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TIPOGRAFIA I - DISSENY II
LLUC NOFRE AGASA - D2
ÍNDEX
La taula parteix de la mesura del pam (19,5 cm), que és l'única que s'ha pres. La resta de mesures
s'han tret a partir del joc d'equivalències. Un cop tretes aquestes mesures, caldrà especificar-ne els
punts Adobe que corresponguin a cada una per, més tard, fer-ne una galga.
PESSIC PUNT
0,03 0,85 1
LÍNIA
0,181 5,131 6
DIT
1,625 46,063 54
POLZADA
2,167 61,427 72
MANEIG QUART
4,875 138,189 162
PALMA
6,5 184,252 216
ABRAÇADA PAM
19,5 552,756 648
PEU
26 737,008 864
COLZE
39 1105,512 1296
TIPOMETRIA 7
GALGA
PUNT
LÍNIA
DIT
POLZADA
QUART
PALMA
PAM
PEU
COLZE
8 TIPOMETRIA
TIPOMETRIA 9
PLA GRÀFIC I MODULACIÓ
10 TIPOMETRIA
FORMAT 1: PAM x PEU
1:3
TIPOMETRIA 11
FORMAT 2: PEU x PEU
1:4
12 TIPOMETRIA
FORMAT 3: PEU X COLZE
1:6
TIPOMETRIA 13
GRAUS TIPOGRÀFICS
14 TIPOMETRIA
PUNT DE PARTIDA
Hpk
Quart
1 1/2 1/3 1/4 1/5 1/6 1/7 1/8 1/9 1/10 1/11 1/12
162pt
81pt
54pt
40,5
32,4
27
23,14
20,25
18
16,2
14,73
13,5
TIPOMETRIA 15
COSSOS TIPOGRÀFICS SELECCIONATS
Hpkx
1. LLUC (1/2 Quart) (81pt)
16 TIPOMETRIA
FÓRMULES TIPOMÈTRIQUES
18 TIPOMETRIA
CAIXA DE TEXT 1
Pam x Quart
8x2 LLUC
24x6 LLUCa
48x12 LLUCu
TIPOMETRIA 19
Era un puebleci-
8x2 LLUC
to rayano, Riba-
24x6 LLUCa
48x12 LLUCu
Era un pueblecito rayano, Ribamoura, vivero de contrabandistas, donde esta profesión de riesgo y lucro
hacía a la gente menos dormida de lo que suelen ser los pueblerinos. Abundaban los mozos de cabeza
caliente, y se desdeñaba al que no era capaz de coger una escopeta y salir a la ganancia.
Las mujeres, vestidas y adornadas con lo que da de sí el contrabando, lucían pendientes de ostentosa fili-
grana, patenas fastuosas, pañuelos de seda de colorines; en las casas no faltaba ron jamaiqueño ni queso
de Flandes, y los hombres poseían armas inglesas, bolsas de piel y tabaco Virginia y Macuba. Al través de
Portugal, Inglaterra enviaba sus productos, y de España pasaban otros, cruzando el caudaloso río.
Algunos días del año se interrumpía el tráfico y la industria de Ribamoura. El pueblo entero se congregaba
a celebrar las solemnidades consuetudinarias, que servían de pretexto para solaces y holgorio. Tal ocurría
con el Carnaval, tal con la fiesta de la Patrona, tal con los días de la Semana Santa. A pesar de ser éstos
de penitencia y mortificación, para los de Ribamoura tenían carácter de fiesta; en ellos se celebraba, en la
iglesia principal, espacioso edificio de la época herreriana, la representación de la Pasión, con personajes
20 TIPOMETRIA
Era un puebleci-
8x2 LLUC
to rayano, Riba-
24x6 LLUCa
48x12 LLUCu
Era un pueblecito rayano, Ribamoura, vivero de contrabandistas, donde esta profesión de riesgo y lucro
hacía a la gente menos dormida de lo que suelen ser los pueblerinos. Abundaban los mozos de cabeza
caliente, y se desdeñaba al que no era capaz de coger una escopeta y salir a la ganancia.
Las mujeres, vestidas y adornadas con lo que da de sí el contrabando, lucían pendientes de ostentosa fili-
grana, patenas fastuosas, pañuelos de seda de colorines; en las casas no faltaba ron jamaiqueño ni queso
de Flandes, y los hombres poseían armas inglesas, bolsas de piel y tabaco Virginia y Macuba. Al través de
Portugal, Inglaterra enviaba sus productos, y de España pasaban otros, cruzando el caudaloso río.
Algunos días del año se interrumpía el tráfico y la industria de Ribamoura. El pueblo entero se congregaba
a celebrar las solemnidades consuetudinarias, que servían de pretexto para solaces y holgorio. Tal ocurría
con el Carnaval, tal con la fiesta de la Patrona, tal con los días de la Semana Santa. A pesar de ser éstos
de penitencia y mortificación, para los de Ribamoura tenían carácter de fiesta; en ellos se celebraba, en la
iglesia principal, espacioso edificio de la época herreriana, la representación de la Pasión, con personajes
TIPOMETRIA 21
CAIXA DE TEXT 2
3 Quarts x 1 1/2 Quarts
6x3 LLUC
18x9 LLUCa
36x18 LLUCu
22 TIPOMETRIA
Era un pue-
6x3 LLUC
blecito raya-
no, Ribamou-
18x9 LLUCa
36x18 LLUCu
Era un pueblecito rayano, Ribamoura, vivero de contrabandistas, donde esta
profesión de riesgo y lucro hacía a la gente menos dormida de lo que suelen
ser los pueblerinos. Abundaban los mozos de cabeza caliente, y se desdeñaba
al que no era capaz de coger una escopeta y salir a la ganancia.
Las mujeres, vestidas y adornadas con lo que da de sí el contrabando, lucían
pendientes de ostentosa filigrana, patenas fastuosas, pañuelos de seda de
colorines; en las casas no faltaba ron jamaiqueño ni queso de Flandes, y los
hombres poseían armas inglesas, bolsas de piel y tabaco Virginia y Macuba.
Al través de Portugal, Inglaterra enviaba sus productos, y de España pasaban
otros, cruzando el caudaloso río.
Algunos días del año se interrumpía el tráfico y la industria de Ribamoura. El
pueblo entero se congregaba a celebrar las solemnidades consuetudinarias,
que servían de pretexto para solaces y holgorio. Tal ocurría con el Carnaval,
tal con la fiesta de la Patrona, tal con los días de la Semana Santa. A pesar de
ser éstos de penitencia y mortificación, para los de Ribamoura tenían carácter
de fiesta; en ellos se celebraba, en la iglesia principal, espacioso edificio de la
época herreriana, la representación de la Pasión, con personajes de carne y
hueso, y encargándose de los papeles gente del pueblo mismo.
TIPOMETRIA 23
Era un pue-
6x3 LLUC
blecito raya-
no, Ribamou-
18x9 LLUCa
36x18 LLUCu
Era un pueblecito rayano, Ribamoura, vivero de contrabandistas, donde esta
profesión de riesgo y lucro hacía a la gente menos dormida de lo que suelen
ser los pueblerinos. Abundaban los mozos de cabeza caliente, y se desdeñaba
al que no era capaz de coger una escopeta y salir a la ganancia.
Las mujeres, vestidas y adornadas con lo que da de sí el contrabando, lucían
pendientes de ostentosa filigrana, patenas fastuosas, pañuelos de seda de
colorines; en las casas no faltaba ron jamaiqueño ni queso de Flandes, y los
hombres poseían armas inglesas, bolsas de piel y tabaco Virginia y Macuba.
Al través de Portugal, Inglaterra enviaba sus productos, y de España pasaban
otros, cruzando el caudaloso río.
Algunos días del año se interrumpía el tráfico y la industria de Ribamoura. El
pueblo entero se congregaba a celebrar las solemnidades consuetudinarias,
que servían de pretexto para solaces y holgorio. Tal ocurría con el Carnaval,
tal con la fiesta de la Patrona, tal con los días de la Semana Santa. A pesar de
ser éstos de penitencia y mortificación, para los de Ribamoura tenían carácter
de fiesta; en ellos se celebraba, en la iglesia principal, espacioso edificio de la
época herreriana, la representación de la Pasión, con personajes de carne y
hueso, y encargándose de los papeles gente del pueblo mismo.
24 TIPOMETRIA
CAIXA DE TEXT 3 12x18 LLUCa
2 Quarts x 3 Quarts
4x6 LLUC
24x36 LLUCu
TIPOMETRIA 25
12x18 LLUCa
Era un
4x6 LLUC
trabandistas, donde esta
profesión de riesgo y lucro
hacía a la gente menos
pueble-
dormida de lo que suelen
ser los pueblerinos. Abun-
daban los mozos de cabe-
cito ra-
za caliente, y se desdeña-
ba al que no era capaz de
coger una escopeta y salir
yano,
a la ganancia.
Las mujeres, vestidas y
adornadas con lo que da
Riba-
de sí el contrabando, lu-
cían pendientes de osten-
tosa filigrana, patenas fas-
moura,
tuosas, pañuelos de seda
24x36 LLUCu
Era un pueblecito rayano, Ribamoura, vivero de con-
trabandistas, donde esta profesión de riesgo y lucro
hacía a la gente menos dormida de lo que suelen ser
los pueblerinos. Abundaban los mozos de cabeza
caliente, y se desdeñaba al que no era capaz de
coger una escopeta y salir a la ganancia.
Las mujeres, vestidas y adornadas con lo que da de
sí el contrabando, lucían pendientes de ostentosa
filigrana, patenas fastuosas, pañuelos de seda de
colorines; en las casas no faltaba ron jamaiqueño ni
queso de Flandes, y los hombres poseían armas in-
glesas, bolsas de piel y tabaco Virginia y Macuba. Al
través de Portugal, Inglaterra enviaba sus productos,
y de España pasaban otros, cruzando el caudaloso
río.
Algunos días del año se interrumpía el tráfico y la
industria de Ribamoura. El pueblo entero se congre-
gaba a celebrar las solemnidades consuetudinarias,
que servían de pretexto para solaces y holgorio. Tal
ocurría con el Carnaval, tal con la fiesta de la Patro-
na, tal con los días de la Semana Santa. A pesar de
ser éstos de penitencia y mortificación, para los de
Ribamoura tenían carácter de fiesta; en ellos se ce-
lebraba, en la iglesia principal, espacioso edificio de
la época herreriana, la representación de la Pasión,
con personajes de carne y hueso, y encargándose
de los papeles gente del pueblo mismo.
Venido de Oporto, un actor portugués, con el ins-
tinto dramático de la raza, organizaba y dirigía la
representación; pero sin tomar parte en ella. Esto
se hubiese considerado en Ribamoura irreverente.
«Trabajaban» por devoción y por respeto tradicional
a los misterios redentores; pero nunca hubiesen ad-
mitido a nadie mercenario, ni tolerado que hiciese los
papeles nadie de mala reputación. Gente honrada,
aunque contrabandease; que eso no deshonra. Ni
26 TIPOMETRIA
12x18 LLUCa
Era un
4x6 LLUC
trabandistas, donde esta
profesión de riesgo y lucro
hacía a la gente menos
pueble-
dormida de lo que suelen
ser los pueblerinos. Abun-
daban los mozos de cabe-
cito ra-
za caliente, y se desdeña-
ba al que no era capaz de
coger una escopeta y salir
yano,
a la ganancia.
Las mujeres, vestidas y
adornadas con lo que da
Riba-
de sí el contrabando, lu-
cían pendientes de osten-
tosa filigrana, patenas fas-
moura,
tuosas, pañuelos de seda
24x36 LLUCu
Era un pueblecito rayano, Ribamoura, vivero de con-
trabandistas, donde esta profesión de riesgo y lucro
hacía a la gente menos dormida de lo que suelen ser
los pueblerinos. Abundaban los mozos de cabeza
caliente, y se desdeñaba al que no era capaz de
coger una escopeta y salir a la ganancia.
Las mujeres, vestidas y adornadas con lo que da de
sí el contrabando, lucían pendientes de ostentosa
filigrana, patenas fastuosas, pañuelos de seda de
colorines; en las casas no faltaba ron jamaiqueño ni
queso de Flandes, y los hombres poseían armas in-
glesas, bolsas de piel y tabaco Virginia y Macuba. Al
través de Portugal, Inglaterra enviaba sus productos,
y de España pasaban otros, cruzando el caudaloso
río.
Algunos días del año se interrumpía el tráfico y la
industria de Ribamoura. El pueblo entero se congre-
gaba a celebrar las solemnidades consuetudinarias,
que servían de pretexto para solaces y holgorio. Tal
ocurría con el Carnaval, tal con la fiesta de la Patro-
na, tal con los días de la Semana Santa. A pesar de
ser éstos de penitencia y mortificación, para los de
Ribamoura tenían carácter de fiesta; en ellos se ce-
lebraba, en la iglesia principal, espacioso edificio de
la época herreriana, la representación de la Pasión,
con personajes de carne y hueso, y encargándose
de los papeles gente del pueblo mismo.
Venido de Oporto, un actor portugués, con el ins-
tinto dramático de la raza, organizaba y dirigía la
representación; pero sin tomar parte en ella. Esto
se hubiese considerado en Ribamoura irreverente.
«Trabajaban» por devoción y por respeto tradicional
a los misterios redentores; pero nunca hubiesen ad-
mitido a nadie mercenario, ni tolerado que hiciese los
papeles nadie de mala reputación. Gente honrada,
aunque contrabandease; que eso no deshonra. Ni
TIPOMETRIA 27
CAIXA DE TEXT 4
Pam x 1/2 Pam
8x4 LLUC
28 TIPOMETRIA
24x12 LLUCa
48x24 LLUCu
TIPOMETRIA 29
Era un puebleci-
8x4 LLUC
to rayano, Riba-
moura, vivero de
contrabandistas,
30 TIPOMETRIA
24x12 LLUCa
48x24 LLUCu
Era un pueblecito rayano, Ribamoura, vivero de contrabandistas, donde esta profesión de riesgo y lucro
hacía a la gente menos dormida de lo que suelen ser los pueblerinos. Abundaban los mozos de cabeza
caliente, y se desdeñaba al que no era capaz de coger una escopeta y salir a la ganancia.
Las mujeres, vestidas y adornadas con lo que da de sí el contrabando, lucían pendientes de ostentosa fili-
grana, patenas fastuosas, pañuelos de seda de colorines; en las casas no faltaba ron jamaiqueño ni queso
de Flandes, y los hombres poseían armas inglesas, bolsas de piel y tabaco Virginia y Macuba. Al través de
Portugal, Inglaterra enviaba sus productos, y de España pasaban otros, cruzando el caudaloso río.
Algunos días del año se interrumpía el tráfico y la industria de Ribamoura. El pueblo entero se congregaba
a celebrar las solemnidades consuetudinarias, que servían de pretexto para solaces y holgorio. Tal ocurría
con el Carnaval, tal con la fiesta de la Patrona, tal con los días de la Semana Santa. A pesar de ser éstos
de penitencia y mortificación, para los de Ribamoura tenían carácter de fiesta; en ellos se celebraba, en la
iglesia principal, espacioso edificio de la época herreriana, la representación de la Pasión, con personajes
de carne y hueso, y encargándose de los papeles gente del pueblo mismo.
Venido de Oporto, un actor portugués, con el instinto dramático de la raza, organizaba y dirigía la repre-
sentación; pero sin tomar parte en ella. Esto se hubiese considerado en Ribamoura irreverente. «Trabaja-
ban» por devoción y por respeto tradicional a los misterios redentores; pero nunca hubiesen admitido a
nadie mercenario, ni tolerado que hiciese los papeles nadie de mala reputación. Gente honrada, aunque
contrabandease; que eso no deshonra. Ni por pecado lo daban en el confesionario los frailes.
Han corrido varios lustros desde la Semana Santa en que soliviantó a Ribamoura cierto rumor, salido no
se sabía de dónde, que cundió de oreja a oreja y de silla a silla, bisbiseado y secreteado, pues nadie se
resolvía a decirlo en alta voz, y, además, nadie tenía certidumbres que añadir a suposiciones, en ningún
hecho concreto fundadas. Así, el runrún fue en parte reprobado por calumnioso. Sin embargo, escandali-
zaba. Tratábase de Antonia, la esposa del Nazario, «el Alerta», linda criatura que ya había desempeñado
durante cuatro años el papel de Magdalena en el auto sacro de la Pasión. Era Nazario el más activo con-
TIPOMETRIA 31
Era un puebleci-
8x4 LLUC
to rayano, Riba-
moura, vivero de
contrabandistas,
32 TIPOMETRIA
24x12 LLUCa
48x24 LLUCu
Era un pueblecito rayano, Ribamoura, vivero de contrabandistas, donde esta profesión de riesgo y lucro
hacía a la gente menos dormida de lo que suelen ser los pueblerinos. Abundaban los mozos de cabeza
caliente, y se desdeñaba al que no era capaz de coger una escopeta y salir a la ganancia.
Las mujeres, vestidas y adornadas con lo que da de sí el contrabando, lucían pendientes de ostentosa fili-
grana, patenas fastuosas, pañuelos de seda de colorines; en las casas no faltaba ron jamaiqueño ni queso
de Flandes, y los hombres poseían armas inglesas, bolsas de piel y tabaco Virginia y Macuba. Al través de
Portugal, Inglaterra enviaba sus productos, y de España pasaban otros, cruzando el caudaloso río.
Algunos días del año se interrumpía el tráfico y la industria de Ribamoura. El pueblo entero se congregaba
a celebrar las solemnidades consuetudinarias, que servían de pretexto para solaces y holgorio. Tal ocurría
con el Carnaval, tal con la fiesta de la Patrona, tal con los días de la Semana Santa. A pesar de ser éstos
de penitencia y mortificación, para los de Ribamoura tenían carácter de fiesta; en ellos se celebraba, en la
iglesia principal, espacioso edificio de la época herreriana, la representación de la Pasión, con personajes
de carne y hueso, y encargándose de los papeles gente del pueblo mismo.
Venido de Oporto, un actor portugués, con el instinto dramático de la raza, organizaba y dirigía la repre-
sentación; pero sin tomar parte en ella. Esto se hubiese considerado en Ribamoura irreverente. «Trabaja-
ban» por devoción y por respeto tradicional a los misterios redentores; pero nunca hubiesen admitido a
nadie mercenario, ni tolerado que hiciese los papeles nadie de mala reputación. Gente honrada, aunque
contrabandease; que eso no deshonra. Ni por pecado lo daban en el confesionario los frailes.
Han corrido varios lustros desde la Semana Santa en que soliviantó a Ribamoura cierto rumor, salido no
se sabía de dónde, que cundió de oreja a oreja y de silla a silla, bisbiseado y secreteado, pues nadie se
resolvía a decirlo en alta voz, y, además, nadie tenía certidumbres que añadir a suposiciones, en ningún
hecho concreto fundadas. Así, el runrún fue en parte reprobado por calumnioso. Sin embargo, escandali-
zaba. Tratábase de Antonia, la esposa del Nazario, «el Alerta», linda criatura que ya había desempeñado
durante cuatro años el papel de Magdalena en el auto sacro de la Pasión. Era Nazario el más activo con-
TIPOMETRIA 33
CAIXA DE TEXT 5
3 Quarts x 1/2 Quart
6x1 LLUC
18x3 LLUCa
36x6 LLUCu
Era un pue-
6x1 LLUC
18x3 LLUCa
36x6 LLUCu
Era un pueblecito rayano, Ribamoura, vivero de contrabandistas, donde esta
profesión de riesgo y lucro hacía a la gente menos dormida de lo que suelen
ser los pueblerinos. Abundaban los mozos de cabeza caliente, y se desdeñaba
al que no era capaz de coger una escopeta y salir a la ganancia.
Las mujeres, vestidas y adornadas con lo que da de sí el contrabando, lucían
pendientes de ostentosa filigrana, patenas fastuosas, pañuelos de seda de
34 TIPOMETRIA
Era un pue-
6x1 LLUC
18x3 LLUCa
36x6 LLUCu
Era un pueblecito rayano, Ribamoura, vivero de contrabandistas, donde esta
profesión de riesgo y lucro hacía a la gente menos dormida de lo que suelen
ser los pueblerinos. Abundaban los mozos de cabeza caliente, y se desdeñaba
al que no era capaz de coger una escopeta y salir a la ganancia.
Las mujeres, vestidas y adornadas con lo que da de sí el contrabando, lucían
pendientes de ostentosa filigrana, patenas fastuosas, pañuelos de seda de
TIPOMETRIA 35
TIPÒMETRE
LLUC LLUCa LLUCu Dit Cícero cm
1 1
1 2 2
1
3
3
2 4 1
4
5 2
5
1 3 6
6
7
3
7
4 8 2
9 8
5 10 9 4
11 10
2 6 12 3 11 5
13
12
7 14
13
6
15
14
8 16 4
15
17 7
16
3 9 18
19 17
8
10 20 5 18
21 19
11 22 20 9
23
21
4 12 24 6
22 10
25
23
13 26
24
27 11
25
14 28 7
29 26
12
5 15 30 27
31 28
16 32 8 13
29
33
30
17 34
31 14
35
32
6 18 36 9
33
37 15
34
19 38
39 35
16
20 40 10 36
41 37
7 21 42 17
38
43
39
22 44 11
40 18
45
41
23 46
42 19
47
43
8 24 48 12
49 44
20
25 50 45
51 46
21
26 52 13 47
53
48
9 27 54 22
49
55
50
28 56 14
51 23
57
52
29 58
59 53 24
10 30 60 15 54
61 55
25
31 62 56
63
57
32 64 16 26
58
65
59
11 33 66
60 27
67
61
34 68 17
69 62 28
35 70 63
71 64
29
12 36 72 18 65
73
66
37 74 30
67
75
68
38 76 19
31
69
77
70
13 39 78
71 32
79
40 80 20 72
81 73 33
41 82 74
83
75
34
14 42 84 21
76
SIMULACRE
PÀGINA DE REVISTA
Pam x 6 Quarts
TIPOMETRIA 39
Era un pueblecito rayano, Ribamoura, vivero de contrabandistas, donde esta
Era un pue-
profesión de riesgo y lucro hacía a la gente menos dormida de lo que suelen
blecito raya-
no, Ribamou-
Era un pueblecito rayano, Ribamoura,
vivero de contrabandistas, donde esta
profesión de riesgo y lucro hacía a la
gente menos dormida de lo que sue-
len ser los pueblerinos. Abundaban los
mozos de cabeza caliente, y se desde-
ñaba al que no era capaz de coger una
escopeta y salir a la ganancia.
Las mujeres, vestidas y adornadas con
lo que da de sí el contrabando, lucían
pendientes de ostentosa filigrana, pa-
tenas fastuosas, pañuelos de seda de
colorines; en las casas no faltaba ron
jamaiqueño ni queso de Flandes, y los
hombres poseían armas inglesas, bol-
sas de piel y tabaco Virginia y Macuba.
Al través de Portugal, Inglaterra enviaba
sus productos, y de España pasaban
otros, cruzando el caudaloso río.
Algunos días del año se interrumpía
el tráfico y la industria de Ribamoura.
Era un pueblecito rayano, Ribamoura,
vivero de contrabandistas, donde esta
40 TIPOMETRIA
Era un pueblecito rayano, Ribamoura, vivero de contrabandistas, donde esta
Era un pue-
profesión de riesgo y lucro hacía a la gente menos dormida de lo que suelen
blecito raya-
no, Ribamou-
Era un pueblecito rayano, Ribamoura,
vivero de contrabandistas, donde esta
profesión de riesgo y lucro hacía a la
gente menos dormida de lo que sue-
len ser los pueblerinos. Abundaban los
mozos de cabeza caliente, y se desde-
ñaba al que no era capaz de coger una
escopeta y salir a la ganancia.
Las mujeres, vestidas y adornadas con
lo que da de sí el contrabando, lucían
pendientes de ostentosa filigrana, pa-
tenas fastuosas, pañuelos de seda de
colorines; en las casas no faltaba ron
jamaiqueño ni queso de Flandes, y los
hombres poseían armas inglesas, bol-
sas de piel y tabaco Virginia y Macuba.
Al través de Portugal, Inglaterra enviaba
sus productos, y de España pasaban
otros, cruzando el caudaloso río.
Algunos días del año se interrumpía
el tráfico y la industria de Ribamoura.
Era un pueblecito rayano, Ribamoura,
vivero de contrabandistas, donde esta
TIPOMETRIA 41
ANNEXOS
42 TIPOMETRIA
RETÍCULA
Format Peu x Colze
Mòdul quadrat (dit x dit)
TIPOMETRIA 43
ACTIVITAT
COS: D08
INTERLÍNIA: 0,2 Cíceros
CAIXA DE TEXT ESQUERRA: 19,10 Cíceros
CAIXA DE TEXT DRETA: 19, 27 Cíceros
44 TIPOMETRIA
COS: D11
INTERLÍNIA: 0,2 Cíceros
CAIXA DE TEXT: 19,8 Cíceros
TIPOMETRIA 45