Professional Documents
Culture Documents
Embriología - Cap 1 Langman y Moore
Embriología - Cap 1 Langman y Moore
a neonato en 9 meses. Abarca investigaciones sobre factores moleculares, celulares y estructurales que
contribuyen a la formación de un organismo con el fin de lograr mejores resultados reproductivos y
prosperar la especie. El desarrollo humano es un proceso continuo que se inicia cuando un ovocito
(ovulo) es fecundado por un espermatozoide. Los procesos celulares de división, migración, apoptosis
(muerte programada), diferenciación, crecimiento y reorganización transforman el ovocito fecundado,
una célula totipotencial sumamente especializada, el cigoto, en un ser humano multicelular. También
se producen cambios importantes durante los periodos tardíos del desarrollo: periodo neonatal
(primeras 4 semanas de vida extrauterina), lactancia (primer año de vida), niñez (desde los 2 arios hasta
la pubertad) y adolescencia (desde los 11 hasta los 19 años de vida).
La embriología con orientación clínica hace referencia al estudio de los embriones; sin embargo, este
término se utiliza generalmente para indicar el desarrollo prenatal de los embriones, los fetos y los recién
nacidos (lactantes de 1 mes o menos). La anatomía del desarrollo estudia el conjunto de cambios
estructurales que experimenta un ser humano desde la fecundación hasta la edad adulta e incluye la
embriología, la fetología y el desarrollo posnatal. La teratología es la rama de la embriología y de la
patología que analiza las alteraciones del desarrollo (malformaciones congénitas). Esta rama de la
embriología contempla los distintos factores genéticos, ambientales o ambos, que alteran el desarrollo
normal y provocan malformaciones congénitas. Las malformaciones congénitas causan la mayoría de
las muertes durante la lactancia.
En el siglo XX, la embriología experimental floreció con experimentos para seguir a las células durante
el desarrollo y determinar sus linajes celulares.
En 1961 la ciencia de la teratología adquirió relevancia como consecuencia del uso del fármaco
talidomida para eliminar la náusea e inducir sedación en mujeres gestantes, pero el fármaco produjo
defectos congénitos, entre ellos anomalías únicas en las extremidades, como agenesia de una o más
de ellas (amelia) o ausencia de sus huesos largos, de modo tal que sólo la mano o el pie se insertaban
en el tronco (focomelia). La asociación entre el fármaco y los defectos congénitos fue reconocida de
manera independiente por dos clínicos, W. Lenz y W. McBride.
Con el uso de otras técnicas para modificar la expresión genética, como las tecnologías de knock-out,
knock-in y de pérdida de sentido, se crearon nuevas alternativas para inducir un desarrollo anómalo y
permitir el estudio de la función de genes independientes en tejidos específicos. El advenimiento de la
biología molecular ha hecho avanzar el campo de la embriología.
Periodo fetal: periodo que transcurre desde la 8va o 12va semana al nacimiento, y donde continua la
diferenciación al tiempo que el feto crece y gana peso.
Periodo prenatal: antes del nacimiento. El desarrollo de un ser humano, desde la fertilización de un ovulo
hasta el nacimiento, se divide en dos periodos principales:
• Embrionario: la mayoría de los avances visibles del desarrollo ocurren durante las semanas 3 a
8.
• Fetal: los tejidos y órganos se diferencian y crecen, al tiempo que aumenta el ritmo de
crecimiento del cuerpo.
ASPECTOS HISTÓRICOS
• Egipcios del imperio antiguo (3000 a.C.) conocían métodos para incubar los huevos de los
pájaros, creían que el alma entraba en el cuerpo del niño a través de la placenta, durante el
parto.
• Se considera que en 1416 a.C. se redactó en sanscrito un breve tratado acerca de la
embriología hindú de la antigüedad, denominada Garbha Upanishad, que decía que: la
existencia del embrión comienza desde la conjugaci6n de la sangre y el semen (la semilla).
Durante el periodo favorable para la concepción, después del coito, aparece un kalada (un
embrión de 1 día). Al cabo de siete noches se convierte en una vesícula. Al cabo de 15 días se
convierte en una masa esférica. Al cabo de 1 mes se convierte en una masa dura. Al cabo de
2 meses se forma la cabeza. Al cabo de 3 meses aparecen las miembro
• Los primeros estudios embriol6gicos aparecen en los libros de Hipócrates de Cos (430-377 a.C.)
la naturaleza del ave es similar a la del hombre.
• Aristóteles de Estagira (384-322 a.C.) escribió un tratado de embriología en el que describió el
desarrollo del pollo y de otros embriones. Aristóteles propuso la idea de que el embri6n se
desarrollaba a partir de una masa informe, que describió como: una semilla primordial con un
alma nutritiva y con todas las partes del cuerpo. Aristóteles consideraba que el embrión se
originaba a partir de la sangre menstrual tras su activaci6n por el semen masculino.
• Claudio Galeno (130-201 d.C.) redactó la obra Sabre la formación del feto, en la cual describía
el desarrollo y la nutrici6n de los fetos, así como de las estructuras que en la actualidad
denominamos alantoides, amnios y placenta.
• El Talmud contiene referencias a la formaci6n del embrión. El medico judío Samuel-el-Yehudi,
que vivió durante el siglo II, describió seis fases en la formación del embrión, desde una masa
enrollada informe hasta un niño a término. Los eruditos del Talmud consideraban que los huesos
y los tendones, las uñas, la medula de la cabeza y el blanco de los ojos procedían del padre,
«que siembra lo blanco», al tiempo que la piel, los músculos, la sangre y el pelo procedían de la
madre, «que siembra lo rojo».
• En la edad media, en el Corán (s. VII), se cita que el ser humano procede de una mezcla de
secreciones del hombre y la mujer, se hacen referencias a la creación del ser humano a partir
de una nutfa (gota pequeña), quedando el organismo resultante asentado en el útero como si
fuera una semilla a los 6 días después de su creación y el embrión parece una sustancia
masticada; Constantino el Africano de Salerno (1020-1087) escribió el tratado De Humana
Natura donde describía la composición y el desarrollo del embrión en relación con los planetas
y con cada mes a lo largo de la gestación. Se mostraban en los esquemas el feto plenamente
desarrollado.
• Leonardo da Vinci (1452-1519) realizo dibujos precisos sobre disecciones de úteros gestantes e
introdujo el método cuantitativo para las mediciones del crecimiento prenatal.
• La revoluci6n embriológica comenzó con la publicación en 1651 del libro de William Harvey, De
Generatione Animalium. Tras introducirse al vientre, los espermatozoides se metamorfoseaban
en una sustancia parecida a un huevo a partir de la cual se daba el embrión. Fabricius de
Acquapendente, llevó a cabo los primeros estudios sabre embriones de diferentes especies de
animales, de donde Hervey estudio embriones de pollo a lupa. Embriones segregados por el
útero. Girolamo Fabricius (15371619) escribió dos tratados, uno de ellos: De Formato Foetu (el
feto formado) que contenía ilustraciones de embriones y fetos en distintas fases del desarrollo.
En 1672, Regnier de Graaf observe la presencia de pequeñas cavidades en el útero del conejo
y llego a la conclusión de que no eran producto de la secreción del propio útero. Propuso que
debían proceder de unos órganos a los cuales llamo ovarios; las pequeñas cavidades descritas
por De Graaf eran blastocistos, también describió los folículos de De Graaf, que en la actualidad
se denominan folículos ováricos vesiculares.
• En 1675, Marcello Malpighi, mientras estudiaba lo que a su juicio eran huevos de gallina no
fertilizados, observo embriones en sus fases iniciales. En consecuencia, considero que el huevo
contenía un polio en miniatura. Un joven estudiante de medicina en Leiden, Johan Ham van
Arnheim, y su compatriota Anton van Leeuwenhoek utilizaron en 1677 un microscopio mejorado
y observaron por primera vez las espermatozoides humanos. Sin embargo, se equivocaron al
describir la función que desempeñan los espermatozoides en la fecundación, pues
consideraron que contenían un ser humano en miniatura que aumentaba de tamaño cuando
era depositado en el aparato genital femenino.
• Caspar Friedrich Wolff refuto en 1759 las dos versiones de la teoría de la preformación del
embrión tras observar que algunas partes de este se desarrollaban a partir de glóbulos
(pequeños cuerpos esféricos). Estudio huevos no incubados, pero fue incapaz de visualizar los
embriones descritos por Malpighi, por lo que propuso el concepto de capas, según el cual la
división del cigoto lleva a la aparición de capas de células (disco embrionario) a partir de las
cuales se desarrolla el embrión. Fundamento de la teoría de epigénesis donde el desarrollo se
debe al crecimiento y diferenciación de células especializadas. Se publico en Theoria
Generations. Observo masas embrionarias de tejido que contribuían parcialmente al desarrollo
de los sistemas urinario y genital (los cuerpos y conductos de Wolff) que ahora se denominan
mesonefros y conductos mesonéfricos.
• En 1775 Lazaro Spallanzani demostró que tanto el ovocito como los espermatozoides eran
necesarios para iniciar el desarrollo. A través de procesos de inseminación en perros concluyo
que el esperma era el fertilizante que iniciaba los procesos del desarrollo.
• Heinrich Christian Pander en su tesis doctoral de 1817 publico el descubrimiento de las tres capas
germinales del embrión, a las cuales denomino blastodermo.
• Étienne Saint-Hilaire e Isadore Saint-Hilaire en 1818 llevaron a cabo estudios significativos acerca
de las alteraciones del desarrollo, por medio de experimentos en animales diseñados para
provocar malformaciones congénitas, dando pie a la teratología.
• Karl Ernst Von Baer, padre de la embriología moderna, describió el ovocito en el folículo ovárico
de una perra en 1827, también observo la segmentación de los cigotos en la trompa uterina y
los blastocitos en el útero. Aporto conocimiento sobre el origen de los tejidos y órganos a partir
de las capas germinales. Formulo dos conceptos importantes: los estadios del desarrollo
embrionario y el concepto según el cual las características generales anteceden a
características específicas.
• Matthias Schleiden y Theodor Schwann en 1839 formularon la teoría celular, que sostiene que el
cuerpo está formado por células y productos celulares, por lo que el embrión se desarrolla a
partir de una única célula llamada cigoto que experimentaba muchas divisiones celulares que
formaban los tejidos y órganos.
• Wilhelm His (1831-1904) desarrolló una serie de mejoras en las técnicas de fijación, corte y tinción
de los tejidos, y también en los métodos para la reconstrucción de embriones. Su método de
reconstrucción grafica permitió la metodología para la generación de imágenes
tridimensionales y estereoscópicas de embriones.
• Franklin P. Mall (1862-1917) obtuvo embriones humanos para su estudio, que ahora está en la
colección de embriones Carnegie.
• Wilhelm Roux (1850-1924) innovador en los estudios experimentales analíticos sabre la fisiología
del desarrollo de los anfibios. Hans Spemann (1869-1941) continuo con ese trabajo y en 1935
recibió el Nobel por su descubrimiento del fenómeno de la inducción primaria que es el
mecanismo por el que un tejido determina el destino de otro.
• Robert G. Edwards y Patrick Steptoe, pioneros de la fecundación in vitro, haciendo posible el
nacimiento de Louis Brown en 1978.
• Genética: en 1859 Charles Darwin público el origen de las especies donde destaca la naturaleza
hereditaria de la variabilidad entre los miembros de una especie como un factor importante en
la evolución. En 1865 Gregor Mendel desarrollo los fundamentos de la herencia genética. Walter
Flemming observo los cromosomas en 1878 y propuso su función en la fecundación. En 1883,
Eduard Von Beneden observo las células germinales maduras y describió características de la
meiosis. Walter Sutton y Theodor Boveri en 1902 propusieron que el comportamiento de los
cromosomas durante la formación de las células germinales y durante la fecundación seguía
los principios de Mendel sobre la herencia genética. Archibald Garrod, padre de la herencia
genética, mencionó la alcaptonuria (un trastorno genético del metabolismo de la fenil-alanina-
rirosina) coma el primer ejemplo de herencia mendeliana en el ser humano. El cigoto contiene
toda la información genética necesaria para dirigir el desarrollo de un nuevo ser humano.
• En 1912 Felix von Winiwarter publicó las primeras observaciones relativas a los cromosomas
humanos y señaló que las células del cuerpo contienen 47 cromosomas. En 1923 Theophilus
Shickel Painter dijo que el número correcto de cromosomas en cada célula del cuerpo era 48,
siendo aceptada la conclusión hasta 1956 cuando Joe Hin Tjio y Albert Levan publicaron que
las células embrionarias solamente poseían 46 cromosomas.
• En 1953 James Watson y Francis Crick descifraron la estructura molecular del ácido
desoxirribonucleico (ADN), y en el año 2000 se llevó a cabo la secuenciación del genoma
humano.
• Algunas personas con malformaciones congénitas tenían un numero anómalo de cromosomas,
lo que también puede causar muerte embrionaria. En 1959, la demostración por parte de
Jerome Jean Louis Marie Lejeune y sus colegas de que las células de niños con síndrome de
Down (trisomía 21) presentaban 47 cromosomas en sus células, en lugar de la cifra habitual de
46, inicio una nueva era en la genética médica.
• En 1941, Norman Gregg observó un número excepcional de casos de cataratas y otras
anomalías congénitas en lactantes de madres que contrajeron rubeola en las fases finales del
embarazo, presentando la evidencia solida de que el desarrollo embrionario podía estar influido
por factores ambientes. Widukind Lenz y William McBride publicaron la aparición de deficiencias
raras en los miembros y otras malformaciones graves en los hijos de mujeres que habían
consumido el sedante talidomida durante el embarazo, teniendo impacto en el uso de
fármacos y los factores ambientales en el embarazo.
• Murray Barr y Ewart Bertram descubrieron la cromatina sexual en 1949. Los núcleos de las células
nerviosas de gatos hembra tenían cromatina sexual y que los gatos que las carecían eran
machos. Keith L. Moore descubrió que había patrones de cromatina sexual en las células
somáticas humanas y en otros animales, también desarrolló una prueba de cromatina sexual en
frotis bucal que se aplica en la práctica clínica como diagnóstico de patologías genéticas.
• Biología molecular: Ian Wilmut y sus colaboradores, utilizando la técnica de la transferencia
nuclear en células somáticas, llevaron a cabo en 1997 la primera clonación de un mamífero, la
oveja Dolly, haciendo posible posteriormente la clonación de otros animales a partir de las
células adultas diferenciadas en cultivo. Las células madre embrionarias humanas son
pluripotenciales, tienen capacidad de autorrenovación y se pueden diferenciar en tipos
celulares especializados. El aislamiento y la reprogramación de células pluripotenciales
embrionarias humanas en cultivo han abierto una gran esperanza para el tratamiento de
enfermedades crónicas, tales como la esclerosis lateral amiotrófica, la enfermedad de
Alzheimer y la enfermedad de Parkinson, así como para el de otros trastornos degenerativos,
malignos y genéticos.
• Embriología biocinética: A mediados del siglo XX se realizaron reconstrucciones precisas del
ectodermo de superficie y de todos los órganos y cavidades del interior del embrión humano
en estadios del desarrollo representativos. Estas reconstrucciones aportaron perspectivas
holísticas del desarrollo humano y revelaron datos novedosos sobre los movimientos que ocurren
entre un estadio y el siguiente, causados por la fuerza biocinética, descubriéndose las fuerzas
que actúan sobre el lugar donde surgen determinados tejidos y se producen de forma
simultánea en cada nivel de amplificación, desde la membrana celular hasta la superficie del
embrión. Estos movimientos y fuerzas producen la diferenciación, que comienza en el lado
externo de la célula para pasar al interior a interaccionar con el núcleo que responde a
diferentes estímulos en momentos concretos y con especificidad; estos van actuando según las
regiones se van diferenciando, las fuerzas actúan en regiones llamadas campos metabólicos.
Hay 8 campos metabólicos tardíos en los que tejidos específicos se diferencian a partir de
mesénquima o del epitelio. Los movimientos y fuerzas comienzan en el momento de la
fecundación y continúan a lo largo de toda la vida.
PLANIMETRÍA: se utiliza dorsal y ventral para la descripción de embriones, superior e inferior para los
niveles relativos de las estructuras, craneal (o rostral) y caudal para la relación con la cabeza y con la
eminencia caudal (cola). El plano transversal o axial es cualquier plano que forma ángulos rectos con
los planos media y coronal, y el plano frontal o coronal es cualquier plano vertical que forma un ángulo
recto con el plano medio y que divide el cuerpo en partes anterior (o ventral) y posterior (o dorsal).
• Célula totipotencial: son células tronco que aun no están diferenciadas, este tipo de
organización llega hasta la mórula siendo esta y el cigoto totipotencial.
• Célula pluripotencial: tienen un grado de diferenciación, como los blastocitos, citotrofoblastos,
y trofoblastos.
• Célula multipotencial: su función radica en lo que se va a convertir el embrión tricapa (tres
capas germinales), pudiendo ser ectodermo (para sistema nervioso central y piel), mesodermo
(miocitos para músculos, osteocitos, aparato reproductor, riñones) y endodermo (hígado,
sistema digestivo, glándulas endocrinas, pulmones). Las células multipotenciales son el embrión
tricapa y la célula hematoprogenitora que va a dar la línea hemática.
• Célula especializada: son los espermatozoides y ovocitos secundarios, tienen una función
definida y específica.
• G0: en este estado la célula ya está especializada y está esperando activarse para su división,
encontrándose en un estado de reposo o vegetativo.
Capítulo 1: Introducción a la regulación y la señalización moleculares
Los genomas dirigen el desarrollo embrionario ya que contienen toda la información genética que está
codificada en el ADN, en secuencias denominadas genes, los cuales que codifican proteínas que
regulan la expresión de otros genes y actúan como las moléculas de señalización que organizan el
desarrollo. Existen alrededor de 23,000 genes en el genoma humano, que son una quinta parte del
número (100,000) esperado antes de completar el Proyecto Genoma Humano. La mitocondria
únicamente tiene una cadena de ADN.
Para que la transcripción tenga lugar, el ADN de cada nucleosoma debe desenrollarse, en ese estado
de relajación o desenrollamiento, la cromatina se conoce como eucromatina.
Intrones: dispersos entre los exones y se transcriben para formar proteínas, pero se eliminan en el
procesamiento postranscripcional (replicación).
Además de esto, el gen incluye: una región promotora que se une a la polimerasa del ARN para dar
inicio a la transcripción; un sitio de inicio de la transcripción; un sitio de inicio de la traducción para
identificar al primer aminoácido de la proteína; un codón de terminación de la traducción; y una región
3’ que no se traduce e incluye una secuencia (el sitio de adición de cola poli A) que ayuda a estabilizar
al ARNm, le permite salir del núcleo y luego ser traducido en una proteína.
Las regiones 5’ y 3’ de un gen se especifican con relación al ARN que se transcribe a partir del gen. Así,
el ADN se transcribe del extremo 5’ al 3’, y la región promotora se ubica en un sitio proximal a aquél en
que inicia la transcripción. La región promotora, sitio en que se une la polimerasa del ARN, suele
contener la secuencia TATA, y a este sitio se denomina caja TATA, para poder unirse a ese sitio, sin
embargo, la polimerasa requiere proteínas adicionales denominadas factores de transcripción. Estos
tienen un dominio de unión al ADN específico, además de un dominio de transactivación que activa o
inhibe la transcripción del gen a cuyo promotor o potenciador se une. En combinación con las
proteínas, los factores activan o reprimen la expresión genética al hacer que el complejo del
nucleosoma de ADN se desenrolle, al liberar a la polimerasa para que pueda transcribir la plantilla o
molde de ADN, y al evitar que se formen nucleosomas nuevos.
Los potenciadores son reguladores del ADN que activan la utilización de los promotores para controlar
su eficiencia y la velocidad de la transcripción a partir del promotor. Se pueden ubicar en cualquier
sitio de la cadena y ADN sin necesidad de estar cerca del promotor. Se unen a factores de
transcripción, por medio del dominio de transactivación del factor de transcripción, y se utilizan para
regular el momento de la expresión de un gen y su localización especifica en la célula. Los
potenciadores actúan al modificar la cromatina para exponer al promotor, o al facilitar la unión de la
polimerasa del ARN.
Como los potenciadores independientes que pueden indicarle al gen que se exprese en distintos
tejidos. El factor de transcripción PAX6 (participa en el desarrollo del páncreas, ojo y tubo neural), tiene
tres potenciadores independientes para la expresión genética de cada tejido.
Unión de la polimerasa tipo II del ARN al sitio de la caja TATA de la región promotora de un gen. Para
esta unión se requiere un complejo de proteínas, además de una proteína adicional denominada
factor de transcripción. Los factores de transcripción cuentan con su propio y específico dominio de
unión al ADN, y actúan para regular la expresión genética.
La metilación de las bases de citosina en las regiones promotoras de los genes impide su transcripción,
silenciando a ciertos genes por este mecanismo, como, por ejemplo, uno de los cromosomas X en cada
célula de la mujer. De esta manera cada célula puede mantener su estado diferenciado característico,
en sí, que mantengan una función específica ligada a su zona de localización. La metilación del ADN
también es responsable de la impronta genética, en que sólo se expresa un gen heredado del padre
o la madre, en tanto el otro se silencia; además, los patrones de metilación se establecen durante la
gametogénesis (espermatogénesis y ovogénesis).
La metilación silencia al ADN al impedir la unión de factores de transcripción o al alterar la unión de las
histonas, lo que da origen a la estabilización de los nucleosomas y a un ADN firmemente enrollado que
no puede transcribirse.
La transcripción inicial de un gen se denomina ARN nuclear (ARNn), o en ocasiones ARN premensajero.
El ARNn es más largo que el ARNm debido a que contiene intrones que son eliminados
(desempalmados) al tiempo que el ARNn se desplaza desde el núcleo hasta el citoplasma.
El proceso de empalme (splicing) proporciona a las células un medio para producir proteínas distintas
a partir de un solo gen; en el empalme alternativo al eliminar los intrones diferentes los exones se
empalman con distintos patrones. El proceso es llevado a cabo por los espliceosomas, que son
complejos de ARN nuclear pequeño (ARNnp) y proteínas que reconocen sitios de empalme específicos
en los extremos 5’ o 3’ del ARNn. Los espliceosomas reconocen sitios específicos en el transcrito inicial
del ARNn de un gen. En función de estos sitios, los distintos intrones son “escindidos” para dar origen a
más de una proteína a partir de un solo gen.
Las proteínas que derivan de un mismo gen se denominan isoformas de empalme (también llamadas
variantes de empalme o formas de empalme alternativas) y confieren a distintas células la oportunidad
de usar el mismo gen para producir proteínas específicas para su tipo celular. Por ejemplo, las isoformas
del gen WT1 tienen distintas funciones en el desarrollo gonadal y el renal.
Incluso después de que se sintetiza (traduce) una proteína, puede sufrir modificaciones
postraduccionales que afectan su función, como ser cortadas para activarse, requieren fosforilación,
combinarse con otras, ser liberadas de espacios confinados, o ser dirigidas a regiones celulares
específicas. Existen muchos niveles de regulación para la síntesis y la activación de proteínas. El número
potencial de proteínas que puede sintetizarse se aproxima quizá a cinco veces el número de genes.
Los órganos se forman por las interacciones entre las células y los tejidos. La mayor parte de las veces
un grupo de células o tejidos hace que cambie el destino de otro grupo similar, proceso denominado
inducción. En cada interacción un tipo de célula o tejido es el inductor que produce la señal, y otro es
el que responde a esa señal. La capacidad de respuesta a una señal de este tipo se denomina
competencia y requiere la activación del tejido de respuesta por un factor de competencia. Ocurren
muchas interacciones inductivas entre las células epiteliales (se unen entre sí formando tubos o láminas)
y mesenquimatosas (tienen aspecto fibroblástico y se encuentran dispersas en las matrices
extracelulares), que se denominan interacciones epitelio-mesénquima, como:
• Endodermo intestinal y mesénquima circundante para formar órganos derivados del intestino
(hígado y páncreas).
• Mesénquima de las extremidades con ectodermo suprayacente (epitelio) para producir el
crecimiento de las extremidades y su diferenciación.
• Endodermo de la yema ureteral y la mesénquima del blastema metanéfrico para producir
nefronas en el riñón.
Las interacciones inductivas también pueden ocurrir entre dos tejidos epiteliales. La intercomunicación
entre ambos tejidos o tipos de células resulta esencial para que la diferenciación continúe.
Señalización celular
La señalización entre células resulta esencial para la inducción, a fin de conferir competencia para
responder, y para que las células que inducen y las que responden mantengan la intercomunicación.
Estas líneas de comunicación se establecen mediante interacciones paracrinas, en que proteínas
sintetizadas por una célula se difunden a distancias cortas para interactuar con otras células, o bien
por interacciones yuxtacrinas, que no implican a proteínas susceptibles de difusión. Las proteínas
difusibles responsables de la señalización paracrina se denominan factores paracrinos o factores de
crecimiento y diferenciación (GDF, Growth and Dif erentiation Factors).
Señalización paracrina: Los factores paracrinos actúan por medio de vías de transducción de señales,
ya sea al activar de manera directa una vía o bloquear la actividad de un inhibidor de una vía (inhibir
al inhibidor). Las vías de transducción de señales cuentan con una molécula de señalización (el
ligando) y un receptor. El receptor se extiende a través de la membrana celular y tiene un dominio
extracelular (la región de unión al ligando), un dominio transmembrana y un dominio citoplásmico.
Cuando un ligando se une a su receptor induce en él un cambio de conformación que activa su
dominio citoplásmico. Por lo general, el resultado de esta activación es el desarrollo de actividad
enzimática en el receptor, que las más de las veces corresponde a la de una cinasa de tirosina capaz
de fosforilar otras proteínas utilizando ATP como sustrato. A su vez, la fosforilación activa a estas
proteínas para que fosforilen proteínas adicionales y, así, se establece una cascada de interacciones
proteicas que por último activa a un factor de transcripción. Este factor de transcripción activa
entonces la expresión genética, o la inhibe. Las vías son numerosas y complejas, y en algunos casos 29
están constituidas por una proteína que inhibe a otra, que a su vez activa a una tercera (en gran
medida como lo que ocurre en la vía de señalización hedgehog).
Señalización yuxtacrina: está mediada de igual modo por vías de transducción de señales, pero no
recurre a factores difusibles. En vez de esto, existen tres mecanismos:
1. Una proteína ubicada sobre una superficie celular interactúa con un receptor en una célula
adyacente, en un proceso análogo a la señalización paracrina. Ejemplo: vía Notch.
2. Los ligandos secretados por una célula hacia la matriz extracelular interactúan con receptores
específicos en las células vecinas. La matriz extracelular es el medio en el que residen las células.
Este medio está constituido por moléculas grandes secretadas por las células, como colágena,
proteoglucanos (condroitinsulfatos, ácido hialurónico, entre otros) y glucoproteínas, como
fibronectina y laminina. Estas moléculas conforman un sustrato sobre el cual las células pueden
fijarse o migrar. Por ejemplo, la laminina y la colágena tipo IV son componentes de la lámina
basal para el anclaje de las células epiteliales, en tanto las moléculas de fibronectina
constituyen andamios para la migración celular. Los receptores que unen a las moléculas
extracelulares como la fibronectina y la laminina con las células se denominan integrinas. Estos
receptores “integran” a las moléculas de la matriz con la maquinaria del citoesqueleto de una
célula (p. ej., microfilamentos de actina), con lo que le confieren capacidad para migrar
siguiendo el andamiaje de la matriz mediante el uso de proteínas contráctiles, como la actina.
De igual modo, las integrinas pueden inducir la expresión génica y regular la diferenciación,
como en el caso de los condrocitos que deben enlazarse con la matriz para formar cartílago.
3. Existe una transmisión directa de señales de una célula a otra mediante las uniones gap (uniones
en hendidura o uniones comunicantes). Estas uniones se comportan como conductos ubicados
entre las células, a través de los cuales pueden pasar moléculas pequeñas y iones. Este tipo de
comunicación es importante en células que se encuentran en unión estrecha, como las del
epitelio del intestino y del tubo neural, puesto que permiten a las células interactuar en
concierto. Las uniones mismas están formadas por proteínas conexinas, que forman un canal, y
estos conductos están “conectados” entre células adyacentes.
Existe gran redundancia en el proceso de transducción de señales. Por ejemplo, las familias de las
moléculas de señalización paracrina a menudo tienen muchos miembros, de modo que otros genes
de la familia pueden compensar la pérdida de una de sus contrapartes. Así, la pérdida de la función
de una proteína de señalización por la mutación de un gen no necesariamente da origen al desarrollo
anormal o la muerte. Además, existe intercomunicación entre las vías, de manera que tienen
interconexión íntima. Estas conexiones proveen puntos adicionales numerosos para regular la
señalización.
Un gran número de factores de señalización paracrina que actúan como ligandos, y que también se
denominan GDF. Casi todos ellos se agrupan en cuatro familias, cuyos sus miembros se utilizan en forma
repetida para regular el desarrollo y la diferenciación de los sistemas orgánicos. Los cuatro grupos de
GDF más importantes durante el desarrollo incluyen a las familias del factor de crecimiento de
fibroblastos (FGF), el WNT, el hedgehog y factor de crecimiento transformante beta (TGF-β). Cada
familia de GDF interactúa con su propia familia de receptores, y estos receptores son tan importantes
como las moléculas de señalización mismas para determinar el efecto de una señal.
De origen llamados así por estimular el crecimiento de los fibroblastos en el cultivo, en la actualidad se
han identificado cerca de dos docenas de genes FGF capaces de producir cientos de isoformas
proteicas mediante la modificación del empalme de su ARN o sus codones de inicio. Las proteínas FGF
codificadas por estos genes activan una serie de receptores de cinasas de tirosina que se denominan
receptores de factores de crecimiento de fibroblastos (FGFR). A su vez, estos receptores activan distintas
vías de señalización. Los FGF son en particular relevantes en la angiogénesis, el crecimiento axónico y
la diferenciación del mesodermo. Pueden sustituirse entre sí, FGF específicos pueden ser responsables
de eventos precisos del desarrollo. FGF8 es importante para el desarrollo de las extremidades y partes
del cerebro.
Proteínas hedgehog
El gen hedgehog recibió su nombre debido a que codifica un fenotipo o patrón de cerdas que genera
un aspecto similar al de un erizo terrestre (hedgehog en inglés) en la pata de la Drosophila. En los
mamíferos existen tres genes hedgehog: desert, Indian y sonic. La proteína Sonic hedgehog (SHH) está
implicada en un gran número de eventos del desarrollo.
Proteínas WNT
Existen por lo menos 15 genes WNT distintos, que se relacionan con el gen de polaridad segmentaria
wingless de la Drosophila. Sus receptores son miembros de la familia frizzled de proteínas. Las proteínas
WNT están implicadas en la regulación de patrones en las extremidades, el desarrollo del cerebro medio
y ciertos aspectos de la diferenciación de somitas y estructuras urogenitales, entre otras acciones.
La superfamilia del TGF-β cuenta con más de 30 miembros e incluye a los TGF-β, las proteínas
morfogenéticas óseas (BMP), la familia de la activina, el factor de inhibición mülleriano (MIF, hormona
antimülleriana), y otros. El primer miembro reconocido de la familia, el TGF-β1, se aisló a partir de células
transformadas por virus. Los miembros de la familia del TGF-β son importantes para la formación de la
matriz extracelular y la ramificación epitelial que se observa durante el desarrollo de pulmones, riñón y
glándulas salivales. La familia BMP induce la formación del hueso y participa en la regulación de la
división celular, la muerte celular (apoptosis) y la migración celular, entre otras funciones.
• Serotonina (5-HT): actúa como ligando de un gran número de receptores, casi todos los cuales
se encuentran acoplados a proteínas G; a través de los cuales regula diversas funciones
celulares, entre otras la proliferación y la migración celulares, y es importante para establecer
la lateralidad, la gastrulación, el desarrollo cardiaco y otros procesos durante las fases de
diferenciación tempranas.
• Noradrenalina: actúa por medio de receptores y parece participar en la apoptosis (muerte
celular programada) en los espacios interdigitales, así como en otros tipos de células.
Señal maestra que dirigía todo el desarrollo embrionario. Esta señal actuaría como morfógeno, una
molécula secretada que establecería gradientes de concentración e instruiría a las células en cuanto
al mecanismo para convertirse en tejidos y órganos distintos. Existe un gran número de moléculas de
señalización que regulan el desarrollo de manera coordinada, la proteína SHH es la que entre todas
ellas se acerca más a cumplir el papel de morfógeno maestro. Esta proteína está implicada en el
desarrollo de la vasculatura, la formación del eje izquierda-derecha, la línea media, el cerebelo, los
patrones neurales, las extremidades, los patrones del músculo liso, el corazón, el intestino, la faringe, los
pulmones, el páncreas, los riñones, la vejiga, los folículos pilosos, los dientes, los timocitos, el oído interno,
los ojos y las papilas gustativas. La proteína se une a su receptor patched (Ptc), una proteína que de
ordinario inhibe a la proteína similar a receptores Smoothened (Smo). Tras la unión de la SHH al Ptc se
elimina la actividad del segundo y se suprime la inhibición de Smo, que por último se activa para
generar una regulación positiva de la actividad de los factores de transcripción de la familia Gli (1 a 3),
que controlan la expresión de genes blanco. La especificidad de la expresión de SHH en distintos tipos
de células se encuentra regulada por elementos potenciadores múltiples que actúan de manera
independiente para controlar la transcripción de SHH en distintas células y tejidos.
La proteína SHH tiene ciertas características únicas, entre ellas el hecho de que después de su síntesis
es escindida y se le agrega colesterol al C-terminal de su dominio N-terminal. Es la adición del colesterol
la que permite el enlace de la SHH con la membrana plasmática. A continuación, se agrega una
entidad de ácido palmítico al extremo N-terminal y la SHH adquiere funcionalidad completa. Su
liberación a partir de la membrana plasmática depende de la proteína transmembrana Dispatched, y
en ese punto, la SHH puede establecer los gradientes de concentración característicos de su actividad
como morfógeno.
La vía de la polaridad celular planar (PCP) regula el proceso de extensión convergente por el cual un
tejido se elonga y estrecha, como en la neurulación donde la placa neural se estrecha y elonga para
dar origen al surco neural entre las crestas neurales. Durante la gastrulación las células se desplazan en
sentido medial y el eje embrionario se elonga. Para la extensión convergente se requieren cambios de
la configuración de las células a la par de su desplazamiento e intercalación con otras células.
La PCP hace referencia a la reorganización de las células y las láminas celulares en el plano de un
tejido, como lo que ocurre durante la extensión convergente. La vía de señalización principal para la
PCP es la vía WNT no canónica, que incluye al receptor Wnt Frizzled (Fz) y a otras dos proteínas
transmembrana denominadas Celsr y Vangl. Estas proteínas transmembrana tienen como objetivo
principal la activación de DISHEVELLED (Dvl), ya sea de manera directa o por mediación de efectores
distales, como prickle (Pk) y Diego (Dgo). A su vez, la Dvl regula la vía de señalización de las cinasas
Rho y Rac para generar una regulación positiva de las cinasas N-terminales de c-Jun (JNK), que
controlan los cambios del citoesqueleto, así como otros efectores distales entre los que se encuentra
factores de transcripción. Se ha demostrado que las mutaciones de muchos de estos genes, entre ellos
FZ, CELSR, VANGL y DVL, inducen defectos del cierre del tubo neural en ratones, en tanto las mutaciones
de los genes VANGL se han vinculado con este tipo de defectos en el humano.
La vía Notch
La señalización Notch está implicada en la proliferación celular, la apoptosis y las transiciones epitelio-
mesénquima. Es en particular importante en la diferenciación neuronal, la formación de vasos
sanguíneos y la especificación (angiogénesis), la segmentación de somitas, el desarrollo de las células
β del páncreas, la diferenciación de las células B y T en el sistema inmunitario, el desarrollo de las células
ciliadas del oído interno y la tabicación del tracto de salida cardiaco. Las mutaciones de JAG1 o
NOTCH2 inducen el síndrome de Alagille, que se caracteriza por defectos del tracto de salida cardiaco,
así como anomalías esqueléticas, oculares, renales y hepáticas. Las mutaciones JAG1 también se han
vinculado con casos de tetralogía de Fallot (un defecto del tracto de salida cardiaco).
Apunte de clase: