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Pontificia Universidad Católica del Ecuador

Facultad de Psicología

Asignatura: NEUROPSICOLOGÍA

Dr. Carlos Alberto Ramos, PhD


Neuropsicólogo Clínico
CÓRTEX Y ÁREAS DE BRODMANN
Aparte de las estructuras filogenéticamente más antiguas citadas con anterioridad, la
mayor parte del córtex o neocórtex o isocórtex representa la estructura más reciente.
Las tinciones argénticas muestran que el neocórtex está constituido por seis capas
celulares (la cuarta, rica en células, se denomina capa granular). Según las regiones del
cerebro, la morfología y la densidad celular de las capas son muy variables; estos
criterios citoarquitectónicos son los que han permitido a Brodmann establecer el mapa
de las áreas corticales numeradas de 1 a 52.
Pueden observarse en forma comparativa las capas del Neocórtex, distinguiéndose
la capa I, más superficial por la escasa cantidad de neuronas. Las capas II y III son
similares entre sí, aunque puede verse mayor número de neuronas piramidales
pequeñas en la capa III y mayor número de neuronas granulares en la capa II. La
capa IV posee una densidad de neuronas mayor a la de las capas II-III y V, siendo
además sus neuronas granulares de menor tamaño y más densamente
empaquetadas. La capa V se observa claramente debido a sus neuronas piramidales
de gran tamaño, que desaparecen en la capa VI.
Las áreas de Brodmann pueden agruparse en tres grandes clases: a) córtex agranular con
ausencia de la capa 4 y profusión de las células piramidales (áreas 4 y 6), b) córtex
hipergranular con una capa granular desarrollada y muy celular (áreas sensitivas y
sensoriales), y c) córtex laminar con equilibrio entre las seis capas (áreas asociativas).
La corteza somatosensorial primaria incluye las áreas 1, 2 y 3. Anatómicamente, se
localizan en el lóbulo parietal y circunvolución parietal ascendente.

Esta zona recibe las sensaciones de tipo táctil, articular y muscular de la zona
contralateral del cuerpo.
El área 4 constituye la zona motora primaria, que está localizada en la circunvolución
precentral en el lóbulo frontal.

Esta zona tiene que ver con la iniciación del movimiento de tipo voluntario en la
ejecución y control de los grupos musculares distales en las extremidades contrarias.
El área sensitiva secundaria está conformada por las áreas 5 y 7, ubicada detrás del giro
postcentral. La función de esta zona tiene que ver con los movimientos voluntarios
dirigidos hacia un destino en relación con la integración de los estímulos visuales.
El área 6 tiene se denomina área premotora y está localizada en el lóbulo frontal y
ocupa parte anterior de la circunvolución precentral. Se encarga de organizar los
movimientos que implican estímulos visual, táctil o auditivo.
El área 17 corresponde a la corteza visual primaria y corresponde al surco calcarino en
el lóbulo occipital. Esta zona cerebral permite fusionar la información que viene de
ambos ojos y analizar la información de tipo visual.
La corteza visual secundaria o área psicovisual está constituida por las áreas 18 y 19. La
función de esta zona es evocar ilusiones visuales.
Las áreas 20, 21 y 37 constituyen la circunvolución temporal inferior. Esta zona conecta
la función visual con el circuito límbico. Permite el reconocimiento de rostros o caras.
El área de Wernicke está conformada por las áreas 39 y 40. Es la región de la corteza
asociativa auditiva en el lóbulo temporal. Esta zona permite comprender palabras y la
producción de discursos significativos.
Las áreas 23, 24, 29, 30, 35 y 28 constituyen el área Límbica. Está ubicad en el giro del
cíngulo y el giro parahipocampal. Está zona tiene relación con el comportamiento
relacionado con los instintos y las emociones.
El área 25 está relacionada con la región cingulada como una banda estrecha en la
porción caudal de la superficie subcallosa. Esta zona está relacionada con los cambios
en el apetito y el sueño, el estado de ánimo y la ansiedad y la memoria.
El área del cíngulo es la 26 y está situada parte inferior y media del encéfalo.
El área 36 es la circunvolución del hipocampo.
La corteza auditiva primaria está conformada por las áreas 41 y 42 se localiza en el
lóbulo temporal. La función de esta zona es detectar los cambios de frecuencia y de
localización de la fuente sonora y dirigir la información al área auditiva secundaria.
El lenguaje está conformado por las zonas 44 y 45. Se encuentra en lóbulo frontal. Esta
zona tiene que ver con la articulación del lenguaje, la coordinación de movimientos de
la zona de la cara, laringe, faringe y respiratoria.
Las áreas 13, 14, 15, 16, 27, 48, 49, 50, 51 y otras no mencionadas, únicamente han sido
encontradas en monos.

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