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1.2 Objetivos:
Conocer detalladamente con el concepto de roca y el origen de las mismas.
Familiarizarse con el ciclo de las rocas.
Identificar las rocas según su origen y aprender a clasificarlas.
1.3 Materiales:
Muestras de rocas
Equipos para realizar las pruebas de identificación de los mismos.
1.4 Introducción:
Las rocas generalmente están formadas por varias especies mineralógicas (rocas
compuestas), pero también existen rocas constituidas por un solo mineral (rocas
monominerálicas). Las rocas suelen ser materiales duros, pero también pueden ser
blandas, como ocurre en el caso de las rocas arcillosas o las arenas. En el lenguaje
cotidiano, pero no en el científico, roca significa también fragmento o bloque rocoso.
Las rocas están sometidas a continuos cambios por las acciones de los agentes
geológicos, según un ciclo cerrado (el ciclo de las rocas), llamado ciclo petrogenético, en
el cual intervienen incluso los seres vivos.
Una roca es un agregado de minerales, que son sólidos con propiedades físicas y
químicas definidas. Los minerales se componen de elementos como el oxigeno, el silicio
y el aluminio; estos elementos están formados por átomos, que son las partículas más
pequeñas de materia que retienen aun las características de un elemento. Se han
identificado y descrito más de 3500 minerales, pero sólo una docena de ellos constituye
la mayoría de las rocas de la corteza.
El ciclo de las rocas es una forma de ver las relaciones entre los procesos internos y
externos de la Tierra. Relaciona los tres grupos de rocas uno con otro; con procesos
superficiales como el intemperismo, transporte y depositación; y con procesos internos
como la generación de magma y el metamorfismo. El movimiento de placas es el
mecanismo responsable de reciclar los materiales de la roca y, en consecuencia, de
impulsar el ciclo de la misma. Las rocas ígneas resultan de la cristalización del magma o
de la acumulación y consolidación de materiales expulsados por los volcanes, como las
cenizas. Al enfriarse el magma, los minerales se cristalizan y la roca resultante se
caracteriza por el entrelazamiento de partículas minerales. El magma que se enfría
lentamente bajo la superficie produce rocas ígneas intrusitas; el magma que se enfría en
la superficie produce rocas ígneas intrusitas.
Los materiales que forman la corteza de la Tierra pueden evolucionar, a lo largo del
tiempo geológico, de un tipo a otro tipo de roca; pueden incluso completar un ciclo a
través de las tres principales categorías de rocas. Por ejemplo, una roca volcánica puede
ser intemperizada y sus fragmentos acarreados en forma de sedimentos hasta un sitio en
donde se acumulen y sean sepultados. Una vez que los sedimentos se han endurecido o
litificado, se puede considerar al material como una roca sedimentaria. Si la roca
sedimentaria es sometida a altas presiones y temperaturas, pude sufrir transformaciones
minerales y texturales que la conviertan en una roca metamórfica. En ciertas condiciones
cuando la temperatura de metamorfismo es alta, la roca puede llegar a fundirse y producir
magmas. El ascenso de los magmas y su posterior solidificación completarían el ciclo de
las rocas en la corteza.
Las interacciones de las placas determinan, hasta cierto punto, cuál de los tres tipos de
rocas se formará. Por ejemplo, la intemperización y la erosión producen sedimentos que
son transportados por agentes como el agua corriente de los continentes a los océanos,
donde se depositan y acumulan. Estos sedimentos, algunos de los cuales se mitifican y
convierten en roca sedimentaria, se vuelven parte de una placa que se mueve junto con la
corteza oceánica subyacente. Cuando las placas convergen, el calor y la presión que se
generan a lo largo del límite de la placa pueden dar lugar a actividad ígnea y de
metamorfismo dentro de la placa oceánica descendente, produciendo de este modo
diversas rocas ígneas y metamórficas.
Las rocas producidas por las erupciones volcánicas están dispersas, pero representan
solamente una pequeña porción de las rocas totales formadas por el enfriamiento y
cristalización del material de roca fundido llamado magma. La mayor parte del magma se
enfría bajo la superficie y forma cuerpos de roca conocidos como plutones. El mismo tipo
de magmas vinculados con el vulcanismo se relaciona con el origen de los plutones,
aunque algunos magmas son más móviles y llegan más comúnmente a la superficie. En
general, los plutones subyacen en las áreas de extenso vulcanismo y fueron las fuentes de
las lavas suprayacentes y los materiales fragmentados arrojados por los volcanes en las
erupciones explosivas. Más aún, como el vulcanismo, la mayor parte del plutonismo tiene
lugar en o cerca de las márgenes de las placas.
Todas las rocas ígneas intrusitas y muchas extrusivas se forman cuando se cristalizan los
minerales del magma. El proceso de cristalización consiste en la configuración y el
posterior crecimiento de los núcleos del cristal. Los átomos en un magma se hallan en
constante movimiento, pero cuando comienza el enfriamiento algunos átomos se enlazan
para formar pequeños grupos o núcleos, cuya disposición de átomos corresponde a la
disposición en los cristales del mineral. Al enlazarse químicamente otros átomos con
estos núcleos en el liquido, lo hacen en una forma geométrica ordenada; los núcleos se
transforman en granos minerales cristalinos, las partículas individuales que componen
una roca. Durante el enfriamiento rápido, el ritmo de formación de núcleos excede al
ritmo de crecimiento y el resultado es una acumulación de muchos pequeños granos. Con
el enfriamiento lento, el ritmo de crecimiento excede al ritmo de la nucleación, así que se
forman granos relativamente grandes.
-Texturas
Las rocas con textura porfídica, una combinación de granos minerales de tamaños
marcadamente diferentes, tienen una historia de enfriamiento más compleja. Los granos
mayores son fenocristales y a los más pequeños se les llama base de vidrio. Suponga que
un magma empieza a enfriarse lentamente como un cuerpo intrusivo; que se forman
algunos núcleos minerales y empiezan a crecer. Piense que antes de la cristalización
completa del magma, la fase liquida restante y los granos minerales sólidos dentro de ella
son expulsados, esto es, echados sobre la superficie donde se enfrían rápidamente para
constituir una textura afanítica. La roca ígnea resultante tendría granos minerales grandes
suspendidos en una base de vidrio finamente cristalina y la roca se caracterizaría como un
porfido.
Una lava puede enfriarse tan rápidamente que sus átomos no tienen tiempo de disponerse
en el ordenado marco tridimensional típico de los minerales. Como resultado de tan
rápido cambio de temperatura, se forma un vidrio natural como la obsidiana. Aun cuando
la obsidiana, con su textura vidriosa, no se compone de minerales se la considera una
roca ígnea.
Algunos magmas contienen grandes cantidades de vapor de agua y otros gases. Estos
gases pueden quedar atrapados en la lava que se enfría y formar numerosos hoyos o
cavidades pequeñas conocidas como vesículas; las rocas que poseen numerosas vesículas
se denominan vesiculares, como el basalto vesicular.
Una textura piroclástica o fragmental caracteriza las rocas ígneas modeladas por
actividad volcánica explosiva. La ceniza puede ser arrojada a lo alto de la atmósfera y
con el tiempo asentarse en la superficie, donde se acumula; si se convierte en roca, se la
considera roca ígnea piroclástica.
-Composición
Las rocas ígneas, como los magmas, se caracterizan como máficas (45 a 52% de sílice),
intermedias (53 a 65% de sílice) o felsicas (>65% de sílice). El magma padre desempeña
un papel importante en la determinación de la composición mineral de las rocas ígneas;
no obstante, un mismo magma puede producir diversas rocas ígneas porque su
composición puede cambiar como resultados de la secuencia en la cual se cristalizan los
minerales, así como el asentamiento del cristal, la asimilación y la mezcla de magma.
-Clasificación
La mayoría de las rocas ígneas se clasifican sobre la base de sus texturas y composición.
Observe en la figura 4.12 que todas las rocas, excepto la peridotito, constituyen parejas
los miembros de una pareja tienen la misma composición, los miembros de una pareja
tienen la misma composición, pero diferentes texturas.
Fig. 4.12
Las rocas ígneas que se muestran en la figura 4.12 se diferencian también por su
composición. Leyendo a través de la grafica, de la riolita a la andesita y al basalto, por
ejemplo, las proporciones de silicatos no ferromagnesianos y ferromagnesianos difieren.
Sin embargo, las diferencias en composición son graduales, de modo que existe un
continuo composicional. En otras palabras, hay rocas de composición intermedia entre la
riolita y la andesita, y así por el estilo.
Las rocas sedimentarias, la segunda familia más importante de las rocas, se componen
todas de materiales derivados por el intemperismo mecánico y químico, que desintegran
y descomponen las rocas preexistentes. Los diversos procesos de intemperismo producen
las materias primas componentes de los suelos y sedimentos; los materiales
intemperizados acarreados del sitio de intemperismo y depositados en otra parte como
sedimento no consolidado pueden intemperizarse más para formar suelo y transformarse
en roca sedimentaria.
El sedimento puede ser detrítico, lo cual significa que consta de partículas sólidas como
los fragmentos de roca o granos minerales liberados durante el intemperismo, o puede ser
químico, compuesto de minerales formados de los materiales disueltos durante el
intemperismo químico. Una vez derivado del material original, el sedimento por lo
general se erosiona y es transportado a otro lugar, donde se deposita en forma de
acumulación de sólidos sueltos, como la arena o la playa o el lodo de un lago. Para
abreviar; el origen o sedimento y su historia posterior son sencillamente una parte del
ciclo geológico de las rocas.
Las rocas sedimentarias se transforman mas comúnmente a partir del sedimento por el
proceso conocido como litificación, pero unas cuantas se saltaron esta etapa de sedimento
no consolidado. Por ejemplo, los arrecifes de coral se forman como rocas cuando los
organismos del arrecife extraen las sustancias disueltas del agua de mar para sus
esqueletos. Con todo, si la roca se rompiera o desmenuzara, como por efecto de una
tormenta, los pedazos sólidos del material del arrecife se depositarían en el lecho marino
como sedimento.
El sedimento puede ser transportado por cualquier agente geológico que tenga la energía
suficiente para mover partículas de un tamaño determinado. Los glaciares pueden mover
partículas de cualquier dimensión, mientras que el viento sólo transporta sedimento del
tamaño de la arena y menor. Las olas y las corrientes marinas arrastran sedimentos
también, pero la orma sobradamente más efectiva de que el sedimento se erosione en el
sitio de intemperización y sea conducido a otro lugar como estaba en las corrientes
fluviales.
Durante el acarreo del sedimento, la abrasión reduce el tamaño de las partículas, tanto las
esquinas como los bordes agudos se desgastan y se alisan conforme las partículas de
grava y arena chocan unas con otras y se redondean. El traslado también da lugar a un
ordenamiento, que se refiere a la distribución de tamaño en una acumulación de
sedimento. Si todas las partículas son aproximadamente del mismo tamaño, el sedimento
se califica de bien clasificados pero si hay una amplia gama de tamaños de grano, esta
mal clasificado. Tanto lo redondeado como lo clasificado son propiedades importantes
utilizadas para determinar el origen de las rocas sedimentarias; estas se tratan de manera
más completa en una sección posterior.
El sedimento puede ser transportado a considerable distancia desde su área fuente pero a
la larga se acumula. Parte de la arena y el lodo que en el presente se depositan en la
desembocadura del río Missisipi provienen de lugares tan distantes como Ohio,
Minnesota y Wyoming. Cualquier área geográfica en el que se almacena el sedimento es
un ambiente de depósito. Si bien no existe una clasificación completamente satisfactoria
de los ambientes de depósito, los geólogos reconocen generalmente tres escenarios
principales de depositación: continental, mixto y marino, cada uno con varios ambientes
de depositación especifico.
Rocas sedimentarias
Cerca de 95% de la corteza de la Tierra se compone de rocas ígneas y metamórficas, pero
las rocas sedimentarias son más comunes en la superficie o cerca de ella.
Aproximadamente 75% de las exposiciones de superficie en los continentes consisten en
sedimentos o rocas sedimentarias y cubren la mayor parte del piso marino. Las rocas
sedimentarias se clasifican, en general, como detríticas o químicas; entre estas últimas se
cuenta una subcategoría conocida como bioquímica.
Las rocas sedimentarias detríticas consisten en detritus, las partículas sólidas de las rocas
preexistentes. Tienen una textura clástica, lo cual significa que estas rocas se componen
de fragmentos o partículas conocidos también como clastos. Se reconoce un gran número
de variedades de rocas sedimentarias detríticas, cada una de las cuales se caracteriza por
el tamaño de sus partículas consecutivas.
-Conglomerado, brecha sedimentaria, arenisca, limo, arcilla, etc.
Las rocas sedimentarias química se originan de los materiales incorporados en la solución
durante el intemperismo químico . Estos minerales disueltos son transportados a los lagos
y a los océanos, donde se concentran. Pueden ser extraídos del agua lacustre u oceánica
para formar minerales, ya sea por procesos químicos inorgánicos o por la actividad
química de los organismos. Algunas rocas formadas por la litlificación de estos minerales
tienen textura cristalina, lo cual significa que consisten de un mosaico de cristales
entreverados, mientras otras tienen textura clástica. A las rocas formadas por la actividad
de los organismos se alude como rocas sedimentarias bioquímicas. En cualquier caso, se
acumulan agregados de minerales que se litifican por compactación y cementación, como
en las rocas sedimentarias detríticas.
Cuando los geólogos investigan las rocas sedimentarias en el campo, están observando
los productos de los acontecimientos que tuvieron lugar en el pasado. El único registro de
estos sucesos está preservado en las rocas y los geólogos tienen que evaluar esos aspectos
de las rocas sedimentarias para hacer inferencias acerca de los procesos originales y el
ambiente de depósito. Las texturas sedimentarias, como la clasificación y el
redondeamiento, pueden dar indicios sobre el proceso de depósito. Las arenas de duna
arrastradas por el viento, por ejemplo, tienden a estar bien clasificadas y redondeadas.
Entre otros aspectos de las rocas sedimentarias que son importantes para el análisis
ambiental están las estructuras sedimentarias y los fósiles.
Las rocas metamórficas (del griego meta, que significa cambio y morfos “forma”
constituyen el tercer grupo más importante de rocas. Resultan de la transformación de
otras rocas por procesos metamórficos que suelen tener lugar bajo la superficie de la
Tierra. Durante el metamorfismo, las rocas son sometidas a suficiente calor, presión y
actividad de fluidos para cambiar su composición y/o textura minerales, con lo cual se
convierten en rocas nuevas. Estas transformaciones tienen lugar en estado sólido y el tipo
de roca metamórfica generado depende de la composición y textura originales de la roca
original, de los agentes del metamorfismo, así como del tiempo que la roca original
estuvo sometida a los defectos del proceso metamórfico.
Los tres agentes del metamorfismo son el calor, la presión y la actividad de fluidos.
Durante el metamorfismo, la roca original sufre cambios para lograr el equilibro con su
nuevo ambiente. Los cambios pueden dar lugar a la formación de nuevos minerales y/o a
una transformación en la textura de la roca por la reorientación de los minerales
originales. En algunos casos, la modificación es menor y las características de la roca
original pueden reconocerse todavía. En otros, la roca varia tanto que la identidad de la
roca original sólo puede determinarse con gran dificultad y eso no siempre.
Calor
Cuando penetran cuerpos de magma en las rocas, estas se ven sometidas a intenso calor
que afecta a la roca circundante; el calentamiento más intenso suele producirse en la zona
adyacente al cuerpo de magma y disminuye gradualmente con la distancia de la intrusión.
La zona de rocas metamorfoseadas que se forma en la roca madre adyacente a un cuerpo
ígneo intrusivo suele ser bastante distinguible y fácil de reconocer.
Presión
Cuando las rocas se entierran se someten a una presión litostática cada vez mayor; esta
presión, que resulta del peso de las rocas suprayacentes, se aplica igualmente en todas
direcciones. A medida que las rocas se someten a creciente presión con la profundidad,
los granos minerales dentro de una roca pueden compactarse más estrechamente. En estas
condiciones, es imposible que los minerales se recristalicen; esto es, pueden formar
minerales más pequeños y más densos.
Junto con la presión litostática resultante del sepultamiento, las rocas pueden
experimentar también diferencias de presión. En este caso, los priostes no son iguales en
todos los lados y l roca se distorsiona consecuentemente. De manera típica, se producen
presiones diferenciadas durante la deformación asociada con la formación de montanas y
pueden generar tanto texturas como características metamorfoseadas definidas.
Actividad de fluidos
Los fluidos químicamente activos, que son parte del proceso metamórfico, provienen
principalmente de tres fuertes. La primera es el agua atrapada en los espacios
intersticiales de las rocas sedimentarias; la segunda es el fluido volátil dentro del magma;
la tercera es la deshidratación de los minerales que contienen agua, como el yeso y
algunas arcillas.
- Tipos de Metamorfismo
*Metamorfismo de contacto
El metamorfismo de contacto tiene lugar cuando un cuerpo de magma altera la roca
original circundante. A profundidades superficiales, un magma intrusivo eleva la
temperatura de la roca circundante, causando alteración térmica. La emisión de fluidos
calientes dentro de la roca original por la intrusión que se enfría puede contribuir,
asimismo, a la formación de nuevos minerales.
*Metamorfismo dinámico
El metamorfismo dinámico se asocia en mayor medida con las zonas de falla (fracturas a
lo largo de las cuales ha habido movimiento), en las cuales las rocas están sometidas a
grandes
*Metamorfismo regional
La mayoría de las rocas metamórficas son resultado del metamorfismo regional, el cual
ocurre en una gran área y suele ser causado por temperaturas, presiones y deformación
externa dentro de las porciones más profundas de la corteza. El metamorfismo regional es
más obvio a lo largo de las márgenes de la placa convergente, donde las rocas se
deforman intensamente y se recristalizan durante la convergencia y la subducción. Dentro
de estas rocas suele haber una gradación de la intensidad metamórfica, que va de las áreas
que fueron sometidas a presiones más intensas y/o a las temperaturas más altas, a las
áreas de temperaturas y presiones más bajas. Tal gradación en el metamorfismo puede
reconocerse por los minerales metamórficos que se hallan presentes
Para fines de clasificación, las rocas metamórficas se dividen comúnmente en dos grupos:
los que muestran textura foliada y los que no.
Muchas rocas y minerales metamórficos son recursos minerales valiosos. Si bien estos
recursos comprenden diversos tipos de depósitos de mineral, las dos rocas metamórficas
más familiares y de mayor uso, como tales, son el mármol y la pizarra que, como ya se
expuso previamente se han usado a lo largo de los siglos en diferentes formas.
Muchos depósitos de mineral resultan del metamorfismo de contacto durante el cual los
fluidos calientes, ricos en iones, emigran de las intrusiones ígneas al posterior de la roca
encajonante, con lo que crean ricos depósitos de mineral. Los minerales de menas de
sulfuro más comunes asociados con el metamorfismo por contacto son la bornita, la
calcopirita, la galena, la pirita y la escalerita; dos minerales de óxidos comunes son la
hematina y la magnetita. El estaño y el tungsteno son también minerales importantes
asociados con el metamorfismo por contacto.
Otros minerales metamórficos importantes, desde el punto de vista económico,
comprenden el talco, usado para el polvo de esa sustancia; el grafito para los lápices y
lubricantes secos; los granates y el corindón, que se usan como abrasivos o como gemas
en joyería, según su calidad, y la andalucita, la cianita y la silimanita, utilizados en la
manufactura de porcelanas de alta temperatura, así como de minerales resistentes a la
temperatura para fabricar productos como bujías para motores y forros de hornos.
Práctica de Laboratorio #3
3. Hable sobre las rocas ígneas y su origen. Describa cinco rocas de este grupo.
5. Mencione las zonas del país donde se pueden encontrar rocas ígneas.
15. ¿Qué características especificas de las rocas metamórficas foliadas las hacen
inadecuadas como roca de cimentación para una presa? ¿Hay algunas rocas
metamórficas que harían buenos cimientos? ¿Por qué?