.
5. Alveolitis alérgica extrínseca (AAE): Véase p. 198.
Otras infecciones por hongos. Candida y Crytococcus pueden causar neumonía en
los inmunosupresivos.
Infección
Aspergiloma
dentro de Infarto
la cavidad
preexistente Maligno
Fibrosis en
el lóbulo
superior
Bronquiestasia
proximal
178 Asma
El asma30 afecta al 5-8% de la población. Se caracteriza por episodios recurrentes de dis-
nea, tos y sibilancias causadas por obstrucción reversible de las vías respiratorias. Tres fac-
tores contribuyen al estrechamiento de las vías respiratorias: la contracción de los
músculos bronquiales, desencadenada por una variedad de estímulos; edema/inflamación
de la mucosa, causada por degranulación de mastocitos y basófilos que resulta en la libe-
ración de mediadores inflamatorios y aumento de la producción de moco.
Síntomas. Disnea intermitente, sibilancias, tos (a menudo nocturna), y esputo ver
tabla 4.5.
Precipitantes: Aire frío, ejercicio, emoción, alérgenos (ácaros del polvo doméstico, polen,
pieles), infección, fumadores y fumadores pasivos31, contaminación, NSAIDS, -blo-
queantes.
Variación diaria: Los síntomas o el flujo pico pueden variar durante el día. Una disminu-
Neumología
ción del flujo pico es muy común por la mañana y puede hacer que la balanza se incline
hacia un ataque serio, a pesar de tener un flujo pico normal (fig. 4.12) en otros momen-
tos.
Ejercicio: Cuantificar la tolerancia al ejercicio.
Sueño perturbado: Cuantificar como noches por semana (un signo de asma grave).
Reflujo ácido: 40-60% de las personas con asma tienen reflujo; su tratamiento mejora la
espirometría, pero no necesariamente los síntomas32.
Otra enfermedad atópica: Eccema, fiebre del heno, alergia o antecedentes familiares. La
casa (especialmente el dormitorio): ¿Animales domésticos? ¿Alfombra? ¿Almohadas de
plumas o edredón? Almohadones y otros «muebles».
Trabajo: Si los síntomas remiten los fines de semana o días festivos, el trabajo puede pro-
porcionar el desencadenante (15% de los casos están relacionados con el trabajo,
más para pulverizadores de pintura, procesadores de alimentos, soldadores y manipula-
dores de animales)33. Pídale al paciente que mida su flujo pico a intervalos de trabajo y
en casa (a la misma hora del día) para confirmarlo (ver fig. 4.13).
Días por semana sin trabajo o sin colegio
Signos. Taquipnea; sibilancias audibles; hiperinfamación en el pecho; notable hiperreso-
nancia; entrada de aire; sibilancias polifónicas generalizadas. Ataque severo: Incapacidad
para decir oraciones completas; pulso > 110 lpm; la frecuencia respiratoria > 25/min;
FEM 33-50% del predicho. Ataque potencialmente mortal: Pecho silencioso; confusión;
agotamiento; cianosis (PaO2< 8 kPA pero PaCO2 4,6-6,0, SpO2 < 92%); bradicardia; FEM
< 33% del predicho. Cerca de fatal PaCO2.
Pruebas. Diagnóstico inicial: Ver figs. 4.10, 4.11. Acceso agudo: FEM, cultivo de esputo, sis-
temático de sangre, urea y electrolitos, PCR, hemocultivos. El análisis de GAB suele mos-
trar una presión normal o ligeramente PaO2 pero PaCO2 (hiperventilación). Si PaO2
es normal pero el paciente está hiperventilando, observe con cuidado y repita los GAB
un poco más tarde. 䊳 Si la PaCO2 es normal o elevada, transfiera a una unidad de cui-
dados intermedios o UVI para ventilación, ya que esto significa un fallo en el esfuerzo res-
piratorio. RXT (para excluir infección o neumotórax). Asma crónica: Monitorización del
FEM (p. 162): una variación diurna > 20% en 3 d a la semana durante 2 semanas. Espi-
rometría: defecto obstructivo (VEF1/CVF, RV p. 162); generalmente 15% de mejo-
ría en VEF1 después de 2 agonistas o ensayo con esteroides. RXT: hiperinflación. Las
pruebas cutáneas pueden ayudar a identificar alérgenos. Prueba de histamina o metaco-
lina. Serología de Aspergillus.
Diagnóstico diferencial. Edema pulmonar («asma cardíaca»); EPOC (puede coexis-
tir); Obstrucción de grandes vías respiratorias (por ejemplo, cuerpo extraño, tumor); obs-
trucción del VCV (sibilancia/disnea no episódica); neumotórax; derrame pleural; bron-
quiectasia; bronquiolitis obliterativa (sospecha en ancianos).
Tratamiento. Asma crónica (p. 182). Tratamiento de emergencia (p. 810).
Enfermedades asociadas. Reflujo ácido; poliarteritis nodosa (PAN, p. 556); síndrome
de Churg-Strauss (p. 696); ABPA (p. 177).
Historia natural. La mayoría de los asmáticos infantiles (ver OHCS p. 164) o dejan de
ser asmáticos en la adolescencia o sufren mucho menos como adultos. Un número sig-
nificativo de personas desarrollan asma crónica tarde en la vida.
Mortalidad. ~ 900 muertes por asma en el Reino Unido en 2012, 50% eran> 65 años
de edad.
Neumología
auscultación
Baja inexplicable VEF1o FEM FEM Cuando sea sintomático
Eosinofilia de sangre periférica inexplicada
Ensayo de asma
tratamiento Considere las pruebas de Considere remisión
función pulmonar/atopia Investigar otras causas
660 660
181
640 HOMBRES 640
620 620
600 600
580 580
560 560
540 540
Neumología
Desviación estándar de hombres 48 litros/min
Desviación estándar de mujeres 42 litros/min
520 520
500 500
MUJERES
480 480
460 460
440 440
420 420
400 400
380 380
15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70
Fig. 4.12. Pico de flujo normal respiratorio (FEM).
Datos de Nunn, AJ, Gregg, I Nuevas regresiones para precedir los picos de los flujos respiratorios en
adultos. BMJ 1989;298:1068-70.
250
200
150
100
50
de los síntomas. Si se usa más de una vez al día, o síntomas nocturnos, vaya al Paso 2.
• Paso 2: Añada dosis estándar de esteroide inhalado, por ejemplo, beclometasona 200-
800 mcg/día, o comience con la dosis apropiada para la gravedad de la enfermedad y
valore.
• Paso 3: Añada 2-agonistas de acción larga (p. ej., salmeterol 50 mcg/12 h por inhala-
dor). Si es beneficioso –pero aún con un control inadecuado– continúe y dosis de
beclometasona a 800 mcg/día. Si no hay efecto, entonces suspenda LABA y dosis de
beclometasona a 800 mcg/día. Pueden utilizarse antagonistas del receptor de leuco-
trienos o teofilina oral.
• Paso 4: Considerar ensayos de: beclometasona hasta 2.000 mcg/día; teofilina oral de libe-
ración modificada; tabletas de 2-agonista de liberación modificada; antagonistas del recep-
tor de leucotrieno orales (ver más adelante en el tema), junto con la terapia anterior.
Fármacos. Agonistas 2-adrenérgicos: Relaja el músculo liso bronquial (AMPc), actuando
en minutos. El salbutamol se administra mejor por inhalación (aerosol, polvo, nebulizador),
pero también puede darse VO o IV. ES: taquiarritmias, K+, temblor, ansiedad. Agonistas 2-
inhalados de larga duración (p. ej., salmeterol, formoterol) puede ayudar a los síntomas noc-
turnos y reducir las recaídas matutinas. Pueden ser una alternativa dosis de esteroides cuan-
do los síntomas son incontrolados; subsisten dudas sobre si están asociados con un aumen-
to de eventos adversos35. ES: como salbutamol, broncoespasmo paradójico36.
Corticosteroides: Mejor inhalados para minimizar el efecto sistémico, p. ej., beclometasona
vía espaciador (o polvo), pero puede ser administrado VO o IV. Actúan durante días en
la inflamación de la mucosa bronquial. Enjuáguese la boca después de los esteroides inha-
lados para prevenir la candidiasis oral. Los esteroides orales se utilizan de forma aguda
(dosis altas, cursos cortos, por ejemplo, prednisolona 40 mg/24 VO durante 7 d) y para
tiempos de más duración una dosis menor (p. ej., 5-10 mg/24 h) si el control no es ópti-
mo con los inhaladores, avisar sobre ES sistémicos: p. 377.
Aminofilina: (Metabolizado a teofilina) actúa inhibiendo fosfodiesterasa, así cuando
haybroncoconstricción por niveles AMPc. Probar como profilaxis, por la noche,VO para
prevenir recaídas matutinas. Probar con una marca (biodisponibilidad variable). También es
útil como un complemento si la terapia inhalada es inadecuada. En el asma grave aguda,
puede ser dado IV. Tiene una estrecha relación terapéutica, causando arritmias, trastorno y
puede llegar a un rango tóxico. Compruebe los niveles de teofilina (p. 756), y controle el
ECG y verificación de los niveles plasmáticos después de 24 h si se utiliza la terapia IV.
Anticolinérgicos: (p. ej., ipratropio, tiotropio.) Puede espasmo muscular sinérgicamente
con 2-agonistas pero no se recomiendan en las directrices actuales para asma crónica.
Pueden ser de mayor beneficio en EPOC.
Cromoglicato (estabilizador de mastocitos). Puede ser utilizado como profilaxis en pacien-
tes con asma leve, inducida por el ejercicio (siempre inhalado), especialmente en los
niños. Puede precipitar el asma.
Antagonistas de los receptores de leucotrienos: (Por ejemplo, montelukast oral, zafi Rlukast.)
Bloquea el efecto de los cisteinil-leucotrienos en las vías respiratorias, antagonizando el
receptor CystLT1.
Anticuerpo monoclonal anti-IgE: Omalizumab37 puede usarse en pacientes con asma alér-
gica persistente. Administrar en inyección subcutánea cada 2-4 semanas dependiendo de
la dosis. Solo prescrito por especialistas.
3El entrenamiento integrado de respiración y relajación (método de Papworth) es psicológico y físico:
Los pacientes aprenden a bajar los hombros, relajar su abdomen y respirar con calma y adecuadamente.
Neumología
Dosis inhalación 25 mcg 50 mcg
Régimen recomendado 50-100 mcg/12 h 50-100 mcg/12 h
Tiotropio bromide (EPOC)
Dosis/Inhalación 2,5 mcg 9 mcg
Régimen recomendado 25 mcg diariamente 18 mcg diariamente
Esteroides
Clenil Moldulite = beclometasona; Plumicort = budesonida, *Flixotide = fluticasona)
Fluticasona (Flixotide)
Posibles dosis/inhalación 50, 100, 250 y También en aerosol 250 mcg/ml
500 mcg
Régimen recomendado 100-250 mcg/12 h 100-250 mcg/12 h 0,5-2 mg/12 h
max. 1 mg/12 h
Clenil Modulite
Posibles dosis/inhalación 50-100 mcg – –
250 mcg/12 h
Régimen recomendado 200 mcg/12 h
entonces
400 mcg/12 h
entonces
1.000 mcg/12 h
* Disponible como un Turbohaler®; Autohalers® son una alternativa (accionado por la respiración)
y no necesitan coordinación de la respiración, p. ej., Airomir® (salbutamol) y Qvar® (beclometa-
sona). Accuhalers® entregan polvos secos (p. ej., Flixotide®, Serevent®).
La absorción sistémica (vía la garganta) es menor si la inhalación es por un dispositivo de gran
volumen, p. ej., dispositivos Volumatic® o AeroChamber Más®. El último es más compacto. La carga
estática sobre algunos dispositivos reduce la dosis deliberadamente, así que lávese en el agua
antes de la dosis; déjelo secar (no frotar). Es insustancial poner varias dosis en un dispositivo: es
lo mejor repetir dosis sencillas, y asegúrese de inhalar en cuanto la medicina está en la cápsula. ES:
candidiasis local (oral) (p. 377); la tasa de cataratas si la dosis a lo largo de la vida 2 g beclo-
metasona38.
Prevalencia. 10-20% en los mayores de ~40; 2,5 x 106 muertes por año en el mundo.
Sopladores rosados y azules abotargados. Una división tradicional pero proba-
blemente los finales de un espectro. Soplador rosado: Tienen ventilación alveolar, un
SpO2 casi normal y una PaCO2 normal o baja. Están sin aliento, pero no son cianóticos.
Pueden progresar a fallo respiratorio de tipo I (p. 188). Azules abotargados: Tienen ven-
tilación alveolar, con bajo PaCO2 y alta PaCO2. Son cianóticos, pero no sin aliento y pue-
den desarrollar cor pulmonale. Sus centros respiratorios son relativamente insensibles a
CO2 y dependen del estímulo hipóxico para mantener el esfuerzo respiratorio (p 180)-
䊳 el oxígeno suplementario debe darse con cuidado.
Síntomas. Tos; esputo; disnea; broncoespasmo. Signos. Taquipnea; empleo de los
músculos accesorios de respiración; hiperinsuflación; distancia cricosternal (< 3 cm);
expansión; percusión resonante o hiperresonante, sonidos de respiración bajos (p. ej.,
sobre bulla); sibilancias; cianosis; cor pulmonale.
Complicaciones. Exacerbaciones agudas ± infección; policitemia; insuficiencia respira-
toria; cor pulmonale (edema; PVY); neumotórax (ruptura de las ampollas); carcinoma
de pulmón.
Pruebas. Sistemático de sangre: Hto. RXT: hiperinsuflación; hemidiafragmas planos;
arterias pulmonares centrales grandes; marcas vasculares periféricas; bulla CT: Espesa-
miento de la pared bronquial; cicatrización; ampliación del espacio aéreo. ECG: Hiper-
trofia de la aurícula derecha y del ventrículo derecho (cor pulmonale). GAB: PaO2 ±
hipercapnia. Espirometría (p. 162, 165): atrapamiento obstructivo + aire (VEF1 < 80% del
predicho, VEF1: cociente FVC < 70%, CPT, RV, DLCO en embolia (p. 160). Aprenda
a hacer espirometría de una persona con experiencia: asegure la máxima espiración de
la respiración completa (se tarda> 4 s, no es un soplo rápido).
Tratamiento. Crónico estable: ver RECUADRO; 䊳䊳 Emergencia Tto: p 822. Abstención
del hábito de fumar con vigor cordial (p. 93). Fomentar el ejercicio. El IMC suele ser bajo:
el consejo dietético ± suplementos43 puede ayudar (p. 584). Los mucolíticos (BNF 3,7)
pueden ayudar a la tos productiva crónica (NICE)44. Las discapacidades pueden causar
depresión grave y tratable; vigile esto (p. 15). Insuficiencia respiratoria: p. 188. Edema: diu-
réticos. Vacunas contra la gripe y el neumococo: p. 167 y p. 396.
Terapia O2 a largo plazo (TOLP): Un ensayo MRC mostró que si PaO2 se mantuvo 8.
0 kPa durante 15 h al día, la supervivencia a 3 años mejorada en un 50%. Las pautas de
la guía NICE de Reino Unido sugieren que se debe administrar TOLP: 1. No fumadores
con PaO2 < 7,3 kPa, a pesar de terapia máxima. Estos valores deben ser estables en dos
ocasiones> 3 semanas aparte. 2. Si Pa O2 7,3-8,0 e hipertensión pulmonar (por ejem-
plo, HVD, S2 reforzado), o policitemia, edema periférico o hipoxia nocturna. 3. O2 tam-
bién puede ser prescrito para pacientes en fase terminal.
Neumología
Largo plazo 2- Larga duración muscarínica LABA más corticosteroides
antagónico (LABA) antagónica (LAMA)*4 inhalados (ICS) en combi-
naciones de inhalaciones
4Los metaanálisis Cochrane (2007) de los ensayos (incluyendo TORCH) favorecen a los esteroides +
LABA (-agonista de acción prolongada) versus cualquiera de ellos dado de forma aislada. LABA solo
puede tasas de exacerbación, pero no exceso de hospitalizaciones o mortalidad. Los inhaladores de
esteroides solos están asociados con mortalidad (en un 33%) en comparación con los esteroides +
LABA. Los inhaladores de esteroides pueden riesgo de neumonía, pero cuando se combinan con
LABA, las ventajas superan a las desventajas.
187
Neumología
Fig. 4.15. Radiografía de tórax supina que muestra sombra de aire-espacio en una distribución
perihilar que se extiende hasta la periferia. Esta apariencia también se puede ver con infección
y con edema pulmonar cardiogénico, pero las pistas del historial, el tamaño del corazón y la
falta de derrames pleurales pueden sugerir SDRA sobre el último. Recuerde que esta es una
proyección supina –por lo tanto el paciente está tumbado durante los rayos X con el haz de
rayos en AP–, lo que produce una sombra cardíaca artificialmente agrandada y los derrames
pleurales hacen nivel con la pared posterior del pecho, por lo que no oscurece los ángulos cos-
tofrénicos a menos que sea muy grande.
Imagen cortesía de los Hospitales de la Universidad de Nottingham NHS Trust Departamento de
Radiología.
• Fibrosis pulmonar.
• SDRA (p. 186).
Insuficiencia respiratoria de tipo II. Definida como hipoxia (PaO2 < 8 kPa) con
hipercapnia (PaCO2 > 6,0 kPa). Causado por hiperventilación alveolar, con o sin des-
ajuste de V/Q. Las causas incluyen:
• Enfermedad pulmonar: Asma, EPOC, neumonía, fibrosis pulmonar en fase terminal,
apnea obstructiva del sueño (SAOS, p. 194).
• Disminución del estímulo respiratorio: Fármacos sedantes, tumor o trauma del SNC.
• Enfermedad neuromuscular: Lesión del cordón cervical, parálisis diafragmática, polio-
mielitis, miastenia gravis, síndrome de Guillain-Barré.
• Enfermedad de la pared torácica: Tórax inestable, cifoescoliosis.
Las características clínicas son las de la causa subyacente junto con síntomas y sig-
nos de hipoxia, con o sin hipercapnia.
Hipoxia: Disnea; inquietud; agitación; confusión; cianosis central. Si la hipoxia es de larga
evolución: policitemia; hipertensión pulmonar; cor pulmonale.
Hipercapnia: Dolor de cabeza; vasodilatación periférica; taquicardia; pulso saltón; tem-
blor/aleteo; papiledema; confusión; somnolencia; coma.
Las pruebas van dirigidas a la determinación de la causa subyacente:
• Pruebas de sangre: sistemático de sangre, urea y electrocitos, PcR, GAB.Ver la tabla 4.7.
• Radiología: RXT.
• Microbiología: esputo y cultivos de sangre (si febril).
• Espirometría (EPOC, enfermedad neuromuscular, síndrome Guillain-Barre).
Tratamiento. Depende de la causa:
Insuficiencia respiratoria tipo I:
• Tratar la causa subyacente.
• Dar el oxígeno (24-60%) por mascarilla
• Ventilación asistida si PaO2 < 8 kPa a pesar de O2 al 60%.
Insuficiencia respiratoria de tipo II: El centro respiratorio puede ser relativamente insensi-
ble a CO2 y la respiración podría ser estimulada por la hipoxia.
• Tratar la causa subyacente.
• Terapia de oxígeno controlada: comenzar con O2 al 24 %. 䊳 La terapia de oxígeno
debería darse con cuidado. Sin embargo, no deje de tratar la hipoxia.
• Compruebe de nuevo los GAB después de 20 minutos. Si la PaO2 es estable o más
baja, aumente la concentración de O2 al 28%. Si PaO2 se ha elevado > 1,5 kPa y el
paciente está todavía hipóxico, considerar la ventilación asistida (p. ej., VNIPP, p. 813,
esto es la ventilación no invasiva de presión positiva).
• Si esto falla, considere intubación y ventilación, si es apropiada.
Neumología
Alcalosis respiratoria Alto Bajo Normal/bajo
Pasos para la interpretación del GAB:
1. pH: ¿acidosis o alcalosis?
2. PCO2: ¿Alta/baja? ¿Encaja con el pH? (Si es así, piense en un problema respiratorio).
3. HCO3: ¿Alta/baja? ¿Encaja con pH? (Si es así, piense en un problema metabólico).
4. VO2: ¿Es esto normal dado el FiO2 (fracción de oxígeno inspirado)?
5. ¿Hay alguna compensación? (es decir, cambios en PCO2/HCO3 para intentar
corregir un desequilibrio derivado). ¿Es este parcial (pH anormal) o completo
(pH normalizado)?
6. Calcular la brecha aniónica. Útil en la elaboración de la etiología de la acidosis
metabólica.
Intervalo aniónico: (Na + K) - (Cl + HCO3-)
Ver p. 670 para las causas de la brecha aniónica elevada (normal 10-18 Mmol/L).
Administrar oxígeno
Se debe prescribir oxígeno53. Valorar la cantidad aconsejada para el paciente guián-
dose por la SaO2 y su condición clínica. La humidificación solo es necesaria para el
suministro a largo plazo de O2 en tasas altas de flujo y traqueotomías, pero puede
la expectoración en bronquiectasia.
Cánulas nasales: Preferida por los pacientes pero el suministro es relativamente
impreciso y puede causar molestias. La tasa de flujo (1-4 L/min) raramente define la
concentración de O2 (24-40%). Puede ser usada para mantener el SaO2 cuando los
nebulizadores ser controlados con aire (p. ej., EPOC).
Máscara facial normal: Suministro de una cantidad variable de O2 dependiendo de
la tasa de entrada. Menos precisa que la máscara Venturi, así que no use si hay hiper-
capnia o insuficiencia respiratoria de tipo II. Riesgo de acumulación de CO2 (dentro
de la máscara y por lo tanto en el gas inspirado) si el caudal < 5 L/min. 䊳 Tenga cui-
dado en aquellos con EPOC (p. 812).
Máscara Venturi: Proporciona un porcentaje o una fracción precisa de O2 (FiO2) en
altas tasas de flujo. Empiece en 24-28% en EPOC. Colores de las máscaras:
AZUL = 24%, BLANCO = 28%, AMARILLO = 35%, ROJO = 40%, VERDE = 60%
Máscara para la no reinspiración: Estas tienen una bolsa de reserva y ofrecen alta con-
centración de O2 (60-90%), determinada por el caudal (10-15 L/min) y la presencia
de válvulas en el lateral. Se utilizan comúnmente en emergencias pero son impreci-
sas y deben ser evitadas en aquellos que requieran terapia de O2 controlada.
Incrementar la oxigenación: Otras maneras de la oxigenación para alcanzar el obje-
tivo SaO2 (esto debe ser dado como un número en la tabla de medicamentos):
• Tratar la anemia (transfundir si es esencial).
• Mejorar el rendimiento cardíaco (tratar la insuficiencia cardíaca).
• Fisioterapia del pecho para mejorar el desajuste ventilación/perfusión.
• TEP previo.
Datos clínicos. Pequeñas embolias pueden ser asintomáticas, mientras que embolias
grandes son a menudo fatales. Síntomas: Dificultad aguda para respirar, dolor del pecho
de características pleuríticas, hemoptisis; mareo; síncope. Pregunte sobre factores de ries-
go (que se han mencionado anteriormente en ese epígrafe), revisar antecedentes de la
enfermedad de tromboembolismo. Signos: Pirexia; cianosis; taquipnea; taquicardia; hiper-
tensión; elevación PVY; roce pleural; derrame plural. Busque los signos de una causa, p.
ej., la trombosis de vena profunda.
Pruebas
• Sistemático de sangre, urea e iones, pruebas básicas de coagulación, dímero-D (RECUADRO).
• GBA puede mostrar PaO2 y PCO2.
• Técnicas de imagen: RXT puede ser normal o mostrar oligoemia que afecta al segmen-
to, dilatación de la arteria pulmonar, atelectasia lineal, pequeño derrame pleural, opaci-
dades en forma de cuña o cavitadas (raro). TC de arteria pulmonar: ver la fig. 4.17.
• ECG puede ser normal o mostrar taquicardia, bloqueo de rama derecha, sobrecarga del
ventrículo derecho (T invertida en V1 a V4). El patrón clásico SI Q III T III (p. 98) es raro.
䊳 Otras investigaciones se muestran en p. 818; ver también el RECUADRO, p. 753.
Tratamiento. 䊳䊳 Ver p. 818. Si hemodinámicamente es inestable, trombólisis para TEP
masivo (alteplasa 10 mg IV más de 1 minuto, entonces 90 mg infusión IV durante más
de 2 h; máximo 1,5 mg/kg si < 65 kg). Hemodinámicamente estable: comience HBPM o
heparina no fraccionada si existe insuficiencia renal y tratar durante 5 días. Entonces,
comience ACOD (anticoagulates de acción directa) o warfarina (p. 350). Para warfarina,
suspenda la heparina cuando INR es 2-3, debido a inicio del efecto antitrombótico de la
warfarina (el objetivo INR es 2-3). Considere la colocación de un filtro en la vena cava
si hay contraindicación de anticoagulación.
TEP no provocado. En pacientes sin factores de riesgo de provocación conocidos,
considere investigación para malignidad posible subyacente. Realice una historia comple-
ta, exploración física (incluyendo la mama), RXT, sistemático de sangre, calcio, pruebas de
función hepática, análisis de orina. Los pacientes > 40 años consideran TC abdomino-
pélvico y mamografía en mujeres. Considere pruebas para descartar antifosfolípido y
trombofilia si la historia de familia es positiva (p. 374).
Prevención. Dar heparina a todos los pacientes inmovilizados. Suspenda la terapia hor-
monal sustitutiva y la píldora contraceptiva combinada antes de la cirugía (de ser segura
otra forma de contracepción).
Neumotórax
Causas. Es espontánea55 a menudo (sobre todo en hombres jóvenes, delgados) debi-
do a ruptura de una bulla subpleural. Otras causas: asma; EPOC; TB; neumonía; absceso
pulmonar; carcinoma; fibrosis quística; fibrosis pulmonar; sarcoidosis; desórdenes de teji-
do conectivo (síndrome de Marfan, síndrome de Ehlers-Danlos), trauma; iatrogénico
(inserción de línea PVC por vía subclavia, aspiración/biopsia pleural, biopsia transbron-
quial, biopsia hepática, ventilación con presión positiva).
Datos clínicos. Síntomas: Puede ser asintomático (buena forma física, joven, y peque-
ño neumotórax) o puede haber inicio repentino de disnea y/o dolor del pecho pleuríti-
co. Pacientes con asma o EPOC pueden presentarse con un deterioro repentino. Los
pacientes ventilados mecánicamente pueden presentar hipoxia o un aumento de pre-
siones de ventilación. Signos: Expansión reducida, hiperresonancia a la percusión, y dismi-
nución de sonidos respiratorios en el lado afectado. Con un neumotórax de tensión, la
tráquea se desvía lejos del lado afectado, p. 749, 815. Cómo tratarlo ver p. 815.
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 04.qxd:Oxford 27/04/18 16:57 Página 191
Neumología
Reposo reciente en cama (3> días) o cirugía (< 4 semanas) 1,5
TVP o TEP previos 1,5
Hemoptisis 1
Recibiendo tratamiento activo de cáncer, tratado en los últimos 6/12,
paliativos 1
Un diagnóstico alternativo es menos probable que TEP 3
Puntuación < 4 = TEP poco probable; puntuación > 4 = TEP probable
TEP SOSPECHOSO
Neumología
Células Lupus erytematosus LES
Células malignas Malignidad
Química clínica
*Proteína
< 25g/L Trasudado
> 35 g/L Exudado
25-35 g/L Si la proteína del líquido pleural/proteína del
suero > 0,5, el derrame es un exudado (85%
específico y sensible)
Glucosa < 3,3 mmol/L Empiema, maligno, TB, AR, LES
PH < 7,2 Empiema, maligno, TB, AR, LES
*LDH (pleural: suero > 0,6) Empiema, maligno, TB, AR, LES
Amilasa Pancreatitis, carcinoma, neumonía bacteriana,
ruptura esofágica
Inmunología
Factor reumatoide AR
Anticuerpos antinucleares LES
Niveles complementarios AR, LES, malignidad, infección
* Los criterios de Light para definir un exudado: proteína derrame/proteína suero > 0,5; LDH derra-
me/LDH suero > 0,6; LDH suero > ½ límite de normalidad superior. Específico del 98% sensible y del
83% específico.
5 Inflamación de la pleura causada por neumonía puede conducir a la infección dl líquido pleural
(empiema); si no está infectado, se utiliza el término paraneumónico.
• Rendimiento cognitivo.
Complicaciones. Hipertensión pulmonar; insuficiencia respiratoria de tipo II (p. 188).
La apnea del sueño es también tenida en cuenta como un factor de riesgo de hiperten-
sión57.
Pruebas. Estudios simples (p. ej., pulsioximetría, grabaciones en vídeo) pueden ser todo
lo que requieren para el diagnóstico. Polisomnografía (que supervisa la saturación de oxí-
geno, el flujo del aire en la nariz y la boca, ECG, EMG el pecho y el movimiento abdo-
minal de la pared durante el sueño) es diagnóstica. La presencia de 15 o más episodios
de apnea o hipoapnea durante 1 h de sueño, por regla general, indica una apnea de
sueño significativa.
Tratamiento
• Reducción de peso.
• Anulación del tabaco y alcohol.
• Dispositivo para avanzar la mandíbula.
• CPAP vía una máscara nasal durante el sueño es efectiva y recomendada por NICE
para aquellos con enfermedad moderada o grave58.
• Cirugía para resolver la obstrucción nasal o de la faringe, p. ej., amigdalectomía o poli-
pectomía, es ocasionalmente necesaria.
Cor pulmonale
El cor pulmonale es una insuficiencia cardíaca derecha causada por hipertensión arterial
pulmonar crónica. Las causas incluyen la enfermedad crónica pulmonar, desórdenes pul-
monares vasculares y enfermedades neuromusculares y esqueléticas (véase RECUADRO).
Datos clínicos. Síntomas: disnea, fatiga y síncope. Signos: cianosis; taquicardia; aumento
de PVC con ondas a y v prominentes; impulso del RV; P2 intenso, soplo pansistólico
(insuficiencia tricúspide); soplo diastólico precoz: Graham Steell; hepatomegalia y edema.
Pruebas. Sistemático de sangre: Hb y hematocrito (policitemia secundaria). GAB:
hipoxia, con o sin hipercapnia. RXT: dilatación de aurícula y ventrículo derechos, arterias
pulmonares prominentes (ver la fig. 4.17). ECG: P pulmonar; desviación de eje hacia la
derecha; hipertrofia/sobrecarga del ventrículo derecho.
Tratamiento
• Tratar la causa principal, p. ej., EPOC e infecciones pulmonares.
• Tratar la insuficiencia respiratoria; en la situación aguda de oxígeno al 24% si PaO2 < 8
kPa. Vigile GAB y aumente gradualmente la concentración de oxígeno si PaO2 es esta-
ble (p. 188). En pacientes con EPOC, la terapia con O2 de larga duración (TOLD)
durante 16 h/d aumenta la supervivencia (p. 184). Los pacientes con hipoxia crónica
cuando están clínicamente estables deben ser evaluados sobre la necesidad de TOLD.
• Trate la insuficiencia cardíaca con diuréticos como furosemida, p. ej., 40-160 mg/24 VO.
Vigilar urea y electrolitos y dar amiloride o suplementos de potasio si fuera necesario.
Alternativa: espironolactona.
• Considerar sangrías si hematocrito > 55%.
• Considerar trasplante de corazón y pulmón en pacientes jóvenes.
Pronóstico. Pobre. El 50% muere en un período de 5 años.
Neumología
• Enfermedad de la célula falciforme Enfermedad cerebrovascular
• Infección parasitaria
Fig. 4.17. Radiografía PA de tórax que muestra las arterias pulmonares agrandadas debido a
hipertensión. Cuando es causado por enfermedad intersticial pulmonar y conduciendo a insu-
ficiencia cardíaca derecha, se denomina cor pulmonale. No pueden identificarse signos de enfer-
medad intersticial pulmonar en esta imagen.
Cortesía de Hospitales de Derby Departamento de Radiología.
196 Sarcoidosis
Trastorno granulomatoso multisistema de causa desconocida. Predominio en Europa del
norte, p. ej., Reino Unido: 10-20/105 población. Por lo general, afecta a adultos entre 20-
40 años, más comúnmente a mujeres. La población africana-caribeña está afectada con
más frecuencia y severidad que los caucásicos, en particular por la enfermedad extrato-
rácica. Asociado con HLA, alelos DRB1 Y DQB1. Para otras causas de granuloma ver la
tabla 4.10.
Datos clínicos. En 20-40 %, la enfermedad es descubierta incidentalmente, después de
una RXT de rutina, y es, por tanto, asintomática. La sarcoidosis aguda a menudo se pre-
senta con fiebre, eritema nodosum (fig. 12.21, p. 563),6 poliartralgia y linfadenopatía hiliar
bilateral (LHB), también llamada síndrome de Löfgren, que por lo general se resuelve
espontáneamente.
Enfermedad pulmonar: El 90 % tiene una RXT anormal CXR con LHB (fig. 4.18) ± infil-
Neumología
tración pulmonar y fibrosis; ver más tarde en el apartado estadiaje. Síntomas: Tos seca,
disnea progresiva, tolerancia al ejercicio y dolor torácico. En el 10-20%, progresión de
síntomas, con deterioro simultáneo de la función pulmonar.
Signos no pulmonares: Estos son legión: linfadenopatía; hepatomegalia; esplenomegalia;
uveítis; conjuntivitis; keratoconjuntivitis seca; glaucoma; quistes de hueso en falange ter-
minal; aumento del lacrimal y glándulas parótidas (fig. 8.50, p. 355); parálisis de Bell; neu-
ropatía; meningitis; síndromes espinales y del tronco encefálico; lesión ocupante de espa-
cio; eritema nodoso (fig. 12.25, p. 563); lupus pernio; nódulos subcutáneos; miocardiopa-
tías; arritmias; hipercalcemia; hipercalciuria; litiasis renales; disfunción pituitaria.
Pruebas sangre: VSG, linfopenia, pruebas de función hepática, ECA en suero en el
60% ~ (no especificado), Ca2+, inmunoglobulinas. Orina de 24 horas: Ca2+ RXT es
anormal en el 90 %: Etapa 0: normal. Etapa 1: LHB. Etapa 2: LHB + infiltración pulmonar
periférica. Etapa 3: solo infiltración pulmonar periférica. Etapa 4: fibrosis pulmonar pro-
gresiva; formación de bullas (pulmón en panal de abeja); afectación pleural. ECG puede
mostrar arritmias o bloqueo de rama.
Pruebas de función pulmonares pueden ser normales o mostrar volúmenes pulmonares
reducidos, empeoramiento de la transferencia de gas y un defecto ventilatorio restricti-
vo. La biopsia de tejido (pulmón, hígado, nódulos linfáticos, nódulos de la piel o glándulas
lacrimales) es diagnóstica y muestra granulomas no caseificantes.
Lavado broncoalveolar (LBA): Muestra linfocitos en enfermedad activa; neutrófilos con
fibrosis pulmonar. Biopsia transbronquial: Puede ser diagnóstica.
Ultrasonido: Puede mostrar nefrocalcinosis o hepatoesplenomegalia.
Rayos X del hueso: Muestra lesiones osteolíticas en las falanges distales.
TC/RM: Puede ser útil en la evaluación de la severidad de la enfermedad pulmonar o
diagnosticando neurosarcoidosis. La evaluación de oftalmología (examen de lámpara de
hendidura, angiografía fluorescente) está indicada en la enfermedad ocular.
Tratamiento. 䊳 Los pacientes con LHB solo no necesitan tratamiento, dado que la
mayoría se recuperan espontáneamente59,60. Sarcoidosis aguda: reposo en cama. AINE.
Indicaciones para corticosteroides:
• Enfermedad pulmonar parenquimatosa (sintomático, estático, o progresivo).
• Uveítis.
• Hypercalcemia.
• Participación neurológica o cardíaca.
Prednisolona (40 mg/24 h) durante 4-6 semanas, entonces dosis durante 1 año según
el estado clínico. Unos pocos pacientes recaen y pueden necesitar un nuevo curso de
tratamiento o terapia a largo plazo.
Otra terapia: En la enfermedad severa, metilprednisolona IV o immunosupresores (meto-
trexato, hidroxicloroquina, ciclosporina, ciclofosfamida) pueden ser necesarios. Puede
intentarse terapia anti-TNF en casos refractarios o en trasplante pulmonar.
Pronóstico el 60% de los pacientes con sarcoidosis torácico supera más de 2 años. El 20%
responde a la terapia de esteroide; en el resto, la mejora es improbable a pesar de la
terapia7.
6 Una historia detallada y el examen (incluyendo para sinovitis) + RXT, 2 titulaciones de ASO y una
cutirreacción de tuberculina son bastante, por lo general, para diagnosticar eritema nodoso61.
7 ECA está también en: hipertiroidismo, Gaucher, silicosis, TB, hiperneumonitis de sensibilidad, asbes-
tosis, neumocistosis62. Los niveles de ECA en el LCR ayudan al diagnóstico de sarcoidosis del SNC
(cuando la ECA en suero es normal)68. ECA es menor en pacientes caucásicos y con anorexia.
Neumología
Enfermedad del polvo Silicosis, beriliosis
orgánico
Idiopático Enfermedad de Crohn
Tiroiditis de Quervain
Sarcoidosis
Alveolitis alérgica extrínseca
Histiocitosis X
Fig. 4.18. Radiografía PA mostrando una linfadenopatía hiliar bilateral. Por su aspecto, es
importante diferenciarla de: sarcoidosis, TB, linfoma, neumoconiosis y enfermedad metástasica.
Este paciente tiene sarcoidosis, pero no hay ningún otro estigma (como la presencia de infil-
traciones, fibrosis y panal de abeja) en esta imagen.
Cortesía de Norfolk y Hospitales de Universidad Norwich, Departamento de Radiología de NHS.
dón (bisinosis).
• Fármacos, p. ej., nitrofurantoína, bleomicina, amiodarona, sulfasalazina, busulfán.
• Reacción de hipersensibilidad, p. ej., neumonitis de hipersensibilidad.
• Infecciones, p. ej., TB, hongos, virales.
• Reflujo gastroesofágico.
Asociadas con enfermedades sistémicas, p. ej.:
• Sarcoidosis.
• Artritis reumatoide.
• LES, esclerosis sistemática, enfermedad del tejido conectivo mixta, síndrome de Sjö-
gren.
• Colitis ulcerosa, acidosis renal tubular, enfermedad autoinmune de tiroide.
Idiopáticas, p. ej.:
• Fibrosis pulmonar idiopática (FPI, p. 200).
• Neumonía organizada criptogenética.
• Neumonitis intersticial no específica.
199
Neumología
Fig. 4.19. Radiografía de tórax AP que muestra un sombreado del espacio aéreo en la zona
izquierda superior. Aunque este aspecto a menudo represente una infección, no es específico.
El diagnóstico diferencial para esta distribución de sombreado incluye linfoma, carcinoma de
célula alveolar (ambos deben ser considerados si no se resuelve en imagen de seguimiento) y
hemorragia.
Imagen cortesía de Hospitales de Universidad de Nottingham, Departamento de Radiología de NHS.
Fig. 4.20. Enfermedad pulmonar intersticial debida a fibrosis pulmonar idiopática (un aspecto
similar al edema intersticial de insuficiencia cardíaca moderada, pero sin cardiomegalia).
Cortesía del Profesor P Scally.
Neumología
progresiva, fibrosis, y, más tarde, cor pulmonale. RXT: por lo general se desarrollan desde la
periferia hasta el hilio, masas fibróticas (1-10 cm) bilaterales en las zonas medio-altas.
Tratamiento: Evite la exposición al polvo de carbón; reclame la compensación (como para
NTC).
Síndrome de Caplan. Asociación entre artritis reumatoidea, neumoconiosis y nódu-
los pulmonares reumatoideos.
Silicosis (Ver fig. 4.21). Causada por la inhalación de partículas de sílice, que son muy
fibrogénicas. Varios trabajos están asociados con esta exposición, p. ej., la minería de metal,
la extracción de piedra, el lavado con arena a presión y la fabricación de cerámica.
Datos clínicos: Disnea progresiva, incidencia de TB, RXT muestra un patrón modular o
miliar difuso en campos altos y medios y calcificación en cáscara de huevo de los nódu-
los hiliares. Espirometría: defecto ventilatorio restrictivo.
Tratamiento: Evite la exposición al sílice; reclame la compensación (como para NTC).
Asbestosis. Causada por inhalación de fibras de asbesto. El asbesto era usado fre-
cuentemente en los edificios para aislarlos del fuego, revestimiento de tuberías, aisla-
miento de cable eléctrico, tela asfáltica. El grado de exposición al asbesto está relaciona-
do con el grado de fibrosis pulmonar.
Datos clínicos: Similar a otras enfermedades pulmonares fibróticas con disnea progresiva,
dedos en palillo de tambor y crepitantes finos teleinspiratorios. También causa placas
pleurales, riesgo de adenocarcinoma bronquial y mesotelioma.
Tratamiento: Sintomático. Los pacientes son a menudo candidatos a compensación por el
Acta de Accidentes laborales británico.
Mesotelioma. Véase p. 174.
Fig. 4.21. Radiografía PA de tórax que muestra opacidades nodulares difusas con un área focal
de sombra blanda irregular en el lóbulo superior derecho, compatible con silicosis y desarro-
llando fibrosis masiva progresiva (FMP).
Cortesía deHospitales de Derby Departamento de Radiología de Confianza de Fundación de NHS.
5 Endocrinología
Contenido
La esencia de la endocrinología 203
Fisiología endocrina 204
Diabetes mellitus (DM)
Clasificación y diagnóstico 206
Tratamiento de la diabetes 208
Complicaciones de una
diabetes 210
La neuropatía diabética y el
cuidado del pie diabético 212
Hipoglucemia 214
Insulinoma 215
Enfermedad paratiroides y tiroides
Pruebas de la función tiroidea
(TFT) 216
Tirotoxicosis 218
Hipotiroidismo (Mixedema) 220
Hormona paratiroidea e
hiperparatiroidismo 222
Hipoparatiroidismo 222
La glándula adrenal Fig. 5.1. Nuestro conocimiento sobre las hor-
Corteza suprarrenal y síndrome monas, aunque todavía se está desarrollando, se
de Cushing 224 originó a partir de una mezcla de experimentos
Enfermedad de Addison aleatorios, hallazgos simultáneos y personajes
(insuficiencia adrenal) 226 extraordinarios. Uno de ellos fue la figura del
Hiperaldosteronismo 228 «castrati» que apareció en la ópera a lo largo de
Feocromocitoma 228 los siglos XVI, XVII y XVIII. Eran chicos castrados
antes de la pubertad. La voz de un castrato era
Hirsutismo, virilismo, ginecomastia pura y poderosa, debido a su enorme capacidad
e impotencia 230 pulmonar y al control de la respiración. Tampoco
La glándula pituitaria (hipófisis) experimentaron ninguna recesión temporal, y sus
Hipopituiarismo 232 brazos y piernas eran largos. Uno de los más
Tumores hipofisarios 234 famosos fue Farinelli, el nombre artístico de Carlo
Hiperprolactinemia 236 María Michelangelo Nicola Broschi. Se dijo que
Acromegalia 238 tenía una voz de soprano bien modulada con
Diabetes insípida 240 extraordinario control de la respiración. Su foto
está en la casa de Handel en Londres. La práctica
fue detenida a principios del siglo XX cuando se
conoció lo inhumana que era la operación.
Nuestro agradecimiento al Dr. Stephen Gilbey, nuestro especialista revisor de este capítulo.
Endocrinología
• Si sospecha un exceso de una hormona, pruebe inhibiendo la glándula que lo pro-
duce (p. ej., prueba de supresión de dexametasona en Cushing). Si hay un tumor
secretor de hormonas, entonces no se producirá la supresión a través de los
mecanismos normales de retroalimentación.
• Encuentre la manera de obtener una imagen de la glándula. NB: los tumores no
activos o los «incidentalomas» se pueden encontrar en la salud, ver p. 224. Solo la
imagen no establece el diagnóstico.
• Procure detener la progresión de la enfermedad; la dieta y el ejercicio pueden dete-
ner la progresión de la glucosa alterada en ayunas a la diabetes franca1,2. Para otras
glándulas, la detención de la progresión dependerá de la comprensión de la autoin-
munidad, y la interacción de los genes y el medio ambiente. En la autoinmunidad tiroi-
dea (una enfermedad autoinmune arquetípica), es posible rastrear las interacciones
que se establecen entre los genes y el ambiente (p. ej., tabaquismo y estrés) median-
te la expresión de moléculas inmunológicamente activas (HLA clase I y II, moléculas
de adhesión, citoquinas, CD40 y la regulación complementaria de las proteínas).
A los endocrinólogos les encanta este enfoque reduccionista, pero han tenido menos
éxitos en la comprensión de ciertos fenómenos emergentes –nuestras propiedades y
actuaciones que no pueden predecirse solamente desde el total conocimiento de
nuestros órganos alterados. Entendemos, p. ej., la secreción diurna del cortisol, pero
el conocimiento que relacione esto con los sueños, el reforzamiento de la memoria,
y la psicopatología de familias y otros grupos (como el que pasa visita a la planta de
endocrinología al que usted está a punto de unirse) está comenzando. Pero como
médicos vamos al compás de la actividad hormonal de los pacientes (como ellos van
a la nuestra) –y sería bueno que comenzáramos a reconocerlo ahora.
Para los que hacen exploraciones
—¿Qué le ocurre? —pregunta su examinador, audazmente. Mientras que usted se
disculpa con el paciente por esta grosería, preguntándole: «¿Le parece bien si habla-
mos de usted como si no estuviera aquí?», pensando en su interior que si usted
fuera un hombre o una mujer que apostase lo haría a que el diagnóstico es endo-
crinológico. En ninguna otra especialidad hay impresiones gestálticas tan característi-
ca. Para ser buenos en el reconocimiento de estas situaciones, hay que pasar tiem-
po con pacientes de endocrino y mirando una serie de imágenes clínicas. Además,
los signos cutáneos específicos son importantes, como los siguientes:
Tirotoxicosis: Pérdida de cabello; mixedema pretibial (término confuso, p. 218); onicólisis
(separación de las uñas del lecho ungueal); ojos saltones (exoftalmos/proptosis).
Hipotiroidismo: Pérdida de cabello; pérdida de la ceja; piel fría y pálida; cara caracte-
rística. Podría, quizás debería, suspender su examen si usted comenta bruscamente
«Cara de sapo».
Síndrome de Cushing: Obesidad central y miembros adelgazados
(= «limón con palos» ver fig. 5.2); cara de luna; joroba de búfalo;
almohadillas de grasa supraclavicular; estrías.
Enfermedad de Addison: Hiperpigmentación (cara, cuello, arruga palmar).
Acromegalia: Acral (distal) + sobrecrecimiento de tejidos blandos;
mandíbulas grandes (macrognatia), manos y pies; la piel es gruesa; los
rasgos faciales son toscos.
Hiperandrogenismo (乆): Hirsutismo; calvicie temporal; acné.
Hipopituitarismo: Piel adelgazada pálida o amarilla, produciéndose
arrugas finas alrededor de los ojos y la boca, haciendo que el pacien-
te parezca más viejo.
Hipoparatiroidismo: Piel seca, escamosa e hinchada; uñas quebradizas;
pelo grueso. Fig. 5.2.
Pseudohipoparatiroidismo: Estatura baja, cuello y 4º y 5º metacarpos «Limón con
cortos. palillos».
Factores de liberación
Células neurosecretoras
Capilares
Riñón y glándula
suprarrenal
Mama
Músculo y hueso
Ovario Testículo
Fig. 5.4. La neurorregulación y la integración de los ejes endocrinos nos convierten en quie-
nes somos –y lo que somos y hacemos nos devuelve a nuestro medio hormonal. Las disfun-
ciones multifactoriales dentro de la hormona del crecimiento (GH), hormona luteinizante (LH)
–testosterona, adrenocorticotropina (ACTH)– cortisol y los ejes de la insulina juegan un papel
importante en la maduración y envejecimiento saludables.
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 05.qxd:Oxford 27/04/18 16:59 Página 205
205
Endocrinología
1 ¿Qué fue antes, el huevo o la gallina? La mayoría de los genes asociados a la diabetes tipo 2 tienen
una función en los vasos sanguíneos, y el estrés en las células puede deberse a defectos vasculares
en el páncreas, por lo que puede ser que eventos vasculares desencadenen DM6.
Endocrinología
se la haya hecho recientemente); anote si está en ayuno o ninguno. Pruebas no sis-
temáticas, pero mejores que las de orina (falsos negativos).
Monoterapia
Primera línea de tratamiento: metformina
Fig. 5.5. Tratamiento de la diabetes tipo 2. Objetivo de HbA1c 48 mmol/mol (6,5%) o 53 (8%)
si dos o más agentes. Datos de Algoritmo para la terapia de disminución de la glucosa
en la sangre en adultos con diabetes tipo 2, Http://www.nice.org.uk/guidance/ng28/chapter/1-
Recommendations#drug-treatment-2
Endocrinología
después (salvo que sea muy rica en azúcar) –ayuda a igualar lo que realmente se come (vs
lo que está previsto).
2 Insulina Isophane (pico variable a 4-12 h): favorecido por NICE (¡es barata!).
3 Insulinas premezcladas (p. ej., NovoMix® 30 = 30% de acción corta y 70% de acción pro-
longada).
4 Los análogos de insulina humana recombinante de acción prolongada (insulina glargina) se
usan a la hora de acostarse en la DM tipo 1 o 2. No hay pico incómodo, tan bueno si la
hipoglucemia nocturna es un problema. Precaución si se está pensando en quedarse emba-
razada. La insulina detemir es similar y tiene un papel importante en regímenes intensivos
en DM tipo 2 con sobrepeso.
Pautas de insulina comunes. 䊳 Planee la titulación para adaptarse al estilo de vida, no al
revés. Plumas desechables: marcar la dosis; inserte la aguja a 90° en la piel. Variar el sitio de la
inyección (parte externa del muslo/abdomen); cambiar la aguja diariamente.
• «Régimen bifásico BD»: dos veces al día insulinas premezcladas con pluma (p. ej., NovoMix
30®), útiles en la DM tipo 2 o tipo 1 con un estilo de vida regular.
• Régimen «bolo-basal»: antes de las comidas insulina ultrarrápida + hora de acostarse analógi-
ca de acción prolongada: útil en la DM tipo 1 para lograr un estilo de vida flexible (p. ej., para
ajustar las dosis con la cantidad de las comidas o el ejercicio).
• Una vez al día antes de irse a la cama, insulina de acción prolongada: un buen régimen inicial
de insulina cuando se cambia de ADO en la DM tipo 2. Dosis típica para realizar el cambio
(¡lentamente!): 1 U/24 h para cada unidad de IMC en adultos. Considere el mantenimien-
to de la metformina (± pioglitazona) si es necesario para un control estricto y si el pacien-
te es incapaz de usar el régimen BD.
Ajuste de la dosis para la alimentación normal (DAFNE): Equipos multidisciplinarios que pro-
mueven la autonomía pueden salvar vidas. DAFNE encontró que el entrenamiento en dosis
flexibles e intensivas de insulina mejoraba el control de la glucemia, así como el bienestar9. Es
un recurso intensivo.
Dosis de insulina subcutánea durante las enfermedades intercurrentes (p. ej., gripe)
modificaciones de 2-4 unidades.
䊳䊳 Aconseje a los pacientes que eviten interrumpir la insulinoterapia durante una enfermedad
aguda.
• La enfermedad a menudo aumenta los requerimientos de insulina a pesar de la ingesta redu-
cida de alimentos.
• Mantenga la ingesta de calorías, p. ej., tomando leche.
• Revise la glucosa en la sangre 4 veces al día y busque cetonuria. Aumente las dosis de insu-
lina si aumenta la glucosa. Pedir ayuda de una enfermera especialista en diabetes o médico de
cabecera si está preocupado (especialmente si los niveles de glucosa están aumentando o tiene
cetonuria). Una opción es la insulina de acción ultrarrápida cada 2 horas (p. ej., 6-8 U), prece-
dida de una determinación de la glucemia.
• Ingresar si está vomitando, deshidratado, tiene cetosis (䊳䊳 p. 832), es un niño o está emba-
razada.
Bombas de insulina. (Insulina subcutánea continua). Considérelas cuando los inten-
tos de alcanzar HbA1c con múltiples inyecciones diarias han dado como resultado una hipo-
glucemia incapacitante o la persona ha sido incapaz de alcanzar la HbA1c objetivo a pesar de
un manejo cuidadoso.
2 Dado que la DM tiene tantos eventos vasculares, particularmente anime a utilizar una estatina
(p. 690), esp. si LDL> 3 mmol/L (115 mg/dL) o la PAS > 140. Incluso considerar el tratamiento con
una estatina independientemente de los niveles de colesterol; háblelo con su paciente.
Endocrinología
de la enfermedad cardiovascular a adultos con DM tipo 1 (NICE 2015). No combi-
ne un IECA con un antagonista del receptor de la angiotensina.
Fig. 5.6. Retinopatía de fondo, con micro- Fig. 5.7. Retinopatía preproliferativa, con
aneurismas y exudados duros. hemorragias y manchas algodonosas.
Cortesía del Prof. J. Trobe. Fotografía de Warrell et al., Oxford Textbook of Medi-
cine, 2010, con permiso de Oxford University Press.
Fig. 5.8. Retinopatía proliferativa, con nueva Fig. 5.9. Cicatrices de fotocoagulación láser
formación de vasos y hemorragias. previa.
Cortesía del Prof. J Trobe. Cortesía del Prof. J Trobe.
Mejorando la calidad de vida: más allá de los placeres de la carne
«No puedo comer lo que quiero a causa de esta dieta lamentable. No tengo sexo
porque la diabetes me ha hecho impotente. Está prohibido fumar, ¿qué es lo que
queda? Me dispararía si pudiera ver bien». Comience reconociendo la angustia de su
paciente. No se encoja de hombros –pero tampoco se lo tome literalmente. Esta
vida puede ser cambiada por la cirugía de cataratas, sildenafílo (a menos que esté
contraindicado, p. 230), se puede negociar la dieta y el deporte (no es necesario que
sea el tiro). Tome medidas para simplificar el cuidado. Detenga el autocontrol de la
glucemia si no está logrando nada (conocido por
la calidad de vida). Incluso si todas
estas intervenciones fallan, usted tiene un as en la manga: «Tratemos de encontrar
una cosa nueva, de valor, antes de nuestro próximo encuentro –y comparemos las
notas». Esto abre el camino a un placer indirecto: un mundo completamente nuevo.
de Charcot fig. 5.11): pes cavus, dedos en garra, pérdida de arco transversal, suela de
balancín. Causada por la pérdida de la sensación de dolor, lo que provoca estrés mecá-
nico y lesiones articulares repetidas. Hinchazón, inestabilidad y deformidad. 䊳 El reconoci-
miento temprano es vital (la celulitis o la osteomielitis son a menudo mal diagnosticadas).
Isquemia. Si no se pueden sentir los pulsos del pie, haga las mediciones de presión con
Doppler. Cualquier evidencia de neuropatía o enfermedad vascular aumenta el riesgo de
ulceración en los pies. Eduque (inspección diaria del pie –p. ej., con un espejo para la plan-
ta del pie, zapatos cómodos). Pedicura regularmente para eliminar los callos, ya que la
hemorragia y la necrosis de los tejidos pueden ocurrir debajo de estos, dando lugar a
una ulceración. Tratar infecciones por hongos (p. 408). La Cirugía (incluyendo los balones
de angioplastia endovascular, las endoprótesis y la recanalización subintimal) tiene su fun-
ción.
Ulceración del pie. Úlcera típicamente indolora, perforada (fig. 5.10) en un área de
callo grueso ± infección agregada. Causa celulitis, abscesos ± osteomielitis.
Evalúe el grado de:
1 Neuropatía (clínicamente).
2 Isquemia (clínicamente + Doppler ± angiografía).
3 Deformidad ósea, p. ej., articulación de Charcot (clínicamente + rayos X). Ver fig. 5.11.
4 Infección (hisopos, hemocultivo, rayos X para osteomielitis, sonda de úlcera para reve-
lar profundidad).
Tratamiento: Pedicura regularmente. Reposo en cama ± zapatos terapéuticos. Para arti-
culaciones de Charcot: reposo en cama/muletas/férula de contacto total hasta que el
edema y el calor local se reduzcan y la reparación ósea sea completa ( 8 semanas). Los
bisfosfonatos pueden ayudar. Las articulaciones de Charcot también se observan en
tabes dorsalis, espina bífida, siringomielia y lepra. Puede ser necesaria la cirugía de la cabe-
za del metatarso. Si hay celulitis, ingrese para antibióticos IV. Organismos comunes: Staphs,
Streps, anaerobios. Empezar empíricamente con bencilpenicilina 1,2 g/6 h IV y flucloxaci-
lina 1 g/6 h IV ± metronidazol 500 mg/8 h IV. La insulina intravenosa puede mejorar la
cicatrización. Consiga asistencia quirúrgica rápidamente. El grado de enfermedad vascu-
lar periférica, la salud general y la solicitud del paciente determinarán el grado de recons-
trucción/cirugía vascular.
䊳 Indicaciones absolutas para la cirugía: Absceso o infección profunda; propagación de la
infección anaerobia; dolor en reposo/gangrena; artritis supurativa.
Neuropatías diabéticas. Polineuropatía sensorial simétrica: (adormecimiento, hormi-
gueo y dolor en zona de «guantes y medias», p. ej., peor durante la noche). Rx: parace-
tamol tricíclico (amitriptilina 10-25 mg noche, gradualmente a 150 mg) duloxe-
tina, gabapentina o pregabalina opiáceos. Ayuda evitar soportar peso. Mononeuritis
múltiple: (p. ej., III y VI nervios craneales). Tratamiento: ¡difícil! Si es súbita o grave, la inmu-
nosupresión puede ayudar (corticosteroides, inmunoglobulina IV, ciclosporina). Amiotro-
fia: doloroso debilitamiento de los cuádriceps y otros músculos pelvi-femorales. Utilizar
electrofisiología para mostrar, p. ej., radiculopatía lumbosacra, plexopatía o neuropatía
crural proximal. Curso natural: variable con mejoría gradual pero a menudo incompleta.
Se han utilizado inmunoglobulinas IV. Neuropatía autonómica: (p. 505) Caída de TA pos-
tural;
autorregulación cerebrovascular; pérdida de la arritmia sinusal respiratoria (neu-
ropatía vagal); gastroparesis; retención de orina; disfuncion eréctil; sudoración gustativa;
diarrea (puede responder a codeína fosfato). La gastroparesia (saciedad temprana, hin-
chazón postprandial, náusea/vómito) se diagnostica mediante gammagrafía gástrica con
una comida marcada con tecnecio99; antieméticos, eritromicina o estimulación gástrica.
La hipotensión postural puede responder a fludrocortisona (ES: edema, PA)/midodrina
(-agonista, ES: PA).
Endocrinología
entender que las muletas, las piernas de madera o articuladas son una broma... ¡Adiós
a la familia, adiós al futuro! Mi vida se ha ido, no soy más que un tronco inmóvil»
(Arthur Rimbaud, carta a su hermana Isabelle, 10 de julio de 1891).
Fig. 5.10. Gangrena (dedos de los pies 2, 4 Fig. 5.11. Articulación de Charcot (neuro-
y 5). pática).
Reproducción de Warrell et al., Oxford Textbook Reproducción de Warrell et al,. Oxford Textbook
of Medicine, 2010, con permiso de Oxford Uni- of Medicine, 2010, con permiso de Oxford Uni-
versity Press. versity Press.
214 Hipoglucemia
䊳䊳 Hipoglucemia. La emergencia endocrina más común –ver p. 834. El diagnóstico y
tratamiento inmediatos son esenciales –el daño cerebral y la muerte pueden ocurrir si
son graves o prolongados.
Definición. Glucemia plasmática 3 mmol/L (54 mg/dL). El umbral para los síntomas
varía. Ver RECUADRO.
Síntomas. Autonómicos: Sudoración, ansiedad, hambre, temblor, palpitaciones, mareos.
Neuroglucopénicos: Confusión, somnolencia, problemas visuales, convulsiones, coma. Rara-
mente síntomas focales, p. ej., hemiplejia transitoria. El mutismo, el cambio de personali-
dad, la inquietud y la incoherencia pueden conducir a un diagnóstico erróneo de la into-
xicación alcohólica o incluso la psicosis.
Hipoglucemia en ayunas. Causas: La causa principal es el tratamiento con insulina o
Endocrinología
Insulinoma 215
Esta tumoración de las células de los islotes pancreáticos es frecuentemente benigna (90-
95%), es esporádica o se observa con MEN-1 (p. 223). Se presenta como hipoglucemia
en ayunas, con la tríada de Whipple:
1. Los síntomas asociados con el ayuno o el ejercicio.
2. Hipoglucemia registrada con síntomas.
3. Síntomas aliviados con glucosa.
Prueba de cribado. Hipoglucemia + insulina en plasma durante un largo ayuno.
Pruebas supresoras. Administre insulina IV y mida el péptido C. Normalmente, la
insulina exógena suprime la producción de péptido C, pero esto no ocurre en el insuli-
Endocrinología
noma.
Técnicas de imagen. CT/MRI ± ecografía pancreática endoscópica ± TEIC (ver
RECUADRO, todos falibles, por lo que no pierda demasiado tiempo antes de proceder
a la visualización intraoperatoria ± ultrasonidos intraoperatorios).18 F-L-3,4-dihidroxife-
nilalanina PET-CT puede ayudar a guiar la cirugía laparoscópica.
Tratamiento. Escisión.
Nesidioblastosis. Ver RECUADRO. Si esto no funciona, las opciones son: dieta, diazoxi-
do, dextrosa IV, alimentación enteral, everolimus.
䊳䊳 Cetoacidosis diabética. Aparece como consecuencia de la deficiencia de insulina
(p. ej., diagnóstico desconocido, enfermedad intercurrente, interrupción de la terapia con
insulina). Véase p. 832.
Hipotálamo
T4-TBG
Pituitaria Tiroides
TRH T4
Receptores
TSH nucleares
T3
Efecto fisiológico
(p. 213)
= Retroalimentación negativa. T3-TBG
Fig. 5.12. Vías implicadas en la función tiroidea.
Pruebas básicas. Ver tabla 5.2. Los T4 y T3 libres son más útiles que T4 y T3 totales, ya
que estos últimos se ven afectados por la TBG. T4 y T3 totales están cuando la TBG está
y viceversa. La TBG está en el embarazo, terapia de estrógenos (TRH, anticoncepti-
vos orales) y hepatitis. TBG está
en el síndrome nefrótico y la desnutrición (ambos con
pérdida proteica), medicamentos (andrógenos, corticosteroides, fenitoína), enfermedad
hepática crónica y acromegalia. La TSH es muy útil:
• Sospecha de hipertiroidismo: Pida T3, T4 y TSH. Todos tendrán
TSH (excepto el raro
adenoma pituitario que secreta TSH). La mayoría tiene T4, pero ~1% tienen solo
aumento de T3.
• Sospecha de hipotiroidismo o seguimiento de R/ sustitución: Pida solo T4 y TSH. La T3 no
añade ninguna información adicional. La TSH varía a lo largo del día: sobre las 2 de la
tarde; se incrementa un 30% más durante los períodos de oscuridad, por lo que es
conveniente tratar de hacerlo a la misma hora.
Eutiroidismo enfermo: En cualquier enfermedad sistémica, las PFT pueden alterarse. El patrón
típico es que «todo sea bajo». La prueba debe repetirse después de la recuperación.
Interferencia con las pruebas como consecuencia de anticuerpos en el suero, que inter-
fieren con la prueba.
Otras pruebas
• Autoanticuerpos tiroideos: Los anticuerpos antitiroideos peroxidasa (TPO, anteriormen-
te llamados microsómicos) o anticuerpos antitiroglubulina pueden estar aumentados en
la enfermedad tiroidea autoinmune: enfermedad de Hashimoto o Graves. Si son positi-
vos en enfermedad de Graves, hay un mayor riesgo de desarrollar hipotiroidismo en
una etapa posterior.
• Anticuerpo del receptor de TSH: Puede estar en la enfermedad de Graves (útil duran-
te el embarazo).
• Tiroglobulina sérica: Útil en el seguimiento del tratamiento del carcinoma (p. 600), y en
la detección de hipertiroidismo facticio (automedicado), donde es baja.
• Ultrasonido: Esto distingue a los nódulos quísticos (generalmente, pero no siempre
benignos) de los sólidos (posiblemente malignos). Si un nódulo solitario grande (o
dominante), en un bocio multinodular, se hace una aspiración con una aguja fina para
buscar cáncer de tiroides; Ver fig. 13.26, p. 601.
• Exploración isotópica: (123Yodo, 99tecnecio pertecnetato, etc.; ver fig. 13.25, p. 601.) Útil
para determinar la causa del hipertiroidismo y para detectar el bocio retroesternal, el
tejido tiroideo ectópico o las metástasis tiroideas (+ TC de cuerpo entero). Si hay
nódulos sospechosos, la pregunta es: ¿la absorción del isótopo en el área ha aumenta-
do (caliente), disminuido (frío) o es la misma (neutral) que en el resto del tiroides (ver
fig. 5.13)? Hay pocos neutros y casi ningún nódulo caliente que sean malignos. El 20%
de los nódulos «fríos» sí son malignos. Es más probable que la cirugía sea necesaria si:
• hay un crecimiento rápido • signos de compresión • un nódulo dominante en la gam-
magrafía • un nódulo 3 cm • hipo-ecogenicidad. Ver también p. 738.
Endocrinología
TSH,
T4 Hipotiroidismo
TSH, T4 normal Hipotiroidismo tratado o subclínico (p. 221)
TSH, T4 Tumor secretor de TSH o resistencia a la hormona
tiroidea
TSH, T4 y
T3 Conversión lenta de T4 a T3 (deficiencia de deyodinasa,
hipertiroxinemia eutiroidea*) o artefacto del anticuerpo
de hormona tiroidea
TSH, T4 o T3 Hipertiroidismo
TSH, T4 y T3 normales Hipertiroidismo subclínico
TSH,
T4 Hipotiroidismo central (trastorno hipotalámico o
pituitario)
TSH,
T4 y
T3 Eutiroideo enfermo o enfermedad de la pituitaria
TSH normal, T4 anormal Considere los cambios en la globulina de unión a la
tiroides, una interferencia en el análisis, amiodarona o el
tumor de TSH hipofisario
* En «hipotiroidismo consuntivo» la actividad deiodinasa está ; sospechar si las dosis de tiroxi-
na tienen que ser .
218 Tirotoxicosis
Efecto clínico por el exceso de la hormona tiroidea, generalmente por hiperfunción de
la glándula.
Síntomas. Diarrea;
peso; apetito (si, aumento de peso paradójico en 10%); hiperac-
tividad; sudoración; intolerancia al calor; palpitaciones; temblor; irritabilidad; labilidad emocio-
nal; oligomenorrea ± infertilidad. Raramente psicosis; corea; pánico; picor; alopecia; urticaria.
Signos. Pulso rápido/irregular (FA o ESV, VT rara), piel húmeda y caliente; temblor fino;
eritema palmar; pelo delgado; retraso del párpado (fig. 5.14; el párpado se queda detrás
del descenso del ojo mientras el paciente observa su dedo descender lentamente); La
retracción del párpado (exposición de la esclerótica por encima del iris, causando «mira-
da fija»). Puede haber bocio (fig. 5.15); nódulos tiroideos; o dependiendo de la causa un
soplo. Signos de la enfermedad de Graves: (RECUADRO: «Enfermedad ocular tiroidea»)
Endocrinología
Endocrinología
daño nervioso no necesariamente va de la mano de la protrusión. De hecho, si el
ojo no puede sobresalir por razones anatómicas, la compresión del nervio óptico es
más probable –una paradoja.
Signos. Exoftalmos –aspecto del ojo que sobresale; proptosis –los ojos protruyen
más allá de la órbita (mira desde arriba en el mismo plano que la frente); edema
conjuntival; ulceración corneal; papiledema; pérdida de visión de color. Oftalmoamo-
plejía (especialmente en la mirada hacia arriba) ocurre debido a la hinchazón y a la
fibrosis del músculo.
Pruebas. El diagnóstico es clínico. La TC/RM de las órbitas puede revelar un
aumento de los músculos oculares.
Tratamiento. Obtenga ayuda de especialistas. Trate el hiper o el hipotiroidismo.
Recomiende dejar de fumar (peor pronóstico). La mayoría tienen una enfermedad
leve que puede ser tratada sintomáticamente (lágrimas artificiales, gafas de sol, evi-
tar el polvo, elevar la cama cuando se duerme para
edema periorbital). Diplopía se
puede manejar con un prisma de Fresnel pegado a unas lentes de contacto (ayuda
a cambiar fácilmente con los cambios del exoftalmos). En enfermedad más severa,
intente una dosis alta de esteroides (la metilprednisolona IV es mejor que la pred-
nisolona 100 mg/día VO) –disminuyendo según los síntomas. La descompresión qui-
rúrgica se utiliza para las enfermedades graves que amenazan la vista, o por razones
estéticas una vez que la actividad de la enfermedad ocular se ha reducido (median-
te una vía orbital inferior, utilizando el espacio en los senos etmoidal, esfenoidal y
maxilar). La cirugía de párpados puede mejorar la imagen y la función. La radiotera-
pia orbital se puede usar para tratar la oftalmoplejía, pero tiene poco efecto sobre
la proptosis. Opciones futuras: Anticuerpos anti-TNF (p. ej., infliximab).
¿Por qué los síntomas de la enfermedad del tiroides son tan variados 221
y tan sutiles?
Casi todos nuestros núcleos celulares tienen receptores que muestran una alta afini-
dad por T3: el conocido como TR-1 es abundante en músculo y grasa;TR-2 es abun-
dante en el cerebro y TR-1 es abundante en cerebro, hígado y riñón. Estos recepto-
res, a través de su influencia en varias enzimas, afectan a los siguientes procesos:
• El metabolismo de sustratos, vitaminas y minerales.
• Modulación de todas las otras hormonas y sus respuestas de tejido objetivo.
• Estimulación del consumo de O2 y generación de calor metabólico.
• Regulación de la síntesis de proteínas, y metabolismo de carbohidratos y lípidos.
• Estimulación de la demanda de coenzimas y vitaminas relacionadas.
Endocrinología
Enfermedad tiroidea subclínica
Hipotiroidismo subclínico. Se sospecha si TSH> 4 mU/L con T4 y T3 normales
y sin síntomas. Es común: ~10% de los > 55 años tienen TSH. El riesgo de pro-
gresión al hipotiroidismo franco es ~2%, y aumenta a medida que TSH; el riesgo
se duplica si hay anticuerpos tiroideos peroxidasa, y también está aumentado en los
hombres. Tratamiento:
• Confirme que la TSH aumentada es persistente (vuelva a verificar en 2-4 meses).
• Vuelva a revisar el historial: si hay características no específicas (p. ej., depresión), dis-
cuta los beneficios del tratamiento (p. 220) con el paciente – puede que mejore.
• Tenga un umbral para supervisar cuidadosamente el tratamiento, ya que su paciente
puede no estar tan asintomático después de todo, y las muertes cardíacas pueden ser
prevenidas. Trate si: 1. TSH 10 mu/L. 2. Autoanticuerpos tiroideos positivos.
3. Enfermedad de Graves pasada (tratada). 4. Otra autoinmunidad específica del órga-
no (DM tipo 1, miastenia, anemia perniciosa, vitiligo), ya que es más probable que pro-
gresen al hipotiroidismo clínico. Si TSH 4-10, y síntomas vagos, tratar durante 6 meses
–solo continúe si los síntomas mejoran (o si la paciente está tratando de concebir). Si
el paciente no cae en ninguna de estas categorías, controlar la TSH anualmente.
• Los riesgos del tratamiento bien controlado del hipotiroidismo subclínico son
pequeños (pero existe un riesgo de fibrilación auricular y osteoporosis si se trata
excesivamente).
Hipertiroidismo subclínico. Ocurre cuando
TSH, con T4 y T3 normales. Hay
un aumento del 41% en la mortalidad relativa de todas las causas versus los sujetos
de control eutiroideos, p. ej., de la FA y la osteoporosis. Tratamiento:
• Confirme que la supresión de TSH es persistente (volver a comprobar en 2-4
meses).
• Compruebe si hay una causa no tiroidea: enfermedad, embarazo, insuficiencia
hipofisaria o hipotalámica (sospecha si T4 o T3 están en el extremo inferior del
rango de referencia), uso de medicamentos que suprimen la TSH, p. ej., tiroxina,
esteroides.
• Si TSH < 0,1, tratar individualmente, p. ej., con síntomas de hipertiroidismo, FA, pér-
dida de peso inexplicada, osteoporosis, bocio.
• Las opciones son la terapia con carbimazol o propiltiouracilo –o tratamiento con
radioyodo.
• Si no hay síntomas, vuelva a revisar cada 6 meses.
2. Los efectos de la reabsorción ósea de la PTH pueden causar dolor, fracturas y osteo-
penia/osteoporosis. 3. PA: 䊳 comprobar Ca2+ en todos los que tie-
nen hipertensión. Asociación: MEN-1 (RECUADRO «Neoplasia endo-
crina múltiple»). Pruebas: Ca2+ y PTH o inapropiadamente nor-
males (otras causas de esto: tiazidas, litio, hipercalcemia hipocalciúri-
ca familiar, hiperparatiroidismo terciario). También
VO43- (menos en
la insuficiencia renal), FA de la actividad ósea, análisis de orina de
24 h Ca2+. Estudios de imagen: osteítis fibrosa cística (debido a resor-
ción severa, rara) puede aparecer como erosiones subperiosteales,
quistes o tumores marrones de falanges ± acro-osteólisis (fig. 5.17)
± cráneo en «sal y pimienta». DEXA (p. 683, para osteoporosis, p.
682). Rx: Si es leve: aconseje la ingesta de fluido para prevenir litia-
sis; evite tiazidas + alto Ca2+ y la ingesta de vitamina D; ver a los 6
meses. La extirpación del adenoma o de las cuatro glándulas hiper-
plásicas previene las fracturas y las úlceras pépticas. Indicaciones: Ca2+
sérico o urinario alto, osteoporosis, cálculos renales,
función renal,
edad 50 años. Complicaciones: Hipoparatiroidismo, daño en el ner-
vio recurrente laríngeo (\ronquera),
Ca2+ sintomática (síndrome
de los huesos con hambre, comprobar Ca2+ diariamente durante
14 días postoperatorio). La ecografía y el MIBI preoperatorios pue-
den localizar un adenoma; se utiliza el muestreo de PTH intraopera- Fig. 5.17. Acro-
torio para confirmar la extracción. Recurrencia: ~8% a los 10 años19. osteolisis.
Cinacalcet (una calcimimética) sensibilidad de las células paratiroi- © Dr I Maddison
myweb.lsbu.ac.uk
des a Ca2+ (\
secreción de PTH); vigilar el Ca2+ dentro de la sema-
na de los cambios de dosis; ES: mialgia;
testosterona.
Hiperparatiroidismo secundario.
Ca2+, PTH (apropiadamente). Causas:
inges-
ta de vitamina D, insuficiencia renal crónica. Rx: Corregir causas. Aglutinantes de fosfato;
vitamina D; cinacalcet si PTH 85 pmol/L y paratiroidectomía difícil.
Hiperparatiroidismo terciario. Ca2+, PTH (inapropiadamente). Ocurre des-
pués de hiperparatiroidismo secundario prolongado, haciendo que las glándulas actúen
autónomamente tras haber sufrido un cambio hiperplásico o adenomatoso. Esto produ-
ce que Ca2+ por secreción de PTH ilimitado por el control de realimentación. Visto
en insuficiencia renal crónica.
Hiperparatiroidismo maligno. La proteína relacionada con las paratiroides (PTHrP)
es producida por algunos cánceres de pulmón de células escamosas, carcinomas de célu-
las renales y de mama. Esto imita PTH resultando en Ca2+ (PTH es
, dado que PTHrP
no se detecta en el ensayo).
Hipoparatiroidismo
Hipoparatiroidismo primario. La secreción de PTH es
debido al fallo de la glán-
dula. Pruebas:
Ca2+, VO4 o , FA. Signos: Los de hipocalcemia, p. 678 ± comorbili-
dad autoinmune (RECUADRO «Síndromes autoinmunitarios poliendocrinos»). Causas:
Autoinmune; congénita (síndrome de Di George, OHCS, p. 642). Rx: suplementos de Ca2+
+ calcitriol (o PTH sintética/12 h SC: previene la hipercalciuria).
Hipoparatiroidismo secundario. Radiación, cirugía (tiroidectomía, paratiroidecto-
mía), hipomagnesemia (el magnesio es necesario para la secreción de PTH).
Pseudohipoparatiroidismo. Fracaso de la respuesta de la célula diana a la PTH. Sig-
nos: Metacarpianos cortos (esp. 4º y 5º, fig. 5.18), rostro redondo, estatura baja, ganglios
basales calcificados (fig. 5.19),
CI. Pruebas:
Ca2+, PTH, o FA. Rx: Igual que hipo-
paratiroidismo 1º.
Pseudopseudohipoparatiroidismo. Las características morfológicas de pseudohi-
potiroidismo, pero con la bioquímica normal. La causa de ambos es genética.
Endocrinología
215), o, raramente, somatostatinoma (DM + esteatorrea + cálculos biliares/colan-
gitis), VIPoma (p. 258) o glucagonomas (± síndrome glucagón: erupción migrato-
ria; glositis, queilitis, fig. 8.6 p. 327, anemia,
peso, plasma glucagón, glucosa).
• Prolactinoma hipofisario (~50%) o tumor secretor de GH (acromegalia:21 p. 239);
también se asocian los tumores suprarrenales y carcinoides.
El gen MEN-1 es un gen supresor de tumor. Menin, su proteína, altera la activación
de la transcripción. Muchos son esporádicos, presentándose entre la 3 ª-5 ª décadas.
MEN-2a:
• Tiroides: carcinoma medular de tiroides (observado en ~100%, p. 600).
• Adrenal: feocromocitoma (~ 50%, generalmente benigno y bilateral).
• Hiperplasia paratiroidea (~ 80%, pero menos del 20% tiene Ca2+).
MEN-2b: Tiene características similares a MEN-2a sumándose neuromas mucosales
y aspecto marfanoide (p. 706), pero no hiperparatiroidismo. Los neuromas de la
mucosa consisten en «bultos» en: labios, mejillas, lengua, glotis, párpados y nervios
visibles de la córnea.
El gen implicado en MEN-2a y b es el protooncogén ret, un receptor la tirosina qui-
nasa. Las pruebas para las mutaciones del ret están revolucionando el tratamiento
MEN-2 permitiendo que se realice una tiroidectomía profiláctica antes de la neo-
plasia, generalmente antes de los 3 años de edad. NB: las mutaciones del RET rara-
mente contribuyen a los tumores paratiroideos esporádicos.
causas endógenas son raras: el 80% se debe a ACTH, de los cuales un adenoma hipo-
fisario (enfermedad de Cushing) es la causa más común.
1. Causas dependientes de ACTH (ACTH)
• Enfermedad de Cushing: Hiperplasia suprarrenal bilateral por un adenoma hipofisario
secretante de ACTH (generalmente un microadenoma, p. 234). 乆:么> 1:1. Edad
pico: 30-50 años. Una dosis baja de dexametasona como prueba (RECUADRO) no
conduce a ningún cambio en el cortisol en plasma, pero 8 mg pueden ser suficien-
tes para reducir más de la mitad el cortisol de la mañana (como ocurre normal-
mente).
• Producción de ACTH ectópica: Especialmente cáncer de pulmón de células pequeñas
y tumores carcinoides, p. 271. Características específicas: pigmentación (debido a
ACTH), alcalosis metabólica hipocalémica (cortisol conduce a la actividad
mineralocorticoide), pérdida de peso, hiperglucemia. Las características clásicas de
Cushing están a menudo ausentes. Dexametasona, incluso en altas dosis (8 mg) falla
en suprimir la producción de cortisol.
• Raramente, producción de CRF ectópica: Algunos cánceres de tiroides (medulares) y
de próstata.
2. Causas independientes de la ACTH (
ACTH debido a la
retroalimentación negativa)
• Iatrogénico: dosis farmacológicas de esteroides (comunes).
• Adenoma/cáncer suprarrenal: (Puede causar dolor abdominal ± virilización en 乆,
p. 230.) Debido a que el tumor es autónomo, la dexametasona en cualquier dosis
no suprimirá el cortisol.
• Hiperplasia adrenal nodular: (En cuanto al adenoma suprarrenal, sin supresión de
dexametasona.)
• Raramente: complejo de Carney, p. 223. McCune-Albright, ver OHCS, p. 650.
Síntomas. Peso; cambio de humor (depresión, letargo, irritabilidad, psicosis); debilidad
proximal; disfunción gonadal (menstruación irregular, hirsutismo, disfunción eréctil); acné;
rotura recurrente del tendón de Aquiles y ocasionalmente virilización si es 乆.
Signos. Obesidad central; cara de luna, pletórica; joroba de búfalo; distribución de la
grasa supraclavicular; atrofia de piel y músculos; moretones; estrías abdominales púrpu-
ras (fig. 5.20); osteoporosis; PA; glucosa; propensos a las infecciones; mala curación. Sig-
nos de la causa (p. ej., masa abdominal).
Pruebas. Los cortisoles plasmáticos aleatorios pueden inducir a error, ya que la enferme-
dad, la hora del día y el estrés (p. ej., el pinchazo de la vena) influyen en los resultados. Ade-
más, no confíe en la imagen para localizar la causa: los «incidentalomas» no funcionales apa-
recer en ~ 5% en el TC suprarrenal y ~10% en la RM hipofisaria. RM detecta solo ~ 70%
de los tumores pituitarios causando un Cushing (muchos son demasiado pequeños).
Tratamiento. Depende de la causa.
• Iatrogénico: Interrumpa los medicamentos si es posible.
• Enfermedad de Cushing: Eliminación selectiva del adenoma hipofisario (transesfenoi-
deo). Adrenalectomía bilateral si la fuente no se puede localizar o recidiva después de
la operación (complicación: síndrome de Nelson: pigmentación de la piel por
ACTH de un tumor hipofisario en aumento, ya que la adrenalectomía remueve la
retroalimentación negativa, responde a la radiación pituitaria).
• Adenoma o carcinoma suprarrenal: Adrenalectomía: «cura» adenomas, pero rara vez
cura el cáncer. La radioterapia y los fármacos adrenolíticos (mitotano) tienen que
seguir si hay carcinoma.
• ACTH ectópico: Cirugía si el tumor está localizado y no se ha diseminado. Metoripone,
ketoconazol y fluconazol
secreción de cortisol antes de la operación o en espera de
efectos de la radiación. Puede ser necesario intubación + mifepristona (compite con
el cortisol en los receptores) + etomidato (bloques de síntesis de cortisol), p. ej., en la
psicosis asociada a ACTH.
Pronóstico. Un Cushing sin tratar tiene la mortalidad vascular22. Si lo trató, el pro-
nóstico es bueno (pero la miopatía, la obesidad, la irregularidad menstrual, PA, la osteo-
porosis, cambios de humor sutiles y DM a menudo permanecen –así que siga al pacien-
te cuidadosamente, y trátelo individualmente).
Endocrinología
na, p. 689). El cortisol libre urinario de 24 h (normal: < 280 nmol/24 h) es una alternativa.
Pruebas de segunda línea. Si las pruebas de primera línea son anormales: Prue-
ba de supresión de dexametasona durante 48 horas: Administre dexametasona 0,5
mg/6 h VO durante 2 días. Mida el cortisol a las 0 y a las 48 h (última prueba a las
6 h después de la última dosis). Una vez más, en el síndrome de Cushing, hay un fra-
caso para suprimir el cortisol. La prueba de supresión de 48 h de alta dosis de dexa-
metasona: (2 mg/6 h.) Puede distinguir la hipófisis (supresión) de otras causas (no
supresión o parcial). Cortisol de medianoche: Ingrese (a menos que se use cortisol
salivar). Es frecuentemente impreciso debido a problemas de medición. El ritmo cir-
cadiano normal (cortisol más bajo a medianoche y más alto por la mañana tempra-
no) se pierde en el síndrome de Cushing. El análisis de sangre a medianoche, a tra-
vés de una cánula durante el sueño, muestra cortisol en el Cushing.
Pruebas de localización. (¿Dónde está la lesión?) Si las pruebas de primera y
segunda línea son positivas. Plasma ACTH. Si la ACTH es indetectable, es probable
que haya un tumor suprarrenal TC/MRI glándulas suprarrenales. Si no hay masa,
proceda al muestreo de las venas suprarrenales. Si la ACTH es detectable, distinguir
una causa hipofisaria de la producción de ACTH ectópica mediante una prueba de
supresión a dosis alta o una prueba de hormona liberadora de corticotropina (CRH):
100 mcg de CRH ovino o humano. Medir cortisol a 120 min. El cortisol aumenta
con la enfermedad pituitaria pero no con la producción de ACTH ectópica.
Si las pruebas indican que el cortisol responde a la manipulación, la enfermedad
de Cushing es probable. Realice pruebas de imagen (RM) de la hipófisis y conside-
re muestreo bilateral de sangre de los senos petrosos inferiores.
Si la prueba indica que el cortisol no responde a la manipulación, busque la fuen-
te de la ACTH ectópica, p. ej., la TC con contraste IV del tórax, el abdomen y la pel-
vis ± RM del cuello, del tórax y abdomen, p. ej., para pequeños tumores carcinoides
que secretan ACTH.
Adrenal
Endocrinología
Hipófisis
CRF
ACTH Cortisol
Efecto
Retroalimentación negativa fisiológico
CRF = Factor de liberación de la corticotropina
ACTH = Hormona adrenocorticotrófica
Fig. 5.21. Vías implicadas en la función suprarrenal.
Uso de esteroides. Aconsejar el uso de un brazalete declarando que está siendo tra-
tado con esteroides. Añadir 5-10 mg de hidrocortisona a la ingesta diaria antes de la acti- 227
vidad extenuante/ejercicio. En enfermedades febriles, lesiones o estrés doblar la dosis de
esteroides. Entregue las jeringas y prescriba hidrocortisona IM, y muéstrele cómo inyec-
tarse 100 mg IM si el vómito impide la ingesta oral (busque ayuda médica, ingrese para
hidratación intravenosa si está deshidratado).
Seguimiento. Anual (PA, orina y electrolitos); vigile las enfermedades autoinmunes
(anemia perniciosa)4.
Pronóstico (tratado). Las crisis suprarrenales y las infecciones causan un aumento de
las muertes: la edad media del fallecimiento para los hombres es de ~65 años (11 años
< esperanza de vida; las mujeres pierden ~3 años).
Endocrinología
! Uso de esteroides exógenos
Los esteroides de sustitución son vitales en aquellos que toman esteroides a largo
plazo cuando están muy enfermos. La insuficiencia suprarrenal puede desarrollarse con
un shock hipovolémico mortal, si no se administra esteroide adicional. 䊳䊳 Ver p. 836.
Uso de los esteroides: Advierta de los peligros de una interrupción brusca del trata-
miento de los esteroides. Señale su prescripción a los médicos/dentistas/cirujanos
que deben saber que el paciente está tomando esteroides: dé una tarjeta de este-
roides.
4 Síndromes poliglandulares autoinmunes tipos 1-4: 1. Síndrome monogénico (gen AIRE en el cromo-
soma 21); signos: candidiasis, hipoparatiroidismo + Addison. 2. (síndrome de Schmidt) Insuficiencia
suprarrenal + enfermedad tiroidea autoinmune ± DM ± pleuritis/pericarditis 3. Enfermedad tiroidea
autoinmune + otras enfermedades autoinmunes pero no Addison. 4. Combinaciones autoinmunes no
incluidas en 1-3.
228 Hiperaldosteronismo
Hiperaldosteronismo primario. Producción excesiva de aldosterona, independien-
te del sistema renina-angiotensina, que causa la retención de sodio y agua y
liberación
de renina. Considere si: hipertensión, hipocalemia o alcalosis en alguien que no está en
diuréticos. El sodio tiende a ser levemente elevado o normal.
Síntomas: A menudo asintomáticos o signos de hipocalemia (p. 674): debilidad (incluso
cuadriparesia), calambres, parestesias, poliuria, polidipsia. PA, pero no siempre.
Causas: ~ 2/3 es debido a un adenoma único que produce aldosterona (vinculado a muta-
ciones en los canales de K+)5 –Síndrome de Conn. ~1/3 Debido a la hiperplasia adreno-
cortical bilateral. Causas raras: carcinoma suprarrenal; o aldosteronismo remediable por
glucocorticoides (GRA) –el elemento regulador de la ACTH del gen de la 11 -hidroxi-
lasa se fusiona con el gen de la aldosterona sintasa, producción de aldosterona y la
Endocrinología
Feocromocitoma
Tumores raros que producen catecolaminas. Surgen de células paraganglionares simpáti-
cas (= cuerpos de feocromo), que son colecciones de células cromafines. Generalmen-
te se encuentran dentro de la médula suprarrenal. Los tumores extraadrenales (para-
gangliomas) son más raros, y a menudo se encuentran por la bifurcación aórtica (los
órganos de Zuckerkandl). Los feocromocitomas siguen aproximadamente la regla del
10%:10% son malignos, 10% extra-suprarrenales, 10% son bilaterales y 10% son familia-
res. Datos recientes sugieren mayor preponderancia en pacientes con mutaciones gené-
ticas que afectan a varios genes incluyendo SDH (sucinil dehidrogenasa). Por lo tanto, la
historia familiar es crucial y la remisión para el cribado genético (particularmente < 50
años). Una causa peligrosa pero tratable de hipertensión (en < 0,1%). Asociaciones: ~
90% son esporádicos; 10% son parte de los síndromes de un cáncer hereditario (p. 215),
p. ej., tiroides, MEN-2A y 2B, neurofibromatosis, síndrome de von Hippel-Lindau (muta-
ciones SDH). Triada clásica: Cefalea episódica, sudoración y taquicardia (± ,
o PA,
ver RECUADRO «Características del feocromocitoma»).
Pruebas. • Bioquímica: orina de 24 h para metanefrinas/metadrenalina (mejor que cate-
colaminas y ácido vanililmandélico25), leucocitos. • Localización: TC/RM abdominal o
gammagrafía meta-yodo bencilguanidina (isótopos que buscan cromafín) (pueden
encontrar tumores extraadrenales, p. 738). Tratamiento. Cirugía: -bloqueo pre-ope-
ratorio: fenoxibenzamina (-bloqueante) se utiliza antes de -bloqueante para evitar la
crisis de la estimulación -adrenérgica sin oposición, -bloquear si también hay cardio-
patía o taquicardia. Consulte al anestesista. Postoperatorio: Haga el análisis de orina de 24
h metanefrina durante las 2 semanas de postoperatorio, controle la PA (riesgo de
BP).
䊳䊳 Emergencia R : p. 837. Si es maligno, puede usarse quimioterapia o MIBG radiomar-
x
cada terapéutica. Seguimiento: A lo largo de toda la vida: la recidiva maligna puede pre-
sentarse tardíamente, sería necesario el cribado genético.
5Tumores de la zona glomerulosa, zona fasciculada, o zona reticularis asociados con síndromes de
mineralcorticoides, glucocorticoides o andrógenos, respectivamente, habitualmente; recuerde
«GRFminer GA».
Endocrinología
ro de incidentalomas suprarrenales. Si la imagen muestra un adenoma unilateral, se
puede realizar un muestreo de la vena suprarrenal (se toman muestras de sangre
venosa de ambas glándulas suprarrenales). Si un lado revela una mayor proporción
de aldosterona: cortisol en comparación con el otro (> 3 veces de diferencia), es
probable que haya un adenoma, y la extirpación quirúrgica está indicada. Si no se
observan nódulos o nódulos bilaterales, piense en la hiperplasia suprarrenal o GRA.
䊳 NB: la estenosis de la arteria renal es una causa más común de PA y
K+ refrac-
tarios (p. 315).
Tratamiento: Comer sano, optimizar el peso, afeitarse; fotodepilación láser; cera; cremas,
p. ej., eflornitina, o electrólisis (costosas y requieren mucho tiempo, pero son eficaces);
blanqueador (peróxido de hidrógeno 1:10).
• Estrógenos: píldora anticonceptiva combinada (OHCS, p. 302) Yasmin® es una opción
dado que su progestágeno, la drospirenona, es un antimineralocorticoide. Alternativa,
Dianette®, (co-cyprindiol) siempre que no haya contraindicaciones, como la hiperten-
sión incontrolada y el cáncer de mama actual. Suspender el tratamiento de Dianette®
3-4 meses después de que el hirsutismo haya desaparecido completamente debido al
aumento del riesgo de TVP. Si los anticonceptivos orales combinados están contrain-
dicados o no han funcionado (después de 6/12), derivar a la paciente a la atención
secundaria para tratamiento especializado.
• La metformina (ayuda a la resistencia a la insulina) y la espironolactona se prueba a
veces.
• Clomifene se utiliza para la infertilidad (lo debe prescribir un experto en fertilidad).
Virilismo. Aparición de amenorrea, clitoromegalia, voz profunda, recesión temporal del
cabello + hirsutismo. Busque un tumor suprarrenal u ovárico que secrete andrógenos.
Ginecomastia (es decir, una cantidad anormal de tejido mamario en los hombres;
puede ocurrir en una pubertad normal.). Relación estrógeno/andrógeno (vs galactorrea
en la que la prolactina está ). Causas: hipogonadismo, cirrosis hepática (estrógenos),
hipertiroidismo, tumores (producción de estrógenos, p. ej., testicular, suprarrenal, pro-
ducción de HCG, p. ej., testicular, bronquial); medicación: estrógenos, espironolactona,
digoxina, testosterona, marihuana; si la suspensión es imposible, considere la testostero-
na si el hipogonadismo ± antiestrógeno (tamoxifeno).
Impotencia (= disfunción eréctil). Las erecciones resultan de la liberación neuronal de
óxido nítrico (NO) que, a través de cGMP y Ca2+, hiperpolariza y, por tanto, relaja las
células musculares lisas vasculares y trabeculares, permitiendo el aumento de tamaño. Es
común después de 50 años, y a menudo multifactorial. La faceta psicológica es corrien-
te (especialmente si la disfunción eréctil se produce solo en algunas situaciones, si el ini-
cio coincide con estrés, y si las erecciones matutinas todavía se producen: estas también
persisten en la enfermedad orgánica en una fase temprana).
Causas orgánicas: Los tres grandes son: el tabaquismo, el alcohol y la diabetes (reduce
NO + neuropatía autónoma).También endocrinas: hipogonadismo, hipertiroidismo, pro-
lactina; neurológicas: lesiones de la médula espinal, EM, neuropatía autonómica; cirugía pél-
vica, p. ej. la del cuello de vejiga y próstata; radioterapia; ateroma; insuficiencia renal o
hepática; hiperplasia prostática; anomalías del pene, p. ej., postpriapismo, o Peyronie
(p. 708); fármacos: digoxina, -bloqueantes, diuréticos, antipsicóticos, antidepresivos, estró-
genos, finasterida, narcóticos.
Diagnóstico: Después de una historia sexual y psicológica completa: urea y electrolitos,
PFH, glucosa, PFT, LH, FSH, lípidos, testosterona, prolactina ± Doppler. ¿La presión arte-
rial peneana es suficiente para el flujo de entrada? ¿Es la sensación peneana OK (sino,
¿problema del SNC?). ¿Está bien el mecanismo venooclusivo? Rx: • Tratar las causas. • Ase-
soramiento. • Inhibidores de la fosfodiesterasa oral (PDE5) cGMP. La erección no es
automática (depende de los estímulos eróticos). Sildenafilo 25-100 mg ½-1 h presexo
(absorción de alimentos y alcohol) ES: Cefalea (16%); rubefacción (10%); dispepsia (7%);
cogestión nasal (4%); trastorno transitorio de la visión (ver todo en azul verdoso) (inhi-
bición de la PDE6 retiniana). CI: Ver RECUADRO «Contraindicaciones y precauciones con
los inhibidores PD5». Tadalafilo (t½ largo,) 10-20 mg ½-36 h presexo. No use > una vez
al día. Vardenafilo (5-20 mg). • Ayudas de vacío (ideales para la rehabilitación del pene
después de la prostatectomía radical), inyecciones intracavernosas, pellets transuretrales
y prótesis (inflables o maleables, los sujetos pueden obtener sensaciones no naturales).
• La ingeniería tisular del corpus cavernosum (p. ej., en las endoprótesis de colágeno ace-
lular) está en sus comienzos.
Endocrinología
• Riesgo de priapismo (anemia de células falciformes, mieloma, leucemia).
• Regímenes complejos antihipertensivos complejos.
• Disnea por esfuerzo mínimo (la actividad sexual puede no ser soportable).
El uso de los inhibidores PD5 en la enfermedad arterial coronaria ha sido cuestio-
nado, pero probablemente sea correcto26.
Interacciones: Nitratos (contraindicación); inductores del citocromo p. 450 (CYP3A):
macrólidos, inhibidores de proteasa, teofilinas, antifúngicos de azol, rifampicina, fenili-
na, carbamazepina, fenobarbital, zumo de pomelo (biodisponibilidad). Precaución si
se usa -bloqueante; evite el vardenafilo con antiarrítmicos de tipo 1A (p. ej., quini-
dina, procainamida) y tipo 3 (sotalol, amiodarona), así como los nitratos, como se ha
mencionado anteriormente.
Hipogonadismo masculino
Hipogonadismo es el fracaso de los testículos para producir testosterona, esperma,
o ambos. Características: testículos pequeños,
libido, disfunción eréctil, pérdida de
vello púbico,
masa muscular,
grasa, ginecomastia, osteoporosis,
estado de ánimo.
Si es prepuberal:
virilización; pubertad incompleta; cuerpo eunucoide; característi-
cas sexuales secundarias reducidas. Causas incluyen:
Hipogonadismo primario debido a insuficiencia testicular, p. ej. • trauma local,
torsión, quimioterapia/irradiación • postorquitis, p. ej., paperas, VIH, brucelosis, lepra
• insuficiencia renal, cirrosis hepática o exceso de alcohol (tóxico para células de Ley-
dig) • anormalidades cromosómicas, p. ej., síndrome de Klinefelter (47XXY) – desa-
rrollo sexual retardado, testículos pequeños y ginecomastia. La anorquia es rara.
Hipogonadismo secundario. •
Gonadotropinas (LH y FSH), p. ej. • hipopitui-
tarismo • prolactinoma • síndrome de Kallman –deficiencia de la hormona liberado-
ra de gonadotropina, a menudo con anosmia y ceguera de color • enfermedad sis-
témica (p. ej., EPOC, VIH, DM) • Síndromes de Laurence-Moon-Biedl y de Prader-
Willi (OHCS, p. 648 y p. 652) • Edad.
Rx: (p. 232) Si la testosterona total es 8 nmol/L, en 2 mañanas (o < 15 si LH tam-
bién) y
volumen muscular, la testosterona puede ayudar, p. ej., 1% del gel dérmico
(Testogel®). El corazón, la vejiga y la función sexual pueden aumentar en el hipogo-
nadismo relacionado con la edad. ¡Cuidado con la medicalización del envejecimien-
to!
CI. Ca2+; nefrosis; policitemia; próstata, mama么 o cáncer de hígado. Monitorizar la
PSA.
232 Hipopituitarismo
El hipopituitarismo implica
secreción de hormonas de la hipófisis anterior (figs. 5.3,
5.22). Se afectan en este orden: hormona del crecimiento (GH), gonadotropinas: hor-
mona folículo-estimulante (FSH) y hormona luteinizante (LH), hormona estimulante del
tiroides (TSH) y hormona adrenal corticotrófica (ACTH). El panhipopituitarismo es la
deficiencia de todas las hormonas anteriores, usualmente causada por irradiación, cirugía
o tumor pituitario.
Causas. Están en tres niveles. 1. Hipotálamo: Síndrome de Kallman (p. 231), tumor, infla-
mación, infección (meningitis, TB), isquemia. 2. Tallo pituitario: Traumatismo, cirugía, lesión
en masa (craneofaringioma, p. 234), meningioma, aneurisma de la arteria carótida. 3. Pitui-
taria: Tumor, irradiación, inflamación, autoinmunidad7, infiltración (hemocromatosis, ami-
loide, metástasis), isquemia (apoplejía hipófisis, p. 234, CID8, síndrome de Sheehan9).
Endocrinología
Características se deben a:
1. Falta de hormona: • GH: obesidad central, aterosclerosis, piel seca arrugada,
resis-
tencia,
equilibrio,
sensación de bienestar,
capacidad de ejercicio,
gasto cardíaco,
osteoporosis,
glucosa, • Gonadotropina (FSH; LH): 乆 oligomenorrea o amenorrea,
fertilidad,
libido, osteoporosis, atrofia de mama, dispareunia. 么 Disfunción eréctil,
libido,
masa muscular, hipogonadismo (todo, testículos pequeños,
eyaculación,
espermatogénesis) • Tiroides: como en el hipotiroidismo (p. 220) • Corticotropina:
como en la insuficiencia suprarrenal (p. 226). NB: no hay pigmentación de la piel
como
ACTH. • Prolactina: rara: lactancia ausente.
2. Causas: p. ej., tumor hipofisario (p. 234), causando efecto de masa, o secreción hor-
monal con la
secreción de otras hormonas, p. ej., prolactinoma, acromegalia, rara-
mente Cushing.
Pruebas (La triple prueba de estimulación ahora se hace raramente.)
• Pruebas basales: LH y FSH (
o ), testosterona o estradiol (
); TSH (
o ), T4 (
);
prolactina (puede , debido a la pérdida de dopamina hipotalámica que normalmen-
te inhibe su liberación), factor de crecimiento similar a la insulina-1 (IGF-1;
-usado como medida del eje GH, p. 238), cortisol (
). También hacer urea y elec-
trolitos (
Na+ de la dilución),
Hb (normocrómica, normocítica).
• Pruebas dinámicas: 1. Prueba breve Synacthen®: (p. 226) para evaluar el eje suprarre-
nal. 2. Prueba de tolerancia a la insulina (ITT): realizada en centros especializados para
evaluar los ejes suprarrenales y GH. CI: epilepsia, cardiopatía, insuficiencia suprarrenal.
Consultar primero al laboratorio. Se trata de insulina intravenosa para inducir hipoglu-
cemia, causando estrés al cortisol y secreción de GH. Se hace en la mañana (solo
tomar agua desde 22:00 h la noche anterior). Tener 50% de glucosa e hidrocortisona
a mano y vía IV. La glucosa debe caer por debajo de 2,2 mmol/L (40 mg/dL) y el
paciente debe llegar a estar sintomático cuando se toman cortisol y GH. Normal: GH>
20 mU/L, y pico de cortisol> 550 nmol/L. 3. Arginina + prueba de hormona libera-
dora de hormona de crecimiento. 4. La prueba de estimulación con glucagón es una
alternativa cuando la ITT está contraindicada.
• Investigar la causa: RM para buscar una lesión hipotalámica o hipofisaria.
Tratamiento. Consulte a un endocrinólogo para la evaluación de la función hipofisaria
y para supervisar el reemplazo hormonal y el tratamiento de la causa subyacente.
• Hidrocortisona para la insuficiencia suprarrenal 2° (p. 226) 䊳 antes de que se adminis-
tren otras hormonas.
• Tiroxina si hipotiroideo (p. 220, pero la TSH es inútil para la monitorización).
• Hipogonadismo (para los síntomas y para prevenir la osteoporosis). 么: las opciones
incluyen testosterona enantato 250 mg IM cada 3 semanas, geles tópicos diarios o
tabletas mucoadhesivas bucales. También se utilizan parches (p. ej., testogel). 乆: (pre-
menopáusicas). Estrógeno: parches transdérmicos de estradiol, o píldora anticoncepti-
va (excede las necesidades de reemplazo) ± testosterona o dehidroepiandrosterona
(DHEA, en mujeres hipoandrogénicas, una pequeña cantidad puede mejorar el bien-
estar y la función sexual y ayudar a la densidad mineral ósea y masa corporal magra).
• La terapia con gonadotropina es necesaria para inducir la fertilidad tanto en hombres
como en mujeres.
• Hormona del crecimiento (GH). La somatotropina imita la GH humana. Aborda difi-
cultades de masa grasa,
masa ósea,
masa magra corporal (masa muscular),
capa-
cidad de ejercicio, y problemas con intolerancia al calor.
7 La hipofisitis autoinmune (= pituitaria inflamada) imita el adenoma hipofisario. Puede ser desencade-
nada por embarazo o inmunoterapia bloqueando CTLA-4. Ningún autoantígeno pituitario todavía se
usa diagnósticamente.
8 La mordedura de serpiente es una causa común en la India (p. ej., cuando se asocia con lesión renal
aguda).
9 El síndrome de Sheehan es la necrosis pituitaria después de la hemorragia posparto.
233
Endocrinología
Fig. 5.22. Neuroendocrinología: emociones pensamientos acciones. Como Miguel
Ángel predijo (en su Creación de Adán) «todos los dioses y demonios que han existido están den-
tro de nosotros como posibilidades, deseos y formas de escape». En la bóveda de nuestro cráneo
de color rojo oscuro vemos formas humanas y divinas que se lanzan hacia fuera, como los pen-
samientos huyen a través de las acciones –con las piernas extendidas por nuestro tronco ence-
fálico (B) y un puño está empujando desde nuestro hipotálamo hacia el tallo pituitario (P). Por
encima de la hipófisis tenemos pensamientos, ideas, impulsos y neurotransmisores. Debajo
tenemos hormonas. Entre ellos se encuentra el reino de la neuroendocrinología –las células
neurosecretoras que transforman las emociones en los factores liberadores de las hormonas
hipofisarias (fig. 5.4).
Imagen cortesía de Gary Bevans; Cita de Frank Lynn Meshberger. Miguel Ángel, ¿Hombre renacentista
pero también cerebral?
temporal bilateral, debido a la compresión del quiasma óptico), parálisis de los nervios cranea-
les III, IV, VI (presión o invasión del seno cavernoso). Además, la diabetes insípida (DI) (p. 240,
más probable por enfermedad hipotalámica); perturbación de los centros hipotalámicos de T°,
sueño y apetito; erosión a través del suelo de la silla turca que conduce a la rinorrea del LCR.
Pruebas. La RM define la extensión dentro y por encima de la silla turca; evaluación precisa de
los campos visuales; pruebas de detección: PRL, IGF-1 (p. 238), ACTH, cortisol, PFT, LH/FSH, tes-
tosterona en 么, prueba corta de Synacthen®. Prueba de tolerancia a la glucosa si se sospecha
acromegalia (p. 238). Si se sospecha Cushing, ver p. 225. Prueba de privación de agua si se sos-
pecha DI (p. 240).
Tratamiento. Inicie el reemplazo hormonal según sea necesario (p. 232). Asegúrese de que los
esteroides se administren antes de la levotiroxina, ya que la tiroxina puede precipitar una crisis
suprarrenal. Para la enfermedad de Cushing véase p. 225, prolactinoma p. 236, acromegalia p. 238.
• Cirugía: (fig. 5.26) La mayoría de la cirugía hipofisaria es transfenoidal, pero si hay extensión por
encima de la silla turca, se puede utilizar un abordaje transfrontal. Para el prolactinoma, el trata-
miento de primera línea es médico con un agonista de la dopamina, p. 236. Preoperatorio: prescri-
ba hidrocortisona 100 mg IV/IM. La sustitución posterior del cortisol y la repetición varían según
los protocolos locales: obtener asesoramiento. Postoperatorio: reexaminar la función pituitaria
(p. 232) para evaluar las necesidades del cambio. Repetición de pruebas dinámicas para la función
suprarrenal 6 semanas después de la operación.
• Radioterapia: (p. ej., estereotáctica). Buena para adenomas residuales o recurrentes (buenas
tasas de control tumoral y normalización del exceso de secreción hormonal).
La recidiva postoperatoria puede ocurrir tarde después de la cirugía, por lo que se requiere
un seguimiento a lo largo de toda la vida. La fertilidad debe ser discutida: puede estar reducida
debido a
gonadotropinas.
Apoplejía pituitaria. El aumento rápido de la hipófisis por un sangrado en un tumor puede
causar efecto de masa, colapso cardiovascular debido al hipopituitarismo agudo y muerte. Sos-
pechar si inicio agudo de la cefalea, meningismo,
GCS (escala de Glasgow), oftalmoplejia/defec-
to del campo visual, especialmente si hay un tumor conocido (puede presentarse como una
hemorragia subaracnoidea). Rx: Esteroides urgentes (hidrocortisona 100 mg IV) y meticuloso
balance de líquidos ± cabergolina (agonista de dopamina, si prolactinoma) ± cirugía; encuentre
la causa, p. ej., una predisposición a la trombosis, por un síndrome antifosfolípido.
Craneofaringioma. No es estrictamente un tumor hipofisario: se origina en la bolsa de Rath-
ke, por lo que está situado entre la hipófisis y el suelo del tercer ventrículo. Son raros, pero es
el tumor intracraneal más frecuente de la infancia. Más del 50% se presenta en la niñez con insu-
ficiencia de crecimiento. Los adultos pueden presentar amenorrea,
libido, síntomas hipotalámi-
cos (p. ej., DI, hiperfagia, alteración del sueño) o efecto de masa tumoral. Pruebas: TC/RM (calci-
ficación en el 50% de los casos, también puede verse con una radiografía del cráneo). Trata-
miento: Cirugía ± radioterapia postoperatoria; prueba de la función hipofisaria después de la
operación.
Tabla 5.4. Frecuencia de secreción de hormonas por los adenomas pituitarios basada
en técnicas de inmunohistoquímica
Hormona % Hormona %
Solo PRL (prolactinoma) 35% ACTH (síndrome de Cushing) 7%
Solo GH (acromegalia) 20% LH/FSH/TSH 1%
PRL y GH 7% No hay una hormona obvia 30%
* Los métodos sensibles de medición de TSH han mejorado el reconocimiento de los tumores secre-
tores de TSH. Estos se encuentran ahora más frecuentemente en el estadio de microadenoma, locali-
zado medialmente, y sin hipersecreción hormonal asociada. En estos tumores, los análogos de soma-
tostatina (p. 238) son muy útiles. Véase también Socin et al. Eur J Endocrinol. 2003;148:433-42.
10 Si < 1 cm, generalmente «incidentaloma»; la mayoría de los macroadenomas que no funcionan se
revelan por efecto de masa y/o hipopituitarismo. Aquí, la recurrencia después de la cirugía es común,
así que sígala con cuidado mediante resonancia magnética.
235
Endocrinología
Fig. 5.23. RM sagital del cerebro (sin contraste Fig. 5.24. TM coronal ponderada en T1 del
de gadolinio) que muestra una lesión en la fo- cerebro (sin contraste de gadolinio) que
sa hipofisaria, muy probablemente un adenoma muestra una lesión en la fosa hipofisaria (ver
hipofisario hemorrágico. El diagnóstico diferen- fig. 5.23).
cial incluye un quiste de hendidura de Rathke. Cortesía de Norwich Radiology Dept.
Cortesía de Norwich Radiology Dept.
Tallo hipofisario
Cisterna supraselar Hipotálamo
Hueco supraóptico
Glándula pituitaria
Lóbulo temporal
Quiasma óptico
Arteria carótida interna
Seno esfenoidal
Hueso esfenoides
Fig. 5.25. Las relaciones de la glándula hipofisaria con los nervios craneales III, IV, V y V.
Extraído de Turner y Wass, Oxford Handbook of Endocrinology and Diabetes, 2009, con permiso de
Oxford University Press.
Adenoma pituitario
Endoscopia
Seno esfenoidal
Fig. 5.26. La cirugía endoscópica es ahora posible en la cirugía hipofisaria.
236 Hiperprolactinemia
Este es el trastorno hormonal más común de la hipófisis. Se presenta más temprano en
las mujeres (trastornos menstruales), que en los hombres (p. ej., con disfunción eréctil
y/o efectos de masa). La prolactina estimula la lactancia11,12. Los niveles elevados condu-
cen a hipogonadismo, infertilidad y osteoporosis, al inhibir la secreción de la hormona
liberadora de gonadotropina (por lo tanto,
LH/FSH y
testosterona o estrógeno).
Causas de prolactina plasmática elevada (PRL> 390 mU/L). La PRL es secretada
por la hipófisis anterior y la liberación es inhibida por la dopamina producida en el hipo-
tálamo. La hiperprolactinemia puede ser el resultado de 1. exceso de producción de la
hipófisis, p. ej., prolactinoma. 2. Desinhibición, por la compresión del tallo pituitario, redu-
ciendo los niveles locales de dopamina. 3. El uso de un antagonista de la dopamina. Un
PRL de 1.000-5.000 mU/L puede resultar de cualquiera, pero > 5000 es probable que
Endocrinología
sea debido a un prolactinoma, con macroadenomas (> 10 mm) que tienen los niveles
más altos, p. ej., 10.000-100.000.
• Fisiológico: Embarazo; lactancia; estrés. Los aumentos agudos ocurren después de un
orgasmo11.
• Medicamentos (la causa más común): Metoclopramida; haloperidol; -metildopa; estró-
genos; euforia/MDMA12; antipsicóticos (es una razón para el «incumplimiento»: la
hiperprolactinemia sostenida puede causar
libido, anorgasmia y disfunción eréctil).
• Enfermedades: Prolactinoma: micro- o macroadenoma; daño del tallo: adenomas hipofi-
sarios, cirugía, trauma. Enfermedad hipotalámica: craneofaringioma, otros tumores. Otros:
hipotiroidismo (debido a TRH), insuficiencia renal crónica (
excreción).
Síntomas. 乆: Amenorrea u oligomenorrea; esterilidad; galactorrea (fig. 5.27). También:
libido, peso, vagina seca. 么: Disfunción eréctil,
pelo facial, galactorrea. Puede presentar-
se tardíamente como osteoporosis o efecto local de masa producido por un tumor (p. 234).
Pruebas. Basales PRL: hacer una venopunción no estresante entre las 09:00 y las
16:00 h. Haga una prueba de embarazo, PFT, urea y electrolitos. RM hipofisaria si se des-
cartan otras causas.
Tratamiento. Consulte a un endocrino. Los agonistas de la dopamina (bromocriptina
o cabergolina) son la 1ª línea de tratamiento.
Microprolactinomas: Un tumor < 10 mm en la RM (~25% de nosotros tiene microprolac-
tinomas asintomáticos). Bromocriptina, un agonista de la dopamina,
secreción de PRL, res-
taura los ciclos menstruales y
tamaño tumor. La dosis se titula hasta: 1,25 mg VO; aumen-
to semanal de 1,25-2,5 mg/d hasta ~2,5 mg/12 h. Efectos secundarios: náusea, depresión,
hipotensión postural (minimizar durante la noche). Si se planea el embarazo, use anticon-
cepción de barrera hasta que hayan ocurrido 2 períodos. Si se produce un embarazo pos-
terior, suspenda bromocriptina después de la primera falta de la regla. Un agonista de dopa-
mina alternativo es la cabergolina: más eficaz y con menos ES, pero hay menos datos sobre
su seguridad en el embarazo. NB: los alcaloides del cornezuelo de centeno (bromocripti-
na y cabergolina) pueden causar fibrosis (p. ej., los ecocardiogramas son necesarios). La ciru-
gía transesfenoidal puede ser considerada si es intolerante a los agonistas de la dopamina.
Tiene un alto índice de éxito, pero hay riesgos de deficiencia hormonal permanente y recu-
rrencia de prolactinoma, por lo que suele reservarse como tratamiento de segunda línea.
Macroprolactinomas: Un tumor > 10 mm de diámetro en la RM. Debido a que están
cerca del quiasma óptico, puede haber
agudeza visual, diplopía, oftalmoplejía, pérdida de
campo visual y atrofia óptica. Trate inicialmente con un agonista dopaminérgico (bromo-
criptina si la fertilidad es el objetivo). La cirugía rara vez se necesita, pero considere si los
síntomas visuales o los efectos de la presión no responden al tratamiento médico. La
bromocriptina, y en algunos casos la radioterapia, puede ser necesaria después de la ope-
ración, ya que la resección quirúrgica completa es poco frecuente. Si está embarazada,
monitoree de cerca, lo ideal es un seguimiento combinado por parte del endocrino/gine-
cólogo, ya que hay riesgo de expansión.
Seguimiento. Monitorice PRL. Si hay dolor de cabeza o pérdida visual, controle los
campos (¿Hacer RM?). Puede reducirse la medicación después de 2 años, pero la recu-
rrencia de la hiperprolactinemia y la expansión del tumor puede ocurrir, por lo que estos
pacientes deben ser vigilados cuidadosamente.
11 El aumento de la prolactina (么 y 乆) después del coito es ~400% mayor que después de la mas-
turbación; a prolactina postorgásmica es parte de un ciclo de retroalimentación que disminuye la exci-
tación mediante la inhibición de los procesos dopaminérgicos centrales. El grado de aumento de pro-
lactina postorgásmico es un índice neurohormonal de satisfacción sexual.
12 MDMA también oxitocina; se piensa que la prolactina + oxitocina mediarían el bienestar post-
orgásmico.
237
Endocrinología
Fig. 5.27. La galactorrea puede ser suficientemente prolífica como para crear galaxias de
mediano tamaño (abajo a la derecha). En el nacimiento de la Vía Láctea, Hera es representada
por Rubens en su carro, atraída por el cielo nocturno por ominosos pavos reales. Entre viajes,
disfrutaba discutir de temas endocrinos complicados con su esposo Zeus (quien también era
su hermano), sobre si las mujeres o los hombres encuentran las relaciones sexuales más agra-
dables. Hera se inclina a esta última opción –y con esta evidencia endeble, y su magnífica galac-
torrea, diagnosticamos su hiperprolactinemia (produciéndose una disminución del deseo, la
lubricación, el orgasmo y la satisfacción). Al final, este asunto fue resuelto, a favor de la opinión
de Zeus, por Tiresias, que tenía una visión única de esta intrigante pregunta: cada vez que este
adivino vio dos serpientes entrelazadas, él/ella cambiaba de sexo, por lo que llegó a saber una
cosa o dos sobre el género y el placer. Este es un ejemplo fundamental en un ensayo «N de
1», donde el sujeto es su propio control. La generalización puede ser un problema con esta
metodología.
Imagen cortesía del Museo del Prado. Rubens: Nacimiento de la Vía Láctea (http://www.consultsos
.com/pandora/f0217pht.htm)
238 Acromegalia
Esto se debe asecreción de GH (hormona de crecimiento) producida
por un tumor hipofisario (99%) o hiperplasia, p. ej., a través de la hormo-
na liberadora de GH ectópica de una tumoración carcinoide. 乆:么 1:1.
Incidencia: Reino Unido 3/millón/año ~ 5% se asocian con MEN-1
(p. 223). La GH estimula el crecimiento de huesos y tejidos blandos a tra-
vés de la secreción del factor de crecimiento similar a insulina 1 (IGF-1).
Síntomas. Acroparestesia (akron = extremidades); amenorrea;
libido; dolor de cabeza; sudoración; ronquidos; artralgia; dolor de
espalda; fig 5.28: «Mis anillos no entran, ni mis viejos zapatos, y ahora
tengo una mordida torcida (maloclusión) y el cabello rizado. Cogí
mucho peso, todos los músculos estuvieron bien hace un tiempo;
Ahora me veo tan demacrado».
Endocrinología
239
Endocrinología
Fig. 5.29. (a) y (b) Tosquedad de la cara y crecimiento de manos y mandíbula (prognatismo).
Signos de la acromegalia
• Crecimiento de las manos (fig. 5.29a, puede ser similar a una pala), mandíbula
(fig. 5.29b) y pies (la suela puede invadir el dorso).
• Rostro tosco; nariz ancha.
• Grandes crestas supraorbitales.
• Macroglosia (lengua grande).
• Dientes ampliamente espaciados.
• Labios, párpados y piel hinchados (oleosa y de poros grandes); también manchas
de la piel.
• Pliegues del cuero cabelludo (cutis verticis gyrata, debido a la piel expandida pero
fijada).
• Oscurecimiento de la piel (fig. 5.29).
• Acantosis nigricans (fig. 12.30, p. 563).
• Disnea laríngea (cuerdas fijas).
• Apnea obstructiva del sueño.
• Bocio (vascularidad tiroidea).
• Debilidad proximal + artropatía.
• Signos del túnel carpiano en 50%, p. 503.
• Signos de cualquier masa hipofisaria: hipopituitarismo ± efecto de masa local
(p. 232; visión; hemianopsia); encaja.
14 Las variantes de la GH hechas por la placenta aumentan exponencialmente hasta la gestación de las
37 semanas; la GH hipofisaria gradualmente cae a niveles casi indetectables. La «acromegalia gestacio-
nal» probablemente se desarrolla para fomentar el crecimiento fetoplacentario; sus efectos secunda-
rios incluyen edema facial, síntomas del túnel carpiano y aumento de la nariz.
15 La pubertad ve aumentos de la masa ósea y muscular + otros efectos «acromegálicos» mediados
por la GH y la gonada.
tremia bebiendo 5 L/día; Pueden tener psicosis, hiponatremia intermitente y polidipsia (síndrome PIP),
¿por volumen intravascular que conduce al péptido natriurético atrial, p. 137, de ahí natriuresis e
hiponatremia.
Endocrinología
• Vaciar la vejiga, luego no tomar bebidas y solo comida seca.
• Peso cada hora. Si se pierde más del 3% durante la prueba, ordene una osmolali-
dad sérica urgente. Si > 300 mOsmol/kg, proceda a la etapa 2. Si < 300, continúe
la prueba.
• Recoger la orina cada 2 h; medir su volumen y osmolalidad.
• Muestra venosa para osmolalidad cada 4 h.
• Parar la prueba después de 8 h (16:00) si la osmolalidad de la orina > 600
mOsmol/kg (es decir, normal).
Etapa 2. Diferenciar DI craneal de nefrogénica.
• Proceda si la orina sigue diluida, es decir, osmolalidad en la orina < 600 mOsmol/kg.
• Dé desmopressina 2 mcg IM. Ahora puede beber agua.
• Medir la osmolalidad urinaria por hora durante las 4 h siguientes.
Tabla 5.5. Interpretación de las pruebas de privación de agua
Diagnóstico Osmolalidad urinaria
Normal Osmolalidad de la orina > 600 mOsmol/ kg en la etapa 1 O:P
ratio > 2 (capacidad de concentración normal)
Polidipsia primaria La orina se concentra, pero menos de lo normal, p. ej., > 400-
600 mOsmol/kg
DI craneal La osmolalidad de la orina aumenta a > 600 mOsmol/kg
después de la desmopresina (si es dudosa puede probarse una
prueba prolongada de privación de agua (no beber a partir de
las 18:00 de la noche anterior))
DI nefrogénica No hay aumento en la osmolalidad de la orina después de la
desmopresina
6 Gastroenterología
Contenido
Comida sana y provechosa 244
La boca 246
Procedimeintos:
Endoscopia y biopsia 248
Algunos síntomas de presentación:
Disfagia 250
Náuseas y vómito 250
Dispepsia y enfermedad de úlcera
péptica 252
Enfermedad de reflujo
grastroesofágico (ERGE) 254
Sangrado gastrointestinal
superior 256
Diarrea 258
Estreñimiento 260
Enfermedades y patologías:
Colitis ulcerativa (CU) 262
Enfermedad de Crohn 264
Malabsorción gastrointestinal 266
Enfermedad celíaca 266
Síndrome de intestino
Fig. 6.1. La familias son raras veces lo que apa-
irritable (SII) 266 rentan: Otto, Aurelia y Sylvia parecen tomar una
Trastornos nutricionales 268 taza agradable de té, pero Warren (el hijo y her-
Pancreatitis crónica 270 mano) está ausente, la pierna de Otto falta, Aure-
Carcinoma del páncreas 270 lia está fuera de sí con ansiedad, y ninguno de los
Tumores carcinoides 271 dos es totalmente consciente de la confusión que
Ictericia 272 se mueve en espiral fuera del control en su hija
Insuficiencia hepática 274 inestable, Sylvia. La forma en la que el tubo diges-
Cirrosis 276 tivo se ve afectado por la vida de nuestros pacien-
Hepatitis viral 278 tes es uno de los misterios perpetuamente fasci-
Alcoholismo 280 nadores de la gastroenterología. Así, si alguna vez
Colangitis biliar primaria usted tiene que diagnosticar en gastroenterología,
(CBP) 282 pregúntese qué falta y trate de imaginar los facto-
Colangitis esclerosante primaria res que están perpetuando o mejorando los sín-
(CEP) 282 tomas. Todo esto es muy útil, pero nunca lo sufi-
cientemente fiable como para permitir controlar
Hepatitis autoinmune (HAI) 284 o predecir lo que va a pasar después. Así que ¿qué
Enfermedad hepática grasa no pasó después? Vea el RECUADRO para descubrirlo.
alcohólica (EHGNA) 285
Enfermedad de Wilson/
degeneración
hepatolenticular 285
Tumores del hígado 286
Hemocromatosis hereditaria
(HH) 288
Deficiencia de 1-antitripsina
(A1AT) 290
Se agradece al Dr. Simón Campbell, nuestro profesor especialista para este capítulo.
Lumen 243
Aprendemos acerca de las enfermedades gastroenterológicas como si fueran enti-
dades separadas, especies independientes recolectadas por los naturalistas, cada una
guardada en su propio apartado, la información que vamos guardando, coge el polvo
como en cualquier estante de la biblioteca. Pero esto no es como funciona la enfer-
medad. Otto tenía diabetes, pero se negó a ver a un médico hasta que estaba muy
avanzada y se necesitaba una amputación. Necesitaba ser cuidado por su esposa
Aurelia. Pero ella tenía a sus hijos Warren y Sylvia para cuidar también. Y cuando
Otto ya no era el que ganaba el pan, se vio obligada a trabajar como profesora, con-
Gastroenterología
table y en cualquier otro trabajo que pudiera desempeñar. La enfermedad de Otto
se manifestó también en el duodeno de Aurelia –como una úlcera. El intestino a
menudo es el que más sufre los problemas de otros. Dentro de cada pieza del intes-
tino hay un lumen1 – el mundo está en el intestino, y el intestino está en el mundo.
Pero la luz no siempre brilla. Así que cuando el lumen se une con la sangre de Aure-
lia, podemos esperar que la enfermedad tenga un impacto en toda la familia. Su hija
sabe de dónde viene la sangre («directamente de la chispa rosada del corazón»).
Después de que Otto murió, Sylvia necesitó pasar un largo tiempo bajo tratamien-
to psiquiátrico y Aurelia tuvo que trasladarse para estar cerca de su hija. La úlcera
duodenal sangrante de Sylvia empeoró cuando necesitó tratamiento electroconvul-
sivante. La terapia funcionó y ahora por suerte Sylvia, antes de su propia muerte
prematura, es capaz de cuidar de Aurelia, mientras se prepara para una gastrecto-
mía.
La historia de cada enfermedad contada separadamente omite algo; pero aún
tomada en su contexto social, esta historia omite algo vital –la poesía vivida, más que
escrita, en la mayoría de la vida de nuestros pacientes– trágica, cómica, humana y
habitualmente oscura –pero en el caso de esta familia no tan oscura, o lo que es lo
mismo, la vida real», la mayor parte de nuestros pacientes han vivido algo trágico,
cómico, humano y por lo general oscurece el origen y el desarrollo de estas enfer-
medades. Brotanto, tan imparable como la sangre de la úlcera de su madre vino la
poesía de Sylvia Plath2.
1 Lumen es latín y significa luz (de ahí su significado médico de una cavidad tubular abierta al
mundo en ambos extremos), además de ser en el SI la unidad de la luz cayendo sobre un obje-
to; es decir, el poder de iluminar. Todos los médicos tienen este poder, bien sea interpretando
perspicazmente las vidas y las enfermedades de los pacientes, o por actos de bondad – inclu-
so algo tan simple como traer una taza de té.
2 Y aquí vienes, con una taza de té
envuelto en vapor.
El chorro de sangre es poesía,
no hay manera de detenerlo.
Me das dos hijos, dos rosas.
Sylvia Plath: Amabilidad; Poemas recopilados; 1981; Faber. Fuente: Katemoses.com/books/w_
chronology.html
mensajes de salud pública. Analizar a nivel demográfico poblacional todos los factores de
confusión potencialmente existentes siempre plantea un desafío –mientras algunos estu-
dios muestran que los vegetarianos pueden tener menos probabilidad de morir de car-
diopatía isquémica, a este efecto se le suma que los vegetarianos en el Reino Unido tie-
nen mayor probabilidad de no ser fumadores? Realizar recomendaciones a los individuos
basados en la información obtenida de los estudios poblacionales (como los periodistas
son propensos a realizar) será siempre limitada y tendrá el peligro de hundir en un mar
de cinismo importantes conceptos fundamentales.
Recomendaciones actuales que deben tener en cuenta tres hechos
• La obesidad cuesta mucho a la sanidad pública, tanto como los fumadores; 1 de cada
4 británicos es obeso.
• La diabetes mellitus florece: en algunos lugares la prevalencia es > 7 % (p. 206).
• El consejo pasado no ha cambiado los hábitos dietéticos en grandes capas de la pobla-
ción.
El consejo probablemente se debería enfocar en lo siguiente
Índice de masa corporal: (IMC; tabla 6.1). Objetivo 18,5-25. El control de la cantidad
puede ser más importante que la calidad. En la hipertensión, comiendo las cosas
«correctas» baja BP solo marginalmente, pero el control del peso produce una reduc-
ción más significativa.
Base su comida en almidón: (Pan, arroz, patatas, pastas.) Estos proveen carbohidratos de
liberación más lenta, en comparación con las dietas que contienen azúcar refinado, y se
debe estar atento a alimentos con alto contenido de azúcar, p. ej., refrescos.
Coma bastante fruta y verduras: El objetivo es de 5 porciones al día.
No coma a menudo productos de alimentación altos en grasa, sal o azúcar
Coma carne, pescado, huevos y judías: El objetivo es pescado 2 veces a la semana, inclu-
yendo pescados azules (aquellos ricos en ácidos grasos omega-3, como caballa, arenque,
sardinas, salmón). Fuentes de proteínas no lácteas incluyen las judías y las nueces. El obje-
tivo es reducir la ingesta de carne roja o procesada a < 70 g/día.
Tome leche y productos lácteos: Seleccione aquellas opciones con las menores cantidades
de grasa, azúcar y sal, cuando sea posible.
Ingesta moderada de alcohol (adultos < 65 años): ~> 14 U/semana tanto para hombres
como para mujeres, repartidos entre al menos 3 o más días. No hay un nivel «seguro».
Suplementos: Hay pruebas escasas sobre la mayoría de los suplementos alimenticios en
los sujetos que siguen una dieta equilibrada. Las mujeres que intentan concebir deberían
tomar 400 día mcg/día de ácido fólico desde la (pre)concepción hasta al menos 12
semanas. Los suplementos de vitamina D (10 mcg/día) pueden beneficiar a las madres
lactantes, a los 65 años, aquellos cuya piel típicamente no es expuesta al sol, o aque-
llos con la piel muy oscura. Pueden recomendar dosis inferiores para bebés y ninos.
Esta dieta no es apropiada para todos: • < 5 de años. • Necesidad de bajos residuos
(p. ej., Crohn, UC, p. 264) o dieta especial (enfermedad celiaca, p. 266). El énfasis puede
ser diferente en: Dislipemia (p. 690); DM (p. 206); obesidad; estreñimiento (p. 260); insufi-
ciencia hepática (p 274); pancreatitis crónica (p. 270); insuficiencia renal (menos proteí-
na) (p. 304);
PA.
Dificultades. Esto es una imposición para pedirnos cambiar nuestra dieta (los niños a
menudo lo rechazan categóricamente); un acercamiento más sutil es el de tomar un ali-
mento del que disfrutamos (patatas chips) y lo hacemos más sano (p. ej., patatas chips
poco saladas hechas con patatas asadas con la piel y fritas en aceite de girasol).
Gastroenterología
sidad es todavía la prevención primaria, pero la farmacoterapia realmente funciona.
Orlistat disminuye la absorción de la grasa (de ahí el ES de incontinencia aceitosa
fecal) – véase OHCS, p. 514. Cirugía: Tiene potencial significativo en la pérdida de
peso en pacientes seleccionados de manera apropiada, pero también una morbili-
dad significativa (véase p. 626)
246 La boca
El diagnóstico a menudo saldrá de la boca de su paciente, así que ¡ábrala! Tantas GI son
investigaciones indirectas… ahora es su posibilidad para la observación directa.
Leucoplasia (fig. 6. 2). Es una zona de mucosa oral de color blanco que no desaparece al
frotarla y que no es atribuible a ninguna otra enfermedad conocida. Es una lesión premalig-
na, con una tasa de transformación que va desde el 0,6% al 18%. Leucoplakia oral peluda es
un área blanca peluda sobre el lado de la lengua vista en el VIH, causada por VEB. Si
hay duda, busque referencia de todas las lesiones intraorales blancas (ver el RECUADRO).
Úlceras aftosas (fig. 6.3). El 20% de nosotros padece estas úlceras poco profundas, dolo-
rosas sobre la lengua o mucosa oral que se curan sin cicatrización. Causas de úlceras gra-
Gastroenterología
ves: Enfermedad de Crohn y celíaca; Behçet (p. 694); trauma; eritema multiforme; liquen
plano; pénfigo; penfigoide; infecciones (herpes simple, sífilis, angina de Vincent, p. 712).
Rx: Úlceras menores: evite el trauma oral (p. ej., cepillos de dientes o productos de alimenta-
ción duros, como la tostada) y productos de alimentación o bebidas ácidos. Tetraciclina o
enjuagues bucales antimicrobianos (p. ej., clorhexidina) con esteroides tópicos (p. ej., triam-
cinolona en gel) y la analgesia tópica. Úlceras graves: terapias posibles incluyen corticosteroi-
des sistémicos (p. ej., prednisolona oral 30-60 VO durante una semana) o talidomida (abso-
lutamente contraindicado en el embarazo). Biopsie cualquier úlcera que no cura después
de 3 semanas para excluir malignidad; remita a un cirujano oral si diagnóstico incierto.
Candidiasis (aftas) (fig. 6. 4). Causa parches blancos o eritema bucal mucoso. Los par-
ches pueden ser difíciles de quitar y sangran al ser raspados. Factores de riesgo: Extremos
de la edad; DM; antibióticos; inmunosupresión (corticosteroides a largo plazo, incluyen-
do inhaladores; citotóxicos; malignidad; VIH). Rx: Suspensión de nistatina 100.000 U (1 mL
para enjuagar y tragar/6 h) o pastillas anfotericina. Fluconazol para aftas orofaríngeas.
Queilitis (estomatitis angular). Fisuras de las esquinas de la boca causadas por pro-
blemas de dentadura, candidiasis o deficiencia de hierro o riboflavin (vitamina la B2)
(fig. 8.6, p. 327).
Gingivitis. Inflamación ± hipertrofía de las encías que ocurre con higiene bucal pobre,
medicinas (fenitoína, ciclosporina, nifedipino), embarazo, déficit de vitamina C (escorbu-
to, p. 268), leucemia mieloide (p. 356), angina de Vincent. (p. 712).
Microstomía (fig. 6.5). La boca es demasiado pequeña, p. ej., engrosamiento y atiran-
tamiento de la piel perioral después de quemaduras o en epidermólisis bullosa (ampo-
llas destructivas de la piel y mucosas de la membrana ± anquiloglosia) o esclerosis sisté-
mica (p. 552).
Pigmentación oral. Manchas marrones periorales características de Peutz-Jeghers
(p. 708). La pigmentación en todas partes de la boca sugiere la enfermedad de Addison
(p. 226) o efecto de algunas medicinas (p. ej., antimalaria). Considere el melanoma malig-
no. Telangiectasia: Esclerosis sistémica; síndrome de Rendu-Weber-Osler (p. 708). Granos
de Fordyce: (Puntos amarillos cremosos en la frontera de la mucosa oral y el labio ber-
mejo.) Quistes sebáceos, comunes y benignos. La colonización por Aspergillus niger puede
producir una lengua negra.
Dientes (fig. 6.6). Una línea azul en el margen entre la encía y el diente sugiere enve-
nenamiento por plomo. La exposición prenatal o durante la infancia a tetraciclina puede
producir manchas de color amarillo-marrón.
Lengua. Puede ser saburral o seca (xerostomía) en la deshidratación, farmacoterapia3,
después de la radioterapia, en la enfermedad de Crohn, síndromes de Sjögren (p. 710)
y Mikulicz (p. 706).
Glositis: Quiere decir una lengua lisa, roja, dolorida, p. ej., causado por déficit de hierro,
fólico o vitamina B12 (fig. 8.28, p. 335). Si la pérdida local de papilas conduce a lesiones
parecidas a una úlcera que se cambian en color y el tamaño, usar el término lengua geo-
gráfica (glositis inofensiva migratoria).
Macroglosia: La lengua es demasiado grande. Causas: mixedema; acromegalia; amiloid
(p. 370). Una ránula es un quiste de retención salival azulado a un lado del frenillo, que lleva
su nombre de la bolsa vocal que se hincha de las gargantas de las ranas (género Rana).
Cáncer de lengua: Aparece como una úlcera levantada con firmes bordes. Factores de ries-
go: tabaco, alcohol4. Extensión: el 1/3 anterior de la lengua drena a los ganglios submento-
nianos; el 1/3 medio a los nódulos submandibulares; y el 1/3 posterior a los nódulos cervi-
cales profundos (ver RECUADRO. p. 599). Tratamiento: Radioterapia o cirugía. Supervivencia a
5 años (enfermedad precoz): El 80 %. Cuando tenga duda, envíe a un especialista.
3 Medicinas que causan xerostomía: inhibidores ECA, antidepresivos; antihistamínicos; antipsicóticos;
antimuscarínicos/anticolinérgicos; bromocriptina; diuréticos; loperamida; nifedipino; opiáceos; prazosín;
proclorperazine, etc.
4 Masticar nuez de Betel (Areca catecú), común en Asia del sur, puede ser un factor de riesgo inde-
pendiente.
Gastroenterología
Fig. 6.2. Leucoplasia en la parte inferior de la Fig. 6.3. Una úlcera aftosa dentro de la meji-
lengua. Es importante remitir la leucoplasia a un lla. El nombre es tautológico: afta en griego
especialista porque es una lesión premaligna. quiere decir ulceración.
Fig. 6.4. Sarro blanco sobre una lengua erite- Fig. 6.5. Microstomía (boca pequeña y estre-
matosa causado por candidiasis oral. La candi- cha), p. ej., el endurecimiento de la piel produ-
diasis orofaríngea puede sugerir al paciente la cido por la esclerodermia estrecha la boca.
infección de VIH subyacente. Esta dolencia es estética y funcionalmente dis-
capacitante.
Gastroenterología
Tabla 6.3. Indicaciones para colonoscopia
Indicaciones diagnósticas Indicaciones terapéuticas
Sangrado rectal –cuando estable, si agudo Hemostasia (p. ej., clipaje del vaso)
Anemia ferropénica (sangrado por cáncer) Lesiones de angiodisplasia sangrantes
Diarrea persistente (fotocoagulación con argón)
Test de sangrado en heces positivo Liberación de stent de colon (cáncer)
Evaluación o sospecha de intestino Descompresión de vólvulo (sigmoidoscopio
irritable flexible)
Vigilancia de cáncer de colon Pseudoobstrucción polipectomía
Fig. 6.7. Pólipo grande visto en la colonosco- Fig. 6.8. Imagen colonoscópica de un adeno-
pia. Una ventaja de la colonoscopia sobre el carcinoma, p. 616. Comparado con pólipo en
enema de bario es la capacidad a la biopsia o colon (fig. 6.20), el carcinoma es irregular en
intervención al mismo tiempo –en este caso, forma y color y más grande y más agresivo.
polipectomía. Imagen cortesía de Dr. J. Simmons.
Imagen cortesía de Dr. Arthur Mee.
Fig. 6.9. Lesión de angiodisplasia vista en colo- Fig. 6.10. Mucosa en el colon en CU activa
noscopia. El sangrado puede ser brusco. Rx: obli- (p. 262); es rojo, inflamado y friable (sangrado
teración endoscópica. Se asocia con estenosis cuando se toca). Los signos de severidad: exu-
aórtica (síndrome de Heyde)2. dado mucopurulento, ulceración mucosa ±
Imagen cortesía del Dr. Antonio Mee. sangrado espontáneo. Si está quiescente, solo
puede haber un patrón vascular de la mucosa
deformado o ausente.
Cortesía del Dr. Simmons.
250 Disfagia
Disfagia es dificultad al tragar y debería dar lugar a un estudio urgente para excluir tumo-
res (a no ser que sea de duración corta, y asociado con un dolor de garganta).
Causas. ¿Oral, faríngea o esofágica? ¿Mecánico o relacionado con la motilidad? (Mirar el
RECUADRO «Causas de disfagia»).
Cinco cuestiones claves para preguntar
1. ¿Hubo dificultad para tragar sólidos y líquidos desde el principio?
Sí: alteración de la motilidad (p. ej., acalasia, SNC o causas faríngeas).
No: Sólidos y después líquidos: sospeche una estenosis (benigna o maligna).
2. ¿Es difícil iniciar un movimiento de deglución?
Gastroenterología
Sí: Sospeche parálisis bulbar, sobre todo si el paciente tose cuando deglute.
3. ¿Es la deglución dolorosa (odinofagia)?
Sí: Sospeche ulceración (malignidad, esofagitis, infección viral o Candida en inmuno-
deprimidos o con mala técnica de inhalación de esteroides) o espasmo.
4. ¿Es la disfagia intermitente o es constante y empeora?
Intermitente: Sospeche espasmo esofágico.
Constante y empeorando: Sospeche estenosis maligna.
5. ¿Se hincha el cuello o gorjea cuando se bebe?
Sí: Sospeche una bolsa faríngea (ver OHCS, p. 570).
Signos. ¿Está el paciente caquéctico o anémico? Examine la boca; palpe buscando gan-
glios supraclaviculares (ganglio supraclavicular izquierdo = ganglio de Virchow –sugiere
tumor intraabdominal); busque signos de enfermedad sistémica, p. ej., esclerosis sistémi-
ca (p. 552), enfermedad del SNC.
Pruebas. Sistemático de sangre (anemia); orina y electrolitos (deshidratación). Endos-
copia ± biopsia del tracto GI superior (fig 6.13). Si se sospecha divertículo faríngeo con-
sidere deglución de contraste (opinión ORL y laringoscopia fibroóptica flexible). La vide-
ofluoroscopia puede ayudar a identificar causas neurogénicas. Manometría de esófago
para dismotilitidad.
Condiciones específicas. Esofagitis: Ver p. 254. Espasmo esofágico difuso: Causa disfa-
gia ± dolor torácico intermitentes. Deglución de contraste/manometría: contracciones
anormales5. Acalasia: Se pierde la peristalsis coordinada y el esfínter esofágico inferior falla
en relajarse (debido a la degeneración del plexo mientérico), causando disfagia, regurgi-
tación y peso. Se encuentran hallazgos característicos con manometría o deglución de
contraste mostrando un esófago dilatado que se afila. Tratamiento: dilatación con globo
mediante endoscopia, o cardiomiotomía de Heller: entonces inhibidores de la bomba de
protones (IBP, p. 254). Inyección de toxina botulínica si se necesita un procedimiento no
invasivo (repetir cada pocos meses). El bloqueo de los canales del calcio y los nitratos
puede relajar también el esfínter. Estenosis benigna de esófago: Causado por reflujo gas-
troesofágico (RGE, p. 254), corrosivos, cirugía o radioterapia. Tratamiento: dilatación
endoscópica con balón. Cáncer esofágico: (p. 618.) Asociaciones: , RGE, tabaco, alcohol,
esófago de Barrett (p. 695), tilosis (hiperqueratosis palmar), síndrome de Plummer-Vin-
son (disfagia postcricoides, tela esofágica superior + deficiencia de hierro). Causas SNC:
Pida ayuda de un terapeuta del lenguaje.
Náuseas y vómito
¡Considerar el embarazo cuando sea apropiado! Otras causas, p. 56.
¿Qué contiene el vómito? Los informes de «posos de café» pueden indicar sangra-
do GI superior, pero representa uno de los signos más exagerados en medicina clínica
–siempre debe verificarlo usted mismo y buscar otras pruebas de sangrado GI; alimentos
reconocible estasis gástrico; alimento feculento obstrucción de intestino delgado.
Momento. Mañana embarazo o
PIC; 1 h tras ingesta estasis gástrico/gastropare-
sia (DM); vómitos que mitigan el dolor úlcera péptica; precedido por gorgoteo ruido-
so obstrucción GI.
Análisis. Sangre: Sistemático de sangre, urea y electrolitos, pruebas de función hepáti-
ca, Ca2+, glucosa, amilasa. GAB: Alcalosis metabólica (hipoclorémica) por pérdida de con-
tenido gástrico (pH > 7,45,
HCO3-) indica vómitos severos. RX simple de abdomen: Si
se sospecha oclusión intestinal (p. 728). Endoscopia GI superior: (Ver p. 248.) Si sospecha
de sangrado o vómito persistente. Considerar TC craneal en caso de
ICP.
Tratamiento. Identificar y tratar causa subyacente. Alivio sintomático: Tabla 6.4. Sea
preventivo, p. ej., preoperación para síntomas postoperatorios. Intentar vía oral como pri-
mer intento. El 30 % necesita un antiemético de segunda línea, así que esté preparado
para prescribir más de uno. Procure hidratación con líquidos IV con K+ si severamente
deshidratado o en dieta absoluta, y monitorizar electrolitos y balance de fluidos.
Gastroenterología
Presión extrínseca Poliomielitis bulbar (p. 436)
Cáncer de pulmón Enfermedad de Chagas (p. 423)
Linfomas de mediastino Miastenia gravis (p. 512)
Bocio retroesternal Otros
Aneurisma aórtico Esofagitis (p. 254; reflujo o Candida/VHS)
Dilatación atrial izquierda Globos (= «tengo un nudo en la garganta»:
Divertículo faríngeo intente distinguirlo de disfagia verdadera)
chos» (fig. 16.35, p 757) y sugieren un trastorno de motilidad que puede conducir a eliminación de ácido.
Los síntomas y la radiología pueden no coincidir. El esófago de cascanueces denota contracciones peris-
tálticas distales > 180 mmHg. Pueden causar el dolor que se alivia por nitratos o nifedipino sublingual.
Síntomas. Dolor epigástrico relacionado a menudo con tener hambre, alimentos espe-
cíficos o momento del día, plenitud después de las comidas, ardor de estómago (dolor
retroesternal); epigastrio sensible. Tenga cuidado con los síntomas de alarma: anemia
(deficiencia de hierro); pérdida de peso; anorexia; síntomas recientes/progresivos; mele-
na/hematemesis; deglución difícil.
H. pylori (Ver tabla 6.5). Si edad 55 años: «Prueba y tratamiento» para H. pylori6; si
positivo, dé un IBP apropiado y combinación de 2 antibióticos, p. ej., lansoprazol 30 mg/12
h VO, claritromicina 250 mg/12 h VO y amoxicilina 1 g/12 h durante 1 semana. Si nega-
tivo, dé solo inhibición ácida. Remita para endoscopia urgente (p. 248) todo caso con
disfagia, así como aquellos 55 años con síntomas de alarma o con dispepsia refractaria
al tratamiento.
Úlcera duodenal. Úlcera duodenal (UD, fig. 6.15) 4 veces más común que la UG. Fac-
tores de riesgo principales: H. pylori (el 90%); medicinas (AINE; esteroides; IRSS). Menores:
Secreción gástrica ácida;
vaciamiento gástrico ( pH duodenal); grupo de sangre O;
fumadores.
Síntomas: Asintomático o dolor epigástrico (aliviado por antiácidos) ± peso. Signos: Sen-
sibilidad epigástrica. Diagnóstico: Endoscopia GI superior. Prueba para H. pylori. Mida las
concentraciones de gastrina cuando de la IBP si se sospecha el síndrome Zollinger-Elli-
son (p. 716). Dispepsia no ulcerosa; Crohn duodenal; TB; linfoma; cáncer pancreáti-
co (p. 270). Continuación: Ninguno; si buena respuesta a RX (p. ej., IBP).
Úlceras gástricas (UG). Ocurren principalmente en el anciano, sobre la curva menor.
Las úlceras en cualquier otro sitio son a menudo malignas. Factores de riesgo: H. pylori
(~ el 80 %); fumar; AINE; reflujo de contenido duodenal; vaciamiento gástrico retrasado;
estrés, p. ej., neurocirugía o quemaduras (las úlceras de Cushing o Rizar). Síntomas: Asin-
tomática o dolor epigástrico (aliviado por antiácidos) ± peso. Pruebas: Endoscopia GI
superior para excluir malignidad (fig. 6.14); múltiples biopsias de los bordes y la base de
la úlcera (histología, H. pylori). Repita endoscopia después de 6-8 semanas para confirmar
la curación y excluir malignidad.
Gastritis. Factores de Riesgo: Alcohol, AINE, H. pylori, hernia de hiato/reflujo, gastritis
atrófica, granulomas (Crohn; sarcoidosis), CMV, síndrome de Zollinger-Ellison y enferme-
dad de Ménétrier (p. 716 y 706). Síntomas: Dolor epigástrico, vómito. Prueba: Endosco-
pia GI superior solo si datos sospechosos (fig. 6.14).
Tratamiento. Estilo de vida: Alcohol y tabaco.
Erradicación de H. pylori: La terapia triple es 80-85 % efectiva en la extirpación7.
Medicinas para reducir ácido: Los IBP son efectivos, p. ej., lansoprazol 30 mg/24 h VO
durante 4 (UD) o 8 (UG) semanas. Los bloqueantes H2 tienen un papel (ranitidina 300
mg cada noche VO para 8 semanas).
Úlceras inducidas por fármacos: Pare el medicamento de ser posible. Los IBP pueden ser
los mejores para tratar y prevenir úlceras GI y sangrado en pacientes en tratamiento con
AINE o fármacos antiplaquetarios. Misoprostol es una alternativa con diferente perfil de
ES. Si los síntomas persisten, vuelva a hacer endoscopia, realice nueva prueba para H.
pylori, y considere diagnósticos diferentes (p. ej., cálculos biliares). Cirugía: Ver p. 622.
Complicaciones. Sangrado (p. 256) perforación (p. 606), malignidad reflujo
gástrico.
Dispepsia funcional (no ulcerosa). Común. La erradicación de H. pylori (solo des-
pués de un resultado positivo) puede ayudar. Algunas pruebas favorecen los IBP y la psi-
coterapia. La dosis baja de amitriptilina (10-20 mg cada noche de VO) puede ayudar.
Antiácidos, antiespasmódicos, bloqueantes de H2, misoprostol, agentes procinéticos, bis-
muto, o sucralfate tienen menos evidencias.
6 H. pylori es el más común patógeno bacteriano encontrado mundialmente (> 50% de la población
mundial de más de 40 años lo tienen). Es un carcinógeno de clase I que causa gastritis (p. 252), úlce-
ras duodenales/gástricas y cáncer gástrico/linfoma (la MALT, p. 362), también asociado con enfermedad
de arteria coronaria y déficits de B12 y hierro.
7 1 semana de terapia es suficiente; 2 semanas aumentan tasas de erradicación en el 5 % ~, pero tam-
bién aumentan ES. Para infecciones que se resisten, combinación de 2 antibióticos de 2ª línea (ver BNF).
Tabla 6.5. Las pruebas (distintas a la serología) deberían realizarse tras > 2 semanas sin IBP
253
Sensibilidad Especificidad
Pruebas invasivas Prueba CLO 95% 95%
Histología 95% 95%
Cultivo 90% 100%
No invasivas Prueba de respiración 13C 95% 95%
Antígeno de heces 95% 94%
Serología 92% 83%
* La prueba de respiración de 13C es la prueba no invasiva más precisa de Helicobacter.
Gastroenterología
Diagnóstico diferencial de dispepsia
• Dispepsia no ulcerosa • Úlcera duodenal/gástrica • Duodenitis
• Esofagitis/ERGE • Malignidad gástrica • Gastritis (p. 257)
Sí No
Endoscopia GI superior
• Suspender fármacos que causen dispepsia,
p. ej., AINE
• Cambios de estilo de vida (p. 254)
No hacer nada más • Antiácidos sin prescripción, plej., trisilicato
Mejora
de magnesio 10 ml/8 h VO
• Revisar después de 4 semanas
No mejora
Negativo
Fig. 6.16. Endoscopia del tracto gastrointesti- Fig. 6.17. Esófago de Barrett.
nal superior que muestra cortes en la mucosa © Dr. A Mee.
en la esofagitis severa.
© Dr. A Mee.
8 El reflujo del líquido duodenal, de las secreciones pancreáticas y de la bilis puede ser tan importante
como el ácido; puede responder a medidas de estilo de vida similares, sucralfato (2 g/12 h VO), dom-
peridona o metoclopramida.
9 La asociación de H. pylori con ERGE es controvertida, pero la erradicación puede ayudar en los sín-
tomas.
Gastroenterología
las mujeres obesas. A pesar de que las hernias más pequeñas son asintomáticas, los
pacientes con hernias grandes pueden desarrollar ERGE.
Imagen: La endoscopia de la parte superior del tracto gastrointestinal visualiza la
mucosa (¿sofagitis?) pero no puede excluir de forma fiable una hernia de hiato.
Tratamiento: Pérdida de peso. Tratar ERGE. Indicaciones de la cirugía: síntomas intra-
tables a pesar de la terapia médica agresiva, complicaciones (ver p. 254). Aunque las
hernias paraesofágicas pueden estrangularse, el riesgo de esto cae drásticamente
después de los 65 años. La reparación profiláctica solo se realiza en aquellos consi-
derados de alto riesgo, debido a mortalidad operatoria (1-2%).
Hernia paraesofágica
Saco
peritoneal
Hernia deslizante
Diafragma
Gastroenterología
Postendoscopia
Diagnóstico Rasgadura de Mallory- El resto de los Malignidad GI
Weiss; ninguna lesión; diagnósticos superior
ningún signo de
sangrado reciente
Signos de Ninguno, o punto Sangre en el tracto
hemorragia reciente rojo oscuro GI superior; trombo
en endoscopia adherente; vaso visible
El sistema de puntuación de Rockall está basado en criterios preendoscópicos; estos
son añadidos a criterios postendoscópicos para predecir el riesgo de nuevo sangra-
do y muerte (tabla 6.7). El sistema de puntuación de Glasgow Blatchford (GBS) es
usado en preendoscopias para identificar a pacientes con bajo riesgo de interven-
ción. Si GBS 0, puede evitarse el ingreso; p. ej., Hb 130 g/L (o 120 g/L si )
PA sistólica O > 110 mmHg; pulso < 100/min; urea < 6,5 mmol/L; no melena o sín-
cope+ ninguna enfermedad hepática pasada/presente o insuficiencia cardíaca.
Tabla 6.7. Tasa de mortalidad del sangrado GI según el sistema de puntuación de Rockall
Puntuación Mortalidad con puntuación inicial Mortalidad después de endoscopia
0 0,2% 0%
1 2,4% 0%
2 5,6% 0,2%
3 11,0% 2,9%
4 24,6% 5,3%
5 39,6% 10,8%
6 48,9% 17,3%
7 50,0% 27,0%
8+ - 41,1%
Tratamiento de las hemorragias por úlcera péptica basadas en hallazgos endoscópicos
Alto riesgo. Sangrado activo, coágulo adherente o vaso visible que no sangra: Lograr
Hemostasia endoscópica (2 de: clips, cauterio, adrenalina). Ingresar en una cama moni-
torizada; comenzar IBP (p. ej., omeprazol 40 mg/12 horas IV/VO; metaanálisis muestran
que 72 horas infusión IV, p. ej., omeprazol 80 mg de bolo seguido de 8 mg/h no es
superior). Si hemodinámicamente estable, comience la administración oral de líquidos
claros 6 h después de la endoscopia. Tratar si es positivo para H. pylori (p. 253).
Riesgo bajo. Superficie plana, pigmentada o base limpia: No hay necesidad de
hemostasia endoscópica. Considere el alta temprana si el paciente es, por otra parte,
de bajo riesgo. Dar IBP oral (p. 252). Dieta regular 6 h después de la endoscopia si
es estable. Tratar si es positivo para H. pylori (p. 253).
Varices gastroesofágicas
Dilatación submucosa venosa secundaria a
de presiones portales ( puede no
haberse documentado enfermedad hepática –sospechar varices si existe alcoholis-
mo); el sangrado puede ser enérgico, en particular si hay de base una coagulopatía
secundaria a la pérdida de síntesis hepática de factores de coagulación.
Causas de hipertensión portal. Prehepática: Trombosis (vena portal o espléni-
ca). Intrahepática: Cirrosis (el 80% en el Reino Unido); esquistosomiasis (el más
común en el mundo); sarcoide; enfermedades mieloproliferativas; fibrosis hepática
congénita. Posthepático: Síndrome de Budd-Chiari (p. 696); insuficiencia cardíaca
derecha; pericarditis constrictiva; enfermedad venoclusiva. Factores de riesgo para san-
grado por varices:
Presión portal, tamaño varicoso, datos endoscópicos de la enfer-
medad de la pared varicosa y de enfermedad hepática avanzada.
Tratamiento. Ligadura endoscópica (esofágica) o escleroterapia (gástrica). Profila-
xis:1°: ~30% de cirróticos con varices sangran vs ~15 % con -bloqueo no selecti-
vo (propanolol 20-40 mg/12 h VO) o ligaduras endoscópicas repetidas. 2°: después
de un primer sangrado por varices, 60% resangran dentro de 1año. Utilizar ligadura
y -bloqueo no selectivo; shunt porto-sistémico intrahepático transyugular (SPSIT)
para varices resistentes.
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CAP. 06.qxd:Oxford 27/04/18 17:00 Página 258
258 Diarrea
La diarrea se caracteriza por una mayor frecuencia y volumen de las heces y una dismi-
nución de la consistencia –aunque las perspectivas de los pacientes sobre esto pueden
variar enormemente.
Historia. Como siempre, una historia cuidadosa ayudará a disminuir un sinfín de causas a
solo unas pocas. ¿Aguda o crónica? Si la gastroenteritis es aguda (< 2 sem) –cualquier fac-
tor de riesgo: ¿Viajar? ¿Cambio de dieta? ¿Contacto con diarrea y vómitos? ¿Tiene fiebre/
dolor? VIH; aclorhidria, p. ej., PA, p. 334, o en supresores de ácidos, ¿por ejemplo IBP? La dia-
rrea crónica que se alterna con el estreñimiento sugiere intestino irritable (p. 266). Peso,
diarrea nocturna o anemia requieren un seguimiento cercano (¿celíaca/CU/Crohn?).
Diarrea sanguinolenta: Campylobacter, Shigella/Salmonella (p. 431), E. coli, amebiasis
Gastroenterología
(p. 432), CU, Crohn, cáncer colorrectal (p. 616), pólipos colónicos, colitis pseudomem-
branosa, colitis isquémica (p. 620). Hemorragia rectal fresca: p. 629.
Moco: Ocurre en SII (p. 266), cáncer colorrectal y pólipos.
Pus franco: Sugiere enfermedad inflamatoria intestinal, diverticulitis o una fístula/absceso.
Explosivo: p. ej., cólera; Giardia; Yersinia (p. 425); Rotavirus.
Esteatorrea: Caracterizado por
gas, olor ofensivo y variable, heces flotantes difíciles de
evacuar –considerar insuficiencia pancreática (p. 267) u obstrucción biliar.
Busque. Deshidratación –membranas mucosas secas, turgencia de piel; relleno capilar
> 2s; shock. Cualquier fiebre, peso, dedos en palillo de tambor, anemia, úlceras orales (p. 246),
¿erupciones cutáneas o masa abdominal o cicatrices? ¿Algún signo de bocio/hipertiroidismo?
Realizar el examen rectal buscando masas (p. ej., cáncer de recto) o heces impactadas:
• Sangre: Sistemático de sangre: VCM/deficiencia de Fe, p. ej., celíaca o ca colon;
VCM
si abuso de alcohol o absorción de B12, p. ej., celíaca o de Crohn; eosinofilia si son
parásitos.
VSG/PCR: infección, enfermedad de Crohn /CU, cáncer. Orina y electrolitos:
K + diarrea y vómitos severos. TSH: tirotoxicosis. Serología celíaca: p. 266.
• Heces: Microbiología: patógenos bacterianos, huevos quísticos, parásitos, toxina de
C. diff (ver RECUADRO «Causas de diarrea»), PCR viral. Elastasa fecal: si sospecha pan-
creatitis crónica, (mala absorción, esteatorrea).
• Endoscopía gastrointestinal inferior: (¿Neoplasia? ¿Colitis?) Si hay afectación grave,
limitarse a sigmoidoscopia flexible con biopsias. Una colonoscopia completa (incluyen-
do la región terminal del íleon) permite valorar si hay una afección más proximal. Si es
normal, considerar la radiología del intestino delgado o la video-cápsula.
Tratamiento. Tratar la causa. Manipuladores de alimentos: no trabajar hasta que las
muestras de heces sean verificadas. Si brote en hospital, las salas pueden necesitar ser
cerradas. La rehidratación oral es mejor que la IV, pero si hay diarrea sostenida o vómi-
to, pueden ser necesarios líquidos intravenosos con sustitución apropiada de electrolitos.
Fosfato de codeína 30 mg/8 h VO o loperamida 2 mg VO después de cada evacuación
de heces (máx. 16 mg/día) frecuencia de heces (evitar en colitis, ambas pueden preci-
pitar megacolon tóxico). Evite los antibióticos a menos que la diarrea infecciosa esté cau-
sando malestar sistémico (fig. 6.20). La diarrea asociada con antibióticos12 puede res-
ponder a probióticos (por ejemplo, lactobacilos).
Causas de a diarrea
Común No GI o causas raras
• Gastroenteritis (p. 428) • Tirotoxicosis
• Diarrea del viajero (p. 429) • Neuropatía autonómica
• C. difficile (RECUADRO «Clostridium difficile») • Enfermedad de Addison
• SII (p. 266) • Colitis isquémica
• Cáncer colorrectal • Esprúe tropical • Pellagra
• Crohn; CU; celíaco. • Gastrinoma • VIPoma14
Causas menos comunes (esp. si es doloroso) • Carcinoide • Amiloide
• Colitis microscópica12 Fármacos
• Pancreatitis crónica (Muchos, véase BNF)
• Mala absorción de la sal biliar • Antibióticos15 • IBP
• Abuso de laxantes • Propranolol • AINE
• Intolerancia a la lactosa • Citotóxicos • Digoxina
• Resección ileal/gástrica • Laxantes • Alcohol
• Sobrecarga de diarrea
• Sobrecrecimiento bacteriano
12 Eritromicina es procinética, otras causan el crecimiento excesivo de los organismos intestinales o
alteran los ácidos biliares.
13 Piense en esto en cualquier diarrea acuosa crónica; diagnóstico por biopsia. Asociado con una gama
de medicamentos incluyendo AINE y IBP. Detenga el medicamento dañino cuando sea posible. Tratar
con budesonida.
14 Vasoactivo polipéptido intestinal-tumor secretor; sospechar si K+ y la acidosis;
Ca2+; Mg2+.
Gastroenterología
• Ingreso en hospital, fluidos orales • Inmunocomprometido
• Considerar Rx de presunción a • Ingestión de pescado
Sintomático RX menos que la causa no sea crudo
infecciosa
PCR ,
leucocitos, albúmina y coli-
tis (con placas adherentes amarillas en mucosa inflamada no ulcerada –la pseudomembrana)
progresando a megacolon tóxico y fracaso multiorgánico.
Portador asintomático: 2-5% de todos los adultos. Solo problemático con la disrupción de la
ecología intestinal, p. ej., antibióticos, lo que conduce a una proliferación rápida y a la expresión
de toxinas.
Predictores de colitis fulminante por C. diff: > 70 años; infección previa por C. diff; uso de fárma-
cos antiperistálticos; leucocitosis severa, inestabilidad hemodinámica.
Detección: Prueba urgente de las deposiciones sospechosas (olor característico –pregunte a las
enfermeras). Proceso de dos etapas con prueba de detección rápida para proteína C. diff (o PCR)
seguido de específico ELISA para la toxina. RX simple de abdomen para el megacolon tóxico.
Rx: Suspenda el antibiótico causante si es posible. Enfermedad leve: metronidazol 400 mg/8 h
VO durante 10-14 días (vancomicina 125 mg/6 h VO es mejor en la enfermedad grave). Pue-
den ser necesarias pautas intensivas de vancomicina 500 mg/6 h IV y vancomicina rectal en no
respondedores. La colectomía urgente puede ser necesaria si megacolon tóxico,
LDH o
si existe deterioro.
Enfermedad recurrente: Común (25 %). Fidaxomicina, un antibiótico con mínima absorción
oral, se asocia con menos tasas de recaídas. Trasplante fecal (introducción de una suspensión
preparada a partir de las heces de un donante mediante endoscopia o vía sonda NG/NY) es
un método de tratamiento altamente eficaz, aunque estéticamente poco atractivo.
Prevención de la propagación: Limpieza meticulosa y políticas adecuadas de gestión de camas,
uso de guantes y delantales desechables, lavado de manos (no solo gel; mate las esporas).
260 Estreñimiento
El estreñimiento refleja disfunción pélvica o
tiempo de tránsito. Las definiciones acepta-
das y las tasas informadas varían, pero un punto de partida es 2 deposiciones/semana,
a menudo expulsadas con dificultad, esfuerzo o dolor, y un sentido de evacuación incom-
pleta. : 2:1. Las principales preocupaciones de los médicos son encontrar síntomas
de alguna patología importante, p. ej., estreñimiento + sangrado rectal cáncer; estreñi-
miento + distensión + intestino activo con sonidos estenosis/obstrucción GI; estreñi-
miento + menorragia hipotiroidismo.
El paciente. Pregunte acerca de la frecuencia, la naturaleza y la consistencia de las
heces. ¿Hay sangre o moco en/sobre las heces? ¿Hay diarrea alternando con estreñi-
Gastroenterología
miento (p. ej., SII, p. 266)? ¿Ha habido cambios recientes en el hábito intestinal? ¿Está digi-
talizando el recto o la vagina para pasar las heces?15 Pregunte acerca de la dieta y los fár-
macos. El tacto rectal es esencial incluso cuando se remita a otro médico (se remite si
los signos de ca colorrectal, p. ej., peso, dolor o anemia).
Pruebas. Ninguna en jóvenes con escasa afectación. El umbral para la investigación disminu-
ye con la edad; los desencadenantes incluyen6: peso, masa abdominal, tacto rectal positivo
para sangre, anemia ferropénica. Sangre: Sistemático de sangre, VSG, urea y electrolitos, Ca2+,
pruebas de función tiroidea. Colonoscopia: Si se sospecha malignidad colorrectal. Ocasional-
mente son necesarios estudios de tránsito; fisiología anorrectal; biopsia para Hirschprung.
Tratamiento. A menudo ser tranquilizados, beber más y consejos de dieta/ejercicio
(p. 245) es todo lo necesario. Trate las cauas ( RECUADRO «Causas de estreñimiento»). A
menudo se aconseja una alta dieta en fibra, pero puede causar hinchazón sin ayudar al
estreñimiento. Solo use medicinas si fallan estas medidas y trate de usarlas solo durante
períodos cortos. A menudo, un estimulante como sena ± un agente que aumente el volu-
men de las heces es más efectivo y más barato que agentes como lactulosa. Agentes que
aumentan el volumen:
masa fecal, de forma que estimulan el peristaltismo. Deben tomar-
se con mucho líquido y pueden tardar unos días en actuar. CI: dificultad en tragar; obs-
trucción GI; atonía del colon; impactación fecal. Polvo de salvado 3,5 g 2-3 veces/d con el
alimento (puede dificultar la absorción de oligoelementos si se toma con cada comida).
Cáscara de Ispaghula, p. ej., 1 bolsita Fybogel ® después de una comida, mezclada en el
agua y tragado inmediatamente (o por el contrario se hace un lodo desagradable).
Methylcellulose, p. ej., Celevac® 3-6 pastillas/12 h con 300 ml de agua. Sterculia, p. ej.,
Normacol® gránulos, 10 mL rociados sobre alimentos diariamente. Laxantes estimulantes:
Aumente la motilidad intestinal, así que no los use en la obstrucción intestinal o la colitis
aguda. Evite el empleo prolongado, pues pueden causar atonía del colon. Los calambres
abdominales son un ES importante. Laxantes estimulantes puros son pastillas bisacodil
(5-10 mg de noche) o supositorios (10 mg por las mañanas) y sena (2-4 pastillas de
noche). Docusate sodio y danthron16 (= dantron) tienen acciones estimulante y ablanda-
doras. Los supositorios de glicerol actúan como un estimulante rectal. El sodio picosulfa-
to (5-10 mg de noche) es un estimulante potente. Suavizadores de deposiciones: Particu-
larmente útiles cuando se tratan patologías anales dolorosas, p. ej., fisuras. Enemas de acei-
te de Arachis engrasan y ablandan excrementos impactados. La parafina líquida no debe-
ría utilizarse por un período prolongado (ES: fugas anales, neumonía lipoidea, malabsor-
ción de vitaminas liposolubles). Laxantes osmóticos: Retienen líquidos en el intestino. Lac-
tulose, un disacárido semisintét ico, produce diarrea osmótica de pH fecal bajo que dismi-
nuye el crecimiento de organismos que producen amoníaco. Macrogol (p. ej., Movicol ®)
es otro ejemplo. Es útil en encefalopatía hepática (dosis inicial: 30-50 mL/12 h). ES: hin-
chazón, entonces su papel en el trato del estreñimiento es limitado. Sales de magnesio (p.
ej., hidróxido de magnesio; sulfato de magnesio) son útiles cuando se requiere una eva-
cuación rápida del intestino. Sales de sodio (p. ej., enemas de Microlette® y Micralax®)
deberían evitarse, dado que pueden causar retención de sodio y líquidos. Los enemas de
fosfato son útiles para la evacuación rápida del intestino antes de procedimientos.
Si estos no ayudan. Prucalopride es un agonista electivo de 5HT4 con propiedades pro-
cinéticas; lubiprostone es un activador de canal de cloruro que aumenta la secreción de líqui-
do intestinal; linaclotide es un agonista guanilate ciclasa-C que también aumenta la secreción
de líquidos y disminuye el dolor visceral. Un abordaje multidisciplinar con terapia de com-
portamiento, entrenamiento del hábito ± biofeedback del esfínter puede ayudar.
Gastroenterología
tener que utilizar cuña) dietético)
Enfermedad anorrectal (esp. si hay • Opiáceos (p. ej., morfina y codeína)
dolor) • Anticolinérgicos (p. ej., tricíclicos)
Cáncer anal o correctal • Hierro
• Fisuras (p. 630), estenosis, herpes • Algunos antiácidos, p. ej., con aluminio
• Prolapso rectal • Diuréticos, p. ej., furosemida
• Proctalgia fugax (p. 630) • Calcioantagonistas
• Ulceración mucosa/neoplasia Neuromuscular (tránsito lento desde
• Disfunción del músculo disminución de la actividad propulsiva)
pélvico/síndrome del elevador del • Lesión del nervio espinal o pélvico
ano (p. ej., trauma, cirugía)
Obstrucción intestinal • Aganglinosis (enfermedad de Chagas y
Carcinoma colorrectal (p. 616) de Hirschsprung )
• Estenosis (p. ej., enfermedad de • Esclerosis múltiple.
Crohn) • Neuropatía diabética
• Masa pélvica (p. ej., feto, fibroma) Otras causas
• Diverticulosis (sangrado rectal es la • Abuso crónico de laxantes (rara –la
presentación más frecuente) diarrea es más común)
• Pseudobstrucción (p. 611) • Tránsito lento idiopático
• Mega recto/colon
~ 20-40 años. CU es 3 veces más común en los no fumadores (es lo opuesto para la
enfermedad de Crohn) –los síntomas pueden recidivar cuando se deja de fumar.
Síntomas. Diarrea episódica o crónica (± sangre y moco); incomodidad abdominal con
calambres; la frecuencia de las deposiciones se relaciona con la severidad (tabla 6.8); urgen-
cia/tenesmo proctitis. Síntomas sistémicos en ataques: fiebre, malestar, anorexia, peso.
Signos. Pueden no aparecer. En la CU grave y aguda puede haber fiebre, taquicardia, y
un abdomen sensible y distendido. Signos extraintestinales: Dedos en palillo de tambor;
úlceras aftosas orales; eritema nodoso (p. 265); pioderma gangrenoso; conjuntivitis; epis-
cleritis; iritis; artritis de grandes articulaciones; sacroileítis; espondilitis anquilosante; colan-
gitis esclerosante primaria (p. 282); déficits nutricionales.
Análisis. Sangre: Sistemático de sangre, VSG, PCR, urea y electrolitos, pruebas de función
hepática, cultivo. Deposición Microbiología: (Ver p. 258.) para excluir Campylobacter, C. dificile,
Salmonella, Shigella, E. coli, amebas. Fecal calprotectin es una prueba simple, no invasiva para
la inflamación GI con la alta sensibilidad. RX simple abdomen: No sombras fecales; engrosa-
miento/islas mucosas (fig. 16.9, p. 729); dilatación del colon (ver «Complicaciones»). Endos-
copia GI baja: (sigmoidoscopio flexible limitado si agudo para acceso y biopsia; colonoscopia
completa una vez controlado para definir el grado de enfermedad; p. 249, fig. 6.23).
Tabla 6.8. Evaluación de la gravedad en colitis ulcerosa (Criterios de Truelove y
Watts modificados para incluir PCR)
Variable CU leve CU moderada CU grave
Deposiciones/día 4 5 6
Sangrado rectal Pequeño Moderado Grande
T °C a 6 AM Apirético 32,1-37,8 °C > 37,8 °C
Pulso en reposo < 70 latidos/min 70-90 latidos/min > 90 latidos/min
Hemoglobina > 110 g/ 105-110 g/l < 105 g/l
VSG (haga también PCR) < 30 > 30 (o PCR > 45 mg/L)
Complicaciones. Agudas: Dilatación tóxica de colon (islas mucosas, diámetro del colon
> 6 cm) con riesgo de perforación; tromboembolismo venoso: dé profilaxis a todos los
ingresados independientemente de sangrado rectal (p. 350); K+ Crónico: Cáncer de
colon: riesgo relacionado con la extensión y actividad de la enfermedad 5-10% con pan-
colitis durante 20 años. Las neoplasias pueden ocurrir en mucosa plana, de aspecto nor-
mal. Para localizar áreas precursoras de displasia, vigilancia colonoscopia p. ej., 1-5 años
(dependiendo del riesgo), con múltiples biopsias aleatorias o biopsias dirigidas por la cap-
tación diferencial por la mucosa anormal de colorante pulverizado endoscópicamente.
Tratamiento. Los objetivos son inducir y después mantener la remisión de la enfermedad7.
CU leve: • 5-ASA,17 p. ej., mesalazina (= mesalamina) son el pilar para la remisión-induc-
ción/mantenimiento. Dado vía rectal (supositorios o enemas) para enfermedad distal
(p. ej., Pentasa® 1 g diariamente); o VO para enfermedad más extensa (p. ej., Pentasa® 2
g diariamente; una sola dosis diaria es tan eficaz como varias; combine las vías rectal y
oral si hay brote). • Cremas de esteroides tópicos vía rectal (p. ej., la hidrocortisona como
Colifoam®), o prednisolona 20 mg en enemas de retención (Predsol®) menos efectivo
que 5-ASA vía rectal, pero puede ser añadido en asociación.
CU moderada: Si 4-6 deposiciones/día, pero por lo demás bien, induzca la remisión con
prednisolona oral 40 mg/d durante 1 semana, reduciendo después 5 mg/semana duran-
te las 7 semanas siguientes. Entonces mantenga 5-ASA (ES: erupción, hemólisis, hepatitis,
pancreatitis, empeoramiento paradójico de la colitis controlar sistemático de sangre y
urea y electrolitos al principio, después cada 3 meses y después anualmente.
17 Ácido 5-aminosalicílico (5-ASA o mesalazina) se debe estabilizar en preparaciones orales para que
sobreviva el pH gástrico. Alternativamente, la olsalazina es un dímero de 5-ASA o balsalazida es un pro-
fármaco, los cuales se escinden en el colon. Raras reacciones de hipersensibilidad: empeoramiento de
la colitis, pancreatitis, pericarditis, nefritis.
Gastroenterología
abdomen. Considerar la transfusión de sangre (p. ej., si la Hb < 80 g/l).
• Si en el día 3-5 PCR> 45 o > 6 deposiciones/d, es necesaria acción18. Terapia de
rescate con ciclosporina o infliximab, pueden evitar la colectomía, pero involucre a los
cirujanos pronto en el cuidado.
• Si se mejora, cambie a prednisolona VO (40 mg/24 h). Programe infliximab de mante-
nimiento si se usó para rescate, o azatioprina si se rescató con ciclosporina.
• Si no hay mejoría, colectomía urgente para días 7-10 –el desafío es no retrasar la ciru-
gía demasiado como para acumular exposición significativa a esteroides y debilidad, lo
que puede retrasar la recuperación tras la cirugía.
Es tiempo para inmunomodulación si... Los pacientes padecen brotes cuando se
está disminuyendo la dosis de esteroides o requieren 2 tandas de esteroides/año, p. ej.,
azatioprina (2-2,5 mg/kg/d VO). El 30 % de pacientes desarrollará ES que requiere el cese
de tratamiento incluyendo dolor abdominal, náuseas, pancreatitis, leucopenia, pruebas de
función hepática anormales. Vigilar sistemático de sangre, urea + electrolitos, pruebas
de función hepática semanal durante 4 semanas, después cada 4 semanas durante
3 meses, y tras esto al menos cada 3 meses.
Terapia biológica. Para pacientes intolerantes a inmunomodulación, o que desarrollen
síntomas a pesar de un inmunomodulador, los anticuerpos monoclonales contra TNF
(infliximab, adalimumab, golimumab) o contra moléculas de adhesión implicadas en el trá-
fico de linfocitos en el intestino (vedolizumab) juegan un papel importante (ver el RECUA-
DRO «Terapias en la enfermedad de Crohn», p. 265).
Cirugía. Es necesaria en algún momento en el ~20%, p. ej., colectomía subtotal + ile-
ostomía terminal en el fracaso de terapia médica o en colitis fulminante con dilatación
tóxica/peforación. Posteriormente finalización de la proctectomía (estoma permanente)
vs bolsa ileoanal. Las bolsas significan la inversión estomal y la posibilidad de continencia
a largo plazo, pero la frecuencia de apertura de la bolsa puede ser de alrededor de
6 x/día y la bulsitis recurrente puede ser problemática (dar antibióticos p. ej., metronida-
zol + ciprofloxacino durante 2 semanas).
18 Frecuencia de deposiciones en el 3er día > 8/día o frecuencia de 3-8 x/día y PCR> 45 = 85% posi-
19Gran parte del riesgo genético se comparte con la CU; pequeñas diferencias de genética combina-
das con modificadores medioambientales pueden explicar los fenotipos muy diferentes.
Gastroenterología
5-ASA. A diferencia de lo que ocurre en CU, no tienen ningún papel en el mane-
jo de la enfermedad de Crohn.
Biológicos. Anti-TNF: TNF juega un papel importante en la patogenia de la
enfermedad de Crohn, por lo que los anticuerpos monoclonales contra TNFa, p. ej.,
infliximab y adalimumab, pueden actividad de la enfermedad. Contrarrestan la acu-
mulación de neutrófilos y la formación de granulomas y producen citotoxicidad con-
tra las células T CD4+, eliminando así las células que impulsan la respuesta inmune.
Estos fármacos desempeñan un papel vital tanto en la terapia de inducción y como
en el mantenimiento. CI: sepsis, TB activa/latente,
pruebas de función hepática > 3
veces por encima del límite superior de la normalidad. EE: erupción cutánea. Evitar
en personas con tumores subyacentes conocidos. La TB puede reactivarse con infli-
ximab, por lo que debe excluirla antes de iniciar el tratamiento (RXT, PPD, ensayo
de liberación de interferón gamma (IGRA)). Combinación de AZA e infliximab pue-
den
eficacia del Rx a los 12 meses, pero hay problemas sobre su seguridad a largo
plazo (p. ej., aumento del riesgo de linfoma). Anti-integrina: Anticuerpos monoclona-
les dirigidos a moléculas de adhesión involucradas en el tráfico de linfocitos intesti-
nales, p. ej., vedolizumab, reducen la actividad de la enfermedad y tienen un mecanis-
mo de acción más específico del intestino. Anti-IL12/23: Representa una nueva cito-
quina objetivo con un papel emergente en el tratamiento, p. ej., ustekinumab.
Nutrición. Se prefiere entérica (p. ej., dieta polimérica); considerar TPN como últi-
mo recurso. Dietas elementales: (p. ej., E028®) contienen aminoácidos y pueden pro-
ducir remisión. Las dietas bajas en residuos ayudan a disminuir los síntomas en aque-
llos con enfermedad activa o estenosis.
Cirugía. 50-80% necesitan 1 operación en su vida. Nunca cura. Indicaciones: si la
medicación fracasa (más común); obstrucción GI por estenosis; perforación; fístula;
absceso. Los objetivos quirúrgicos son: 1. resección de áreas afectadas –pero cuida-
do con el síndrome del intestino corto (p. 580) 2. para controlar la enfermedad
perianal o fistulizante 3. evitar la función (descanso) de enfermedad distal, p. ej., con
una ileostomía temporal. La cirugía de bolsa no se realiza en Crohn (.·. riesgo de
recurrencia).
Fig. 6.21. Más allá del intestino... «Odio cómo Fig. 6.22. Úlceras profundas fisuradas obser-
esta estúpida enfermedad me está destruyen- vadas en la colonoscopia. ¿El resultado final?
do...». Además de eritema nodoso en las espi- «Mi familia ni siquiera me habla de la enfer-
nillas (arriba; causado por sarcoidosis, fármacos, medad... Yo no sé cuándo tendré que correr
estreptococos y TB), Crohn puede asociarse hacia el baño, por lo que no salgo y llevo una
con la artritis seronegativa de articulaciones vida de ermitaño...».
grandes o pequeñas, espondiloartropatía, © Dr. A Mee.
espondilitis anquilosante, sacroiliitis, pioderma
gangrenoso, conjuntivitis, episcleritis e iritis.
Enfermedad celíaca
Sospechar si hay diarrea + pérdida de peso o anemia (especialmente si hierro o B12 ).
Respuestas de células T al gluten (proteínas solubles en alcohol en trigo, cebada, cente-
no ± avena) en el intestino delgado causa atrofia villosa y malabsorción. Asociaciones.
HLA DQ2 en 95%; el resto son DQ8; enfermedad autoinmune; dermatitis herpetiforme.
Prevalencia. 1 en 100-300 (más común si es irlandés). Edad típica cualquiera (picos en
la infancia y 50-60 años). :: > 1:1. El riesgo relativo en los familiares de primer grado
es de 6x.
Presentación. Heces apestosas/esteatorrea; diarrea; dolor abdominal; hinchazón; náu-
seas + vómito; úlceras aftosas; estomatitis angular (p. 327, fig. 8.6); peso; fatiga; debilidad;
osteomalacia; retraso de crecimiento (niños). ~ 30% menos grave: puede simular SII.
Diagnóstico. Hb;
ancho distribución eritrocitaria (p. 325); B12, ferritina. Anticuer-
pos: antitransglutaminasa es la prueba individual preferida (pero es un anticuerpo IgA
–comprobar los niveles de IgA para excluir deficiencia de subclase). Cuando la serología
es positiva o hay alto índice de sospecha proceder a la biopsia duodenal mientras se
sigue una dieta que contiene gluten: esperar atrofia subtotal de vellosidad,
leucocitos
intraepiteliales + hiperplasia de las crípticas. Cuando persista la duda, el genotipo HLA
DQ2 y DQ8 puede ayudar.
Tratamiento. Dieta sin gluten durante toda la vida –los pacientes llegan a ser expertos.
Arroz, maíz, soja, patatas y azúcar están bien. El consumo limitado de avena ( 50 g/d) puede
ser tolerado en pacientes con enfermedad leve. Las galletas, la harina, el pan y la pasta sin
gluten pueden prescribirse. Vigilar la respuesta por los síntomas y repetir la serología.9
Complicaciones. Anemia; dermatitis herpetiforme (OHCS, p. 588); osteopenia/osteo-
porosis; hipoesplenismo (ofrecer vacunaciones antigripales y neumocócicas); linforma GI
de células T (raro, sospechar si hay síntomas refractarios o peso);
riesgo de maligni-
dad (linfoma, gástrico, esofágico, colorrectal); neuropatías.
Gastroenterología
cina, alcohol); amiloide (p. 370).
• Sobrecrecimiento bacteriano20: espontáneo (en particular en anciano); en diver -
tículos yeyunales; postoperación asa ciega? DM y uso de IBP son también factores
de riesgo. Intente metronidazol 400 mg/8 h VO. No confunda con síndrome del
asa aferente (p. 622).
• Infección: giardiasis; difilobotriasis (malabsorción de B12); estrongiloidiasis.
• Urgencia intestinal: dumping postgastrectomía; postvagotomía; gastroyeyunostomía.
Tratamiento SII
Haga un diagnóstico positivo (p. 266) y otros diagnósticos, por lo que:
• Si la historia es clásica, sistemático de sangre, VSG, PCR y serología de celiaquía
(p. 266) son suficientes.
• Si 60 años o cualquier marcador u enfermedad orgánica (
Tª, sangre por el
recto, peso): colonoscopia.
• Tener un umbral bajo para referir para estudio si antecedentes familiares de cán-
cer de ovario o de intestino.
• : excluir cáncer de ovario requiere suero CA-125 (OHCS, p. 281); la endome-
triosis (OHCS, p. 288) a menudo imita el SII: considere si el dolor es cíclico.
• Si los criterios de SII no se cumplen, considere el contexto clínico y decida sobre:
cultivo de heces; B12/folato; TSH; calprotectina fecal (p. 262).
Refiera para estudio si: 1. Incertidumbre de diagnóstico (usted o el paciente!). 2. Si
cambio de síntomas en «SII conocido». 3. Refractario a tratamiento: estrés o depre-
sión (visto en 50%) o síntomas refractarios (aquí, NICE favorece la terapia cogni-
tiva, OHCS, p. 390), síndromes solapados de dolor crónico (fibromialgia + fatiga crónica
+ dolor pélvico crónico) o problemas del detrusor.
Tratamiento: Debe enfocarse en controlar los síntomas, usando inicialmente medidas
de estilo de vida/dieta, después terapia cognitiva (OHCS, p. 390) o farmacoterapia si
es necesario:
• Estreñimiento: asegurar una ingesta adecuada de agua y fibra y promocione activi-
dad física (
ingesta de fibra puede empeorar la flatulencia/hinchazón por lo que
debe evitar fibra insoluble como salvado; la avena es mejor). Laxantes simples
(p. 260, pero cuidado con la lactulosa, que fermenta y puede agravar la hinchazón).
Si 2 de estos fracasan, trate prucaloprida, linaclotida o lubiprostona; o autoadmi-
nistración de enema.
• Diarrea: Evite los edulcorantes de sorbitol, alcohol y cafeína; reducir el contenido
de fibra de la dieta; anime a los pacientes a identificar sus propios alimentos «des-
encadenantes»; pruebe con un agente que aumente el volumen de las heces ±
loperamida 2 mg después de cada deposición suelta.
• Cólico/hinchazón: antiespasmódicos orales: mebeverina 135 mg/8 h o buscopan
10 mg/8 h (sin prescripción). La combinación de probióticos en dosis suficientes
(p. ej., VSL # 3®) puede ayudar a la flatulencia o hinchazón. Dietas bajas en sacári-
dos fermentables, poco absorbibles y alcoholes pueden proporcionar beneficios
(la dieta FODMAP baja).
• Síntomas psicológicos/hipersensibilidad visceral: ¡haga hincapié en lo positivo! Se ha
excluido patología siniestra y con el tiempo los síntomas tienden a mejorar. Con-
sidere la terapia cognitiva (OHCS, p. 390), hipnosis y los tricíclicos, p. ej., amitriptili-
na 10-20 mg por la noche (ES: somnolencia, boca seca). Explicar que esto debe
ser una dosis pequeña para el dolor visceral (es decir, usted no está prescribien-
do la dosis más alta autorizada para la depresión).
vitaminas. Causas: edad avanzada, neuropatía autonómica (p. ej., diabética), resección de válvula ileoce-
cal; uso de IBP; amiloidosis.
tía (beriberi seco) por falta de vitamina B1 (tiamina). Para tratamiento y pruebas diag-
nósticas, ver la encefalopatía de Wernicke (p. 714).
Pelagra = falta de ácido nicotínico.Tríada clásica: diarrea, demencia, dermatitis (collar de
Casal) ± neuropatía, depresión, insomnio, temblor, rigidez, ataxia, síncopes. Puede ocurrir
en el síndrome carcinoide y medicamentos anti-TB (isoniazida). Endémico en China y
África. Rx: Educación, reemplazo electrolítico, nicotinamida 100 mg/4 h.
Xeroftalmía. Este síndrome de deficiencia de vitamina A es una causa importante de
ceguera en la zona tropical. Las conjuntivas se secan y desarrollan manchas ovales/trian-
gulares (manchas de Bitôt). Las córneas se vuelven nubladas y blandas. Administre vita-
mina A (OHCS, p. 460). Obtenga ayuda especial si estuviera embarazada: debe evitar-
se la embriopatía por vitamina A. Reeducar y vigilar la dieta.
Tabla 6.9. Síndromes de deficiencia y sitios de absorción de nutrientes
Vitaminas y
Lugares de absorción Síndrome de deficiencia
nutrientes
AF Intestino delgado Xeroftalmia (p. 278)
B1 (tiamina) Intestino delgado Beriberi (p. 278); encefalopatía de
Wernicke (p. 714)
B2 (rivoflavina) Intestino delgado proximal Estomatitis angular; queilitis (p. 246)
B6 (piridoxina) Intestino delgado Polineuropatía
B12 Íleo terminal Anemia macrocítica (p. 332);
neuropatía; glositis
C Íleo proximal Escorbuto (p. 278)
DF Yeyuno libre de vitaminas Raquitismo (p. 684); osteomalacia
(p. 684)
EF Intestino delgado Hemólisis; déficit neurológico
KF Intestino delgado Trastornos de la coagulación (p. 344)
Ácido fólico Yeyuno Anemia macrocítica (p. 332)
Nicotidamida Yeyuno Pelagra (p. 278)
Minerales
Calcio Duodeno + yeyuno p. 676
Cobre Estómago + yeyuno Síndrome del pelo rizado de Menkes
Fluoruro Estómago Caries
Ioduro Intestino delgado Bocio; cretinismo
Hierro Duodeno + yeyuno Anemia microcítica (p. 326)
Magnesio Intestino delgado p. 679
Fosfato Intestino delgado Osteoporosis; anorexia; debilidad
Selenio Intestino delgado Miocardiopatía
Zinc Yeyuno Acrodermatitis enteropática; pobre
cicatrización de heridas (p. 679)
F =Vitamina liposoluble, por lo que la deficiencia es probable si hay malabsorción de grasa.
21 Que las naranjas y los limones previenen el «escorbuto» fue notado por el cirujano naval James Lind
en 1753. En lo que puede clasificarse como el primer ensayo clínico, dividió al azar a 12 marineros con
escorbuto en 6 grupos, a los que le dio la misma dieta básica pero cada grupo recibió una interven-
ción dietética única. Los 2 marineros que recibieron naranjas y limones hicieron una buena recupera-
ción, a diferencia de los otros 10.
Gastroenterología
que yacen mueren de pelagra por no conseguir beneficios de una naranja. Y los
forenses deben rellenar en los certificados –muerte por malnutrición– porque la
comida debe pudrirse, debe ser forzada a pudrirse.
La gente viene con redes para pescar patatas en el río, y los guardias se lo impi-
den; vienen en coches chirriantes para conseguir las naranjas desechadas, pero que-
roseno es esparcido. Y se quedan quietos mirando cómo las papas flotan, escuchan-
do a los cerdos gritar cuando les matan en una zanja y les cubren con cal viva, miran
cómo las montañas de naranjas se desploman hasta una lechada putrefacta; y en los
ojos de la gente hay un fracaso; y en los ojos de los hambrientos, una cólera cre-
ciente. En las almas del pueblo las uvas de la ira se están rellenando y creciendo con
fuerza, creciendo con fuerza para la vendimia». (J Steinbeck, Las Uvas de la Ira).
¿Cómo crecen las uvas de John Steinbeck en nuestro suelo del siglo XXI? Dema-
siado bien; doblar la cosecha, resulta que no solo acabaría con el hambre, en medio
de la abundancia (para los que pueden pagar), sino que además hay un nuevo «dolor
en nuestra tierra que el llanto no puede simbolizar»: el ayuno voluntario «patológi-
co, nuevamente en mitad de la abundancia, en la búsqueda de un cuerpo hermoso
de acuerdo a las imágenes establecidas por los medios de comunicación de masas.
Si los gastroenterólogos tuviesen un deseo, tal vez no sería el final de las enferme-
dades, pero sí que la humanidad estuviera en una armonía con la fertilidad de la tie-
rra de Steinbeck, sus árboles rectos, sus robustos troncos y su fruta madura.
dar un breve alivio); lipasa, p. ej., Creon®; vitaminas liposolubles (p. ej., Multivite®). Las
necesidades de insulina pueden ser altas o variables (cuidado con la hipoglucemia). Dieta:
Sin alcohol; baja en grasa puede ayudar. Triglicéridos de cadena media (aceite MCT) (no
se necesita lipasa para la absorción, pero la diarrea puede empeorar). Cirugía: Para el
dolor ininterrumpido; abuso de estupefacientes (cuidado con esto); peso: p. ej., pan-
createctomía o pancreaticoyeyunostomía (un procedimiento de drenaje del conducto).
Complicaciones. Pseudoquiste; diabetes; obstrucción biliar; aneurisma arterial local;
trombosis de la vena esplénica; varices gástricas; carcinoma pancreático.
Gastroenterología
(.·. síndrome de Cushing), paratiroides y hormonas tiroideas. El 10% son parte del sín-
drome de MEN-1 (p. 223); 10% ocurre con otros tumores neuroendocrinos.
Síndrome carcinoide. Se da en ~ 5% e implica afectación hepática.
Síntomas y signos: Broncoconstricción; enrojecimiento paroxístico, especialmente en la
parte superior del cuerpo (± habones migratorios); diarrea; IC (incompetencia tricúspi-
de y estenosis pulmonar de la fibrosis inducida por 5HT). Crisis carcinoide: Véase
RECUADRO «Crisis carcinoide».
Pruebas:
ácido 5-hidroxiindolacético en orina 24 horas (5HIAA, un metabolito
5HT, los niveles cambian con medicamentos y dieta: discutir con el laboratorio). RXT +
RM/TC tórax ayudan a localizar los tumores primarios. La cromogranina A plasmática
(refleja la masa tumoral); gammagrafía con octreótido 111Indio (octreoscan) y la tomo-
grafía por emisión de positrones (p. 739) también tienen un papel. La ecocardiografía y
el BNP (p. 137) se pueden utilizar para investigar la cardiopatía carcinoide.
Tratamiento. Síndrome carcinoide: Octreotide (análogos de somatostatina) bloquea la
liberación de mediadores tumorales y contrarresta los efectos periféricos. Alternativa de
largo plazo: lanreotide. Loperamida para la diarrea. Terapia tumoral: La resección es la única
cura para los tumores carcinoides, por lo que es vital encontrar la ubicación principal. En
la cirugía, los tumores son de color amarillo intenso. Los procedimientos dependen de la
ubicación, por ejemplo, los tumores carcinoides rectales < 1 cm pueden resecarse
endoscópicamente. Disminución de la masa (p. ej., enucleación), embolización o ablación
por radiofrecuencia de las metástasis hepáticas pueden síntomas. Dar cobertura con
octreotide para evitar precipitar una crisis carcinoide masiva.
Media supervivencia. 5-8 años (~ 3 años si las metástasis están presentes, pero pue-
den ser de hasta 20 años; así que tenga cuidado de no renunciar fácilmente, incluso en
la enfermedad metastásica).
Crisis carcinoide
Cuando un tumor sobrepasa su suministro de sangre o es manipulado demasiado
durante la cirugía, se liberan los mediadores. Existe una vasodilatación potencialmen-
te mortal, hipotensión, taquicardia, broncoconstricción e hiperglucemia. Se trata con
una dosis alta de octreotide, medidas de apoyo y manejo cuidadoso del equilibrio de
fluidos (es decir, se necesita una vía central – ver p. 775 para la técnica de inserción).
Procedimiento de Whipple
A) Áreas de reflexión de las distintas partes B) Después de la operación
Hígado Estómago Estómago
Hígado
B
A
A B
A
C B
D C
Asa de Roux
Duodeno D DC Páncreas
Páncreas
Fig. 6.23. El procedimiento de Whipple puede usarse para remover masas en la cabeza
del páncreas –típicamente de carcinoma pancreático o, rara vez, un tumor carcinoide10.
22 Algunos nunca se detectan clínicamente: 1 de cada 300 necropsias tienen un tumor carcinoide del
intestino delgado.
272 Ictericia
La ictericia se refiere al color amarillo de la piel, escleróticas y mucosas por
plasma bili-
rrubina (visible a 60 mol/L fig. 6.24). La ictericia se clasifica por la localización del pro-
blema (prehepática, hepatocelular o colestásica/obstructiva) o por el tipo de bilirrubina
circulante (conjugada o no conjugada, fig. 6.25).
Hiperbilirrubinemia no conjugada. Como la bilirrubina no conjugada es insoluble
en agua, no entra en la orina, lo que resulta en hiperbilirrubinemia no conjugada.
Sobreproducción: Hemólisis (p. 338, p. ej., malaria/CID, etc.); eritropoyesis ineficaz.
Captación hepática disminuida: Medicamentos (paracetamol, rifampicina), hepatitis isqué-
mica.
Gastroenterología
Gastroenterología
Reproducido de Roper, Clinical Skills, 2014, con permiso de Oxford
University Press.
El proceso metabólico de la bilirrubina
En el hígado, la bilirrubina se conjuga con ácido glucurónico por hepatocitos, haciéndo-
la soluble en agua. La bilirrubina conjugada se secreta en la bilis y pasa al intestino. A
veces se vuelve a captar por el hígado (vía circulación enterohepática) y el resto se con-
vierte al urobilinógeno por las bacterias intestinales. El urobilinógeno es reabsorbido y
excretado por los riñones, o convertido a estercobilina, que colorea las heces marrones.
Hemoglobina
Glucorónido de
bilirrubina (conjugada)
Fig. 6.25. La bilirrubina
Intestino delgado está formada por degrada-
ción de la hemoglobina en
Riñón un proceso de 3 pasos:
captación hepática, conju-
Absorbida gación y excreción.
Estercobilinógeno Urobilinógeno
Gastroenterología
en la circulación y pasan al cerebro, donde los astrocitos lo aclaran (mediante pro-
cesos que conllevan la conversión de glutamato en glutamina). Este exceso de glu-
tamina causa un desequilibrio osmótico y paso de líquido hacia el interior de estas
células – por lo tanto edema cerebral. Clasificación:
I Alteración del estado de ánimo/comportamiento; trastornos del sueño (p. ej.,
patrón de sueño invertido); disraxia («Por favor, copie esta estrella de cinco pun-
tas»); mala aritmética. No hay temblor hepático.
II Somnolencia creciente, confusión, habla arrastrada ± temblor hepático, conduc-
ta inapropiada/cambio de personalidad (pregunte a la familia –no tenga tacto).
III Incoherente; inquieto; temblor hepático; estupor.
IV Coma.
¿Qué más podría estar enturbiando la conciencia? Hipoglucemia; septicemia; trau-
ma; postictal.
276 Cirrosis
La cirrosis (griego kirrhos = amarillo) implica daño irreversible del hígado. Histológica-
mente hay pérdida de la arquitectura hepática normal con fibrosis de soporte y regene-
ración nodular.
Causas. Con mayor frecuencia, abuso crónico del alcohol, el VHB o infección por el
VHC. Otros: ver RECUADRO «Causas de cirrosis».
Signos. Leuconiquia: uñas blancas con lúnulas no marcadas, de hipoalbuminemia; uñas
de Terry –blancas proximalmente pero el 1/3 distal enrojecido por telangiectasias; dedos
en palillo de tambor; eritema palmar; circulación hiperdinámica; contractura de Dupuy-
tren; araña naevi (fig. 6.27); xantelasma; ginecomastia; testículos atróficos; pérdida del vello
Gastroenterología
277
Gastroenterología
desde la que irradian numerosos vasos (al igual
que las patas de una araña). Estos se llenan
desde el centro, a diferencia de las telangiecta-
sias, que se llenan desde la periferia. Ocurren
con mayor frecuencia en la piel que drena en la
vena cava superior. Un número de 5 es normal Fig. 6.28. Importante ascitis. Observe la her-
(especialmente en ). Las causas incluyen nia umbilical (p. 613), ginecomastia y venas visi-
enfermedad hepática, OCP y embarazo (es bles en la pared abdominal anterior.
decir, cambios en el metabolismo estrogénico).
Causas de cirrosis
• Uso crónico de alcohol • Esteatohepatitis no alcohólica (EHNA)
• Infección crónica por VHB o VHC28 • Autoinmunidad: colangitis biliar prima-
• Alteraciones genéticas: hemocromato- ria (p. 282); colangitis esclerosante pri-
sis (p. 288); deficiencia de 1-antitripsi- maria (p. 282); hepatitis autoinmune (p.
na (p. 290); enfermedad de Wilson 284)
(p. 285) • Fármacos: p. ej., amiodarona, metildo-
• Problemas en la vena hepática (Budd- pa, metotrexato
Chiari, p. 696)
Trasplante hepático
El primer trasplante hepático se realizó en Denver, USA, en 1963. Ahora, se realizan
cada año 800-1000 en Reino Unido (indicaciones ver p. 284). El factor precipitante
para el procedimiento es con frecuencia la lista de espera para la donación de un
órgano, que puede ser cadavérico (corazón latiente o corazón no latiente) o de donan-
tes vivos (lóbulo derecho). Entre las contraindicaciones se incluyen malignidad extra-
hepática; enfermedad cardiorrespiratoria grave; sepsis sistémica; sospecha de que no
se va a seguir bien el tratamiento farmacológico; consumo continuado de alcohol (en
los casos relacionados con el alcohol). Refiera a los pacientes pronto mejor que tarde,
p. ej., cuando ascitis refractaria o tras el primer episodio de peritonitis bacteriana. En
el Reino Unido, la priorización está basada en el sistema de puntuación UKELD (enfer-
medad hepática terminal UK), calculado en base al Na+, creatinina, bilirrubina e INR29.
Postoperatorio: 12-48 horas en cuidados intensivos, iniciando la alimentación enteral
en cuanto sea posible y vigilancia estrecha de las pruebas de función hepática. Ejem-
plos de inmunosupresión: tacrolimus ± micofenolato mofetil (o azatioprina) + predni-
solona. El rechazo hiperagudo es el resultado de incompatibilidad ABO. Rechazo
agudo (mediado por células T, a 5-10 d): el paciente se siente mal con pirexia y sen-
sibilidad hepática –con frecuencia tratado alternando los inmunosupresores. Otras
complicaciones: sepsis (esp. gramnegativo y CMV), trombosis de arteria hepática,
rechazo crónico (a 6-9 meses), recurrencia de la enfermedad y, raramente, enfer-
medad del injerto contra huésped. La supervivencia media a 1 año es ~80% (super-
vivencia a 5 años 60-90%; depende de la enfermedad preoperatoria).
28 Pistas sobre qué pacientes con VHC crónica desarrollarán cirrosis: plaquetas 140 x 109/L, ratio glo-
bulina/albúmina 1, y GOT (AST)/GPT (ALT) 1-100% valor positivo predictivo pero menor sensi-
bilidad (~30%).
29 Hay calculadoras online disponibles, p. ej., en www.odt.nhs.uk
Normal Normal
HBsAg + + +
HBeAg + + + /-
Anti-HBs
Anti-HBe + /- + +
Anti-HBc IgM + + /-
Anti-HBc IgG + + +
Gastroenterología
HÍGADO
HBcAg
HBsAg
Exposición
HBsAg anti-HBs
SUERO
HBeAg anti-HBe
DNAP
Anti-DANE Partícula
Anti-HBc
GOT (AST)
0 Semanas 8 20 32
Fig. 6.29. Eventos virales en hepatitis B en relación con el pico de GOT (AST). IF = inmuno-
fluorescencia; Ag = antígeno; HBs = hep. B superficie; HBC = hep. núcleo B; HBe = hep. antí-
geno B y DNAP = DNA polimerasa.
El triunfo de los virólogos: cura del VHC
Desde el aislamiento original de VHC a finales de la década de 1980, en pleno apo-
geo del miedo al sida, han pasado menos de tres décadas. En este tiempo, el geno-
ma relativamente más simple de VHC ha sido mucho más facil que el VIH de com-
batir y el tratamiento de VHC ha sufrido una revolución hasta el punto de que
muchos genotipos comunes son considerados curables.
Todos los pacientes con detección sostenida de VHC deberían ser considerados
para el tratamiento. Las opciones van evolucionando rápidamente, pero centrándo-
nos sobre el empleo de los inhibidores de proteínas virales no estructurales (p. ej.,
ledipasvir + sofosbuvir), que son mucho mejor tolerados que el pilar anterior de tra-
tamiento, interferon pegilado. Los regímenes sin interferón, por lo tanto, eliminan las
barreras principales al cumplimiento incluyendo la duración de tratamiento y ES, al
mismo tiempo que alcanzan resultados superiores: los regímenes antivirales con-
temporáneos pueden conseguir de manera realista la ausencia completa de virus
detectables por PCR en la sangre 6 meses después del tratamiento en casi el 100%
de los pacientes con genotipo 1, incluidos los pacientes con cirrosis establecida. La
ribavirina, análogo nucleosídico, también puede evitarse cada vez más en el genotipo
1, aunque sigue siendo un tratamiento útil para los genotipos 2 y 3, más difíciles de
tratar. En este caso, las tasas informadas de niveles virales indetectables sostenidos
superan actualmente el 90%. Los costos del tratamiento son asombrosos, pero el
análisis de costo-efectividad es favorable dados los altos índices de curación y la
importante carga de salud pública del VHC. Los genotipos 4, 5 o 6 son prevalentes
en los países de bajos ingresos y han recibido menos atención, pero los datos limi-
tados en los que existen recursos sugieren tasas de respuesta similares.
Mientras tanto, la amenaza del VIH permanece. La prevalencia del VHC es ~ 7%
para el VIH sexualmente transmitido y > 90% para la transmisión IV. El VIH no tra-
tado puede acelerar el progreso de la fibrosis hepática inducida por el VHC. Todos
los pacientes coinfectados con VIH/VHC deben ser evaluados para la terapia antivi-
ral combinada. Dado el potencial para la toxicidad y la mutación a la resistencia viral,
tales terapias deben ser planificadas y aplicadas a través de servicios expertos.
280 Alcoholismo
Un alcohólico es alguien cuyo patrón problemático de uso de alcohol conduce a un
deterioro clínicamente significativo o a angustia, que se manifiesta por múltiples factores
psicosociales, conductuales o fisiológicos. Pueden coexistir otras adicciones. Prevalencia a
lo largo de la vida: ~ 10% ( 4%). La negación es una característica principal, así
que asegúrese de preguntar a sus familiares.
Órganos afectados. No olvide el riesgo de trauma mientras está intoxicado.
Hígado: Normal en 50%;
o
Gastroenterología
ponde «sí» a 2 pueden tener dependencia (sensibilidad 43-94%; especificidad 70-
97%), pero la exactitud cambia de acuerdo con la población en la que se está estu-
diando. Aquellos que rechazan responder o dan respuestas poco convincentes pue-
den tener más que contar en su bioquímica: Busque
GT,
GPT (ALT),
VCM,
GOT (AST):GPT (ALT)> 2, urea, plaquetas.
ALP. La letargia, somnolencia y prurito pueden preceder años a la ictericia. Signos: Icte-
ricia; pigmentación de piel; xantelasma (p. 691); xantoma; hepatoesplenomegalia. Compli-
caciones: Las de la cirrosis (p. 276); la osteoporosis es común. Malabsorción de vitaminas
liposolubles (A, D, E, K) debido a colestasis y bilirrubina en la luz del tubo digestivo da
lugar a osteomalacia y coagulopatía; hepatocarcinoma (p. 286).
Pruebas. Sangre:
ALP,
GT y ligeramente
GOT (AST) y GPT (ALT); enfermedad
tardía:
bilirrubina, albúmina,
protrombina. 98% son subtipo AMA M2 positivo, p. ej.,
en un título de 1:40 (véase más arriba en tema). Pueden producirse otros autoanticuer-
pos (p. 553) en títulos bajos. Las inmunoglobulinas están
(esp. IgM). TSH y colesterol
Gastroenterología
explicación etiológica completa, y en la que los anticuerpos son solamente testigos.
El proceso del que carecemos de los instrumentos para visualizar, como las células
del sistema inmunológico siguen su ataque contra sus enemigos percibidos, motiva-
do por razones que ninguno de los presentes parece dispuesto a revelar a nuestro
análisis grosero con análisis de sangre, rayos X y biopsias. Mientras el cuerpo no
conoce enfermedades, solo dolor y muerte, nuestras mentes intentan imponer una
enfermedad unitaria en células libres de sospecha y a veces inocentes.
Por ejemplo, clínicamente observamos que la hepatitis autoinmune (HAI) con fre-
cuencia se superpone con CEP y SII. Una batería de pruebas de anticuerpos puede
ayudar a veces a comprender el proceso dominante, pero también puede confun-
dir aún más las cosas si intentamos aplicar nuestros clasificadores inadecuados
(«¿Pero por qué el ANCA no es positivo?» Grita el estudiante, enfurecido por el fra-
caso de los miserables linfocitos B del paciente para comportarse honorablemen-
te). Como siempre, el tratamiento debe ser individualizado de acuerdo con la his-
tología hepática e intestinal, los niveles séricos de inmunoglobulina, el grado de coles-
tasis bioquímica, colangiografía y, sí, autoanticuerpos.
33 Los virus hepatotrópicos (p. ej., sarampión, herpesvirus) y algunos fármacos parecen desencadenar
HAI en individuos genéticamente predispuestos a un milieu intérieur hepatotóxico. El interferón viral
puede inactivar enzimas del citocromo P450 (.·. metabolismo de hepatotoxinas ex- o endógenas).
Modificaciones resultantes de las proteínas pueden generar autoantígenos que conducen a la activa-
ción de las células T CD4 auxiliares.
Gastroenterología
Factores de riesgo para el progreso. Edad avanzada; obesidad; DM; EHGNA. Tra-
tamiento. Control de factores de riesgo, incluyendo la obesidad (la cirugía bariátrica
ayuda). Abordar el riesgo cardiovascular (más común causa de muerte, véase p. 93). Evite
el consumo de alcohol. Ningún medicamento ha demostrado beneficiar, aunque la vita-
mina E puede mejorar la histología en la fibrosis (p. ej. 400 UI/d –dosis más altas se aso-
cian con el exceso de mortalidad). Seguimiento. Vigile la aparición de complicaciones
(EHNA, cirrosis, DM). Si es cirrótico, se debe realizar cribado de hepatocarcinoma con
ultrasonido ± alfa-fetoproteína dos veces al año.
(hepatocarcinoma).
Pruebas. Sangre: Sistemático de sangre, coagulación, pruebas de función hepática, serología de
hepatitis, -fetoproteína (
en 50-80% de hepatocarcinoma, aunque los niveles no se correlacio-
nan con el tamaño, estadio o el pronóstico. Imágenes: US o TC para identificar lesiones y guiar la
biopsia. La RM es mejor para distinguir entre lesiones benignas y malignas. Hacer CPRE (p. 742)
y biopsia si se sospecha colangiocarcinoma. Biopsia de hígado: (Ver p. 248.) Puede lograrse un diag-
nóstico histológico; si el tumor es potencialmente resecable, se requiere una cuidadosa discu-
sión multidisciplinaria, dado que son posibles el sangrado y la siembra a lo largo del tracto de biop-
sia. Si la lesión puede ser una metástasis, encuentre el primario, p. ej., RXT, mamografía, colonos-
copia, TC, RM o biopsia de médula ósea.
Metástasis de hígado. Significa enfermedad avanzada. El tratamiento y el pronóstico varían
según el tipo y extensión del tumor primario. La quimioterapia puede ser eficaz (p. ej., linfo-
mas, tumores de células germinales). Las metástasis pequeñas y solitarias pueden ser suscep-
tibles de resección (p. ej., cáncer colorrectal). En la mayoría, el tratamiento es paliativo. Pro-
nóstico: Frecuentemente < 6 meses.
Carcinoma hepatocelular (CHC). La neoplasia de hepatocitos primarios representa el
90% de los cánceres primarios de hígado; es común en China y África (40% de los cánceres
vs 2% en el Reino Unido). El paciente: Fatiga, apetito, dolor cuadrante superior derecho,
peso, ictericia, ascitis, haemobilia.34 : 3. Causas: El VHB es la causa principal en todo el
mundo (especialmente si la carga viral es alta, p. 278). HCV;35 HAI (p. 284); cirrosis (alcohol,
hemocromatosis, CBP); hígado graso no alcohólico; aflatoxina; Clonorchis sinensis; esteroides
anabólicos.
: TC de 3 fases (retraso en el lavado del contraste en una masa sospechosa); RMR; biopsia.
Tratamiento: Resección de tumores solitarios < 3 cm a través
supervivencia a 3 años del 13%
al 59%; pero ~50% tienen recurrencia en 3 años36. El trasplante de hígado tiene una tasa de
supervivencia a 5 años del 70%37. La ablación percutánea, la embolización tumoral (TACE38) y
el sorafenib son opciones. Prevención: vacunación contra el VHB (RECUADRO y tabla 6.15). No
reutilice las agujas. Cribado de sangre. exposición a Aflatoxin (maíz secado al sol). Alfafeto-
proteína ± ultrasonido (p. ej., cribado cada 6 meses): Considere si hay
riesgo: p. ej., todos con
cirrosis; o VHB crónico en africanos o ancianos asiáticos.
Colangiocarcinoma (cáncer de vías biliares). ~ 10% de los primarios hepáticos. Causas:
Trematodo (Clonorchis, p. 435); CEP (el cribado mediante CA19-9 puede ser útil, p. 282);
quistes biliares; enfermedad de Caroli, p. 272; VHB; VHC; DM; toxinas N-nitrosas.
El paciente: Fiebre, dolor abdominal (± ascitis), malestar,
bilirrubina;
FA.
Patología: Suele ser de crecimiento lento. La mayoría son distales extrahepáticos o perihiliares.
Tratamiento: 70% inoperable en la presentación. De los que lo son, el 76% recurren. Cirugía:
p. ej., hepatectomía mayor + exéresis del conducto biliar extrahepático + resección del lóbu-
lo caudado. Supervivencia a 5 años ~30%. Las complicaciones postoperatorias incluyen insu-
ficiencia hepática, pérdida de bilis y hemorragia GI. Colocación de endoprótesis en el árbol
biliar extrahepático obstruido, percutáneamente o vía CPRE (p. 742), mejora la calidad de vida.
Rara vez es posible el trasplante de hígado. Pronóstico: ~5 meses.
Tumores benignos. Hemangiomas: Los tumores benignos más frecuentes del hígado. Son
a menudo un hallazgo incidental en la ecografía o TC y no requieren tratamiento. ¡Evitar biop-
sia! Adenomas: Común. Causas: esteroides anabólicos, píldora anticonceptiva oral; embarazo.
Solo tratar si es sintomático o > 5 cm.
34 La hemobilia es tardía en el CHC. Piense en sangrado en el árbol biliar siempre que esté presente la tría-
da de Quinke: dolor en el cuadrante superior derecho, hemorragia GI superior e ictericia. Puede ser mortal.
35 El riesgo acumulado a 5 años si existe cirrosis es de 30% en Japón y 17% en EE.UU.
36 Mortalidad operatoria: 1,6%. La recidiva es más probable si la histología mostró embolia neoplásica en
pequeños vasos. Obtenga una advertencia precoz de recurrencia mediante la realización de estudios de ima-
gen, p. ej., si FA> 5,45 mcg/L (especialmente si la tendencia está aumentando). El CHC fibrolamelar, que ocu-
rre en niños y adultos jóvenes, tiene un mejor pronóstico.
37 Criterios de Milán para el trasplante hepático en CHC: 1 nódulo < 5 cm o 2-3 nódulos < 3 cm.
38 TACE = quimioembolización transarterial, p. ej., con perlas recubiertas de fármacos; causa fiebre y dolor
abdominal en el 50%.
Gastroenterología
* Los hemangiomas son hiperecoicos en la ecografía; pueden formar parte del síndrome de von
Hippel-Lindau; podría necesitar cirugía si el diagnóstico es incierto (puede ser confundido con
CHC) o si crece en la ecografía a 6 meses.
† Los GIST son tumores mesenquimales que tienen más probabilidades de encontrarse en el
intestino como una masa esférica que surge de la muscularis propria, p. ej., con sangrado gastroin-
testinal. Si es irresecable, imatinib
supervivencia a 2 años de 26% a 76%.
Tabla 6.14. Origen de tumores secundarios en el hígado
Común en hombres Común en mujeres Menos común (los dos sexos)
Estómago Pecho Páncreas
Pulmón Colon Leucemia
Colon Estómago Linfoma
Útero Tumores carcinoides
39 La saturación de transferrina> 45% es un umbral sensible para el cribado adicional, pero conducirá
Esto ayuda a determinar la gravedad de la enfermedad hepática, particularmente en aquellos con otras
causas subyacentes de enfermedad hepática crónica.
Gastroenterología
en el duodeno y el yeyuno, aunque se absorben cantidades muy pequeñas en el
estómago y el íleon. Los requerimientos de hierro son mayores para las mujeres
(pérdida menstrual), en el crecimiento, en el embarazo y en infecciones crónicas.
La hepcidina, un péptido sintetizado en los hepatocitos, secretado en el plasma, es
un regulador negativo de la absorción del hierro intestinal y del reciclado del hierro
de los hemo por los macrófagos. La síntesis de hepcidina es estimulada por el hie-
rro y reprimida por la deficiencia de hierro y por
eritropoyesis de la médula ósea
(p. ej., en anemia, hemorragia, hemólisis, diseritropoyesis o inyecciones de eritropo-
yetina). Los defectos en el estímulo normal de la hepcidina por exceso de hierro son
una causa rara de hemocromatosis no relacionada con las mutaciones de HFE, mien-
tras que un defecto en la represión de la hepcidina es responsable de una anemia
de deficiencia de hierro refractaria al hierro.
En HH, el hierro total del cuerpo es hasta 10 veces mayor que el de una perso-
na normal, con carga encontrada particularmente en el hígado y el páncreas (x100).
La enfermedad hepática comienza clásicamente con fibrosis, progresando a la cirro-
sis como una característica tardía.
Fig. 6.33. La hemocromatosis hace que las articulaciones estresadas se deterioren más rápi-
do que las articulaciones en reposo: las articulaciones 2ª y 3ª MCP tienen osteolitos y estre-
chamiento de los espacios articulares en comparación con la mano normal (imagen de la dere-
cha) en este hombre que solo utilizó su mano dominante para su trabajo en línea de produc-
ción.
De «Artropatía por hemocromatosis y trauma repetitivo», C Morgan, D Smith, 2012, con permiso de
BMJ Publishing Group.
Gastroenterología
en crecimiento) o placenta.
Gamma-glutamil transferasa (GGT; GT): Presente en hígado, páncreas, túbulos rena-
les e intestino –pero no en el hueso, por lo que ayuda a saber si un aumento de fos-
fatasa alcalina es de hueso (GGT) o hígado (GGT
). NB: no es específico del
daño del hígado por alcohol.
Pruebas de función hepática. Albúmina sérica, bilirrubina sérica, TP (INR).
Lesión hepatocelular predominante en el hígado.
GOT (AST) y
GPT
(ALT). Evaluar rápidamente, considerar medicamentos, historia colateral obtenida de
la familia («¿Podría estar consumiendo
alcohol?»); ecografía para descartar hígado
graso, metástasis, serología viral (hepatitis A, B, C, E, EBV, CMV).
Enfermedad hepática alcohólica: La relación GOT (AST)/GPT (ALT) es típicamente
de 2:1 o más. Cuando la historia no es fiable, fosfatasa alcalina normal,
GGT y la
macrocitosis sugieren esta condición.
Hepatitis viral aguda:
GPT (ALT). La bilirrubina puede ser . NB: GOT (AST)
puede estar
, p. 278 y p. 281.
Hepatitis viral crónica:
GPT (ALT); VHB y C son una causa principal en todo el
mundo.
Hepatitis autoinmune (AIH): Ocurre principalmente en mujeres jóvenes y de media-
na edad.
Infiltración grasa del hígado: (Ver p. 285.) Probablemente es la principal causa de eleva-
ción ligera de PFH en la población general y puede ser reconocido por ultrasonido.
Hepatitis isquémica: Se puede ver en condiciones cuando el volumen circulatorio
efectivo es bajo (p. ej., IM, hipotensión, hemorragia).
7 Nefrología
Contenido
Orina 294
Infección del tracto urinario
(ITU) 296
Lesión renal aguda (LRA):
Enfoque clínico 298
Tratamiento 300
Enfermedad renal crónica
(ERC) 302
Tratamiento 304
Terapia de reemplazo renal (TRR):
Diálisis y filtración 306
Trasplante 308
Glomerulonefritis 310
Síndrome nefrótico 312
Manifestaciones renales de
enfermedad sistémica 314
Túbulo renal: trastornos y
diuréticos 316
Nefropatía tubulointersticial y
nefrotoxinas 318
Enfermedad renal hereditaria 320
Fig. 7.1. «Riñón artificial de tambor giratorio»:
una de las primeras máquinas de diálisis construi-
das por Willem Kolff en 1943. Exiliado en un
remoto hospital holandés durante la ocupación
nazi de los Países Bajos, construyó una máquina
de diálisis con chatarra, utilizando una bomba de
agua de un Ford modelo T, un tambor de un avión
de combate derribado, unos trozos de lavadora,
latas de zumo de naranja y pieles de salchicha. Los
primeros 16 pacientes que utilizaron la máquina
murieron. Después, en 1945, la paciente de 67
años Sofía María Schafstadt («Paciente Número
17») fue referida de mala gana a Kolff con diag-
nóstico de «envenenamiento». Su sangre fue
pasada a través de un tubo de piel de salchicha
que estaba envolviendo un tambor, girando como
una lavadora en un baño de agua salada. Se trata-
ron un total de 80 litros de su sangre de esta
manera, y se eliminaron 60 g de urea. Después de
11 horas, la paciente abrió los ojos para declarar:
«Voy a divorciarme de mi marido». Esto lo consi-
guió, así como un hito en la historia de la medici-
na. Kolff optó por no patentar su invento salvador,
sino que donó copias a hospitales por todo el
mundo.
Agradecemos al Dr. Andrew Mooney, nuestro médico especialista, por su contribución a este capítulo.
Nefrología
ciones basadas en la creatinina sérica son ampliamente utilizadas para dar un eTFG
(MDRD) (ver p. 669). Errores en el eTFG son causadas por condiciones no estables,
situaciones que alteran la creatinina sérica (dieta, masa muscular) y eTFG es menos
precisa en niveles más altos de TFG. Por lo tanto, la eTFG es solo parte de la eva-
luación de la función renal.
• Presión arterial alta: Se debe excluir una etiología renal si ocurre hipertensión con
cualquier indicador de enfermedad renal: hematuria, proteinuria, eTFG.
• Alteraciones electrolíticas: Trastornos del sodio, del potasio y del equilibrio ácido-base
(p. 301 y 670-5) pueden deberse a enfermedad renal subyacente.
2. Con síntomas del tracto renal
• Síntomas urinarios: La disuria es una sensación de malestar con la micción y puede ir
acompañada de urgencia, frecuencia y nicturia. La ITU es la principal causa en el diag-
nóstico diferencial. Considere la etiología prostática si hay dificultad para iniciar la
micción, flujo pobre y goteo. La oliguria (< 400 mL/24 horas o < 0,5 mL/kg/hora) y
la anuria deben poner en marcha un estudio para descartar la lesión (LRA) (véase
p. 298-301). La poliuria es la micción de volúmenes anormalmente altos de orina, por
lo general debido a alta ingesta de líquidos. Considere también DM, diabetes insípi-
da (p. 240), hipercalcemia (p. 677), trastornos medulares renales (que causan una dis-
minución de la concentración de orina).
• Dolor lumbar: El cólico ureteral es severo e irradia hacia adelante y hacia la ingle. Es
causado por un cálculo renal, un coágulo o una papila desgarrada. Para el dolor con-
finado en la zona lumbar, considere la pielonefritis, la patología quística renal y el
infarto renal.
• Hematuria visible: (HV, macroscópica). Se requiere estudio urológico para malignidad
en el tracto renal. Las causas de enfermedades nefrológicas incluyen riñón poliquís-
tico y enfermedad glomerular (IgA p. 311, antimembrana basal glomerular (anti-
MBG) p. 311, síndrome de Alport p. 320).
• Síndrome nefrótico: Proteinuria > 3 g/24 horas (= P:CR> 300 mg/mmol) con hipo-
albuminemia (< 30 g/L) y edema periférico. La biopsia renal suele estar indicada en
adultos (p. 310).
• Enfermedad renal crónica sintomática: Disnea, anorexia, pérdida de peso, prurito,
dolor óseo, disfunción sexual, deterioro cognitivo (p. 302-5).
3. Un trastorno sistémico con afectación renal
• DM: (p. 314.)
• Metabólico: Enfermedad falciforme (p. 315), esclerosis tuberosa (p. 320), enfermedad
de Fabry (p. 320), citinosis (p. 321).
• Autoinmune: Vasculitis asociada a ANCA (p. 314, 556), LES (p. 314), púrpura de
Schonlein-Henoch (p. 311), esclerosis sistémica (p. 315), sarcoide (p. 318), síndrome
de Sjögren (p. 318, 710).
• Infección: La sepsis es una causa frecuente de LRA. La afectación renal específica
puede ocurrir con TB (p. 392), malaria, hepatitis crónica (p. 278), VIH (p. 398-403).
• Malignidad: Obstrucción, hipercalcemia, toxicidad directa, p. ej., mieloma (p. 314).
• Embarazo: Pre-eclampsia, obstrucción.
• Medicamentos utilizados en trastornos sistémicos: AINE, i-ACE, ARAII, aminoglucósi-
dos, quimioterapia.
294 Orina
Realizar análisis con tira de orina siempre que sospeche enfermedad renal. Esta es una
manera grosera de comprobar si la orina contiene algo que no debería, p. ej., proteína,
sangre, glucosa. Las anormalidades pueden indicar enfermedad renal intrínseca o ano-
malías del tracto renal y por lo general requieren más estudios. Sin embargo, un análisis
con tira de orina de una muestra obtenida con sonda es difícil de interpretar.
䊳 Busque un análisis de tira de orina (antes de insertar la sonda). Un resultado positivo
indica la necesidad de asesoramiento especializado de nefrología/urología. Un resultado
negativo puede ayudar a tranquilizarle acerca de la ausencia de enfermedad renal intrín-
seca.
Proteinuria
Requiere cuantificación. Las colecciones de 24 h se utilizan raramente debido a la inexac-
titud. La proporción de albúmina: creatinina (A:CR) o proteína:creatinina (P:CR) se rea-
Nefrología
liza en una muestra de orina al azar. Normal A:CR es < 2,5 (么) o 3,5 (乆). P:CR es < 15.
Niveles aproximadamente equivalentes de proteinuria se dan en la tabla 7.1.
Tabla 7.1. Factores de conversión
Excreción de proteína g/24 h A:CR mg/mmol P:CR mg/mmol
0,15 (fisiológico) 2,5 么 o 3,5 乆 15
0,5 30 50
1 70 100
3 (rango nefrótico) 250 300
Causas de A:CR/P:CR aumentadas: Cuanto más alta es la proteinuria, mayor es la proba-
bilidad de que esté causada por enfermedad glomerular, p. ej., glomerulonefritis, DM, ami-
loidosis, mieloma (aunque las tiras no detectan cadenas ligeras). La proteinuria se asocia
con un riesgo de enfermedades cardiovasculares y muerte. Falso positivo: Postural
(repetir muestra con una muestra de primera hora de la mañana), después del ejercicio,
fiebre, insuficiencia cardíaca.
Microalbuminuria: Existen tiras de medición ultrasensibles para medir la albuminuria
(excreción de albúmina 30-300 mg/24 h). Sugiere enfermedad glomerular temprana,
p. ej., DM, PA.
Hematuria
La sangre en la orina puede surgir de cualquier parte del tracto renal. Deben excluirse
causas transitorias, p. ej., ITU, menstruación. Clasificado como:
• Visible (HV): previamente conocido como macroscópico, franco.
• No visible (HNV): se encuentra con la tira reactiva/microscopIa, anteriormente cono-
cida como microscópica. HNV se subdivide en función de la presencia de síntomas del
tracto urinario: síntomática (HNVs) o asintomática (HNVa).
Causas: Malignidad (riñón, uréter, vejiga), cálculos, nefropatía por IgA, síndrome de Alport
(p. 320), otra glomerulonefritis (p. 310), enfermedad renal poliquística (p. 320), esquisto-
somiasis. No atribuya la hematuria a la anticoagulación sin investigación. Falso positivo: La
mioglobina desencadena la misma reacción de las tiras –compruebe microscopía.
Tratamiento: HV, HNVs y HNVa > 40 años deben someterse a evaluación urológica, estu-
dios de imagen y cistoscopia para excluir la malignidad del tracto renal y litiasis.
Se debe considerar una etiología renal y remitir para estudio por nefrología, en HNV con:
• eTFG < 60
• proteinuria coexistente (A:CR> 30 o P:CR> 50)
• hipertensión > 140/90 mmHg
• antecedentes familiares de enfermedad renal.
No se establece una causa en el 19-68% de los pacientes con HNV. Estos pacientes
deben ser monitorizados vía PA, eTFG y repetición A:CR/P:CR cada 6 meses-1 año. Pro-
teinuria en aumento y deterioro del eTFG justifican repetir el envío a nefrología para
estudio y realizar una nueva investigación de las posibles causas.
Otros
Glucosa: DM, embarazo, sepsis, patología tubular renal proximal (p. 316). Cetonas: Inani-
ción, cetacidosis. Leucocitos: ITU (p. 296), flujo vaginal. Nitritos: ITU (organismo gramne-
gativo entérico). Bilirrubina: Hemólisis. Urobilinógeno: Enfermedad hepática, hemólisis. Gra-
vedad específica: Rango normal: 1.005-1.030, sustituto limitado de la osmolalidad de la
orina, afectada por proteinuria. pH: NR: 4,5-9, generalmente ácido con la carne que con-
tiene la dieta (equilibrio ácido-base: p. 670, acidosis tubular renal, p. 316-7).
Nefrología
trasplante renal y malignidad.
Células epiteliales escamosas:
• A menudo visto, no patológico.
Cilindros urinarios:
Los cilindros son cuerpos cilíndricos formados en el lumen de los túbulos distales.
Se forman a partir de la proteína de Tamm-Horsfall combinada con células.
• Cilindro hialino (fig. 7.2b) –se ve en la orina normal.
• Cilindro de glóbulos rojos (fig. 7.2c) –significa un proceso inflamatorio en el glo-
mérulo, p. ej., glomerulonefritis (p. 311).
• Cilindro de células blancas (fig. 7.2d) –pielonefritis, nefritis intersticial (p. 318), glo-
merulonefritis (p. 311)
• Cilindro granular (fig. 7.2e) –formado a partir de células tubulares degeneradas,
visto en enfermedades renales crónicas.
Cristales:
Los cristales son comunes en orina vieja o fría y pueden no significar patología. Son
importantes en los formadores de litiasis.
• Ácido úrico (fig. 7.2f) (p. 680) –cálculos de ácido úrico, síndrome de lisis tumoral.
• Oxalato de calcio (fig. 7.2g) –cálculos (p. 638), dieta con alto contenido de oxala-
to, intoxicación por etilenglicol.
• Cistina (fig. 7.2h) –observada en la cistinuria (p. 321).
Fig. 7.2. (a) Células blancas; B) cilindros hialinos; (C) cilindros de glóbulos rojos; (D) cilin-
dros de células blancas; (E) quiste granular; (F) cristales de ácido úrico; (G) cristales de oxa-
lato cálcico; (H) cristal de cistina.
Las imágenes (a) a (h) reproducidas de Turner et al., Oxford Textbook of Clinical Nephrology,
2005, con permiso de Oxford University Press.
Tabla 7.2. Causas de piuria estéril (número de glóbulos blancos pero estéril
en cultivo estándar)
Relacionadas con la infección No relacionadas con la infección
䊳 TB Cálculo Riñón poliquístico
ITU recientemente tratada Tumor del tracto renal Catéter reciente
ITU inadecuadamente tratada Necrosis papilar Embarazo
Requisito de cultivo exigente Nefritis tubulointersticial LES
Apendicitis, prostatitis, clamidia Cistitis química Medicamentos, p. ej., esteroides
Nefrología
Mujeres embarazadas:
Obtenga ayuda de expertos: la ITU durante el embarazo se asocia con parto pre-
maturo y restricción del crecimiento intrauterino. La bacteriuria asintomática debe
ser confirmada en una segunda muestra. Cualquier bacteriuria debe ser tratada con
un antibiótico. Consulte las recomendaciones locales para la elección de los antibió-
ticos (evitar el ciprofloxacino, el trimetoprim en el primer trimestre, la nitrofurantoí-
na en el tercer trimestre). Confirme la erradicación.
Hombres:
• Trate la ITU baja con un curso de 7 días de trimetoprim o nitrofurantoína (si
eGFR> 30).
• Si los síntomas sugieren prostatitis (dolor en la pelvis, genitales, espalda baja, nal-
gas) considere un período más largo (4 semanas) de fluoroquinolona (p. ej., cipro-
floxacino) debido a su capacidad de penetración en el líquido prostático.
• Si la ITU es superior o recurrente, remita para estudio urológico.
Pacientes sondados:
• Todos los pacientes con sonda son bacteriúricos. Enviar MSU solo si es sintomá-
tico. Los síntomas de ITU pueden ser no específicos/atípicos. Los síntomas posi-
bles incluyen la fiebre, en el costado/dolor suprapúbico, cambio en el patrón de
micción, vómitos, confusión, sepsis.
• Cambiar una sonda que lleve tiempo antes de comenzar un antibiótico.
• Consulte las directrices locales para la elección inicial de antibióticos. Cuando sea
posible y según la sensibilidad del cultivo, utilice un antibiótico de espectro estre-
cho según el cultivo y la sensibilidad antibiótica.
Tuberculosis del tracto urinario
• Una causa de piuria estéril: disuria, aumento de frecuencia, dolor suprapúbico pero
cultivo estándar negativo. Pregunte sobre malestar, fiebre, sudores nocturnos, pér-
dida de peso, dolor de espalda/costado, hematuria visible (p. 393).
• También puede causar nefritis intersticial (p. 318) y amiloidosis renal (p. 315). La
glomerulonefritis es rara.
• Diagnosticar por microscopia con técnicas ácidas-rápidas y cultivo de micobacte-
rias en una muestra matutina de la mitad de la micción y/o tejido del tracto uri-
nario.
• Tratar con rifampicina e isoniazida durante 6 meses en conjunción con pirazina-
mida y etambutol durante 2 meses (ver p. 394).
Los «Profetas del Pis»
Cuidado con las falacias, el engaño y el malabarismo de la ciencia del pis usada por
todos aquellos que pretenden el conocimiento de las enfermedades a través de la
orina. Thomas Brian 1655
Los textos medievales1 dan las siguientes máximas en relación con el cambio urina-
rio y la enfermedad:
• Orina blanca o de color paja = hígado y estómago débiles y fríos
• Orina espumosa = eructación (eructos)
• Orina turbia de color claro = mucosidad
• Círculo de plomo en la orina no densa = melancolía patológica
• Burbujas en la superficie = enfermedad de la cabeza
• Orina acuosa = enfermedad del amor
• Mareo, negro, orina apestosa = fatal
• Orina de color plomo = un útero en desintegración
• Orina turbia y con burbujas = asma o un latido irregular del corazón.
1 Uroscopia en la temprana Europa Moderna por Michael Stolberg, Routledge, 2016, p. 53-6.
! LRA 299
NOTICIAS (vea la contraportada interior)
Considerar la derivación de cuidados críticos
¿Existe algún
tipo de ¿Edema pulmonar? Referencia temprana a nefrología
complicación pues puede necesitar diálisis (ver abajo y p. 301)
con amenaza
de muerte?
K+ urgente (gas en la sangre venosa)
Tratar si > 6,5 mmol/L o cualquier cambio en el ECG (p. 301)
Nefrología
PA, PVY, relleno replete. Si se dan 2 L sin respuesta, busque ayuda de expertos
capilar, palpar vejiga (Nefro/Cuidados intermedios/UCI)
Vigile
• Balance de líquidos –considere sonda urinaria y producción horaria de orina
+
• K –controle la respuesta al tratamiento y al menos diariamente hasta que la creatinina
caiga
• Observaciones –mínimo cada 4 horas
• Lactato si hay signos de sepsis
• Creatinina diaria hasta (se demora ~ 24 horas después de la respuesta clínica)
Investigar
• Tira de orina (presonda) y cuantificación de cualquier proteinuria. Hematuria/
proteinuria puede sugerir enfermedad renal intrínseca
• Ecografía dentro de las 24 horas (a menos que la causa sea obvia o la mejora del LRA).
Pequeños riñones (< 9 cm) sugieren ERC. La asimetría puede sugerir una enfermedad
vascular renal
• Compruebe la función hepática (hepatorrenal)
• Compruebe las plaquetas –si es necesario filtrar sangre para hemólisis (SUH/PTT)
• Investigar si hay enfermedad renal intrínseca si está indicada: inmunoglobulinas,
paraproteína, complemento, autoanticuerpos (ANA, ANCA, anti-GBM)
Mantenimiento
• Tratar la sepsis (p. 792)
• Suspender la medicación nefrotóxica: AINE, i-ECAA, ARAII, aminoglucósidos
• Suspender los fármacos que pueden complicaciones: diuréticos (especialmente
ahorradores de K+), metformina, antihipertensivos
• Compruebe que todas las dosis de fármaco son apropiadas para la insuficiencia renal
• Considerar la gastroprotección (antagonista H2, IBP) y el apoyo nutricional
• Evitar el contraste radiológico (o riesgo: p. 319)
Refiriendo a nefrología
Solicite que el asesoramiento/revisión sea necesario debido a:
• LRA no responde al tratamiento
• LRA con complicaciones: K+, acidosis, sobrecarga de fluido.
• estadio 3 LRA (tabla 7.3).
• LRA con un equilibrio de fluido difícil (p. ej., hipoalbuminemia, insuficiencia cardía-
ca, embarazo).
• LRA por posible enfermedad renal intrínseca (tabla 7.4).
• LRA con hipertensión.
Saber: Tendencia de la creatinina y el resultado premórbido si está disponible, K+,
bicarbonato/lactato, Hb, recuento de plaquetas (+frotis), tira de orina (antes de la
sonda), observaciones clínicas (NOTICIAS) desde la admisión, la entrada/salida de
fluidos, los hallazgos de exámenes (hipo/hipervolemia). Resultado de ecografía,
comorbilidad (p. ej., DM), fármacos administrados (¿qué? ¿cuándo? ¿nefrotóxicos?)
Hiperpotasemia 301
Nefrología
Fig. 7.4. ECG que muestra hiperpotasemia grave; note el ensachamiento de los complejos QRS.
Cambios en el ECG: (En orden), onda T altas «en tienda»; aumento del intervalo PR;
onda P pequeña o ausente; complejo QRS ensanchado (fig. 7.4); patrón de onda
sinusoidal; asistolia. Existe considerable susceptibilidad interindividual.
䊳 No espere un resultado de laboratorio: utilice el analizador de gases sanguíneos.
䊳䊳 Trate5 K+ > 6,5 mmol/L o cualquiera con cambios de ECG (ECG para todos los
K+ > 6,0 mmol/L):
1. 10 ml de cloruro de calcio al 10%2 (o 30 ml de gluconato de calcio al 10%) vía
IV en una vena grande sobre 5-10 min, repetida si es necesario y si los cam-
bios del ECG persisten. Esto es cardioprotector (durante 30-60 min) pero no
trata el nivel de K+.
2. Insulina intravenosa (10 u de insulina soluble) en 25 g de glucosa (50 ml de glu-
cosa al 50% o 125 ml de glucosa al 20%). La insulina estimula la captación intra-
celular de K+, disminuyendo el K+ sérico por 0,65-1,0 mmol/L durante 30-60
min. Vigilar cada hora por la hipoglucemia (en el 11-75% de los pacientes tra-
tados) que pueden retrasarse en la insuficiencia renal (hasta 6 horas después
de la infusión).
3. El salbutamol también causa paso del K+ medio intracelular, pero se requieren
dosis altas (10-20 mg a través del nebulizador) y la taquicardia puede limitar el
uso (10 mg de dosis en cardiopatía isquémica, evitar en taquiarritmias).
4. El tratamiento definitivo requiere la extracción de K+. Si la patología subyacen-
te no puede corregirse, puede estar indicado el reemplazo renal. La transfe-
rencia segura a un sitio externo a la unidad renal requiere K+ < 6,5 mmol/L;
comentar con el equipo renal y de cuidados críticos.
El uso de bicarbonato sódico intravenoso es controvertido con evidencia insuficien-
te de que tiene algún beneficio adicional sobre las etapas de tratamiento enumera-
das aquí. Hay un riesgo de sobrecarga de sodio y de fluido. Las dosis de bolo de
8,4% de bicarbonato de sodio no deberían usarse.
Nefrología
• Estado actual: Los pacientes pueden presentar una ERC sintomática si la TFG <
30. Incluye los síntomas de sobrecarga de fluido (disnea, edema periférico), ano-
rexia, náuseas, vómitos, inquietud de piernas, fatiga, debilidad, prurito, dolor óseo,
amenorrea, impotencia.
Examen
• Periferia: Edema periférico. Signos de enfermedad vascular periférica o neuropatía.
¿Hay una erupción (vasculítica)? Tofo gotoso. Enfermedad articular. Fístula arteriove-
nosa (frémito, soplo, ¿punción con aguja reciente?). Signos de inmunosupresión: more-
tones de esteroides, malignidad de la piel.Temblor/encefalopatía urémica si TFG < 15.
• Cara: Anemia, xantelasma, tinte amarillo (uremia), ictericia (hepatorrenal), hiper-
trofia de las encías (ciclosporina), cushingoide (esteroides), edema periorbital (sín-
drome nefrótico), piel tensa/telangiectasia (esclerodermia), lipodistrofia facial (glo-
merulonefritis).
• Cuello: PVY para el estado de fluido, línea tunelada (si se elimina, busque una
pequeña cicatriz sobre la yugular interna, y una cicatriz más grande en el área del
«bolsillo del seno»), cicatriz de paratiroidectomía, linfadenopatía.
• Cardiovascular: PA, esternotomía, cardiomegalia, estigmas de endocarditis. Si insufi-
ciencia cardíaca derecha/regurgitación tricuspídea, la PVY no refleja el estado de
fluido.
• Respiratorio: Edema o derrame pulmonar.
• Abdomen: Catéter de diálisis peritoneal o cicatrices de catéteres anteriores
(pequeñas cicatrices justo debajo del ombligo y a un lado de la línea media), sig-
nos de trasplante previo (cicatriz, injerto palpable), riñones poliquísticos que rebo-
tan a la palpación ± hígado palpable.
Estudios
• Sangre: Urea y electrolitos (comparar con anterior), Hb (anemia normocrómica
normocítica), glucosa (DM), Ca2 +,VO43-, PTH (osteodistrofia renal). Investiga-
ción dirigida de la enfermedad renal intrínseca: ANA, ANCA, anticuerpos antifos-
folípidos, paraproteína, complemento, crioglobulina, anti-GBM, serología de la
hepatitis, anti-PLA2R (nefropatía membranosa). Nota: La VSG no es útil dado que
en ERC y estados proteinúricos.
• Orina: Tira renal, cultivo y antibiograma, A:CR o P:CR (p. 294), Bence Jones.
• Imágenes: Ecografía para el tamaño, simetría, anatomía, diferenciación corticome-
dular y para excluir la obstrucción. En la ERC los riñones pueden ser pequeños
(< 9 cm), excepto en trastornos de infiltración (amiloide, mieloma), riñón poliquís-
tico y DM. Si aparece asimétrico, considerar enfermedad renovascular. Las cicatrices
se pueden ver en ultrasonidos, pero los escáneres de isótopos son más sensibles.
• Histología: Considere la biopsia renal (p. 310) en enfermedad progresiva, síndrome
nefrótico, enfermedad sistémica, LRA sin recuperación. Es improbable que la biop-
sia cambie el tratamiento si GFR estable y P:CR < 150. La DM con neuropatía/reti-
nopatía puede no necesitar biopsia a menos que sea atípica, es decir, nefrótica,
hematuria, otros síntomas sistémicos.
tada
• proteinuria A:CR > 30 mg/mmol con hematuria
• eTFG decreciente:
– eGFR 25% + categoría de TFG (tabla 7.5)
– eGFR sostenido 15% en 12 meses
• PA mal controlada a pesar de 4 fármacos antihipertensivos a dosis terapéuticas
• causa rara o genética conocida o sospechada de ERC.
Tratamiento para disminuir la progresión de la enfermedad renal
PA: La presión arterial sistólica es < 140 mmHg (rango 120-139 mmHg) y diastólica
< 90 mmHg. Si DM o A:CR > 70 entonces el objetivo sistólico es < 130 mmHg (rango
120-129) y diastólica < 80 mmHg
Sistema renina-angiotensina: Tratamiento con un antagonista del sistema renina-angioten-
sina (i-ECA, ARAII) a:
• DM y A:CR > 3 mg/mmol.
• Hipertensión y A:CR> 30 mg/mmol.
• Cualquier ERC con A:CR > 70 mg/mmol.
No combinar antagonistas renina-angiotensina debido al riesgo de hiperpotasemia e
hipotensión. Compruebe K+ y la función renal antes, y 1-2 semanas después de iniciar el
tratamiento o cambiar la dosis. Suspender si K+ > 6 mmol/L, eTFG > 25%, o creatini-
na > 30%: excluir otras posibles causas y considerar una dosis más baja.
Control glucémico: Objetivo HbA1c de ~ 53 mmol/mol (7,0%) a menos que haya riesgo
de hipoglucemia, comorbilidad o esperanza de vida limitada.
Estilo de vida: Dé consejos sobre ejercicio, peso saludable y dejar de fumar.
La ingesta de sal debe reducirse a < 2 g de sodio/día ( 5 g de cloruro de sodio/día).
Tratamiento de las complicaciones renales de la ERC
Anemia: Compruebe Hb cuando eTFG < 60. Investigar (especialmente si es anémico con
eTFG> 30) y tratar otras deficiencias: hierro (glóbulos rojos hipocrómicos > 6%, satura-
ción de transferrina < 20%, ferritina < 100), B12 y folato. No pase por alto la pérdida cró-
nica de sangre. La terapia con hierro puede ser administrada IV. Considere el tratamien-
to con un agente estimulante eritropoyético (ESA, «Epo») si Hb < 110 g/L y es proba-
ble que se beneficie en términos de función y calidad de vida. La aplasia pura de glóbu-
los rojos es una complicación muy rara y grave del tratamiento con ESA debido a anti-
cuerpos antieritropoyetina y por lo general causa Hb < 60 g/L: excluir causas de anemia
primero.
Acidosis: Considere los suplementos de bicarbonato de sodio para pacientes con eTFG
< 30 y bicarbonato sérico bajo (< 20 mmol/L). Precaución en pacientes con hiperten-
sión y sobrecarga de fluido debido al componente de sodio.
Edema: Restringir la ingesta de líquido y sodio. Pueden ser necesarias altas dosis de diu-
réticos de asa. La combinación de un diurético de asa y tiazídico puede tener un pode-
roso efecto: la excreción distal de sodio de los túbulos (y su inhibición con una tiazida)
es más significativa cuando ya está tratado con un diurético de asa (fig. 7.13). El trata-
miento diurético debe solo administrarse con un cuidadoso control del estado de fluido
y la función renal.
Nefrología
Dieta: El consejo dietético experto debe estar disponible en relación con la ingesta de
proteínas, K+ si hiperpotasémico y restricción de fosfato (p. ej., productos lácteos).
Tratamiento de otras complicaciones de la ERC
Enfermedad cardiovascular: la ERC confiere riesgo de enfermedad cardiovascular debi-
do a la PA, rigidez vascular, inflamación, estrés oxidativo y función endotelial anormal
(el riesgo CV es a menudo mayor que el riesgo de fallo renal).
• Antiplaquetarios (dosis baja de aspirina) para ERC con riesgo de eventos ateroscleró-
ticos a menos que el riesgo de sangrado pese más que el beneficio. El beneficio sobre
la mortalidad no está claro en la ERC.
• Atorvastatina 20 mg (y mayor si TFG > 30) para prevención primaria y secundaria de
las enfermedades cardiovasculares.
• La ERC no debe afectar al tratamiento para la insuficiencia cardíaca, pero la monitori-
zación de la TFG y K+.
• TFG < 60 puede afectar los valores de troponina y BNP. Interpretar los resultados con
cautela con consideración de la TFG.
Preparación para la terapia de reemplazo renal (TRR)
La planificación de la TRR debe comenzar en la ERC progresiva cuando el riesgo de insu-
ficiencia renal es 10-20% dentro de un año. La remisión a nefrología menos de 1 año
antes de la TRR se considera una remisión tardía.
Todos los pacientes adecuados deben ser listados para un trasplante de donante falle-
cido 6 meses antes del inicio anticipado de la TRR. Todos los pacientes adecuados deben
ser informados acerca de las ventajas de un trasplante de riñón vivo preventivo y de los
esfuerzos por encontrar donante (p. 308).
Prescripción en CKD
䊳 Nunca prescribir en insuficiencia renal antes de verificar cómo la administración
debe ser alterada debido a un TFG. Esto se determinará en gran medida por el
grado en que un fármaco se excreta por vía renal. Esto es significativo para amino-
glucósidos, penicilinas, cefalosporinas, heparina, litio, opiáceos y digoxina. Las dosis de
carga no deben ser cambiadas.
Si se requiere precisión para la dosificación (p. ej., quimioterapia), entonces la TFG
no debe ser estimada a partir de la creatinina: se debe usar cistatina C o realizar una
medida directa de la TFG.
Si el paciente está recibiendo reemplazo renal (hemofiltración, diálisis peritoneal o
hemodiálisis), la modificación de la dosis depende de la medida en que se elimine un
fármaco de la circulación por diálisis/filtración.
La mejor guía de prescripción para consultar es la Base de Datos/Manual de Medi-
camentos Renales (www.renaldrugdatabase.com), un recurso inestimable que detalla
la modificación de la dosis en la insuficiencia renal y con reemplazo renal de casi cual-
quier fármaco que usted pudiera desear utilizar. Todos los hospitales deben tener
acceso: hable con su farmacéutico.
Nefrología
com, p. 305). Cuidado con el reemplazo de fluido en la sepsis: guiarse por el examen
clínico y peso objetivo. Si no está seguro, obtenga ayuda de expertos. Si depleción
de volumen, proporcione 250 ml en bolos de cristaloide (que no contiene K+)
durante 15 minutos con una observación estrecha. Evite los fluidos de manteni-
miento en aquellos que normalmente tienen una restricción de líquidos. No use una
línea de diálisis o una fístula para el acceso IV –si es necesaria una cánula, preferen-
temente utilizar la parte dorsal de la mano, y salve otros vasos para futuras fístulas.
5. La cirugía necesita un anestesista experto y estrecho consejo de nefrología.
Objetivo de pre-op K+ < 5,5 mmol/L (< 5,0 mmol/L si la cirugía mayor con ries-
go de destrucción de tejidos/hemólisis). Compruebe K + urgentemente postopera-
torio (gasometría venosa en la recuperación). En cirugía electiva, planee la diálisis
antes y después de la operación.
Advertencia: no hay normalidad
Diez años es mucho tiempo. Durante esos diez años, o poco más de 3.560 veces,
estuve enganchado a una máquina de diálisis peritoneal en la que me sometí a nueve
horas y cincuenta minutos durante la terapia nocturna. Posteriormente aprendí a hacer
un montón de crucigramas y leí una ridícula cantidad de libros. En diez años tuve solo
tres incidentes: una hernia inguinal debido a pensar que podía mover un sofá (no pude),
una paratiroidectomía (mis rodillas fueron mucho más felices después) y un desafortu-
nado brote de peritonitis (una vez fue suficiente). Estadísticamente hablando, soy una
anomalía: la vida «media» de un paciente de diálisis peritoneal es de cuatro años.
Es cierto que inicialmente no asumí la necesidad de diálisis. Después de haber
tenido éxito con un trasplante, un regreso a la diálisis me parecía un fracaso enor-
me. No quería tener la molestia del tratamiento. No quería montones de cajas que
atestaran nuestra casa y sobre todo, yo no quería un catéter de DP sobresaliendo
de mi vientre. Pero la vida da muchas vueltas y lo que originalmente se creía que era
inaceptable, gradualmente se hizo tolerable, aunque necesité tiempo, atención y
n apoyo para aceptarlo. Necesité encontrarme en forma y admitir que la vida de diá-
lisis, aunque difiere de existir con un trasplante, podría ser bien vivida.
Natasha Boone, autora e ilustradora, www.nomalnotnormal.com
El hombre en una canoa roja que salvó un millón de vidas
La mayoría nos trasladamos a trabajar cada día impulsados por motivos que prefe-
riríamos no mirar demasiado profundamente. Pero un nefrólogo usaba una canoa
roja para viajar todos los días desde su casa flotante hasta el hospital. Podría haber
sido un hombre muy rico, pero el médico Belding Scribner regaló su invención y
continuó su modesta existencia.
Inventó la derivación de Scribner –una U de teflón en la conexión de una arteria
a una vena, permitiendo hemodiálisis como algo que podría repetirse tantas veces
como fuera necesario. Antes de Scribner, tenían que ser penosamente insertados
tubos de vidrio en los vasos sanguíneos, lo que provocaba daños y el procedimien-
to de hemodiálisis solo podía hacerse unos pocos ciclos. Clyde Shields fue su primer
paciente en 1960, y explicó que su primer tratamiento «le extrajo tantos residuos
de los que había almacenado en su cuerpo que fue como si se encendiera la luz en
la oscuridad». Scribner convirtió algo que tenía una mortalidad del 100%, en una
condición con una supervivencia del 90%.
El 19 de junio de 2003, su canoa fue encontrada a flote pero vacía. Como en los
antiguos entierros de indios en canoas encontrados en Wiskam, que han sido puli-
das hasta un lustre inimaginable por la acción de las arenas movedizas alrededor de
la Isla de los Muertos, nosotros pulimos y acariciaríamos la imagen de este hombre
que dio todo para ayudar a otros.
Pronóstico
Rechazo agudo < 15%, supervivencia del injerto a 1 año > 90%. Pérdida del injerto a 309
más largo plazo ~ 4%/año. Factores que contribuyen a la pérdida del injerto:
• Factores del donante: edad, comorbilidad, vida/fallecido, DMC/DCD.
• Rechazo.
• Infección.
• PA/ECV.
• Enfermedad renal recurrente en el injerto.
El resultado más común es la muerte con un trasplante funcional (es decir, el trasplante
«sobrevive» al paciente).
Cuando un paciente con un trasplante renal presenta…
1. Comente todo con la unidad local de trasplante renal: estarán encantados de ase-
sorar, revisar, transferir y dar seguimiento a cualquier receptor de trasplante renal.
Nefrología
2. ¿Qué es el eTFG/creatinina? ¿Cómo se compara esto con los resultados ante-
riores? Si usted no tiene ninguno, pregunte a la unidad de trasplante.
3. Examinar y tratar cualquier causa reversible de la LRA. Evaluación de fluidos (p. 300)
es importante –si no está seguro, obtenga ayuda de expertos. La corrección de la
depleción de volumen y el tratamiento de cualquier sepsis debe ser rápido.
4. Considerar las infecciones virales/oportunistas y las presentaciones atípicas debi-
das a la inmunosupresión, p. ej., CMV, Pneumocystis jirovecii.
5. No suspenda ningún medicamento inmunosupresor. Si el paciente no puede tolerar
la medicación oral, entonces la inmunosupresión se debe dar NG o convertirse
en dosis IV (la conversión depende del fármaco: consulte a su farmacéutico).
6. Compruebe si hay interacciones medicamentosas: antibióticos macrólidos (eri-
tromicina, claritromicina) puede causar toxicidad del inhibidor de la calcineurina.
7. Dosis de todos los fármacos según la función renal: penicilinas, cefalosporinas,
aminoglucósidos, insulina, opiáceos y heparina de bajo peso molecular.
8. Consulte con la unidad de trasplante antes de administrar heparina de bajo peso
molecular para la profilaxis de TVP: pueden querer hacer una biopsia de trasplante.
Fig. 7.8. «Alive» de Natasha Boone. Fig. 7.9. Garabatos tras el trasplante de
Por primera vez en once años no tengo Natasha Boone. Así es como veo el trasplan-
tubos en mi cuerpo. te.
310 Glomerulonefritis
El término glomerulonefritis (GN) abarca una serie de condiciones que:
• son causadas por patología en el glomérulo
• presentan proteinuria, hematuria o ambas
• se diagnostican en una biopsia renal
• causan ERC
• pueden progresar a insuficiencia renal (excepto enfermedad de cambio mínimo).
Los nombres de las enfermedades provienen de la apariencia histológica (p. ej., glome-
rulonefritis membranosas), o la afección sistémica asociada (p. ej., nefritis lúpica).
¿Nefrótico o nefrítico?
Las glomerulonefritis se presentan clásicamente en un espectro que va desde nefrosis
(proteinuria por patología podocítica, p. 312) a nefritis (hematuria debida al daño infla-
matorio, p. 311). Esto se ilustra en la fig. 7.10. Sin embargo, si una GN causa cicatrización,
entonces puede ocurrir proteinuria. La proteinuria puede complicar a largo plazo cual-
quier GN, incluyendo aquellos que son clásicamente nefríticos.
Nefrología
Hematuria
Proteinuria
Fig. 7.10. El espectro de la enfermedad glomerular que va desde la proteinuria (nefrosis) hasta
la hematuria (nefritis).
Figura adaptada de Turner et al., Oxford Textbook of Clinical Nephrology, 2015, con permiso de Oxford
University Press.
Investigación. Evalúe el daño y la causa potencial. Sangre: Sistemático de sangre, urea
y electrolitos, PFH, PCR; inmunoglobulinas, electroforesis, complemento (C3, C4); auto-
anticuerpos (p. 553): ANA, ANCA, anti-dsDNA, anti-GBM; hemocultivo, anticuerpos
antiestreptococo (ASTO), serología de la hepatitis. Orina: Urocultivo y antibiograma, pro-
teína de Bence Jones, A:CR/P:CR (p. 295), cilindros hemáticos (p. 295). Imágenes: RXT
(hemorragia pulmonar), ultrasonido renal (tamaño y anatomía para la biopsia). Biopsia
renal: Requerida para el diagnóstico.
Biopsia renal
Preprocedimiento: PA (< 160/95 o según el protocolo local), sistemático de sangre (Hb
> 9, plaquetas > 100), coagulación (TP y APTT < 1,2), G y S. Consentimiento infor-
mado por escrito incluyendo posibles complicaciones: leve dolor de espalda/costado,
hematuria visible (~5%, normalmente desaparece), sangrado, necesidad de transfu-
sión (~1%), intervención angiográfica (~ 0,5%). Suspender los anticoagulantes (aspi-
rina 1 semana, warfarina a TP < 1,2, heparina de bajo peso molecular 24 h).
Postprocedimiento: Reposo en cama por un mínimo de 4h. Vigilar el pulso, la presión
arterial, los síntomas y color de la orina. No envíe a casa hasta que la hematuria
macroscópica desaparezca. La aspirina o la warfarina se pueden reiniciar el día
siguiente si el procedimiento no se complica.
Resultado: El examen de las lesiones glomerulares proporciona diagnóstico de la GN.
Incluye: proporción de los glomérulos implicados (uso focal vs. difuso), cuánto de cada
glomérulo está afectada (segmentaria vs. global), hipercelularidad, esclerosis. La inmu-
nohistología para depósitos (Ig, cadenas ligeras, complemento). La microscopia elec-
trónica para ultraestructura: ubicación precisa de los depósitos, apariencia podocito.
También examinar el intersticio tubular (atrofia, fibrosis, inflamación) y cualquier vaso.
Tratamiento. Tratamiento general como para ERC (p. 304-5) incluyendo control de
PA e inhibición del eje renina-angiotensina. El tratamiento específico que incluye inmu-
nosupresión depende del diagnóstico histológico, la gravedad de la enfermedad, la pro-
gresión de la enfermedad y la comorbilidad.
Nefrología
ción de IgA en la piel/articulaciones/intestino, además del riñón. Presentación: Erup-
ción purpúrica en superficies extensoras (típicamente en las piernas, p. 720), poliar-
tritis migratoria, dolor abdominal (sangrado GI) y nefritis. Diagnóstico: Generalmente
clínico. Confirmado con IF positivo para IgA y C3 en la piel. La biopsia renal es idén-
tica a la nefropatía por IgA. Tratamiento: La enfermedad renal se trata como una
nefropatía por IgA. Los esteroides pueden usarse para la afectación intestinal.
GN postestreptocócica
Ocurre después de una infección de garganta (~2 semanas) o de piel (~3-6 sema-
nas). El antígeno estreptocócico aparece en los depósitos del glomérulo que con-
duce a la formación de complejos inmunes e inflamación. Presentación: Varía de la
hematuria a la nefritis aguda: hematuria, edema, PA y oliguria. Diagnóstico: Eviden-
cia de infección estreptocócica: ASLO, anti-DNAse B. También C3. Tratamiento:
De soporte, antibióticos de apoyo para eliminar las bacterias nefritogénicas.
Enfermedad de la membrana basal antiglomerular (anti-GBM)
Anteriormente conocida como enfermedad de Goodpasture. Raro. Autoanticuer-
pos contra el colágeno tipo IV que está presente en las membranas basales glome-
rulares y alveolares. Presentación: Enfermedad renal (oliguria/anuria, hematuria, LRA,
insuficiencia renal) y enfermedad pulmonar (hemorragia pulmonar en 50-90% .·. dis-
nea, hemoptisis). La dependencia de la diálisis en el inicio y el medias lunas en la
biopsia predicen mal pronóstico. Diagnóstico: Anti-GBM en la circulación/riñón
(fig. 7.11). Tratamiento: Intercambio plasmático, corticosteroides y ciclofosfamida.
GN rápidamente progresiva
Cualquier GN agresiva, progresando rápidamente a insuficiencia renal durante días
o semanas. Las causas incluyen vasculitis de vaso pequeño/ANCA (p. 314), nefritis
lúpica (p. 314), enfermedad anti-GBM. Otras GN pueden «transformarse» para con-
vertirse rápidamente en progresivas incluyendo IgA, membranosa. Diagnóstico: Las
roturas en el GBM permiten un influjo de las células inflamatorias de modo que se
observan medias lunas en la biopsia renal (se pueden referir como una GN con
medias lunas) (fig. 7.12). Tratamiento: Corticosteroides y ciclofosfamida. Otros trata-
mientos dependen de la etiología; p. ej., intercambio plasmático de vasculitis anti-
GBM/ANCA, posible papel de los anticuerpos monoclonales en la nefritis lúpica.
Fig. 7.11. Inmunofluorescencia para IgG, Fig. 7.12. GN de medias lunas: una prolifera-
mostrando tinción lineal característica de la ción de células epiteliales y macrófagos con
enfermedad anti-GBM. ruptura de la cápsula de Bowman.
Reproducido de Barratt y col., Oxford Desk Refe- Cortesía del Dr. I. Roberts.
rencia: Nefrología, 2008, con permiso Oxford Uni-
versity Press.
Nefrología
Es la glomerulonefritis más común observada en la biopsia renal. Primaria (idiopáti-
ca) o secundaria (VIH, heroína, litio, linfoma, cualquier causa de masa del
riñón/nefronas, cicatrización renal debido a otra glomerulonefritis). Todos en riesgo
de ERC progresiva e insuficiencia renal: proteinuria empeora el pronóstico. La enfer-
medad recurrirá en 30-50% de los trasplantes de riñón.
Diagnóstico: Los glomérulos tienen cicatrices de ciertos segmentos (es decir, escle-
rosis focal). Puede pasarse por alto la enfermedad temprana si < 10 glomérulos en
la muestra de biopsia.
Tratamiento: i-ECA/ARAII y control de la presión arterial en todos. Corticosteroides
solo en enfermedad primaria (idiopática): remisión en ~ 25%, remisión parcial en
hasta 50%. Los inhibidores de la calcineurina pueden considerarse de segunda línea.
El intercambio plasmático y rituximab han sido utilizados para la recurrencia en los
trasplantes.
Nefropatía membranosa
~ 25% del síndrome nefrótico adulto. Primario (idiopático) o secundario a:
• neoplasia maligna: pulmón, mama, GI, próstata, hematológico
• infección: hepatitis B/C, estreptococos, malaria, esquistosomiasis
• enfermedad inmunológica: LES, artritis reumatoide, sarcoidosis, síndrome de Sjögren
• fármacos: oro, penicilamina.
Enfermedad indolente con remisión espontánea en ~ 25%.
Diagnóstico: Anticuerpo contra el receptor A2 anti-fosfolipasa en 70-80% de la
enfermedad idiopática. MBG difusamente engrosada debido a depósitos subepitelia-
les (IgG4 dominante en idiopática, otra IgG en la enfermedad secundaria). «Picos»
en la tinción de plata.
Tratamiento: i-ECA/ARAII y control de la presión arterial en todos. Inmunosupresión
(Régimen de «Ponticelli»: corticosteroides más ciclofosfamida/clorambucilo) solo en
aquellos con alto riesgo de progresión (proteinuria > 4 g sin respuesta a i-
ECA/ARAII durante 6 meses, creatinina en 30% en 6-12 meses, pero eTFG toda-
vía > 30). El papel de la inmunosupresión dirigida en los positivos para anticuerpos
contra el receptor antifosfolipasa A2, sigue siendo desconocido. En la enfermedad
secundaria, la proteinuria puede remitir con el tratamiento de la causa subyacente.
Glomerulonefritis membranoproliferativa
~ 10% del síndrome nefrótico adulto (mayor en los países de ingresos bajos y
medianos debido a la infección). Dividido en:
• Asociadas a inmunocomplejos: impulsados por complejos inmunes aumentados o
anormales que se depositan en el riñón y activan el complemento. Una causa sub-
yacente puede encontrarse en la mayoría de los casos, p. ej., infección, crioglobu-
linemia, gammopatía, autoinmunidad.
• Glomerulopatía C3: debido a un defecto genético o adquirido en la vía alternativa
del complemento, p. ej., el factor nefrítico C3. La disfunción progresiva del riñón es
común.
Diagnóstico: Glomerulonefritis proliferativa con depósitos electrodensos. El depósito
de inmunoglobulina distingue la enfermedad asociada al complejo inmune de la glo-
merulopatía C3.
Tratamiento: i-ECA/ARAII y control de la presión arterial en todos. Causa subyacen-
te en la inmunidad-enfermedad compleja. Ensayo de inmunosupresión si no se
encuentra ninguna causa subyacente y disminución progresiva de la función renal. Se
esperan tratamientos para bloquear o modificar la activación de C3.
Tratamiento:
• El control intensivo de la DM previene la microalbuminuria y reduce el riesgo de
progresión a la macroalbuminuria («aumento severo de la albuminuria») = A:CR
> 30 mg/mmol. HbA1c de 53 mmol/mol (7%) reduce el desarrollo de todas las com-
plicaciones microvasculares. Sin embargo, menos impacto en el riesgo de ECV y los
resultados renales «duros» incluyendo progresión a la insuficiencia renal. Considere el
riesgo de hipoglucemia.
• PA < 130/80. Use i-ECA/ARAII para protección CV y renal por encima del control de
la PA. Puede prevenir la progresión de normoalbuminuria a microalbuminuria a macro-
albuminuria en DM hipertensiva. (Beneficio menos claro en DM normotensiva pero
recomendado si A:CR> 30 mg/mmol). No se han realizado estudios que compararen
directamente i-ECA con ARAII en DM pero son equivalentes fuera de DM. Si tos con
i-ECA cambiar a ARAII. No hay beneficio para la terapia dual y el riesgo de K+. Se
esperan datos sobre inhibidores de renina directos (p. ej., aliskiren).
• Restricción de sodio a < 2 g/día ( 5 g de cloruro de sodio/día).
• Estatinas para reducir el riesgo CV (p. 305). Beneficio poco claro una vez en diálisis: no
iniciar si no es necesario y no interrumpir si se tolera.
Nefritis lúpica
El LES es una enfermedad autoinmune sistémica con anticuerpos contra componentes
nucleares, p. ej., ADN de doble cadena (ds). La deposición de complejos de anticuerpos
causa inflamación y daño tisular. Presentación: Erupción cutánea, fotosensibilidad, úlceras,
artritis, serositis, efectos del SNC, citopenias y enfermedad renal. La nefropatía es fre-
cuente (50% en el primer año y 75% en general). Puede presentarse como nefritis
(p. 310) o nefrosis (p. 312). Diagnóstico: Clínico. Perfil del anticuerpo: ANA es sensible pero
no especifica. Anti-dsDNA tiene una especificidad de 75-100% y los títulos se correlacio-
nan con la actividad de la enfermedad. Considere la biopsia si A:CR> 30, P: CR> 50.
Tratamiento: Depende de la clase histológica. Las clases I y II muestran cambios leves con
poco riesgo de progresión de la enfermedad renal: i-ECA/ARAII para la protección renal
e hidroxicloroquina para la enfermedad extra-renal. Las clases III-V requieren inmunosu-
presión: micofenolato, glucocorticoides, ciclofosfamida, rituximab.
Vasculitis de vasos pequeños
Existen múltiples sistemas de clasificación. El fenotipo clínico y el subtipo ANCA son
importantes. La vasculitis asociada a ANCA (AAV) se produce con o sin especificidad para
la proteinasa 3 (PR3) y mieloperoxidasa (MPO). AAV se presenta clásicamente a una edad
avanzada (> 60 años) y representa el 20% de los hallazgos de biopsia > 80 años. Pregunte
sobre letargo, fiebre, mialgia, anorexia («¿Cuándo te sentiste bien por última vez?»). Pre-
gunte acerca de los síntomas respiratorios e investigue la hemorragia pulmonar. Diagnós-
tico: Clínica + ANCA + biopsia: GN rápidamente progresiva (p. 311) sin depósitos inmu-
nes («pauci-inmune»). Tratamiento: Glucocorticoides a dosis alta más ciclofosfamida o
rituximab. Intercambio de plasma si presenta insuficiencia renal o hemorragia pulmonar.
Mieloma (véase pág. 362)
Enfermedad renal asociada hasta en un 40%: obstrucción tubular debida a cilindros de
cadenas ligeras (riñón de mieloma); deposición de Ig/cadenas ligeras en el glomérulo
(causa proteinuria); hipercalcemia; infección del tracto renal por inmunoparesia. Trata-
miento: Adecuada hidratación, bisfosfonatos para la hipercalcemia (cuidado si TFG < 30),
tratamiento antimieloma incluyendo glucocorticoides. No está claro si hay un beneficio
en la eliminación de cadenas ligeras por intercambio de plasma o por hemodiálisis de
poros grandes.
Amiloide 315
El plegamiento patológico de proteínas conduce a acumulación extracelular y disfunción
de órganos incluyendo la enfermedad renal. Clasificación según proteínas: cadenas lige-
ras en mieloma = AL amiloide; amiloide sérica A en inflamación crónica = amiloide AA;
además raros tipos familiares. Diagnóstico: Tinción de rojo Congo con biopsia, escaneo
SAP. Tratamiento: Condición subyacente. Las nuevas terapias apuntan a la producción,
agregación y a la degradación del amiloide
Síndrome urémico hemolítico (SUH)
Se presenta con anemia hemolítica microangiopática (Hb < 100 g/L, LDH, haptoglo-
bina, fragmentos en frotis), plaquetas y LRA debido a trombosis de los capilares glo-
merulares (microangiopatía). En niños, principalmente asociados con colitis hemorrágica
debida a E. coli productora de toxina Shiga (STEC), p. ej., O157: H7. SUH atípico causa-
do por la desregulación/activación descontrolada del complemento = ~ 5% de SUH.
Nefrología
Puede ser precipitado por el embarazo. Diagnóstico: Tríada de anemia hemolítica, pla-
quetas y LRA con hematuria/proteinuria. Evidencia de STEC. Buscar anomalías en la vía
del complemento: niveles de C3, C4, factores H e I, cribado de la mutación del comple-
mento. Tratamiento: STEC-SUH: de apoyo. SUH: infusión/intercambio de plasma, eculizu-
mab (anti-C5) en Inglaterra a través del centro nacional aSUH, Newcastle-Upon-Tyne.
Púrpura trombocitopénica trombótica (PTT)
Los síntomas se superponen con el SUH (ver párrafo anterior). Pentalogía: Anemia
microangiopática hemolítica, plaquetas, LRA, síntomas neurológicos (cefalea, parálisis,
convulsiones, confusión, coma) y fiebre. Debido a una deficiencia congénita de, o anti-
cuerpos adquiridos a, la proteasa ADAMTS13, que normalmente escinde multímeros de
von Willebrand (VWF). Los multímeros de VWF grandes causan la agregación plaqueta-
ria y la deposición de fibrina en pequeños vasos, lo que conduce a una microangiopatía
trombótica multisistémica. Diagnóstico: Clínico. Actividad ADAMTS13. Tratamiento: 䊳 PTT
es una emergencia hematológica: pedir ayuda a un experto. La infusión/intercambio de
plasma elimina anticuerpos/sustituye ADAMTS13 y puede salvar la vida. Corticosteroi-
des. Considere rituximab para los no respondedores/recaída.
Enfermedad renovascular aterosclerótica
Parte de una enfermedad vascular ateromatosa sistémica, incluyendo enfermedades car-
diovascular, cerebrovascular y enfermedad vascular periférica (preguntar acerca de la
claudicación, comprobar los pulsos del pie), PA y lípidos. Conduce a la regulación posi-
tiva de la renina-angiotensina que causa la resistencia al tratamiento PA y/o un dete-
rioro de la función renal en i-ECA/ARAII. Insuficiencia cardíaca aguda (sin deterioro del
VI en el eco) con edema pulmonar fulminante hasta en un 10%. Diagnóstico: > 1,5 cm
de asimetría en el tamaño renal (pero sensibilidad y especificidad). Los estudios de
Doppler de los riñones nativos no son consistentemente precisos para el diagnóstico.
Angiografía TC o MR (evita contraste). Tratamiento: Modificación de los factores de ries-
go CV: estatina, aspirina, tratamiento antihipertensivo. Históricamente, i-ECA/ARAII fue-
ron considerados contraindicados debido a la preocupación por la perfusión renal
dependiente de la renina y el deterioro de la función renal con este tratamiento. Sin
embargo, se observa mortalidad con i-ECA/ARAII. eTFG < 25% «sacrificado» por
un mejor resultado cardíaco y renal a largo plazo. Grandes estudios aleatorizados con-
trolados de tratamiento médico versus revascularización no han mostrado una ventaja a
la revascularización .·. solo se ha considerado en edema pulmonar súbito, insuficiencia
renal rápida/oligoanúrica.
Crisis en esclerodermia renal
Ocurre en ~ 5% de la esclerosis sistémica. riesgo con: enfermedad difusa, anti-RNA
polimerasa III y < 2 años del diagnóstico. Diagnóstico: Hipertensión acelerada (nueva >
150/85 mmHg) y LRA (eTFG por > 30%). Biopsia: glomérulos colapsados, engrosa-
miento de las arteriolas en piel de cebolla. Tratamiento: i-ECA/ARAII. Vasodilatadores IV
para resistencia vascular y para la isquemia digital. Cuidado con -bloqueantes dado
que FC compensa para ictus. Puede recuperar la función renal después de muchos
meses.
Nefropatía de células falciformes
El HbSS está asociado con hiperfiltración (creatinina inferior a la esperada) y albuminu-
ria. Aunque hasta el 75% de los pacientes jóvenes tienen algún grado de ERC, la pro-
gresión a insuficiencia renal suele asociarse con otro desencadenante, p. ej., necrosis papi-
lar. Diagnóstico: Clínico. Biopsia solo si busca otro diagnóstico, p. ej., LRA sin causa clínica,
síndrome nefrótico. Tratamiento: i-ECA/ARAII. Datos inconsistentes de hidroxiurea y
hiperfiltración. Mortalidad en diálisis: objetivo de trasplante.
Na+
HCO3-
Fosfato Na+
Cápsula Azúcar CI-
de Bowman Aminoácidos
K+
H+
Córtex Na+
Médula k+
2CI-
Nefrología
Conducto de
recolección
Túbulo proximal
Asa ascendente gruesa
Túbulo distal Asa de Henle
Vejiga
Conducto colector cortical
Fig. 7.13. La nefrona se divide en segmentos (túbulo proximal, asa ascendente gruesa de
Henle, túbulo distal, conducto colector) con movimientos clave de solutos (rojo).
Tabla 7.8. Resumen de los trastornos tubulares y la acción diurética dentro
de la nefrona (RTA = Acidosis tubular renal)
Segmento de la nefrona Movimiento de solutos Patología tubular Diurético
Túbulo contorneado Reabsorción: Na+, Síndrome de Fanconi Manitol
proximal HCO3-, fosfato, Proximal (tipo 2) Inhibidor anhídrido
azúcares, aminoácidos RTA carbónico
Asa ascendente Reabsorción: Na+, Síndromes de Bartter Asa
gruesa K+, Cl-
Túbulo contorneado Reabsorción: Na+, Síndrome de Gitelman Tiazida
distal K+, Cl-
Conducto de Excreción: K+, H+ Distal (tipo 1) RTA Ahorrador de K+
recolección cortical Tipo 4 RTA
Conducto colector Excreción: agua Diabetes insípida Antagonistas de V2
(p. 240) («Vaptan») (p. 320)
Nefrología
Diuréticos de asa (p. ej., furosemida, bumetanida): Bloquea el cotransportador Na+/
K+/2Cl-. en el asa ascendente gruesa de Henle, por lo tanto, aumenta la carga de solu-
to del filtrado y reduce la reabsorción de agua. Aumenta la excreción de agua, Na+,
Cl-, fosfato, Mg2 + Ca2, K+ y H+. Se absorben fácilmente desde el tracto GI (a menos
que esté edematoso, en cuyo caso se puede necesitar IV) con concentración pico a
los 30-120 min. Ampliamente utilizado en el edema periférico (insuficiencia cardía-
ca, ascitis). También se pueden utilizar para tratar la hipercalcemia. Los efectos secun-
darios incluyen alcalosis metabólica hipocaliémica, hipovolemia y ototoxicidad.
Túbulo distal
Fisiología
Reabsorbe Na+ (~5-10%) y otros electrolitos. Transporte clave vía cotransportador
de NaCl.
Patología
Síndrome de Gitelman: Pérdida de la función del co-transportador de NaCl. Más leve
que el síndrome de Bartter: por lo general se presenta en la adolescencia/edad adul-
ta con el hallazgo incidental de las anomalías electrolíticas. Imita la administración de
diuréticos tiazídicos. Tratar con suplemento de electrolitos.
Diuréticos
Tiazida (p. ej., bendroflumetiazida) y diuréticos de tipo tiazídico (p. ej., indapamida, clorta-
lidona, metolazona): Inhiben el transportador de NaCl .·. disminuyen de la reabsorción
de NaCl y aumentan la pérdida de agua. Se utilizan para tratar PA (p. 140). Efectos
secundarios: hiponatremia, hipocaliemia e hipomagnesemia. Sin embargo, la excreción
de calcio se reduce (en contraste con los diuréticos de asa) .·. puede usarse para tra-
tar litiasis renales recurrentes en pacientes con hipercalciuria. La excreción de ácido
úrico se reduce (cuidado con la gota). Puede haber intolerancia a la glucosa (el meca-
nismo puede estar relacionado con la hipopotasemia), así que hay que tener cuidado
con DM. El aumento del colesterol LDL no es significativo con el uso crónico en
pequeñas dosis, especialmente en el contexto de la reducción beneficiosa de la PA.
Nefrotoxinas
Muchos agentes pueden ser tóxicos para los riñones ya sea por daño directo a los
túbulos o causando una nefritis intersticial (véase más arriba en el tema). Ejemplos
(no se trata de una lista exhaustiva y reacciones idiosincrásicas):
Analgésicos: AINE (p. 319).
Antimicrobianos: Aminoglucósidos (p. 319), sulfametoxazol (en cotrimoxazol), penici-
linas, rifampicina, anfotericina, aciclovir.
Anticonvulsivantes: Lamotrigina, valproato, fenitoína.
Otros fármacos: IBP, cimetidina, furosemida, tiazidas, i-ECA/ARAII, litio, hierro, inhibi-
dores de la calcineurina, cisplatino.
Agentes anestésicos: Metoxifurano, enflurano.
Material radiocontrastado: (p. 319).
Proteínas: Ig en mieloma, enfermedad de cadena ligera, Hb en hemólisis, mioglobina
en rabdomiólisis (p. 319).
Cristales: Urato (p. 319).
Bacterias: Streptococcus, Legionella, Brucella, Mycoplasma, Chlamydia, TB, Salmonella,
Campylobacter, leptospirosis, sífilis.
Virus: VEB, CMV, VIH, poliomavirus, adenovirus, sarampión.
Parásitos: Toxoplasma, Leishmania.
Otros: Etilenglicol, radiación (p. 319), ácido aristolóquico (p. 319).
Nefropatía analgésica
Causado por NSAIDS, aspirina, paracetamol. Prevalencia desde la retirada de la fenace- 319
tina. Riesgo determinado por la frecuencia y duración del uso. Presentación: Historia de
dolor crónico (dolor de cabeza, musculoesquelético). Muchas veces silencioso hasta ERC
avanzada. Diagnóstico: Análisis de orina: Piuria normal o estéril, proteinuria leve. Ecogra-
fía: riñones pequeños e irregulares. UIV: aspecto clásico de «taza y derrames». TC de no
contraste: masa renal, calcificación papilar. Biopsia: NTIC secundaria a necrosis papilar.
Riesgo de aterosclerosis. Tratamiento: Interrumpir la analgesia. Tratar ERC (p. 304-5).
Ecografía o TC urograma si hay repentino dolor de costado para excluir la obstrucción
de la papila desgarrada.
Aminoglucósidos (Gentamicina> tobramicina> amicacina,> estreptomicina)
Causa LRA debido a la necrosis tubular. Factores de riesgo: dosis, uso prolongado, ERC,
depleción de volumen, otras nefrotoxinas. Presentación: Típicamente leve, LRA no oligú-
rica después de 1-2 semanas de tratamiento. La recuperación puede ser retrasada/
Nefrología
incompleta. Tratamiento: Prevención. La dosis única diaria puede ser menos nefrotóxica
䊳 verificar los niveles (p. 756).
Nefropatía por radiocontraste
LRA 48-72 horas después del contraste IV. Factores de riesgo: ERC, DM, dosis de con-
traste, depleción de volumen, otras nefrotoxinas. Tratamiento: Ninguno. 䊳 La prevención
es clave: prehidratar con cristaloide IV (no se ha demostrado un beneficio consistente
para el bicarbonato sobre el cloruro sódico al 0,9%). Utilice el protocolo local o consi-
dere 3 mL/kg/h 1 hora antes y 1 mL/kg/h durante 6 h después. La evidencia de N-cisteí-
na acetil es débil. Suspender otros medicamentos nefrotóxicos 24 h antes y después del
procedimiento. Informe al radiólogo sobre los factores de riesgo para que use la dosis
más baja de contraste bajo/isoosmolar.
Rabdomiólisis
Los resultados de la ruptura del músculo esquelético, con liberación de los contenidos
intracelulares (K+, mioglobina) en el espacio extracelular. citoquinas y óxido nítrico
causan vasoconstricción. La mioglobina es filtrada por los glomérulos que causan obs-
trucción e inflamación. Presentación: Historial de trauma, cirugía, inmovilidad, hipertermia,
convulsiones. Dolor muscular, hinchazón, sensibilidad. LRA. Orina de color marrón rojizo.
Diagnóstico: Mioglobina sérica: vida media corta (puede no detectarse). Plasma CK x 5
límite superior. Mioglobinuria (orina de color del té o cola) es falsamente positiva para la
sangre en la tira sin RBC viéndolo en el microscopio. K+, VO43-, Ca2+. Tratamiento:
De apoyo. Tratamiento urgente para la hipercaliemia (p. 301). Rehidratación con líquidos
IV: mantener la producción de orina 300 mL/h hasta que la mioglobinuria haya cesado;
pueden necesitarse hasta 1,5 L de fluido/h. Si es oligúrica, vigile la PVC en UCI/Cuidados
intermedios. El reemplazo renal puede ser necesario. (Alcalinización de orina con la hipó-
tesis de cristalización y metabolitos tóxicos, pero no hay evidencia de estudios alea-
torizados que apoyen el uso sobre otros cristaloides y tener cuidado con Ca2+).
Nefropatía por urato
En la nefropatía cristalina aguda, los cristales de ácido úrico se precipitan dentro del tubu-
lointerstitium causando TFG e inflamación secundaria.Visto en el síndrome de lisis tumo-
ral cuando una alta carga tumoral y sensibilidad a la quimioterapia causan ácido úrico
que se precipita en asociación con fosfato. Además, el ácido úrico sérico es un factor
de riesgo para ERC: la hipótesis es que supone un estímulo para enfermedad arterial con
autorregulación patológica del flujo sanguíneo renal, renina y PA. Tratamiento: Lisis
tumoral: hidratación agresiva, alopurinol/rasburicasa para síntesis de ácido úrico. Enfer-
medad crónica: incierto si la dieta/tratamiento con ácido úrico (alopurinol, febuxostat)
mejora el resultado.
Nefritis por radiación
Insuficiencia renal por radiación ionizante. Se presenta 6 meses-años después de la irra-
diación total del cuerpo, radioterapia de campo local o terapia de radionucleótidos diri-
gida. Se presenta con PA, proteinuria/hematuria, progresión a insuficiencia renal. Pro-
nóstico vinculado a PA. Tratamiento: Dosis de radiación con blindaje. Como ERC
(p. 304-5) con estricto control de PA.
Nefropatía del ácido aristolóquico
Remedios herbales que contienen ácido aristolóquico pueden causar ERC progresiva.
Anemia desproporcionada, proteinuria leve y disfunción renal. Biopsia: fibrosis extensa y
atrofia tubular. El riesgo de malignidad urotelial x5, ocurre hasta en el 40%. Ácido aristo-
lóquico que se cree es la causa subyacente de la nefropatía endémica de los Balcanes: agru-
pación de la ERC/insuficiencia renal en las zonas de los Balcanes donde se detecta el ácido
aristolóquico en el trigo. Tratamiento: Evitar la exposición. Tratar como ERC (p. 304-5).
Investigar malignidad. Considerar ensayo terapéutico de esteroides (datos limitados).
Cistinuria
1 entre 17.000. Defecto autosómico recesivo que previene la reabsorción de cistina y 321
aminoácidos dibásicos en los túbulos proximales. Conduce a la formación de cistinuria y
cistina. Tratamiento: dieta, consumo de líquidos y alcalinización de orina. Los fármacos
actuales que aumentan la solubilidad de la cistina tienen un perfil de efectos secundarios
adversos.
Cistinosis
1 entre 100.000-200.000. Autosómico recesivo. Trastorno del almacenamiento lisosomal
con acumulación de cistina. En formas nefropáticas causa disfunción del túbulo proximal,
Fanconi (p. 316) y trastorno renal progresivo. También discapacidad visual, miopatía e
hipotiroidismo. Cisteamina oral cisteína intralisosomal, y retrasa la ERC terminal, pero
no se tolera bien (síntomas GI, depósitos en la piel, fiebre, convulsiones).
Nefrología
8 Hematología
Contenido
Una idea de humorismo 323
Anemia 324
Anemia ferropénica (AF) 326
Anemia de enfermedad crónica
(anemia secundaria) 326
Anemia sideroblástica 326
Frotis de sangre periférica 328
Recuento diferencial de glóbulos
blancos 330
Anemia macrocítica 332
Anemia por deficiencia de
vitamina B12 y perniciosa 334
Un acercamiento a la anemia
hemolítica 336
Causas de la anemia
hemolítica 338
Anemia falciforme 340
Talasemia 342
Trastornos de la coagulación 344
Vías de coagulación 345 Fig. 8.1. Aquí vemos Los Trabajos de Los solo y
Una aproximación a la en la noche de William Blake martillando un gló-
hemorragia 346 bulo rojo en la fragua del corazón humano. «Por
Transfusión de sangre y productos cada espacio mayor que un glóbulo rojo de san-
sanguíneos 348 gre del hombre/Es visionario, y es creado por el
Anticoagulantes 350 Martillo de Los:/y cada espacio más pequeño que
Leucemia y el residente de abre un glóbulo de la sangre del hombre/En la
eternidad de que esta Tierra vegetal es solo una
guardia 352 sombra. El Glóbulo Rojo es el Sol incansable crea-
Leucemia linfoblástica aguda do por Los./ Para medir el tiempo y el espacio a
(LLA) 354 los hombres mortales...» (William Blake Milton
Leucemia mieloide aguda (1804-1810), líneas 17-24.)
(LMA) 356 Cuando nosotros mismos estamos trabajando solos y
Leucemia mieloide crónica por la noche, machacándonos en algún problema difí-
(LMC) 358 cil en las profundidades del hospital, podemos perder
Leucemia linfocítica crónica de vista el contexto en el que se encuentra nuestro
(LLC) 359 propio glóbulo rojo. Desafortunadamente, como con
la tarea de Los, la nuestra es una con una eternidad
Linfoma de Hodgkin (LH) 360 de obligaciones dentro y fuera de ella. En lugar de
Linfoma no Hodgkin 362 abrumarse por una lista de trabajo aparentemente
Pancitopenia e insuficiencia de interminable, debemos concentrar nuestra atención
médula ósea 364 desde el único glóbulo rojo a los sistemas interconec-
Trastornos mieloproliferativos 366 tados circundantes; priorizando nuestras tareas y
Mieloma 368 pidiendo ayuda cuando la necesitemos. Podríamos no
enfrentarnos a un destino tan solitario e interminable.
Paraproteinemia 370
Amiloidosis 370
Velocidad de sedimentación
globular (VSG) 372
Viscosidad plasmática (PV) 372
Síndrome de hiperviscosidad 372
El bazo y la esplenectomía 373
Trombofilia 374
Fármacos inmunosupresores 376
Damos las gracias a nuestro adjunto especialista Dr. Drew Provan por su contribución a este
capítulo.
Hematología
filósofo romano Claudio Galeno (c.129-c. 201 DC) que atribuyó el físico y rasgos
de comportamiento a cada humor: las personas sanguíneas son de corazón cálido
y confidentes, los flemáticos prácticos y racionales, los que tienen un carácter colé-
rico son apasionados, mientras que los melancólicos (melas = negro, khole = bilis)
son depresivos aunque creativos1. Se pensó que un desequilibrio de cualquiera de
estos elementos era la fuente de enfermedad, una creencia que llevó a la recomen-
dación a gran escala de la eliminación del exceso de líquido corporal: expectoración,
purga, y lo más popular, flebotomía. William Harvey, Sydenham y Dupytren están
entre los famosos nombres que celebraron esta cura. Harvey declarando que ‘la
experiencia diaria satisface que la sangría tiene efectos saludables en muchas enfer-
medades, y es de hecho el principal entre todos los remedios generales». Se des-
arrollaron muchas herramientas para ayudar a este procedimiento, especialmente un
recipiente colector con una muesca para la fosa o cuello antecubital: el predecesor
del plato de riñón moderno.
Tal fue la convicción de la curación provocada por la sangría que la «hematoma-
nía» reinó a pesar de un sospechoso nivel de mortalidad. De hecho, se cree que
hasta el primer presidente de Estados Unidos, George Washington, en 1799 pudo
haber muerto por esta causa: en el proceso de su laringitis se le sangró con entu-
siasmo cuatro veces al día por su médico personal, muriendo 24 horas después del
inicio de los síntomas.
Finalmente, la credibilidad de esta práctica disminuyó, y en 1860 había virtual-
mente desaparecido. Sin embargo, la flebotomía sigue desempeñando un papel
importante en la gestión de la hemacromatosis (ver p. 288) y policitemia rubra vera
(p. 366).
Fig. 8.2. Un frotis sanguíneo normal, con un neutrófilo, glóbulos rojos y plaquetas (flechas).
1 Compare estas personalidades con las de la película antropomorfa de Pixar de 2015 «Inside Out».
324 Anemia
La anemia se define como una concentración baja de hemoglobina (Hb) y puede deber-
se a una masa baja de glóbulos rojos o un aumento del volumen plasmático (p. ej., duran-
te el embarazo). Una Hb baja (al nivel del mar) es < 135 g/L para los hombres y
< 115 g/L para las mujeres. La anemia puede deberse a una reducción en la producción
o aumento en la pérdida de hematíes y tiene muchas causas. A menudo se distinguen
por la historia clínica, el examen físico y la inspección del frotis sanguíneo (fig. 8.2, p. 323).
Síntomas. Debido a la causa subyacente o a la propia anemia: fatiga, disnea, desmayos,
palpitaciones, cefaleas, tinnitus, anorexia –y angina si existe enfermedad arterial corona-
ria preexistente.
Signos. Puede estar ausente incluso en anemia severa. Puede haber palidez (p. ej., de la
conjuntiva, ver fig. 8.3, aunque esto no es un signo fiable). En la anemia grave (Hb
Hematología
< 80 g/L), puede haber signos de una circulación hiperdinámica, p. ej., taquicardia, soplos
de flujo (sistólico de eyección más fuerte en el ápex), y agrandamiento cardíaco; o hemo-
rragia retiniana (rara vez). Posteriormente, puede darse insuficiencia cardíaca: en este
caso, la transfusión sanguínea rápida puede ser fatal.
Tipos de anemia. El primer paso en el diagnóstico es observar el volumen celular
medio (VCM). El VCM normal es 76-96 fentolitros (1015 fL = 1 L).
VCM bajo (anemia microcítica):
1. Anemia ferropénica, la causa más frecuente: ver p. 326.
2. Alasemia (sospechar si el VCM es «demasiado bajo» para el nivel de Hb y el recuen-
to de glóbulos rojos se eleva, aunque el diagnóstico definitivo necesita análisis de
ADN): ver p. 342.
3. Anemia sideroblástica (muy rara): p. 326.
NB: hay acumulación de hierro en las dos últimas condiciones, por lo que las pruebas
mostrarán un aumento de hierro sérico y ferritina con una baja capacidad total de unión
al hierro (CTFH).
VCM normal (anemia normocítica):
1. Pérdida aguda de sangre. 5. Hipotiroidismo (o VCM).
2. Anemia de enfermedad crónica (o VCM). 6. Hemólisis (o VCM).
3. Insuficiencia de la médula ósea. 7. Embarazo.
4. Insuficiencia renal.
NB: sileucocitos o plaquetas en la anemia normocítica, sospecha de insuficiencia
medular: véase p. 364.
VCM alto (anemia macrocítica):
1. Deficiencia de B12 o de folato. 5. Síndromes mielodisplásicos.
2. Exceso de alcohol –o enfermedad hepática. 6. Infiltración de la médula ósea.
3. Reticulocitosis (p. 328, p. ej., con hemólisis). 7. Hipotiroidismo.
4. Citotóxicos, p. ej., hidroxicarbamida. 8. Antifolatos (p. ej., fenitoína).
Anemias hemolíticas: No se ajustan a la clasificación antes mencionada, ya que la anemia
puede ser normocítica o, si hay muchos hematíes jóvenes (por lo tanto más grandes) y
reticulocitos, macrocítica (p. 332). Sospechar si hay reticulocitosis (> 2% de los hematí-
es; o recuento de reticulocitos > 100 x109/L), macrocitosis leve, haptoglobina, bilirru-
bina, LDH o urobilinógeno. A menudo, estos pacientes tienen una leve ictericia (pero
observe que la hemólisis causa ictericia prehepática, por lo que no habrá bilirrubina en
la orina).
¿Necesita el paciente una transfusión de sangre? Probablemente no si Hb > 70
g/L. La anemia crónica en particular puede ser bien tolerada (aunque es crucial saber la
causa), y en la anemia ferropénica los suplementos de hierro aumentarán la Hb de forma
más segura y coste-efectiva. En la anemia aguda (p. ej., hemorragia con úlcera péptica
activa), la transfusión para aquellos con Hb < 70 g/L puede estar indicada. Otros facto-
res a considerar son las comorbilidades (particularmente la cardiopatía isquémica) y si el
paciente está sintomático.
En la anemia grave con insuficiencia cardíaca, la transfusión es vital para restaurar la Hb
a un nivel seguro, p. ej., 60-80 g/L, pero esto debe hacerse con mucho cuidado. Suminis-
tre lentamente 10-40 mg de furosemida IV/VO con unidades alternativas (la dosis depen-
de de la exposición previa a los diuréticos; no mezclar con la sangre). Compruebe si hay
signos de empeoramiento de la sobrecarga: PVY y crepitantes basales: en esta eventua-
lidad, detener y tratar.
325
Hematología
Fig. 8.3. La «palidez conjuntival» es el signo clásico de la anemia. Es un término confuso
porque la conjuntiva es translúcida, transmitiendo el color de las estructuras debajo de
ella. La «palidez» se refiere a la vasculatura en la superficie interna del párpado con falta
de Hb. Es este color pero debe ser:
na es una proteína de fase aguda y con inflamación, p. ej., infección, malignidad. La trans-
ferrina está también en la AF pero se ve menos afectada por la inflamación. Revisar la
serología celíaca en todos (P280): si es negativo entonces se refiere a todos los hombres
y mujeres no menstruantes para gastroscopia urgente y colonoscopia. Considerar
microscopia de heces para huevos si historia de viajes relevante. La sangre oculta en las
heces no es recomendable, ya que la sensibilidad es deficiente. 䊳 AF sin una fuente obvia
de sangrado obliga a una exclusión cuidadosa de patología GI2.
Tratamiento. Tratar la causa. Hierro oral, p. ej., sulfato ferroso 200 mg/8 h VO. ES: náu-
seas, malestar abdominal, diarrea o estreñimiento, heces negras. La Hb debería aumentar
en 10 g/L/semana, con una reticulocitosis modesta (hematíes jóvenes, p. 328). Continuar
durante al menos 3 meses después de que la Hb se normalice para reponer las reser-
vas. El hierro IV solo se indica si la vía oral es imposible o ineficaz, p. ej., deficiencia fun-
cional de hierro en insuficiencia renal crónica, donde existe una inadecuada movilización
de reservas de hierro en respuesta a la terapia con eritropoyetina.
La razón habitual por la que la AF no responde al reemplazo de hierro es que el
paciente ha rechazado las píldoras –comprobar el cumplimiento. ¿Es la razón del pro-
blema de la alteración GI? La alteración de la dosis de hierro elemental con una prepa-
ración diferente puede ayudar. Alternativamente, puede haber pérdida continuada de
sangre, malabsorción, anemia de enfermedades crónicas; o mal diagnóstico, p. ej., cuando
la talasemia es la causante.
Anemia sideroblástica
¡La anemia microcítica no siempre significa deficiencia de hierro! El 20% de las personas
mayores con un VCM < 75 fL no tiene deficiencia de hierro. 䊳 Piense en la anemia sidero-
blástica siempre que la anemia microcítica no responda al hierro. Esta condición se caracteriza
por eritropoyesis ineficaz, que conduce a absorción de hierro, carga de hierro en médula
± hemosiderosis (daño endocrino, hepático y cardíaco debidos a la deposición de hierro).
Causas. Congénita (rara, ligada a cromosoma X) o adquirida, p. ej., idiopática como una
de las enfermedades mielodisplásicas/mieloproliferativas, también puede seguir a la qui-
mioterapia, fármacos antituberculosos, irradiación o exceso de alcohol o plomo. Prue-
bas. Busque ferritina, un frotis hipocrómico y los sideroblastos que definen la enfer-
medad en la médula (figs. 8.8, 8.9, tabla 8.1). Tratamiento. Elimine la causa. Piridoxina
± transfusiones repetidas para la anemia severa.
2En un estudio, el 11% que se presentó a su médico con AF tenía carcinoma GI. Plantear el estudio
de los tractos GI superior e inferior: puede haber anomalías en ambos.
Hematología
Fig. 8.4. Coiloniquia: uñas en forma de cucha- Fig. 8.5. Queilitis angular (también conocido
ra. como estomatitis): Ulceración en un lado de
la boca. También un rasgo de la deficiencia de
vitamina B12 y B2 (riboflavina) y glucagonoma
(p. 223).
Cortesía del Dr. Joseph Thompson: AskAnOr-
thodontist.com
Fig. 8.8. Anillos de sideroblastos en la médula, Fig. 8.9. Dos sideroblastos anillados que
con anillo perinuclear de gránulos de hierro, muestran cómo puede variar la distribución
encontrado en la anemia sideroblástica. de las moléculas mitocondriales perinuclea-
Cortesía de la Prof. Christine Lawrence. res de ferritina. El problema en la anemia
sideroblástica congénita es el trastorno de la
síntesis de hemo mitocondrial.
Cortesía del Prof. Tangün y el Dr. Köroglu.
329
Hematología
Society.
Fig. 8.14. Frotis en hipoesplenismo: célula Fig. 8.15. Desviación a la izquierda: presen-
diana (flecha corta), acantocito (flecha larga) y cia de neutrófilos inmaduros en la sangre.
un cuerpo de Howell-Jolly (cabeza de flecha). Véase p. 328.
© Prof. Barbara Bain y Massachusetts Medical © Prof. Krzysztof Lewandowski.
Society.
331
Hematología
Fig. 8.19. Neutrófilo. Estos ingieren y matan Fig. 8.20. Neutrófilos que muestran diversas
bacterias, hongos y células dañadas. respuestas a la infección: a) «granulación tóxi-
ca» (también observada en el embarazo);
c) «desviación a la izquierda»: neutrófilos
inmaduros son liberados con pocos lóbulos en
sus núcleos, en este ejemplo se observa en
forma de herradura.
Cortesía del Prof. Tangün y el Dr. Köroglu.
Fig. 8.21. Linfocitos: divididos en tipos T y B, Fig. 8.22. Eosinófilos: estos median las reac-
que tienen papeles importantes en la inmuni- ciones alérgicas y defienden contra los parási-
dad celular y producción de anticuerpos. tos.
Cortesía del Prof. Krzysztof Lewandowski. Cortesía del Prof. Krzysztof Lewandowski.
Fig. 8.23. Monocitos: precursores de los Fig. 8.24. Basófilos. El citoplasma se llena con
macrófagos tisulares. gránulos de tinción oscura, que contienen his-
Cortesía del Prof. Krzysztof Lewandowski.tamina, mieloperoxidasa y otras enzimas. Al
fijar la IgE, la histamina se libera del basófilo.
Cortesía del Prof. Krzysztof Lewandowski.
333
Fig. 8.25. Anemia megaloblástica: frotis de Fig. 8.26. Macrocitos ovalados vistos aquí en
Hematología
sangre periférica mostrando muchos macro- síndromes meliodisplásicos, obsérvese aniso- y
citos y un neutrófilo hipersegmentado (nor- poiquilocitosis con pequeñas células fragmenta-
malmente debe ser 5 segmentos). das (esquistocitos).
Cortesía de la Profesora Barbara Bain © 2005 NB: las deficiencias de B12 y folato también cau-
Massachusetts Sociedad Médica. san macrocitos ovalados, pero los macrocitos
causados por el alcohol y las enfermedades del
hígado suelen ser redondos.
Cortesía del Prof. Tangün y Dr. Körog lu.
335
Hematología
Fig. 8.27. La lengua grande y fornida de la glositis
por deficiencia de B12. Otras causas de glositis: defi-
ciencia de hierro (o Zn), pelagra, dermatitis de con-
tacto/intolerancias alimentarias específicas, enfer-
medad de Crohn, fármacos (minociclina, claritromi-
cina, algunos i-ECA), tuberculosis de la lengua. La
glositis puede ser la característica de presentación
de la enfermedad celiaca o alcoholismo.
Hematología
Muestra de sangre de un Los hematíes del Aglutinación de hematíes:
paciente con anemia hemolítica paciente son lavados e Los anticuerpos antihumanos
mediada por inmunidad: se incubados con forman conexiones entre los
muestran los anticuerpos anticuerpos hematíes uniéndose a los
adheridos a los antígenos en la antihumanos (reactivos anticuerpos humanos en los
superficie de los hematíes de Coombs) hematíes
Se obtiene suero del Se añade muestra de Las Ig del receptor, que tienen
receptor, que contiene sangre del donante al como diana los hematíes del
anticuerpos (Ig) tubo con suero donante, forman complejos
anticuerpo-antígeno
Anticuerpos humanos
(reactivos de Coombs)
339
Fig. 8.29. Anemia hemolítica autoinmune: eri- Fig. 8.30. Anemia microangiopática, p. ej., de
trocitos recubiertos de anticuerpos siendo CID: están presentes numerosos fragmentos
Hematología
fagocitados por monocitos. celulares (esquistocitos).
© Prof C Lawrence. © Prof. B Bain © Sociedad Médica de Massachu-
setts.
deformen, produciendo células falciformes, que son frágiles y hemolizan, y también blo-
quean los pequeños vasos.
Prevalencia. 1: 700 personas de ascendencia africana.
Pruebas. La hemólisis es variable. Hb 60-90g/L, reticulocitos 10-20%, bilirrubina.
Frotis: células falciformes y células diana (fig. 8.37). Prueba de solubilidad de hematíes falci-
formes positiva, pero no distingue entre HbSS y HbAS. Electroforesis de Hb: Confirma el
diagnóstico y distingue estados SS, AS y otras variantes de Hb. El objetivo es el diag-
nóstico al nacer (sangre del cordón umbilical) para ayudar a una precoz profilaxis neu-
mocócica (vacuna, p. 167 ± penicilina V).
Signos/síntomas. La hemólisis crónica suele ser bien tolerada (excepto en crisis; ver
RECUADRO «Manejo de las crisis de células falciformes»).
Crisis vaso-oclusiva «dolorosa»: Común, debido a la oclusión microvascular. A menudo
afecta a la médula, causando dolor intenso, desencadenado por el frío, deshidratación,
infección o hipoxia. Las manos y los pies están afectados si < 3 años de edad, lo que con-
duce a dactilitis. La oclusión puede causar isquemia mesentérica, imitando un abdomen
agudo. El infarto del SNC ocurre en ~ 10% de los niños, dando lugar a un accidente cere-
brovascular, convulsiones o defectos cognitivos. La ecografía Doppler transcraneal indica
riesgo de accidente cerebrovascular inminente y transfusiones de sangre puede evitarlo
mediante la reducción de HbS. También necrosis avascular (p. ej., de la cabeza femoral),
úlceras en las pierna (fig. 8.38) y priapismo de bajo flujo (también observadas en la LMC,
pueden responder a la hidratación, -agonistas, p. ej., fenilefrina, o aspiración de sangre +
irrigación con solución salina; si para > 12 h el cortocircuito cavernosus-spongiosum
puede prevenir la impotencia posterior).
Crisis aplástica: Esto se debe al parvovirus B19, con reducción súbita de la producción en
la médula ósea, especialmente de los eritrocitos. Normalmente auto-limitante < 2sema-
nas; la transfusión puede ser necesaria.
Crisis de secuestro: Principalmente afecta a los niños, dado que en los adultos el bazo se
convierte en atrófico. Hay secuestro de sangre en el bazo ± hígado, con organomegalia,
grave anemia y shock. Se necesita una transfusión urgente.
Complicaciones. • El infarto esplénico ocurre antes de los 2 años de edad, debido a
oclusión microvasculares, lo que conduce a susceptibilidad a la infección (40% de las
muertes por facilforme son causadas de esta manera). • Crecimiento deficiente. • Insufi-
ciencia renal crónica. • Cálculos biliares. • Enfermedad retiniana. • Sobrecarga de hierro
(ver RECUADRO «Un niño de 7 años...»). • Daño pulmonar: Hipoxia fibrosis hiper-
tensión pulmonar.
Manejo de enfermedades crónicas. 䊳 Recibe ayuda de un hematólogo.
• Hidroxicarbamida en caso de crisis frecuentes ( producción de hemoglobina fetal,
HbF). Dosis ejemplo: 20mg/kg/d si eTFG> 60mL/min.
• El infarto esplénico conduce al hiposplenismo y a la inmunodepresión. Debe realizar-
se profilaxis, mediante antibióticos e inmunización (pág. 367).
• Los niños febriles corren riesgo de septicemia: pueden evitarse los ingresos repetidos
mediante el uso precoz de antibióticos, p. ej., ceftriaxona (p. ej., 2 dosis, 50 mg/kg IV los
días 0 y 1). Considere el ingreso si la Hb < 50g/L, leucocitos < 5 o > 30 x109 /L, T °>
40 °C, grave dolor, deshidratación, infiltración pulmonar. Busque asesoramiento exper-
to.
• El trasplante de médula ósea puede ser curativo pero sigue siendo controvertido.
Prevención. Asesoramiento genético; pruebas prenatales (OHCS p. 154-5). Educación
de los padres puede ayudar a prevenir el 90% de las muertes por crisis de secuestro.
Hematología
Esto ayuda a la oxigenación, y es tan buena como la transfusión de intercambio.
Cruce sangre para los antígenos del grupo sanguíneo Rh (C, D, E) y Kell, para pre-
venir la formación de aloanticuerpos.
• La transfusión de intercambio está reservada para aquellos que están empeoran-
do rápidamente: es un proceso en el que se extrae la sangre y se administra la
sangre del donante en etapas. Indicaciones: severa crisis torácica, sospecha de
evento del SNC o fallo multiorgánico –cuando la proporción de HbS debe redu-
cirse a < 30%.
• Informar pronto a su hematólogo del ingreso.
El síndrome de tórax agudo: Incluye infiltrados pulmonares que afectan a segmentos
completos del pulmón, causando dolor, fiebre, taquipnea, sibilancias y tos. Es grave. Inci-
dencia: ~ 0,1 episodios/paciente/año. En el estudio de referencia de Vichinski, el 13%
necesitó ventilación, el 11% tuvo síntomas del SNC y el 9% de los mayores de 20 años
murieron. Ocurren pródromos con crisis dolorosas ~ 2,5 días antes de cualquier anor-
malidad en RXT en el 50% de los pacientes. Las causas principales de los infiltrados
son la embolia grasa de médula ósea o infección por Chlamydia, Mycoplasma o virus.
Rx: O2, analgesia, antibióticos empíricos (cefalosporina + macrólido) hasta que se
conozcan los resultados del cultivo. Los broncodilatadores (p. ej., salbutamol, p. 182)
han demostrado ser eficaces en aquellos con sibilancias u obstrucción pulmonar en la
presentación.Transfusión de sangre (intercambio si es grave). Llevar a la UCI si la PaO2
no puede mantenerse por encima de 9,2 kPa (70 mmHg) al respirar aire.
Analgesia controlada por el paciente, es una buena opción si las medidas de apoyo y
la analgesia oral no corrigen el dolor. Empezar con 1 mg/kg de morfina en glucosa
al 5 % (dosis pediátrica) y probar una tasa de 1 mL/h, permitiendo al paciente admi-
nistrar bolos extra de 1 mL cuando sea necesario. Comprobar la frecuencia respi-
ratoria y la GCS cada ¼ h + saturación O2 si presenta dolor abdominal o de pecho.
Contactar con la unidad del dolor.
Fig. 8.37. Frotis de células falciformes: hay Fig. 8.38. Úlceras de pierna en la enferme-
células falciformes, células diana y una célula dad de células falciformes.
roja nucleada. © Prof. C Lawrence.
© Prof. C Lawrence.
Un niño de 7 años nos dice lo que es tener una enfermedad de células
falciformes
«He sido hospitalizado más de 50 veces por complicaciones de esta enfermedad.
Para mantenerme controlado comencé a tener transfusiones mensuales. Después
de repetidas transfusiones, mi cuerpo comenzó a obtener demasiado hierro así que
tuve que empezar a obtener infusiones. Estaba tomando el medicamento desferal5,
por lo que mi mamá tuvo que insertar una aguja en mi vientre enganchada a una
bomba que tuve que llevar en mi espalda en mi mochila de Spiderman. Estaba
enganchado a la máquina durante 10 horas al día, 5 días a la semana, pero estaba
bien ¡¡¡todavía podría jugar!!! Sufría de crisis de dolor que hacían que mis piernas y
espalda dolieran como si alguien me estuviera golpeando con un martillo.
Usted puede notar que puedo moverme lento o parecer cansado cuando necesito
la transfusión de sangre. Eso es porque las transfusiones son como un latido del cora-
zón para mi cuerpo, sin él no puedo sobrevivir. Cuando estoy con el dolor lo único que
me ayuda es morfina... le digo a mi mamá cuando ella está llorando ¡ESTARÉ BIEN!!».
5 Esto fue necesario hasta que apareció un quelante de hierro oral una vez al día: deferasirox (Exjade®).
342 Talasemia
Las talasemias son enfermedades genéticas de síntesis desequilibrada de Hb, con déficit
de producción (o ninguna producción) de una cadena de globina (ver tabla 8.2 y RECUA-
DRO). Las hemoglobinas no emparejadas precipitan, lo que daña a la membrana del eri-
trocito y producen su hemólisis mientras está todavía en la médula. Son comunes en
áreas del Mediterráneo hasta el lejano oriente.
talasemias. Usualmente causadas por mutaciones puntuales en los genes
-globina
en el cromosoma 11, que conduce a producción de cadena
(
+) o su ausencia (
0).
Son posibles varias combinaciones de mutaciones (p. ej.,
0/
0,
+/
+ o
+/
0).
Pruebas. Sistemático de sangre, VCM, frotis, hierro, HbA2, HbF, electroforesis de Hb. RM
donde se sospecha siderosis de miocardio (por sobrecarga de hierro).
talasemia menor o rasgo (p. ej.,
/
+, estado heterocigótico): es un estado de portador, y
Hematología
suele ser asintomático. Anemia leve y bien tolerada (Hb> 90 g/L) que puede empeorar
durante el embarazo.VCM < 75 fL, HbA2> 3,5%, ligero HbF. A menudo confundido con
anemia de deficiencia de hierro.
+ talasemia intermedia: describe un estado intermedio con anemia moderada pero sin
necesidad de transfusiones. Puede haber esplenomegalia. Hay una variedad de causas,
incluyendo mutaciones homocigóticas leves de talasemia
talasemia, p. ej.,
+/
+, o cohe-
rencia del rasgo de talasemia con otra hemoglobinopatía, p. ej., talasemia HbC (uno de
los padres tiene el rasgo HbC y el otro tiene
+). La talasemia
+ con células falciforme
produce un cuadro similar a la anemia de células falciformes.
talasemia mayor: denota anomalías significativas en ambos genes de
-globina, y se pre-
senta en el primer año, con anemia severa y falta de crecimiento. Se produce hemato-
poyesis extramedular (producción de eritrocitos fuera de la médula ósea) en respuesta
a la anemia, causando la forma característica de la cabeza, p. ej., turricefalia (figs. 8.39,
8.40) y hepatoesplenomegalia (también debido a la hemólisis). Hay osteopenia (puede
responder a ácido zoledrónico). La radiografía del cráneo muestra un signo del «pelo en
el extremo» debido a actividad de la médula ósea. Se necesitan transfusiones de san-
gre de por vida, con la consiguiente sobrecarga/depósito de hierro, visto después de ~
10 años como insuficiencia endocrina (pituitaria, tiroides, páncreas diabetes mellitus),
enfermedad hepática y toxicidad cardíaca. El frotis muestra células microcíticas muy hipo-
crómicas + células diana + eritrocitos nucleados, HbF, variable HbA2, ausencia de
HbA.
Tratamiento: 䊳 Promover ejercicio físico; dieta saludable. Los suplementos de folato
ayudan.
• Transfusiones regulares (~ 2-4 semanas) para mantener la Hb> 90 g/L, para suprimir
la eritropoyesis ineficaz extramedular y permitir un crecimiento normal. La sobrecar-
ga de hierro es un gran problema que produce hipotiroidismo, hipocalcemia e hipo-
gonadismo. Puede ser mitigado por quelantes de hierro (deferiprona VO + desferrio-
xamina sc dos veces por semana. ES: dolor, sordera, cataratas, daño de la retina, ries-
go de Yersinia). Las grandes dosis de ácido ascórbico también pueden ayudar la
excreción urinaria de hierro.
• Esplenectomía si el hiperesplenismo persiste con el aumento de los requerimientos de
transfusión (p. 373) –es mejor evitarlo hasta> 5 años de edad debido al riesgo de
infecciones.
• Sustitución o tratamiento hormonal para las complicaciones endocrinas, p. ej., diabetes
mellitus, hipotiroidismo. El tratamiento con hormonas de crecimiento ha tenido un
éxito variable.
• Un trasplante de médula histocompatible puede ofrecer la posibilidad de una cura.
Prevención: Los enfoques incluyen el asesoramiento genético o el diagnóstico prenatal
utilizando sangre fetal o el ADN, luego el aborto «terapéutico».
talasemias (fig. 8.41). Hay dos genes -globina separados en cada uno de los cro-
mosomas 16 .·. hay cuatro genes (denominados / ). Las talasemias son produci-
das por deleciones de genes. Si se suprimen los cuatro genes (–/–), se produce la
muerte en el útero (hidrops de Bart). Aquí está presente la HbBarts (4), que es fisioló-
gicamente inútil. La enfermedad de HbH ocurre si se suprimen tres genes (–/– ); puede
haber anemia moderada y características de la hemólisis: hepatoesplenomegalia, úlceras
en las piernas e ictericia. En el frotis sanguíneo, hay formación de tetrámeros de
4 (=
HbH) debido al exceso de cadenas
, HbBarts, HbA y HbA2. Si se suprimen dos genes
(–/ o – /– ), existe un estado portador asintomático, con VCM. Con un gen supri-
mido, el estado clínico es normal.
que contiene cada uno un grupo de hemo En el primer año de vida, la hemoglobi-
na adulta reemplaza a la hemoglobina fetal (HbF).
Se podría pensar que debido a que los detalles moleculares de las talasemias están
Hematología
tan bien estudiados, representan un perfecto ejemplo de la aplicación del principio
reduccionista: averigüe exactamente lo que está sucediendo dentro de las moléculas,
y podrá explicar todas las manifestaciones de una enfermedad. Pero no es así. Tene-
mos que reconocer que dos personas con la mutación idéntica en su
loci pueden
tener enfermedades muy diferentes. Co-herencia de otros genes y patologías (p. ej.,
talasemia) es parte de la explicación, así como la eficiencia de producción de hemo-
globina fetal. Las razones están más allá de la simple co-segregación de genes que
promueven la formación de Hb fetal. La tasa de proteólisis de las cadenas de -glo-
bina en exceso también puede ser importante, como también pueden serlo los
mecanismos que tienen poco que ver con eventos genéticos o moleculares
Fig. 8.40.
talasemia mayor: radiografía de
cráneo.
© Colección Crookston.
Fig. 8.39.
talasemia mayor: turricefalia debi-
da a hematopoyesis extramedular.
© Dr. E van der Enden.
Fig. 8.41. talasemia mostrando células de sombrero mexicano (también llamadas células
diana) – una de las cuales tiene una flecha en el panel izquierdo. Observe también la celda en
lágrima en el panel derecho, y los dos normoblastos (glóbulos rojos nucleados, uno en cada
panel). La flecha más corta en el panel izquierdo señala un cuerpo de Howell-Jolly. Note que
las células que no son sombreros mexicanos son más bien pequeñas (microcíticas). Hay tam-
bién poiquilocitosis (del griego poikilos, variado –por lo que esto simplemente significa que los
glóbulos rojos son de forma variada).
Cortesía del Prof. Tangün y el Dr. Köroglu.
(p. 702).
2. Trastornos plaquetarios. Disminución de la producción de médula ósea: Anemia
aplásica (p. 364), anemia megaloblástica, infiltración de la médula (p. ej., leucemia, mielo-
ma), supresión medular (fármacos citotóxicos, radioterapia). Exceso de destrucción: Inmu-
ne: Trombocitopenia inmune (PTI, ver RECUADRO «Trombocitopenia inmune»), otras cau-
sas autoinmunes, p. ej., LES, LLC, fármacos, p. ej., heparina, virus. No inmune: CID (p. 352),
púrpura trombocitopénica trombótica (PTT) o SHU (p. 315), secuestro (en hiperesple-
nismo). Plaquetas de funcionamiento deficiente: Visto en la enfermedad mieloproliferativa,
AINE y la urea.
3. Trastornos de la coagulación. Congénitos: Hemofilia, enfermedad de von Wille-
brand (P726). Adquiridos: Anticoagulantes, enfermedad hepática, CID (p. 352), deficiencia
de vitamina K.
Hemofilia A. Deficiencia de factor VIII; heredada en un patrón recesivo ligado al cro-
mosoma X en 1:10 000 nacimientos masculinos –usualmente debido a una inversión de
«flip tip» en el gen del factor VIII en el cromosoma X. Hay una alta tasa de nuevas muta-
ciones (30% no tienen antecedentes familiares). La presentación depende de la gravedad
y es a menudo temprano en la vida o después de la cirugía/trauma –con hemorragias en
las articulaciones que conducen a la artropatía inmovilizante, y en los músculos causan-
do hematomas (presión puede conducir a parálisis nerviosa y síndrome compartimen-
tal). Diagnóstico: Mediante APTT y factor VIII. Tratamiento: Buscar el consejo de un
experto. Evite los AINE y las inyecciones de IM (ver fig. 8.43). Hemorragia menor: presión
y elevación de la parte afectada. La desmopresina (0,3 mcg kg/12 h IV durante 20 min)
aumenta los niveles del factor VIII y puede ser suficiente. Hemorragias importantes (p. ej.,
hemartrosis): niveles del factor VIIIA al 50% de lo normal, p. ej. con factor VIII recom-
binante. Hemorragias que amenazan la vida (p. ej., obstrucción de las vías respiratorias)
necesidad de niveles del 100%, Consejo genético: OHCS, p. 154.
Hemofilia B (Enfermedad de Christmas). Es deficiente del factor IX (heredado,
recesivo ligado al cromosoma X); Se comporta clínicamente como la hemofilia A. Tratar
con factos IX recombinante.
La hemofilia adquirida es una diátesis hemorrágica que causa grandes hemorragias
mucosas en hombres y mujeres por la aparición repentina de autoanticuerpos que inter-
fieren con el factor VIII. Pruebas: APPT; VIII autoanticuerpo; actividad del factor VIII <
50%. RX: Esteroides.
Enfermedad del hígado. Produce un trastorno de sangrado complicado con sínte-
sis de factores de la coagulación, absorción de vitamina K y anomalías de la función pla-
quetaria.
La malabsorción conduce a una menor absorción de vitamina K (necesaria para la sín-
tesis de factores II, VII, IX y X). Tratar con vitamina K (10 mg). En la hemorragia aguda,
utilice complejo de protrombina o plasma fresco congelado.
XI XIa
Factor tisular
+ VII IX IXa
+ Ca2+ + VIII
+ Ca2+
+ Fosfolípido
X Xa
Hematología
+V
+ Ca2+
+ Fosfolípido XIII
Protrombina Trombina
XIIIa
Fig. 8.43. Hemofilia
entrecruzamiento leve después de una
inyección intramus-
Fibrinógeno Fibrina cular. 䊳 Dar vacunas
Etc SC!
Fig. 8.42. Vías intrínsecas y extrínsecas de la coagulación (¡simplificada!). © Colección Crookston.
Fibrinólisis
El sistema fibrinolítico funciona generando plasmina, que causa disolución de fibrina.
El proceso comienza con la liberación de activador de plasminógeno tisular (t-PA)
de las células endoteliales, un proceso estimulado por la formación de la fibrina. El t-
PA convierte el plasminógeno inactivo en plasmina, que luego puede escindir la fibri-
na, así como otros varios factores. Tanto el t-PA como el plasminógeno se unen a la
fibrina, localizando así la fibrinólisis a la zona del coágulo.
Agentes fibrinolíticos activan este sistema y pueden utilizarse para romper trombosis
patológica, p. ej., en: IAM agudo, accidente cerebrovascular isquémico agudo,TVP, TEP
y trombosis venosa o arterial central de la retina. En todos los casos, el riesgo de
efectos adversos de la trombólisis (p. ej., hemorragia) debe ser superado por los
beneficios potenciales. La estreptoquinasa, una exotoxina estreptocócica que se une
y activa el plasminógeno, fue el primer agente autorizado, pero tiene el riesgo de
anafilaxia durante la dosificación repetida. La alteplasa (= rT-PA = Actilyse®) es t-PA
recombinante. Los agentes más recientes incluyen tenecteplase y reteplase.
agotados).
– Sangrado en alguien que ya está anémico (especialmente si hay otras comorbi-
lidades).
2. ¿Por qué el paciente está sangrando? El sangrado es normal, dadas las circuns-
tancias (p. ej., cirugía, trauma, parto), o el paciente tiene un trastorno hemorrágico
(RECUADRO «¿Está este paciente preoperatorio en riesgo de sangrado excesivo?»)
• ¿Hay una causa secundaria, p. ej., fármacos (warfarina), alcohol, enfermedad hepáti-
ca, sepsis?
• ¿Hay sangrado inexplicable, moretones o hematomas?
• ¿Antecedentes personales o familiares de sangrado excesivo, p. ej., durante un trau-
ma, odontología, cirugía?
• ¿El patrón de sangrado es indicativo de problemas vasculares, plaquetarios o de
coagulación? (p. 344)? ¿Están sangrando viejas punciones de venopunción o cánulas
(CID, p. 352)? Busque condiciones asociadas (p. ej., con CID).
• ¿Son anormales unas pruebas de coagulación (tabla 8.3)? Compruebe sistemático
de sangre, plaquetas, TP, APTT y tiempo de trombina. Considere los dímeros D, el
tiempo de sangrado y un análisis de factor VIII. 䊳 Si Tanto TP como APTT están muy
elevados, con plaquetas bajas y dímeros D, considere CID (p. 352).
3. En los casos de trastornos hemorrágicos, ¿cuál es el mecanismo? Investi-
gar con sistemático de sangre, frotis y pruebas de coagulación (tubo de citrato; resul-
tados falsos si están insuficientemente llenos):
• Tiempo de protrombina (TP): Se añade tromboplastina para probar el sistema extrín-
seco. El TP se expresa como una relación comparada con el control (razón nor-
malizada internacional (INR), intervalo normal = 0,9-1,2). Prueba de anomalías en
los factores I, II, V, VII, X. Prolongada por: warfarina, deficiencia de vitamina K, enfer-
medad hepática, CID.
• Tiempo de plastina parcial del trombo activado (APTT): Se añade caolín para estudiar
el sistemático intrínseco. Pruebas de anomalías en los factores I, II, V, VIII, IX, X, XI, XII.
Rango normal 35-45 s. Prolongado por: tratamiento con heparina, hemofilia, CID,
enfermedad hepática.
• Tiempo de trombina: Se añade trombina al plasma para convertir el fibrinógeno en
fibrina. Rango normal: 10-15 s. Prolongado por: tratamiento con heparina, CID, dis-
fibrinogenemia.
• Los dímeros-D son un producto de degradación de la fibrina, liberado de las fibras
entrelazadas durante la fibrinólisis (p. 345). Esto ocurre durante la CID, o en pre-
sencia de tromboembolismo-trombosis venosa profunda (TVP) o embolismo pul-
monar (TEP). Los dímeros-D también se pueden elevar en inflamación, p. ej., con
infección o malignidad.
Tratamiento. Depende del grado de sangrado. En caso de shock, reanimar (p. 790). Si
el sangrado continúa en presencia de un trastorno de la coagulación o una transfusión
masiva, discutir la necesidad de FFP, crioprecipitado, concentrados de factores o plaque-
tas con un hematólogo. En PTI (p. 345), se puede usar inmunoglobulina IV ± esteroides.
Especialmente en el embarazo (OHCS, p. 88), consulte a un experto. ¿Hay sobredosis con
anticoagulantes? (p. 842)? En hemorragias hemofílicas, consulte pronto sobre el reempla-
zo del factor de coagulación. Nunca administre inyecciones IM.
Hematología
Pueden estar disponibles pruebas especiales (análisis de factores: 䊳 consultar a un hematólogo).
si ya hay una muestra de sangre en el laboratorio, con el grupo determinado, sin ningún
tipo de anticuerpos atípicos (es decir, G & G).
Productos2. Sangre entera: La única opción durante los primeros 250 años de la histo-
ria de la transfusión, pero ahora se utiliza raramente. Hematíes: (Embalado para hacer el
hematocrito ~ 70%.) Use para corregir la anemia o la pérdida de sangre. 1U Hb por
10-15 g/L. En la anemia, transfundir hasta Hb ~ 80 g/L. Plaquetas: (p. 364.) Por lo general
solo es necesario si el sangrado o el recuento es < 20 x109/L. 1U debe plaquetas >
20 x 109/L. El no hacerlo sugiere una causa refractaria: coméntelo con el hematólogo. Si
la cirugía está planificada, obtenga asesoramiento si el recuento es < 100 x 109/L. Plasma
fresco congelado (PFC): Se utiliza para corregir los defectos de la coagulación: p. ej., CID (p.
352); sobredosis de warfarina donde la vitamina K sería demasiado lenta; enfermedad del
higado; púrpura trombocitopénica trombótica (p. 315). Es caro y corre todos los riesgos
de la transfusión de sangre. No lo utilice como un simple expansor de volumen. Se pro-
duce una solución de albúmina humana como solución al 4,5% o 20% de proteína y se
utiliza para reemplazar la proteína. Puede utilizarse la albúmina al 20% temporalmente en
el paciente con hipoproteinemia (p. ej., enfermedad hepática, nefrosis) que está sobre-
cargado de fluido, sin dar una carga excesiva de sal. También se utiliza como reemplazo
en la paracentesis abdominal (p. 765). Otros: Crioprecipitado (una fuente de fibrinógeno);
concentrados de coagulación (autoinyectados en hemofilia); inmunoglobulinas.
Complicaciones de transfusión. 䊳 Manejo de reacciones agudas2: ver RECUADRO
«Reacciones de la transfusión» y la tabla 8.4.
• Temprana (dentro de 24 h): Reacciones hemolíticas agudas (p. ej., incompatibilidad ABO
o Rh); anafilaxia; contaminación bacteriana; reacciones febriles (p. ej., de anticuerpos
HLA); reacciones alérgicas (picazón, urticaria, fiebre leve); sobrecarga de fluido; lesión
pulmonar aguda relacionada con la transfusión (LPRT, es decir, SDRA debido a anti-
cuerpos antileucocitarios en plasma donante).
• Retrasada (después de 24 horas): Infecciones (p. ej., virus: hepatitis B/C, VIH, bacterias,
protozoos; priones); sobrecarga de hierro (tratamiento, p. 342); enfermedad injerto
contra huesped; purpura postransfusión –potencialmente letal caída en el recuento de
plaquetas 5-7 d después de la transfusión que requiere tratamiento especializado con
inmunoglobulina IV y transfusiones de plaquetas.
Transfusión sanguínea masiva. Esto se define como el reemplazo del volumen san-
guíneo (> 10 U) dentro de 24 h. Complicaciones: plaquetas; Ca2+; factores de coa-
gulación;K+; hipotermia. 䊳 Buscar el apoyo temprano y continuo de hematólogos y
banco de sangre que debe asesorar sobre productos y monitoreo. En la hemorragia
aguda, use sangre cruzada si es posible, pero si no, use el grupo de «donantes universa-
les» de sangre O Rh negativo, cambiando a la sangre cruzada lo más pronto posible.
Transfusión en pacientes con insuficiencia cardíaca. Si Hb ~ 50 g/L con insufi-
ciencia cardíaca, la transfusión con concentrado de hematíes es vital para restaurar la Hb
a un nivel seguro, p. ej., 60-80 g/L, pero debe hacerse con cuidado. Dar cada unidad en
más de 4 horas con furosemida (p. ej., 40 mg IV lento/VO; no mezclar con la sangre) con
unidades alternas. Compruebe la presencia de PVY y crepitantes basales; considerar
una línea de PVC.
Transfusión autóloga. Existe un papel para que los pacientes tengan su propia san-
gre almacenado preoperatoriamente para uso posterior. La eritropoyetina (EPO, p. 304)
puede aumentar el rendimiento de células autólogas de sangre en personas normales. El
rescate celular intraoperatorio con retransfusión se utiliza con más frecuencia, especial-
mente en cirugía cardíaca, vascular y de emergencia. El análisis de costos demuestra que
puede valer la pena solo sobre una base económica.
Hematología
solución salina al 0,9%. Trate CID (p. 352)
Anafilaxia DETENGA la transfusión. Mantener las vías
Broncoespasmo, cianosis, PA e hinchazón de respiratorias y dé oxígeno. Póngase en
tejido blando contacto con el anestesista. 䊳䊳 Ver p. 794
Contaminación bacteriana DETENGA la transfusión. Comprobar
Tª (inicio rápido), PA y escalofríos identidad contra el nombre en la unidad;
comunique al hematólogo y envíe la unidad +
sistemático de sangre, urea y electrolitos,
coagulación, cultivos y orina al laboratorio.
Iniciar antibióticos de amplio espectro
LTRP DETENGA la transfusión. Dar 100% de O2.
(Ver p. 348) Disnea, tos; RXT Blanco 䊳䊳 Trate como SRDA, p. 186. El donante
350 Anticoagulantes
Principales indicaciones
• Terapéuticas: Enfermedad tromboembólica venosa: TVP y TEP.
• Profilácticas: Prevención de la TVP/TEP en pacientes de alto riesgo (p. 375), p. ej., en
postoperatorios. Prevención del accidente cerebrovascular, p. ej., en la FA
crónica o válvulas cardíacas protésicas.
Heparina. 1. Heparina de bajo peso molecular (HBPM): p. ej., dalteparina, enoxaparina,
tinzaparina. La opción preferida en la prevención y tratamiento inicial del tromboembo-
lismo venoso. Inactiva el factor Xa (pero no la trombina). T½ es 2 a 4 veces más largo
que la heparina estándar, y la respuesta es más predecible: solo se debe dar una o dos
veces al día SC, y la monitorización de laboratorio generalmente no es requerida. Ver
BNF para dosis. Se acumula en insuficiencia renal: disminución de dosis para profilaxis, uso
Hematología
Hematología
con embolia recurrente no provocada, con trombofilia subyacente (p. 374), consi-
derar los riesgos de sangrado contra los beneficios de un tratamiento indefinido.
trolitos, PFH, Ca2+, glucosa y coagulación. Considere la hemorragia en el SNC –TC si hay
duda. Con cualquier nuevo paciente, encuentre el objetivo acordado de tratamiento:
¿curación; prolongar la supervivencia; o paliación con toxicidad mínima? Dirigir sus efec-
tos en consecuencia; obtener ayuda si no está claro el diagnóstico.
Régimen neutropénico. (Para cuando el recuento de neutrófilos 0,5 x 109/L.)3.
䊳 Contacto estrecho con un microbiólogo y hematólogo es vital. ¡Respete los procedi-
mientos de control de infecciones! Utilice una herramienta de evaluación de riesgos (p. ej.,
MASCC, véase RECUADRO).
• Aislamiento completo en una habitación lateral si es posible. El lavado de manos es vital.
• Evite inyecciones de IM (peligro de hematoma infectado).
• Busque infecciones (boca, axila, perineo, sitio infusión IV). Tome muestras.
• Comprobar: sistemático de sangre, plaquetas, INR, urea y electrolitos, PFH, LDH, PCR.
Tome cultivos (sangre x3 –periféricamente ± línea de Hickman; orina, esputo, heces si
hay diarrea); RST si está clínicamente indicado.
• Lavar el perineo después de la defecación. Limpie la piel húmeda con clorhexidina. Evi-
tar exámenes rectales innecesarios. Higiene bucal (p. ej., lavados bucales de peróxido
de hidrógeno 2 h) y profilaxis de Candida son importantes (p. 246).
• Compruebe los signos vitales cada 4 horas. Dieta alta en calorías; evitar los alimentos
con alto riesgo de contaminación por microorganismos. Los vasos que contienen flo-
res cortadas presentan un riesgo de Pseudomonas.
Uso de antibióticos en la neutropenia. 䊳 Trate rápidamente cualquier infección
conocida.
• Si Tª > 38 °C o Tª > 37,5 °C en dos ocasiones, > 1 h de diferencia, o el paciente es
séptico, iniciar terapia ciega de combinación de acuerdo con las directrices locales
–p. ej., piperacilina-tazobactam– p. 386 (+ vancomicina, p. 386, si se sospecha o aíslan
organismos grampositivos, p. ej., sepsis de la línea de Hickman). Continuar hasta que
esté afebril durante 72 h o curso de 5 d, y hasta que los neutrófilos > 0,5 x 109/L. Si
la fiebre persiste a pesar de los antibióticos, piense en CMV, hongos (p. ej., Candida,
Aspergillus, p. 408) e infección de la línea central.
• Considerar el tratamiento para Pneumocystis (p. 400, p. ej., cotrimoxazol, aunque tenga
cuidado, pues esto puede empeorar la neutropenia). Recuerde TB.
Otros peligros. • Síndrome de lisis tumoral: Resulta en K +, urea e IRA. Véase p. 529.
• Hiperviscosidad: (p. 372). Si la leucocitosis es > 100 x 109/L, pueden formarse trombos
de glóbulos blancos en el cerebro, pulmón y corazón (leucostasis). Evite la transfusión
antes de bajar la leucocitosis, p. ej., hidroxicarbamida o leucoferesis, dado que la visco-
sidad aumenta (riesgo de leucostasis).
• CID: La liberación de procoagulantes en la circulación provoca una activación genera-
lizada, consumo de factores de coagulación y plaquetas y causando riesgo de san-
grado. Los hilos de fibrina llenan los pequeños vasos, hemolizando los glóbulos rojos
que pasan. La fibrinólisis está también activada. Causas: Malignidad, sepsis, trauma, acon-
tecimientos obstétricos. Signos: (fig. 8.44) Moretones, hemorragias en cualquier parte
(p. ej., sitios de punción vénosa), insuficiencia renal. Pruebas: Plaquetas; TP; APTT;
fibrinógeno (correlaciona con la gravedad); productos de degradación de la fibra
(dímeros D). Frotis: eritrocitos rotos (esquistocitos). Rx: Tratar la causa. Reemplazar las
plaquetas si < 50 x109/L, crioprecipitar para reemplazar el fibrinógeno, PFC para reem-
plazar factores de coagulación. La heparina es polémica. El uso del ácido all-transreti-
noico (ATRA) ha reducido significativamente el riesgo de CID en la leucemia promie-
locítica aguda (la leucemia más común asociada con CID).
• Prevención de la sepsis: Administrar fluoroquinolona (p. ej., ciprofloxacino) antes de que
la neutropenia llegue a ser grave. Los estimuladores de colonias de granulocitos (G-
CSF) pueden aumentar la producción de glóbulos blancos (granulocitos) de la médu-
la ósea, pero no deben administrarse de forma rutinaria en quimioterapia. El herpes,
neumocistis y la profilaxis de CMV tienen un papel.
Hematología
– Síntomas moderados 3
– Síntomas graves 0
• Sin hipotensión (PA sistólica> 90 mmHg) 5
• No hay EPOC 4
• Sin deshidratación 3
Obsérvese la subjetividad de la «carga de la enfermedad» y la omisión de variables
como la PCR (que, si no disminuye después de comenzar los antibióticos, predice el
fracaso del tratamiento). Como con todas las demás puntuaciones, la puntuación
MASCC debe ser interpretada dentro del contexto del cuadro clínico individual.
6 P. ej., t (12:21) ETV6-RUNX1, t(1; 19) TCF3-PBX1, t (9; 22) BCR-ABL1- y reordenamiento de LLM.
355
Fig. 8.45. Frotis de sangre en LLA, subtipo L1. Fig. 8.46. Médula ósea en LLA, subtipo L1.
Pequeños blastos con escaso citoplasma. Cortesía de la Prof. Christine Lawrence.
Cortesía de la Prof. Christine Lawrence.
Hematología
Fig. 8.47. Frotis de sangre en LLA, subtipo L2.
Blastos más grandes con mayor variación mor-
fológica y citoplasma más abundante. Fig. 8.48. LLA L3. Blastos con citoplasma ba-
Cortesía de la Prof. Christine Lawrence. sófilo vacuolado. A y B: frotis de sangre.
C: nódulo linfático.
Cortesía del Prof. Tangün y el Dr. Köroglu.
3. LMA, relacionadas con la terapia (en los tratados previamente con fármacos citotó-
xicos).
4. LMA, otros (no incluidos en la lista anterior, subclasificados como M0-M7 por madu-
ración).
Signos y síntomas. • Insuficiencia de la médula ósea: Anemia, infección o sangrado. CID
ocurre en la leucemia promielocítica aguda, un subtipo de LMA, donde hay liberación de
tromboplastina (p. 352). • Infiltración: Hepatomegalia, esplenomegalia, hipertrofia de las
encías (fig. 8.50), afectación de la piel. La afectación del SNC en la presentación es rara.
Diagnóstico. Los leucocitos están con frecuencia , pero pueden ser normales o inclu-
so bajos. Las células blásticas pueden ser pocas en la sangre periférica, por lo que el diag-
nóstico depende de la biopsia de médula ósea, inmunofenotipado y métodos molecula-
res. En la biopsia, la LMA se diferencia de la LLA por los bastones de Auer (figs. 8.51-
8.53). El análisis citogenético (p. ej., el tipo de mutación) guía las recomendaciones de tra-
tamiento y el pronóstico.
Complicaciones. • Predisposición a la infección tanto por la enfermedad como por el
tratamiento; puede ser bacteriana, fúngica o viral –se da profilaxis para cada una de ellas
durante el tratamiento. Esté alerta a la septicemia (p. 352): organismos comunes pre-
sentes y extraños y raros organismos pueden infectar comúnmente (particularmente los
hongos Candida y Aspergillus).Tenga en cuenta que la propia LMA provoca fiebre. • La
quimioterapia causa niveles plasmáticos de urato (de la lisis tumoral) –por ello, dar alo-
purinol con la quimioterapia, y mantener bien hidratado con fluidos intravenosos. • La
leucostasis (p. 352) puede ocurrir si leucocitos.
Tratamiento. • Cuidados de apoyo: Como para LLA. Los ejercicios para caminar pue-
den aliviar la fatiga.
• Quimioterapia: Muy intensiva, dando lugar a largos períodos de supresión de la médu-
la ósea con neutropenia + plaquetas . Los principales fármacos utilizados son dauno-
rrubicina y citarabina, con ~ 5 ciclos en bloques de una semana para obtener una remi-
sión (las mutaciones RAS ocurren en ~ 20% de pacientes con LMA y aumentan la sen-
sibilidad a citarabina).
• Trasplante de médula ósea (BMT): Se recogen células madre hematopoyéticas pluripo-
tentes de la médula ósea. Los trasplantes alogénicos de donantes compatibles con
HLA (guardados en bases de datos internacionales) están indicados en la enfermedad
refractaria o recidivante. La idea es destruir las células leucémicas y el sistema inmu-
nológico, p. ej., ciclofosfamida + irradiación total del cuerpo, luego repoblar la médula
con células donantes infundidas IV. Se utilizan ciclosporina ± metotrexato para reducir
el efecto de la nueva médula que ataca al cuerpo del paciente (enfermedad injerto
contra huesped).
– Complicaciones: Enfermedad injerto contra huesped (puede ayudar a explicar el
efecto curativo del trasplante de médula); infecciones oportunistas; recaída de leu-
cemia; esterilidad.
– Pronóstico: Bajas tasas de recaída ~ 60% de supervivencia a largo plazo, pero mor-
talidad significativa de ~ 10%. El trasplante de médula autólogo (donde las células
madre se toman del propio paciente se utilizan en la enfermedad del pronóstico
intermedio, aunque algunos estudios sugieren mejores tasas de supervivencia con
regímenes de quimioterapia intensiva.
– El trasplante autólogo de células madre de sangre periférica movilizada puede ofrecer
una recuperación hematopoyética más rápida y menos morbilidad.
• El tratamiento de apoyo, o quimioterapia de dosis más baja para el control de la enfer-
medad, puede ser más apropiado en pacientes ancianos, donde las terapias intensivas
tienen peores resultados.
357
Hematología
Fig. 8.51. Bastones de Auer (cristales de grá-
nulos coalescentes) encontrados en las células
mieloblásticas de la LMA.
Cortesía de la profesora Christine Lawrence.
Hetererogeneidad en LMA
Considere cuatro tipos de heterogeneidad a medida que avanzamos en la historia
clínica: morfológica, inmunofenotípica, citogenética y molecular. Tecnologías genómi-
cas pemiten un análisis molecular cada vez más detallado de la LMA y esto puede
utilizarse para ayudar en el pronóstico y guiar la estratificación del riesgo. La epige-
nética y otros perfiles revelan cada vez más biomarcadores, p. ej., mutaciones en los
genes que codifican el ADN (citosina-5) metiltransferasa 3A (DNMT3A).
Fig. 8.54. LMC: numerosas células granulocí- Fig. 8.55. Hepatoesplenomegalia en LMC.
ticas en las diferentes etapas de diferenciación.
Cortesía de la profesora Christine Lawrence.
Hematología
III Linfocitosis + anemia (Hb < 110 g/L) 2 años
IV Linfocitosis + plaquetas < 100 x 109/L 1 año
Fig. 8.56. Linfadenopatía cervical bilateral en Fig. 8.57. LLC: muchos linfocitos y una célula
LLC. sombra: una célula frágil dañada en la prepara-
ción.
Cortesía de la profesora Christine Lawrence.
tamaño del nódulo puede fluctuar, y pueden apelmazarse. El 25% tienen síndrome cons-
titucional, p. ej., fiebre, pérdida de peso, sudores nocturnos, prurito y letargo. Puede haber
dolor de ganglios linfáticos inducido por alcohol. La afectación mediastínica de los gan-
glios linfáticos puede causar un efecto de masa, p. ej., obstrucción bronquial u obstruc-
ción de VCS (p. 528), o extensión directa, p. ej., causando derrames pleurales.
Signos. Linfadenopatía. También, caquexia, anemia, esplenomegalia o hepatomegalia.
Pruebas. Diagnóstico del tejido: Biopsia de escisión de ganglios linfáticos si es posible.
Biopsia con aguja guiada a través de imágenes, laparotomía o mediastinoscopia. Sangre:
Sistemático de sangre, película, VSG, PFH, LDH, urato, Ca2+.VSG o Hb indican un
peor pronóstico. LDH dado que se libera durante renovación celular. Imágenes: RXT,
TC/PET de tórax, abdomen y pelvis.
Estadificación (sistema de Ann Arbor). Influencia del tratamiento y el pronóstico. Se
realiza mediante técnicas de imagen ± biopsia de la médula ósea si síntomas B, o enfer-
medad en estadio III-IV.
I. Confinado a una única región de ganglios linfáticos.
II. Participación de dos o más áreas nodales en el mismo lado del diafragma.
III. Participación de nodos en ambos lados del diafragma.
IV. Diseminación más allá de los ganglios linfáticos, p. ej., hígado o médula ósea.
Cada etapa es «A» –no hay síntomas sistémicos distintos al prurito; o «B» –presencia de
síntomas B: pérdida de peso > 10% en los últimos 6 meses, fiebre inexplicable > 38 °C
o sudores nocturnos (que necesitan cambiar de ropa). «B» indica una enfermedad más
grave. La extensión extranodal localizada no avanza la etapa, pero se indica mediante el
subíndice «E», p. ej. I-AE.
Quimioterapia. Radioterapia + cursos cortos de quimioterapia para los estadios I-A
y II-A (p. ej., con 3 áreas implicadas). Cursos más largos de quimioterapia para II-A con
> 3 áreas involucradas hasta IV-B. «ABVD»: Adriamicina, Bleomicina, Vinblastina, Dacar-
bazina cura ~ 80% de los pacientes. Se utilizan regímenes más intensivos si los pronósti-
cos o la enfermedad es avanzada8. En la recidiva de la enfermedad: alta dosis de quimio-
terapia seguida por trasplante autólogo de células madre.
Complicaciones del tratamiento: Ver p. 524-7. La radioterapia puede riesgo de tener una
segunda neoplasia maligna –tumores sólidos (especialmente pulmón y mama, también
melanoma, sarcoma, cáncer de estómago y tiroides), cardiopatía isquémica, hipotiroidis-
mo y fibrosis pulmonar debida al campo de radiación. Los ES de la quimioterapia inclu-
yen mielosupresión, náuseas, alopecia, infección. LMA (p. 356), linfoma no Hodgkin e
infertilidad pueden deberse tanto a la quimioterapia como a la radioterapia –ver p. 525.
Supervivencia a 5 años. Depende del estadio y grado (tabla 8.9): > 95% en la enfer-
medad I-A con predominio de linfocito, < 40% con IV-B deficiente en linfocitos.
Presentaciones de emergencia. Infección; obstrucción de VCS –PVC, sensación
de plenitud en la cabeza, disnea, desmayos, edema facial (busque ayuda de expertos, ver
p. 528).
7 Thomas Hodgkin (1798-1866); redescubierto por Samuel Wilks (1824-1911), quien magnánimamen-
te dio a la enfermedad nombre de Hodgkin.
8 P. ej., BEACOPP (bleomicina/etopósido/doxorrubicina/ciclofosfamida/vincristina/procarbazina/predni-
sona). En IIB, III o IV, BEACOPP proporciona un mejor control inicial, pero la supervivencia libre de
eventos de 7 años es similar: 78% frente a 71%.
Hematología
Fig. 8.58. Una célula Reed-Sternberg con Fig. 8.59. Otra célula de Reed-Sternberg.
dos núcleos, característicos del linfoma de Cortesía de la colección Crookston.
Hodgkin.
Cortesía de la profesora Christine Lawrence.
Fig. 8.60. Célula Reed-Sternberg mononu- Fig. 8.61. Linfadenopatía cervical en enfer-
clear en un ganglio linfático. medad de Hodgkin.
© Prof. Tangün y el Dr. Köroglu.
(p. 619), con características sistémicas (ver abajo). MALT generalmente implica el antro,
es multifocal y más tarde metastatizan. 2. Linfomas gástricos no MALT (60%) habitual-
mente son linfomas difusos de células B grandes –alto grado y que no responden bien
a la erradicación de H. pylori. 3. Linfomas del intestino delgado, p. ej., EIDIP (enfermedad
del intestino delgado inmunoproliferativa, p. 370), o EATCL (linfoma de células T intrae-
piteliales asociado con enteropatía/celiaquía) –se presenta con diarrea, vómitos, dolor
abdominal y peso. Pronóstico pobre. Piel: (2º más frecuente –ver fig. 8.62) p. ej., célu-
las T clonales en micosis fungoide (representa ~ 50%, p. 596). Orofaringe: El linfoma del
anillo de Waldeyer causa dolor de garganta/obstrucción respiratoria. Otros sitios posi-
bles: Hueso, SNC y pulmón.
• Rasgos sistémicos: fiebre, sudores nocturnos, pérdida de peso (menos frecuente que
en linfoma de Hodgkin, e indica enfermedad diseminada).
• Pancitopenia por afectación de la médula –anemia, infección, sangrado ( plaquetas).
Pruebas. Sangre: Sistemático de sangre, urea y electrolitos, PFH. LDH pronóstico
peor, refluyendo la rotación de células. Biopsia de médula y nódulos para la clasificación
(compleja, basada en el sistema OMS de grados alto o bajo). Estadio: Sistema de Ann
Arbor (p. 360); TC ± PET del tórax, abdomen, pelvis. Enviar citología de cualquier derra-
me; punción lumbar para la citología del LCR si hay signos del SNC.
Diagnóstico/tratamiento. Es multidisciplinario, sintetizando detalles de evaluación,
histología, inmunología, genética molecular y técnicas de imagen. En general:
• Los linfomas de bajo grado son indolentes, a menudo incurables y ampliamente dise-
minados. Incluir: linfoma folicular, linfoma de zona marginal/MALT, linfoma linfocítico
(estrechamente relacionado con LLC y tratado de manera similar), linfoma linfoplas-
mocitoide (produce IgM = macroglobulinemia de Waldenström, p. 364). Ver fig. 8.63.
• Los linfomas de alto grado son más agresivos, pero a menudo curables. En ocasiones la
linfadenopatía se agranda rápidamente con síntomas sistémicos. Incluye: linfoma de
Burkitt (enfermedad infantil con una característica linfadenopatía de la mandíbula,
figs. 8.64, 8.65), linfomas linfoblásticos (como LLA), linfoma difuso de células B grandes.
Tratamiento. Gran variedad de opciones, dependiendo del subtipo de la enfermedad.
Grado bajo: Si no tiene síntomas, no se necesitará ninguno. La radioterapia puede ser
curativa en pacientes con dicha enfermedad. Se utiliza el clorambucilo en la enfermedad
difusa. La remisión puede mantenerse utilizando -interferón o rituximab (ver más ade-
lante en el párrafo). Bendamustina es eficaz tanto con rituximab como en monoterapia
en pacientes refractarios a rituximab. Alto grado: (p. ej., linfoma de células B grandes,
LDCBG), régimen R-CHOP: Rituximab, Ciclofosfamida, Hydroxi-daunorrubicina, vin-
cristina (Oncovin®) y Prednisolona. Los factores estimulantes de las colonias de granu-
locitos (G-CSF) ayudan en la neutropenia –p. ej., filgrastim o lenograstim (a dosis bajas
puede ser coste-efectivo).
Supervivencia. La histología es importante. El pronóstico es peor si en la presentación:
• Edad> 60 años. • Síntomas sistémicos. • Enfermedad voluminosa (masa abdominal
> 10 cm). • LDH. • Enfermedad diseminada. Supervivencia típica a 5 años para los
pacientes tratados: ~ 30% para linfomas de alto grado y > 50% para los de bajo grado,
pero el cuadro es muy variable.
363
Hematología
Fig. 8.63. A y B: linfocitos villosos (linfoma
esplénico de zona marginal). C: células hendi-
das con núcleos escindidos (linfoma folicular).
D: células de Sézary células con núcleos intrin-
cados.
Cortesía del Prof. Tangün y Dr. Köroglu.
linfoma, tumores sólidos, TB), anemia megaloblástica, mielofibrosis (p. 366). 2. Destruc-
ción periférica: Hiperesplenismo.
Agranulocitosis. Implica que los granulocitos (leucocitos con gránulos neutrófilos, basó-
filos o eosinófilos) han dejado de producirse, lo que coloca al paciente en un riesgo de
infecciones fatales. Muchos fármacos pueden ser los culpables: p. ej., carminazol, procaina-
mida, sufonamidas, oro, clozapina, dapsona. 䊳 Cuando se comience tratamiento con un fár-
maco capaz de producir agranulocitosis, advierta al paciente que debe comunicar cualquier
fiebre. La neutropenia (leucocitos 0,5 x 10 9/L) puede declararse inicialmente como dolor
de garganta. Suspenda el fármaco, comience el régimen de neutropenia y considere fac-
tores estimulantes de las colonias de granulocitos (G-CSF) si está indicado (p. 352).
Soporte de médula ósea. Las células rojas sobreviven durante ~ 120 d, las plaque-
tas durante ~ 8 d y los neutrófilos por 1-2 d, por lo que los problemas tempranos son M
principalmente de neutropenia y trombocitopenia.
1. Transfusión de glóbulos rojos: La transfusión 1U debe elevar la Hb en ~ 10-15 g/L
(p. 348). La transfusión puede disminuir el recuento de plaquetas (puede que tenga
que dar plaquetas antes o después).
2. Plaquetas: Se producen hemorragias traumáticas, púrpura y moretones fáciles si las
plaquetas < 50 x109/L. Puede producirse sangrado espontáneo si las plaquetas < 20
x109/L, siendo rara la hemorragia intracraneal. Las plaquetas se almacenan a tempe-
ratura ambiente (22 °C, no en la nevera). En el trasplante de médula ósea o en caso
de inmunodepresión severa, las plaquetas pueden necesitar irradiación antes de su
uso para prevenir la enfermedad injerto contra huésped asociada a la transfusión. Las
plaquetas deben ser ABO compatible. No se utilizan en PTI (p. 345). Indicaciones: •
Plaquetas< 10x109/L. • Hemorragia (p. ej., CID, p. 352). • Antes de procedimientos
invasivos (p. ej., biopsia, punción lumbar) para aumentar el recuento a > 50 x109/L.
4 U de plaquetas debe aumentar la cuenta hasta> 40 x109/L en adultos; comprobar
la dosis necesaria con el laboratorio.
3. Neutrófilos: Utilizar un régimen neutropénico si el recuento es < 0,5x109/L (p. 352).
Biopsia de la médula ósea. Brinda información diagnóstica cuando hay anormalida-
des en la sangre periférica; también es una prueba importante de estadiaje en los tras-
tornos linfoproliferativos. Idealmente tomar un aspirado y un cilindro óseo por lo gene-
ral de la ilíaca posterior (los aspirados se pueden tomar de la cresta ilíaca anterior o del
esternón). El aspirado proporciona una película que se examina por microscopio. El cilin-
dro es un núcleo de hueso que permite evaluar la celularidad de la médula ósea, la arqui-
tectura y la presencia de la enfermedad inflamatoria (p. ej., neoplasia). Es posible que sea
necesario corregir los trastornos de la coagulación prebiopsia. Aplique presión después
(acostarse sobre ese lado durante 1-2 h si las plaquetas están bajas).
Anemia aplásica
Se trata de un trastorno de células madre raras (~ 5 casos por millón/año) en el que
la médula ósea deja de producir células, dando lugar a pancitopenia. Presenta caracte-
rísticas de anemia (Hb), infección (leucocitos) o sangrado ( plaquetas). Causas: La
mayoría de los casos son autoinmunes, provocados por fármacos, virus (p. ej., parvovi-
rus, hepatitis) o irradiación. También puede ser heredado, p. ej., anemia de Fanconi
(p. 698). Pruebas: La biopsia de médula ósea es diagnóstica. Tratamiento: Principalmen-
te de apoyo en pacientes asintomáticos. Transfusión de sangre según sea necesario e
iniciar un régimen neutropénico si el recuento es < 0,5x109/L (p. 352). El tratamiento
de elección en pacientes jóvenes con enfermedad grave es el trasplante de médula alo-
génica de un hermano HLA-emparejado, que puede ser curativo. De otra manera, la
inmunosupresión con ciclosporina y globulina antitimocítica puede ser posible, aunque
no es curativo en la mayoría de los casos. No hay un papel claro para el G-CSF.
365
Eritrocito/hematíe
Reticulocito
Eritroblasto Célula plasmática
ortocromático
Eritroblasto
policromático
Linfocito T Linfocito B
Eritroblasto basófilo
Hematología
Proeritroblasto
Megacarioblasto Prolinfocito
Célula madre Linfoblasto Célula
Célula madre NK
linfoide
Promegacariocito Célula Madre Mieloide
Megacariocito
Monoblasto Mieloblasto Célula dendrítica
Promonocito
Monocito
Monocito
Eosinófilo
Metamielocito N.
Neutrófilo encayado
Basófilo
Neutrófilo
Fig. 8.66. Hematopoyesis y ley de Sod. Cuando contemplamos un diagrama como este (de
aparente complejidad galáctica), siendo médicos, pensamos «¿qué puede salir mal?». Con un
sentimiento pesimista nos damos cuenta de que cada arco es una oportunidad para múltiples
desastres. Tal vez, usando el Martillo de Los (p. 322) y nuestro propio ingenio podríamos oca-
sionalmente completar estos caminos sin intervención de Sod (la ley de Sod dice que si algo
puede salir mal, saldrá mal – aquí el aliento tuberculoso de Sod se ve soplando la línea de célu-
las rojas fuera de curso – TB es una causa célebre de anemia leucoeritroblástica). Cuando nos
damos cuenta de que cada día cada uno de nosotros produce 175 mil millones de glóbulos
rojos, 70 mil millones de granulocitos y 175 mil millones de plaquetas, sentimos que Sod está
sonriendo a sí mismo con especial deleite. Cualquier cosa puede salir mal. Todo puede salir mal.
Esto lo llamamos anemia aplásica. Agranulocitosis es cuando los arcos del sur se equivocan;
trombocitopenia cuando los arcos que apuntan hacia el oeste van mal. Al este tenemos los lin-
focitos y sus complejidades de células B y T. La anemia se encuentra en el norte de este dia-
grama. Y en cuanto a la hemorragia – ¿cómo podrían nuestros predecesores soportar perder
una sola gota de estas cosas a propósito? Nuestras mentes se tambalean en 175 mil millones
de glóbulos rojos por día – pero esto es justo cuando el sistema está inactivo. Cuando sangra-
mos, el rendimiento puede aumentar en un orden de magnitud –si Sod está haciendo la vista
gorda ¿hay suficientes hematínicos (p. ej., hierro, B12 y folato) para permitir la máxima hemo-
poyesis?
Figura © Aria Rad.
Hematología
Fig. 8.67. Trombocitemia esencial: se obser- Fig. 8.68. Células de la lágrima, en mielofi-
ven muchas plaquetas. brosis.
© Prof. Christine Lawrence. © Dr. Nivaldo Medeiros.
Hematología
• Osteosclerosis, p. ej., de la hepatitis C
• Hipercalcemia. • Enfermedad de Paget del hueso
• Insuficiencia renal. • Anemia falciforme
• Anemia. • Osteodistrofia renal
4. Lesiones óseas: un estudio esquelé- • Síndrome de CREST/síndrome de
tico después de diagnóstico detec- Sjögren
ta enfermedad ósea: Rayos X de • Hiperparatiroidismo
tórax; toda la columna vertebral; Pruebas: PSA, VSG, Ca2+, PFH, electro-
cráneo; pelvis ± Tc-99m MIBI y PET foresis.
(p. 739). Tratamiento: Tratar la causa; bisfosfonatos
y AINE pueden controlar los síntomas.
Complicaciones del mieloma
• Hipercalcemia (p. 676). Ocurre con la enfermedad activa, p. ej., en la presentación
o recaída. Rehidratar vigorosamente con solución salina IV 0,9% 4-6 L/d (cuida-
doso balance hídrico). Bisfosfonatos IV, p. ej., zolendronato o pamidronato son úti-
les para tratamiento de la hipercalcemia agudamente.
• Compresión de la médula espinal (p. 466). Ocurre en el 5% de las personas
con mieloma. RM urgente si se sospecha. El tratamiento es con dexametasona
8-16 mg/24 h VO y radioterapia local.
• La hiperviscosidad (p. 372) causa disminución de la cognición, visión alterada y san-
grado. Se trata con plasmaféresis para eliminar las cadenas ligeras.
• La lesión renal aguda se trata con rehidratación. Puede ser necesaria una diálisis urgente.
Fig. 8.70. Médula ósea del mieloma: muchas Fig. 8.71. Sección de la médula en mieloma,
células plasmáticas con formas anormales. teñida con anticuerpos monoclonales IgG kappa.
Cortesía de la Prof. Christine Lawrence. Cortesía de la Prof. Christine Lawrence.
Fig. 8.72. Una banda monoclonal de para- Fig. 8.73. Células plasmáticas en el mieloma.
proteína kappa IgG (electroforesis de inmuno- A: frotis médula, B: frotis periférico. Note la
fijación, una muestra de control se ha ejecuta- romación de pilas de monedas de glóbulos
do a la izquierda). rojos (p. 328 y 368).
Cortesía de la Prof. Christine Lawrence. Cortesía del Prof. Tangün y el Dr. Köroglu.
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 08.qxd:Oxford 27/04/18 17:03 Página 370
370 Paraproteinemia
La paraproteinemia denota la presencia en la circulación de inmunoglobulinas produci-
das por un solo clon de células plasmáticas. La proteína se reconoce como una proteí-
na monoclonal (Banda M) en la electroforesis del suero.9 Hay seis categorías principales:
1. Mieloma múltiple. Véase p. 368.
2. Macroglobulinemia de Waldenström. Se trata de un linfoma linfoplasmocitoi-
de que produce una paraproteína IgM monoclonal. La hiperviscosidad es común
(p. 372), con síntomas del SNC y oculares. También se ven linfadenopatía y espleno-
megalia. VSG, con paraproteina IgM en electroforesis sérica. Rx: Ninguno si es asin-
tomático. Se puede usar clorambucilo, fludarabina o quimioterapia combinada. Plas-
maféresis9 para hiperviscosidad (p. 372).
3. Amiloidosis primaria. Ver tema siguiente.
Hematología
Amiloidosis
Este es un grupo de trastornos caracterizados por depósitos extracelulares de una pro-
teína con forma fibrilar anormal, resistente a la degradación. Las siguientes son las formas
sistémicas de amiloidosis. La deposición de amiloide es también una característica de la
enfermedad de Alzheimer, diabetes mellitus tipo 2 y amiloidosis relacionada con hemo-
diálisis.
Amiloide AL (amiloidosis primaria). Proliferación del clon de células plasmáticas
inmunoglobulina monoclonal amiloidogénica Depósito de proteínas de cadena lige-
ra fibrilar Fallo orgánico Muerte. Asociaciones: mieloma (15%); Waldenström, linfo-
ma. Órganos implicados:
• Riñones: lesiones glomerulares – proteinuria y síndrome nefrítico.
• Corazón: miocardiopatía restrictiva (se ve «brillante» en el eco), arritmias, angina.
• Nervios: neuropatía periférica y autonómica; síndrome del túnel carpiano.
• Intestino: macroglosia (lengua grande), malabsorción/peso, perforación, hemorragia,
obstrucción y hepatomegalia.
• Vascular: púrpura, especialmente periorbital –un dato característico (fig. 8.74).
Rx: Optimizar la nutrición; VO melphalan + prednisolona extiende la supervivencia. Dosis
alta IV de melphalan con trasplante de células madre autólogas puede ser mejor.
Amiloide AA (amiloidosis secundaria). Aquí el amiloide se deriva del amiloide
sérico A, una proteína de fase aguda, reflejando inflamación crónica en artritis reumatoi-
de, CU/Crohn, fiebre mediterránea familiar e infecciones crónicas –TB, bronquiectasias,
osteomielitis. Afecta a los riñones, el hígado y el bazo (fig. 8.75) y puede presentarse con
proteinuria, síndrome nefrótico o hepatoesplenomegalia. No se observa macroglosia; la
afectación cardíaca es rara (hipertrofia ventricular y soplos). Rx: Tratar la enfermedad sub-
yacente de forma óptima.
Amiloidosis familiar. (Autosómica dominante, p. ej., de mutaciones en transtiretina,
una proteína de transporte producida por el hígado). Suele causar una neuropatía sen-
sorial o autonómica ± afectación renal o cardíaca. El trasplante de hígado puede curar.
Diagnóstico: Se hace con biopsia de tejido afecto y tinción positiva con rojo Congo con
birrefringencia verde-manzana bajo microscopia de luz polarizada. El recto o la grasa sub-
cutánea son sitios relativamente no invasivos para la biopsia y son positivos en el 80%.
Pronóstico: La mediana de supervivencia es de 1-2 años. Pacientes con mieloma y ami-
loidosis tienen una supervivencia más corta que aquellos con mieloma solo.
9La electroforesis y la plasmaféresis parecen compartir partes, pero no: griego phoros = bearing (esis
= proceso), pero aphairesis es griego para la eliminación.
371
Hematología
Fig. 8.75. Áreas de deposición amiloide
en el hígado y el bazo en la amiloidosis
(isótopo escanear).
Reproducido de Warrell et al., Oxford Text-
book of Medicine, 2010, con permiso de
Oxford University Press.
Incluso una VSG ligeramente elevada en estos pacientes se debería inducir a uno a pre-
guntar: «¿Qué más sucede?»
Tratamiento. • En aquellos con una VSG ligeramente elevada, el mejor plan es proba-
blemente esperar un mes y repetir la prueba. • Si la VSG está elevada (> 100 mm/h),
esto puede tener un valor predictivo del 90% para enfermedad, por lo que tales pacien-
tes deben ser investigados a fondo, incluso en presencia de síntomas no específicos. Haga
una historia completa, examine cuidadosamente y considere estas pruebas: sistemático
de sangre, electroforesis de plasma, urea y electrolitos, PSA, estudio de imagen de tórax
y abdominal, ± biopsia de médula ósea o arteria temporal.
Síndrome de hiperviscosidad
Síntomas. Letargo; confusión; cognición,
alteración del SNC; dolor torácico; dolor
abdominal (y a veces sangrado espontáneo GI
o GU); desmayos; perturbación visual (p. ej.,
visión, amaurosis fugax, retinopatía –p. ej.,
congestión de venas retinianas, hemorragias,
exudados; y un disco borroso como se ve en
fig. 8.76). Los síntomas visuales son como Fig 8.76. Síndrome de hiperviscosidad.
«mirar a través de un parabrisas lloroso».
Causas de alta viscosidad sanguínea. Recuento de glóbulos rojos muy alto (hema-
tocrito > 50, p. ej., policitemia vera), recuento de glóbulos blancos (> 100 x109/L, p. ej.,
leucemia) o componentes plasmáticos –generalmente inmunoglobulinas, en el mieloma
o la macroglobulinemia de Waldenström (p. 370, dado que la IgM es más grande y por
lo tanto la viscosidad más que la misma cantidad de IgG). Fármacos: anticonceptivos
orales, diuréticos, IG IV, eritropoyetina, quimioterapia, medio de contraste raiológico.
Tratamiento. Se necesita tratamiento urgente que depende de la causa. La flebotomía
se realiza en policitemia. Leucoféresis en leucemias para eliminar los glóbulos blancos.
Plasmaféresis en mieloma y Waldenström: se extrae sangre a través de una máquina de
intercambio de plasma; el plasma sobrenadante de este se descarta, y los eritrocitos son
devueltos al paciente después de ser resuspendidos en un medio adecuado.
Hematología
pal: riñón izquierdo agrandado.) El bazo: • Es mate a la percusión. • Se agranda hacia
la FID. • Se mueve hacia abajo en la inspiración. • Puede sentir una muesca medial.
• «No se puede llegar por encima de él» (es decir, el margen superior desaparece
debajo de las costillas).
Pruebas: Estudie el bazo con ecografía o TC abdominal o CT. Búsqueda de la causa
del aumento: busque linfadenopatía y enfermedad hepática, p. ej., sistemático de san-
gre, VSG, PFH ± biopsia de hígado, médula ósea o ganglios linfáticos.
Complicaciones: Los síntomas de anemia, infección o sangrado pueden ocurrir como
resultado del hiperesplenismo: las células quedan atrapadas en el sistema reticulo-
endotelial del bazo, causando pancitopenia. La esplenectomía puede ser necesaria si
es grave.
Esplenectomía: Principales indicaciones: traumatismo esplénico, hiperesplenismo,
hemólisis autoinmune: en PTI (p. 345), anemia hemolítica autoinmune caliente
(p. 338) o anemias hemolíticas congénitas. Movilizar precozmente postesplenecto-
mía dado que transitorio de plaquetas predispone a trombos. Después de la
esplenectomía se observa un frotis de sangre característico, con cuerpos de Howell-
Jolly, cuerpos de Pappenheimer y células diana (ver p. 328).
䊳 El principal problema postesplenectomía es el aumento del riesgo de infección a lo
largo de toda la vida. El bazo contiene macrófagos que filtran y fagocitan bacterias. La
infección postesplenectomía es causada más comúnmente por organismos encap-
sulados: Streptococcus pneumoniae, Haemophilus influenzae y Neisseria meningitis.
Reduzca el riesgo dando:
1. Inmunizaciones:
• Vacuna neumocócica (p. 167), al menos 2 semanas antes de la operación para
asegurar una buena respuesta, o tan pronto como sea posible después de la
esplenectomía de emergencia, p. ej., después del trauma. Reinmunizar cada
5-10 años. Evitar durante el embarazo.
• Vacuna contra el Haemophilus influenzae tipo b (Hib, ver p. 391).
• Vacuna contra el meningococo C.
• Vacuna anual contra la gripe (p. 396).
2. Antibióticos orales profilácticos de por vida: fenoximetilpenicilina (penicilina V) o
eritromicina si alergia a la penicilina.
3. Los pacientes deben llevar colgantes, pulseras o tarjetas para alertar al personal
médico.
4. Consejos para buscar atención médica urgente si hay signos de infección: reque-
rirá administración de antibióticos de amplio espectro si se desarrolla la infección.
5. Si viaja al extranjero, advierta del riesgo de malaria severa y aconseje profilaxis
meticulosa, con redes, repelente y medicación.
El consejo dado aquí también se aplica a los pacientes hiposplénicos, p. ej., en ane-
mia de células falciformes o enfermedad celíaca.
374 Trombofilia
La trombofilia es una coagulopatía heredada o adquirida que predispone a la trombosis,
generalmente venosa: TVP o TEP (tromboembolismo venoso: TEV). Son necesarias pre-
cauciones especiales cuando hay un factor de riesgo adicional para la trombosis, p. ej.,
cirugía, embarazo o reposo forzado (véase RECUADRO para otros factores de riesgo). Solo
~ 50% de los pacientes con trombosis y antecedentes familiares tienen una trombofilia
identificable en las pruebas de rutina: otros pueden tener anomalías que aún no han sido
identificadas.
Heredada
• Resistencia a proteína A activada (PCA)/factor V Leiden: Principal causa de herencia de
trombofilia. Presente en ~ 5% de la población, aunque la mayoría no desarrollará trom-
bosis. Generalmente asociada con una única mutación puntual en el factor V (factor V
Leiden), de manera que este factor de coagulación no es descompuesto por PCA. El
Hematología
Hematología
Para trombofilia en el embarazo, véase OHCS, p. 32; para el uso de anticoagulantes
durante el embarazo y tromboprofilaxis, véase OHCS, p. 33
• Puede ocurrir retraso del crecimiento en pacientes jóvenes, y los mayores frecuente-
mente presentan más ES por el tratamiento.
• Interacciones: eficacia reducida por antiepilépticos (ver más tarde en el tema) y rifam-
picina.
• Precaución en el embarazo (puede causar retraso del crecimiento en el feto). Ver BNF
para uso en la lactancia.
Efectos secundarios: Múltiples y serios (ver tabla 8.11): minimizar estos utilizando la menor
dosis por el período de tiempo más corto posible. Prescriba calcio y suplementos de
vitamina D para reducir el riesgo de osteoporosis (p. 682) o considere bisfosfonatos.
Antes de comenzar un tratamiento a largo plazo, explique claramente al paciente los
potenciales ES y asegúrese de que es consciente de lo siguiente:
• No interrumpa los esteroides bruscamente (p. 836).
• Consulte al doctor si no se encuentra bien; aumente la dosis de esteroides (p. ej., si
requiere tratamiento antibiótico o cirugía).
• Lleve una tarjeta que indique que toma esteroides, la dosis y la indicación.
• Evite otros fármacos que no requieren prescripción, p. ej., AINE: aspirina e ibuprofeno
(riesgo de úlcera duodenal).
• El ejercicio y dejar de fumar pueden ayudar a prevenir la osteoporosis.
Azatioprina. ES: Diarrea, dolor abdominal, supresión medular (anemia, linfopenia),
nefritis, pancreatitis, transaminitis. Interacciones: Mercaptopurina y azatioprina (que es
metabolizada a mercaptopurina) son metabolizadas por la xantina oxidada (XO). Así,
que puede aparecer toxicidad si se coadministra una dosis completa de azatioprina con
inhibidores de la XO (p. ej., alopurinol). Monitorización: Debe haber guías locales para
orientar; típicamente sistemático de sangre, urea y electrolitos, creatinina, PFH semanal-
mente durante la titulación y cada 1,3 meses una vez estable.
Ciclosporina, tacrolimus. Inhibidores de la calcineurina con importantes papeles en
la reducción del rechazo en el trasplante de órganos y médula. El principal ES es nefro-
toxicidad relacionada con la dosis: controle niveles sanguíneos.
• Otros ES: hiperplasia gingival (ciclosporina), temblor, PA (suspenda si ), edema,
parestesias, confusión, convulsiones, hepatotoxicidad, linfoma, cáncer de piel –evitar
tomar el sol.
• Monitorizar urea y electrolitos y creatinina cada 2 semanas durante los primeros 3
meses, después mensualmente si dosis > 2,5 mg/kg/d (cada 2 meses si es menor que
esta). 䊳 Reduzca la dosis si la creatinina aumenta > 30% en dos determinaciones inclu-
so si la creatinina está todavía en el rango normal. Suspenda si la anormalidad persiste.
También vigile PHH.
• Las interacciones son legión: potenciadas por: ketoconazol, diltiazem, verapamilo, píl-
dora anticonceptiva, eritromicina, zumo de uva. La eficacia es reducida por: barbitúri-
cos, carbamazepina, fenitoína, rifampicina. Evite el uso concurrente de nefrotóxicos:
p. ej., gentamicina. El uso simultáneo de AINE aumenta la hepatotoxicidad –monitori-
ce PFH.
Metotrexato. Un antimetabolito. Inhibe la dihidrofolato reductasa, que participa en la
síntesis de purinas y pirimidinas. Ver p. 547.
Ciclofosfamida. Un agente alquilante. ES: supresión médula (monitorice sistemático de
sangre), náuseas, infertilidad, teratogenia, cistitis hemorrágica debida a un metabolito irri-
tante urinario. Hay un ligero riesgo de desarrollo posterior de cáncer de vejiga o leu-
cemia.
Hematología
Síndrome de Cushing
SCN Agravamiento de epilepsia
Depresión; psicosis
Ojo Cataratas; glaucoma
Papiledema
Inmune Aumento de susceptibilidad y severidad de infecciones,
p. ej., varicela
Los esteroides pueden causar fiebre y leucocitos; raramente producen leucopenia
9 Enfermedades infecciosas
Contenido
¿Qué es la vida? 379
Enfermedades infecciosas: una
visión general 380
Infección bacteriana
Infección bacteriana: una visión
general 382
Antibióticos 384
Antibióticos: tablas de
resumen 386
Bacterias grampositivas 388 Fig. 9.1. Microscopio de Leeuwenhoek. Era un
Bacterias gramnegativas 390 erudito poco común: un lencero sin educación
Tuberculosis (TB): académica. Se mezcló incómodo en un mundo
presentación 392 científico compuesto por aquellos más educados,
Tuberculosis (TB): diagnóstico y más ricos y con modales más refinados. Se sentía
tratamiento 394 indigno de publicar, sin embargo, envió cientos de
Infección viral cartas a la Royal Society, siempre pidiendo a sus
Gripe o influenza 396 lectores que tuviesen en cuenta sus humildes orí-
Virus de la inmunodeficiencia genes. A pesar de su auto-desprecio, su microsco-
humana (VIH): diagnóstico 398 pía era sofisticada. Las lentes que le sobrevivieron
Complicaciones de la infección aumentaban x266 y presentaban una resolución
por el VIH 400 de hasta 1,35 µm, comparables a las de un
VIH: tratamiento antirretroviral microscopio compuesto moderno. Gracias a él,
(TAR) 402 consiguió una de las primeras apreciaciones de las
Herpesvirus 404 criaturas vivas «invisibles» del mundo microscópi-
Otros virus 406 co. Sus microscopios eran baratos y fáciles de
Otro fabricar – hizo 500 para su uso personal. Los recu-
Inmunización 407 bría en oro y plata para añadirles el prestigio que
Hongos 408 la comunidad científica sentía que les faltaba. Pero
Infección asociada a la asistencia aquella comunidad falló a la hora de ver más allá
sanitaria (nosocomial) 410 de la punta de su nariz. Las sangrías, las purgas y
Infección de transmisión los eméticos seguirían fallando a los pacientes
sexual (ITS) 412 durante otros 150 años.
Infección importada e inusual:
Fiebres después de un viaje 414
Fiebre entérica 415
Malaria: diagnóstico 416
Tratamiento de la malaria 418
Enfermedad transmitida por los
mosquitos 420
Enfermedades transmitidas por
vectores 422
Zoonosis 424
Fiebre hemorrágica viral (VHF) 426
Gastroenteritis: una visión
general 428
Gastroenteritis: infecciones
específicas 430
Parásitos gastrointestinales 432
Esquistosomiasis y enfermedad
hepática 434
Enfermedad neurológica 436
Enfermedad ocular 438
Enfermedad de la piel en viajeros
que regresan 440
Pirexia de origen desconocido
(POD) 442
Suscitar lo extraño y lo
maravilloso 443
Enfermedades infecciosas
¿qué es lo que realmente conlleva estar vivo? ¿Están vivos los virus y los priones?
¿Cuántas ramas hay en nuestro árbol de la vida? Cuanto más nos fijamos, más com-
plejidades hallaremos. El diagrama de Hillis es un árbol filogenético circular y una
representación del lugar de la humanidad en la naturaleza. Recibimos una lección de
humildad por este desafío a nuestra imaginada auto-importancia, recordándonos
que nosotros en realidad, no ocupamos una posición privilegiada en la jerarquía de
los vivos, solo una secuencia de ARN de subunidad única (fig. 9.2).
medades de este capítulo causan patología multisistémica. Para estas infecciones, puede ser
útil clasificar por patógeno (tabla 9.1). Sin embargo, los agentes infecciosos no entran por
la puerta y nos dicen quiénes son. Puede ser necesario un trabajo de detective basado en
la geografía; o en la exposición: a vectores, animales y agua/comida contaminada.Y así otras
páginas en este capítulo tienen eso como su (útil) premisa. Cuando la infección es especí-
fica del órgano, es posible que necesite buscar en otro lugar (tabla 9.2).
Tabla 9.1. Enfermedad infecciosa por patógeno (ilustrativa, no exhaustiva)
Bacteria Virus
Grampositivo Virus de ARN
Estafilococos: Picornavirus («ARN diminuto»):
• Staphylococcus aureus (coagulasa positivo) • Rinovirus
• Staphylococcus epidermidis (coagulasa • Poliovirus
negativo) Calicivirus («taza»), p. ej., Norwalk
Estreptococos: Flavivirus («amarillo»):
• -hemolítico, p. ej., Streptococcus • Dengue • Zika
pneumoniae • Fiebre amarilla
• -hemolítico, p. ej., Streptococcus pyogenes Coronavirus («corona»): URTI
Enterococos Rhabdovirus («bastón»), p. ej., rabia
Especies de Clostridium: Filovirus («hilo»), p. ej., Ebola/Marburg
• C. botulinum (botulismo) Paramyxovirus («cerca del moco»),
• C. perfringens (gangrena de gas) p. ej., parotiditis
• C. tetani (tétanos) Virus de ADN
• C. Difícil (diarrea) Hepadnavirus («ADN del hígado»):
Gramnegativo hepatitis
Neisseria: Parvovirus («pequeño»): gastroenteritis
• N. meningitidis (meningitis) Herpesvirus («lento»):
• N. gonorrheae (gonorrea) • HSV
Helicobacter pylori • VZV
Escherichia coli • CMV
Shigella • EBV
Especies de Salmonella Hongos
Campylobacter jejuni Candida
Klebsiella pneumoniae Pneumocystis jirovecii
Pseudomonas aeruginosa Cryptococcus
Haemophilus influenzae Parásitos
Bordetella pertussis (tos ferina)
Protozoos
Vibrio cholerae (cólera)
Entamoeba histolytica
Yersinia pestis (peste)
Giardia lamblia
Micobacteria
Cryptosporidium especies
M. tuberculosis
Toxoplasma gondii
M. leprae
Especies de Plasmodium (malaria)
Bacterias intracelulares
Especies de Leishmania (leishmaniasis)
Chlamydia
Especies de Trypanosoma
Rickettsia (enfermedad rickettsial) (tripanosomiasis)
Coxiella burnetii Nematodos
Espiroquetas Helmintos transmitidos por el suelo
Borrelia burgdorferi (enfermedad de Lyme) Enfermedad filarial
Treponema (sífilis, pian) Trematodes
Leptospira (enfermedad de Weil) Schistosoma (esquistosomiasis), flukes
Cestodes
Enfermedad hidatídica, tenia
Enfermedades infecciosas
crónica p. 177
GI Esofagitis
Gastrointestinal p. 252
Gastroenteritis p. 428-33
Colitis, proctitis, diverticulitis, apendicitis
Hepatitis p. 278
Enfermedad hepática tropical p. 434-5
Colecistitis, colangitis, empiema de la vesícula biliar p. 634
Pancreatitis
Peritonitis p. 606
GU y ginecología Infección del tracto urinario inferior, cistitis, pielonefritis p. 296-7
Balanitis, orquitis, epididimitis, prostatitis
Cervicitis, vulvovaginitis p. 412-3
Ulceración y verrugas genitales p. 412-3
Enfermedad inflamatoria pélvica, endometritis OHCS, p. 286
Cardiovascular Endocarditis infecciosa p. 150-1
Miocarditis, pericarditis, mediastinitis p. 152-4
Aortitis/arteritis p. 154
Sistema nervioso Meningitis, encefalitis, empiema subdural p. 822-4
Neuropatías y mielitis transversa p. 504-5
Piel y tejidos Celulitis, miositis, fascitis p. 660-1
blandos Manifestaciones cutáneas de la enfermedad tropical p. 422-3
Infecciones 2° al trauma, p.e., herida quirúrgica p. 571, 576
Huesos y Osteomielitis ósea y articular OHCS p. 696
articulaciones Artritis séptica y bursitis p. 544
ORL Faringitis, laringitis, otitis media OHCS p. 564
Ojo Enfermedad ocular tropical p. 438-9
Glosario bacterial
Bacterias: Microorganismo procariótico sin núcleo de membrana.
Clasificación de bacterias: Mediante microscopia y cultivo de muestras corporales infecta-
das. Informa la elección de antibióticos. Incluye:
• Tinción de Gram: técnica de tinción. Las bacterias
con capas gruesas expuestas de peptidoglicano
se teñirán «grampositivo» (púrpura/azul). Las
bacterias con una capa de peptidoglicano pro-
tegida se teñirán de color rosa/rojo y son
«gramnegativos» (fig. 9.3).
• Forma: coco = redondo; bacilos = en forma de
bastón; espiroqueta= espiral.
• Aerobios/anaerobios: algunas bacterias no pue-
den sobrevivir sin oxígeno (aerobios obligato-
rios), mientras que otras no pueden crecer en
su presencia (anaerobios obligados). Muchos
más pueden sobrevivir en cualquier ambiente
(anaerobios facultativos). Algunos tipos de
infección son más propensos a involucrar bac-
terias aerobias o anaerobias, p. ej., las infeccio-
nes GI son típicamente anaeróbicas. Fig. 9.3. Membranas celulares a)
Bacteriemia: Bacterias que circulan en el torrente grampositivo versus b) gramnegativas.
sanguíneo. Reproducido con permiso de Macmillan
Bactericida: Mata las bacterias dentro y fuera del Publishers Ltd: Nature Reviews.
ciclo de replicación. Microbiology, Cabeen et al., 3(8),601-610,
Bacteriostático: Detiene la replicación sin matar las Copyright 2005.
bacterias existentes.
Bacteria encapsulada: Las bacterias con una cáp-
sula externa gruesa, p. ej., Haemophilus influenzae, Neisseria meningitidis y Streptococcus
pneumoniae. Estas son destruidas en el bazo. Después de la esplenectomía (o infarto
esplénico, p. ej., anemia de células falciformes) existe un mayor riesgo de infección por
bacterias encapsuladas, por lo que debe ofrecerse vacunación profiláctica (p. 407).
Comensal: Un organismo que vive en/sobre un huésped sin causar daño.
Endotoxina: Un complejo lipopolisacárido encontrado en la membrana externa de bac-
terias gramnegativas. Puede provocar una respuesta inflamatoria. Activa la vía alternativa
del complemento.
Enterotoxina: Exotoxina que se dirige al intestino, p. ej., toxina de Clostridium difficile
(p. 411).
Exotoxina: Toxinas secretadas por bacterias que actúan en sitios retirados de la zona de
crecimiento bacteriano. La producción de una exotoxina puede determinar la virulencia,
p. ej., toxinas de botulinum, tétanos, difteria y shiga.
Flagelo: Un apéndice parecido a una cola que se mueve para propulsar la bacteria, p. ej.,
Helicobacter pylori.
Nosocomial: Adquirido en un hospital/centro de salud (p. 410-1).
Intracelular obligatorio: Bacterias que solo pueden sobrevivir en las células huésped .·. indu-
cen una inmunidad mediada por células y no crecerán en los medios de cultivo estándar.
Tinción de Ziehl-Neesen = tinción ácido-rápida: El ácido micólico en la pared celular de
micobacterias resiste la tinción de Gram pero aparecerá en rojo con técnicas ácidas-
rápidas.
Enfermedades infecciosas
en masa y la «edad de oro» de los antibióticos, con la introducción de una variedad
de fármacos selectivamente tóxicos para las bacterias, pero no para las células de
los mamíferos. Esto se logró mediante:
• la utilización de un objetivo único para las bacterias, p. ej., la pared celular
• la selección selectiva de componentes específicos de bacterias, p. ej., enzimas, ribo-
somas
• impidiendo el transporte del fármaco a las células humanas, p. ej., el metronidazol
que solo puede ser transportado dentro de las bacterias anaerobias.
El mecanismo de acción de diferentes clases de antibióticos se muestra en la fig. 9.4.
Síntesis del folato
Síntesis de la pared Sulfonamidas
celular Síntesis de proteínas
Trimetoprim
Betalactámicos Síntesis ADN
Penicilinas Quinolonas
Cefalosporinas Metronidazol
Carbapenémicas THF A ARN polimerasa
DHF A Rifampicina
PABÁ
384 Antibióticos
Una guía para la prescripción de antibióticos
䊳䊳 Administrar antibióticos inmediatamente en pacientes con una respuesta inflamatoria sis-
témica a la infección. Ver «Sepsis», p. 792.
Comience inteligentemente:
1. No prescriba2 antibióticos en ausencia de evidencia clínica de infección bacteriana o para
una condición autolimitada. Tómese el tiempo para discurrir:
Enfermedades infecciosas
Enfermedades infecciosas
-lactámicos: penicilinas, cefalosporinas, carbapenems, monobactam
Contienen un anillo -lactámico que inhibe la formación de enlaces cruzados entre pep-
tidoglicanos en la pared celular bacteriana. La resistencia se produce cuando las bacte-
rias (p. ej., estafilococos) producen una enzima -lactamasa.
Penicilinas:
Ver tabla 9.4. Incluyen penicilinas naturales (penicilina G y V) y penicilinas sintéticas que
se modifican químicamente para ampliar su espectro de actividad, p. ej., amoxicilina, pipe-
racilina.
En un intento de superar la resistencia a -lactamasa, se han combinado penicilinas con
inhibidores de -lactamasa para crear combinaciones de inhibidores de -lactámico-
-lactamasa, p. ej., co-amoxiclav (amoxicilina + ácido clavulánico), Tazocin® (piperacilina +
tazobactam).
La resistencia estafilocócica se define convencionalmente por estabilidad a meticilina,
un ácido-lábil y único equivalente IV a flucloxacilina (ver SAMR p. 388).
Cefalosporinas:
Ver tabla 9.5. Contienen un anillo -lactámico unido a una estructura nuclear de seis
miembros (cinco en penicilina), lo que permite la modificación sintética en dos sitios (uno
en penicilina). Esto significa que las cefalosporinas son los grupos más grandes de anti-
bióticos disponibles. La clasificación en «generaciones» no está estandarizada: como regla
general: como una regla grosera, cuanto mayor sea la generación, más amplio es el es-
pectro.
Carbapenems:
Ver tabla 9.6. Espectro más amplio de todos los antibióticos -lactámicos. Busque con-
sejo microbiológico experto antes de utilizar.
Monobactam:
Aztreonam solo es activo contra especies gramnegativas, incluyendo Neisseria meningiti-
dis, Haemophilus influenzae, Pseudomonas. Dada IV/IM. Preparación para que sea inhalado
por Pseudomonas pulmonares crónicas (fibrosis quística). Ajuste de la dosis para la fun-
ción renal. ES: náuseas y vómitos, hemorragia GI, erupción,
PFH, plaquetas, parestesia,
convulsiones, broncoespasmo.
Inhibidores de la pared celular no -lactámicos
Ver fig. 9.4 y tabla 9.7. Incluye lipopéptidos, vancomicina, teicoplanina y polimixinas, p. ej.,
colistina.
Inhibidores de la síntesis de proteínas
Ver fig. 9.4 y tabla 9.8. Incluye:
• aminoglucósidos
• macrólidos
• tetraciclinas y derivados de la tetraciclina
• otros: clindamicina, linezolid, cloranfenicol, ácido fusídico.
Inhibidores de la síntesis de ácidos nucleicos
Ver fig. 9.4 y tabla 9.9. Incluye:
• inhibidores de la síntesis de folato: trimetoprim, cotrimoxazol
• fluoroquinolonas
• otros: metronidazol, rifampicina.
䊳 La nitrofurantoína es única. Los metabolitos interfieren con el crecimiento celular a tra-
vés de ribosomas, ADN, ARN y pared celular. Múltiples sitios de ataque significa resis-
tencia. Se concentra en la orina (no si es TFG), usado en ITU no complicada. ES: hemó-
lisis, fibrosis pulmonar, hepatotoxicidad.
䊳 Antibióticos para la TB, ver p. 394-5.
Enfermedades infecciosas
Amikacina y anaerobios). Tobramicina tiene toxicidad vestibular, ototoxicidad
actividad contra Pseudomonas. La
amikacina tiene menos resistencia
Macrólidos
Azitromicina Cocos grampositivos (no Ss (
con eritromicina): GI, colestasis,
Claritromicina enterococos) y estafilococos, sífilis,
QT.
Eritromicina clamidia, enfermedad de Lyme Inhibición del citocromo P450
( con azitromicina):
warfarina,
rabdomiólisis con estatinas,
niveles
de inhibidores de la calcineurina
Tetraciclinas y derivados
Tetraciclina Exacerbación EPOC, clamidia, CI: embarazo, < 8 y (dientes/huesos).
Doxiciclina enfermedad de Lyme, micoplasma, ES: náuseas y vómitos, C. difficile,
rickettsiae, Brucella, ántrax, sífilis, hígado graso, hipertensión
SAMR, profilaxis de la malaria intracraneal idiopática
Tigeciclina Grampositivos y gramnegativos Ajuste de la dosis en la disfunción
incluyendo cepas resistentes a hepática
-lactámicos ES: náuseas y vómitos, fotosensibilidad,
PFH
Otro
Clindamicina Cocos grampositivo (no
riesgo C. diffícile
enterococos), SAMR, anaerobios
Linezolid Cocos grampositivos, SAMR, ERV, IMAO: comprobar las interacciones,
anaerobios, micobacterias mielosupresión, neuropatía óptica
Cloramfenicol Grampositivo, gramnegativo, Uso sistémico limitado por supresión
anaerobios, micoplasma, clamidia, de la médula ósea
conjuntivitis (típica)
Ácido fusídico Staphylococci ES: GI,
PFH
Tabla 9.8. Inhibidores de la síntesis de ácidos nucleidos
Antibióticos Indicaciones Consideraciones
Inhibidores de la síntesis de folato
Trimetoprim Gramnegativo: ITU, prostatitis Inhibe la secreción de creatinina:
creatinina sin TFG
Cotrimoxazol Pneumocystis jirovecii, infección GI Combinación sinérgica. Buena
(sulfametoxazol (p. ej., Shigella, E. coli), Protozoos absorción oral y tejido/penetración
+ trimetoprim) (p. ej., Cyclospora), listeria, nocardia, LCR. ES: deficiencia de folato,
K+,
SAMR erupción, supresión de médula ósea,
hemólisis con deficiencia G6PD
Fluoroquinolonas
Ciprofloxacino Amplio, incluyendo Pseudomonas: ITU, SE: Irritación GI, efectos del SNC
Levofloxacino prostatitis, infección torácica atípica y ( umbral de convulsiones, cefalea,
Moxifloxacino nosocomial, diarrea infecciosa somnolencia, cambio de humor),
neuropatía periférica, tendinopatía
(Aquiles),
QT, C. difficile
Otros
Metronidazol Infección anaeróbica: intraabdominal, Buena absorción oral. Ajustar dosis
pélvica, oral, tejidos blandos. Vaginosis para la función hepática.
bacteriana. C. diffícile ES: reacción disulfiram con el alcohol,
inhibe el metabolismo de la warfarina
Rifamicinas: Las micobacterias (TB, atípicas ES: hepatitis (monitor PFH), GI,
rifampicina, micobacterias, lepra), algunos efectos del SNC, mielosupresión,
rifabutina, estafilococos, legionela, profilaxis de secreciones rojas (orina, saliva, sudor,
rifapentina meningococo esputo, lágrimas)
Enterococos:
Comensal del intestino. La resistencia a cefalosporinas y quinolonas conduce a coloniza- 389
ción e infección nosocomiales. El más común es Enterococcus fecalis: si se encuentra en
hemocultivo, asumir la endocarditis hasta que se demuestre lo contrario. Tratamiento:
resistencia intrínseca y adquirida incluyendo enterocosos resistentes a la vancomicina
(ERV). Busque ayuda experta.
Enfermedades infecciosas
Bacilos grampositivos
Listeria:
Causada por Listeria monocytogenes que vive en el suelo. Capaz de multiplicarse a baja
temperatura. Se encuentra en paté, verduras crudas/ensalada, leche sin pasteurizar/
queso. Presentación: la mayoría son asintomáticos, o enfermedad leve similar a la gripe. En
inmunodeprimidos (incluyendo ancianos): gastroenteritis, infección local (absceso, osteo-
mielitis, artritis séptica, endocarditis, neumonía), meningoencefalitis, septicemia potencial-
mente mortal. La Listeria en el embarazo puede causar enfermedad leve en la madre
pero infección transplacental placentitis, amnionitis, parto prematuro, sepsis neonatal,
muerte intrauterina. Diagnóstico: cultivo: sangre, placenta, líquido amniótico, LCR. PCR. La
serología no es específica. Tratamiento: ampicilina más gentamicina (acción sinérgica) para
la enfermedad sistémica.También cotrimoxazol (enfermedad del SNC), macrólidos, tetra-
ciclina, rifampicina, vancomicina, carbopenem. 䊳 Resistente a las cefalosporinas que a
menudo son tratamiento empírico de 1ª línea para la meningitis, así que recuerde la
cobertura antimicrobiana adicional si hay posibilidad de existencia de Listeria.
Clostridia:
• Clostridium difficile, ver p. 259, 411.
• Clostridium perfringens:
– Gastroenteritis, ver p. 430.
– Gangrena gaseosa debido a la producción de exotoxinas (la toxina alfa más común).
Previamente Clostridium welchii. Presentación: dolor repentino y severo debido a
mionecrosis, crepitación de tejido, shock sistémico. La mayoría tras la cirugía (GI,
biliar) o tras trauma de tejido blando/fractura abierta. Si es espontáneo, busque
malignidad. Tratamiento: Reconocimiento temprano, desbridamiento quirúrgico, inhi-
bidores de la síntesis de proteínas (fig 9.4, tabla 9.8), p. ej., la clindamicina inhibe las
toxinas> penicilinas. O2 hiperbárico no ha sido probado en ensayos.
• Clostridium botulinum, ver p. 436.
• Clostridium tetani, ver p. 436.
Difteria:
Causado por la toxina de Corynebacterium diphtheriae. Prevenible con vacuna. Presenta-
ción: pseudomembrana tonsilar con fiebre, disfagia dolorosa, linfadenopatía cervical (ver
OHCS, p. 158). Diagnóstico: cultivo, detección de toxinas, PCR. Tratamiento: antitoxina den-
tro de 48 h. Bencil penicilina/eritromicina. Soporte de las vías respiratorias.
Actinomicosis:
Debido a Actinomyces israelii, una membrana mucosa comensal. Presentación: Infección
granulomatosa/supurativa subaguda adyacente a la membrana mucosa. Diagnóstico: culti-
vo. Los gránulos de «azufre» en pus/tejido son patognomónicos. Tratamiento: Antibióti-
cos que cubren actinomicetos y microbios concomitantes.
Nocardia:
Causa rara de la enfermedad. Presentación: absceso de piel tropical, absceso pulmo-
nar/cerebral, infección diseminada si inmunodepresión. Tratamiento: usualmente cotrimo-
xazol.
Antrax: Ver p. 424.
Fig. 9.5. Los estreptococos se agrupan por patrones hemo-
líticos (, , o no hemolítico), por el antígeno de Lancefield
(A-G), o por especies. Rebecca Lancefield (1895-1981) se
muestra con su lente de mano, tipificando estreptococos con
una variedad de anticuerpos específicos de la proteína M. Su
laboratorio se conocía como «el Scotland Yard de los miste-
rios de los Estreptococos» después de que ella encontró
que los crímenes más graves de estreptococos casi siempre
implican a M como un cómplice secreto. Aunque ella «arres-
tó» a M en muchas ocasiones, M la sobrevivió, y todavía ace-
cha nuestras salas y clínicas.
© Dr. V Fischetti, Universidad de Rockefeller, NY.
Fig. 9.6. Lesiones maculares en las piernas. Fig. 9.7. Hemorragia masiva de la piel con
Reproducido de Warrell et al. Libro de texto de septicemia meningocócica fulminante.
Medicina Oxford, 2010, con permiso de Oxford Reproducido de Warrell et al. Libro de texto de
University Press. Oxford de Medicina, 2010, con permiso de Oxford
University Press.
Diagnóstico: 䊳䊳 Iniciar el tratamiento de inmediato si la meningitis/sepsis meningocócica es
un diagnóstico posible. No espere confirmación: el retraso puede ser mortal. Diplococos
intra o extracelulares en microscopia de LCR/sangre/lesión cutánea. PCR de LCR/san-
gre/lesión de piel. Tratamiento: tratamiento antibiótico urgente: bencilpenicilina, ceftriaxo-
na (ver p. 822-3). Cefotaxime, cloranfenicol, meropenem también son bactericidas. Pre-
vención: La vacunación infantil de rutina contra el grupo capsular C en el Reino Unido.
Vacuna del grupo capsular B en niños del Reino Unido desde 2015: induce anticuerpos
bactericidas, no hay datos poblacionales, duración de protección desconocida. Vacuna
Quadrivalent ACWY a los 14 años y si viaje de alto riesgo. Dosis adicional de B, C,
ACWY si hiperesplenismo y deficiencia del complemento. Profilaxis de los contactos:
ciprofloxacino/ceftriaxona (dosis única), o rifampicina 600 mg BD durante 48 h.
Neisseria gonorrhoea: ver p. 412-3.
Moraxella catarrhalis:
Coloniza el tracto respiratorio superior en niños ( en adultos). Se asemeja a los comen-
sales Neisseria, por lo que puede pasar desapercibido. Presentación: neumonía, exacerba-
ción de la EPOC, hasta el 20% de otitis media aguda, sinusitis. La bacteriemia es rara.
Diagnóstico: cultivo de esputo, orificio del oído, aspiración sinusal, sangre. «Signo del disco
de hockey»: las colonias pueden ser empujadas a lo largo de la superficie de Agar sin alte-
ración. Tratamiento: macrólido, cefalosporina.
Bacilos gramnegativos
Enterobacteriaceae: 391
La familia Enterobacteriaceae es grande: > 50 géneros, > 170 especies nombradas. En la
clínica, 3 especies constituyen el 80-95% de los aislamientos:
1. Escherichia coli: parte de la flora normal del colon. Las formas patógenas pueden cau-
sar:
Enfermedades infecciosas
• Enfermedad intestinal:
• Enterotoxigénica: una de las principales causas de diarrea del viajero (p. 428-9).
• Enterohemorrágica: diarrea, colitis hemorrágica, p. ej., O157:H7 (p. 431).
• Enteropatogénica: lactantes en áreas de saneamiento deficiente.
• Enteroinvasiva: síndrome similar a la disentería.
• Enteroadherente: diarrea del viajero, diarrea crónica en niños/VIH.
• Enfermedad extraintestinal: generalmente flora propia del paciente que no es pató-
gena en el intestino pero causa la enfermedad en otra parte: ITU (p. 296-7); menin-
gitis neonatal; infección nosocomial: neumonía, meningitis, sepsis. Tratar según la sen-
sibilidad: trimetoprim, ampicilina, cefalosporina, ciprofloxacino, aminoglucósido.
2. Klebsiella pneumoniae: coloniza piel, nasofaringe, tracto GI en pacientes hospitalizados.
Asociado con la exposición a los antibióticos, catéteres implantados, inmunosupre-
sión. Causa neumonía (enfermedad necrosante y sepsis si está inmunodeprimido).
También ITU, inflamación nasofaríngea. Tratar según la sensibilidad: aminoglucósido,
cefalosporina, carbapenem, quinolona.
3. Proteus mirabilis: intestino comensal. Causa ITU (p. 296-7). Formación de litiasis debido
a la producción de ureasa: descompone la urea para producir amoníaco, litiasis de
estruvita («litiasis de infección») en presencia de magnesio, calcio y fosfato (p. 638-9).
Otras Enterobacteriaceae incluyen Salmonella, Shigella, Yersinia spp: ver fiebre entérica
(p. 415), gastroenteritis (p. 428-31), peste (p. 425).
Resistencia: el uso generalizado de antibióticos ha conducido al desarrollo de especies de
E. coli y Klebsiella multirresistentes de gran virulencia, incluyendo:
• Enterobacteriaceae resistentes a carbapenem (ERC).
• Enterobacteriaceae productora de betalactamasa de espectro extendido (BLES). Resis-
tente a penicilinas, cefalosporinas, fluoroquinolonas, trimetoprim, tetraciclina, con posi-
ble extensión a otros grupos de antibióticos.
La resistencia requiere política antimicrobiana (p. 384), vigilancia, control de infección
robusto e investigación sobre el riesgo de resistencia y la transmisión (p. 383).
Pseudomonas aeruginosa:
Se encuentra en el medio ambiente. Se propaga por contacto/ingestión. Presentación:
causa importante de la infección nosocomial. Si hay infección en el tejido comprometi-
do, p. ej., herida, neumonía con enfermedad pulmonar o ventilación, ITU con sonda. Sep-
ticemia si está inmunodeprimido. Tratamiento: las opciones incluyen ceftazidima/carbepe-
nem, aminoglucósido, colistina. La combinación puede ser necesaria. La impermeabilidad
de la membrana y colonización del biofilm conducen a
resistencia antibiótica.
Resis-
tencia a múltiples medicamentos. 䊳 Pedir la ayuda de expertos.
Haemophilus influenzae:
Dividido en formas encapsuladas y tipificables (a-f); y no encapsuladas, en formas no tipi-
ficables. Portado en el tracto respiratorio superior, transmitido por gotitas. H. influenzae
b (Hib) causa meningitis, epiglotitis, otitis media, neumonía, celulitis, artritis séptica y bac-
teriemia. Fatal en ~ 5%. Inmunización de rutina en la infancia y esplenectomía/Hiposple-
nismo (p. 407). Las formas no tipificables causan neumonía y sinusitis. Tratamiento: amo-
xicilina, macrólido, cefalosporina, cloranfenicol, rifampicina.
Tos ferina:
Bordetella pertussis. Presentación: fase catarral 1-2 semanas, luego tos paroxística. La tos-
ferina es una respiración a través de cuerdas vocales parcialmente cerradas, observada
principalmente en niños. La tos es prolongada («tos de 100 días»). Lactantes: tienen
complicaciones/mortalidad. Diagnóstico: PCR nasal/muestra faríngea. Sensibilidad del cul-
tivo 10-60%. Tratamiento: macrólidos infectividad (pero puede no alterar el curso de la
enfermedad). Vacunación infantil de rutina. Vacunación en el embarazo para
tranferen-
cia de anticuerpos placentales y proteger a los recién nacidos (p. 407).
Otros:
Brucelosis (p. 424), cólera (p. 430), melioidosis (p. 414).
Casos nuevos de TB
(todas las formas) por
100.000 habitantes año
0-24,9
25-99
100-199
200-299
300
Sin datos
No aplicable
Enfermedades infecciosas
dad activa), derrame pleural. Puede formarse un aspergiloma/micetoma (p. 177) en
las cavidades. La presentación varía y puede ser silenciosa o atípica, especialmente
con la inmunosupresión, p. ej., VIH, después del trasplante.
• Linfadenitis tuberculosa: Agrandamiento indoloro (generalmente) de los ganglios
linfáticos cervicales o supraclaviculares. Afectación de los ganglios axilares e ingui-
nales menos frecuente. Síntomas sistémicos coexistentes en el 40-50%. Normal-
mente, el nodo es firme al tacto y no inflamado agudamente («absceso frío»). La
piel puede adherirse a la masa subyacente con riesgo de ruptura y formación de
fístulas. Puede ocurrir con o sin enfermedad pulmonar. Estudie mediante aspiración
con aguja fina, tinción con AFB (Ziehl-Neelsen) y cultivo (p. 394).
• Tuberculosis gastrointestinal: La mayor parte de la enfermedad es ileocecal. Causa
dolor abdominal cólico y vómitos. Puede ocurrir obstrucción intestinal debido al
engrosamiento de la pared intestinal, formación de estenosis o adherencias infla-
matorias. Es necesaria la biopsia para el diagnóstico. La necrosis caseificante y la
ausencia de erosiones/fisuras transmurales la distinguen de enfermedad de Crohn.
• Tuberculosis espinal: Dolor local y sensibilidad ósea durante semanas-meses. Pro-
gresión lenta, insidioso. Puede no presentarse hasta la deformidad o síntomas neu-
rológicos. Busque destrucción ósea, colapso vertebral y absceso de tejido blando
(ver vértebra de Pott, p. 708 y OHCS p. 696).
• TB miliar: Diseminación hematógena
que conduce a la formación de focos
(~ 2 mm) de tejido granulomatoso a
través del pulmón (apariencia de
semilla de «mijo») RXT: fig. 9.9. La
diseminación se produce por todo el
cuerpo con afectación meníngea en
~ 25%. El esputo puede ser negativo
para la AFB (Zielh-Nielsen) dado
que la propagación es hematógena.
Tener un bajo límite para PL. Se
supone que la mortalidad no tratada
es cercana al 100%. No retrase el
tratamiento mientras que los resulta-
dos de las pruebas estén pendientes.
• TB SNC: Propagación hematógena en
focos de infección en el cerebro y Fig. 9.9. TB miliar (opacidades nodulares).
médula espinal. Los focos pueden © Dr Vijay Sadasivam, radiólogo, SKS Hosp, Salem,
agrandarse para formar tuberculo- Tamil Nadu, India.
mas. La ruptura de los focos condu-
ce a meningitis.
Riesgo con inmunosupresión, VIH, < 3 años. Dolor de cabeza,
meningismo, confusión, convulsiones, déficit neurológico focal y síntomas sistémi-
cos. Necesita PL y examen del LCR (leucocitosis, proteína elevada, glucosa LCR:
plasma < 50%, tinción AFB (Zielh-Neelsen), PCR y cultivo). Busque TB en otros
lugares (RXT, etc.), prueba de VIH. La TC/RM puede mostrar hidrocefalia, exuda-
dos basales. Los tuberculomas tienen realce en anillo. 䊳䊳 Todas las pruebas diag-
nósticas rápidas (p. 394) tienen sensibilidad, por lo que debe tratar cuando haya
sospecha.
• TB genitourinaria: Los síntomas pueden ser crónicos, intermitentes o silentes. Incluir
disuria, aumento frecuencia miccional, dolor lumbar, hematuria, piuria estéril (ver
p. 296). Los granulomas pueden causar fibrosis, estenosis, infertilidad y ulceración
genital.
• TB cardíaca: Por lo general involucra el pericardio: pericarditis, derrame pericárdi-
co y/o pericarditis constrictiva (p. 154). Comprobar la imagen del tórax buscando
otra patología de la TB, p. ej., enfermedad pulmonar, ganglios mediastínicos. Puede
estar indicada la pericardiectomía para la constricción persistente a pesar del tra-
tamiento antituberculoso. La afectación miocárdica (arritmias, insuficiencia cardíaca,
aneurisma ventricular u obstrucción del tracto de salida) es poco frecuente.
• Piel: Lupus vulgaris: TB cutánea persistente, progresiva, cutánea, nódulos rojo-
marrón, «jalea de manzana». Escrofuloderma: lesión de la piel extendida de la infec-
ción subyacente, p. ej., ganglio linfático, hueso. Provoca ulceración y cicatrización.
Tratamiento
Los antibióticos utilizados en el tratamiento3 de la TB se detallan en la tabla 9.10.
Tabla 9.10. Antibióticos utilizados en el tratamiento de la tuberculosis
Curso estándar para
Antibiótico Notas
enfermedad activa
Rifampicina 2 meses intensivo Inductor enzimático: cuidado con warfarina,
4 meses de continuación inhibidores de la calcineurina, estrógenos, fenitoína;
secreciones corporales color naranja-rojo (incluye tinción
de lentes de contacto); función hepática alterada
Isoniazida 2 meses intensivo Inhibe la formación de piridoxina activa (Vit B6) que
4 meses de continuación causa una neuropatía periférica (
riesgo con DM, ERC,
VIH, desnutrición)\dar con piridoxina profiláctica; hepatitis
Pirazinamida 2 meses intensivo Hepatotoxicidad idiosincrática, dosis si eTFG < 30
Etambutol 2 meses intensivo Ceguera de color, agudeza visual, neuritis óptica.
Compruebe la agudeza visual al inicio del tratamiento,
vigile los síntomas. Control visual mensual si el tratamiento
> 2 meses. Controle los niveles si eTFG < 30
TB latente
Equilibrar el riesgo de desarrollo activo de la enfermedad con los posibles efectos secun- 395
darios de tratamiento. Considerar el tratamiento en todos con
riesgo de que se des-
arrolle la enfermedad activa: VIH, trasplante, quimioterapia, agentes biológicos, p. ej., anti-
TNF (ver p. 365), diabetes, ERC incluyendo diálisis, silicosis, cirugía bariátrica y reciente
contacto cercano con pacientes TB pulmonares/laríngeos. Ofrezca la realización de prue-
Enfermedades infecciosas
bas de VIH, hepatitis B y C antes del tratamiento.
Tratar con 3 meses de isoniazida (con piridoxina) y rifampicina o 6 meses de isoniazi-
da (con piridoxina).
Si existe preocupación por la posible hepatotoxicidad, puede preferirse 3 meses de
isoniazida y rifampicina. En caso de enfermedad hepática grave, consultar a un especialis-
ta. Si las interacciones con rifamicinas son una preocupación (p. ej.,VIH, trasplante), enton-
ces pueden preferirse 6 meses de isoniazida.
TB activa
Todas las formas de TB activa deben ser obligatoriamente notificadas en el Reino Unido.
Esto incluye tanto diagnóstico clínico como microbiológico. La notificación es a través del
equipo local de protección de la salud pública (www. Gov.uk/health-protection-team). El
tratamiento es administrado bajo el cuidado de un especialista en clínica/servicio de
acuerdo con la tabla 9.11. Las excepciones incluyen:
• enfermedad activa del SNC (incluyendo afectación de la médula espinal): la fase de
continuación del tratamiento se amplía de 4 a 10 meses
• enfermedad del SNC y pericárdico: use esteroides adyuvantes en dosis altas (con dis-
minución y retirada durante el período de tratamiento intensivo)
• TB resistente a los medicamentos (ver más adelante en el tema).
La adherencia es importante para que el tratamiento sea eficaz y para prevenir la resis-
tencia a los fármacos. La terapia observada directamente (TOD) debe ser considerada si:
hay tratamiento previo para TB, o personas sin hogar, mal uso de drogas/alcohol, prisión,
trastorno psiquiátrico o cognitivo, resistencia a medicamentos, o por solicitud del paciente.
El acceso universal al diagnóstico y tratamiento de la TB forma parte de la justicia
social. La OMS ha desarrollado una estrategia de «Fin de TB» con el objetivo de reducir
las muertes por tuberculosis en un 90% para 2030, y la incidencia de tuberculosis en un
90% para 2035 (www.who.int/tb/strategy/en).
TB resistente a los medicamentos
PAAN (p. 394) debe ser solicitado para todos los pacientes con factores de riesgo que
puedan desarrollar resistencia a fármacos: tratamiento previo de TB, contacto con enfer-
medad resistente a fármacos, nacimiento o residencia en un país donde 5% de nuevos
casos son resistentes a fármacos (fig 9.10). La resistencia a fármacos puede ser:
• a cualquier agente individual en la tabla 9.11. La resistencia a la rifampicina se maneja
como enfermedad resistente a múltiples fármacos.
• TB multirresistente (TB-RMF): resistente a la rifampicina y a la isoniazida
• TB extensamente resistente a los fármacos (TB-ERF): resistente a rifampicina, isoniazi-
da, un agente inyectable (capreomicina, kanamicina o amicacina) y una fluoroquinolona.
Si se detecta resistencia a la rifampicina, tratar con al menos seis agentes a los que la
micobacteria es probable que sea sensible. Prueba de resistencia a fármacos de 2ª línea.
Recuerde medidas de control de la infección. Busque consejo de expertos para todos
los casos resistentes a fármacos.
Porcentaje
de casos
0-2,9
3-5,9
6-11,9
12-17,9
>18
Sin datos
No aplicable
Infección viral aguda de los pulmones y vías respiratorias. Propagación rápida de perso-
na a persona por gotitas aerosolizadas y contacto. Infectividad desde 1 d antes, hasta
~ 7 d después de los síntomas. Incluye tres subtipos de virus: A, B y C. La gripe de tipo
A se subdivide según combinaciones de proteínas de superficie vírica, p. ej., A (H1N1), A
(H3N2). Las epidemias estacionales tienen su máxima incidencia durante el invierno en
los países templados. La inmunidad adquirida es específica para el subtipo de virus.
Presentación: Incubación: 1-4 d. Fiebre, tos seca, dolor de garganta, síntomas de coriza,
cefalea, malestar, mialgia, conjuntivitis, dolor ocular ± fotofobia. Las complicaciones inclu-
yen neumonía, exacerbación de la enfermedad pulmonar crónica, crup o laringotra-
queobronquitis, otitis media, diarrea y vómitos, miositis, encefalitis, síndrome de Reye
(encefalopatía + fallo de hígado degenerativo graso).
Diagnóstico: Clínico: inicio agudo + tos + fiebre tiene valor predictivo positivo> 79%. Las
pruebas se limitan a brotes y la vigilancia de la salud pública incluye: PCR viral, pruebas
de antígeno rápido, cultivo viral de muestras clínicas (frotis de garganta, frotis nasal, lava-
do nasofaríngeo, esputo).
Tratamiento:
• Gripe no complicada, tratamiento sintomático, p. ej., paracetamol. Antivirales solo si alto
riesgo:
– Enfermedad crónica: pulmón, corazón, riñón, hígado, SNC, DM
– Inmunosupresión: inmunodeficiencia, actual o planeada, o dentro de los 6 meses de
tratamiento inmunosupresor, CD4 (< 200 en adultos, < 500 si el niño < 5 años).
– Embarazo – > 65 años – Esplenectomía/hiposplenismo
– IMC> 40 – < 6 meses de edad.
• Gripe complicada incluye hospitalización, infección del tracto respiratorio inferior, exa-
cerbación de cualquier condición médica subyacente. Administre antivirales. Las opcio-
nes antivirales4 en el Reino Unido son inhibidores de la influenza neuraminidasa:
1. Osteltamivir: VO o NG. Dosis para adultos: 75 mg BD. 5 d curso. 1ª línea en Reino
Unido.
2. Zanamivir: inhalado (10 mg BD, pauta de 5 d, técnica confirmada), nebulizado o IV
(enfermedad respiratoria que afecta la entrega del nebulizador, UCI). Se utiliza si:
hay resistencia a oseltamivir (p. ej., A (H1N1)), mala respuesta clínica al oseltamivir,
preocupación por la absorción GI de oseltamivir.
Los datos observacionales retrospectivos y los estudios con animales de oseltamivir y
zanamivir no muestran evidencia de daño durante el embarazo. Tratamiento de apoyo
para todos. Se ha utilizado oxigenación extracorpórea de membrana (ECMO) para apo-
yar el intercambio de gases en lesiones pulmonares agudas severas por gripe.
Prevención:
• Profilaxis postexposición: si es de alto riesgo (ver «Tratamiento») Y si no está protegido
por vacunación: oseltamivir VO OD (inhalación de zanamivir OD en caso de resisten-
cia al oseltamivir) durante 10 d.
• Vacunación anual en el Reino Unido: todos los de alto riesgo (ver «Tratamiento»),
niños> 2 años, trabajadores sanitarios (ver p. 407).
Gripe pandémica
La gripe estacional está sujeta a la variación antigénica: pequeños cambios genéticos
durante la replicación que pueden ser contabilizados en la vacuna anual. Para los que no
existe inmunidad preexistente en la población, el cambio antigénico mayor es un cambio
de influenza A, que resulta en nuevas proteínas de hemaglutinina (H) y neuraminidasa
(N). Cualquier virus de la influenza no humano que transfiere a los virus de la influenza
a los humanos son nuevos. Si también capacidad para la transmisión humano-humano
rápida, se produce una pandemia. Sobre la base de pandemias anteriores, hasta el 50%
de la población del Reino Unido puede infectarse, lo que conduce a 20.000-750.000
exceso de muertes.
Enfermedades infecciosas
progreso se tambalea. El mástil (spar) de la pandemia influenza es un larguero alto
y vertical que produce la máxima tracción cuando el viento hincha las velas y per-
mite que los marineros suban arriba para ver lo que el horizonte nos depara. Cuan-
do nos preparamos para una gripe pandémica, debemos prepararnos un entrena-
miento (spar) de principios y planes adecuados para la tormenta que se avecina:
• Vigilancia (surveillance), planificación y comunicación: se ha realizado vigilancia viro-
lógica mundial de la gripe a través de la OMS durante> 50 años. Ofrece una aler-
ta global, un mecanismo para los virus con potencial pandémico y define meto-
dologías para evaluación de la susceptibilidad antiviral. Cooperación entre las orga-
nizaciones de salud pública internacionales y nacionales para comprender las
características clínicas y la propagación de la enfermedad. Es necesaria la comuni-
cación al individuo (medios públicos y sociales) con consejos sobre el autoaisla-
miento, cuándo y cómo buscar ayuda médica y la higiene personal.
• Proteger: desarrollo de vacunas y capacidad de producción (almacenamiento),
equipo de protección personal (delantal, guantes, mascarilla protectora), adminis-
tración antiviral según pruebas sólidas y sensibilidad.
• Animales: limitación/eliminación del reservorio animal de virus por sacrificio, res-
tricción de movimiento de animales, vacunación de ganado.
• Investigación (research): características del virus, predictores de la gravedad de la
enfermedad, epidemiología, los factores de riesgo, desarrollo de antivirales, focali-
zación del tratamiento y vacunación, vacunas de mayor espectro con inmunidad
más duradera, cuidados de salud eficaces, la protección de los trabajadores y las
medidas de distanciamiento social basadas en la evidencia.
«Jugar al escondite»
En 2009, hubo una preocupación mundial justificada por una pandemia de gripe por-
cina. Basado en una revisión Cochrane en 2008, que mostró una reducción de las
complicaciones con el oseltamivir (Tamiflu®), se gastaron miles de millones en alma-
cenar la droga en todo el mundo.
De hecho, la conclusión positiva fue impulsada principalmente por el resumen de
unos datos de 10 estudios financiados por la industria, de los cuales solo dos habían
sido publicados5. Cochrane necesitaba acceso a estos datos perdidos. La consi-
guiente lucha por la información duraría 5 años. La oferta de un contrato secreto,
con términos secretos y secreto sobre los métodos fue declinado. Estos métodos
no eran aceptables para el metanálisis. Comenzaron a surgir incoherencias en las
conclusiones sobre la eficacia. ¿Estaba la gente viendo datos diferentes, o era sim-
plemente una llamada de atención sobre diferentes conclusiones separadas por una
«valla» muy pequeña? De cualquier manera, ver todos los datos comenzó a ser cada
vez más importante. Pero como sabemos, la investigación del medicamento en su
fase tres nunca había sido publicado. Y ¿la autocomunicación de una neumonía era
un buen parámetro de eficacia primaria? En diciembre de 2009, Cochrane solo podía
declarar que la escasez de datos socavaba las conclusiones anteriores.
Esta batalla por los datos se convirtió en parte de «Alltrials»: una campaña de trans-
parencia en todos los ensayos clínicos. ~ 50% de todos los ensayos clínicos no se publi-
can. Esta «caza» por los resultados continúan, encontrarlos es muy dificil. Usted puede
realizar su propia investigación sobre medicamentos, elegir qué publicar y ver cómo los
datos son sesgados en: www.alltrials.net/news/the-economist-publication-bias.
Después de media década, bajo demanda incesante y con la retención de datos
cada vez más indefendibles, se publicaron los informes del estudio clínico. Estas se
utilizan normalmente para proporcionar a las autoridades un informe detallado de
las investigaciones. La evaluación de 160.000 páginas era un territorio desconocido
para Cochrane pero llegó a la conclusión de que: el oseltamivir acorta los síntomas
por < 1 d pero la hospitalización no se reduce. Otras complicaciones fueron repor-
tadas de forma poco fiable.
La OMS incluye el oseltamivir en su Lista modelo de medicamentos esenciales (19
edición, 2015), lo que significa que se considera eficaz, seguro, coste-efectivo y por
lo tanto básico para la atención primaria. ¿Resiste esto un escrutinio independiente?
La base de la evidencia está ciertamente empañada. Pero una pandemia no es un
ECA. Y el umbral de la evidencia para revertir decisiones de política puede ser dife-
rente del umbral necesario para introducirlos. Si se avecina una nueva pandemia,
millones más serán tirados, por ahora.
Epidemiología
Se estima que ~37 millones de adultos y niños viven con el VIH en todo el mundo
(fig. 9.11), con 1,2 millones de muertes/año. África tiene la mayor parte de la enfermedad
(~ 26 millones), la mayor tasa de mortalidad (790.000/año) y ~1% de la riqueza mundial.
En Reino Unido: estimado ~ 100.000 que viven con el VIH (= 1.9/1000) incluyendo el
5% de hombres que tienen sexo con hombres (HSH). ~ 17% de las personas con VIH
en el Reino Unido no son conscientes de su infección.
Presentación
Con síntomas de infección temprana por el VIH: 399
• La infección primaria por VIH es sintomática en ~ 80%, típicamente 2-4 semanas des-
pués de la infección (= enfermedad seroconversión, síndrome retroviral agudo). Man-
tener un alto índice de sospecha. Ofrezca prueba del VIH a cualquier persona (inde-
pendientemente de su riesgo) que se presente con síntomas gripales y una erupción
Enfermedades infecciosas
erimatosa/maculopapular. Considerar el VIH primario en el diagnóstico diferencial de
cualquier combinación de fiebre, erupción, mialgia, faringitis, ulceración mucosa, linfa-
denopatía y cefalea/meningitis aséptica. El diagnóstico del VIH primario es una oportu-
nidad única para prevenir la transmisión (
carga viral y dispersión por vía genital). La
prueba de anticuerpos contra el VIH puede ser negativa, pero los niveles de RNA del
VIH son altos –busque ayuda experta con respecto a las pruebas de carga viral (ver
prueba de VIH más adelante en el tema).
• Linfadenopatía generalizada persistente, nódulos linfáticos inflamados/agrandados> 1
cm en dos o más sitios no contiguos (no inguinales) que persistan durante más de 3
meses. Debido a hiperplasia folicular causada por la infección por el VIH. Excluir la TB,
la infección y la malignidad.
En la fase latente asintomática de la infección crónica por VIH:
En el Reino Unido hay pruebas universales en clínicas de salud sexual, servicios prenatales,
dependencia y en pacientes con TB/hepatitis B/hepatitis C/linfoma. Donde la prevalencia del
VIH es> 2/1000 deben considerarse las pruebas universales por médicos de familia y otras
unidades médicas. Cualquier solicitud para una prueba de VIH debe ser cumplida.
Con complicaciones de la disfunción del sistema inmune: Ver p. 400-1.
Prueba del VIH
El pronóstico para los pacientes con VIH en el Reino Unido es mucho mejor que para
muchos otros pacientes de otras enfermedades graves para los que los médicos realizan
pruebas de forma rutinaria. La prueba del VIH6 no debe ser vista de manera diferente. Cual-
quier médico puede solicitar una prueba de VIH: explique los beneficios de las pruebas y
detalle cómo deben darse los resultados. El consentimiento por escrito es innecesario. Orga-
nizar el seguimiento con un servicio VIH/salud sexual o genitourinario local en el plazo de
2 semanas (preferiblemente < 48 h) para los pacientes que dan positivo por primera vez.
• ELISA para el anticuerpo y antígeno del VIH (p. 24): Ensayos de 4ª generación para el
anticuerpo del VIH y antígeno p. 24. Esto reduce el «período de ventana» (tiempo de
pruebas falsas negativas entre la infección y la producción de antígeno/anticuerpo
medible). El promedio son ~ 10 días. El diagnóstico en el Reino Unido está confirma-
do por un ensayo confirmatorio.
• Pruebas rápidas en el punto de atención: Kit de inmunoensayo que da un resultado rápi-
do, esta toma se hace por medio de un pinchazo de dedo o hisopo bucal. Solo deben
utilizarse kits marcados con CE. Se necesita confirmación serológicas.
• Carga viral: Cuantificación del ARN del VIH. Se utiliza para monitorizar la respuesta al
TAR. No diagnóstico debido a la posibilidad de un resultado falso-positivo .·. cuidado
si se usa para HVI primaria sintomática en el «período de ventana» –la confirmación
de la seroconversión es todavía necesaria.
• Prueba de ácido nucleico/PCR viral: Prueba cualitativa para la presencia de ARN viral.
Usado para probar la transmisión vertical en recién nacidos dado que la transferencia
placentaria de anticuerpos maternos puede afectar las pruebas de anticuerpos ELISA
hasta los 18 meses de edad.
• Recuento de CD4: No se puede diagnosticar el VIH. Se utiliza para monitorear la fun-
ción del sistema inmunológico y progresión de la enfermedad en pacientes con VIH. <
200 células/microlitro es una de las definiciones para el sida.
䊳 Ver www.aidsmap.com para ver las pruebas de VIH disponibles y los recursos específi-
cos del país.
Lesión por pinchazo con aguja
Riesgo de transmisión del VIH a partir de una sola exposición de pinchazo con aguja
de una persona con el VIH no en TAR es ~ 1 en 300 (menor que los riesgos de
transmisión de hepatitis B y C).
Prevenir:
• Use «objetos cortantes seguros» (incorporan un mecanismo para minimizar lesio-
nes accidentales).
• No vuelva a cubrir objetos médicos punzantes no protegidos.
• Cuando utilice objetos punzantes, asegúrese de que hay un contenedor de elimi-
nación cerca.
Tratamiento:
• Facilite que la herida sangre, idealmente bajo agua corriente (no chupe).
• Lave con jabón y agua corriente, no frote.
• Busque asesoramiento de control de salud ocupacional/infección (o urgencias
fuera de horas de trabajo) con respecto a los análisis y a la profilaxis posterior a
la exposición (p. 398).
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 09.qxd:Oxford 27/04/18 17:13 Página 400
Enfermedades infecciosas
Complicación por comorbilidad
• Enfermedad cardiovascular: Aumento del riesgo de ECV en el VIH. Incluye indivi-
duos con riesgo tradicionalmente menor: menor edad, normotensos, no DM, no
obesos. Factores que contribuyen: dislipidemia causada por el TAR, aceleración de
la inflamación pro-aterosclerosis por el VIH. Vigilar los factores de riesgo CV, aun-
que no hay datos en el resultado para orientar objetivos específicos de lípidos y
PA en el VIH.
• Enfermedades óseas: Aumento del riesgo de baja densidad mineral ósea y fractu-
ras por fragilidad en el VIH. Factores contribuyentes: efecto secundario del TAR,
aumento de la prevalencia de factores de riesgo, p. ej., mala nutrición, fumar, alco-
hol, bajos niveles de vitamina D. Evaluación del riesgo y considerar bisfosfonato.
• TB: Todos los pacientes con TB y VIH necesitan TAR (tan pronto como se tolere
el tratamiento de TB y dentro de 2 semanas si CD4 < 100 células/microlitro).
Consultar a un experto y revisarlo con las directrices locales. Considere Truvada®
más efavirenz como 1ª línea en el Reino Unido (niveles séricos de los inhibidores
de la integrasa disminuyen con la rifampicina). Ver TAR, p. 402-3, TB, p. 394-5.
• Hepatitis B (VHB): La coinfección requiere un régimen de TAR incluyendo antivi-
rales con actividad anti-VHB, p. ej., tenofovir más emtricitabina (no lamivudina ni
emtricitabina como agente único debido al potencial de aparición de resistencia
al VHB).
• Hepatitis C (VHC): Evaluar todos con VIH para el tratamiento del VHC. El interfe-
rón pegilado es menos eficaz con menor recuento de CD4. Objetivo de CD4>
500 células/microlitro con TRA primero.
Tabla 9.11. Diagnóstico diferencial en el VIH
Presentación Diagnóstico diferencial
Fiebre Candidiasis, absceso intraoral, sinusitis, neumonía, TB, endocarditis, meningitis,
encefalitis, piomiositis, linfoma, inmunorreconstitución después del inicio del
TAR, cualquier otra causa no relacionada con el VIH
Linfadenopatía Linfadenopatía generalizada persistente (p. 399), TB, sífilis, histoplasmosis,
criptococo, linfoma, sarcoma de Kaposi, infección local
Erupción cutánea Reacción a fármacos, herpes zóster, sarna, criptococo cutáneo o histoplasmosis,
sarcoma de Kaposi, dermatitis seborreica
Tos/disnea Neumonía adquirida en la comunidad, Pneumocystis jirovecii, TB, compresión
bronquial (TB, linfoma, sarcoma de Kaposi), sarcoma de Kaposi pulmonar
(poco frecuente), insuficiencia cardíaca (miocardiopatía por VIH, derrame
pericárdico infeccioso, vasculopatía del VIH)
Diarrea Salmonella, Shigella, Clostridium difficile, amebiasis, Giardia, Cryptosporidia, CMV,
enteropatía por VIH (diagnóstico de exclusión)
Dolor abdominal TB, colitis por CMV, pancreatitis (CMV, TB o secundario a TAR)
䊳 No olvide una prueba de embarazo
Disfagia Candidiasis, HSV
Enzimas Hepatitis viral (A, B, C, CMV, HSV, EBV), lesión hepática inducida por fármacos
hepáticos (anti-TB o TAR), colangiopatía del VIH, linfoma, congestión debida a
enfermedad cardiovascular (¿afectación pericárdica?)
LRA Prerrenal debido a sepsis/deshidratación, nefritis intersticial secundaria a
medicamentos, nefropatía asociada al VIH (proteinuria, ERC)
Cefalea/ Meningitis (bacteriana, TB, criptococo, sífilis), empiema, lesión ocupante de espacio
Convulsiones/ (toxoplasmosis, linfoma, tuberculoma), reacciones adversas al fármaco,
sintomatología encefalopatía por VIH, leucoencefalopatía multifocal progresiva (LMP), accidente
neurológica focal cerebrovascular (vasculopatía del VIH). Ver p. 517
Enfermedad ocular Herpes zóster, retinitis por CMV. Ver p. 438-9
Periférico TAR, CMV, neuropatía del VIH, deficiencia nutricional
neuropatía
Pi
ADN del VIH
Proteínas
INSTI Transcriptasa
NRTI reversa
NNRTI
Enfermedades infecciosas
• Inhibidor no nucleósido de la transcriptasa inversa.
• Inhibidor de la integrasa.
Los medicamentos de 1ª línea comúnmente utilizados en el Reino Unido incluyen:
• Columna vertebral de NRTI: Tenofovir y emtricitabina (tableta de combinación =
Truvada®), abacavir y lamivudina (comprimido de combinación = Kivexa®). Efec-
tos adversos: perturbaciones gastrointestinales, anorexia, pancreatitis, disfunción
hepática (acidosis láctica grave con hepatomegalia y esteatosis hepática, precau-
ción con hepatitis B/C), densidad mineral ósea. Evite el abacavir si existe alto ries-
go de ECV. Evite tenofovir si eTFG < 30.
• Inhibidores de la proteasa: Atazanavir, darunavir. Efectos adversos: hiperglucemia,
resistencia a la insulina (principalmente medicamentos de 1ª generación), dislipi-
demia, ictericia y hepatitis.
• NNTRI: Rilpivirina (dar con alimentos, interacción con inhibidores de la bomba de
protones), efavirenz (toxicidad del SNC, asociación con el suicidio .·. cuidado en la
depresión/ansiedad, perfil lipídico adverso). Otros efectos secundarios: erupción
cutánea, alteración GI.
• Inhibidor de la integrasa: Dolutegravir, elvitegravir, raltegravir. Efectos adversos: erup-
ción cutánea, perturbación en GI, insomnio.
Monitor: adherencia (ver RECUADRO «Adherencia»), efectos adversos (PFH, glucosa),
respuesta virológica (carga viral). CD4 cuenta guía profilaxis de infección oportunis-
ta (los valores pueden no correlacionarse con la respuesta virológica, usar la carga
viral preferentemente).
Adherencia
La adherencia a la TAR está asociada con la resistencia a los medicamentos, pro-
gresión de la enfermedad y muerte. El apoyo a la adhesión debe ser parte integral
de la provisión de la TAR.
Evaluar: Pregunte acerca de la adherencia de una manera no crítica. No culpabilizar al
paciente. Explique el razonamiento detrás de cada pregunta. ¿La no adherencia se debe
a problemas prácticos o creencias sobre lo que hay que hacer sobre determinados
temas de salud? Esté listo para abordar ambos. ¿Qué ayuda le gustaría a su paciente?
Intervenir: Normalizar la situación –las dudas y preocupaciones sobre la TAR son
comunes. Encuentre tiempo para discusión/información para tranquilizar al pacien-
te. Simplificar el régimen de dosificación, ofrecer la posibilidad de un sistema de
medicación multicompartimental. Vincular la toma de medicamentos a una actividad
diaria regular. Discutir los efectos secundarios: ¿cuáles son los riesgos/beneficios del
cambio la dosis o de régimen de TAR?
404 Herpesvirus
Virus del herpes simple (VHS) (herpesvirus humano 1 y 2)
Incluye VHS1 y VHS2. Hay infección por VHS1 en 2/3 de la población mundial (~ 3,7 mil
millones < 50 años) y VHS2 en ~ 11% (~ 400 millones). Los virus se multiplican en las
células epiteliales de la superficie mucosa produciendo vesículas o úlceras. Hay infección
latente durante toda la vida cuando el virus entra en las neuronas sensoriales en el sitio
de la infección. Puede reactivar, replicar e infectar el tejido circundante. Infección disemi-
Enfermedades infecciosas
Enfermedades infecciosas
megalia, hepatomegalia, ictericia. El malestar es prominente. Resolución de los síntomas
usualmente dentro de 2 semanas. La infección crónica activa y la recurrencia son raras.
Oncogenicidad: ver RECUADRO «Virus oncogénicos».
Diagnóstico:
• Frotis de sangre: linfocitosis.También ocurren linfocitos atípicos (núcleos grandes e irre-
gulares) en otras infecciones virales (CMV, VIH, parvovirus, dengue), toxoplasmosis,
tifus, leucemia, linfoma, reacciones medicamentosas, envenenamiento por plomo.
• Las pruebas de anticuerpos heterófilos (p. ej., Monospot®, Paul-Bunnell) detectan anti-
cuerpos heterófilos no EBV que están presentes en ~ 85% de los sueros de mononu-
cleosis infecciosa. Falso positivo: embarazo, enfermedad autoinmune, linfoma/leucemia.
• Serología: IgM contra antígeno de cápside viral VEB en la infección aguda. IgG si infec-
ción pasada.
• PCR viral con transcriptasa inversa.
Tratamiento: De soporte. 䊳 Busque ayuda experta en caso de enfermedad grave/inmu-
nosupresión: datos observacionales sobre el uso de antivirales y esteroides.
Citomegalovirus (CMV) (herpesvirus humano 5)
50-100% de los adultos son seropositivos dependiendo del riesgo socioeconómico y
sexual. Infección latente: dispersión viral periódica, asintomática (pero infeccioso) en los
fluidos corporales incluyendo la transfusión de sangre, el trasplante (donante CMV posi-
tivo al receptor CMV negativo).
Presentación: Asintomática en la mayoría. Los síntomas imitan la mononucleosis infeccio-
sa o hepatitis. Enfermedad grave en inmunodepridos (postrasplante, VIH): esofagitis, gas-
tritis, colitis, retinitis (p. 438), neumonitis, hepatitis. Infección en el embarazo se asocia con
anomalía congénita.
Diagnóstico: Infección primaria en inmunocompetentes: IgM. Inmunodeprimido: prueba
de amplificación de ácido nucleico cuantitativa (TANC) en sangre superior a un umbral
definido, o titulación creciente. Enfermedad invasiva: TANC en tejido, histopatología.
Tratamiento: Dado en infección grave/inmunosupresión. Ganciclovir, valganciclovir (
bio-
disponibilidad oral). Foscarnet y cidofovir: la nefrotoxicidad limita el uso. Preferencia en
pacientes trasplantados basados en los resultados de TANC. El riesgo/beneficio para anti-
virales/inmunoglobulina en el embarazo sigue siendo poco claro. Utilizar CMV negativo,
sangre irradiada para transfusión si es inmunodeprimido y hay riesgo: transplante, VIH,
leucemia.
Otros virus del herpes
Herpesvirus humano 6 (HVH6): Roseola infantum, enfermedad febril sin erupción cutánea.
Herpesvirus humano 8 (HVV8): Oncogénico (ver RECUADRO «Virus oncogénicos»), enfer-
medad de Castleman’s.
Virus oncogénicos
~ 12% de los cánceres humanos son causados por virus, > 80% de estos ocurren
en países de ingresos bajos y medios (tabla 9.12).
Rasgos comunes de los oncovirus:
• El virus es necesario pero no es suficiente para causar cáncer.
• Los cánceres aparecen en el contexto de la infección crónica, llevando años-déca-
das para aparecer.
• El sistema inmunológico tiene un papel variable: los cánceres están asociados con
la inmunosupresión y la inflamación crónica.
Tabla 9.12. Virus oncogénicos
Virus Cánceres
VEB (HVH4) Linfoma de Burkitt, linfoma de Hodgkin, linfoma de células B en
inmunosupresión, cáncer gástrico, cáncer nasofaríngeo, postrasplante
enfermedad linfoproliferativa (ELP)
HVH8 Sarcoma de Kaposi (p. 400) y linfoma primario
VPH Cáncer de cuello uterino, ano, vulva, pene, cabeza, cuello, orofaringe
Hepatitis B y C Carcinoma hepatocelular
HTLV-1 Virus linfotrópico-T humanoleucemia célula T adulta
MCV Poliomavirus de células Merkelcarcinoma de células Merkel
Inmunización 407
La inmunidad pasiva utiliza anticuerpos preformados para proteger contra la infección. Ofre-
ce protección inmediata pero de corta duración. La inmunidad pasiva natural ocurre en la
transferencia placentaria de anticuerpos maternos al feto; la inmunidad pasiva adquirida
Enfermedades infecciosas
incluye tratamiento con inmunoglobulina, p. ej., hepatitis B, rabia, tétanos, varicela-zóster.
La inmunidad activa es la exposición a un antígeno, que genera una respuesta inmunita-
ria adaptativa. La inmunidad natural activa ocurre después de la infección. La inmunidad
activa adquirida se proporciona mediante vacunación. Las vacunas de rutina en el Reino
Unido se muestran en la tabla 9.13. Se ofrecen otras vacunas a grupos vulnerables espe-
cíficos (tabla 9.14). Inmunosupresión es una contraindicación para vacunas vivas debido
al riesgo de enfermedad diseminada. Incluye inmunodeficiencia, tratamiento inmunosu-
presor, VIH. Vacunas inactivadas pueden administrarse, pero la respuesta de anticuerpos
puede ser menor: objetivo a dar> 2 semanas antes tratamiento inmunosupresor cuan-
do sea posible (o vacunarse durante el tratamiento y considerar repetir la reinmuniza-
ción cuando/si el tratamiento se ha completado).
Tabla 9.13. Resumen de vacunación en el Reino Unido (* = vacuna viva)
Edad (m = meses, a = años)
Vacunación
2 m 3 m 4 m 12 m > 2 a 3-5 a 12 a 乆 14 a > 65 a 70 a
Difteria + + + + +
Tétanos + + + + +
Pertusis + + + +
Poliomielitis + + + + +
Haemophilus
influenzae B (Hib) + + + +
Neumococo + + +
Rotavirus* + +
Meningitis B + + +
Meningitis C +
Sarampión, parotiditis,
rubéola + +
Influenza + +
HPV 6,11,16,18 +
Meningitis ACWY +
Varicela zóster* +
Viaje
Los consejos de viaje (comida/bebida, repelente de insectos, profilaxis de la malaria, con-
dones) son más importantes que la vacunación. Verifique que las vacunas de rutina estén
actualizadas. La vacunación depende del área de viaje y las actividades planificadas: BCG
(viva), rabia, fiebre amarilla (viva), hepatitis A/B, cólera, encefalitis japonesa, encefalitis
transmitida por garrapatas, tifoidea. Para obtener recomendaciones actualizadas, consul-
te http://www.fi tfortravel.nhs.uk/destinations.
408 Hongos
Mundialmente hay
en infecciones fúngicas con nueva patogenicidad,
virulencia y nue-
vos mecanismos infecciosos. Datos de incidencia limitados por fallos en el reconoci-
miento y diagnóstico. Dividido en superficial/cutáneo y sistémico/invasivo.
Micosis superficial/cutánea
• Dermatofitosis: Los hongos dermatófitos digieren queratina. Causa infección de la piel
y estructuras queratinizadas, p. ej., pelo, uñas. Presentación. Escama y prurito. La lesion
Enfermedades infecciosas
de piel puede ser anular con curación central, p. ej., tiña, tiña corporis. Tinea pedis afec-
ta hasta el 15% de la población sana: erosiones de la piel y ampollas en los espacios
interdigitales de los pies, escama seca en plantas. Enfermedad de las uñas fúngicas =
onicomicosis/tinia unguium: decoloración, engrosamiento de las uñas. Tinea capitis: esca-
mas en el cuero cabelludo, alopecia.
• Candidiasis superficial: Usualmente Candida albicans
(fig. 9.17), un comensal en la boca, la vagina y el tracto
GI. Factores de riesgo: inmunosupresión, tratamiento
antibiótico. Presentación. Orofaríngea: parches blancos
sobre fondo eritematoso (tipo de placa); dolorido (tipo
eritematoso). GU: inflamación, blanco parches/flujo
(fig. 9.18). Piel: usualmente en pliegues/interdigital (fig. Fig. 9.17. Candida albicans.
9.19). Cortesía de P-Y Guillaume.
• Malassezia: Comensales de piel grasa. Presentación. Piti-
riasis versicolor: escamosa erupción hipo/hiperpigmentada con descamación (fig. 9.20).
Dermatitis seborreica: descamación de la cara, cuero cabelludo (caspa), tórax anterior.
Malaisezia foliculitis: prurito, erupción folicular en la espalda y los hombros ( acné).
Diagnóstico: Clínica, microscopia de raspado de piel. Tratamiento: Todas las micosis super-
fiales: antifúngico «-azole» o terbinafina tópicos 1-4 semana. También la nistatina tópica y
anfotericina en la candidiasis superficial. Tinea capitis: griseofulvina, terbinafina, itraconazol.
La infección de las uñas requiere tratamiento sistémico (terbinafina, itraconazol) .·. diag-
nóstico confirmado y precaución con efectos secundarios incluyendo hepatotoxicidad.
Ver también VHI p. 394.
Micosis sistémica/invasiva
• Candidiasis invasiva: Suele ocurrir en pacientes inmunocomprometidos y pacientes con
patología subyacente. La susceptibilidad genética probablemente contribuye. Estimado
250.000/año con 50.000 muertes. Candidemia en ~ 7/1.000 pacientes de la UCI. Pre-
sentación. Riesgo de factores para la enfermedad fúngica invasiva (ver p. 409), febril sin
evidencia microbiológica de infección, nuevo soplo, sensibilidad muscular, nódulos cutá-
neos. Diagnóstico. (Repetido) sangre/cultivo de tejidos. PCR. Cándida en secreciones
respiratorias solo es insuficiente. Tratamiento. Retire todos los catéteres posibles. Las
equinocandinas (caspofungina, anidulafungina, micafungina), fluconazol, anfotericina B
(liposomal para la toxicidad renal). Considerar la profilaxis con fluconazol si factores
de riesgo para la enfermedad invasiva (p. 409). Considere el tratamiento empírico si
fiebre persistente, que no responde a otra terapia (comente con el microbiólogo, la
elección depende de la epidemiología local, comorbilidad).
• Criptococcus: Ver VIH, p. 400. Causa meningitis, neumonía. Presentación. Generalmente
inmunosupresión, p. ej., VIH, sarcoide, Hodgkin, malignidad hematológica, postrasplante.
La historia puede ser larga, no específica. Cefalea, confusión, ataxia, signos neurológicos
focales, fiebre, tos, dolor pleurítico, disnea. Diagnóstico. Tinción de LCR con tinta china,
cultivo de sangre/LCR/BAL, prueba de antígeno en sangre/LCR. Tratamiento. Anfoteri-
cina + flucitosina, fluconazol.
• Histoplasmosis: Distribución mundial de Histoplasma,
en suelo contaminado con las heces
de pájaros/murciélagos. La enfermedad depende de la inmunidad del huésped, estimada
en ~ 1%. Presentación. Síntomas similares a la gripe, fiebre, malestar general, tos, cefalea,
mialgia, neumonía, nódulos en el pulmón/cavitación, pericarditis, fibrosis mediastínica/granu-
loma ( sarcoide,TB). Diagnóstico. Serología, prueba de antígeno. Tratamiento. Enferme-
dad pulmonar moderada o grave con incidencia del SNC: anfotericina, itraconazol.
• Blastomicosis: Blastomyces en la materia en descomposición, principalmente
USA/Canadá. Presentación. Fiebre, tos, sudores nocturnos, SDRA.
riesgo de enferme-
dad extrapulmonar con inmunosupresión: piel, hueso, GU, SNC. Diagnóstico. Cultivo,
detección de antígenos (reacciones cruzadas con histoplasmosis). Tratamiento. Anfote-
ricina, itraconazol.
䊳 Vea también: Hongos y el pulmón p. 177, Pnemocystis jirovecii p. 400.
Enfermedades infecciosas
2. Cualquier paciente con malestar sistémico que no responde a la terapia con anti-
bióticos.
3. Cualquier paciente persistentemente febril sin evidencia microbiológica de infec-
ción.
Tabla 9.15. Factores de riesgo asociados con la infección por hongos invasivos
Factor de riesgo Incluye
Infección VIH, CMV, TB, colonización/tratamiento inadecuado de enfermedad fúngica,
antibióticos de amplio espectro, infección fúngica previa
Malignidad Neutropenia, mucositis, malignidad hematológica
Enfermedad
Puntuación de predicción de la mortalidad (p. ej., APACHE), ingreso
crítica prolongado en la UCI, ventilación prolongada, trauma severo/pancreatitis
Catéter Catéter venoso central, catéter urinario, acceso de diálisis, nutrición
parenteral total
Trasplante Medicación inmunosupresora, rechazo reciente, enfermedad injerto contra
huésped
Genético Enfermedad granulomatosa crónica hereditaria genética, anomalías en
factores de necrosis tumoral/interleucinas/citoquinas
Cirugía Cirugía mayor, perforación GI, fuga anastomótica, operación de trasplante,
cierre diferido
Otras Cualquier enfermedad manejada con terapia inmunosupresora,
comorbilidades quemaduras
Adaptado de Ramana KV, et al. Infecciones fúngicas invasivas. Am J Enfermedades Infecciosas y
Microbiología 2013, 1 (4); 64-69.
Estudios:
• Hemocultivo: tres muestras, sitios diferentes, misma sesión, objetivo total de 40-60
mL de sangre.
• Microscopia + inmunohistoquímica/fluorescencia dependiendo del sitio/riesgo.
• Otros: pruebas de antígeno/anticuerpos para detección general (p. ej., manano,
galactomanano) y hongos específicos (p. ej., criptococos); metabolitos fúngicos;
PCR: para la tipificación/confirmación.
䊳 Buscar asesoramiento experto sobre tratamiento empírico, el agente depende de
la epidemiología local.
Hechos de la vida para micelios en ciernes
Para los no iniciados, los hongos son como bacterias, pero sus paredes celulares de
quitina y su truco de la mitosis los pone en su propio reino. Son más grandes que
las bacterias (p. ej., 8 µm de diámetro) y se reproducen sobre todo por brotes de
tubos germinativos (fig. 9.21), no por fisión. Las levaduras ocurren como células indi-
viduales o como racimos. Las hifas ocurren a menudo en una masa de células (lla-
mados moldes). Una célula de hifas con paredes cruzadas se llama micelio. Algunas
levaduras son dimórficas: células individuales a 37 °C pero formando estructuras lla-
madas micelios, que contienen fructificación (hifas), a temperatura ambiente.
Fig. 9.18. Cándida del glande. Fig. 9.19. Cándida del espacio interdigital.
Cortesía de P-Y Guillaume. Cortesía de A Huntley.
Fig. 9.20. Pitiriasis versicolor. Fig. 9.21. Tubos germinales que salen de
Reproducido de Lewis-Jones (ed), Pediatric blastóporos de Candida albicans dimórfica.
Dermatology 2010, con permiso de Oxford Cortesía de P-Y Guillaume.
University Press.
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 09.qxd:Oxford 27/04/18 17:13 Página 410
transmitidos a otros.
El 7-25% de los ingresos hospitalarios se complican por una infección nosocomial con
morbilidad, mortalidad y costo. El microbio causal puede ser benigno en circunstancias
normales, pero es capaz de causar enfermedad cuando el paciente:
1. ha recibido antibióticos de amplio espectro (p. ej., organismos resistentes a los anti-
bióticos, colitis por Clostridium difficile)
2. no está bien/inmunodeprimido (infección oportunista)
3. tiene barreras comprometidas (catéter/línea permanentes, ventilación, cirugía).
Infección asociada a la asistencia sanitaria
ITU asociada a la sonda:
Se inserta una sonda en ~ 20% de los pacientes hospitalizados. La ITU es la más común
de las infecciones adquirida como resultado de la asistencia sanitaria, que representa el
19% de todos los infectados. ~ 50% de ITU se asocian con un catéter uretral. El ries-
go de infección está relacionado con el método de inserción del catéter, la duración
del catéter, la calidad del cuidado del catéter y la susceptibilidad del paciente.
Para reducir el riesgo, solo cateterizar si es necesario: ¿hay obstrucción?, ¿no es nece-
sario conocer el flujo preciso de orina? Retirar lo antes posible. Ver ITU p. 296-7.
Infecciones asociadas con el uso de dispositivos de acceso intravascular:
Incluye catéteres periféricos, venosos centrales y arteriales; tunelizados y no tuneli-
zados. > El 60% de las infecciones del torrente sanguíneo están asociadas con dis-
positivos intravasculares. El riesgo es mayor con los catéteres centrales. La infección
puede resultar de la introducción de microbios durante la inserción, acceso (p. ej.,
cuando se administran antibióticos intravenosos), o de microbios en otras partes del
cuerpo que siembran el material extraño. Los organismos incluyen Staphylococcus
epidermidis (p. 388), Staphylococcus aureus (incluidas las formas resistentes a la meti-
cilina, p. 388), especies de Candida (p. 408) y enterococos (p. 389).
Asegúrese de que los dispositivos de acceso vascular se utilicen solo cuando estén
clínicamente indicados. Cambie al tratamiento oral (fluido, medicación, nutrición) tan
pronto como sea clínicamente apropiado. El tratamiento de la infección debe incluir
la extracción/intercambio del dispositivo siempre que sea posible.
Neumonía asociada al ventilador (NAV):
La NAV afecta hasta el 20% de los pacientes ingresados en unidades de cuidados
intensivos. Ocurre como en el tubo endotraqueal interfiere con los relfejos protec-
tores de las vías respiratorias superiores y facilita la microaspiración. Los riesgos
con máscaras de ventilación no invasivas. En una enfermedad grave, la orofaringe se
contamina con bacterias gramnegativas debido a la exposición al antibiótico, altera-
ción de las defensas del huésped y cambios en la adherencia de la mucosa. El acce-
so a la vía aérea se produce a través de pliegues en el manguito endotraqueal, lo
que facilita que el biofilm bacteriano se vea impulsado a las vías aéreas distales. Los
organismos incluyen Pseudomonas aeruginosa (p. 391), Enterobacteriaceae (p. 391) y
Staphylococcus aureus (p. 388).
El diagnóstico clínico tiene sensibilidad y especificidad. Sospeche si hay infliltrados
nuevos/persistentes en RXT más dos o más de: esputo purulento, leucocitosis (> 12
x109/L), leucopenia (< 4 x109/L), temperatura> 38,3 °C.
Prevenir mediante la reducción de la colonización (enjuague bucal, tubos endotra-
queales recubiertos de plata), cuidados de enfermería a 45° hasta riesgo de aspi-
ración, quitar el ventilador tan pronto como sea posible.
Infección del sitio quirúrgico:
Afecta al 5% de los pacientes sometidos a procedimientos quirúrgicos, contribuye a
> 1/3 de pacientes muertos en postoperatorios. Los organismos comunes incluyen
Staphylococcus aureus (p. 388), Streptococcus pyogenes (p. 388) y Enterobacteriaceae
(cuando la cirugía implica entrada a vísceras huecas). Los métodos de prevención
incluyen higiene de manos, asepsia estricta, rastreo y descolonización de SAMR, depi-
lación, normotermia perioperatoria, apósitos mínimamente manipulados de baja
adherencia/transparentes.
Enfermedades infecciosas
do inflamación y lesión mucosa (colitis). Esto suele suceder cuando se pierde la inhi-
bición aportada por la flora colónica completa debido a exposición a los antibió-
ticos.
Presentación: Diarrea acuosa: colitis moderada fulminante (pseudomembranas en
endoscopia = «colitis pseudomembranosa»), íleo, megacolon tóxico. Considere en
toda diarrea asociada con el uso de antibióticos, especialmente si neutrofilia marcada.
Diagnóstico: El inmunoensayo de detección de glutamato deshidrogenasa (antígeno
común) detecta todas las cepas de C. difficile. Detección de toxina (inmunoensayo
de toxina, amplificación de ácido nucleico del gen de la toxina) distingue la infección
de los portadores sanos.
Tratamiento: SIGHT: Sospeche, Aislar dentro de 2 h, Guantes y delantales, Lavado
a mano con jabón, prueba inmediatamente.
• Leve/moderado: metronidazol VO.
• Grave (Leucocitos> 15 x109/L o LRA o colitis o temperatura> 38,5 °C): vanco-
micina VO (La preparación de la inyección se puede administrar por vía oral y es
más barata que las cápsulas) o fidaxomicina (
coste).
• No respondedores: dosis altas de vancomicina + metronidazol IV, fidaxomicina,
inmunoglubulina IV (sin datos de ECA).
• Recurrencia: (destete) vancomicina, fidaxomicina, trasplante fecal.
la piel vulvar, dolor abdominal, dispareunia, sangrado vaginal inusual (postcoital, inter-
menstrual, considere remisión para colposcopia urgente).
• Exposición: Contactos sexuales dentro de los últimos 3 meses, incluyendo el sexo de
la(s) pareja(s), tipo de contacto (oral, vaginal, anal), método anticonceptivo (¿correcta-
mente utilizado?), tipo y duración de la relación, síntomas en el (los) compañero(s), fac-
tores de riesgo para el VIH/hepatitis en pareja(s), si el (las) pareja(s) puede(n) ser con-
tactado(s). Historia de las ITS en todos. Pregunte a los hombres si han tenido relacio-
nes sexuales con otro hombre en alguna ocasión.
• Otros: Último período menstrual, patrón menstrual, fecha de la última citología cervical
(frotis). Anticonceptivos actuales, dificultades con el uso/suministro. Terapia antimicro-
biana actual/reciente. Historial de la vacuna contra el VPH. Puede haber divulgación de
sexo no consensuado o violencia de la pareja. No tenga miedo en pedir ayuda: «Todo
lo que se diga hoy es confidencial a menos que me diga algo que me haga temer por
su seguridad, momento en el cual necesitaré discutir esto con otro profesional para
mantenerle a salvo».
Exploración de los genitales
么: retirar el prepucio, inspeccionar el meato uretral para descarga, contenido/sensibili-
dad/hinchazón escrotal (paciente de pie). 乆: examen vulvar (litotomía), espéculo de vagi-
na/cuello uterino, examen bimanual para sensibilidad anexial, abdomen/pelvis para masas.
En total: área genitoanal, protoscopia si síntomas anales, ganglios linfáticos inguinales,
mucosa oral si sexo orogenital. Utilice un acompañante y documente su nombre.
Uretritis/secreción vaginal. Ver tabla 9.16.
Verrugas genitales. Causadas por el virus del papiloma humano (VPH) p. 406.
Úlcera(s) genital(es)
• Herpes genital: VHS. Presentación: pródromos parecidos al catarro después desarrollan
vesículas/pápulas alrededor de los genitales, ano, garganta. Estos estallan, formando
dolorosas úlceras poco profundas. También secreción uretral, disuria, retención urina-
ria, proctitis. Diagnóstico: PCR. Tratamiento: analgesia, lidocaína tópica. Antivirales dentro
de 5 d: aciclovir, valaciclovir, famciclovir.
• Sífilis: Treponema pallidum. Presentación:
1. Primaria: < 90 d después de la inoculación (mediana 3 semanas). Máculapápu-
laúlcera típicamente sin dolor (chancro). Escara central, borde redondeado defi-
nido. Muy contagioso.
2. Secundaria: diseminación ~ 4-10 semanas después del chancro. Erupción cutánea
(maculopapular en 50- 75%, en palmas, plantas en 11-70%), parches mucosos, con-
diloma lata (placas elevadas, pálidas, a menudo en flexuras), fiebre, cefalea, mialgia,
linfadenopatía, hepatitis.
3. Terciario: 20-40 años después de la infección. Neurosífilis: meningitis aséptica, déficit
en enfermedad neurológica focal, convulsiones, síntomas psiquiátricos, pupila de
Argyll Robertson (p. 72), tabes dorsalis (arreflexia, reflexión plantar extensora, défi-
cits de la columna dorsal, articulaciones de Charcot). Sífilis gomatosa: granulomata
destructivo en piel, membranas de moco, huesos, vísceras. Cardiovascular: aortitis,
regurgitación aórtica/aneurisma.
Diagnóstico: PCR. Serología: no específica (RPR, VDRL) sensible en la infección tempra-
na, después disminuye; específica (T. pallidum como antígeno, p. ej., TPHA, TPPA) reac-
ciona en la infección temprana y persiste. Tratamiento: penicilina G parenteral (p. ej.,
penicilina benzatina IM), duración depende de la etapa. Procaína penicilina potenciada
con probenicida en la enfermedad del LCR.
• Linfogranuloma venerum: Chlamydia trachomatis. Presentación: principalmente HSH en
Reino Unido. Pápula/úlcera indolora linfadenopatía, fiebre, artritis, neumonitis. La
transmisión directa a la mucosa rectal causa proctitis hemorrágica: dolor, sangrado rec-
tal/flujo, tenesmo. Diagnóstico: PCR. Tratamiento: doxiciclina.
• Infecciones tropicales: Chancroide (Haemophilus ducreyi), Donovanosis (Klebsiella gra-
nulomatis). Presentación: ambos causan ulceración genital y linfadenitis con propagación
de la infección en el tejido suprayacente (pseudobubo). Diagnóstico: PCR de H. ducre-
yi, cuerpos de Donovan en el tejido. Tratamiento: azitromicina, ceftriaxona.
Embarazo:
riesgo de parto prematuro, bajo peso al
vaginalis 么: asintomática (~ 70%), flujo móviles) 5-7 d). Seguimiento de parejas, cribado, nacer
tratamiento. Evitar las relaciones sexuales Puede aumentar la transmisión del VIH
hasta completar el tratamiento
Vaginosis Flujo vaginal fino, blanco y con olor a Tinción de Gram para examinar la flora Metronidazol oral o vaginal o clindamicina El pH vaginal elevado altera la flora vaginal:
bacterias
bacteriana pescado. Sin picazón o dolor. Asintomático vaginal (predominio/ausencia de vaginal anaerobias. No se transmite sexualmente pero
en ~ 50% lactobacilos), células clave, pH vaginal> 4,5 asociado con ITS
Candidiasis Prurito genital, ardor, secreción de color Microscopia y cultivo para Candida (Ver -azoles: pesario, p. ej., clotrimazol, crema si Muy común. Ninguna evidencia para el tratamiento de
Enfermedades infecciosas
413
CAP. 09.qxd:Oxford 27/04/18 17:13 Página 414
Exploración
Erupción: 415
• Maculopapular: dengue, chikungunya, EBV, seroconversión del VIH, FVH.
• Purpúrica: dengue, infección meningocócica, peste, CID, FVH.
• Úlcera: tripanosomiasis, Yersinia pestis, tifus de garrapata, ántrax, úlcera tropical.
Ictericia: Hepatitis viral, malaria grave por falciparum, fiebre entérica, leptospirosis, recaída
Enfermedades infecciosas
con fiebre, tifus, FVH, bartonelosis.
Hepatoesplenomegalia: Hepatitis viral, VIH, fiebre entérica, brucelosis, leptospirosis, infec-
ción rickettsial, fiebre recurrente, esquistosomiasis, absceso hepático amebiano, tripano-
somiasis, leishmaniasis visceral.
Estudios
Dirigido por la historia de viaje y la exploración. En fiebre indiferenciada:
• Prueba de diagnóstico de la malaria frotis/diagnóstico rápido (p. 417).
• Prueba del VIH (p. 399).
• Sistemático de sangre: linfopenia en la infección viral incluyendo VIH; eosinofilia en pará-
sitos/hongos, p. ej., helmintos transmitidos por el suelo, filiariasis, esquistosomiasis, enfer-
medad hidatídica; plaquetas en malaria, dengue, VIH, fiebre tifoidea, sepsis grave.
• Cultivo de sangre x2: antes de los antibióticos.
• PFH.
• Considerar: guardar suero, serología específica o muestra de EDTA para la PCR.
Apoyo
• Equipo local de enfermedades infecciosas (incluida la atención continuada).
• Notificación de la enfermedad: www.gov.uk/health-protection-team.
• Servicio de fiebre importada de la Salud Pública de Inglaterra 0844 778 8990.
• Red y Centro Nacional de Salud y Viajes (NaTHNaC)/TravelHealthPro
www.travelhealthpro.org.uk (0845 602 6712).
• Hospital de Enfermedades Tropicales 0203 456 7890.
• Sitio web de diagnóstico de fiebre del viajero: www.fevertravel.ch.
Fiebre entérica: tifoidea y paratifoidea
~ 20 millones de casos y 200.000 muertes anuales en todo el mundo, ~ 500/año
en el Reino Unido, principalmente importados de la India, Pakistán y Bangladesh.
Causado por cepas gramnegativas relacionadas de «Salmonella spp: tifoidea».
• Tifoidea (~ 75-90%): Salmonella typhi.
• Paratifoide (~ 10-25%, menos grave): Salmonella paratyphi serotipo A> B> C.
Las bacterias invaden la mucosa intestinal. La diseminación se produce sin una res-
puesta diarreica. Esto distingue a los serotipos «tifoideos» de los serotipos «no tifoi-
deos» de Salmonella que causa diarrea y vómitos (p. 428). La transmisión es fecal-
oral desde agua/alimentos contaminados. Incubación 6-30 d (más 10-20 d). ~ 10.000
organismos son necesarios para causar la enfermedad. Puede ser asintomático (pero
disemina organismos).
Síntomas: Fatiga, cefalea, anorexia. Fiebre marcada, «paso a paso» (aumenta cada día
con picos progresivos) en < 20%. Dolor abdominal, bradicardia relativa (signo de
Faget), tos, estreñimiento. Manchas rosa en ~ 25% (color salmón, 1-4 cm, blanqueo,
debido a embolia bacteriana a la dermis). Diarrea («sopa de guisantes») y hepato-
esplenomegalia en la segunda semana. Toxicidad progresiva y enfermedad complica-
da hasta 10%: hemorragia/perforación intestinal, miocarditis, hepatitis, neumonía, CID,
la afectación del SNC (delirio, meningismo, encefalitis, signos cerebelosos, ataques,
coma), complicaciones oculares (úlcera corneal, uveítis, neuritis, trombosis).
Diagnóstico: Aislamiento de S. typhi de: sangre (tomar cultivos múltiples de 10-15 mL
en primeros 10 d para
sensibilidad), la médula ósea, las secreciones intestinales o las
heces (
sensibilidad después de la primera semana). La serología tiene sensibilidad
y especificidad, no suficiente como única herramienta de diagnóstico (prueba de Widal
es negativa en ~ 30% de los casos de cultivo probado).
PFH. PCR (no rutina).
Tratamiento: Azitromicina ± ceftriaxona IV. > 70% importados de Asia son resisten-
tes a fluoroquinolonas. La fiebre tarda una mediana de 5-7 d en responder debido
a nicho intracelular del organismo. Antipiréticos, manejo de líquidos, nutrición. Enfer-
medad del SNC: dexametasona 3 mg/kg IV y luego 1 mg/kg/6 h hasta 8 dosis (datos
limitados).
Vacuna: Ty21a (oral, vivo, CI: inmunosupresión, embarazo) o Vi (IM, vacuna capsular).
~ 50-80% de efectividad para ~ 3 años. Protección limitada/no contra paratifoide.
Malaria endémica Endémica en los 2000, Malaria no endémica o sin transmisión actual No aplicable
no continúa siendo endémica
Fig. 9.23. Países con transmisión de la malaria.
Reproducido con permiso de la Organización Mundial de la Salud, Informe mundial sobre el paludis-
mo 2015. © World Health.
Tabla 9.19. Especies de malaria en humanos
Promedio de Persistente
Especie incubación Etapa del Distribución
(distancia) hígado
P. falciparum 12 días No África, India, Asia sudoriental, Indonesia,
(fig. 9.24) (6 días-6 meses) Oceanía, América central, Oriente medio
P. vivax 14 días Sí Asia meridional, América del sur y central,
(fig. 9.25) (días-años) África, Oriente medio
P. malariae 30 días No África, América del sur y central, sudeste
(fig. 9.26) (28 días-años) de Asia
P. ovale 11-16 días (años) Sí África
P. knowlesi 9-12 días No SE Asia
Oxford Textbook of Global Public Health, OUP, 2015.
Fig. 9.24. Anillo P. vivax Fig. 9.25. Anillo de P. mala- Fig. 9.26. Gametocitos de
oculto en parte por los riae y formas de banda de 2 P. falciparum con forma de
puntos de Schuffer. especímenes. salchicha en hematíe.
Manchado y examinado en © S Upton, Kansas Univ. © S Upton, Kansas Univ.
el Campo por JML.
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CAP. 09.qxd:Oxford 27/04/18 17:13 Página 417
Enfermedades infecciosas
pica a los humanos. Estos viajan a Humano anfitrión
través del torrente sanguíneo al inicial
hígado donde se produce la anfitrión Infección en
maduración para formar esqui- el hígado
zontes que contienen ~ 30.000
merozoitos descendientes. Si Infección
existe una etapa inactiva (vivax, de sangre
ovale ver tabla 9.21), y se trata
inadecuadamente, los merozoí-
tos pueden liberarse desde el Transmisión 2º vector
hígado semanas-meses (-años) en el útero
causando posteriormente enfer- Fig. 9.27. Ciclo de vida de la malaria.
medad. La ruptura de esquizon-
tes libera los merozoítos que entran en los hematíes («¡qué nicho fantástico!»). En los
hematíes, los merozoítos forman trofozoítos más grandes y esquizontes ertrocíticos
(indicador pronóstico deficiente si se observa en el plasma sanguíneo). La ruptura de
esquizontes eritrocíticos produce las manifestaciones clínicas de la malaria.
Características clínicas
䊳 Considerar en cualquier persona con fiebre que haya visitado previamente un área de
malaria (fig. 9.23) independientemente de la profilaxis.
Presentación: P. falciparum tiene una incubación mínima de 6 días y ocurre más comúnmen-
te dentro de los 3 meses de regreso de una zona endémica. Haga una historia detallada del
viaje: país, área de viaje, fecha de regreso. No te olvides de preguntar sobre las escalas. Los
síntomas no son específicos: fiebre, cefalea, malestar general, mialgia, diarrea, tos. Se descri-
ben patrones de fiebre pero solo se producen si la ruptura de los hematíes infectados se
sincroniza: días alternos para P. falciparum, P. vivax, P. ovale («terciana»); cada 3 días para P. mala-
riae («cuartana»). 䊳 La mayoría de los pacientes no tienen un patrón específico de fiebre.
Exploración: Fiebre, de lo contrario nada especial. Si el diagnóstico se retrasa o la enfer-
medad es grave puede presentar ictericia, confusión, convulsiones.
Diagnóstico
La prueba de sangre inmediata es obligatoria en el Reino Unido:
• Microscopia de frotis sanguíneo fino y de gota gruesa. Sensible y específico en manos
expertas.
• Prueba de diagnóstico rápido (PDR) de detección de antígeno parasitario. Se utiliza
para el cribado inicial si la microscopia experta no está disponible, p. ej., fuera de horas
de trabajo. Se utiliza además de (no en lugar de) frotis de sangre.
Los resultados deberían estar disponibles en 4 h. 䊳 Si se sospecha malaria, pero la san-
gre es negativa: repetir a las 12-24 h y después de más 24 h. La malaria es poco proba-
ble si tres pruebas específicas de sangre son negativas. dengue, fiebre tifoidea, hepa-
titis, meningitis/encefalitis, VIH, fiebre hemorrágica viral. Cuidado durante el embarazo: los
frotis de gota gruesa pueden ser negativos a pesar de parásitos en la placenta. Busque
ayuda de expertos.
Si P. falciparum (o P. knowlesi) debe darse un % estimado de los glóbulos rojos parasitados:
• > 2% =
probabilidad de enfermedad grave (indicación para tratamiento parenteral
ver p. 418-9).
• > 10% = enfermedad grave.
Otros: Sistemático de sangre (anemia, trombocitopenia), creatinina y diuresis (LRA), coa-
gulación (CID), glucosa (hipoglucemia), gasometría arterial/lactato (acidosis), análisis de
orina (hemoglobinuria). La malaria es notificable a la salud pública: www.gov.uk/health-pro-
tection-team.
Errores a evitar
• No considerar el diagnóstico • Retraso en el análisis de sangre/RDT
• Historial de viaje inadecuado • Sin frotis sanguíneo serieado si la pri-
• Pensar que la profilaxis previene toda la mera prueba es negativa
malaria • Tratamiento inadecuado (p. 418-9)
• Pensar que se presenta con un patrón • Tratamiento inapropiado (p. 418-9)
de fiebre • Falta de anticipar/tratar las complica-
• Síntomas no específicos no reconocidos ciones
De Beeching et al.Viajeros de vuelta. En: Principios y Práctica de la Medicina del Viaje,Wiley & Sons, 2013.
Malaria no falciparum
P. vivax, P. ovale, P. malariae, P. knowlesi: 419
• En caso de infección mixta con falciparum, tratar como falciparum.
• En caso de enfermedad no falciparum grave/complicada, tratar como falciparum grave.
• Si es una enfermedad sin complicaciones, tratar con TCA como falciparum sin compli-
caciones.
Enfermedades infecciosas
La cloroquina puede utilizarse para la enfermedad no falciparum. Dosificación en adultos:
620 mg base a 0 h, 310 mg base a 6-8 h, base 310 mg base en el día 2 y 3. Pero:
• no utilizar si no se puede excluir P. falciparum.
• tenga en cuenta que TCA puede trabajar más rápido tanto en la fiebre como en el
conteo de parásitos.
• Existe resistencia a la cloroquina en P. vivax (Papúa Nueva Guinea, Indonesia).
䊳 Además de otros tratamientos, P. vivax y P. ovale requieren la erradicación de hipno-
zoítos hepáticos con primaquina:
• P. vivax: adulto 30 mg (0,5 mg/kg) diarios durante 14 días.
• P. ovale: adulto 15 mg (0,25 mg/kg) diariamente durante 14 días.
䊳 Riesgo de hemólisis con primaquina en deficiencia de G6PD, así que descártelo antes
de su uso. Buscar asesoramiento de expertos para la dosificación/monitorización de
pacientes con deficiencia de G6PD y durante el embarazo.
Prevención de la malaria
Control vectorial para todas las personas en riesgo de malaria. Incluye:
• Reducción de fuentes por destrucción de sitios de reproducción de mosquitos (es
decir, agua estancada).
• Redes insecticidas de larga duración. Deberían proporcionarse gratuitamente y
con equidad de acceso. Las redes duran ~ 3 y, una vida útil de 5 y podría ahorrar
~ $ 3,8 bn. La resistencia a los insecticidas es una preocupación creciente, ¿se
deben utilizar agentes duales?
• Pulverización residencial residual, eficaz durante 3-6 meses cuando> 80% de las
viviendas están incluidas.
• Liberación de mosquitos machos estériles. Se estimó que inicialmente se requeri-
rían 20 machos/humano para estar protegidos .·.~ 64 mil millones de mosquitos
estériles en todo el mundo.
• Modificación genética para desarrollar mosquitos que no son susceptibles a la mala-
ria (y otros) parásitos. Requiere modificación que no fertilidad o no se disperse
en la población de vectores. Requiere aceptabilidad, infraestructura y dinero.
Quimioprofilaxis es el uso de fármacos antimaláricos para prevenir la enfermedad clí-
nica. En áreas de alta transmisión es recomendable para mujeres embarazadas (dado
en las visitas prenatales) y los lactantes (administrados con vacunación de rutina).
A los viajeros del Reino Unido a zonas de malaria deben ser dados:
1. Consejos para la prevención de picaduras: repelentes de insectos con DEET al
20-50% (para todos> 2 meses incluyendo embarazadas y lactantes). Aplicar des-
pués del protector solar con protección solar > 30 dado DEET puede efi-
ciencia de protección solar.
2. Quimioprofilaxis (tabla 9.20) según área de viaje. Consulte www.fitfortravel.
Nhs.uk/destinations.aspx
Tabla 9.20. Régimen profiláctico contra la malaria en adultos (ver BNF)
Área Régimen Notas
No resistencia Cloroquina 310 mg base/semana 1 semana antes y 4 semanas después
a las drogas OR proguanil 200 mg OD del viaje. Cloroquina: trastorno GI,
Pequeña Cloroquina 310 mg base/semana cefalea. CI epilepsia. Proguanil: diarrea,
resistencia a PLUS proguanil 200 mg OD antifolato (cuidado si posibilidad de
cloroquina embarazo)
P. falciparum Mefloquine 250 mg/semana Mefloquine: 2-3 semanas antes y
resistente a (p. ej. Larium®) O 4 semanas después.
la cloroquina ES: Neuropsiquiátrica, mareos
Doxixciclina 100 mg OD O Doxiciclina: 1-2 d antes, 4 semanas
después, ES: Insuficiencia hepática,
teratogénica
Combinación de Atovaquona- Atovaquona-proguanil: 1-2 d anterior,
proguanil (p. ej., Malarone®) 1 semana después, consejo experto
con el VIH TAR
La erradicación de la malaria es la reducción permanente de la incidencia de la mala-
ria, lo que significa que la intervención ya no es necesaria. Depende del estado social,
demográfico y económico de un país, el sistema de salud disponible y la inversión.
Requiere diagnóstico y tratamiento para lograr cura parasitológica (como opuesta a
la cura clínica) para eliminar la transmisión asintomática.
Enfermedades infecciosas
guíneos, así que la transmisión no se limita al vector. Los datos geográficos y clínicos
disponibles en: www.ecdc.europa.eu Presentación: Subclínico en ~ 80%. Enfermedad
leve en ~ 20%: fiebre, conjuntivitis, mialgia, erupción. Grave enfermedad aguda y Gui-
llian-Barré son raros. Zika y defectos de nacimiento: Depende de la situación geográ-
fica y la relación temporal entre la infección por Zika y la microcefalia. Zika es detec-
tado en el líquido amniótico proporcionando evidencia de transferencia placentaria.
Síndrome específico fetal observado: microcefalia severa, calcificación intracraneal,
patología ocular, cuero cabelludo redundante. Pequeños estudios no controlados
muestran anomalías fetales en hasta el 30% de las mujeres embarazadas infectadas
con Zika13. Riesgos absolutos y relativos desconocidos (2016). Diagnóstico: PCR de
ADN viral en sangre/fluido corporal. Tratamiento: Control vectorial, evitar viajes no
esenciales a áreas de transmisión Zika durante el embarazo, prevenir con preserva-
tivos la transmisión sexual. Ensayos de vacunas en curso (2016).
Leishmaniasis
Causada por parásitos protozoos de especies de Leishmania12, 423
transmitidas por moscas de arena flebotominas hembras infec-
tadas. 556 millones de personas en riesgo. Factores de riesgo:
pobreza, malnutrición, desplazamiento, deforestación, construc-
ción de presas/riego. Presentación:
Enfermedades infecciosas
• Cutánea, forma más común, ulceración (fig 9.62, p. 440). Fig. 9.32. Leishmaniasis
• Mucocutánea (fig 9.32): conduce a la destrucción tisular de mucocutánea.
nariz, boca, garganta. El 90% ocurre en Bolivia, Brasil, Perú. Reproducido con permi-
• Leishmaniasis visceral (LV, kala-azar, «enfermedad negra») so de World Health
(fig. 9.33): fiebre, pérdida de peso, hepatoesplenomegalia, ane- Organización. © Organi-
mia. > 95% de mortalidad sin tratamiento. Endémica en el zación Mundial de la
subcontinente indio, este de Africa. El 90% de los casos nue- Salud. Http: //Www.who.
vos ocurren en Bangladesh, Brasil, Etiopía, India, Sudán del sur, int/leishmaniasis/mucocu
Sudán. 300.000 Casos/año, 20.000 muertes/año. Post kala-azar taneous_Leishmaniasis/en/
es una complicación de Leishmania donovani = una erupción
hipopigmentada maculo/nodular (lepra), 6 meses-1 año
después de cura aparente, puede curar pero es un reservorio
para los parásitos y mantiene la transmisión.
Diagnóstico: Clínico. Microscopia de muestras de tejido (piel,
hueso, médula ósea) para el parásito. La detección de anticuer-
pos (fluorescencia indirecta, ELISA, western blot, prueba de aglu-
tinación directa o prueba inmunocromatográfica) está limitada
debido a: 1. niveles de anticuerpos detectables durante años
después de la curación, no puede distinguir LV recaída/infección
activa. 2. Las pruebas son positivas en muchos sin historia de LV.
3. La serología puede ser negativa si VIH positivo. Tratamiento: Fig. 9.33. Leishmaniasis
Anfoterina B liposómica (dosis única), miltefosina oral, antimo- visceral.
niales pentavalentes (resistencia en la India). El programa de Eli- Reproducido con permi-
minación de Kala-azar de la OMS ha logrado uns reducción del so de World Health
75% en nuevos casos. Esto incluye una donación acordada de Organización. © Organi-
liposomas anfotericina a los países endémicos desfavorecidos. zación Mundial de la
Tripanosomiasis africana humana (TAH, enfermedad Salud. Http://www.who.
del sueño) int/leishmaniasis/Visceral_
Infección por parásitos protozoarios de Trypanosoma16, transmi- leishmaniasis/es /
tida por la mosca tsetsé en el África subsahariana. Dividido en:
• TAH rhodesiense, incubación < 21 d, fiebre alta, alteración GI, linfadenopatía, cefalea.
Chancro en el sitio de la mordedura en ~ 84%, erupción maculopapular. Progresa a
miopericarditis, arritmias y síntomas neurológicos.
• TAH gambiense, enfermedad crónica en la población africana, se presenta años después
de la infección (pero puede presentarse con enfermedad febril aguda en viajeros). Fie-
bre baja. Trastorno del sueño: inversión del ciclo sueño-vigilia, episodios de sueño
incontrolables. Debilidad, marcha anormal, síntomas psiquiátricos.
Diagnóstico: Hb, plaquetas, LRA,
PFH,
IgM policlonal. Microscopia de parásitos (san-
gre, ganglio linfático, chancro, LCR). Serología y PCR si está disponible. Tratamiento: Según
tipo de enfermedad y estadio. Disponible en la OMS. Incluye suramina, melarsoprol, pen-
tamidina, nifturtimox-eflornitina. Buscar consejo de expertos –efectos adversos de todos.
Enfermedad de Chagas (tripanosomiasis americana)
Enfermedad potencialmente mortal debido al protozoo Trypanosoma cruzi transmitido
por chinches triatominos. Endémica en América Latina: ~ 6-7 millones infectados. Pre-
sentación: fase aguda (~ 2 meses): lesión cutánea (chagoma), fiebre, cefalea, mialgia, linfa-
denopatía, conjuntivitis unilateral, edema periorbital (signo de Romaña), miocarditis,
meningoencefalitis. Fase crónica (años): cardíaca: miocardiopatía dilatada; GI: megaesófago
(disfagia, aspiración), megacolon (distensión abdominal, estreñimiento); síntomas del
SNC. Diagnóstico: Aguda: tripomastigotes en sangre, LCR, aspirado de nódulo. Crónica:
serología (ELISA de IgG de Chagas). Tratamiento: Benznidazol, nifurtimox. efectividad
en la enfermedad crónica.
Fiebre recurrente
Causada por espiroqueta Borrelia recurrentis (transmitida por piojos, África subsahariana,
campamentos de refugiados) u otras Borrelia (transmitidas por garrapatas, en todo el
mundo). Presentación: Fiebre intermitente «crisis» debida a la variación antigénica (~ fie-
bre 3 d, a continuación afebril ~ 7 d), cefalea, mialgia, PA. Diagnóstico: Espiroquetas en
frotis de sangre, serología falsa positiva para enfermedad de Lyme. Tratamiento: Doxicili-
na/macrólidos (dosis única si transmitido por piojos). Tratamiento neuroborreliosis si hay
enfermedad del SNC (p. 422). La reacción de Jarisch-Herxheimer debido a endotoxinas
(¿TNF?) puede imitar la «crisis» de la fiebre: observar 1as ~ 4 h de tratamiento, utilizar
enfriamiento/antipiréticos.
424 Zoonosis
Ántrax (Bacillus anthracis)
grampositivo, bacilo aeróbico encontrado en el suelo en todo el mundo. Los seres huma-
nos expuestos a través de ganado o productos animales, p. ej., piel, lana, colmillos. Infec-
ción por inhalación, ingestión, contaminación de la piel rota (incluye abuso de drogas IV).
Las bacterias secretan exotoxinas: toxina de edema y toxina letal. Presentación:
• Cutánea (~ 95%): pápula pruriginosa vesícula escara necrótica. El edema puede
Enfermedades infecciosas
Enfermedades infecciosas
clínico en ~ 90%. Seguido por la recuperación o 2ª (inmune/leptospirúrica) fase: sufusión
conjuntival, mialgia (
CK), ictericia, meningitis, uveítis, LRA, hemorragia pulmonar, SDRA,
mio/pericarditis (enfermedad de Weil descrita en 1886: fiebre, esplenomegalia ictérica,
insuficiencia renal, síntomas del SNC. Término epónimo ahora usado para la enfermedad
severa.) Diagnóstico: En UK18 vía Servicio Nacional de Leptospirosis (https://www.gov.uk/
guidance/leptospira-reference-unit-services). Cultivo (sangre/LCR) positivo durante la 1ª
fase. Serología. PCR. Tratamiento: Doxiciclina, penicilina. Evidencia conflictiva de beneficios
para esteroides en enfermedades graves.
Yersinia pestis (peste)
Patógeno intracelular obligado gramnegativo transmitido por animales pequeños y sus
moscas por mordedura, contacto directo, inhalación o ingestión (rara). ~ 300 casos/año
en todo el mundo. Presentación: Incubación: 3-7 d. Síntomas similares a los de la gripe,
después una de tres formas de enfermedad:
1. Bubónica: forma más común. Yersinia pestis entra con la mordedura y viaja a través de lin-
fáticos. El nódulo linfático inflamado, doloroso se denomina «bubón» y puede supurar.
2. Septicemia: propagación directa sin «bubón», o etapa avanzada después de «bubón».
3. Neumonía: enfermedad pulmonar. Más virulento, menos común. Por lo general, desde
la forma bubónica avanzada pero puede transmitir a través de gotitas a otros seres
humanos sin moscas/animales.
Diagnóstico: Cultivo de fluido de bubón, sangre, esputo. Prueba rápida de antígeno dispo-
nible. Tratamiento: Reduce la mortalidad del 60% a < 15%: estreptomicina, tetraciclina12.
Toxoplasmosis
Fig. 9.34. Los oocistos en heces de
Huésped definitivo (gato) Oocistos no gato pueden permanecer en el suelo
esporulados
Quistes ingeridos pasados en heces durante meses, donde las ratas los
por gatos comen. Las ratas se infectan y bajo la
dirección de Toxoplasma en la amíg-
Quistes en tejidos o dala, las ratas pierden su miedo a los
huésped intermedio gatos y así son comidas, con lo que
comienza el ciclo. Así el parásito ase-
Quistes ingeridos en Oocistos en alimentos, gura el éxito de traslado de un cuer-
carne infectada (cruda agua o suelo, ingeridos por
o poco hecha) po a otro, facilitando un salto desde
el huésped el parásito intermedio al anfitrión
intermedio definitivo. ¿Cómo supera el parásito
el miedo innato a los gatos? Produ-
Huésped Oocistos ciendo una atracción sexual hacia el
intermedio esporulados normalmente aversivo olor del gato
Feto Taquizoítos a través de la actividad límbica.
infectado transmitidos a través De Fernando Monroy:
de la placenta Comida/agua contaminada www2.nau.edu/~fpm/research/res.html
Enfermedades infecciosas
gulación/glucosa, tratar infecciones secunda-
rias, nutrición. Ribavirán no eficaz. Busque los Equipo
contactos, familia de apoyo. Experimental: • Guantes dobles
Agentes anti-RNA, inmunoterapia con san- • Vestido repelente de líquidos
gre/plasma de los supervivientes, anticuer- • Delantal de plástico de cuerpo
pos monoclonales (ZMapp), vacuna de entero
Ébola. Ética: Aleatorización versus uso com- • Cubrir la cabeza (gorro quirúrgico)
pasivo: ¿es ético retirar una terapia incluso
potencialmente beneficiosa a un grupo con- • Calzado impermeable a los fluidos
trol con una enfermedad que amenaza la • Protección completa de la cara
vida? ¿Son los datos observacionales obteni- • Respirador repelente completo
dos mediante el uso compasivo de terapia • Eliminación meticulosa
experimental suficiente para guiar las deci-
siones clínicas? ¿Hacia dónde deben dirigirse los recursos para mejorar los resultados?:
¿desarrollo de fármacos o provisión de cuidados básicos, p. ej., mejorará la capacidad para
controlar el K+ la mortalidad?
Marburg, Lassa y FHCC
En la tabla 9.23 se dan las características diferenciales.
Tabla 9.23. Diferenciación entre VHF
FHV Características clínicas
Marburg Incubación típicamente 5-9 d. Curso de enfermedad clínicamente idéntico al Ebola.
Ebola/Marburg sugiere por la sensibilidad del hígado.
Lassa ~ 80% leve/asintomático. Hemorragia en ~ 20%. Mortalidad variable en epidemias
25-80%. Faringitis exudativa. Pérdida auditiva convaleciente. Los datos observacionales
muestran la respuesta a la ribavarina si se administran en los primeros 6 d
FHCC Transmitida por garrapatas. Pródromo de inicio repentino. Etapa hemorrágica común,
se desarrolla rápidamente, pero generalmente de corta duración 2-3 d. Ribavarina
usada en el tratamiento ( evidencia)
Evaluación del riesgo de VHF en el Reino Unido
Evaluar la posible transmisión y fiebre.
• Transmisión: 1. Viaje a la zona endémica (rural para la fiebre de Lassa, cuevas/prima-
tes/antílopes/murciélagos para Ebola/Marburg; garrapatas/sacrificio de animales para
FHCC). 2. Viajar a lugares conocidos por haber tenido brotes (http://www.promedmail.
org). 3. Contacto con la muestra infectada.
• Fiebre: > 37,5 °C en las últimas 24 h.
Si existe posible transmisión y la fiebre se considera de «alta posibilidad» ( alta proba-
bilidad), aislar, PPE (ver tabla 9.26). Informe al equipo local de enfermedades infecciosas
y comuníquese con el servicio de fiebre (0844 778 8990) para la investigación VHF.
䊳 Moratones, sangrado y diarrea y vómitos incontrolados también justifican el aislamien-
to y la discusión si la historia de contacto es relevante.
Ébola y sacrificio
Esta página está dedicada al Dr. Sam Brisbane, director del departamento de urgen-
cias en Monrovia, Liberia. Bondadoso, alegre, intenso, irreverente. En 2013, expresó
su mayor preocupación: una epidemia de FHV. Un temor fundado que se demostró
profético, en un hospital con escasez de personal, racionamiento de guantes y jabón
limitado. ¿Precauciones universales? Inasequible y ni siquiera cerca. También era agri-
cultor de café. Pero ese modo de vida no era para él, no se merecía el retiro a su
plantación, rodeado de fotografías de 8 niños, 6 niños adoptados y nietos a juego.
Desprotegido, a pesar de un sombrero de la suerte y un sentido del humor hirien-
te, contrajo Ebola en 2014 a la edad de 74 años mientras estaba luchando en pri-
mera línea contra el FHV, el más letal del mundo, que se conoce hasta la fecha.
Durante su enfermedad le dijo a sus médicos, «Cuando nos encontramos en medio
del mar y hay olas altas, no debemos rendirnos. Debemos luchar hasta el final». Un
hombre verdaderamente sagaz, cuya vida y trabajo trasciende las perspectivas occi-
dentales. Nunca podremos reproducir tu coraje, porque nunca conoceremos tu
miedo. Es en justicia, materia de leyenda.
Enfermedades infecciosas
• Adenovirus entérico • Salmonella enterocolitis*
• Enterotoxigénico E. coli • Clostridium difficile
• Enteropatógena de E. coli • Yersinia enterocolitis
• Staph. aureus productor de toxinas • Entamoebic histolytica (disentería amebiana)
• Cólera • Tricuriasis (tricocéfalo)
• Clostridium perfringens • CMV
• Giardia
• Cryptosporidium
• Cyclospora cayetanensis
* La enfermedad más leve puede presentarse como diarrea sin sangre.
Enfermedades infecciosas
mitió mezclarse con el suministro de agua de la
bomba de Broad St (fig. 9.37). De esta confluencia
surgió la disciplina de la Salud Pública. Las muertes
resultantes del cólera agrupadas alrededor de la
bomba de Broad St, fueron puestas en diagrama por
el Dr. John Snow. Utilizó su ahora famoso diagrama
de Vonoroi que muestra las muertes dentro de una
«línea de bomba más cercana» para motivar a los
habitantes de la parroquia: «Como consecuencia de
lo que dije, el mango de la bomba fue retirado al día
Fig. 9.37. Dispensario de la Muerte. siguiente», por lo que esta investigación inauguró el
George Pinwell 1866. control del cólera. Estos eventos ilustran Una serie
de verdades:
1. El conocimiento de la causa microscópica de la enfermedad no es necesario para
tener éxito en las medidas a tomar en salud pública. (Vibrio cholerae fue identifi-
cado por Robert Kock en 1883).
2. Incluso los más pueblerinos son capaces de salvar vidas cuando son asistidos por
un médico al mando de los hechos.
3. Los amigos influyentes ayudan. El doctor Snow se mantuvo en gran parte des-
conocido hasta la década de 1930 cuando el «Sobre la Forma de Comunicación
del Cólera» fue publicado por Wade Hampton Frost, primer profesor de epide-
miología en la Escuela John Hopkins.
4. La aleatorización (bomba de Broad St. versus suministro de agua alternativo) es
esencial.
Quiste
Excreccón en (a) Comida y bebida tomada
las heces
por humanos
(g)
(b)
Enquistación en Exquistación en el
el colon intestino delgado
(e) (c)
(d) Trofocitos
Enfermedades infecciosas
los portadores asintomáticos y enfermedad sintomática, además
de otros tratamientos. El absceso puede requerir (guiado por
imagen) drenaje.
Ciclospora
Protozoo coccideano Cyclospora cayentanensis. ~ 50 casos
importados/año en el Reino Unido. Presentación: Pródromo gri-
pal, diarrea acuosa, pérdida de peso, fatiga marcada, fiebre baja en
~ 25%. Autolimitante después de 7-9 semanas en inmunocom- Fig. 9.41. Ciclospora.
petentes. Diagnóstico: Oocitos autofluorescentes en las heces Fluorescencia de oocistos.
(aparecen azul-verde bajo fluorescencia UV fig. 9.41), PCR. Trata- Crédito: CDC DPDx.
miento: Cotrimoxazol.
Nematodos (helmintos transmitidos
por el suelo y Trichinella)
• Lombrices: Ascaris lumbricoides ~ 1 mil
millones afectados, Trichinella spiralis
(fuente contaminada de carne).
• Tricocéfalos: Tricuris trichiura, 600-800
millones afectados.
• Anquilostomas: Necator americanus, Ancy-
lostoma duodenale ~ 700 millones afecta-
dos. Fig. 9.42. Proporción de niños que requieren
• Nematodos: p. ej., Strongyloides stercoralis, tratamiento preventivo de los helmintos trans-
30-100 millones afectados. mitidos por el suelo. Reproducido por Orga-
Una de las infecciones más comunes en nización Mundial de la Salud, «Proporción de
todo el mundo, afecta a pobres y personas Niños (1-14 años de edad) en el país que
vulnerables (fig. 9.42). Los parásitos viven requieren tratamiento con preventivo con
en los intestinos, produciendo 1.000 hue- quimioterapia (QP) para helmintiasis transmi-
vos/día en las heces. Humanos infectados tidas por el suelo, en todo el mundo, 2014».
por huevos (ascariasis, triquinosis) o larvas © Organización Mundial de la Salud 2015. http: //
gamapserver. Who.int/mapLibrary/Files/Maps/
(Ancylostoma) en alimentos contaminados; o STH_2014.png?ua=1
mediante la penetración directa de la piel
(Anquilostoma, Strongyloides). Presentación:
Diarrea, dolor abdominal, pérdida de sangre/proteína, dete-
rioro, crecimiento/desarrollo cognitivo. Prurito/urticaria si la
migración envuelve la piel (Strongyloides fig. 9.42). La invasión
pulmonar (ascariasis, anquilostoma, Strongyloides) puede con-
ducir a un síndrome similar al de Loeffler: tos, disnea, sibilan-
cias, hemoptisis, consolidación, eosinofilia. Otra invasión de
tejido (triquinosis): mialgia, conjuntivitis, fotofobia, meningitis,
encefalitis, neuropatía. Diagnóstico: Clínico, huevos en las Fig. 9.43. Huevos de Asca-
ris (45 40 m) y 么 gusano
muestras de heces (fig 9.43). Eosinofilia. Strongyloides serolo- (20 cm).
gía/PCR. Tratamiento: tabla 9.26. Cortesía del Prof. S. Upton,
Tabla 9.26. Medicamentos antihelmínticos Kansas University.
Indicación Mecanismos Indicación
Mebendazol Bloque irreversible de absorción de glucosa/ Lombrices, tricocéfalos, anquilostoma
nutrientes
Albendazol
ATP, inmovilización y muerte del gusano Ascariasis, anquilostoma (Strongyloides)
Ivermectina
Cl- permeabilidad, hiperpolarización, parálisis
Strongyloides, ascariasis
Pyrantel Bloqueo neuromuscular despolarizante Dosis única en el gusano, ascáride y
Pamoato que produce parálisis espástica del gusano anquilostoma
Piperazina Parálisis flacida del gusano, expulsa gusano vivo Embarazo (ascariasis)
Teniasis (tenia)
Incluye Taenia solium (cerdo, 2-8 m, 50.000 huevos/gusano), Taenia saginata (carne de
vacuno, 4-12 m, 100.000 huevos/gusano), Taenia asiatica (Asia, 4-8 m, millones de hue-
vos). Presentación: No síntomas o síntomas GI leves, segmentos de tenia (proglótidos) a
través del ano/en excrementos. Diagnóstico: Huevos/proglótidos en las heces. Tratamien-
to: Praziquantel, niclosamida.
䊳 Ver también toxoplasmosis (p. 425), esquistosomiasis (p. 434), cisticercosis (p. 437).
(c) Esquistosomas
(g) Los huevos eclosionan inmaduros migran a
en agua dulce través del cuerpo
Puede causar
(f) Los huevos se liberan en (d) Maduración del fiebre
la orina o en las heces esquistosoma Katayama y/o
síndrome de
Loeffer
Enfermedades infecciosas
• Equinococosis alveolar: E. multilocularis. Se encuentra en el hemisferio norte. Usual. Los
huéspedes son zorros y roedores.
Los humanos ingieren huevos de parásito a través de alimentos/agua contaminados con
heces de animales o por animales que están infectados con la lombriz. La enfermedad se
debe al desarrollo de larvas parecidas a quistes en las vísceras, usualmente hígado/pul-
mones. Presentación: Los quistes de crecimiento lento pueden ser asintomáticos por
muchos años. Los síntomas y signos dependen de la ubicación:
• Hígado: dolor abdominal, náusea, hepatomegalia, ictericia obstructiva, colangitis, fiebre
de origen desconocido.
• Pulmón: disnea, dolor torácico, tos, hemoptisis.
• SNC: signos de ocupación del espacio.
• Hueso: una interesante causa osteolítica del dolor en la rodilla, compresión medular.
• Enfermedad silenciosa en mama, riñón, glándulas suprarrenales, vejiga, corazón, psoas.
Diagnóstico: Ecografía/TC/RMR: quistes avasculares llenos de líquido ± calcificación (
quiste benigno, TB, micosis, absceso, neoplasia). Serología. Antígeno equinocócico positi-
vo. Tratamiento: Obtenga ayuda (incluyendo cirugía). Depende del tipo de quiste, ubica-
ción, tamaño y complicaciones. Tratamiento prolongado (meses/años) con albendazol.
PAIR: Punción, Aspiración, inyectar (solución salina hipertónica/productos químicos),
Reaspirar. Cuidado con derramar el del quiste: praziquantel se puede administrar perio-
peratoriamente.
Fasciola hepática (trematodo común del hígado)
Infección parasitaria. ~ 2 millones de personas infectadas en todo el mundo. Las mayo-
res tasas de infección en Bolivia y Perú. Las larvas infecciosas se desarrollan en huéspe-
des acuáticos de caracol. Los seres humanos infectados vía ingesta productos contami-
nados (agua, plantas acuáticas, p. ej., berros) o por comer el hígado poco cocido de otro
animal huésped, p. ej., ovejas, cabras. Enfermedad causada por la migración del parásito a
los conductos de la bilis Presentación: Fase aguda con migración del intestino a través del
hígado (2-4 meses): dolor abdominal, náuseas, fiebre, erupción urticarial, eosinofilia. Fase
crónica con producción de huevos en los conductos biliares: colecistitis, colangitis, pan-
creatitis, cirrosis. Diagnóstico: Serología en fase aguda y crónica. Huevos solo en
heces/aspirado de bilis en fase crónica. Tratamiento: Triclabendazol en dosis única. Tratar
a todos los casos sospechosos en áreas endémicas.
Otros trematodos hepáticos: opistorquiasis y clonorquiasis
Opistorquiasis y clonorquiasis son trematodos hepáticos adquiridos por comer pescado
contaminado, principalmente en el sudeste de Asia. Los gusanos adultos se alojan en los
pequeños conductos biliares y en la vesícula biliar. Presentación: Dolor abdominal, altera-
ciones GI, colecistitis, colangitis, colangiocarcinoma. Diagnóstico: Huevos en heces. Trata-
miento: Praziquantel.
fláccida. Presentación: Incubación de hasta 8 d (normalmente 12-36 h). Afebril, parálisis flác-
cida descendente: diplopía, ptosis, disartria, disfagia, parálisis progresiva de las extremidades,
insuficiencia respiratoria. Signos autónomos: boca seca, pupilas fijas/dilatadas, disfunción uri-
naria/cardíaca/gastrointestinal. 䊳 No hay signos sensoriales. Diagnóstico: Clínico: no retrasar el
tratamiento. Tomar muestras (suero, heces, herida hisopo) para confirmación posterior por
cultivo/PCR. Contacto Unidad de referencia de bacterias GI en el Reino Unido (020 8327
7887). Tratamiento: Obtenga ayuda. Ingresar en UCI. Antitoxina botulínica (de Public Health
England, Colindale 020 8200 4400), bencilpenicilina, metronidazol.
Tétano
Causado por esporas de Clostridium
anaeróbico tetani, universalmente pre-
sentes en el suelo. Ingresa en el cuer-
po a través de una brecha en la piel.
Produce una neurotoxina (tetanospas-
mina) que se difunde vía sangre/linfáti-
cos e interfiere con la liberación de
neurotransmisores con contracción
muscular sin oposición y espasmo
(tétanos = «estirar»). ~ 6 casos/año Fig. 9.45. Espasmo causante de opistótono
en Inglaterra y Gales (2015). El tétanos (arqueamiento de cuerpo con hiperextensión del
materno y neonatal es una causa cuello). tétanos, rabia, malaria cerebral, neuro-
importante de mortalidad prevenible sífilis, lesión cerebral aguda, catatonia.
en los países con ingresos medios © Centros para el Control y la Prevención de Enfer-
bajos. Presentación: El sitio de entrada medades.
puede ser trivial/desapercibido. Incuba-
ción ~ 3-21 d. Pródromo: fiebre, malestar, cefalea. Trismo (trismo, griego «trismos» =
molienda). Risus sardonicus = una postura parecida a una sonrisa de los músculos facia-
les hipertónicos. Opistótonos (fig. 9.45). Espasmos musculares inducidos por el movi-
miento, las inyecciones, el ruido, luego se torna espontánea. Disfagia. Disfunción autonó-
mica: arritmias, fluctuación de la PA. Paro respiratorio. Diagnóstico: Clínico. Detección de
la toxina tetánica/aislamiento de C. tetani.
Tratamiento: 䊳䊳 Obtenga ayuda en la UCI: el nivel de atención de apoyo predice el resul-
tado. Inmunoglobulina tétanos (TIG) IM (o suero de antitétano equino si no está dispo-
nible). Tomar sangre para la detección de anticuerpos contra la toxina tetánica y contra
el tétanos. Desbridamiento de la herida, metronidazol. Tratamiento del espasmo: diaze-
pam/lorazepam/midazolam (Puede necesitar dosis altas IV), sulfato de magnesio IV, baclo-
feno (necesidad de administrar intratecal para la penetración de la barrera hematoen-
cefálica .·. solo con apoyo ventilatorio en la UCI), dantroleno, toxina botulínica-A23. Vacu-
nación: Rutina en el Reino Unido (p. 407). Profilaxis después de una lesión: TIG en caso
de contaminación intensa. Si la historia de vacunación es desconocida/o incompleta: TIG
más dosis de vacuna en un sitio diferente. Dosis de recuerdo preventiva antes de viajes
si> 10 años desde la última dosis.
Poliomielitis
Un picornavirus altamente infeccioso, transmitido por vía fecal-oral o comida/agua con-
taminadas. Réplicas en el intestino. Invade el sistema nervioso con destrucción de célu-
las del asta anterior/tronco encefálico parálisis irreversible. Incidencia un 99% desde
la formación de la Iniciativa Mundial de Erradicación de la Poliomielitis en 1988. 74 casos
en 2015. Sigue siendo endémico en Afganistán y Pakistán (2016)12. Presentación: Incuba-
ción 7-10 d. Pródromo similar a la gripe en ~ 25%. Etapa preparalítica: fiebre,
pulso,
cefalea, vómitos, náuseas, temblor, dolor en las extremidades. ~ 1 en 200 progreso a esta-
dio paralítico: MNI/signos bulbar ± fallo respiratorio. 䊳 No hay signos sensoriales. Sín-
drome postpolio en ~ 40% de los supervivientes (hasta 40 años en adelante): nueva
debilidad muscular progresiva, mialgia, fatiga. Diagnóstico: Cultivo viral de heces, frotis
faríngeos, sangre, LCR. Heces más sensible –envíe dos muestras > 24 h aparte. La PCR
puede diferenciarse del tipo salvaje de la vacuna. Serología emparejada. Tratamiento: Nin-
guno. Vacunación: Salk (inactivado, IM) o Sabin (vivo, oral). En áreas previamente endémi-
cas, 200 millones de voluntarios han vacunado a 3 mil millones de niños, previniendo 1,5
millones de muertes en los últimos 20 años.
Rabia
Rhabdovirus transmitido a través de la saliva o tejido del SNC, generalmente de la mor- 437
dedura de un mamífero infectado, p. ej., murciélago (en el Reino Unido), perro (95% de
transmisiones a seres humanos), gato, zorro. La enfermedad es fatal cuando aparecen los
síntomas. Distribución mundial. ~ 50.000 muertes/año, la mayoría en África/Asia. Presen-
tación: Incubación ~ 9-90 d. Pródromo: cefalea, malestar, comportamiento extraño, agita-
Enfermedades infecciosas
ción, fiebre, parestesia en el lugar de la mordedura/herida. Avanza hacia una de las dos
formas de enfermedad:
• «Rabia furiosa»: hiperactividad y terror (hidrofobia, aerofobia); o
• «Rabia paralítica»: parálisis fláccida en la extremidad mordida coma muerte.
Diagnóstico: Clínico: exposición potencial + signos de mielitis/encefalitis (enfermedad no
progresiva y enfermedad> 3 semanas son indicadores negativos). PCR viral (saliva, cere-
bro, tejido nervioso) o anticuerpos anti-LCR pueden ser posteriormente confirmados
(post-mortem). Tratamiento: Evite el contacto con los animales. Si le muerden o lamen la
piel rota, lave (> 15 min) con jabón y busque ayuda urgente. Profilaxis postexposición:
vacunación ± inmunoglobulina antirrábica. Tratamientos experimentales: ribavirina, IFN,
ketamina. Evitable y eliminable con vacunación previa a la exposición de todos los que
corren riesgo. La vacunación de los perros puede casos en humanos
Virus de la encefalitis japonesa
Flavivirus propagado por los mosquitos. Transmisión endémica (~ 3 mil millones en riesgo)
y causa común de encefalitis viral en Asia y el Pacífico occidental. La enfermedad grave es
rara (1 en 250), pero conduce a secuelas neurológicas o psiquiátricas hasta en un 50%,
mortalidad hasta 30%. Presentación: Incubación 5-15 d. La mayoría de la fiebre asintomáti-
ca o leve y cefalea solamente. Enfermedad grave: fiebre alta, cefalea, meningitis, alteración
del estado mental, coma, convulsiones, parálisis espástica, muerte. Diagnóstico: Clínico en
área endémica. Suero/serología LCR, PCR7. Tratamiento: De soporte. Vacunación.
Vírus del oeste del Nilo
Flavivirus transmitido por mosquitos con transmisión en Europa, oriente medio, África,
Asia, Australia y América. Presentación: Incubación 2-14 d. Asintomático en ~ 80%. Fiebre
del Nilo occidental en ~ 20%: fiebre, cefalea, náuseas y vómitos, linfadenopatía. Neuroin-
vasivo en ~ 1%: encefalitis, meningitis, parálisis fláccida, mortalidad ~ 10%. Diagnóstico:
Suero /IgM LCR, PCR viral. Tratamiento: De soporte. Se espera la vacuna (2016).
Neurocisticercosis
Las enfermedades helmínticas del SNC más comunes y la causa más frecuente de epi-
lepsia (~ de la epilepsia) es en áreas endémicas (fig. 9.46). Causada por la tenia del cerdo
Taenia solium. El consumo de las partes de cerdo infestadas crea la infestación intestinal
(teniasis) y el desprendimiento de los huevos de T. solium en las heces. La enfermedad
invasiva ocurre cuando se ingieren vía transmisión fecal-oral de individuos con teniasis.
La neurocisticercosis se debe a quistes larvarios que infectan el SNC. Presentación: Deter-
minada por el sitio y el número de lesiones (citicerco) dentro del cerebro/médula espi-
nal. Epilepsia en el 70%. Neurología focal en ~ 20%: pérdida motora/sensorial, alteración
del lenguaje, movimientos involuntarios. También cefalea, pérdida visual, meningitis, hidro-
cefalia, discapacidad. Diag-
nóstico: Imagen TC/RM y
serología. Tratamiento: Con-
trol de la convulsión ( evi-
dencia sobre la elección del
fármaco, duración del trata-
miento o profilaxis si no
hay convulsiones). Consejo
neuroquirúrgico si hidroce-
falia/
ICP. Albendazol para
las que no están calcificadas
(mejor penetración del
SNC que el praziquantel). Fig. 9.46. Endemicidad de Taenia solium, 2015.
Cuidado con las respuestas Reproducido con permiso de la Organización Mundial de la Salud,
inflamatorias provocadas Endemicidad
Salud 2016.
de Taenia solium, 2015. © Organización Mundial de la
por el tratamiento –consi- Http://www.who.int/mediacentre/factsheets/Endemicity_Taenia_Soli
derar dexametasona. um_2015-1000x706.jpg? Ua = 1
7Servicio de diagnóstico y asesoramiento especializados en el Reino Unido a través del Laboratorio
de patógenos raros e importados (RIPL): www.Gov.uk/government/collections/rare-and-imported-
pathogens-laboratory-ripl
Enfermedades infecciosas
Causa uveítis posterior. Presentación: visión borrosa/cuerpos
flotantes. Diagnóstico: clínico. Fondo de ojo (fig. 9.50): enfo-
que de coroiditis, cicatriz coriorretiniana de infección previa,
cobertura de neblina vítrea debido a la respuesta inflama-
toria. Lesiones múltiples/bilaterales/extensas si
inmunosu- Fig. 9.50. Toxoplasmosis en
presión. Serología. PCR de fluido ocular. Tratamiento: Atova- retina.
quona ( toxicidad), sulfadiazina y pirimetamina.
Infección filarial
Oncocercosis («ceguera de los ríos»)
Causada por el gusano filario, Onchocerca volvulus. Transmitido por la mordedura de
moscas negras que se crían en ríos y arroyos de flujo rápido. La segunda causa infec-
ciosa más común de ceguera en todo el mundo: predominantemente África subsa-
hariana, Brasil, Venezuela, Yemen. Presentación: Se forma un nódulo en el sitio de la
mordedura donde las larvas maduran a los gusanos adultos. La hembra adulta puede
liberar hasta 1000 microfilariae/día causando:
• enfermedad de la piel: pigmentación alterada, liquenificación, pérdida de elastici-
dad, mala cicatrización.
• enfermedad ocular: queratitis, uveítis, catarata, pupila fija, degeneración del fondo,
neuritis óptica/atrofia, deterioro/pérdida visual (fig. 9.51).
• función linfática alterada: linfadenopatía, elefantiasis.
Diagnóstico: Visualización de la microfilaria en la biopsia del ojo o de la piel: un afeitado
fino de piel limpia se incuba en solución salina al 0,9% para permitir que surjan micro-
filarias que aparecen en la identificación microscópica. Serología. Tratamiento: Ivermecti-
na 150 mcg/kg, una dosis cada 3-12 meses (dependiendo de la probable reexposición).
CI si coexisten Loa-Loa debido al riesgo de una reacción cerebral encefálica. Pauta de
6 horas de doxiciclina segura y eficaz en varios estudios. No hay vacuna disponible.
Fig. 9.51. Esclerosis bilateral Fig. 9.52. Migración de Loa Fig. 9.53. Loa loa cruzando
Queratitis en la oncocercosis loa En la piel. el conjuntiva.
causando ceguera. Reproducido de Warrell et al. . Reproducido de Warrell et al.
Reproducido de Warrell et al. Oxford Textbook of Medicine, Oxford Textbook of Medicine,
Oxford Textbook of Medicine, 2010, con el permiso de 2010, con el permiso de
2010, con el permiso de Oxford University Press. Oxford University Press.
Oxford University Press.
Infecciones No infecciosas
(más comunes) (menos comunes)
Miasis
Infección con larvas de mosca/gusano. Puede afectar teji- 441
do vivo y necrótico. En el sur y centro de América el
moscardón pone sus huevos en mosquitos que los
depositan cuando muerden. En el África subsahariana, la
mosca Tumbu pone sus huevos en la ropa que luego se
Enfermedades infecciosas
pasa a la piel. Presentación: Hinchazón dolorosa. Puede
haber sensación de movimiento dentro de la picadura.
Se puede abrir para revelar los tubos respiratorios lar-
vales (fig. 9.57). Diagnóstico: Clínico. Identificación de lar-
vas en la picadura. Tratamiento: El petróleo o la grasa del
cerdo causan asfixia del gusano haciendo que protruya Fig. 9.57. Miasis.
más hacia fuera de la piel permitiendo su eliminación Reproducido bajo la licencia Crea-
con pinzas. Cuidado: espinas hacia atrás en la enferme- tive Commons Attribution CCo
dad americana puede prevenir la eliminación completa a 1.0 de Dominio Público Universal
menos que se haga quirúrgicamente. Ivermectina. Ase- de https://common.wikimedia.org/
wiki/
gúrese de que la vacuna contra el tétanos esté al día. Archivo: Miasis_human.jpg
Tungiasis
Infección de la piel por la pulga de la arena/vaina Tunga penetran. Adquirida (por lo gene-
ral caminando descalzo) en suelos arenosos, selvas tropicales y plantaciones de banano
en el sur y centro América, África subsahariana, Asia, Caribe. Presentación: Dolorosa,
pápula con picazón del pie. Puede ser visible la extrusión de huevos. Costras negras al
morir la pulga. Diagnóstico: Clínico. Tratamiento: Ninguno, autolimitado.
Lepra (enfermedad de Hansen)
Causado por Mycobacterium leprae de crecimiento lento, ácido-rápido que afecta la piel,
nervios y membranas mucosas. Incubación 5-20 años. Transmitido a través de gotitas
desde nariz/boca durante contacto cercano y frecuente. Clasificado como:
• Multibacilar («lepromatoso»): respuesta inmune,
bacilos, frotis positivo.
• Paucibacilar («tuberculoide»):
respuesta inmune, granulomata con bacilos, los frotis
pueden ser negativos.
Tratamiento gratuito a través de la OMS desde
1995: prevalencia en un 99% a 176 000 en
2014 (5,2 millones en 1985)12. Presentación:
Lesiones cutáneas hipopigmentadas (fig. 9.58,
menos marcadas que el vitíligo), pérdida sensorial,
nervios engrosados, nódulos, placas, congestión
nasal, epistaxis, debilidad muscular, parálisis, neuro-
patía, úlceras. Afectación ocular: iritis crónica,
escleritis, episcleritis, sensación corneal (parálisis
del V par), parpadeo (parálisis del VII par), lagof-
talmos (dificultad para cerrar los ojos), trauma
producido por las pestañas (triquiasis). Diagnósti-
co: Clínico, frotis de piel positivo, biopsia de piel. Fig. 9.58. Lepra: máculas hipopigmen-
Serología poco fiable. Tratamiento: Tratamiento tadas.
multidrogas de la OMS: Cortesía del Profesor Jayakar Thoma.
• Multibacilar: Rifampicina 600 mg/mes, dapsona
100 mg OD, clofazimina 300 mg/mes y 50 mg OD. Dura-
ción: 1 año.
• Paucibacilar: rifampicina 600 mg/mes, dapsona 100 mg OD.
Duración: 6 meses. Si una lesión simple: rifampicina 600 mg
+ ofloxacina 400 mg + minociclina 100 mg (dosís única).
Pián
Enfermedad granulomatosa crónica causada por Treponema
pertenue. Encontrada en áreas húmedas/de la selva tropical en
África, Asia, América Latina, Pacífico. Asociada con condicio-
nes socioeconómicas. Transmisión por contacto directo. Pre-
sentación: Enfermedad primaria = papiloma. Si no se trata
ulcerará (fig..9.59). Enfermedad secundaria: lesiones amarillas Fig. 9.59. Pián ulceropa-
de la piel, dactilitis. No se producen complicaciones de SCV y pilomatoso.
SCN. Diagnóstico: La serología es indistinguible de la sífilis (Tre- Reproducido de Warrell et
Alabama. Libro de texto de
ponema pallidum). Ensayo de plataforma de doble vía (DPP) Medicina de Oxford, 2010,
puede distinguir entre infecciones actuales y pasadas. PCR. con permiso de Oxford Uni-
Tratamiento: Una dosis única de azitromicina VO. versity Press.
Criterios de diagnóstico
Pirexia > 3 semanas sin causa identificada después de la evaluación en el hospital de
3 días o 3 visitas externas
La fiebre también puede presentarse en subgrupos específicos que requieren una eva-
luación de 3 días incluyendo cultivos microbiológicos que se incuban durante 2 días
antes de calificarlo como un POD:
• POD nosocomial: Paciente hospitalizado > 48 h sin infección en el ingreso.
• POD inmunodeficiente: Pirexia en pacientes con < 500 neutrófilos/microlitro.
• POD HIV: Pirexia en la infección por el VIH que dura > 4 semanas como paciente
ambulatorio o 3 días como paciente hospitalizado.
Historia
La mayoría de los POD se deben a enfermedades comunes con presentación atípica.
Considere todos los detalles como potencialmente relevantes. Incluye: viaje (p. 414),
dieta, contacto con animales, cambios en medicamentos, uso recreativo de drogas, ante-
cedentes obstétricos/sexuales, antecedentes familiares (tabla 9.30).
Exploración
Confirmar fiebre. El patrón de fiebre es raramente útil (contrario a los libros de texto, la
mayoría de la malaria no tiene un patrón específico). No olvide: boca, genitales, piel, tiroi-
des, sistema linfático, ojos incluida retina, arterias temporales (tabla 9.30).
Investigación
䊳 Extensión de la investigación depende del estado inmunológico y de lo bien que esté
el paciente.
• Análisis de sangre: Sistemático de sangre, urea y electrolitos, PFH, PCR, VSG, electrofo-
resis, LDH, CK, ANA, ANCA, factor reumatoide, prueba de VIH, frotis de malaria, ensa-
yo de liberación de interferón-gamma para TB (p. 394).
• Microscopia y cultivo: Sangre x 3, orina, esputo (incluyendo BAAS), heces, LCR.
• Técnicas de imagen: RXT, ecografía abdominal/pélvica, Doppler venoso. Considere: TC
(AP), RM, eco (TOE). Fluorodeoxiglucosa-PET (FDG-PET) destaca áreas de absorción
de glucosa incluyendo tumor e inflamación. Puede ayudar/dirigir el diagnóstico en hasta
1/ de POD.
3
• Otros: Serología de hepatitis, CMV, VEB, ecografía autoinmune, crioglobulinas, toxoplas-
mosis, brucelosis, Coxiella, biopsia de ganglios linfáticos, endoscopia, biopsia de arteria
temporal.
Tabla 9.30. Diferencial FOD de acuerdo con la historia y los hallazgos del examen
Historia Diferencial
Contacto con los animales Brucelosis, toxoplasmosis, Bartonella, leptospirosis, fiebre Q, psitacosis
Tos TB, PE, fiebre Q, fiebre entérica, sarcoidosis, enfermedad del
legionario
Síntomas nasales Dinusitis, GPA, fiebre recurrente, psitacosis
Confusión TB, Cryptococcus, sarcoide, carcinomatosis, brucelosis, fiebre entérica
Artralgia SLE, endocarditis infecciosa, enfermedad de Lyme, brucelosis, TB, IBD
Pérdida de peso Malignidad, vasculitis, TB, VIH, EII, tirotoxicosis
Antecedentes familiares Fiebre mediterránea familiar
Antecedentes de fármacos Fiebre inducida por fármacos (~7-10 días después del nuevo fármaco)
Examen Diferencial
Conjuntivitis Leptospirosis, fiebre recurrente, fiebre maculosa, triquinosis
Uveítis Tuberculosis, sarcoide, enfermedad de Still de adultos, LES,
enfermedad de Behçet
Boca Absceso dental, enfermedad de Behçet, CMV, IBD
Linfadenopatía Linfoma, TB, EBV, CMV, VIH, toxoplasmosis, brucelosis, Bartonella
Erupción cutánea VIH, EBV, LES, vasculitis, enfermedad de Still, endocarditis
Hepatomegalia TB, EBV, malignidad, malaria, fiebre entérica, hepatitis granulomatosa,
fiebre Q, leishmaniasis visceral
Esplenomegalia Leucemia, linfoma, TB, brucelosis, endocarditis infecciosa, CMV, VEB,
artritis reumatoide, sarcoide, fiebre entérica, fiebre recurrente
Sensibilidad renal Pielonefritis crónica, absceso perinefrénico
Epididimoorquitis TB, linfoma, VEB, brucelosis, leptospirosis
Enfermedades infecciosas
1. «¿Ha dado a luz bebés sépticos en el último año?» (Impresione y cure a sus ami-
gos obstetras que le dicen que «estoy tan deprimido por no ser capaz de librar-
se de este catarro», y que han olvidado la transferencia de brucelosis desde el
bebé hasta el obstetra).
2. «¿Está su carpa bien en la actualidad?» (Infección de la piel por Mycobacterium
marinum).
3. «¿Podría ser una mordedura de garrapata Hyalomma cuando montaste tu avestruz
en la carrera de la semana pasada?» (Fiebre hemorrágica de Crimea y Congo).
4. «¿Quién te ha estado lamiendo la cara recientemente?» (Pasteurella multocida).
5. «¿Su perro ha estado de vacaciones este año?» (Monkeypox de los perros de las
praderas).
6. «¿Ha perdido peso tu erizo doméstico?» (Salmonella).
7. «¿Desarrolló su cefalea después de haber adoptado su cotorra?» (Transmisión
zoonótica de Cryptococcus neoformans que causa meningitis).
8. «¿Tuviste un cerdo callejero viviendo bajo tu casa cuando empezó el monzón?»
(Cerdos + agua estancada + mosquitos = encefalitis japonesa).
9. «¿Tomaste la paella de rana local?» (Angiostrongiliasis causante de la meningitis
eosinófila).
10. «¿Su cabra abortó el año pasado?» (Coxiella burnetii).
11. «¿Tu cerdo deprimido desarrolló un hocico púrpura?» (Endocarditis por Erysipe-
lothrix rhusiopathiae vía erisipela porcina).
12. «¿Puedo ver a su langosta doméstica: puede ser la causa de su mala mano?»
(Mano del cuidador de langosta es una infección eri-
sipeloide de Erysipelothrix). Las langostas como mas-
cotas tienen un gran pedigrí. Gérard de Nerval le
daba a su langosta paseos, con una correa de seda
azul, al lado del Sena (fig. 9.60). Una langosta, dijo, es,
«seria, tranquila y silenciosa, no rasca ni ladra como
un perro, y conoce todos los secretos de las pro-
fundidades». La misión de sus langostas era comba-
tir el filistinismo que nos avoca a la mediocridad. Fig. 9.60. «¿Está bien tu
Pregunte también: «¿Dónde has estado?». Aunque no mascota la langosta?»
serás libre de pensar, incluso cuando la respuesta es «Sou- (Gérard de Nerval).
thend». Puede tratarse de escalas amnésicas. O tal vez su paciente es un manipulador
de equipaje de aeropuerto, mordido por un mosquito excursionista. E incluso cuando
no ha habido ningún viaje a los trópicos, el calentamiento global nos asegura que los
trópicos están viajando a nosotros. Para los primeros escritores de libros de medicina,
el paraíso era justo más allá del lejano oriente, y el mundo era un disco rodeado por
Océanos de agua azul. Pero el mundo sigue adelante, manchado, despreciable y des-
trozado; y el paraíso parece estar evolucionando con cada vez más serpientes en el
jardín, seduciéndonos con respuestas ambiguas a nuestras grandes preguntas.
No renunciar. Si la producción es negativa, puede ser necesario repetir las prue-
bas. ¿Quizás el organismo es «exigente» en su necesidad nutricional o requiere una
incubación más larga? Incluso si se logra el cultivo, es posible que el organismo cul-
tivado sea flora no patógena. Si falla la producción, busque anticuerpos o antígenos.
La PCR se utiliza cada vez más para la identificación, pero está lejos de ser infalible;
tenga cuidado con los inhibidores, contaminación y la base que no es tan especial
como su paciente.
Recuerde a Sherlock: «Mi mente», dijo, «se rebela ante el estancamiento. Dame pro-
blemas, dame trabajo, dame el criptograma más abstruso o el más intrincado análisis y
estaré en mi atmósfera apropiada. Puedo administrarlos con estimulantes artificiales.
Pero aborrezco la rutina de la existencia. Anhelo por la exaltación mental. Por eso he ele-
gido mi propia profesión, o más bien la creé, porque yo soy el único en el mundo».
La Señal de los Cuatro, Arthur Conan Doyle, 1890
No, Sherlock, tú no eres el único, tienes a los médicos de enfermedades infecciosas
como compañeros.
10 Neurología
Contenido
Neurología en la cabecera:
¿Dónde está la lesión? 446
Fármacos y sistema nervioso 448
Suministro de la sangre en el
cerebro 450
Estudian los nervios periféricos 452
Dermatomas y nervios periféricos 454
Algunas presentaciones comunes:
Cefalea 456
Migraña 458
Mareos 460
Vértigo y mareos 462
Pérdida auditiva y tinnitus 464
Debilidad bilateral aguda
de las piernas 466
Movimientos involuntarios anormales
(discinesia) 468
Enfermedades y afecciones:
Ictus:
Características clínicas
y tratamiento agudo 470
Investigación y prevención 472
Rehabilitación después del ictus 474
Ataque isquémico transitorio (AIT) 476
Hemorragia subaracnoidea (SAH) 478
Trombosis venosa intracraneal (TVI) 480
Hematoma subdural 482
Hematoma extradural (epidural) 482 Fig. 10.1. Sir Roger Bannister CBE corrió la pri-
Delirio (estado confusión agudo) 484 mera vez una milla en menos de 4 minutos el 6
Demencia 486 de mayo de 1954 a la edad de 25. En ese tiem-
po él era un estudiante de medicina en la Uni-
Enfermedad de Alzheimer (EA) 488 versidad de Oxford que se graduó al año
Epilepsia: diagnóstico 490 siguiente. Llegó a ser un prominente neurólogo
Epilepsia: tratamiento 492 académico e investigó sobre el sistema nervio-
Parkinsonismo 494 so autonómico, lo que consideraba su mayor
Esclerosis Múltiple (EM) 496 logro. La actividad autonómica y correr están,
Lesiones ocupantes de espacio por supuesto, íntimamente ligados, como Ban-
(LOE) 498 nister reflejaba de una manera más poética del
Hipertensión intracraneal idiopática 498 habitual cliché «luchar o huir»: «Cuando era un
Parálisis de Bell (parálisis del nervio facial niño corrí descalzo a lo largo de arena húmeda
idiopática) 500 y fresca por la orilla del mar. El aire tenía una
Mononeuropatías 502 calidad especial… El sonido de las olas silencia-
Polineuropatías 504 ba todos los demás, y me sorprendí, casi asusta-
Neuropatía autonómica 505 do, por la emoción tremenda que unos cuantos
Enfermedad de la motoneurona pasos podrían crear. Fue un intenso momento
de descubrimiento de una fuente de poder y
(EMN) 506 belleza que hasta entonces apenas había soña-
Parálisis bulbar 507 do». En 2014, Bannister habló públicamente con
Espondilosis cervical 508 ironía cuando fue diagnosticado de la enferme-
Miopatía 510 dad de Parkinson.
Miastenia gravis (MG) 512 Bettmann/Bettman collection/Getty Images.
Síndrome miasténico de Lambert-Eaton
(SMLE) 512
Neurofibromatosis 514
Siringomielia 516
Retrovirus y neurología 517
Neurología
situada en la glándula pineal, es una entidad separada totalmente del ser material, y
controla el avatar del cuerpo físico como un titiritero.
Estos puntos de vista conflictivos ilustran bien el espectro de la enfermedad neu-
rológica y sus borrosas fronteras con la psiquiatría y la psicología. Jean Martin Char-
cot (1825-1893), a menudo acreditado como el padre de la neurología, parecía estar
más interesado en este cruce que en la disfunción neuronal: pasó dos décadas de
su carrera estudiando la histeria en París, atribuyendo inicialmente los síntomas del
llanto, del desmayo y la ceguera temporal a una causa orgánica, heredada, antes de
revisar su punto de vista con posterioridad para concluir que se trataba de una
enfermedad psicológica. Sus polémicas afirmaciones en este campo inspiraron las
teorías psicoanalíticas de su estudiante Sigmund Freud e ilustraron el verdadero
poder de lo consciente, o subconsciente, para producir síntomas físicos, un fenóme-
no familiar para todos los médicos. Quizás reflejando nuestra frustración con este
desafiante área así como con su limitado éxito, recordamos a Charcot por sus resul-
tados más tangibles, p. ej., al dar la descripción inaugural de, entre otras cosas, escle-
rosis múltiple, enfermedad de Parkinson, esclerosis lateral amiotrófica (ELA), enfer-
medad de Charcot-Marie-Tooth y, por supuesto, su epónima articulación deforma-
da resultante de la pérdida proprioceptiva.
Sin embargo, tanto Aristóteles como Charcot seguramente estarían de acuerdo
con Descartes y su proposición de «cogito ergo sum»: pienso, luego existo. Si la
mente y el cerebro son dobles o uno, están inextricablemente unidos y la propia
naturaleza de la conciencia demuestra su existencia.
las del asta anterior en la médula espinal (a través de la cápsula interna, tronco cerebral y
médula)1. • La debilidad de la NMS afecta a grupos más que a músculos individuales, típi-
camente en un patrón «piramidal»: el brazo, los extensores están predominantemente afec-
tados; en la pierna ocurre todo lo contrario, y los flexores son el grupo muscular más débil.
• La espasticidad se desarrolla en los grupos de músculo más fuertes (flexores de brazos y
extensores de piernas). Se manifiesta como ↑tono que depende de la velocidad, es decir,
cuanto más rápido se mueve el músculo del paciente, mayor es la resistencia, hasta que
finalmente cede (como una navaja)2. • La atrofia muscular es menos prominente. • Hay
hiperreflexia: los reflejos son rápidos. • Los plantares son ascendentes (signo de Babinski posi-
tivo) ± clonus (provocado por la dorsiflexión rápida del pie; ≤ 3 movimientos rítmicos des-
cendentes del pie son normales). • La pérdida de movimientos finos del dedo puede ser
mayor de lo esperado por el grado general de debilidad (véase RECUADRO «Clasificación
de la debilidad muscular»). Las lesiones de la NMS pueden inmitar lesiones de MNI en
las primeras horas antes de que se desarrollen espasticidad e hiperreflexia.
Neurona motora inferior (NMI): Las lesiones son causadas por daños en cualquier parte
entre las células del asta anterior y las porciones más distales, incluyendo las raíces ner-
viosas, los plexos y los nervios periféricos. Los patrones de debilidad corresponden a los
músculos suministrados por las neuronas involucradas.• Los músculos afectados mues-
tran atrofia ± fasciculación (contracciones espontáneas involuntarias). • Hay hipotonía/flac-
cidez: la extremidad se siente blanda y floja, proporcionando poca resistencia al estira-
miento pasivo. • Los reflejos están reducidos o ausentes; las plantas permanecen flexoras.
El diagnóstico diferencial principal de la lesión de la NMI es una enfermedad muscular
primaria (p. 510) –pero aquí hay pérdida simétrica, los reflejos son normales o se pier-
den tardiamente, y no hay componente sensorial.
Síntomas mixtos de NMS y NMI: Puede ocurrir, p. ej., en ELA, ↓B12, taboparesis (ver p. 466).
Déficits sensoriales: Es importante probar las modalidades individuales y recordar las
peculiaridades de nuestro entramado normal correctamente interpretados, la distribu-
ción de la pérdida sensorial y la modalidad involucrada (dolor, Ta, tacto, vibración, senti-
do de la posición de la articulación) ayudarán a redefinir y aumentar su confianza en la
localización de la lesión (ver RECUADRO «De los hallazgos a la neuroanatomía»). Las sen-
saciones de dolor y Ta viajan a lo largo de pequeñas fibras en los nervios periféricos y
los tractos anterolaterales (espinotalámicos) en la médula y el tronco encefálico (p. 516),
mientras que la posición articular y la sensación de vibración viajan a través de fibras lar-
gas en los nervios periféricos y en las grandes columnas dorsales de la médula.
Clasificación de la debilidad muscular (Clasificación MRC)
• Grado 0 Sin contracción muscular • Grado 3 Movimiento activo contra la gravedad
• Grado 1 Mínima contracción • Grado 4 Movimiento activo contra la resistencia
• Grado 2 Algunos movimientos activos • Grado 5 Potencia normal (teniendo en cuenta
la edad)
El Grado 4 cubre una gran gama: 4-, 4, y 4+ denotan movimiento contra resistencia leve, mode-
rado o fuerte; evitar las descripciones rutinarias –«fuerza 4/5 en todo» sugiere una cuadripa-
resia leve o miopatía. Es mejor documentar «pobres esfuerzos» y el grado máximo para cada
músculo probado. La distribución de la debilidad nos dice más que el grado de debilidad (el
grado ayuda a mejorar la documentación).
1 La mayoría de las fibras del tracto corticoespinal (= piramidal) se decusan o cruzan en las pirámides
medulares, lo que explica el nombre y la naturaleza contralateral de los síntomas. Extrapiramidal deno-
ta daños a los ganglios basales y se presenta como parkinsonismo (véase p. 468, 494).
2 Aunque con rigidez, el ↑ del tono no depende de la velocidad sino que es constante durante el movi-
miento pasivo.
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 10_Oxford 07/05/18 16:12 Página 447
Neurología
plejia (todos los miembros) son sugeridas mediante la detección de nivel motor y
de reflejos (la potencia no está afectada por encima de la lesión, con signos de MNI
al nivel de la lesión, y signos de MNI por debajo de la lesión). Un nivel sensorial es el
signo distintivo (aunque poco fiable) –es decir, disminución de la sensación por deba-
jo del nivel de la lesión con sensación normal por encima. Las lesiones de la hemi-
médula producen un cuadro de Brown-Séquard (p. 696): pérdida de la columna dor-
sal en el lado de la lesión y pérdida espinotalámica contralateral. Pueden producirse
pérdidas sensoriales disociadas, p. ej., en lesiones de la columna cervical –pérdida del
tacto fino y propiocepción sin pérdida de dolor y temperatura (o viceversa, p. ej.,
siringomielia, p. 516, o tumores de la médula). Neuropatías periféricas (p. 502). La
mayoría causa debilidad distal, p. ej., caída de pies; mano débil (nota: aunque el sín-
drome de Guillain-Barré se presenta típicamente como debilidad distal que ascien-
de con el tiempo, algunas formas atípicas del síndrome de Guillain-Barré pueden
presentarse con debilidades proximales debido a la afectación de las raíces nervio-
sas). La pérdida sensorial es típicamente peor distalmente (puede implicar todas las
modalidades sensoriales o ser selectiva, dependiendo del tamaño de las fibras ner-
viosas). La participación de un solo nervio (mononeuropatía) ocurre con traumatis-
mo o atrapamiento (túnel carpiano, p. 503); implicación de varios nervios (mono-
neuritis multiplex), p. ej., en DM o vasculitis. La pérdida sensorial por las lesiones ner-
viosas individuales seguirá los territorios anatómicos (dermatomas, p. 454), que son
usualmente más claramente definidos que las de las lesiones radiculares.
También hay que preguntar
¿Cuál es la lesión? ¿Están las células enfermas, disfuncionales, desconectadas (des-
pués de accidente cerebrovascular), o infraexcitadas o sobreexcitadas (migraña, epi-
lepsia)? Hay pérdida de un tipo específico de la célula nerviosa, como en la ELA o
la degeneración subaguda combinada de la médula (↓B12, p. 334). Los pacientes con
arteriopatía tienen lesiones cerebrovasculares, los viajeros tropicales adquieren
enfermedades parasitarias.
¿Por qué? ¿Existe una enfermedad sistémica que causa la afectación neurológica?
p. ej., fibrilación auricular que permite que se forme un émbolo, que luego se aloja
en el hemisferio dominante del paciente, causando un infarto que se presenta con
disfasia. Realizar un examen completo de los sistemas y siempre tener cuidado con
el pulso irregular.
Neurología
Sumatriptán (migraña) Mirtazapina (depresión)
Buspirona (agonista parcial, ansiedad) Olanzapina, clozapina (esquizofrenia)
Fluoxetina, sertralina (inhibidores de la
recaptación; depresión)
Aminoácidos El glutamato y el aspartato actúan como transmisores excitadores en
receptores NMDA y no-NMDA-relevantes en la epilepsia y la isquemia del SNC.
Ácido γ-amino butírico (GABA) es principalmente inhibitorio
Gabapentina, valproato (agonistas de Memantina (antagonista del glutamato;
GABA; epilepsia y dolor neuropático) demencia)
Benzodiazepinas (agonistas de GABA,
sedación)
Baclofeno (agonistas de GABA,
espasticidad)
Alcohol (agonista de GABA)†
Acetilcolina Múltiples receptores clasificados en tipos muscarínicos y nicotínicos.
Agonistas periféricos utilizados en glaucoma (pilocarpina); miastenia (anticolinesterasas).
Antagonistas periféricos utilizados en el asma (ipratropio); incontinencia; para disminuir las
secreciones antes de la operación; dilatar las pupilas; para ↑ frecuencia cardíaca (atropina).
Los fármacos de acción central incluyen:
Donepezil, galantamina, rivastigmina Prociclidina, trihexifenidilo (parkinsonismo
(inhibidores de la acetilcolinesterasa; inducido por fármaco
demencia)
Histamina y purinas (p. ej., ATP)
Ciclizina (antihistamínico, náuseas)
Los bloqueadores de los receptores
purinérgicos (papel emergente en
dolor crónico).
Neuropéptidos Lista múltiple y creciente; incluye opioides y sustancia P
Los opioides exógenos (analgésicos Aprepitant (↓náuseas relacionadas con la
de amplio espectro y efectos quimioterapia bloqueando los receptores
relacionados con el estado de ánimo). de la sustancia P).
Noradrenalina, adrenalina (= norepinefrina, epinefrina) 4 tipos de recéptor: α1-2,
β1-2. La noradrenalina es más específica para los receptores α, pero ambos transmisores
afectan a todos los receptores. En la periferia, los α-receptores producen vasoconstricción
arteriolar y dilatación pupilar; la estimulación de β1 conduce a ↑ pulso y contractilidad
miocárdica; la estimulación de β2 produce broncodilatación, relajación uterina y
vasodilatación arteriolar. Los fármacos de acción central incluyen:
Clonidina (hipertensión refractaria)
Antidepresivos tricíclicos y venlafaxina
(inhibidores de la recaptación de 5HT
y noradrenalina; depresión)
IMAO
* El agonismo en los agonistas de los receptores D3 puede causar patrones patológicos de compor-
tamiento, p. ej., hipersexualidad, patología de juegos de azar o pasatiempos, y trastornos del control de
los impulsos en personas que no tienen antecedentes de estos. †En el consumo crónico de alcohol, los
receptores GABA están regulados a la baja; acamprosato, utilizado en el alcoholismo, puede mantener
la señalización GABA después de la abstinencia de alcohol).
suministran el tronco encefálico). Esta disposición puede compensar los efectos de oclu-
sión de un vaso al permitir el suministro proveniente de vasos no afectados; sin embar-
go, la anatomía del círculo de Willis es variable y en muchas personas no proporciona
mucha protección.
Arterias cerebrales. Tres pares de arterias salen del círculo de Willis para suministrar
los hemisferios cerebrales: las arterias cerebrales anterior, media y posterior (figs. 10.2,
10.3). Las cerebrales anteriores y medias son ramas de las arterias carótidas internas; En
el 80%, la arteria basilar se divide en las dos arterias cerebrales posteriores. La isquemia
que aparece por la oclusión de cualquiera de ellas puede ser disminuida por suministro
retrógrado desde los vasos leptomeníngeos.
Arteria cerebral anterior (fig. 10.2): Irriga la parte frontal y medial del cerebro. La oclusión
puede causar una pierna contralateral débil, entumecida ± similares, si es más leve, sín-
tomas en el brazo. La cara está respetada. El infarto bilateral es una causa rara de para-
plejia y una causa aún más rara de mutismo acinético.
Arteria cerebral media (fig. 10.2): Irriga la parte lateral de cada hemisferio. La oclusión
puede causar hemiparesia contralateral, pérdida hemisensorial (especialmente cara y
brazo), hemianopsia homónima contralateral debida a la participación de la radiación ópti-
ca, cambios cognitivos incluyendo disfasia con lesiones hemisféricas dominantes, y pertur-
bación espaciovisual (p. ej., no se puede vestir, se pierde) con lesiones no dominantes.
Arteria cerebral posterior (figs. 10.2, 10.4): Irriga el lóbulo occipital. La oclusión da hemia-
nopsia homónima contralateral (a menudo con macula respetada).
Circulación vertebrobasilar. Irriga el cerebelo, el tronco encefálico, los lóbulos occi-
pitales; la oclusión causa síntomas relacionados con cualquiera de ellos o con los tres:
hemianopsia; ceguera cortical; diplopía; vértigo; nistagmo; ataxia; disartria; disfasia; hemi- o
cuadriplejia; síntomas sensoriales unilaterales o bilaterales; hipo; coma. Infartos del tronco
encefálico pueden producir varios síndromes, p. ej., el síndrome medular lateral, en el que
la oclusión de una arteria vertebral o de la arteria cereberal inferior posterior provoca un
infarto de la médula lateral y la superficie cerebelosa inferior (→ vértigo, vómito, disfagia,
nistagmus, ataxia ipsilateral, parálisis del paladar blando, síndrome de Horner ipsilateral y
una pérdida sensorial de patrón cruzado –analgesia al pinchazo con alfiler en la cara ipsi-
lateral y en el tronco y extremidades contralaterales). El síndrome de enclaustramiento es
causado por daño en el puente troncoencefálico o protuberancia anular ventral debido a
la oclusión de la arteria pontina. Los pacientes son incapaces de moverse, pero conser-
van la cognición completa y la conciencia, la comunicación por parpadeo, tableros elec-
trónicos, o computadoras especiales. Puede invocarse la legislación sobre el derecho a
morir ... pues un afectado parpadeó: «Mi vida es aburrida, miserable, degradante, indigna
e intolerable». El síndrome del enclaustramiento es diferente de otras condiciones de
derecho a morir porque los pacientes necesitan que alguien haga el acto por ellos.
Síndrome de robo de la subclavia: Estenosis de la arteria subclavia proximal al origen de la
arteria vertebral puede hacer que la sangre sea robada por el flujo retrógrado desde la
arteria vertebral hacia el brazo, causando isquemia del tronco cerebral típicamente des-
pués del uso del brazo. Sospecha que la PA en cada brazo difiera en > 20 mmHg.
Arterias basilares
Arteria cerebelosa inferior anterior
Arteria vertebral
Neurología
Arteria cerebelosa inferior
posterior (PICA)
Arteria espinal
anterior
a a
m m
p p
Fig. 10.2. El círculo de Willis en la base del cerebro. Ver también figs. 10.17, 10.18.
Fig. 10.3. Aneurisma sacular (en for- Fig. 10.4. TC de ictus en el territorio
ma de baya o berry) en la unión de la de la arteria cerebral posterior.
arteria comunicante posterior con la © J. Trobe.
carótida interna (p. 478).
© Dr. D. Hamoundi.
Thomas Willis
Thomas Willis (1621-1675) es uno de esos héroes felices de Oxford que sostienen
un falso doctorado, concedido en 1646 por sus simpatías con la realeza mientras
estaba en el Christ church, el college real más leal de la Universidad. Tuvo una vida
ocupada inventando términos como «neurología» y «reflejos». No solo dio su nom-
bre a su famoso círculo, sino que fue el primero en describir la miastenia gravis, tos
ferina y el sabor dulce de la orina diabética. Fue la primera persona (y hay que decir
que pocos le siguieron) que conoció el curso del nervio accesorio espinal. Él es
inusual entre los neurólogos de Oxford en que desarrolló la práctica de dar su
almuerzo a los pobres. También abrazó la iatroquímica: una teoría de la medicina
según la cual todas las patologías del cuerpo podrían ser explicadas por los trator-
nos en las fermentaciones y efervescencias de sus humores.
Neurología
C5, 6 Bíceps Flexión con antebrazo supinado
C5, 6 Deltoides Abducción del brazo entre 15° y 90°
Nervio radial (p. 502)
C6, 7, 8 Tríceps Extender el codo contra la resistencia
C5, 6 Braquioradial Flexión del codo con el antebrazo a medio camino
entre pronación y supinación
C5, 6 Extensor carpi radialis longus Extender la muñeca al lado radial
C6, 7 Supinator Brazo al lado, resistencia a la pronación de la mano
C7, 8 Extensor digitorum Mantener los dedos extendidos en la articulación
metacarpofalángica
C7, 8 Extensor carpi ulnaris Extender la muñeca al lado cubital
C7, 8 Abductor pollicis longus Abducción del pulgar a 90° de la palma
C7, 8 Extensor pollicis brevis Extender el pulgar en la articulación
metacarpofalángica
C7, 8 Extensor pollicis longus Resistencia a la flexión del pulgar en la articulación
interfalángica
Nervio mediano (p. 502)
C6, 7 Pronator teres Mantener el brazo pronado contra la resistencia
C6, 7 Flexor radial del carpo Flexionar la muñeca hacia el lado radial
C7, 8, T1 Flexor digitorum superficialis Resistencia a la extensión en la articulación
interfalángica proximal (con falange proximal fijada
por el examinador)
C7, 8 Flexor digitorum Resistencia a la extensión en la articulación
Profundus I y II interfalángica distal del dedo índice
C7, 8, T1 Flexor pollicis longus Resistencia a la extensión del pulgar en la
articulación interfalángica (falange proximal fija)
C8, T1 Abductor pollicis brevis Abducción del pulgar (uña a 90° de la palma)
C8, T1 Opponens pollicis El pulgar toca la base de la punta del quinto dedo
(uña paralela a la palma)
C8, T1 Primer lumbrico/interóseo Extienda la articulación interfalángica proximal
(Nervios mediano y ulnar) contra la resistencia con la articulación
metacarpofalángica hiperextendida
Nervio ulnar (p. 502)
C7, 8, T1 Flexor carpi ulnaris Flexión de la muñeca al lado cubital; observar el
tendón
C7, C8 Flexor digitorum profundus Resistencia a la extensión de la falange distal del
III y IV quinto dedo mientras fija su falange media
C8, T1 Interóseos dorsales Abducción del dedo: no puede cruzar el medio
sobre el dedo índice (pruebe abducción del dedo
índice también)
C8, T1 Interóseos palmares Aducción del dedo: separar una hoja de papel
sostenido entre las articulaciones interfalángicas
proximales de los dedos corazón y anular de ambas
manos; el papel se mueve en el lado más débil*
C8, T1 Adductor pollicis Aducción del pulgar (uña a 90° con la palma)
C8, T1 Abductor digiti minimi Abducción de dedos meñiques
C8, T1 Flexor digiti minimi Flexión del dedo meñique en la articulación
metacarpofalángica
* Además, la flexión de la articulación metacarpofalángica puede estar más en el lado afectado, dado
que se reclutan los tendones flexores –la base del signo de papel de Froment. El signo de Wartenberg
es la abducción persistente del dedo meñique.
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 10_Oxford 07/05/18 16:12 Página 454
Axilar
Intercostobraquial
Cutáneo medial
Musculocutáneo
Plexo braquial
Cutáneo
Neurología
posterior
Radial
Rama
superficial
Mediano
Cubital
Abdominogenital
menor
Genitocrural
Plexo Femorocutáneo
lumbar Rama
Femoral cutánea
anterior
Safeno
Cutáneo
peroneo
Plexo sacro
Ciático
Peroneo profundo
y superficial
Safeno externo
Plantar interno
Fig. 10.5. Las áreas en blanco denotan terra incognita: existe una considerable variación inter-indi-
vidual, por lo que no puede considerable más correcta ninguna de las opciones.
Neurología
Brazo cutáneo medial y lateral. De radiales
Cutáneo medial
Intercostobraquial
Musculocutáneo
Rama superficial del radial
456 Cefalea
Todos los días, miles de personas visitan al médico quejándose de cefalea. Las cefaleas de
tensión son las más comunes, pero tenga cuidado con las discapacitantes y tratables (migra-
ña y cefalea en racimos), y las siniestras (lesiones ocupantes de espacio, meningitis, hemo-
rragia subaracnoidea). Una buena historia clínica es la clave. Preguntar acerca de:
Inicio. Los dolores de cabeza de inicio rápido son preocupantes; el diagnóstico clave para
descartar aquí es: • hemorragia subaracnoidea (HSA, p. 478), dolor de cabeza de inicio repen-
tino, peor que nunca, a menudo occipital, rigidez del cuello, síntomas focales, ↓ consciencia.
Otros diagnósticos a tener en cuenta son: • Meningitis (p. 822): Fiebre, fotofobia, rigidez del
cuello, erupción purpúrica, coma. Tal vez asociado con rigidez del cuello (≈ irritación menín-
gea). Hacer una punción lumbar, iniciar los antibióticos. • Encefalitis (p. 824): Fiebre, com-
portamiento extraño, cambios o disminución de la conciencia. Hacer un TC de cabeza y
punción lumbar urgentes para buscar signos de de infección. • Cefalea postcoito.
Dolores de cabeza de inicio subagudo/gradual: • Trombosis del seno venoso (p. 480): Cefalea
Neurología
subaguda, papiledema. • Sinusitis: Dolor persistente y constante sobre los senos frontales o
maxilares, con sensibilidad ± goteo postnasal. El dolor es peor al inclinarse. El dolor etmoi-
dal o esfenoidal se siente profundamente en la línea media en la raíz de la nariz. Común
con coriza (p. 406). El dolor dura ~1-2 semanas. La TC puede confirmar el diagnóstico,
pero rara vez se necesita. • Enfermedades tropicales: P. ej., malaria: antecedentes de viaje,
enfermedad tipo gripe (p. 416); tifus (p. 415). • Hipotensión intracraneal: Fuga de LCR, p. ej.,
iatrogénica después de punción lumbar o anestesia epidural. Sospeche si los dolores de
cabeza empeoran al ponerse de pie; tratar con el parche de sangre epidural sobre la fuga,
si el tratamiento conservador con líquidos intravenosos y cafeína fallaran.
Carácter. ¿Banda apretada? Piense cefalea de tensión (la causa habitual de cefalea bilate-
ral, no pulsátil ± sensibilidad al cuero cabelludo). ¿Palpitante/pulsátil/lateralización? Piense en
la migraña (p. 458).
Frecuencia. Los dolores de cabeza recurrentes tienden a ser benignos: • Migraña: p. 458.
• Cefalea en racimos: (ver RECUADRO «Cefalea en racimo») • Neuralgia del trigémino: (ver
RECUADRO «Neuralgia del trigémino») • Meningitis recurrente (de Mollaret): Sospeche si fie-
bre/meningismo con cada dolor de cabeza. Remita LCR para PCR de herpes simple
(HSV2). ¿Hay acceso al espacio subaracnoideo a través de una fractura del cráneo, o una
causa recurrente de meningitis aséptica (LES, p. ej., parálisis del nervio abducente, Behçet,
sarcoide)?
Duración. Los dolores de cabeza crónicos y progresivos pueden indicar presión intra-
craneal. Típicamente peor al despertarse, acostarse, inclinarse hacia adelante o toser. Tam-
bién: vómitos, papiledema, convulsiones, síntomas de localización falsa o comportamiento
extraño. Hacer imágenes para excluir una lesión ocupante de espacio, y considerar la hiper-
tensión intracraneal idiopática. La punción lumbar está contraindicada hasta después de
la obtención de imágenes.
Rasgos asociados. Dolor en los ojos ± visión reducida: Piense en el glaucoma agudo. Típi-
camente ancianos, personas con problemas de visión. El dolor constante se desarrolla rápi-
damente alrededor de un ojo, irradiando a la frente con visión marcadamente reducida,
halos visuales y un ojo rojo congestionado (p. 561). Busque ayuda de expertos inme-
diatamente. Si es probable un retraso en el tratamiento > 1 h, gotas (p. ej., 0,5% de male-
ato de timolol ± 2% de pilocarpina) y acetazolamida 500 mg VO. Claudicación de mandí-
bula con arterias temporales sin pulso, sensibles y engrosadas: Arteritis de células gigantes:
(p. 556) cefalea de inicio subagudo con VSG > 40 mm/h. Excluir en todos > 50 años con
un dolor de cabeza que ha durado unas semanas: un diagnóstico rápido y esteroides evi-
tan la ceguera.
Causas precipitantes: Traumatismo de cabeza: Comúnmente causa dolor localizado,
pero puede ser más generalizada. Dura ~ 2 semanas; a menudo resistentes a la analgesia.
Haga TC para excluir hemorragia subdural o extradural si somnolencia ± intervalo lúcido,
o síntomas focales (p. 482). También pregunte sobre: Analgesia, sexo, comida (p. ej., choco-
late, queso, cafeína).
Signos de alarma. Ver p. 780.
Historial de fármacos. Excluir cefalea por uso excesivo de medicamentos (rebote analgé-
sico): Culpables son analgésicos mixtos (paracetamol + codeína/opiáceos), ergotamina y
triptanos. Esta es una razón común para el dolor de cabeza episódico que se convierte en
dolor de cabeza diario crónico. Debe retirarse la analgesia –aspirina o naproxeno pueden
calmar el dolor de cabeza de rebote. Un medicamento preventivo puede ayudar a retirar
otros fármacos (p. ej., tricíclicos, valproato, gabapentina; p. 504). Limite el uso de analgesia
de venta libre (no más de 6 d por mes).
Historia social. Pregunte sobre el estrés o los acontecimientos de la vida reciente; puede
no explicar la patología, pero le ayudará a apreciar el contexto en el que se experimentan
los síntomas.
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CAP. 10_Oxford 07/05/18 16:12 Página 457
Neurología
SC 6 mg al inicio (o zolmitriptán spray nasal 5 mg).
Preventivos. Evitar desencadenantes: Ej. Alcohol. Medicamentos: Considerar: corti-
costeroides (corto plazo solamente, muchos ES); verapamilo 360 mg, litio 900 mg
(controlar cuidadosamente).
458 Migraña
El 15% de nosotros sufre de migrañas, (3:1); los costes económicos se extienden a
miles de millones/año. Síntomas. Clásicamente: • Aura visual o de otro tipo (ver más
abajo) con una duración de 15-30 minutos seguidos dentro de 1 h por cefalea unilate-
ral, palpitante. O: • Aura aislada sin dolor de cabeza; • Episodios de cefalea severos sin
aura, a menudo premenstrual, generalmente unilateral, con náuseas, vómitos ± fotofo-
bia/fonofobia (migraña común). Puede haber alodinia –todos los estímulos producen
dolor: «No puedo cepillar mi pelo, usar pendientes o gafas, o afeitarme, es tan doloro-
so». Pródromo: Precede el dolor de cabeza por horas/días: bostezos, antojos, estado de
ánimo/cambio de sueño. Aura: • Visual: distorsión caótica, «fusión» y confusión de líneas,
puntos o zigzags, escotomas o hemianopsia; • Somatosensorial: parestesias que se extien-
den de los dedos a la cara; • Motor: disartria y ataxia (migraña basilar), oftalmoplejia o
hemiparesia; • Habla: (8% de auras) disfasia o parafasia.
Neurología
Neurología
cronía de las migrañas con el ciclo menstrual. • Niveles elevados de metabolitos 5-
HT en la orina de los pacientes durante los ataques de migraña fueron comunica-
cos por primera vez en 1972 y aunque su significación exacta es controvertida, la
eficacia de los triptanos (agonistas 5HT1B/1D) apoya su papel en la migraña. • Los trip-
tanos también inhiben la liberación de la sustancia P y neuropéptidos proinflamato-
rios, bloqueando la transmisión desde el trigémino nervioso e implicando la disfun-
ción del nervio trigémino.
460 Mareos
Las causas de colapso ± pérdida de conciencia son muchas; tomar una historia cuidado-
sa (RECUADRO).
Síncope vasovagal (neurocardiogénico). Se produce por el reflejo de bradicardia
± vasodilatación periférica provocada por la emoción, el dolor o la bipedestación pro-
longada (no puede ocurrir estando acostado). Se inicia en unos segundos (no instantá-
neo), y es a menudo precedido por síntomas presincopales, p. ej., náuseas, palidez, su-
doración y estrechamiento del campo visual. Pueden ocurrir ligeras sacudidas clónicas de
las extremidades debido a una hipoperfusión cerebral, pero no hay secuencia tónica/cló-
nica. La incontinencia urinaria es infrecuente, y no hay mordedura de lengua. La incons-
ciencia suele durar ~2 min y la recuperación es rápida.
Síncope de la situación. Síntomas como el síncope vasovagal pero con un claro pre-
cipitante: el síncope de la tos se produce después de un paroxismo de tos; síncope de
Neurología
esfuerzo por ejercicio; generalmente hay una causa cardíaca, p. ej., estenosis aórtica, HCM;
el síncope miccional ocurre durante o después de la micción: en su mayoría hombres, por
la noche.
Síncope del seno carotídeo. Los barorreceptores hipersensibles causan excesiva
bradicardia ± vasodilatación en la estimulación mínima (p. ej., al girar la cabeza, afeitarse).
Epilepsia (p. 490). Las características sugestivas de este diagnóstico incluyen: ataques
cuando duerme o acostado; aura; disparadores identificables (p. ej., TV); respiración alte-
rada; cianosis; típicos movimientos tónico-clónicos; incontinencia urinaria; morderse la
lengua; somnolencia prolongada postcrisis, confusión, amnesia y parálisis focal transitoria
(parálisis de Todd).
Ataques de Stokes-Adams. Arritmias transitorias (p. ej., bradicardia debida a blo-
queo cardíaco) causan ↓ gasto cardíaco y pérdida de conciencia. El paciente cae al suelo
(a menudo sin advertencia excepto palpitaciones; las lesiones son comunes) y se vuelve
pálido, con un pulso lento o ausente. La recuperación es en segundos: el paciente enro-
jece, el pulso se acelera y la conciencia se recupera. Al igual que con el síncope vasova-
gal, pueden producirse sacudidas clónicas anóxicas en síncopes prolongados. Los ataques
pueden ocurrir varias veces al día y en cualquier postura.
Otras causas. Hipoglucemia (p. 214.): El temblor, el hambre y la transpiración anuncian
aturdimiento o pérdida de conciencia; rara en los no diabéticos. Hipotensión ortostática:
Inestabilidad o pérdida de conciencia al incorporarse tras estar tumbados en los sujetos
con reflejos vasomotores inadecuados: los ancianos; neuropatía autónoma (p. 505); medi-
cación antihipertensiva; sobrediuresis; atrofia multisistémica (AMS, p. 494). Ansiedad:
Hiperventilación, temblor, sudoración, taquicardia, parestesias, aturdimiento y no pérdida
de conciencia sugieren un ataque de pánico. Ataques de caída: Caída repentina al suelo
sin pérdida de conciencia. La mayoría benignos y debidos a la debilidad de las piernas
pero también puede ser causada por hidrocefalia, cataplejia o narcolepsia. Mareos facti-
cios: Pseudoconvulsiones, Münchausen (p. 706).
Exploración física. Cardiovascular, neurológica. Mida PA tumbado y de pie.
Investigación. Todos con síncope recurrente (o caídas) necesitan evaluación cardíaca
–urgentemente si está asociado con palpitaciones, arritmias, bloqueo AV de tercer grado
o intervalo QT prolongado (p. 711). ECG ± 24 h ECG (arritmia, QT largo, p. ej., Roma-
no-Ward, p. 96); urea y electrolitos, sistemático de sangre, Mg2+, Ca2+, glucosa; prueba de
mesa basculante3, EEG, EEG en sueño; ecocardiograma; TC/MRI cerebro; gases arteriales
si es práctico (↓PaCO2 en ataques sugiere la hiperventilación como la causa). Mientras
se está aclarando la causa, aconseje no conducir (ver p. 158).
3 El paciente está sujeto a monitorización continua de ECG y PA mientras está atado a una mesa y se
mueve rápidamente desde posición horizontal a posición vertical. La inducción de síntomas con caída
inadecuada de la PA > 30 mmHg o la bradicardia sugiere un síncope neuronal mediado. Considere el
marcapasos.
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 10_Oxford 07/05/18 16:12 Página 461
Neurología
• ¿Hay síntomas asociados, como palpitaciones, sudoración, palidez, dolor torácico,
disnea (Ver fig. 10.11).
• ¿Cuánto dura el ataque?
Antes del ataque:
• ¿Hay alguna advertencia? –p. ej., aura epiléptica típica o presíncope cardíaco.
• ¿En qué circunstancias ocurren los ataques? (Si está viendo televisión, considere la
epilepsia).
• ¿Puede el paciente prevenir ataques?
Después del ataque:
• ¿Cuánto recuerda el paciente del ataque?
• ¿Hay dolor muscular? (Sugiere una convulsión tónico-clónica).
• ¿El paciente está confundido o somnoliento? (Sugiere epilepsia).
Antecedentes de los ataques:
• ¿Cuándo comenzaron?
• ¿Son cada vez más frecuentes?
• ¿Hay alguien más en la familia que los sufre? La muerte arrítmica súbita puede no
tener evidencia en postmortem, o puede haber miocardiopatía hereditaria (se
refiere a aquellos con un familiar que ha tenido una muerte súbita inexplicable
< 40 años de edad).
Fig. 10.11. VT, causa mareo en el síndrome de Brugada (p. 695). Este paciente ha sido tra-
tado con un desfibrilador implantable (véase p. 132).
Causas
Vértigo posicional benigno: Ocurre con el movimiento de la cabeza debido a la disrupción
de detritos del canal semicircular de los oídos (canalolitasis). Nistagmo fatigable cuando
se realiza la maniobra de Hallpike es diagnóstico; las maniobras de Epley limpian los detri-
tos (OHCS p. 555).
Laberintitis aguda (neuronitis vestibular): Inicio abrupto de vértigo severo, náuseas, vómi-
to ± postración. No sordera ni tinnitus. Causas: virus; lesión vascular. El vértigo más grave
disminuye en días, la recuperación completa tarda 3-4 semanas. R/ : Tranquilizar. Sedar.
Enfermedad de Ménière: Aumento de la presión en el sistema endolinfático del oído
interno que provoca ataques recurrentes de vértigo > 20 min, pérdida de audición neu-
rosensorial fluctuante (o permanente) y tinnitus (con una sensación de plenitud auditiva
± caer a un lado). R/ : reposo en cama y tranquilizar en ataques agudos. Un antihistamíni-
co (p. ej., cinarizina) es útil si se prolonga, o proclorperazina bucal si es grave, hasta 7 d.
Ototoxicidad: Los aminoglucósidos, los diuréticos del asa o el cisplatino pueden causar
sordera ± vértigo.
Neuroma acústico (figs. 10.12, 10.13): Doblemente mal llamado: es un schwannoma (no
neuroma) que surge del nervio vestibular (no auditivo). Representan el 80% de tumores del
ángulo cerebelo-pontino y a menudo se presentan con pérdida auditiva unilateral, con vér-
tigo que tendrá lugar después. La tasa de crecimiento es lenta (usualmente 1-2 mm/año) y
puede predecirse por MRI de serie. Con la progresión, los nervios ipsilaterales V, VI, IX,
y X pueden verse afectados (también síntomas cerebelares ipsilaterales). Los síntomas
de ↑ PIC ocurren más tarde, lo que indica un tumor grande. Más común en y neuro-
fibromatosis (especialmente NF2, p. 514).
Daño traumático: Si el trauma afecta el hueso temporal petroso o al ángulo pontocere-
beloso, entonces el nervio auditivo puede estar dañado, causando vértigo, sordera y/o
tinnitus.
Herpes zóster: Erupción herpética del conducto auditivo externo; parálisis facial ± sor-
dera, tinnitus y vértigo (síndrome de Ramsay Hunt, véase p. 501).
Otros: Epilepsia vertiginosa; esclerosis múltiple; accidente cerebrovascular/TIA; migraña;
cinetosis; intoxicación alcohólica.
Nervio Neuroma
vestibular acústico Nervio 463
facial
Nervio
coclear
Neurología
Fig. 10.12. Neuroma acústico (schwannoma vestibular) que crece peligrosamente cerca del
nervio facial.
Fig. 10.13. Schwannoma vestibular grande: T2 axial (izquierda) y RM coronal con contraste
(derecha).
Reproducido de Manji et al., Oxford Handbook of Neurology, 2007,
con permiso de Oxford University Press.
Weber: Con el diapasón en el vértice o la frente, pregunte al paciente que sonido es más
fuerte. El sonido se localiza en el oído afectado con pérdida de conducción (pérdida de
> 10 dB), al oído contralateral en DANS y a la línea media si ambas orejas son norma-
les (o si DANS bilateral).
Sordera conductiva. Causas: Cera (eliminar, p. ej., jeringa con agua tibia después de
ablandamiento con gotas de aceite de oliva), otosclerosis, otitis media o pegamento de
oído (OHCS, p. 546).
Sordera neurosensorial crónica. A menudo debida al ruido ambiental acumulado,
toxicidad, presbiacusia o trastornos hereditarios. Presbiacusia: Pérdida de la agudeza para
los sonidos de frecuencia alta, comienza antes de los 30 años. Normalmente no lo nota-
mos hasta que se afecta la audición de una conversación. La audición está más afectada
en presencia de ruido de fondo. Los audífonos son el tratamiento habitual.
Sordera neurosensorial súbita. ¡Obtener una opinión de ORL rápidamente (los
esteroides pueden curar)! Causas: Exposición al ruido; gentamicina/otra toxina; parotidi-
tis; neuroma acústico; esclerosis múltiple, ictus, vasculitis, TB. Pruebas: VSG, sistemático de
sangre, PFH, pANCA, títulos virales y TB (ver RECUADRO «Pruebas diagnósticas para la
tuberculosis», p. 394); audiometría de respuesta evocada; TXT; MRI; ganglio linfático y
biopsia nasofaríngea para cultivo.
Tinnitus
Este zumbido o silbido en los oídos es común, y puede causar depresión o insomnio.
Investigar el tinnitus unilateral para excluir completamente un neuroma acústico (p. 462).
Causas. Daño en el oído interno y pérdida de la audición (que conduce a la hiperex-
citabilidad de la corteza auditiva), cera, exceso de ruido, lesión en la cabeza, otitis media,
postestapedectomía, Ménière, anemia (si es pulsátil entonces piense en la estenosis o
disección de la arteria carótida, fístula AV y tumores del glomus jugulare). Medicamentos:
Aspirina (reversible), diuréticos de asa, aminoglucósidos. Edad media al inicio: 40-50 años.
:≈1:1.
Tratamiento. Excluir causas graves. El apoyo psicológico es muy importante: Asegu-
re que el tinnitus no significa locura o enfermedad grave y que a menudo mejora en el
tiempo. La terapia cognitiva ayuda, al igual que el «entrenamiento para afrontar el tinni-
tus» y los grupos de apoyo. Los fármacos son decepcionantes: anticonvulsivos (p. ej., car-
bamazepina) no son de beneficio; el misoprostol parece ayudar (ensayos a pequeña esca-
la solamente); los hipnóticos por la noche pueden proporcionar algún beneficio. Evite los
tranquilizantes, especialmente si está deprimido (use antidepresivos tricíclicos aquí). Si la
enfermedad de Ménière es la causa, la betahistina ayuda solo a unos pocos. El enmasca-
ramiento puede dar alivio: se da un ruido blanco (como una radio no sintonizada) a tra-
vés de un generador de ruido usado como un audífono postauricular. Los audífonos pue-
den ayudar amplificando sonidos deseables. La sección del nervio coclear es una opción
drástica que alivia el tinnitus discapacitante en el 25%, pero a expensas de la sordera.
Neurología
también lo hizo (véase pág. 86).
Neurología
la posición de sentado debido a debilidad de la cintura pelviana.
Psicogénica: Sospecha si hay un andar extraño que no se ajusta a ningún patrón de
alteración de la marcha orgánica y sin síntomas cuando se examina en el sofá.
Pruebas. Radiología de la columna; RM; sistemático de sangre; VSG; serología de la
sífilis; suero B12; urea y electrolitos; PFH; PSA; electroforesis de suero; RXT; punción
lumbar; EMG; biopsia de músculo ± nervio sural.
Distonía 469
La distonía describe contracciones musculares prolongadas que causan una postura
anormal o movimientos repetitivos.
Distonía idiopática generalizada: La distonía de inicio infantil a menudo comienza en
una pierna con progresión ipsilateral sobre 5-10 años. La herencia autosómica domi-
nante es común (deleción de DYT1). Excluir la enfermedad de Wilson y la distonía
sensible a la dopa (necesita probar L-dopa). Pueden ayudar los anticolinérgicos y los
relajantes musculares. Estimulación cerebral profunda para los síntomas refractarios
e incapacitantes.
Distonías focales: Confinadas a una parte del cuerpo, p. ej., tortícolis espasmódico
(cabeza que tira más a un lado), blefaroespasmo (contracción involuntaria de mús-
culo orbicular, OHCS, p. 417), el calambre del escritor. Las distonías focales en los adul-
tos suelen ser idiopáticas, y rara vez se generalizan. Se agravan por el estrés. Los
Neurología
pacientes pueden desarrollar un gesto antagónico para intentar resistir la postura dis-
tónica (p. ej., un toque con el dedo en la mandíbula cuando se padezca tortícolis
espasmódica). La inyección de toxina botulínica en los músculos hiperactivos suele
ser eficaz.
Distonía aguda (fig. 10.14): Puede ocurrir al iniciar muchos fármacos, incluyendo neu-
rolépticos y algunos antieméticos (p. ej., metoclopramida, ciclizina). Hay tortícolis
(cabeza en retroceso), trismo (espasmo oromandibular) y/o crisis oculógira (ojos
hacia arriba). Puede confundirse con el tétanos o meningitis, pero estas reacciones
desaparecen rápidamente después de una dosis de un anticolinérgico, ver p. 855.
noidea (p. 478), trombosis del seno venoso (p. 480), síndrome de antifosfolípido, trombofilia
(p. 374), síndrome de Fabry (p. 698), CADASIL5.
Diagnóstico diferencial. Lesiones en la cabeza, hipo/hiperglucemia, hemorragia subdural,
intracraneal, tumores, migraña hemipléjica, postictal (parálisis de Todd), linfoma del SNC, enfer-
medad de Wernicke, encefalopatía, encefalopatía hepática, encefalitis, toxoplasmosis, abscesos
cerebrales, aneurisma micótico, sobredosis de drogas (si está comatoso).
Factores de riesgo modificables. ↑PA, tabaquismo, DM, enfermedad cardíaca (valvular,
isquémica, FA), enfermedad vascular periférica, ↑ PVC, soplo carotídeo, anticonceptivos orales
combinados, ↑lípidos, ↑uso de alcohol, ↑coagulación (p. ej., ↑plasmafibrinógeno, ↓antitrombi-
na III, p. 374), ↑homocisteína, sífilis.
Síntomas. Peor al inicio. Indicadores de sangrado (¡no fiable!): meningismo, dolor de cabeza
severo, coma. Sugieren isquemia: soplo carotídeo, FA, pasado TIA, CI. Infartos cerebrales: (50%).
Dependiendo del sitio puede haber pérdida sensorial contralateral o hemiplejia –inicialmente
flácida (pierna flácida, cae como un peso muerto al levantarse), volviéndose espástica (MNS);
disfasia; hemianopsia homónima; déficit visuoespacial. Infartos del tronco encefálico (25%): Varia-
do; incluyen cuadriplejía, trastornos de la mirada y la visión, síndrome de enclaustramiento
(consciente, pero incapaz de responder). Infartos lacunares (25%, ganglios basales, cápsula
interna, tálamo y protuberancia): Cinco síndromes: hemiparesia atáxica, motor puro, sensorial
puro, sensoriomotor y disartria/mano torpe. Cognición/conciencia están intactos excepto en
ictus talámicos.
Tratamiento agudo. Proteger las vías respiratorias: Esto evita la hipoxia/aspiración.
• Mantener la homeostasis: glucosa en sangre: mantener entre 4-11 mmol/L. Presión sanguí-
nea: Solo tratar si hay una emergencia hipertensiva (p. ej., encefalopatía o disección aórtica)
o trombólisis (idealmente objetivo para ~ <185/110) dado que el tratamiento de PA inclu-
so muy elevadas puede perjudicar la perfusión cerebral.
• Vigile la deglución: «Dieta absoluta» hasta que esto se haga (pero mantenga hidratado).
• TC/RM en 1 h: Esencial si: se considera trombólisis, riesgo elevado de hemorragia (↓ GCS, sín-
tomas de ↑PIC, cefalea severa, meningismo, síntomas progresivos, tendencia al sangrado o
anticoagulación), o presentación inusual (p. ej., conciencia fluctuante, fiebre). En otras situa-
ciones el estudio de imagen es menos urgente (objetivo < 24 h). La RM ponderada en difu-
sión es más sensible para un infarto agudo, pero la TC ayuda a descartar la hemorragia pri-
maria (fig. 10.15).
• Agentes antiplaquetarios: Una vez excluido el accidente cerebrovascular hemorrágico, admi-
nistrar aspirina 300 mg (continuar durante 2 semanas, a continuación, cambiar a tratamien-
to antitrombótico de largo plazo, p. 472).
• Trombólisis: Considere esto tan pronto como se haya excluido la hemorragia, dado que el
inicio de los síntomas fue ≤ 4,5 h atrás2. Los beneficios de la trombólisis superan a los ries-
gos dentro de esta ventana, aunque los mejores resultados son dentro de 90 min. Altepla-
sa es el agente elegido y debe ser administrado por personal capacitado, idealmente den-
tro de un equipo de accidente cerebrovasculares. Siempre hacer TC 24 h después de la
lisis para identificar hemorragias6. CI de la trombólisis: • Infarto grave o hemorragia en la
TC. • Déficit mínimo/no incapacitante. • Cirugía reciente, traumatismos o punción de arte-
ria o vena en un sitio no compresible. • Sangrado anterior en SNC. • MAV/aneurisma. •
Enfermedad hepática grave, varices o hipertensión portal. • Convulsiones en la presenta-
ción. • Glucosa en la sangre (< 3 o > 22). • Accidente cerebrovascular o lesión grave en la
cabeza en los últimos 3 meses. • Hemorragia GI o urinaria en los últimos 21 días. • Cono-
cido desorden de la coagulación. • Anticoagulantes o INR > 1,7. • Plaquetas < 100 x 109/L.
• Historia de neoplasia intracraneal. • Mejora rápida de los síntomas. • PA > 180/105.
• Trombectomía: La trombectomía mecánica intraarterial proporciona beneficio para aquellos
con oclusión de arteria grande en la circulación anterior proximal.
Ingresar en una unidad de accidente cerebrovascular agudo: la atención multidisciplinaria
mejora los resultados (p. 474).
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
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471
Neurología
Fig. 10.15. La imagen ponderada T2 (p. 746) de la izquierda muestra edema en el lóbulo occi-
pital derecho. Diagnóstico diferencial: Infarto (ACP derecha), inflamación o tumor. La imagen de
ponderación de difusión a la derecha muestra una difusión limitada en la región, lo que indica
que se trata de un infarto.
©Prof. Peter Scally.
Actúe rápido
Varias medidas de salud pública han tenido como objetivo aumentar la conciencia
sobre el ictus y la gravedad de la enfermedad: el reetiquetado del accidente cere-
brovascular como un «ataque cerebral» y a través de la campaña en los medios de
comunicación gráficos FAST = Asimetría facial, debilidad del brazo/pierna, dificul-
tad para hablar, Hora de llamar al 999 (112). La publicidad que rodea este acróni-
mo ha incrementado el reconocimiento de los síntomas del ictus y ha enfatizado la
urgencia de buscar ayuda médica; después de la introducción de la campaña en 2011
el NHS en Inglaterra registró un aumento del 24% en las llamadas al 999 relaciona-
das con el accidente cerebrovascular.
quetarios»): Si no hay hemorragia primaria en la TC, dar 2 semanas de aspirina 300 mg,
a continuación, cambiar a monoterapia con clopidogrel a largo plazo. Si está CI o no se
tolera, dar aspirina a dosis baja más dipiridamol de liberación lenta. Anticoagulación des-
pués del accidente cerebrovascular de la FA: Ver RECUADRO «Causas cardíacas del acciden-
te cerebrovascular».
Pruebas (Consulte la p. 470 para estudios de imagen). Investigue puntualmente para
identificar factores de riesgo para nuevos ictus pero considere si los resultados afectarán
el tratamiento. Buscar:
• Hipertensión: Busque retinopatía (p. 560), nefropatía o cardiomegalia en RXT.
• Fuente cardíaca de émbolos (Ver RECUADRO «Causas cardíacas del accidente cerebro-
vascular»): ECG de 24 horas para buscar FA (p. 130). La RXT puede mostrar un
aumento de la aurícula izquierda. El ecocardiograma puede revelar trombo mural debi-
do a la FA o un segmento hipocinético del músculo cardíaco post-MI. También puede
mostrar lesiones valvulares en la endocarditis infecciosa o cardiopatía reumática. El eco
transesofágico es más sensible que el transtorácico.
• Estenosis de la arteria carótida: Haga Doppler carotídeo ± angiografía TC/RM. Los
beneficios y riesgos de revascularización deben ser individualizados por un experto,
pero generalmente será más beneficiosa con una estenosis ≥ 70% y una esperanza de
vida ≥ 5 años, mientras que algunos (especialmente ) se beneficiarán con 50-69% de
estenosis7 (ver p. 476). La endarterectomía carotídea es el procedimiento de elección;
la angioplastia endovascular de la arteria carótida con stent es una alternativa para
aquellos no adecuados para cirugía y logra resultados similares a largo plazo, pero tiene
mayores índices de accidentes cerebrovasculares periprocedimiento y tasas de mor-
talidad.
• Hipoglucemia, hiperglucemia, dislipidemia e hiperhomocisteinemia.
• Vasculitis: ↑ VSG, ANA (p. 556). VDRL para buscar sífilis activa no tratada (p. 412).
• Estados protrombóticos: p. ej., trombofilia (p. 374), síndrome antifosfolípido (p. 554).
• Hiperviscosidad: p. ej., policitemia (p. 366), anemia drepanocítica (p. 340).
• Trombocitopenia: y otros trastornos hemorrágicos.
• Pruebas genéticas: CADASIL (p. 470); enfermedad de Fabry (p. 698).
Pronóstico. Mortalidad general: 60.000/año; Reino Unido 20% a 1 mes, entonces ~ <10%/
año. Recuperación completa: ≤ 40%. Somnolencia ≈ mal pronóstico. Evite las úlceras por
presión (fig. 10.16).
7 Las intervenciones para las estenosis del 50-69% pueden estar justificadas; individualizar el riesgo y
verificar las directrices locales. En particular, verificar qué criterio se utiliza para estimar el grado de este-
nosis desde NASCET (North American Symptomatic Carotic Endarterectomy Trial) tienden a incluir algu-
nas lesiones más severas en un rango del 50-69% en comparación con los criterios del ECST (Euro-
pean Carotid Surgery Trialists Collaboative Group).
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CAP. 10_Oxford 07/05/18 16:13 Página 473
Neurología
cerebrovascular (o 7-10 d si clínica y radiológicamente pequeño). Ofrezca un anti-
coagulante oral directo (ACOD) o warfarina (p. 350), tras una discusión de ries-
gos y beneficios.
Otras fuentes cardíacas de embolia: • Cardioversión. • Válvulas protésicas. • Infarto
agudo de miocardio con grandes anomalías del movimiento de la pared del ventrí-
culo en ecocardiografía. • Foramen oval permeable (defectos septales). • Cirugía car-
díaca. • Endocarditis infecciosa (causa embolia séptica; 20% de las endocarditis se
presentan con signos del SNC).
Fig. 10.16. Categorización de las úlceras por presión. A) Etapa 1: enrojecimiento no blanquea-
ble de la piel intacta, típicamente sobre una prominencia ósea. B) Etapa 2: pérdida de espesor
parcial de la dermis que se presenta como una úlcera abierta poco profunda con una base de
la herida roja/rosada, sin escara. También puede presentarse como ampollas serosanguinolentas
intactas o abiertas/rotas. C) Etapa 3: pérdida total de piel con grasa subcutánea visible. Huesos,
tendones y músculos no están expuestos. D) Etapa 4: pérdida de tejido de espesor total con
exposición de hueso, tendón o músculo.
Las imágenes (a) a (d) reproducidas de Gosney et al., Oxford Desk Reference: Geriatric Medicine, 2012,
con Permiso de Oxford University Press.
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
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peda. Utilice líquidos IV, luego semisólidos (p. ej., gelatina, evite sopas y alimentos des-
menuzables). Evite alimentación precoz mediante sondas NG; esto puede ser necesa-
rio para salvaguardar la nutrición en aquellos con problemas de deglución que persis-
ten más allá de los primeros 2-3 d. Si la deglución no se recupera, considere los bene-
ficios de la colocación de los tubos de alimentación enteral –p. 759. Los logopedas
especializados en evaluar las dificultades de deglución son inestimables aquí.
• Evite lesiones adicionales: minimice el riesgo de caídas y tenga cuidado al levantar al
paciente para no dañar sus hombros.
• Asegúrese de tener un buen cuidado de la vejiga y el intestino a través del uso fre-
cuente de un baño. Evitar el sondaje temprano, lo que puede impedir el retorno a la
continencia.
• Posición para minimizar la espasticidad (ocurre en ~40%). Obtener fisioterapia rápida.
Férulas e inyecciones de toxina botulínica son útiles para la espasticidad focal.
• Controlar el progreso: p. ej., medir el tiempo necesario para sentarse y transferirse a
la silla.
• Vigilar el estado de ánimo: en pseudo-emocionalismo/labilidad emocional (sollozos sin
ser provocados por el dolor, por el fracaso de la inhibición cortical del sistema límbi-
co), tricíclicos o fluoxetina pueden ayudar.
• Involucrar al paciente en su propia recuperación haciendo que la fisioterapia sea diver-
tida. Nadando (un brazo hemipléjico puede ser apoyado en un flotador especial), la
música y los videojuegos son agradables y ↑ recuperación mediante la promoción de
la reorganización cerebral. Restricción del brazo bueno puede ser útil.
Informar cuidadosamente al cuidador/cónyuge con todos los aspectos del cuidado.
Una buena rehabilitación salva vidas.
Pruebas. Pedir que se señale una parte determinada del cuerpo es una prueba de la
función perceptiva. Seguir los patrones de movimiento marcados por un lápiz prueban
la capacidad espacial. Vestirse o copiar una esfera del reloj es una evaluación de la apra-
xia (p. 86). Escoger y nombrar objetos fáciles de un montón prueba para agnosia (agu-
deza OK, pero no puede usar el mimo; las conjeturas están fuera, semántica y fonética-
mente). Ver si se padece depresión (bajo estado de ánimo, incapacidad para sentir pla-
cer o para concentrarse).
Decisiones de fin de vida. Ver p. 13.
Neurología
1 Accidentes ocasionales (una vez a la semana)
2 Continente
Vejiga 0 Incontinencia o sonda insertada pero incapaz de manejarlo
1 Accidentes ocasionales (hasta una vez por 24 h)
2 Continente (por más de 7 días)
Higiene personal 0 Necesita ayuda con el cuidado personal: cara, cabello, dientes,
afeitado
1 Independiente (proporcionados los instrumentos)
Uso del WC 0 Dependiente
1 Necesita ayuda, pero puede hacer algunas cosas solo
2 Independiente (encendido y apagado, limpieza, vestidor)
Alimentación 0 Incapaz
1 Necesita ayuda para cortar, extender mantequilla, etc.
2 Independiente (comida a su alcance)
Transferencia 0 Incapaz de ir de la cama al inodoro: la transferencia vital para
prevenir la necesidad de atención de enfermería las 24 horas
1 Ayuda importante necesaria (física, 1-2 personas), puede sentarse
2 Se necesita ayuda menor (verbal o física)
3 Independiente
Movilidad 0 Inmóvil
1 Independiente de la silla de ruedas, incluyendo esquinas, etc.
2 Paseos con ayuda de una persona (verbal o física)
3 Independiente
Vestido 0 Dependiente
1 Necesita ayuda, pero puede hacer alrededor de la mitad sin
ayuda
2 Independiente (incluyendo botones, cremalleras, cordones, etc.)
Escaleras 0 Incapaz
1 Necesita ayuda (verbal, física, ayuda)
2 Independiente arriba y abajo
Baño/ducha 0 Dependiente
1 Independiente (debe entrar y salir sin ayuda y lavarse a sí mismo)
Mahoney FI, Barthel DW: Evaluación funcional: el Índice de Barthel.
Maryland State Medical Journal. 1965; 14: 61-65. Se utiliza con permiso.
La paradoja de Barthel
Cuanto más contemplamos el elogio de la independencia de Barthel, más lo vemos
como un espejismo que refleja una gran verdad sobre los asuntos humanos: no
existe la independencia –solo interdependencia– y nuestra verdadera vocación resi-
de en fomentar esta interdependencia:
Ningún hombre es una isla entera por sí mismo; cada hombre es una pieza del conti-
nente, una parte del todo; si el mar se lleva una porción de tierra, toda Europa queda
disminuida, como si fuera un promontorio, o la casa de uno de tus amigos, o la tuya
propia. La muerte de cualquier hombre me afecta, porque me encuentro unido a toda
la humanidad; por eso, nunca preguntes por quién doblan las campanas: doblan por ti.
John Donne 1572-1631; Meditación XVII.
bo mural post-IM o en la FA, enfermedad valvular, válvula protésica (p. 473). • Hipervis-
cosidad: P. ej., policitemia, anemia de células falciformes, mieloma. • La vasculitis es una
causa rara y no embólica de síntomas de AIT (p. ej., arteritis craneal, PAN, LES, sífilis, etc.).
Diagnóstico diferencial. Hipoglicemia, aura de migraña (p. 458), epilepsia focal (sín-
tomas se extienden en segundos y con frecuencia incluyen espasmos y sacudidas), hiper-
ventilación, sangrado retinal. Imitación rara de AIT: Hipertensión maligna, EM (disartria
paroxística), tumores intracraneales, neuropatía periférica, feocromocitoma, somatización.
Pruebas. Sistemático de sangre, VSG, urea y electrolitos, glucosa, lípidos, RXT, ECG,
Doppler carotídeo ± angiografía, TC o resonancia magnética ponderada por difusión,
ecocardiograma.
Tratamiento
• Control de los factores de riesgo cardiovasculares: Optimizar: PA (cautelosamente infe-
rior; objetivo < 140/85 mmHg, p. 140); hiperlipidemia (p. 690); DM (p. 206); ayuda a
dejar de fumar (p. 93).
• Medicamentos antiplaquetarios: Como con el accidente cerebrovascular, dar aspirina
300 mg OD durante 2 semanas, a continuación, cambiar a clopidogrel 75 mg OD. Si
está contraindicado o no se tolera, administre aspirina 75 mg OD combinado con dipi-
ridamol de liberación lenta.
• Indicaciones de la anticoagulación: Fuente cardíaca de embolia (ver p. 473).
• Endarterectomía carotídea: Realizar dentro de 2 semanas de la primera presentación si
70-99% de estenosis8 y el riesgo operatorio es aceptable (mayor riesgo en: , > 75
años y, ↑PA sistólica, arteria contralateral ocupada; estenosis ipsilateral del sifón caro-
tídeo/ carotídea externa). No suspenda la aspirina preoperatoriamente. La cirugía se
prefiere a la angioplastia endovascular de la arteria carótida con stent en aquellos que
la toleran debido a que existe más ictus periprocedimiento y tasas de mortalidad con
la prótesis endovascular.
Conducción. Prohibido durante al menos 1 mes, ver p. 158.
Pronóstico. Los riesgos a largo plazo de accidente cerebrovascular o eventos cardio-
vasculares después de AIT son dependientes sobre los factores de riesgo vascular sub-
yacentes: calcular utilizando la puntuación de ABCD2 (ver RECUADRO y cuadro 10.6).
8 Las intervenciones para las estenosis 50-69% pueden estar justificadas; individualizar el riesgo y veri-
ficar las directrices locales. En particular, verificar qué criterio se utiliza para estimar el grado de este-
nosis desde NASCET (North American Symptomatic Carotid Endarterectomy Trial) tienden a incluir algu-
nas lesiones más severas en un rango del 50-69% como con los criterios del ECST (European Caro-
tid Surgery Trialists Collaborative Group).
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Neurología
2 puntos
Síntomas que duran 10-59 min 1 punto
Diabetes 1 punto
Una puntuación de ≥ 4 indica que el paciente está en alto riesgo de un accidente
cerebrovascular temprano y debe ser evaluado por un especialista dentro de 24 h.
Una puntuación de ≥ 6 predice fuertemente un accidente cerebrovascular (8,1%
dentro de 2 días, 35,5% en la próxima semana). Otros factores que sugieren un
aumento del riesgo son: • FA • > 1 AIT en una semana • AIT mientras está antico-
agulado. Crucialmente, el riesgo es menor si el paciente es tratado en una unidad
especializada en ictus (p. 474).
ABCD2 reimpreso de The Lancet, 366, Rothwell et al., «A simple score (ABCD) para identificar
individuos con alto riesgo temprano de accidente cerebrovascular después de un ataque
isquémico transitorio», 29-36. 2003, con permiso de Elsevier.
Causas. • Ruptura de aneurisma sacular o en baya (80%). Sitios comunes: uniones de las
comunicantes posteriores con las carótidas internas (ver fig. 10.3, p. 451) o de la comu-
nicante anterior con la arteria cerebral anterior, o bifurcación de la arteria cerebral media
(fig. 10.17). 15% son múltiples. • Malformaciones arteriovenosas (15%). • Otras causas:
Encefalitis, vasculitis, tumor (vasos sanguíneos invasores), idiopática.
Factores de riesgo. HSA aneurismática previa (nueva formación de aneurisma,
aumento del tamaño de los antiguos), fumar, mal uso del alcohol, ↑ PA, trastornos hemo-
rrágicos, EBS (aneurisma micótico), antecedentes familiares (3-5x ↑ riesgo de HSA en
parientes cercanos). Riñones poliquísticos, coartación aórtica y el síndrome de Ehlers-
Danlos (p. 149) está asociados con aneurismas saculares.
Diagnóstico diferencial. Meningitis (p. 822), migraña (p. 458), sangrado intracerebral,
trombosis de vena cortical (p. 480), disección de una arteria carótida o vertebral, cefa-
lea benigna en trueno (desencadenada por la maniobra de Valsalva, p. ej., tos, coito).
Pruebas. • TC urgente: Detecta > 95% de HSA dentro de la 1ª 24 h (fig. 10.18). • Con-
siderar punción lumbar: Si TC positiva pero la historia es muy sugerente de HSA (y no CI:
p. 768). Esto necesita realizarse > 12 h después del inicio del dolor de cabeza para per-
mitir la degradación de los glóbulos rojos, de manera que una muestra positiva es xan-
trocrómica (amarilla, debido a la bilirrubina: diferencias entre la sangre antigua de HSA
frente a una «punción sangrienta»).
Tratamiento. Referir todas las HSA probadas a la neurocirugía de inmediato.
• Reexamine a menudo el SNC; Tabla PA, pupilas y GCS (p. 788). Repita la TC si se está
deteriorando.
• Mantenga la perfusión cerebral manteniéndola bien hidratada, pero apunte a una PAS
< 160 mmHg.
• Nimodipino (60 mg/4 h VO durante 3 semanas, o 1 mg/h IV) es un antagonista de Ca2+
que reduce el vasoespasmo y la morbilidad consecuente por isquemia cerebral.
• Cirugía: Liberación de espirales (coils) de forma endovascular versus tratamiento qui-
rúrgico con clipado (requiere craneotomía): la decisión depende del grado de accesi-
bilidad y del tamaño del aneurisma, aunque el tratamiento endovascular es el preferi-
do siempre que sea posible (menos complicaciones, mejores resultados). Hacer caté-
ter o angiografía por TC para identificar aneurismas únicos vs múltiples antes de inter-
venir. Las nuevas técnicas como la remodelación con balón y el desvío de flujos pue-
den ser útiles en aneurismas anatómicamente complejos.
Complicaciones. El resangrado es la causa más común de muerte, y ocurre en el 20%
a menudo en los primeros días. La isquemia cerebral debida al vasoespasmo puede cau-
sar un déficit SNC y es la causa más común de morbilidad. Si esto sucede, la cirugía no
es útil en el momento, pero puede ser más tarde. Hidrocefalia, debido al bloqueo de gra-
nulaciones aracnoides, requiere drenaje ventricular o lumbar. La hiponatremia es común
pero no deben ser manejados con restricción de fluidos. Busque ayuda de expertos.
La mayor parte de la mortalidad ocurre en el primer mes. 90% de supervivientes del pri-
mer mes, sobreviven > 1 año.
Neurología
Tenga en cuenta el viejo adagio: «si no está roto, no lo arregles» –por lo general, los
riesgos de una intervención preventiva superan cualquier beneficio, excepto quizá en
• pacientes jóvenes (más años en riesgo, y la cirugía es dos veces más peligrosa si
> 45 años de edad) que han padecido • aneurismas > 7 mm de diámetro, espe-
cialmente si están situados en la • unión de la carótida interna y la arteria cerebral
comunicante posterior, o en la • bifurcación de la arteria basilar rostral y, especial-
mente, si hay hipertensión no controlada o • antecedentes de sangrado. Datos del
Estudio Internacional de 2003 sobre los aneurismas intracraneales (ISUIA) muestran
que el riesgo relativo de ruptura de un aneurisma 7-12 mm de diámetro es de 3,3
en comparación con aneurismas < 7 mm de diámetro; si el diámetro es > 12 mm, el
riesgo relativo es 17.
Fig. 10.17. Las imágenes TC pueden manipu- Fig. 10.18. La sangre de un aneurisma roto
larse para mostrar solo estructuras de alta ocupa la fisura interhemisférica (flecha superior),
densidad como huesos y arterias que contie- un área intracerebral en forma de media luna
nen contraste. Aquí se ve un aneurisma de la presumiblemente cerca del aneurisma (2ª fle-
arteria cerebral media. cha), las cisternas basales, los ventrículos laterales
Agradecemos al Profesor Peter Scally por estas (cuernos temporales) y el cuarto ventrículo
imágenes de TC y los comentarios sobre ellas. (flecha inferior).
Agradecemos al Profesor Peter Scally por estas
imágenes TC y los comentarios sobre ellas.
papiledema.
• Seno sigmoide: Síntomas cerebelosos, parálisis del nervio craneal inferior.
• Seno petroso inferior: Parálisis de los pares V y VI, con dolor temporal y retroorbital (sín-
drome de Gradenigo, lo que sugiere que la otitis media es la causa).
• Seno cavernoso: A menudo debido a la propagación de pústulas o foliculitis faciales, cau-
sando cefalea, quemosis, párpados edematosos, proptosis, oftalmoplejía dolorosa, fiebre.
Trombosis de la vena cortical (TVC). Suele ocurrir con un trombo del seno cuan-
do se extiende en las venas corticales, causando infarto en un territorio venoso (fig.
10.21). Estos infartos dan lugar a síntomas focales similares a los accidentes cerebrovas-
culares que se desarrollan durante días. A menudo hay convulsiones y cefalea asociada
que puede venir repentinamente (dolor de cabeza del trueno).
Causas. Numerosas, incluyendo todo lo que promueve un estado hipercoagulable
(p. 374). Causas comunes: Embarazo/puerperio, anticonceptivo combinado, traumatismo
craneal, deshidratación, discrasias sanguíneas, tumores (invasión/presión local), malignidad
extracraneal (hipercoagulabilidad), punción lumbar reciente. Otras causas: Infección
(meningitis, abscesos, otitis media, malaria, tuberculosis), fármacos (p. ej., antifibrinolíticos,
andrógenos), LES, vasculitis, Crohn o CU.
Diagnóstico diferencial. Hemorragia subaracnoidea, meningitis, encefalitis, absceso
intracraneal, infarto arterial.
Exploraciones. Excluir la hemorragia subaracnoidea (si cefalea en trueno, p. 478) y
meningitis (p. 822). Sangre: Cribado de trombofilia. Imágenes: Tomografía computariza-
da/resonancia magnética pueden mostrar la ausencia de un seno (fig. 10.19), aunque un
seno transversal ausente puede ser una variante normal. Las secuencias de eco de gra-
diente ponderadas en T2 de RM pueden visualizar el trombo directamente (fig. 10.20),
y también identificar el infarto hemorrágico. La TC puede ser normal al principio, pero
muestran un defecto de llenado en ~1 semana (signo delta). Punción lumbar (si no hay
CI): presión elevada. El LCR puede ser normal, o mostrar hematíes y xantocromía.
Tratamiento. Busque ayuda de expertos. Anticoagulación con heparina o HBPM y
luego warfarina (INR 2-3) puede ser beneficiosa incluso si hay hemorragia cerebral
secundaria (a menos que esté contraindicada por otro motivo). Si se produce un dete-
rioro a pesar de una anticoagulación adecuada, la trombólisis o trombectomía mecánica
puede proporcionar beneficios limitados (pero no en aquellos con infartos grandes e
herniación inminente). El ↑PIC requiere atención inmediata (p. 830); la hemicraniectomía
descompresiva puede prevenir la herniación inminente.
9 Los predictores de mal pronóstico incluyen: puntuación GCS al ingreso < 9, ubicación TVC profunda,
infección del SNC, malignidad, hemorragia intracraneal, anomalía del estado mental, edad > 37 años y .
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CAP. 10_Oxford 07/05/18 16:13 Página 481
481
Neurología
visto. Posteriormente, la irregularidad
del vaso indica un coágulo no oclusi-
vo.
Imagen y comentario cortesía
del Prof. P. Scally.
Fig. 10.20. RM mostrando trombo (flechas) en el seno sagital (imagen sagital ponderada en T1,
izquierda) y en el seno transverso derecho (imagen axial ponderada en T2, derecha). A menu-
do más de un seno está involucrado. Imagen cortesía del Dr. David Werring.
SSS
VS
VCI
ST
Fig. 10.21. Territorios venosos (comparar con territorios arteriales en p. 451). SSS –seno supe-
rior sagital; ST –seno transverso; VS –venas silvianas; VCI –venas corticales internas.
Hay mucha mayor variación en la anatomía venosa que entre los individuos de la anatomía
arterial, por lo que este diagrama es solo una guía aproximada. El punto clave es darse cuenta de
que el infarto que atraviesa los límites entre territorios arteriales puede ser de origen venoso.
Neurología
Fig. 10.23. La sangre (alta atenuación,
fusiforme o biconvexa) en el lado dere-
cho está limitado anteriormente por la
sutura de la corona y posteriormente
por sutura lambdoidea. Se trata, pues, de
un hematoma extradural. La baja atenua-
ción de la densidad de la colección de
LCR en el lado izquierdo está causando
el festoneado del hueso superpuesto.
Esta ubicación es típica de un quiste arac-
noideo; una detección accidental de una
anomalía congénita.
Agradecemos al profesor Peter ScallyPara
las imágenes y comentarios.
10 Delirio, del latín de (de) y lira (canto entre surcos), que significa «fuera de un surco».
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CAP. 10_Oxford 07/05/18 16:13 Página 485
Neurología
mables, pero pueden no estar siempre disponibles. Realizar un test mental abrevia-
do en todos los pacientes > 65 años hospitalizados (Muchos proformas de admi-
sión permiten esto). Esto le permitirá comparar su puntuación de admisión con eva-
luaciones posteriores y seguimiento de cualquier mejora, deterioros o fluctuaciones
en la cognición durante el ingreso.
486 Demencia
Es un síndrome neurodegenerativo con disminución progresiva en varios dominios cog-
nitivos. La presentación inicial suele ser la pérdida de memoria durante meses o años
( mirar otras causas si durante días/semanas). La prevalencia aumenta con la edad: 20%
de las personas > 80 años se sabe que tienen demencia, sin embargo, probablemente
solo la mitad de los casos se diagnostican.
Diagnóstico. Se hace por: La historia del paciente con una narrativa colateral comple-
ta –pregunte sobre la cronología de la decadencia y los dominios afectados. Síntomas no
cognitivos tales como agitación, agresión o apatía indican enfermedad tardía5. Pruebas:
Utilice un test de cribado de demencia validado como la AMTS (p. 64) o similar, más
pruebas cortas de función ejecutiva y lenguaje. Realizar un examen de estado mental
para identificar ansiedad, depresión o alucinaciones. La exploración física puede identificar
una causa física, factores de riesgo (p. ej., demencia vascular) o parkinsonismo. Revisión de
Neurología
11 Ventrículos dilatados sin surcos agrandados. Síntomas: apraxia de la marcha, incontinencia, demencia;
los shunts de LCR ayudan.
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CAP. 10_Oxford 07/05/18 16:13 Página 487
Neurología
y servicios disponibles:
• Servicios de lavandería para la ropa sucia.
• Identificación para el coche facilitando estacionamiento prioritario.
• Ayuda de un terapeuta ocupacional, enfermeras y enfermeras psiquiátricas
comunitarias.
• Subsidio asistencial.
• Ingreso por respiro o claudicación familiar.
• Reembolso de tasas municipales (formularios en el ayuntamiento local).
• Los hospitales de día pueden ser de valor incalculable a la hora de estimular a los
pacientes y proporcionar descansos regulares y más que necesarios a los cuidadores.
• Apoyo moral. Los grupos de apoyo, las líneas de ayuda telefónica y las asociacio-
nes benéficas pueden aligerar la carga. P. ej., Asociación para Enfermos de Alzhei-
mer de Reino Unido.
• Combatir los comportamientos problemáticos: Primero descartar el dolor, la infec-
ción y la depresión. Considere la trazodona (50-300 mg por la noche) o loraze-
pam (0,5-1 mg/12-24 h PO). El haloperidol (0,5-4 mg) puede ser útil a corto
plazo.
12 «Enduring» no significa que no fluctúe: la cognición viene y va, permitiendo perspectivas poéticas,
como en el dolororo autodiagnóstico de Iris de Murdoch: «Estoy navegando hacia la oscuridad».
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Neurología
la úlcera péptica y el bloqueo cardíaco. Pregunte acerca de los síntomas y haga primero
un ECG.
Tratamiento antiglutamatérgico: La memantina (un antagonista de NMDA, p. 449) es razo-
nablemente efectiva en la fase tardía de la EA y se recomienda en pacientes con enfer-
medad grave o aquellos con enfermedad moderada en la que los inhibidores de la AChE no
son tolerados/CI. Dosis: 5 mg/24 h inicialmente, ↑ por 5 mg/d semanalmente a 10 mg/12 h.
ES: alucinaciones, confusión, hipertonía, hipersexualidad.
Antipsicóticos: Considerar solo en síntomas severos y no cognitivos (p. ej., psicosis o agi-
tación extrema). Posible aumento del riesgo de accidente cerebrovascular/AIT para
discutir los riesgos y evaluar los factores de riesgo cerebrovasculares. Evitar en leve a
moderado: cuerpo de demencia de Lewy (riesgo de reacciones de sensibilidad neuro-
léptica), EA y demencia vascular.
Suplementos vitamínicos: Se han realizado ensayos de suplementos dietéticos y vitamíni-
cos con resultados no concluyentes y decepcionantes. Tal vez la mejor evidencia existe
para la vitamina E (2000 UI OD), lo que puede conferir un beneficio modesto en el retra-
so de la progresión funcional para moderar la EA, pero sin efecto sobre el rendimiento
cognitivo.
La genética y el futuro
La posesión del alelo APOE4 en el cromosoma 19 es la principal causa genética de la EA;
la homocigosidad aumenta el riesgo de desarrollar la enfermedad 12x. Sin embargo, aun-
que identificar este riesgo podría permitir a una persona hacer cambios en su estilo de
vida, no hay mucho más que hacer salvo anticipar el inminente declive cognitivo (solo uno
de los dilemas planteado por pruebas genéticas). Mientras que las proteínas que compo-
nen las placas y los enredos neurofibrilares vistos en EA fueron identificados en los tem-
pranos años 80, su progreso ha sido lento desde entonces. Tanto es así que en 2013, los
líderes mundiales se comprometieron a buscar un medicamento que detendría la demen-
cia dentro de los próximos 10 años. Ahora un inhibidor de la agregación de tau de segun-
da generación llamado LMTX podría hacer el trabajo, habiéndolo mostrado en ensayos
clínicos de fase III en pacientes con EA leve o moderada, con mejoría clínica y una dismi-
nución de la atrofia en la RM. Tal vez en un futuro inminente la identificación de aquellos
con mayor riesgo de desarrollo EA a través de pruebas genéticas pueda tener un papel.
años antes), desarrollo (p. ej., tumor neuroepitelial disembrioplásico o disgenesia corti-
cal), lesión ocupante de espacio, apoplejía, esclerosis del hipocampo (p. ej., tras convul-
siones febriles), malformaciones vasculares. Otros: Esclerosis tuberosa, sarcoidosis, LES,
PAN, anticuerpos contra los canales de potasio controlados por voltaje.
Diagnóstico. Puede ser difícil debido a la naturaleza heterogénea de la enfermedad
(hay > 40 tipos diferentes de epilepsia). NICE estima que el 5-30% de las personas con
epilepsia han sido erróneamente diagnosticados. Todos los pacientes con una convulsión
deben ser referidos para evaluación e investigación por un especialista en < 2 semanas.
Haga una historia completa: Incluyendo una descripción detallada de un testigo. Pregun-
te específicamente sobre la mordedura de la lengua y una lenta recuperación. Si se trata
de una primera epilepsia preguntar sobre giros pasados/comportamiento extraño. Déjà
vu y extraños sentimientos episódicos de miedo pueden ser relevantes. ¿Existen desen-
cadenantes (p. ej., alcohol, estrés, luces que parpadean/TV)? Los ataques desencadenados
tienden a repetirse.
Establecer el tipo de convulsión: Ver RECUADRO «Clasificación de las convulsiones»7. NB: si
comienza una convulsión con características focales, es una convulsión parcial, sin embargo
rápidamente se generaliza. No olvidar el trastorno de ataque no epiléptico (= «pseudo»
crisis psicógenas): esto no es infrecuente. (Sospechar si las convulsiones tienen un inicio
gradual, duración prolongada y abrupta terminación y se acompañan de ojos cerrados ±
resistencia a la apertura de los ojos, respiración rápida, actividad motora fluctuante y epi-
sodios de inmovilidad sin respuesta. El examen del LCR, la TC, la RM y el EEG son nor-
males. Puede coexistir con una verdadera epilepsia.)
Eliminar las causas que provocan: La mayoría de las personas tendrían una convulsión
dada una provocación suficiente (p. ej., convulsiones anóxicas reflejas en desmayos), pero
no se clasificarían como epilépticos: solo 3-10% de las convulsiones provocadas recurren;
generalmente cuando la provocación es irreversible.
Causas: traumatismos; ictus; hemorragia; ↑ PIC; retirada de alcohol o de benzodiazepinas;
trastornos metabólicos (hipoxia, ↑↓ Na+, ↑ Ca2+, ↓ glucosa, uremia, enfermedad hepáti-
ca); infección (p. ej., meningitis, encefalitis); ↑ Ta; fármacos (tricíclicos, cocaína). Las con-
vulsiones no provocadas tienen una tasa de recurrencia de 30-50%.
Investigaciones. Busque causas provocadoras. Considere un EEG: no puede excluir epi-
lepsia y puede ser falsamente positivo, por lo que no debe hacerse uno si el síncope sim-
ple es el diagnóstico probable. Solo haga EEG de emergencia si el problema es el estatus
no convulsivo. Otras pruebas: RM (lesiones estructurales); niveles de fármaco (si con
antiepilépticos: ¿toma el paciente la medicación?); cribado de drogas; punción lumbar
(p. ej., si se sospecha infección).
Asesoramiento. Después de cualquier «convulsión», aconseje acerca de los peligros,
p. ej., nadar, conducir, alturas hasta que se conozca el diagnóstico; después, dé asesora-
miento individualizado sobre el empleo, el deporte, el seguro y sobre la concepción
(OHCS, p. 28). El paciente debe ponerse en contacto con la oficina de tráfico y evitar
conducir hasta que no tenga convulsiones durante más de 1 año (p. 159).
Neurología
sando un ataque generalizado, que es típicamente convulsivo.
Convulsiones generalizadas. Originadas en algún punto dentro y rápidamente
afectando redes distribuidas bilateralmente que conducen a la aparición simultánea de
descargas eléctricas sin características de localización referentes a un solo hemisferio.
Subtipos importantes:
• Ataques de ausencia: Pausas breves (≤ 10 s), p. ej., de repente deja de hablar en
medio de la frase, luego continúa donde la dejó. Se presenta en la infancia.
• Convulsiones tónico-clónicas: Pérdida de la conciencia. Miembros rígidos (tónico),
luego sacudida (clónica). Puede tener uno sin el otro. Confusión postictal y som-
nolencia.
• Convulsiones mioclónicas: Sacudidas repentinas de una extremidad, cara o tronco.
El paciente puede verse arrojado repentinamente al suelo, o tener una extremi-
dad violentamente desobediente: un paciente lo describió como «mi epilepsia de
platillo volador», pues si hubiera tenido una pieza de vajilla en la mano hubiera sali-
do volando.
• Atonic (akinetic) convulsiones: Súbita pérdida de tono muscular causando una caída,
no pérdida de conciencia.
• Espasmos infantiles (OHCS, p. 206): Comúnmente asociado con esclerosis tuberosa.
NB: la clasificación de los síndromes epilépticos está separada de la clasificación de
convulsiones y se basa en el tipo de convulsiones, edad de inicio, hallazgos de EEG
y otras características tales como la historia familiar.
Neurología
visión borrosa, fotosensibilidad, temblor, agitación, vómitos, anemia aplásica.
Levetiracetam: Inicialmente 250 mg/24 h, aumento de 250 mg/12 h cada 2 semanas
hasta el máximo 1,5 g/12 h (si eTFG > 80). ES: los efectos secundarios psiquiátricos
son comunes, p. ej., depresión, agitación. Otros SE: diarrea y vómitos, dispepsia, som-
nolencia, diplopía, discrasias sanguíneas.
Valproato sódico: Inicialmente 300 mg/12 h, aumento de 100 mg/12 h cada 3 d hasta
máx. 30 mg/kg (o 2,5 g) diarios. ES: Teratogénico. Las náuseas son muy comunes
(tomar con la comida). Otros ES: insuficiencia hepática (mire PFH especialmente
durante los primeros 6 meses), pancreatitis, pérdida de pelo (crece hacia atrás riza-
do), edema, ataxia, temblor, trombocitopenia, encefalopatía (hiperamonemia).
Fenitoína: Ya no es la primera línea debido a la toxicidad (nistagmo, diplopía, temblor,
disartria, ataxia) y ES: ↓ intelecto, depresión, rasgos faciales toscos, acné, hipertrofia
de encías, polineuropatía, discrasias sanguíneas. Niveles en sangre requeridos para la
dosificación.
La carbamazepina, la fenitoína y los barbitúricos son inductores de enzimas hepá-
ticas.
Epilepsia y embarazo
La epilepsia conlleva un 5% de riesgo de anomalías fetales, por lo que un buen con-
trol de las convulsiones durante la concepción y el embarazo es vital. Además, algu-
nos antiepilépticos son teratogénicos: la paciente debe recibir información precisa y
asesoramiento sobre anticoncepción, la concepción, el embarazo y la lactancia
materna con el fin de tomar decisiones informadas.
En particular:
• Aconsejar a las mujeres en edad fértil que tomen ácido fólico 5 mg/d.
• Evitar estrictamente el valproato de sodio y la politerapia antes de la concepción
y embarazo (se prefiere la lamotrigina pero es necesario planificar la transición).
• Advierta que la mayoría de los FAE, excepto carbamazepina y valproato, están en
la leche materna. Lamotrigina no se piensa que sea perjudicial para los bebés.
• Discutir los métodos anticonceptivos, teniendo en cuenta que: la capacidad induc-
tora de las enzimas hepáticas de los FAE hace que la anticoncepción solo con pro-
gesterona no sea confiable y los anticonceptivos que contienen estrógenos dismi-
nuyen los niveles de lamotrigina –puede ser necesario un aumento de la dosis
para lograr el control de las crisis.
494 Parkinsonismo
Esta es la tríada extrapiramidal de:
1. Temblor. Peor en reposo; a menudo «pellizcar» el pulgar sobre los
dedos (Ver p. 468).
2. Hipertonía. Rigidez + temblor da la «rigidez de la rueda denta-
da», sentido por el examinador durante pronación/supinación
rápida.
3. Bradicinesia. Lento para iniciar el movimiento; las acciones se
ralentizan y disminuyen en amplitud con repetición, p. ej. ↓ tasa
de parpadeo, micrografía. El paso es festinante (arrastrando los
pies, lanzado hacia adelante, fig. 10.25) con ↓ balanceo en el
brazo y congelación en obstáculos o puertas (debido a la mala
función motora y cognitiva). Cara sin expresión.
Neurología
Causas. Enfermedad de Parkinson (EP): Pérdida de neu- Fig. 10.25. «March à petit pas».
ronas dopaminérgicas en la sustancia negra, asociada Marcha de pequeño paso.
con cuerpos de Lewy en los ganglios basales, tronco
encefálico y la corteza. La mayoría de los casos son esporádicos, aunque se han identifi-
cado varios loci genéticos en casos familiares. La edad media de inicio es de 60 años. Pre-
valencia: ↑ con edad: 3,5% a 85-89 años. Características clínicas: La tríada parkinsoniana,
más síntomas no motores tales como: disfunción autonómica (hipotensión postural,
estreñimiento, frecuencia urinaria/urgencia, goteo de la saliva), trastornos del sueño y
reducción del sentido del olfato. Las complicaciones neuropsiquiátricas, como la depre-
sión, la demencia y la psicosis, son comunes y debilitantes. Diagnóstico: Es clínico y basa-
do en las características centrales de bradicinesia con temblor en reposo y/o hipertonía;
deben excluirse la enfermedad cerebelosa y la demencia fronto-temporal; apoya el diag-
nóstico una respuesta clínica a la terapia dopaminérgica. Los síntomas son invariable-
mente peores de un lado –si son simétricos, buscar otras causas. Si se sospecha una
causa alternativa, entonces considere la RM para descartar patología. La neuroimagen
funcional (DaTscan®, PET) está desempeñando un papel emergente. Tratamiento: Se cen-
tra en el control de los síntomas y no retarda la progresión de la enfermedad (Ver RECUA-
DRO). Las opciones no farmacológicas incluyen la estimulación cerebral profunda (ECP,
puede ayudar a aquellos que responden parcialmente a la dopamina) y la ablación qui-
rúrgica de los circuitos de los ganglios basales hiperactivos (p. ej., núcleos subtalámicos).
Síndromes Parkinson plus. Parálisis supranuclear progresiva (PSP, síndrome de Steele-
Richardson-Olszewski): Inestabilidad postural temprana, parálisis vertical de la mirada ±
caídas; rigidez del tronco > extremidades; inicio simétrico; problemas de habla y de
deglución; pequeño temblor. Atrofia de múltiples sistemas (AMS, Shy-Drager): Caracterís-
ticas autonómicas tempranas, p. ej., impotencia/incontinencia, ↓PA postural; signos cere-
belosos + piramidales; rigidez > temblor. Degeneración cortico-basal (DCB): Rigidez aci-
nética con una extremidad; pérdida sensorial cortical (p. ej., astereognosis); apraxia (inclu-
so actividad de interferencia autónoma por extremidades afectadas –el fenómeno de las
«extremidades alienígenas»). Demencia del cuerpo de Lewy: Ver p. 486.
Causas secundarias. Parkinsonismo vascular (2,5-5% del parkinsonismo, también lla-
mado parkinsonismo de «miembros inferiores»): P. ej., paciente diabético/hipertenso con
inestabilidad postural y caídas (en lugar de temblor, bradicinesia y festinación). Otras cau-
sas secundarias: Fármacos (neurolépticos, metoclopramida, proclorperazina), toxinas
(manganeso), enfermedad de Wilson (p. 285), trauma (demencia pugilista), encefalitis,
neurosífilis.
Tratamiento. Requiere la participación de un equipo multidisciplinario (médico de AP,
neurólogo, enfermera especialista, trabajador social, cuidadores, fisioterapeuta y terapeu-
ta ocupacional) para mejorar la calidad de vida. Evaluar la discapacidad y la cognición de
forma objetiva y regular y controlar el estado de ánimo, como la depresión, pues es muy
común. Involucrar pronto a los servicios de cuidados paliativos. Ejercicios posturales y el
levantamiento de pesas pueden ayudar. No se olvide de los cuidadores (p. 487): ofrez-
ca treguas de descanso.
Neurología
ES: discinesia y distonía dolorosa. ES no motores: psicosis; alucinaciones visuales, náu-
seas y vómitos (dar domperidona). Las preparaciones de liberación modificada solo
deben utilizarse en la enfermedad tardía.
Agonistas de la dopamina (AD): La monoterapia con ropinirole y pramipexol puede
retrasarse, comenzando la L-dopa en estadios tempranos de la EP y permitiendo
dosis más bajas de L-dopa a medida que la EP progresa. Los parches transdérmicos
de rotigotina están disponibles como mono o aditivos. ES: somnolencia, náuseas, alu-
cinaciones, conducta compulsiva (juegos de azar, hipersexualidad, p. 449). AD-ago-
nistas derivados de ergot (bromocriptina, pergolida, cabergolina) pueden causar
reacciones fibróticas y no son favorecidas. La amantadina (AD débil) es utilizada para
las discinesias inducidas por fármacos en la EP tardía.
Apomorfina: Potente agonista AD usado con infusión SC continua para equilibrar el
efecto al final de la dosis, o como una pluma de rescate para la congelación
repentina. ES: úlceras en el lugar de la inyección.
Anticolinérgicos (p. ej., benzhexol, orphenadrine): Causan confusión en los ancianos y
tienen múltiples ES –limitados a los pacientes más jóvenes (pero no es primera línea).
Inhibidores de la MAO-B (p. ej: rasagilina, selegilina): Una alternativa a los agonistas
dopaminérgicos en la EP temprana. Los ES incluyen hipotensión postural y fibrilación
auricular.
Inhibidores de COMT (p. ej., entacapona, tolcapona): Pueden ayudar a complicaciones
motoras en enfermedad tardía. Disminuya el tiempo de «apagado» en aquellos con
disminución de efecto al final de la dosis. Tolcapone tiene mayor eficacia, pero puede
causar complicaciones hepáticas graves y requiere seguimiento a través de monito-
res de PFH.
tación del tracto corticoespinal y de la vejiga también son comunes y los síntomas pue-
den empeorar con el calor (p. ej., baño caliente o ejercicio). Otros síntomas/Signos, ver
tabla 10.8.
Diagnóstico. Es clínico, hecho por un neurólogo usando criterios establecidos (p. ej.,
McDonald, ver tabla 10.9) y después de excluidos los diagnósticos alternativos. El diag-
nóstico y tratamiento tempranos reducen las tasas de recaída y la discapacidad, por lo
que se refieren a neurología tan pronto como se sospecha la EM.
Pruebas. Dependiendo de los síntomas de presentación, algunos pacientes pueden
necesitar apoyo adicional e información para hacer un diagnóstico (según los criterios de
McDonald). RM: sensible pero no es específico para la detección de la placa. También
puede excluir otras causas, p. ej., la compresión de la médula. LCR: Bandas oligoclonales
de IgG en electroforesis que no están presentes en el suero sugieren inflamación del
SNC. Potenciales evocados visuales, auditivos y somatosensoriales retrasados.
Progresión. La mayoría de los pacientes siguen un curso recurrente-remitente, con
recuperación inicial entre recaídas. Con el tiempo, la remisión se hace incompleta, por lo
que la discapacidad se acumula (progresión secundaria). El 10% de los pacientes pre-
sentan discapacidad progresiva con ausencia de recaídas (EM primaria progresiva), mien-
tras que una minoría de pacientes no experimenta ninguna discapacidad progresiva en
absoluto. Síntomas de mal pronóstico: mayores; síntomas motores al inicio; muchas
recaídas tempranas; muchas lesiones por RM; pérdida axonal. Embarazo: No altera la tasa
de progresión: las recaídas pueden reducir durante el embarazo y aumentar 3-6 meses
después, pero vuelve a su tasa anterior a partir de entonces.
Tratamiento. Como en todas las afecciones neurológicas, se requiere el cuidado coor-
dinado de un equipo multidisciplinario y la plena participación del paciente en todas las
decisiones8.
Consejos para el estilo de vida: El ejercicio regular, dejar de fumar y evitar el estrés pue-
den ayudar.
Fármacos modificadores de la enfermedad: El dimetilfumarato es una opción para los
pacientes con recaída leve/EM remitente. Los anticuerpos monoclonales alemtuzumab
(actúa contra las células T) y natalizumab (actúa contra los receptores VLA-4 que per-
miten a las células inmunes cruzar la barrera hematoencefálica) también están aproba-
dos para la enfermedad recidivante-remitente. El interferón beta y el glatirámero no son
recomendados por el NICE por el balance de efectividad clínica y coste-efectividad. La
azatioprina no se recomienda debido a su perfil de ES.
Tratamiento de recaídas: Metilprednisolona, p. ej., 0,5-1 g/24 h IV/VO para 3-5 d acorta
recaídas agudas. Usar con moderación (~ < dos veces al año; esteroide ES, p. 377). No alte-
ra el pronóstico general.
Control de los síntomas: Espasticidad: Ofrezca baclofeno o gabapentina. Tizanidina o dan-
troleno son de segunda línea; si estos fallan considere benzodiazepinas. Temblor: Las
inyecciones de toxina botulínica de tipo A mejoran el temblor y el funcionamiento del
brazo. Urgencia/frecuencia: Si la orina residual postmicción > 100 mL, enseñar autocate-
terización intermitente; si < 100 mL, pruebe la tolterodina. Fatiga: La amantadina, la TCC
y el ejercicio pueden ayudar.
Neurología
meningismo, neuritis óptica bilateral, leucocitosis del LCR y ↑ proteínas del LCR son raras
en la EM y pueden sugerir enfermedad desmielinizante recurrente no EM, p. ej., vasculitis
o sarcoidosis.
Seis epónimos de EM
Síndrome de Devic (= Neuromielitis óptica, NMO): Variante de EM con mielitis trans-
versa (pérdida de la función motora, sensorial, autonómica, de reflejos y de esfínte-
res por debajo del nivel de una lesión), atrofia óptica y anticuerpos anti-acuaporina
4 (p. 698).
Signo de Lhermitte: La flexión del cuello causa «choques eléctricos» en el tronco/extre-
midades. (También positivo en espondilosis cervical, tumores de la médula y ↓B12.)
Fenómeno de Uhthoff: Empeoramiento de los síntomas con el calor, p. ej., en el baño.
Síndrome de Charles Bonnet (Raro): ↓Agudeza/ceguera temporal ± alucinaciones
visuales complejas de caras, así como animales, plantas y árboles.
Efecto de Pulfrich: Latencias de los ojos desiguales, causando desorientación en el trá-
fico, dado que trayectorias rectas parecen curvadas y las distancias son mal juzgadas
al mirar hacia los lados.
Pupila de Argyll Robert: Ver p. 72.
so (25% múltiple); hematoma subdural crónico, granuloma (p. 197, p. ej., tuberculoma),
quiste (p. ej., cisticercosis). Tumores: 30% son metastásicos (p. ej., mama, pulmón, melano-
ma). Primarios: astrocitoma, glioblastoma multiforme, oligodendroglioma, ependimoma.
También meningioma, linfoma primario del SNC (p. ej., como manifestación no infeccio-
sa del VIH) y hemangioblastoma cerebeloso.
Diagnóstico diferencial. Ictus, lesión en la cabeza, trombosis del seno venoso, vascu-
litis, EM, encefalitis, postictal, metabólica o hipertensión intracraneal idiopática.
Pruebas. TC ± RM (bueno para las masas de la fosa posterior). Considere la biopsia.
Evite punción lumbar antes de imágenes (riesgos de enclavamiento, es decir, las amígda-
las cerebelosas herniadas a través del foramen magnum).
Tratamiento del tumor. Benigno: Eliminar si es posible, pero algunos pueden ser inac-
cesibles. Maligno: La escisión de los gliomas es difícil, ya que los márgenes de la resección
rara vez son claros, pero la cirugía da un diagnóstico histológico, disminuye el volumen
pre-radioterapia y hace una cavidad para insertar obleas de carmustina (proporciona
quimioterapia local). Si un tumor es inaccesible, pero causa hidrocefalia, puede ayudar
una derivación ventrículo-peritoneal. La quimio-radioterapia se utiliza en post-operato-
rio para gliomas o metástasis, y como terapia única si la cirugía es imposible. El oligo-
dendroglioma con deleciones 1p/19q es especialmente sensible. En glioblastoma, temo-
zolomida (agente alquilante) ↑ supervivencia. Profilaxis de convulsiones (p. ej., fenitoína)
es importante, pero a menudo falla.Tratar la cefalea (p. ej., codeína 60 mg/4 h VO). Edema
cerebral: Dexametasona 4 mg/8 h VO; manitol si ↑ PIC aguda (p. 831). Plan meticuloso
de tratamiento paliativo (p. 534).
Pronóstico. Pobre pero mejorando (< 50% de supervivencia a los 5 años) para las pri-
marias del SNC; supervivencia a los 20 años del 40% del hemangioblastoma cerebeloso;
los tumores benignos son curables por escisión.
Quistes coloidales del tercer ventrículo. Estos quistes congénitos se declaran en
la vida de adultos con amnesia, dolor de cabeza (a menudo posicional), obnubilación
(conciencia borrosa), incontinencia, pérdida de visión, parestesias bilaterales, piernas débi-
les y ataques de caídas. R/ : Excisión o derivación ventrículo-peritoneal.
Neurología
nosis (incapaz para reconocer un objeto por el tacto solo). • Falta de atención sen-
sorial. • Disfasia (p. 86). • Síndrome de Gerstmann (p. 700).
Lóbulo occipital: • Defectos del campo visual contralateral. • Palinopsia (imágenes
persistentes una vez que el estímulo haya abandonado el campo de visión). • Polio-
pia (ver múltiples imágenes).
Cerebelo: Recuerde DANISH: disdiadococinesis (enperoramiento de los movi-
mientos que se alternan rápidamente, p. 67) y dismetría (apuntamiento pasado); ata-
xia (miembro/tronco –pero si la ataxia truncal es peor al cerrar los ojos, culpar a las
columnas dorsales); nistagmo; temblor intencional; discurso tortuoso (disartria);
hipotonía.
Ángulo cerebelopontino (P. ej., neuroma acústico/schwannoma vestibular, p. 462.): Sor-
dera ipsilateral, nistagmo, ↓ reflejo corneal, debilidad facial (rara), signos ipsilaterales
cerebelosos (arriba), papiledema, VI parálisis del nervio (p. 70).
Cerebro medio (p. ej., tumores pineales o infarto de cerebro medio): Fallo para subir
o bajar la mirada; respuesta pupilar disociada cerca de la luz (p. 72), nistagmo en la
mirada convergente.
501
Fibras motoras
Fibras sensibles
Neurología
S. parasimpático (fibras secretoras)
Fibras del gusto
1. Núcleo del nervio facial, 9. Nervio maxilar superior 17. Ramo auricular
en la formación reticular 10. Glándula lacrimal 18. Agujero estilomastoideo
profunda del puente infe- 11. Nervio petrosal profun- 19. Nervio lingual-motor vis-
rior do grande ceralVII y gustoVII y sensi-
2. Núcleo espinal de V 12. Nervio de Vidian bilidad general de la len-
3. Nuca salivar superior 13. Nervios de la glándula gua (V3)
4. Tracto solitario nariz/paladar 20. Ganglio submandibular
5. Porus acusticus interno 14. Pequeño nervio petroso (y glándula, 21)
6. Agujero meato al ganglio geniculado 22. Glándula sublingual
7. Nervio petroso grande 15. Nervio estapedial
8. Ganglio de esfenopalatino 16. Chorda tympani
Fig. 10.26. Ramas del nervio facial. La parte motora mueve los músculos de la cara, cuero cabe-
lludo y oído –también buccinador (abombar las mejillas), platisma, stapedius, y el vientre poste-
rior del digástrico. También contiene las fibras motoras simpáticas (vasodilatador) de las glán-
dulas submaxilares y sublinguales (vía el nervio de la cuerda del tímpano). La parte sensorial
contiene las fibras del gusto para los 2/3 anteriores de la lengua y algunas fibras sensitivas somá-
ticas de la región del oído medio.
Imagen del Baylor College of Med. Bcm.edu/oto/studs/face.html.
502 Mononeuropatías
Lesiones de los nervios periféricos o craneales individuales. Las causas suelen ser locales,
como trauma o atrapamiento (p. ej., tumor), excepto el síndrome del túnel carpiano (ver
RECUADRO «Síndrome del túnel carpiano»).
Nervio mediano C6-T1. El nervio mediano es el nervio del agarre de precisión –los
músculos implicados son más fáciles de recordar si utiliza su «LOAF» (dos lumbricales,
oponentes pollicis, abductor pollicis brevis y flexor pollicis brevis). Las características clínicas
dependen de la localización de la lesión: En la muñeca: (Ver RECUADRO «Síndrome del
túnel carpiano».) Debilidad del abductor pollicis brevis y pérdida sensorial sobre los 3½
dedos radiales y palma. Lesiones del nervio interóseo anterior (p. ej., traumatismos): Debi-
lidad de la flexión de la falange distal del pulgar y el dedo índice. Lesiones proximales (p.
ej., compresión del codo): Puede mostrar defectos combinados.
Nervio ulnar C7-T1. Vulnerable al trauma del codo. Signos: Debilidad/atrofia de los
Neurología
flexores mediales de la muñeca (lado cubital), los interóseos (no pueden cruzar los
dedos como en el signo para pedir buena suerte), y dos lumbricales mediales (mano de
garra, más marcada en lesiones de muñeca con digitorum profundus intacto); atrofia de la
eminencia hipotenar, débil abducción del quinto dígito, y flexión de la 4ª y 5ª articulación
interfalángica proximal; pérdida sensorial de los 1½ dedos medio y el lado cubital de la
mano. Tratamiento: Ver RECUADRO «Tratamiento de las mononeuropatías ulnares por
atrapamiento».
Nervio radial C5-T1. Este nervio abre el puño. Puede dañarse por la compresión con-
tra el húmero. Síntomas: Pruebe la caída de la muñeca y el dedo con el codo flexionado
y el brazo pronado; la pérdida sensorial es variable –el aspecto dorsal de la base del pul-
gar (la tabaquera anatómica) está afectada con mayor fiabilidad. Músculos implicados:
(«BEAST») Braquioradialis; extensores; abductor pollicis longus; supinador tríceps.
Plexo braquial. Dolor/parestesia y debilidad en el brazo afectado en una variable dis-
tribución. Causas: Traumatismos, radioterapia (p. ej., para carcinoma de mama), carga pro-
longada de una mochila pesada, costilla cervical, compresión de salida torácica (también
afecta la vasculatura) o amiotrofia neurálgica (síndrome de Parsonage-Turner: dolor
repentino unilateral y severo, seguido durante horas por una profunda debilidad, que será
resuelta en unos días. Pueden raramente afectar al nervio frénico o a los nervios crane-
ales inferiores.)
Nervio frénico C3-5. C3, 4, 5 mantiene vivo el diafragma: las lesiones causan ortop-
nea con un hemidiafragma elevado sobre RXT. Causas: Cáncer de pulmón, TB, síndrome
paraneoplásico, mieloma, timoma, espondilosis cervical/traumatismos, cirugía torácica,
infecciones (HZV, VIH, enfermedad de Lyme), distrofia muscular.
Nervio cutáneo lateral del muslo L2-L3. La meralgia paraesthetica es dolor ardien-
te anterolateral del muslo por atrapamiento debajo del ligamento inguinal.
Nervio ciático L4-S3. Dañado por tumores pélvicos o fracturas de pelvis o fémur. Las
lesiones afectan los isquiotibiales y todos los músculos debajo de la rodilla (caída del pie),
con pérdida de sensibilidad lateral debajo de la rodilla.
Nervio peroneo común L4-S1. Se origina del nervio ciático justo por encima de la
rodilla. A menudo dañado debido a que gira alrededor de la cabeza fibular (traumatis-
mos, sentarse con las piernas cruzadas). Signos: caída del pie, debilidad del tobillo dorsi-
flexión/eversión, pérdida sensorial sobre el pie dorsal.
Nervio tibial L4-S3. Originario del nervio ciático justo por encima de la rodilla. Las
lesiones nos llevan a una incapacidad de ponerse de puntillas (flexión plantar), invertir el
pie, o flexión de los dedos del pie con pérdida sensorial sobre la planta del pie.
Mononeuritis multiplex. Describe la implicación de dos o más nervios. Las causas
tienden a ser sistémicas: DM, trastornos del tejido conectivo (reumatoide, LES), vasculi-
tis (granulomatosis con poliangitis, anteriormente granulomatosis de Wegener, PAN) y
más raramente sarcoidosis, amiloide, lepra. Electromiografía (EMG) ayuda a definir el sitio
anatómico de las lesiones.
Neurología
Pruebas: La neurofisiología ayuda confirmando el sitio y la gravedad de la lesión (y la
probabilidad de mejoría después de la cirugía). La flexión máxima de la muñeca
durante 1 min (prueba de Phalen's) puede provocar síntomas, y el golpear sobre el
nervio en la muñeca puede inducir hormigueo (prueba de Tinel), pero ambos son
bastante inespecíficos.
Tratamiento: Férula, inyección local de esteroides ± cirugía de descompresión.
NB:También hay síndrome del túnel tarsal: dolor unilateral quemante de la planta del
pie tras compresión del nervio tibial.
504 Polineuropatías
Trastornos motores y/o sensitivos de múltiples nervios periféricos o craneales: general-
mente simétricos, extendidos y a menudo peor distalmente (distribución de «guantes y
calcetines»). Pueden clasificarse por: cronicidad, función (sensorial, motora, autonómica,
mixta) o patología (desmielinización, degeneración axonal, o ambas). P. ej., Guillain-Barré
(p. 702) es una neuropatía aguda, predominantemente motora, desmielinizante, mientras
que el abuso crónico del alcohol conduce a una neuropatía axonal crónica, inicialmente
sensorial y posteriormente mixta.
Diagnóstico. La historia es vital: sea claro sobre el curso del tiempo, la naturaleza pre-
cisa de los síntomas y cualquier evento precedente o asociado (p. ej., diarrea y vómitos
antes que síndrome de Guillain-Barré; ↓ peso en el cáncer; artralgia de una enfermedad
del tejido conectivo). Pregunte acerca de viajes, consumo de alcohol y drogas, infeccio-
nes sexuales y antecedentes familiares. Si es palpable el engrosamiento de los nervios
Neurología
Neurología
de Lyme Leucodistrofia Fenitoína
Metronidazol
Otros
Paraproteinemias, amiloidosis, plomo, arsénico
* Polirradiculoneuropatía desmielinizante inflamatoria crónica (PDIC): desmielinización autoinmune
de nervios periféricos (inicio distal de debilidad/pérdida sensorial en miembros + agrandamiento
del nervio + ↑ proteína del LCR).
Neuropatía autonómica
Las neuropatías simpáticas y parasimpáticas pueden estar aisladas o formar parte de
una neuropatía periférica sensoriomotora generalizada.
Causas. DM, amiloidosis, síndromes de Guillain-Barré y Sjögren,VIH, lepra, LES, tóxi-
co, genético (p. ej., porfiria), o paraneoplásico, p. ej. encefalomieloneuropatías para-
neoplásicas y síndrome miasténico de Lambert-Eaton (SMLE, p. 512).
Sígnos. Simpáticos: Hipotensión postural, ↓sudoración, fallo eyaculatorio, síndrome
de Horner (p. 702). Parasimpático: Estreñimiento, diarrea nocturna, retención de
orina, disfunción eréctil, pupila de Holmes-Adie (p. 72).
Pruebas de funcionamiento autonómico
• PA: La caída postural de ~ >20/10 mmHg es anormal.
• ECG: Una variación de < 10 bpm con la respiración es anormal (verifique el inter-
valo R-R).
• Cistometría: Estudios de presión de la vejiga.
• Pupilas: Instilar epinefrina 0,1% (se dilata si denervación simpática postganglionar, no
si es normal); cocaína 2,5% (se dilata si es normal; no si hay denervación simpática);
metacolina 2,5% (se contrae si la lesión parasimpática) –raramente utilizada.
• Anticuerpos paraneoplásicos: Anti-HU, anti-YO, anti-RI, anti-anfifisina, anti-CV2, anti-
MA2. Otros Ab: La presencia de anticuerpos contra el receptor de acetilcolina
muestra que la causa puede ser ganglionopatía autónoma autoinmune.
Fallo autonómico primario. Ocurre solo (ganglionopatía autónoma autoinmu-
ne), como parte de la atrofia multisistémica (AMS, p. 494), o con enfermedad de Par-
kinson, típicamente en un hombre de mediana edad/anciano. Comienzo: insidioso;
síntomas como los enumerados anteriormente.
3. Atrofia muscular progresiva. (< 10%): Lesión de la célula del asta anterior, por lo que
los signos son solo de MNI. Afecta a los grupos musculares distales antes de la pro-
ximal. Mejor pronóstico que la ELA.
4. Esclerosis lateral primaria (Raras): Pérdida de células de Betz en la corteza motora:
principalmente signos de la MNS, debilidad marcada de la pierna espástica y parálisis
pseudobulbar. No hay deterioro cognitivo
Presentación. Piense en la EMN en aquellos > 40 años (la edad mediana del Reino
Unido al inicio es de 60) con marcha espástica torpe, caída de pies ± miopatía proximal,
agarre débil (las manivelas de las puertas no se giran) y abducción del hombro (lavado
del cabello es difícil), o neumonía por aspiración. Busque signos de MNI: espasticidad,
reflejos vivos, ↑ plantares; y signos de MNI: atrofia, fasciculación de la lengua, abdomen,
espalda, muslo. ¿Están afectados el habla o la deglución (signos bulbares)? La fasciculación
no es suficiente para diagnosticar una lesión de MNI: buscar también debilidad. La
demencia frontotemporal se produce en ~25% (ver RECUADRO «Dignidad y Dignitas»).
Criterios diagnósticos (Ver RECUADRO «Criterios de diagnóstico de ELA revisados de
El Escorial»). No es una prueba de diagnóstico. La RM de cerebro/médula ayuda a excluir
las causas estructurales, la punción lumbar ayuda a excluir las inflamatorias y la neurofi-
siología puede detectar la denervación subclínica y excluyen la imitación de neuropatías
motoras14.
Pronóstico. Pobre, < 3 años después del inicio en la mitad de los pacientes.
Tratamiento. Adoptar un enfoque multidisciplinario: neurólogo, enfermera de paliati-
vos, residencia, fisioterapeuta, terapia ocupacional, logoterapéutica, dietista, servicios
sociales, todo orquestado por el médico de atención primaria. Riluzol, un inhibidor de la
liberación de glutamato y antagonista del receptor NMDA, es la única medicación que
ha demostrado mejorar la supervivencia. Otros muchos fármacos que han demostrado
en los modelos animales no han demostrado su utilidad en los ensayos clínicos, factores
neurotróficos, agentes antiapoptóticos, antioxidantes e inmunomoduladores. Tratamiento
de apoyo/sintomático: Exceso de saliva: Posicionamiento, cuidado bucal y succión. Prue-
be un antimuscarínico (p. ej., propantheline) o bromuro de glicopirronio (se puede admi-
nistrar SC). La toxina botulínica A puede ayudar. Disfagia: Mezcle los alimentos. La gas-
trostomía es una opción –discuta desde el principio. Espasticidad: Ejercicio, ortopedia. Ver
EM para medicamentos (p. 496). Dificultad de comunicación: Proporcionar equipos de
comunicación «aumentativos y alternativos». Cuidados al final de la vida: Involucre al
equipo de cuidados paliativos desde el diagnóstico (p. 532). Considere los opiáceos para
aliviar la disnea y valorar la ventilación no invasiva (ver RECUADRO «Dignidad y Dignitas»).
14 Si no hay signos de MNI y los músculos distales del brazo están afectados en la distribución de los
nervios individuales, sospeche neuropatía motora multifocal con bloqueo de conducción (diagnóstico
en estudios de conducción nerviosa R/ : Ig IV). Ginecomastia, testículos atróficos ± infertilidad sugiere
síndrome de Kennedy (atrofia muscular bulbospinal).
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 10_Oxford 07/05/18 16:13 Página 507
Neurología
tino; afecto pseudobulbar (PBA) –llanto no provocado por pena o risa incongruen-
te con el estado de ánimo (la incontinencia emocional sin cambios de humor tam-
bién se observa en la EM, la enfermedad de Wilson y enfermedad de Parkinson,
demencia, uso de óxido nitroso y traumatismo en la cabeza). En algunos países, el
dextrometorfano + quinidina tiene licencia para la PBA.
Criterios de diagnóstico de ELA revisados de El Escorial
Definitivo. Signos de la neurona motora inferior + superior en 3 regiones.
Probable. Signos de motoneurona inferior + superior en 2 regiones.
Probable con el apoyo del laboratorio. Signos de mononeurona inferior +
superior en ≥ 1 región + EMG muestra denervación aguda en ≥ 2 miembros.
Posibles. Síntomas de la neurona motora inferior + superior en 1 región.
Sospecha. Síntomas de la neurona motora superior o inferior solo en una o más
regiones.
Dignidad y Dignitas
La ELA está estrechamente relacionada con la demencia frontotemporal (DFT,
p. 486) por una creciente evidencia clínica, genética y molecular (expansiones de
repetición de nucleótidos en el gen C9orf72 han sido descritas en la ELA familiar y
esporádicamente en DFT). Sin embargo, los pacientes con EMN a menudo no tie-
nen deterioro cognitivo en las primeras etapas de la enfermedad, y atestiguan su
declinación física inefable con la conciencia aterrorizada. Por esta razón es imperati-
vo planificar para el futuro temprano: discutir sus deseos para la atención al final de
la vida y en la eventualidad de una disminución respiratoria antes de que sea dema-
siado tarde para que se comuniquen los deseos. Estas discusiones son cruciales pero
no vinculantes: el paciente puede cambiar de opinión en cualquier momento y tam-
bién rechazar cualquier tratamiento, conociendo que la consecuencia es la muerte.
Sin embargo, en la mayoría de los países y en el Reino Unido, no podemos atrave-
sar esa línea que se encuentra entre la gestión de una muerte sostenida tras la inte-
rrupción de intervenciones de prolongación de la vida (o prolongación de la muer-
te) y hacer intervenciones con la intención de causar la muerte. Las batallas legales
continúan, con solicitudes de suicidio asistido que pueden frustrar y desafiar la ética
de los especialistas en ética, de los médicos, los políticos y el poder judicial, pero,
sobre todo, los pacientes y sus familias. Frente a estas pasiones conflictivas, tal vez
nuestra función sea dejar claro que nuestro papel es estar junto a nuestros pacien-
tes, pase lo que pase.
Neurología
corazón
C8 (disco C7/T1) Debilidad en la parte de los flexores Dolor en el brazo y en el
de los dedos y pequeños músculos antebrazo medial
de la mano; adormecimiento dedos
meñique y anular
Síntomas preocupantes: Dolor nocturno, ↓ peso, fiebre.
* El giro pasivo de la cabeza puede exacerbar el dolor radicular C6 pero no el síndrome del túnel car-
piano (Maniobra de Spurling's).
Fig. 10.27. Una IRM ponderada en Fig. 10.28. Vértebra cervical. 1. Ganglio de la raíz dor-
T2 (∴ CSF parece brillante). El sal; 2. Raíz dorsal; 3. Dura mater; 4. Espacio subarac-
cable está comprimido entre los noideo; 5. Pia Mater; 6. Materia gris; 7. Nervio espinal.
osteofitos anteriores y ligamento 8. Rama ventral; 9. Arteria vertebral en el agujero trans-
flavum posterior. versal; 10. Materia blanca; 11. Nervio espinal ventral.
© Prof. P. Scally.
Porción de hernia
del disco cervical
que será extraída
Fig. 10.29. Laminectomía. Fig. 10.30. Laminoplastia (tornillo y placas).
Cedida por Dr. Carpenter. Cedida por Dr. Carpenter.
510 Miopatía
Trastorno primario del músculo con debilidad simétrica de inicio gradual; Puede ser con-
fundido clínicamente con neuropatía. A favor de la miopatía: • Inicio gradual de la debili-
dad proximal simétrica –dificultad para peinar el cabello y subir escaleras (Nota: la debi-
lidad es también distal en la distrofia miotónica). • Grupos musculares específicos afecta-
dos (es decir, debilidad selectiva en la primera presentación). • Reflejos tendinosos con-
servados. • No hay parestesias o problemas de la vejiga. • No hay fasciculación (sugiere
la enfermedad de las células del asta anterior o de la raíz).
El inicio rápido sugiere una miopatía tóxica, farmacológica o metabólica (o una neuro-
patía). El exceso de fatigabilidad («↑ debilidad con el ejercicio») sugiere miastenia (p. 512).
Espontáneo dolor en reposo y sensibilidad local ocurre en las miopatías inflamatorias.
Dolor al hacer ejercicio sugiere isquemia o miopatía metabólica (p. ej., la enfermedad de
McArdle). Los músculos extrañamente firmes (debido a infiltrados con grasa o tejido
Neurología
511
Neurología
Fig. 10.31. Escápulas aladas en distrofia muscular facioscapulohumeral, debido a la debilidad de
los músculos toracoscapulares.
Reproducido de Donaghy, Enfermedades del Cerebro del Sistema Nervioso,
12ª edición, con permiso de Oxford University Press.
Neurología
de la membrana postináptica (el potencial de la placa final). Este cambio en el esta-
do postsináptico de la membrana desencadena la contracción muscular en la
UNM, o la progresiva transmisión del potencial de acción en las neuronas. En la
miastenia gravis, los anticuerpos receptores ACh postsinápticos, evitan que el
potencial de la placa final sea lo suficientemente grande como para provocar la
contracción muscular y la debilidad muscular.
5. La acción del transmisor se termina por la degradación inducida por encima del
transmisor (p. ej., acetilcolinesterasa), la captación en el terminal presináptico o en
células de la glía, o por difusión lejos de la sinapsis. Tratamientos contra la coli-
nesterasa para la miastenia gravis, como la piridostigmina, reducen la tasa de
degradación de ACh, aumentando la posibilidad de que se dispare un potencial
en la placa final.
Nervio Canal
terminal de calcio
VGGC
Vesícula
de
acetilcolina
Anti-
cuerpos
Receptor
de
acetilcolina
Músculo
Fig. 10.32. La miastenia gravis presenta anticuer- Fig. 10.33. El síndrome de Lambert-Eaton
pos postsinápticos AChR. Los reflejos tendinosos presenta anticuerpos presinápticos del
son normales porque las sinapsis no tienen tiem- canal de Ca2+. Los reflejos tendinosos dis-
po para fatigarse con una contracción muscular minuidos son comunes, porque se libera
tan breve. Las parálisis oculares son comunes (no menos transmisor, pero los reflejos pue-
está exactamente claro el por qué). den ↑ después de la contracción volunta-
ria máxima debido a una construcción de
transmisor en la fisura sináptica (potencia-
ción postetánica).
514 Neurofibromatosis
Neurofibromatosis tipo 1 (NF1, enfermedad de von Recklinghausen)
Herencia autosómica dominante (locus del gen 17q11.2). La expresión de NF1 es varia-
ble, incluso dentro de una familia. Prevalencia: 1 en 2500, :≈1:1; no predilección racial.
Síntomas: Manchas de café con leche: Manchas planas de color café en el primer año de
vida (más clara en la luz UV), aumentando en tamaño y número con la edad. Los adul-
tos tienen ≥ 6, > 15 mm de diámetro. No predisponen al cáncer de piel. Pecas: típica-
mente en pliegues cutáneos (axila, ingle, base del cuello y área submamaria), y usual-
mente presente a la edad de 10 años. Neurofibromas
dérmicos: pequeños nódulos violáceos, gelatinosos en la
textura, que aparecen en la pubertad, y pueden volver-
se papilomatosos. No son dolorosos, pero pueden picar.
Aumentan en número con la edad. Los neurofibromas
Neurología
Neurología
NF2:
El diagnóstico se realiza si se encuentra cualquiera de los siguientes:
1. Schwannomas vestibulares bilaterales observados en la RM o TC.
2. Pariente de primer grado con NF2, y bien:
a) Schwannoma vestibular unilateral; o
b) Uno de los siguientes:
• Neurofibroma.
• Meningioma.
• Glioma.
• Schwannoma.
• Catarata juvenil (tipo NF2).
Diagnóstico diferencial: NF1, schwannomatosis.
Causas de manchas de café con leche: Normal (p. ej., hasta 5); NF1 (densidad de
↑melanocitos vs manchas «normales» de café con leche); NF2; síndromes raros:
Gaucher; McCune-Albright; Russel-Silver; esclerosis tuberosa; Wiskott-Aldrich.
516 Siringomielia
Un siringe o siringx es una cavidad tubular en o cerca del canal central de la médula cer-
vical. La edad media de inicio: 30 años. Incidencia: 8/100.000/año. Los síntomas pueden
estar estáticos durante años, pero agravarse rápidamente –p. ej., al toser o estornudar, ya
que la ↑ presión provoca la extensión, ejemplo. En el tronco encefálico (siringobulbia,
véase más adelante en el tema).
Causas. Normalmente, la circulación bloqueada del LCR (sin la cuarta comunicación
ventricular), con el ↓ flujo de la fosa posterior basal al espacio caudal, p. ej., la malforma-
ción de Arnold-Chiari (hernia del cerebelo a través del foramen magnum); aracnoiditis
basal (después de infección, irradiación, hemorragia subaracnoidea); invaginación basilar
(en la que la parte superior del proceso odontoideo de C2 emigra hacia arriba, causan-
do estenosis del foramen magno ± compresión del bulbo raquídeo); masas (quistes, pan-
nus reumatoide, encefalocele, tumores). Menos común, una siringe puede desarrollarse
Neurología
Neurología
el recuento de CD4 sea > 200. Pneumocystis profilaxis también protege contra la toxo-
plasmosis. • Cryptococcus neoformans (fig. 10.36) causa una meningitis crónica con fiebre
y cefalea (la rigidez del cuello puede estar ausente). La cognición se ve alterada lenta-
mente, puden aparecer convulsiones y coma. Tratar con anfotericina B seguida de fluco-
nazol. • El citomegalovirus (CMV) puede causar encefalopatía. • La leucoencefalopatía mul-
tifocal progresiva (LMP) es causada por el virus JC. Hay inflación progresiva de la materia
blanca. La mortalidad incluso con terapia antirretroviral es alrededor del 50% en 1 año.
• La sífilis y la tuberculosis también pueden causar meningitis.
Los tumores: Que afectan al SNC incluyen linfoma cerebral primario (asociado con VEB) y
linfoma de células B. La PCR del virus JC en LCR es útil para distinguir la LMP del linfoma.
Neuropatías: Comunes en el VIH y pueden ser el resultado de la enfermedad en sí o de
terapia de los antirretrovirales. Hasta el 30% de los pacientes tienen una neuropatía peri-
férica, que es dolorosa y predominantemente sensorial. Otros cuadros clínicos incluyen
polirradiculopatía, mononeuritis múltiple y miopatía proximal.
Trastorno neurocognitivo crónico asociado al VIH (HAND): Si bien la terapia antirretroviral
(ART) ha disminuido la incidencia de complicaciones del SNC en el VIH/sida, las perso-
nas suelen estar viviendo durante más tiempo con la enfermedad y durante esta aumen-
tan las complicaciones crónicas, como la demencia asociada al VIH. Esto ocurre en el 7-
15% cuando la enfermedad está más avanzada y generalmente cuando el recuento de
CD4 es < 200. Se observan cambios de comportamiento progresivos junto con datos
de la zona subcortical: pérdida de memoria, poca atención y bradicinesia. También pue-
den contribuir a esto varias encefalopatías, p. ej., LMP.
Virus linfotrópico de células T humanas (HTLV-1). Es otro retrovirus con mani-
festaciones neurológicas, aunque mucho más raro que el VIH (~0,5%). Causa: Paraplejía
espástica tropical: Una mielopatía de progresión lenta, típicamente afectando la zona del
tórax. Puede haber parestesias, pérdida sensorial y trastornos de la micción. Polineuropa-
tía desmielinizante y ataxia también pueden ocurrir.
Fig. 10.36. Criptococosis: (a) Meningitis crónica con leptomeningitis basal con múltiples y peque-
ños quistes intraparenquimatosos observados en la corteza cerebral. (b) Bajo el microscopio
vemos estos quistes como dilatación del espacio perivascular para formar cavidades llenas de colo-
nias de criptococos, que aparecen como estructuras basófilas redondas.
Reproducción de Gray et al., Escourelle y Poirier's Manual of Neuropathology Basic, 2013,
con el permiso de Oxford University Press.
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 11_Oxford 07/05/18 16:07 Página 518
Agradecemos al Profesor Max Watson, nuestro médico especialista adjunto, por su contribución en
este capítulo.
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CAP. 11_Oxford 07/05/18 16:07 Página 519
necesitan ser capaces de adaptarse y cambiar de manera que puedan formarse diferentes teji-
dos y órganos. Necesitan ordenar su propio aporte sanguíneo. Sin unos exhaustivos mecanis-
mos para controlar el crecimiento celular y para prevenir la replicación de células anormales,
estos requerimientos de la vida constituyen la base para el desarrollo de un cáncer. Un fallo en
los mecanismos de control produce cáncer.
El cáncer es una enfermedad genética. Ocurren cambios genéticos en las vías asociadas con
el crecimiento, la diferenciación y la muerte celulares. Las mutaciones pueden heredarse o
adquirirse. Los errores adquiridos o somáticos ocurren debido a la edad, la exposición a car-
cinógenos y en un recambio celular rápido descontrolado. Las mutaciones producen como
consecuencia:
• Oncogenes con «aumento de función» que tienen actividad patológica en ausencia de una
señal relevante. Por ejemplo, ras es una proteína relacionada con señales de transducción.
Está mutada en el ~30% de los cánceres humanos. Los oncogenes se comportan de una
manera dominante: las mutaciones de un alelo producen una activación descontrolada.
• Genes supresores de tumor con «pérdida de función» dejan de actuar como inhibidores de
procesos promalignos. En la mayoría de los casos, deben ocurrir mutaciones en ambos alelos
para que se produzca un fenotipo de cáncer. Esto puede ocurrir, bien como dos eventos
somáticos separados, o en el caso de genes de predisposición, el primer «golpe» es hereda-
do y el segundo ocurre somáticamente. Por tanto, los tumores ocurren antes y con mayor
frecuencia en cánceres familiares. p. 53 es un supresor mutado en ~50% de los cánceres
humanos.
La mayoría de los cánceres surgen de múltiples mutaciones. Esto está quizás mejor represen-
tado en una acumulación progresiva de mutaciones en el cáncer colorrectal (fig. 11.2). La com-
prensión de la biología molecular del cáncer facilita el desarrollo de fármacos (fig. 11.3).
Fig. 11.2. Mutaciones celulares y genes que contribuyen en el desarrollo del cáncer colorrectal.
Inhibidores de la
Inhibidores EGFR quinasa dependiente
de la ciclina
Resistencia Permitir
Miméticos BH3 Inhibidores
a la inmortalidad
proapoptóticos telomerasa
muerte replicativa
celular
Inflamación promotora
Inestabilidad y mutación de tumores
del genoma
Fármacos
Inhibidores PPRP Inducir Activación invasión antiinflamatorios
angiogénesis y metástasis selectivos
Inhibidores de Inhibidor
señalización VEGF de HGF/c-Met
Pueden utilizarse otros prefijos: c se refiere a estadio clínico; p es el estadio tras el estudio pato-
lógico; y se refiere al estadio tras la terapia administrada antes de la cirugía; r es utilizado si un
tumor es vuelto a estadificar tras un intervalo libre de enfermedad; a indica la estadificación tras
la autopsia.
La estadificación TNM puede convertirse a un sistema de estadificación del cáncer general
menos detallado: 0-IV. El estadio 0 se refiere al carcinoma in situ; Estadios I-III describe el tama-
ño del cáncer y/o diseminación próxima; Estadio IV indica enfermedad metastásica.
Algunos cánceres pueden tener un sistema específico de estadificación, tal como la clasifica-
ción de Duke del cáncer colorrectal (p. 616). Ver también el cáncer de pulmón (p. 176); cán-
cer de mama (p. 602); cáncer esofágico (p. 618); cáncer de vejiga (p. 647).
cáncer. El objetivo es administrar suficiente fármaco citotóxico a una diana de las células cancerosas
que es expresada de forma diferencial en comparación con el tejido normal. Los fármacos citotó-
xicos son administrados a intervalos (ciclos de tratamiento) para permitir la recuperación del teji-
do normal. La quimioterapia es el único tratamiento sistémico del cáncer (la cirugía y la radiotera-
pia son tratamientos locales). Esto es importante, dado que la mayoría de los cánceres son consi-
derados como enfermedades sistémicas bien debido a las metástasis o al potencial de metastatizar
en el futuro. 䊳 La quimioterapia debería ser prescrita y administrada solo bajo la orientación experta y
por personas entrenadas en su uso. Incluye:
• Agente único: Raramente es curativa, dado que se produce selección de células genéticamente
resistentes.
• Quimioterapia combinada: Una combinación de fármacos con diferente mecanismo de acción y
diferente perfil de efectos adversos reduce la probabilidad de resistencia y toxicidad. Los fárma-
cos utilizados debería ser:
• Actividad citotóxica para el tumor, preferentemente capaz de inducir remisión.
• Diferentes mecanismos de acción, idealmente con efectos aditivos o sinérgicos.
• Toxicidad no superpuesta para maximizar el beneficio de dosis terapéutica completa.
• Diferentes mecanismos de resistencia.
• Adyuvante: Después de otro tratamiento inicial para reducir el riesgo de recidiva, p. ej., siguiendo
resección quirúrgica de, p. ej., cáncer de mama e intestino.
• Neoadyuvante: Utilizado para disminuir los tumores antes del tratamiento quirúrgico o radioterá-
pico. Puede permitir que el tratamiento posterior sea más conservador.
• Paliativo: Sin objetivo curativo, ofrece mejoría de síntomas, puede prolongar la supervivencia.
Clases de fármacos citotóxicos
• Agentes alquilantes: Fármacos antiproliferativos que se unen mediante grupos alquilo al ADN y
producen la muerte celular apoptótica, p. ej., ciclofosfamida, clorambucilo, busulfán.
• Inhibidores de la angiogénesis: P. ej., bevacizumab, aflibercept, sunitinib.
• Antimetabolitos: Interfieren con el metabolismo celular incluyendo ADN y síntesis de proteína, p.
ej., metotrexato, 5-fluouracilo.
• Antiestrógenos: Inhibidores de la aromatasa (p. ej., letrozole, anastrozole), antagonistas de los
receptores de estrógenos (p.ej., tamoxifeno, raloxifeno) utilizados en el tratamiento del cáncer de
mama.
• Antibióticos antitumorales: Interrumpen la función del ADN, p. ej., dactinomicina, doxorubicina,
mitomicina, bleomicina.
• Anticuerpos monoclonales: Anticuerpos contra un antígeno tumoral específico pueden enlentecer
el crecimiento tumoral incrementando la inmunidad del huésped, o ser conjugados con quimio-
terapia/isótopos radiactivos para permitir tratamiento dirigido a una diana concreta. Espere más
de esto en el futuro.
• Inhibidores de la topoisomerasa: Interrumpen la regulación de la curvadura del ADN, p. ej., etopósido.
• Alcaloides de la vinca y taxanos: «Venenos del huso» que tienen como diana el mecanismo de la
división celular, p. ej., vincristina, viblastina, docetaxel.
Efectos adversos
Debidos a efectos citotóxicos en células no cancerosas. El mayor efecto se ve en células en división,
p. ej., intestino, pelo, médula ósea, gametos (ver RECUADRO «Fertilidad y cáncer», p. 525).
• Vómito: Se da profilaxis en la mayoría de los regímenes de citotóxicos (ver p. 251).
• Alopecia: Puede impactar profundamente en la calidad de vida. Considerar gorros refrigerantes,
servicio de pelucas.
• Neutropenia: Vista con mayor frecuencia 7-14 días tras la quimioterapia. 䊳䊳 La sepsis neutropéni-
ca es muy grave y necesita evaluación y tratamiento empírico urgente (p. 352).
Extravasación de quimioterapia
Extravasación8 = infiltración inadvertida de un fármaco en el tejido subcutáneo/sub-
dérmico. Presentación: Hormigueo, quemazón, dolor, enrojecimiento, edema, no con-
firmación de reflujo de sangre/resistencia desde la cánula. Tratamiento: Interrumpa y
desconecte la infusión. Aspire cualquier fármaco residual antes de retirar la cánula.
Siga políticas locales (pregunte por la «caja de extravasación»). Siga cualquier reco-
mendación específica para el fármaco. Para los fármacos que se unen al ADN (antra-
ciclinas, agentes alquilantes, antibióticos antitumorales), utilice una compresa fría seca
para vasoconstricción y ↓ propagación del fármaco. Para fármacos que no se unen
al ADN (alcaloides de la vinca, taxanos, sales de platino), utilizar una compresa seca
caliente para vasodilatar y ↑ propagación del fármaco.
Cirugía 525
• Prevención: Cirugía para reducir el riesgo, p. ej., tiroidectomía en NEM (p. 223),
colectomía en PAF (p. 521).
• Cribado: Endoscopia, colposcopia.
• Diagnóstico y estadificación: Aspiración con aguja fina, biopsia con aguja gruesa,
Ensayos clínicos
• Ventajas: Posibilidad de un tratamiento más efectivo que el actualmente disponi-
ble, vigilancia estrecha con acceso directo al equipo de investigación, tranquilidad
por un número aumentado de consultas, ganancia por altruismo.
• Desventajas: Posibilidad de recibir terapia que no es mejor o peor que la estándar,
toxicidad desconocida de los nuevos fármacos, consume tiempo, ansiedad por el
aumento en el número de visitas médicas.
Usted puede cuidar de pacientes que están participando en ensayos clínicos. En
muchos de ellos, no estará familiarizado con la terapia del ensayo e incluso puede
no saber qué terapia está recibiendo el paciente: una terapia nueva, una terapia vieja,
o placebo. 䊳 Contacte con el equipo de investigación para discutir cualquier preo-
cupación clínica o cambio en el tratamiento. Los datos de contacto deben estar en
la historia clínica del paciente. Mire en las notas, o pregunte al paciente si tiene una
copia de la «Hoja de Información al Participante» que es obligatoria en todos los
estudios de investigación que se realizan en RU.
Información sobre ensayos clínicos relevantes para sus pacientes disponible en:
• Cancer Research RU (www.cancerresearchuk.org/about-cancer/find-a-clinica-trial)
• UK Clinical Trials gateway (www.ukctg.nihr.ac.uk)
Fertilidad y cáncer
La quimioterapia y la radioterapia pueden:
• Dañar las espermatogonias empeorando la espermatogénesis o esterilidad mas-
culina.
• Acelerar la depleción de oocitos, lo que conduce a fallo ovárico prematuro.
Si el tratamiento del cáncer conlleva un riesgo de infertilidad, deben discutirse téc-
nicas de preservación de la fertilidad9 antes de iniciar el tratamiento.
• Hombres: Debe ordenarse criopreservación del semen antes de iniciar el trata-
miento debido al riesgo de producir daño genético en el esperma tras la inicia-
ción de la quimioterapia. La inyección intracitoplásmica de esperma quiere decir
que hasta una pequeña cantidad de esperma preservado en un banco de semen
puede ser utilizado exitosamente en el futuro.
• Mujeres: Criopreservación de:
1. Embriones.
2. Oocitos: Si objeciones éticas a la preservación del embrión o no hay pareja.
3. Tejido ovárico: No se requiere estimulación ovárica, técnica experimental.
La transposición de ovarios (ooforopexia) puede ser posible antes de la radiotera-
pia pélvica pero no se puede garantizar protección debido a la radiación dispersa.
Líneas de Beau
Las líneas de Beau (fig. 11.4) son depresiones horizon-
tales en la uña que corren paralelas a la porción en
forma de luna del lámina ungueal. Son el resultado de
una interrupción brusca de la síntesis de queratina y
pueden ser debidas a trauma/infección local, enferme-
dad sistémica o a medicación (p. 76). Cada línea en esta
foto coincidió con un ciclo de quimioterapia para cán-
cer de mama.
objetivo del tratamiento con radioterapia es inactivar las células cancerosas sin producir
reacción grave en el tejido normal.
Tratamiento radical. Dado con intención de curar. La dosis total está en el rango de
40-70 gray (Gy) en hasta 40 fracciones. Algunos regímenes conllevan varias pequeñas
fracciones cada día con intervalos de 6-8 horas. La quimiorradiación combinada es utili-
zada en algunas localizaciones, p. ej., ano y esófago, para aumentar la tasa de respuesta.
Radioterapia paliativa. El objetivo es aliviar los síntomas, pero sin impactar en la
supervivencia. Las dosis son menores y dadas en menos fracciones para ofrecer control
tumoral en corto plazo con mínimos efectos secundarios. La paliación es utilizada en
metástasis cerebrales, compresión de la médula espinal, compresión vicesal y sangrado,
p. ej., hemoptisis, hematuria. El dolor óseo por metástasis puede ser reducido o elimina-
do en el 60% de los casos.
Reacciones precoces
Ocurren ~2 semanas de tratamiento, con pico a ~2-4 semanas tras el tratamiento.
• Cansancio: ~80%. Mejora ~4 semanas después de haber completado el tratamiento,
pero se hace crónico en ~30%. Aconseje a los pacientes que se mantengan tan acti-
vos como sea posible.
• Reacciones cutáneas: Incluyen eritema, descamación seca, descamación húmeda y ulce-
ración. Puede utilizarse crema acuosa en las áreas con piel íntegra.
• Mucositis: Todos los pacientes que reciban tratamiento en cabeza y cuello deben tener
un control dental antes de la terapia. Evitar fumar. Los colutorios antisépticos pueden
ayudar. Pueden probarse los gargarismos y otros analgésicos solubles. Pruebe cepilla-
do oral con fluconazol 50 mg/24 h VO, nistatina puede exacerbar las náuseas.
• Náuseas y vómitos: Ocurren cuando se tratan el estómago, el hígado o el cerebro.
Pruebe la metroclopramida 10 mg/8 h VO (antagonista de la dopamina), domperido-
na 10 mg/8 h VO (bloqueo de la zona gatillo del quimiorreceptor central) u ondanse-
trón 4-8 mg/8 h VO/IV (antagonista de 5HT3 serotonina).
• Diarrea: Habitualmente tras tratamientos abdominales o pélvicos. Mantener buena
hidratación. Evitar agentes ricos en fibra. Trate con loperamida 2 mg VO tras deposi-
ción blanda (máx 16 mg/24 h).
• Disfagia: Tras tratamientos torácicos. Logopedia, nutrición.
• Cistitis: Tras tratamientos pélvicos. Beba abundantes líquidos.
Reacciones tardías:
Meses-años tras el tratamiento.
• SNC/SNP: Somnolencia: 4-6 semanas tras la radioterapia cerebral. Considerar ↑ dosis
de esteroides. Mielopatía de la médula espinal: debilidad progresiva. RM para excluir
compresión medular. Plexopatía braquial: adormecimiento, debilidad o brazo doloroso
tras radioterapia axilar.
• Pulmón: Puede ocurrir neumonitis 6-12 semanas tras el tratamiento torácico produ-
ciendo tos seca ± disnea. Los broncodilatadores y dosis decreciente de esteroides
pueden ayudar.
• GI: Xerostomía = saliva disminuida. Son importantes el cuidado dental y la nutrición.
Tratar con agua, sustitutos de saliva, estimulantes de la salivación. Estenosis benignas del
esófago o intestino.Tratar con dilatación. Buscar opinión de especialista quirúrgico con res-
pecto a las fístulas. La proctitis puede ser un problema tras la irradiación de la próstata.
• GU: Frecuencia urinaria: vejiga pequeña y fibrosa tras el tratamiento pélvico. Tras la
radioterapia pélvica pueden ocurrir estenosis vaginal, dispareunia, disfunción eréctil.
↓ Fertilidad: debido a radioterapia pélvica (ver p. 525).
• Endocrino: Panhipopituitarismo tras tratamiento radical que afecte a la fosa pituitaria.
Controle el perfil hormonal en niños: puede ser necesaria la sustitución de la hormo-
na del crecimiento. Hipotiroidismo en ~50% tras el tratamiento del cuello: controles
PFT anualmente.
• Cánceres secundarios: Riesgo (2-4 por 10.000 personas-año) es habitualmente insigni-
ficante comparado con la recurrencia/muerte como causa de la lesión primaria. Más
importante para pacientes jóvenes tra tratamiento curativo. A las mujeres < 35 años
que reciben radioterapia para linfoma de Hodgkin debería ofrecérseles cribado para
el cáncer de mama a partir del 8º año de tratamiento.
䊳 ↑ Supervivencia por el cáncer significa ↑ número de personas que viven con proble-
mas de salud y discapacidad tras el tratamiento (~625.000 en RU). Recuerde que el
impacto emocional y físico del cáncer se extiende más allá del curso prescrito de radio-
terapia/quimioterapia.
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CAP. 11_Oxford 07/05/18 16:07 Página 527
Oncología intervencionista
La oncología intervencionista (OI) hace referencia a los procedimientos de radiolo-
gía intervencionista utilizada en el tratamiento o paliación de pacientes con cáncer.
La OI puede ser dividida en procedimientos modificadores de la enfermedad o sin-
tomáticos.
OI modificadores de la enfermedad:
Dirigidos a modificar la progresión del cáncer y/o para mejorar el pronóstico. Incluye:
• Ablación guiada por imagen, p. ej., ablación por radiofrecuencia, crioablación, elec-
troporación irreversible.
• Embolización, p. ej., embolización transarterial, quimoembolización, terapia de
radiación interna selectiva.
• Braquiterapia guiada por imagen.
• Quimioterapia de perfusión aislada: utiliza técnicas de oclusión para proteger el
tejido normal de altas dosis de quimioterapia.
OI sintomática:
Procura alivio de los síntomas relacionados con el cáncer, pero no modifica el curso
de la enfermedad. Las técnicas (tabla 11.2) pueden ofrecer mejoría significativa de la
calidad de vida, reduce los ingresos y disminuye la necesidad de ingresos hospitalarios.
Tabla 11.2. Técnicas intervencionistas disponibles para el control de los síntomas
del cáncer.
Problema clínico Opción de tratamiento intervencionista
Ascitis Drenaje de ascitis temporal/permanente guiado
por imagen
Derrame pleural Drenaje pleural temporal/permanente guiado
por imagen
Obstrucción de vena Endoprótesis de vena cava superior
cava superior (p. 528)
Obstrucción intestinal Endoprótesis de esófago
Obstrucción intestino Endoprótesis de colon
grueso
Hemorragia relacionada Embolización transarterial
con el tumor
Ictericia Drenaje biliar y endoprótesis
Obstrucción del Nefrostomía, endoprótesis de uréter
tracto renal
Metástasis óseas Ablación guiada por imagen
䊳 Hable con el radiólogo intervencionista.
pacientes que presentan malestar y dentro de las 6 semanas de haber recibido quimio-
terapia. Pueden no tener signos de localización. Examinar sitios de implantación de caté-
teres. 䊳䊳 El tratamiento inmediato salva vidas. Utilizar las guías locales o tratar empírica-
mente con piperacilina/tazobactam (ver p. 352).
Compresión de la médula espinal
El 3-5% de los pacientes con cáncer tienen metástasis espinal. El ~15% de los pacientes
con cáncer avanzado desarrollan compresión metastásica de la médula espinal. Se asocia
con mayor frecuencia con cáncer de pulmón, próstata, mama, mieloma y melanoma.
䊳䊳 Se requiere tratamiento urgente para preservar la función neurológica y aliviar el
dolor.
Causas: Colapso o compresión de un cuerpo vertebral debido a metástasis (común),
extensión directa de un tumor en la columna vertebral (rara).
Signos y síntomas: Dolor en la espalda en ~95%. Pregunte sobre el dolor nocturno y
dolor con el esfuerzo. Preocúpese si hay dolor torácico/cervical. También debilidad en los
miembros, dificultad en la marcha, pérdida de sensibilidad, disfunción de intestino/vejiga.
Mantener un alto índice de sospecha.
Tratamiento: Ingrese para reposo en cama y organice una RM urgente (en 24 h) de toda
la columna. Dar dexametasona 16 mg/24 h VO con gastroprotección profiláctica, p. ej.,
IBP, y vigilancia de la glucemia. Si movilidad reducida, considerar tromboprofilaxis (medias
de compresión, HBPM). Referir urgentemente para EMD de clínica de oncología/cáncer.
La radioterapia es el tratamiento más común y debería administrarse en 24 horas del
diagnóstico de RM. Puede ser apropiado realizar cirugía ± radioterapia descompresiva
dependiendo del pronóstico. Los pacientes con pérdida de función tras > 48 h tienen
poca probabilidad de recobrar la función. (Ver también p. 466).
Síndrome de vena cava superior (VCS)
Reducción del retorno venoso desde la cabeza, cuello y miembros superiores. Debido a
compresión extrínseca (más común) o trombosis venosa (considerar si acceso venoso
central actual o pasado). 䊳䊳 El síndrome de VCS con compromiso de la vía aérea requie-
re tratamiento urgente.
Causas: > 90% de los síndromes de VCS se deben a malignidad. Los cánceres más comu-
nes: pulmón (~75%), linfoma, metastásico (p. ej., mama), timoma, célula germinal.
Signos y síntomas: El diagnóstico se hace clínicamente. Disnea, ortopnea, estridor, pléto-
ra/cianosis, edema en la cara y el brazo, tos, cefalea, ingurgitación de las venas del cuello
(↑ PVY no pulsátil), ingurgitación de las venas de la pared torácica. Test de Pemberton1:
elevación de los brazos a los lados de la cara produce plétora/cianosis facial.
Tratamiento: Apoyo. Evaluar para hipoxia (oximetría del pulso, gases sanguíneos) y aporte
de oxígeno si necesario. Dexametasona 16 mg/24 h. La TC es utilizada para definir la ana-
tomía de la obstrucción. La venoplastia con balón y endoprótesis de la VCS produce el ali-
vio más rápido de los síntomas (ver RECUADRO «Oncología intervencionista», p. 527). Tratar
con radioterapia o quimioterapia dependiendo de la sensibilidad del cáncer subyacente.
Hipercalcemia asociada con malignidad
Las anormalidades metabólicas más comunes en los pacientes con cáncer: ~10-20% de
los pacientes con cáncer, ~40% de mieloma. Es un signo de mal pronóstico: 75% de mor-
talidad a los 3 meses. El calcio está muy unido a las proteínas y necesita corrección por
la concentración plasmática de albúmina. Los niveles de PTH deberían suprimirse (ver
p. 676-7).
Causas: Proteína relacionada con la PTH producida por el tumor (ver p. 529), osteólisis
local, p. ej., mieloma, calcitriol producido por el tumor.
Signos y síntomas: Pérdida de peso, anorexia, náuseas, polidipsia, poliuria, estreñimiento,
dolor abdominal, deshidratación, debilidad, confusión, convulsión, coma.
Tratamiento: Rehidratación agresiva. Bisfosfonatos (si eTFG 30), p. ej., ácido zoledronico
IV, habitualmente normaliza el calcio en 3 días y puede darse como una infusión repeti-
da. La calcitonina produce un efecto más rápido (2 h) pero de corto plazo, al mismo
tiempo que puede desarrollarse tolerancia. El tratamiento a largo plazo es mediante el
control de la malignidad subyacente.
1 Pemberton describió este «útil» signo de obstrucción venosa debida a un bocio en 1946.
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CAP. 11_Oxford 07/05/18 16:07 Página 529
Metástasis cerebrales
Afectan ~40% de los pacientes con cáncer. Más frecuentemente: pulmón, mama, colo- 529
rrectal, melanoma. Mal pronóstico: supervivencia media 1-2 meses; mejor pronóstico con
lesión única, cáncer de mama (ver también p. 830).
Signos y síntomas: Cefalea (~50%, con frecuencia peor por la mañana, al toser o al incli-
Síndromes paraneoplásicos
Los síndromes paraneoplásicos (tabla 11.3) consisten en síntomas atribuibles a una
malignidad, que son mediados por hormonas, citoquinas o reacciones cruzadas de
anticuerpos tumorales. No se correlacionan con el estadio/pronóstico y pueden
preceder a los síntomas del cáncer.
Tabla 11.3. Ejemplos de síndromes paraneoplásicos
Síndrome
Comentario Tumor Ver
paraneoplásico
Hipercalcemia Proteína relacionada con la Pulmón, esófago, piel, p. 528
hormona paratiroidea secretada cérvix, mama, riñón
por el tumor
SIADH Secreción excesiva de hormona Pulmón, páncreas, linfomas, p. 673
antidiurética (ADH) que produce próstata
↓Na+
Síndrome El tumor secreta ACTH o CRF Pulmón, páncreas, timo, p. 224
de Cushing haciendo que la médula adrenal carcinoide
secrete niveles altos de corticoides
Neuropatía Degeneración neuronal mediada Pulmón, mama, mieloma, p. 504
por anticuerpos: periférica, Hodgkin, GI
autonómica, cerebelosa
Síndrome Anticuerpos contra canales iónicos Mayormente pulmón. p. 512
miasténico activados por voltaje en la membrana También GI, mama, timo
de Lambert- presináptica producen debilidad
Eaton (más frecuente en zona proximal
de miembros inferiores)
Dermatomiositis Inflamación de los músculos ± Pulmón, mama, ovario, GI p. 552
y polimiositis erupción heliotrópica
Acantosis Piel hiperpigmentada, aterciopelada GI p. 562
nigricans (habitualmente en zonas de flexión)
Pénfigo Ampollas en la piel/membranas Linfoma, timo, sarcoma
mucosas de Kaposi
Osteoartropatía Formación ósea perióstica, artritis
hipertrófica y acropaquias Pulmón
Signo de Trousseau
Trousseau (fig. 11.5) fue, probablemente, el primero en
descubrir un síndrome paraneoplásico. Observó que
muchos pacientes con tromboflebitis migratoria («signo
de Trousseau») desarrollaban cáncer gástrico. Desafor-
tunadamente, él mismo desarrolló una tromboflebitis
migratoria y predijo correctamente su propia muerte
por malignidad GI.
Fig. 11.5. Armand Trousseau 1801-1867.
Wellcome Library, London. Armand Trousseau. Lithograph by JBA Lafosse, 1866, after P. Petit.
Antígeno Colorrectal Monitorización adenocarcinomas Mama; gástrico; pulmón; mesotelioma; Tabaco; hepatopatía crónica; enfermedad
carcinoembrionario (CEA) esofágico; pancreático renal crónica; diverticulitis; ictericia
Gonadotropina coriónica Célula germinal/testicular, Diagnóstico, pronóstico, monitorización Pulmón Embarazo
humana (hcG) trofoblástico gestacional de tumores de células germinales
Paraproteínas Mieloma Diagnóstico, monitorización del Ninguno conocido Ninguna conocida
tratamiento, detección de recurrencias
Tiroglobulina Tiroides (folicular/papilar) Monitorización del tratamiento, Ninguno conocido Ninguna conocida
detección de recurrencias
Fuente de los datos «Marcadores tumorales en suero: Cómo pedirlos e interpretarlos.» Sturgeon CM, Lai LC, Duffy MJ, 2012, BMJ Publishing Ltd.
Opioides 533
La cantidad de opioide requerida para aliviar el dolor varía y debería ser titulada indi-
vidualmente. La morfina oral es la primera línea. Si la vía oral no está disponible, uti-
lizar morfina o diamorfina SC (ver tabla 11.5, y tablas 11.6, 11.7, p. 536). La explica-
ción y la revisión regular son importantes. Prescriba antieméticos y laxantes para
Insomnnio
Causas: Los pacientes con enfermedad terminal pueden experimentar agotamiento físi- 535
co y emocional. La falta de sueño puede aumentar la sintomatología.
Tratamiento: Medidas simples pueden hacer una gran diferencia: temperatura de la habi-
tación apropiada, oscuridad y silencio durante la noche (pida una habitación aislada para
Dolor espiritual
«Los aspectos espirituales de una enfermedad afectan a las experiencias humanas de
la dolencia (o «mal-estar») y de la búsqueda del significado de la misma»
Peter W Speck
La espiritualidad es una forma de vivir la experiencia de la vida. Se relaciona con la
forma en la que los individuos comprenden y viven su vida. Comprende elementos
que incluyen significado, propósito y algo superior al «yo». Es distinto a la fe, que es
una experiencia religiosa, que puede formar parte o no de la espiritualidad. El dolor
o sufrimiento espiritual20,21 es frecuente cuando la gente se enfrenta a la muerte.
Puede incluir sensaciones de desesperanza, culpa, aislamiento, falta de significado y
confusión. Considere:
• El pasado: recuerdos dolorosos, culpa.
• El presente: aislamiento, rabia.
• El futuro: miedo, desesperanza.
Los recuerdos ayudan a afrontar el pasado, aportan contexto y ofrecen reconoci-
miento al paciente como un individuo. Debe reconocerse la rabia. El miedo al futu-
ro imaginado puede no cambiar, pero puede ser potencialmente reducido median-
te el debate. Puede ser necesario modificar la naturaleza de la esperanza. Si es
inapropiado tener esperanza de una cura, esta no debería ser la esperanza principal
o la única. Las esperanzas realistas incluyen el alta hospitalaria, ver a los familiares feli-
ces, ser recordado. Hacer testamento, pasar responsabilidades y tratar negocios no
finalizados puede facilitar una sensación de estar en control y permitir un sentido de
finalización de una tarea.
䊳 Recuerde la persona en completo: historia, mecanismos de adaptación, estado de
bienestar. Elementos como estos pueden alterar la forma en la que la enfermedad
afecta al paciente y cómo el paciente responde a la enfermedad.
䊳 El compañerismo es esencial en el apoyo espiritual. A veces, el médico necesita
modificar su papel para simplemente acompañar al paciente moribundo. Esto es
manejable dentro de los límites profesionales establecidos y terapéuticamente. Si no
puede hacer esto, encuentre a alguien que pueda: equipos de cuidados paliativos,
enfermeras especializadas voluntarias y capellanes (capaces de escuchar a pacientes
de todas las fes y de ninguna) son recursos muy valiosos.
䊳 El dolor espiritual es exacerbado por síntomas físicos. Estos deben atajarse si se
quiere que el apoyo espiritual sea efectivo.
medad (ver «Diagnóstico de la agonía», p. 12), los cuidados deben ir dirigidos a aliviar los
penosos síntomas22.
䊳 Debe hacerse un plan de cuidados individualizado y discutido con su paciente, su fami-
lia y personal médico relevante.
Continúe tratando los problemas reversibles según sea apropiado (p. ej., retención uri-
naria). Interrumpa las tomas de constantes y las pruebas de sangre (a no ser que vaya a
hacer algo con la información que obtenga). Racionalice la medicación, pero mantenga
las que aporten beneficio a los síntomas actuales.
Prescriba fármacos subcutáneos para el fin de la vida según sea necesario: Prescriba medi-
cación subcutánea a discreción antes de que sea necesario, cuando aparezcan síntomas
de anticipación (ver tabla 11.6).
Ponga un inyector (dosificador) subcutáneo automático: Cuando los fármacos para controlar
los síntomas son necesarios de forma regular (ver tabla 11.7). La práctica es variable, pero
algunos fármacos pueden ser utilizados en indicaciones no autorizadas. Utilice siempre pri-
mero las guías locales. Si el alivio del dolor es insuficiente, revise las dosis regulares y recal-
cule los requerimientos de administración a discreción (1/10-1/6 de la dosis de 24 h).
Medicación en anticipación de la agonía
Tabla 11.6. Medicaciones típicas en anticipación de la agonía
Indicación Fármaco Dosis subcutánea
Dolor Morfina 2,5 mg SC o 5 mg VI (máximo cada hora).
Si en tratamiento con opioides, utilice 1/10-1/6
de dosis diaria (ver p. 533 y tabla 11.5)
Agitación + Haloperidol 2,5 mg SC (máximo cada hora)
Náuseas y vómitos
Agitación + ansiedad Midazolam 2,5 mg SC (máximo cada hora)
Náuseas y vómitos Levomepromazina 6,25 mg SC tres veces al día
Secreciones respiratorias Glicopirronio 200 mcg SC cada 4-8 h
problemáticas
12 Reumatología
Contenidos
La historia reumatológica 539
Evaluación del aparato locomotor 540
Exploraciones reumatológicas 541
Dolor de espalda 542
Osteoartritis o artrosis (OA) 544
Artritis séptica 544
Artritis reumatoide (AR) 546
Artropatías por cristales:
Gota 548
Deposición por pirofosfato cálcico
(EDPC) 548
Espondiloartritis:
Espondilitis anquilosante (EA) 550
Artritis enteropática, psoriásica
y reactiva 550 y 551
Enfermedades del tejido conectivo
autoinmunes:
Esclerosis sistémica 552
Enfermedad mixta del tejido conectivo 552 Fig. 12.1. Cuando William Pitt, «el Viejo», esta-
Policondritis recidivante 552 dista británico, sufrió otro de sus ataques de
Polimiositis y dermatomiositis 552 gota, se mantuvo ausente del Parlamento duran-
Lupus eritematoso sistémico (LES) 554 te 1773, año en el cual sus miembros fueron
Vasculitis: persuadidos para imponer un impuesto consi-
Arteritis de células gigantes 556 derable sobre las importaciones de té a las
Poliarteritis nodosa 556 colonias americanas. Como resultado, se originó
Poliangitis microscópica 556 el Motín del Té en 1773. Los colonos abordaron
Polimialgia reumática 557 los barcos de la Compañía de las Indias Orien-
Fibrimialgia 558 tales en el puerto de Boston y arrojaron las
Enfermedad sistémica con: cajas de té por la borda. En respuesta, el gobier-
Manifestaciones oculares 560 no británico envió tropas a ocupar Boston y
Manifestaciones dermatológicas 562 controlar así a los colonos. La respuesta armada
Emergencias reumatológicas: a estas fuerzas de ocupación condujo a la Gue-
䊳䊳 LES agudo 554 rra de Independencia de los Estados Unidos.
䊳䊳 Vasculitis sistémica aguda 314 y 556 Trece colonias del Reino Unido se independiza-
䊳䊳 Compresión medular aguda 466 y 543 ron. Entonces se dice que, ¡la gota influyó en el
䊳䊳 ACG 556 comienzo de la Revolución Americana!
䊳䊳 Neumonitis inducida por
metotrexate 547
䊳䊳 Sepsis neutropénica 352
䊳䊳 Esclerodermia: hipertensión pulmonar
y crisis renales 315 y 552
䊳䊳 Artritis séptica 544
Reumatología
1. ¿No tiene usted dolor o rigidez en las articulaciones, músculos o espalda?
2. ¿Puede usted vestirse sin mucha dificultad?
3. ¿Puede usted subir y bajar escaleras?
Si la respuesta es sí a las tres preguntas, es poco probable que haya enfermedad infla-
matoria muscular/articular.
Síntomas de presentación: Enfermedades relacionadas:
• Patrón de articulaciones afectadas. • Crohn/CU (en espondilitis anquilosante), infec-
• Simetría (o no). ciones precedentes, psoriasis.
• Rigidez matutina > 30 min (p. ej., AR). Fármacos actuales o pasados:
• Dolor, inflamación, pérdida de fun- • AINE, FARME.
ción, eritema, calor. • Agentes biológicos (p. ej., inhibidores de TNFα).
Datos extraarticulares: Historia familiar:
• Erupciones, fotosensibilidad (p. ej., LES). • Artritis, psoriaris, enfermedad autoinmune.
• Raynaud (LES, esclerosis sistémica, Historia social:
polimiositis y dermatomiositis). • Edad.
• Ojos o boca secos (Sjögren). • Ocupación.
• Ojos rojos, iritis (p. ej., EA). • Historia sexual.
• Diarrea/uretritis (artritis reactiva). • Raza (p. ej., LES es más común en africanos-
• Nódulos o ganglios (p. ej., AR, TB, caribeños y asiáticos).
gota). • Capacidad para funcionar (p. ej., vestirse, cepi-
• Úlceras boca/genitales (p. ej., Beh- llarse, escribir, caminar).
cet, LES). • Situación doméstica, apoyo social, adaptaciones
• Pérdida de peso (p. ej., malignidad, en el hogar.
cualquier enfermedad inflamatoria • Tabaco (puede empeorar AR).
sistémica). • Enfermedad intestinal inflamatoria.
Artritis
El patrón de afectación articular puede dar claves de la causa subyacente (tabla 12.1).
Tabla 12.1. Patrones de presentación de las artritis
Oligoartritis Poliartritis
Monoartritis (≤ 5 articulaciones) (> 5 articulaciones afectadas)
Artritis séptica Artritis por cristales Simétrica Asimétrica
Artritis por cristales Artritis psoriásica Artritis reumatoide Artritis reactiva
(gota, EDPC)
Osteoartritis Artritis reactiva, p. ej., Osteoartritis Artritis psoriásica
Yersinia, Salmonella,
Campylobacter
Traumatismo Espondilitis anquilosante Virus (p. ej., hepatitis
(hemartrosis) A, B y C; parotiditis)
Osteoartritis Enfermedades sistémicas* (puede ser cualquiera)
*Enfermedad del tejido conectivo (p. ej., LES y policondritis recidivante), sarcoidosis, malignidad
(p. ej., leucemia), endocarditis, hemocromatosis, anemia falciforme, fiebre mediterránea familiar, Behçet.
䊳䊳 Excluya artritis séptica en cualquier articulación inflamada agudamente, dado que
puede destruir una articulación en menos de 24 horas (p. 544). La inflamación
puede ser menos evidente en inmunocomprometidos (p. ej., por los muchos fárma-
cos inmunosupresores utilizados en las enfermedades reumatológicas) o si hay
enfermedad articular subyacente. La aspiración articular (p. 541) es la investigación
clave, y si usted no es capaz de hacerla, encuentre a alguien que pueda.
ber?1 Observe desde delante: «Ladee su cabeza» (sin mover los hombros) –pruebe la flexión
lateral del cuello. Palpe buscando los puntos dolorosos típicos de la fibromialgia (ver p. 558).
Brazos: «Trate de poner sus manos detrás de la cabeza» –prueba los movimientos funcionales
del hombro. «Brazos hacia fuera rectos» –pruebe la extenxión del codo y la supinación/pro-
nación del antebrazo. Examine las manos: ¿cualquier deformidad (fig. 12.2), atrofia o inflama-
ción? Apriete en las articulaciones metacarpofalángicas 2ª-5ª. La presencia de dolor puede indi-
car sinovitis articular o tendinosa. «Ponga su dedo índice en su dedo gordo» –pruebe el agarre
de la pinza. Evalúe la habilidad, p. ej., abrochando un botón o cogiendo una moneda.
Piernas: Observe las piernas: ¿masa muscular del cuádriceps normal? ¿Cualquier inflamación o
deformidad? Con el paciente en decúbito supino: ¿cualquier discrepancia en la longitud de las
piernas? Rote interna/externamente cada rodilla en flexión. Flexione pasivamente la rodilla y la
cadera hasta su máxima extensión. ¿Está limitado el movimiento? ¿Cualquier crepitación?
Encuentre cualquier derrame en la rodilla utilizando la percusión de la rótula. Si hay líquido, con-
sidere aspiración y prueba para cristales o infección. Con el paciente de pie: observe los pies:
¿cualquier deformidad? ¿Están los arcos altos o planos? ¿Cualquier callosidad? Estas indican
marcha anormal de cierta cronicidad. Apriete en las articulaciones metatarsofalángicas: mire
como en los brazos. También: aunque no se encuentra en el sistema GALS, palpe el talón y el
tendón de Aquiles para identificar fascitis plantar y tendonitis del tendón de Aquiles, asociados
con frecuencia con patologías reumatológicas seronegativas. Examine los zapatos del paciente
buscando signos de desgaste desequilibrado.
Marcha: Observe la marcha: ¿es la marcha suave? ¿Buen balanceo de los brazos? ¿Longitud de
la zancada OK? ¿Buen golpe de talón y dedo del pie? ¿Puede girarse rápidamente?
Distancia de movimiento articular. Se indica en grados, siendo la posición anatómica la
posición neutral –p. ej., el codo flexión 0º-150º normalmente, pero con flexión fija y movi-
miento limitado, la distancia puede verse reducida a 30-90º. Una deformidad en valgo desvía
lateralmente (se aleja de la línea media, fig. 12.3); una deformidad en varo apunta hacia la línea
media.
Reumatología
Normal Claro, sin color ↔ <
~200 Ninguno
Osteoartritis Claro, paja ↑ <1000
~ <50%
~
Hemorrágico Hemático, Varía <
~10.000 <50
~
xantocrómico
Inflamación aguda
• AR Turbio, amarillo ↓ 1000-50.000 Varía
• Cristal Turbio, amarillo ↓ 5000-50.000 ~80%
Séptico Turbio, amarillo ↓ 000-100.000 > 90%
*p. ej., trauma, tumor o hemofilia.
Análisis de sangre: Sistemático de sangre, VSG, urato, urea y electrolitos. Hemoculti-
vos en la artritis séptica. Considerar factor reumatoide, anti-CCP, ANA, otros auto-
anticuerpos (p. 553) y HLAB27 (p. 551) –según la presentación clínica. Considerar
causas de artritis reactiva (p. 551), p. ej., serología viral, PCR de Chlamydia en orina,
serología de hepatitis y VIH si hay factores de riesgo presentes.
Radiología: Busque erosiones, calcificación, ensanchamiento o pérdida del espacio
articular, cambios en el hueso subyacente de las articulaciones afectadas (p. ej., osteo-
penia periarticular, áreas escleróticas, osteofitos). En las figs. 12.4-12.6 se muestran
datos característicos de RX para varias espondilartritis. En las espondiloartritis se
observa irregularidad de las articulaciones sacroilíacas. Los ultrasonidos o la RM son
más sensibles identificando derrames, sinovitis, entesitis e infección que la radiogra-
fía simple –comente estudios adicionales con el radiólogo. Haga una RXT para AR,
vasculitis, TB o sarcoidosis.
Erosiones periarticulares
Espacio articular normal
Inflamación de tejidos Fig. 12.6. Datos de RX de gota
blandos (1ª metatarsofalángica).
Cortesía del Dr. D. C. Howlett.
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 12_Oxford 07/05/18 16:34 Página 542
Exploración
1. Con el paciente en bipedestación, mida la extensión y suavidad de la flexión ante-
rior/lateral y de la extensión (ver p. 540).
2. Prueba para sacroileítis: palpar posteriormente hacia abajo a lo largo de la columna,
incluyendo los procesos espinosos, músculos paraespinales y articulaciones sacroilía-
cas; examinar para descartar sensibilidad en la zona.
3. Déficits neurológicos (ver RECUADRO): pruebe la sensación en miembros inferiores,
fuerza y reflejos plantares y tendinosos profundos. Tacto rectal para examinar el tono
y la sensación perianales.
4. Examine el dolor de la raíz nerviosa (tabla 12.3): están distribuidas en dermatomos
relevantes y empeora por la tos y la inclinación hacia delante. Prueba de la pierna recta
(L4, L5, S1): positivo si elevando la pierna con la rodilla extendida se produce dolor
debajo de la rodilla, que aumenta con la dorsiflexión del pie (signo de Lasegue). Sugie-
re irritación del nervio ciático. La principal causa es el prolapso de un disco lumbar.
También prueba de estiramiento femoral (L2-L4): dolor en la parte anterior del muslo
al elevar la cadera en extensión con el paciente en decúbito prono o ventral y la pier-
na flexionada.
5. Signos de enfermedad generalizada –p. ej., malignidad. Examinar otros sistemas (p. ej.,
abdomen) dado que el dolor puede ser referido.
Causas. La edad determina las causas más probables:
15-30 años: Prolapso discal, trauma, fracturas, espondilitis anquilosante (EA; p. 550),
espondilolistesis (un desplazamiento anterior de una vértebra sobre otra,
que es congénita o debida a un traumatismo), embarazo.
30-50 años: Enfermedad degenerativa de la columna, prolapso discal, malignidad (pri-
maria o secundaria a cáncer de tumor, mama, próstata, tiroide o riñón).
> 50 años: Colapso vertebral osteoporótico degenerativo, Paget (ver p. 685), maligni-
dad, mieloma (ver p. 368), estenosis espinal.
Más raras: Tumores de la cauda equina, absceso del psoas, infección espinal (p. ej., disci-
tis, habitualmente estafilocócica pero también por Proteus, E. Coli, S. Typhy y TB –con fre-
cuencia no hay signos sistémicos).
Exploraciones. Organice las pruebas relevantes si sospecha una causa específica, o si
síntomas de alarma: sistemático de sangre, VSG y PCR (mieloma, infección tumor), urea
y electrolitos, FA (Paget), electroforesis de suero/orina (mieloma), PSA. Rayos X –los
estudios de imagen pueden no ser siempre necesarios, pero pueden excluir anormalida-
des óseas y fracturas. La correlación entre las anormalidades radiográficas y los datos clí-
nicos puede ser pobre. RM es la técnica de imagen de elección y puede detectar prolap-
so discal, compresión medular (fig. 12.7), cáncer, infección o inflamación (p. ej., sacroileítis).
Tratamiento. 䊳䊳 Remisión urgente a neurocirugía si cualquier déficit neurológico (ver
RECUADRO). Mantenga el diagnóstico en revisión. Para un dolor de espalda no específico,
enfóquese en educación y autocuidado. Aconseje a los pacientes continuar con sus activi-
dades normales y estar activos. Uso regular de paracetamol ± AINE ± codeína. Consi-
derar baja dosis de amitriptilia/duloxetina si esto falla (no IRSS para el dolor). Ofrecer
fisioterapia, acupuntura o una tabla de ejercicios si no mejora4. Tenga en cuenta los aspec-
tos psicológicos, que pueden predisponer al desarrollo de dolor crónico y discapacidad
(ver p. 449). Referir a clínica del dolor o a opciones quirúrgicas para pacientes con sín-
tomas intratables.
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CAP. 12_Oxford 07/05/18 16:34 Página 543
Reumatología
Raíz nerviosa Dolor Debilidad Reflejo afectado
L2 Parte superior del muslo Flexión y aducción de la cadera Ninguno
L3 Parte inferior del muslo Aducción de cadera, extensión Reflejo rotuliano
de la rodilla
L4 Rodilla y maléolo medio Extensión de la rodilla, inversión Reflejo rotuliano
y dorsiflexión del pie
L5 Espinilla lateral al dorso Extensión y abducción de la Reflejo del dedo
del pie y dedo gordo cadera gordo
Flexión de la rodilla
Dorsiflexión del piel y dedo gordo
S1 Pantorrilla posterior a Flexión de la rodilla Reflejo aquileo
lateral del pie y dedo Flexión plantar del pie y dedo gordo
pequeño del pie Eversión del pie
Artritis séptica
䊳䊳 Considerar la artritis séptica en cualquier articulación inflamada agudamente, dado
que puede destruir una articulación en menos de 24 horas y tiene una tasa de mortali-
dad de hasta el 11%. La inflamación puede ser menos evidente si inmunocomprometido
(p. ej., por medicación) o si hay enfermedad articular subyacente. La rodilla está afectada
en > 50% de los casos.
Factores de riesgo. Enfermedad articular preexistente (especialmente artritis reuma-
toide); diabetes mellitus, inmunosupresión, insuficiencia renal crónica, cirugía articular
reciente, prótesis articular (donde la infección es particularmente difícil de tratar), abuso
de drogas IV, edad > 80 años9.
Exploraciones. La exploración fundamental es la aspiración articular urgente para
estudio microscópico y cultivo de líquido sinovial (p. 541), dado que la radiografía simple
y la PCR pueden ser normales. El principal diagnóstico diferencial son las artropatías por
cristales (p. 548). Los hemocultivos son esenciales (antes de los antibióticos).
Pregúntese «¿Cómo llegó el organismo allí?» ¿Hay inmunosupresión u otro foco de infec-
ción, p. ej., líneas IV permanentes, piel infectada o neumonía (presente en hasta el 50%
en los que tienen artritis neumocócica)?10.
䊳䊳 Tratamiento. En caso de duda, comience antibióticos IV empíricos (tras aspiración)
hasta que se conozca el antibiograma. Los organismos causales más comunes son Staph.
aureus, Strectococci, Neisseria gonococcus, y bacilos gramnegativos. Siga las guías de prácti-
ca clínica locales para selección de antibióticos y contacte con microbiología para con-
sejo en todos los casos complejos/pacientes inmunosuprimidos (p. ej., VIH). Considerar
flucloxacilina 2 g IV cuatro veces al día (clindamicina si alergia a penicilina); vancomicina
IV más cefalosporina de 2a-3a generación si se sospechan organismos gramnegativos11. Si
se sospechan gonococos o menincococos, considerar ceftriaxona. Se requiere trata-
miento antibiótico durante un período prolongado, convencionalmente ~2 semanas IV,
después, si mejora el paciente, 2-4 semanas VO12. Considerar revisión del traumatólogo
para artrocentesis, lavado y desbridamiento; 䊳䊳 remitir siempre urgentemente a los
pacientes con afectación de prótesis articular.
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CAP. 12_Oxford 07/05/18 16:34 Página 545
Reumatología
GI (y úlceras y perforación), acontecimientos cardiovasculares (IM e ictus) y daño
renal. Los riesgos están relacionados con la dosis relacionada, comenzando con la
primera dosis, así que siempre procure utilizar la menor dosis posible durante el
período más corto de tiempo. Los riesgos aumentan considerablemente con la
edad, polifarmacia, historia de úlcera péptica e insuficiencia renal.
Efectos adversos GI: NICE recomienda la prescripción simultánea de IBP para cual-
quier paciente > 45 años, y en lo que tienen otros factores de riesgo para sangra-
do GI. Las interacciones de fármacos pueden aumentar los riesgos de sangrado –evi-
tar la prescripción concomitante de anticoagulantes, agentes antiplaquetarios, IRSS,
espironolactona, esteroides y bisfosfonatos. Los coxibs tienen un riesgo ligeramente
inferior que los AINE no selectivos.
Efectos adversos cardiovasculares: AINE –todos están asociados con un pequeño
aumento de riesgo de IM e ictus (independiente del factor de riesgo cardiovascular
o duración de uso)14. Los riesgos son mayores en los que tienen factores de riesgo
de CI concomitantes, p. ej., diabetes e hipertensión. Coxibs y diclofenaco tienen un
riesgo mayor, y están contraindicados si hay historia previa de IM, EVP, ictus o insufi-
ciencia cardíaca. Naproxeno tiene el menor riesgo cardiovascular. Puede considerar-
se el uso de celecoxib en baja dosis en pacientes en tratamiento con dosis bajas de
aspirina (si se requieren AINE) dado que no interacciona con ella15.
Riesgos renales: Mayor para pacientes ya en tratamiento con diuréticos, inhibidores
de la ECA o ARA. Los riesgos están también aumentados en el anciano, en los
pacientes con hipertensión y DM2. Globalmente, naproxeno (< 1000 mg/día) o ibu-
profeno (< 1200 mg/día) más IBP pueden ser las opciones más seguras.
Alternativas a AINE: Paracetamol, AINE tópicos, opioides. Los ejercicios de fortaleci-
miento pueden ser más beneficiosos que los analgésicos orales suaves.
Aconsejando a los pacientes: Asegúrese de que los pacientes entienden sobre los fár-
macos que están utilizando: el sangrado es más común en los que conocen menos sobre
sus fármacos16.
• Solo tomar AINE cuando los necesite.
• Suspenda los AINE y busque revisión médica urgente si desarrolla dolor abdomi-
nal o cualquier síntoma de sangrado GI (p. ej., comunique inmediatamente heces
negras ± mareo).
• No mezcle prescripción de AINE con formulaciones sin prescripción: mezclar
AINE puede incrementar el riesgo 20 veces.
• Fumar y aumento del alcohol aumentan el perfil de riesgo de AINE.
Reumatología
PCR normal y VSG normal = 0 PCR anormal o VSG anormal = 1
D Duración de síntomas: < 6 semanas = 0 ≥ 6 semanas = 1
* = Metacarpofalángica, interfalángica proximal, 2ª-5ª metatarsofalángica, muñecas e interfalángicas del
pulgar. † = con o sin afectación de las articulaciones grandes.
Calidad de vida
La depresión, la discapacidad y el dolor son predictores importantes de la calidad de
vida. Sea consciente del impacto de la enfermedad en las relaciones, trabajo y aficio-
nes, y reconozca y explore este aspecto con sus pacientes. Los pacientes pueden que-
rer investigar las terapias complementarias y pueden beneficiarse de grupos de apoyo.
549
Reumatología
Fig. 12.8. Monoartritis aguda en la gota. Fig. 12.9. Tofo ulcerado en la gota.
Fig. 12.10. Cristales de urato monosódico en Fig. 12.11. Cristales de pirofostato cálcico des-
forma de aguja (Needle) encontrados en la hidratado de forma romboide en Pseudogota,
gota, que muestran una birrefringencia Negati- mostrando birrefringencia Positiva en luz pola-
va bajo la luz polarizada. rizada.
Reproducido de Warrell et al., Oxford Textbook Imagen cortesía del Prof. Eliseo Pascual,
of Medicine, 2010, con el permiso de Oxford Sección de Reumatología, Hospital General
University Press. Universitario de Alicante.
Fig. 12.12. No infravalore la gravedad del dolor causado por la gota –como
se ilustra por el artista satírico y paciente gotoso James Gillray (1756-1815).
©Lordprice collection/Alamy Stock Photo.
550 Espondiloartritis
Las espondiloartritis (EspA) son un grupo de enfermedades inflamatorias crónicas rela-
cionadas. Tienden a afectar el esqueleto axial, aunque no siempre, con rasgos clínicos
compartidos:
1. Seronegatividad (=factor reumatoide negativo).
2. Asociación con HLA B27 –ver RECUADRO.
3. «Artritis axiales»: patología en la columna (espóndilo) y articulaciones sacroilíacas.
4. Oligoartritis (es decir, < 5 articulaciones) asimétrica de grandes articulaciones o
monoartritis.
5. Entesis: inflamación de los puntos de inserción de los tendones o ligamentos en el
hueco, p. ej., fascitis plantar, tendonitis del Aquiles, costocondritis.
6. Dactilitis: inflamación de un dedo entero («dedo en salchicha»), debido a edema de
tejido blando e inflamación tenosinovial y articular.
Reumatología
3. Artritis psoriásica (OHCS, p. 594.) Ocurre en 10-40% con psoriasis y puede apa-
recer antes que los cambios cutáneos. Los patrones son: • poliartritis simétrica (simi- 551
lar a AR) • articulaciones interfalángicas distales • oligoartritis asimétrica columna ver-
tebral (similar a EA) • artritis psoriásica mutilante (rara, ~3%, deformidad severa).
Radiología: Cambios erosivos, con deformidades de «lápiz en copa» en los casos seve-
ros. Asociada con cambios en las uñas en 80%, sinovitis (dactilitis), erupciones anei-
formes y pustulosis palmo-plantar. Tratamiento: AINE, sulfasalazina, metotrexato. Los
agentes anti-TNF también son efectivos.
4. Artritis reactiva. Una condición en la que la artritis y otras manifestaciones clíni-
cas ocurren como una respuesta autoinmune a una infección en cualquier parte del
organismo –típicamente GI o GU, aunque la infección precedente puede haberse
resuelto o ser asintomática en el momento en el que aparece la artritis. Otros datos
clínicos: Iritis, queratodermia blenorrágica (placas elevadas, marrones en las palmas de
Reumatología
las manos y las plantas de los pies), balanitis circinada (ulceración peneana indolora
secundaria a Chlamydia), úlceras orales y entesis. Los pacientes pueden presentarse
con una tríada de uretritis, artritis y conjuntivitis (síndrome de Reiter). Pruebas: ↑ VSG
y ↑ PCR. Cultivo de heces si diarrea. Serología infecciosa. Revisar la salud sexual. Los
RX pueden mostrar entesitis con reacción periostal. Tratamiento: No hay cura espe-
cífica. Ponga férula en las articulaciones afectadas agudamente; trate con AINE o inyec-
ciones locales de esteroides. Considerar sulfalzina o metotrexato si síntomas > 6
meses. El tratamiento de la infección original no produce ningún efecto significativo
en la artritis.
da: Afecta la cara, manos y pies (formalmente síndrome CREST). Se asocia a anticuerpos
anticentrómero en 70-80%. La hipertensión pulmonar está presente de forma subclínica
con frecuencia, y debería buscarse (R/ : sildenafilo, bosentán). Difusa: Puede afectar a todo
el cuerpo. Anticuerpos antitopoisomerasa-1 (SCL-70) en 40% un anti-ARN polimerasa
en 20%. El pronóstico es con frecuencia pobre. Controle la PA meticulosamente. Reali-
ce anualmente ecocardiograma y espirometría. Tanto la limitada como la difusa tienen el
potencial de producir fibrosis de órganos: pulmón, cardíaca, GI y renal (p. 314) pero esto
ocurre más tarde en casos limitados.
Tratamiento: Actualmente no tiene cura. Los regímenes inmunosupresores, incluyendo la
ciclofosfamida IV, son utilizados para la afectación de los órganos o enfermedad cutánea
progresiva. Están en marcha estudios de inhibidores de la tirosina quinasa antifibrótica41.
Controle la PA y la función renal. El uso regular de i-ECA y ARA2 ↓ de crisis renal
(p. 314). Fenómeno de Raynaud (ver 708).
Enfermedad mixta del tejido conectivo. Combina datos de esclerosis sistémica,
LES y polimiositis y la presencia de títulos elevados de anticuerpos anti –U1-RNP.
Policondritis recidivante. Condición rara con episodios recurrentes de inflamación
y destrucción del cartílago. Afecta al pabellón auricular (orejas caídas), tabique nasal, larin-
ge (estridor), árbol traqueobronquial (infecciones) y articulaciones. Asociaciones: Enfer-
medad de la válvula aórtica, poliartritis y vasculitis. El 30% tiene enfermedad reumática o
autoinmune subyacente. El diagnóstico es clínico. R/ : Esteroides, FARME o CPAP/tra-
queotomía para afectación de la vía aérea.
Polimiositis y dermatomiositis
Condiciones raras caracterizadas por inicio insidioso de debilidad muscular proximal
simétrica progresiva e inflamación de los músculos estriados mediada por autoinmunidad
(miositis), asociada con mialgia ± artralgia. La debilidad muscular puede producir también
disfagia, disfonía (p. ej., fonación pobre, no disfasia) o debilidad respiratoria. La miositis
(esp. en dermatomiositis) puede ser un fenómeno paraneoplásico, comúnmente por
malignidad del pulmón, páncreas, ovario o intestino. Realice cribado para cánceres.
Dermatomiositis. Miositis más signos cutáneos: • Erupción macular (signo del chal
positivo si hay afectación sobre la espalda y los hombros). • Erupción lila-púrpura (helio-
tropo) en los párpados, a menudo con edema (fig. 12.26, p. 563). • Eritema del pliegue
de la uña (dilatación de las asas capilares). • Pápulas de Gottron: pápulas rojas ásperas
sobre los nudillos, vistas también en codos y rodillas (patognomónicos de ↑ CK + debi-
lidad muscular). Malignidad en el 30% de los casos.
Signos extramusculares. En ambas patologías puede darse fiebre, artralgia, Raynaud,
fibrosis pumonar intersticial y afectación miocárdica (miocarditis, arritmias).
Pruebas. Enzimas musculares (GPT, GOT, LDH, CK y aldolasa) ↑ en plasma; la EMG
muestra potenciales fibrilatorios característicos; la biopsia muscular cofirma el diagnósti-
co (y excluye patología similar). La RM muestra edema muscular en la miositis aguda. Aso-
ciaciones son autoanticuerpos: (ver RECUADRO) anti-Mi2, anti-Jo1 –asociados con inicio
agudo y fibrosis pulmonar intersticial que debe ser tratada agresivamente.
Diagnóstico diferencial. Miopatía carcinomatosa, miositis con cuerpos de inclusión,
distrofia muscular, PMR, miopatía endocrina/metabólica (p. ej., esteroides), rabdomiólisis,
infección (p. ej., VIH), fármacos (penicilamina, colchicina, estatinas o cloroquina).
Tratamiento. Comience prednisolona. Los inmunosupresores (p. 376) y citotóxicos
son utilizados pronto en casos resistntes. Hidroxicloroquina/tacrolimus tópico para enfer-
medad dermatológica.
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CAP. 12_Oxford 07/05/18 16:34 Página 553
Reumatología
LES > 95% Esclerosis sistémica 96%
Hepatitis autoinmune 75% AR 30%
Síndrome de Sjögren 68% Normal 0-2%
Los títulos de ANA se expresan de acuerdo a la dilución a la que pueden ser detec-
tados los anticuerpos, p. ej., 1:160 quiere decir que los anticuerpos pueden ser
detectados todavía cuando el suero se ha diluido 160 veces. Títulos de 1:40 o 1:80
pueden no ser significativos. El patrón de tinción puede indicar la enfermedad (aun-
que no son específicos):
Homogéneos LES Nucleolar Esclerosis sistémica
Moteado Enfermedad TC mixta Centrómero Esclerosis sistémica limitada
Anti-DNA de doble cadena (dsDNA): LES (60% sensibilidad, pero altamente específico).
Ac antihistona: LES inducido por fármacos (~100%).
Ac antifosfolípidos (p. ej., Ac anticardiolipina): Síndrome antifosfolípico, LES.
Ac anticentrómero: Esclerosis sistémica limitada.
Anticuerpos anti-antígenos nucleares extraíbles (ENA) (habitualmente con ANA posi-
tivo):
Anti-Ro (SSA) LES, síndrome de Sjögren, esclerosis sistémica. Asociado con
bloqueo cardíaco congénito
Anti-La (SSB) Síndrome de Sjögren, LES (15%)
Anti-Sm LES (20-30%)
Anti-RNP LES, enfermedad mixta del tejido conectivo
Anti Jo-1; Anti-Mi-2 Polimiositis, dermatomiositis
Anti-Sc170 Esclerosis sistémica difusa
Gastrointestinal: (Para anticuerpos hepáticos, ver p. 284)
Ac antimitocondriales (AMA): colangitis biliar primaria (> 95%), hepatitis autoinmune
(30%), cirrosis idiopática (25-30%).
Ac anti-músculo liso (SMA): hepatitis autoinmune (70%), colangitis biliar primaria
(50%), cirrosis idiopática (25-30%).
Ac anti-células parietales gástricas: anemia perniciosa (> 90%), gastritis atrófica (40%),
«normal» (10%).
Ac factor intrínseco: anemia perniciosa (50%).
Ac α-gliadina, transglutaminasa antitejido, Ac antiendomisial: enfermedad celíaca.
Endocrino: Ac antiperoxidasa tiroidea: tiroiditis de Hashimoto (~87%), enfermedad de
Graves (> 50%). Ac anticélulas del islote (ICA), Ac antidecarboxilasa ácido glutámico
(GAD): diabetes mellitus tipo 1 (75%).
Renal: Ac antimembrana basal glomerular (anti-GBM): enfermedad de Goodpasture
(100%). Ac antineutrófilos citoplásmicos (ANCA):
Citoplásmicos (cANCA), específicos para proteinasa sérica 3 (PR3 positivo). Granu-
lomatosis con poliangitis (Wegener) (90%); también poliangitis microscópica
(30%), poliarteritis nodosa (11%).
Perinuclear (pANCA), específico para mieloperoxidasa (MPO positivo). Poliangitis
microscópica (45%), Churg-Strauss, vasculitis pulmonar renal (Goodpasture).
A diferencia de la vasculitis por inmunocomplejos, en la vasculitis asociada con
ANCA no se produce consumo de complemento o depósito de complejos autoin-
munes (esto es, vasculitis pauci-inmune)42.
ANCA también pueden ser positivos en CU/Crohn, colangitis esclerosante, hepatitis
autoinmune, Felty, AR, LES o fármacos (p. ej., antitiroideos, alopurinol, ciprofloxacino).
Neurológica: Ac antirreceptor acetilcolina: miastenia grave (90%) (ver p. 512).
Ac anticanales de K+ dependientes de voltaje: encefalitis límbica.
Ac anticanales de Ca2+ dependientes de voltaje: síndrome de Lambert-Eaton (ver p. 512).
Antiaquaporina 4: neuromielitis óptica (enfermedad de Devic, p. 698).
5 La mayoría de los centros utilizan los anticuerpos anti-CCP para el diagnóstico inicial de AR.
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CAP. 12_Oxford 07/05/18 16:34 Página 554
Otros datos incluyen linfadenopatía, pérdida de peso, alopecia, infarto del lecho ungueal,
endocarditis no bacteriana (síndrome de Libman-Sacks), Raynaud (30%; ver p. 708), ictus
y exudados retinianos.
Inmunología. >95% son ANA + vos. Un título elevado de anticuerpos anti-ADN de
doble hebra (dsDNA) es altamente específico, pero solo es + VO en ~60% de los casos.
También puede ser ENA (p553) + VO en un 20-30% (anti-Ro, anti-La, anti-Sm, anti-RNP);
el 40% son RhF + vos; también pueden dar + VO los anticuerpos anti-fosfolípidos (anti-
cardiolipina o anticoagulante lúpico). SLE puede asociarse a otras condiciones autoinmu-
nes: S. Sjörgren (15-20%), enfermedad tiroidea autoinmune (5-10%).
Diagnóstico. Ver RECUADRO. Monitorizando la actividad. Las tres mejores pruebas
son: 1. Títulos de anticuerpos anti-dsDNA. 2. Complemento: ↓ C3, ↓ C4 (denota con-
sumo de complemento, por tanto ↓ C3 y ↓ C4, y ↑ C3d y ↑ C4d, sus productos de
degradación). 3. VSG. También: PA, orina para cilindros o proteína (nefritis lúpica, deba-
jo), sistemático de sangre, urea y electrolitos, PFH, PCR (habitualmente normal) 䊳 pien-
se en LES cuando cualquiera tiene una alteración multisistémica y ↑ VSG pero PCR normal.
Si ↑ PCR, piense, por el contrario, en infección, serositis o artritis. Las biopsias de piel o
renales pueden ser diagnósticas.
Lupus inducido por fármacos. Causas (> 80 fármacos) incluidas isoniazidas, hidra-
lazina (si > 50 mg/24 h en acetiladores lentos), procainamida, quinidina, clorpromazina,
minociclina, fenitoína, agentes anti-TNF. Está asociado con anticuerpos antihistona en
> 95% de los casos. Prevalecen los signos dérmicos y pulmonares (el riñón y el SNC
están raramente afectados). Esta enfermedad remite si se suspende el fármaco. Las sul-
fonamidas o los anticonceptivos orales pueden empeorar el LES idiopático.
Tratamiento. Referir: los casos complejos deben ser tratados por clínicas especializa-
das en LES/nefritis.
• Medidas generales: Crema protectora solar de alto factor. Hidroxicloroquina, a no ser
que esté contraindicada, reduce la actividad de la enfermedad y mejora la supervi-
vencia. Para los brotes en la piel, primero trate con esteroides tópicos.
• Mantenimiento: AINE (a no ser que tenga enfermedad renal) e hidroxicloroquina para
síntomas de la piel y de las articulaciones. Azatioprina, metotrexato y micofenolato
como fármacos que permiten evitar los esteroides. Beimumab (anticuerpo monoclo-
nal) utilizado como terapia asociada para enfermedad con anticuerpos positivos en la
que la actividad de la enfermedad es alta44. (Ver RECUADRO).
• Brotes leves (No daño orgánico serio): Hidroxicloroquina o esteroides a baja dosis.
• Brotes moderados (Afectación orgánica): Puede requerir FARME o micofenolato.
䊳䊳 Brotes graves: Si amenazan la vida o un órgano, p. ej., anemia hemolítica, nefritis, peri-
carditis aguda o enfermedad del SNC; altas dosis de esteroides urgente, micofenolato,
rituximab, ciclofosfamida. El trabajo del EMD para lupus neuropsiquiátrico (pueden estar
indicadas las pruebas psicométricas, punción lumbar).
Nefritis lúpica (p. 314): Puede requerir inmunosupresión más intensa con esteroides y
ciclofosfamida o micofenotalo. El control de la PA es vital (p. ej., iECA). La terapia de
reemplazo renal (p. 306) puede ser necesaria si la enfermedad progresa; la nefritis recu-
rre en ~50% postrasplante, pero es una causa rara de fallo del injerto45.
Pronóstico: Supervivencia del ~80% a los 15 años43. Hay un riesgo elevado de ECV y oste-
oporosis a largo plazo.
Síndrome antifosfolípido. Puede estar asociado con LES (20-30%). Con frecuencia
ocurre como enfermedad primaria. Los anticuerpos fosfolípido (anticardiolipina y anti-
coagulante lúpico, anti-β 2 glicoproteina1) causa CLOTS: trastorno de la Coagulación
(arterial/venoso), Livedo reticularis (p. 557), Obstétrico (abortos recurrentes), Trom-
bocitopenia. La tendencia trombótica afecta a los vasos cerebrales, renales, entre otros.
Dx: Anticuerpos antifosfolípidos persistentes con datos clínicos. R/ : Anticoagulación; bus-
car consejo en el embarazo46.
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CAP. 12_Oxford 07/05/18 16:34 Página 555
Reumatología
sible, o lupus cutáneo subagudo (lesión de forma psoriásica no endurecida/poli-
cíclica anular que se resuelve sin cicatrización).
2. Lupus cutáneo crónico: Erupción discoide, placas elevadas eritematosas con esca-
mas queratóticas adherentes y relleno folicular ± cicatrización atrófica (fig.
12.15). Piensen en ello como una erupción en tres etapas afectando oídos, meji-
llas, cuero cabelludo, frente y tórax: eritema → pápulas edematosas hiperque-
ratósicas pigmentadas → lesiones deprimidas atróficas.
3. Alopecia sin cicatriz (En ausencia de otras causas).
4. Úlceras orales/nasales (En ausencia de otras causas).
5. Sinovitis (Afectando dos o más articulaciones o dos o más articulaciones sensi-
bles con > 30 minutos de rigidez matutina).
6. Serositis: a) Pulmón (pleuresía durante > 1 día, o derrame pleural o roce pleu-
ral; b) dolor pericárdico durante > 1 día, o derrame pericárdico o roce peri-
cárdico, o pericarditis en el ECG.
7. Análisis de orina: Presencia de proteinuria (> 0,5 g/d) o cilindros de hematíes.
8. Datos neurológicos: Convulsiones; psicosis; nomoneuritis múltiples; mielitis; neu-
ropatía central o periférica; encefalitis/estado confusional agudo en ausencia de
otras causas.
9. Anemia hemolítica.
10. Leucopenia (Leucocitos < 4.) Por lo menos una vez, o linfopenia (linfocitos < 1)
al menos una vez.
11. Trombocitopenia (Plaquetas < 100). Al menos una vez.
Criterios de laboratorio
1. ANA positivo (positivo en > 95%).
2. Anti-dsADN.
3. Presencia de anticuerpos anti-Smith.
4. Presencia de Ac antifosfolípidos.
5. Complemento bajo (C3, C4, o C50).
6. Prueba de Coombs directo positiva.
Adaptada de «Derivation and validation of the Systemic Lupus International Collaborating
Clinics classification criteria for systemic lupus erythematosus». Petri M. et al., Arthritis and
Rheumatism, vol. 64, issue 8 (2012) 2677-2686.
556 Vasculitis
Las vasculitis son alteraciones inflamatorias de los vasos sanguíneos; comúnmente clasifi-
cadas utilizando los criterios modificados de Chapel Hill48. Pueden afectar cualquier órga-
no, y la presentación depende de los órganos afectados. Puede ser una patología prima-
ria o secundaria a otras enfermedades, p. ej., LES, AR, hepatitis B y C, VIH. Clasificada por
el tamaño de los vasos afectados.
• Grande: Arteritis de células gigantes, arteritis de Takayasu (OHCS, p. 646).
• Media: Poliarteritis nodosa, enfermedad de Kawasaki (OHCS, p. 646).
• Pequeña: • Asociado con ANCA: poliangitis microscópica; granulomatosis con polian-
gitis (granulomatosis de Wegener); poliangitis con granulomatosis eosinofílica (síndro-
me de Churg-Strauss; 40-60% son ANCA positivos). • Vasculitis de complejos inmu-
nes: enfermedad de Goodpasture; vasculitis crioglobulinémica; vasculitis de IgA (púr-
pura de Henoch-Schonlein).
Reumatología
Reumatología
corticales; glomerulonefritis en vasculitis ANCA positiva).
Neurológica: Ictus, ataques, corea, psicosis, confusión, deterioro cognitivo, alteraciones
del carácter. Arteritis de los vasa vasorum (aporte sanguíneo a nervios periféricos)
puede causar monoarteritis multiplex o polineuropatía sensoriomotora53.
GU: Orquitis –dolor o sensibilidad testicular.
Factores de riesgo: RECUADRO «Factores de riesgo». Sexo femenino, edad media, bajos
ingresos familiares, divorcio, bajo nivel de educación.
Asociaciones: Otros síndromes somáticos como el síndrome de fatiga crónica, síndrome
del intestino irritable (p. 266) y síndromes de cefaleas crónicas (ver OHCS, p. 502). Tam-
bién encontrado en ~25% de los pacientes con AR, EA y LES.
Datos: El diagnóstico depende del dolor, que es crónico (> 3 meses) y generalizado (afec-
ta lados izquierdo y derecho, por encima y por debajo de la cintura, y en esqueleto axial).
Es casi universal la presencia de importante fatiga con quejas de sueño no reparador y
fatiga significativa y dolor con pequeños aumentos de la actividad física. Datos adiciona-
les: rigidez matutina (~80-90%), parestesias (sin causa subyacente), cefalea (migraña y
tensión), pobre concentración, bajo estado de ánimo y alteraciones del sueño (~70%).
Puntos dolorosos graves y generalizados.
Pruebas: Todas normales. El diagnóstico es clínico. El exceso de estudios puede consoli-
dar la sensación y conducta de enfermedad; pero excluya otras causas de dolor y/o fati-
ga (p. ej., AR, PMR ver p. 557, vasculitis ver p. 556, hipotiroidismo ver p. 220, mieloma ver
p. 368).
Tratamiento: Multidisciplinario con resultados óptimos obtenidos de la implicación com-
pleta del paciente que debería ser motivado para permanecer tan activo como sea
capaz, e, idealmente, continuando con su trabajo. Los nuevos síntomas deben ser com-
pletamente revisados para excluir un diagnóstico alternativo. Los pacientes deberían
conocer que no hay ningún tratamiento específico que tenga garantía de funcionar, pero
cualquiera de los siguientes puede ayudar: programas de ejercicio programado, inclu-
yendo entrenamiento tanto aeróbico como dirigido a mejorar la fuerza. El ritmo de la
actividad es fundamental para evitar el exceso de ejercicio y, consecuentemente, el dolor
y la fatiga. Los programas de ejercicio graduado a largo plazo mejoran la capacidad fun-
cional55,56. También pueden ayudar la relajación, la rehabilitación y la fisioterapia. La tera-
pia conductual-cognitiva (TCC) tiene como objetivo ayudar a los pacientes a desarrollar
estrategias para afrontar la patología y a establecer objetivos alcanzables57.
Farmacoterapia: Se ha demostrado que la amitriptilina a baja dosis (p. ej., 10-20 mg por
la noche) ayuda a aliviar el dolor y a mejorar el sueño. Pregabalina (150-300 mg/12 h
VO) puede ser utilizada si amitriptilina es inefectiva. Duloxetina o un IRSS pueden ser uti-
lizados para fibromialgia con comorbilidades de ansiedad y depresión. Los esteroides y
AINE no son recomendados porque no hay inflamación (si no responde, ¡reconsidere su
diagnóstico!).
Síndrome de fatiga crónica (también conocida como
encefalomielitis miálgica)
El síndrome de fatiga crónica58 es definido por la persistencia de fatiga discapacitante per-
sistente que dura > 6 meses, afectando a la función física y mental, presenta > 50% del
tiempo, más ≥ 4 de: mialgia (~80%), poliartralgia, memoria, sueño no reparador, fatiga tras
ejercicio > 24 h, molestia en la faringe persistente, nódulos linfáticos sensibles en cue-
llo/axila. Los principios de tratamiento son similares a los de la fibromialgia e incluyen
ejercicio graduado y TCC. No hay fármacos que hayan demostrado ser efectivos para el
síndrome de fatiga crónica (ver también OHCS, p. 502).
Reumatología
tamiento.
Patogénesis de la fibromialgia
La hipótesis actual es que la fibromialgia está causada por procesamiento aberrante
del dolor tanto a nivel periférico como central. Dos datos claves de la patología son
alodinia (dolor en respuesta a estímulos no dolorosos) e hiperestesia (percepción
exagerada del dolor en respuesta a estímulos dolorosos leves), examinados por la
palpación de puntos sensibles. La investigación está comenzando a sugerir que cier-
tos antidepresivos pueden aliviar el dolor y otros síntomas, y especialmente aquellos
que tienen actividad tanto serotoninérgica como noradrenérgica (tricíclicos y vela-
faxina). Los que actúan solo en los receptores serotoninérgicos son menos efecti-
vos. Hay también ciertas pruebas para apoyar el uso de terapias alternativas como
acupuntura o terapias en spa, que se han postulado como capaces de actuar sobre
similares vías espinales moduladoras del dolor60. Hasta ahora, los estudios han inclui-
do un número relativamente pequeño de pacientes y han tenido cortos períodos
de seguimiento, por lo que no tienen el poder suficiente como para extraer con-
clusiones definitivas. Sin embargo, es interesante señalar que el LCR de los pacien-
tes con fibromialgia parece tener niveles aumentados de sustancia P, mientras que
los niveles de los metabolitos de noradrenalina y serotonina están disminuidos. Los
tres son neurotransmisores implicados en las vías descendentes de la médula espi-
nal moduladoras del dolor61,62. Las pruebas por los estudios de imagen con PET
sugieren que los pacientes con fibromialgia pueden tener una repuesta central de
dopamina al dolor anormal63. La cuestión crítica es: ¿es la causa o el efecto?
Fig. 12.18. Cableado de plata. Fig. 12.19. Cruces AV. Fig. 12.20. Papiloedema.
© Prof. Jonathan Trobe. © Prof. Jonathan Trobe. © Prof. Jonathan Trobe.
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Tabla 12.5. Diagnóstico diferencial de un ojo rojo
Cámara Presión
Conjuntiva Iris Pupila Córnea Tratamiento Aspecto
anterior intraocular
Glaucoma agudo Inyección de vasos ciliares Inyectado Dilatadas, fijas, oval Húmeda, Muy superficial Muy alta Referir
y conjuntival. El ojo entero neblinosa
es rojo. Ver OHCS p. 430
Uveítis anterior Enrojecimiento más marcado Inyectado Pequeña, irregular Normal Túrgida Normal Referir. Colirio
(iritis) alrededor de la córnea, que no se debido a adherencias de esteroides
blanquea con la presión. Habitualmente entre el cristalino (p. ej., 0,5%
unilateral. Causas: AE, AR, sarcoidosis anterior y los prednisolona) +
de Reiter, herpes simplex, herpes zóster, márgenes de la pupila midriática (p. ej.,
y enfermedad de Behçet. NV: ciclopentolato
una apariencia escleral similar 0,5%)
pero sin afectación papilar o de
la cámara anterior puede haber
escleritis (p. ej., AR, LES, vasculitis)
Conjuntivitis A menudo, bilateral. Los vasos Normal Normal Normal Normal Normal La mayoría no
conjuntivales inyectados, más hacia los requiere tratamiento.
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Hemorragia Esclera roja brillante con Normal Normal Normal Normal Normal Parece alarmante,
subconjuntival anillo blanco alrededor del pero resuelve.
limbo. Causas: ↑ PA; leptospirosis; espontáneamente.
trastornos hemorrágicos; Controlar la PA
trauma; veneno de serpiente; si mayor; referir
fiebres hemorrágicas si traumático;
Reumatología
561
CAP. 12_Oxford 07/05/18 16:34 Página 562
563
Reumatología
Fig. 12.25. Vitíligo. Compare con fig. 9.58, p. 441.
13 Cirugía
Índice
El lenguaje de la cirugía 565
Cuidados perioperatorios:
Cuidados prequirúrgicos 566
Consentimiento 568
Antibióticos profilácticos en cirugía 570
Suturas 571
Anestesia 572
Control del dolor 574
Complicaciones postquirúrgicas
generales 576
Trombosis venosa profunda (TVP) 578
Edema de miembros inferiores 579
Complicaciones postquirúrgicas
específicas 580
Cuidados del estoma 582
Soporte nutricional en el hospital 584-7
Grupos específicos de pacientes 588-91
Cirugía mínimamente invasiva y
ambulatoria 592
Tumoraciones en cabeza, cuello y piel
594-601
Cirugía de mama 602 Fig. 13.1. El robot Da Vinci, el primer sistema
quirúrgico robótico que recibió aprobación legal.
Cirugía gastrointestinal: Con cuatro brazos, articulaciones pequeñas y
Masas abdominales 604 estables con múltiples ejes de rotación, y visión
Abdomen agudo 606 3D de alta resolución, el sistema ofrece potencial
Apendicitis aguda 608 para los avances significativos en cirugía mínima-
Obstrucción intestinal 610 mente invasiva que se están realizando actualmen-
Hernias 612-5 te en un rango de especialidades. Pero, ¿dónde
Carcinoma colorrectal 616 está el cirujano en esta fotografía? A primera vista,
Carcinomas de estómago y esófago 618 puede parecer que esta hazaña tecnológica susti-
Isquemia mesentérica 620 tuye a la habilidad del cirujano humano; sin
Cirugía gástrica y sus consecuencias 622 embargo, la máquina necesita todavía un opera-
Fundoplicatura para la ERGE 624 dor con el entrenamiento y las habilidades nece-
Tratamiento quirúrgico de la obesidad 626 sarias para realizar esta difícil cirugía. La de la ciru-
Enfermedad diverticular 628 gía es una historia de adaptación de las habilida-
Trastornos perianales 630 des quirúrgicas a las nuevas tecnologías, desde la
Hemorroides 632 anestesia y la asepsia al trasplante de órganos y la
Cirugía hepatobiliar 634-7 laparoscopia. ¿Cómo pueden los programas de
Urología: aprendizaje adaptarse a su vez para permitir la
Urolitiasis 638 adquisición de estas nuevas habilidades sin supo-
Obstrucción del tracto urinario 640 ner un riesgo inaceptable para el paciente? Y, cual-
Hiperplasia benigna de próstata 642 quiera que sea el abordaje quirúrgico, la vieja
Fibrosis retroperitoneal 643 máxima no cambia: el arte de la cirugía consiste
Procesos malignso del tracto urinario en elegir la operación adecuada en el momento
644 adecuado para el paciente adecuado.
Tumores de vejiga 646
Incontinencia urinaria 648
Masas en la ingle y el escroto 650
Torsión del testículo 652
Cirugía vascular:
Aneurismas de arterias 654
Disección de aorta torácica 655
Enfermedad arterial periférica 656
Venas varicosas 658
Gangrena y fascitis necrotizante 660
Úlceras cutáneas 660
Agradecemos al Sr Antonio Foliaki, lector especialista de este capítulo, y al Sr William Breakey, por la
contribución de ambos a este capítulo.
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Cirugía
4. Pfannenstiel
5. Toracoabdominal (esofagectomía
9º o 10º espacio intercostal)
1. Paramediana
2. McBurney
3. Lanz
4. Transversa
Fig. 13.3. Incisiones. 5. Transversa abdominal alta
6. McEvedy (hernia femoral)
7. Incisión para hernia inguinal
-ectomía Extirpación.
-grafía Imagen radiológica.
-pexia Anclaje de una estructura para mantenerla en posición.
-plastia Remodelado quirúrgico para recuperar función adecuada o cosmesis.
-scopia Procedimiento instrumental para observar el interior del cuerpo.
-stomía Unión artificial entre un conducto y el exterior u otro conducto.
-tomía Corte realizado para abrir una estructura al exterior.
-tricia Fragmentación de un objeto.
angio- Vaso lit- Cálculo
apendic- Apéndice mast- Mama
cole- Relativo a la bilis meso- Mesenterio
colp- Vagina nefr- Riñón
cist- Vejiga orqui- Testículo
-doc- Conductos oofor- Ovario
enter- Intestino delgado fren- Diafragma
escar- Tejido necrótico (p. ej., por quemadura) piloro- Esfínter pilórico
gastr- Estómago piel- Pelvis renal
hepat- Hígado proct- Canal anal
hister- Útero salping- Trompa de Falopio
lapar- Abdomen esplen- Bazo
absceso Cavidad que contiene pus. Recuerde: donde hay pus, hay que evacuarlo.
cólico Dolor intermitente debido a espasmo/obstrucción de una víscera hueca.
quiste Cavidad llena de líquido rodeado por epi/endotelio.
fístula Conexión anómala entre dos superficies epiteliales. Las fístulas frecuentemente se
cierran espontáneamente, pero no lo harán en presencia de tejido maligno, obs-
trucción distal, cuerpo extraño, inflamación crónica o la formación de una unión
mucocutánea (p. ej., estoma).
hernia Protrusión de una víscera o parte de ella a través de un defecto en la pared de la
cavidad donde se encuentra, situándose en una posición anormal.
íleo Usado en este libro como sinónimo de intestino adinámico.
sinus Tracto ciego, típicamente recubierto por epitelio o tejido de granulación, que se
abre a una superficie epitelial.
stent Tubo artificial colocado dentro de un conducto biológico para mantenerlo abierto.
estoma Unión artificial entre conductos, o entre un conducto y el exterior.
úlcera Solución de continuidad de una superficie epi/endotelial.
vólvulo Torsión de una estructura sobre sí misma. Frecuente en el colon sigmoide y el
ciego, y con menor frecuencia en el estómago.
epi- sobre pan- todo peri- alrededor
end- dentro para- al lado sub- debajo
mega- agrandado per- atravesando trans- a través
Cirugía
del cuello (p. ej., artritis que complique la intubación)? ¿Es necesaria profilaxis de TVP/EP
(p. 580)? Para cirugías «unilaterales», marcar el brazo/pierna/riñón correcto (cirujano).
Pruebas. Guíese por la historia, exploración y los protocolos locales/NICE.
• Urea y electrolitos, hemograma y glucemia capilar en la mayoría de pacientes: Si Hb < 100
g/L, informe al anestesista. Realice las pruebas complementarias/tratamiento adecuados.
La urea y electrolitos son particularmente importantes en pacientes en ayunas, diabé-
ticos, con diuréticos, quemados, con enfermedad hepática o renal, con íleo o con nutri-
ción parenteral.
• Pruebas cruzadas: Identificar el grupo sanguíneo y reservar unidades para el paciente. Grupo
y guardar (G y G): El grupo sanguíneo se identifica y se guarda, pendiente de las pruebas
cruzadas (si se requieren). Contacte con su laboratorio para discutir los requerimientos;
esto disminuye el derroche y permite mayor eficiencia en los bancos de sangre.
• Análisis específicos en sangre: Pruebas de función hepática si ictericia, malignidad o abuso
de alcohol. Amilasa si dolor abdominal agudo. Glucemia en sangre si diabetes (p. 588).
Niveles de fármacos si está indicado (p. ej., digoxina, litio). Estudios de coagulación si
enfermedad hepática o renal, CID (p. 352), hemorragia masiva, o si tratamiento con val-
proato, warfarina o heparina. VIH, HBsAg en pacientes de alto riesgo, tras informarles.
Detección de células falciformes en pacientes procedentes de África, el Caribe o el
Mediterráneo, o de áreas con paludismo (incluyendo la mayor parte de la India). Prue-
bas de función tiroidea en los que tengan enfermedad tiroidea.
• Radiografía de tórax: Si patología cardiorrespiratoria conocida, síntomas o > 65 años.
Recuerde comprobar la placa antes de la cirugía.
• ECG: si > 55 años, escasa tolerancia al ejercicio, o historia de isquemia miocárdica,
hipertensión, fiebre reumática u otra enfermedad cardíaca.
• Ecocardiograma: Puede realizarse si hay sospecha de mala función del ventrículo izquierdo.
• Pruebas de función respiratoria: En enfermedad pulmonar conocida/obesidad.
• Radiografía lateral de columna cervical (imágenes en flexión y extensión): Si historia de
artritis reumatoide/espondilitis anquilosante/síndrome de Down, para anticipar posible
intubación difícil.
• Cribado de SARM: Cribar y decolonizar a los portadores nasales de acuerdo con los
protocolos locales (p. ej., pomada de mupirocina nasal). La colonización no es una con-
traindicación para la cirugía. Colocar a estos pacientes en el último lugar de la lista para
minimizar la transmisión, y realizar profilaxis antibiótica apropiada, p. ej., vancomicina o
teicoplanina. Considerar y documentar riesgo alto de virus de transmisión parenteral
(VIH, VHB, VHC) de acuerdo con los protocolos locales.
1 Si ha sido en los últimos 6 meses, el riesgo perioperatorio de reinfarto (hasta el 40%) contraindica
la mayor parte de las cirugías electivas. Se deberían realizar ecocardiografía y prueba de esfuerzo
(+ ECG de esfuerzo o ventriculografía nuclear).
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 13_Oxford 07/05/18 16:16 Página 568
568 Consentimiento
¿En cuál de las siguientes situaciones solicitaría el «consentimiento informado por escrito» del
paciente? 1. Palpar un pulso. 2. Sacar sangre. 3. Poner una vía central. 4. Extirpar una sec-
ción del intestino delgado durante una laparotomía para eliminar adhesiones. 5. Orquiecto-
mía después de una operación fallida de una torsión testicular.
La ley inglesa establece que cualquier intervención o tratamiento necesita consentimien-
to; es decir, todas las situaciones anteriores, aunque por diferentes motivos. De hecho, el
consentimiento por escrito en sí no es requerido por la ley, pero sí que constituye una
«buena práctica médica» en el interés del paciente y el médico. A veces, las acciones y
palabras implican un consentimiento válido, p. ej., entrar en conversación o acercar el
brazo. Si las consecuencias no están claras y el paciente tiene capacidad de dar consen-
timiento, debería solicitar el consentimiento informado por escrito como un registro de
la conversación.
Para que un consentimiento sea válido
• Puede darse en cualquier momento antes de que comience la intervención/trata-
Cirugía
miento. Es mejor cuanto antes, ya que esto dará tiempo al paciente para pensar sobre
los riesgos, beneficios y alternativas; él o ella puede incluso plantear preguntas sobre
asuntos que no había considerado relevantes. Pienso en el consentimiento como un
proceso continuo a lo largo de la interacción entre el paciente y usted, no solo el
momento de firmar el formulario.
• El tratamiento o prueba propuesto debe ser claramente entendido por el paciente,
teniendo en cuenta los beneficios, riesgos (incluidas las tasas de complicación, si se
saben), procedimientos adicionales, cursos de acción alternativos y sus consecuencias.
• Debe ser dado voluntariamente. Esto puede ser difícil de evaluar (p. ej., cuando se está
considerando la donación de un órgano). Ver RECUADRO «Circunstancias especiales
para el consentimiento» para otras situaciones difíciles.
• El médico que proporciona tratamiento o realiza la prueba necesita asegurarse de que
el paciente ha dado un consentimiento válido. El acto de solicitar consentimiento es,
en última instancia, la responsabilidad del médico a cargo del paciente, aunque la tarea
puede ser delegada en otro profesional de la salud, siempre y cuando esté adecuada-
mente entrenado y cualificado.
Capacidad. Se relaciona con la habilidad de 1 entender, 2 retener y 3 ponderar la infor-
mación relevante, así como 4 comunicar la decisión. La capacidad no es un estado fijo,
sino que es específico de un momento y decisión dados; una persona puede carecer de
la capacidad para involucrarse en una decisión compleja determinada, pero mantener la
capacidad para decidir otros aspectos de su cuidado, o recuperar la capacidad al repo-
nerse de una enfermedad aguda. Por tanto, no debe etiquetarse a nadie como incapaz
de tomar una decisión salvo que se hayan dado todos los pasos necesarios para ayudarle
a ello sin éxito; las decisiones no urgentes siempre deberían retrasarse si existen posibi-
lidades de recuperar la capacidad más adelante. Cuando se actúe en nombre de una per-
sona que carece de capacidad, debe hacerse en su interés, e involucrando a los familia-
res o a un representante asignado si la urgencia de la decisión lo permite.
Cuando se solicite consentimiento
• ¿Tiene el paciente en este momento capacidad para la decisión en cuestión?
• ¿Es la persona adecuada para obtener el consentimiento?2
• Use palabras que el paciente comprenda, y evite tecnicismos y abreviaturas.
• Asegúrese de que comprendan la información y puedan recordar los «pros» y «con-
tras» el suficiente tiempo para informar su decisión. Los folletos informativos/diagra-
mas para operaciones individuales pueden ayudar.
• Asegúrese de que su elección está libre de presiones de terceros, y explique que pue-
den revocar el consentimiento en cualquier momento después de firmar el formula-
rio. Algunos pacientes pueden ver el formulario de consentimiento como un contrato
al cual no pueden renunciar.
• Si el paciente es analfabeto, una firma con testigos supone un consentimiento válido.
Del mismo modo, si el paciente quiere pero es físicamente incapaz de firmar el con-
sentimiento informado, una entrada en la historia clínica indicándolo, con testigos, es
válida.
• Recuerde discutir procedimientos adicionales que pueden hacerse necesarios durante
el tratamiento propuesto. Esto evita sorpresas desagradables (p. ej., un testículo ausen-
te, como en el escenario 5 mencionado previamente en este apartado).
Cirugía
Reino Unido, los > 16 años pueden dar consentimiento válido. Los < 16 años pue-
den dar consentimiento válido para una decisión médica siempre que compren-
dan lo que supone (el concepto de competencia Gillick). Aun así, es buena prácti-
ca médica involucrar a los padres en la decisión, si el niño acepta. En < 18 años que
rechacen cirugía necesaria para salvar la vida, hable con los padres y sus superiores;
la ley no es clara. Puede que necesite contactar con el juez de turno en el Alto
Tribunal (High Court). Proceder en el mejor interés del paciente es decidido por
el médico responsable del caso, con la cooperación de los miembros de la fami-
lia o un defensor nominado.
Suturas 571
Las suturas son fundamentales para el arte de la cirugía. Ninguna sutura concreta es la
ideal para todas las situaciones, de modo que la selección de la sutura (incluyendo el
tamaño) depende del trabajo entre manos (Ver tablas 13.2, 13.2). En su sentido más
amplio, pueden ser absorbibles o no absorbibles, sintéticas o naturales, y su estructura
puede dividirse en monofilamento, torsionada o trenzada. Las suturas monofilamento
son bastante escurridizas pero minimizan las infecciones y producen menos reacción. Las
suturas trenzadas poseen filamentos entrelazados y producen nudos seguros, pero pue-
den favorecer la infección en el tejido que rodea a sus filamentos. Las suturas torsiona-
das poseen dos filamentos retorcidos sobre sí, y cualidades similares a las suturas tren-
zadas. Los tamaños se designan de acuerdo a una escala que disminuye a partir del #5
(sutura trenzada pesada). La mayoría de las suturas modernas comunes son más peque-
ñas que el tamaño #0; por ello, números mayores con el sufijo -0 corresponden a sutu-
ras progresivamente más finas, hasta el 11-0 (monofilamentos finos de uso oftálmico). 3-0
Cirugía
o 4-0 son los mejores tamaños para el cierre de la piel. El momento de la retirada de la
sutura depende del sitio y de la salud general del paciente. Las suturas de cara y cuello
pueden retirarse a los 5 d (antes en niños), cuero cabelludo y nuca a los 5 d, las incisio-
nes abdominales y extremidades proximales (incluyendo clips) a los ~10 d, y las extre-
midades distales a los 14 d. En pacientes con mala cicatrización (p. ej., corticoides, cán-
cer, infección, caquexia (p. 35), ancianos, fumadores) las suturas pueden precisar ~14 d.
No absorbibles
Tabla 13.3. Materiales de sutura no absorbibles
Nombre Material Estructura Uso
Ethilon® Poliamida Monofilamento Cierre cutáneo
Prolene® Polipropileno Monofilamento Anastomosis arteriales
Mersilk®N Seda Multifilamento trenzado Fijar drenajes
Metal P. ej., acero Grapas o monofilamento Cierre de piel/esternotomía
N = Natural; otros materiales naturales (p. ej., algodón y tripa de gato) apenas se usan hoy en día.
572 Anestesia
Antes de la anestesia, explique al paciente lo que va a pasar y dónde va a despertar, para
que no tenga miedo cuando esté en la sala de reanimación o la UCI. Explique que puede
sentirse mal al despertar. La premedicación sirve para aliviar la ansiedad y facilitar la anes-
tesia (ver RECUADRO I). Los regímenes habituales incluyen:
• Ansiolíticos: Benzodiazepinas, p. ej., lorazepam 2 mg VO; temazepam 10-20 mg VO. En
niños, usar premedicación oral como primera opción, p. ej., midazolam 0,5 mg/kg (sabe
amargo, puede disolverse a la suspensión de paracetamol). Dar la premedicación oral
2 h antes de la cirugía (1 h si se da IM).
• Analgésicos: Ver p. 574. La analgesia preventiva con frecuencia no se usa, y sus efectos
son difíciles de determinar. El objetivo es amortiguar las señales de dolor antes de que
lleguen. En niños o adultos ansiosos, la crema anestésica tópica puede usarse en algu-
nos sitios antes de insertar una vía intravenosa ( el anestesista puede preferir colo-
car la vía personalmente).
• Antieméticos: ~25% de los pacientes presentan náuseas y vómitos postquirúrgicos. Los
Cirugía
antagonistas 5HT3 (p. ej., ondansetrón 4 mg IV/IM) son los agentes más eficaces; otros
(p. ej., metoclopramida 10 mg/8 h IV/IM/VO) también se usan (ver p. 251).
• Antiácidos: Ranitidina 50 mg IV u omeprazol 40 mg VO/IV si hay riesgo de aspiración.
• Antisialogogos: El glicopirronio (200-400 mcg en adultos, 4-8 mcg/kg en niños, por vía
IV/IM. 30-60 min antes de la inducción) se usa a veces para disminuir las secreciones
que puedan causar obstrucción de las vías aéreas pequeñas.
• Antibióticos: Ver p. 570.
Efectos secundarios de los agentes anestésicos
• Hioscina, atropina: Anticolinérgicos: taquicardia, retención urinaria, glaucoma, sedación
(sobre todo en ancianos).
• Opioides: Depresión respiratoria, ↓reflejo de la tos, náuseas y vómitos, estreñimiento.
• Tiopental: (Agente de inducción) Laringospasmo.
• Propofol: (Agente de inducción) Depresión cardíaca/respiratoria, dolor al inyectar.
• Agentes volátiles, p. ej., isoflurano: Náuseas y vómitos, depresión cardíaca, depresión res-
piratoria, vasodilatación, hepatotoxicidad (ver BNF).
Las complicaciones de la anestesia se deben a la pérdida de:
• Sensación del dolor: Retención urinaria, quemaduras de diatermia, necrosis por presión,
lesiones nerviosas (p. ej., parálisis del radial al estar el brazo colgando del borde de la
camilla).
• Consciencia: No se puede comunicar que la «pierna/brazo es la equivocada». Nota: en
algunos pacientes (~0,15%) la conservación de la consciencia es el problema. Estar
consciente bajo AG suena como una contradicción, pero recuerde que la anestesia es
un proceso, no un suceso. Esta consciencia puede conducir posteriormente a proce-
sos poco conocidos de neurosis y trastorno de estrés postraumático.
• Potencia muscular: Abrasión corneal (cierra los ojos con cinta), apnea, ausencia de tos;
este último favorece la aparición de neumonía o atelectasia (colapso parcial del pul-
món, que causa shunting ± afectación del intercambio de gases: empieza minutos des-
pués de la inducción, y puede estar relacionado con el uso de O2 al 100%, la posición
supina, la cirugía, la edad y la pérdida de potencia muscular).
Anestesia local/regional. Si el paciente no es apto/no desea someterse a anestesia
general, puede estar indicado el bloqueo nervioso (p. ej., plexo braquial) o medular (con-
traindicación: anticoagulación, infección local) con anestésicos locales de larga duración
como la bupivacaína. Ver dosis y toxicidad en la tabla 13.4.
Fármacos que complican la anestesia. Informar al anestesista. Ver p. 566 para
una lista de fármacos específicos y conductas a seguir.
Hipertermia maligna. Es una complicación infrecuente, precipitada por cualquiera de
los agentes volátiles, como el halotano o el suxametonio. Tiene una herencia autosómica
dominante. Se produce una rápida elevación de la temperatura (< 1ºC cada 30 min); el
espasmo del masetero puede ser un signo precoz. Las complicaciones incluyen la hipo-
xemia, hipercarbia, hipercalemia, acidosis metabólica y arritmias. Pida ayuda experta
inmediatamente. El tratamiento precoz con dantroleno3 (un relajante del músculo esque-
lético), el enfriamento activo y el ingreso en UCI pueden reducir significativamente la
mortalidad.
3 Dar 1 mg/kg cada 5 min IV, hasta un máximo de 10 mg/kg (OHCS, p. 628).
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 13_Oxford 07/05/18 16:16 Página 573
Hipnosis Analgesia
Relajación muscular
Fig 13.4. Principios de la anestesia.
La técnica de la anestesia (fig. 13.4) consiste típicamente en:
• Inducción: Intravenosa (p. ej., propofol 1,5-2,5 mg/kg IV a una velocidad de 20-40 mg
cada 10 s; el tiopental es una alternativa) o, si hay obstrucción de la vía aérea o el
Cirugía
acceso IV es difícil, gaseosa (p. ej., sevoflurano u óxido nitroso, mezclado con O2).
• Control de la vía aérea: Con mascarilla facial, orofaríngea (de Guedel) o por intu-
bación. Lo último suele requerir relajación muscular con un bloqueante neuro-
muscular despolarizante/no despolarizante (OHCS, p. 622).
• Mantenimiento de la anestesia: Anestesia con un agente volátil añadido a la mez-
cla de N2O/O2, con opiáceos a dosis altas y ventilación mecánica, o con infusión
IV (p. ej., propofol 4-12 mg/kg/h IV).
• Reanimación: Cambiar los gases inspirados a oxígeno solo al 100%, a continuación
interrumpir todas las infusiones anestésicas y revertir la parálisis muscular. Extubar
solo cuando haya respiración espontánea, colocar al paciente en posición de recu-
peración y dar oxígeno por mascarilla facial.
• Para más detalles, ver capítulo de Anestesia en OHCS (p. 612).
abuso. Son útiles los sistemas de infusión continua de morfina IV controlados por el
paciente.
• Comuníquese con la Unidad de Dolor Agudo, si es posible.
Analgesia no narcótica (simple). Paracetamol 0,5-1-0 g/4 h VO (hasta 4 g al día);
15 mg/kg/4 h iv en 15 min en niños < 50 kg; hasta 60 mg/kg/d). Precaución si hepato-
patía. Los AINE, p. ej., ibuprofeno 400 mg/8 h VO (ver BNFc para dosis en niños) son bue-
nos para el dolor musculoesquelético y el cólico renal o biliar. CI: úlcera péptica, coagu-
lopatías, anticoagulantes. Precaución: asma, daño hepático o renal, insuficiencia cardíaca,
cardiopatía isquémica, embarazo y ancianos. La aspirina está contraindicada en niños por
el riesgo de síndrome de Reye (OHCS, p. 652).
Fármacos opioides para el dolor grave. La morfina (p. ej., 10-15 mg/2-4 h IV/IM)
o la diamorfina (5-10 mg/2-4 h VO, SC o IV lenta, pero puede precisarse mucho más) son
las mejores opciones. Nota: son fármacos «controlados». Para cuidados paliativos, ver
p. 538. Otras vías de administración son la transdérmica (una vez que los requerimien-
tos basales hayan sido establecidos) o la sublingual.
Efectos secundarios de los opioides: Incluyen náuseas (dar con un antiemético, p. 251),
depresión respiratoria, estreñimiento, supresión de la tos, retención urinaria, ↓TA y seda-
ción (no usar si insuficiencia hepática o traumatismo cefálico). La dependencia no suele
ser un problema. La naloxona (p. ej., 100-200 mcg IV seguida de incrementos de 100 mcg
cada 2 min hasta respuesta) puede ser necesaria para revertir los efectos de una dosis
excesiva de opioides, p. 842).
Analgesia epidural. Se administran opioides y anestésicos en el espacio epidural,
mediante infusión o en bolos. Pida consejo a la Unidad del Dolor. ES: se cree que son
menores, ya que el fármaco está más localizado: vigilar si aparece depresión respiratoria
y bloqueo autonómico inducido por el anestésico local (↓TA).
Tratamientos adyuvantes. P. ej., radioterapia para el dolor de neoplasias óseas; anti-
convulsivantes, antidepresivos, gabapentina o corticoides para el dolor neuropático,
antiespasmódicos como el bromuro de butilescopolamina4 (Buscapina® 10-20 mg/8 h
vo/im/iv) para cólicos intestinales o de la vía urinaria. Si se necesita un alivio breve del
dolor (p. ej., para cambiar apósitos o examinar heridas), probar con óxido nitroso inhala-
do (con O2 al 50%, Entonox®) con una válvula «a demanda». Pueden intentarse la esti-
mulación eléctrica nerviosa transcutánea (TENS), el calor local, la anestesia local o regio-
nal y los procedimientos neuroquirúrgicos (p. ej., excisión de un neuroma), pero los resul-
tados pueden ser decepcionantes. Trate las comorbilidades que exacerben el dolor
(p. ej., estreñimiento, depresión, ansiedad).
4 No confundir con el bromuro de escopolamina, que se usa para reducir secreciones y en la cinetosis.
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 13_Oxford 07/05/18 16:16 Página 575
Cirugía
No opioides
± adyuvantes
• Retención urinaria.
En ocasiones, se necesita sedar al paciente para explorarlo; valorar lorazepam 1 mg VO/IM
(antídoto: flumazenilo) o haloperidol 0,5-2 mg IM Informe a los familiares de que la con-
fusión postoperatoria es frecuente (hasta el 40% lo presenta) y reversible.
Disnea o hipoxia. ¿Antecedentes de neumopatía? Poner al paciente en sedestación y
dar O2, monitorizar la saturación de O2 periférica con pulsioxímetro (p. 162). Buscar sig-
nos de: • neumonía, colapso pulmonar o aspiración • insuficiencia cardíaca izquierda (IM,
sobrecarga de volumen) •TEP (p. 190) • neumotórax (p. 190; causado por el catéter para
medir la PVC, el bloqueo intercostal o la ventilación mecánica. Pruebas: Hemograma,
gasometría arterial, placa de tórax, ECG. Tratar según los resultados.
↓TA. Si es grave, inclinar el cabecero hacia abajo y dar O2. Medir el pulso y la TA, y com-
parar con los valores preoperatorios. La ↓TA postoperatoria suele ser por hipovolemia
debida a una administración inadecuada de líquidos: compruebe el gráfico de líquidos y
cubra las pérdidas. Monitorice la diuresis (puede ser necesario sondaje). La medición de
la PVC puede ayudar a monitorizar la recuperación de la volemia (lo normal es 0-5
cmH2O respecto al ángulo esternal). La hipovolemia también puede deberse a hemo-
rragia, así que deben revisarse las heridas, los drenajes y el abdomen. Si hay inestabilidad
hemodinámica, reintroducir en el quirófano para hacer hemostasia. Estar alerta de cau-
sas neurogénicas y cardiogénicas, y buscar signos de IM o TEP. Considerar sepsis y anafi-
laxia. Tratamiento: p. 790.
HTA. Puede ser por dolor, retención urinaria, HTA idiopática (p. ej., no tomar la medi-
cación) o fármacos inotrópicos. La medicación cardíaca oral (incluidos los antihiperten-
sivos) deberían mantenerse durante el período perioperatorio, incluso en dieta absolu-
ta. Tratar la causa, valorar incrementar la medicación habitual, o si no puede darse por
boca, probar 50 mg de labetalol IV en 1 min (ver p. 140).
↓Diuresis (oliguria). El objetivo es una diuresis de > 30 mL/h en adultos (o > 0,5
mL/kg/h). La anuria puede reflejar una sonda taponada o mal colocada (ver p. 763) más
que daño renal agudo. Lavar o sustituir la sonda. La oliguria suele deberse a un reempla-
zo insuficiente de las pérdidas de líquido. Se trata incrementando la administración de
líquidos. El daño renal agudo puede ocurrir tras shock, fármacos, transfusión, pancrea-
titis o traumatismo (ver p. 300 para la clasificación y tratamiento del daño renal agudo).
• Revisar gráfica de líquidos y buscar signos de depleción de volumen.
• La retención urinaria es también frecuente: explorar si hay vejiga palpable.
• Establecer la normovolemia (una vía para medir la PVC puede ayudar); puede reque-
rirse 1 L/h iv durante 2-3 h. Una infusión «a chorro» de 250-500 mL en 30 min tam-
bién puede ayudar.
• Sondaje vesical (para una monitorización precisa). Ver p. 762; mide urea y electrolitos.
• Si se sospecha fallo renal intrínseco, suspenda los fármacos nefrotóxicos (p. ej., AINE,
IECA) e interconsulte al nefrólogo rápidamente.
Náuseas/vómitos. ¿Existe obstrucción mecánica, íleo o fármacos eméticos (opiáceos,
digoxina, anestésicos)? Valorar placa de abdomen, sonda nasogástrica y antieméticos
( salvo metoclopramida, por su efecto procinético).Ver p. 251 para la elección del antie-
mético.
↓Na+. ¿Niveles preoperatorios? El exceso de fluidos IV puede exacerbar la situación.
Corregir despacio (p. 672). El dolor, las náuseas, los opioides y la infección pulmonar pue-
den precipitar un SIADH (p. 673).
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 13_Oxford 07/05/18 16:16 Página 577
Cirugía
• Por la cirugía en general: (p. 576) p. ej., infección de la herida, hemorragia, daño neu-
rovascular, TVP/TEP.
• Por el procedimiento específico: p. ej., daño del nervio safeno en la resección de una
variz larga.
Individualice la discusión para el paciente; por ejemplo, si padece arteriopatía, tiene
un riesgo significativo de isquemia cardíaca en los episodios hipotensivos que pue-
dan ocurrir bajo la anestesia general. Para otras complicaciones postoperatorias, ver:
• Dolor (p. 574) •TVP (p. 578) •TEP (p. 190; masivo, p. 818) • Dehiscencia de la heri-
da (p. 580) • Complicaciones tras la cirugía gástrica (p. 622) • Otras complicaciones
de operaciones específicas (p. 580).
Cirugía
mismo grado.
Edema unilateral. Dolor ± eritema implican TVP o inflamación, p. ej., celulitis o pica-
duras de insecto (¿hay ampollas?). La causa puede ser ósea o muscular: tumores, fascitis
necrotizante (p. 660); traumatismo (explorar sensibilidad, pulsos y dolor intenso, sobre
todo a la movilización: un síndrome compartimental con necrosis isquémica requiere
fasciotomía). La afectación de la movilidad sugiere traumatismo, artritis o quiste de Baker
(p. 694). El edema sin fóvea es aquel que no deja marca al presionar: ver p. 35.
Nueve preguntas que plantearse
1. ¿Afecta a ambas piernas? 2. ¿Está embarazada? 3. ¿Se moviliza?
4. ¿Traumatismos? 5. ¿Deja fóvea (p. 35)? 6. ¿Antecedentes personales/fármacos?
7. ¿Duele? 8. ¿Hay cambios cutáneos? 9. ¿Hay edema en otras zonas?
Pruebas. Buscar proteinuria (+hipoalbuminemia (≈ síndrome nefrótico)). ¿ICC?
Tratamiento del edema de miembros inferiores. Tratar la causa. La diuresis no
es la respuesta para todas. Elevar las piernas para el edema gravitacional (los tobillos por
encima de las caderas, no valen los reposapiés); elevar el pie de la cama. Las medias de
compresión graduadas pueden ayudar (contraindicadas si isquemia).
Cirugía
den ser secundarias a infecciones, radiación y procesos inflamatorios como la enfer-
medad de Crohn. Sus principales secuelas son la obstrucción intestinal (son causa
del ~60% de casos, ver p. 610) y el dolor crónico abdominal o pélvico. Los estudios
han mostrado que la adhesiólisis puede ayudar a aliviar el dolor crónico, aunque para
una pequeña proporción de pacientes el dolor no mejora o incluso empeora tras la
intervención.
En lo que a prevenir se refiere, la mejor intervención es evitar operar; la laparos-
copia reduce la tasa de adhesiones comparada con la laparotomía. La inserción de
películas sintéticas (p. ej., membrana de ácido hialurónico/carboximetilcelulosa) para
prevenir adhesiones a la pared abdominal anterior reduce la incidencia, extensión y
gravedad de las bridas, pero no la incidencia de obstrucción o de reintervención.
Cirugía
• Estenosis.
• Hernia paraestomal (el riesgo aumenta con el tiempo). Nota: La inserción de una
malla profiláctica en el momento de la creación del estoma reduce el riesgo.
• Fístula.
• Problemas psicológicos.
Identificar a los pacientes en riesgo. Evaluar el estado nutricional (usando p. ej., la Mal-
nutrition Universal Screening Tool3) y pesar a los pacientes en el ingreso; reevaluar semanalmente
después. Consultar a los nutricionistas desde temprano en los que estén en riesgo.
• Historia: ↓Peso reciente (> 20%, sin contar el balance de fluidos); ingesta reducida
reciente, cambio dietético (p. ej., cambio reciente en la consistencia de la comida), náu-
seas, vómitos, dolor, diarrea, que pueden llevar a una menor ingesta.
• Exploración: Estado de hidratación (p. 666), la deshidratación puede ir de la mano con
la desnutrición, y la sobrehidratación puede enmascarar la desnutrición. Signos de des-
nutrición: piel colgando de los músculos (p. ej., del bíceps); ausencia de grasa en el plie-
gue cutáneo; pelo tosco y áspero; úlceras por presión; erosiones en las comisuras labia-
les. Calcular el índice de masa corporal (p. 244); IMC < 18,5 kg/m2 sugiere desnutri-
ción. Los índices antropomórficos, como la circunferencia braquial, la medida del plie-
gue cutáneo y la fuerza de agarre, también se utilizan.
• Pruebas: Generalmente no ayudan. La hipoalbuminemia es sugestiva, pero puede
deberse a muchas causas aparte de la nutrición. ↑Albúmina puede ayudar a monito-
rizar la recuperación.
Nutrición enteral (Nutrición dada en el tracto gastrointestinal). Si es posible, nutrir
por boca. Una dieta líquida puede cumplir los requerimientos mínimos (pero pida con-
sejo a los nutricionistas). Si hay riesgo de atragantamiento o aspiración (p. ej., tras un
ictus), valorar dieta semisólida. La nutrición enteral postoperatoria temprana ha mostra-
do ser beneficiosa para los pacientes (p. ej., tras cirugía GI) y puede reducir las compli-
caciones. Alimentación por sonda: Nutrición líquida por una sonda: la nasogástrica se suele
colocar a ciegas; las sondas nasoyeyunales requieren colocación endoscópica (se usan si
hay obstrucción de la salida gástrica, retraso del vaciamiento gástrico, postgastrectomía,
o en la pancreatitis). Alternativamente, las sondas gástricas o yeyunales pueden insertar-
se radiológica o quirúrgicamente (p. ej., gastrostomía/yeyunostomía). Usar con prepara-
dos comerciales, nutricionalmente completos. La comunicación estrecha con un nutri-
cionista es esencial. Los preparados poliméricos consisten en proteínas no digeridas, poli-
sacáridos y ácidos grasos de cadena larga (p. ej., Nutrison standard®, Osmolite®). Nor-
malmente contienen ~1 kCal/mL y 4-6 g de proteínas/100 mL. Los requerimientos típicos
se alcanzan con 2 L/24 h. Los preparados elementales consisten en aminoácidos, oligo- y
monosacáridos individuales que apenas necesitan digestión. La administración de los pre-
parados suele comenzar a una velocidad lenta y continua (para evitar náuseas y vómi-
tos) pero los pacientes pueden acostumbrarse a bolos más cortos, quedando libres de
la infusión entre ellos.
Guía para el éxito
• Usar una sonda nasogástrica fina (9 Fr) cuando sea posible.
• Comprobar la colocación de la sonda nasogástrica (medir pH) antes de empezar la
alimentación (p. 759); la colocación de una sonda nasoyeyunal puede comprobarse
con una placa de abdomen.
• Aumentar gradualmente las infusiones para prevenir la diarrea y la distensión.
• Pesar al menos semanalmente.
• Medir la glucemia y los electrolitos plasmáticos (monitorizar la aparición de síndrome
de realimentación, si previamente estaba malnutrido; p. 587).
• Tratar las enfermedades subyacentes vigorosamente, p. ej., la sepsis puede impedir un
balance de nitrógeno positivo.
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Cirugía
Requerimientos
Sustancia Notas
(/kg/día)
Energía 20-40 kCal Los requerimientos normales de un adulto son
2000-2500 kCal/día; incluso los pacientes
catabólicos no suelen requerir > 2500 kCal/día
84-168 kJ Multiplicar kCal por 4,2
Nitrógeno 0,2-0,4 g 6,25 g de proteínas enterales proporcionan 1 g
de nitrógeno. Tener en cuenta el balance de
nitrógeno es importante, pues aunque el
catabolismo es inevitable, la reposición es vital
Proteínas 0,5 g Contienen 5 kCal/g
Grasas 3g Contienen 10 kCal/g
Carbohidratos 2g Contienen 4 kCal/g
Agua 25-30 mL +500 mL/día por cada ºC de fiebre
Na/K/Cl 1,0 mmol cada uno Los electrolitos deben tenerse en cuenta,
incluso si no están en infusión IV
normal es aportar 2000 kCal y 10-14 g de nigrógeno en 2-3 L; esto suele alcanzar los
requerimientos diarios del paciente (ver tabla 13.6, p. 585). ~50% de las calorías las apor-
tan las grasas, y ~50% los carbohidratos. Los regímenes incluyen vitaminas, minerales, oli-
goelementos y electrolitos; estos son normalmente incluidos por el farmacéutico.
Complicaciones
• Sepsis (p. ej., Staphylococcus epidermidis y Staphylococcus aureus; Candida; Pseudomonas;
endocarditis infecciosa.) Sospechar si presenta fiebre en picos, y explorar el punto de
inserción de la vía. Interrumpir la NP, coger una vía y hemocultivos, y dar antibióticos
por la vía. Si se sospecha sepsis relacionada con la vía central, el curso de acción más
seguro es siempre retirar la vía. No intentar salvar una vía cuando se identifique infec-
ción por S. aureus o Candida.
• Trombosis: Puede haber trombosis venosa central, y resultar en embolia pulmonar o
en obstrucción de la cava superior (p. 528).
• Desequilibrio metabólico: Anomalías de los electrolitos: ver RECUADRO «Síndrome de rea-
limentación»; alteraciones de la glucemia; hiperlipidemia; síndromes carenciales (tabla 6.9,
p. 268); desequilibrio ácido-base (p. ej., hipercapnia por producción excesiva de CO2).
• Mecánicas: Neumotórax, embolia de la punta de la vía IV.
Guía para el éxito
Mantenga contacto estrecho con el equipo de inserción de la vía, el equipo de nutri-
ción y los farmacéuticos.
• Esterilidad meticulosa. No usar la vía venosa central para usos distintos de la nutrición.
Retirar la vía si se sospecha infección. Cultivar su punta.
• Revisar el balance de fluidos al menos dos veces al día, y los requerimientos de ener-
gía y electrolitos diariamente.
• Medir peso, balance de fluidos y glucosa en orina una vez al día mientras se establece
la nutrición parenteral. Medir glucemia, creatinina, electrolitos (incluidos calcio y fosfa-
to) y hemograma diariamente hasta que estén estables. Pedir pruebas de función
hepáticas y aclaramiento de lípidos tres veces a la semana hasta que estén estables.
Medir zinc y magnesio semanalmente.
• No correr. Alcanzar el régimen de mantenimiento en pequeños pasos.
• Tratar las enfermedades de base vigorosamente: p. ej., la sepsis puede impedir un
balance de nitrógeno positivo.
5 La alimentación enteral promueve la integridad de la barrera mucosa intestinal, por lo que previene
la translocación de bacterias y endotoxina a través de la pared intestinal, que puede llevar a fallo mul-
tiorgánico y a perpetuar una respuesta inflamatoria sistémica, incluso cuando el intestino no es la fuen-
te primaria de enfermedad.
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CAP. 13_Oxford 07/05/18 16:16 Página 587
Cirugía
Prevención. Dar dosis altas de Pabrinex® durante la ventana de realimentación.
Identificar los pacientes en riesgo, evaluar y monitorizar estrechamente durante la
realimentación (glucosa, lípidos, sodio, potasio, fosfato, calcio, magnesio y zinc). Es
necesaria la implicación estrecha de un nutricionista.
Tratamiento. Tratar las complicaciones, y administrar fosfato parenteral (p. ej.,
18 mmol/día) además de la suplementación oral.
Cirugía
9,1-11,0 3 U/h
11,1-14,0 4 U/h
14,1-17,0 5 U/h
17,1-20 6 U/h
> 20 6 U/h; pedir revisión diabética urgente
Los fluidos deben prescribirse para administrarse junto con la VRIII (por la misma
vía, mediante una válvula de no retorno). Lo ideal es usar cloruro sódico al 0,45%
con glucosa al 5% más cloruro potásico (KCl) al 0,15% (= 20 mmol/L) o al 0,3%
(= 40 mmol/L). Esto proporciona un aporte constante de sustrato, pero no está dis-
ponible en todos los sitios.
Como alternativa, usar glucosado al 10% + KCl. Esto tiene un menor riesgo de hipo-
glucemia e hiponatremia que el glucosado al 5%. Si la glucemia capilar > 15 mmol/L
al empezar la VRIII, usar salino al 0,9% hasta < 15 mmol/L, luego usar glucosado al 10%.
Los fluidos deberían darse a 83-125 mL/h (p. ej., 1L en 8-12 h). Omitir el potasio si
hay fallo renal o hipercalemia, y reducir la velocidad de infusión en la insuficiencia car-
díaca.
rar vía central, inótropos y furosemida si la diuresis es baja a pesar de una adecuada
hidratación. Medir y corregir urea y electrolitos a diario.
591
Cirugía
palpación es imposible y puede ser más difícil localizar las lesiones antes de la resección.
Como consecuencia, puede ser necesario que el estudio de imagen preoperatorio tenga
que ser más extenso. Una nueva habilidad tiene que aprenderse y enseñarse.
Cirugía ambulatoria. Los avances en las técnicas quirúrgicas y en los cuidados perio-
peratorios implican mejores resultados para el paciente (menores listas de espera,
menos infecciones, menos días sin trabajar y ↑ satisfacción del paciente). Muchas opera-
ciones pueden hacerse hoy de manera ambulatoria. En teoría, cualquier procedimiento
es adecuado, siempre que el tiempo bajo anestesia general no exceda ~1 h. El uso de
anestesia regional ayuda a evitar las náuseas y desorientación que pueden acompañar a
la anestesia general, facilitando por tanto el alta.
Tenga en cuenta que los siguientes grupos de pacientes pueden no ser adecuados para
la cirugía ambulatoria: • Demencia grave. • Retraso mental grave. • Vivir solo (y sin ayu-
dantes). • Niños, si la supervisión es difícil: los cambios en expectativas, retrasos y el ali-
vio del dolor pueden ser problemáticos. • IMC > 32 (p. 244). • Categoría ASA ≥ III
(p. 567), con comorbilidades potencialmente inestables: consultar al anestesista. • Infec-
ción en el sitio de la cirugía.
593
Cirugía
ejemplo.
Lipomas. Estas tumoraciones benignas de grasa ocurren en cualquier lugar en el que la
grasa se pueda expandir (p. ej., no en cuero cabelludo o palmas); tienen márgenes sua-
ves e imprecisos, cierta fluctuación, y no están fijados a la piel o a estructuras profundas.
Los síntomas se deben solo a la presión. La malignización es muy infrecuente (sospe-
charla si hay crecimiento rápido/endurecimiento/vascularización). La presencia de múlti-
ples lipomas diseminados, que pueden ser dolorosos, se ve en la enfermedad de Der-
cum, típicamente en mujeres postmenopáusicas.
Quiste sebáceo. Mejor llamados quistes epidermoides (fig. 13.11) o pilares (ya que no
son de origen sebáceo y contienen queratina, no sebo). Se presentan como nódulos sub-
cutáneos firmes, redondos y móviles, de tamaño variable. Buscar el característico punc-
tum central. La infección es bastante común: en ella puede salir pus maloliente por el
punctum. Son frecuentes en el cuero cabelludo, cara, cuello y tronco. Tratamiento: Extir-
pación del quiste y su contenido.
Ganglios linfáticos. Causas de linfadenopatía: Infección: Mononucleosis, brucelosis, TB,
VIH, toxoplasmosis, actinomicosis, sífilis. Infiltración: Malignidad (carcinoma, linfoma), sar-
coidosis.
Abscesos cutáneos. Los estafilococos son los organismos más frecuentes. El estrep-
tococo hemolítico es frecuente solo en infecciones de mano. Proteus es una causa fre-
cuente de abscesos axilares no estafilocócicos. Por debajo de la cintura, los organismos
fecales son frecuentes (aerobios y anaerobios). Tratamiento: Incisión y drenaje. Los forún-
culos son abscesos que afectan a un folículo piloso y sus glándulas asociadas. Un ántrax
es un área de necrosis subcutánea que drena en la superficie a través de múltiples sinus.
Piense en la hidradenitis supurativa en caso de abscesos inguinales o axilares recurrentes.
Nódulos reumatoides (fig. 13.12). Granulomas colágenos que aparecen en artritis
reumatoide establecida, en las caras extensoras de las articulaciones, sobre todo codos
(fig. 13.12).
Gangliones. Quistes degenerativos de una articulación o vaina sinovial adyacente; se
ven comúnmente en el dorso de la muñeca o mano y en el dorso del pie. Pueden trans-
iluminar. El 50% desaparecen espontáneamente. La aspiración puede ser efectiva, espe-
cialmente si se combina con infiltración de corticoide y hialuronidasa. Para el resto, el tra-
tamiento de elección es la excisión, mejor que el tradicional reventón con tu biblia (¡el
Oxford Texbook of Surgery!) Ver fig. 13.13.
Fibromas. Pueden ocurrir en cualquier parte del cuerpo, pero más frecuentemente
bajo la piel. Son tumores benignos, blanquecinos, que contienen colágeno, fibroblastos y
fibrocitos.
Quistes dermoides. Contienen estructuras dérmicas y se encuentran en la unión de
fronteras cutáneas embrionarias, p. ej., en la línea media o lateralmente al ojo.Ver fig. 13.14.
Tumores malignos del tejido conjuntivo. Fibrosarcomas, liposarcomas, leiomiosar-
comas (músculo liso) y rabdomiosarcomas (músculo estriado). Se estadifican usando el
sistema TNM modificado, incluyendo el grado tumoral. Los tumores grandes se biopsian
con aguja (Trucut®) antes de la resección. Cualquier lesión sospechosa de sarcoma no
debería simplemente enuclearse. Derivar a un especialista.
Neurofibromas. Ver p. 514.
Queloides. Causados por hipertrofia irregular de colágeno vascularizado, formando
bordes sobreelevados en sitios de cicatrices previas, que pueden extenderse fuera de la
cicatriz (fig. 13.15). Frecuentes en pieles oscuras. El tratamiento puede ser difícil. Los cor-
ticoides intralesionales son el pilar básico.
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Cirugía
Fig. 13.11. Quiste epidérmico. Cortesía de Fig. 13.12. Nódulo reumatoide. Cortesía de
DermNetNZ, las páginas webs de la New Zea- DermNetNZ, las páginas webs de la New
land Dermatological Society Inc. www.derm- Zealand Dermatological Society Inc. www.
netnz.org. dermnetnz.org.
Fig. 13.13. Ganglión. Cortesía de John M Erik- Fig. 13.14. Quiste dermoide. Reproducido
son, MD, Raleigh Hand Centre. de Lewis-Jones, Paediatric Dermatology, 2010,
con permiso de Oxford University Press.
Los melanomas de extensión superficial (70%) crecen despacio, metastatizan más tarde y
tienen mejor pronóstico que los melanomas nodulares (10-15%), que invaden en pro-
fundidad y metastatizan antes. Las lesiones nodulares pueden ser amelanóticas en el
~5%. Otros: Los melanomas acrales ocurren en palmas, plantas o área subungueal; el mela-
noma sobre lentigo maligno evoluciona a partir de un lentigo maligno preexistente. El
espesor de Breslow (profundidad en mm), el estadio tumoral y la presencia de ulcera-
ción son factores pronósticos importantes. Tto.: La extirpación urgente puede ser cura-
tiva. La quimioterapia obtiene respuesta en el 10-30% de la enfermedad metastásica
(OHCS, p. 592). El ipilimumab, un anticuerpo monoclonal que bloquea CTLA-4, un recep-
tor inhibidor de células T, ha demostrado mejorar la supervivencia en pacientes con
melanoma metastásico5,6.
2. Carcinoma espinocelular: Suele presentarse como una lesión ulcerada, con bordes duros
y sobreelevados, en áreas fotoexpuestas. Puede comenzar sobre queratosis actínicas (ver
más adelante) o aparecer sobre los labios de fumadores, o en úlceras de larga evolución (=
úlcera de Marjolin). Las metástasis a los ganglios linfáticos son infrecuentes, la destrucción
local puede ser extensa. Tto.: Extirpación + radioterapia para tratar recurrencias/ganglios
afectados. Ver fig. 13.17. Nota: esta condición puede confundirse con un queratoacantoma-
una pápula benigna autolimitada, de crecimiento rápido, con un tapón queratósico.
3. Carcinoma basocelular (ulcus rodens): Nodular: suele ser un nódulo perlado con bordes
telangiectásicos «enrollados», en la cara o en sitios fotoexpuestos. Puede tener una úlce-
ra central. Ver fig. 13.18. Las metástasis son muy infrecuentes. Lentamente causa des-
trucción local si no se trata. Superficial: las lesiones aparecen como placas descamativas
eritematosas con bordes lisos sobreelevados, frecuentemente en el tronco o en los
hombros. Causa: (lo más frecuente) exposición UV. Tto.: extirpación, crioterapia; para
CBC superficiales: fluorouracilo o imiquimod tópicos (como en «queratosis actínicas»).
Tumores premalignos
1. Queratosis solar (actínica): Aparecen en piel fotoexpuesta como lesiones costrosas
blancoamarillentas. La degeneración en carcinoma espinocelular puede ocurrir al cabo
de muchos años. Tratamiento: crioterapia, crema de fluorouracilo al 5% o imiquimod al 5%:
su uso causa: eritema → vesiculación → erosión → ulceración → necrosis → reepiteli-
zación; respetando la piel sana. Avisar al paciente de la previsible reacción inflamatoria.
Ver BNF para las dosis. Alternativamente: gel de diclofenaco (3%, usar capa fina dos veces
al día durante ≤ 90 d).
2. Enfermedad de Bowen: Placa eritematosa/parduzca de crecimiento lento, p. ej., en
las piernas. Histología: displasia del espesor total (carcinoma in situ). Progresa con fre-
cuencia a carcinoma espinocelular. La enfermedad de Bowen del pene se llama eritro-
plasia de Queyrat. Tratamiento: crioterapia, fluorouracilo tópico (como en «queratosis actí-
nicas») o terapia fotodinámica.
3. Ver también sarcoma de Kaposi (p. 702), enfermedad de Paget mamaria (p. 708).
Otros. • Carcinoma secundario: Las metástasis cutáneas más frecuentes son las de mama,
riñón o pulmón. Normalmente son nódulos firmes, con más frecuencia en el cuero cabellu-
do. Ver también acantosis nigricans (p. 562). •Micosis fungoide: Linfoma cutáneo de células T
normalmente confinado a la piel. Causa placas eritematosas pruriginosas (el síndrome de
Sézary es una variante que asocia también eritrodermia). •Leucoplasia: Se manifiesta como
placas blancas (que pueden fisurarse) en la mucosa oral o genital (donde puede picar).
Puede haber cambios carcinomatosos francos. • Lepra: Sospechar en toda lesión hipopig-
mentada anestésica (p. 441). • Sífilis: Toda úlcera genital es sífilis hasta que se demuestre lo
contrario. Sífilis secundaria: exantema papular, incluyendo en ocasiones las palmas (p. 412).
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CAP. 13_Oxford 07/05/18 16:16 Página 597
Cirugía
Fig. 13.16. Melanoma. Fig. 13.17. Carcinoma espino- Fig. 13.18. Carcinoma basocelu-
celular. lar (CBC).
Arteria carótida
Glándula parótida 599
externa Ganglios parotídeos
Esternomastoideo
Milohioideo
Nervio hipogloso
Ganglios amigdalinos
Ganglios Ganglios occipitales
submandibulares
Escaleno medio
Cirugía
Hueso hioideo
Esternohioideo Nervio vago
Esternotiroideo
Arteria subclavia
Arteria carótida
común Vena subclavia
Esternomastoideo
Fig 13.19. Estructuras importantes de cabeza y cuello.
Patología de las glándulas salivares
Hay tres pares de glándulas salivares mayores: parótidas, submandibulares y sublinguales
(hay muchas glándulas menores). Historia: Tumoraciones, hinchazón en relación con la
comida, dolor. Exploración: Hinchazón externa, explorar las secreciones; palpación bima-
nual para los cálculos. Examinar 7º par y ganglios linfáticos regionales. Citología: Hacer
PAAF.
Hinchazón aguda: Pensar en paperas y VIH. La hinchazón y dolor unilaterales recurrentes sue-
len deberse a un cálculo. El 80% son submandibu-
lares. La historia clásica consiste en dolor e hin-
chazón al comer, con una glándula enrojecida,
dolorosa, hinchada pero no infectada. El cálculo
puede verse en una radiografía simple o por sia-
lografía (fig. 13.20). Los cálculos distales se retiran
por vía oral, pero los más profundos pueden
requerir resección de la glándula. Los síntomas cró-
nicos bilaterales pueden coexistir con ojos y boca
secos y enfermedad autoinmune; p. ej., hipotiroi-
dismo, síndrome de Mikulicz o de Sjögren (p. 706
y p. 710), también la bulimia o el exceso de alco-
hol. El aumento de volumen fijo puede ser por un
tumor/LLA (fig. 8.49, p. 335), sarcoidosis, granulo-
matosis con poliangeítis o ser idiopático. Fig 13.20. Sielograma normal de la
Tumores de glándulas salivares (tabla glándula submandibular. El conducto de
13.9). «80% son en la parótida, 80% de ellos son Wharton (submandibular) desemboca
adenomas plemorfos, el 80% de ellos son en el en la boca cerca del frenillo lingual.
lóbulo superficial». La desviación de la oreja
hacia fuera es un signo clásico. Extirpar todo aumento de volumen de glándula salivar
para evaluación si ha estado presente > 1 mes. La parálisis del 7º par indica malignidad.
Nervio vago
Lóbulo izquierdo
de la glándula
tiroides Nervio
laríngeo
Arteria tiroidea superior
superior
Lóbulo derecho
Glándulas de la glándula
paratiroides tiroides
superiores
Arteria tiroidea
inferior
Glándulas
Cirugía
paratoiroides
inferiores
Nervio
Nervio laríngeo laríngeo
recurrente recurrente
Fig. 13.21. Anatomía de la región de la glándula tiroides. Las estructuras importantes que
deben ser consideradas al operar la glándula tiroides incluyen:
• Nervio laríngeo recurrente.
• Nervio laríngeo superior.
• Glándulas paratiroides.
• Tráquea.
• Arteria carótida común.
• Vena yugular interna (no mostrada, ver fig. 13.23).
D I
Fig. 13.22. Gammagrafía tiroidea que mues- Fig. 13.23. Ecografía transversa del lóbulo
tra cambios consistentes con enfermedad de izquierdo del tiroides que muestra un pequeño
Graves (ver también nódulos calientes y fríos quiste hipoecoico dentro del tejido tiroideo
(p. 216) y medicina nuclear, p. 738). Hay un hiperecogénico. Advertir la proximidad de la
aumento de la captación del radiotrazador glándula a la arteria carótida común y la vena
difuso en ambos lóbulos de la glándula (razón yugular interna (esta última ligeramente com-
de captación = 6:1). primida por la presión de la sonda); ambas pue-
Imagen cortesía del Departamento de Radiolo- den verse detrás del cuerpo del músculo ester-
gía de Norwich. nocleidomastoideo.
Imagen cortesía del Departamento de Radiología
de Norwich.
Cirugía
→ citología
Fig. 13.24. Triple evaluación y estudio de un nódulo mamario. *La ecografía es más precisa para
la detección de cáncer de mama invasivo, aunque la mamografía sigue siendo más precisa para la
detección de carcinoma ductal in situ (CDIS). La RM se usa en la evaluación de enfermedad mul-
tifocal/bilateral y en pacientes con prótesis cosméticas que sean identificadas como de alto riesgo.
Cirugía
recordar el compromiso excepcional de Mrs Todd-Crawford. Con las prisas de nues-
tras tareas diarias, quizás es fácil olvidar que la realización de la cirugía hoy día puede
no ser menos temible para los pacientes de lo que lo era hace 200 años.
Cirugía
Adenitis mesentérica
Diverticulitis de Meckel Ruptura de embarazo
Enfermedad de Crohn ectópico
Perforación de ciego Hernia estrangulada
Absceso del psoas Perforación de colon
Enfermedad de Crohn
Colitis ulcerosa
Fig. 13.25. Causas de dolor abdominal. Cálculo renoureteral
2 Hay un segundo pico entre los 60-70 años; los adultos de más edad pueden presentarse más tarde
con síntomas atípicos.
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CAP. 13_Oxford 07/05/18 16:16 Página 609
Cirugía
Posterior Distal al anterior Suprapúbico Mesentérica inferior
El mesenterio
apendicular y la
arteria apendicular
se ligan y seccionan
obstrucción, sin compromiso vascular. Asa cerrada: Obstrucción en dos puntos (p. ej.,
vólvulo de sigma) formando un asa de intestino excesivamente distendida con riesgo
de perforación. Estrangulada: el aporte sanguíneo está comprometido y el paciente
está más enfermo de lo que cabría esperar. El dolor es más agudo, más constante y
localizado. El peritonismo es el signo cardinal. Puede haber fiebre + leucocitosis, con
otros signos de isquemia mesentérica (p. 620).
Causas. Ver tabla 13.12.
Tabla 13.12. Causas de obstrucción intestinal
Causas: intestino Causas: intestino Causas más
delgado grueso infrecuentes
• Adhesiones (p. 581) • Ca de colon (p. 616) • Estenosis por Crohn
• Hernias (p. 612) • Estreñimiento (p. 260) • Íleo biliar (p. 634)
• Estenosis diverticular • Invaginación
• Vólvulo • TB (países en desarrollo)
• Sigmoide (ver RECUADRO • Cuerpo extraño
«Vólvulo sigmoide»)
• Cecal
Tratamiento
• Principios generales: La causa, el sitio, la velocidad de inicio y el grado de obstrucción
determinan el tratamiento definitivo: la estrangulación y la obstrucción de intestino
grueso requieren cirugía; el íleo y la obstrucción incompleta de intestino delgado pue-
den recibir tratamiento conservador, al menos al principio.
• Acción inmediata: «Drip and suck (gotear y sorber)»: SNG y fluidoterapia IV para
rehidratar y corregir el desequilibrio electrolítico (p. 668). La dieta absoluta no da el
suficiente reposo al intestino, porque este puede producir hasta 9 L de fluido/día. Tam-
bién: analgesia, analítica de sangre (incluyendo amilasa, hemograma, urea y electrolitos),
placa simple de abdomen, placa de tórax en bipedestación, sondaje para monitorizar
el balance de líquidos.
• Pruebas de imagen adicionales: TC para establecer la causa de la obstrucción (puede
mostrar un intestino dilatado y lleno de líquido, y una zona de transición en el lugar de
obstrucción: fig. 13.29, 13.30). El Gastrofrafin® oral antes de la TC puede ayudar a iden-
tificar el nivel de obstrucción y puede tener una leve acción terapéutica contra la obs-
trucción mecánica. Valorar investigar la causa de la obstrucción de colon mediante
colonoscopia, pero tener cuidado con el riesgo de perforación.
• Cirugía: La estrangulación requiere cirugía urgente. La obstrucción en asa cerrada
puede ser tratada con cirugía o intentarse una descompresión endoscópica. El stenting
endoscópico se puede usar para obstrucción debida a cáncer de colon, tanto con
intención paliativa como un puente a la cirugía en el caso de obstrucción aguda
(p. 616). La obstrucción de intestino delgado secundaria a bridas no debería conducir
a cirugía habitualmente: ver RECUADRO, p. 581.
9 La fermentación del contenido intestinal en la obstrucción establecida causa vómitos «fecaloideos».
Los verdaderos vómitos «fecales» se producen cuando hay una fístula colónica con el tubo digestivo
proximal.
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Vólvulo sigmoide
Cirugía
El vólvulo sigmoide ocurre cuando el intestino se torsiona sobre su mesenterio, lo
que puede producir una rápida y grave obstrucción estrangulada (fig. 13.28c). Tien-
de a ocurrir en pacientes ancianos, estreñidos y con comorbilidades, y se trata con
la inserción de un tubo de descompresión o un sigmoidoscopio. La colectomía sig-
moide es necesaria en ocasiones. Si no se trata con éxito, puede progresar a per-
foración y peritonitis fatal.
Fig. 13.28. (a) Obstrucción de intestino delgado: La radiografía simple de abdomen muestra
sombras de gas centrales con válvulas conniventes que cruzan completamente la luz, y ausen-
cia de gas en el intestino grueso. (b) Obstrucción de intestino grueso: La radiografía simple de
abdomen muestra sombras de gas periféricas proximales al bloqueo (p. ej., en el ciego) pero
no en el recto. (c) Vólvulo sigmoide: radiografía simple de abdomen característica con un asa
en «U invertida» que recuerda un poco a un grano de café.
Imágenes (a), (b) y (c) reproducidas de Darby et al., Oxford Handbook of Medical Imaging, 2011, con
permiso de Oxford University Press.
Fig. 13.29. TC sin contraste de abdomen que Fig. 13.30. TC de abdomen con contraste oral
muestra múltiples asas de intestino delgado que muestra asas de intestino grueso dilatadas
dilatadas y llenas de líquido en un paciente y llenas de aire y líquido (el medio de contras-
con obstrucción de intestino delgado. te está en el intestino delgado).
Imagen cortesía del Norwich Radiology Dept. Imagen cortesía del Norwich Radiology Dept.
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masa en la zona superomedial del muslo o encima del ligamento inguinal apuntando
abajo hacia la pierna, a diferencia de una hernia inguinal que apunta hacia la región geni-
tal. Ocurre más frecuentemente en , especialmente de mediana edad y ancianas. Con
frecuencia son irreductibles y se estrangulan, debido a la rigidez de los límites del con-
ducto. Anatomía: Ver fig. 13.32. Diagnóstico diferencial: (Ver p. 651.) 1. Hernia inguinal.
2. Variz de la safena. 3. Ganglio de Cloquet aumentado (p. 615). 4. Lipoma. 5. Aneuris-
ma femoral. 6. Absceso del psoas. Tratamiento: Se recomienda la reparación quirúrgica.
La herniotomía es la ligación y extirpación del saco, la herniorrafia es la reparación del
defecto herniario.
Hernias paraumbilicales. Aparecen justo encima o debajo del ombligo. Los factores de
riesgo son la obesidad y la ascitis. El mesenterio o el intestino se hernian a través del defec-
to. La cirugía consiste en la reparación de la vaina del recto (reparación de Mayo).
Hernias epigástricas. Pasan a través de la línea alba, por encima del ombligo.
Hernias incisionales. Ocurren tras la dehiscencia del cierre muscular después de una
cirugía (11-20%). En obesos, la reparación no es fácil. La reparación con malla ha ↓ las
recurrencias pero ↑ las infecciones en las suturas.
Hernia de Spiegel. Surgen a través de la línea semilunar, en el extremo lateral de la
vaina de los rectos, debajo y lateral al ombligo.
Hernias lumbares. Surgen a través del triángulo lumbar inferior o superior, en la pared
abdominal posterior.
Hernia de Richter. Solo se hernia la pared intestinal, no toda la luz.
Hernia de Maydl. Consisten en la herniación de una «doble asa» de intestino. La por-
ción estrangulada puede quedar como un asa simple dentro de la cavidad abdominal.
Hernia de Littre. Es un saco herniario que contiene un divertículo de Meckel estran-
gulado.
Hernias del obturador. Ocurren a través del conducto obturador. Típicamente, se da
en mujeres delgadas con dolor en la cara medial del muslo.
Hernias ciáticas. Pasan a través del agujero ciático menor (un conducto a través de
varios ligamentos pélvicos). Una obstrucción GI + masa glútea sugieren esta infrecuente
posibilidad.
Hernias deslizantes. Contienen una estructura parcialmente extraperitoneal (p. ej.,
ciego en el lado derecho, colon sigmoide en el izquierdo). El saco no rodea completa-
mente los contenidos.
Hernias pediátricas. Incluyen las hernias umbilicales: (3% de nacidos vivos). Son resul-
tado de un defecto persistente en la fascia transversalis. No suele ser necesaria la repa-
ración quirúrgica, ya que la mayoría se resuelve a los 3 años. Hernias inguinales indirectas
(~4% de todos los lactantes debido a la persistencia del proceso vaginal; la prematu-
ridad es factor de riesgo, es infrecuente en lactantes ; considerar feminización testicu-
lar.) Requieren reparación quirúrgica. Gastrosquisis: Protrusión del contenido abdominal a
través de un defecto de la pared abdominal anterior a la derecha del ombligo. Requie-
ren una rápida reparación quirúrgica. Onfalocele: Los contenidos abdominales se encuen-
tran fuera del abdomen, cubiertos por una membrana trilaminar consistente en perito-
neo, gelatina de Eharton y amnios. La reparación quirúrgica es menos urgente porque el
intestino está protegido por estas membranas.
613
Epigástrica
(Para)umbilical
De Spiegel
Cirugía
Inguinal
Femoral
Obturatriz
Fig. 13.31. Algunos ejemplos de hernia.
Nervio femoral
Arteria fermoral
Vena femoral
Ligamento inguinal
Sartorio
Aductor largo
Vena safena mayor
Hernias irreductibles. Puede que le llamen porque una hernia de larga evolución sea
ahora irreductible y dolorosa. Siempre merece la pena intentar reducirlas por su cuenta
para prevenir la estrangulación y necrosis (que requieren laparotomía rápida). Aprenda
a hacerlo de un experto, esto es, uno de sus pacientes que lleve años reduciendo su her-
nia. Entonces sabrá como actuar correctamente cuando la urgencia se presente. Dése
cuenta de que esos pacientes usan la palma de la mano extendida, dirigiendo la hernia
desde abajo hacia arriba, hacia el hombro contralateral. A veces, a medida que la hernia
se obstruye, la reducción requiere perseverancia, que puede ser recompensada por el
gorgoteo del intestino volviendo a su lugar y por el beso de la atenta esposa que pen-
saba que la cirugía era inevitable.
Reparaciones. Perder peso (si sobrepeso) y dejar de fumar antes de la cirugía. Avisar
de que las hernias pueden recurrir, y se debería informar a los pacientes de la posibili-
dad de dolor crónico postquirúrgico. Las técnicas con malla (p. ej., reparación de Lich-
tenstein) han sustituido a los métodos antiguos. En las reparaciones con malla, una malla
de polipropileno refuerza la pared posterior. La tasa de recurrencias es menor que con
otros métodos (< 2% vs 10%). (CI: hernias estranguladas, contaminación con pus/conte-
nido intestinal.) Las técnicas con anestesia local y de cirugía ambulatoria pueden bajar el
precio de la cirugía a la mitad, lo cual es importante porque esta es una de las opera-
ciones más comunes (> 100.000 al año en RU). La reparación laparoscópica obtiene tasas
de recurrencia similares. Los métodos incluyen el transabdominal preperitoneal (TAPP), en
el que se abre el peritoneo y se repara la hernia, y el totalmente extraperitoneal (TEP),
que disminuye el riesgo de daño a vísceras. Para los beneficios de la cirugía laparoscópi-
ca, ver p. 592.
Vuelta al trabajo: Depende del abordaje quirúrgico y del paciente: discutirlo antes de la
cirugía. Reposo 4 sem y convalecencia alrededor de 10 sem con los abordajes abiertos,
pero las reparaciones laparoscópicas pueden permitir la vuelta al trabajo manual (y a
conducir) tras ≤ 2 sem si todo va bien.
Tubérculo púbico
Vena
Femoral Arteria Hernia femoral
Vena
Ganglio de Cloquet
Cirugía
Fig. 13.33. Anatomía del conducto inguinal. Suelo: Ligamento inguinal y ligamento lacunar me-
dialmente; Techo: Fibras del transverso, oblicuo interno; Anterior: Aponeurosis del oblicuo exter-
no + oblicuo interno en el 1/3 lateral; Posterior: Lateralmente, la fascia transversalis; medialmen-
te, la hoz inguinal.
DRO); sigmoidoscopia o colonoscopia (figs 6.7 y 6.8, p. 249), que pueden hacerse «vir-
tualmente» con la TC (fig. 16.31, p. 743), función hepática, ecografía/RM hepática. El CEA
(p. 531) puede usarse para monitorizar la enfermedad y la eficacia del tratamiento. Si hay
historia familiar de PAF, derivar para test genético cuando > 15 años de edad.
Diseminación. Local, linfática, hematógena (hígado, pulmón, hueso) o peritoneal. El sis-
tema TNM (Tumor, ganglio (Node), Metástasis, ver tabla 13.13 y p. 523) se usa para esta-
dificar la enfermedad, y se prefiere antes que la más antigua clasificación de Dukes (Dukes
A: limitado a la muscularis mucosae; Dukes B: extensión más allá de la muscularis muco-
sae; Dukes TC: afectación de ganglios linfáticos regionales).
Cirugía. El objetivo es curar y puede ↑el tiempo de supervivencia hasta un 50%. En la
cirugía electiva, la anastomosis se realiza típicamente en la 1ª operación. La cirugía lapa-
roscópica ha revolucionado la cirugía del cáncer de colon. Es tan segura como la cirugía
abierta y no hay diferencia en supervivencia global o en recurrencia de la enfermedad. •
Hemicolectomía derecha para tumores de ciego, colon ascendente o transverso proxi-
mal. • Hemicolectomía izquierda para tumores de colon transverso distal o descenden-
te. •Colectomía sigmoide para tumores sigmoides. •Resección anterior para tumores sig-
moides bajos o rectales altos. • Resección abdominoperineal (AP) para tumores en el
recto inferior (~< 8 cm del ano): colostomía permanente y extirpación de recto y ano.
–Procedimiento de Hartmann para la obstrucción intestinal urgente, la perforación, o
como paliativo (p. 582). –La microcirugía endoscópica transanal permite la extirpación
local mediante un proctoscopio ancho para la enfermedad rectal localizada. El stenting
endoscópico debería considerarse como paliativo en la obstrucción maligna, y como un
puente hasta la cirugía en la obstrucción aguda. El stenting puede ↓ la necesidad de colos-
tomía, tiene menos complicaciones que la cirugía urgente, reduce la estancia en cuida-
dos intensivos y hospitalaria total, y previene operaciones innecesarias. La cirugía con
resección hepática puede ser curativa si hay metástasis en un único lóbulo hepático y no
hay diseminación extrahepática.
Radioterapia. Su uso es fundamentalmente paliativo en el cáncer de colon. Ocasio-
nalmente se usa como neoadyuvante en el cáncer rectal para permitir la resección. La
radioterapia postqx solo se usa en pacientes con tumores rectales de alto riesgo de
recurrencia.
Quimioterapia. La quimioterapia adyuvante para la enfermedad estadio 3 ha demos-
trado reducir la recurrencia de enfermedad en un 30%, y la mortalidad en un 25%. Los
beneficios para la enfermedad estadio 2 son más marginales y es necesario un abordaje
individualizado. El régimen FOLFOX se ha vuelto estándar (5-FU, ácido folínico y oxalipla-
tino). La quimioterapia también tiene un uso paliativo en la enfermedad metastásica. Tera-
pias biológicas: El bevacizumab (anticuerpo anti-VEGF) aumenta la supervivencia cuando
se añade al tratamiento combinado en la enfermedad avanzada. El cetuximab y el pani-
tumumab (agentes anti-EGFR) mejoran la tasa de respuesta y la supervivencia en el cán-
cer colorrectal metastásico sin mutación en KRAS.
Pronóstico. La supervivencia depende de la edad y el estadio; en el estadio 1, la super-
vivencia a 5 años es ~75%, pero cae hasta el 5% cuando se diagnostica en el estadio 4;
de ahí lo imperativo de un cribado eficaz (RECUADRO).
Ciego 14%
Colon sigmoide 20%
Apéndice 1%
Recto 27%
Ano 2%
Otros y no especificado 9%
Cirugía
Fig. 13.34. Distribución de los carcinomas colorrectales. Se trata de medias: las mujeres negras
tienden a presentar neoplasias más proximales. Los varones blancos tienden a presentar neo-
plasias más distales.
Cirugía
Signos: que sugieren enfermedad incurable: masa epigástrica, hepatomegalia, ictericia, asci-
tis (p. 604), gran adenopatía supraclavicular izquierda (de Virchow) (=signo de Troisier),
acantosis nigricans (p. 562). La mayoría de pacientes en occidente se presenta con enfer-
medad localmente avanzada (inoperable) o metastásica. La diseminación es local, linfáti-
ca, hematógena y peritoneal, p. ej., a los ovarios (tumor de Krukenberg).
Pruebas. Gastroscopia + múltiples biopsias del borde de la úlcera. Biopsiar toda úlce-
ra gástrica ya que incluso las úlceras malignas pueden aparentar curarse con el tratamiento
médico. La ecografía endoscópica (ecoendoscopia) puede evaluar la profundidad de la
invasión; la TC/RM ayudan a estadificar. La laparoscopia de estadificación se recomienda
en tumores localmente avanzados. La citología del lavado peritoneal puede ayudar a
identificar metástasis peritoneales.
Tratamiento. Ver p. 622 para una descripción de las resecciones quirúrgicas. Los cán-
ceres gástricos tempranos pueden ser resecables endoscópicamente (resección mucosa
endoscópica). La gastrectomía parcial puede ser suficiente para tumores distales más
avanzados. En los proximales, puede ser necesaria la gastrectomía total. La quimioterapia
en combinación (p. ej., epirrubicina, cisplatino y 5-fluorouracilo) parecen aumentar la super-
vivencia en la enfermedad avanzada. Dada en el perioperatorio en la enfermedad ope-
rable, aumenta la supervivencia comparada con la cirugía sola. El tratamiento paliativo
quirúrgico es frecuentemente necesario para la obstrucción, dolor o la hemorragia. En la
enfermedad localmente avanzada y metastásica, la quimioterapia aumenta la calidad de
vida y la supervivencia. Es probable que las terapias dirigidas tengan un papel cada vez
mayor, p. ej., el trastuzumab para los tumores HER-2 positivos.
Supervivencia a 5 años. < 10% globalmente, pero casi del 20% en pacientes someti-
dos a cirugía radical. El pronóstico es mucho mejor en el carcinoma gástrico «temprano».
Arteria
mesentérica
621
superior Arteria
Arteria cólica mesentérica
media inferior
Arteria cólica
derecha Arteria cólica
izquierda
Ramas yeyunales
Ramas
e ileales
sigmoides
Arteria Arteria rectal
ileocólica superior
Cirugía
Fig. 13.36. Vascularización arterial del colon.
Gastrectomía Billroth II (AKA Polya): (fig. 13.37) Gastrectomía parcial con anastomosis gas-
troyeyunal. El muñón duodenal es sobrehilado (dejando un asa aferente ciega), y la anas-
tomosis se consigue con una incisión longitudinal a la parte proximal del yeyuno. Y de
Roux: (fig. 13.38) siguiendo una gastrectomía total o subtotal, el muñón del duodeno pro-
ximal se sobrehila, el yeyuno proximal es dividido por el duodeno distal y se conecta con
el esófago (o el estómago proximal después de una gastrectomía subtotal), mientras que
el duodeno distal se conecta a la parte distal del yeyuno.
La limpieza de nódulos linfático es un área de controversia. Revisiones y metaanálisis sugie-
ren que puede haber un beneficio limitado y un aumento de la morbilidad asociada a lin-
fadenectomías extensas (D2 o D3) sobre la resección limitada de los ganglios perigástri-
cos (D1).
Complicaciones físicas de la gastrectomía
• Sensación de plenitud abdominal anormal: Sentirse saciado precozmente (± causando
incomodidad y distensión) que mejora con el tiempo. Advierte que se tienen que
hacer pequeñas y frecuentes comidas.
• Síndrome del asa aferente: Postgastrectomía (p. ej., Billroth II), el asa aferente se puede
llenar de bilis después de la comida, causando un dolor abdominal superior y vómitos
biliosos. Esto dificulta el tratamiento –pero suele mejorar con el tiempo.
• Diarrea: Puede ser invalidante después de una vagotomía. El fosfato de codeína puede
mejorarla.
• Tumor gástrico: Una complicación de cualquier cirugía que ↓ la secreción de ácido.
• ↑ amilasa: Si se asocia a dolor abdominal, puede indicar una obstrucción de asa afe-
rente después de una cirugía Billroth II y requiere una cirugía de urgencia.
Complicaciones metabólicas
• Sindrome de dumping: Sudoración y sensación de mareo después de comer debido a
comida con un potencial osmótico alto que llega al yeyuno, causando oligohemia por
un paso de fluidos muy rápido. El «dumping tardío» se debe al rebote hipoglucémico
y ocurre 1-3 h después de las comidas. Ambos tienden a mejorar con el tiempo pero
puede ser necesario comer menos azúcar y más guarina y pectina (glucosa de absor-
ción lenta). La acarbosa puede tambien ayudar a reducir los estímulos hiperglucémicos
tempranos para la secreción de insulina.
• Pérdida de peso: Frecuentemente debida a ingesta calórica pobre.
• Sobrecrecimiento bacteriano ± malabsorción (síndrome del asa ciega). Puede ocurrir.
• Anemia: Normalmente por una falta de hierro, hipoclorhidria y resección gástrica. Los
niveles de B12 suelen ser bajos pero la anemia megaloblástica es rara.
• Osteomalacia: Puede haber pseudofracturas que parezcan metástasis.
Cirugía
Fig. 13.37. Billroth II. Fig. 13.38. Reconstrucción en Y de Roux.
Theodor Billroth
Theodor Billroth fue un cirujano de origen austro-germánico, cuyo nombre vive en
un conjunto de cirugías de estómago. Él fue un pionero de la cirugía abdominal y del
uso de técnicas asépticas, realizando la primera cirugía de Billroth I en 1881 para la
resección de un carcinoma gástrico de píloro. Entre muchos de sus logros remarca-
bles se incluye la primera laringuectomía. Fue también un músico de gran talento (un
amigo cercano de Brahms) y un dedicado educador con un tipo de visión realista
del mundo:
«El placer de un médico es pequeño, la gratitud de los pacientes es rara, y aún es más
rara la recompensa económica, pero estas cosas nunca detendrán al estudiante que sien-
te la llamada dentro de sí»
Theodor Billroth (1829-94).
Rotura esofágica
Causas. •Iatrogénica: p. ej., endoscópica/biopsia/dilatación (es la causa del 85-90% de las
perforaciones). • Traumatismo: p. ej. un cuerpo extraño perforante que se ingiere. • Carci-
noma. • Síndrome de Boerhaave –ruptura secundaria a vómitos violentos. • Ingestión de
sustancias corrosivas.
Características clínicas. Odinofagia, taquipnea, disnea, fiebre, shock, enfisema subcu-
táneo (sensación de crepitantes al palpar la piel del pecho o del cuello debido al aire que
proviene de los pulmones. ▲▲: Neumotórax).
R/ : Las perforaciones iatrogénicas son menos propensas a la mediastinitis y sepsis y pue-
den ser manejadas conservadoramente con una sonda NG, IBP y antibióticos. Algunos
requieren reanimación, IBP, antibióticos, antifúngicos y cirugía (desbridamiento del
mediastino y colocación de un tubo-T para drenar y la formación de una fístula esofági-
co-cutánea controlada).
625
Cirugía
necesaria).
5. El paciente debe ser bien informado y motivado.
Si el IMC ≥ 50, o ha sido diagnosticado recientemente de DMT2 con un IMC ≥ 30, la
cirugía se recomienda como tratamiento de primera línea.
Comparación con la terapia médica. La cirugía es más efectiva consiguiendo una
pérdida de peso que el manejo no quirúrgico y la pérdida de peso suele mantenerse a
largo plazo. Los efectos adversos son frecuentes en la cirugía y pueden variar entre los
distintos tipos de cirugías.
Procedimientos. Hay dos mecanismos principales que causan la pérdida de peso:
1. Restricción de la ingesta calórica reduciendo la capacidad estomacal. 2. Malabsorción
de nutrientes reduciendo la longitud del intestino delgado funcionante. NB: Esto también
afecta a los niveles de circulación de glucopéptidos (p. ej., PYY y GLP-1), que suelen jugar
un papel importante en el mecanismo de regulación de la saciedad y la pérdida de peso.
Elija la intervención quirúrgica conjuntamente con el paciente:
• Banda gástrica ajustable laparoscópica (BGAL): Esta técnica restrictiva crea una bolsa
pre-estomacal gracias a que se pone una banda de silicona alrededor de la parte supe-
rior del estómago, que hace como un nuevo estómago más pequeño. La banda puede
ser ajustada añadiendo o quitando suero salino a través de un porta subcutáneo (ver
fig. 13.40). La BGAL se asocia a una mejoría de comorbilidades y de la calidad de vida.
La pérdida de peso es más lenta y menor que en un bypass gástrico pero hay menos
complicaciones y menos mortalidad. Es relativamente no invasiva y se puede realizar
la retirada de esta banda. Complicaciones: Crecimiento de la bolsa, desacomodación de
la banda, erosión de la banda e infección del porta.
• Gastrectomía en manga (fig. 13.41): Implica la división del estómago verticalmente,
reduciendo su tamaño un 75%. La válvula pilórica al final del estómago se deja intacta
para que la digestión y la función no sean alteradas. El procedimiento no es reversible
y puede ser la primera fase para una progresión en Y de Roux en un bypass gástrico
o en un intercambio duodenal en pacientes muy obesos donde un único procedi-
miento sería técnicamente difícil o no seguro.
• Bypass gástrico en Y de Roux (fig. 13.42): Laparoscópica o abierta. Una porción del yeyu-
no se une a una pequeña bolsa estomacal para permitir que la comida atraviese el
estómago distal, el duodeno y la parte proximal del yeyuno. Puede realizarse laparos-
cópicamente y funciona tanto de un modo restrictivo como malabsortivo. La principal
pérdida de exceso de peso a los 5 años es del 62,8%. Las evidencias actuales demues-
tran aún más pérdida de peso, mejor resolución de las comorbilidades y tasas de rein-
tervención menores comparadas con la BGAL. Complicaciones: déficit de micronu-
trientes (requiere suplementos vitamínicos y análisis de sangre de seguimiento duran-
te toda la vida), síndrome de dumping, infección de la herida, hernias, malabsorción, dia-
rrea y una mortalidad de < 0,5% (en centros experimentados).
Esófago 627
Bolsa
Banda ajustable
Duodeno
Puerto de acceso
subcutáneo Esófago Bolsa estomacal
Fig. 13.40. Banda gástrica ajustable. proximal
Cirugía
Estómago distal
(bypass)
«Manga
gástrica»
Asa de Roux
Píloro (yeyuno)
Estómago
resecado Duodeno (transporta la bilis
y los fluidos pancreáticos)
Fig. 13.41. Gastrectomía vertical en manga. Fig. 13.42. Bypass gástrico.
Cirugía
ter urinario si hay sospecha de compromiso hemodinámico –no hay una indica-
ción absoluta, pero recuerde que debe sopesar riesgos y beneficios. De cristaloi-
des como reposición y mantenimiento IV. Realice una transfusión sanguínea solo
si hay una pérdida sanguínea significativa (tabla 13.10, p. 607).
Coagulación: Retirar ± revertir los agentes antiagregantes y anticoagulantes
(p. 351).
Antibióticos: pueden ser necesarios ocasionalmente si hay evidencia de sepsis o
perforación, p. ej., piperalacina/tazobactam 4,5 g/8 h IV.
Mantener reposo en cama: El paciente quizás sienta la necesidad de salir de la
cama para pasear, pero esto puede desembocar en otro sangrado masivo, que
puede resultar en un colapso si intenta caminar. No permita que los movilicen
e informe de esto al equipo de enfermeras.
Empiece una tabla de seguimiento: Para monitorizar el volumen y la frecuencia de
las deposiciones. Mande una muestra a análisis (x3 si sabe que hay comorbilida-
des como EII).
Dieta: Mantener fluidos claros para que puedan tomar algo, pero teniendo el
colon tan limpio como sea posible por si se da el caso de realizar una colonos-
copia.
Invervenciones: Si el sangrado no se controla con manejo conservador: la angio-
grafía puede permitir localizar el sangrado (p. ej., divertículo sigmoideo o angio-
displasia del lado derecho) y también tratar con una embolización terapéutica; la
angio TC es una alternativa no invasiva (sin opciones de intervención); la colonos-
copia puede permitir hemostasis endoscópica.
Cirugía: La indicación principal es un incesante y masivo sangrado que no se con-
trola de otro modo.
de toxina botulínica (2 línea) y el diltiazem tópico (2%) son al menos tan efectivos como
la NTG pero con menos efectos adversos. Si las medidas conservadoras fallan, las opcio-
nes quirúrgicas incluyen la esfinterectomía lateral parcial interna.
Fístula anal. Un tracto que comunica la piel con el canal anal/recto. La oclusión de los
conductos glandulares intramusculares profundos se piensa que predispone a la forma-
ción de abcesos, los cuales degeneran para formar las fístulas. La regla de Goodsall deter-
mina el camino del trayecto de la fístula, si es anterior, el tracto es una línea recta (radial);
si es posterior, la apertura interna se encuentra siempre a las 6 en punto, teniendo un
trayecto tortuoso. Causas: Sepsis perianal, abcesos (ver después el tema), enfermedad de
Crohn, TBC, enfermedad diverticular, carcinoma rectal, inmunocomprometidos. Tests:
Tacto rectal; ecografía endoanal. Tto.: Fistulotomía + excisión. Las fístulas altas (que afec-
tan los músculos anales de la continencia) requieren una «sutura de seton» apretada
para mantener la continencia; las fístulas bajas son propensas a curarse por segunda
intención –la sección de las posturas del esfínter no pone en peligro la continencia.
Abcesos anorrectales. Normalmente causados por organismos intestinales (rara-
mente Staph o TBC). :≈1:8. Perianales (~45%), isquiorrectales (≤ 30%), interesfintéri-
cos (> 20%), del supraelevador (~5%) (fig. 13.43). Tto.: Incisión y drenar bajo antesia
general. Asociaciones: DM, enfermedad de Crohn, malignidad y fístulas.
Hematoma perianal (AKA vaso trombosado perianal; ver p. 633). En el sentido más
estricto, realmente es un sáculo venoso coagulado. Aparece como una «mora oscura»
de 2-4 mm bajo la piel en el margen anal. Puede ser evacuado bajo anestesia local o se
deja para que se resuelva espontáneamente.
Sinus pilonidal. Obstrucción de un folículo capilar ~6 cm por encima del ano. El creci-
miento de pelo estimula una respuesta de cuerpo extraño y puede hacer que haya una
segunda vía por la que pase el pelo lateralmente ± abcesos con una secreción olorosa. (A
los barberos les suele pasar esto entre los dedos). :≈10:1. Los caucásicos obesos y la
gente que proviene de Asia, oriente medio y el Mediterráneo tienen más riesgo. Tto.: Esci-
sión del tracto del sinus ± cierre primario. Considerar antibióticos preoperatorios. Los trac-
tos complejos pueden abrirse y cerrarse individualmente o el uso de flaps cutáneos puede
ser necesario para tapar los defectos. Se debe ofrecer consejo de higiene y de depilación.
Prolapso rectal. La mucosa (parcial/tipo 1), todos los niveles (completos/tipo 2 – más
comunes), pueden protruir a través del ano. Hay incontinencia en un 75% de los casos.
Se debe a la laxitud del esfínter, presión prolongada y asociado a enfermedades psicoló-
gicas y neurológicas crónicas. Tto.: Abordaje abdominal: fijar el recto al sacro (rectopexia)
± inserción de los mesos ± rectosigmoidectomía. La rectoplexia laparoscópica es tan
efectiva como la reparación abierta. Abordaje perineal: el procedimiento de Deforme
(resección cerca de la línea dentada y sutura de los extremos de la mucosa), cerclaje anal
con un hilo de Thiersch.
Verrugas anales. Los condilomas acuminados (verrugas virales) se tratan con podofilo-
toxina o imiquimod o excisión quirúrgica/crioterapia. Los condilomas acuminados gigantes
de Bushke y Loewenstein pueden evolucionar a cáncer verrugoso (de bajo grado, no
metastatizan). Los condilomas planos secundarios a la sífilis se tratan con penicilina.
Proctalgia fugax. Idiopático, intenso, breve y punzante dolor rectal que empeora nor-
malmente por la noche. La principal línea de tratamiento es tranquilizar. Salbutamol inha-
lado o NTG tópica (0,2-0,4%) o diltiazem tópico (2%) pueden ayudar.
Úlceras anales. Ten en cuenta la enfermedad de Crohn, el cáncer anal, el linfogranu-
loma venéreo, la TBC y la sífilis.
Acrocondilomas. Pueden ser molestos pero son fáciles de quitar.
Cirugía
Músculo longitudinal Músculo elevador del ano
Músculo circular
Muscular de la mucosa
Línea dentada
Esfínter interno
Glándula anal
Fosa Esfínter
isquioanal externo
Fig. 13.43. Anatomía del canal anal. Los abscesos perianales se presentan
como masas blandas, inflamadas y localizadas en la fosa anal. Los abscesos
isquiorrectales tambien son blandos pero causan una masa difusa e indu-
rada en la fosa isquioanal. Encontrará al paciente esperando con ansiedad
a que llegue, inclinado o en el borde de la silla: evitar cualquier tipo de pre-
sión es imperativo. NB: por encima de la línea dentada = inervación visce-
ral (por lo tanto, no sensación dolorosa); por debajo = inervación somáti-
ca (muy sensible al dolor).
atrapadas por el esfínter anal, bloqueando el retorno venoso. Ver fig. 13.44.
Diagnóstico diferencial. Hematoma perianal; fisura anal, absceso, tumor, proctalgia
fugax. Nunca asocie el sangrado rectal a pilas sin realizar antes una exploración y estu-
dio de la causa.
Causas. El estreñimiento con defecaciones prolongadas es un factor clave. En muchos,
el hábito intestinal puede ser normal. El estreñimiento debido a un tumor pélvico, al
embarazo, a ICC o hipertensión portal son importantes en solo una minoría de casos.
Son puntos de atención en la historia clínica.
Patogénesis. Es un círculo vicioso: los almohadones vasculares que protruyen a través
del estrecho ano se congestionan más, se hipertrofian y protruyen aún más de nuevo
más rojizos. Estas protrusiones pueden estrangularse. Ver tabla 13.15 para la clasificación.
Síntomas. Sangrado rectal rojo brillante, que frecuentemente mancha con una capa el
papel o salpican la taza después de la defecación. Puede haber secreción mucosa y pru-
rito anal. Puede haber anemia severa. Los síntomas como la pérdida de peso, el tenes-
mo, los cambios de hábito intestinal deben hacernos pensar más bien en otra patología.
A todos los sangrados rectales se les debe realizar:
• Una exploración abdominal para descartar otra patología.
• Un tacto rectal: las pilas que prolapsan son obvias. Las hemorroides internas no son
palpables.
• Colonoscopia/sigmoidoscopia flexible para descartar patología proximal si es un
paciente ~ > 50 años.
Tratamiento. 1. Médico: (1er escalón) ↑ los fluidos y la fibra es la clave ± analgesia tópi-
ca y sustancias que ablanden las heces (formadores de masa). Los esteroides tópicos se
deben aplicar solo durante breves períodos.
2. No quirúrgica: (2 y 3 escalones, o 1 escalón si el tratamiento médico falla). • Ligadura
con bandas: Barata, pero necesita tener habilidad para hacerlo. Las bandas producen una
úlcera que destruye la mucosa (EA: sangrado, infección, dolor). Tiene la tasa de recu-
rrencias más baja. • Esclerosantes (1 o 2 escalón) 2 mL de 5% fenol en aceite se inyecta
en la pila por encima de la línea dentada, induciendo una reacción fibrótica. Las recu-
rrencias son mayores (EA: impotencia; prostatitis). • Coagulación con infrarrojos: Se aplica
a zonas con pilas localizadas, funciona coagulando los vasos y uniendo la mucosa al teji-
do submucoso. Tiene tanto éxito como las bandas pero provoca menos dolor. • Diater-
mia bipolar y electroterapia directa causan la coagulación directa y la fibrosis después de
la aplicación local de calor. Las tasas de éxito son similares a la coagulación con infrarro-
jos y las tasas de complicaciones son bajas.
3. Cirugía: • Hemorroidectomía excisional Es el tratamiento más efectivo (extirpación de las
hemorroides ± ligadura de los pedículos vasculares, es una cirugía ambulatoria y requiere
2 semanas de baja). Escalpelo, electrocauterización o láser pueden ser precisos. • Hemo-
rroidoplexia con grapas (procedimiento para hemorroides que prolapsan) pueden resultar
menos dolorosa, con una hospitalización menor y un regreso a la actividad normal precoz
respecto a la cirugía convencional. Se usa cuando hay un componente interno muy gran-
de, pero tiene unas recurrencias y una tasa de prolapsos mayores que el tratamiento exci-
sional. Las complicaciones quirúrgicas son estreñimiento; infección; estenosis; sangrado.
Hemorroides trombosadas o prolapsadas. Analgesia, hielo y sustancias que ablan-
den las heces. El dolor se suele resolver en 2-3 semanas. Algunos prefieren una cirugía
precoz.
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 13_Oxford 07/05/18 16:16 Página 633
Cirugía
El origen es por debajo El origen es por encima El origen es por encima
de la línea dentada de la línea dentada y debajo de la línea
(plexo rectal externo) (plexo rectal interno) dentada (plexo rectal
externo e interno)
Fig. 13.44. Hemorroides internas y externas.
bro derecho –ver p. 609), vómitos, fiebre, dolor peritoneal localizado, o una masa de vesícula
biliar. La principal diferencia de un cólico biliar es el componente inflamatorio (dolor peritone-
al localizado, fiebre, ↑ leucocitosis). Si la piedra se desplaza al CBC, puede darse ictericia obs-
tructiva y colangitis –ver RECUADRO «Complicaciones de los cálculos biliares». El signo de
Murphy: apoye dos dedos en el cuadrante superior derecho: pídale al paciente que inspire.
Esto le causará dolor e interrumpirá la inspiración, ya que la VB se pone en contacto con sus
dedos. Es solo positiva si el mismo test hecho en el CSI no causa dolor. Un flemón (masa en
el CSD de omento e intestinos inflamados adheridos) puede ser también palpable. Pruebas
diagnósticas: ↑ leucocitos, ecografía –una pared engrosada, una VB encogida (también visible
en la enfermedad crónica), líquido pericolecístico, piedras, CBC (dilatado si es > 6 mm). Plan-
tée una RX de abdomen solo si se muestra ~10% de cálculos biliares; puede identificarse
como una VB de porcelana (asociada a riesgo de cáncer). Tratamiento: Dieta absoluta, analge-
sia, fluidoterapia y antibióticos, p. ej., amoxi-clavulánico 625 mg/8 h IV. La colecistectomía lapa-
roscópica es el tratamiento de elección para todos los pacientes que lo toleren. La cirugía
abierta solo es necesaria si hay una perforación de la VB. Si es muy mayor el paciente o hay
alto riesgo/no cumple criterios para una buena cirugía, considere la colecistostomía percutá-
nea; la colecistectomía puede ser realizada después. La colecistostomía puede también ser un
tratamiento para la colecistitis acalculosa.
Colecistitis crónica. Inflamación crónica ± cólico. «Dispepsia flatulenta»: disconfort vago
abdominal, distensión, náuseas, flatulencia e intolerancia a las grasas (la grasa estimula la libe-
ración de colecistoquinina y la contracción de la VB). La ECO sirve para ver piedras y para
calcular el diametro del CBC. La CPRE (p. 742) se usa para encontrar las piedras en el CBC.
Tto.: Colecistectomía. Si la ECO muestra un CBC dilatado con piedras, la CPRE (p. 742) +
esfinterotomía antes de la cirugía. Si los síntomas persisten después de la cirugía, considere
una hernia de hiato, úlcera péptica, pancreatitis crónica, tumor.
Otras presentaciones
• Ictericia obstructiva con piedras en el CBC (ver p. 272): Si empeora la función hepática, CPRE
con esfinterotomía ± red biliar, después puede ser necesaria la realización de una colecis-
tectomía o una cirugía abierta con una exploración del CBC. Si se sospechan cálculos en el
CBC prequirúrgicamente, entonces deben ser identificados por medio de la CPRE (p. 742).
• Colangitis (infección de los conductos biliares): Causa dolor en CSD, ictericia y fiebre («Tria-
da de Charcot», RECUADRO). Tratar con ej, piperacina /tazobactam 4,5 g/8 h IV.
• Íleo biliar: Una piedra emerge desde la VB al duodeno; y puede obstruir el íleo terminal. La RX
de abdomen muestra: aire en el CBC (= neumobilia), niveles hidroaéreos en el intestino del-
gado y una piedra. Las obstrucciones duodenales son más raras (síndrome de Bouvaret).
• Pancreatitis: Ver p. 636.
• Mucocele/empiema: VB obstruida llena de moco (secretado por la pared de la VB)/pus.
• Cálculos silenciosos: Hacer una cirugía selectiva a aquellos con células falciformes, inmunosu-
presión (está en debate si también en diabéticos) y en VB calcificadas/de porcelana.
• Síndrome de Mirizzi: Una piedra en la vesícula biliar comprime el conducto biliar causando
ictericia.
• Necrosis de vesícula biliar: Rara porque tiene una irrigación vascular doble (la arteria hepática
vía la arteria cística, y plexos pequeños de la arteria hepática en la fosa de la VB).
• Otras: Otras causas de colecistitis y síntomas biliares que no sean por cálculos son raras. Con-
sidere la infección (tifoidea, criptosporidiosis y brucelosis); liberación de colecistocinina; la
nutrición parenteral; alteraciones anatómicas; poliarteririts nodosa (p. 556).
10 Las abreviaciones más comunes de esta sección: CBC, conducto biliar común; VB: vesícula biliar.
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CAP. 13_Oxford 07/05/18 16:16 Página 635
Cirugía
Colangitis ✓ ✓ ✓
Tabla 13.17.
PO2 < 8 kPa
Age (edad) > 55 años
Neutrofilia Leucocitos > 15 × 109/L
Calcio < 2 mmol/L
Renal (función) Urea > 16 mmol/L
Enzimas LDH > 600 iU/L; AST > 200 iU/L
Albúmina < 32 g/L (sérica)
Cirugía
Sugar (azúcar) Glucosa sanguínea > 10 mmol/L
Fig. 13.45. TC axial del abdomen (con contraste IV y VO) que muestra un
pseudoquiste pancreático ocupando la transcavidad de los epiplones del
abdomen, posterior al estómago. Se llama «pseudoquiste» porque no es un
quiste verdadero, es más bien una colección de líquido en el omento
menor (p. ej., no delimitado por epi/endotelio). Se desarrolla tras ≥ 6 sema-
nas. El líquido del quiste es de una atenuación menor comparado con el
contenido del estómago porque no ha sido resaltado por el contraste.
Imagen cortesía del Dr. Stephen Golding.
Cirugía
¿Por qué él o ella tienen esta piedra ahora?
• Dieta: chocolate, té, ruibarbo, fresas, nueces, espinacas aumentan los niveles de
oxalato.
• Estación: se piensa que las variaciones de los niveles de calcio y oxalato están
mediadas por la síntesis de vitamina D a través de la piel gracias a la luz solar.
• Trabajo: ¿puede beber cuando quiere en su trabajo? ¿hay deshidratación laboral?
• Medicación: drogas que precipitan como: diuréticos, antiácidos, acetazolamina, cor-
ticosteroides, teofilina, aspirina, alopurinol, vitaminas C y D, indinavir.
¿Hay factores predisponentes? Por ejemplo:
• ITU recurrentes (cálculos de estruvita).
• Alteraciones metabólicas:
• Hipercalciuria/hipercalcemia (p. 676): hiperparatiroidismo, neoplasia, sarcoidosis,
hipertiroidismo, síndrome de Addison, Cushing, litio, exceso de vitamina D.
• Hiperuricosuria/↑ácido úrico en orina: por sí mismo o con gota.
• Hiperoxaluria.
• Cistinuria (p. 321).
• Acidosis tubular renal (p. 316-7).
• Alteraciones del tracto urinario: p. ej., obstrucción de la unión pelviureteral, hidrone-
frosis (de los cálices o de la pelvis renal), divertículos caliciales, riñón en herradura,
ureterocele, reflujo vesicoureteral, estenosis ureteral, espongiosis medular renal11.
• Cuerpos extraños: p. ej., stents, catéteres.
¿Hay antecedentes familiares? ↑Riesgo de piedras x3. Específicamente en enferme-
dades que incluyen nefrolitiasis asociada a cromosoma X, y enfermedad de Dent
(proteinuria, hipercalciuria y nefrocalcinosis).
¿Hay infección por encima de la piedra? P. ej., fiebre, lumbares sensibles, ¿piuria?
Necesitan intervención urgente.
Fig. 13.46. Oxalato cálcico mo- Fig. 13.47. Piedra de struvita. Fig. 13.48. Piedra de cistina.
nohidrato. Imagen cortesía de Dr. Glen Austin. Imagen cortesía de Dr. Glen Austin.
Imagen cortesía de Dr. Glen Austin.
11 La espongiosis medular renal es una anormalidad del riñón típicamente sintomática que se suele ver
sobre todo en mujeres adultas, cuando hay dilatación de los conductos colectores, que cuando es seve-
ra lleva a una imagen de esponja de la médula renal. Complicaciones/asociaciones: ITU, nefrolitiasis,
hematuria, hipercalciuria, hiperparatiroidismo (si está presente, debemos buscar marcadores genéticos
del MEN tipo 2ª, ver p. 223).
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CAP. 13_Oxford 07/05/18 16:16 Página 640
• Obstrucciones del tracto urinario superior crónicas: Dolor en el flanco, insuficiencia renal,
sobreinfección. La poliuria puede ocurrir debido a la afectación de la concentración
urinaria.
• Obstrucciones del tracto urinario inferior agudas: Las retenciones agudas urinarias típi-
camente presentan dolor suprapúbico severo ± confusión aguda (en personas mayo-
res); puede ser aguda o crónica (por lo tanto precedida por síntomas crónicos, ver el
siguiente punto). Clínicamente: vejiga distendida, palpable que contiene ~600 mL, mate
a la percusión. Las causas incluyen la obstrucción prostática (típico de de edad avan-
zada), estenosis uretrales, anticolinérgicos, coágulos, p. ej., de una lesión vesical (reten-
ción de coágulos), alcohol, estreñimiento, postcirugía (dolor/inflamación/anestésicos),
infección (p. 296), neurológicas (síndrome de la cola de caballo, ver p. 466).
• Obstrucciones del tracto urinario inferior crónicas: Síntomas: frecuencia urinaria, indeci-
sión, chorro débil, babeo terminal, incontinencia por rebosamiento. Signos: distensión,
vejiga palpable (la capacidad puede ser de > 1,5 L) ± una próstata grande en la explo-
ración. Complicaciones: ITU, retención urinaria, fallo renal (p. ej., uropatía obstructiva
bilateral –ver RECUADRO «Uropatía obstructiva»). Las causas pueden ser un agranda-
miento de próstata (común), proceso maligno pélvico; cirugía rectal; diabetes mellitus,
enfermedad del SNC, p. ej., mielitis transversa/EM; zóster (s2-s4).
Análisis. Sangre: Ionograma, creatinina, hemograma, antígeno específico de próstata
(PSA, p. 530)12. Orina: Tira reactiva y cultivo de orina. Ecografía (p. 744) es la técnica de
imagen de elección para investigar el tracto superior: si hay hidronefrosis o hidrouréter
(distensión de la pelvis y cálices renales o del uréter), se pide una TC. Esta nos ayudará
a encontrar el punto de obstrucción. NB: en ~5% de los casos de obstrucción no se ve
distensión en la ecografía. Imagen radionuclear: Establece una valoración funcional de los
riñones.
Tratamiento. Tracto urinario superior: Nefrostomía o stent ureteral. NB: los stents pue-
den causar incomodidad significativa y los pacientes tienen que ser advertidos de esto y
de otros riesgos (ver RECUADRO «Problemas de los stents ureterales»). Los α-bloquean-
tes ayudan a reducir el dolor relacionado con el stent (↓los espasmos ureterales). La pie-
loplastia, para abrir la unión pieloureteral puede usarse en el caso de obstrucción idio-
pática de esta zona.
Tracto urinario inferior: Insertar un catéter uretral o suprapúbico (p. 763) para aliviar la
retención aguda. En una obstrucción crónica solo hay que sondar si el paciente siente
dolor, infección renal o afectación renal; a veces es necesario el autosondaje intermiten-
te (p. 763). Si hay una retención de coágulos el paciente puede necesitar un catéter de
3 vías y un lavado vesical. Si hay > 1 L residual, hay que revisar el monograma y moni-
torizar la diuresis postobstructiva (ver RECUADRO «Uropatía obstructiva»). Monitorizar el
peso, el balance hídrico, empezar con un α-bloqueante (ver p. 642). Después de 2-3 días,
el intentar la retirada de la sonda (Trial without catheter, TWOC, p. 763) puede funcionar
(especialmente en < 75 años y < 1 L expulsado o una retención desencadenada por un
evento pasado (p. ej., GA).
12 Hacer la venopunción del PSA antes del tacto rectal, por que el tacto rectal puede aumentar el PSA
~1 ng/mL (PSA libre ↑ un 10%). Es difícil saber si una retención aguda aumenta el PSA, pero el solu-
cionarla causa una bajada.
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CAP. 13_Oxford 07/05/18 16:17 Página 641
Uropatía obstructiva
Cirugía
En la retención urinaria crónica, un episodio de retención aguda puede pasar inad-
vertido durante varios días, y, a causa de los síntomas basales, puede solo mostrar-
se cuando la incontinencia por rebosamiento se vuelve molesta-dolorosa y no nece-
sariamente es una característica
especial. Después del diagnóstico de
una retención aguda superpuesta a
una crónica y de poner el catéter, el
residuo vesical puede llegar a 1,5 L
de orina. ¡No se sorprenda si le llaman
de laboratorio para decirle que su
creatinina sérica es de 1500 μmol/L!
Las buenas noticias son que la fun-
ción renal vuelve a la normalidad
transcurridos unos días (puede
haber algo de disfunción basal). Fig. 13.49. Ecografía de un riñón obstruido con
Pida una ecografía renal de urgen- hidronefrosis. Fíjese en la dilatación de la pelvis
cia (fig. 13.49) y considere hacer lo renal y del uréter y los cálices como tréboles.
siguiente durante el episodio agudo Imagen cortesía del departamento
para un desenlace seguro: de radiología de Norwich.
• Hipercalemia. Ver p. 301.
• Acidosis metabólica. En la gasometría arterial suele haber una acidosis meta-
bólica compensada. Se debe discutir precozmente con un nefrólogo (siempre es
buena idea) en caso de que se necesitase hemodiálisis (p. 306).
• Diuresis postobstructiva. En la fase aguda después de aliviar la obstrucción, los
riñones producen mucha orina; puede llegar a ser un litro en la primera hora. Es vital
proveer una reposición de líquidos y después equiparar la entrada con la salida de
líquidos. La depleción de líquidos es más peligrosa que el exceso.
• Nefropatía pierde sodio/bicarbonato. Como el riñón disminuye su diuresis,
se pierden grandes cantidades de sodio y bicarbonato en la orina. Hay que repo-
ner «lo perdido con lo ganado» (como hemos mencionado antes) con suero iso-
tónico 1,26% sodio/bicarbonato; esto debería estar disponible en la UCI. Algunos
expertos prefieren usar 0,9% de suero salino, aunque el exceso de cloro puede
exacerbar la acidosis. Retirar los fármacos neurotóxicos.
• Infección. Tratar la infección, teniendo en mente que la leucocitosis y el aumen-
to de proteína C reactiva puede estar asociado a una respuesta del estrés. Hay
que enviar muestras de orina para su cultivo.
Cirugía
se usa para descartar procesos malignos.
Tratamiento. Colocar un stent retrógrado para solucionar la obstrucción (quitarlo des-
pués de 12 meses) ± ureterólisis (disecar de los uréteres del tejido fibrosos retroperi-
toneal). Inmunosupresión (en la FRP idiopática) con una dosis baja de esteroides tiene
buenos resultados a largo plazo.
Cirugía
• Hay muchas incertezas acerca de tratar aquellos que sale que sí tienen cáncer de
próstata: las opciones son cirugía radical para extirpar la próstata (riesgos de
incontinencia y disfunción eréctil), radioterapia y hormonas.
• El screening vía PSA ha demostrado resultados conflictivos. Algunos estudios han
demostrado que no hay diferencia en la tasa de muerte de cáncer de próstata y
otros han demostrado que reduce la mortalidad, p. ej., 1 muerte evitada por cada
1055 hombres a los que se les realizó el screening (si se detectasen 37 tumores).
Por último, tiene que decidir por usted mismo qué es lo que quiere.
Prostatitis
Puede ser aguda o crónica. Normalmente en > 35 años. Prostatitis aguda: Causada
la mayoría de veces por S. faecalis y E. coli, también Chlamydia (y antiguamente por
TBC). Características: ITU, retención de orina, dolor, hematoespermia, próstata dura y
suave al tacto rectal. Tto.: Analgesia; levofloxacino 500 mg/24 h VO durante 28 días.
Prostatitis crónica: Puede ser bacteriana o no. Mismos síntomas que en la aguda, pero
durante más de 3 meses. Las prostatitis crónicas no bacterianas no responden a anti-
bióticos. Antiinflamatorios, α-bloqueantes y masaje prostático pueden ayudar.
Cirugía
hacer una gran cantidad de pruebas, considere que:
• Un estudio demostró que la incidencia de enfermedad urogenital (p. ej., cáncer de
vejiga) no era más alta en pacientes con microhematuria asintomática que en
aquellos que no la presentaban.
• La hematuria no visible asintomática en forma de único síntoma se da solo en el
4% de los tumores de vejiga, y no hay evidencia de que estos tumores sean menos
avanzados que otros que presenten hematuria macroscópica.
• Cuando seguimos pacientes con un cáncer de vejiga tratado en búsqueda de
recurrencias, la hematuria no visible asintomática tiene una sensibilidad de solo un
31% en aquellos pacientes que tienen un tumor superficial, en el cual su detección
sería la aplicación más útil.
• Por otra parte, el 80% de los dolores de flanco debido a un cálculo renal presen-
tan microhematuria, al igual que el 50% de los dolores de flanco sin cálculo renal.
La conclusión no es que la tira de orina sea inútil, sino que los resultados no se pue-
den interpretar aisladamente. Una hematuria no visible sin explicación en > 50 años
tiene que estudiarse bajo la regla de las 2 semanas. Aquellos fumadores y aquellos
que tengan antecedentes familiares de cáncer urotelial pueden también ser estudia-
dos de un modo distinto respecto a aquellos que no tienen estos factores de ries-
go. Es comprensible que en un joven, deportista, en forma, el diagnóstico se inclina
más hacia una hematuria debida a ejercicio. Los doctores inteligentes trabajan cola-
borando con sus pacientes «No vendamos la piel del oso antes de cazarla» puede
ser una buena respuesta para algunos pacientes.
Cirugía
Agonistas β3 adrenérgicos: Considerar si están contraindicados los
mirabegron 50 mg/24 h; EA antimuscarínicos o son clínicamente
taquicardia; CI: HTA grave; precaución ineficaces, o si los efectos secundarios son
si hay daño renal/hepático inaceptables
Toxina botulínica intravesical Considerar si los tratamientos mencionados
(Botox®) son inefectivos
Estimulación percutánea del nervio Considerar si el tratamiento farmacológico es
tibial posterior (ENTP). (Un inefectivo y no se quiere aplicar Botox®. La
tratamiento típico consiste en ENTP manda neuromodulación a la unión
sesiones de 30 minutos durante S2-S4 del plexo sacro
12 semanas, semanalmente
Neuromodulación vía estimulación Estimulación del nervio sacro inhibe el
eléctrica transcutánea comportamiento reflejo de las contracciones
involuntarias del detrusor
Modulación de las vías aferentes Gabapetina (sin indicación)
de la vejiga
Hipnosis, psicoterapia, (Necesitan un alto grado de motivación)
entrenamiento vesical
Cirugía (p. ej., ileocistoplastia Reservado para síntomas problemáticos e
en almeja) intratables. La vejiga se diseca, se abre como
una almeja y 25 cm de íleo se le cosen
NB: Desmopresina nasal en spray 20 mcg durante la noche reduce la producción de orina y disminu-
ye la nicturia en la vejiga hiperactiva. No aplicable a edad avanzada (EA: retención de líquidos, fallo car-
díaco, ↓ Na+). *La mente sobre la vejiga: • Orina cuando no tengas urgencia, no vayas al baño cuando
tienes imperiosa necesidad. • Gradualmente aumenta el tiempo entre micciones, programa tus visitas al
baño. • Cuando llega la urgencia, cálmate y relájate usando los trucos de la mente sobre la vejiga.
¡No todos los síntomas urinarios en el hombre se asocian
a la próstata!
Hiperactividad del detrusor. Los hombres sufren de esto al igual que las muje-
res. Estudios de presión-chorro ayudan a diagnosticarlo (como hace que el múscu-
lo sea de un grosor de ≥ 2,9 mm en ecografía).
Obstrucción primaria del cuello de la vejiga. Una condición en la cual el
cuello de la vejiga no se abre adecuadamente durante la micción. Los estudios en
hombres y mujeres con una disfunción del vaciamiento muestran que es común. La
causa puede ser muscular, una disfunción neurológica o fibrosis. Diagnóstico: Video-
urodinámica, con medida simultánea de la presión-chorro, y una visualización del
cuello de la vejiga durante el vaciamiento. Tratamiento: observación espectante; α-
bloqueantes (p. 642); cirugía.
Estenosis uretral. Puede ser consecuencia de un trauma o una infección (p. ej.,
gonorrea), y frecuentemente lleva a síntomas de vaciamiento alterado, ITU o reten-
ción. Los procesos malignos son una causa rara. Imagen: uretrograma retrógrado o una
cistouretrograma anterógrada si el paciente tiene un catéter suprapúbico existente. La
uretrotomía interna implica una incisión de la estenosis transuretral usando equipo
endoscópico –para liberar el tejido cicatrizal. Stents: Se dejan en la pared de la uretra
y mantienen la luz abierta. Funcionan mejor en estenosis cortas en la uretra bulbar
(anatomía uretral anterior, desde proximal a distal: uretra prostática → uretra poste-
rior o membranosa → uretra bulbar → uretra peneana → fosa navicular → meato).
Cirugía
Normal Hidrocele Espermatocele Varicocele
NB: La torsión del apéndice testicular o epididimal (la hidátide de Morgagni –un remanen-
te del conducto de Müller) –generalmente ocurre entre los 7-12 años y causa menos
dolor. Un pequeño nódulo azul puede observarse bajo el escroto. Se cree que se debe
al aumento de las gonadotropinas que señalan el inicio de la pubertad. El edema escro-
tal idiopático es una condición benigna que ocurre, por lo general, entre las edades de
2 y 10 años, y se diferencia de la torsión por la ausencia de dolor y sensibilidad.
Pruebas: Una ecografía doppler puede demostrar la falta de flujo sanguíneo hacia los tes-
tículos. Realizar únicamente si el diagnóstico no es claro –no retrasar la exploración qui-
rúrgica.
Tratamiento: Pedir consentimiento para una posible orquidectomía + fijación bilateral
(orquidopexia) –véase p. 568. Durante la cirugía, descubrir y realizar la detorsión de los
testículos. Si su color es el adecuado, devolverlos al escroto y fijar ambos testículos al
escroto.
Testículos no descendidos
Incidencia. Alrededor de un 3% de los niños nacen con, al menos, un testículo sin des-
cender (30% de los niños prematuros), pero desciende al 1% tras el primer año de vida.
La afectación unilateral es cuatro veces más común que la bilateral. (Si la afectación es
bilateral, debería realizarse un test genético).
• Criptorquidia: Ausencia de los testículos en el escroto (anorquia es la ausencia total de
testículos).
• Testículos en ascensor: Los genitales se desarrollan de forma normal, pero con un refle-
jo cremastérico excesivo. Los testículos suelen encontrarse en el anillo inguinal exter-
no. R/ : Confirmar (examinar durante un baño caliente, por ejemplo, puede ayudar a
diferenciarlo de unos testículos mal descendidos/ectópicos).
• Testículos mal descendidos: Pueden encontrarse en cualquier parte del recorrido nor-
mal de descenso desde el abdomen hasta la ingle.
• Testículos ectópicos: Frecuentemente, se encuentran en la bolsa inguinal superior (ante-
rior a la aponeurosis oblicua externa), pero también pueden hacerlo en la región
abdominal, perineal, del pene y en el triángulo femoral.
Complicaciones de los testículos mal descendidos y ectópicos. Infertilidad;
incremento ×40 del riesgo de cáncer testicular (el riesgo persiste tras la cirugía, pero en
la criptorquidia puede reducirse si se realiza una orquidopexia antes de los 10 años),
mayor riesgo de trauma y de torsión testicular. También se asocia a hernias (debido al
proceso vaginal patente en > 90%, p. 613) y otras anomalías del tracto urinario.
El tratamiento de los testículos mal descendidos y ectópicos restaura (el
potencial para) la espermatogénesis; aunque se mantiene el mayor riesgo de malignidad,
se vuelve más fácil su diagnóstico.
Cirugía: Orquidopexia, generalmente siguiendo la técnica paraescrotal, se realiza en la
infancia: se movilizan los testículos y el cordón tras la incisión en la ingle, se extrae el pro-
ceso vaginal o el saco herniario y el testículo se pasa a través de una incisión en el mús-
culo dartos hasta la bolsa subcutánea resultante, dónde el músculo evita la retracción.
Hormonal: A veces se prueba la terapia hormonal, comúnmente gonadotropina corióni-
ca humana (GCh), si el testículo sin descender está en el canal inguinal.
653
Cirugía
Cirugía
o ecocardiografía transesofágica (ETE). Llevarlo a UCI: hipotensores: mantener la sistóli-
ca a ~100-110 mmHg: labetalol (p. 140) o esmolol (t½ ultracorta) vía IV es útil aquí (cal-
cio antagonistas pueden ser utilizados si los β-bloqueantes están contraindicados). Mor-
talidad de cirugía aguda: < 25%.
657
Ligamento Femoral
inguinal superficial
Femoral Femoral
común profunda
Cirugía
Poplítea
Tibial
Tibial anterior
posterior Peronea
Fig. 13.53. Arterias de la pierna. Fig. 13.54. Angio-TC que muestra (A) la vasculatura normal
de un miembro inferior y (b) arterias fuertemente enfermas
con bypass de femoral anterior y tibial anterior previos.
Reproducido de «Diagnosis and Management of Peripherals
arterial disease», BMJ, Peach et al., 345:e5208, 2012, con
permiso de BMJ Publishing Group Ltd.
Apertura safena
Unión safeno
Vena safena larga poplítea
Vena safena
Vena del arco posterior corta
Cirugía
Perforadoras
Superior Perforadoras inconstantes
Media mediales
Inferior
ca, pida ayuda quirúrgica temprana. Hay un intenso dolor sobre la piel afectada y el mús-
culo subyacente. El estreptococo β hemolítico del grupo A es la principal causa, a pesar
de que la infección suele ser polimicrobiana. La gangrena de Fournier es una fascitis
necrotizante localizada en escroto y periné. Tto.: Desbridación radical ± amputación; anti-
bióticos IV, p. ej., penicilina benzatina y clindamicina.
Úlceras cutáneas
Las úlceras son lesiones anormales de la superficie cutánea. Las lesiones en las piernas
afectan al ~2% en los países desarrollados.
Causas. Pueden ser múltiples. Para las úlceras de miembros inferiores, la enfermedad
venosa es el 70%, junto al 15% causado por enfermedad arterio-venosa y el 2% de enfer-
medad arterial aislada. Otros factores que contribuyen a ello pueden ser la neuropatía
(p. ej., DM), el linfedema, la vasculitis, procesos malignos (p. 596), infecciones (p. ej., TBC,
sífilis), traumatismos (lesiones por presión: ver fig. 10.16, p. 473), hipoderma gangrenoso,
fármacos (nicorandil, hidroxiurea).
Historia clínica. Pregunte acerca del número, el dolor, un posible traumatismo. Explo-
re las comorbilidades –p. ej., VV, EAD, diabetes, vasculitis. ¿Tamaño de la historia? ¿Ha esta-
do el paciente tomando corticoides? ¿Son las úlceras autoinflingidas, dermatitis artefacta,
una posibilidad? ¿Se le ha tomado una biopsia alguna vez?
Exploración. Prestar atención a características como el lugar, el número, el área de
superficie, la profundidad, los bordes, la base, secreción, linfadenopatía, la sensibilidad y la
curación (ver RECUADRO). Si están en las piernas, preste atención a características de insu-
ficiencia venosa o enfermedad arterial y, si es posible, ponga el manguito para medir la
TA para poder medir el índice de presión tobillo-brazo (IPTB).
Pruebas. Biopsia de la piel y de las úlceras pueden ser necesarias – p. ej., para aproximar-
nos a un diagnóstico de vasculitis (necesitamos inmunohistopatología) o un cambio maligno
en una úlcera preestablecida (úlcera de Marjolin = CEC en una herida crónica). Si la ulcera-
ción es el primer signo de una sospecha de enfermedad sistémica, otros tests van a hacer falta.
Manejo. El manejo de las úlceras suele ser difícil y caro. Trate la(s) causa(s) y concén-
trese en la prevención. Optimice la nutrición. ¿Hay factores de riesgo adversos (adicción
a drogas, o factores de riesgo de arteriopatía como fumar)? Hay que conseguir un cui-
dado de enfermería experto. Considere remitirlo a una enfermera especialista comuni-
taria o a una clínica especializada en úlceras/viabilidad tisular:
• «Charing-Cross» vendaje de 4 niveles de compresión es mejor que los vendajes están-
dard [úselo solo si el pulso arterial está OK; IPTB (p. 656 tiene que ser > 0,8)]. Ven-
dajes con miel pueden mejorar la curación en quemaduras medias-moderadas, pero
como adyuvante en el vendaje compresivo para las úlceras de miembros inferiores no
tienen una mejora de la tasa de curación significativa. La terapia de presión negativa
(p. ej., VAC®) ayuda en las úlceras de diabéticos.
• La cirugía, la terapia larval y los hidrogeles se usan para desbridar superficialmente el
tejido (evitar los hidrogeles en las úlceras de diabéticos debido al ↑ riesgo de gangre-
na húmeda).
El uso de antibióticos de rutina no mejora la curación. Úselos solo si hay infección (no
colonización).
14 «El primer signo de que su fin llegaba fue cuando una de mis ancianas tías, mientras lo desvestía, le
arrancó un dedo del pie con uno de sus viejos calcetines». Graham Greene, A Sort Of Life, 1971, Simon
& Schuster.
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CAP. 13_Oxford 07/05/18 16:17 Página 661
Cirugía
morfologías inusuales pueden ser secundarias a infecciones por micobacterias, como tubercu-
losis cutánea o escrofuloderma (Tuberculosis colliquativa cutis, donde un nódulo infectado se
ulcera y fistuliza a la piel).
Contorno. Inclinado/en declive ≈ curación; exteriorizada ≈ isquémica o sífilis; enrollada/everti-
da ≈ maligna; indeterminada ≈ tuberculosis.
Base. ¿Hay destrucción muscular, de hueso, de tendón (malignidad, úlceras de presión, isque-
mia)? Puede haber descamación gris-amarillenta, entre la cual puede haber piel rosada en la
base. La descamación (slough) es una mezcla de fibrina, productos de destrucción celular, exu-
dado seroso, leucocitos y bacterias –que no implican necesariamente infección, y puede ser
parte del proceso normal de curación. El tejido de granulación es una profunda y rosada matriz
tipo gel dentro de una red de colágeno fibroso que implica un proceso de curación.
Profundidad. Si no molesta al paciente (p. ej., una ulceración neuropática), se puede usar una
lanceta para desbridar y ver cuánto de profunda es la úlcera.
Secreción. Hay que cultivarla antes de empezar ningún antibiótico (que normalmente no
suelen hacer efecto). Una secreción acuosa suele decantar a favor de la TBC; si es sangrante
≈ malignidad.
Asociado a linfadenopatías sugieren infección o proceso maligno
Sensibilidad. La disminución de la sensación alrededor de la úlcera se asocia a neuropatía.
Posición en las fases de extensión/curación. La curación es anunciada por la granula-
ción, formación de una cicatriz y epitelización. Márgenes inflamados ≈ extensión.
14 Química clínica
Índice
Contenidos
Sobre ser normal en la sociedad
de números 662
La esencia de la medicina
de laboratorio 663
Bioquímica: algunos patrones
de enfermedades importantes 664
䊳䊳 Resultados de laboratorio: actúe
AHORA 665
Balance líquido y terapia
de líquidos IV 666
Fisiología de los electrolitos
y el riñón 668
Balance ácido-base 670
Hiper e hiponatremia 672
Síndrome de secreción inadecuada
de ADH (SIADH) 673
Hiper e hipocalcemia 674
Fisiología del calcio y del fosfato 676 Fig. 14.1. Rosalyn Yalow (1921-2011). Formada en
Hipercalcemia 676 física nuclear, hizo un buen uso de ello cuando des-
Hipocalcemia 678 arrolló la técnica del radioinmunoensayo para per-
Fosfato, magnesio, zinc y selenio 679 mitir la medición de cantidades pequeñas de pép-
Urato y riñón 680 tidos utilizando anticuerpos. Esto revolucionó la
Enfermedad ósea metabólica medicina de laboratorio, haciendo posibles pruebas
ampliamente disponibles para hormonas, lo que
Osteoporosis 682 permitió el desarrollo de la endocrinología. Tam-
Osteomalacia 684 bién se utilizó para cribar la sangre en busca de
Enfermedad ósea de Paget 685 varios patógenos, y la técnica todavía se utiliza
Proteínas plasmáticas 686 comúnmente en la actualidad. Le fue concedido el
Proteínas urinarias 686 Premio Nobel por su trabajo en 1977, y comentó
Enzimas plasmáticas 688 a un grupo de niños que: «Inicialmente, las nuevas
Hiperlipidemia 690 ideas son rechazadas… Posteriormente, llegan a
Porfirias 692 ser dogma, si tienes razón. Y eres realmente afor-
tunado porque puedes publicar el rechazo como
parte de su presentación en el Nobel».
Agradecemos a la Dra. Petra Sulentic, nuestra especialista, por su contribución a este capítulo.
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 14_Oxford 07/05/18 16:34 Página 663
Química clínica
• 䊳 Interprete siempre los resultados del laboratorio en el contexto del cuadro clínico
del paciente.
• Si los resultados no encajan con el cuadro clínico, confíe en el juicio clínico y repita la
prueba. ¿Podría ser un artefacto? El rango «normal» para una prueba (intervalo de
referencia) es habitualmente definido como el intervalo, simétrico alrededor de la
media, que contiene al 95% de los resultados en una población dada (p. 751). Cuan-
tas más pruebas haga, mayor es la probabilidad de un resultado «anormal» que no
tenga significado (ver p. 751).
• El personal de laboratorio quiere tener contacto con usted. Son una fuente de ayuda
e información excelente tanto sobre peticiones como sobre resultados.
• 䊳 Implique al paciente. No olvide explicarle la utilidad de la prueba en su plan gene-
ral de tratamiento.
Obteniendo lo mejor del laboratorio: un decálogo del laboratorio
1. Interese a alguien del laboratorio en los resultados de su paciente.
2. Rellene la hoja de petición completamente.
3. Dé detalles clínicos, no su diagnóstico preferido.
4. Asegúrese de que el laboratorio sabe con quién contactar.
5. Ponga la etiqueta tanto en las muestras como en la hoja de petición.
6. Siga la rutina de etiquetado del hospital para pruebas cruzadas.
7. Averigüe cuándo se hacen las pruebas, especialmente las que se hacen con mues-
tras agrupadas.
8. Hable con el laboratorio antes de pedir una prueba inusual.
9. Sea considerado: a las 16:30 las pruebas de rutina han sido organizadas.
10. Represente los resultados gráficamente: las anormalidades se detectan antes.
Artefactos y dificultades en las pruebas de laboratorio
• No extraiga muestras de sangre de un brazo que tenga una vía IV conectada y fun-
cionante.
• Repita cualquier resultado inesperado e inconsistente antes de tomar decisiones con
el mismo.
• Para el tiempo de coagulación no tome muestras de un catéter IV heparinizado.
• El K+ sérico se sobreestima si la muestra es antigua o está hemolizada (esto ocurre si
la venopunción es difícil).
• Si utiliza Vacutainer, llene los tubos lisos primero –por otra parte, las contaminaciones
con anticoagulante de tubos previos pueden producir errores.
• Los resultados del calcio total están afectados por la concentración de albúmina (p. 676).
• El INR puede sobrevalorarse si las botellas de citrato no se llenan completamente.
• Los fármacos pueden producir errores analíticos (p. ej., la prednisolona produce reac-
ciones cruzadas con cortisol). Sospeche si los resultados son inesperados.
• La comida puede afectar los resultados, p. ej., las bananas elevan HIAA urinaria (p. 271).
Química clínica
utilizando un nuevo analizador con un ciclo de lavado erróneo? 䊳 Cuando dude,
busque ayuda y repita la prueba.
Los siguientes valores son algo arbitrarios y deben ser tomados solo como una guía.
Muchos resultados menos extremos que estos indicados pueden ser igualmente
peligrosos si el paciente es anciano, inmunodeprimido o tiene otra patología como
neumonía.
Bioquímica plasmática:
䊳䊳 Los mayores riesgos cuando los electrolitos plasmáticos son peligrosamente
anormales (tabla 14.3) son las arritmias cardíacas y las manifestaciones del SNC,
tales como las convulsiones.
Gases sanguíneos:
• PaO2 < 8,0 kPa = Hipoxia grave. Dé O2. Ver p. 188.
• pH < 7,1 = Acidosis peligrosa. Ver p. 670 para determinar la causa.
Resultados hematología:
• Hb < 70 g/L con volumen celular medio (< 75 fL) o historia de sangrado. Este
paciente puede necesitar transfusión urgente (sin capacidad extra) –pregunte
sobre síntomas, comorbilidades y Hb basal. Controles de índices hemáticos antes
de la transfusión. Ver p. 324.
• Plaquetas < 40 × 109/L. Puede necesitar transfusión de plaquetas; llame al hema-
tólogo.
• Plamodium falciparum visto en frotis sanguíneo. Comenzar antipalúdicos ahora. Ver
p. 418.
• VSG > 30 mm/h + cefalea. ¿Podría haber arteritis de células gigantes? Ver p. 556.
Resultados LCR:
䊳䊳 Nunca retrase el tratamiento cuando se sospeche meningitis bacteriana.
• > 1 neutrófilo/mm3. ¿Hay meningitis?: habitualmente > 1.000 neutrófilos? Ver p. 822.
• Tinción grampositiva. Hable con un microbiólogo; terapia ciega urgente. Ver p. 822.
Resultados conflictivos, equívocos o inexplicables: 䊳 Obtenga ayuda pronto.
rica, así que siempre reinicie la ingesta oral de líquido tan pronto como sea posible.
䊳 En un paciente enfermo, no olvide incluir fuentes adicionales de pérdidas de líquidos,
tales como los drenajes, la fiebre o la diarrea cuando calcule los requerimientos diarios
de líquidos (ver RECUADRO «Casos especiales»). Pesar diariamente ayuda a monitorizar
globalmente el balance de líquidos, de la misma forma que lo hacen las gráficas de balan-
ce hídrico.
䊳 Examine a los pacientes regularmente para evaluar el balance de fluidos (ver RECUA-
DRO «Evaluando el balance hídrico»).
Compartimentos de líquidos y tipos de líquido IV
Para un varón de 70 kg, los líquidos corporales totales son ~42 L (60% del peso corpo-
ral). De estos, 2/3 es intracelular (28 L) y 1/3 es extracelular (14 L). Del compartimento
extracelular, 1/3 es intravascular, es decir, sangre (5 L). Diferentes tipos de líquido IV se
equilibrarán con los diferentes compartimentos de fluido, dependiendo del contenido
osmótico del fluido dado.
Glucosa 5% (=Dextrosa): Isotónico, pero contiene solo una pequeña cantidad de gluco-
sa (50 g/L) y, por tanto, aporta poca energía (~10% de la energía diaria por litro). El híga-
do metaboliza rápidamente toda glucosa, dejando solo agua, que rápidamente se equili-
bra a través de todos los compartimentos de líquido. Es, por tanto, inútil para reanima-
ción con fluidos (solo 1/9 permanecerá en el espacio intravascular), pero adecuado para
mantener la hidratación. Un exceso de glucosa 5% IV puede conducir a sobrecarga hídri-
ca e hiponatremia (p. 672).
Salino 0,9% («Salino normal»):Tiene casi el mismo contenido de Na+ que el plasma (150
mmol/L) y es isotónico con el plasma. El salino 0,9% se equilibrará rápidamente a través
del compartimento extracelular solo, y tarda más en alcanzar el compartimento intrace-
lular que la glucosa 5%. Es, por tanto, apropiado para reanimación con fluidos, dado que
permanecerá predominantemente en el espacio extracelular (y, por tanto, 1/3 del volu-
men dado en el espacio intravascular), así como para mantener la hidratación. También
hay disponibles soluciones salinas hipertónicas e hipotónicas, pero son para uso especia-
lizado solo.
Coloides (p. ej., Gelofusine®): Tienen un contenido osmótico alto, similar al del plasma y,
por tanto, permanecen en el espacio intravascular durante más tiempo que otros líquidos,
lo que los hace apropiados para la reanimación con fluidos, pero no para la hidratación
general. Los coloides son caros y pueden producir reacciones anafilácticas. En realidad,
una resucitación con fluidos efectiva utilizará una combinación de coloide y salino 0,9%.
Glucosa hipertónica (10% o 50%): Puede ser usado en el tratamiento de la hipoglucemia.
Es un irritante para la vena, así que tenga cuidado cuando su uso sea necesario. Las zonas
de infusión deberían inspeccionarse regularmente, y lavarse con salino 0,9% tras su uso.
Glucosa con cloruro sódico (Un quinto del «salino normal»): Isotónico, conteniendo salino
0,18% (30 mmol/L de Na+) y glucosa 4% (222 mmol/L). Tiene aproximadamente la can-
tidad de Na+ requerida para un mantenimiento de líquidos normal cuando se adminis-
tra cada 10 horas en adultos, pero es ahora más comúnmente utilizado en el contexto
pediátrico.
Solución de Hartmann: Contiene 131 mmol de Na+, 111 mmol de Cl–, 29 mmol de lac-
tato, 5 mmol de K+, 29 mmol de HCO3– y 2 mmol de Ca2+ por litro de líquido. Es una
alternativa al salino 0,9% y algunos lo consideran más fisiológico.
Química clínica
La PVY es un marcado sustituto de la presión venosa central, y cuando se evalúa el balan-
ce de líquidos IV es difícil, una vía de PVC puede ayudar a guiar el tratamiento de fluidos.
Casos especiales
Pérdida de sangre aguda: Reanimar con coloides o salino 0,9% vía una cánula de gran
calibre hasta que la sangre esté disponible.
Niños: Utilizar glucosa con cloruro de sodio para el mantenimiento de líquidos: 100
mL/kg por los primeros 10 kg, 50 mL/kg por los siguientes 10 kg, y 20 mL/kg a par-
tir de entonces –todos por 24 h.
Anciano: Puede ser más propenso a sobrecarga de líquidos, así que utilice fluidos IV
con cuidado (menor bolo de líquidos).
Pérdidas GI (diarrea, vómito, tubos NG, etc.): Reemplace el K+ perdido, así como el
volumen de líquidos perdido.
Insuficiencia cardíaca: Utilizar líquidos IV con cuidado para evitar sobrecarga de líqui-
dos (p. 134).
Fallo hepático: Los pacientes tienen con frecuencia un sodio corporal total elevado,
así que utilice albúmina pobre en sal o sangre para la reanimación, y evite el salino
0,9% para el mantenimiento.
Pancreatitis aguda: Se requiere reanimación agresiva con líquidos debido a una gran
cantidad de líquido secuestrado en el «tercer espacio» (p. 636).
Bajo flujo urinario: Objetivo >1 mL/kg/h; el mínimo es >0,5 mL/kg/h. Dé una sobre-
carga líquida de prueba, p. ej., 500 mL salino 0,9% en 1 h (o la mitad de este volu-
men en insuficiencia cardíaca o en ancianos), y vuelva a comprobar el flujo urinario.
Si no existe sonda urinaria, excluya retención; si existe sonda urinaria, ¡asegúrese de
que la sonda no está obstruida!
Postoperatorio: Compruebe las notas de la operación para pérdidas intraoperatorias,
y asegúrese de que controla y reemplaza las pérdidas añadidas con los drenajes, etc.
Shock: Reanime con coloide o salino 0,9% vía una cánula de gran calibre. Identifique
el tipo de shock (p. 790).
Pérdidas por transpiración: (Fiebre, quemaduras) Sea consciente de las grandes can-
tidades de líquido que pueden perderse de forma no perceptible a través de la
transpiración. Las quemaduras graves en particular pueden requerir una reanimación
agresiva con líquidos.
Potasio en líquidos IV
• Los iones de potasio pueden ser dados en glucosa 5% o salino 0,9%, habitual-
mente 20 mmol/L o 40 mmol/L.
• El K+ puede retenerse en el fallo renal, así que procure no dar demasiado IV
• Los líquidos gastrointestinales son ricos en K+, así que un aumento de las pérdidas
a través del intestino (p. ej., diarrea, vómito, estoma de alto flujo, fístula intestinal)
necesitará aumento de reemplazo de K+.
䊳 La máxima concentración de K+ que es seguro infundir vía una línea periférica es
40 mmol/L, a una velocidad máxima de 20 mmol/h en un paciente monitorizado car-
díacamente. Los pacientes con restricción de líquidos pueden requerir concentra-
ciones o velocidades más altas en hipopotasemia que amenace la vida. Una veloci-
dad más rápida tiene el riesgo de arritmia o asistolia, y una concentración más alta
tiene riesgo de tromboflebitis, dependiendo del tamaño de la vena, así que dé solu-
ciones concentradas > 40 mmol/L vía un catéter venoso central, y utilice monitori-
zación del ECG para velocidades > 10 mmol/h. Para síntomas y signos de hiper e
hipopotasemia ver p. 674.
merular (fig. 7.13, p. 316) en respuesta al flujo renal disminuido y al aumento del tono
simpático, y cataliza la conversión de angiotensinógeno (un péptido hecho en el hígado)
a angiotensina I. Esta es posteriormente convertida por la enzima convertidora de la
angiotensina (ECA), que está localizada a lo largo del árbol vascular, en angiotensina II. La
última tiene varias acciones importantes incluyendo la constricción arteriolar renal efe-
rente (así presión de perfusión), vasoconstricción periférica y estimulación de la corteza
adrenal para producir aldosterona, que activa la bomba Na+/K+ en el túbulo renal distal
conduciendo a la reabsorción de Na+ y agua desde la orina, en intercambio por K+ y H+.
La glucosa se derrama en la orina cuando la concentración plasmática > umbral renal para
la reabsorción (≈10 mmol/L, pero esto varía entre las personas y está ↓ en el embarazo).
Control de sodio. El control se realiza mediante la acción de la aldosterona en el túbu-
lo contorneado distal (TCD) y en el tubo colector para aumentar la reabsorción de Na+
desde la orina. Los péptidos natriuréticos PNA, PNB y PNC (p. 137) contribuyen a la
homeostasia del Na+ mediante la reducción de la reabsorción de Na+ desde el TCD e
inhibiendo la renina. Una TFG alta (ver más tarde en este tema) resulta en un aumento
de la pérdida de Na+, y un flujo tubular renal alto y la hemodilución disminuyen la reab-
sorción de Na+ en el túbulo proximal.
Control del potasio. La mayoría de K+ es intracelular, y así los niveles séricos de K+
son un pobre reflejo del potasio corporal total. Las concentraciones de K+ e H+ en el
fluido intracelular tienden a variar juntas. Esto es porque estos iones compiten entre sí
en el intercambio con Na+ que ocurre a través de la mayoría de las membranas celula-
res y en el túbulo contorneado distal del riñón, donde el Na+ es reabsorbido desde la
orina. Así, si la concentración de H+ es alta, será excretado menos K+ en la orina. Simi-
larmente, el K+ competirá con el H+ para el intercambio a través de las membranas celu-
lares y se acumulará el K+ extracelular. Tanto la insulina como las catecolaminas estimu-
lan la captación intracelular de K+ estimulando la bomba Na+/K+.
Osmolalidad del suero. Una medida de laboratorio del número de osmoles por kilo-
gramo de solvente. Es aproximada por la osmolaridad del suero (el número de osmoles
por litro de solución) utilizando la ecuación 2(Na+ + K+) + Urea + Glucosa, dado que
estos son los electrolitos plasmáticos séricos. La osmolaridad normal del suero es 280-
300 mmol/L, que será siempre un poco menos que la osmolalidad medida en el labora-
torio –el gap osmolar. Sin embargo, si el gap osmolar es mayor de 10 mmol/L, esto indi-
ca la presencia adicional de solutos: considerar diabetes mellitus o elevación en la sangre
de etanol, metanol, manitol o etilenglicol.
Control de agua. El control se realiza fundamentalmente vía concentración de Na+ en
suero, dado que la ingesta y la pérdida de agua son reguladas para mantener la concen-
tración de Na+ constante. El aumento de la osmolalidad plasmática (p. ej., deshidratación
o glucosa en diabetes mellitus) causa sed a través del centro hipotalámico de la sed y libe-
ración de hormona antidiurética (ADH) desde la pituitaria posterior. La ADH aumenta la
reabsorción pasiva de agua desde el tubo colector renal mediante la apertura de cana-
les de agua para permitir el flujo de agua desde el fluido luminal hipotónico al intersticio
renal hipertónico. La osmolalidad plasmática baja inhibe la secreción de ADH, reducien-
do así la reabsorción renal de agua.
Tasa de filtración glomerular (TFG). Definida como el volumen de líquido filtra-
do por el glomérulo por minuto (unidades mL/min), y es una de las medidas primarias
de la progresión de la enfermedad en la enfermedad renal crónica. Puede ser estimada
mediante diversos procedimientos (ver RECUADRO).
Química clínica
utilizada como un marcador de la tasa de filtración de líquidos y solutos en el glo-
mérulo porque es solo ligeramente reabsorbida desde el túbulo renal. Cuanto más
reabsorbida sea la sustancia filtrada, sin embargo, menos precisa será la estimación
de la TFG.
MDRD (Modification of Diet in Renal Disease Study Group): Este ofrece una estima-
ción de la TFG partiendo de cuatro parámetros simples: creatinina sérica, edad, sexo
y raza (negro/no negro). Es uno de los mejores validados para monitorizar pacientes
con insuficiencia renal moderadamente grave2, y la mayoría de los laboratorios infor-
man actualmente de forma rutinaria de la TFG estimada (eTFG) utilizando la ecua-
ción MDRD en todos los informes de urea y electrolitos:
TFGe= 32-788 × creatinina suero–1.154 × edad–0,203 × [1,212 si negro] × [0,742 si mujer]
Sin embargo, existe una serie de advertencias, por lo que es mejor utilizarla para
monitorizar una función renal que se va deteriorando que para etiquetar a los
pacientes ancianos de insuficiencia renal ligera:
• No está validado para insuficiencia renal ligera, y, por tanto, su uso para cribar
poblaciones generales es cuestionable.
• Las variaciones interindividuales (y, por tanto, los intervalos de confianza) son
amplios, aunque para cada individuo las variaciones sean pequeñas, por lo que una
reducción en eTFG en un número de muestras de suero es siempre significativo.
• Los resultados individuales pueden estar afectados por variaciones en la creatini-
na sérica, tal y como ocurre tras una comida rica en proteína.
Ecuación de Cockcroft-Gault: Produce una estimación del aclaramiento de creatinina.
Mejora la ecuación de MDRD, dado que también tiene en cuenta el peso del pacien-
te. Sin embargo, el 10% de la creatinina es excretada activamente en los túbulos, y,
por tanto, el aclaramiento de creatinina sobrevalora la TFG real e infravalora el dete-
rioro de la función renal. Además, la ecuación asume un peso corporal ideal, por lo
que es menos fiable en el paciente obeso o edematoso. También es menos fiable en
función renal inestable.
(140 – edad) × peso (kg) × (0,85 si mujer) × (1,212 si negro)
Aclaramiento = ————————————————————————
de creatinina
0,813 × creatinina sérica (μmol/L)
El aclaramiento de creatinina también puede ser calculado midiendo la creatinina
excretada en una orina de 24 h y comparándola con la concentración de creatinina
sérica. Sin embargo, la precisión de la recolección de orina en las 24 h es vital, aun-
que con frecuencia inadecuada, lo que hace que este método sea inconveniente y
poco fiable.
La TFG también puede ser medida mediante la inyección de radioisótopo segui-
do de la muestra sanguínea secuencial (51Cr-EDTA) o por una gammagrafía (p. ej.,
DTPA 99Tc, p. 190). Estos métodos permiten una estimación más precisa de la TFG
que el aclaramiento de creatinina, dado que pequeñas proporciones de estas sus-
tancias son reabsorbidas en los túbulos. También tienen la ventaja de ser capaces de
proveer una función renal separada.
Aclaramiento de inulina: El patrón oro para el cálculo de la TFG, porque el 100% de
la inulina filtrada (no insulina) es retenida en el fluido luminal y, por tanto, refleja exac-
tamente la tasa de filtración de agua y solutos en el glomérulo. Sin embargo, la medi-
ción del aclaramiento de inulina requiere, de nuevo, la colección de la orina duran-
te varias horas, y también la infusión constante de inulina IV y es, por tanto, incon-
veniente de realizar.
110
Química clínica
7,0 100
90
7,1 80
Acidosis
(H+)anmol/L
70 metabólica
pHa
7,2
60 Acidosis respiratoria
aguda Acidosis
7,3 50 respiratoria
crónica
7,4 40
Alcalosis
7,5 30 respiratoria Alcalosis metabólica
7,6
20
0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 mmHg
0 2 4 6 8 10 12 kPa
PaCO2
Fig. 14.2. El área sombreada representa la normalidad. Este método es muy poderoso. El resul-
tado representado por el punto x, por ejemplo, indica que la acidosis es en parte respiratoria
y en parte metabólica. Busque una causa para cada uno.
672 Hipernatremia
Signos y síntomas. Letargia, sed, debilidad, irritabilidad, confusión, coma y mareos,
junto con signos de deshidratación (p. 666). Datos de laboratorio: ↑Na+, ↑hematocrito,
↑albúmina, urea.
Causas:
Habitualmente debido a pérdida de agua en exceso a las pérdidas de Na+:
• Pérdida de líquido sin reemplazo de agua (p. ej., diarrea, vómito, quemaduras).
• Diabetes insípida (p. 240). Sospeche si gran volumen urinario. Esto puede seguir al trau-
matismo craneoencefálico, cirugía del SNC, especialmente de la pituitaria.
• Diuresis osmótica (para como diabético, ver p. 832).
• Aldosteronismo primario: raramente severa, sospeche si ↑PA, ↓K+, alcalosis (↑HCO3–).
• Iatrogénica: reemplazamiento incorrecto de líquidos IV (salino excesivo).
Química clínica
Hiponatremia
La concentración plasmática de Na+ depende de la cantidad de Na+ como de agua en
el plasma. La hiponatremia, por tanto, no implica necesariamente depleción de Na+, La
evaluación del estado de hidratación es fundamental para el diagnóstico (ver fig. 14.3).
Signos y síntomas. Mire si hay anorexia, náusea y malestar, inicialmente, seguido de
cefalea, irritabilidad, confusión, debilidad, ↓ GCS y convulsiones, dependiente de la grave-
dad y velocidad de cambio del Na+ sérico. El fallo cardíaco o edema puede ayudar a
indicar la causa. La hiponatremia tampoco aumenta el riesgo de caída en el anciano3.
Causas. Ver fig. 14.3. Las causas artefactuales incluyen: • muestra de sangre obtenida de
un brazo con una vía IV • elevado contenido sérico de lípido/proteína que produce
↑ volumen sérico, con ↓ concentración Na+ pero con osmolalidad plasmática normal
• si hiperglicemico (~ >20 mmol/L) añada ~4,3 mmol/L al sodio plasmático por cada
10 mmol/L aumento de la glucosa por encima de lo normal.
Hiponatremia iatrogénica. Si glucosa 5% es infundida continuamente sin añadir sali-
no 0,9%, la glucosa es rápidamente utilizada, lo que deja al líquido hipotónico y produ-
ciendo hiponatremia, esp. en los pacientes en tratamiento con diuréticos tiazídicos, muje-
res (esp. premenopáusicas), y en los que tienen estrés psicológico (p. ej., postoperatorio,
séptico). En algunos pacientes, niveles plasmáticos de Na+ solo marginalmente bajos cau-
sas efectos graves (p. ej., ~128 mmol/L) –no atribuya signos extraños del SNC a ictus/AIT
no existentes si ↓ Na+.
Tratamiento
• Corrija la causa subyacente: nunca base el tratamiento en la concentración de Na+ solo.
La presencia de síntomas, la cronicidad de la hiponatremia y el estado de hidratación son
todos importantes. Reemplace Na+ y agua a la misma velocidad con la que se perdió.
• Hiponatremia crónica asintomática: restricción de líquido es con frecuencia suficiente si
asintomático, aunque puede requerirse demeclocilina (antagonista ADH). Si hipervo-
lémico (cirrosis, HF), trate primero el trastorno subyacente.
• Hiponatremia aguda o sintomática: o si deshidratado, puede realizarse rehidratación cui-
dadosa con salino 0,9%, pero no corrija los cambios rápidamente, pues puede produ-
cirse mielinólisis pontina central2. El máximo aumento en Na+ sérico de 15 mmol/L por
día si crónico, o 1 mmol/L por hora si agudo. Considere utilizar furosemida cuando no
hipovolémico para evitar la sobrecarga de líquidos.
• Antagonistas de receptor vasopresor («vaptans», p. ej., tolvaptán): promueven la excre-
ción de agua sin pérdida de electrolitos, y parecen ser efectivos en el tratamiento de
la hiponatremia hipervolémica y euvolémica, pero son caros4.
䊳䊳 En emergencia: (Convulsiones, coma) busque ayuda de expertos. Considere salino
hipertónico (p. ej., salino 1,8%) a 70 mmol Na+/h ± furosemida. Busque un aumento
gradual en Na+ plasmático a ≈125 mmol/L. Cuidado con la insuficiencia cardíaca y la
mielinólisis pontina central2.
2 Mielinólisis pontina central: desmielinización pontina irreversible y con frecuencia fatal vista en alco-
hólicos malnutridos o en corrección rápida de ↓Na+. Hay un inicio subagudo de letargia, confusión,
parálisis pesudobulbar, para o quadriparesia, síndrome de enclaustramiento o coma.
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CAP. 14_Oxford 07/05/18 16:34 Página 673
Hiponatremia 673
Sí No
¿Es el Na+ urinario ¿Está el paciente
>20 mmol/L? edematoso?
Sí No Sí No
Química clínica
Na+ y H2O se Na+ y H2O se • Síndrome nefrótico ¿Es la osmolalidad
pierden por vía de pierden por una • Fallo cardíaco urinaria
los riñones: vía distinta a los • Cirrosis hepática > 100 mmol/L?
• Enfermedad de riñones: (hiponatremia puede
Addison • Diarrea preceder al edema)
• Fallo renal, p. ej., • Vómito • Fallo renal
fase diurética del • Fístula
fallo renal; • Quemaduras
nefrocalcinosis o • Adenoma
enfermedad velloso rectal
quística medular • Obstrucción del
• Exceso de intestino
diuréticos delgado
• Diuresis osmolar • Fibrosis quística
(↑glucosa; • Exposición al Sí No
↑urea) calor
• SIADH • Sobrecarga
(ver hídrica
RECUADRO) • Hipotiroi-
dismo grave
• Glucocorti-
coides
674 Hiperpotasemia
䊳䊳 Un potasio plasmático > 6,5 mmol/L es una emergencia potencial y necesita evalua-
ción urgente (ver p. 301). La preocupación es de hiperexcitabilidad del miocardio que
conduce a fibrilación ventricular y parada cardíaca. Primero evalúe al paciente –¿parece
enfermo?, ¿hay una causa obvia? Si no, ¿podría tratarse de un resultado por artefacto?
Signos y síntomas preocupantes. Incluyen un pulso irregular rápido, dolor torácico,
debilidad, palpitaciones y sensación de mareo. ECG: (ver fig. 14.4) ondas T altas, con
forma de tienda de campaña, pequeñas ondas P, complejo QRS ancho (al final hacién-
dose sinusoidal) y fibrilación ventricular.
Resultados por artefacto: Si el paciente está bien y no tiene ninguno de los datos mencio-
nados previamente, repita la prueba urgentemente pues puede ser un artefacto, causado
Química clínica
por: • hemólisis (punción venosa difícil; paciente con el puño apretado) • contaminación
con anticoagulante potasio EDTA en botellas de sistemático de sangre (realice el sistemá-
tico de sangre tras urea y electrolitos) • trombocitemia (K+ se libera de las plaquetas duran-
te la coagulación) • analítica retrasada (K+ se libera de los hematíes; un problema particu-
lar en los puntos de atención primaria debido a tiempos largos de tránsito al laboratorio)5.
Causas
• Fallo renal oligúrico. • Enfermedad de Addison (ver p. 226).
• Diuréticos ahorradores de K+. • Transfusión sanguínea masiva.
• Rabdomiólisis (p. 319). • Quemaduras.
• Acidosis metabólica (DM). • Fármacos, p. ej., IECA, suxametonium.
• Exceso de terapia con K+. • Resultados por artefacto (ver previamente
«Resultados por artefacto»).
Tratamiento de casos no urgentes
Tratar la causa subyacente; revise medicaciones.
• Resina de poliestireno sulfonato sódico (p. ej., Calcium Resonium® 15 g/8 h VO) fija K+
en el intestino, previniendo la absorción y bajando los niveles de K+ en unos pocos
días. Si presenta vómitos, evitar la administración de PO, dar un enema de 30 g, segui-
do de una irrigación de colón de 9 h.
Tratamiento de emergencia
䊳䊳 Si hay evidencia de hiperexcitabilidad de miocardio, o K+ es > 6,5 mmol/L, obtenga
asistencia de persona experta y trate como una emergecia (ver p. 301).
Hipopotasemia
Si K+ < 2,5 mmol/L, se requiere tratamiento urgente. Note que la hipopotasemia exa-
cerba la toxicidad digitálica.
Signos y síntomas. Debilidad muscular, hipotonía, hiporreflexia, calambre, tetania, pal-
pitaciones, mareo (arritmias), estreñimiento.
ECG. Ondas T pequeñas o invertidas, ondas U prominentes (tras la onda T), intervalo
PR largo y depresión de los segmentos ST.
Causas
• Diuréticos. • Síndrome de Cushing/Esteroides/ACTH.
• Vómito y diarrea. • Síndrome de Conn.
• Estenosis pilórica. • Alcalosis.
• Adenoma velloso rectal. • Abuso de purgantes y regaliz.
• Fístula intestinal. • Fallo renal tubular (p. 316 y p. 664).
–
Si en tratamiento diurético, HCO3 es la mejor indicación de que la hipopotasemia es pro-
bablemente de larga duración. El Mg2+ puede ser bajo, y la hipopotasemia es con frecuen-
cia difícil de corregir hasta que no se normaliza el Mg2+. Sospeche el síndrome de Conn si
hipertenso, alcalosis hipopotasémica en alguien que no esté tomando diuréticos (p. 228).
En la parálisis periódica hipopotasémica, la debilidad intermitente que dura hasta 72 h
parece ser causada por desviación del K+ desde el espacio extracelular al intracelular. Ver
OHCS, p. 652.
Tratamiento. Si leve: (> 2,5 mmol/L, no síntomas.) Dé suplemento oral de K+ (≥ 80
mmol/24 h), p. ej., Sando-K® 2 tabletas/h). Revise K+ tras 3 días. Si tomando un diurético
tiazídico, y K+> 3,0 considere repetir y/o diuréticos ahorradores de K+. Si grave: (< 2,5
mmol/L) y/o síntomas peligrosos.). Dé potasio IV cuidadosamente, no más de 20
mmol/h, y no más concentrado de 40 mmol/L. No dé K+ si oligúrico.
䊳䊳 Nunca dé K+ como un bolo rápido.
Química clínica
675
CAP. 14_Oxford 07/05/18 16:34 Página 676
Hipercalcemia
Signos y síntomas. «Huesos, piedras, gruñidos y gemidos psicológicos». Dolor abdo-
minal; vómito; estreñimiento; poliuria; polidipsia; depresión; anorexia; pérdida de peso;
cansancio; debilidad; hipertensión, confusión; pirexia; litiasis renal; fallo renal; calcificación
ectópica (p. ej., córnea –ver RECUADRO); parada cardíaca. ECG: ↓intervalo QT.
Causas (Ver fig. 14.5). Más comúnmente malignidad (p. ej., de metástasis óseas, mieloma,
PTHrP) o hiperparatiroidismo primario. Otros incluyen sarcoidosis, intoxicación por vit D,
tirotoxicosis, litio, hiperparatiroidismo terciario, síndrome leche-alcali e hipercalciemia hipo-
calciúrica benigna familiar (raro; defecto en el receptor sensible al calcio). VIH puede cau-
sar ambos ↑ y ↓Ca2+ (probablemente de remodelado óseo relacionado con PTH)6.
Pruebas. La principal distinción es malignidad vs. hiperparatiroidismo 1º. Datos que
sugieren malignidad son ↓ albúmina, ↓ Cl–, alcalosis, ↓K+, PO43–, ↑FAlc, ↑PTH indica hiper-
paratiroidismo. También sistemático de sangre, electroforesis proteica, RXT, gammagrafía
ósea, excreción urinaria de Ca2+ en 24 h (para hipercalcemia hipocalciuria familiar).
Hipercalcemia1 677
Química clínica
Urea normal:
Hiperparatiroidismo
1º o 3º
678 Hipocalcemia
䊳 La hipocalcemia aparente puede ser un artefacto de hipoalbuminemia (p. 676).
Signos y síntomas. Ver RECUADRO11. Leve: Calambres, adormecimiento/parestesias
periorales. Grave: Espasmo carpopedal (especialmente si compresión de la arteria bra-
quial, signo de Trousseau; ver fig. 14.6), laringoespasmo, convulciones. La excitabilidad neu-
romuscular puede ser demostrada también golpeando sobre la parótida (nervio facial)
produciendo temblor de los músculos faciales (signo de Chvosted; ver fig. 14.7). Cataratas
si hipocalcemia crónica. ECG: Intervalo QT largo.
Causas. Con ↑PO43– Con ↔ o ↓PO43–
• Enfermedad renal crónica (p. 302). • Deficiencia de vitamina D.
• Hipoparatiroidismo (incl. cirugía • Osteomalacia (FAlc).
tiroidea y paratiroidea, p. 222). • Pancreatitis aguda.
Química clínica
Fig. 14.6. Signo de Trousseau: al inflar el man- Fig. 14.7. Signo de Chvosted: la comisura de la
guito, la muñeca y los dedos se flexionan y boca tiembla cuando el nervio facial es gol-
caen juntos (espasmo carpopedal). peado sobre la parótida.
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CAP. 14_Oxford 07/05/18 16:34 Página 679
Fosfato 679
Hipofosfatemia. Común y de poco significado a no ser que sea grave (<0,4 mmol/L).
Causas: Deficiencia de vitamina D, abstinencia del alcohol, síndrome de realimentación
(p. 587), ingesta oral inadecuada, cetoacidosis diabética grave, disfunción tubular renal e
hiperparatiroidismo 1º. Signos y síntomas: Debilidad muscular o rabdomiólisis, disfunción
de hematíes, leucocitos y plaquetas, y parada cardíaca si arritmias. Tratamiento: Suple-
mentos de fosfato oral o parenteral, p. ej., Phosphate Polyfusor® infusión IV (100 mmol
PO43– en 500 mL). Nunca dé fostado IV a un paciente que es hipercalcémico u oligúrico.
Hiperfosfatemia. Más comúnmente debido a enfermedad renal crónica, cuando es
tratado con fijadores del fosfato, p. ej., sevelamer 800 mg/8 h VO durante las comidas.
Química clínica
También estados catabólicos como síndrome de lisis tumoral (p. 529).
Magnesio
El magnesio está distribuido un 65% en el hueso y un 35% en las células; la concentra-
ción plasmática tiende a seguir la de Ca2+ y K+.
Hipomagnesemia. Causa parestesia, ataxia, convulsiones, tetania, arritmias. Puede exa-
cerbarse la toxicidad de la digital. Causas: Diuréticos, diarrea grave, cetoacidosis, abuso de
alcohol, nutrición parenteral total (monitorizar semanalmente), ↓Ca2+, ↓K+ y ↓PO43–. Tra-
tamiento: Si necesario, dé sales de magnesio, VO o IV (p. ej., 8 mmol MgSO4 IV durante
3 minutos a 2 horas, dependiendo de la gravedad, con niveles frecuentes de Mg2+.
Hipermagnesemia. Rara vez requiere tratamiento a no ser que sea grave (>7,5 mmol/L).
Causas: Fallo renal o iatrogénico (p. ej., antiácidos excesivos). Signos: Si grave: depresión
neuromuscular, ↓PA, ↓pulso, hiporreflexia, SNC y depresión respiratoria, coma.
Zinc
Deficiencia de zinc. Puede ocurrir en la nutrición parenteral o, raramente, en una
dieta pobre (demasiados pocos cereales o productos lácteos; anorexia nerviosa; alcoho-
lismo). Rara vez es debido a defecto genético. Síntomas: Alopecia, dermatitis (busque
lesiones cutáneas rojas, con costra, especialmente alrededor de las fosas nasales y comi-
suras de la boca), ceguera nocturna, diarrea. Diagnóstico: Prueba terapéutica con zinc
(niveles plasmáticos son poco fiables dado que pueden ser bajos sin deficiencia, p. ej., en
infección o trauma).
Selenio
Un elemento esencial presente en cereales, frutos secos y carne. Niveles bajos en la tie-
rra en algunas partes de Europa y China producen estados de deficiencia. Es requerido
por el antioxidante glutatión peroxidasa, que ↓ peligrosos radicales libres. El selenio es
también antitrombótico, y es requerido por las proteínas de movilidad del esperma. Su
deficiencia puede aumentar el riesgo de neoplasia y ateroma, y puede conducir a mio-
cardiopatía y artritis. Los niveles séricos son una guía pobre. Los síntomas tóxicos pue-
den encontrarse también con reemplazo demasiado enérgico.
681
Química clínica
1ª: historia parental, alcohol >4 unidades diarias, artritis reumatoide, IMC <19, inmovili-
dad prolongada y menopausia no tratada. Ver RECUADRO «Factores de riesgo para osteo-
porosis» para otros factores de riesgo, incluyendo osteoporosis 2ª.
Pruebas. Rayos X (baja sensibilidad/especificidad, con frecuencia a posteriori tras una
factura). Densitometría ósea (DEXA –ver RECUADRO «Densitometría ósea»; tabla 14.5).
Sangre: Ca2+, PO43– y FAlc normal. Considerar pruebas específicas para causas 2ª si histo-
ria sugestiva. La biopsia es poco fiable e innecesaria, sin que haya disponibles técnicas no
invasivas.
Tratamiento. La pérdida de densidad mineral ósea puede no ser completamente irre-
versible. El tratamiento farmacológico (p. ej., FRAX con la herramienta de la OMS para
evaluar el riesgo a 10 años de fractura osteoporótica en pacientes no tratados; ver
www.shef.ac.uk/frax)13,14, está guiado por la edad, número de factores de riesgo y densi-
dad mineral ósea (escáner DEXA; ver RECUADRO «Densitometría ósea con DEXA»). Las
medidas para toda la vida deben aplicarse en todos (incluyendo aquellos en riesgo pero
que no tienen todavía osteoporosis).
Medidas de estilo de vida:
• Dejar de fumar y reducir el consumo de alcohol.
• Ejercicio con soporte de peso puede aumentar la densidad mineral ósea15.
• Ejercicios de balance, como el tai chi, reducen el riesgo de caídas.
• Dieta rica en calcio y vitamina D (utilice suplementos si la dieta es insuficiencia –ver
«Medidas farmacológicas» más abajo en este tema)
• Programas de prevención de caídas en el hogar, con evaluación visual y visitas al domi-
cilio. NB: los protectores de cadera no son fiables para prevenir fracturas16.
Medidas farmacológicas:
• Bifosfonatos: El ácido alendrónico es 1ª línea (10 mg/d o 70 mg/semana; no si la TFGe
<35). También utilizado para prevención cuando se utilizan esteroides a largo plazo. Si
intolerante, trate con etidronato o risedronato. Dígale al paciente que tome las pasti-
llas con mucha agua y que se mantenga de pie durante >30 minutos, así como espe-
rar 30 minutos antes de comer o tomar otros fármacos. (ES: fotosensibilidad; molestia
GI; úlceras esofágicas –suspenda si disfagia o dolor abdominal; rara vez, osteonecrosis
de la mandíbula).
• Calcio y vitamina D: Rara vez utilizados solos para profilaxis, dada su cuestionable efi-
cacia y alguna evidencia de pequeño riesgo ↑CV. Ofrezca si pruebas de deficiencia,
p. ej., calcio 1 g/d + vit D 800 U/d. Objetivo de niveles en suero de 25-hidroxi-vitami-
na D ≥ 75 nmol/L.
• Ranelato de estroncio: Debido a un riesgo aumentado de problemas cardíacos debería
utilizarse solo en los pacientes que tienen intolerancia grave a otros agentes y sin
enfermedad cardiovascular.
• Terapia de reemplazo hormonal (TRH): Puede prevenir (no tratar) la osteoporosis en
mujeres posmenopáusicas. El riesgo relativo de cáncer de mama es 1,4 si utilizada >10
años; riesgo ↑ CV.
• Raloxifeno: Es un modulador selectivo del receptor de estrógeno (MSRE) que actúa de
forma similar a la THS, pero con ↓ riesgo de cáncer de mama.
• Teriparatida (PTH recombinante): Es útil en los que sufren más fracturas a pesar de tra-
tamiento con otros agentes. Hay un potencial riesgo de malignidad renal.
• Calcitonina: Puede reducir el dolor tras una fractura vertebral.
• Testosterona: Puede ayudar al hombre con hipogonadismo mediante la promoción de
la conectividad trabecular.
• Denosumab: Un AC monoclonal para el ligando RANK, dado SC dos veces al año
↓ reabsorción.
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CAP. 14_Oxford 07/05/18 16:34 Página 683
Química clínica
–1 a –2,5 Osteopenia. Riesgo de fractura osteoporótica tardía. Ofrezca consejo
sobre estilos de vida
–2,5 o peor Osteoporosis. Ofrezca consejo sobre estilo de vida y tratamiento
(p. 682). Repita DEXA en 2 años
Osteomalacia: Dolor y sensibilidad en los huesos; fracturas (esp. cuello femoral); miopatía
proximal (marcha de pato), debido a ↓PO43– y deficiencia de vitamina D per se.
Causas
Deficiencia de vitamina D: Debido a malabsorción (p. 266), dieta pobre o falta de luz solar.
Osteodistrofia renal: El fallo renal conduce a deficiencia de 1,25-dihidroxi-colecalciferol
[deficiencia de 1,25(OH)2-vitamina D]. Ver también enfermedad ósea renal (p. 312).
Inducida por fármacos: Anticonvulsivantes pueden inducir enzimas hepáticas, conducien-
do a aumento de la eliminación de 25-hidroxi-vitamina D.
Resistencia a la vitamina D: Un número de patologías, principalmente hereditarias, en las
que la osteomalacia responde a altas dosis de vitamina D (ver «Tratamiento» más tarde
en este tema).
Enfermedad hepática: Debido a hidroxilación reducida de vitamina D a 25-hidroxi-cole-
calciferol y a malabsorción de vitamina D, p. ej., en cirrosis (p. 276).
Osteomalacia inducida por tumor: (Hipofosfatemia oncogénica.) Mediada por producción
elevada por el tumor de la fosfatonina, factor de crecimiento de fibroblástico 23 (FGF-
23), que causa hiperfosfaturia. La ↓PO43– sérica con frecuencia causa mialgia y debilidad18.
Pruebas
Plasma: Ligera ↓Ca2+ (pero puede ser grave); ↓PO43–; FAlc; PTH alta; ↓25(OH)-vitamina
D, excepto en resistencia a la vitamina D. En fallo renal, ↓1,25(OH)2-vitamina D (p. 312).
Biopsia: La biopsia ósea muestra mineralización incompleta. La biopsia muscular (si mio-
patía proximal) es normal.
Rayos X: En osteomalacia, hay una pérdida de hueso cortical; también, pueden verse frac-
turas parciales aparentes sin desplazamiento, especialmente en el borde lateral de la escá-
pula, cuello femoral inferior y en la parte femoral media (zonas de Looser; ver fig. 14.9).
En el raquitismo se ven superficies metafisarias desgastadas en forma de copa (fig. 14.10).
Tratamiento
• En la insuficiencia dietética, dé vitamina D, p. ej., como una tableta/12 h VO de calcio
D3 forte.
• En malabsorción o enfermedad hepática, dé vitamina D2 (ergocalciferol), hasta 40.000 U
(=1 mg) diariamente, o calcitriol parenteral, p. ej., 7,5 mg al mes.
• Si se debe a enfermedad real o a resistencia a la vitamina D, dé alfacalcidol (1α-hidro-
xi-vitamina D3) 250 ng-1 mcg diariamente, o calcitriol (1,25-dihidroxi-vitamina D3) 250 ng-
1 mcg diariamente, y ajuste la dosis según el nivel plasmático de Ca2+. 䊳䊳 Alfacalcidol
y calcitriol pueden producir hipercalcemia peligrosa.
• Monitorice el plasma Ca2+, inicialmente semanalmente, y si náusea/vómito.
Raquitismo resistente a vitamina D. Existe en dos formas. El tipo I tiene baja acti-
vidad de 1-hidroxilasa renal, y el tipo II tiene resistencia en el órgano final a 1,25-dihi-
droxi-vitamina D3, debido a una mutación puntual en el receptor. Ambos son tratados
con grandes dosis de calcitriol.
Raquitismo hipofosfatémico ligado al cromosoma X. Heredado con patrón
dominante –debido a un defecto en el manejo del fosfato renal (debido a mutaciones
en los genes PEX o PHEX que codifican una endopeptidasa). El raquitismo se desarro-
lla en la primera infancia y es asociado con crecimiento pobre. El nivel plasmático de
PO43– es bajo, FAlc es alta y hay fosfaturia. El tratamiento es con altas dosis de fosfato oral
y calcitriol.
Química clínica
crecimiento óseo (p. ej., sordera, compresión de las raíces nerviosas), IC de alto gasto (si
está afectado > 40% del esqueleto) y osteosarcoma (< 1% de los afectados durante
> 10 años –sospechar si inicio súbito o empeoramiento del dolor óseo)19.
Radiología rayos X. Aumento localizado del hueso. Engrosamiento cortical parcheado
con esclerosis, osteólisis y deformidad (p. ej., osteoporosis circumscripta del cráneo). Afinidad
por el esqueleto axial, huesos largos y cráneo. El escaneado óseo revela «puntos calientes».
Química sanguínea. Ca2+ y PO43– normales; FAlc marcadamente elevada.
Tratamiento. Si falla la analgesia, puede probarse el ácido alendrónico para reducir el
dolor y/o deformidad. Es más efectivo que etidronato o calcitonina, y tan efectivo como
pamidronato IV Siga el consejo experto.
destación) y variaciones genéticas. Albúmina alta: las causas son deshidratación; artefacto
(p. ej., estasis).
Inmunoglobulinas (Anticuerpos). Son sintetizados por las células B. Existen cinco iso-
formas de Ig en humanos, A, D, E, G y M, y la IgG es la forma circulante más abundante.
Banda monoclonal específica en paraproteinemia (ver p. 370). Difusamente aumentada en
infecciones crónicas, TB, bronquiectasias, cirrosis hepática, sarcoidosis, LES, RA, enferme-
dad de Crohn, cirrosis biliar 1ª, hepatitis y parasitemia. Bajas en síndrome nefrótico,
malabsorción, malnutrición y estados de deficiencia inmune (p. ej., enfermedad grave, fallo
renal, diabetes mellitus, malignidad o congénita).
Respuesta de fase aguda. El cuerpo responde a una variedad de insultos con, entre
otras cosas, la síntesis, por el hígado, de un número de proteínas (normalmente presen-
te en pequeñas cantidades en el suero); p. ej., α1-antitripsina, fibrinógeno, complemento,
haptoglobina y PCR. Una reducción concomitante en el nivel de albúmina es caracterís-
tico de patologías tales como infección, malignidad (especialmente α2-fracción), trauma,
cirugía y enfermedad inflamatoria.
PRC. Así denominada porque se une a un polisacárido (fracción C) en la pared celular
del neumococo. Los niveles ayudan a monitorizar la inflamación/infección (normal < 8
mg/L). Al igual que la VSG, aumenta en muchas patologías inflamatorias, pero cambia más
rápidamente. Aumenta en horas y comienza a disminuir a los 2-3 días de la recupera-
ción; por tanto, puede ser usada para seguir la actividad de la enfermedad (p. ej., enfer-
medad de Crohn) o la respuesta a la terapia (p. ej., antibióticos). El valor de PCR en la
inflamación leve es 10-50 mg/L; infección bacteriana activa 50-200 mg/L; infección grave
o trauma > 200 mg/L; ver tabla 14.6.
Proteínas urinarias
La pérdida de proteína urinaria > 150 mg/d es patológica (p. 294).
Albuminuria. Habitualmente causada por enfermedad renal (p. 294). Microalbuminu-
ria: La pérdida de proteína urinaria entre 30 y 300 mg/d (así que no visible con la tira
normal) y puede ser vista en diabetes mellitus, ↑PA, LES y glomerulonefritis (ver p. 314
para el papel en DM). Puede también ser cuantificada midiendo la ratio albúmina:creati-
nina urinaria (A:CR), habitualmente en una muestra urinaria obtenida en la primera mic-
ción de la mañana. Un nivel > 30 mg/mmol indica albuminuria, y microalbuminura es defi-
nida como > 2,5 mg/mmol en hombres y > 3,5 en mujeres. Es una prueba de cribado útil
en diabéticos, y en sujetos con TFGe reducida. Note que algunos laboratorios miden la
proteína urinaria total, no la albúmina –a P:CR de 50 es equivalente a una A:CR de 3020.
Proteína de Bence Jones. Se trata de cadenas ligera excretadas en exceso en algu-
nos pacientes con mieloma (p. 368). No son detectadas por tira analítica y pueden ocu-
rrir con electroforesis del suero normal.
Hemoglobinuria. Causada por hemólisis intravascular (p. 336).
Mioglobinuria. Causada por rabdomiólisis (p. 319).
Química clínica
Albúmina
α1 α2 β γ
β1 β2
α1-antitripsina α2-macroglobulina Transferrina C3 Inmunoglobulinas
haptoglobulina alguna LDL
Química clínica
y potencialmente más efectos adversos. El BNF contiene una lista de las interaccio-
nes más importantes entre los fármacos.
Tabla 14.7. Inhibidores e inductores comunes de las isoenzimas de citocromo P450
Inductores enzimáticos Inhibidores enzimáticos
Fenitoína IRSS Amiodarona
Rifampicina Ciprofloxacino Diltiazem
Carbamazepina Isoniazida Verapamilo
Alcohol Macrólidos Omeprazol
Hierba de San Juan Inhibidores de la proteasa VIH Zumo de pomelo
Barbitúricos Agentes antifúngicos imidazol y triazol
690 Hiperlipidemia
Los lípidos viajan en la sangre enpaquetados con proteínas como lipoproteínas. Hay cua-
tro clases: quilomicrones y VLDL (principalmente triglicéridos), LDL (principalmente
colesterol) y HDL (principalmente fosfolípidos) (para las abreviaturas ver nota a pie de
página3). La evidencia de que el colesterol es un factor de riesgo mayor para enferme-
dad cardiovascular (ECV) es irrefutable (ESTUDIO «4S»21, WOSCOPS22, ESTUDIO
CARE23, HEART PROTECION STUDY24) y, de hecho, puede ser incluso la «luz verde»
que permite que actúen otros factores de riesgo25. La mitad de la población de RU tiene
un colesterol sérico que los sitúa en un riesgo significativo de ECV. El HDL parece corre-
lacionarse inversamente con ECV.
A quién realizar cribado para hiperlipidemia
Química clínica
Química clínica
Trig < 2,3 puede tener xantelasma
o arco
Hiperlipidemia familiar Col 6,5-10 ↑LDL ↑VLDL Lipidemia 1ª siguiente más
combinadaIIb,IV, o V Trig 2,3-12 ↓HDL común; xantelasma; arco
Disbetalipoproteinemia Col 9-14 ↑LDL Estría palmar; xantoma
(enfermedad de partículas Trig 9-14 ↓HDL ↓LDL eruptivo
remanentes)III
Hipertrigliceridemia familiarIV Col 6,5-12 ↑VLDL
Trig 3,0-6,0
Hiperlipoproteinemia tipo V Trig 10-30; Xantoma eruptivo;
se hallan lipemia renalis;
quilomicrones hepatoesplenomegalia
Números superíndices azules = fenotipo OMS; col/trig niveles dados en mmol/L.
Anormalidades primarias de HDL:
• Hiperalfalipoproteinemia: ↑HDL, col > 2.
• Hipoalfalipoproteinemia (enfermedad de Tangier): ↓HDL, col < 0,92.
Anormalidades primarias de LDL:
• Abetalipoproteinemia (ABL): trig < 0,3, col < 1,3, desaparecidos LDL, VLDL y qui-
lomicrones. Trastorno autosómico recesivo de malabsorción grasa que produce
deficiencia de vitaminas A y E, con retinitis pigmentosa, neuropatía sensorial, ata-
xia, pie cavo y acantocitosis.
• Hipobetalipoproteinemia: col < 1,5, ↓LDL, ↓HDL. Trastorno codominante autosó-
mico del metabolismo de apolipoproteina B. Longevidad en heterocigotos. Los
homocigotos se presentan con un cuadro clínico similar a ABL.
Fig. 14.13. Xantelasma. Xantos es amarillo en griego, y elasma quiere decir plato. Los xantelas-
mas son placas amarillas, típicamente de pocos milímetros de dimensión. Se congregan alrede-
dor de los párpados, o justo debajo de los ojos e indican hiperlipidemia.
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CAP. 14_Oxford 07/05/18 16:34 Página 692
692 Porfirias
Las porfirias son un grupo heterogéneo de enfermedades raras producidas por varios
errores de la biosíntesis del hemo (producido cuando el hierro es quelado en la proto-
profirina IXa), que pueden ser genéticos o adquiridos. Dependiendo del estadio de la
biosíntesis de hemo que sea defectuoso, hay una acumulación de cualquier porfirinóge-
no, que son inestables y oxidados a porfirinas, o sus precursores, porfobilinógeno y ácido
δ-aminolevulínico. Los precursores de la porfirina son neurotóxicos, mientras que las
porfirinas también inducen fotosensibilidad y la formación de radicales libres tóxicos.
• Alcohol, plomo o deficiencia de hierro producen metabolismo anormal de las porfirinas.
• Debería ofrecerse consejo genético (OHCS, p. 154) a todos los pacientes y a sus familias.
Porfirias agudas. Ocurre cuando predomina la acumulación de los precursores del
Química clínica
Química clínica
• Agentes anestésicos (barbitúricos, halotano)
• Antibióticos (cefalosporinas, sulfonamidas, macrólidos, tetraciclinas, rifampicina, tri-
metoprim, cloranfenicol, metronidazol)
• Metoclopramida
• Inhibidores de la ECA
• Bloqueantes de los canales de Ca2+
• Estatinas
• Anticonvulsivantes
• Furosemida
• Sulfonilureas
• Lidocaína
• Sales de oro
• Antihistamínicos
• Anfetaminas
15 Síndromes epónimos
Fig. 15.1. «Ningún descubrimiento científico recibe
el nombre de su descubridor original», afirma el Pro-
fesor Stephen Sitgler en Ley de Epónimos de Stigler, y
afirmando esto, nombra al sociólogo RK Merton
como su descubridor –haciendo de forma delibera-
da que la ley de Stigler sea un ejemplo en sí misma.
¿Es también cierto en medicina? Al menos otros seis
describieron la enfermedad de Alzheimer antes que
Alois Alzheimer en 1906, y la tetralogía de Fallot (que
recibió el nombre por Étienne-Louis Fallot en 1888)
había sido descrita por primera vez en 1672 por
Niels Stenson. No todos los epónimos médicos
siguen la ley de Stigler. Cuarenta años después de
que fuera descrita por primera vez, el neurólogo francés Jean-Marie Charcot (él mismo asociado con al
menos 15 epónimos médicos) atribuyó el nombre de «enfermedad de Parkinson» a la enfermedad des-
crita en el ensayo de James Parkinson de 1817 La Parálisis Agitante. Los doctores monocromáticos pueden
tratar de abolir los epónimos reglamentándolos mediante títulos basados en la histología. Pero las clasifica-
ciones varían a medida que emergen los hechos, y como resultado se hace esencial volver a renombrar los
no epónimos. Los epónimos, por el contrario, continúan para siempre, dado que no implican nada con res-
pecto a las causas.
Síndromes epónimos
bado con endoscopia en individuos con síntomas de ERGE crónica y factores de
riesgo (> 50 años, obesidad, 么, raza blanca, historia familiar de Barret o adenocarci-
noma esofágico). Diagnóstico: Biopsia del epitelio columnar endoscópicamente visi-
ble conduce a la corroboración histológica. Debe registrarse la longitud (utilizando
la clasificación de Praga). Tratamiento: 䊳 Enfocado en la detección y prevención de la
morbilidad asociada más significativa: adenocarcinoma esofágico. El riesgo de pro-
gresión es bajo (0,1-0,4% por paciente por año, mucho menos que previamente
sugerido). Los factores de riesgo para la transformación maligna incluyen ↑ edad, 么,
largo segmento esofágico afectado, y evidencia de displasia. Existe controversia sobre
el uso de la endoscopia para la vigilancia de displasia, dado que no hay evidencias de
su utilidad. Las guías actuales sugieren que los pacientes sin displasia y en los que la
longitud del esfófago afectado es < 3 cm deberían ser considerados para darles de
alta en los programas de vigilancia, dependiente de la histología específica8. En los
que haya una enfermedad más extensa, es apropiada la evaluación endoscópica cada
2-3 años. Si hay alto grado de displasia o carcinoma intramural, se recomienda la
resección endoscópica o ablación con radiofrecuencia (ARF) de la mucosa. Si se
detecta displasia de bajo grado, debería confirmarse mediante examen repetido tras
6 meses y por un patólogo independiente, antes de la ARF9.
Norman Rupert Barrett, 1903-1979 (cirujano británico)
Síndrome de Brugada
Preste atención al bloqueo de rama derecha
con la inusual elevación de los segmentos ST
en V1-V3 (fig. 15.2; hay tres variantes ECG de
este patrón). Esta patología predominante-
mente autosómica dominante que produce
alteración de los canales de sodio predispone
a arritmias fatales (p. ej., fibrilación ventricular),
típicamente en varones jóvenes (p. ej., desen-
cadenada por fiebre)10. Es prevenible implan-
tando un desfibrilador. 䊳Considerar enfermedad
cardíaca eléctrica primaria en todos los síncopes
inesperados. Puede ser necesaria la estimulación
eléctrica programada. Los familiares de los que
hayan tenido muerte súbita inexplicada pueden
someterse a una prueba de desenmascara-
miento de arritmias mediante las prueba de
ajmalina IV –pero algunos resultados son falsos
positivos. Utilice el juicio para seleccionar a los
que presentan anormalidades del ST, pero están
asintomáticos, para realización de pruebas elec-
trofisiológicas, biopsia miocárdica del ventrículo
derecho y RM. Se encuentran mutaciones del
gen SCN5A (codifica el canal Nav1.5 depen-
diente de voltaje) en 15-20%. Se han descrito
otras mutaciones11.
Pedro y Josep Brugada, descrito 1992 (cardiólogos españoles)
Signos que pueden distinguir el ECJ variante de ECJ esporádico (ECJe) 697
• Una menor edad de presentación (media 29 años vs. 60 años en casos esporádicos
de ECJ).
• Mayor supervivencia y demencia más tardía (media 14 meses vs. 4 para ECJ esporádico).
• Los datos psiquiátricos son un signo precoz (ansiedad, abstinencia, apatía, agitación, un
aspecto permanente de miedo en los ojos, depresión, cambio de personalidad, insom-
nio). Pueden presentarse alucinaciones y delirios –antes de mutismo acinético.
• Son comunes los síntomas sensoriales dolorosos (p. ej., dolor hiperestésico en el pie).
Síndromes epónimos
• Un EEG más normal (la ECJ esporádica tiene una espiga y patrón de ondas caracterís-
ticos).
• La ratio proteica tau-pT181/tau es 10 veces superior en ECJv que en ECJe22.
• Es típico ser homocigoto para metionina en el codón 129 del gen PRP.
Envenenando a su jefe
En 1931, la enfermedad de Buerger produjo gangrena en los dedos del pie de Harvey
Cushing (p. 224) –el neurocirujano más cascarrabias (y más grande) que haya habido
nunca. Tenía que ser llevado en silla de ruedas al quirófano para poder continuar con su
brillante arte (y para continuar aterrorizando a sus asistente)26. Tuvo que retirarse parcial-
mente, en cuyo momento sus colegas le regalaron una magnífica pitillera de plata, conte-
niendo 2000 cigarrillos (a lo cual, él era adicto) –uno por cada tumor cerebral que había
extirpado durante su larga carrera, verificando así la verdad de que aunque debemos todo
a nuestros profesores, debemos al final matarlos para poder salir de su sombra1.
1 Der Vogel kämpft sich aus dem Ei. Das Ei ist die Welt. Wer geboren werden will, muss eine Welt zerstören.
El pájaro lucha para salir del huevo. El huevo es el mundo. Quienquiera que vaya a nacer, debe prime-
ro destruir un mundo (Herman Hess. Demian; 1917).
2 Fibrosis quística (mal plegamiento de la proteína CFTR), Marfan (mal plegamiento de la fibrilina)28,
Fabry (mal plegamiento de la α-galactosidasa), Gaucher (mal plegamiento de β-glucocerebrosidasa),
retinitis pigmentosa 3 (mal plegamiento de la rodopsina); algunos cánceres puede ser causados por mal
plegamiento de proteínas supresoras del tumor (proteína de von Hippel-Lindau).
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 15_Oxford 07/05/18 16:27 Página 698
Síndromes epónimos
RM cabeza Habitualmente normal Muchas lesiones de la sustancia
blanca periventricular
RM lesiones médula Longitudinal, central Múltiples, pequeñas, periféricas
LCR bandas oligoclonales Ausentes Presentes
Discapacidad permanente Inusual y relacionado En enfermedad progresiva
con el ataque tardía
Otras autoinmunidades En ≤ 50% (p. ej., Sjögren) No común
coespinales (debilidad y respuesta plantar extensora) con daño del nervio periférico, así que los
700 reflejos tendinosos están paradójicamente disminuidos (diagnóstico diferencial p. 446). Hay también
degeneración de la columna dorsal, con pérdida de la sensación posicional y vibratoria. Aparece
también pie cavo y escoliosis. La miocardiopatía puede causar IC. La edad típica de la muertes es
~50 años. R/ : No hay cura. Trate la IC, arritmias y DM.
Nikolaus Friedreich, 1825-1882 (neurólogo alemán)
Síndrome de Froin. ↑ Proteína en LCR + xantocromía con número de células normal –signos
de bloqueo del flujo en el LCR (p. ej., por un tumor de la columna).
Georges Froin, 1874-1932 (médico francés)
Síndromes epónimos
Síndrome de Gardner. Una variante dominante de poliposis adenomatosa familiar, causada por
mutaciones del gen APC (5q21). Hay múltiples pólipos del colon (que se malignizan de forma inevi-
table; p. 520)37, osteomas benignos, quistes epidérmicos, tumores dermoides, fibromas y neurofi-
bromas. Fondo de ojo revela manchas negras (hipertrofia congénita del epitelio pigmentario retinia-
no); esto ayuda a la detección presintomática. Presentación: Puede presentarse de 2-70 años con sín-
tomas colónicos (p. ej., diarrea sanguinolenta) o extracolónicos. Cirugía profiláctica (p. ej., proctoco-
lectomía) es el otro tratamiento curativo. Se ha utilizado la polipectomía endoscópica con terapia
con celecoxib a largo plazo para posponer la colectomía profiláctica38.
Eldon J Gardner, 1909-1989 (médico estadounidense)
Síndrome de Gélineau (Narcolepsia). El paciente, habitualmente un hombre joven, sucumbe a
ataques irresistibles de sueño inapropiado ± vívidas alucinaciones hipnogógicas, cataplexia (hipoto-
nía súbita) y parálisis de sueño (parálisis del habla y el movimiento, mientras que se está completa-
mente alerta, al inicio del sueño o al despertarse). Hipótesis: Mutaciones conducen a pérdida de
neuronas hipotalámicas que contienen hipocretin, vía destrucción autoinmune39. El 95% son positi-
vos para HLA DR2. R/ : Estimulantes (p. ej., metilfenidato) pueden producir dependencia, psicosis.
Modafinil puede ser mejor. ES: ansiedad, agresión, boca seca, euforia, insomnio, ↑PA, discinesia, ↑FAlc.
Jean-Baptiste-Édouard Gélineau, 1828-1906 (médico francés)
Síndrome de Gerstmann. Una constelación de síntomas que sugieren una lesión parietal domi-
nante: agnosia de los dedos (inhabilidad para identificar los dedos), agrafia (incapacidad para escribir),
acalculia (incapacidad de calcular) y desorientación izquierda-derecha.
Josef Gerstmann, 1887-1969 (neurólogo austriaco)
Síndrome de Gilbert. Una causa común de hiperbilirrubinemia indirecta o no conjugada debido
a ↓ actividad UGT-1 (la enzima que conjuga la bilirrubina con ácido glucurónico). Prevalencia: 1-2%;
5-15% tiene historia familiar de ictericia. Puede pasar desapercibido durante muchos años y habi-
tualmente se presenta en la adolescencia con ictericia intermitente que ocurre durante enferme-
dades, ejercicio o ayunas. Diagnóstico: ↑ Bilirrubina leve; sistemático de sangre y reticulocitos normal
(es decir, no hemólisis). Es una patología benigna.
Nicolas Augustin Gilbert, 1858-1927 (médico francés)
Síndrome de Gilles de la Tourette. Tics tónicos, clónicos, distónicos o fónicos: sacudidas, par-
padeos, olisqueos, escupitajos, tartamudeo, exclamaciones verbales obscenas explosivas e inconte-
nibles (coprolalia, en 20%) o gestos (coprofilia, 6%)40, gruñidos, chillidos, eructos, giros, morder a
otros ± pataletas. Puede haber un cuadro ocurrente, innovador, fantasmagórico, con imitaciones
(ecopraxia), payasadas, picardías, extravagancias, dramatizaciones, asociaciones surrealistas, afecto
inhibido, rapidez, soltura, imágenes y memoria vívidas, y ganas de estímulo. La paradoja del tic: Los
tics son voluntarios, pero con frecuencia no deseados; el deseo de los tics surge del alivio de la extra-
ña sensación que crece antes del tic y es liberada por él, «como rascarse una picadura de mosqui-
to, los tics conducen a más tics»41. Edad media de inicio: 6 años.么:乆≈4:1. Patogénesis: Desconocida;
múltiples loci genéticos implicados y anormalidades neuroanatómicas reportadas en RM. Asociacio-
nes: Trastorno obsesivo-compulsivo; trastorno de hiperactividad y déficit de atención. R/ : (Ninguno
puede ser querido.) Risperidona, haloperidol o pimozida. Entrenamiento para revertir el hábito42. La
estimulación cerebral profunda está indicada raramente, pero puede ayudar.
Marquis Georges Albert Édouard Brutus Gilles de la Tourette,
1857-1904 (neurólogo francés)
Enfermedad de Goodpasture (Síndrome neumorrenal). Glomerulonefritis aguda + síntomas pul-
monares (hemoptisis/hemorragia pulmonar difusa) causado por anticuerpos contra la membrana basal
glomerular (se fijan en la membrana basal del riñón y en la membrana alveolar). Pruebas: RXT: infiltra-
dos debidos a hemorragia pulmonar, con frecuencia en las zonas inferiores. Biopsia renal: glomerulone-
fritis con semilunas. R/ : 䊳䊳Trate el shock, tratamiento inmunosupresor vigoroso y plasmaféresis.
Ernest William Goodpasture, 1886-1960 (patólogo estadounidense)
Síndromes epónimos
pérdida de conciencia. ▲▲: bradicardia, migraña, epilepsia atónica/acinética, síndrome
de la fase del sueño retrasada, trastorno de conversión, simulación y psicosis.
No confundir cataplexia con catalepsia –una flexibilidad como la cera en la que se
mantienen sin esfuerzo posturas involuntarias como estatuas (congelados) a pesar
de parecer muy poco confortable.
arritmias. Estudios de conducción nerviosa: Conducción lenta. LCR: ↑ Proteína (p. ej., > 5,5 g/L),
número de leucocios del LCR normal. La afectación respiratoria (el gran peligro) requiere
traslado a la UVI. Haga capacidad vital forzada (CVG) cada 4 horas. 䊳Cuanto antes inicie la
ventilación, mejor, p. ej., CVF < 1,5 L, PaO2 < 10 kPa, PaCO2 > 6 kPa. R/ : Inmunoglobulina IV
0,4 g/kg/24 h durante 5 días. El intercambio plasmático también es bueno (¿más ES?)45. Los
esteroides no tienen efecto. Pronóstico: Bueno; ~85% presentan una recuperación comple-
ta o casi completa. El 10% son incapaces de andar solos al año. Una parálisis completa es
compatible con una recuperación completa. Mortalidad: 10%.
George C. Guillain, 1876-1961; Jean-Alexandre Barré, 1880-1967 (neurólogos franceses)
Púrpura de Henoch-Schönlein (PHS) (fig. 15.5). Una vasculitis de pequeño vaso,
que se presenta con púrpura (pápulas púrpura que no se blanquean cuando se presio-
na la piel debido a sangrado intradérmico), con frecuencia sobre los glúteos y superficies
extensoras, típicamente afectando a 么 jóvenes. Puede haber glomerulonefritis (p. 310),
artritis y dolor abdominal (± intususcepción), que puede simular un «abdomen agudo».
R/ : Fundamentalmente de soporte.
Eduard H. Henoch, 1820-1910 (pediatra alemán); Johann L. Schönlein, 1793-1864 (médico alemán)
Síndrome de Horner. Una triada de 1. miosis (constricción de la pupila, fig. 15.4);
2. ptosis parcial (caída del párpado superior) + enoftalmos aparente (ojo hundido);
3. anhidrosis (pérdida de sudoración ipsilateral). Debido a interrupción de la inervación
simpática de la cara, p. ej., en el tronco encefálico (desmielinización, enfermedad vascu-
lar), médula (siringomielia), salida torácica (tumor de Pancoast, p. 708), o en el recorrido
del simpático desde la arteria carótida interna hasta el cráneo (fig. 15.6), y órbita.
Johann Friedrich Horner, 1831-1886 (oftalmólogo suizo)
Enfermedad de Huntington. Trastorno neurodegenerativo autosómico dominante,
progresivo, incurable, que se presenta en la edad media de la vida, con frecuencia con
una fase prodrómica de síntomas leves (irritabilidad, depresión, incoordinación). Progre-
sa a corea, demencia ± mareos y muerte (en ~15 años del diagnóstico). Patología: Atro-
fia y pérdida neuronal del estriatum y de la corteza. Base genética: Expansión de la
secuencia CAG en cromosoma 4. R/ : (p. 87). Ningún tratamiento previene la progresión.
Consejo para el paciente y la familia46.
George Huntington, 1850-1916 (médico estadounidense)
Síndrome de Jervell y Lange-Nielsen. Sordera sensorioneuronal bilateral, congé-
nita, ausómica recesiva e intervalo QT largo (p. 96, por tanto, síncope, torsades ± muer-
te súbita-50% para la edad de 15 si no tratados). Mutación del gen KCNQ1 o KCNE1
causa canalopatía K+. R/ : β-bloqueantes, marcapasos, DAI, implantes cocleares47.
Anton Jervell, 1901-1987; Fred Lange-Nielsen, 1919-1989 (médicos noruegos)
Sarcoma de Kaposi (SK). Un tumor de células fusiformes derivadas de las células
del endotelio capilar causado por el herpes virus B (=sarcoma de Kaposi asociado al
virus del herpes SKHV). Se presenta como pápulas púrpura (1/2-1 cm) o placas en la piel
(fig. 15.7) y mucosa (mire en la boca, pero en cualquier órgano). Metastatiza a los gan-
glios. Hay cuatro tipos: 1. Clásico, una enfermedad rara del anciano. 2. Endémico, una
enfermedad de los niños documentada antes del VIH. 3. SK iatrogénico debido a inmu-
nosupresión, p. ej., receptores de trasplante de órganos. 4. SK asociado al sida. Habitual-
mente se presenta con un número bajo de CD4 y puede indicar fallo de TARGA
(p. 402). Sin embargo, 1/3 se presenta en VIH con número casi normal de CD4 y una
carga viral indetectable. Iniciación de TARGA con constitución rápida del sistema inmu-
ne puede precipitar el SK. El SK pulmonar puede presentarse en hombres y mujeres VIH
positivos como disnea y hemoptisis. El SK intestinal puede producir náusea, dolor abdo-
minal. Sitios raros: SNC, laringe, ojo, glándulas, corazón, mama, heridas o lugares de biop-
sia. ▲: Biopsia. R/ : Optimizar TARGA, radioterapia local, excisión quirúrgica, terapia intra-
lesional (vincristina, bleomicina), retinoides tópicos, interferón alfa, interleukina-12. La
investigación reciente incluye talidomida, VEGF, anticuerpos monoclonales y sirolimus.
Moricz Kaposi, 1837-1902 (dermatólogo húngaro)
Síndromes epónimos
debilidad facial bilateral)
• Nivel sensorial
• La recuperación comienza ~2 semanas
• Asimetría de la debilidad marcada
después de que haya finalizado el período
y persistente
de progresión
• Disfunción grave del intestino o la
• Disfunción autonómica
vejiga
• Ausencia de fiebre al principio
• Leucocitos en LCR > 50
• Proteínas del LCR ↑ con leucocitos
< 10 × 106/L
• Pruebas electrofisiológicas típicas
afecta a un sistema único (73%, p. ej., hueso) o a múltiples (27%), con granulomas infiltrantes
que contienen células dendríticas (Langerhans). 么:乆≈1,5:1; los órganos en riesgo son hígado,
pulmón, bazo, médula ósea. La enfermedad pulmonar se presenta con neumotórax o hiper-
tensión pulmonar primaria. TC/RXT: nódulos y quistes + patrón en panal de abeja en zonas
superiores y medias. ▲: Biopsia (piel, pulmón). R/ : Excisión local, esteroides; vinblastina ± eto-
pósido si grave49. OHCS (p. 644).
Paul Langerhans, 1847-1888 (patólogo alemán)
Síndrome de Leriche. Pulso femoral ausente, claudicación/atrofia de la región glútea, una
pierna pálida y fría y disfunción eréctil por enfermedad oclusiva aorto-iliaca, p. ej., émbolo en
silla de montar en la bifurcación aórtica. La cirugía puede ayudar.
René Leriche, 1879-1955 (cirujano francés)
Endocarditis eosinofílica de Loffler. Miocardiopatía restrictiva + eosinofilia (p. ej., 120 ×
109/L). Puede ser un estadio precoz de fibrosis endomiocárdica (y se solapa con el síndrome
hipereosinofílico, p. 330) pero es distinto de la leucemia esofinofílica. Signos: Insuficiencia car-
díaca (75%) ± regurgitación mitral (49%) ± bloqueo cardíaco. R/ : Suprimir la eosinofilia (pred-
nisona ± hidroxicarbamida) y después medicación contra la insuficiencia cardíaca.
Wilhelm Löffler, 1887-1972 (médico suizo)
Síndrome de Löffler (Eosinofilia pulmonar). Una infiltración alérgica de los pulmones por
eosinóficos. Los alérgenos incluyen: Ascaris lumbricoides, Trichinella spiralis, Fasciola hapática,
Strongyloides, Ankylostoma, Toxocara, Clonorchis sinensis, sulfonamias, hidralazina y nitrofurantoí-
na. Con frecuencia, asintomática, con hallazgo incidental en RXT (manchas difusas con forma
de abanico) o tos, fiebre, eosinofilia (en ~20%) y migración de larvas (p. 433). R/ : Erradicar la
causa. Esteroides (si idiopática).
Wilhelm Löffler, 1887-1972 (médico suizo)
Síndrome de Lown-Ganong-Levine. Un síndrome de preexcitación, similar al Wolff-Par-
kinson-White (WPW, p. 133), caracterizado por un intervalo PR corto (< 0,12 s), un com-
plejo QRS normal (al contrario que las ondas d del WPW), y riesgo de taquicardia supraven-
tricular (pero no FA/flúter). La causa no es completamente conocida, pero puede ser debida
a fibras paranodales que cortocircuitan todo o parte del nódulo auriculoventricular. El pacien-
te puede quejarse de palpitaciones intermitentes50.
Bernard Lown, b1921(cardiólogo estadounidense); William F. Ganong, 1924-2007
(fisiólogo estadounidense); Samuel A. Levine, 1891-1966 (cardiólogo estadounidense)
Enfermedad de almacenamiento de glucógeno de MacArdle (Tipo V). Ausencia
de la enzima fosforilasa, lo que resulta en la incapacidad de convertir el glucógeno en glucosa
(p. ej., mutación R50X del gen PYGM; autosómica recesiva). Fatiga y crisis de calambres ± hiper-
termia. Rabdomiólisis/mioglobinuria tras ejercicio. Pruebas: ↑↑CK. La biopsia muscular es diag-
nóstica (necrosis y atrofia)51. R/ : El ejercicio moderado ayuda (utilizando sustratos de energía
alternativos). Evitar el ejercicio intenso y las estatinas. La sacarosa antes del ejercicio mejora el
rendimiento, lo que también hace la dieta rica en carbohidratos. Creatina a baja dosis y rami-
pril (solo si fenotipo ECA D/D) puede ser de mínimo beneficio52.
Brian McArdle, 1911-2002 (pediatra británico)
Desgarro de Mallory-Weiss. Vómito/arcadas persistentes producen hematemesis por un
desgarro en la mucosa esofágica.
George K. Mallory, 1900-1986 (patólogo estadounidense); Soma Weiss, 1898-1942 (médico estadounidense)
Síndrome de Marchiafava-Bignani. Desmielinización y necrosis del cuerpo calloso, con
mayor frecuencia secundario a alcoholismo crónico. El tipo A se caracteriza por coma, estu-
por y datos del tracto piramidal afectando a todo el cuerpo calloso. En el tipo B, los síntomas
son leves y el cuerpo calloso está parcialmente afectado53. ▲: RM. R/ : Como en el síndrome
de Wernicke, p. 714 (ver RECUADRO «Efectos adversos del alcohol en el SNC»).
Ettore Marchiafava, 1847-1935; Amico Bignami, 1862-1929 (patólogos italianos)
Síndrome de Marchiafava-Micheli (Hemoglobinuria nocturna paroxística, HNP). Una
expansión clonal adquirida de una célula madre multipotente que se manifiesta con anemia
hemolítica (por hemólisis intravascular mediada por el complemento), trombosis de grandes
vasos y hematopoyesis ineficiente (varía de leve a pancitopenia). Ver RECUADRO, «Hemoglobi-
nuria nocturna paroxístia» fig. 15.8, y p. 338.
Ettore Marchiafava, 1847-1935 (patólogo italiano); Ferdinando Micheli, 1872-1936 (médico italiano)
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 15_Oxford 07/05/18 16:27 Página 705
Síndromes epónimos
de la hemoglobinuria3 no es tan fiable. Una prueba mucho mejor, incluso que la biop-
sia medular (panel de la derecha, muestra un clon de células de HNP) es el análisis
por citometría de flujo de las proteínas ancladas a GPI en las células de sangre peri-
férica. Esto puede determinar el tamaño del clon HNP y tipo de deficiencia de GPI
(completa o parcial). R/ : La mayoría se beneficia de medidas de soporte –pero el tras-
plante alogénico de células madre es la única cuda. Eculizumab es un anticuerpo
monoclonal que tiene como diana la proteína C5 del sistema de complemento. El
bloqueo previene la activación de la vía distal del complemento, reduciendo la hemó-
lisis, estabilizando la hemoglobina y reduciendo las necesidades de transfusión.54
Fig. 15.8. Orina y sangre de HNP. En esta muestra de orina de 24 h, la hora más oscura
es antes del amanecer. La hemólisis ocurre a lo largo del día y de la noche, pero la orina
se concentra durante la noche, produciendo este llamativo cambio de color.
Cortesía de Crookston Collection.
3 En la hemoglubinuria, la tira de orina será positiva para sangre pero la microscopía de orina no mues-
tra glóbulos rojos (esto la diferencia de la hematuria, pero no de la mioglobinuria –en la que CK ±
AST-GOT están elevadas).
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CAP. 15_Oxford 07/05/18 16:27 Página 706
Síndrome de Marfan (tabla 15.3) Alteración autosómica dominante (fibrilina-1) con formación
706 de microfibrilla extracelular; pero ~25% no tiene historia familiar. Criterios mayores (Diagnóstico si
> 2): Dislocación del cristalino (ectopia lentis; fig. 15.9); disección/dilatación aórtica; ectasia de la dura;
datos esqueléticos: aracnodactilia (dedos largos y delgados), envergadura de los brazos > estatura,
deformidad del tórax, escoliosis, pies planos. Signos menores: Prolapso de la válvula mitral, paladar
ojival, hipermotilidad de las articulaciones. El diagnóstico es clínico; RM para ectasia de la dura
madre. R/ : El peligro es la disección aórtica; β-bloqueantes enlentecen la dilatación de la raíz aórti-
ca. Las ecografías anuales, reparación quirúrgica cuando el diámetro aórtico es > 5 cm. En el embara-
zo riesgo de disección. La homocistinuria tiene deformidades esqueléticas similares.
Antoine Bernard-Jean Marfan, 1858-1942 (pediatra francés)
Síndromes epónimos
707
Síndromes epónimos
Fig. 15.9. Dislocación del cristalino en sín-
drome de Marfan: en él la lente está disloca-
da superior y medialmente.
Cortesía de Prof. Jonathan Trobe.
Síndrome cardiovocal de Ortner. Parálisis recurrente del nervio laríngeo por una aurícula
708 izquierda grande (p. ej., por una estenosis mitral) o disección aórtica.
Norbert Ortner, 1865-1935 (médico austriaco)
Síndrome de Osler-Weber-Rendu (Telangiectasia hereditaria). Telangiectasia autosómica domi-
nante de la piel y membranas mucosas (produce epistaxis y hemorragias GI), ver fig. 15.12. Asocia-
da con malformaciones arteriovenosas pulmonares, hepáticas y cerebrales.
William Osler, 1849-1919 (canadiense); Frederick Weber, 1863-1962 (británico);
Henri Rendu, 1844-1902 (francés)-médicos
Enfermedad de Paget de la mama (EPM). Diseminación intraepidérmica de un cáncer intra-
ductal, que puede tener un aspecto similar a un eccema. 䊳 Cualquier lesión roja, escamosa del
pezón (ver fig. 15.13) debe sugerir EpM: haga una biopsia. R/ : Cirugía conservadora de la mama +
Síndromes epónimos
Síndromes epónimos
la función endotelial además de hiperreactividad local de las arterias coronarias.
Si el tratamiento antianginoso completo no reduce los síntomas, pueden probar-
se la implantación de una endoprótesis o la radioterapia (braquiterapia 20 Gg) intra-
coronaria en los segmentos vasoespásticos. El pronóstico es bueno (especialmente
si no fumador, no antecedentes de IM y no diabético; la progresión a infarto es muy
rara)61, están contraindicados β-bloqueantes y grandes dosis de aspirina.
La angina de Prinzmetal está asociada con hiperreactividad vascular/alteraciones vaso-
espásticas, tales como fenómeno de Raynaud y migraña. También está asociado con
oclusión del círculo de Willis por engrosamiento de la íntima (enfermedad moyamoya).
Síndromes epónimos
Tóxico: Organofosforados.
Fármacos antiarrítmicos: Quinidina; amiodarona; procainamida; sotalol.
Antimicrobianos: Eritromicina; levofloxacino; pentamidina; halofantrina.
Antihistamínicos: Terfenadina; astemizol.
Fármacos para motilidad: Domperidona.
Fármacos psicoactivos: Haloperidol; risperidona; tricíclicos; IRSS.
Enfermedades del tejido conectivo: Anticuerpos anti-RO/SSA (p. 552).
Productos de herbolario: Pregunte sobre remedios chinos tradicionales (pueden con-
tener cantidades desconocidas de arsénico). Cocaína, quinina y artemisina (y otros
antipalúdicos) son ejemplos de productos derivados del hierbas que pueden pro-
longar el intervalo QT.
Arteritis de Takayasu (Síndrome del arco aórtico; enfermedad sin pulso). Rara fuera de
712 Japón, esta vasculitis sistémica afecta a la aorta y a sus ramas mayores. Una inflamación
granulomatosa produce estenosis, trombosis y aneurismas. Con frecuencia afecta a muje-
res de 20-40 años. Los síntomas dependen de las arterias afectadas. El arco aórtico está
afectado con frecuencia, lo que produce síntomas cerebrales, oftalmológicos y del miem-
bro superior, p. ej., mareo, cambios visuales y pulsos débiles en los brazos. Los síntomas
sistémicos son comunes –p. ej., fiebre, pérdida de peso y malestar. El ↑ PA es un rasgo
frecuente, debido a estenosis de la arteria renal. Las complicaciones incluyen regurgita-
ción de la válvula aórtica, aneurisma aórtico y disección; ictus isquémico (↑ PA y trom-
bo); y cardiopatía isquémica. Diagnóstico: ↑ VSG y PCR; RM/PET permiten el diagnóstico
Síndromes epónimos
con mayor precocidad que la angiografía estándar. R/ : Prednisolona (1 mg/kg/d VO). Meto-
trexato y ciclofosfamida han sido utilizados en casos resistentes. El control de la PA es
esencial para ↓ el riesgo de ictus. En estenosis críticas se realizan angioplastia ± implan-
tación de endoprótesis o cirugía de revascularización. Pronóstico: supervivencia de ~95%
a los 15 años.
Mikito Takayasu, 1860-1938 (oftalmólogo japonés)
Síndrome de Tietze (Costocondritis idiopática). Dolor/sensibilidad localizada en la unión
costocondral, aumentado por el movimiento, tos y estornudo. La 2ª costilla es la más
afectada. La clave diagnóstica es dolor localizado que es marcado (se estremece al tocar-
lo). Tratamiento: Analgesia simple, p. ej., AINE. Su importancia radica en que es una causa
benigna de algo que puede parecer alarmante; p. ej., dolor cardíaco. En enfermedades de
larga duración pueden utilizarse inyecciones locales de esteroides.
Alexander Tietze, 1864-1927 (cirujano alemán)
Parálisis de Todd. Déficit neurológico transitorio (paresia) tras una convulsión. Puede
ser debilidad de cara, brazo o pierna, afasia, o parálisis de la mirada, durante de ~30 min
a 36 h. La etiología no está clara.
Robert Bentley Todd, 1809-1860 (médico nacido en Irlanda)
Angina de Vincent (Gingivitis ulcerosa necrotizante). Infección oral con gingivitis ulce-
rosa debida a Borrelia vincentii (una espiroqueta) + bacilo fusiforme, con frecuencia afec-
tando a jóvenes 么 fumadores con pobre higiene oral. Tratar con amoxicilina 500 mg/8
h y metronidazol 400 mg/8 h VO + colutorios con chorhexidina.
Jean Hyacinthe Vincent, 1862-1950 (médico francés)
Síndrome de Von Hippel-Lindau. Una mutación dominante de la línea germinal de
un gen supresor de tumores. Predispone a quistes renales bilaterales y carcinoma renal
de células claras (p. 320), hemangioblastoma retiniano y cerebeloso, y feocromocitoma.
Ver figs. 15.19 y 15.20. Puede presentarse con empeoramiento visual o signos cerebe-
losos (p. ej., ataxia unilateral).
Eugen von Hippel, 1867-1939 (oftalmólogo alemán); Arvid Lindau, 1892-1958 (patólogo suizo)
Enfermedad de Von Willebrand (EVW). El factor de Von Willebrand (FVW) tiene
tres papeles en la coagulación: 1. Llevar a las plaquetas a contactar con el subendotelio
expuesto. 2. Hacer que las plaquetas se unan entre sí. 3. Unirse al factor VIII, protegién-
dolo de su destrucción en la circulación. Hay > 22 tipos de EVW: las más comunes son:
Tipo I: (60-80%) ↓ Niveles de EVW. Los síntomas son ligeros. Autosómico dominante.
Tipo II: (20-30%) FVW anormal, con falta de multímeros de alto peso molecular. Habitual-
mente herencia autosómica dominante. La tendencia al sangrado varía. Hay 4 subtipos.
Tipo III: (1-5%) Niveles indetectables de FVW (autosómico recesivo con deleciones de
genes). El antígeno FVW está ausente y hay ↓ factor VIII. Los síntomas pueden ser graves.
Signos: son los propios de una enfermedad plaquetaria (p. 344): moretones, epistaxis,
menorragia, sangrado tras extracción dentaria. Pruebas: ↑ APTT, ↑ tiempo de hemorra-
gia, ↓ factor VIIIC (actividad coagulante), ↓Ag FVW; ↔ INR y plaquetas. R/ : Obtenga ayuda
experta. La desmopresina es utilizada en el sangrado leve, concentrado de factor VIII que
contiene FVW para cirugía o hemorragias mayores. Evite AINE.
Erik Adolf von Willebrand, 1870-1949 (médico finlandés)
Síndrome medular lateral de Wallenberg. Este síndrome relativamente común
comprende lesiones en múltiples núcleos del SNC, producidas por oclusión de las arte-
rias cerebelosas posterior o inferior, lo que conduce a infarto de tallo cerebral (fig.
15.21). Datos: • Disfagia, disartria (núcleos IX y X). • Ataxia ipsilateral (pedúnculo cere-
beloso inferior). • Síndrome de Horner ipsilateral (fibras simpáticas descendentes). • Pér-
dida de las sensaciones de dolor y temperatura en la hemicara ipsilateral (núcleo V) y
miembro contralateral (tracto espinotalámico). No hay debilidad de los miembros dado
que los tractos piramidales no están afectados.
En el más raro síndrome medular medial, la oclusión de la arteria vertebral espinal o
anterior produce parálisis ipsilateral de la lengua (núcleo XII) con debilidad del miembro
contralateral (tracto piramidal, respetando la cara) y pérdida del sentido de posición.
Adolf Wallenberg, 1862-1949 (neurólogo sueco)
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CAP. 15_Oxford 07/05/18 16:27 Página 713
713
Síndromes epónimos
Fig. 15.19. Síndrome de Von Hippel-Lin- Fig. 15.20. Síndrome de Von Hippel-Lin-
dau mostrando desprendimiento de retina. dau mostrando un tumor retiniano.
Reproducido con permiso de National Eye Reproducido con permiso de National Eye
Institute, National Institutes of Health. Institute, National Institutes of Health.
Rupert Waterhouse, 1873-1958 (médico británico); Carl Friderichsen, 1886-1979 (pediatra danés)
Síndrome de Weber (Hemiplejia alternativa superior). Parálisis del nervio oculomotor
ipsilateral con hemiplejia contralateral, debido a infarto de una mitad del mesencéfalo,
tras oclusión de las ramas paramediales de las arterial cerebrales basilar o posterior.
Herman David Weber, 1823-1918 (médico nacido en Alemania cuyo hijo
describió el síndrome de Sturge-Weber)
Granulomatosis de Wegener. Ha sido renombrada granulomatosis con poliangiitis
(GPA), en parte debido a preocupaciones sobre la propiedad de Friedrich Wegener, un
miembro del partido nazi durante la Segunda Guerra Mundial, como origen del epóni-
mo. GPA es una enfermedad multisistema de causa desconocida caracterizada por infla-
mación granulomatosa necrotizante y vasculitis de vasos de pequeño y mediano calibre.
Tiene una predilección por el tracto respiratorio superior, los pulmones y los riñones.
Datos: Es común la enfermedad de la vía respiratoria superior, con obstrucción nasal,
úlceras, epistaxis o destrucción del septo nasal produciendo una deformidad en «silla de
montar» característica6. La sinusitis es un rasgo frecuente. La enfermedad renal produce
glomerulonefritis rápidamente progresiva con formación en semiluna, proteinuria o
hematuria. La afectación pulmonar puede producir tos, hemoptisis (grave si hemorragia
pulmonar) o pleuritis. Puede haber púrpura cutánea o nódulos, neuropatía periférica,
mononeuritis múltiple, artritis/artralgia o afectación ocular, p. ej., queratitis, conjuntivitis,
escleritis, epiescleritis, uveítis. Pruebas: La más específica es cANCA dirigidos contra PR3
y está aumentado en la mayoría de los pacientes (p. 533). Algunos pacientes expresan
pANCA específico para MPO. ↑ VSG/PCR. Debe realizarse un análisis de orina para bus-
car proteinuria o hematuria. Si están presentes, considerar biopsia renal. La RXT puede
mostrar nódulo ± infiltrados algodonosos de hemorragia pulmonar. La TC puede reve-
lar hemorragia alveolar difusa. Las células atípicas de citología de esputo/BAAR pueden
ser confundidas con carcinoma bronquial66. Tratamiento: Depende de la extensión de la
enfermedad. La enfermedad grave (p. ej., enfermedad renal demostrada en la biopsia)
debería ser tratada con corticosteroides y ciclofosfamida (o rituximab) para inducir remi-
sión. Las indicaciones para el cambio plasmático incluyen pacientes que se presentan con
enfermedad renal grave (p. ej., creatinina > 500 μmol/L) y en aquellos con hemorragia
pulmonar. El cotrimoxazol debería ser administrado como profilaxis contra Pneumocystis
jirovecii y la colonización estafilocócica.
Friedrich Wegener, 1907-1990 (patólogo alemán)
Encefalopatía de Wernicke. Deficiencia de tiamina (vitamina B1) con una triada clási-
ca de 1. confusión, 2. ataxia y 3. oftalmoplejia (nistagmo, recto lateral o parálisis de la mira-
da conjugada). Hay una ingesta inadecuada, ↓ absorción GI y empeoramiento de la utiliza-
ción de tiamina, lo que resulta en áreas de daño focal en el cerebro, incluyendo hemorra-
gias puntiformes periacueductales (mecanismo no claro). Considere siempre este diagnós-
tico en alcohólicos: puede también estar presente con trastornos de la memoria, hipoten-
sión, hipotermia o reducción del nivel de conciencia67. Causas reconocidas: Alcoholismo cró-
nico, alteraciones de la alimentación, malnutrición, vómito prolongado, p. ej., con quimiote-
rapia, malignidad GI, o hiperémesis del embarazo. Diagnóstico: Primariamente clínica. La acti-
vidad de la transcetolasa de los hematíes está disminuida (se realiza raramente). Trata-
miento: Reemplazo urgente para prevenir el síndrome de Korsakoff irreversible (p. 704). Dé
tiamina (Pabrinex®), 2 pares de ampollas de alta potencia IV/IM/8 h en más de 30 min
durante 2 días; después 1 par al día durante otros 5 días. El suplemento oral (100 mg al
día) debería continuarse hasta que no se esté «en riesgo» (+ dé otras vitaminas B). La ana-
filaxia es rara. Si hay hipoglucemia coexistente (con frecuencia el caso en este grupo de
pacientes), asegúrese de que la tiamina se administra antes que la glucosa, dado que puede
precipitarse Wernicke por la administración de glucosa en un paciente deficiente en tiami-
na. Pronóstico: Sin tratamiento, la muerte ocurre en el 20% y ocurre psicosis de Korsakoff
en 85% –un cuarto de los cuales requerirá cuidado institucional a largo plazo.
Karl Wernicke, 1848-1905 (neurólogo alemán)
715
Síndromes epónimos
Fig. 15.22. Sepsis meningocócica con púrpura.
6 Causas comunes de deformidad en «silla de montar» de la nariz son trauma o iatrogénico (p. ej.,
post-rinoplastia). Causas más raras (populares con algunos examinadores): GPA, policondritis recidi-
vante, sífilis, lepra.
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CAP. 15_Oxford 07/05/18 16:27 Página 716
716 Enfermedad de Wipple. Una enfermedad rara68 que presenta malabsorción GI que
habitualmente ocurre en hombres de mediana edad, más comúnmente en Europa. Es
fatal si no se trata y es causada por el Tropheryma whipplelii, que, combinado con inmu-
nidad mediada por células defectuosas, produce una enfermedad sistémica. Datos: Con
frecuencia comienza insidiosamente con artralgia (artropatía seronegativa crónica, migra-
toria que afecta fundamentalmente a las articulaciones periféricas). Los síntomas GI inclu-
yen comúnmente dolor abdominal cólico, pérdida de peso, esteatorrea/diarrea, que con-
duce a malabsorción (p. 266). También ocurren síntomas sistémicos como tos crónica,
fiebre, sudoración, linfadenopatía e hiperpigmentación de la piel. La afectación cardíaca
puede conducir a endocarditis, que típicamente tiene hemocultivos negativos. Los datos
Síndromes epónimos
del SNC incluyen demencia reversible, oftalmoplejia y mioclono facial (si aparecen todos
juntos, son altamente sugestivos) –también síndrome hipotalámico (hiperfagia, polidipsia,
insomnio). NB: La afectación del SNC puede ocurrir sin afectación GI. Pruebas: El diag-
nóstico requiere un elevado nivel de sospecha clínica. La biopsia yeyunal muestra micro-
vellosidades atrofiadas. Hay depósito de macrófagos en la lámina propia que contienen
gránulos con tinción positiva para ácido peryódico de Schiff (PAS). Pueden encontrarse
células similares en muestras afectadas, p. ej., LCR, tejido de válvulas cardíacas, nódulos
linfáticos, líquido sinovial. Con microscopia electrónica, la bacteria puede ser vista en el
interior de los macrófagos. Puede realizarse PCR del ARN bacteriano en el suero o teji-
do. La RM puede demostrar afectación del SNC. R/ : Debería incluir antibióticos que cru-
cen la barrera hematoencefálica. Las recomendaciones actuales: ceftriaxona IV (o penici-
lina + estreptomicina) durante 2 semanas, después cotrimoxazol oral durante 1 año. Pau-
tas de tratamiento más cortas tienen el riesgo de recaídas. Habitualmente ocurre una
rápida mejoría de los síntomas.
George Hoyt Whipple, 1878-1976 (patólogo estadounidense)
Síndrome de Zellweger (Síndrome cerebrohepatorrenal). Una rara enfermedad rece-
siva caracterizada por la ausencia de peroxisomas (organelas intracelulares necesarias
para muchas actividades celulares, incluyendo el metabolismo lipídico). El síndrome tiene
una base molecular similar al síndrome de Refsum infantil, y aunque más grave, presenta
anormalidades bioquímicas comparables (p. 710). Los datos clínicos incluyen anormali-
dades craneofaciales, hipotonía y retraso metal graves, glaucoma, cataratas, hepatomega-
lia y quistes renales. Se ha identificado un número de mutaciones del gen PEX causales.
La expectativa de vida es habitualmente de solo unos pocos meses.
Hans Zellweger, 1909-1990 (pediatra estadounidense)
Síndrome de Zollinger-Ellison. Es la asociación de úlceras pépticas con adenoma
secretor de gastrina (gastroma). La gastrina estimula la producción excesiva de ácido gás-
trico, que puede producir múltiples úlceras en el duodeno y el estómago. El adenoma se
encuentra habitualmente en el páncreas, aunque puede surgir en el estómago o duode-
no. La mayoría de los casos son esporádicos; el 20% están asociados con neoplasia endo-
crina múltiple, tipo 1 (MEN1, p. 223). El 60% son malignos; las metástasis se encuentran
en los nódulos linfáticos locales y en el hígado. Síntomas: Incluyen dolor abdominal y dis-
pepsia, por la(s) úlcera(s), y diarrea crónica debido a la inactivación de las enzimas pan-
creáticas (también produce esteatorrea) y daño a la mucosa intestinal. Incidencia: El
~0,1% de los pacientes con úlcera péptica. Sospeche en los que tienen úlceras pépticas
múltiples, úlceras distales al duodeno o historia familiar de úlceras pépticas (o de células
de los islotes, pituitaria o adenomas paratiroides). Pruebas: (fig. 15.23) ↑ Niveles de gas-
trina en suero en ayunas (> 1000 pg/mL). Medir tres niveles en ayunas en días diferen-
tes. Debería excluirse hipoclorhidria (reducción de la producción de ácido; p. ej., en gas-
tritis atrófica crónica), dado que también produce un nivel elevado de gastrina: el pH gás-
trico debería ser < 2. La prueba de estimulación de somatostatina es útil en los casos
sospechosos con niveles de gastrina solo ligeramente elevados (100-1000 pg/mL). El
adenoma suele ser pequeño y difícil de visualizar; se utiliza una combinación de escinti-
grafía del receptor de somatostatina, ultrasonidos endoscópicos y TC para localizar y rea-
lizar estadificación del adenoma. La endoscopia evalúa la ulceración gástrica/duodenal. R/ :
Inhibidores de la bomba de protones a altas dosis, p. ej., omeprazol: comenzar con 60
mg/d y ajustar según la respuesta. La medición del pH intragástrico ayuda a determinar
la mejor dosis (el objetivo es mantener el pH en 2-7). Todos los gastrinomas tienen
potencial maligno –y la cirugía es mejor cuanto antes (con extirpación de nódulo linfáti-
co generalmente recomendada si tamaño > 2 cm). La cirugía puede ser evitada en
MEN1, dado que los adenomas son frecuentemente múltiples, y la enfermedad metas-
tásica es rara. Si bien diferenciado (G1 y G2) los análogos de somatostatina pueden ser
de 1ª línea y la quimioterapia con estreptozotocina (si disponible) + doxorubicina/5FU es
2ª línea. En G3, es posible etopósido + cisplatino69. En las metástasis hepáticas puede rea-
lizarse embolización selectiva. Pronóstico: Supervivencia a 5 años: 80% si lesión única rese-
cable, ~20% en metástasis hepáticas. Realice cribado en todos los pacientes para MEN1.
Robert M. Zollinger, 1903-1992; Edwin H. Ellison, 1918-1970 (cirujanos estadounidenses)
Síndromes epónimos
d
e
r
e
c
h
o
Fig. 15.23. Octreoscan en paciente con gastrinoma MEN1 metastásico. Depósito metastásico
hepático solitario (flecha fina), tumor gástrico neuroendocrino (flecha gruesa).
Reproducido de Wass et al., Oxford Textbook of Endrocrinology and Diabetes, 2011,
con permiso de Oxford University Press.
Epílogo
El 25% de los pacientes con enfermedades raras tienen que esperar 5-30 años para
el diagnóstico. El 40% está mal diagnosticado, lo que resulta en tratamiento farma-
cológico o psicológico inadecuado –p. ej., 20% de los pacientes con síndrome de
Ehlers-Danlos (p. 149) tienen que consultar más de 20 médicos antes de que se
establezca el diagnóstico70, produciendo una entendible pérdida de confianza en
nuestra profesión. La falta de una referencia adecuada y el rechazo por complejidad
de la enfermedad son problemas comunes. Vamos a cultivar nuestra red de contac-
tos con otros compañeros y aproximémonos a los «síntomas inexplicables» con una
mente abierta.
16 Radiología
Contenidos
Principios en radiología:
Dosis efectiva típica 719
Justificando la exposición a radiación
ionizante 719
El arte de la petición 720
Interpretando una imagen 721
Presentando una imagen 721
Modalidades:
Radiografía de tórax (RXT) 722-7
Radiografía simple de abdomen 728
Tomografía computarizada
(TC) 730-3
Resonancia magnética (RM)734
Ultrasonidos (US) 736
Medicina nuclear 738
Radiología en la práctica clínica:
(NB: la imagen torácica es tratada
en modalidades, p. 726, p. 730)
Imagen cardiovascular 740
Imagen gastrointestinal 742
Imagen genitourinaria 744
Neuroimagen 746 Fig. 16.1. El primer rayos X, tomado por Wil-
Medios de contraste en estudios helm Röntgen de la mano de su esposa (por lo
de imagen 748 que ganó el primer Premio Nobel de Física en
Estudios de imagen en el 1901). Al ver la imagen espectral, gritó «¡He
paciente agudo 749 visto mi muerte!». ¿Podría esta exclamación
haber profetizado las malignidades inducidas
por la radiación que han asolado a los recepto-
res (y a los administradores) de rayos X desde
su invención (ver RECUADRO)? A pesar del obvio
potencial comercial, Röntgent declinó tener nin-
gunas patentes sobre su nueva tecnología, prefi-
riendo ver cómo se desarrollaba para el benefi-
cio de la humanidad. El destino no correspondió
a su generosidad: su fortuna personal se depre-
ció en la hiperinflación alemana de los años 20,
y estuvo sus últimos años en bancarrota.
Reproducido bajo la licencia exclusiva de Creative
Commons Attribution por 4.0 Wellcome Library
Agradecemos al Profesor Peter Scally, Dr. Dean
McCoombe, y Dr Paul Thomas, nuestros médicos
especialistas por este capítulo.
Agradecemos al profesor Peter Scally, al Dr. Dean McCoombe y al Dr. Paul Thomas, nuestros lectores
especialistas de este capítulo.
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CAP. 16_Oxford 07/05/18 16:06 Página 719
Radiología
Estudios de rayos X
Miembros y articulaciones < 0,01 <1 < 2 días
Tórax (PA) 0,015 1 2,5 días
Abdomen 0,4 30 2 meses
Columna lumbar 0,6 40 3 meses
TC cabeza 1,4 90 7,5 meses
TC tórax 6,6 440 3 años
TC abdomen/pelvis 6,7 450 3 años
Estudios isotópicos
Ventilación pulmonar 0,4 30 9 semanas
Perfusión pulmonar 1 70 6 meses
Hueso 3 200 1,4 años
PET cabeza 7 460 3,2 años
PET-TC 18 1200 8,1 años
Reproducido de iRefer Making the Best Use of Clinical Radiology, 7th edition,
© Royal College of Radiologists, 2012
Radiología
gen 2D de una estructura 3D. Una comprensión de la relación anatómica del área
en cuestión ayudará a reconstruir las imágenes en su mente.
• Orientación: Para las imágenes transversales es como si usted estuviera mirando a
su paciente desde los pies. Para imágenes con orientación no convencional
(p. ej., MRCP) mire en la imagen para marcas claves, o confíe en su conocimiento
de anatomía –¡puede ser problemático visualizar cortes oblicuos!
• Recuerde a su paciente: –una exploración es solo una parte de la evaluación clínica,
no confíe solamente en el resultado de la prueba para sus decisiones terapéuticas.
Vaya de nuevo a ver a su paciente después de haber visto la exploración y de haber
leído el informe radiológico: usted puede notar algo que detectó previamente.
723
Radiología
Fig. 16.2. Colapso del lóbulo inferior (pulmón derecho). El borde derecho del corazón está
borrado. La pérdida de volumen en la zona del lóbulo derecho produce un lóbulo superior
derecho hiperexpandido que es más radiolucente que el lóbulo superior izquierdo.
Cortesía de Edmund Godfrey.
Fig. 16.3. «Alas de murciélago», edema pulmonar perihiliar indicando fallo cardíaco y conges-
tión pulmonar.
Cortesía de Edmund Godfrey.
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CAP. 16_Oxford 07/05/18 16:06 Página 724
725
Radiología
Fig. 16.4. Opacificación del hemitórax izquierdo debido a una consolidación.
Cortesía del Dr. Edmund Godfrey.
Fig. 16.5. Gran neumotórax derecho; note que la tráquea sigue estando centrada, sugiriendo
que se trata de un neumotórax simple, no un neumotórax a tensión.
Cortesía del Dr. Edmund Godfrey.
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CAP. 16_Oxford 07/05/18 16:06 Página 726
Anatomía normal
• La VCS comienza en el primer espacio intercostal anterior derecho.
• La aurícula derecha está al nivel del 3er espacio intercostal.
• La carina debería ser visible al nivel de las vértebras torácicas T5-T7.
• La orejuela derecha se sitúa al nivel del 3er espacio intercostal.
Llamadas frecuentes por parte del personal de enfermería
1. No puede aspirarse por la vía venosa central:
• ¿Está la punta en el lugar correcto (ver antes en el capítulo) o se ha ido hacia arriba
en el interior de la yugular interna, demasiado lejos (apoyándose contra la válvula tri-
cúspide, ¿tiene el paciente arritmia?) o no lo suficientemente lejos (apoyada contra una
válvula venosa)?
• Está la punta del catéter curvada, lo que sugiere que puede estar en una rama veno-
sa o apoyada contra la pared del vaso.
• Si la punta parece estar bien posicionada, considere lavar la vía con suavidad, ¿puede
estar bloqueada la vía?
2. El paciente no ventila bien:
• ¿Está el tubo endotraqueal dentro del bronquio principal derecho (produce colapso
del pumón izquierdo o rara vez neumotórax)? Retire el tubo para corregir la posición
(ver antes en el capítulo).
• ¿Está el tubo endotraqueal bloqueado? La mayoría tiene un puerto secundario que
permite la ventilación incluso si el agujero principal está bloqueado, ¡obtenga ayuda del
anestesista!
3. El drenaje torácico no burbujea/oscila:
• Si está correctamente posicionado (ver antes en este tema) –si no está en el espacio
pleural no puede drenar ningún líquido. Entre los problemas comunes se encuentran
apoyarse en tejido blando o en la pared torácica, o estar situado por encima del derra-
me, debajo del neumotórax o en la fisura oblicua.
• ¿Está bloqueado? Si está drenando un derrame y está correctamente posicionado, con-
sidere lavarlo con suavidad con 10 mL de salino estéril, y aspirar después. Si no tiene
éxito, obtenga consejo de un médico con experiencia.
• ¿Se ha resuelto el derrame/neumotórax? Los neumotórax pueden resolverse rápida-
mente con un drenaje correctamente posicionado.
4. Incapaz de aspirar en una sonda NG:
• ¿Está el tubo NG no situado suficientemente lejos o en el esófago? La punta es radio-
paca y debería ser visible debajo del diafragma, si está retorcido podría estar en la farin-
ge o en cualquier sitio a lo largo del mediastino.
• ¿Está la sonda NG colocada a lo largo de la tráquea y dentro de los bronquios? El esó-
fago es (hablando en general) una línea vertical recta, si la sonda se desvía hacia la
izquierda o hacia la derecha antes de ir por debajo del diafragma, asuma que está en
el bronquio y reemplácela.
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CAP. 16_Oxford 07/05/18 16:06 Página 727
727
Radiología
Fig. 16.6. Imagen obtenida en la UVI que muestra un tubo endotraqueal, una vía venosa cen-
tral y una sonda NG in situ, con electrodos de ECG situados en el torax.
Imagen cortesía del Dr. Elen Thomson, Leeds Teaching Hospitals.
Fig. 16.7. Saber dónde se tienen que colocar las vías IV y los tubos es una habilidad esencial.
Un tubo endotraqueal (naranja) debería situarse 3-7 cm por encima de la carina; este está lige-
ramente por encima. La punta de la vía venosa central (rojo, aquí una vía yugular interna dere-
cha) debería estar en la VCS, como se ve aquí, o justo en la aurícula derecha. La punta de la
sonda NG (verde) debe estar debajo del diafragma para asegurar que está colocado en el esó-
fago, no en la tráquea. No confunda los electrodos externos (azul) con las vías internas.
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CAP. 16_Oxford 07/05/18 16:06 Página 728
benigna. En los vólvulos sigmoideo y de ciego pueden verse segmentos de intestino muy dilatados
(signo del grano de café) –fig. 13.28c, p. 611. En la colitis inflamatoria (p. ej., EII) se observa la pér-
dida de los pliegues de mucosa normales y el engrosamiento de la pared intestinal –fig. 16.9. La
«impresión del pulgar» es la protrusión de pliegues murales engrosados en la luz, visto en isquemia
del intestino grueso y colitis.
Tabla 16.3. Patrón radiológico del gas en el intestino
Intestino delgado Intestino grueso Íleo
• Calibre más pequeño • Mayor calibre • Se ven ambos intestinos,
• Central; múltiples asas • Periférico delgado y grueso
• Valvuli conniventes: pliegues • Pliegues semilunares: no • No hay claro punto de
que van de pared a pared, atraviesan toda la luz, pero transición que corresponda
a través de todo el lumen; puede parecer que lo a una lesión obstructiva.
más regulares y finos que hacen cuando se ven
las haustras. desde un ángulo
• Gris (contiene aire y • Más negro (contiene gas)†
líquido)
*Pliegues semilunares (plicae semilunares) están entre las haustras adyacentes.
†El colon ascendente contiene heces líquidas, pero el colon descendente contiene bolitas fecales
(scybala).
Gas fuera de la luz. Debe explicar cualquier gas fuera de la luz intestinal. Puede ser: 1. Neumo-
peritoneo; signos en la RXA supina son: gas en ambos lados de la pared intestinal (signo de Rigler),
un triángulo de gas en el cuadrante superior derecho atrapado bajo el ligamento falciforme, y un
círculo de gas debajo de la pared abdominal anterior. Se ve con perforación intestinal pero también
después de la cirugía laparoscópica. 2. Gas en el tracto urinario –p. ej., en la vejiga por una fístula. 3.
Gas en el árbol biliar (ver siguiente párrafo), o rara vez. 4. Gas intramural, encontrado en la necro-
sis intestinal.
Árbol biliar. Cualquier cálculo: ~10% visible en la RXA simple. Cualquier gas: (Neumobilia.) Produ-
cido por: • post-ERC/esfinterotomía • post-cirugía (p. ej., Whipple) • paso reciente de un cálculo •
colangitis anaeróbica (rara) • fístula vesícula-intestino: el cálculo migra directamente al intestino (la
triada de Rigler se ve en 25%: neumobilia, obstrucción del intestino delgado y litiasis ectópica). Calci-
ficación: («Vesícula en porcelana»). Inflamación crónica por litiasis (asociada con cáncer de vesícula).
Tracto urinario. Comprobar la presencia de cálculo (visible en el 90% de los casos)1 y anatomía
normal: Riñón: Longitud equivalente a 21/2-31/2 cuerpos vertebrales, inclinados inferolateralmente. El
derecho es inferior que el izquierdo («empujado hacia abajo» por el hígado). Su contorno puede
ser visto habitualmente debido a una capa de grasa perinefrítica. Uréteres: Pasan cerca de los extre-
mos de los procesos transversos lumbares, cruzan la articulación sacroilíaca, hacia abajo hacia las
espinas ilíacas y giran medialmente para unirse a la vejiga.
Otros tejidos blandos. Mire el tamaño/posición de: hígado, bazo y vejiga. Un hígado grande
empujará el intestino hacia la parte izquierda del abdomen. Un bazo aumentado desplaza el intes-
tino y el estómago hacia la derecha. Una gran vejiga eleva a estos.
Dispositivos médicos. Pueden verse doble J y endoprótesis biliares, nefrostomía y tubos de gas-
trostomía, dispositivos intrauterinos, clips laparoscópicos y catéteres de diálisis peritoneal.
Huesos y articulaciones. La RXA simple no es ideal, pero puede haber importantes anormali-
dades. En la columna lumbar, busque escoliosis y degeneración (osteofitos, estrechamiento del espa-
cio articular), así como metástasis óseas o sacroileítis.
1 No se confunda con otras calcificaciones –p. ej., flebolitos: calcificaciones inocuas halladas en las venas
perivesicales (redondeadas con un centro radiolucente).
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CAP. 16_Oxford 07/05/18 16:06 Página 729
729
Radiología
Fig. 16.8. Múltiples asas de intestino delgado y grueso dilatadas y llenas de
aire. Este patrón se ve en el íleo.
Cortesía de Norwich Radiology Department.
Fig. 16.9. Imagen abdominal que muestra megacolon tóxico asociado con
colitis ulcerosa, note el engrosamiento de la pared del colon y la pérdida de
los pliegues mucosos.
Cortesía del Dr. Edmund Godfrey.
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CAP. 16_Oxford 07/05/18 16:06 Página 730
alta utilización, lo que puede ser responsable de 1% de todos los cánceres: siempre sope-
se los beneficios del TC vs otras modalidades con menos o ninguna radiación (ultrasoni-
dos; RM), particularmente en el joven o en los que tienen enfermedad crónica, que pro-
bablemente tendrán que someterse a múltiples estudios de imagen. Comente con el
radiólogo—hay varios aspectos técnicos de la imagen que pueden limitar la dosis de la
radiación, aunque aun ofreciendo información útil.
Técnica de imagen de elección para
• Estadiaje y monitorización de la mayoría de las enfermedades malignas.
• Enfermedad intracardíaca, p. ej., ictus, trauma, PIC y lesiones ocupantes de espacio.
• Trauma.
• Evaluación preoperatoria de masas complejas.
• Evaluación del abdomen agudo (figs. 16.15, 16.16). NB que el ultrasonido es utilizado
de forma creciente.
• Tras la cirugía abdominal.
Medio de contraste (p. 748). Realza los detalles anatómicos por el uso de medio de
alta o baja (agua) atenuación para llenar la luz de una estructura. Dar IV para obtener
imagen de la anatomía vascular (fig. 16.12) y estructuras vasculares (incluyendo tumores
con gran perfusión). Las imágenes adquiridas en diferentes momentos («fases») tras la
inyección mostrarán el agente en las estructuras arteriales o venosas o durante el «lava-
do» (= vaciado). Las TC de perfusión realizan un mapa del flujo sanguíneo cerebral al
adquirir las imágenes en serie tras la administración de contraste y combinando después
estas en una imagen codificada en color de tiempos de perfusión (fig. 16.14). Asegure
una vía IV segura y de calibre suficiente para permitir una inyección rápida de agente de
contraste como un bolo –la extravasación del contraste puede producir un daño tisular
significativo. Dar VO, p. ej., 1-12 h antes de obtener imágenes del intestino. Dar por vía rec-
tal: Para examinar la luz distal del colon.
Las TC realzadas con contraste pueden incluir series previas al contraste. Las imágenes
no realzadas reducen la exposición a la radiación y pueden ser adecuadas para imáge-
nes del cerebro, columna, pulmón y sistema musculoesquelético o necesarias en los que
tienen fallo renal (el contraste es nefrotóxico).
Artefacto en bandas o rayos. Recuerde que el corte de TC es una representación
matricial de la atenuación producida por rotación alrededor del paciente. Los objetos de
alta atenuación, tales como rellenos metálicos, clips y prótesis (e incluso hueso) pueden
producir interferencia.
TC combinada con PET. (Ver p. 739.) Combina los detalles anatómicos de la TC con
la información metabólica del PET, para ayudar en la evaluación de, p. ej., lesiones neo-
plásicas. Las dosis de radiación son mucho más elevadas que las de la TC aislada.
Escala de Hounsfield
731
Radiología
Fig. 16.11. TC axial de alta resolución
del tórax de un algoritmo de ventana
pulmonar; note la lesión solitaria en el
pulmón derecho (en este caso, de GPA).
Cortesía de Norwich Radiology Dept.
Fig. 16.15. La historia fue de dolor abdominal central con un abdomen sin peritonitis. La TC
muestra un AAA goteante, que puede ser reparado mediante endoprótesis insertadas vía pun-
ción de la arterial femoral y colocadas en el aneurisma (p. 654). Este tipo de reparación endo-
vascular (REVA) es utilizado comúnmente en el tratamiento del AAA goteante, así como en la
reparación electiva de aneurismas intactos pero que aumentan de tamaño.
733
Radiología
Fig. 16.16. TC de abdomen de triple fase, recortada para mostrar el páncreas. Panel superior—
imagen no realzada, panel central—fase arterial de medio de contraste para buscar pseudo-
quistes y realce del parénquima, panel inferior—fase venosa portal para ver las venas. La histo-
ria aquí también fue dolor abdominal central con abdomen no peritonítico. La TC muestra una
cabeza del páncreas aumentada con grasa cabalgando alrededor del surco duodenopancreáti-
co («pancreatitis del surco duodenopancreático»), y dos pequeñas áreas de atenuación líquida
posteriormente, que probablemente sean pseudoquistes.
Panel superior cortesía del Dr. Edmund Godfrey.
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CAP. 16_Oxford 07/05/18 16:06 Página 734
zación (asumiendo que los núcleos no se han movido) se obtiene una imagen de la distri-
bución a lo largo del cuerpo de la grasa, tejido y agua.
• Los núcleos de hidrógeno en el flujo de sangre se mueven tras recibir los pulsos de RF. No
se detecta el eco, por lo que la luz del vaso aparece negra (vaciado del flujo).
Más que radiodensidad o atenuación, la terminología descriptiva correcta para la escala de gri-
ses utilizada en la RM es intensidad de la señal: la señal alta aparece blanca y la señal baja, negra
(ver tabla 16.4). La ponderación es una cualidad de la RM que es dependiente del tiempo
entre los pulsos de RF (tiempo de repetición, TR) y el tiempo entre un pulso de RF y el eco
(tiempo de eco, TE). Las imágenes de RM son más comúnmente ponderadas en T1 (buenas
para visualizar la anatomía) o en T2 (buenas para visualizar la enfermedad) pero pueden ser
también una mezcla de ambos, denominado densidad de protones (DP). Las secuencias FLAIR
producen imágenes muy ponderadas en T2. Una buena forma de determinar la ponderación
de una imagen de RM es mirar en el agua—p. ej., en el humor acuoso de los ojos, SNC o líqui-
do sinovial (ver tabla 16.4; fig. 16.17).
Tabla 16.4. Características
de las secuencias de RM
Ponderación T1 Ponderación T2
TR Corto (< 1000 ms) Largo (> 000 ms)
TE Corto (< 30 ms) Largo (> 80 ms)
Baja Agua Hueso
señal Hb que fluye Hb que fluye
Hb fresca Hb deoxi
Hemosiderina Hemosiderina
Melanina
Alta Médula ósea Agua
señal Grasa Colesterol
Colesterol Hb fresca
Gadolinio (p. 762) MetHb
MetHb Fig. 16.17. RM ponderada en T1 de las cade-
ras. La médula ósea normal del adulto es de
Ventajas. La mayor ventaja de la RM es que señal alta debido a la grasa; note también la
no conlleva radiaciones ionizantes. No tiene baja señal de la orina en la vejiga.
efectos adversos conocidos a largo plazo. Es Cortesía de Norwich Radiology Department.
excelente para estudiar los tejidos blandos (agua
y, por tanto, densos en protones) y es preferido a la TC para las patologías de los tejidos blan-
dos y para muchas enfermedades intracraneales, de cabeza y cuello (figs. 16.18-16.20). La
adquisición multiplanar de imágenes puede proveer numerosas vistas y reconstrucción 3D
partiendo de un solo escaneado. La angiografía RM es también excelente para la reconstruc-
ción de la anatomía vascular. Evita la necesidad de angiografía invasiva con punción femoral o
TC de contraste en pacientes con empeoramiento renal.
Desventajas. Largos tiempos de adquisición. Imagen pobre del parénquima pulmonar. Claus-
trofobia. Incompatible con algunos implantes metálicos. Alto coste e interpretación especiali-
zada (= disponibilidad limitada).
Contraindicaciones. Absolutas: • Marcapasos; otros dispositivos eléctricos implantados. •
Cuerpos extraños metálicos, p. ej., intraoculares (considerar rayos X de la órbita para excluir-
los), metralla. • Clips/espirales quirúrgicas/válvulas cardíacas no compatibles. Relativas: • Si no
es capaz de completar el cuestionario preescaneado. • Implantes cocleares. NB: las prótesis
ortopédicas y los clips metálicos extracraneales son habitualmente seguros. Si no está segu-
ro, pregunte a un radiólogo. Contraste: • Empeoramiento renal (gadolinio puede producir
fibrosis sistémica). • Alergia. • Embarazo.
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CAP. 16_Oxford 07/05/18 16:06 Página 735
735
Radiología
enfermedad debenerativa. C2 (eje) es
identificable por la apófisis odontoides,
que se deriva embriológicamente del
cuerpo de C1 (atlas).
Cortesía de Norwich Radiology
Department.
Fig. 16.19. RM axial del cerebro pon-
derada en T1 tras la inyección IV de
gadolinio. En la región temporoparietal
derecha hay una pequeña área de real-
ce de alta señal con una zona central
de baja señal, rodeada por una región
de baja señal (presumiblemente edema
cerebral vasogénico) en comparación
con el tejido cerebral normal. Todo
esto está produciendo efecto de masa
con borramiento de los surcos y del
cuerno frontal adyacente del ventrícu-
lo lateral. Hay una desviación de la línea
media muy sutil.
Cortesía de Norwich Radiology
Department.
nado, de forma que si en los tejidos superficiales hay una atenuación mayor que la pro-
mediada (p. ej., tejido fibroso, calcificación o gas), cualquier estructura más profunda esta-
rá en una sombra acústica de baja intensidad (negro). Si en los tejidos superficiales hay un
objeto con atenuación menor al promedio (p. ej., estructura llena de líquido/quística), cual-
quier estructura situada detrás de ella será de alta intensidad (blanca) o realzada. Si una
interfaz de tejido está muy dispar, p. ej., gas en el intestino, después todas las ondas se refle-
jan hacia atrás, haciendo imposible la imagen detrás de ello. Ver también figs. 16.21-16.24.
Modos. B (Brillo): es la más común, dando cortes 2D que trazan una imagen de dife-
rentes magnitudes del eco en escala de grises. M: (Movimiento) trazan el movimiento de
estructuras dentro de la línea del haz de ultrasonidos. Se utilizan en estudios de imagen,
p. ej., válvulas cardíacas (p. 110).
Ultrasonografía dúplex (flujo y morfología). Mediante la combinación de efectos
Doppler (desviación en la longitud de onda producida por el movimiento de una fuen-
te o superficie reflectante) con tecnología de ultrasonidos en modo B, pueden inferirse
las características del flujo de la sangre (fig. 16.21). Esto es extremadamente útil en los
estudios arteriales y venosos, y en la ecografía.
Ventajas. Portátil; rápido; no ionizante; barato; en tiempo real; puede ser utilizado con
intervención; puede entrar en los órganos, p. ej., recto, vagina, intestino. US endoscópicos
pueden ser utilizados para estadiaje y biopsia de cánceres de pulmón y del tracto GI,
p. ej., estómago, páncreas, y también para estudiar el corazón = ecocardiografía transe-
sofágica o ETE, p. 110.
Desventajas. Dependiente del operador –alta variabilidad interoperador; pobre cali-
dad si el paciente es obeso; interferencia por hueso, gas intestinal, cálculos u órganos
superpuestos pueden limitar la profundidad y calidad de la imagen.
Fig. 16.21. Un estudio de US dúplex de la arteria carótida derecha común con una velocidad
de flujo = 77 cm/s. El trazo de Doppler (naranja) se representa debajo de la imagen principal.
Cortesía de Norwich Radiology Department.
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CAP. 16_Oxford 07/05/18 16:06 Página 737
Radiología
tica) en el borde libre del omen-
tum menor. Después, pregunte
«¿Qué está produciendo la obs-
trucción?» y «¿Dónde puedo obtener
esta información?».
Cortesía de Norwich Radiology
Department.
Fig. 16.25. Gammagrafía de ventila- Fig. 16.26. Gammagrafía de perfu- Fig. 16.27. Gamma-
ción. sión que muestra desequilibrios con grafía ósea que mues-
Cortesía de Norwich Radiology fig. 16.25. tra metástasis.
Department. Cortesía de Norwich Radiology Cortesía de Norwich
Department. Radiology Department.
Gammagrafía ósea. Los bifosfonatos marcados con 99 mTc son captados fácilmente
por el hueso y concentrados en zonas con patología, p. ej., tumores, fracturas. Es mucho
más sensible para identificar metástasis que los rayos X, en los que las lesiones no apa-
recen hasta que no se ha destruido >50% de la matriz ósea (fig. 16.27).
Enfermedad tiroidea. Se utiliza TcO4 para diferencial la enfermedad de Graves, bocio
multinodular tóxico y tiroiditis subaguda (fig. 13.22, p. 601), así como para identificar teji-
do ectópico, nódulos funcionantes y tejido tiroideo residual/recurrente tras la cirugía. El
~15% de nódulos fríos (no funcionantes) son malignos. Los nódulos calientes son fre-
cuentemente adenomas tóxicos.
Feocromocitoma. Iodo-123 (123I) meta-iodobenzilguanidina (MIBG) es captada por
tejidos simpáticos, e indica tumores de médula adrenal (+otras crestas neurales) funcio-
nantes, ectópicos y metastásicos. 131I-MIBI también es utilizado para tratamiento.
Hiperparatiroidismo. Los estudios con 99 mTc-metoxi isobutil isonitrilo (MIBI) pue-
den detectar adenomas paratiroideos.
Hemorragia. Se extraen hematíes del paciente y se marcan con 99 mTc, después se
reinyectan en el paciente para permitir la identificación de un punto sangrante. Es utili-
zado tanto en sangrado agudo (tras endoscopia o TC) como GI crónico, siendo más sen-
sible que la angiografía TC y útil en sangrado intermitente, aunque la localización puede
ser un desafío.
Radiología
Department.
corta, queda concentrado en los tejidos metabóli-
camente activos. FDG decae rápidamente para pro-
ducir un positrón que, tras viajar unos pocos milímetros a través del tejido, se aniquila
con un electrón para producir un par de fotones de alta energía (rayos gamma), que son
detectados por la PET. En el cerebro, hígado, riñón, vejiga, laringe y tejido linfoide de la
faringe suele haber normalmente una alta captación de FDG, lo que debe tenerse en
cuenta cuando se valoren imágenes. Las neoplasias tienen una alta captación de FDG con
puntos calientes que sugieren enfermedad primaria o metástasis. Puesto que las lesiones
inflamatorias tendrán también una alta captación, hay un riesgo de resultados falsos posi-
tivos (p. ej., sarcoide, TB); el diagnóstico debe ser confirmado con histología de las lesio-
nes sospechosas. La PET permite el estadiaje de muchas malignidades de órganos sóli-
dos (pulmón, melanoma, esofágico), así como en linfomas, y es particularmente útil para
la planificación de la radioterapia y la cirugía tanto para enfermedades primarias como
para metástasis. La PET puede ser también utilizada para representar en imágenes fuen-
tes ocultas de infección. La PET puede ser combinada con TC o RM para ofrecer imá-
genes de alta calidad que combinan anatomía con fisiología. Están entrando en uso clíni-
co una variedad de trazadores alternativos con radiotrazadores conjugados con otros
sustratos específicos de tejidos (p. ej., metomidato marcado con 11C para detectar tumo-
res de origen adrenocortical, trazadores de somatostatina en tumores neuroendocrinos
y trazadores de amiloide en la enfermedad de Alzheimer).
Tomografía computarizada de emisión de fotón único (SPECT). Similar a la
PET, pero en lugar de utilizar emisión de positrones, utiliza una molécula marcada por
radioisótopo como en las técnicas nucleares convencionales, pero empleando dos gam-
macámaras para la detección. Las imágenes producidas son de menor resolución que la
PET, pero los isótopos utilizados son de vida más larga y con mayor disponibilidad. Entre
los ejemplos se encuentran estudios de perfusión miocárdica (p. 741).
Radiología
predichas de forma fiable. Los fármacos (p. ej., adenosina, dobutamina y dipiridamol) pue-
den también ser utilizados para inducir diferencias de perfusión entre tejidos normal o
hipoperfundidos.
Los estudios de perfusión miocárdica añaden información en pacientes que se presen-
tan con IM agudo (para determinar la cantidad de miocardio salvado por la trombólisis)
y en el diagnóstico del dolor torácico agudo en los pacientes que no tienen los cambios
clásicos del ECG (para definir la presencia de defectos de perfusión significativos).
Fig. 16.30. Estudio de perfusión con 99Tc que muestra defecto de perfusión en las paredes
anterior y lateral del ventrículo izquierdo con el esfuerzo, que son parcialmente reversibles
(diferencia entre los estudios de estrés y de reposo). Es bueno para enfermedad de pequeño
vaso como la que se ve en la diabetes. La TC y la coronariografía no muestran bien la enfer-
medad de pequeño vaso.
Cortesía del Dr. Cousins.
traste orales o IV realzan la definición (p. 730). La mayor desventaja es la dosis de radia-
ción. La colonoscopia con TC (CTC; fig. 16.31) utiliza insuflación de aire o CO2 rectal, habi-
tualmente asociado con un agente oral que marque las heces para visualizar la mucosa
del colon en los pacientes no adecuados para estudio endoscópico o en los que este ha
fallado (p. ej., en un tumor estenosante, donde puede ser utilizado para evaluar el colon
proximal y permitir la evaluación de las metástasis hepáticas y ganglionares simultánea-
mente). Una prueba negativa puede ser considerada como definitiva excepto si se ven
pólipos o masas, en cuyo caso los pacientes requerirán una colonoscopia.
Endoscopia con cápsula inalámbrica: Ver p. 248.
Resonancia magnética (RM). Ofrece una excelente imagen del tejido blando, lo que
le da un importante papel en el estudio del hígado, sistema biliar, páncreas y conducto
pancreático (CPRM—colangiopancreatografía con resonancia magnética; fig. 16.32). Ade-
más de para evaluar enfermedad potencialmente maligna, CPRM es una modalidad de
elección para la detección de cálculos en el conducto biliar común que pueden ser pasa-
dos por alto con US. La RM realizada tras sobrecarga de líquido del intestino delgado
(líquido administrado oralmente = enterografía por RM; líquido administrado vía tuvo
nasoduodenal = enteroclisis por MR) permite la evaluación de la inflamación del intesti-
no delgado (p. ej., Crohn) y lesiones que pueden ser difíciles de alcanzar con endosco-
pia convencional.
Colangiopancreatografía retrógrada endoscópica (CPRA; fig. 16.33). Indicacio-
nes: No se utiliza ya de forma rutinaria para el diagnóstico, aunque todavía tiene un papel
terapéutico significativo: esfinterotomía para cálculos en el conducto biliar común; endo-
prótesis de estenosis benignas o malignas y obtención de cepillado para diagnosticar la
naturaleza de la estenosis. Método: Se avanza un catéter desde una duodenoscopia con
vista lateral vía la ampolla dentro del conducto biliar común. Se inyecta medio de con-
traste y se obtienen imágenes para mostrar lesiones en el árbol biliar y conductos pan-
creáticos. Complicaciones: Pancreatitis; sangrado; colangitis; perforación. Mortalidad <0,2%
globalmente; 0,4% si se realiza extracción de cálculos.
Ultrasonidos endoscópicos (USE; ver p. 736). Comúnmente utilizado en el diag-
nóstico de anormalidades GI del tracto superior; son excelentes para el diagnóstico de
cánceres esofágicos, gástricos y pancreáticos. Permiten realizar el estadiaje mediante la
evaluación de la profundidad de la invasión, así como el diagnóstico histológico de las
lesiones mediante biopsia.
Estudios de contraste (fig. 16.34). Pueden ayudar en la disfagia (p. 250) y evaluando
la integridad de anastomosis tras la cirugía. Los estudios fluoroscópicos en tiempo real
evalúan la función de la deglución. El bario ofrece un mejor contraste, pero si existe sos-
pecha de perforación se utilizan medios de contraste hidrosolubles basados en yodo. Los
enemas de contraste están cada vez más obsoletos y ahora se utilizan para excluir una
fuga tras una resección anterior baja, para protogramas y no mucho más.
743
Radiología
Fig. 16.32. CPRM del sistema biliar que
muestra: ducto hepático izquierdo (fle-
cha amarilla); cálculos múltiples en la
vesícula (flecha negra); conducto biliar
común (flecha blanca); conducto pan-
creático (flecha verde); duodeno (flecha
verde).
Cortesía de Norwich Radiology
Department.
745
Radiología
Fig. 16.36. Reconstrucción 3D del
urograma TC que muestra un aspecto
normal de ambos riñones, uréteres y
vejiga.
Cortesía del Dr. Edmund Godfrey.
746 Neuroimagen
TC (fig. 16.39). Modalidad de imagen de elección para pacientes que se presentan con
síntomas neurológicos agudos sugestivos de ictus. Es mejor que la RM mostrando hemo-
rragia aguda y fracturas, y es más fácil de realizar en los pacientes enfermos o anestesia-
dos, y así es bueno en emergencias. La atenuación de tejidos blandos biológicos está en
un corto límite desde +80 para sangre y músculo, a 0 para el LCR, y bajo hasta -100 para
la grasa (unidades Hounsfield, p. 730). El medio de contraste inicialmente da un efecto
angiográfico, blanqueando los vasos. Posteriormente, si hay un defecto en la barrera
hematoencefálica (p. ej., tumores o infección), el medio de contraste opacificará unos
márgenes de lesión, dando áreas blancas realzadas.
• Algunas áreas del SNC, p. ej., glándula pituitaria, plexo coroideo, no tienen barrera
hematoencefálica y se realzan normalmente.
• La sangre fresca es de mayor atenuación (es decir, más blanca) que el tejido cerebral.
• En los hematomas antiguos, la Hb se degrada y pierde atenuación, así un hematoma
Radiología
subdural subagudo a las 2 semanas puede ser de la misma atenuación que el cerebro
adyacente.
• Un hematoma crónico subdural será de una atenuación relativamente baja.
La TC es utilizado con frecuencia en el ictus agudo para excluir hemorragia (p. ej., previo
a la antiagregación) y con estudios de perfusión (fig. 16.14) para ayudar en las decisio-
nes terapéuticas en relación con la trombólisis. El área actual de infarto/isquemia puede
no aparecer durante un día o más, y será edema citotóxico de baja atenuación (afec-
tando tanto a la materia blanca como a la gris –mire buscando la pérdida de definición
de materia gris).
Tumores y abscesos: Parecen similares, p. ej., una masa con un anillo resaltado, rodeado de
edema vasogénico y efecto de masa. El edema vasogénico (de capilares con fugas) es
extracelular y se distribuye a través de la sustancia blanca (sustancia gris respetada). El
efecto de masa produce compresión de los surcos y de los ventrículos ipsilaterales, y
puede también producir herniación (subfalcina, transtentorial o tonsilar). Ver p. 483 (y
también fig. 16.40).
Otra indicación para la TC es cefalea aguda, grave, p. ej., sugestiva de hemorragia sub-
aracnoidea (p. 478). Una TC sin realce puede mostrar sangre fresca, hidrocéfalo o ↑ PIC,
cualquiera de los cuales puede hacer insegura la punción lumbar.
La angiografía TC da mapeo excelente de la circulación cerebral (fig. 16.41), y puede
hacerse directamente tras una TC sin realce, buscando un aneurisma si la TC no realza-
da muestra hemorragia subaracnoidea.
RM (RM en ictus: fig. 10.19, p. 481): Las secuencias de imagen principales son:
• Imágenes ponderadas en T1: Dar buen detalle anatómico con la que puede ser com-
parada la imagen ponderada en T2. La grasa es más brillante (↑ intensidad de señal);
otros tejidos son más oscuros en distintos grados. La sangre que fluye es de baja señal.
El contraste de gadolinio (p. 748) habitualmente resulta en un aumento de la intensi-
dad de la señal. Ver tabla 16.4.
• Imágenes ponderadas en T2: Ofrecen la mejor detección de la mayoría de las lesiones,
dado que habitualmente contienen algún edema o líquido y, por lo tanto, parece blan-
co (p. ej., fig. 16.20, p. 735). Grasa y líquido aparecen más brillantes. El flujo de la san-
gre es de nuevo de baja señal.
Angiografía con resonancia magnética traza las circulaciones (y senos, venas) carotídea,
vertebrobasilar y cerebral. La RM funcional puede representar la imagen de flujo de san-
gre local.
Angiografía de catéter (fig. 16.42). Menos comúnmente utilizada desde la llegada de
la ARM y la angiografía TC y técnicas de perfusión, aunque tiene la ventaja de permitir la
terapia inmediata –p. ej., embolización con espirales de aneurismas saculares.
Diagnóstico con técnicas de imagen con radioisótopos (p. 738). La PET es fun-
damentalmente utilizada como una herramienta de investigación en demencia, pero la
gammagrafía de perfusión se usa en la evaluación de la enfermedad de Alzheimer, otras
demencias y focos epileptogénicos localizados. El SPECT para visualizar la captación de
123I-FP-CIT (DaTSCANTM) puede ser utilizado para evaluar el transporte dopaminérgi-
co estriatal.
747
Radiología
Fig. 16.39. TC axial sin realce de la cabeza;
note el infarto antiguo en el territorio de la
arteria cerebral media izquierda.
Cortesía de Norwich Radiology Department.
del estudio.
Tenga cuidado en: empeoramiento renal o cardíaco; mieloma; diabetes; enfermedad de
células falciformes; ancianos; niños; enferma aguda. Evite los agentes basados en yodo
en el hipertiroidismo activo.
Tenga la función renal a mano en estos pacientes (ver p. 315). Las reacciones meno-
res incluyen náusea, vómito y sensación de calor. Reacciones más graves incluyen urtica-
ria, broncoespasmo, angioedema y baja PA (1:250); riesgo teórico de muerte para
1:150.000.
La metformina debería suspenderse durante 48 h tras la administración de contraste
IV debido al riesgo de acidosis láctica.
Sulfato de bario. Utilizado en el examen del tracto GI. Las partículas insolubles en
agua de 0,6-1,4 mm de diámetro se mezclan con grandes moléculas orgánicas tales
como pectina y goma para promover el buen flujo, adherencia de la mucosa y alta den-
sidad en capas finas.
Complicaciones: Neumonitis química o peritoneal. Nunca administre si sospecha víscera
perforada.
Agentes de contraste basados en yodo, no iónicos, hidrosolubles. Utilizados
en lugar de bario donde hay un riesgo de contaminación peritoneal (p. ej., fístula, mega-
colon, ulceración, diverticulitis, anastomosis intestinal, hemorragia intestinal aguda). No
debería utilizarse gastrografín.
Contienen yodo, así que establezca historia de alergia y estado tiroideo.
Aire. En la colonografía de TC, se insufla aire (o CO2) como un medio de contraste
negativo tras la administración de bario para realzar la definición de las mucosas. El agua
puede ser utilizada también VO o vía rectal para definir la luz del intestino.
Gadolinio. Un elemento de la serie de los lantánidos con cualidades paramagnéticas
que es administrado intravenosamente (como gadolinio-DTPA) para realzar el contras-
te de ciertas estructuras en la RM. Trabaja reduciendo el tiempo de relajación (TR) de
los núcleos de hidrógeno en su proximidad y aparece como una alta señal en estudios
ponderados en T1. No cruza la barrera hematoencefálica, así que es útil realzando tumo-
res extraaxiales isointensos, tales como los meningiomas. También puede resaltar áreas
en las que se ha roto la barrera hematoencefálica debido a inflamación o procesos neo-
plásicos. Se excreta renalmente: controle la TFGe: si esté reducida significativamente, el
gadolinio está contraindicado, dado que hasta el 30% puede desarrollar fibrosis sistémi-
ca nefrogénica progresiva/dermoparía fibrosante nefrogénica que produce fibrosis gene-
ralizada, la cual empeora el movimiento y la respiración –y que puede ser fatal. Las abe-
rraciones en el metabolismo del calcio-fosfato y el tratamiento con eritropoyetina pare-
cen incrementar el riesgo. Otras reacciones adversas incluyen cefalea, náusea e irritación
local en la zona de inyección, con reacción idiosincrática reportada en menos del 1%.
Radiología
(aire/CO2) en el abdomen durante ~10 días. TC si sospecha de fuente intraabdominal
para sepsis o patología que requiera cirugía precoz (p. ej., apendicitis). US para embarazo
ectópico.
• Cualquier paciente con sensibilidad de la columna cervical en la línea media postraumáti-
ca –¡no solo para el departamento de urgencias! Inmovilización con collar y respaldo
seguido de una TC. Deben visualizarse todas las vértebras hasta la parte alta de T1 y des-
cartarse patología antes de que sea seguro retirar el collar.
• Inicio súbito de síntomas neurológicos focales, cefalea más intensa que nunca, GCS deterio-
rándose: TC craneal, después punción lumbar si no evidencia de PIC.
Recuerde que el diagnóstico por técnicas de imagen –o repetición de la técnica por un estu-
dio de pobre calidad– no debería retrasar nunca el tratamiento definitivo de una patología
urgente, p. ej.:
• Neumotórax a tensión (p. 814 y fig. 16.43): descompresión no RXT.
• Hemorragia intraabdominal o ruptura visceral (p. 606): laparotomía.
• Alta sospecha clínica de torsión testicular (p. 652): cirugía no US Doppler.
Antes de la llegada de la radiología intervencionista, un paciente colapsado, en shock con un
abdomen agudo habría evitado la TC y habría sido llevado directamente a laparotomía. Sin
embargo, debería tener en mente que los aneurismas rotos son cada vez más tratados median-
te reparación endovascular bajo control fluoroscópico (p. 654), así que esta es un área en la
que el estudio de imagen puede ser preferible a la intervención inmediata.
Fig. 16.43. Esta es una gran imagen educativa de la UVI. El doctor inexperto puede distraerse por la
poca calidad de la imagen, pasando por alto las bases del pulmón; los técnicos hacen lo mejor que
pueden en condiciones difíciles. Pedir una nueva RXT aquí sería un error note el gran neumotó-
rax derecho a tensión que ¡necesita ser inmediatamente descomprimido! Pulmones: El campo pul-
monar derecho es demasiado negro en comparación con el izquierdo, el hemidiafragma derecho está
deprimido y el pulmón derecho se ve colapsado contra el mediastino. Mediastino: Desviado hacia la
izquierda, obstruyendo el retorno venoso –así, ↓ gasto cardíaco, y amenazando la vida. ¿Está siendo
empujado o retraído? Compruebe los hilios, huesos y tejidos blandos. Puesto que el pulmón derecho
está colapsado y el mediastino desviado hasta la izquierda, esto sugiere neumotórax derecho a ten-
sión. Ahora es necesario realizar descompresión con toracocentesis y un drenaje torácico.
Cortesía del Dr. Edmund Gofrey.
Probabilidad
2 desviaciones estándar
incluyen el 95% de la población
Tabla 17.1.
Intervalo de referencia
Sustancia Muestra (laboratorios varía; Su hospital
solo una guía)
Alanina aminotransferasa (ALT) P 5-35 u/L
Albúmina1 P 35-50 g/L
Aldosterona2 P 100-500 pmol/L
Amilasa-α P 0-180 iu/dL
Angiotensina II2 P 5-35 pmol/L
Antígeno prostático específico P 0-4 mcg/mL, específico de la edad,
(PSA)
Aspartato transaminasa P 5-35 u/L
Bicarbonato1 P 24-30 mmol/L
Bilirrubina P 3-17 μmol/L
BNP (ver p. 137) P < 50 ng/L
Calcio (ionizado) P 1,0-1,25 mmol/L
Calcio1 (total) P 2,12-2,60 mmol/L
Ver p. 676 para corregir
por la albúmina
Calcitonina P < 0,1 mcg/L
Capacidad transportadora S 54-75 μmol/L
de hierro total
Cloro P 95-105 mmol/L
Colesterol3 (ver p. 690) P < 5,0 mmol/L
VLDL (p. 690) P 0,128-0,645 mmol/L
LDL P < 2,0 mmol/L
HDL P 0,9-1,93 mmol/L
Cortisol P am 450-700 nmol/L
Creatina quinasa (CK) P Medianoche 80-280 nmol/L
Creatinina1 (proporcional a P 么 25-195 u/L
masa corporal magra) 乆 25-170 u/L
Ferritina P 12-200 mcg/L
Fetoprotenía-α P < 10 ku/L
Folato S 2,1 mcg/L
Folato de glóbulos rojos B 0,36-1,44 μmol/L
(160-640 mcg/L)
Fosfatasa alcalina1 P 30-130 u/L (adultos)
Gamma-glutamil P 么 11-51 u/L
transpeptidasa 乆 7-33 u/L
Globulina transportadora P 7-17 mg/L
del tiroides (TBG)
Glucosa (ayunas) P 3,5-5,5 mmol/L
HbA1c = Hb glicosilada (DCCT) B 4-6%. 7% ≈ buen control DM
HBA1c = IFCC (más específica B 20-42 mmol/mol, 53 ≈ buen control
que DCCT) DM
Hierro S 么 14-31 mmol/L
乆 11-30 mmol/L
Hormona adrenocorticotrópica P < 80 ng/L
Hormona antidiurética (ADH) P 0,9-4,6 pmol/L
Hormona del crecimiento P < 20 mu/L
Hormona estimuladora P 0,5-4,2 mu/L
del tiroides (TSH) se incrementa con la edad, p. 216
los ensayos varían; 4-5 es un área gris
Tabla 17.3.
Intervalos de referencia en orina Intervalo de referencia Su hospital
17-oxosteroides (neutral) 么 17-76 μmol/día
乆 14-59 μmol/día
Ácido hidroxiindolacético 16-73 μmol/24 h
Ácido hidroximetilmandélico 16-48 μmol/24 h
(HMMA, VMA)
Cortisol (libre) < 280 nmol/24 h
Esteroides 17-osogénicos 么 28-30 μmol/día
乆 21-66 μmol/día
Fosfato (inorgánico) 15-50 mmol/24 h
Metanefrinas 0,03-0,69 μmol/mmol
creatinina
(o < 5,5 μmol/día)
Osmolalidad† 350-1000 mosmol/kg
Potasio 14-120 mmol/24 h
Proteína < 150 mg/24 h
Proteína Creatinina ratio < 3 mg/mmol
Sodio 100-250 mmol/24 h
Interpretar en base a los valores plasmáticos.
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Cap. 17_Oxford 07/05/18 16:05 Página 754
Hematíes
3,9-5,6 × 1012/L
Hemoglobina 130-180 g/L
115-160 g/L
Volumen de glóbulos rojos 0,4-0,54 L/L
o hematocrito 0,37-0,47 L/L
Volumen corpuscular 76-96 fL
medio (VCM)
Hemoglobina corpuscular 27-32 pg
media (HCM)
Concentración de 300-360 g/L
hemoglobina corpuscular
media (CHCM)
Ancho distribución 11,6-14,6% (p. 325)
de eritrocitos (AED)
Neutrófilos 2,0-7,5 × 109/L
40-75% leucocitos
Linfocitos 1,0-4,5 × 109/L
20-45% leucocitos
Eosinófilos 0,04-0,44 × 109/L
1-6% leucocitos
Basófilos 0,0-0,10 × 109/L
0-1% leucocitos
Monocitos 0,2-0,8 × 109/L
2-10% leucocitos
Plaquetas 150-400 × 109/L
Reticulocitos 0,8-2,0%1 25-100 × 109/L
Velocidad de sedimentación Depende de la edad (p. 372)
globular (VSG)
Tiempo de protrombina 10-14 s
(bote citrada)
Factores I, II, VII y X
Tiempo de tromboplastina 35-45 s
parcial activada (TTPA)
(VIII, IX, XI, XII)
Rango terapéutico para INR, ver p. 351.
1 Solo utilice porcentajes para los intervalos de referencia si los hematíes son normales; en otro caso,
755
Amikacina1. Pico (1 h tras dosis IV): 20-30 mg/L. Valle: < 10 mg/L.
Carbamacepina1. Concentración óptima: 20-50 μmol/L (4-12 mg/L).
Digoxina1 (6-12 horas tras la dosis) 1-2,6 nmol/L (0,8-2 mcg/L). < 1,3 nmol/L puede ser
tóxico si hay hipocalemia. Signos de toxicidad-SCV: arritmias, bloqueo. SNC: confusión,
insomnio, agitación, ver demasiado amarillo (xantopsia), delirio. GI: náusea.
Fenitoína.1,2 Valle: 40-80 μmol/L (10-20 mg/L). Tenga cuidado con que ↑↓albúmina, dado
que la prueba mide la fenitoína unida, mientras que es la fenitoína libre la que es farma-
cológicamente importante. Signos de toxicidad: ataxia, diplopía, nistagmo, sedación, disartria.
Gentamicina1,2 (p. 387) y tobramicina1,2. Si los aminoglucósidos son utilizados de forma
inadecuada, el potencial para oto- y nefrotoxicidad es algo, por lo que prescríbalos solo
durante períodos cortos de tiempo y siga las recomendaciones/guías de expertos loca-
les. CI: En fallo renal o hepático grave, ascitis, quemaduras, situaciones de alto gasto (p. ej.,
anemia, enfermedad de Paget), niños y embarazo. Signos de toxicidad: Tinnitus, sordera,
nistagmo, vértigo, fallo renal. Es preferible utilizar una dosis única diaria, con ajuste de
dosis, dado que tiene menos ES y mayor capacidad bactericida (p. ej., gentamicina
5 mg/kg/d o tobramicina 4 mg/kg/d; consulte con el farmacéutico en pacientes obesos o
cuando se utilice tobramicina en fibrosis quística). La endocarditis constituye una excep-
ción a esta dosificación: la fragmentación de la dosis (p. ej., gentamicina 1 mg/kg/8 horas
o cada 12 horas en insuficiencia renal) aumenta el efecto bactericida sinérgico de otros
fármacos. Los niveles en el valle (justo antes de la dosis) y la función renal, deben moni-
torizarse diariamente al principio (puede hacerse dos veces a la semana en pacientes
estables con función renal normal) –el objetivo para el valle: < 1 mg/L tanto para genta-
micina como para tobramicina. Si los niveles valle están fuera de intervalo, no ponga la
siguiente dosis hasta que los niveles sean < 1 mg/L (vuelva a medir niveles en 12-24 horas).
Litio2 (12 horas tras la dosis). Las guías de práctica clínica varían: 0,4-0,8 mmol/L es razo-
nable. Signos precoces de toxicidad (Li+ > 1,5 mmol/L): temblor. Intermedios: letargia. Tar-
díos: (Li+ > 2 mmol/L): espasmos, coma, mareos, arritmia, insuficiencia renal (puede ser
necesaria hemodiálisis). Ver OHCS p. 349.
Teofilina. 10-20 mg/dL (55-110 μmol/L). (䊳 Ver p. 810). Tomar la muestra 4-6 horas tras
iniciar una infusión (que debe suspenderse durante ~15 min antes de que se tome la
muestra). Signos de toxicidad: arritmias, ansiedad, temblor, convulsiones.
Vancomicina.1,2 Se excreta renalmente; dosificación guiada por la edad y la función renal
(pero típicamente 500 mg-1 g/12 h). Controle los niveles valle antes de la 3ª dosis,
teniendo como objetivo 5-10 mg/L (10-15 mg/L en EBS/EI y en infecciones por SAMR
menos sensibles). Si los niveles son demasiado bajos, compruebe la dosis que se está
administrando e incremente la dosis lentamente; si los niveles están altos, confirme el
momento en el que se ha administrado la dosis/niveles, omita la nueva dosis, confirmar
de nuevo los niveles, y considere disminuir la dosis o la frecuencia.
1 Los niveles valle deben determinarse justo antes de la siguiente dosis. Si los valores son demasiado
altos, confirme que la muestra se ha tomado realmente en el valle y no después de la dosis.
2 Fármacos para los que está indicada la monitorización de rutina.
18 Procedimientos prácticos
Contenidos
Sondas nasogástricas 759
Colocar una cánula IV 760
䊳䊳 Cortar en una vena 761
Sondaje vesical 762
Drenar ascitis 764
Aspiración diagnóstica del derrame
pleural 765
Paracentesis abdominal 765
Insertar un drenaje torácico 766
䊳䊳 Liberando un neumotórax a
tensión 767
Aspiración de un neumotórax 767
Punción lumbar (PL) 768
Cardioversión/desfibrilación 770
Muestra de sangre arterial 771
Manejo de la vía aérea en
emergencias 772
Tratamiento de emergencia
de la vía aérea 774 Fig. 18.1. Póster de la campaña del NHS «lávese
Catéter de la yugular interna 775 manos».
Contiene información del sector público bajo
Insertando un marcapasos cardíaco licencia de v3.0.https://www.hatdotheyknow.com/
temporal 776 request/21861/response/56086/attach/3/04072%
20Hand%20Hygiene%205%201.1.pdf
El obstetra húngaro Ignaz Semmelweis demostró los beneficios del lavado de manos en los años
1940: observó que la mortalidad maternal era casi tres veces más alta en una maternidad llevada
por un médico que en la llevada por una comadrona. La explicación no era fácil de hallar, hasta que
un amigo del Semmelweis, Kakob Kolletschka, falleció tras recibir un corte accidental con un escal-
pelo manejado por un estudiante durante una demostración en cadáveres. Semmelweis reconoció
en la muerte de Kolletschka muchas de las características de las madres que morían. La explicación:
los doctores de la planta de maternidad comenzaban el día com exámenes postmortem, tras lo cual
procedían a realizar exámenes vaginales en las vivas sin lavarse las manos. Habiéndose percatado de
ello, Semmelweis introdujo la práctica del lavado de manos con cloruro de lima y redujo las muer-
tes al nivel de las pacientes de las comadronas. A pesar de la evidencia que acumuló, la teoría de
Semmelweis fue rechazada por sus contemporáneos, un rechazo que indudablemente contribuyó a
su problema psiquiátrico, posterior reclusión en un manicomio y, al final, su muerte por los golpes
de sus guardias.
Dedique un minuto a lavar sus manos cuidadosamente antes de comenzar cualquier procedimiento.
Este prerrequisito no solo reducirá el riesgo de infección de sus pacientes, sino que también le dará a
usted un momento para reflexinar: concéntrese en el agua caliente cayendo sobre sus manos, respire
profundamente y, por un momento, olvídese de su lista de trabajos. Quizás, dedique un pensamiento al
Dr. Kolletschka. Puede encontrar que el procedimiento que sigue va mejor de lo que había anticipado.
Agradecemos a nuestro médico especialista, Dr. Andrew Johnston, por su contribución en este capítulo.
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 18_Oxford 07/05/18 16:04 Página 759
Procedimientos prácticos
trucción, p. ej., obstrucción de la salida del estómago, íleo, obstrucción intestinal.
• Para lavado gástrico.
• Para administrar alimento/fármacos, especialmente en pacientes críticos o en los
que tienen disfagia, p. ej., enfermedad de la neurona motora, post-ACV.
Pasando la sonda. Las enfermeras son expertas y le pedirán a usted (que puede
no haber pasado ninguna) hacerlo solo cuando ellas fallas—así, la primera cuestión
a preguntar es: «¿Le has preguntado a la supervisora de la sala próxima?»
• Utilice guantes no estériles y un delantal para protegerle tanto a usted como al
paciente.
• Explique el procedimiento. Tome una sonda nueva, fría (por tanto, menos flexible).
Tenga un vaso de agua a mano. Lubrique bien con gel acuoso.
• Utilice la sonda, sujetándola contra la cabeza del paciente, para estimar la longitud
requerida para llegar desde las fosas nasales a la parte posterior de la faringe.
• Sitúe la sonda lubricada en las fosas nasales con su curva natural buscando el paso
hacia abajo, mejor que hacia arriba. La fosa nasal derecha es con frecuencia más
fácil que la izquierda, pero, si es factible, pregúntele al paciente por su preferencia.
Avance directamente hacia atrás (no hacia arriba).
• Cuando estime que la punta está entrando la faringe, rote la sonda unos ~180º
para evitar el paso hacia la boca.
• Pídale al paciente que trague un sorbo de agua, y avance a medida que lo hace, coor-
dinando cada empujón con una deglución. Si esto falla: Inténtelo en la otra fosa nasal.
• La sonda tiene marcas de distancia a lo largo de toda su longitud: el estómago está
a ~35-40 cm en adultos, así que avance > esta distancia, preferentemente ~10-20 cm
más. Asegure con esparadrapo en la nariz.
Confirme la posición. Esto es vital antes de comenzar cualquier tratamiento a
través de la sonda. Sondas nasogástricas mal situadas han conducido a un número
de muertes prevenibles, y alimentar vía una sonda mal colocada es considerada en
el NHS como un Never Event o acontecimiento que no debe ocurrir nunca (un inci-
dente de seguridad serio, mayormente prevenible, que no debería ocurrir nunca si
las medidas preventivas disponibles hubieran sido implementadas).
• Utilice un papel de pH para probar que está en el estómago: los contenidos gás-
tricos aspirados son ácidos (pH ≤ 5,5) aunque los antiácidos o los IBP pueden
incrementar el pH. Los tubos pequeños pueden ser difíciles de aspirar, trate reti-
rando o avanzando unos pocos cm o tumbando al paciente sobre el lado izquier-
do para ayudar a introducir la sonda en los contenidos gástricos. Los aspirados
deberían ser > 0,5 mL y probados directamente en papel de pH sin manipular.
Espere 10 s para que se produzca el cambio de color.
• Si el pH es > 5,5 y la sonda NG es necesaria para administrar fármacos o ali-
mentación, la posición de la misma debe comprobarse radiológicamente. Pida una
RXT/abdo (dígale al radiólogo el motivo por el que la quiere). Busque la
línea/punta radiopaca (puede ser difícil de ver, mire debajo del diafragma, pero si
tiene duda, busque la ayuda del radiólogo).
• La prueba del soplido NO es un método aceptado para comprobar la posición de la sonda.
• Ponga una llave en la sonda o permita que drene en una bolsa de catéter depen-
diente asegurada a la ropa (cinta de óxido de zinc alrededor de la sonda para for-
mar una tapa, perno de seguridad a través de la tapa).
䊳 No pase un tubo nasalmente si hay cualquier sospecha de fractura facial.
䊳 Obtenga ayuda de un médico experto si el paciente ha tenido cirugía GI superior
reciente—no es buena práctica empujar el tubo a través de una anastomosis fresca.
Complicaciones. • Dolor, o raramente: • Pérdida de electrolitos. • Esofagitis. • Intu-
bación traqueal o duodenal. • Necrosis: retro o nasofaríngea. • Perforación gástrica.
Destete. Cuando planee la retirada de una SNG in situ para descompresión o ali-
vio de obstrucción, es inteligente destetar al paciente de forma que compruebe que
el paciente puede estar sin ellas. El drenaje debería ser < 750 mL/24 horas para un
destete exitoso.
• Primero debería estar en drenaje libre con, p. ej., aspiraciones cada 4 horas.
• Después, cierre la válvula con aspiraciones cada 4 horas.
• Después, solo la válvula. Si es bien tolerado junto con ingesta oral, probablemen-
te sea seguro retirar la sonda; si no, espere para retirarla.
Procedimientos prácticos
18 g VERDE 1,2 40 90
20 g ROSA 1,0 32 55
22 g AZUL 0,28 25 25
24 g AMARILLO 0,07 19 24
(Pi – P0) r4
Q ∝ —————
ηl
corto uso 䊳 pero inadecuados en auténtica alergia al látex. Los catéteres de silastic (sili-
cona) pueden ser utilizados a largo plazo, pero son más caros. La cobertura de aleación
de plata reduce las infecciones. Forma. Foley es típica (fig. 18.2); los catéteres de coudé
(codo) tienen una punta angulada para facilitar el paso a través de la próstata, pero son
más arriesgadas; los catéteres de 3 vías son utilizados en la retención de coágulos o de-
sechos y tienen una luz extra para irrigación de líquidos, unida al juego de irrigación a
través de una puerta extra en el extremo final (fig. 18.3). Obtenga consejo de urología
antes de iniciar la irrigación. Los catéteres de condón son frecuentemente preferidos por
los pacientes (menos molestia) incluso aunque pueden gotear y caerse.
Problemas de los catéteres. • Infección: ~5% desarrolla bacteriemia (la mayoría ten-
drá colonización bacteriana, no se requerirán los antibióticos a no ser que el paciente
tenga malestar sistémico; coméntelo con microbiología). Una dosis inmediata, p. ej., gen-
tamicina 80 mg es administrada a veces antes de la inserción a pesar de falta de eviden-
cia sobre su beneficio. Compruebe la política local. • Espasmo de vejiga: Puede ser dolo-
roso-trate reduciendo el agua en el globo o un fármaco anticolinérgico, p. ej., oxitutinin.
Por la uretra. Se requiere técnica aséptica.
Indicaciones: • Aliviar la retención urinaria. • Monitorizar el flujo de orina en pacientes crí-
ticamente enfermos. • Recoger orina no contaminada para diagnóstico. 䊳 Está contrain-
dicado en lesión uretral (p. ej., fractura pélvica) y prostatitis aguda.
• Explique el procedimiento y obtenga el consentimiento verbal. Prepare un carrito de
sondaje: guantes, catéter, gel de lidocaína, solución de limpieza, vendaje, bandeja de riñón,
hisopos de gasa, bolsa de drenaje, 10 mL de agua y jeringa, contenedor de muestras.
• Coloque al paciente en decúbito supino: las mujeres con las rodillas flexionadas y caderas
en abducción con los talones juntos. Use una mano enguantada para limpiar el meato ure-
tral en dirección del pubis al ano, manteniendo los labios separados con la otra mano. En
los hombres sin circuncisión, retraiga el prepucio para limpiar el glande; utilice una mano
enguantada para sujetar el pene fijo. La mano utilizada para sujetar el pene o los labios no
debería tocar el catéter. Coloque un paño estéril con un orificio en el centro para ayudar
a mantener la asepsia. Recuerde: mano izquierda sucia, mano derecha limpia.
• Ponga gel de lidocaína 1-2% estéril en la punta del catéter y ≤ 10 mL en el interior de
la uretra (≤ 5 mL si 乆). En el hombre, levante y estire cuidadosamente el pene hacia
arriba para eliminar cualquier flexión de la uretra que pueda conducir a la formación
de una falsa luz.
• Utilice una presión suave y continua para avanzar el catéter; rotarlo ligeramente puede
ayudar a pasar. 䊳 Nunca fuerce el catéter. Inclinar el pene hacia arriba en dirección al
ombligo mientras se inserta puede ayudar a pasar a través de la próstata. Inserte hasta
la empuñadura; espere hasta que salga la orina antes de inflar el globo. Recuerde com-
probar la capacidad del globo antes de inflarlo (escrito en la parte externa del extre-
mo). Recoja una muestra estéril y conecte una bolsa de drenaje. Tire del catéter hacia
afuera hasta que el globo venga a reposar al cuello de la vejiga.
• Si está teniendo problemas al pasar la próstata, inténtelo: con más lubricación, un suave
movimiento de giro; un catéter de mayor tamaño; o llame a un urólogo, que puede uti-
lizar una guía.
䊳 Recuerde volver a colocar el prepucio en los pacientes no circuncidados después de
insertar el catéter para prevenir edema del glande y parafimos.
Documentación: En las notas, asegúrese de documentar la indicación para el sondaje, el
tamaño del catéter, si la inserción fue difícil o fácil, cualquier complicación, volumen resi-
dual y color de la orina. Es buena práctica documentar que se ha vuelto a colocar bien
el prepucio. Firme con su nombre, fecha y cargo.
Sondaje suprapúbico. Se requiere técnica estéril. 䊳 Absolutamente contraindicada a
no ser que haya una gran vejiga palpable o visible con ultrasonidos, por el riesgo de per-
foración intestinal. Sea precavido, particularmente si hay historia de cirugía abdominal o
pélvica. La inserción de un catéter suprapúbico es de alto riesgo y usted debería estar
entrenado antes de intentarlo, hable con el urólogo primero.
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CAP. 18_Oxford 07/05/18 16:04 Página 763
Autosondaje 763
Es una buena y segura forma de tratar la retención crónica secundaria a vejiga neuro-
pática (p. ej., en esclerosis múltiple, neuropatía diabética, tumor lumbar o trauma).
Nunca considere que un paciente en dificultades por un gran volumen residual sea
demasiado viejo, joven o discapacitado para aprender. Niños de 5 años pueden apren-
Procedimientos prácticos
der la técnica, y pueden transformar sus vidas —así que la motivación puede ser exce-
lente. Puede haber menos ITU dado que no hay orina residual— y menos uropatía
obstructiva por reflujo. La evaluación de la posibilidad conlleva comprobar los derma-
tomas sacros: un «adormecimiento vago» implica ↓ sensación de una vejiga llena;
mayor pérdida sensorial puede indicar que el sondaje será indoloro. Obtenga ayuda
de su consejero de continencia que estará en una posición de enseñar al paciente o
al cuidador que el sondaje puede hacerse con suavidad (el catéter es de un calibre
mucho menor), particularmente si falta la sensación, y puede ser > 4/d («siempre man-
tenga su catéter con usted; no espere a una urgencia antes del sondaje»). Ver fig. 18.4.
Fig. 18.2. Un catéter Foley de Fig. 18.3. El extremo externo Fig. 18.4. Un catéter para
látex de tamaño 14 F con el de un catéter de 3 vías de tama- autosondaje de tamaño 10 F.
globo inflado a través de la ño 20 F. La puerta inferior es Son habitualmente menores
puerta de entrada más alta en para el líquido para irrigar la veji-
que los catéteres para sondaje
el extremo externo (verde). ga y la puerta superior (amarilla) prolongado, p. ej., 10 F compa-
Dr. Tom Turmezei (no a escala). es para el inflado del globo. rado con 14 F. Note que este
Dr. Tom Turmezei (no a escala). catéter no tiene globo.
Dr. Tom Turmezei (no a escala).
«La sonda no está drenando…»
Usted puede ser avisado para comprobar sondas que no están drenando. Com-
pruebe la hoja de balance hídrico y al paciente:
• Previamente buena diuresis, ahora anúrico: Catéter bloqueado hasta que se demues-
tre lo contrario. ¿Era la orina previamente clara o teñida de sangre? Considerar
lavar el catéter: con técnica aséptica inyecte y retire 20 mL de salino 0,9% con una
jeringa de vejiga. Esto puede conseguir restablecer el flujo. Puede ser necesaria
una sonda de 3 vías si hay retención de coágulos o restos. Si se bloquea de nuevo,
reemplácela. La repetición de lavados conduce a infección.
• Reducción lenta de la diuresis durante varias horas: En un paciente deshidratado/
postoperado una sobrecarga de líquidos de 500 mL inmediatamente (250 mL si
comorbilidad cardíaca) puede ayudar, vuelva en 30 minutos y compruebe la res-
puesta. Compruebe el resto de los parámetros (p. ej., pulso, PA, PVC) y aumente
la velocidad de la infusión de los líquidos IV pautados, si es apropiado.
䊳䊳 Daño renal agudo (p. 298): si la diuresis ha disminuido y ahora se ha inte-
rrumpido, la causa es con frecuencia la hipoperfusión renal (es decir, fallo prerre-
nal), pero considere otros factores, p. ej., fármacos nefrotóxicos.
• La orina se está perdiendo al salir por los lados de la sonda: Un catéter de condón
puede ser más apropiado.
• La sonda se ha desplazado a la uretra proximal (prostática): Posible incluso si el
globo está totalmente inflado. Considerar esto si al lavar el líquido entra, pero no
puede ser extraído. Si el paciente todavía necesita una sonda, reemplácela, y con-
sidere un mayor tamaño.
• La sonda ha perforado el tracto urinario inferior en la inserción y no está en la vejiga
o la uretra: 䊳䊳 Si se sospecha, llame al urólogo inmediatamente.
Recuerde: la diuresis debería ser > 400 mL en 24 h o > 0,5 mL/kg/h (ver p. 576).
Procedimientos prácticos
menos riesgo que un drenaje formal. También le
permite decidir si el drenaje es requerido.
Se puede extraer una muestra de ascitis para
diagnóstico citológico y bacteriano, p. ej., para
excluir peritonitis bacteriana espontánea (PBE;
p. 276). Antes de comenzar, conozca las pla-
quetas + tiempos de coagulación. Si son anor-
males, busque ayuda antes de continuar.
• Sitúe al paciente tumbado y extraiga la asci-
tis, marcando un punto donde se haya iden-
tificado, evitando vasos, estomas y cicatrices
(adherencias a la pared abdominal anterior). El
lado izquierdo puede ser más seguro –menos Fig. 18.5. Siempre extraiga la ascitis,
posibilidades de dañar el hígado (fig. 18.5). pero el objetivo es aproximadamente
• Limpie la piel. Infiltre algunos anestésicos 5 cm medial y superior a la cresta ilia-
locales, p. ej., lidocaína 1% (ver p. 573). ca anterior superior. Si en duda, pida
• Inserte una aguja 21 G en una jeringa de 20 mL una ecografía para marcar el punto.
en la piel y avance mientras aspira hasta que
se extraiga líquido; procure obtener 60 mL de líquido.
• Retire la aguja, aplique un paño estéril.
• Envíe líquido a microbiología (15 mL) para microscopia y cultivo, bioquímica (5 mL
para proteínas, ver p. 192) y citología (40 mL). Llame a microbiología para preve-
nirles si son necesarios análisis urgentes de la muestra.
Aspiración diagnóstica de un derrame pleural
• Si no se ha realizado todavía, una RXT puede ayudar a evaluar el sitio y tamaño
del derrame.
• Idealmente utilice guías de US a la cabecera del paciente (posibilidades de aspira-
ción exitosa ↑ posibilidades de punción de órganos). Si está disponible, pida a un
ecografista que marque un punto, o percuta el borde superior del derrame pleu-
ral y elija un sitio 1 o 2 espacios intercostales debajo del mismo (habitualmente
posterior o lateralmente).
• Limpie el área alrededor del punto marcado con solución de clorhexidina al 2%.
• Infiltre debajo, hasta la pleura con 5-10 mL de lidocaína 1%.
• Ponga una aguja 21 G a una jeringa e insértela justo por encima del borde superior
de la costilla, debajo de la marca para evitar el paquete vasculonervioso (fig. 18.6).
Aspire mientras va avanzando la aguja. Extraiga 10-30 mL de líquido pleural. Envíe
líquido al laboratorio para química (proteína, glucosa, pH, LDH); bacteriología
(microscopia y cultivo, tinción de auramina, cultivo de TB); citología, y, si indicado, ami-
lasa e inmunología (factor reumatoide, anticuerpos antinucleares, complemento).
䊳䊳 Si no puede obtener líquido con una aguja de 21 G, busque ayuda.
• Si cualquier causa de preocupación, pida una nueva RXT.
Pulmón
Pleura parietal Costilla
Pleura visceral
Paquete
vasculonervioso {
Músculos Externo
intercostales Interno
Seguro
Músculo Cavidad de
intercostal líquido pleural
íntimo
Costilla
Fig. 18.6. Estrategia segura para entrar en la pleura a través de la vía intercostal.
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CAP. 18_Oxford 07/05/18 16:04 Página 766
Procedimientos prácticos
toralis major, una línea a lo largo del
borde anterior del latissimus dorsi y una
línea superior al nivel horizontal de la
mamila. El ápex del triángulo es la axila. A
menudo los drenajes torácicos son inser-
tados directamente bajo control de
ultrasonidos, o con un punto premarca-
do; sin embargo, en una emergencia o
para aspiración, es importante conocer
los puntos de referencia del triángulo
seguro.
Complicaciones
• Daño a órganos torácicos o abdominales. • Drenaje linfático ∴ quilotórax. • Daño
al nervio torácico largo de Bell ∴ escápula alada. • Raramente, arritmia.
Tenga cuidado con:
• Flujo retrógrado hacia el tórax.
• Burbujeo persistente –puede haber una fuga continua desde el pulmón.
• Bloqueo del tubo por coágulos o acodaduras –no oscilación o burbujeo.
• Mala posición –compruebe la posición en RXT.
Aspiración de un neumotórax
Identifique el 2º espacio intercostal en la línea medioclavicular (o 4º-6º espacio inter-
costal en la línea medioaxilar) e infiltre con lidocaína 1% hasta la pleura que recubre
el neumotórax.
• Inserte una cánula 16 G en el interior del espacio pleural. Retire la aguja y conec-
te la cánula a una llave de 3 pasos y a una jeringa de 50 mL. Aspirar hasta 2,5 L de
aire (50 mL × 50). Pare si siente resistencia, o si el paciente tose excesivamente.
• Pida una RXT para confirmar la resolución del neumotórax. Si es exitoso, consi-
dere dar de alta al paciente y repetir la RXT tras 24 h para excluir recurrencia, y
de nuevo tras 7-10 d. Aconseje evitar viajes aéreos durante 6 semanas tras una
RXT normal. Bucear debería ser evitado permanentemente.
• Si la aspiración no es exitosa (en un neumotórax significativo, sintomático), inser-
te un drenaje intercostal (ver p. 766).
PL. La TC no es infalible, así que esté seguro de que su indicación para PL es fuerte.
Método. Explique al paciente lo que conlleva la obtención de muestra del LCR, por qué
es necesario realizarlo, que su cooperación es vital y que pueden comunicarse con usted
en todo momento.
• Coloque al paciente sobre su lado izquierdo, con la espalda en el borde de la cama,
completamente flexionado (rodillas en la barbilla). Una almohada bajo la cabeza y otra
entre las rodillas pueden mantenerlo más estable.
• Puntos de referencia: plano de las crestas ilíacas a través del nivel de L3/4 (ver fig. 18.8).
En los adultos, la médula espinal termina en el disco L1/2 (fig. 18.9). Marque el espa-
cio intervertebral L3/4 (o un espacio debajo, L4/5), p. ej., mediante una muesca suave
realizada con el capuchón de una aguja sobre la piel (mejor que la marca de un bolí-
grafo, que puede ser borrado por el líquido de esterilización).
• Utilice una técnica aséptica (gorro, máscara, guantes, bata) y clorhexidina 2% en alco-
hol 70% para limpiar la piel, deje que se seque y después coloque paños estériles.
• Abra la caja de material para la punción espinal. Coloque el manómetro y la llave de
3 pasos. Tenga disponibles tres tubos estériles normales y uno con fluoruro (para glucosa).
• Utilizando una aguja 25 G (naranja), haga una ampolla de anestésico local, después uti-
lice una aguja 21 G (verde) para infiltrar más profundamente.
• Espere 1 min, después inserte la aguja espinal (22 G, estilete en su interior) perpendi-
cular al cuerpo, a través de su marca, dirigiéndose ligeramente hacia arriba en direc-
ción al ombligo. Sienta la resistencia de los ligamentos espinales, y después la dura, des-
pués un pequeño desplazamiento de la aguja por su elasticidad en el momento en el
que entra en el espacio subaracnoideo. NB: mantenga el bisel de la aguja mirando hacia
arriba, paralelo a las fibras de la dura.
• Retire el estilete. Compruebe que el LCR llena la aguja y una el manómetro (la llave
de 3 pasos girada hacia usted) para medir la presión «de apertura».
• Recoja líquido en tres tubos numerados secuencialmente (10 gotas por tubo).
• Vuelva a insertar el estilete y después retire la aguja y ponga un apósito. Documente
el procedimiento claramente en las notas clínicas incluyendo el aspecto del LCR y la
presión «de apertura».
• Envíe LCR rápidamente a microscopia, cultivo, proteína, lactato y glucosa (haga glucosa
plasmática también –llame al laboratorio y coménteselo. Si es aplicable, remita también
para: citología, estudios de hongos, cultivo de TB, virología (± herpes y otros PCR),
serología de sífilis, bandas oligoclonales (+ muestra sérica para comparación) si se sos-
pecha esclerosis múltiple. ¿Hay xantocromía (p. 478)?
• Si falla; pida ayuda—trate con el paciente sentado o con guía radiológica.
Composición del LCR. Valores normales: Linfocitos < 5/mm3; no polimorfos; proteí-
na < 0,4/L; glucosa > 2,2 mmol/L (o 50% nivel plasma); presión < 200 mm LCF. En menin-
gitis: Ver p. 822. En esclerosis múltiple: Ver p. 496.
Punción hemática: Es un artefacto debido a atravesar un vaso sanguíneo, que es indicado
(de forma no fiable) por presentar cada vez menos hematíes en los tubos sucesivos, y
no color amarillento del LCR (xantocromía). Para estimar cuántos leucocitos (L) había
en el LCR antes de que se añadiera la sangre, utilice lo siguiente:
L = LCR Leucocitos – [(leucocitos sangre × hematíes LCR) ÷ hematíes sangre]
Si el recuento en la sangre es normal, la regla general es sustraer del total de leucocitos
del LCR (por μL) un leucocito por cada 1000 hematíes. Para estimar el nivel de proteína
real, sustraiga 10 mg/L por cada 1000/hematíes/mm3 (esté seguro de hacer el recuento y
la estimación de las proteínas en el mismo tubo). NB: niveles elevados de proteínas en
LCR hacen que aparezca amarillo. Hemorragia subaracnoidea: Xantocromía (sobrenadan-
te amarillo en LCR centrifugado). Hematíes en igual número en los tubos (no fiable). Los
hematíes desencadenarán una respuesta inflamatoria (p. ej., aumento de leucocitos de
LCR), más marcado tras 48 h. Proteínas elevadas: Meningitis; EM; síndrome de Guillain-
Barré. Proteínas del LCR muy elevadas: Bloqueo espinal; TB; meningitis bacteriana grave.
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CAP. 18_Oxford 07/05/18 16:04 Página 769
Complicaciones 769
• Cefalea tras punción de la dura. • Infección. • Sangrado. • Herniación cerebral (rara,
busque signos de ↑ PIC antes del procedimiento. • Síntomas neurológicos menores/tran-
sitorios, p. ej., parestesia, radiculopatía.
Cualquier cambio en la neurología del cuerpo inferior tras una PL (dolor, debilidad,
Procedimientos prácticos
cambios sensoriales, trastornos de vejiga/intestino) deberían ser tratados como
compresión (hematoma/absceso) de la cauda equina hasta que no se demuestre lo
contrario. Obtenga una RM urgente de la columna.
Tras PL, la RM cerebral con gadolinio con frecuencia muestra realce difuso de las menin-
ges. Se piensa que es un reflejo de un aumento del flujo sanguíneo secundario a hipo-
tensión intracraneal. Interprete estos estudios con cuidado y en el contexto de la situa-
ción clínica del paciente. Asegúrese de que el motivo para pedir la prueba y la explo-
ración neurológica actual son discutidos con el radiólogo antes del procedimiento.
Cefalea tras PL
Riesgo. 10-30%, típicamente ocurre en las primeras 24 h de PL, se resuelve en un
período de horas a 2 sem (media: 3-4 d). Los pacientes describen una cefalea cons-
tante, sorda, más frontal que occipital. El síntoma más característico es su exacerba-
ción posicional –peor con la bipedestación. Puede haber meningitis leve o náusea.
Se piensa que la patología es la pérdida continua de LCR por la zona de punción e
hipotensión intracraneal, aunque puede haber otros mecanismos implicados.
Prevención. Utilice la menor aguja espinal que es práctica (22 G) y mantenga el
bisel alineado como se ha descrito en p. 768. Las agujas romas (más caras) pueden
reducir el riesgo y son recomendadas (pregunte a un anestesista sobre cómo obte-
nerlas); sin embargo, la recogida del LCR dura demasiado tiempo (> 6 min) si se uti-
lizan agujas más pequeñas de 22 G. Antes de retirar la aguja, reinserte el estilete.
Tratamiento. A pesar de años de consejo anecdótico de lo contrario, ninguno de
los siguientes ha demostrado ser un factor de riesgo: posición durante o tras el pro-
cedimiento; estado de hidratación antes, durante o después; cantidad de LCR extraí-
do; actividad inmediata o reposo tras PL. El tiempo es un consistente sanador. Para
cefaleas graves o prolongadas, pregunte a un anestesista sobre un parche de sangre.
Se trata de la inyección cuidadosa de 20 mL de sangre venosa autóloga en el espacio
epidural adyacente (denominado «tapar el agujero»). Ocurre alivio inmediato en 95%.
770 Cardioversión/desfibrilación
䊳 No espere a una crisis antes de familiarizarse con el desfibrilador, dado que hay varios
tipos. Todos los hospitales deben incluir esta información en su iniciación, pero com-
pruebe cómo funciona la máquina de su planta.
Indicaciones. Para restaurar el ritmo sinusal si FV/TV; FA, flúter o taquicardias supra-
ventriculares si otros tratamientos (p. 126) han fallado, o hay compromiso hemodinámi-
co (p. 130 y p. 806). Esto puede ser realizado como una
Procedimientos prácticos
Procedimientos prácticos
ción diferente y que es por un
motivo diferente (p. 162 para
indicaciones y análisis). El sitio
habitual es la arteria radial en la
muñeca.
䊳 Compruebe con el paciente
que no tiene ninguna fístula arte-
riovenosa para hemodiálisis.
Nunca jamás tome una muestra
de una fístula.
Procedimiento: Fig. 18.12. Posición ideal de la muñeca, ligeramente
• Tenga el equipo preparado; hiperextendida y apoyada sobre una bolsa de 1 L de
incluye: cubo portátil para cualquier líquido sin abrir o sobre un rollo de venda-
material punzante; jeringa je. En un paciente inconsciente o para una inserción
preheparinizada; aguja (azul en la línea arterial, pegar el pulgar a la cama con espa-
tamaño (23 G) es buena, radrapo puede mantener la muñeca en la posición
aunque muchas jeringas vie- perfecta si no tiene un ayudante.
nen ahora con la aguja incorporada); guantes; gasas con clorhexidina 2%/alcohol
70%; gasa; esparadrapo.
• Palpe cuidadosamente buscando el mejor sitio. Mire en ambos lados.
• Frote con hisopo limpiador. Deje el área que se seque. Póngase confortable.
• Si el paciente está adormilado o inconsciente, pídale a un ayudante que sujete la
mano y el brazo con la muñeca ligeramente extendida (fig. 18.12).
• Antes de tomar la muestra, expulse cualquier exceso de heparina en la jeringa. La
infiltración sobre la arteria con una pequeña cantidad de lidocaína 1% (p. 573) uti-
lizando una aguja 25 G (naranja) hace el procedimiento indoloro.
• Sujete la jeringa como un lápiz, con la aguja con el bisel hacia arriba. Informe al
paciente de que usted va a tomar la muestra. Sienta el pulso con su otra mano y
entre a 45º, dirigiéndose hacia debajo del dedo con el que la está palpando.
• En la mayoría de las jeringas, el émbolo se desplazará hacia arriba solo de una forma
pulsátil si está en la arteria; rara vez puede suceder lo mismo al entrar en una vena
próxima a la arteria. El color
de la sangre es de poca utili- Nervio femoral
dad para saber el origen. Arteria femoral
• Permita que la jeringa se llene Vena femoral
con 1-2 mL, después retire la
Ligamento inguinal
aguja y aplique una presión
firme durante 5 minutos (10
si anticoagulado). Sartorio
• Expulse el aire de la jeringa Aductor largo
dado que este alterará la oxi-
genación de la sangre. Tape y Vena safena mayor
etiquete la muestra, comprue-
be la temperatura y el FiO2 Fig. 18.13. La arteria femoral es buena para la toma de
del paciente (0,21 en aire). muestras para la medida de gases arteriales.
Lleve la muestra a la máquina de análisis más próxima y envíela al laboratorio de forma
rápida (que pueden ser sus propios pies, haga que otra persona aplique presión), dado
que debe ser analizada en los 15 minutos siguientes a obtener la muestra.
• Las jeringas y las máquinas de análisis difieren, así que familiarícese con los deta-
lles locales.
El otro sitio que puede ser adecuado para muestra de GSA es la arteria femoral (fig.
18.13). Sorprendentemente, este puede ser menos molesto dado que es un área
menos sensible y porque, cuando se está en supino, el paciente no puede ver la aguja
y por tanto puede notar menos aprensión. La arteria braquial también puede ser
utilizada, pero sea consciente de que el nervio mediano está próximo en el radio
medial y de que es una arteria terminal. Valores normales: p. 753.
Procedimientos prácticos
Fig. 18.15. Pericardiocentesis de emergencia con aguja.
• Obtenga la ayuda de su adjunto (para el que esta página puede servir como un
refresco de la memoria).
• Equipo: jeringa 20 mL, cánula larga 18 G, llave de 3 pasos, monitor de ECG, pro-
ducto para limpiar la piel. Utilice guía de Eco si hay tiempo.
• Si el tiempo lo permite, utilice técnica completamente aséptica, como mínimo lim-
pie la piel con clorhexidina 2% en alcohol 70% y utilice guantes estériles, y, si está
consciente, utilice anestesia local y sedación, p. ej., con midazolan IV lento: titular
hasta 3,5-5 mg –comenzar con 2 mg administrados en 1 min, 0,5-1 mg en ancianos
(en los cuales la dosis máxima es 3,5 mg; inyecte a una velocidad de 2 mg/min)– antí-
doto: flumazenil 0,2 mg IV en 15 s, después 0,1 mg cada 60 s, hasta 1 mg en total.
䊳 Asegúrese de que tiene acceso IV y equipo de reanimación completo a mano.
• Introduzca la aguja a 45º con respecto a la piel justo debajo y a la izquierda del
apéndice xifoides del esternón, dirigiendo la punta hacia la escápula izquierda (fig.
18.15). Aspire continuamente y mire el ECG. Extrasistolia ventricular frecuente o
un patrón de lesión (↓ segmento ST) en el ECG indican que se ha contactado el
miocardio –retire ligeramente. Tan pronto como se obtenga líquido a través de la
aguja, deslice la cánula en su lugar.
• Evacue el contenido pericárdico a través de la jeringa y la vía de 3 pasos. La eva-
cuación de solo una pequeña cantidad de líquido (p. ej., 20 mL) puede producir una
mejoría clínica marcada. Si no está seguro de si el líquido que está aspirando es san-
gre pura (p. ej., por entrar en un ventrículo), mire si se coagula (el líquido pericár-
dico muy hemático no se coagula), o mida su hematocrito (aunque puede ser difí-
cil de obtener en la urgencia, algunos analizadores de gases pueden determinarlo).
• Puede dejar la cánula in situ temporalmente para aspiraciones repetidas. Si hay rea-
cumulación, inserte un drenaje, aunque puede ser necesaria una pericardiectomía.
• Envíe líquido para microscopia y cultivo, según sea necesario, incluyendo pruebas
para TB.
Complicaciones: Laceración de ventrículo o arteria coronaria (± hemopericardio sub-
siguiente); aspiración de sangre ventricular; arritmias (fibrilación ventricular); neumo-
tórax; punción de la aorta, esófago (± mediastinitis) o peritoneo (± peritonitis).
a O2 a O2
Agujero a O2 Agujero
mente útil echar un vistazo para comprobar el tamaño de los vasos, la posición en rela-
ción con la arteria y la permeabilidad (no trombo ni estenosis). Para las contraindicacio-
nes, ver tabla 18.2.
Tabla 18.2. Contraindicaciones para canulación venosa central
Absoluta Relativa
Infección en el sitio de inserción Coagulopatía
Endarterectomía carotídea ipsilateral
Electrodos de marcapasos recientemente insertados
Trombo en la vena
Estenosis venosa
Anatomía anormal ipsilateral
Lugares de inserción. Estos son: vena yugular interna (ver p. 775 y p. 43), vena sub-
clavia y vena femoral. La elección depende en gran medida de la experiencia del opera-
dor, pero las pruebas sugieren que la vía femoral está asociada con una mayor tasa de
infección y trombosis de la vía. Globalmente, la vía yugular interna (con orientación por
los ultrasonidos) es la utilizada con mayor frecuencia y conlleva menos complicaciones
que la subclavia. Si es posible, obtenga un consentimiento informado (p. 568). Com-
pruebe la coagulación y las plaquetas. Aquí se indica la técnica para la yugular interna
(rutina) y femoral (emergencia).
Complicaciones (~20%). La inserción no está exenta de riesgos, así que decida pri-
mero si el paciente necesita la vía, y después pida ayuda si usted no tiene experiencia.
䊳 Hemorragia; punción/canulación arterial; formación de fístula AV; embolismo arterial;
neumotórax; hemotórax; quilotórax (linfa); parálisis del nervio frénico (el nervio frénico
derecho pasa sobre la arteria braquiocefálica, posterior a la vena subclavia –el hipo
puede ser un signo de lesión); flebitis; formación de trombo en la punta o en la vena (si
riesgo alto de tromboembolismo, p. ej., malignidad, considerar anticoagulación, p. ej.,
HBPM); colonización bacteriana; celulitis; sepsis (si toma hemocultivos de un paciente
febril con una vía central recuerde tomar muestras desde la vía central y desde una vena
periférica).
Cánulas centrales insertadas periféricamente (vías CCIP). Son una buena
alternativa a las vías centrales, dado que pueden estar in situ hasta 6 meses, y ofrecen
acceso para muestras de sangre, líquidos, antibióticos (permitiendo terapia domiciliaria
IV). Se insertan utilizando una técnica de Seldinger, pinchando la vena braquial o basílica
y después pasando la vía hasta la vena subclavia o la vena cava superior. Debido a la zona
de inserción, hay un riesgo mucho menor de neumo o hemotórax, pero son delicadas
de insertar en una emergencia.
Retirada de vías centrales. Debería hacerse cuidadosamente con técnica aséptica.
Posicione al paciente ligeramente con la cabeza baja, retire los vendajes, limpie y coloque
paños en la zona, retire las suturas. Pida al paciente que inhale y mantenga la respiración,
después que 䊳 espire suavemente mientras usted retira la línea. Pida al paciente que
ensaye esta secuencia asegurándose de que ha entendido su papel. Aplique presión
durante 5 minutos (mayor si alteraciones de la coagulación).
Procedimientos prácticos
ce orientación de US si es posible, idealmente para insertar la vía bajo visión directa, pero
al menos para definir la anatomía. Si es posible, conecte al paciente a un monitor cardí-
aco en caso de arritmias.
• Posicione al paciente ligeramente con la cabeza baja para evitar embolismo aéreo y
llene las venas para mejorar sus posibilidades de éxito. 䊳 Esto puede comprometer la
función cardíaca y precipitar insuficiencia VI aguda, así que compruebe si su paciente
tiene una historia cardíaca. Minimice el tiempo que el paciente tiene que estar con la
cabeza baja; si es incapaz de tumbarse plano, considere una vía femoral. Gire su cabe-
za ligeramente hacia la izquierda.
• Esto debería ser un procedimiento estéril, así que utilice técnica aséptica completa
(gorro, mascarilla, guantes, bata) y limpie con clorhexidina 2% en alcohol isopropilo
70% antes de poner los paños. Asegúrese de que su equipo está preparado, lave las
luces del catéter con salino.
• Si los US no están disponibles, se puede utilizar el procedimiento estándar para identi-
ficar el punto de inserción—aproximadamente en la unión de las dos cabezas del
esternocleidomastoideo cerca del nivel del cartílago tiroideo (fig. 18.17). Palpe suave-
mente el pulso carotídeo, después infiltre con lidocaína al 1% justo lateral a esta zona.
La vena es habitualmente superficial (fig. 18.8).
• Inserte la aguja introductora con una jeringa de
5 mL acoplada, avance con suavidad con un ángu-
lo de 45º, dirigiéndola hacia la mamila ipsilateral y
aspirando continuamente. Si está utilizando US,
mire la punta de la aguja entrando en la vena, si
utiliza el procedimiento estándar, mantenga sus
dedos en el pulso carotídeo.
• Tan pronto como se aspira sangre, deje la sonda Fig. 18.17. Posición de las venas yu-
de US y mantenga la aguja introductora en posi- gular y subclavia internas (rojo) en com-
ción, retire la jeringa y pase la guía a través de la paración con la clavícula (amarillo).
aguja. Debería pasar fácilmente, si hay resistencia
inténtelo bajando el ángulo de la aguja y avanzan-
do suavemente la guía. Si la guía no pasa, no la reti-
re sola, la punta puede cortarse y embolizar; reti-
re la aguja con la guía, aplique presión e intente
una segunda punción.
• Si la guía pasa fácilmente, inserte hasta los 30 cm
(vea las marcas en la guía), retire la aguja mante-
niendo control de la guía en todo momento. Haga
una marca en la piel con un escalpelo en el punto
de inserción, y suavemente pase el dilatador sobre Fig. 18.18. Vasos vistos mediante
la guía. No necesita pasar el dilatador demasiado ecografía. La vena compresible está
lejos, solo tan lejos como esté la vena (con fre- por encima de la arteria.
cuencia notará una pérdida de resistencia cuando
el dilatador entra en la vena, así que insértelo con suavidad; puede producirse un neu-
motórax si se dilata con demasiado entusiasmo).
• Retire el dilatador, manteniendo control de la guía, pase el catéter lavado sobre la guía,
después retire la guía. La vía debería estar alrededor de 13 cm en el lado derecho
(14 cm en el izquierdo). Compruebe que puede aspirar sangre desde cada luz, des-
pués lávelos.
• Suture el catéter en el sitio (muchos tienen «alas» para la sutura) y cúbralos con ven-
das. Pida una RXT para confirmar la posición y excluir neumotórax. La punta del caté-
ter debería estar verticalmente en la VCS.
Vena femoral. En una situación de emergencia donde los ultrasonidos no son fácil-
mente accesibles, si el paciente no puede estar tumbado plano, o donde la velocidad es
esencial, la vía femoral es con frecuencia la más segura, dado que no hay riesgo de neu-
motórax o hemotórax y tiene un riesgo de arritmia muy reducido. La técnica es similar
a la yugular interna, excepto por el punto de inserción, que es justo medial a la arteria
femoral en el pliegue inguinal.
Vena subclavia. Debería ser enseñada por un experto y realizarse idealmente con
orientación de US. Algunos médicos prefieren esta vía, pero incluso en manos expertas
hay un riesgo de complicaciones comparado con las vías yugulares internas guiadas
por US.
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CAP. 18_Oxford 07/05/18 16:04 Página 776
Procedimientos prácticos
IVC RV
19 Emergencias
Presentaciones de emergencia
Cefalea 780
Disnea 782
Dolor torácico 784
Coma 786
La Escala de Coma de Glasgow
(GCS) 788
Shock 790
Sepsis 792
Shock anafiláctico 794
Emergencias cardiovasculares:
Síndrome coronario agudo –con
elevación del ST 796
Síndrome coronario agudo –sin
elevación del ST 798
Edema pulmonar grave 800
Shock cardiogénico 802
Taquicardia de complejo ancho 804
Taquicardia de complejo estrecho
806
Bradicardia 808
Emergencias respiratorias: Fig. 19.1. El Dr. Leander Starr James (1853-
Asma grave agudo 810 1917) fue un médico de la época victoriana
Exacerbación aguda del EPOC 812 poco conocido en la historia de nuestra pro-
Neumotórax 814 fesión y, sin embargo, inmortalizado por la idea-
Neumotórax a tensión 814 lización de su carácter en el poema «Si» de
Neumonía 816 Rudyard Kipling. Las palabras de Kipling contie-
Embolismo pulmonar (EP) 818 nen mucho de lo que podría guiar al doctor
Emergencias gastrointestinales: que se enfrenta con una emergencia inespera-
Hemorragia GI superior aguda 820 da. Más allá de la citada exhortación a «man-
Emergencias neurológicas: tener tu cabeza cuando a tu alrededor todos
pierden las suyas», Kipling también refrendó un
Meningitis 822 grado apropiado de autoconfianza («confía en
Encefalitis 824 ti mismo cuando todos los hombres dudan de ti,
Absceso cerebral 824 pero ten también sus dudas en cuenta»), alienta
Estatus epiléptico 826 el realismo («conoce el Triunfo y el Desastre y
Lesión craneoencefálica 828 trata a esos dos impostores de la misma mane-
Elevación de la presión intracraneal ra»), y una gran medida de coraje («fuerza a tu
(PIC) 830 cabeza, a tus nervios y a tus tendones a aguan-
Emergencias endocrinológicas: tar mucho después de que se hayan ido, y así
Cetoacidosis diabética (CTD) 832 resiste hasta que no haya en ti nada más que la
Otras emergencias diabéticas 834 voluntad para decirles: ¡Resistid!»). Pero ¿qué hay
Emergencias tiroideas 834 sobre el Dr. James? Como un interno en Lon-
Crisis addisoniana 836 dres, tuvo una crisis por exceso de trabajo y se
Coma hipopituitario 836 mudó para llevar lo que sería una clínica dis-
Emergencias del feocromocitoma tinguida en Suráfrica. Realizó una incursión en
el ejército que no terminó bien y dio con sus
837 huesos en la cárcel como consecuencia de una
Envenenamiento agudo 838-841 incursión fallida que fue tan extraña que pare-
Algunos venenos específicos y sus ce que él permitió ser el chivo expiatorio para
antídotos 842 otros de un nivel superior en el gobierno.
Intoxicación por paracetamol 844 Murió en noviembre de 1917, sobreviviendo a
Intoxicación por salicilato 844 John, el hijo de Kipling, que murió en las trin-
Quemaduras 846 cheras a la edad de 18 años, y al que «Si» iba
Hipotermia 848 dirigido: «tuya será la Tierra y todo lo que hay en
Catástrofes 850 ella, y –lo que es más importante– serás un
Hombre, hijo mío».
Agradecemos a los Drs. Andrew Johnston y Bernard Ho, nuestros especialistas consultores, por su con-
tribución.
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CAP. 19_Oxford 07/05/18 16:03 Página 779
Emergencias
do, recuerde que cuando perdemos un paciente, es la enfermedad la que lo ha matado,
no nosotros. Trate de tomarse unos pocos minutos y reflexione sobre lo que ha ocurri-
do; pregúntese si usted pudo haber hecho algo diferente. ¿Debería haber buscado ayuda
antes? Consultar con un adjunto puede ser de ayuda, como también puede serlo escri-
bir sus reflexiones, no en un portafolio para discutirlo en su evaluación sino en un for-
mato anónimo para su propia educación. Observe al equipo en una parada, los mejores
médicos son los que han aprendido a permanecer un paso detrás, evaluar la situación glo-
balmente y tomarse el tiempo suficiente como para ver dónde es necesaria la interven-
ción crítica. No hay sustituto para la experiencia, nadie llega a ser un consultor en una
noche, pero observe cómo trabajan los mejores médicos y aprenderá tanto habilidades
prácticas como de actitud ante la vida.
Lo más importante en una situación de emergencia es la comunicación. En donde pueda,
comente con los familiares y con todo el equipo, pero recuerde que en el centro del pro-
blema está el paciente. ¿Qué quieren? Nunca tenga miedo de preguntarle al paciente
directamente, pues puede tener posiciones muy claras. Sin embargo, nos corresponde a
nosotros como médicos ser honestos con ellos con respecto al pronóstico –no ofrezca
tratamiento que usted sabe que no es lo mejor para el paciente, y esto incluye la reani-
mación. Cuando se enfrentan a la muerte, muchos pacientes tienen miedo –nuestro
papel es tratar de disipar ese miedo, bien interviniendo para retrasar la muerte, o bien
facilitando su llegada. Pero no podemos nunca prevenir la muerte, nosotros simplemen-
te la retrasamos. Como Shakesperare dice en Julio César:
«De todas las maravillas que he escuchado, me parece la más extraña que los hombres
deban temer, viendo que la muerte, un fin necesario, vendrá cuando venga».
781
Emergencias
783
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785
Emergencias
786 Coma
Definición. Falta de respuesta no despertable. Cuantifique utilizando la Escala de coma de
Glasgow (GCS).
Causas de disminución del nivel de conciencia/coma
Metabólicas:
• Fármacos, venenos, p. ej., monóxido de carbono, alcohol, tricíclicos.
• Hipoglucemia, hiperglucemia (cetoacidosis, o síndrome diabético hiperosmolar hiperglucé-
mico, p. 832-4).
• Hipoxia, narcosis por CO2 (EPOC).
• Septicemia (p. 792).
• Hipotermia.
• Mixedema (p. 834), crisis Addisoniana (p. 836).
• Encefalopatía hepática/urémica (p. 275, 298).
Neurológicas:
Emergencias
• Trauma.
• Infección: meningitis (p. 822), encefalitis (p. ej., herpes simple –p. 404; dar aciclovir IV si la
menor sospecha), tropical: malaria (p. 416; haga frotis); fiebre tifoidea, ridus, rabia, tripanoso-
miasis.
• Tumor: 1º o 2º (p. 528).
• Vascular: ictus (p. 470), subdural (p. 482), subaracnoidea (p. 478), encefalopatía hipertensiva
(p. 140).
• Epilepsia: estatus no convulsivo (p. 484) o estado postictus.
Tratamiento inmediato. Ver fig. 19.2 (y exploración del SNC en coma, p. 789).
• Evaluar Vía Aérea, Respiración (Breathing) y Circulación. Considerar intubación si GCS < 8
(p. 788). Apoye la circulación si es necesario (es decir, líquidos IV). Dé O2 y trate cualquier
convulsión. Proteja la columna cervical a no ser que se sepa que la causa no ha sido un trau-
matismo.
• Controle la glucosa plasmática; de p. ej., 200 mL IV de glucosa 10% administrados inmedia-
tamente si la hipoglucemia es posible.
• Tiamina IV si cualquier dato de encefalopatía de Wernicke; ver más tarde en este tema.
• Naloxona IV (0,4-2 mg IV) para la intoxicación por opiáceos (puede ser administrado tam-
bién por vía IV o a través del tubo endotraqueal); flumazenil IV (p. 842) para la intoxicación
por benzodiacepina solo si la vía aérea está comprometida en riesgo de convulsiones, espe-
cialmente si intoxicación concomitante por tricíclicos.
Exploración. 䊳 Los signos vitales son vitales –obténgalos todos, incluyendo la temperatura.
• Signos de traumatismo –hematoma, laceración, cardenales, sangre/LCR en nariz u oídos,
deformidad del cráneo por fractura, enfisema subcitáneo, «ojos de panda».
• Piel buscando marcas de aguja, cianosis, palidez, erupción (meningitis; tifus), escasa turgencia
de la piel.
• Huela el aliento (alcohol, fetor hepático, cetosis, uremia).
• Opistótonos (fig. 9.45), p. 436) meningitis o tétanos. ¿Descerebrado/decorticado (p. 788)?
• Meningismo (p. 456, 822) 䊳 pero no mueva el cuello a no ser que se haya descartado lesión
de la columna cervical.
• Pupilas (p. 789) tamaño, reactividad, mirada.
• Corazón/pulmón explore la PA, soplos, roces, sibilancias, consolidaciones, colapso.
• Abdomen/rectal explore organomegalia, ascitis, moretones, peritonismo, melena.
• ¿Hay algún foco de infección (abscesos, mordeduras, infección del oído medio)?
• Cualquier signo de meningitis: ¿rigidez del cuello, erupción, focalidad neurológica?
• Fíjese en la ausencia de signos, p. ej., ausencia de miosis pupilar en un heroinómano conocido.
Historia rápida. De la familia, personal de la ambulancia, testigos: ¿inicio brusco o gradual?
¿Cómo fue hallado –nota de suicidio, convulsión? Si traumatismo, sospeche lesión de la colum-
na cervical y no mueva la columna (OHCS p. 782). Quejas recientes –¿cefalea, fiebre, vértigo,
depresión? Historia médica reciente ¿sinusitis, otitis, neurocirugía, procedimiento ORL? Ante-
cedentes médicos –¿diabetes, asma, ↑PA, cáncer, epilepsia, enfermedad psiquiátrica? Exposición
a drogas o toxinas (especialmente a alcohol y otras drogas psicoactivas)
Si el diagnóstico no está claro:
• Trate lo tratable: O2; naloxona como indicado previamente; glucosa (p. ej., 200 mL de 10%
IV); Pabrinex® (vitamina B) para encefalopatía de Wernicke, p. 714; tratamientos antibióti-
cos específicos; cefotaxima 2 g/12 h IV (meningitis, p. 822), arteméter/quinina (malaria,
p. 418), aciclovir (encefalitis, p. 824).
• Realice la analítica de rutina: bioquímica, hematología, frotis, cultivos sanguíneos, etanol en
sangre, drogas, etc.
• Realice TC de cabeza urgente, si normal, y no CI, realice punción lumbar.
El diagnóstico debería estar ahora claro, p. ej., hipo/hiperglucemia; exceso de alcohol; envene-
namiento; uremia; neumonía; hemorragia subaracnoidea; encefalopatía hepática/hipertensiva.
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Vía IV
Emergencias
Glucosa plasmática (punción y laboratorio)
Controle convulsiones
Trate causas potenciales, p. ej., glucosa IV, tiamina, naloxona (si pupilas pequeñas
y posible uso de narcóticos). Otros antídotos: ver p. 842.
Exploraciones
• Gases arteriales, sistemático de sangre, urea y electrolitos, PCR, etanol, cribado
de tóxicos, niveles de drogas
• Cultivos de sangre, orina, considerar malaria
• RX tórax, TC cabeza
Se obtiene una puntuación global sumando las puntuaciones de las tres áreas evaluadas.
• No respuesta al dolor + no verbalización + no apertura de ojos = 3.
• Lesión severa, GCS ≤ 8 –considerar protección de la vía aérea.
• Lesión moderada, GCS 9-12.
• Lesión menor, GCS 13-15.
Producir dolor no es una cosa agradable; hay métodos aceptables y no aceptables. Trate
la presión del lecho ungueal con un bolígrafo/lápiz, presión esternal (no frotar) o un
pellizco supraesternal. La respuesta anormal al dolor puede ayudar a localizar el daño:
• Flexión: Postura decorticada (brazos doblados hacia adentro en el tórax, pulgares meti-
dos como en un puño cerrado, piernas extendidas) implica daño por encima del nivel
del núcleo rojo en el tronco encefálico1.
• Extensión: Postura descerebrada (aducción y rotación interna del hombro, pronación
del antebrazo) indica daño del mesencéfalo debajo del nivel del núcleo rojo.
NB: Una escala de coma abreviada, AVPU, es utilizada a veces en la evaluación inicial
(«evaluación primaria») del paciente enfermo crítico:
A = alerta.
V = responde a estímulos vocales.
P = responde al dolor (pain).
U = sin respuesta (unresponsive).
NB: la puntuación GCS es diferente en niños pequeños; ver OHCS p. 201.
1 Las fibras eferentes del núcleo rojo refuerzan la flexión antigravitacional del miembro superior. Cuan-
do están dañadas, los tractos reticuloespinal y vestibuloespinal quedan sin regulación y refuerzan el
tono extensor de los miembros superior e inferior.
La Escala de Coma de Glasgow es reproducida de The Lancet, Vol. 304, Teasdale G y Jennet B, Assess-
ment of Coma and Impaired Consciousness: A Practical Scale, ©1974, con permiso de Elsevier.
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Emergencias
• Nivel de conciencia; descríbalo utilizando palabras objetivas/AVPU.
• Patrón respiratorio (p. 53) –Cheyne-Stokes (lesiones del tronco cerebral o com-
presión), hiperventilación (acidosis, hipoxia, o raramente, neurogénico), respiración
atáxica o apnéustica (respiración contenida)(lesión del tronco encefálico con pro-
nóstico grave).
• Ojos –casi todos los pacientes con patología del SARA tendrán hallazgos oculares:
1. Campos visuales: –en coma ligero, compruebe los campos con amenazas viaua-
les. No parpadeo en un campo sugiere hemianopsia y lesión del hemisferio
contralateral.
2. Pupilas –presencia de reflejos directos y consensuales = integridad del mesencé-
falo. Posición media (3-5 mm) no reactiva ± irregular = lesión del mesencéfalo.
Dilatación y no reactividad (fija) unilateral = compresión del 3er par. Pequeña,
reactiva = lesión en protuberancia o puente («pupilas mióticas pontinas») o
drogas. Síndrome de Horner (p. 702, fig. 15.4) = lesión del hipotálamo o bulbo
lateral ipsolateral, puede preceder a la herniación uncal. Sea consciente de los
ojos falsos y de los que utilizan colirios para el glaucoma.
3. Movimientos extraoculares (MEO) –observe la posición de reposo y el movi-
miento espontáneo; después pruebe el reflejo vestíbular ocular (RVO) bien
con la maniobra de los ojos de muñeca (normal cuando los ojos permanecen
fijos mirando al mismo punto en el espacio cuando la cabeza es movida rápi-
damente lateral o verticalmente) o bien con agua fría (normal si los ojos des-
vían hacia el oído frío con nistagmo hacia el otro lado). Si presente, el RVO
exonera a la mayor parte del tronco encefálico desde el núcleo del VII par
(protuberancia) al del III par (mesencéfalo). No mueva la cabeza a no ser que
se haya descartado lesión en la columna cervical.
4. Fondo de ojo –papiledema, hemorragia subaracnoidea, retinopatía hipertensiva,
signos de otra enfermedad (p. ej., retinopatía diabética).
• Examine para descartar asimetría del SNC (tono, movimientos espontáneos, refle-
jos). Una forma de evaluar la presencia de hemiplejia en un paciente en coma es
levantar ambos brazos juntos y comparar cómo caen con el efecto de la grave-
dad. Si uno de ellos desciende con más rapidez, como si tuviera un peso de
plomo, pero el otro lo hace con más gracilidad, ha encontrado un valioso signo
focal de disfunción cortical. Lo mismo se aplica para las piernas.
Reproducido de «Assessment of coma and impaired consciousness: a practical scale»,
Graham Teasdale y Bryan Jennett, The Lancet, Vol. 304, No. 7872, 81-84 (1974), Elsevier.
790 䊳䊳 Shock
Fallo circulatorio que resulta de perfusión inadecuada de los órganos. Se define con fre-
cuencia como ↓PA –sistólica <90 mmHg– o presión arterial media (PAM) <65 mmHg
con evidencia de hipoperfusión tisular, p. ej., piel moteada, flujo urinario (FO) de <0,5
mL/kg/h, lactato sérico > 2 mmol/L. Signos: ↓GCS/agitación, palidez, frialdad de zonas
acras, taquicardia, relleno capilar lento, taquipnea, oliguria.
PAM = gasto cardíaco (GC) × resistencia vascular sistémica (RVS).
GC: volumen latido ↓ frecuencia cardíaca.
䊳 ∴ el shock puede resultar de un GC inadecuado, de una pérdida de RVS, o de ambos.
Gasto cardíaco inadecuado
• Hipovolemia:
• Sangrado: trauma, aneurisma aórtico roto, hemorragia GI.
• Pérdida de líquidos: vómito, quemaduras, pérdidas de «tercer espacio», p. ej., pan-
Emergencias
Emergencias
Función cerebral Normal/ansioso Ansioso/hostil Ansioso/ Confuso/
confundido no respondedor
Tabla reproducida de las guías ATLS, con permiso del American College of Surgeons.
792 Sepsis
La sepsis es un asesino muy importante. Hay > 120.000 casos de sepsis en Inglaterra
cada año, resultando en > 36.000 muertes y mucha morbilidad.
Sepsis. Disfunción orgánica que amenaza la vida como consecuencia de una respuesta
desordenada del huésped a la infección.
Shock séptico. Sepsis en combinación con:
• BIEN Lactato > mmol/L a pesar de una reanimación adecuada con fluidos
• O el paciente requiere vasopresores para mantener una PAM ≥ 65 mmHg.
▲! Reconocimiento de la sepsis
Muchas muertes relacionadas con la sepsis podrían ser prevenidas con un trata-
miento precoz. Con frecuencia, el fallo esencial en el tratamiento de la sepsis es no
reconocerla a tiempo. Sistemas de puntuación que avisen rápido (p. 892) ayudan a
Emergencias
Emergencias
Obtenga información
Historia: Historia médica completa: clarifique cuidadosamente el curso temporal de los
síntomas y cualquier historia de viajes.
Exploraciones:
• General: tiempo de relleno capilar, piel con manchas/lívida, nivel de conciencia.
• Localizar la fuente de infección: no olvide evaluar heridas/úlcera que pueden estar
ocultas por vendajes.
Pruebas a la cabecera del paciente: Gases arteriales por lactato, las observaciones
incluyen FC, PA, FR, saturaciones, temperatura; tira de orina y diuresis.
Pruebas
Análisis de sangre: GAB seriados, o GVB para lactato; hemocultivos; U y E,
PCR, sistemático de sangre, PFH, estudios de coagulación.
Micromuestras: Esputo y orina para MC y S; tome muestras de cualquier
herida; considere punción lumbar; envíe líquido de drenajes y vías IV;
aspirados de articulaciones; líquido ascítico.
Técnicas de imagen: RXT, considerar TC/US/RM/eco del origen sospechoso.
Tratamiento
Antibióticos ± otros antimicrobianos
Líquidos
Oxígeno
Contacte con otros equipos
• Cuidados críticos, cirujanos, especialidades
médicas
Trate complicaciones agudas
Revise
Alerte inmediatamente a un adjunto si, tras 1 h de antibióticos y líquidos:
• PAS <90 • FR>30 • GCS reducido
• Aumento de lactato no reducido por >20%
䊳䊳 Considerar referir a cuidados críticos
Emergencias
Administre adrenalina IM 0,5 mg (es decir, 0,5 mL de 1:1000)
Repita cada 5 min, si necesario según la PA, pulso y función
respiratoria hasta que mejore
Asegure acceso IV
Clorfenamina 10 mg IV
e hidrocortisona 200 mg IV
Tratamiento adicional:
• Ingrese en la planta. Monitorizar ECG
• Mida la triptasa sérica cada 1-6 h tras la sospecha de anafilaxia
• Continúe clorfenamina 4 mg/6 h VO si prurito.
• Enseñe cómo autoinyectarse adrenalina (p. ej., 0,3 mg, Epipen®) para
prevenir un ataque fatal
• Las pruebas cutáneas de alergia que muestran IgE específicas ayudan a
identificar los alérgenos a evitar
Acceso IV
Sangre para sistemático de sangre, U y E, lípidos, troponina (p. 119, fig. 3.22)
Evaluación breve:
• Historia de enfermedad cardiovascular; factores de riesgo para CI
Emergencias
• Exploración; pulso, PA (ambos brazos), PVY, soplos, signos de ICC, pulsos de los
miembros superiores, cicatrices de cirugías cardíacas previas, R/ : si no retrasará
• ¿Contraindicaciones para ICP o fibrinólisis?
Aspirina: 300 mg (a no ser que haya sido dado ya por médico de atención primaria/paramédicos)
Ticagrelor: 180 mg (o antiplaquetario alternativo) –ver «Aspirina» en el texto
Sí No
quémica y antiplaquetaria.
Terapia antiplaquetaria oral: Aspirina 300 mg VO, seguido de 75 mg OD. Para los que ten-
gan un SCA confirmado dé un segundo agente antiplaquetario, p. ej., clopidogrel (300 mg
VO, después 75 mg OD VO). Ticagrelor (180 mg, después 90 mg/12 h VO) es una alter-
nativa preferida, particularmente en los grupos de riesgo más algo5 (p. ej., • ≥ 60 años de
edad • ictus, AIT, IM o CDAC • estenosis coronaria ≥ 50% en ≥ 2 vasos o estenosis caro-
tídea ≥ 50% conocidas • DM • enfermedad arterial periférica • enfermedad renal cróni-
ca). Prasugrel (60 mg, después 10 mg/d VO) es una alternativa a clopidogrel en los que
van a ser sometidos a ICP. En la práctica, si la historia es típica pero los cambios del ECG
no son diagnósticos y se están esperando los resultados de la troponina, con frecuencia
se inicia tratamiento con clopidogrel en base a la sospecha clínica; si la prueba de la tro-
ponina confirma posteriormente el SCA, todavía es apropiado dar bien ticagrelor o pra-
sugrel para los pacientes en los que esté indicado, incluso si ya se había dado clopidogrel.
Anticoagulación: Idealmente fondaparinux (inhibidor del factor Xa) 2,5 mg OD; si no está
disponible, utilice heparina de bajo peso molecular (HBPM, p. ej., enoxaparina 1 mg/kg/12 h)
o heparina no fraccionada (objetivo APTT 50-70s) hasta el alta.
β-bloqueantes: En pacientes de mayor riesgo sin contraindicaciones (considerar diltiazem
como alternativa). 䊳No utilice β-bloqueantes con verapamilo –pueden precipitar asistolia.
Nitratos (VO o IV): Para dolor torácico actual.
i-ECA: Debería darse a todos los pacientes a no ser que haya CI (monitorice la función
renal).
Tratamiento de los lípidos: Comenzar pronto, p. ej., atorvastatina 80 mg OD (ver p. 120).
Pronóstico. Riesgo global de muerte ~1-2%, pero ~15% para angina refractaria a
pesar de terapia médica. La estratificación del riesgo puede predecir los que tiene mayor
riesgo y permitir que el intervencionismo se realice en ellos: calcular utilizando el siste-
ma de puntuación GRACE2. Los siguientes están asociados con un riesgo aumentado:
• Historia de angina inestable.
• Depresión del ST o inversión extensa de la onda T.
• Troponina elevada (excepto en paciente con IM con elevación del ST).
• Edad > 70 años.
• Comorbilidades generales, IM previo, función del VI deprimida o DM.
䊳 Los pacientes de alto riesgo deberían ser considerados para ingreso y realización de
coronariografía. Las lesiones sintomáticas pueden ser abordadas con endoprótesis coro-
nario o CDAC (ver p. 123).
Medidas adicionales
• Retire progresivamente la infusión de trinitrato de glicerina (NTG) cuando esté estabi-
lizado con fármacos orales.
• Continúe fondaparinux (o HBPM o heparina) hasta el alta.
• Observe en monitor cardíaco o telemetría en caso de arritmias. Controles ECG seria-
dos y troponina > 12 h tras el dolor.
• Aborde los factores de riesgo modificables: tabaco, hipertensión, hiperlipidemia, diabetes.
• Movilización suave.
• Asegúrese de que el paciente está con doble terapia antiagregante, β-bloqueante, inhi-
bidor de la ECA y estatina.
䊳 Si recurren los síntomas, refiera al cardiólogo para coronariografía urgente e ICP o CDAC.
2 GRACE = Global Registry of Acute Coronary Events. Sistema de puntuación basado en edad, fre-
cuencia cardíaca, PA, función renal, clase Killip de insuficiencia cardíaca y otros factores, p. ej., elevación
de troponina. Muy complicada de calcular, así que la recomendación de la Sociedad Europea de Car-
diología es utilizar una calculadora online, p. ej., http://outcomes-umassmed.org/grace/.
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CAP. 19_Oxford 07/05/18 16:03 Página 799
Emergencias
Aspirina: 300 mg VO
Considerar la necesidad de un segundo agente antiplaquetario (ver «terapia antiplaquetaria oral» en el texto)
Estrategia invasiva (ptes. de alto riesgo): Terapia conservadora (ptes. bajo riesgo):
• Aumento de troponina O: • No dolor torácico recurrente
• Cambios dinámicos del ST o de la onda T • No signos de insuficiencia cardíaca
• Criterios secundarios-diabetes, ERC, • ECG normal
FEVI <40%, angina postinfarto precoz, IcP • Troponina negativa basal (± repetición)
reciente, CDAC previa, score GRACE de Puede ser dado de alta (comprobar interva-
riesgo intermedia a alto los requeridos para control de troponina con
su laboratorio y vuelva a hacer la prueba tras
retraso si es necesario). Organice estudio
ambulatorio adicional, p. ej., prueba de estrés
Emergencias
Exploraciones mientras se continúa el tratamiento
Ver p. 800
Si la PA sistólica < 100 mmHg, trate como shock cardiogénico (p. 802) y refiera a UCI
* Evite oxígeno suplementario si no hipoxémico, puesto que puede producir vasoconstricción y redu-
cir el gasto cardíaco. Si EPOC conocida, la hipoxemia aún necesita corrección; administre oxígeno de
alto flujo pero monitorice estrechamente la posibilidad de retención de CO2 (controlen los GAB de
forma seriada si necesario) y reduzca el flujo tan pronto como sea posible.
3 P. ej., gasto cardíaco por contorno del pulso (PICCO) o gasto cardíaco por dilución de litio (LIDCO).
Ambos utilizan inyección (PICCO= agua fría, LIDCO= litio) para estimar la presión de llenado, agua
extravascular (p. ej., edema pulmonar) y gasto cardíaco. El tiempo desde la inyección vía una vena cen-
tral hasta la detección vía una línea arterial, más la dilución, da una estimación del gasto cardíaco y del
estado de volumen y puede guiar la terapia con fluidos e inotropos.
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CAP. 19_Oxford 07/05/18 16:03 Página 803
Oxígeno
Titular para mantener una saturación arterial de 94-98%
(88-92% si EPOC)
Emergencias
Pruebas y monitorización estrecha
(ver p. 802)
¿Signos adversos?
• Shock (PA < 90 mmHg, puso > 100)
• Dolor torácico
Emergencias
No • Insuficiencia cardíaca
• Síncope Sí
Sedación
Evalúe ritmo
Si regular: Hasta 3 choques sincronizados:
Si TV o ritmo incierto, administre amiodarona 䊳 120-150 J el primero, después
300 mg IV durante ≥ 20 min. Después, 900 mg 䊳 150-360 J posteriormente
durante 24 h, todo en vía central
Si historia conocida de TSV y bloqueo de rama,
trate como taquicardia de complejo estrecho
con p. ej., adenosina (p. 806) Compruebe y corrija K+, M2+ y Ca2+
Si irregular:
• Busque ayuda experta; el diagnóstico es
habitualmente uno de: Amiodarona 300 mg IV durante ≥ 20 min;
• FA (p. 130) con bloqueo de rama considere repetir el choque; después
• FA preexcitada: considerar amiodarona 900 mg/24 en infusión IV por vía central
• TV polimórfica, p. ej., torsade de pointes; ver
arriba; administre Mg2+ 2 g en infusión IV
Cardioversiones adicionales si son necesarias
Compruebe que las energías dadas por su desfibrilador son de un desfibrilador bifásico típico; si se utiliza
un choque monofásico pueden ser necesarias energías mayores.
Fig. 19.9. Tratamiento de la taquicardia de QRS ancho.
los QRS.
• Taquicardia auricular multifocal: ≥ 3 morfologías de onda P, complejos QRS irregulares.
• Taquicardias de la unión AV: El nódulo AV es parte del camino. La onda P va enterrada
en el complejo QRS o aparece detrás de los mismos.
• Taquicardia de reentrada en nodo AV.
• Taquicardia de reentrada AV, incluye una vía accesoria, p. ej., WPW (p. 133).
Tratamiento. 䊳 Guíese por el estado del paciente6, ver fig. 19.106.
䊳䊳 Si el paciente está comprometido, utilice cardioversión DC.
• Por otra parte, identifique el ritmo subyacente y trate en consonancia. Lo más impor-
tante es decidir si el ritmo es regular o no (irregular es más probablemente FA).
• Maniobras vagales (masaje del seno carotídeo, maniobra de Valsalva) aumenta transi-
toriamente el bloqueo AV y puede desenmascarar un ritmo auricular subyacente.
• Si no tiene éxito, administre adenosina, que produce un bloqueo AV transitorio. Tiene
una vida media corta (10-15 s) y produce su efecto mediante: 1. enlenteciendo tran-
sitoriamente los ventrículos para mostrar el ritmo auricular; 2. cardiovertiendo una
taquicardia de la unión a ritmo sinusal.
Adenosina: Consulte BNF si está en tratamiento con dipiridamol o tiene un trasplante
cardíaco. Administre un bolo IV de 6 mg en una vena grande, seguido de un bolo de sali-
no de 0,9%, mientras registra una tira de ritmo. Si no tiene éxito, tras 2 min administre
12 mg, después otro bolo adicional de 12 mg. Advierta sobre los ES: sensación transito-
ria de molestia torácica, disnea, cefalea, enrojecimiento. CI relativas: Asma, bloqueo AV de
2º-3º o enfermedad sinoatrial (a no ser que exista marcapasos). Interacciones: Potencia-
do por dipiridamol; antagonizado por teofilina.
Específicas. Taquicardia sinusal: Identificar y tratar causa subyacente.
Taquicardia supraventricular: Si falla la adenosina, utilice verapamilo 2,5-5 mg IV durante
2 min. NB: NO en tratamiento con β-bloqueantes. Si no respuesta, unos 5 mg adiciona-
les administrados durante 3 min (si edad < 60 años). Alternativas: atenolol 2,5 mg IV
repetido a intervalos de 5 min hasta que se administren 10 mg; o amiodarona. Si no tiene
éxito, utilice cardioversión DC.
Fibrilación/flúter auricular: Trate con control de frecuencia; busque ayuda si resistente (p. 130).
Taquicardia auricular: Raro; puede ser debida a intoxicación por digoxina: suspenda digoxina,
considere fragmentos de anticuerpo específicos de digoxina. Mantenga K+ a 4-5 mmol/L.
Taquicardia auricular multifocal: Ocurre con mayor frecuencia en EPOC. Corrija la hipo-
xia y la hipercapnia. Considere verapamilo si la frecuencia se mantiene > 110 lpm.
Taquicardia de la unión: Cuando ocurre conducción anterógrada a través del nódulo AV,
merece la pena probar las maniobras vagales. La adenosina habitualmente cardiovertirá
el ritmo de la unión a ritmo sinusal. Si falla o recurre, β-bloqueantes (o verapamilo –no
con β-bloqueantes, digoxina, o agentes de clase I como la quinidina). Si esto no contro-
la los síntomas, considere la ablación por radiofrecuencia.
䊳 Busque consejo especializado si taquicardia de la unión resistente, o vía accesoria.
Síndrome de Wolff-Parkinson-White (WPW) (ECG p. 133, fig. 3.37). Producido
por vías de conducción accesorias congénitas entre las aurículas y los ventrículos. El ECG
de reposo muestra intervalo PR corto y ensanchamiento del complejo QRS debido a
un empastamiento en el ascenso u «onda delta». Dos tipos: WPW tipo A (onda δ posi-
tiva en V1), WPW tipo B (onda d negativa en V1). Se presenta con TSV que puede deber-
se a una TRAV (p. 126), FA preexcitada, flúter auricular preexcitado. Riesgo de degene-
rar en FV y muerte súbita. R/ : Flecainida, propafenona, sotalol o amiodarona. Referir al
cardiólogo para estudio electrofisiológico y ablación de la vía accesoria.
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CAP. 19_Oxford 07/05/18 16:04 Página 807
¿Signos adversos?
• Shock
• Dolor torácico/isquemia en ECG
No • Insuficiencia cardíaca Sí
• Síncope
Emergencias
¿Es el ritmo regular? Obtenga ayuda experta
Probable FA Sedación
Véase el CUADRO
*Compruebe que las energías administradas por su desfibrilador son las típicas de un desfibrilador
bifásico (preferido); si se utiliza un choque monofásico, serán necesarias energías mayores.
Fig. 19.10. Tratamiento de taquicardia de complejo estrecho (taquicardia supraventricular).
▲! Taquicardia de complejo estrecho irregular
• Trate como una FA –con mucho, el diagnóstico más frecuente.
• Control de la frecuencia con:
• β-bloqueante: p. ej., metoprolol 1-10 mg IV, administre pequeños incrementos para enlen-
tecer la frecuencia.
• Bloqueantes de los canales del Ca2+ que controlan la frecuencia, p. ej., verapamilo
5-10 mg
• La digoxina es una alternativa en la insuficiencia cardíaca (carga con p. ej., 500 mcg VO des-
pués 500 mcg VO tras 8 h y otros 250 mcg VO tras 8 h).
• Amiodarona (puede también controlar el ritmo –vea el último punto de este recuadro).
• Considerar anticoagulación con warfarina o ACOD para ↓ riesgo de ictus.
• Si el inicio es claramente <48 h, o si efectivamente anticoagulado durante > 3 sem, conside-
re la cardioversión con DC sincronizado bajo sedación (ver p. 770). La cardioversión quími-
ca puede obtenerse con flecainida 300 mg VO (solo si se ha descartado cardiopatía estruc-
tural de forma fiable) o amiodarona, infusión 300 mg IV durante 20-30 min, después 900 mg
durante 24 h.
808 Bradicardia
La bradicardia es definida como una frecuencia cardíaca de < 60 lpm. Puede ser normal
y asintomática en individuos jóvenes muy entrenados, cuyo elevado volumen latido man-
tiene un gasto cardíaco adecuado a bajas frecuencias cardíacas.
Síntomas. Con frecuencia asintomática. Fatiga, náuseas, mareo. La presencia de sínco-
pe, dolor torácico o dificultad para respirar es preocupante y sugiere la presencia de sig-
nos adversos; puede ocurrir muerte súbita.
Ritmo. El tratamiento inmediato tiende a relacionarse más con la causa y los signos
adversos que con el ritmo subyacente, que puede ser • bradicardia sinusal • bloqueo car-
díaco (ver p. 98) • FA con respuesta ventricular lenta • flúter auricular con alto grado de
bloqueo • bradicardia de la unión.
Causas
• Fisiológica: Frecuencias cardíacas tan bajas como 40 lpm en reposo y 30 lpm durante
Emergencias
¿Signos adversos?
• Shock
Sí • Síncope
• Insuficiencia cardíaca No
Emergencias
• Isquemia miocárdica
Medidas provisionales:
• Repetir atropina 500 mcg IV cada 3-5 min
(máx 3 mg)
• Marcapasos transcutáneo –p. 777
• Infusión IV de isoproterenol 5 mcg/min
• Alternativas: aminofilina, dopamina, glucagón Continuar observación
(si bradicardia producida por β-bloqueantes
o bloqueantes de los canales del calcio)
Ataque grave:
• Incapaz de completar sentencias en una respiración.
• Frecuencia respiratoria ≥ 25/min.
• Frecuencia cardíaca ≥ 110 latidos/min.
• FEP 33-50% del predicho o del mejor.
Ataque que amenaza la vida:
• FEP < 33% del predicho o del mejor.
• Tórax silencioso, cianosis, esfuerzo respiratorio muy débil.
• Arritmia o hipotensión.
• Agotamiento, confusión o coma.
• Gases en sangre arterial:
• PaCO2 > 4,6 kPa normal/alto.
• PaO2 < 8 kPa o SaO2 < 92%.
Tratamiento. 䊳 El tratamiento rápido y la reevaluación son clave7, ver fig. 19.12.
• Salbutamol 5 mg nebulizado con oxígeno y dar 30 mg de prednisolona VO.
• Si FEP persiste < 75%, repita salbutamol; añada ipratropio.
• Monitorice la saturación de oxígeno, frecuencia cardíaca y frecuencia respiratoria.
• Ingrese a todos los que tengan datos de gravedad que no respondan al tratamiento
inicial o con datos que amenacen la vida.
NB: no se recomienda el uso rutinario de antibióticos en las exacerbaciones del asma.
Alta. Los pacientes con FEP > 75% en 1 h del tratamiento inicial pueden ser dados de
alta si no hay otro motivo para ingreso. Por otra parte, antes del alta el paciente debe
haber:
• Estado estable durante 24 h con la medicación que seguirán al alta.
• Tener comprobada la técnica de inhalación.
• Velocidad de flujo pico > 75% del predicho o el mejor con variabilidad diurna < 25%.
• Esteroides (inhalado y oral) y terapia broncodilatadora.
• Su propio medidor FEP y tener un plan de tratamiento escrito.
• Cita con el médico de atención primaria en 2 d.
• Cita con la clínica respiratoria en 4 sem.
Fármacos utilizados en asma aguda
Salbutamol (β2-agonista). ES: taquicardia, arritmias, temblor, ↓ K+.
Hidrocortisona y prednisolona (esteroide; reduce la inflamación).
Aminofilina es utilizada menos frecuentemente y no es recomendada de forma rutinaria
en las guías BTS actuales, pero puede ser utilizada por el equipo respiratorio o UCI. Inhi-
be la fosfodiesterasa: ↑ [AMPc]. ES: pulso, arritmias, náusea, convulsiones. La cantidad de
infusión de aminofilina IV puede necesitar modificación de acuerdo con el paciente indi-
vidual: siempre compruebe el BNF. Monitorice ECG. 䊳 El objetivo es una concentración
en plasma de 10-20 mcg/mL (55-110 μmol/L). Toxicidad seria (↓ PA, arritmias, parada
cardíaca) puede ocurrir a concentraciones ≥ 25 mcg/mL. Mida el K+ plasmático: teofili-
nas pueden producir ↓ K+. No dé dosis de carga a pacientes que ya estén en tratamiento
oral. Utilice solo una marca (biodisponibilidad varía).
Tratamiento inmediato:
O2 suplementario para mantener saturaciones 94-98%
Salbutamol 5 mg (o terbutalina 10 mg) nebulizado con O2
Emergencias
Si severo/amenaza para la vida, añada ipratropio 0,5 mg/6 h a nebulizadores
Hidrocortisona 100 mg IV o prenisolona 40-50 mg VO
terapia en casa.
• ECG.
• Envíe esputo para cultivo si purulento.
• Hemocultivos si febril.
Tratamiento. 䊳 Asegure oxigenación, luego trate lo reversible8, ver fig. 19.13.
• Busque una causa, p. ej., infección, neumotórax.
• Antes del alta, contacte con el médico de atención primaria con respecto a la reduc-
ción de los esteroides, oxígeno domiciliario (p. 184), abandono del tabaco, y vacuna-
ción neumocócica y antigripal (p. 166).
Tratamiento de EPOC estable y enfermedad más avanzada: Ver p. 184-5.
Considerar el techo de cuidados: ¿Qué es en el mejor interés del paciente? La ventilación
invasiva para la exacerbación de la EPOC puede no se apropiada: puede ser difícil reti-
rar a los pacientes del soporte ventilatorio, y conlleva el riesgo de neumonías y neumo-
tórax asociados con el ventilador, los últimos por ruptura de bullas. Si es posible, hable
pronto con el paciente, antes del deterioro, trate de determinar sus deseos. Los pacien-
tes que han sido ventilados previamente pueden no querer repetir la experiencia. Con-
siderar comorbilidades, FEV1, estado funcional, si el paciente requiere oxígeno domicilia-
rio, y si el paciente ha estado ingresado en una UCI previamente (y si es así, si fueron
retirados fácilmente de la ventilación invasiva). Incorpore pronto al paciente, la familia, sus
adjuntos y a la UCI en la toma de decisiones.
Oxigenoterapia
• El mayor peligro es hipoxia, que probablemente es responsable de más muertes
que la hipercapnia. No deje a los pacientes severamente hipoxémicos.
• Sin embargo, en algunos pacientes, que dependen de su estímulo hipóxico para
respirar, demasiado oxígeno puede conducir a una reducción de la frecuencia res-
piratoria e hipercapnia, con una consecuente disminución del nivel de conciencia.
Siempre prescriba O2 como si fuera un fármaco.
• Siempre es necesario tener cuidado con el O2, especialmente si hay evidencia de
retención de CO2. Comience con O2 al 24-28% en estos pacientes.
䊳䊳 Siempre que inicie o cambie la terapia con oxígeno, considere un GAB en 1 h.
• Monitorice al paciente cuidadosamente. El objetivo es aumentar la PaO2 por enci-
ma de 8,0 kPa con un aumento en PaCO2 < 1,5 kPa.
• En paciente sin evidencia de retención basalmente utilice O2 al 28-40%, pero aún
monitorice y repita GAB.
Broncodilatadores nebulizados:
Salbutamol 5 mg/4 h e ipratropio 500 mcg/6 h
Pruebas: RXT, GAB
Emergencias
Esteroides:
200 mg IV hidrocortisona y 30 mg prednisolona oral OD
(continuar durante 7-14 d)
Antibióticos:
Utilizar si pruebas de infección, p. ej., amoxicilina 500 mg/8 h VO,
alternativamente claritomicina o doxiciclina (p. 387)
Si no respuesta:
1. Considerar ventilación no invasiva con presión positiva (VNIPP) si la fre-
cuencia respiratoria > 30 o pH < 7,35, o PaCO2 aumentando a pesar
de tratamiento médico, O:
2. Considerar un fármaco estimulante de la respiración, p. ej., doxapram
1,5-4 mg/min IV en pacientes que no son candidatos a ventilación mecá-
nica. ES: agitación confusión, taquicardia, náusea. Es una medida a corto
plazo, utilizar solo si VNI no está disponible
* Dosis de carga con 250 mg durante 20 min, después infundir a una velocidad de ~500 mcg/kg/h
(300 mcg/kg/h si anciano), donde kg es del peso corporal ideal. No dar dosis de carga en pacientes
con metilxantinas de mantenimiento (teofilinas/aminofilina; ver p. 811). Comprobar niveles plasmáticos
si administrados > 24 h. Se requiere monitorización del ECG.
†Esto solo puede servir como terapia de rescate, ser un paso intermitente antes de la ventilación, o ser
considerado como el «techo de la terapia» para aquellos que se consideran no adecuados para ven-
tilación mecánica.
Fig. 19.13. Tratamiento de la EPOC aguda.
814 䊳䊳 Neumotórax
Causas
• Espontáneo: (Especialmente en hombres jóvenes) debido a la ruptura de una bulla
subpleural.
• Enfermedad pulmonar crónica: Asma; EPOC; fibrosis quística; fibrosis pulmonar; sarcoi-
dosis.
• Infección: TB; neumonía; absceso pulmonar.
• Traumático: Incluyendo iatrogénico (inserción de vía de PVC, aspiración o biopxia pul-
monar, biopsia percutánea del hígado, ventilación con presión positiva).
• Carcinoma.
• Trastornos del tejido conectivo: síndrome de Marfan, síndrome de Ehlers-Danlos.
Datos clínicos
Síntomas: Puede ser asintomático (especialmente en jóvenes con buena forma física y
Emergencias
pequeños neumotórax) o comienzo súbito de disnea y/o dolor pleurítico. Los pacientes
con asma o EPOC pueden presentarse con un deterioro súbito. Los pacientes ventila-
dos mecánicamente pueden desarrollar hipoxia súbita o un incremento en las presiones
de ventilación.
Signos: Expansión reducida, hiperresonancia a la percusión y disminución de los sonidos
ventilatorios en el lado afectado. Con un neumotórax a tensión, la tráquea se desviará
lejos del lado afectado y el paciente estará muy enfermo.
Pruebas. 䊳 No debería realizarse una RXT si se sospecha un neumotórax a tensión, dado
que retrasaría un tratamiento inmediato necesario. En otras circunstancias, pida una RXT
en espiración, y mire un área falta de márgenes pulmonares, periférica al borde del pul-
món colapsado (ver p. 725). Asegúrese de que el sospechado neumotórax no es una gran
bulla enfisematosa. Compruebe GAB en pacientes disneicos/hipóxicos y en los que tie-
nen enfermedad pulmonar crónica.
Tratamiento. 䊳 Ver fig. 19.14. Depende de si se trata de un neumotórax primario o
secundario (= enfermedad pulmonar subyacente o fumador > 50 años), tamaño y sín-
tomas9.
• El tamaño se mide desde el borde visible del pulmón hasta la pared torácica al nivel
del hilio.
• El neumotórax debido a traumatismo o ventilación mecánica requiere drenaje torácico.
• Aspiración de un neumotórax, ver p. 767.
• Inserción y manejo de un drenaje de tórax, ver p. 766. Utilice un tubo pequeño (10-
14 F) a no ser que haya también sangre/pus. Los tubos pueden ser retirados 24 h des-
pués de que el pulmón se ha reexpandido y se ha interrumpido la salida de aire (es
decir, el tubo deja de burbujear). Se realiza durante espiración o durante una manio-
bra de Valsalva.
Consejo quirúrgico: Organícelo si: neumotórax bilateral; el pulmón no se expande en 48 h
de la inserción del drenaje intercostal; fuga de aire persistente; dos o más neumotórax
previos en el mismo lado, o historia de neumotórax en el lado opuesto.
Neumotórax a tensión
䊳䊳 Es una emergencia médica. (Ver fig. 16.14, p. 749).
Esencia. Aire que sale al espacio pleural con cada inspiración no tiene ruta de escape
durante la espiración. El mediastino es empujado hacia al hemitórax contralateral, aco-
dando y comprimiendo las grandes venas. A no ser que el aire sea extraído rápidamen-
te, ocurrirá una parada cardiorrespiratoria.
Signos. Distrés respiratorio, taquicardia, hipotensión, distensión de las venas del cuello,
desviación de la tráquea lejos del lado del neumotórax. Aumento de la nota de percu-
sión, reducción de la entrada de aire/sonidos respiratorios en el lado afectado.
Tratamiento
Extraer el aire, insertar una aguja de gran calibre (14-16 g) con una jeringa parcialmen-
te llena con salino 0,9% en el 2º espacio intercostal en la línea medioclavicular en el lado
del sospechado neumotórax. Retire el émbolo para permitir que el aire atrapado bur-
bujee a través de la jeringa (con el salino como sello de agua) hasta que pueda colocar-
se un tubo de tórax. Alternativamente, inserte un Venflon de gran calibre en la misma
localización.
䊳䊳 Realice esto antes de pedir una RXT.
䊳䊳 Después inserte un drenaje torácico. Ver p. 766.
Emergencias
Drenaje de tórax
Neumotórax secundario:
¿Disnea o borde de aire No No
¿Tamaño 1-2 cm?
> 2 cm en RXT?
Sí
No Aspiración. Sí Ingrese para
Drenaje de tórax observación 24 h y O2
¿Exitosa?
816 Neumonía
Una infección del parénquima pulmonar. La incidencia de neumonía adquirida en la
comunidad es 5-11 por 1000 adultos. De estos, 1-3 por 1000 requerirán hospitalización,
y la mortalidad en los hospitalizados es de hasta un 14%.
Organismos comunes
• Streptococcus pneumoniae es la causa más común (60-75%).
• Hemophilus influenzae.
• Mycoplasma pneumoniae.
• Staphylococcus aureus encontrado con mayor frecuencia en pacientes de la UCI.
• Legionella species y Chlamydia psittaci.
• Bacilos gramnegativos, con frecuencia adquiridos en el hospital o inmunocomprome-
tidos, p. ej., Pseudomonas, especialmente en los que tienen EPOC.
• Virus, incluyendo influenza, son responsables de hasta el 15%.
Emergencias
Síntomas. Fiebre, rigidez, malestar, anorexia, disnea, tos, esputo purulenteo (clásica-
mente «oxidado» con neumococo), hemoptisis y dolor torácico pleurítico.
Signos. Fiebre, cianosis, herpes labial (neumococo), confusión, taquipnea, taquicardia,
hipotensión, signos de consolidación (expansión disminuida, percusión mate, ↑ tacto fré-
mito vocal/resonancia vocal, respiración bronquial), roce pleural.
Tratamiento. 䊳 Asegure oxigenación y después identifique y trate la patología rever-
sible10, ver fig. 19.15.
Pruebas: Evalúe la gravedad –esto guiará el estudio y el tratamiento.
• RXT (imágenes de rayos X, fig. 16.4 en p. 725).
• Saturación de oxígeno y GAB si SaO2 < 92% o neumonía grave.
• Sistemático de sangre, U y E, PFH, PCR.
• Hemocultivos (si CURB-65 ≥ 2).
• Cultivo de esputo (si CURB-65 ≥ 3 o si CURB-65 = 2 y no ha recibido antibióticos
todavía).
• Antígeno neumocócico urinario (si CURB-65 ≥ 2), antígeno de Legionella (si CURB ≥ 3
o si sospecha clínica).
• Considerar la necesidad de muestras faríngeas para virus y serología/PCR de mico-
plasma.
• Líquido pleural puede estar aspirado para cultivo (si CURB-65 ≥ 2).
• Considerar broncoscopia y lavado broncoalveolar si el paciente está inmunodeprimi-
do o en la UCI.
Gravedad: Calcular la puntuación de datos adversos nucleares «CURB-65»: • Confusión
(prueba mental abreviada ≤ 8). • Urea > 7 mmol/L. • Frecuencia respiratoria ≥ 30/min.
• PA (BP) <90/60 mmHg. • Edad ≥65. Puntuación: 0-1, tratamiento domiciliario si posible.
≥ 2: terapia hospitalaria; ≥ 3: indica neumonía grave y debería considerarse referir a UCI.
Otros datos que aumentan el riesgo de muerte son enfermedad coexistente; afectación
bilateral/multilobar; PaO2 < 8 kPa o SaO2 < 92%.
Tratamiento: Ver orientación de antibióticos (Tabla 4.2 en p. 167). La mayoría de los
pacientes que requieren antibióticos IV pueden ser cambiados con seguridad a terapia
VO el tercer día.
Complicaciones. (De la infección o del tratamiento.) Derrame pleural, empiema, abs-
ceso pulmonar, fallo respiratorio, pericarditis, miocarditis, ictericia colestática, lesión renal
aguda.
Emergencias
Pruebas:
Ver p. 816
Antibióticos:
Ver p. 167
¿No mejoría?
Si hipóxico a pesar del oxígeno, considerar CPAP para reclutar parénquima
pulmonar y mejorar la oxigenación. Pero si el paciente está hipercápnico,
requerirá ventilación no invasiva o invasiva (es decir, intubación)
䊳䊳 Comente con UCI pronto si el paciente tiene P CO en aumento o
a 2
continúa hipoxémico a pesar de la mejor terapia médica
• Hipotensión, taquicardia, ritmo de galope, ↑ PVY, P2 fuerte, golpe del ventrículo dere-
cho, roce pericárdico, taquipnea, cianosis, FA.
Con tromboprofilaxis, la EP tras la cirugía es mucho menos común, pero el EP puede
ocurrir tras cualquier período de inmovilidad, o con factores predisponentes. La disnea
puede ser el único signo. Pequeños émbolos pequeños pueden presentarse menos dra-
máticamente con dolor pleurítico, hemoptisis y disnea gradualmente creciente. 䊳 Busque
fuentes de émbolo—especialmente TVP (¿está inflamada una pierna?).
Pruebas. 䊳 Estratifique el riesgo basándose en los datos clínicos (utilice el sistema de
puntuación de Wells para EP de 2 niveles –p. 191). Un dímero D negativo en un pacien-
te con baja probabilidad excluye EP efectivamente11.
• U y E, sistemático de sangre, pruebas de coagulación basales.
• ECG: Habitualmente normal o taquicardia sinusal; patrón de sobrecarga del ventrículo
derecho en V1-V3 (p. 98), desviación del eje hacia la derecha, BRD, FA, puede haber
ondas S profundas en I, ondas Q en III, ondas T invertidas en III («SI QIII TIII»).
• RXT: Con frecuencia normal; marcas vasculares disminuidas; pequeño derrame pleural.
Área de infarto en forma de cuña. Atelectasias.
• GAB: Hiperventilación + intercambio gaseoso deteriorado: ↓PaO2, ↓PaCO2, ↑pH.
• Dímero D en suero: Baja especificidad (↑ si trombosis, inflamación, postoperatorio, infec-
ción, malignidad) ∴ compruebe solo en pacientes con baja probabilidad pretest (p. 191).
• Angiografía pulmonar con TC (APTAC): Es sensible y específico y es la prueba de elec-
ción para los pacientes de alto riesgo o pacientes de bajo riesgo con dímero D posi-
tivo. Si no disponible, la gammagrafía de ventilación-perfusión (V/Q) ayuda en el diag-
nóstico pero produce resultados equívocos con frecuencia.
Tratamiento. 䊳 Ver fig. 19.16 para tratamiento inmediato11.
䊳 Si una historia y signos compatibles, haga el diagnóstico. Inicie tratamiento (fig. 19.16)
antes de las pruebas definitivas: la mayoría de las muertes por EP ocurren en la 1ª hora.
• Comience con HBPM o fondaparinux.
• Si hay inestabilidad hemodinámica, considere la trombólisis.
• Anticoagulación a largo plazo: bien ACOAD (p. 350 –cambiar directamente desde
HBPM) o warfarina (continúe HBPM hasta INR > 2).
• ¿Hay una causa subyacente, p. ej., trombofilia (p. 374), LES, policitemia? Considerar
malignidad (haga una historia cuidadosa y realice una exploración física completa; com-
pruebe RXT, sistemático de sangre, PFH, Ca2+, análisis de orina; considere TC de abdo-
men/pelvis y mamografía).
• Si hay una causa reversible obvia, anticoagulación durante 3 meses (p. 351) puede ser
suficiente; de otra forma, continúe durante ≥ 3-6 meses (largo plazo y embolia recu-
rrente o malignidad subyacente).
Prevención .Ver p. 190.
Emergencias
Si ↓ PA dar bolo de 500 mL de líquido IV
Evaluación por UCI
䊳䊳 ¿Hemodinámicamente inestable?
No Sí
Considerar trombólisis
Si ↓ PA persistente, considerar vasopresores, p. ej., (p. ej., bolo IV de alteplasa
dobutamina 2,5-10 mcg/kg/min IV o noradrenalina; 10 mg seguido de infusión IV
objetivo de PA sistólica > 90 mmHg 90 mg/2 h)
roso, signos de hepatopatía crónica (p. 276), p. ej., telangiectasia, púrpura, ictericia. NB:
pregunte sobre problemas GI previos, uso de fármacos, alcohol.
Tratamiento. 䊳 Céntrese en la circulación12, ver fig. 19.17. Estratifique el riesgo basán-
dose en, p. ej., el sistema de puntuación de Rockall (ver tabla 6.6, p. 257).
¿Está el paciente en shock?
Periféricamente frío/sudoroso; tiempo de relleno capilar > 2 s; diuresis < 0,5 mL/kg/h.
• ↓ GCS o encefalopatía (p. 275).
• Taquicardia (pulso > 100 lpm).
• PA sistólica < 100 mmHg; disminución postural >20 mmHg.
• Si está en shock: ver fig. 19.17 para tratamiento.
Si hemodinámicamente estable:
• Inserte dos cánulas IV grandes (14-16 g) y tome muestras de sangre para sistemático
de sangre, PFH, coagulación, y cruzar y guardar sangre.
• Administre líquidos IV (p. 821) para restaurar el volumen intravascular; evite el salino
si cirrótico/varices; considere una línea de PVC para monitorizar y guiar el reemplaza-
miento de líquidos.
• Organizar RXT, ECG y compruebe GAB.
• Considere una sonda vesical y monitorizar la diuresis horaria.
• Transfunda si una disminución significativa de Hb (< 70 g/L).
• Corrija las anormalidades de la coagulación (vitamina K (p. 274), PFC, plaquetas).
• Si sospecha de varices (p. ej., historia conocida de enfermedad hepática y exceso de
alcohol) después administre terlipresina IV (1-2 mg/6 h durante ≤ 3 d) e iniciar anti-
bióticos IV de amplio espectro (p. ej., piperacilina/tazobactam IV 4,5 g/8 h).
• Monitorizar pulso, PA y PVC (mantener > 5 cmH2O) al menos cada hora hasta que
se estabilice.
• Organice para realizar una endoscopia urgente (p. 248).
• Si falla el control endoscópico, puede ser necesaria cirugía o angiografía/embolización
mesentérica emergente. Para el sangrado incontrolado por varices esofágicas, una
sonda de Sengtaken-Blakemore puede comprimir las varices, pero debería colocarse
solo por alguien con experiencia.
Terapia farmacológica aguda: No hay papel para la administración rutinaria de IBP antes de
la endoscopia (asumiendo que la endoscopia puede ser realizada en un tiempo apropia-
do). En pacientes en los que pueda realizarse una hemostasis endoscópica exitosa, admi-
nistre IBP (p. ej., omeprazol 40 mg/12 h IV/VO). Tratar si positivo para H. pylori (p. 253).
Resangrado. Acontecimiento serio: 40% de los pacientes que vuelven a sangrar mori-
rán. Si «en riesgo» mantenga un elevado índice de sospecha. Si vuelve a sangrar, com-
pruebe signos vitales cada 15 min y llame al adjunto para repetir la endoscopia y/o inter-
vención quirúrgica.
Signos de resangrado:
• Presión del pulso en aumento.
• PVY disminuyendo ± reducción de diuresis horaria.
• Hematemesis o melena «fresca» (NB: es normal tener cantidades decrecientes de
melena durante 24 h tras la hemostasia, dado que la sangre debe seguir su camino a
través del tracto GI).
• Disminución de PA (un signo tardío y siniestro) y disminución del nivel de conciencia.
Emergencias
Si signos de shock grado III o IV (p. 790) administre sangre específica
de grupo O Rh negativa hasta que se realice el cruce
Monitorice los signos vitales cada 15 min hasta estable, después cada hora
822 䊳䊳 Meningitis
䊳 Atención primaria. Acciones rápidas salvan vidas. 䊳䊳 Si se sospecha meningitis orga-
nice traslado urgente a un centro secundario. Si se observa una erupción que no se blanquea
con la presión, administre 1,2 g IM/IV de benzilpenicilina antes del ingreso.
Organismos. Meningococo o neumococo. Menos comúnmente Haemophilus influen-
zae; Listeria monocytogenes. VHS, VZV, enterovisus. CMV, Cryptococcus (p. 400), o TB (p.
393) si inmunocomprometido, p. ej., HIV positivo, trasplante de órgano, malignidad.
Diagnóstico diferencial. Malaria, encefalitis,
septicemia, subaracnoidea, dengue, tétanos.
Datos
Pronto: Cefalea, fiebre, dolores en piernas, manos
y pies fríos, color de la piel anormal.
Más tarde:
• Meningismo: rigidez de cuello, fotofobia, signos
Emergencias
Meningítico: (p. ej., rigidez de cuello; Septicémico: p. ej., shock (tiempo de relleno capilar
fotofobia) sin shock retrasado; manos + pies fríos; ↓PA), erupción en evolución
Emergencias
Extraiga hemocultivos Obtenga ayuda de UCI:
• Tome hemocultivos
• Antibióticos IV (ver texto)
• Soporte de la vía aérea/intubación
Signos de ↑PIC/desviación del cerebro preventiva
(edema de papila, convulsiones • Reanimación con
incontroladas, neurología focal, GCS ≤ 12) líquidos/inotropos/vasopresores (objetivo
de: PAM > 70 mmHg; diuresis > 30 mL/h)
• Retrase la PL hasta que esté estable
Sí No
䊳䊳 Monitorización cuidadosa
824 Encefalitis
䊳 Sospeche encefalitis siempre que observe conducta extraña, ↓conciencia, focalidad
neurológica o convulsiones si precedidas de un pródromo infeccioso (Ta erupción, linfa-
denopatía, irritación fría, conjuntivitis, signos meníngeos). Con frecuencia es inteligente
tratar (ver debajo) antes de que se conozca la causa exacta –usualmente viral, y con fre-
cuencia nunca identificada. Sin el pródromo infeccioso considerar encefalopatía: hipoglu-
cemia, encefalopatía hepática, cetoacidosis diabética, fármacos, lesión cerebral hipóxica,
uremia, LES, Wernickes (administre vit. B1 si en duda p. 714).
Signos y síntomas
• Conducta encefalopática bizarra o confusión.
• ↓ GCS o coma.
• Fiebre.
• Cefalea.
Emergencias
Abscesos cerebrales
Sospéchelo en cualquier paciente con PIC, especialmente si hay fiebre y leucocitos.
Puede seguir infecciones de oído, senos, dentales o periodontales; factura cráneo; car-
diopatía congénita; endocarditis; bronquiectasia. Puede ocurrir también en ausencia de
signos sistémicos de inflamación.
Signos. Convulsiones, fiebre, signos de localización o signos de PIC. Coma. Signos de
sepsis en cualquier otro sitio (p. ej., dientes, oídos, pulmón, endocarditis).
Pruebas. TC/RM p. 746 (p. ej., lesión «con anillo resaltado»); leucocitos; ↑ VSG; biopsia.
Tratamiento. Referir urgentemente a neurocirugía; tratar PIC (p. 839). Si la fuente son
los senos frontales o los dientes, el organismo más probable será Strep. milleri (microae-
rofílico), o anaerobios orofaríngeos. Si abscesos del oído, los más comunes son B. fragilis
u otros anaerobios. Los abscesos bacterianos son con frecuencia periféricos; las lesiones
por toxoplasmosis (p. 425) son más profundas (p. ej., ganglios basales). NB: pregúntese a
sí mismo: ¿está el paciente inmunocomprometido? Comente con enfermedades infec-
ciosas/microbiología.
825
Emergencias
probable, compruebe la orina y la PA: llame a un obstetra experto –puede ser necesa-
rio un parto inmediato.
Pruebas
• Glucosa en la cabecera de la cama, las siguientes pruebas pueden realizarse una vez
que se haya iniciado R/ : glucosa de laboratorio, GAB, U y E, sistemático de sangre, ECG.
• Considerar niveles de anticonvulsivantes, cribado de toxicología, PL, cultivo de sangre
y orina, EEG, TC, niveles de monóxido de carbono.
• Pulsioximetría, monitor cardíaco.
Tratamiento. 䊳 Ver fig. 19-20. Soporte vital básico –y estos agentes14:
1. Lorazepan: 0,1 mg/kg (habitualmente 4 mg) como un bolo lento en una vena grande.
Si no respuesta tras 10-20 min, administre una segunda dosis. Cuidado con la parada
respiratoria durante la última parte de la inyección. Tenga a mano facilidades para rea-
nimación completa en todas las situaciones en las que utilice benzodiacepinas IV. La
vía rectal es una alternativa para diazepam si el acceso IV es difícil. Midazolam bucal
es una forma más fácil de uso oral cuando no hay acceso IV (p. ej., en un ambiente
comunitario); la dosis para los pacientes de 10 años de edad o mayores es de 10 mg;
si 1-5 años, 5 mg, si 5-10 años, 7,5 mg; eche la mitad del volumen entre la encía infe-
rior y la mejilla en cada lado. Mientras espera a que comience el efecto, prepare para
otros fármacos. Si las convulsiones continúan…
2. Infusión de fenitoína: 15-18 mg/kg en infusión IV (redondeando, 1 g si 60 kg, y 1,5 g si
80 kg; más 2 g), a una velocidad máxima de 50 mg/min (no ponga diazepam en la
misma vía: no se mezclan). Cuidado con PA y no utilice si bradicardia o bloqueo car-
díaco. Requiere monitorización de la PA y del ECG. La dosis de mantenimiento es
100 mg/6-8 h (comprobar niveles). Si las convulsiones continúan…
3. Busque ayuda de la UCI: Se requiere parálisis y anestesia con p. ej., propofol. Monito-
rización estrecha, especialmente la función respiratoria, es vital. Considere si pudieran
ser pseudoconvulsiones (p. 490), particularmente si hay datos extraños (empujones
de la pelvis; resistencia a los intentos de abrir los párpados y sus intentos de movi-
mientos pasivos; brazos y piernas agitándose).
4. Dexametasona: 10 mg/IV si es posible que haya vasculitis/edema cerebral (tumor).
Tan pronto como se controlen las convulsiones, comenzar con fármacos orales (p. 492).
Pregunte sobre cuál fue la causa, p. ej., hipoglicemia, embarazo, alcohol, fármacos, lesión
o infección del SNC, encefalopatía hipertensiva, dosis/adherencia anticonvulsivante
inadecuada (p. 490).
Emergencias
U y E, PFH, Sistemático de sangre, glucosa, Ca2+
Cribado toxicológico si indicado.
Niveles de anticonvulsivantes
Anestesia general: Convulsiones continuadas tras 60-90 min o más las terapias
requieren ayuda experta con parálisis (p. ej., infusión de propofol) y ventilación
con monitorización continua del ECG en UCI. NB: 䊳 nunca esté más de 20 minutos
con alguien con estatus epiléptico sin tener la ayuda de un anestesista en la cabecera
de la cama
ABC
Emergencias
Trate el shock si es necesario (p. 790)
Exploración rápida
Pruebas:
U y E, glucosa, sistemático de sangre, alcohol en sangre,
Cribado de toxicología, GAB y coagulación
Exploración neurológica
Historia breve:
¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Cómo? ¿Tuvo pérdida de conciencia? ¿Intervalo lúcido? ¿Alcohol?
Radiología:
Como indicado: TC de cabeza/cuello (ver texto)
Considerar la necesidad de serie de traumatismo (p. ej., TC
de tórax/abdomen(pelvis)
Fig. 19.21. Plan de tratamiento inmediato de la lesión craneal.
ABC
Emergencias
Elevar la cabecera de la cama a 30-40º
Agentes osmóticos (p. ej., manitol) puede ser útil pero puede conducir
a rebote de la PIC tras un uso prolongado (~12-24 h):
Administre solución 20% 0,25-0,5 g/kg IV durante más de 10-20 min (p. ej.,
5 mL/kg). El efecto se ve tras ~20 min y dura 2-6 horas. Sigue la osmolalidad
del suero –objetivo de alrededor 300 mosmol/kg pero no exceda 310
Pruebas: Gases venosos para pH, bicarbonato; glucosa con tira y de laboratorio
y cetonas; U y E, sistemático de sangre, PCR; RXT, ECG
Emergencias
Insulina: Añada 50 unidades de insulina soluble humana a 50 mL de salino 0,9%. Infunda continuamente
a 0,1 unidad/kg/h. Continúe la insulina regular de vida media larga del paciente a su dosis y tiempos
habituales; considere inicio de insulina de vida media larga en DM tipo 1 de reciente diagnóstico.
䊳 Objetivo: disminución de las cetonas sanguíneas de 0,5 mmol/L/h, o aumento del bicarbonato veno-
¡Evite la hipoglucemia! Cuando la glucosa < 14 mmol/L comience con glucosa 10%
a 125 mL/h para pasar junto con salino y prevenir hipoglucemia
Continúe insulina a velocidad continua hasta que las cetonas < 0,6 mmol/L, pH venoso
> 7,3 y bicarbonato venoso > 15 mmol/L. No se fíe de las cetonas urinarias para indicar la
resolución –permanecen positivas después de que la CAD se haya resuelto.
Encuentre y trate infección/causa de CAD
▲! Reemplazamiento de fluidos
• Salino 0,9% es el líquido de elección para el reemplazamiento.
• El déficit de líquidos típico es 100 mL/kg, así que para un hombre medio de 70 kg = 70 litros.
• Administre p. ej., 1 L en 1 h (más rápido si PA sistólico < 90 mmHg) después: 1 L en 2 h, 1 L en
2 h, 1 L en 4 h, 1 L en 4 h, 1 L en 8 h. Este régimen puede no ser apropiado para todos: reeva-
lúe frecuentemente, especialmente si joven, anciano, embarazada o comorbilidades.
• El bicarbonato puede aumentar el riesgo de edema cerebral y no se recomienda.
▲! Reemplazamiento de potasio
• Déficit típico = 3-5 mmol/kg, K+ plasmático disminuye con tratamiento a medida que el K+ entra
en las células.
• No añada K+ a la primera bolsa. Posteriormente, añada K+ de acuerdo con los resultados de
gases venosos más recientes (tabla 19.5).
Tabla 19.5. Reemplazamiento de potasio en CDA
K+ sérico (mmol/L) Cantidad de ClK a añadir por litro de fluido IV
> 5,5 Nada
3,5-5,5 40 mmol
< 3,5 Busque ayuda de UCI/cuidados intermedios
para dosis mayores
hay cambio al metabolismo de las cetonas, de forma que la cetonemia está < 3 mmol/L y pH > 7,3.
La osmolalidad es típicamente > 320 mosmol/kg: 䊳 Los acontecimientos oclusivos son un peligro (sig-
nos focales del SNC, corea, CID, isquemia/rabdomiólisis en piernas) –administrar profilaxis con
HBPM a todos a no ser que esté contraindicado (p. 350). Rehidrate lentamente con infusión de salino
0,9% en 48 h, los déficits típicos son 110-220 mL/kg, es decir 8-15 L para un adulto de 70 kg. Reem-
place K+ cuando la orina comienza a fluir (ver RECUADRO CAD, p. 833). 䊳Solo utilice insulina si la glu-
cemia no está disminuyendo por 5 mmol/L/h con rehidratación o si cetonemia –comience lentamente
0,05 u/kg/h. Mantenga la glucosa sanguínea al menos 10-15 mmol/L durante las primeras 24 horas para
evitar edema cerebral. Busque la causa, p. ej., IM, fármacos, sepsis o infarto intestinal.
Acidosis láctica. Una complicación rara pero seria de la DM en tratamiento con metformina o
septicemia. Lactato sanguíneo: > 5 mmol/L. Busque ayuda experta. Trate la sepsis vigorosamente,
mantenga la presión arterial y así la perfusión tisular. Interrumpa la metformina.
Emergencias tiroideas
Coma mixedematoso. El último estado hipotiroideo antes de la muerte.
Signos y síntomas: Parece hipotiroideo (p. 220, p. 221, fig. 5.16); con frecuencia > 65 años; hipoter-
mia; hiporreflexia; ↓ glucosa; bradicardia; coma; convulsiones. Puede haber tenido yodo radioactivo,
tiroidectomía o cirugía pituitaria (signos de hipopituitarismo, p. 232). Psicosis (demencia mixedema-
tosa) puede preceder al coma. Precipitantes: infección, IM, ictus o trauma.
Exploración física: Bocio; cianosis; ↓ PA (cardiogénico); fallo cardíaco; signos de precipitantes.
Tratamiento: Preferible en UCI.
• Sangre para: T3, T4, TSH, sistemático de sangre, U y E (con frecuencia Na+), cultivos, cortisol, glu-
cosa.
• GAB para PaO2. O2 en alto flujo si cianótico. Puede ser necesaria ventilación.
• Corrija cualquier hipoglucemia.
• Administre T3 (liotironina) 5-20 mcg/12 h IV lentamente. Sea cuidadoso: puede precipitar mani-
festaciones de cardiopatía isquémica. Regímenes alternativos utilizan levotiroxina.
• Administre hidrocortisona 100 mg/8 h IV—vital si se sospecha hipotiroidismo pituitario (es decir,
no bocio, no yodo radioactivo previo, y no cirugía tiroidea previa).
• Si se sospecha infección, administre antibiótico, p. ej., co-amoxiclavulámico 1,2 g/8 h IV.
• Cuidado con los líquidos, rehidrate según sea necesario, pero vigile la disfunción cardíaca; la PA
puede no responder a los líquidos y pueden necesitarse inotropos.
• Calentamiento activo (mantas, líquidos) puede ser necesario por hipotermia. Cuidado con las
complicaciones (hipoglucemia, pancreatitis, arritmias). Ver p. 848.
R/ adicional: T3 5-20 mcg/4-12 h IV hasta mejoría sostenida (~2,3 d), después levotiroxina
50 mcg/24 h VO. Hidrocortisona + líquidos IV según sea necesario (la hiponatremia es dilucional).
Crisis hipertiroidea (tormenta tirotóxica). Signos y síntomas: 乆:么≈4:1. Hipertiroidismo
grave (ver p. 218): ↑Tª, agitación, confusión, coma, taquicardia, FA, D y V, bocio, soplo tiroideo, abdo-
men agudo (excluir causas quirúrgicas), fallo cardíaco.
Precipitantes: Cirugía tiroidea o yodo radioactivo recientes; infección; IM; trauma.
Diagnóstico: No espere al resultado de las pruebas si es necesario un tratamiento urgente. Reali-
ce TSH, T4 libre y T3 libre. Confirme con captación de tecnecio si es posible.
Tratamiento: 䊳 Ver fig. 19.24. Busque consejo de endocrinología y tenga como objetivo: 1. Con-
trarrestar los efectos periféricos de las hormonas tiroideas. 2. Inhibir la síntesis de hormonas tiroi-
deas. 3. Tratar las complicaciones sistémicas. Si no está avanzando en 24 h, la tiroidectomía puede
ser una opción.
Tomar muestras de sangre para: T3, T4, TSH, cultivos (si se sospecha infección)
Emergencias
Si no contraindicación, y gasto cardíaco OK, administre propranolol 60 mg/4-6 h VO;
máx dosis IV: 1 mg en 10 min; puede ser necesario repetir cada pocas horas.
En asma/gasto cardíaco reducido, propranolol ha producido parada cardíaca en la
tormenta tirotóxica, por lo que los β-bloqueantes de vida media ultracorta tienen un
papel, p. ej., esmolol IV Considerar diltiazem si β-bloqueantes están contraindicados
䊳 Obtenga ayuda
tación y esteroides).
• Hidrocortisona 100 mg IV inmediatamente.
• Bolo de líquidos IV p. ej., 500 mL salino 0,9% para aumentar la PA, repetir si necesario.
• Monitorice la glucosa sanguínea: el peligro es hipoglucemia.
• Sangre, orina y esputo para cultivos, después antibióticos si preocupación sobre infección.
Continuación del tratamiento
• Puede necesitarse glucosa IV si hipoglucémico.
• Administre líquidos IV guiado por el estado clínico y para corregir el disbalance de U y E.
• Continúe hidrocortisona, p. ej., 100 mg/8 h IV o IM.
• Cambie a esteroides orales tras 72 h si la condición del paciente es buena.
• Puede necesitarse fludrocortisona si la causa es la enfermedad adrenal: pregunte a un
experto.
• Busque (y trate vigorosamente) la causa subyacente. Obtenga ayuda endocrinológica.
Coma hipopituitario
Piense en fallo hipofisario crónico descompensado siempre que hipotermia, hipotensión
refractaria ± signos sépticos sin fiebre ocurran con estatura corta o pérdida de vello axi-
lar/púbico ± atrofia gonadal. 䊳 Puede ser fatal esperar a los resultados del laboratorio.
Habitualmente se desarrolla gradualmente en una persona sin hipopituitarismo conoci-
do. Su inicio rápido debido a infarto de la pituitaria (p. ej., postparto, Sheehan, p. 232), es
frecuentemente mal diagnosticado como hemorragia subaracnoidea dado que los sínto-
mas incluyen cefalea y meningismo.
Presentación. Cefalea, oftalmoplejia; ↓ conciencia; hipotensión; hipotermia; hipoglice-
mia; signos de hipopituitarismo (p. 232).
Pruebas. Cortisol; T4; TSH; glucosa. TC/RM de fosa pituitaria.
Tratamiento. Hidrocortisona, p. ej., 100 mg IV/6 h.
• Solo tras comenzar hidrocortisona: liotironina (L-tri-iodotironina sódica), p. ej., 10 mcg/
12 h VO o mediante IV lenta: 5-20 mcg/12 h (cada 4 horas puede ser necesario).
• Es necesaria una cirugía precoz si la causa es apoplejía pituitaria (p. 234).
Emergencias
para mantener una PA segura.
• Cuando la PA está controlada, administre un α-bloqueante de acción larga, p. ej., feno-
xibenzamina 10 mg/24 h VO (aumentar en 10 mg/d según sea necesario, hasta 30
mg/12 h VO); ES: hipotensión postural; mareo; taquicardia; congestión nasal; reducción
marcada idiosincrática de la PA tras la 1ª dosis. La idea es ↑ dosis hasta que la PA está
controlada y no hay hipotensión postural significativa. Los bloqueadores α1-selectivos
alternativos, p. ej., doxazosina, son preferidos en algunos centros, particularmente si la
cirugía no es una opción, p. ej., tumor metastático.
• También puede ser administrado un β1-bloqueante en este momento para controlar
cualquier taquicardia o isquemia miocárdica/arritmia (p. 114).
• La cirugía suele ser de elección tras 4-6 semanas, para permitir un α-bloqueo com-
pleto y expansión de volumen. Cuando se ingrese para cirugía se incrementa la dosis
de fenoxibenzamina hasta que ocurra hipotensión postural significativa.
Considere ventilación (si la frecuencia respiratoria es < 8/min, o PaO2 < 8 kPa,
respirando O2 al 60%, o la vía aérea está en riesgo, p. ej., GCS ≤ 8)
Emergencias
Si inconsciente, cuide en posición semiprona
▲! Tratamiento adicional
Evaluar al paciente
Pruebas:
• Glucosa, U y E, sistemático de sangre, PFH, INR, GAB, ECG, niveles de paracetamol y
salicilatos.
• Toxicología de orina/suero, estudios específicos según sea apropiado
Monitorice:
• Tª, pulso y frecuencia respiratoria, PA, saturaciones de O2, diuresis ± ECG
Tratamiento:
• Medidas de soporte: puede ser necesario sondaje
• ↓ Absorción: considere lavado gástrico ± carbón activado (ver p. 840)
mol. Se administra en dosis repetidas (50 g/4 h) para aumentar la eliminación de algunos
fármacos desde la sangre, p. ej., carbamazepina, dapsona, teofilinas, quinina, fenobarbital y
paraquat. Son utilizadas dosis menores para niños. No utilice con productos del petró-
leo, corrosivos, alcoholes, clofenotano, malation o sales de metal (p. ej., hierro, litio).
Lavado gástrico. Utilizado raramente. Un lavado realizado tras 30-60 min puede
empeorar las cosas. 䊳 No vacíe el estómago si se han ingerido productos del petróleo o
corrosivos como ácidos, álcali, lejía, productos para quitar el sarro (excepción: paraquat),
o si el paciente está inconsciente y es incapaz de proteger su vía aérea (a no ser que
esté intubado). 䊳 Nunca induzca el vómito.
Vaciado y lavado gástrico. NB: no recomendamos intentar el lavado gástrico a no
ser que sea recomendado por Toxbase o el Servicio de Información de Venenos. Si
comatoso, o no reflejo de deglución, busque a un anestesista para proteger la vía aérea
con un tuvo endotraqueal con manguito. Si consciente, obtenga consentimiento infor-
mado.
• Monitorice O2 mediante pulsioximetría. Ver p. 162.
• Tenga un aparato de aspiración a mano y preparado.
• Eleve la cabecera de la cama 20 cm.
• Pase un tubo lubricado (14 mm de diámetro externo) a través de la boca, pidiendo al
paciente que trague.
• Confirme la posición en el estómago (ver p. 759).
• Extraiga con sifón los contenidos gástricos. Compruebe el pH con papel de tornasol.
• Realice lavado gástrico utilizando 300-600 mL de agua templada de una vez. Masajee
el hipocondrio izquierdo y después extraiga el contenido con sifón.
• Repita hasta que no se observen pastillas en el agua extraída con sifón.
• Deje carbón activado (50 g en 200 mL de agua) en el estómago a no ser que se haya
ingerido alcohol, hierro, Li+ o etilenglicol.
• Cuando extraiga el tubo, ocluya su extremo (previene la aspiración del líquido que
quede en el tubo).
Hemodiálisis. Puede ser necesaria para envenenamiento con etilenglicol, litio, metanol,
fenobarbital, salicitalos o valproato de sodio.
Ayuda en la web. Los proveedores de salud en el RU pueden registrarse para con-
sejo toxicológico gratuito en www.toxbase.org o llamando 0344 892 0111 para el Ser-
vicio de Información de Venenos.
Emergencias
ser:
• Leve: Mareo, ansiedad, taquicardia, náusea, mareo/confusión.
• Moderada: Vómito, reducción nivel de conciencia, convulsiones, cianosis.
• Grave: Coma profundo, pupilas fijas no reactivas, fallo cardiorrespiratorio, arritmias,
edema pulmonar.
Tratamiento: 䊳䊳 O2 al 100%, descontaminación GI. Si leve, los cuidados de soporte son
habitualmente suficientes. Si moderado/grave es necesario tratamiento específico para
fijar la cianida. Administre tiosulfato de sodio/nitrito, o EDTA dicobáltico 300 mg IV
durante 1 min, después 50 mL de glucosa 50% IV (repetir una vez si no respuesta tras
un minuto); o hidroxicobalamina (Cianokit®) 5 g durante 15 min repetido una vez si
requerido. Obtenga ayuda experta. Ver p. 847.
Monóxido de carbono. A pesar de la hipoxemia, la piel es rosa (o pálida), no azul,
dado que la carboxihemoglobina (COHb) desplaza al O2 de los puntos de unión de la
Hb. Por las mismas razones, puede ser normal la SpO2 de un pulsioxímetro. Comprue-
be los GAB en un cooxímetro (es decir, asegúrese que mide hemoglobina, SaO2, Met-
Hb y CoHb) que mostrará SaO2 bajo y CoHb alto (normal < 5%). Síntomas: Cefalea,
vómitos, pulso, taquipnea, y, si COHb > 50%, síncope, coma y parada cardíaca.
Tratamiento: 䊳䊳 Retire la fuente. Administre O2 100% hasta COHb < 10%. La acidosis
metabólica habitualmente responde a la corrección de la hipoxia. Si grave, anticípese al
edema cerebral y administre infusión de manitol IV (p. 831). Confirme el diagnóstico con
GAB rápidamente dado que los niveles pueden retornar rápidamente a lo normal. Moni-
torice el ECG. Si COHb > 20%, el paciente tiene manifestaciones neurológicas o psico-
lógicas, o deterioro cardiovascular, no responde al tratamiento o está embarazada, con-
sidere O2 hiperbárico: coméntelo con el servicio de tóxicos.
Digoxina. Síntomas: ↓ Cognición, halos visuales amarillo-verdes, arritmias, náusea y ano-
rexia. Si hay arritmias serias, corrija hipopotasemia e inactive con fragmentos de anti-
cuerpo específicos de digoxina (DigiFab®). Si se desconocen los niveles o la carga, admi-
nistre 20 viales (800 mg) –adulto o niño > 20 kg.
Metales pesados. Consiga ayuda de expertos.
Hierro. Desferroxamina 15 mg/kg/h en infusión IV; máx 80 mg/kg/d. NB: levado gástri-
co de ingestión de hierro en la última hora; considere irrigación de todo el intestino.
Anticoagulantes orales. Ver p. 351. Si sangrado mayor, administre vitamina K 5 mg IV
lento y concentrado de complejo protrombínico 50 U/kg (o si no disponible, plasma fres-
co congelado 15 mL/kg en infusión IV). Para un INR anormal sin (o mínimo) sangrado.
Ver BNF. Si es vital que continúe la anticoagulación consiga ayuda de expertos. Comen-
te con hematología. NB: los efectos sobre la coagulación pueden retrasarse durante 2-3
días tras la ingestión.
Opiáceos (muchos analgésicos contienen opiáceos). Administre naloxona, p. ej., 0,4-2
mg IV; repetir cada 2 min hasta que la respiración sea adecuada (tiene una t1/2 corta, así
que puede necesitar ser administrado con frecuencia o IM; máx ~10 mg). Naloxona
puede precipitar manifestaciones de abstinencia de opiáceos –diarrea o calambre, que
normalmente responderán a difenoxilato y atropina (p. ej., cofenotrona). Sede según sea
necesario (ver p. 15). Los que utilizan de forma inadecuada altas dosis de opiáceos pue-
den necesitar metadona (p. ej., 10-30 mg/24 h VO) para combatir la abstinencia. Refiera
para ayuda (OHCS p. 374).
Emergencias
puede mejorar el pronóstico. Busque ayuda experta.
Insecticidas organofosforados. Inactivan la colinesterasa—el aumento resultante de
acetilcolina produce la respuesta SLUD: salivación, lacrimación, micción (urinatium) y dia-
rrea. También busque sudoración, pupilas pequeñas, fasciculación muscular, coma, distrés
respiratorio y bradicardia. Tratamiento: Utilice guantes; retire ropas sucias. Lave la piel.
Tome muestra de sangre (sistemático de sangre y actividad de colinesterasa sérica).
Administre atropina IV 2 mg cada 10 min hasta atropinización completa (piel seca, pulso
> 70, pupilas dilatadas). Pueden ser necesarios hasta 3 d de tratamiento. También admi-
nistre pralidoxima 30 mg/kg en infusión IV durante 20 minutos, después 8 mg/kg/h, máx
12 g 24 h. Incluso si no hay convulsiones, el diazepam 5-10 mg IV lento parece ayudar.
Envenenamiento por paraquat (encontrado en herbicidas). Produce D y V, úlceras
orales dolorosas, alveolitis y fallo renal. Diagnosticada por prueba urinaria. Administre car-
bón activado rápidamente (100 g seguido de un laxante, después 50 g/3-4 h). 䊳 Obten-
ga ayuda experta. Evite O2 pronto (promueve daño pulmonar).
Envenenamiento por éxtasis. El éxtasis es una sustancia alucinógena semisintética
(MDMA, 3,4-metilenedioximetamfetamina). Sus efectos van desde náusea, dolor muscu-
lar, visión borrosa, amnesia, fiebre, confusión y ataxia, hasta taquiarritmias, hipertermia,
hiper/hipotensión, intoxicación acuosa, CID, ↑ K+, lesión renal aguda (LRA), necrosis
hepatocelular y muscular, colapso cardiovascular y SDRA. No hay antídoto y el trata-
miento es de soporte. El tratamiento depende de los hallazgos clínicos y de laboratorio,
pero puede incluir:
• Administración de carbón activado y monitorización de PA, ECG y temperatura
durante el menos 12 h (puede ser necesario enfriamiento rápido).
• Controlar diuresis y U y E (LRA p. 298-9), PFH, CK, sistemático de sangre y coagula-
ción (CID p. 352). La acidosis metabólica puede beneficiarse del tratamiento con bicar-
bonato.
• Ansiedad: lorazepam 1-2 mg IV como un bolo lento en una vena grande. Pueden
administrarse dosis repetidas hasta que se controla la agitación (ver p. 826).
• Taquicardias de complejo estrecho (p. 806) en adultos: considerar metoprolol 5 mg IV
• La hipertensión puede ser tratada con nifedipino 5-10 mg VO o fentolamina 2-5 mg
IV. Trate la hipotensión convencionalmente (p. 790).
• Hipertermia: intente enfriar, si Ta rectal > 39 oC considere dantroleno 1 mg/kg IV
(puede ser necesario repetir: comente con su adjunto y la unidad de toxicología). La
hipertermia con éxtasis es similar al síndrome de serotonina, y pueden ser necesarios
propranolol, relajación muscular y ventilación.
Serpientes (víboras). Anafilaxia: p. 794. Signos de envenenamiento: ↓ PA (vasodilata-
ción, cardiotoxicidad de la víbora); D y V; hinchazón distribuyéndose proximalmente a las
4 h de la mordedura; sangrado de encías o de zonas de punción venosa; anafilaxia; pto-
sis; trismus; rabdomiólisis; edema pulmonar. Pruebas: ↑ Leucocitos; coagulación anormal;
↓ plaquetas; U y E; hematíes en orina; CK; ↓ PaO2, ECG. Tratamiento: Evite el movimien-
to activo del miembro afectado (así que utilice férula y póngalo en cabestrillo). Evite inci-
siones y torniquetes. 䊳 Obtenga ayuda del servicio nacional de toxicología. ¿Está indicado
el antídoto (IgG de ovejas inmunizadas con veneno)? –p. ej., 10 mL IV durante 15 minu-
tos (adultos y niños) de Antisuero de Víbora Europea (de Monviato) para mordeduras de
víboras (ver BNF); –20 mL si envenenamiento grave, tenga adrenalina a mano –p. 794.
Monitorice el ECG. Para serpientes no endémicas en RU, ver BNF.
120 0,8
845
110
Emergencias
50
0,3
40
30 0,2
20
0,1
10
0 0
0 2 4 6 8 10 12 14 16 18 20 22 24
Tiempo (horas)
Fig. 19.26. Concentración plasmática de paracetamol vs tiempo, ver p. 844 para interpretación.
La gráfica puede ser errónea si VIH positivo (↓ glutatión hepático), o si se ha tomado parace-
tamol de acción prolongada, si hay enfermedades hepáticas preexitentes o si ha ocurrido induc-
ción de las enzimas hepáticas.
Reproducido de Drug Safety Update September 2012, vol. 6, issue 2: A1©Crown Copyright 2013.
846 䊳䊳 Quemaduras
Evaluación. Tamaño de la quemadura: es importante evaluarlo dado que influye en el
grado de respuesta inflamatoria (vasodilatación, permeabilidad vascular aumentada) y así
el desplazamiento de líquidos desde el volumen intravascular. Utilice la gráfica de Lund y
Browder (ver fig. 19.27) o la «regla de los nueves» (brazo: 9%; parte frontal del tronco
18%; cabeza y cuello 9%; pierna 18%; parte posterior del tronco 18%; perineo 1%). Igno-
re el eritema. Profundidad de la quemadura: determina el tiempo de curación/cicatriza-
ción; su evaluación puede ser compleja, incluso para los expertos. La mayor distinción es
si la quemadura tiene un espesor parcial (dolorosa, roja y con ampollas) o un espesor
completo (insensible/indolora; gris-blanca). NB: las quemaduras pueden evolucionar, par-
ticularmente en las primeras 48 h.
Reanimación. Reanime y organice traslado a unidades de quemados para todas las
Emergencias
quemaduras mayores (> 25% grosor parcial en adultos y > 20% en niños). Evalúe el sitio,
tamaño y profundidad de la quemadura (fig. 19.27, para calcular los requerimientos de
líquidos). El traslado es también recomendado en casos con quemaduras de grosor com-
pleto > 5%, quemaduras de grosor parcial > 10% en adultos o > 5% en niños o ancia-
nos, quemaduras en sitios especiales, quemaduras químicas o eléctricas y quemaduras
con lesión inhalatoria.
• Vía aérea: Cuidado con el desarrollo de obstrucción de la vía aérea si se inhalan gases.
Sospeche si historia de incendio en espacio cerrado, hollín en cavidad oral/nasal, pelos
nasales chamuscados o voz ronca. Una broncoscopia/laringoscopio flexible es útil.
Incorpore pronto a los anestesistas y considere una intubación precoz. Puede des-
arrollarse obstrucción en las primeras 24 h.
• Respiración: Excluya lesiones torácicas que amenacen la vida (p. ej., neumotórax a ten-
sión) y quemaduras que produzcan constricción –considere escarotomía si las que-
maduras del tórax están dificultando la excursión torácica (OHCS p. 766). Administre
O2 100%. Sospeche envenamiento con monóxido de carbono (p. 842) de la historia,
piel rojo cereza, y nivel de carboxihemoglobina (COHb). Con O2 100% el t1/2 de
COHb cae de 250 min a 40 min (considerar O2 hiperbárico si: pH < 7,1); signos del
SNC; >25% COHb o >20% si embarazada). SpO2 (oximetría) no es fiable en el enve-
nenamiento por CO.
• Circulación: Las quemaduras de grosor parcial > 10% en un niño y > 15% en adultos
requieren reanimación con líquidos IV. Coloque 2 vías IV de gran calibre (14 G o 16 G).
No se preocupe si tiene que ponerlas a través de piel quemada; el acceso intraóseo
es de valor en niños y puede utilizarse en adultos (ver OHCS p. 236). Asegúrelas bien:
son literalmente líneas de vida.
Utilice una tabla calculadora del flujo en quemaduras o una fórmula, p. ej.: fórmula de Park-
land (popular): 4 x peso (kg) x %quemadura = mL de solución de Hartmann en 24 h, la
mitad administrada en las 1as 8 h. Reemplace los líquidos desde el tiempo de la quema-
dura, no desde el momento en que fue visto por primera vez en el hospital. Las fórmu-
las son solo guías: ajuste la infusión IV de acuerdo a la respuesta clínica y a la diuresis; obje-
tivo de 0,5 mL/kg/h (1 mL/kg/h en niños), ~50% más en quemaduras eléctricas y lesio-
nes por inhalación. Monitorice la Ta (central y superficie); sonde la vejiga. Cuidado con
sobrepasarse («sobrecarga de líquidos») que puede conducir a complicaciones como el
síndrome del compartimento abdominal.
Tratamiento. «Enfríe la quemadura, caliente al paciente.» No aplique agua fría a que-
maduras extensas durante largos períodos: puede intensificar el shock. Tenga cuidado con
quemaduras de espesor completo circunferenciales de los miembros dado que puede
desarrollarse rápidamente un síndrome compartimental tras la reanimación con líquidos.
Descomprima (escarotomía y fasciotomía) según sea necesario. Si se transfiere a una uni-
dad de quemados, no rompa las ampollas ni aplique cremas especiales, pues esto puede
dificultar la evaluación. Son adecuadas gasas salinas simples o gasa de parafina; film adhe-
rente puede ser útil como medida temporal y alivia el dolor. Titule morfina IV para buena
analgesia. Asegure inmunidad contra el tétanos. No se utiliza de rutina profilaxis antibió-
tica.
Vendaje definitivo. Hay muchos vendajes para quemaduras de espesor parcial, p. ej.,
biológicos (piel de cerdo, piel de cadáver), sintéticos y crema de sulfadiazina de plata sola
o con nitrato de cerio como Fammacerium®; forma una escara dura que resiste la infec-
ción. Las quemaduras mayores de espesor completo se benefician de excisión tangencial
precoz e injertos de piel de grosor dividido, dado que la quemadura es una fuente mayor
de citoquinas inflamatorias y forma un rico medio para el crecimiento bacteriano.
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 19_Oxford 07/05/18 16:04 Página 847
Emergencias
cefalea y convulsiones. Taquicardia + disnea pronto dan lugar a bradicardia + apnea.
El CO es generado posteriormente en el fuego a medida que hay depleción de oxí-
geno. NB: Los niveles de COHb no se correlacionan bien con la severidad del enve-
nenamiento y parcialmente reflejan el estado de tabaquismo y la vida urbana. Utili-
ce normogramas para extrapolar los niveles pico.
䊳䊳 Se administra O2 100% para eliminar tanto la cianida como el CO.
䊳䊳 Involucre UCI/anestesistas pronto ante cualquier signo de obstrucción de la vía
aérea o fallo respiratorio: pueden ser útiles la intubación precoz y la ventilación.
䊳䊳 Incorpore ayuda de expertos en el envenenamiento por cianida –ver p. 842.
Agradecimiento
Agradecemos al Profesor Tor Chiu por su ayuda en este tema.
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
CAP. 19_Oxford 07/05/18 16:04 Página 848
848 Hipotermia
䊳 Tenga un alto grado de sospecha y un termómetro que mida temperaturas bajas. La mayo-
ría de los pacientes son ancianos y no se quejan de, o sienten, frío –así que pueden no
haber tratado de calentarse. En el joven, la hipotermia suele ocurrir por exposición al frío
(p. ej., casi ahogamiento), o es secundario a empeoramiento del nivel de conciencia
(p. ej., por exceso de alcohol o sobredosis de drogas).
Definición. La hipotermia implica una temperatura central (rectal) < 35 °C.
Causas. En el anciano, la hipotermia es con frecuencia causada por una combinación de
factores:
• Empeoramiento de los mecanismos homeostáticos: habitualmente relacionado con la edad.
• Baja temperatura en la habitación: pobreza, chabolismo.
• Termorregulación empeorada: neumonía, IM, insuficiencia cardíaca.
• Metabolismo reducido: inmovilidad, hipotiroidismo, diabetes mellitus.
Emergencias
849
V4
Onda J
Emergencias
Cortesía del Dr. R. Luke y Dr. E. McLachlan.
Emergencias
comunes. Los misiles surgen de la bomba o son secundarios, p. ej., cristales.
4. Quemaduras del fogonazo: Son habitualmente superficiales y ocurren en la piel
expuesta.
5. Lesiones por aplastamiento: Cuidado con la muerte súbita o lesión renal aguda por
rabdomiólisis tras la liberación.
6. Contaminación: Existe una preocupación creciente sobre el uso de materiales bio-
lógicos o radiactivos en las bombas terroristas. Incluso explosiones domésticas o
industricales pueden esparcir químicos ampliamente y producir tanto contamina-
ción superficial como penetrante. Considerar la localización y el mecanismo de la
exploxión, y busque consejo.
7. Daño psicológico: P. ej., trastorno de estrés postraumático (OHCS p. 353).
Tratamiento: Utilice el mismo procedimiento que cualquier traumatismo mayor (OHCS
p. 778). Ponga en reposo y observe a cualquier sospechoso de haber estado expues-
to a una explosión significativa, pero sin otra lesión. Lesión por arma de fuego: ver
OHCS p. 789. Las lesiones de explosión significativas, cualquiera que sea la causa,
deben ser comunicadas a la policía para su investigación.
20 Bibliografía
Contenidos
Capítulo 1 Pensando en la medicina 852
Capítulo 2 Historia y exploración 853
Capítulo 3 Medicina cardiovascular 853
Capítulo 4 Neumología 856
Capítulo 5 Endocrinología 858
Capítulo 6 Gastroenterología 858
Capítulo 7 Nefrología 859
Capítulo 8 Hematología 859
Capítulo 9 Enfermedades infecciosas 859
Capítulo 10 Neurología 860
Capítulo 11 Oncología y cuidados paliativos 860
Capítulo 12 Reumatología 861
Capítulo 13 Cirugía 863
Capítulo 14 Química clínica 864
Capítulo 15 Síndromes epónimos 864
Capítulo 16 Radiología 867
Capítulo 17 Intervalos de referencia 867
Capítulo 18 Procedimientos prácticos 867
Capítulo 19 Emergencias 867
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Parámetros
fisiológicos 3 2 1 0 1 2 3
Cualquier suplemento Sí No
de oxígeno
Nivel de
conciencia A V, P o U
Fig. A 1. National early warning score para pacientes adultos. © RCP 2012.
1 Royal College of Physicians. National Early Warning Scores (NEWS): standardising the assessment of
acute illness severity in the NHS. London: RCP, 2012.
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/
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PUNTUACIÓN FRECUENCIA DE
RESPUESTA CLÍNICA
893
NEWS MONITORIZACIÓN
• Continúe la rutina de
0 Mínimo cada 12 horas monitorización NEWS en cada
grupo de observaciones
• La enfermera informa
urgentemente al equipo médico
que cuida del paciente
Total: 5 o más
Frecuencia creciente hasta un • Evaluación urgente por un médico
o 3 en un
mínimo de cada hora con competencia para evaluar
parámetro
pacientes agudamente enfermos
• Cuidado clínico en un ambiente con
posibilidad de monitorización
• La enfermera informa
inmediatamente al equipo médico
que cuida del paciente –este
debería ser al menos al nivel de
especialista
• Evaluación de emergencia por un
Monitorización continua de
Total: 7 o más médico con competencia para
signos vitales
evaluar pacientes críticos, que
incluye a expertos con habilidades
para manejar la vía aérea
• Considerar trasladar a un área
clínica de nivel 2 o 3, es decir,
cuidados intermedios o UCI
No responde y no respira
normalmente
Llamar al aquipo
de reanimación
RCP 30:2
Conecte desfibrilador/monitor
Minimice interrupciones
Evalúe el ritmo
No desfibrilable
Ritmo desfibrilable Retorno de circulación
(actividad eléctrica
(FV(TV sin pulso) espontánea
sin pulso/asistolia)
Parada cardiorrespiratoria e
䊳䊳 Asegure la seguridad del paciente y de usted mismo.
䊳䊳 Confirme el diagnóstico: un paciente que no responde y no respira adecuadamente está en
paraca cardiaca (un control manual del pulso es impreciso y no recomendado).
Soporte vital básico. Grite para obtener ayuda. Pida a alguien que llame al equipo de para-
da y que traiga el desfibrilador. Anote el tiempo. ABC:
䊳䊳 Vía aérea: Cabeza inclinada (si no lesión de columna) y elevación del mentón/tracción de
la mandíbula.
䊳䊳 Respiración (breathing): Observe, escuche y sienta la respiración durante no más de 10
segundos. Si hay cualquier duda sobre si la respiración es normal, comience con las com-
presiones torácicas.
䊳䊳 Compresiones torácicas: Coloque la base de una mano en el centro del tórax (mitad infe-
rior del esternón). Coloque su segunda mano sobre la primera y entrecruce los dedos. Ponga
los brazos rectos. Realice compresiones a una frecuencia de 100-120/min. El objetivo es
comprimir el esternón 5-6 cm. Tras 30 compresiones, haga 2 respiraciones de rescate. No
interrumpa las compresiones > 10 s. Continúe con una razón de 30:2 hasta que esté dis-
ponible el desfibrilador.
Soporte vital avanzado. Ver algoritmo fig. A3.
• Continúe compresiones torácicas mientras se colocan los parches adhesivos de desfibrila-
ción/monitorización. Planifique todas las acciones antes de interrumpir las compresiones
torácicas.
• Interrumpa las compresiones torácicas < 5 s para evaluar el ritmo. Determine si el ritmo es
desfibrilable (FV/TV sin pulso) o no desfibrilable (asistolia, actividad eléctrica sin pulso).
Ritmo desfibrilable: FV/TV sin pulso
䊳䊳 Una única persona realiza las compresiones torácicas ininterrumpidamente mientras que
otra prepara la desfibrilación: permanecer separado, aleje 1 m el dispositivo de adminis-
tración del oxígeno.
䊳䊳 Seleccione la energía apropiada en el desfibrilador (150 J o guías del fabricante). Cuando
el desfibrilador esté cargado y los controles de seguridad completados, el reanimador que
realiza la compresión torácica permanece separado y se administra la descarga.
䊳䊳 Se reinicia la RCP inmediatamente (30:2). Reevaluar pulso/ritmo tras 2 minutos de PCR.
䊳䊳 Repetir si persiste el ritmo desfibrilable. Administre fármacos tras 3 descargas (ver Fárma-
cos en este tema).
Ritmo no desfibrilable: asistolia/actividad eléctrica sin pulso (EASP)
䊳䊳 Continúe PCR 30:2. Obtenga acceso IV y vía aérea segura. Una vez que se obtenga una
vía aérea segura, cambie a compresiones continuas y ventilación. Administre 1 mg IV de
adrenalina.
䊳䊳 Compruebe el ritmo cada 2 minutos.
䊳䊳 Considere causas reversibles (4 Hs y 4 Ts: hipoxia, hipovolemia, hiper/hipocaliemia/otros
trastornos metabólicos, hipotermia, trombosis, neumotórax a tensión, taponamiento, toxinas).
Fármacos
• Administre adrenalina 1 mg i.v. cada 3,5 minutos tanto para ritmos desfibrilables (tras la 3a
descarga) como no desfibrilables. En la práctica, esto quiere decir tras cada comprobación
del ritmo o descarga1.
• En los ritmos desfibrilables, administre amiodarona 300 mg IV tras 3 intentos de desfibrila-
ción. Considere una dosis adicional de 150 mg IV tras 5 descargas. Lidocaína es una alter-
nativa.
Interrumpir la reanimación. Necesita juicio clínico: ¿cuál es la probabilidad de obtener un
retorno exitoso de una circulación espontánea? Los intentos son habitualmente continuados
si hay un ritmo desfibrilable o una causa reversible. Es razonable interrumpirla si asistolia
> 20 min sin causa reversible. Pida la opinión de otros en el equipo de reanimación.
Decisiones de reanimación. Considere, discuta y registre las decisiones de RCP:
• Ante la petición de un paciente con capacidad.
• Como parte del cuidado al final de la vida (p. 12, p. 536).
• En enfermedad grave incapacitante.
䊳 Su paciente debe tomar parte en las decisiones sobre RCP (a no ser que esto pueda pro-
ducirle daño físico o psicológico). Explíquele su decisión, incluyendo la futilidad.
䊳 No realice juicios sobre la calidad de vida de los demás basándose en su propia percep-
ción.
1 El metanálisis falla a la hora de mostrar que la adrenalina aumenta la supervivencia hasta el alta hos-
pitalaria (http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/24193240). Se esperan los resultados de los ensayos clí-
nicos aleatorizados (Paramédico 2: Ensayo de Adrenalina ISRCTN 73485024).
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Antieméticos
Ciclizina 50 mg/8 h VO/IM/IV ES: somnolencia
Metoclopramida 10 mg/8 h VO/IM/IV ES: extrapiramidales,
especialmente en adultos jóvenes
Ondansetrón 4-8 mg/8-12 h VO/IV ES: estreñimiento; cefalea.
CI: síndrome de QT largo
Antihistamínicos
Clorfenamina 4 mg/4-6 h VO. EX: adormecimiento; retención
En anafilaxia: 10 mg IM urinaria; boca seca; visión borrosa;
Ceritinina 10 mg/24 h VO trastornos GI
Loratidina 10 mg/24 h VO
Ver también: Prescribiendo en cuidados paliativos (p. 532-537), laxantes (p. 260), inha-
ladores (p. 183), digoxina (p. 115), insulina (p. 589), fluidos (p. 666), prescripción de oxí-
geno (p. 189), naloxona (p. 842).
Mas libros: https://www.facebook.com/groups/mibibliotecademedicina/