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“BURGH! FLORENCIA VICTORIA C/ SWISS MEDICAL ART S.A. Si ACCIDENTE -LEY ESPECIAL” EXPT 7907/2011 EXCMA, CAMARA: La Sra. Juez “a-quo”, en el marco de una accién destinada al cobio de las prestaciones previstas por la Ley 24557 y sus modificalorias, desestimo el planteo de inconstitucionalidad de los arts, 1 y cones. de la Ley 27348 y declard, en consecuencia, la falta de aptitud jurisdiccional directa para conocer en un reclamo que, en su tesis, debia transitar por las comisiones médicas creadas por el ast, Stde la Ley 24241 (ver ts. 23/26). Tal decisién ha sido apelada por la actora a fs. 2729, y VE solicita mi opinién acetea de la viabilidad de la queja (ver f. 32), Las constituciones clisicas del siglo XIX, que tuvieron como modelo la de los Estados Unidos de América (entre ellas, la nuestra), partieron del principio republicano basico de la division de poderes y, en coherencia con sus aleances, establecicron la potestad exclusiva del Poder Judicial para resolver los conilictos de derecho, con imparcialidad y sin injereneias. Aun a ri os de ser redundantes y como si vislumbraran tentaciones futuras, los constituyentes incluyeron una veda expresa ps que ‘el Poder Ejecutivo jams se arrogara facultades judiciales, y podria mencionarse, como ejemplo, el viejo art, 95 de ta Constitucion Nacional de 1853, hoy art, 109, luego de la relorma de 1994, § ¢ advierte de una manera clara el celo de aquello que luego se denomind a “jurisdic i6n primaria”, y que se resume en la consigna anglosajona “para los conflictos, solo los jueces Ahora bien, este principio, que podriamos denominar de Yestricta jurisdiccionalidad inicial”, durante el ilo XX, se entfento con una realidad dindmica, compleja y cambiante, de intensa especializacién, con crecimiento cuantitativo y reclamos plurales y no aislados. a transformacion, unida a fa tigidez de los procesos judiciales tradicionales, no concebidos: para dar respuesta a reclamos gcneralizados, contribuyo, desde una perspectiva pragmatica, a la atribucién posible de la jurisdiceion primaria a organismos administrativos, cuando las pretensiones 0 las controversias necesiten, para ser resueltas, conocimientos particulares técnivos o cientiticos, 0 se relieran a émbitos regulatorios particulares, que requicran una uniformidad 0 inmediates, que desavonseje criterios heterogeneos 0 contradictorios EL ordenamiento. positivo argentino no ha sido ajeno a adaptabilidad y a modo de ejemplo, cabria evocar el régimen que otorgaba potestades a las cajas de jubilaciones para reconocer © denegar el derecho y su ulterior revisién judicial plena con el recursa del hoy derogado art, 14 de la Ley 14234, que la Corte Suprema de Justicia declar6 constitucional en la inteligencia de que la dltima palabra siempre seria la de Jos jueces (ver Pallos 244:548 y el lisis de Amadeo Allocati en el T.V del “Tratado de Derecho “Trabajo” dirigido por Mario Deveali, pigs. 270 y sgtes,, 2° Edicién, Editorial .a Ley}. Un criterio anilogo rige en sistema de asociaciones sindicales, al otorgirsele facultades jurisdiccionales al Ministerio de Trabajo de la Na n para decidir contiendas de enctiadramiento 0 de personeria y todo conflicto de vida interna o de proceso electoral, con ¢] reexainien judicial sin limites que est tablece el art. 62 de la Ley 23581. Tambien podria evocarse el réyimen de la regulacidin de energia y sus reclanios (art. 66 de la ley 24076) y, ya_en el marco de un ordenamiento tutelur, Jas ins ancius previas a los reclamos de los derechos del consumidor La modificacién al paradigma de la jurisdieeion primaria ha sido descripta con precisién por el Alto Tribunal en el considerando 13) de la Sent ia dictada el 5 de abril del 2005 en autos “Angel Estrada y C a, S.A", ail que alvide Ia Sra. Juez ‘a-quo” a f. 25, pero cabe destacar con singular énfasis que el cambio de marras, generado en Tas transformaciones fitcticas, no implica un abandono del principio. constitucional basic y, obviamente, solo puede coneebirse como valido si no conlleva una eliptica 6n Nacional. transgresion de lo dispuesto por los arts.109 y 116 de la Constitue La Corte Suprema de Justicia de ta Naeidn fue muy clara al respecto y, en aras de resumir tas exigeneias de legitimidad de todo diseio que atribuya a organismos ajenos al Poder Judicial el cono iniiento inicial de fos contlictos, cabe requerit a) Una tipologia de controversias cuya solucién remita a conocimientos ténice’s especificos y a respuestas de automaticidad y autoaplicacién; b) Un procedimiento bilateral que resguarde de una manera cabal cl derecho de defensa de los peticiona rios; ¢) Una limitacién temporal del tramite razonable y de plazos perentorios, que no implique dilatar el ack eso a ki jurisdiceién y d) La revisién judicial plena, sin cercenamientos y en todas las facetas de la controversia. Sentado lo expuesto, se impone evalua si el diseito de la ley 27348 es coherente con estas pautas impreseindibles y, a mi juicio, y mas alld de algin reproche de desprolijidad lingitistica a la que estamos habituados, ef sistema, sin soslayar Jas objeciones que podrian suscitar, no contradice los parimetros deseriptos, Hago esta afirmacién porque, los reclamos concernientes a los infortunios laborales se centralizan, en lo eseneial, en los aspectos m 'dicos y en lo referido aia causalidad y a Ja incapacidad, y lo cierto es que el art. 3 de la eitada disposicidin ley prevé un plizo perentorio y Fatal para expedit que no puede exceder los 60 dias, Ministers o Piblico de la Nacién contados desde ta primera presentacién y a cuyo veneimiento queda expedita la via judicial, La norma adinite 1a. posibilidad de una prorroga, pero debe ser excepeional y fundada, y también establece responsabilidad de los funcionarios por la demora, No dejo de advert que el legislador incurre en una dudosa delegacién hacia la Superintendencia de Riesgos de ‘Trabajo en lo que hace al procedimiento, pero no se puede afirmar en este momento, en forma dogmética, que lo creado, cuya validez no esté atin en tela de juicio, vulnere ostensiblemente cl debido proceso. adjetivo, en particular si se tene en cuenta ta obligatoriedad del patrocinio letrado. Ahora bien, lo traseendente, para la validez de todo sistema, consiste, como vimos, en la consagracién de una revision judicial e ieaz. La norma que nos retine establece un régimen algo parco y bartoco que, a opeidn del trabajador, permite insistir ante la Comis jin Médica Central y luego recurrir al Tribunal de Alzada, o cacstionar Io decidide por la Comision Médica Local ame el Juez del Trabajo, Se ha clegido la terminologia “recurso” y nada indica que éste no deba ser pleno, con la posibilidad de un proceso de cognicién intenso y In produceién de prueba, tal como se interprets que debian ser las vias de isidn similares, como la del ya evocado art.14 de la Ley 14236. La posible Lai nz actual acerea del proceso judicial conereto ulterior, deber’ ser conjurada por los magistrados y cn esa inteligencia se parte de la premisa del ejercicia de potestades instructorias, de ser ne arias y de velo cn ta bilateralicad y el derecho de defensa, En el orden de ideas aludido es decisive que, en el ordenamiento de marras, fos jueces son los que tienen la dltima palabra, los que deciden con preseindencia de lo resuetto por las comisiones médlie: , que en nada los vineula y, por Jo tanta, se curnpl 1. con el “test de constitucionalidad” mencionado, No soslayo las argumentaciones relacionadas eon el acceso la jurisdicciém que surgen de las normas internacionales que se eitan, pero destaco que ecitido plazo de 60 dias que se les impone a las comisiones médicas, algo mayor que el del Servicio de Conciliacién Obligatorio, que deja de ser imperativo, no dilata tanto el derecho es inconstitucional a recurrir a los jueces como para considerar que la normativa Creo necesario destacar que no es trasladable al tema que nos retine [x tesis sentada por el Alto Tribunal én las ntencias dictadas 7 de setiembre del 2004, en “Castillo Angel e/Cerimica Alberdi”, ef 13 de marzo del 2007 en “Venlialgo Inocencio ¢/Maptre Acone ua” y el 17 de marzo del 2012 cn “Obregén Francisco c/Liberty”, porque en dichos pronunciamientos se invalids cl sistema desde la perspectiv de la centralizacién, federal de los reclamos en defensa de la jurisdiceién local y no s analiz6 Ja | ‘midad de una instancia previa La diferencia que el art.) de la Ley 27438 establece en su tercer parrafo. cn lo que hace a los trabaiadores no registrados y Ja posibilidad de estos:de: reclamar interponicndo una accién directa, sin transitar por las comisiones médicas, tampoco es invazonable, porque es Hogi co presumir la existencia de un debate sobre la conceptualizacidn del vinewlo que exceda ta aptitud dle dichos organismos. Siempre, desde la doctrina y la cétedra, he sido exitice éptico, tanto en Deres ho del Trabajo, como en Derecho de Daios, de las instanci previas imperativas y lo sigo siendo, Pero no corresponde que intente, desde a funciin, reemplazar la axiologia del legislador por mi axiologia. No todo aqucllo que eonteadice mi valoracidn 0 mis vaticinios cientificos es inconstitueional. Lo medular, para juzgar el nuevo régimen, mas alli de sus equivocos posibles, reside en que permanece reservado al Poder Judicial especiatizado, 0 sea esta Justicia Nacional del ‘Trabajo, el minucioso examen pleno de fo actuado por tas comisiones médicas, en esos 60 dias, asi como la cortoboracién definitiva de los presupuestos de responsabilidad y los aleanees del erédito, Sugicro, en sintesis, confirmar lo resuelto, ‘Tenga V.E, por evacuada la vista. Buenos Aires, 12 de julio de 2017, juardo O, Alvarez Fiseal General Dictamen N° 72.879 VRG pte. N"

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