Gerardo Parajeles Vit Enun valioso antecedentejurisprudencial, se le otor- g6 legitimacién para la apertura al apoderado especial judicial del causante, mandato concedido dentro de un proceso ordinario de nulidad de donacién: “El Tribu- nal tuvo a la vista el expediente 96-001215-181-Cl que es ordinario que se tramita ante el Juzgado Segundo Civil de Mayor Cuantia del Circuito Primero Judicial de San José, en donde consta que el actor es J. J. A., con- tra E. E. J.A., dos hermanos més de éste, y contra O. A A.~ Ese expediente tiene un auto en que se ordend re- servar el dictado de la sentencia hasta que no se aper- sone el albacea de la sucesién del actor- En ese ordina- rio se pretende la nulidad de una donacién que hizo el actor a su hijo el demandado E. E,, en donde el actor se dej6 el usuufructo, y se pretende también la nulidad de Ja venta de E.E. a su madre y dos hermanos del vende- dor- Por otro lado, consta en autos, que el causante dejé ademas de esos hijos, a dos hijas més que no fue- ron demandadas en ese proceso ordinario, y que even- tualmente pueden ser herederas del causante, y éstas dos hijas por alguna circunstancia no han mostrado in- terés aqui, pero de no procederse como lo solicita el gestionante podria resultar al gtin perjuicio paraesas dos personas, maxime que en el ordinario se dict resolu- cidn difiriendo la sentencia hasta que no se apersone el albacea de la sucesién del actor.- En esas condiciones, el gestionante actud conforme lo obliga el poder que el actor del ordinario, aqui causante le dieraen aquél pro- ceso, y conforme al numeral 1283 del Cédigo Civil, por lo que se considera que si tiene el licenciado C. V. S.C. legitimacion para plantear la apertura del sucesorio de quien fue su cliente y poderdante.- Se impone por con- siguiente, revocar la resolucin recurrida, para que se disponga la apertura del sucesorio, si otro motivo legal no lo impide.- Se le hace ver al A-quo que debe tomar las medidas preventivas correspondientes para el nom- bramiento de albacea que disponga, pues en el ordina- Aspecto Generales —2 rio figuran como demandados la esposa del causante y tres de sus hijos, por lo que si alguno de ellos resulta nombrado albacea, se impone nombrar albacea espect- fico para que atienda el proceso ordinario, y se aperso- ne en aquél como lo dispuso ese juzgado.” Para continuar con la ejecuci6n de sentencia de un proceso de desahucio, la jurisprudencia le otorgs legi- timacién al actor de ese asunto, sin que se confunda con los alcances del fuera de atraccién. Se resolvid: “El auito impugnado se conoce en lo apelado, coneretamente en cuanto rechaza la solicitud de acumulacién. La aper- tura del suicesorio es promovida por el seftor A. S. 5. ¢ c. A. M. P, en su calidad de acreedor producto de un proceso de ejecucién pendiente. Se trata de un proceso de desahucio donde el causante figuraba como actor y M. P. como demandado, el cual fue declarado sin lugar con costas a cargo del vencido. Ese asunto se encuentra en etapa de ejecucidn -liquidacidn de costas- y se pre- tende la acumulacin por fuero de atraccién. Lo resuel- toes correcto y debe mantenerse. El supuesto descrito no encuadra en ninguna de las hipétesis del articulo 900 del Cédigo Procesal Civil. Por el contrario, el falle- cimiento del actor del desahucio constituye una causa de interrupcién del proceso en virtud del instituto pro- cesal denominado “sucesién procesal”. Doctrina de los numerales 113 y 201 del citado cuerpo legal. En efecto, el desahucio ~incluyendo su ejecucién en el mismo ex- pediente- debe continuar en el mismo Juzgado, ahora con la sucesién del actor R. A. P. M. representada por la albacea. No hay duda que el ejecutante est legitimado para abrir la universalidad, pero tinicamente con la fi- nalidad de dotar de representacién al sucesorio y, de esa manera, continuar con la ejecucién de la sentencia. Tribunal Primero 1oras 25 minutos del 27 de mayo de 1995.