Un soldado que regresaba de la guerra llegé a un pueblo.
Como tenfa mucha hambre, se detuvo en la primera
granja que encontr6 y pidié que le dieran algo de comer.
No podemos darte nada, Apeni
-le contestaron los granjeros apesadumbrados.
tenemos para nosotros
Pero si tendréis al menos una marmita -