ITRODUCCION
La educacién como problema filosofico y politico
Desde su origen griego, la filosofia ha mantenido con la educacién una relacién especial.
Platén ubicé esa relacién, de manera privilegiada, bajo la impronta de la politica. El fildsofo,
preocupado por la justicia, encuentra que el destino de la pdlis estard ligado al tipo de
educacién que tuvieron sus integrantes (Platén, Repiiblica:423d-424c). La educacién tendra,
entonces, la funcién politica de formar ciudadanos y, como la pélis es el ambito en el que los
‘seres humanos son auténticamente libres, la educacién formara para la libertad, Ese camino
hacia la plenitud sera un trayecto guiado por y hacia las normas que rigen la polis. Por lo
tanto, en un mismo movimiento, la educacién debera transmitir saberes y practicas, integrar
comunitariamente y preparar para la vida publica,
Si bien es evidente que el ciudadano ateniense no es el mismo que el modemo y que
la concepcién del Estado, el significado de la libertad, la integracién social o la ensefianza
actuales son también diferentes, podemos reencontrar, en el nticleo de toda educacién, la
médula de la preocupacién politica platénica. En esta perspectiva, la pregunta filosofica por
la justicia lleva a desplazar el analisis del acto justo individual a una pdlis justa y al papel
central que le corresponderia a la educacién en su consecucién (idem:368e-369a)
Asimismo, queda interpelado el lugar que concieme a la figura del Estado y en qué medida
es posible, en ese contexto, la libertad. Quiz sea en el conocido motivo platénico de la
alegoria de la caverna (idem:514a-521b) -en el que el esclavo es obligado a salir a la luz
desde su prisin subterranea para alcanzar la verdad y luego regresar, transformado, a su
antigua morada- donde se evidencia el aspecto crucial del problema politico de toda
educacién: qué significa y hasta dénde se puede o debe inducir o forzar a otro en nombre
del saber y la liberacién del desconocimiento. Pero ademés: quién es el liberador, quién
atribuye, 0 se atribuye, ese papel y, consecuentemente, en qué consiste la libertad de ese
esclavo. Mas alla de que Platén intentara obviar el problema asignando un lugar central a
los filésofos en ese proceso de liberacién y de construccién de una polis justa, la
contraposicién entre obligacién y libertad, la tensién entre ensefiar lo que hay (0 lo que debe
ser transmitido) y dar un lugar a otro, en el marco de la organizacién de una comunidad, es
una constante politica de todo acto educativo.
Una cuestién cercana, aunque construida desde una perspectiva diferente, la
encontramos en la base del proyecto politico y educativo de la llustracién (Cabrera y Cerletti,
2001). Una de las paradojas de la educacién concebida por la tradicién iluminista consistia
en satisfacer, por un lado, el objetivo de autonomia del sujeto -servirse de la propia razén,
sin tutelas ajenas- y, por otro, la necesidad social de que ese sujeto sea gobernable. La
magnitud de esta contraposicién ya habia sido percibida por Kant en el célebre opuisculo
Was ist Aufklérung? (¢Qué es la llustracién?) y puesta de manifiesto en el dictum que le
atribuye a Federico Il de Prusia: ‘razonad todo lo que querdis y sobre todo lo que querdis,
pero jobedeced!" (Kant, 1978:28 y 37). Para intentar resolver esta dicotomia entre la
autonomia de los sujetos ilustrados y la exigencia de limitar la libertad en funcién de la
necesidad de gobernar, Kant introdujo la distincién entre el uso publico y el uso privado de la
razén. Recordemos que él consideraba al primero como aquel que, en calidad de maestro,
se puede hacer de la propia razén ante el gran pliblico. Por uso privado entendia al que ese
mismo personaje puede hacer en su calidad de “funcionario" (28). El uso pliblico no debia
tener limites, y el uso privado si, ya que "existen empresas de interés ptiblico en las que es
necesario cierto automatismo para [...] poder ser dirigidos por el gobierno hacia los fines
pliblicos. En estos casos no cabe razonar, sino que hay que obedecer" (28-29). Es decir que
maestros 0 profesores deberian hacer un cuidadoso uso privado de su razén -el que
efectian en calidad de funcionarios del orden estatal-, porque su responsabilidad consiste,
fundamentalmente, en mantener la ligadura del lazo constituyente (y las finalidadesptiblicas). En ese Ambito, no se podria poner en cuestién lo que opera como condicién de
posibilidad de la libertad, que consiste en el ejercicio pliblico de la razén.
En su afan de hallar procedimientos que limiten y, al mismo tiempo, legitimen un
estado de cosas, Kant encontraba que se podrian suscitar inconvenientes si se razonara
cuando se deberia obedecer y, entonces, colocé el limite alli donde se hace necesario que
el sujeto ilustrado, mas que razonar, acte con docilidad. Ahora bien, cuando Kant se
preguntaba si la suya era una época ilustrada, respondia que no todavia, pero que si era
una época de ilustracién, En este sentido, la llustracién no era pensada como un estado
alcanzado, sino como una actividad progresiva cuyo logro era superar los obstdculos que
impidieran servirse de la propia razén, es decir, ejerceria sin tutelas. Segtin Kant, un
gobiemo equivocaria su misién si impidiera artificialmente este movimiento de ilustracién, ya
que, en un régimen de libertad, “nada se debe temer por la tranquilidad publica y la unidad
del bien comiin’ (36). Podriamos decir que aquella época de ilustracién a la que se referia
Kant llega, en cierta forma, hasta nuestros dias.
En su concepcién basica y mas alla de las sucesivas crisis que son anunciadas a
menudo, nuestros sistemas educativos, tal como hoy los conocemos, mantienen en gran
medida el ideal moderno promotor de la libertad del sujeto a través de la transmisin de
conocimientos en un marco regulado sociopoliticamente. Esta concepcién ha llegado, en la
actualidad, al limite de sus posibilidades, La resolucién trivial que se suele dar al problema
aqui planteado afirmando que lo que se transmite son los saberes, las practicas 0 los
valores socialmente reconocidos y que la legitimidad de dicha transmisién estaria dada, por
ejemplo, por el cardcter democratico de un Estado no hace mas que poner de manifiesto la
arbitrariedad politica que sostiene esa solucién, que amerita ser revisada minuciosamente
En virtud del reconocimiento de la pertinencia politica de la educacién en la conformacién e
integracién social, y partiendo de él, una de las tareas de la filosofia es identificar sus
aspectos cruciales y llevarlos a conceptos.
‘Asumiremos, entonces, como punto de partida, que cada acto educativo actualiza un
problema filoséfico y politico fundamental, que es cémo resolver la tension entre reproducir
lo que hay y dar un lugar a lo diferente que puede haber. La historia de la educacién podria
leerse a la luz del mayor o menor peso que se ha intentado dar a una u otra de estas
alternativas. Por cierto, esta cuestién va més alld del terreno especifico de la pedagogia o la
didactica. En efecto, no se trata meramente de lo que pasa en una institucién escolar con
unos saberes, practicas o normas, reputados socialmente como valiosos o impuestos de
manera arbitraria, y del modo de transferencia que puede hacerse de ellos entre maestros y
alumnos. Tampoco se trata, solamente, del conjunto de experiencias formativas escolares
que, junto a otras, van contribuyendo a constituir lo que alguien es. La educacién
institucionalizada reafirma, ademas -y sobre todo-, una concepcién del Estado, un conjunto
de saberes admitidos y el lugar que corresponde 0 puede corresponder a cada uno de los
miembros en una comunidad. La integracién progresiva de dichos miembros, desde su
infancia, es realizada de acuerdo con un conjunto de prescripciones y normativas, que son
las dominantes y que intentan garantizar que o que hay se mantenga (0 se modifique de
una manera permitida o tolerada). La posibilidad de reproduccién de las sociedades se
dirime en el sostenimiento de un vinculo cultural (en tanto difusién de las tradiciones, las
costumbres, las practicas sociales, etc.), pero también, y fundamentalmente, politico (en
‘cuanto reaseguro del lazo social constituido). La irrupcién de lo diferente, en tanto novedad
frente al estado de cosas, siempre tiene un efecto inicialmente desestructurante que debe
ser contrarrestado 0 asimilado de alguna forma, porque implica el riesgo de que se
produzcan consecuencias imprevisibles.
Toda reproduccién se afirma, en ultima instancia, en una ficcién constituyente que
establece un territorio y fija una norma: cada miembro de una comunidad es tenido en
cuenta en la medida en que es contado por un régimen de cuenta normal. Se legitima, de
esta forma, una distribucién social de lugares y una relacién de los individuos con el Estado
Esta estructura de funcionamiento ~que es, en definitiva, la de todo Estado procura dar
cuenta de todo y de todos (de ahi su cardcter ficcional) y, por consiguiente, aspira a
perpetuar el estado de cosas o bien a administrar el sentido de los eventuales cambios.En este trabajo, nos proponemos analizar esa forma de pensar la relacién entre el
todo y sus elementos constituyentes, y revisar vinculos diferentes. Para ello, se explora
parcialmente la dimensién ontolégica de la cuestién y, a partir de dicho examen, se evalan
algunas consecuencias. Corresponderé establecer, en un sentido general, cual es el
estatuto de lo que hay y cudles son las condiciones de lo distinto que puede haber, es deci
de la novedad que sera excepcién a las reglas que garantizan el funcionamiento normal de
un estado de cosas. Posteriormente, se debera evaluar en qué medida es posible la
integracién de lo nuevo o si la imposibilidad de admitirlo 0 reconocerlo conduce a una nueva
‘concepcién de la estructura de lo dado.
En el fondo, se trata de la actualizacién de un problema muy antiguo de la filosofia,
que podriamos resumir en el interrogante: gcémo es posible que algo nuevo tenga lugar? o
zcémo es posible que algo acontezca? Estas preguntas estan enlazadas, a su vez, con otra
que es, en Ultima instancia, fundante: gcémo es posible pensar la novedad? Abordar esta
cuestién supone interrogarnos sobre qué recursos teéricos se deben poner en juego para
dar cuenta de la eventual aparicién de algo diferente a lo que hay o sobre las limitaciones
que se tienen para tal emprendimiento. El problema asi planteado no solo significa un
desafio a las posibilidades materiales de realizacién de sucesos novedosos, sino que
también -y fundamentalmente- constituye un desafio a las posibilidades del propio
pensamiento de dar cuenta de la novedad.
EI objetivo central de este libro consiste en recrear los conceptos de novedad y sujeto en la
educacién institucionalizada a partir de su vinculacién reciproca, y en destacar las
consecuencias filoséfico-politicas que es posible derivar de tal postura. Las cuestiones de la
repeticion, la novedad y el sujeto son consideradas como una unidad dindmica ¢ integrada,
en la que la determinacién de cada una de ellas depende de las restantes. A modo de tesis
que guia el trabajo, se sostiene que los procesos educativos institucionalizados son
estructuras complejas de repeticién cuyas disrupciones y eventuales recomposiciones estan
ligadas al inicio de procesos de subjetivacion
La problematica que se asume tiene, entonces, como ejes los interrogantes: .qué
significa que algo nuevo tenga lugar en los contexts propios de la transmision educativa? —
y, Por extensién: {cuando es factible que eso ocurra?— y {cémo es posible la constitucién
de un sujeto educativo a partir de aquella novedad? Mas especificamente, desde una
perspectiva politica, se considera que el sentido de la educacién normalizada por el Estado
se dirime en la resolucién que se dé al problema de la tensién entre la transmisién de los
saberes establecidos (lo que hay) y la aparicién de elementos novedosos (lo que puede
haber), y el lugar que corresponda a quienes participan en esa educacién. Desde un punto
de vista ontolégico, aquella tensién es concebida como una determinada dialéctica del ser y
el acontecer que posibilita, en ella, la composicién de un sujeto. A través de la integracién de
ambas perspectivas, se justifica la existencia de un sujeto de la educacién que se
constituye, sélo en ciertas situaciones, a parlir de una disrupcién en la continuidad del
estado de las cosas. El tipo de disrupcién y las consecuencias que de ella se puedan derivar
permitiran definir diferentes figuras subjetivas, Respecto de estas figuras, se muestra que
‘comportan dos dimensiones interrelacionadas, una colectiva y otra individual. Se postula,
asimismo, que todo cambio real lo es en el orden del pensamiento. En virtud de ello, se
contrapone la repeticién propia de la transmisién de conocimientos (estado de normalidad)
con la irrupcién que implica la intervencién novedosa del pensamiento (singularidad o
acontecimiento), Esto permite afirmar que toda composicién 0 recomposicién subjetiva
supone una manera nueva de pensar y pensarse en una realidad y en un contexto.El trabajo utiliza, como estructura de base conceptual, los planteos ontolégicos y
metaontolégicos que Alain Badiou desarrolla en su teoria del ser y el acontecimiento', Se
lleva adelante una apropiacién y recreacién de sus categorias centrales para ponerias en
funcionamiento respecto de la cuestién educativa, ya que Badiou no ha abordado, al menos
explicitamente, la tematica de la educacién en sus trabajos. Sobre este nucleo tedrico, se
confrontan e integran criticamente otros aportes que completan el cuadro conceptual
general en tres lineas de andlisis convergentes: la repeticin educativa como
reproductivismo, la transmisién de la ideologia a través de los aparatos de Estado y la
igualdad como punto de partida de la subjetivacién emancipadora
En cuanto a los aspectos formales, el volumen esta organizado en siete capitulos separados
en dos partes que reflejan su estructura conceptual. Los aspectos propositivos del libro son
incorporados gradualmente, mientras que, en diversas ocasiones, se vuelve sobre lo ya
desarrollado con el objeto de profundizar y fortalecer la continuidad de la exposicién.
La primera parte (‘Continuidades y rupturas en la educacién’) consiste en la
presentacién de los conceptos centrales, la exposicién de sus postulados fundamentales y
una primera composicién de sus propuestas tedricas. Se trata basicamente de una
reelaboracién de los lineamientos generales de la teoria del ser y el acontecimiento de
Badiou, en funcién de su utiizacion para dar significado a las cuestiones de la repeticion, la
novedad y el sujeto en la educacién,
EI capitulo 1 (‘Ontologia de la educacién institucionalizada’) plantea una
caracterizacién de la educacién institucionalizada a partir de sus aspectos constitutivos y de!
tipo de legalidad que la hace posible y perdurable. Se adapta y emplea el concepto de
muttiplicidades para caracterizar de manera genética a las instituciones educativas. Esas
multiplicidades son definidas como conjuntos cuyos elementos son, a su vez,
multiplicidades, Estos conjuntos son determinados por alguna operacién o régimen de
cuenta (un fener en cuenta) que explicita qué es lo que hay, identificando cada uno de sus
componentes. De este modo, quedan recortadas multiplicidades especificas compuestas por
elementos especificos, ya que el tener en cuenta acomoda y determina lo que hay y ocurre.
Las operaciones de cuenta constituyen legalidades de ordenamiento que dan cuenta de lo
que existe y establecen un tipo de organizacién de lo que hay. Se plantea que /o que hay en
educacién son, especificamente, situaciones educativas (y no una educacién en general) en
las que se actualizan cotidianamente las complejas relaciones de los mundos escolares. Se
define el concepto de estado de cada situacién como una segunda pauta de ordenamiento
(una institucionalizacién) que garantiza la continuidad de lo que hay, y se lo vincula con la
funcién reguladora del Estado (en su acepcién juridico-politica). Se presentan, asimismo, las
condiciones de lo que se llamard la normalidad educativa y las posibilidades de eventuales
puntos de ruptura (singularidades).
El capitulo 2 (‘Los saberes establecidos: rupturas y verdades") avanza sobre el
andlisis de las posibles alteraciones en la continuidad de lo que hay, a partir de la
apropiacién del concepto de acontecimiento para la interpretacién del cambio. Ademas, se
completa la idea de acontecimiento en la educacién con la de verdad. Para Badiou, la
irrupcién de un acontecimiento va a dar lugar a una verdad, que sera la verdad de la
situacién tal como ella fue transformada por dicho acontecimiento. La concepcién de verdad
no esta remitida aqui a dimensiones trascendentes, metafisicas o a posibilidades logicas. Se
trata, muy especificamente, de una construccién compleja derivada de lo que irrumpié en un
estado de normalidad. Es el nombre dado al proceso de recomposicién o transformacién de
todo lo que habia, a la luz de la novedad que supone un acontecimiento.
* Especificamente, en el recorrido que va de L’étre ef lévénement (EI ser y ef acontecimiento) a Logiques des
‘mondes. L’stre ef événement, 2 (Légicas de los mundos). El libro Court traité d'ontologie transifoire (Breve
tratado de ontologia transitoria) constituye una suerte de mediacion entre ambos; all, sobre la base del primero,
se anuncian los desarrallos posteriores. Si bien la seouencia que inaugura Létre et événement establece un
salto conceptual respecto de la obra anterior de Badiou, basicamente de Théorie du sujet, en Logiques des
‘mondes reaparecen algunos temas de aquel trabajo (lo subjetivo formal, el materalismo, etc.) incorporados a un
‘nuevo cuadro lagico y ontolégico,
10En el capitulo 3 (‘Subjetivacién: continuidad y transformaciones"), se fundamenta la
relacién entre las teorias del sujeto y el acontecimiento. La posibilidad de un sujefo estara
intimamente relacionada con las situaciones existentes y las alteraciones que se produzcan
en ellas. Se propone una caracterizacién de las construcciones subjetivas enlazada con las
consecuencias que se podrian seguir de los acontecimientos y, desde este planteo, se
analizan las formas tradicionales de referir el sujeto de la educacién. Se muestra la
pertinencia de identificar como sujeto objetivo de la educacién al usualmente caracterizado
‘como sujeto pedagégico y se exploran las consecuencias de esta decision. Se desarrolla el
tipo de construccién subjetiva propio de esa caracterizacién (vinculado basicamente con
diferentes formas de repeticién) y se exponen sus limitaciones. Finalmente, se estudian los
conflictos que emergen a partir de la contraposicién entre la continuidad que supone la
transmisién del conocimiento y la novedad que implica el pensamiento. Esto permite afirmar
que toda recomposicién subjetiva supone una manera nueva de pensar y pensarse en el
contexto de una situacién,
El capitulo 4 ("El sujeto educativo y el sujeto en la educacién’) muestra el panorama
completo de la subjetividad propia de los procesos educativos institucionalizados, a la luz de
las propuestas teéricas formuladas. En primer lugar, queda identificado, a partir de lo
desarrollado en el capitulo anterior, el sujefo-objetivo o sujeto-objeto de la educacién, quien
es, de manera dominante, una consecuencia o un efecto de la institucionalizacién. Se trata
de un sujeto sujetado, de acuerdo a la utilizada expresion, ya que se constituye en la
continuidad entre la situacién y su metaestructuracion estatal (estado de la situacién),
internalizando y reproduciendo los saberes y las practicas que son dominantes. Es lo que el
Estado (y la sociedad), a través de sus diversas instituciones, quiere que seamos. Es, en
definitiva, la voluntad politica del Estado respecto de la educacién de sus miembros. Por otro
lado, es identificado lo que se llamara un sujeto-subjetivo de la educacién, el cual establece
una particular relacién con lo que hay a partir de ciertas decisiones y lo que ocurre con ellas.
Es decir, se constituye a partir de algiin tipo de diferenciacién con lo que hay y de
apropiacién de los saberes que cada institucion pone en juego. Finalmente, se presenta lo
que es llamado sujeto politico en la educacién, que se corresponde con la existencia de
acontecimientos, 0 los efectos de ellos, en el seno de la institucionalidad educativa. Se
explica que solo este tiltimo podria llamarse, en sentido estricto, sujefo, de acuerdo a las
categorias que se han definido, pero se justifica la pertinencia de emplear también dicho
término para caracterizar a los otros dos.
En la segunda parte ("Reproduccién educativa, ideologia e igualdad’), se retoman los
avances alcanzados en la primera, cotejandolos con el andlisis de otras formas de abordar
la cuestién de la repeticién y la eventualidad de su alteracién. Esta segunda parte sirve
‘como una suerte de contrapunto tedrico de la primera y, a partir de la revision y evaluacién
de algunos temas especificos (la reproduccién, la ideologia y la igualdad), se amplia el
‘cuadro delineado inicialmente. Son revisados, en especial, diversos aspectos puntuales de
aquellas lineas tedricas que interpretaron la cuestién de la transmisién educativa desde una
perspectiva basicamente politica
En el capitulo 5 ("Educacién y reproduccién social’), se adoptan como punto de inicio
las criticas a las teorias conocidas tradicionalmente bajo el comin denominador de
reproductivismo, Nos detenemos en ver de qué modo se ha planteado la relacién entre las
condiciones de la reproduccién sociocultural, la funcién de la institucién educativa y los
sujetos comprometidos en ella. A partir de esto, se plantea una construccién tedrica que se
denominaré reproductivismo primario— que permite, por un lado, evaluar los alcances de los
intentos de reproduccién social y cultural a través de las instituciones de una sociedad y, por
otro, establecer los limites de esa reproduccién, tanto desde el punto de vista tedrico como
practico (social y politico).
EI capitulo 6 (“Educacién, sujeto e ideologia’) propone un revisién del texto
emblematico Ideologia y aparatos ideolégicos de Estado, de Louis Althusser, de manera
separada del resto de las obras clasicas del reproductivismo, debido a que en él se
tematiza, muy especificamente, y a diferencia de los otros, la cuestién del sujeto y el Estado
(con sus aparatos ideolégicos, entre los cuales la escuela cumple un papel central), y su
1"