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Garcia-Gonzélez,Jaime-E. Causas de! mal so de los plaguiidas (con ‘énfasis on Costa Rica) Tecnologie en Marcha. Vol. 12,n0. 4 * Convenio Oficina ‘de Extonsién Comunitariay Consarvacion del Moco Ambiente (UNED) - Centro delnvestgacién ‘en Contaminacién “Ambiental (UCR). ‘San José, Costa, Rica CAUSAS DEL MAL USO DE LOS PLAGUICIDAS (Con énfasis en Costa Rica) ‘0s problemas causados por los plaguicidas tienen raices econémicas y sociales que adoptan la apariencia de ser problemas técnicos. De modo que, todos los esfuerzos por hallar tinicamente soluciones técnicas estas problemas estén condenados -en ‘gran medida- al fracaso, puesto que basicamente tratan los efectos, en lugar de as causas. S610 conociendo las ratces de la problemdtica estaremos en la disposicién de elaborar y poner en préctica estrategias de solucién més eftcaces y exitosas. (Adaptado por el autor de una idea ‘original de Harry Rothman) RESUMEN Este articulo destaca en forma sucinta las. ‘causas que inducen a las personas involucra- das directa, indlrecta, consciente o inconscien- temente con los plaguicidas, a realizar un usoy ‘manejo indebido de lestos productos. INTRODUCCION Los estudios realizados relacionados con el uso y manejo de los plaguicidas en el pals revelan claramente el hecho de que stos no estén siendo utiizados de la mejor manera al: i) hacer las aplicaciones bajo condicio- nes ambientales destavorables; Jaime-E. Garefa-Gonzdlez* ii) _aplicar sobredosis al prepararlas soluciones con concentraciones mayores a las recomendadas 0 al realizar aplicaciones innecesarias para “asegurar’ las cosechas (Arauz et al, 1983; Monge, 1993-a-b; Navarro y Barquero, 1990; Rodriguez, 1983; Rottger y Saborio citados por Barquero, 1988; Vega, 1990); ii) utilizar éstos fuera de las épocas recomendadas (Solérzano, 1987); 'v)aplicar productos prohibidos 0 restringidos en cultivos, animales 0 instalaciones (bodegas, casas, otras) enlos cuales no esté autorizado su Uso (Bolafios y Santacruz, 1991; Chacén, 1991, 1988); ¥) no. cumplir con las condiciones ‘minimas de seguridad cuando se ‘manipulan estas sustancias (Arias et al., 1989); vvi) no aplicar el producto adecuado; vi) utilizar plaguicidas sin saber exacta- ‘mente para qué se usa el producto, con eriterio preventivo o porque se lo han recomendado, pero sin poder reconocer exactamente el objetivo de su aplicacién (Chacén, 1988); vii) cambiar el método de aplicacién recomendado. Vo 2.0.4. ‘TECNOLOGIA EN MARCHA Eluso de los plaguicidas enla actualidad es, mientras nose conozcan otras opciones viables, impres- cindibleen algunos casos: ix) manejar inadecuadamente los ‘desechos (recipientes) y remanentes de plaguicidas. x) _subestimarlaimportancia del Mantenimiento de los equipos de aplicaci6n y de proteccién personal. xi) preparary aplicar mezclas ("c6cteles” ‘© "bombas”) no compatibles 0 inadecuadas de plaguicidas (Putnam y Penner, 1974). CAUSAS ESPECIFICAS Este mal uso que se ha venido dando ‘menudo a los plaguicidas y, sobre todo, enpalses pobres con economias sustentadas mayoritariamente en la agricultura, como Costa Rica, ha sido -y continia siendo- la consecuencia de uno 0 varios de los siguientes tactores: 1. Ignorancia, alno tener conocimientos precisos sobre: = _ les organismos que componen el agroecosistema; = elconcepto de plaga; = _ laaplicacién, el manejo y uso correcto de estas sustancias; = _ elmantenimiento adecuado del equipo; — las reglamentaciones existentes; = los efectos negativos que estas sustancias tienen cuando se usan inadecuadamente o confines diferentes a aquellos para los que fueron creadas (Bull, 1989; Coto y ‘Szostak, 1993; Chediak et al, 1983; Garcia, 1993-b; Riding, 1977; Roldan y Wesseling, 1990; USAID/RENARM, 1992; von Diszeln, 1991), 2. Negligencia, al no manipular con las debidas precauciones estas sustancias, a pesar de las advertencias y del conocimiento de sus peligros potenciales (USAID/RENARM, 1992) Intereses econdmicos por parte de algunos fabricantes, vendedores y expendedores sin escripulos morales ni ética profesional, que recomiendan la.utilizacién de plaguicidas de acuerdo con criterios puramente mercantilstas. Aqui deben mencionarse también los casos de los contrabandistas de plaguicidas prohibidos o restringidos en el pats, y elde los funcionarios piblicos corruptos (Lutzenberger, 1985; Norris, 1982; Roldan y Wesseling, 1990; Thrupp, 1986, 1988). Publicidad y propaganda incorrectas orientadas al consumismo. Ocasionalmente se omite 0 encubre, ‘con recursos de diversa indole, el peligro real y potencial de estas sustancias; lo mismo que se insindano hacen ofrecimientos y afirmaciones relacionadas con aspectos econémicos, de eficaciaode “seguridad” que no corresponden ala realidad (Bolafios y Santacruz, 1991; Bull, 1989; Chediak eta., 1983) Manipulacién y comercializacién de productos al margen de las leyes y reglamentaciones existentes. sin ccontar con los permisos requeridos (ver Cuadro 1), expendiendo productos en locales inadecuados, en envases dafiados, o con etiquetas en ‘mal estado (borrosas o rotas), esoritas ‘en lenguale poco claro, con letras demasiado pequefias, en otro idioma, sin contener toda la informacién exigida (Arias, 1993; Barquero y Navarro, 1990; Bolafos y Santacruz, 1991; Bull, 1989; Costa Rica 1978, 1984, 1987, 1990; Garcia, 1994; Mendoza, 1989; Morera, 1993). Restricciones y disposiciones recomendadas por entes gubernamentales e intemacionales ignoradas por los fabricantes, los distribuidores 0 los comercializadores de plaguicidas (Bolafios y Santacruz, 1991; Norris, 1982). Este fue el caso 1% VoL2.ma.4 TECNOLOGIA EN MARCHA CUADRO |. Situacién de establecimientos que manipulan plaguicidas supervisados por el Dopartamento de Registro y Control de Sustancias Téxicas y Medicina del Trabajo del Ministerio de Salud (Morera, 1993) Tipo de establecimiento Con permiso* inpermiso Clausurados Total (1.1.99-15.11.99) (1.1.99-15.11.93) (Desde 1990) Expendios 270 36 2 318 Bodegas 50 21 - mn Formuladoras y sintetizadoras 12 3 16 Reempacadoras y reenvasadoras 14 5 19 Viveros 21 10 - 31 TOTAL 367 5 13 455 * Vigenta, vencdo 0 en trémite de renovacion. que se presenté con un herbicida en 8. Falta de leyes reguladoras claras y Costa Rica el cual se registré para su especiticas de las diferentes utllizaci6n en solo cuatro cultivos actividades relacionadas con el (soya, kudzu, melén y café); sin ‘embargo, en la etiqueta se ‘mencionaban ademas de los cultivos autorizados, las palabras ‘protege eficientemente, entre otros cultivos, los siguientes: soya, kudzd, melény café" (destacado no es del original). Al mismo tiempo, un anuncio del mismo ‘producto en un periddico local reco- mendaba su uso en 34-cultivos diferentes (Chediak et al, 1983; Intemational Agencies, 1982). Entre las disposiciones internaciona- les de mayor relevancia se encuentra laversi6n, enmendadacon|aincusion 9,

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