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UNIVERSIDAD ESTATAL DE BOLIVAR

FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD Y DEL SER HUMANO

CARRERA DE ENFERMERIA

TEMA:

ENSAYO DE DIGESTIÓN Y ABSORCIÓN DE LOS CARBOHIDRATOS

ALUMNOS:

ROCIO JUDITH AGUILAR LEMA

CARLA MARCELA ANDRADE PAZMIÑO

SKARLETH NAHOMI CHIMBOLEMA TAMAMI

ADRIAN JOSUE HIDALGO CHANGO

LORENA LIZETH JARAMILLO TOAPANTA

ASIGNATURA:

BIOQUIMICA

PARALELO:

SEGUNDO ENFERMERIA “A”

DOCENTE:

LIC. JANINE TACO

PERIODO:

NOVIEMBRE 2022 – MARZO 2023

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INTRODUCCIÓN

Para hablar sobre la absorción de los carbohidratos a través de la digestión debemos saber

que “Los carbohidratos son digeridos principalmente por las amilasas y borde en cepillo enzimas

del borde en cepillo. Los carbohidratos sólo pueden ser absorbidos como monosacáridos por lo

que estas enzimas rompen las grandes moléculas de almidón en monosacáridos monosacáridos”

(Lectorio, 2022)

Los carbohidratos son biomoléculas que son una fuente de energía para los seres vivos,

también necesitan consumir diversos alimentos para poder obtener azucares, estos se encuentran

principalmente en la glucosa de la cual se obtiene energía para los procesos metabólicos. Están

presentes en diferentes alimentos como cereales, algunas frutas, legumbres y verduras.

Los hidratos deben ser descompuestos para su respectiva absorción para luego ser

metabolizados y su principal función es la de generar energía para los músculos y transportar

nutrientes a través de la sangre.

En los mamíferos la glucosa se transporta por la sangre y cuando sus reservas no son

suficientes se descomponen (Glucólisis). La glucosa es almacenada en el hígado y músculos

como glucógeno.

Su proceso es extenso y es más común de lo que se espera, sabemos su proceso, ya que

hablamos sobre la alimentación, claramente interactúan enzimas y procesos un poco más

especializados en la descomposición y trasporte de nutrientes, pero es similar: “El proceso

supone una rotura enzimática tanto de glúcidos, como de proteínas y lípidos, por medio de

enzimas de la saliva, jugo gástrico, jugo pancreático y células de las vellosidades intestinales.
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Los lípidos requieren además una solubilización micelar por medio de los ácidos biliares de la

bilis.” (Open course ware OCW, 2017)

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DESARROLLO

Digestión de los Carbohidratos

La digestión de los carbohidratos comienza en la boca, donde los alimentos se mezclan

con alfa amilasa salival, esta es una enzima hidrolasa activada por iones de cloruro, que degrada

al azar los enlaces alfa 1,4 del almidón de todo alimento. La alta concentración de protones

presentes en el estómago inactiva esta enzima y el almidón se sigue digiriendo en el intestino

delgado gracias a la alfa amilasa pancreática. Esta enzima degrada el almidón liberando maltosa,

maltotriosa y dextrinas.

La digestión de los hidratos de carbono comienza por medio de las enzimas presentes en

la saliva que actúan sobre los almidones, rompiéndolos en porciones más pequeñas, incluso

en disacáridos. Una vez en el estómago los ácidos de este inactivan la enzima de la saliva que

metaboliza los glúcidos. Sin embargo, los alimentos ingeridos, por lo general tardan hasta 1 hora,

antes de tener contacto con los ácidos del estómago y los carbohidratos ya han sido trabajados en

este momento por las enzimas de la saliva. Cuando los alimentos se mezclan con el ácido del

estómago y pepsina, la digestión de las proteínas se inicia y la digestión de los carbohidratos se

suspende temporalmente. (J, 2019)

Pasado ese tiempo, pasa al duodeno donde actúa otra vez la amilasa, aunque no llega a

romper todos los enlaces, lo que se consigue finalmente en el intestino delgado. De aquí, una

vez convertidos en glucosa, pasan al torrente sanguíneo y a las "despensas" del cuerpo, es decir,

al hígado y a los músculos donde se almacena en forma de glucógeno para su uso futuro.

Por el contrario, comemos demasiados carbohidratos o éstos tienen un alto índice

glicémico (rapidez con la que la glucosa de los carbohidratos entra en la sangre), las reservas se
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llenarán pronto y el resto de glucosa que quede flotando en la sangre deberá convertirse en grasa

para ser guardada en los diferentes tejidos adiposos.

Los hidratos de carbono no digeribles, como la fibra, una vez en el colon, son

parcialmente degradados por enzimas de la flora bacteriana hasta distintos compuestos que en

parte pueden ser absorbidos. Cuando los niveles de glucosa en la sangre aumentan, el páncreas

estimula la producción de la hormona insulina, la cual se encarga de guardar la glucosa en las

despensas. Sin embargo, ésta no es su única misión: a la vez que guarda, también se asegura que

la grasa guardada no se queme.

Por esta razón, aunque la insulina es muy importante para mantenernos vivos, hay que

evitar producir grandes cantidades. Sin duda, la forma más efectiva de controlar los niveles de

insulina es a través de comer alimentos con un bajo índice glicémico. Recordemos que, a mayor

índice glicémico, mayor producción de insulina. El glucógeno se sintetiza principalmente en

periodos en los que la cantidad de glucosa presente en las células es mayor que la cantidad

precisada para la producción de energía.

Sin embargo, la "despensa" de la que dispone el organismo es muy reducida. Es decir, la

capacidad de almacenamiento es pequeña y, por lo tanto, las posibilidades de que se agote la

fuente de energía rápida son muchas, si no se cuenta con un aporte externo adecuado. Como ya

se ha dicho, los dos "almacenes" orgánicos son el hígado y el músculo, y en el acto deportivo la

utilización de una u otra es importante, ya que tienen funciones diferentes: El glucógeno hepático

regula la concentración de glucosa en sangre, y es esta glucosa la que alimenta el cerebro de

forma constante.
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Si el cerebro está bien alimentado, funciona bien, lo que garantiza la capacidad de

concentración y un buen estado de ánimo. El glucógeno en el hígado alcanza una reserva de 100

gramos aproximadamente. Estas reservas son mayores después de las comidas, pero

disminuyen entre las mismas y especialmente durante la noche y el ayuno, ya que se

degrada el glucógeno hepático para mantener normales los niveles de glucosa en la sangre. El

glucógeno muscular debe abastecer las necesidades del músculo para llevar a cabo el trabajo

derivado del desarrollo de la actividad deportiva. El almacenamiento de glucógeno en los

músculos se agota sistemáticamente durante el ejercicio.

La tasa de agotamiento depende de la intensidad del ejercicio y de la cantidad de

glucógeno almacenado en los músculos antes de comenzar el entrenamiento. En 15 minutos de

ejercicio intenso puede agotarse del 60% al 70% del glucógeno almacenado en los músculos. El

agotamiento total puede producirse después de 2 horas de ejercicio intenso. Una vez agotado este

glucógeno se necesitan 48 horas para reponer el almacenamiento de glucógeno en los músculos,

en condiciones de una dieta normal, es decir, cuando una dieta contiene el habitual 55% a60%

del valor energético total de hidratos de carbono (cuando la dieta es deficitaria en hidratos de

carbono se necesitan no menos de 5 días de recuperación). (Mercado, 2020)

Absorción de los Carbohidratos

La digestión de carbohidratos comienza en la boca con la amilasa salival y continúa en el

intestino delgado con la amilasa pancreática. El almidón consta de cadenas lineales de glucosa

unidas a por enlaces alfa 1, que se ramifican en ciertos puntos con enlaces alfa 1,6. La amilasa

pancreática escinde enlaces alfa 1, y los productos resultantes son glucosa, maltosa, maltotriosa y

capdextrina. La glucosa no necesita hidrolizarse, pero las moléculas restantes de sí necesitan ser

hidrolizadas por enzimas en el borde del cepillo . La lim-dextrina se hidroliza principalmente

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por la glucoamilasa, aunque también se hidroliza a partir de la isomaltosa-sacarosa. La maltosa y

la maltotriosa son hidrolizadas por la isomaltosa, que rompe los enlaces alfa-1,6 y forma un

complejo con la sacarosa. Otros disacáridos como la lactosa y la trehalosa son hidrolizados por

la-lactasa y la trehalasa. El enterocito sólo puede absorber monosacáridos y especialmente

glucosa, galactosa y fructosa. La glucosa y la galactosa se absorben mediante transporte activo

dependiente de sodio. Una proteína de transporte denominada SGLUT 1 transporta una molécula

de glucosa, otra de galactosa y dos de sodio. El transporte de fructosa es independiente y lo hace

por difusión facilitada a través de la proteína transportadora GLUT 5. Tres moléculas, glucosa,

galactosa y fructosa, cruzan la proteína transportadora de membrana del enterocitos GLUT 2 por

difusión facilitada, aunque algunas también lo hacen por difusión simple5. No todos los

carbohidratos potencialmente digeribles se absorben en el intestino delgado, hasta 20 L de

almidón dietético pueden llegar al intestino grueso porque es fermentado por bacterias del colon

(como sucede con las fibras dietéticas fermentables) dando como resultado ácidos grasos de

cadena corta (butirato ). , propionato, acetato y lactato), hidrógeno, dióxido de carbono y metano.

En pacientes con malabsorción de carbohidratos, la fermentación bacteriana excesiva provoca

heces ácidas, gases e hinchazón. (Gallardo, Evaluación de la absorción y metabolismo intestinal,

2007)

Malabsorción

Antes de comenzar el estudio de los cambios en la función intestinal básica (digestión y

absorción de nutrientes) y métodos de evaluación y diagnóstico, debemos definir algunos

términos. Indigestión: Dificultad para convertir nutrientes (carbohidratos, proteínas, grasas) en

Evaluación de Absorción y Metabolismo en el Intestino productos de menor absorción (mono-,

di- u oligosacáridos; aminoácidos; oligopéptidos; ácidos grasos, monoglicéridos).

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Malabsorción: cambios en la mucosa intestinal absorción y transporte de nutrientes

adecuadamente digeribles, incluyendo vitaminas y oligoelementos. Los procesos de digestión y

absorción están tan estrechamente relacionados que se acuñó un tercer término, mala

asimilación, para describir esta situación. A pesar de que estos datos reflejan la fisiopatología

subyacente, el término malabsorción se usa ampliamente como un término general para referirse

a todos los aspectos de los trastornos digestivos y de malabsorción.

El proceso integrado de digestión y absorción se puede describir en tres fases:

• Fase luminar

• Fase mucosa

• Fase de transporte

En la fase luminal, los carbohidratos, las proteínas y las grasas contenidas en los

alimentos se hidrolizan y disuelven; depende en gran medida de la secreción pancreática y biliar

en la fase mucosa, se produce la hidrólisis final y la asimilación de sacáridos y péptidos, y los

lípidos tomados de las células epiteliales se procesan y almacenan para exportarlos desde el

enterocito a nombres sanguíneos. capilares . Los nutrientes absorbidos en la fase de transporte se

transportan al torrente sanguíneo oa la circulación linfática. En cada una de estas tres etapas,

pueden ocurrir cambios en los procesos de absorción. Una comprensión del proceso de absorción

normal es de gran ayuda para comprender las causas y consecuencias de la malabsorción y, por

lo tanto, guía el desarrollo de una estrategia adecuada para el uso de varios métodos de

diagnóstico. La malabsorción puede ocurrir por defectos en tres fases además, uno o más

cambios pueden ocurrir simultáneamente. Y aunque los hallazgos clínicos pueden ser similares,
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los mecanismos fisiopatológicos, los estudios de diagnóstico y los tratamientos pueden diferir.

(Gallardo, Evaluación de la absorción y metabolismo intestinal, 2007)

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CONCLUSIÓN

En conclusión, hemos llegado que los carbohidratos son los que almacenan energía y son

uno de los 3 macronutrientes principales, además de las proteínas y los lípidos; los carbohidratos

están presentes en muchos alimentos, como los cereales, las frutas, las legumbres y muchas

verduras, es decir es la degradación enzimática de las moléculas complejas que constituyen a los

alimentos, para convertirlas en compuestos más sencillos.

Sobre todo, son la principal fuente dietética de hidratos de carbono para el ser humano

para ser utilizados como energía por los seres humanos, la mayoría de los hidratos de carbono

deben ser digeridos descompuestos en monosacáridos que puedan ser absorbidos y luego

metabolizados.

La digestión y absorción de los carbohidratos son procesos importantes ya que permiten

la degradación de los alimentos y bebidas y su asimilación para que de estos obtener los

nutrientes necesarios que el cuerpo necesita aportando energía y así realizar diferentes

actividades cotidianas del mismo.

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BIBLIOGRAFÍA

Gallardo, P. P. (2007). Evaluación de la absorción y metabolismo intestinal. Nutricion

Hospitalaria, 7 .

Gallardo, P. P. (2007). Evaluación de la absorción y metabolismo intestinal. Nutricion

Hospitalaria , 7-8.

J, A. G. (2019). Digestión Carbohidratos. BUENAS TAREAS.

Lectorio. (19 de Septiembre de 2022). Lectorio. Obtenido de Clasificacion de los carbohidratos

segun su tamaño: https://www.lecturio.com/es/concepts/digestion-y-absorcion-de-los-

carbohidratos/#:~:text=Imagen%20por%20Lecturio.-

,Digestión%20de%20los%20Carbohidratos,de%20almidón%20en%20monosacáridos%2

0monosacáridos.

Mercado, X. (2020). Digestión Carbohidratos. Universidad de Ixtlahuaca CUI: Studocu.

Open course ware OCW. (12 de Junio de 2017). Unican-OCW. Obtenido de Tema 6. Digestión y

absorción : https://ocw.unican.es/mod/page/view.php?id=571