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6 - Carballeda - Intervencion en Lo Social. Cap 1, 4, 5. FALTA CAP 2
6 - Carballeda - Intervencion en Lo Social. Cap 1, 4, 5. FALTA CAP 2
TRAMAS SOCIALES
D �ectora de colección:
LA INTERVENCIÓN EN LO· SOCIAL
1
. .
. 1 O. I. Cortazzo y C. Moise
Estado, salud y desocupación
ExclUsión e integ�ación en los nuevos
11. R. Teubal y otros escenario.s sociales
1
.,_r ,
:
14. A. Carballeda
La inte7'"Vención en lo social
15. S. Duschatzkyy C. Corea
Chicos en banda 1
u
16. L. Schvarstein �1
1
17. L. Marmora ·
18. M. Montero
Teoría y práctica de la psicología comunitaria
T. Puig
. PA·IDÓS
Buenos Aires
La comunicaci6n m'tlnicipal có1nplice con los
ciudadanos ·'
Barcelona
México
22. G. I<.esler
Delito exclusión y juvéntud
,
Alberto. Calabrese
. l
En síntesis, ¿qué nos propone el autor? Entender palJa
no
sorprendemos, buscar adecuadamente, su�tentar el ·tr�bajo CAPÍTULOl
de investigación en determinados pensadores que. ilumin
an La int:ervenció� en lo social:
este tránsito, proponer·: acciones inteligentes -:-porqu
crean propuestas y vínculos- y dar una nueva fuerza
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los oríge:qe·s y su sentido
a1 una
VIeJa tarea. if.
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En este aspecto, la intervención en lo social manifiesta una
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importante influencia del pensamiento ·de Thomas Hobbes
La sociedad, en el pensamiento de T homas Hobbes, es clave. No sólo en el campo del hacer, también en el de cons
la !legación del estado de naturaleza. Si los hombres "pac- tituir (construir) a aquellos sobre los qu� "se hace". La inter
, tan" para franquear él paso del status natu1�afis a una socie vencióp en lo social habrá de surgir en este t�rreno oscuro y
dad civil, debe-n .entregarse a un Leviatán (soberano repre nebulqso donde se edificarán dispositivos de ··relación con el
sentado mediante la figura de .un monstruo nombrado en la "otro"; apoyados en el "derecho a la vida". Pero en ese mo
Biblia), en el cual Estado y sociedad coinciden. No casual mento fundac�onal,,_.e1 poder, producto del saber, es una c:la-
mente Leviatán es el nombre del Estado, lo que pone de , ve que : permanecerá oculta durante siglos, a veces develada y
manifiesto que la visión de la política y la sociedad de Tho otras -vPelta a cubrir hasta el presente. Se crearán formas de
mas Hobbes está atravesada en forma relevante por su no la intetvención en las cuales, a veces en forma efímera, otras
ción del Estado . de madera evidente, Estado y sociedad civil, o poder y socie
Desde la perspectiva de Hobbes, en el pacto de sujeción dad civil, se entrelazarán. coincidiendo, articulándose, de al
(pactu7n subjectionis) los hombres delegan su soberanía a un guna manera alimentándose, en especial en ese "entregarse"
monarca, quien a cambio les restituye el derecho a la vida. a otro que tiene el poder que le confiere el saber, dentro del
En ese momento, crucial en la historia de la ciencia política, espacio artificial de la intervención.
·
se funda el absolutisrno, pero a partir de ese e?tablecinúen En �íntesis, retomando el pensamiento de Hobbes, si librá
to también. se comienzan a construir las forn1.as para "lo dos a s'í mismos los hombres aspiran solamente a "satisfacer
grar" la pa·i, .Para· cohesionar aquello que se presentaba co sus impulsos", luego de lograda la paz social será necesario
mo salvaje(>y anárquico luego de la "retirada" de Dios dei manterterla, generando formas de reorientar la acción de los
mundo de'los hori1.bres. ho1nbrf s, de enca�zarlos en una direc�ión, �� busca d: aque
_
Pero es'e instante de creación marca algo más sutil: la llo que,;,el pensamiento modemo considerara y definira como
fundación�:de las formas para lograr la cohesión en el terreno útil p�ri� el "todo social".
de la paz, alcanzada luego del pacto de suj.eción, es también Es nosible plantear, de este modo, una serie de interrogan
el momento de construcción de los .instrumentos de coer tes que:: intentan profundizar el análisis de la intervención en
ción que se relacionarán con los bordes, los márgenes de ese lo soci�l, generando una suerte de disección de ésta, a· fin de
contrato, en definitiva con aquellos que quedaron fuera de 1
accede a los acontecilllÍentos que le dieron sentido.
·
Al fin, serán éstos quienes recibirán las más puras fonnas de Los ihicios de la intervención en lo social llevan, en s(misxnos, ·una se
rie de interrogantes. ¿Qué fue lo que motivó el desarrollo de estas ..nue
la intervención que imponen de manera significativa el acto
vas dhrategias?; ¿cóino se constituyeron en discursos portadores ·:de'
. individual de entregar soberanía a otro que detenta poder "ver�ad"?; ¿por qué las prácticas médicas tendrán un papel tan irnpÓr
(en tanto conocimiento), para finalizar e� . "estado de guerra f
tante ; ¿dónde se dan los puntos de encuentro entre prácticas aparen
natural" y lograr la integración de �qiiell6 que'-se estaba fun teme�·lte tan diferenciadas corno la medicina, la guerra, la filantropía o
la ev :i,n gelización?; ¿dónde se hace transversa ... el discurso político e.ri es
dando y se había comenzado a designar corno sociedad. te juego? Y por último, ¿cuáles son las inscripciones jurídicas en toda
Thornas Hobbes ofrece a Occidente una de las primeras esta cuestión? (Carballeda, 2000b).
·
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.. A lfredo J. Ca1·balleda
-r·� La intervención en lo social: los orígénes y su seiltido
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época construye los perfiles d e la transgresión. Esto ij plica cu ela, muerte, etcétera) debe ser reord enado, racionalizado e
uri.a forma de acercarse a este " territorio" a través de di�eren- i�troducido en la "vida metódica". Es decir, será ingresado :a
'
tes dispositivos, instrumentos y modalidad es d e acci �n en la 1, .. la modernida d. _.,
una puj a entre lo natural y lo sobrenatural. En este as��ecto, jer quiere abandonar un recién nacido? Avisa a la persona de guardia
se aceptaba que el mal era producto del demonio, y qhe se.
·-
to6ando el timbre. Inmediatamente el cilindro, girando sobre sí mis
filO, presenta al exterior su lado- abierto, recoge_:al recién naci do y, pro
hallaba en a quellos por quienes éste tenía predilecció � : los
espíritus a l os que podía seducir, especialmente las mu eres, J siguiendo su movimiento, lo introduce al interior del hospicio (Don
zelot, 1977).
los m e lan cólicos y _los
- insensatos
- �
.. Allí, en• el origen - e la
.
"anorn1alidad", es posible ubicar el encuentro de tres fi9!uras:
� �-;:Y � . Este dispositivo se irá transformando.:en clave moderna,
·
tra nliento del cuerpo ::.n l os talleres, la familia o el ejérc !.to, y co1no alegoría o Inetáfora, para dar forma y sentido a· las
el onanista, que representa la preocupación por la seA.'Ua:Ji dad
prácticas que se estaban creando.
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infantil y a.raíz de ello.por la organización de la familia ou� En principio podemos ·pensar este dispositivo como una
cault, 1994). . . . . :il
forma de ingreso a la institución, a uri nuevo n1undo, a un or
Tmnbién en esta etapa se trata de dar un� e plicacióf ra
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-!1-lfredo J. Carballeda . �a inte?IJención' en lo social: los m--ígenes y su sentido
rente, corta ese juego, genera nuevos significados y ocupa el poder y una ratificación de su circulación y su vitalidad en ca-
lugar de aquéllos. El abandono queda ligado a un nuevo dis da actb.
· ·
este mundo", reafinnando la visión secular de "salvación" Desde la perspectiva de Bentham los papeles en la sociedad se deben ·
reg!r por la. tolerancia de dos impulsos básicos de los hombres: el deseo
que trae el pensamiento ilustrado.
de felicidad y la voluntad de eVitar el dolor. La "utilidad" en Be11tham
Tatnbién esta contraposición, muchas veces transformada es sfnóniino de la deseable, es un instrumento para conseguir la felici
en disputa, es sinóniino de pujas políticas. _A su ':.ez, la inter daé{ general de la humanidad. A partir de a;ustarse al sentido de "utili
vención proporciona nuevas estdttegias de'1-' ·moralización, �
da ", una sociedad dispone de una normativa que le sirve para discer- .
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·
ahora asentadas en un nuevo catecistno . social. . En la Aro-en- nir �cerca de .qué es justo y qué es injusto , cotno así tatnbién lo correc
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b
.
to .P incorrecto. Estas ideas lo aproximan al pensamiento de Kant
. . �- .
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ciahnente de la posesión de atributos para su ejercicio. En
definitiva, la intervención en lo social itnplica un ejercicio del t
En(definitiva, la intervención se va ratificando en la pérs-:-
pecti de los ideales vinculados a l � S "nuevos" valores de 1á.
'
20 21
.,.
·:
ulomo autor "pone en acto" sus tdeas a trayes del dtsen¡ _ de p rídica, consagrada exclusivamente al ejercicio espontáneo de la libertad.
(Botana, 1989).
una figura arquitectónica, el panóptico, que·:·enmarcará 1,� in
.
.
tervención en lo sociaJ,durante años, con repercusi.ones n la
.
� De esta manera, Constant, siguien9 � el �an�ino de Mon:
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acrual'd
1 ad .
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En este s�ntido, ·��.posible aJ;lalizar los orígenes de 1� in-. seguridad . Pero no debe existir voluntad legislativa que se
tervención desde un diálogo con la ciencia política. ; ,Los introduzca en la esfera del individuo. Así, se construye una
acontecimientos de fin del siglo XVIII, en especial la R; va visión de lo público como un pequeño territorio ·que se en-.
lución Francesa, y las diferentes formas que adquiere ' las frenta a lo privado cargado de atributos que definen un ho-
n�odalidades de gobierno durante el siglo ·siguiente,-se¡ in...; � . rizonte sin línlites. A su vez, . y siguiend:J a Botana, es posi
gularizan en EuropL continental· a través de la soberan�;I de
ble vincular el pensmniento de Constant al de Ada1n Smith,
la ·razón. En el terrenQ de las ideas y d.e la aplicación p ác r relacionando el pasado con la conquista y los tie1npos nlo
tica de las forn�as de �gobierno se observan. dos nociones de
dernos con el progreso qne·trae ·eLcomercio. En definitiva,.
;
Hbertad: la "libert d ··de. los antiguos" y l a "libertad d � los lo que se plantea es una puja entre la Ubertad civil y la liber
modernos", que eri; definitiva remiten a la representaci � n y
tad política. Esta última es vista como ,cargada de inseguri
la soberanía. Esta d�scusión se afinna a partir de las do�tri- · dad. De allí surge otra fonna de construir la necesidad de 1�
nas que Benja1nin Constant expone con gran claridaq en intervención, ahora p'ara ordenar la sociedad, custodiar el
una conferencia dictada en 1819, tirulada "La liberta d� 4 orden y prevenir desbordes, como los producidos· por la R�
los. antiguos
.
comparada con .
la libertad de los n1oderq.o�" volución Francesa.
1
(1823). Para Constant, la distribución del poder entre li to.,.. j Esta discusión alrededor de la soberanía tendrá lugar
dos los ciudadanos era- un can�ino inexorable hacia el es � con mayor énfasis en Europa continehtal, en especial en
potismo. La libertad de l� s antiguos, segú�··constant, e a·la J }{rancia, y tan1.bién tendrá su impacto singular en el Río de
independencia de las ciudades griegas, pero no la inde en d la Plata. La circulación de las diferentes ideas políticas du
dencia del individuo. Constant ve en el Estado a un " {�o � rante . el siglo XIX y la influencia de ,los posrulados de la
nente a la libertad". T<;:>do esto puede leerse como una e � e Ilustración, la experiencia de Inglaterra y la naciente demo
cie de desafío a las re:v-oluciones, en ta.r;tto éstas ponía en rj cracia en los Estados Unidos también jmpactan significati-·
crisis las formas de gobierno pero no lograhan desartic� lar A . van1ente en la Argentina. En el planb de la intervención en
la omnipotencia del Estado. Estas considera�iones lo ll ,, an �� io social, en este país se construyen nuevos disposi:tivos o se
a plantear que la liberf:ad no se garantiza· ni: siquiera a ra- � f .
.
. . recrean antiguos.
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Alfredo J. Carballeda � \
¡La intervención en lo social: los orígenes y su sentid.o
Si encontráramos una �anera el_e dominar todo lo que a cierto nÚinero
bilida fl construida en forma artificial. Así, la intervención
de hmnbres les puede ocurrir; de disponer de todo lo que esté;en su de
elaboi¡a sus primeros "contratos", proponiendo desde la pe-
rredor, a fin de causar en cada uno de ellos la impresión que se quiera l
producir, de cercioramos de sus movimientos, de sus relaciones, de to dago g[a formas de cohesión, preparando a los "otros" para
das las circunstancias de su vida, de modo que nada pudiera escapar ni i¡u
un fu ro que el clima de época visualiza· como promisorio.
entorpecer el efecto deseado, es indudable que en medio de esta índo Para �sto debe "en,tr�garse" la soberanía a alguien que pue
le ser�a un instrumento muy útil, sería un instrumento muy enérgico y
.
muy util, que los gobiernos podrían aplicar (Bentham, 1988).
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da dit g i('élé:d'�'S�H.ií�'f�tto o el padecimiento. El espacio de.
la inte1rven.'cÜ3h;:·s'é·"�"i�(tiaturalizando 'p rogresivamente, incor
Las disciplinas que se resignifican en ese momento de la p orand o lo cotidiano como una necesidad para acceder a
1
�na vf da mejor. . . ·
historia deben estar atentas a las posibilidades de cambio, · 1
En el. caso de la ciudad de Buenos Aires; los inicios de ¡ 17'
. sobre todo a· aquellos casos de deformaciones o retrocesos '
par� así intervenir, corrigiend9 desde el cuerpo, el ahna nf.¡ �
inte nci n en lo social se relacionan con una i�stituc J . Ó � (
(mente) o el contexto. De esta forma, la intervención en lo que s�:. dedico"' a enterrar a .los muertos que no podian rectbl'r \ ·. ·
. social surgirá en relación con diferentes planos: en la detec sepulf.ura por falta de dinero.1 . . \
ción de lo "c;tnormal" y su clasificación; en la aplicación de Esta visibilidad de la muerte produjo la aparición de un \ .
formas de· disciplinarniento, y por último en la articulación dispo� itivo de intervención en lo social que paulatinamente /
de ambas· p:ara dar una señal a la sociedad, en definitiva para se ext �ndería a otras esferas, como la n1.inoridad, la salud o la
educat:ión. Esos muertos, productos de una guerra silencio- !1
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construir ei}:_forma permanente a ese "otro" sobre el cual se
sa p er;!b no por ello m enos cruenta, llamaron la atención co
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• intervendrá;;;,:
mo a ello que d ebía ser c-:rregido, qu e est:a a dicien o al-
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Así,los ddgenes de la intervención en lo social se relacio .
n�n �on la ']lustración, en especial cori la orientación pedagó g9 peligroso para ·el orden Imperante, en un· Idioma aun no \·
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:rr�ndo las puertas al origen, al pasado y a la historicidad del' q�!1
�lUJeto, p�11�Hu1do sc5lo e11 fttncidtt clel futuro y de tt11a socia� t:�u·� utt ttutyt;u• d8§Artt;;U{,j di e!l�ei§. ��ttuts, véftSt'! Carba1hed� (�OOOb).
1
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24 25
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Alfredo :J. Carballeda La intervención en lo social: los orí'genes y su sentido
l1
Esta nueva visión de lo social también determina la � pari- Este entrelazamientO fundacional delE:stado y la sociedad
ción de nuevas formas en los procesos.judiciales. El contepto se reproducirá, luego d.el abandono de la :fórmula de Hobbes,
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de delito social surge en este context��. don,de la impor 1�cia . en el espacio de la intervención. Así, las instituciones dedica
se centrará no sólo en lo que se hizo si�o en la "virtuaÚd�d de das a indigentes, ancianos, huérfanos y delincuentes se rela
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1 .
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los actos", es decir, ep.lo que ese "otro podría llegar a acer, cionan con ideales y formas de búsqued� :de la verdad atrave
en ténninos de presunció n de futuros eelitos. Pero esta:ffigu sadas por su origen jurídico y la práctica penaL La indagación
.
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ra del delito social s· e corresponde también con 1 � limi ción que habían hecho los griegos se transforr:nará en el Medioevo
del acceso a los recursos de los que menos tienen.' Así, 1� pu... en "inquisitia "� para pasar a ser sinónimo de examen en la mo
ja por la supervivencia será criminalizada. La vida cotictiana dernidad. lnquisitia y examen coinciden en la necesidad de la
. . ,! '
con1o espacio de construcción de identidad, será el lugaf pri- prueba como camino ·a la verdad y como instancia de cons
1 ·vilegiado de la interven�ión, cotno espacio favorito del �isci- trucción de ella. Esa construcción se produce en oscuros en
plinan¡iento. A su vez, en esta relación con la cotidianid4 d de tretelones donde se expresan diversas fuerzas de poder (Fou-
.
1 los otros, éstos son construidos. con1o sujetos de la intelven-
�
ción, y las primeras instituciones de reclusión fueron pla tea
cault, 1980).
Hace falta disciplinar determinadas tendencias "masculi-
1 da� coino la, ?oratorios de observación, para experiment r en-� nas", como el consumo de tabaco ·.y alqohol, .las reladones
.J mas y nuevas· fonnas de conocer.
·}
con prostitutas o la falta de responsabilidad (Donzelot,
1977). En el caso de la Argentina, este propósito disciplina�
.
rio se reproduce dentro del discurso médi co a. fines del siglo
A.'1X.
. La intervención C0�9 "bú�queda de Ia verdad�'.
Los avatares jurídicos de su llistoria
�;¡ El sujeto de la Íntervención ya está ,.prácticamente cons-
'
:� truido, inventado, y · desde esa "preocupación" se darán seña
. � les a toda la sociedad. Justamente es en .ese período cuando
La intervención ert·lo social va a sign ificar el mont� de j� surgen las priineras Ligas de Te1nplanza, que propondrán .
una nueva ·fonna de conocer, de saber, en definitiva, de¡ ge
terminar con la "cultura de. la taberna" y el consumo de alco
nerar discursos de ve�:dad que construirán sujetos de cÓno
hol, práctican1ente en todo el n1undo, presentándose como
cimiento. En otras palabras, ese otro será constituido 'des-
una prolongación de las creadas a fines del siglo A."VVII y du
[· paciosa y c� ! ladamente.a ·t�avés de descripciones, infor�es,
,. obser-Vaciones y e�peciahnente desde la relación que se �sta }:
-�
rante el siglo XIX en los Estados Unidos ..
blece con quien lleva adelante la intervención. Hospitkles, La s Ligas de Tem.planza se multiplicaban e � e l país y en el mundo,
COrreccionales de Inenores Y Inujeres, escuelas de inte�na desde ellas se trataba 'd e que la sociedad n10de�ara su carácter, hacién
dos servirán para conocer . las conductas y costumbre de � dose hincapié en los efectos nocivos de la vid a ociosa o poco produc
tiva, en los "excesos" en cuanto a las diversiones, el tie1npo libre co
aquellos a los que se quiere transfonnar. 4
mo productivo, y en la necesi dad de ll evar adelante .una vida "sana",
Pero tatnbién se trataba, a través de la intervenció de �� m<'is ·vinculada a los procesOs económicos del modelo de producción
construir ideales a Ios'que se aspiraba: fa,nlilia, padre, m�:P,re, europeo que a otras modali dades de trabajo ó formas de vida. El tra
hijos tendrán funciones cada vez n1ás estrechamente asi b� a- bajo era planteado como fin y la vi d a debía estrUcturarse en torno de
. .
das y hacia. allí se dirigirán las prácticas del cuerpo, 1� �f él. La templanza era una especie de "acritud¡ frente a la vi da" que lo�
sectores "vulnerables" debían aprender e i�ternalizar en nombre d ef
J,.
¡ '
patológico, que va a hacer surgir un nuevo sujeto de conoci- De e�ta forma, la intervención en lo social avanzará sobre
.
miento, más definido, ya clasificado según parámetros cien la vida cb tidiana, imponiendo un ordert, adem.ás de construir
tíficos. Aun así, este· saber no es definitivo ni estático; los dis� y ratifi�,�r a ese "otro" en el lugar de la exclusión. Éste, en
cursos acerca de la anormalidad o la disfunción social llec:ran ese con·texto, será visualizado como alguien que padece de
hasta el presente, 'y. en muchos casos esta construcción dis-
b
bido a �pe no "comprende" los beneficios de una vicÍa metó
cursiva se centra en la interven�ión� dica, pefo funda111entalmente por ser moralmente débil. En,
Así, desde determinadas prácticas sociales cada vez n1ás el texto j de Bunge se advierte un "ideal de trabajador", que
cercanas a JU.na intervención sistemática, organizada y fun- tiene pqcos hijos y una mujer hacendosa, que controla sus
.. · '
m
.
darnentadá�·· ,se generan dominios de saber que i1nponen impulsds, etcétera, y todo este discurso se fundamenta en la
.
nuevos obj·e 59-s, con'ceptos y técnicas qe interv�nción que, medici:d,a, la cual se introduce en lo cotidiano medicalizando
:
. ·
h1stonca pueden ser definidas a partir de una práctica penal . minolo¿fía que, por ejen1plo, pondrá .�1 acento en los rasgos
(jurídica). físicos de los delincuentes. Las ideas del
. vlalthus, Spencer y la
·
Durante los prim,eros años del siglo XX, la intervención aplicaci�n del pensmniento de Darwin 1. la lectura de lo ·so
en lo social será u::.� instrun1ento político de otra índole� que cial con\s_gurarán una serie de entrecnizamientos constructo-_,
. ará con la mirada
s� relacion res de v:erdad que le darán una dirección definida, en los pri- ·
sobre determinados grupos so.:.
c1al�s, los que paulatinamente serán constituidos como po �
meros f-os �el siglo ::CX' a la int�rven.ción e� lo social. �
.
blaCiones homogéneas distribuidas en un hábitat determina En s�p tes1s, los ongenes de la Intervencion·en lo social se
do. Así, los inspectores de hio-iene .rnédicfl. deberán virrilar en
. relacio�an con la modernidad y sus diferentes etapas, sobre
el caso de la ciudad de Buen� s Aire�, la . hio-ie� �,. de la0habi ta todo cojn la Ilustración y �1 positivismo. Es entonces cuan
ción en la que se hospeda el pacien�e�: · ·er J'énero de vida que do se c 1 nstruye un poder disciplinarió que en el case de Eu
lleva, sus necesidades, sus recursos y, especialmente si da ropa se�!relaciona, en sus inicios, con el Antiguo Régimen, e
'
curnplüniento a los preceptos higiénicos. irá campiando de forma a través del ·dempo, átravesando di-.
ferente�. corrientes de pensamiento ..a�sta la actualidad, es
Tmnemos un obrerá �uyo trabajo está bien pago y expuesto a pocos
.
decir, desde el inicio de la modernidad hasta el Estado in
paros, su muJer es hacendosa y gana ade1nás un pequeño salario tra- terventb r, con su antecedente en la ÁÍe1nania de Bismarck,
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Alfredo J. Carbal/eda
1
¡)
'. �1 :. La intervención en lo social: los orígenes y su sentido
desarrollándose en forma significativa luego de la crisis del . De ahí que interrogar el origen de la intervención en lo .
trcinm. � ·
..
· . . '':.social implica preguntar no qué es sino qué hace, qué tipo de
: .:·.·relaciones sociales construye, cómo se entromete enla socia
nes n1odemos de la intervención en lo social, en tanto se bilidad, qué responsabi.lidad tiene en la pérdida de los lazos
.
.·.
cuestiones clave: la vigilancia jerárquica y la sanción .dorma está allí naturalizado y por eso se hace dificil de visualizar, la
.
liz�dora. Estos hechos producen un disciplinamiento;jde los·
..
intervención en lo social muestra la nece�idad de incorporar
saberes, jerarquizando· algunos, quitándoles valor a otros . la p.lestión política desde una visión del poder, UI;;L poder que
Así, sa�er es sinónimo de disciplina en tanto cada uno!:de los
1
11
1) En la crisis de legitimidad y representación que atraviesan
•
.
p
Alfredo J. Carballeda ittterJ,Jención en lo social: los 01-igenes y su sentido
pone entre �ujeto y verdad, se hacen visibles -tal vez- las ata..:. En fi�-'�, desde la in�erve-'?-ción en lo soci�l se trata de bus
una 1orma discursiva diferente, ahora signada por el su-
_
duras que afectan a la libertad.
' conl$trnida en su vinculación con los otros y no a partir
En el contexto actual, la intervención en lo social se nos
presenta como un "espacio de libertad", ya que se construye �
. atrih cionés elaboradas previamente. Así planteada, la
en pequeños h_iatos, intersticios, lugares, donde es posible re ..;.....f'",o�rPn
· • ón en lo social muestra la necesidad de un trabajo
construir historicidad, entender a ese otro no como un suje · ,l ·ó1i;·w'dé..'in:'d�gá:'�io n alrededor· de la lógica del acon-
·.l,.\:;;'-�.�, ... ... ... ..... ... ., ... ...., que se pi"igffi� en
to a moldear sino corno un portador de historia social ' de el momentd de la demanda ha-
·'
cultura, de relaciones interpersonales. ella, f en el c �mino de � econoce: 1� pre�e��ia de la his
-
Tal vez la int�rvención en lo social no implique agregar ni en �1 presente, conflriendole as1 h�stoncidad al acto de
.
·
quitar nada sino · solamente "hacer ver" aquello que el con ,jntervenir.
texto, el escenario, el clima de época impiden visualizar. Y
¡ acaso pernlita hacer que ese otro recupere historicidad, ubi
i� cándolo en el lugar de la verdad, corriéndolo del banquillo
!.
! de la sos¡::_echa, entendiendo _que se es en tanto efecto' de la
cultura, ��e es imposible pensarse separado de los otros, y
que la di��renciación estriba en lo singular de las inscripcio
nes de cá:cia cuerpo. La intervención probableme�te implicó
fragmen üi::ción, aun.que se presentara com� dis positivo de in-·
tegración:"Es por eso que intervenir en lo social puede signi
ficar, o n?;· unir áquello que una vez se fracturó, recuperar las
sociabilidh-des perdidas, que sumadas conducen a la recons
trucción dé la sociedad .. Quizás desde los otros, desde la pa
labra de aquellos que meticulosamente. fueron construido-s
como "portadores de cuestión-
social" ' la dirección de la in-
tervención se pueda encaminar hacia la búsqueda de respues-
tas a las interpelaciones más actuales.
Sin e1nbargo, si se lleva más allá la cuestión y se retoma
uno de los planteas de Max Weber, es posible profundizar la
indagación alrededor de 'la intervención.
32 33 .
Alfredo J. Carballeda
o pro ceso
Por un lado, la tradici ón normativa pone el ej e en el or ,. La infervención en lo social com
den de la sociedad. Un orden, si s e quiere, constituido arti
latino in
ficialmente y mantenido a través d e dispositivos de discipli L� pala bra intervención proviene del téi-mino
ir en_tr� " ? �'in�
narniento que se aplican mediante prácticas e inscituciones. tet7;en�o, que pued e s er traducid o corno "ven
ser s1nonimo
terpo�erse". D e ahí que "intervención" pued : ...
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rnentt;- ten er a su
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' . en tanto �xis.��. UJ?:� de-
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ción mediante los lazos sociales, articulación que implica un sitivo'fqu ·- · -'' ' .... �. . . - - .,., . if . ue la d emanda ·s ea' el acto fundador
e se' entr . oiúe
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n1iten a las masas urbanas. Max \Veber sostiene qu� las ma CIO. ... n. áefi. �i . .
éción de; . . ésta,
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. . - . .. ... ,. .a. . ..Parti;r. del '
qu1�:E(; 1nt�0?.:�I1-� 1<::> hace p orq11�. . e ?tá leoirimado
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92 93
Alfredo :J. Carballeda La intervención
�l?!Q.��a��_9.n � �:�� � ����� c��-P.:\���!v� explicativo paga la intervención o a quién ambos (profesional y sujeto de
d,e
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ª���{��§:!���Ac��'4�"cie�7ii�f
- � Ülla -� tó�·" "caa�}�=-<: �erternente atravesado por las cuestiones anteriormente
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mencionadas.
..e..,ñé� ·señt:i-é:IO, ¡,;; b-;te
rvénción desencadena una serie d �
Pero, en definitiva, ¿qué debe hacerse desde la interv�n
ción, en especial desde 1'3-s expectativas sociales que ésta ge
expectanvas y con secuencias fuertemente
ligadas a la consj nera ? L�. ip��-:r.Y'�l.1�Í.QI1 ?V:P9:P.�_:lJguna.:forw� c:l e 1Jlí.�qu �da _de
truc�i�n simbólica y a las representaci one
s de quien está in i
temruendo . De esta forma, una n1.odalid
s e vinc� a a un determinad o marco concep�
una sen e de aportes teóricos y empíricos
ad de intervenció · '
al que, ligado �
n respu�-���s� -�---� �t-�:�_?..fi��t� s - �rniil:_:�tem e.l_l.�� ---so ��:l.-l.�-� ; _ po� ., l <:>
'taiif.9': ·dehería producir tnodificaciqp.e_s __ en r.�l�-�!.9p_ _ con -lá·
�uestió� pun-iiiareii · cfue · e��.JJ.a rnada a actuar ; -�sí, nueyarnen
relacionados con e� te apare<;e !a 9:eli�it;:tcjóJ?. d.e. Ufl: territorio, el espacio o lu
contexto, genera "formas típicas" de interven
�_j
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·
. . (Foucault, 1 98 0) .
···
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.
. \�
ticas que actúan den- : D� _es1:a forma, el lugar de lp. intervención se transforma
_
J
tro del campo de la salud es a travé
s de la utilización de la noción de :¡
model . Desd e esta_ perspectiva podr
? ían abordarse tanto los fundamen- :!, · -- eri ·territorio,. es decir, un espacio jurídico, que habla de la le-
tos ep1sten1ológicos de las mismas, com
o así también las distintas ma gitinzidad de la, inteTven ción, y polí� co, que 11Z�:-ca la_ "agen'da "
neras de intervención profesional, ..
en diferentes contextos y en distin- . cuestzon soeza/.
donde se constru)'en dije1-entes aspectos de l�
tos momentos históricos (Barberena
y otros, 1 998) . .
·
F ;
1\ 1�1.�.�-�-�;.Y
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11 "Qt[p � 9���--�� .���-! ��-� - �����!'-e �. quien . �- s� - vez_ genera una ¡' lf
..
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En principio, y retoinando la visión cercana a la noción de
,��E��- - ---��E ) ;tJ1��t.!,t.n��qn ! desencad ��� una se:i-ie de dispo- �
_
de Interrogantes. En pnnctpi o, desd e una social, construcción que puede presentarse corno discursiva y
visi ón foucaultia- i\ que genera sujetos de �oi1ocirniento. En términos de cotidia
na, las . p,regun s giraiían alrede or de qu�é
1
_ ulsar � � n tiene pod �r p�- � nidad, lo social se constmye a partir de imaginarios sociales,
�a Imp la mtervención, o, desd e otra perspectiva,
quién de represent�ciones, que generan diferentes impactos en la
1 1
Alfredo J. Carballeda . La intervención
\1 \t:
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; l .
singularidad de cada grupo, barrio o §Uj eto� D e�,?e la pers e social¡ : que se ubica en último término en las expériencias vi
¡ pectiva de los imaginarios sociales� :¡_hJ,ªginario _jh.o es sólo vidas ¡por el individuo. Pero la experiencia s�.cial resulta ser,
·
1\1\¡
"imagen den, sino una creación inc�·sanit,··-·'incf�terminada
porque es atravesada p or lo psicológico, lo" social. y lo histó
rico que, en definitiva, impacta en el orden de lo real.
en definitiva, comunitaria.
Por su parte, lo simbólico impacta -en la esfera del sujeto. ·
desde ' una forma particular en el orden de lo real. En este
. A su vez, la noción de "representación" se relaciona con aspe c�o, esa relación entre lo simbólico y lo real puede ser
, / un conjunto de conceptos, p ercepciones, significados y acti entendida de dos maneras diferentes: a partir .de-una. .�_qn.,;: .
tudes que los individuos <;,ep.ci?n aristotélic a, y en este juego se capta · �J ·eidos o ésej:i:... .
'/ con ellos mismos y con losdefenómenos
un grupo comparten en relación
del mundo que los cir / '' cia, y:;:a esde una visión positivista, med!ante la�-cñal-s'e-�6Ípta
· 1'¡·. !
cunda. A su vez, esas representaciones se resigni:fican en una
\ \ serie de espacios rnicrosociales que tienen como común de-
l •
'<.:"'Hf"to$lid ad objetiva a partir de- la memoria. · Así, la '�reduc�
ción �idética" p ermite la reconstrucción del mundo dt::)a
noininador a la vida cotidiana. exper\�enci a, en tanto elementos, "capas" de s entido, genera!..:· ·
Por otra parte, la visión d e lo social como algo constitui ción �le sentido, horizonte��e sentido. espaciales, tempora
do de la vida cotidiana exige considerar la construcción de les y -temáticos (Waldenfels, 1997). · - . .
intercambios y reciprocidades dentro de un grupo, familia, D�sde la búsqueda de aééeso a la subjetivida d, lo · que re
barrio, etcétera. A.sí, se intenta comprender y explicar lo so- . su�t:a pe ese juego de a:rticula�ión eritre los órdenes de las re�
cial desde la.singularidad, centralizando la mirada en los pro pkese�taciones, lo real y lo simbólico, es, lo que se denomina
pios actores. "-regis'tr o", y éste se vincula a imágenes ail.tériores que son re
A su vez, desde esta p erspectiva, la vida social es organi- totna�as, asimiladas . y se resignifican. En · definitiva, se en
" ··zada en términos de sÍlnbolos, que adquieren significado s e cuentra en relación con un complejo de imágenes que prece
gún la representación de quienes cons�yen y recrean el den-y dan forma a una nueva impresión . Las simbolizaciones
mundo en que viven, el que a su vez está condicionado por -. se· va.A · creando a través de las ;mediaciones entre �ujetos, :en
influencias macrosociales que se resigni:ficarán dentro del or un espacio-tiempo que se cqmparte. Lo soci�l · implica una
den de lo real, en términos lacanianos . cotnunidad que · existe y se recrea a través de .•símbolos mu
Desde una visión cercana a la fenomenoloaía o
de Ed- tuos . . D e esta forma (especialmente a partir de las formula
mund Husserl y de Alfred Schütz, la "acción" sería la uni- cionei3 de Alfred S chütz) es _posible pensar la constitución de
dad de la sociedad. La acción se centra en el análisis y la ex la int�rsubjetividad. En este aspecto existe una serie de rela
periencia personal de los individuos. D e esta forma, la "ver:: cione!$ entre diversos autores que recibieron influencias del
dad" de la vida social se �ncuentra en la subjetividad de sus p ensa!miento fenomenológico, como Merleau-Ponty, Sartre,
partí ci pan tes.
( ---- Perspectivas filosóficas como las mencionadas revelan la
Rico�fur o D errida, e? quienes lo que sobresale es la ponde
racióh. de lo subjetivo. En definitiva, la experiencia social .se
cons�ruye en gran parte dentro de este juego, de modo que
l
! nseecesidad de aproximarse a la subjetividad de ese "ot;ro" que
·
1 presenta en el territorio de la intervención,. a través de una la co�ciencia humana presupone !� realidad y existencia .d e
otrosl1 Las experiencias 1Cle las personas están mediatizadas I,/
.
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Es posible, ·entonces, acceder a una "explicación" de la vida de lo� lazos sociales . ..---
... ¡¡
l¡i
96 i·! 97
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�ji
Alfredo J. Carballeda La intervención
r ···-
·La intervención, planteada desde este lugar, implica UI1a nea de trabajo es posible hallar valiosos aportes en los textos
necesaria búsqueda de significados en las instituciones, a� de Castoriadis sobre la "elucidación crítica'\ --en la visión de
i
gramatical", fuertemente marcado por la ·singularidad . En definitiva, los sujetos construyen su identidad en un ¡·
�, quiene� escriben _Y reesc�iben las diferentes insc�pciones. Jt¡ juego de articul�cióii de "los ordenes imaginario, simbó�ico y \
a 1mf ort�c1a del vtncul ? en:re representac��nes y coti real. En estas condiciones . es posible pensar la denormnada íl
. � i
1��
[
·
dtantdad nnphca una necesana nur�da a la relac1on entre �tersubjetivi�ad o las diversas manifestaciones del padec�� .
cienCias sociales y la subjetividad. miento subjetivo asociadas al atravesamiento de lo real, lú }
D esde los inicios de la modernidad, la separación _d e la
r
� . que se presenta como dem�n:da casi constante hacia la inte.:
nociones de individuo y sociedac;l marcó toda una serie d � vención en lo social.
controversias de tipo espistemológico. Indivi_duo y socieda4 A su vez, la identidad del �ujeto se cq�s.g!':!Y�.--�!!:_.�.--��pa-
�
��-�!������e;1�"·��f.:E:!:��e ��;:��t��cré 1k ���:��
fueron históricamente pr�senta � os como pa_res antinómico
'
Luego, sobre. todo a partir del stglo XX, se Inte�taron cons j.
-· ����i������i�f;ff�j��J� ��?��i�fl�ui�ª�t:�
truir infinidad de puentes, relaciones e- interacciones entr�
,!
·
"interno" y la sociedad co1no lo "extemo". -En principio, 1� -'les,c.�l sujeto de la intervención mediati¡za esa construcción en
noción de .subjetividad dentro del campo . de las ciencias so-;'¡ su vida cotidiana , desde un ;marco . comprensivo explicativo
ciales implica la no separación de ambas instancias. Pero lo� que le dará fopna a su padecimiento. Pero es justamente
subjetivo, la subjetividad, no puede ser pensado en forma� ...... dentro de esa cotidianidad donde se construyen los significa
universal. Una vía posible de acceso a la subjetividad pasa, en' dos atravesad os por elementos del orden de lo real y de lo
principio, por el camino de la singularidad. Desde una pers-.t simbólico enmarcad os en . micro y macrodiscursos que atra
pectiva si se quiere 1netodológica, se hace necesari.o particu-�
larizar aquello qu � ha soportado añoS de universalizac�ón. !? e r: 1 viesan la intervención, qú e, en es·te sentido, implica Ún pro
ceso de análisis que intenta comprender y explicar esas arti
modo que esta rnJ.rada conlleva, por un ladq, la elucidacton ! �ulacione s. Esa vida cotidiana se encuentra estructura da en
diferentes aspectos y visiones y de alguna manera enmarca la
.d·e
crítica de una serie de nociones que intentarían "desenciali-·�
zar" lo social cotidiano, y, por otro, surge la necesidad tra- :i intervención en lo social, por eso se hace necesario compren
bajar la. dirnen�ión sociohistórica de la subjetividad. · !1 der y explicar los asp�cto� significativos de la vida social, e In
D esde la . perspectiva d e la desencialización, este camino . tervenir buscando transformaciones, en definitiva, constru-
. impli��ría des-encub.dr aquello que una ho.p1.ogeneid.ad arti- �.·
·ficialílieiité cóflstimida e!:lboró u Ocuitó. "DentrO de esta · Ií- r . yendoJa_ visió:p. parti�u,lar del aGontecimiento que éonyoca a
la intervención.
Alfredo J. Carballeda La intervención
Desde este punto , .de· ·vista, resulta necesario definir y Ast> la intervención se construye desde la prodll�.C:�é)I?: y
;����rr����;,�:a����ff¿��2�1'f�f���:����;ri�··
rección de 1� -i:Ó.terveri�'i'ón 's�:-�ri�;!;i' hacia la ·e-cféstió:rÍ de la
identidad como un elemento artÜ;lJ.lador de la problemática
����}�������;��������;���;#!�:���}�:
persp��tiva comunitaria,· el acceso· ·a. · Ta· siñgularidád. . implica
de la integración. Así,l?: iden.tidad desde una.p.erspec.tiy� so- · úñ.a;�I:raa-a:-':fiacia 'Tos''laz-os- sOciales' como· erementos :fuñdan-
cial §� ex.pr<:!?a en fo_rrna co_i¡te�fll �r:'--ü· 'sea-;"5"-e-i;¡s-érfb�- en un tes a'e"ie'stá.·
e ��=�!l�.d.ii�.�Ú1�:;.n�!!��,��i:��.�i{�.:,:�,�·:·��9��it���2P�s,: -�-; �,.i�iii.�o -
rial, lingi!í�ti�a, fa!I!iliar, histórjca,' religiosa, etcé�era. _ .La
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ciones que se constituyert en este ámbito. Los trabajos de es --se:r{!a�o corno problema. Según C. Geertz, los relatos portan
te autor intentan describir las reglas que en diferentes épo en sí fuisrnos las claves para su interpretación . ·
cas controlan las interacciones de la vida . cotidiana. A su vez '
. .
. . . :· ' .
. ., · .-
.. . .
•• ,·--·., • •,
s_ u iJjetiv:o,
· . . .. .. . .. . .._. .. __ .. , .._.,,,. _, . . .. .. .. - . . .. .,• . � ..
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·� recreacloii " der Víii.culó, eCsij.siei:lt:o de 1a. pertenencia, el f�;�- i ;�J�i� ����! ¡¿;
.
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.
101
1 00
rj¡
Alfredo J. Carballeda · La intervención
tegorías de análisis y la dirección en que se realizará la inter�,· f estar presente o no. Por otra parte, la comprensión implica
vención. Como antecedente, la escuela historicista alemana! un acceso a la singularidad, en tanto incorpora _la racionalidad
realiza algunos aportes entre los cuales cábe ·destacar e( propia de cada individuo. Es en este juego de. comprensión y
planteo de Dilthey sobre la diferencia entre las- ciencias his explicación donde surge la "imputación de sentidos". D esde
tórico-sociales y las ciencias de la-naturaleza: las primeras se:¡, las conocidas conceptualizaciones de Weber que apunta� a la
relacionan con un objeto que les es--ptopio y las segundas1· idea de que los hombres, para vivir, necesitan imputar senti
dos a lo que hacen y que solamente algunos aspectos de los
..
:¡
·
1
Para Dilthey, comprensión y e:A'P licación s e presentan co- 1 ' Algunas cuestiones instrumentales
mo pares antitéticos. Weber, influido en parte por el histori- f \
.
cisma y el romanticismo, tratará . de articular y unificar· los ¡; El pensamiento de Weber plantea la necesidad de distin
dos conceptos. D esde la noción de racionalidad, tratará de � guir las determinaciones de lo histórico en lo individual y lo
investigar conexiones de sentido tomando como" base la ra- ·111 digno de ser conocido. A Sl:!- vez, también plantea la necesi
cionalidad con acuerdo a fines. .
dad de encontrar las causas significativas que permiten re
Los aportes metodológicos· de Max Weber en relación cortar el fenómeno que · ·podrá ser tanto explicado como
con la intervenc�ón en lo social facilitan la definición del aná comprendido (por ejempl<?, la relación· entre las manifesta
lisis, la construcción de planos de análisis que integren la ciones macrosociales de la violencia, su expresión en lo ur
comprensión y la explicación, la incorporación de la raciona bano y su posible intromisión en la vida doméstica). De es
lidad y el logro de la autonomía de las ciencias sociales·.· to se sigue, entonces, que desde las dos últimas formas de
Para Weber, explicación y comprénsión no son contradic expresión se pueden presentar demandas de intervención en
torias. ·La explicación . es una parte, un momento del �nálisis, lo social, lo que implica1.. una necesaria aproximación a los
- no es un :f_in en sí misma, y requiere la Gontr_as:tación empíri compone� tes �el acontecimiento que se . intenta compren
ca, que implica la existencia de una cadena causal que puede der y 'la construcción de una '�lógica · del acontecin1iento"
Alfredo J. Ca1,.balleda ;f La intervención
que generó la demanda. �a .aprqximación a la intervención,
,¡¡
c d{'Jsecuentemente, para la sociología comprensiva el punto de partida
so�� las representaciones d� l�s actores que no remi�eE a otra cosa y, co
¡¡¡¡���i!§f�!:r����s;�x���;� _
_
m_<j'\ resultado, son -en pnnc1p10 perfectamente "tra,nsparentes". Esta
(Z±eck1-ationalitiit),
tr�sparencia está ·muy bien ejemplificada por la racionalidad de fines
cuyo perfecto ejemplo es- el mercado. Aquí no es ne
ce�11rio recurrir a ias representácion�s colectivas, significados ·extraindi-·
--··r:fés'a<tla: · ·p�rsp e�nva _,de�·los tipos--ideales de Max Weber,_ vi dual es o pre�iones · normativas. Todo lo que se requiere es el cálculo
la explicación de la esfera de lo individual piesupone un sa- .
ber nomológico, un conjunto de uniformidade s típicas que pr�puesto es el modo de acción del homo oeconomicus,
raa!onal de costo y beneficio. En resumen, la acción racional con un fin
que .no puede evi
tariel ser perfectamente transparente porque sus razones, aunque sub
· expresan un comp �rtamiento que pue de ser compro bada jeti�as, son perfectamente tomprensibles par� cualquier observador ex
desde lo empírico. Estas pueden ser elaboradas en forma si terno. Aquí, libertad, racionalidad y transparencia están Íl,lextricable-
�
milar a los conceptos a través de procedimientos de abstrac me�te ligadas (Pellicani, 1995).
ción; de ahí que el resultado sea un "tipo ideal". �ste "tipo
ideal" se constituye a partir de aquellas uniformidad es de la E4' síntesis, d esde el pensamiento de Max Weber es posi
conducta. de los hon1bres que están cargadas de sentido. Esas ble acfc eder a la construcción de significados en la esfera del
p equeñas uniformidade s, empíricamente comprobables, se sujetq. De esta forma, un enfoque de tipo interpretativo, des
expresan en los tipos ideales, de modo que la comprensi.ón d� la ;p erspectiva de la inteiV;enció:n, implica la búsqueda de·
(verstehen) p-q_ede ser útil para anaiizar y estudiar la conducta n¡oci�aciones_y no de causas,_ mediante . el reconocirrri ento y
· como "acción social" . a n áli s)�t s de la· multiplicidad de las primeras. La s motivacion e s
r
s� ret cionan con nuevas �o dificaciones, son productos d�l
_ Según: \Veber, la "acción so_cial" s e construye en l a medi
- - -da en que ésta' se .encuentre subj etivaJ:Ilente relacionada de 4
lazo bcial en tanto construcción de reciprocidades e inter-
modo intencional con el comportamiento de .otros. .5�:.Ul.=��-��J.().�.
c� lll:b:: os. A:� .
. P..�P��-
es so)i_a�t?S _"In�� d eÍ} _ s �r. . ��ten- ):¡
.
d1_d(�sl: cc;:>mo un . enguaJ e, una grama tJ. ca �9-C:!fl:1. :_q�� d..�P�P.d e 1'1 .
_ _
Hablarnos de acción cornuni taria cuando la acción hmnana está relacio -. d��·�Ht:-gl:U.J2'9.�_:ª�:���J.��9.�.- P.�!��:.�. ·a,<;>s ,·.�4'qii.�-��--�-�----�9ns�yen
nada; de una Inanera subjetiva dotada de sehtido, co.p. las acti tudes de sigñ!l·��1()_s�- Este, entendillúento requiere una: necesari� re- ¡
otros seres humanos [...] . Una acción racional ligada a.un fin está orien
��;cii����(
,d� los
CCJns.!DJc;9.P �
,\,
subjetivamente racional, puede estar basada en el hecho de que esa per
sona espera de ellos una actitud dotada de significado, con varios nive
les de posibilidades (Weber, 1986). E�i p osible p ensar que la actitud frente a lo que conside- ""'7"\
f
ramo problema social puede ser similar a la del lingüista o : ·J
� {
Weber insiste en qúe en la sociedad existen fundamental
mente los individuos y los significados, entendidos en un
sentido puramente subjetivo, significados que los ind�.Yiduos
j
el ser iólogo frente al texto, en tanto nec'esidad de captar. el
signi ': cado de la acción, de las motivaciones, para definir la ¡
direc ' :ión de la intervencipn.
. . , J
atribuyen a sus acciones y a las de otros individuos con los S � la escue,la crític�, son la iq�ol�gía, las fuerza� �o�ia-
·
! ' ! 1
1 04 J f)j
La intervención
Alfreao J. Carbal/eda
A su vez, .según G. Simmel, no es posible comprender la
histói:icos que acompañaron el desarrollo de las ciencias so.J'·1
.1
c1a es durante el siglo XX. '!) sociedad sin tener en cuenta la existencia de una serie de mo
vimientos que separan o acercan diferentes · c�nstelaciones.
1
La irrupción del nacionalsocialismo y el fascismo, eJ...· ni�fo del stali_.;:1 Es decir, toda sociedad vive en "acto" pulsiones que alejan o
n!smo, obligaron a retomar una vez más la cuestión del sujeto. Era pre-• acercan a grupos, personas, etcétera. La sociedad· es posible
CI�o adentrase en lo que Georges BatáíHe-,-eJ!_consonancia con W. Ben a través del lazo social en tanto acción recíproca.
jamin y los frank:furtianos, denominó . feliz�ente · como -- la estructuraii . Además, la ·consistencia de los lazos sociales depende de
psicológica del fascismo (Álvarez Uría, 1997).
una serie de "regiones" de significación con reglas de perti
nencia. Estas últimas están -circunscriptas por las interaccio
D e bsta forma, los científicos sociales críticos comenza
nes. En definitiva, �o existe la sociedad ·sin accíones recípro
ron a indagar la subjetividad, y utilizaron el psicoanálisis pa-"�
r cas. Y es esa reciprocidad lo que se constituye como desafío
ra construir una aproximación a lo interpretativo. .
para la intervención en lo social. Desd� esta perspectivá; ·se ·
;¡ '\ puede acceder a una visión. �dinámica de' la sociedad que se
Si analizamos la lógica de fondo de las imaginativ�s y esclarecedorasl1
1
producciones intelectuales de C. Wrigth Mills, E. Goffmari, L. Coser,'t. vincula en gran parte a las características culturales.
y :>tras sociólogos críticos norteamericanos, · resulta claro que tras la !_ ·Es posible pensar, entonces, una relació� entre·' cornuni
eltte del poder, tras la conceptualización y crítica de las instituciones:;¡. da9 y cultura por fuera de parámetros estáticoo. En otras ePa- ·
totales; o la diseminac� ón � or todo el c erpo socia� ? e las institucio-;¡i
.
':
nes ':oraces, _�o que esta �n Juego es no solo la negac10n de determina-¡
_
das libertades en detenninadas coyunturas específicas sino también, y;,
� 1) labras, la existencia de códig0s y sanciones <PS otra fuente de
rn:irada para la intervención en lo social.:1 Este sistema de co
sobre todo, l � per? etua�ión del antorit�rismo y del fascismo p_:ecisa- j' dificaciones abarca diferentes esferas que incluyen lo religio
. --
.
....._ .. . . mente en el Intenor mismo de los reg1menes democráticos (AJvarez�
¡
so, lo moral, la ley y las costumbres, mientras que la:s sancio
!)1
· ·
Uría, 1 997). · •1
·.
lidades (los efectos pueden estar antes que las causas), po� ld l
cual los fenómenos histórico-sáciales se preserttan como:;
complejos y se admite la gran dificultad para acceder al to- �� -.....
Algunas aplicaciones de la int�rvención e� lo social
do. D e ahí la necesidad de captar variables relevantes, com-:;1
portamientos, interrelaciones. En defi�itiva, acceder _al ): D esde una demanda construida a partir de la violencia
mundo del otro, al modo como lo interpreta, comprende y1; '
doméstica es posible, por ejemplo, intentar construir una ló
explica. Así, el comprensivismo cambia la noción de causali - !11
dad p �r la de "c-onexiones causaJes", que no - son leyes ni � gica del acontecimiento que convoque la intervención. D es-
de allí se construyen determinadas categorías de análisis. En
enunciados generales sino lo que constituye la imputación lf
s principio, desde la explicación y la búsqueda de "conexiones
de sentidos a la acción social en términos de Weber. ,;· ·
causales".
Las conexiones causales implican constelaciones indivi- �
duales e hi$tóricas de .Gansas que conducen al fenómeno como /l De esta forma, una demanda como la mencionada puede
relacionarse con la pérdida de reciprocidades e intercambios
tesv-lta,do. El fin ya no �s el conocimien_to
• •: • • • • • •• -
.. de lás causa's' sino • � - •. • • - - • �. . • ,_ • • ···- •.• ... t ••• • • · - -� ··; •. • . •
mismo, son múltiples las motivaciones que deben ser consÍ Jia intervención en lo social . ...!?99P
se construye�. d�---�-�.!�
deradas: la emergencia del matrifocalismo (como forma de
alteración de papeles y funciones dentro de · una unid;:�.d do
méstica); la caída o pérdida de grandes relatos_.J�X.p Úcativos
�'ilEt����:�¡t!�.����r:=��ti��·�;��=
ticuFadón es preciso interrogarse: ¿ cómo se construyen esos
(que implican una posible construcción de nuevas esferas de órd cines? , ¿cómo se actualizan? , ¿ cómo se transmiten? , y es.,.
explicación para · cada integrante· ··de- un grupo familiar}; e� p ecialmente ¿cómo se mediatizan ?
in1pacto de la crisis económica (con su carga· de-incertidum lp"na experiencia llevada a delante a través de un progra
bre e inquietud); dificultád es para recodificar lo nuevo co ma de autoconstrucdón de viviendas y ayuda mutua ilustra
mo incierto; la implosión de lo paterno masculino; la �risis
· .
vínculos solidarios; interrogantes como " ¿La violencia pue· rLa infom1.ación necesaria para cubrir los casilleros de la encuesta social
�o era suficiente para acceder a algunos componentes de . la singul��
de ser una forma d e lenguaje o es un fenó1neno nuevo que
obstruye? " .
...
dad de los actores intervinientes [ ] este momento no debe ser enten
&ido en términos morales y ¡!e presentación por parte de .los involucra
En definitiva, s e presenta una serie de cuestiones que -im Jos de mayores carencias o..,.. méritos para poder acceder al PP. Todo lo
plican la necesidad de nuevas fonnas de ap roximación a la de �ontrario. Me estoy refirierrdo solamente a la necesidad de hacer pre �
martda que cómienza a construir la intervención. En otras pa ��nte las trayectorias personaJes, farnHiares y colectivas de esos. vecinos
e incorporarlas [...] al proceso de áutoconstrucción de viviendas po� el
Jistema de ayuda Inutu.a. Para poder logrado era necesario. aproximar-:
lab ras, nuevamente se intenta una aproximación a lo social
desde la búsqueda de la comprensión y explicaciqp. . de los ac- Je a la subjetividad de los posibles autoconstructm;es y comenzar a pro-'
tores en el escenario de su vida cotidiana. f-m
¡¡_1
dizar algunos componentes de ésta y la cultura (Rivas, 2 00 1).
_
D e esta forma, los relatos que s e presentan se reco �an al {1 - . .
rededor de lo que cada momento histó�ico-. propone .corno - p tra cuestión significativ� de la int�rve�ción �n lo social
problema social. Esos relatos forman parte del núcleo signi · s e �� laciona con la recuperaCIQn
... de sohdandades. ·
ficativo de ese sujeto que demanda atención, y de ellos de l a noción de solidaridad posibilita repensar .
algunas -cues.:.:.
q
penden la construcción real y sin1bólica de aquello · que es tiortes· relevantes de la intervención, . desde don�e se inte�ta
presentado como problema. prqtbletnatizar una serie de conceptos que en definitiva remi
·
Así, desde la intervención surgen diferentes aproximacio.,. ten'l.l a l a i dea global de solidaridad.. D e esta forma; las nocio.:.
nes)
.
·
de igualdad, identidad,
social en un hospital psiqui.átrico o general, Ola narracióií de etcétera, se relacionan con la problemática de la integración' ·
'"in�d"ád no
· ':"<' , , .. :. . .. . .. . , •• _ ::
·
1 08
ll
1
Alfredo.]. Ca1-baÍJeda La inte1-vención
t
-· � -- � ·-· . .
· registr o .
interpretación del acontecimiento, el análisis y el
·
..
.
.. ·.·= • ..•. :-.. ·; ...
..
� sitivo. Se pregunta:
)
�¡
,1 l ¿Cuáles son las posibilidades de la intervención, los márgenes reales de ��
1 1\
¡:
maniobra de los maestros, los trabajadores de la salud mental, los tra- �.l
bajadores sociales? Para determinarlo es necesario que se superpongan �
discursos de diferentes órdenes y no solamente discursos de teorización ;¡·:
. ·
\. �. ·
el nivel .de las relaciones de 'la vida cotidiana [ .. ]. El análisis, conSíste �n :�
...
.
., ., í'l
CAPÍTULO 5
,..
{•:. .
�·
La initer:vención en lo social y los espacios microsociales� · ·
.
ría s� vincula en principio a .la posibilidad de ··trabajar los as..;.
pectos más significativos de la "problemática de la integra- ·
mentación social" .
La expresio:ri microsocial de la intervención es visible a ·
113
Alfredo J. Carballeda 1 La interuénción en espacios microsociales
,j¡
�
forma momentánea, se restringe a una dimensión menor que:1' diversos programas sociales que se aplican y, a través de la
en épocas anteriores. ;, triangulación entre elementos cualitativos y cuantitativos,
Otra expresión de la fragmentación de lo ·social se . maniJ evaluar el impacto de las estrategias de intervención utiliza
fiesta a través de diferentes formas de padecimient:G. Tanto la': das. En definitiva, se trata de elaborar modalidades de inter
fragmentación como el padecimi�nto interrogan a la inter..: · vención que puedan singularizarse en- lo local.
vención en lo social en tanto posibllldad . de ��tervenir sobreh Por otra parte, el espacio de lo barrial instaura una serie
·.
aquello que la crisis separó. - ¡1 . de significaciones a través de las cuales puede observarse la
tensión entre lo público y lo privado. Es posible pensar el ha- .
En efecto, el trabajo comunitario puede proponerse, den-'�
tro de sus lineamientos generales, intervenir en los procesos� rrio dentro de una tram¡1 de significaciones, desde la apropia
o fenómenos de fragmentación (en ta�to trama social), a par_;,; ción social del espacio, hasta la construcción· o el intento de
tir de su expresión local, intentando reparar o reconstituir¡ constituir un · orden propio que habla de la cultura e histor� a
aquello que las condiciones sociales, económicas y políticas, ! de quienes lo habitan. ...
La sociedad crea los espa�ios y, en muchos casos, los
fragmentaron. · .· .
En este sentido, entonces, la intervención comunitaria se :
� conflictos sociales urbanof"muestran las marcas que quedan
relacion� con una serie de elementos integrado�es, organiza- � inscriptas en el territorio de lo· barrial : un barrio; ·una comu
dores y simbólicos que pueden servir en función de la re- ' ·rü.dad, un espacio, es un texto que. ·es posible develar. Al mis
construcción -- de identidades en un escenario microsócial. � . �o tiempo, la sociedad es el lugar donde se expresa la com-
. Así, la intervención en
la comunidad implica una modalidad; · � plejidad de l�s lazos sociales, ya que· es el espacio donde
---
. _ � ingular, s egún la cual construye su complejidad a partir de la , transcurre gran parJe de la cotidianidad. Distintos elemen
elaboración de dispositivos que van a actqar en espacios mi-,j tos materiales y simbólicos le dan características definidas al
crosociales, cuyo horizonte se relaciona con la· integración, la,r espacio. Una forma de construcción de identidad pasa, en
organización barrial y la identidad. · : , tn:u,chos casos, por los modos de apropiación de los espacios.
Lo microsocial implica una mirada a lo local y una bús- 1 / La ciudad en general se presenta entonces como· un espacio
queda de la singularidad del escenario de acuerdo con· sus ,¡ de pujas permanentes y diárias donde la ma·rca del graffitti
propias características y su relación con lo macrosocial. Por "\ -llamado "tatuaje urbano" por algunos autores- puede deli
otro lado, la singularidad fonna parte de una construcción ji mitar territorios. El espacio se muestra a los otros, se nom
histórica de esa comunidad que va a tener süm.ificados b
parti- ''�1, bra, se materializa y participa en la construcción de identi
enlates. Es decir, el acceso a la singularidad permite incorpo- �� dades, dentro de la constitución de dos órdenes: uno visual
rar historicidad a la intervención comunitaria, lo que implica f¡ y otro lingüístico.
una apertura hacia la concepción de los problemas sociales �� La ciudad se nos presenta como un sistema de significa
desde su construcción, ampliando de esta forma la mirada ha- �� ciones que se va a singularizar en lo microsocial, lo barrial, lo
cia la posibilidad . o no de distintas formas de reparaciqn pro- ;¡ comunitario. Pero la ciudad es también sighi_fi cación social
pias de cada lugar, que pueden s er evidentes o que necesitan
ser develadas desde la intervenció n.
.i�
ll
en sí misma; producto de diferentes condiciones históricas,
discursivas, valorativas;-- ·económicas, políticas, etcétera. Hoy
.
�-- . �
-� �: ���.�rv:���i �.n --� c ?��� �� � �, ,��-�� i ��\�� �P?X� e:.n )? ex-
puesto, tambten permite hacer ITiáS operatiVOS y factibles los
· � !f su expresión, o parte de ésta, se manifiesta en los espacios
·microsOciales, donde aún se construyen identidades. que,
'i
. Alfredo J. Carballeda La intervención en espacios mia�oso_ciales
desde una perspectiva con textual, presuponen el concepto de fenó;tnenos. Éstos son presentados en la práctica cotidiana co
la conciencia de sí, reafirmada d esde lo territorial, lo lingüís . mo problemas en tanto demandas de tipo in��gral.
tico, lo familiar, los orígenes, la religiosidad , los códigos, et Dada la dificultad de la intervención conii:mitaria en la ac
cétera. Identidad que, en definitiva, se constiTI.Jy:�--�C::l?-
. :la- -inte tual�dad, la -concepción de " diagnóstic�" no s ería suficiente en
racción con la presencia de un " otro" que forma parte .
de un la húsq:ueda d e lineamientos, perspectivas y esencialmente
escenario, de un espacio microsociaL--_
· horilzontes para la intervención en lo social desde cualq�ier
_ _ _
1>,!
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�
116 117
Alfredo J. Carballeda
La intervención en espacios microsociales
Es posible hacer una larga lista de los obj etivos técnicos
s on de fácil medición: por ejemplo, por un lado, es posible
del trabajo comunitario que aspiran a mejorar la calidad de
medir la presencia · del sida, p ero es muy 1ifícil entender el
vida de la población, disminuir las enfermedades infe'7c��sas,
impacto del VIH sobre la singularidad de su portador y có
incrementar el número" de vacunaciones, mejor�rr.Jq� indices
mo esto implica una marca familiar y local. Es decir, una si
de habitabilidad, bajar las tasas de analfabetismo, etcétera. A
tuación objetiva implica una impresión en la esfera subjetiva,
su ve�, en · la actualidad se suman riuevas_Guestiones como la
que puede traducirse en incertidumbre, dificultades familia
drogadicción, el sida, el desempleo, la falta de espacios de en
res, ruptura de lazos sociales, pérdida de espacios de sociali
cuentro o socialización, la violencia doméstica, la violencia )
i zación, etcétera, a partir de lo cual se producen nuevas signi- ·
·urbana, etééter�. Estas últimas provocan crecientes dificulta
ficaciones en cuanto a"" la idea de enf�rmedad, por ejemplo,
des en la intervención y son las· más frecuentes en las deman
1
En definitiva, el conocimiento rnicrosociológico local im Por otro lado, aquello que se observa tiene historicidad,
plica la conjunción de los dos aspectos mencionados, es de forma parte de un proceso, expresa lo colectiVQ�.Y se encuentra
cir, aquello que es posible medir y el impacto cualitativo de en mÓvimiento p ermanente. Además, el pap¿:;l del observador
los indiéadores sociales en la singularidad del co�·ten-o· don..:. se vincula· a la imagen que de él tiene . la comunidad, lo cual
de se propone la intervención comunit�ria. consttuye una esfera de reciprocidades que puede ser caracte
rizad�' corno intervención comunitaria, en tanto construcción
.... _ _ .
to,,de lo microsociaL D esde los aportes de la investigación-ac cuales se interviene, intentando aproximarse a los códigos lo-�
cióii··es posible plantear que el instrumento d�- observación en cales/ las forrrias de participación y en especial las modaFda
el trabajo comunitario es el " observador mismo", pero éste es des· d� _comprensión y explicación de los problemas sociales
tá signado por representaciones y saberes previos que requie -· qi:re-é'stos. poseen.
ren una profunda reflexión y trabajo en equipo para dar lugar Este abordaje, que recib e . aportes de la an:tr:opoiogía y ·4et
[.
a una reelaboración de lo observado , en tanto búsqueda de iñ trabajo social, revela la necesidad de acceder a las formas. cons-
. . . .•
terpretaciones y confrontación con lo empírico, es decir, con lo titutitas . del espacio rnicrosocial en términos de reciprocidades
fáctico. La observación es, entonces, una instancia de un pro e int�rcambios. Justamente es este plano de observación el que1
ceso de análisis que contribuye a la interpretación de lo local. se vincula a la intervención� La obs.ervación se transfo�a en:
Desde esta perspectiva, la observación se vincula a la mirada un dispositivo de intervención que se orienta hacia la recons
sobre la trama cultural del espacio microsocial. Según Geertz, trucdón de solidaridades, redes y formas de reciprocidad e in�
dentro de una situación social pueden existir diferentes claves tercatnbio que implican una dinámica material y simbólica . en
interpretativas, de ahí la importancia de la propia visión del ac cada �ituación; es decir, la observación es la instancia inicial de
tor en tanto construye significaciones en su vida cotidiana¡.· · �
un p oceso que bus�a res�tuir una· trama social fragmentada y
En definitiva� la observación s e relaciona con una situa fuerdemente atravesada por formas de sociabilidad que cada
ción o acontecimiento estipulado con anterioridad, ·d�be ser vez �ás se orientan hada " la esfera individual. La mirada sobre
planificada y evaluada y es neceS'ario retnitirla a proposicio-
· ,, · · · ·· · · ·
d
. las r laciones de reciprocidad e intercambio, entendidas ' en •
nes gen eral es. · .· · ·· ·
�
. � térill. n os de re laCi ón" social · o,. riü!j ór; dé"lazó · ·sodal; "¡J'resúpqne"'
· · ·.
· ·
·
.
· ·
¡ · ·-··. ··,
- 11 .
��'"1
1'
1 20 121
Alfredo J. Carballeda La intervención en- espacios microsociales
esa perspectiva que intenta desde los espacios microsociales Hacia un esquema de trabajo comunitario
amalgamar aquello que la crisis fragmentó.
Otro plano de la mirada se relaciona con lo. histórico, Las estrategias d e intervención en comunidad pueden
vinculando la historicidad y las características. o.¡:ga.nizativas graficarse en .un cuadro que nos permita ordenar lo expues-
locales a través d e determinados . dispositivos d e interven
·
�t re �
grupos de la comunidad es concebida desde una estrategia de i
recuperación de lo propio, de aquello que construve identi- .!: Fractura en el teji o c·o nte ción social
�ad y que, en ·-definitiva, s e vincula al "todo social;, . Resulta J. ��
necesario, entonces, adaptar para el trabajo comunitario algu- � Intervención com u n itaria . en espacios m icrosociales
. --�os de los dispositivos, técnicas· e instrumentos de iri.terven
c.lon que las ciencias sociales han utilizado . ;hasta el presente. � �
- Ejes de intervención Instrumentos de intervención
Por o.tra parte, la mirada hacia los aspectos lúdicos y expre�
sivos muestra también otra posibilidad de aproximación a la f ·
· Lo solidario Observación
>< lar las' relacion es ·con el todo social. Esta trama arquitectóni
I n te rve n c i ó n e n co ntextos m ic rosocial es
� �
D e m an d a l N ec e s i d ad D e manda 1 N ecesidad
terminada dinámica cultural y con un sistema de códigos y ,
valores . .
Esta articulación de lazos sociales que es posible �evelar, �:.
Expre s i ó n c u a ntitativa Expre s i ó n cualitativa
partir de la intervención en espacios microsociales in1plica una
serie de relaciones informales que se construyen y se recrean
a partir de acontecimientos significativos, como la b�ografí�
Lo solidario co1no estrategia de intervención
en espacios 11tia:usociales de sus integrantes, el parentesco, la yecindad o la amistad. Pe
rq:.··por otro lado, esta trama de rela�iones que se estructuran.
D esde la intervención en los espacios microsoc iales, la a partir de la�os sociales se aso�ia a deten:pin.ados procesos co
�irada a la cuestión de la solidarid ad pennite reflexionar le�tiv�s y a su historia, y constituye también una circulación .
acer�_a de los lazos sociales y de la sociab�lid ad que éstos fo �
de in ersubjetividades que éxige otra vía de ingres� a la cues
mentan. No se trata de recupera r la visión de solidarid ad or tión de. la identidad. Las relaciones que se constituyen a través
gánica y/o mecánica , presente en el pe.Iisamie�to d e Émile de_ los; lazos sociales tienen un sentido integrador, organizador
Durkheün, sino de visualizar los lazos sociales desde las re -.y siiñ.bólico . D,..esde la filosofía de Husserl, la relación en cua.n
laciones inforn1ales que se construyen en el espació de la vi- ' 1
r
to a las cosas es impensable sin una _corporeid�d ·constitutiva,
da cotidiana. ·
en los lazos sociales , es posible lina aproximación al conoci Aqemás, la construcción de sociabilidad a través de los la
mien �o y análisis d e la realidad local, de los significados·Jqu� zos scpciales significa la p9sibilidad de encontrarse con cier
se atribuyen a los acontecimientos en ese medio, y de la in- tos niJ!veles de predicción,,. organización de recursos, previsión
fluencia de lo macro social en ellos. ·
1 24
125
La interoención en espacios microsociales
· Alfredo J. Carballeda L'
'l
•,1
�;¡
Así, los lazos sociales no sólo ratifican, en la vida cotidia
para una mayor comprensión de lo local. Asimismo, la forma
de construcción de esa sociabilidad se presenta como signifi
�-
jti'i
. Objetivamente los intercambios son múltiples, observa� ·
d�ran la histori�. del sujeto, grupo o micro:Sociedad confiere, en
·
1 1
la men1oria col_ectiva, poniéndola en es�cena a través de es.:..
. ' 1
128 12_9
Alfredo J. Carballeda L
1 La intervención en espacios microsociales
· El trabaj o con grupos heterogéneos puede s er útil debidb
tanto la generación de interrogantes como, especialmente, la
a la diversida d de representaciones de aquello que se recupel
�
jULIO CORTÁZAR·
nes juegan, para .qué lo hacen y cuáles · son los efectos de las
Jugar implica · "fundar un orden", desarrollar actitudes y) actividades dentro del orden de lo simbólico. Efectos que, en
conductas diferentes de las habitua1es que posibilitan otra\! definitiva, se van a relacionar con la recuperación de lazos
forma de vinculación con el mundo, la vida social y la ·trama]! sociales; pero · también con la posibilidad de aumentar la
de significaciones de éstá·. Cada acercamiento lúdico ; lá rea J confianza en las capacidades de quienes participan de ese es-
I·
lidad genera interrogantes, origina nuevas inquietudes e im-� . pacio de intervención. 'f..
pulsa formas de relaéión o construcción de lazos sociales . Un(·
·· · 'ácercamie�ro lúdico a la vida cotidiari:i presupone, entonces, Para nosot:I;O$ juego viene dejocum, palabra de origen latino que signi
fi.éa broma o burla. El juégo es , pues: lo dife�ente de· lo cotidiano, lo di-
Alfredo J. Carballeda La inteTvención en espacios nticrosociales .
verso, lo establecid<?: es la variante, la creatividad misma. Desde la pers.:.. �· A partir de lo grupal, si se entiende �: grupo com� �n lugar
pectiva occidental, juego y trabajo pertenecen a esferas distintas del
transitorio, éste, a través de la expreSIOn de la sreattVIdad, ra-:
quehacer, como la burla, lo serio o la diversión y la vida cotidiana. En
las lenguas indígenas americanas no hubo nunca una pála,bra -[. .. ] que . tifica su inserción en el lugar y construye formas que en de
pudiera traducirse por lo · que llamamos "trabajo". A-,naclie se le podía · finitiva apuntan a sentir y sostener su propia inclusión. Para
ocurrir que no fuera placentero, que no ·fuera ca-creativo con la natti Freuq, el arte se p�esenta como un terreno intermedi o, en�e
raleza, con Dios, con la sociedad, eón ·1e-hwnano; por ejemplo, cons . la realidad que se opone a nuestros deseos y el mundo � e la
•
truir una casa, pescar, tallar una piedra� pintar uná roeª-_[. . . ] eso nunca
podía ser "trabajo" (Magrassi, 1985). ·· fantasía que intenta satisfacerlos plenamente. · . . · · .
. A su vez, lo creativo se presenta como la posibll� dad de
_
Lo lúdico se presenta así como estrategia de recuperación constt;uir y elaborar nueyas respuestas ante nuevas situacio
desde un punto de vista instrumental, pero también ·como una nes desde el sujeto, el grupo o la .comunidad . Por otra parte,
ma:p.er� de alterar el orden de lo cotidiap.o, demo�trando la po la c�e�tividad con1o dispositivo de intervención implica el re-:
sibilidad de resignificar o reconstruir situacíones� El juego per des�ubrimiento de la importancia de lo ·grupal, la rel:ación en,""7 .
mite suspender o desplazar las determinaciones que. parecen tre .lo 1':f!TUpal y lo comunitario, la promoción de nuevas fo��as
infranqueables en el sistema de convenciones de la vida coti de coihunicación y, por últhno, la posibilidad de explorar. �� -
sibÜidades expre·sivas del cuerpo en relación con �1 e�pa�1o.
1
Lo creativo como instru1nento de interyención se presen Por último, la intervención en ·-�spacios microsociales se
ta con1o otra manera de aproximación cualitativa a la dinámi presenta como una posibilidad de revis�r el trabaj o comuni
.
diferentes estítnulos del lne dio, desde una visi6l1 hist6ricoa: t;on daridad �1 horizont� de la interven�tón d�ntro de la '-1n-= ' �
social del sujeto. D esde esta perspectiva, lo creativo formaría
parte de un proceso que surge y sustenta la propia i d eritida�. 1 · . '. . '.gtt �
. .la idnd de
í:
.,lo lo�al. · ;
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1 32 133