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UNIVERSIDAD SALESIANA DE BOLIVIA

Carrera de Derecho

La Paz - Bolivia

TRABAJO PRÁCTICO "REINTEGRO DE LEGÍTIMA"

Materia: Derecho de Sucesiones


Universitaria: Veronica Ramos Arcani
Luis Huanca Mamani
Ricardo Layme Paye
Michael colque

Paralelo: 1-1-1
Docente: Msc. Roció Isabel Reinaga Vásquez

2023

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INDICE

1. ANTECEDENTES............................................................................................................ 3
2. ANALISIS…………………………………………………………………………….…....……..4
3. MARCO JURIDICO.......................................................................................................... 8
3.1 Constitución Política del Estado.....................................................................................8
3.2 Código Civil Boliviano.....................................................................................................8
4. FUNCION…………………………………………………………………................................9
5. PROCEDIMIENTO………………………………………………………..…………………….9
4. DESARROLLO...............................................................................................................10
5. MEMORIAL……………………………………………………………………….…………….13
6. CONCLUSIONES.......................................................................................................... 24
7. BIBLIOGRAFIA.............................................................................................................. 25

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ANTECEDENTES

En el tema que precede, hemos referido que la legítima es la reserva que asegura la ley
sobre el patrimonio del de cuyos, en favor de los herederos forzosos; porción que resulta
intocable e indisponible por el testador por actos de liberalidad inter-vivos (donaciones) o,
mediante disposiciones mors causa (legados testamentarios). Por otra parte, sabemos
que la legítima es una limitación al derecho de testar, en virtud de la cual se impone al
propietario reservar la mayor parte de su patrimonio para sus herederos legitimarios,
razón por la que está impedido de disponer del mismo por testamento. Pero cuando el
testador ha instituido uno o varios sucesores voluntarios (legatarios y donatarios) en favor
de personas extrañas o la de sus propios herederos, otorgándoles una herencia o legado
superior a la porción de libre disponibilidad que le faculta la ley (donaciones o legados),
reduciendo la porción de la reserva, se habrá producido la lesión de la legítima. Contra
ese acto excesivo de disposición patrimonial se han instituido las acciones del
reintegro y la reducción, como un medio legal de defensa de la legítima. Constituyéndose
en un remedio jurídico para restablecer o reconstruir su porcentaje predeterminado en la
ley

2
ANÁLISIS DEL EXPEDIENTE

Partes del memorial: a) Parte demandante, Encarnación Evelin Soliz Acha.

b) Parte demandada, Inés Wendy Mercado Soliz en


representación de Andrews Enrique y Génesis Dayra ambos Santos Mercado (menores
de edad) y Giomar Stephanny Santos Mercado.

ANTECEDENTES DEL PROCESO.

Parte demandante: Encarnación Evelin Soliz Acha interpuso


pretensiones contra Ines Wenddy Mercado Soliz, Andrews Enrique y Génesis Dayra
ambos Santos Mercado (menores de edad) y Giomar Stephanny Santos Mercado.

Parte demandada: Ines Wenddy Mercado Soliz, en


representación de Andrews Enrique y Génesis Dayra ambos Santos Mercado
respondieron negativamente a la demanda e interpusieron demanda reconvencional de
mejor derecho propietario, acción negatoria y colación de herederos.

CONTESTACIÓN PARTE DEMANDANTE AL RECURSO DE CASACIÓN.

La demandante Encarnación Evelyn Soliz Acha, contesto al recurso de casación de la


parte adversa, en razón de los siguientes fundamentos:

Que el recurso de casación no cumple con lo dispuesto en el art 274 del Código
Procesal Civil, porque la parte recurrente no especifico de manera clara ni indico en que
consiste la violación o cual era la norma jurídica aplicable

Que es una afirmación temeraria la que realiza la parte recurrente respecto a que
el Tribunal de alzada solo habría considerado tres de las nueve cuestiones reclamadas en
apelación

Que en el recurso de apelación no existe ningún argumento donde se haya


señalado que los documentos presentados de fs.401 a 434, de fs. 607 a 610 y de fs.623 a

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631, hubieran sido reclamados o impugnados como para que sean tomados en cuenta en
el Auto de Vista, por lo que el Tribunal de alzada no resolvió el mismo

Que el principio iura novit curia se encuentra regulado en el art 25 I del Codigo
Procesal Civil, razón por la cual el Tribunal de alzada sustento su decisión el mismo

Refiere que en ningún momento se desconoció o violo el derecho de los


sucesores testamentarios

Que la demandada jamás demostró la existencia de otros bienes, no señalo


los documentos de propiedad de bienes muebles o inmuebles

Que es intranscendente un avaluó de los bienes antes del proceso, ya que


esto se lo realiza una vez que el proceso concluye

Que en virtud a que la demanda fue declarada probada, es lógico que se


inscriba el derecho sucesorio que la demandante ostenta, para lo cual debe levantarse la
inscripción testamentaria, pues lo contrario tomaría de inejecutable la sentencia

CONTESTACIÓN PARTE DEMANDADA AL RECURSO DE CASACIÓN

En el recurso de casación que fue interpuesto por la demandada Ines Wenddy Mercado
Soliz en representación de sus hijos menores Andrews Enrique y Génesis Dayra ambos
Santos Mercado

A continuación, considerar y dar respuesta a los reclamos acusados en casación, los


cuales fueron resumidos en el considerando II de la presente resolución

1 En el numeral 1 la recurrente denuncia que el Tribunal de alzada al pronunciar el Auto


de Vista recurrido incumplió con lo preceptuado en el art 265 I del Codigo Procesal Civil,
como también incumplió lo ordenado en el Auto Supremo N 510/2021 de 10 de junio,
porque no se circunscribió a los puntos que fueron resueltos por el inferior y que fueron
objeto de apelación

2 En el numeral 2 del recurso de casación, la recurrente se refiere ante os reclamos


acusados en apelación respecto a que la sentencia habría dispuesto extremos jamás
demandados y que en dicha resolución existe vulneración a la garantía al debido proceso
establecido en el art 115 II de la Constitución Política del Estado porque se antepuso

2
principios a garantías y derechos constitucionales; el Tribunal de alzada habría otorgado
una respuesta carente de análisis jurídico normativo con relación al debido proceso

3 Corresponde referirnos al inmerso en el numeral 3, donde la recurrente si bien reitera la


conculcación del art 265 I y III del Codigo Procesal Civil, esta vez acusa que la respuesta
otorgada por el Tribunal de alzada de que sería intranscendente determinar la masa
hereditaria, demostraría una cierta parcialidad con la parte actora en franca vulneración
con los derechos de sus hijos que son menores de edad.

4 Corresponde dar respuesta al reclamo acusado en el numeral 4, donde la parte


demandada, ahora recurrente, acuso que el Tribunal de alzada habría omitido referirse y
resolver la cuarta cuestión reclamada en apelación, es decir, al hecho de que la sentencia
vulneraria el principio de seguridad jurídica, reconocido en la Constitución Política del
Estado, pues considera que la estructura de la sentencia debe estar relacionada con el
contenido que satisfaga lo postulado en la demanda y como en el caso de autos no fue
una pretensión demandada que se levante las inscripciones y que en ejecución de
sentencia se proceda recién a un avaluó de la masa hereditaria y posterior repartición e
inscripción de los bienes que componen la legitima, sería una determinación que vulnera
el debido proceso y la seguridad jurídica.

SOBRE LA FUNDAMENTACIÓN Y MOTIVACIÓN DE LAS RESOLUCIONES


JUDICIALES

La SC N 0012/2006- R DE 4 de enero, ha razonado: “La motivación de los fallos judiciales


está vinculada al derecho al debido proceso y a la tutela jurisdiccional eficaz y se
manifiesta como el derecho que tienen las partes de conocer las razones en que se funda
la decisión del órgano jurisdiccional

La SC N 2023/2010-R de 9 de noviembre también estableció: “la motivación no implicara


la exposición ampulosa de consideraciones y citas legales, sino que exige una estructura
de forma y de fondo, pudiendo ser concisa, pero clara y satisfacer todos los puntos
demandados

La SCP N 0903/2012 de 22 de agosto se ha señalado que: “la fundamentación y


motivación de una resolución que resuelva cualquier conflicto jurídico, no necesariamente
implica que la exposición deba ser exagerada y abundante de consideraciones, citas
legales y argumentos reiterativos, al contrario, una debida motivación con lleva que la
resolución sea concisa, clara e integre en todos los puntos demandados

2
La SCP N 0075/2016- S3 de 8 de enero, sobre este tema ha sintetizado señalando:” es
una obligación para la autoridad judicial y/o administrativa, a tiempo de resolver todos los
asuntos sometidos a su conocimiento, exponer las razones suficientes de la decisión
adoptada acorde a los antecedentes del caso

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MARCO JURÍDICO
Código civil Boliviano
ARTÍCULO 1067. (REINTEGRO DE LA LEGÍTIMA). –
Cuando se abre en todo o en parte la sucesión ab intestato, concurriendo herederos
forzosos con otros llamados a suceder, las porciones que corresponderían a estos últimos
se reducen proporcionalmente en los límites necesarios para integrar la legítima de
aquéllos, los cuales, sin embargo, deben imputar a ésta todo lo que han recibido del de
cujus en virtud de donaciones o legados.

2
FUNCIÓN
La acción que tiene la finalidad de reconstituir al porcentaje previsto en la ley, la legítima
que ha sido lesionada por el causante mediante los actos de liberalidad como ser los
legados o las donaciones. De este modo, los herederos forzosos que hubiesen recibido
una cantidad inferior en las porciones de sus derechos, tienen la plena facultad de ser
reintegrados en sus legítimas, a tal efecto, la ley pone a disposición de los herederos las
acciones del reintegro y la reducción, que deberán dirigirse contra los coherederos,
legatarios o donatarios; bajo el fundamento de que las reglas de la legítima son de orden
público y se hallan amparadas por el principio de la Intangibilidad diremos que el reintegro
es la acción por la cual el Heredero forzoso recobra la parte asignada de menos en su
legítima.

PROCEDIMIENTO
Si al abrirse una sucesión testamentaria se comprueba que el de cujus, sea por acto inter
vivos o en su testamento, ha afectado la legítima de los herederos; cualquiera de ellos,
podrá solicitar el reintegro correspondiente.
A tal efecto el heredero lesionado, podrá iniciar una acción de reintegro de la legítima, a
fin de conseguir se le entregue la cuota prevista por ley.

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DESARROLLO
El instituto del reintegro, es la acción que tiene la finalidad de reconstituir al porcentaje
previsto en la ley, la legítima que ha sido lesionada por el causante mediante los actos de
liberalidad como ser los legados o las donaciones. De este modo, los herederos forzosos
que hubiesen recibido una cantidad inferior en las porciones de sus derechos, tienen la
plena facultad de serreintegrados en sus legítimas, a tal efecto, la ley pone a disposición
de los herederos las acciones del reintegro y la reducción, que deberán dirigirse contra los
coherederos, legatarios o donatarios; bajo el fundamento de que las reglas de la legítima
son de orden público y se hallan amparadas por el principio de la Intangibilidad
¿Qué es la legitima?
La legítima es la parte de la herencia que por disposición de la ley es reservada a los
herederos forzosos o legitimarios. La legítima es una limitación a la libertad de testar,
debido a que el causante si bien tiene un patrimonio, solo puede disponer de sus bienes,
respetando la legítima, que es la parte de la herencia que por ley está reservada a los
herederos forzosos o legitimarios, dejando la otra parte para disponer libremente en favor
de parientes o terceras personas.
¿Cuál es la función de la legítima?
La legítima tiene dos funciones principales, una es la de proteger a la familia contra las
liberalidades en favor de extraños. Es decir, la ley establece que el difunto no podrá
disponer de su patrimonio a extraños, debiendo dejar a los herederos o legitimarios cierta
porción de la herencia.
La otra función principal es la de asegurar la igualdad entre los coherederos. Es decir, que
el patrimonio debe ser necesariamente dispuesto a los herederos legitimarios, permitiendo
que los herederos de un mismo grado reciban igual porción hereditaria. Por lo cual
además de impedir liberalidades exageradas en favor de extraños, también se protege a
los mismos familiares para que tengan iguales derechos.
¿Por qué se dice que la legítima es inviolable?
La legítima es inviolable porque es la porciónde la herencia que pertenece a los diferentes
herederos forzosos y no puede ser disminuida, incrementada ni suprimida, debiendo ser
respetada por el testador,quién no puede afectarla. En el caso que se evidencie la
afectación de la misma, se deberá disponer el reintegro o la reducción de la legítima de
quién haya recibido menos o más de lo consignado por la ley. El Art. 1066 del Código Civil
establece que toda disposición testamentaria que modifique o suprima la legítima de los
herederos forzosos es nula.
¿Por qué se dice que la legítima es irrenunciable?
La legítima es irrenunciable, debido a que ningún heredero forzoso o legítimo podrá
renunciar a su legítima, antes de la apertura de la sucesión. La segunda parte del art.
1066 concuerda con el principio antes mencionado estableciendo:

2
“Es igualmente nulo todo contrato, celebrado antes de abrirse la sucesión, que modifique,
suprima o imponga cargas o condiciones a la legítima de los herederos forzosos.”

¿Cuál es la cuantía de la legítima para los hijos?


Cuando quienes concurren a la sucesión son hijos o descendientes, cualquiera sea el
origen de éstos, la legitima alcanzará a las cuatro quintas partes del patrimonio del
causante, la quinta parte restante constituye la porción disponible que el de cujus puede
destinar a liberalidades, sea mediante donaciones o mediante legados.
La legítima de los descendientes llamados a la sucesión en lugar de los hijos es la misma
que ellos habrían recibido en caso de vivir. La legítima de los hijos adoptivos es la misma
que la de los demás hijos.
¿Cuál es la cuantía de la legítima para los ascendientes?
En caso de que el difunto no deje descendientes, sino sólo ascendientes. La legítima
perteneciente a éstos es de las dos terceras partes del patrimonio; la tercera parte
restante constituye la porción disponible que el de cujus puede destinar a liberalidades,
sea mediante donaciones o mediante legados.
¿Cuál es la cuantía de la legítima el cónyuge?
En caso de que el difunto no deje descendientes ni hijo adoptivo, ni ascendientes, la
legítima perteneciente al cónyuge es de las dos terceras partes del patrimonio; la tercera
parte restante constituye la porción disponible que el de cujus puede destinar a
liberalidades, sea mediante donaciones o mediante legados.
¿Qué sucede si existe la concurrencia del cónyuge con hijos?
Si el difunto ha dejado uno o más hijos y cónyuge, la legítima alcanzará a las cuatro
quintas partes del patrimonio del causante, la quinta parte restante constituye la porción
disponible que el de cujus puede destinar a liberalidades, sea mediante donaciones o
mediante legados.
¿Qué es el reintegro de la legítima?
Si al abrirse una sucesión testamentaria se comprueba que el de cujus, sea por acto inter
vivos o en su testamento, ha afectado la legítima de los herederos; cualquiera de ellos,
podrá solicitar el reintegro correspondiente.
A tal efecto el heredero lesionado, podrá iniciar una acción de reintegro de la legítima, a
fin de conseguir se le entregue la cuota prevista por ley.
Qué es la reducción de las liberalidades?
Cuando el causante ha dispuesto de su patrimonio, mediante liberalidades hechas en
testamento o inter vivos, lesionando la porción legítima de los herederos forzosos, debe
procederse a la reducción de dichas liberalidades para realizar el reintegro de la legítima.

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La acción de reducción sólo puede ser interpuesta por los herederos forzosos, sus
herederos y causahabientes, no por los donatarios o legatarios, ya que ambos no tienen
legítima.

¿Cuál es el orden y el modo de las reducciones?


El artículo 1071 del Código Civil dispone que en primer término se reducirán
proporcionalmente las disposiciones testamentarias, o sea los legados, sin distinguir entre
herederos y legatarios, posteriormente se procede a la reducción de las donaciones.
Sin embargo por mandato del mismo Código Civil, cuando el testador ha declarado
expresamente que uno de sus legados, sea cumplido con preferencia a otros, este legado
solamente se reduce, cuando el valor de los otros no sea suficiente para reintegrar la
legítima de los herederos forzosos.

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MEMORIAL

TRIBUNAL SUPREMO DE JUSTICIA 


S A L A C I V I L 
Auto Supremo: 1043/2021
Fecha: 29 de noviembre de 2021 
Expediente: LP-186-21-S
Partes: Encarnación Evelyn Soliz Achá c/ Inés Wenddy Mercado Soliz por sí y en 
representación de Andrews Enrique y Génesis Dayra ambos Santos 
Mercado (menores de edad) y Giomar Stephanny Santos Mercado.
Proceso: Reintegro de legítima y reducción de disposición testamentaria 
inscripción en Derechos Reales.
Distrito: La Paz.
VISTOS: El recurso de casación cursante de fs. 809 a 815 interpuesto por Inés Wendy
Mercado Soliz por sí y en representación de sus hijos Andrews Enrique y Génesis Dayra
ambos Santos Mercado, contra el Auto de Vista Nº 297/2021 de 19 de agosto, corriente
en fs. 798 a 800 vta., pronunciado por la Sala Civil Quinta del Tribunal Departamental de
Justicia de La Paz, dentro del proceso ordinario de reintegro de legítima y reducción de
disposición testamentaria e inscripción en Derechos Reales, seguido a instancia
de Encarnación Evelyn Soliz Achá contra Giomar Stephanny Santos Mercado y los
recurrentes, la contestación de fs. 818 a 821 vta.; el Auto de concesión de 20 de octubre
de 2021 visible a fs. 822; el Auto Supremo de admisión del recurso de casación Nº
987/2021-RA de 09 de noviembre, que sale de fs. 828 a 829 vta.; todo lo inherente al
proceso; y: 
CONSIDERANDO I:
ANTECEDENTES DEL PROCESO
1. Encarnación Evelyn Soliz Achá, según memorial de demanda de fs. 18 a 23,
formalizada por escrito de fs. 58 a 63 y subsanada por memorial cursante a fs. 65, 70 y
72, inició proceso ordinario de reintegro de la legítima y reducción de disposición
testamentaria e inscripción en Derechos Reales; pretensiones que fueron interpuestas
contra Inés Wenddy Mercado Soliz, Andrews Enrique y Génesis Dayra ambos Santos
Mercado (menores de edad) y Giomar Stephanny Santos Mercado; de igual forma, la
citada demandante, llamó en calidad de litisconsorte necesario activo a Julio Arturo Soliz
Achá.
Citados los demandados y el litisconsorte necesario activo, por memoriales cursante de
fs. 172 a 176 vta., y fs. 193 a 196, Inés Wenddy Mercado Soliz por sí y en representación
de Andrews Enrique y Génesis Dayra ambos Santos Mercado (menores de edad) y
Giomar Stephanny Santos Mercado respondieron negativamente a la demanda e
interpusieron demanda reconvencional de mejor derecho propietario, acción negatoria y
colación de herederos; asimismo, por memorial que sale de fs. 212 a 213 se apersonó al
proceso Julio Arturo Soliz Achá solicitando que se declare improbada la demanda
principal. 
2. Bajo esos antecedentes, y tramitada que fue la causa, el Juez Público Civil y Comercial
Nº 17 de la ciudad de La Paz, emitió la Sentencia Nº 21/2020 de 24 de enero, corriente en

2
fs. 710 a 717 vta., declarando PROBADA la demanda principal interpuesta por
Encarnación Evelyn Soliz Achá e IMPROBADA la demanda reconvencional; en
consecuencia, dispuso que una vez que la resolución adquiera calidad de cosa juzgada,
se proceda a levantar las inscripciones realizadas en virtud al Testamento abierto
contenido en la Escritura Pública Nº 176/2016, y por la complejidad del caso, también
dispuso que en ejecución de Sentencia se proceda al avalúo, repartición e inscripción de
los bienes que componen la legítima que dejó a su fallecimiento María Olga Achá Videz a
los herederos: Encarnación Evelyn Soliz Achá y Julio Arturo Soliz Achá de 4/5 partes del
total de la herencia de forma equitativamente igual, y de la restante 1/5 parte se respetará
porcentualmente la distribución realizada por María Olga Achá Videz como expresión de
liberalidades en el testamento abierto contenido en la Escritura Pública Nº 176/2016; sin
costas ni costos por demanda doble.
Resolución que, puesta en conocimiento de las partes procesales, dio lugar a que los
demandados Inés Wenddy Mercado Soliz Achá por sí y en representación de Andrews
Enrique y Génesis Dayra ambos Santos Mercado (menores de edad), por memorial
cursante de fs. 726 a 730, interpusiera recurso de apelación.
3. En mérito a esos antecedentes la Sala Civil Quinta del Tribunal Departamental de
Justicia de La Paz, emitió el Auto de Vista Nº 297/2021 de 19 de agosto, corriente en fs.
798 a 800 vta., por el que CONFIRMÓ la Sentencia apelada; con costas y costos a la
parte apelante.
Determinación que fue asumida en virtud de los siguientes argumentos jurídicos:
- Que es claro que la autoridad judicial a tiempo de emitir Sentencia dispuso efectos que
no fueron solicitados por la parte demandante, pero en virtud al principio de justicia
material, advirtió que tales disposiciones fueron determinadas en pro de efectivizar la
tutela solicitada, puesto que obrar de forma contraria supone emitir una Sentencia
meramente declarativa que no logrará efectivizar la pretensión planteada por la
demandante, por lo que la decisión del Juez de la causa es correcta y conforme al
principio iura novit curia.
- Que el determinar la masa hereditaria no es una cuestión trascendente en este tipo de
acción, toda vez que lo medular es advertir si se lesionó la legítima, y, si bien en el caso
de autos ambas partes pusieron a conocimiento de la autoridad judicial la existencia de
determinados bienes los cuales conformarían la masa hereditaria, empero la parte
demandada no puede pretender acusar un agravio sobre la base de su negligencia,
puesto que tenía la posibilidad jurídica de producir prueba idónea que sustente su
argumento; no obstante, al tener la Sentencia un carácter declarativo, la determinación de
la masa hereditaria es una cuestión a averiguarse en ejecución de Sentencia en virtud a
los principios de eficacia y eficiencia previstos en el art. 180 de la Constitución Política del
Estado.
- Que atentos al carácter declarativo de la Sentencia emitida en la causa, el levantamiento
de las inscripciones realizadas en virtud del testamento, ya sea previo avalúo o no, no es
más que un efecto previsible para hacer efectivo el reintegro de la legítima; por lo tanto, la
incongruencia acusada resulta intrascendente, ya que la realización de un avalúo anterior
al levantamiento de las inscripciones o de forma posterior, no hace que la Sentencia sea
inejecutable o pierda sentido razonable, ya que a finalidad del avalúo -ya sea anterior o
posterior- no es más que otorgar un valor a los bienes para su posterior división
porcentual.
De igual forma, el referido Tribunal de apelación, ante la solicitud de explicación y
complementación formulada por memorial que sale de fs. 802 a 803 vta., emitió el Auto de
14 de septiembre de 2021, por el cual declaró “no ha lugar” a lo solicitado por ser claros y
explícitos los términos de redacción del Auto de Vista.

2
4. Fallo de segunda instancia que, puesto en conocimiento de los sujetos procesales,
ameritó que la demandada Inés Wenddy Mercado Soliz por sí y en representación de sus
hijos menores de edad Andrews Enrique y Génesis Dayra ambos Santos Mercado, según
memorial cursante de fs. 809 a 815, interponga recurso de casación, el cual se pasa a
analizar:
CONSIDERANDO II: 
DEL CONTENIDO DEL RECURSO DE CASACIÓN
Del medio de impugnación objeto de la presente resolución, se observa que la recurrente
alegó como agravios los siguientes extremos:
1. Acusó que el Tribunal de alzada al pronunciar el Auto de Vista recurrido incumplió con
lo preceptuado en el art. 265.I del Código Procesal Civil e incumplió lo ordenado en el
Auto Supremo Nº 510/2021 de 10 de junio, porque no se circunscribió a los puntos que
fueron resueltos por el inferior y que fueron objeto de apelación; en ese entendido,
puntualiza cinco reclamos que hubieren sido objeto de apelación, empero estos
contendrían nueve cuestiones que ameritaban ser considerados, de los cuales solo tres
fueron estimados por el referido Tribunal.
2. Alegó que al dictarse la resolución recurrida se incumplió con lo preceptuado por el art.
265.I y III de la Ley Nº 439, esto con relación a la segunda y quinta cuestión reclamada en
apelación, es decir, respecto a que la Sentencia dispuso extremos jamás demandados y
que en dicha resolución existe vulneración a la garantía al debido proceso establecido en
el art. 115.II de la Constitución Política del Estado porque se antepuso principios a
garantías y derechos constitucionales; con ese argumento acusó que existe una total
carencia de análisis jurídico normativo con relación al debido proceso, pues de la lectura
de la Sentencia se tendría que esta no cumple con los estándares mínimos de
cumplimiento del debido proceso, que establecen que el fallo debe responder a lo
demandado y no ir más allá de ello, esto en virtud al principio de congruencia que
responde al principio dispositivo, aspectos que no fueron considerados en segunda
instancia.
3. Reiteró la vulneración del art. 265.I y III del Código Procesal Civil en relación con la
tercera cuestión reclamada en apelación referida, a que la Sentencia dispone el reintegro
de una masa hereditaria desconocida; sobre el particular refiere que la respuesta
otorgada por el Tribunal de alzada de que sería intrascendente determinar la masa
hereditaria, demostraría una manifiesta parcialidad con la parte actora en franca
vulneración de los derechos de sus hijos que son menores de edad, además de tornar de
incongruente y contradictorio el Auto de vista.
4. Finalmente, y sustentado en la misma conculcación de la norma procesal referida en
los apartados anteriores, es decir en el art. 265.I y III del Código Procesal Civil, reitera una
posible omisión incurrida por el Tribunal de alzada, ya que considera que no se refirió ni
resolvió la cuarta cuestión reclamada en apelación, es decir, al hecho de que la Sentencia
vulneraría el principio de seguridad jurídica, debidamente reconocido en la Constitución
Política del Estado, pues considera que la estructura de la sentencia debe estar
directamente relacionada con el contenido que satisfaga lo postulado en la demanda y,
como en el caso de autos no fue una pretensión demandada que se levante las
inscripciones y que en ejecución de Sentencia se proceda recién a un avalúo de la masa
hereditaria y posterior repartición e inscripción de los bienes que componen la legítima,
sería una determinación que vulnera el debido proceso y la seguridad jurídica.
En virtud a estos reclamos solicitó se emita Auto Supremo ya sea anulando o casando el
Auto de Vista recurrido y deliberando en el fondo se declare improbada la demanda
principal.
Respuesta al recurso de casación.

2
La demandante Encarnación Evelyn Soliz Achá, por memorial cursante de fs. 818 a 821
vta., contestó al recurso de casación de la parte adversa, en razón de los siguientes
fundamentos:
- Que el recurso de casación no cumple con lo dispuesto en el art. 274 del Código
Procesal Civil, porque la parte recurrente no especificó de manera clara ni indicó en qué
consiste la violación o cual era la norma jurídica aplicable correctamente o cuál la
interpretación debida, pues simplemente habría realizado una enumeración de los
artículos, mas no explicó en qué consiste la violación, vulneración o desconocimiento de
esa norma legal, por lo que el citado medio de impugnación no cumple con lo establecido
por el ordenamiento Adjetivo Civil.
- Que es una afirmación temeraria la que realiza la parte recurrente respecto a que el
Tribunal de alzada sólo habría considerado tres de las nueve cuestiones reclamadas en
apelación, ya que revisado el recurso de apelación se observa con meridiana claridad que
son tres los agravios sufridos y estos se encuentran expresados con el nomen juris: I Con
relación a la demanda, II. De los argumentos que motivan la apelación, y III. De los
agravios sufridos y el derecho vulnerado; los cuales fueron debidamente respondidos y
considerados a momento de emitirse el Auto de Vista recurrido.
- Que en el recurso de apelación no existe ningún argumento donde se haya señalado
que los documentos presentados de fs. 401 a 434, de fs. 607 a 610 y de fs. 623 a 631,
hubieran sido reclamados o impugnados como para que sean tomados en cuenta en el
Auto de Vista, por lo que el Tribunal de alzada no resolvió el mismo, puesto que no se
sabe de qué documentos se tratan ni que demostrarían los mismos, ni si se tratan de
bienes muebles o inmuebles; por lo tanto, como no existe fundamentación en el recurso
de apelación, estos reclamos no fueron resueltos en segunda instancia.
- Que el principio iura novit curia se encuentra regulado en el art. 25.I del Código Procesal
Civil, razón por la cual el Tribunal de alzada sustentó su decisión en el mismo; de ahí que,
al ser la Sentencia meramente declarativa es que para efectivizar la misma, conforme al
principio de justicia material, se necesita su ejecución en la forma dispuesta por los jueces
de instancia.
- Refiere que en ningún momento se desconoció o violó el derecho de los sucesores
testamentarios, pues los jueces de instancia dispusieron que la restante quinta parte se
respetará porcentualmente a liberalidades de la testadora, es decir, que la disposición
testamentaria se redujo a lo que la ley dispone, por lo que no existe violación de ninguna
ley.
- Que la demandada jamás demostró la existencia de otros bienes, no señaló los
documentos de propiedad de bienes muebles o inmuebles, extremo que le correspondía
demostrar a la parte recurrente.
- Que es intrascendente un avalúo de los bienes antes del proceso, ya que esto se lo
realiza una vez que el proceso concluye, porque la finalidad del avalúo es otorgar valor a
los bienes para su posterior división y partición porcentual. 
- Que en virtud a que la demanda fue declarada probada, es lógico que se inscriba el
derecho sucesorio que la demandante ostenta, para lo cual debe levantarse la inscripción
testamentaria, pues lo contrario tornaría de inejecutable la Sentencia, ya que en el registro
de Derechos Reales seguirían figurado como titulares de los bienes inmuebles los
demandados, por lo tanto, refiere que la Sentencia de primera instancia que fue
confirmada por Auto de Vista no es ultrapetita.
La citada contestación no contiene petitorio.
CONSIDERANDO III: 
DOCTRINA APLICABLE AL CASO
III.1. De la incongruencia omisiva.

2
En mérito al principio de congruencia, toda resolución debe reunir la coherencia procesal
necesaria, que en el caso de la apelación, encuentra su fuente normativa en el art. 265.I
del Código Procesal Civil, que se sintetiza en el aforismo “tantum devolutum quantum
appellatum”, que significa es devuelto cuanto se apela, con esto se establece el límite
formal de la apelación en la medida de los agravios propuestos en la impugnación, en
otras palabras, la función jurisdiccional del órgano de revisión en doble instancia se ve
compelido a lo formulado en la apelación por el impugnante.
En ese entendido, el Tribunal de casación a momento de realizar el análisis sobre los
reclamos de incongruencia omisiva en que habría incurrido el Tribunal de alzada respecto
a los puntos acusados en apelación, debe tener presente que al ser un aspecto que acusa
un vicio de forma, como es la incongruencia omisiva que afecta la estructura de la
resolución, el análisis de este máximo Tribunal solamente debe limitarse a contrastar en el
contenido de la resolución la existencia o no de dicha omisión, tal cual orientó el Tribunal
Constitucional Plurinacional que en la SCP Nº 1083/2014 de 10 de junio, interpretando los
alcances del recurso de casación en la forma en relación a la falta de respuesta a los
puntos de agravio del recurso de apelación, señaló: “…cabe recalcar que, la Sala Civil del
Tribunal Supremo de Justicia, ante el planteamiento de un recurso de casación en la
forma, debe limitar sus consideraciones a las causales establecidas en el art. 254 del
CPC. En el presente caso, al estar extrañada la falta de respuesta a los puntos de agravio
identificados en el recurso de apelación, el Tribunal de casación debe limitar su
consideración únicamente para establecer si hubo o no respuesta a los reclamos del
recurrente, lo contrario implicaría ingresar a cuestiones que atingen a la impugnación en
el fondo; así, los Magistrados demandados, luego de efectuar un examen de los
antecedentes del legajo procesal, concluyeron que el Tribunal de apelación, otorgó la
respuesta extrañada, inclusive extrayendo citas textuales que ellos consideraron como
respuestas a la apelación contra la Sentencia; por lo tanto, el Auto Supremo Nº 434/2013,
no incurre en incongruencia omisiva ni carece de la debida motivación, ya que la labor del
Tribunal de casación estaba restringida a efectuar el control para determinar si hubo o no
respuesta a los reclamos del recurrente y, fue ésa la misión que cumplieron los
Magistrados demandados; por lo tanto, cumple con el debido proceso”.
III.2. Sobre la fundamentación y motivación de las resoluciones judiciales.
Sobre este particular, la SC Nº 0012/2006-R de 4 de enero, ha razonado: “La motivación
de los fallos judiciales está vinculada al derecho al debido proceso y a la tutela
jurisdiccional eficaz, (...), y se manifiesta como el derecho que tienen las partes de
conocer las razones en que se funda la decisión del órgano jurisdiccional, de tal manera
que sea posible a través de su análisis, constatar si la misma está fundada en derecho o
por el contrario es fruto de una decisión arbitraria...”.
A ese respecto la SC Nº 2023/2010-R de 9 de noviembre también estableció: “...la
motivación no implicará la exposición ampulosa de consideraciones y citas legales,
sino que exige una estructura de forma y de fondo, pudiendo ser concisa, pero
clara y satisfacer todos los puntos demandados, debiéndose expresar las
convicciones determinativas que justifiquen razonablemente su decisión en cuyo caso las
normas del debido proceso se tendrán por fielmente cumplidas; al contrario, cuando la
resolución aun siendo extensa no traduce las razones o motivos por los cuales se toma
una decisión, dichas normas se tendrán por vulneradas...”. (El resaltado nos corresponde)
En ese mismo entendido, en la SCP Nº 0903/2012 de 22 de agosto, se ha señalado
que: “...la fundamentación y motivación de una resolución que resuelva cualquier conflicto
jurídico, no necesariamente implica que la exposición deba ser exagerada y abundante de
consideraciones, citas legales y argumentos reiterativos, al contrario una debida
motivación conlleva que la resolución sea concisa, clara e integre en todos los puntos
demandados, donde la autoridad jurisdiccional o en su caso administrativa, exponga de

2
forma clara las razones determinativas que justifican su decisión, exponiendo los hechos,
realizando la fundamentación legal y citando las normas que sustentan la parte dispositiva
dela resolución; en suma se exige que exista plena coherencia y concordancia entre la
parte motivada y la parte dispositiva de un fallo”.
Finalmente la SCP Nº 0075/2016-S3 de 8 de enero, sobre este tema ha sintetizado
señalando: “...es una obligación para la autoridad judicial y/o administrativa, a tiempo de
resolver todos los asuntos sometidos a su conocimiento, exponer las razones suficientes
de la decisión adoptada acorde a los antecedentes del caso, en relación a las
pretensiones expuestas por el ajusticiado o administrado; pues, omitir la explicación de
las razones por las cuales se arribó a una determinada resolución, importa suprimir una
parte estructural de la misma”.
Por lo expuesto se puede colegir, que para el cumplimiento del debido proceso en sus
elementos debida fundamentación y motivación, la estructura de la resolución en la forma
y el fondo, no requiere de una exposición ampulosa de consideraciones y citas legales,
sino que esta sea coherente, precisa y clara, dando a entender los motivos y/o
convicciones determinativas de la resolución, y que respondan a los antecedentes del
caso en relación a las pretensiones de los sujetos procesales, cumplido este extremo se
tiene por realizada la motivación de una resolución.
III.3. Respecto al principio de eficacia. 
En la Sentencia Constitucional Plurinacional N° 0210/2010 de 24 de mayo, se concretó lo
siguiente: “El art. 180 de la CPE, prevé los principios procesales de la jurisdicción
ordinaria, entre ellos el principio de eficacia, que supone el cumplimiento de las
disposiciones legales y que los procedimientos deben lograr su finalidad, removiendo, de
oficio, los obstáculos puramente formales, sin demoras innecesarias; este principio está
íntimamente vinculado con la prevalencia del derecho sustancial respecto al formal y el
principio de verdad material; el principio de eficiencia por el que se pretende mayor
certeza en las resoluciones y que las personas puedan obtener un oportuno
reconocimiento de sus derechos a través de la ejecución de las resoluciones judiciales, y
el principio de verdad material que buscará por todos los medios la verdad pura”.
CONSIDERANDO IV:
FUNDAMENTOS DE LA RESOLUCIÓN
Expuestos los fundamentos doctrinarios que han de sustentar la presente resolución,
corresponde a continuación dar respuesta a los reclamos acusados en el recurso de
casación que fue interpuesto por la demandada Inés Wenddy Mercado Soliz por sí y en
representación de sus hijos menores Andrews Enrique y Génesis Dayra ambos Santos
Mercado.
En ese entendido, corresponde aclarar previamente, que de un examen minucioso de los
fundamentos en los cuales se sustenta el presente medio recursivo, se advierte que todos
estos decantan en cuestiones estrictamente formales, pues están orientados a acusar la
vulneración del principio del debido proceso en sus elementos de congruencia y debida
motivación y fundamentación, toda vez que la recurrente considera que el Tribunal de
alzada habría omitido dar respuesta a todos los agravios acusados en el recurso de
apelación y que el Auto de Vista carecería de análisis jurídico normativo; de esta manera,
se infiere que lo acusado en casación son vicios de forma que cuestionan la estructura
formal de la resolución de alzada.
En ese contexto, y conforme a lo ampliamente desarrollado en el apartado III.1. de la
presente resolución y la vasta jurisprudencia emitida por este Tribunal de casación,
amerita señalar que en virtud al principio de congruencia, toda resolución debe reunir la
coherencia procesal necesaria que, en el caso de la apelación, encuentra su fuente
normativa en el art. 265.I del Código Procesal Civil, que establece que el Auto de Vista
deberá circunscribirse a los puntos resueltos por el inferior y que fueron objeto de

2
apelación y fundamentación, motivo por el cual la función jurisdiccional del órgano de
revisión en doble instancia se ve compelido a lo formulado en el recurso de apelación por
el impugnante, pues lo contrario implicaría emitir una resolución ultra, citra o extra petita. 
Del mismo modo, respecto al elemento motivación y fundamentación, cabe señalar que
este es un elemento o vertiente del derecho al debido proceso que impone a las
autoridades judiciales que al momento de resolver la problemática planteada lo hagan
sobre la base de razonamientos jurídicos y fácticos, es decir, explicando de forma
razonada y coherente el motivo por el cual asumen una determinada decisión, en otros
términos, es la justificación razonada del por qué se asume una postura, siendo este el
elemento primordial que destaca en todo Estado Constitucional de Derecho; sin embargo,
conforme a lo señalado en el acápite III.2., es preciso aclarar que para que este elemento
se tenga por fielmente cumplido a momento de emitirse una resolución, no es necesario
que este contenga una exposición ampulosa de consideraciones y citas legales, pues si
esta es concisa, pero clara y satisface todos los puntos demandados, es decir, si contiene
una exposición clara de las razones determinativas que justifican la decisión asumida, no
existirá razón suficiente que sustente la ausencia o carencia de una debida motivación y
fundamentación.
Realizadas estas consideraciones que resultan necesarias para sustentar la decisión a
ser asumida, corresponde a continuación considerar y dar respuesta a los reclamos
acusados en casación, los cuales fueron resumidos en el Considerando II de la presente
resolución.
1. En el numeral 1, la recurrente denuncia que el Tribunalde alzada al pronunciar el Auto
de Vista recurrido incumplió con lo preceptuado en el art. 265.I del Código Procesal Civil,
como también incumplió lo ordenado en el Auto Supremo Nº 510/2021 de 10 de junio,
porque no se circunscribió a los puntos que fueron resueltos por el inferior y que fueron
objeto de apelación; en ese entendido puntualiza cinco reclamos que hubieren sido objeto
de apelación, empero estos contendrían nueve cuestiones que ameritaban ser
considerados, de los cuales solo tres fueron estimados por el referido Tribunal.
Toda vez que lo acusado en este apartado deviene en una posible incongruencia omisiva
incurrida por el Tribunal Ad quem a momento de emitir la resolución de alzada,
corresponde a este Tribunal de casación verificar si en el contenido del Auto de Vista
recurrido existe o no de dicha vulneración, es decir, que el examen que realice este
Tribunal se encuentra limitado a corroborar si lo acusado es o no evidente, tal como
orientó el Tribunal Constitucional Plurinacional en la Sentencia Constitucional
Plurinacional Nº 1083/2014 de 10 de junio, ya que al ser un vicio netamente formal no
existe razón alguna para realizar consideraciones de fondo sobre si la decisión es o no
correcta.
En esa lógica, y conforme a los datos que cursan en obrados, se tiene que, ante la
emisión de la Sentencia de primera instancia, la parte demandada por memorial cursante
de fs. 726 a 730 interpuso recurso de apelación; ahora bien, de la revisión minuciosa de
dicho actuado, se advierte que este está conformado por tres acápites: el primero
denominado “Con relación a la demanda”, donde la parte apelante hizo una exposición de
los fundamentos en los cuales se habría sustentado la demanda principal y el petitorio
expuesto por la parte demandante. En el apartado segundo intitulado “De los argumentos
que motivan esta apelación”, la recurrente, como resulta lógico por la denominación del
acápite, procedió a exponer los agravios que le hubiere ocasionado la Sentencia de
primera instancia, acusando de esta manera tres aspectos concretos: 1. Que en la
Sentencia de primera instancia existe una enorme incongruencia entre lo demandado y lo
resuelto, puesto que la parte actora no habría solicitado la cancelación o el levantamiento
de los registros en Derechos Reales de la parte demandada; 2. Que en la Sentencia
existe disposiciones contrapuestas, pues el Juez de la causa dispuso por un lado que una

2
vez realizado el sorteo o el avalúo se proceda al levantamiento de las partidas y por otro
ordenó que el levantamiento sea una vez ejecutoriada la demanda; y 3. Que existe un
vacío con relación al objeto de la litis, ya que no se habría establecido la masa hereditaria
y es por esa razón que se ordenó que recién en ejecución de Sentencia se proceda a
hacer un avalúo. Posteriormente, la apelante, en el apartado denominado “De los
agravios sufridos y el derecho vulnerado”, procedió a enumerar cuatro preceptos
normativos que hubieran sido vulnerados con la emisión de la sentencia, como también,
sin mayor fundamentación o explicación alguna, se limitó a indicar agravios que hubiera
sufrido, alegando errónea valoración de la prueba, incongruencia entre lo considerado y lo
dispuesto y entre lo demandando y lo otorgado, la disposición de extremos jamás
demandados y el reintegro de una masa hereditaria desconocida, como la ausencia de
motivación y fundamentación y confusión entre lo analizado y lo dispuesto por existir
doble disposición.
Ahora bien, ante la interposición del presente recurso de apelación, el Tribunal de alzada,
pronunció el Auto de Vista Nº 297/2021 de 19 de agosto, cursante de fs. 798 a 800 vta.,
resolución de la cual se observa prima facie que el referido Tribunal, después de referirse
a los antecedentes que hacen a dicha resolución, ya en el Considerando II, de acuerdo a
la lectura que realizó del recurso de apelación, advirtió la exposición de agravios, los
cuales coinciden perfectamente con los tres extremos acusados que motivaron el recurso
de apelación; es así que en el Considerando III, en estricto cumplimiento de lo dispuesto
en el art. 265 del Código Procesal Civil y art. 17.II de la Ley 025, sustentado tanto en
normativa aplicable al caso concreto, doctrina y jurisprudencia emitida por este Tribunal
Supremo de Justicia, procedió a dar respuesta a todos los extremos acusados en
apelación, pues de manera ordenada, es decir, en la misma forma en que fueron
expuestos en el recurso de apelación, analizó y consideró los agravios denunciados, tal
como se tiene de los apartados 3.1, 3.2. y 3.3. (a los cuales nos remitimos), donde explicó
de manera clara y precisa las razones por las cuales correspondía confirmar la Sentencia
de primera instancia.
Entre los fundamentos que demuestran que el Tribunal de alzada no incurrió en
incongruencia omisiva, ya que, como se señaló supra, todos estos fueron debidamente
considerados, se tienen: “… es claro que la autoridad judicial, a tiempo de emitir sentencia
dispuso efectos que no fueron solicitados por la parte demandante, empero, conforme el
principio de justicia material, se advierte que tales disposiciones fueron determinadas en
pro de efectivizar la tutela solicitada puesto que obrar de forma contraria, supone emitir
una sentencia meramente declarativa, que no logrará efectivizar en esencia la pretensión
planteada…”; asimismo arguyó que: “…La parte demandante (demandada) no puede
pretender acusar un agravio en base a su negligencia, puesto que este tenía la
posibilidad jurídica, en primera y en esta instancia, de producir prueba idónea que
sustente sus argumento, más sin embargo, adviértase que: al tener la sentencia un
carácter declarativo, la determinación de la masa hereditaria es una cuestión a
determinarse en ejecución de sentencia, en virtud a los principio de eficacia y eficiente
previstas en el art. 180 de la Constitución Política del Estado.”; de igual forma señaló:
“… que la incongruencia acusada entre la parte considerativa y la dispositiva de la
sentencia, es totalmente INTRASCENDENTE, puesto que la realización de un avalúo
anterior al levantamiento de las inscripciones, o de forma posterior, no hace que la
sentencia sea inejecutable o pierda sentido razonable, puesto que la finalidad del avalúo -
ya se anterior o posterior- no es más que otorgar un valor a los bienes para su posterior
división porcentual…” 
De lo expuesto se infiere que el Tribunal de alzada, contrariamente a lo acusado por la
recurrente, no incurrió en omisión alguna, pues en estricto cumplimiento del principio de
congruencia sí se circunscribió a los puntos resueltos por el inferior y que fueron objeto de

2
apelación y fundamentación, por lo que no existe transgresión alguna del art. 265 del
Código Procesal Civil; sin embargo, corresponde aclarar a la parte recurrente, que el
hecho de que en un apartado de su recurso de apelación haya enumerado preceptos
normativos, no implica que esta exposición deba ser considerada como si se tratase de
otros reclamos ajenos a los ya fundamentados, máxime cuando la misma apelante refirió
que los agravios sufridos vulneraban dichas normas; asimismo, corresponde aclarar que,
si bien la apelante en la parte final de su recurso de apelación señaló que sufrió agravios
porque la Sentencia contendría errónea valoración probatoria, o porque sería
incongruente, ultrapetita o carente de motivación o fundamentación, estas simples
alegaciones, carentes de todo sustento, no se constituyen más que en simples
reiteraciones de los agravios acusados en el apartado II del recurso de apelación,
empero, si la recurrente considera que estas simples enunciaciones de agravios merecían
ser considerados por el Tribunal de alzada como si se tratasen de otros reclamos,
debieron ser debidamente fundamentados, tal como estipula el art. 265 del Código
Procesal Civil.
Con base en lo expuesto se concluye que el reclamo acusado en este primer apartado, no
resulta evidente; no obstante, corresponde señalar que si la parte demandada, ahora
recurrente, consideraba que el Tribunal de alzada no habría considerado todos los
reclamos acusados en apelación, ésta tenía la facultad de solicitar dentro del plazo
señalado por ley, la complementación, explicación y/o enmienda respectiva, para así
subsanar la omisión alegada; empero, de la revisión de obrados se advierte que si bien la
parte demandada por memorial cursante de fs. 802 a 803 vta., solicitó explicación y
complementación, sin embargo ninguno de los fundamentos ahí expuestos están
abocados a cuestionar la incongruencia omisiva, lo que por otro lado también constituye
una convalidación de los vicios procesales ahora acusados.
2. En el numeral 2 del recurso de casación, la recurrente refiere que ante los reclamos
acusados en apelación respecto a que la Sentencia habría dispuesto extremos jamás
demandados y que en dicha resolución existe vulneración a la garantía al debido proceso
establecido en el art. 115.II de la Constitución Política del Estado porque se antepuso
principios a garantías y derechos constitucionales; el Tribunal de alzada habría otorgado
una respuesta carente de análisis jurídico normativo con relación al debido proceso,
cuando de la lectura de la Sentencia se tendría que esta no cumple con los estándares
mínimos de cumplimiento del debido proceso que establecen que el fallo debe responder
a lo demandado y no ir más allá de ello, esto en virtud al principio de congruencia que
responde al principio dispositivo, aspectos que no fueron considerados en segunda
instancia.
Toda vez que lo acusado en este apartado está abocado a cuestionar una carencia de
motivación y fundamentación respecto a la respuesta que el Tribunal de apelación habría
otorgado a dos de los reclamos acusados en apelación, ya que no habría considerado
que el fallo de primera instancia no puede ir más allá de lo demandado; es que al devenir
dicha acusación en una cuestión de forma, conforme ya se explicó anteriormente, amerita
verificar si lo acusado es o no evidente, es decir si es cierto que se otorgó una respuesta
carente de análisis jurídico normativo.
En ese entendido, de la revisión del Auto de Vista recurrido Nº 297/2021 de 19 de agosto
(fs. 798 a 800 vta.), específicamente del apartado 3.1 de dicha resolución, se advierte que
el Tribunal Ad quem, precisamente con la finalidad de dar respuesta al reclamo que
acusaba que la Sentencia sería incongruente porque habría dispuesto extremos jamás
demandados y que en dicha resolución existe vulneración a la garantía al debido proceso
establecido en el art. 115.II de la Constitución Política del Estado porque se antepuso
principios a garantías y derechos constitucionales, de manera clara y precisa señaló y
desarrolló que uno de los principios que sustenta el ordenamiento jurídico es el

2
principio iura novit curia, alegando que este resulta coherente con el derecho a la tutela
judicial efectiva, derecho que en lo medular busca otorgar efectividad al derecho al debido
proceso legal de las partes, más allá de toda restricción formal; de igual forma, con la
finalidad de que la respuesta otorgada sea lo suficientemente motivada y fundamentada,
citó como jurisprudencia al Auto Supremo Nº 470/2019 de 03 de mayo, 735/2014 de 09 de
diciembre y 309/2018 de 02 de mayo; posteriormente, ya ingresando al caso en particular
arguyó que el principio de congruencia no es absoluto ya que este cede ante el derecho a
la tutela judicial efectiva y el principio de justicia material y si bien el Juez de la causa a
momento de emitir Sentencia dispuso efectos que no fueron solicitados por la parte
demandante empero advirtió que tales disposiciones fueron determinadas en pro de
efectivizar la tutela solicitada, ya que lo contrario implicaría emitir una sentencia
meramente declarativa que no logrará efectivizar la pretensión planteada por la demanda,
por lo que en atención al nuevo paradigma constitucional que busca que se garantice una
justicia pronta oportuna y sin dilaciones, es que consideró que lo dispuesto en Sentencia
era correcto.
De estas consideraciones, se colige que la ausencia de motivación y fundamentación
acusada en este apartado, para nada resulta evidente, ya que el Tribunal de alzada, en
estricto cumplimiento de este elemento del debido proceso (motivación y
fundamentación), al momento de resolver la problemática planteada lo hizo sobre la base
de razonamientos jurídicos y fácticos, explicando de forma razonada y coherente los
motivos por los cuales concluyó que la determinación asumida en primera instancia no
resultaba atentatoria al principio de congruencia y, por ende, tampoco ameritaba declarar
la nulidad de la Sentencia; de ahí que el presente reclamo también resulta infundado,
puesto que el Juez de la causa al momento de emitir Sentencia, aplicó, entre otros, el
principio de eficacia que se relaciona directamente con la legitimidad de la administración
de justicia, pues la misma permite llegar a lo que se ha esperado, es decir, la impartición
de justicia, toda vez que este principio supone que la organización y la función de la
jurisdicción ordinaria deben estar diseñadas y concebidas para garantizar la obtención de
los objetivos, fines y metas propuestos y asignados por el propio ordenamiento jurídico,
removiendo para dicho fin, inclusive de oficio, los obstáculos puramente formales, pues
debe prevalecer el derecho sustancial respecto al formal, garantizando así la tutela judicial
efectiva, tal y como lo señaló el Tribunal de apelación.
3. Continuando con la consideración de reclamos acusados en casación, corresponde
referirnos al inmerso en el numeral 3, donde la recurrente si bien reitera la conculcación
del art. 265.I y III del Código Procesal Civil, empero, esta vez acusa que la respuesta
otorgada por el Tribunal de alzada de que sería intrascendente determinar la masa
hereditaria, demostraría una manifiesta parcialidad con la parte actora en franca
vulneración de los derechos de sus hijos que son menores de edad, además de tornar de
incongruente y contradictorio el Auto de vista.
Del examen de los fundamentos en los cuales se sustenta la presente acusación, se
observa que la recurrente, acusa una posible parcialización del Tribunal de alzada con la
parte actora, ya que la Sentencia que es confirmada por el Auto de Vista beneficiaría a la
parte actora y no así los intereses de la parte recurrente o de sus hijos menores de edad;
sin embargo, el presente reclamo, lejos de acusar algún vicio de forma o de fondo que
permitan a este Tribunal de casación revisar si evidentemente se vulneró algún derecho, o
se interpretó erróneamente alguna norma o se valoró incorrectamente algún medio
probatorio, la recurrente, simplemente expresa su disconformidad con la decisión de
alzada, alegando de manera muy sutil que en el Auto de Vista recurrida existiría
contradicción porque se habría señalado que lo importante en el caso de autos era
establecer si se lesionó o no la legítima de la parte actora y contrariamente se habría
señalado que no es importante lo demandado, sino el derecho reclamado; observación

2
que este Tribunal no considera contradictorio, pues cuando la parte actora acudió al
órgano jurisdiccional fue porque consideró que su derecho a la legítima habría sido
vulnerado por la disposición testamentaria que hizo su madre, excediendo de esta manera
los límites porcentuales permitidos por ley ya que se habría dispuesto el total de la
legítima, motivo por el cual demandó el reintegro de la legitima y la reducción de la
disposición testamentaria y el correspondiente registro en Derechos Reales de las
porciones legítimas y testamentarias; por lo tanto, si la parte recurrente considera que la
disposición testamentaria realizada en su favor y en favor de sus hijos no vulneraba el
derecho a la legítima de la parte actora, ésta debió producir y presentar todos los medios
de prueba idóneos para desvirtuar los fundamentos de hecho y de derecho en los cuales
se sustentó la parte demandante, y no limitarse a acusar una posible parcialización por el
solo hecho de que el Juez de la causa no le dio la razón; en ese entendido, el presente
reclamo también resulta infundado.
4. Finalmente, corresponde dar respuesta al reclamo acusado en el numeral 4, donde la
parte demandada, ahora recurrente, acusó que el Tribunal de alzada habría omitido
referirse y resolver la cuarta cuestión reclamada en apelación, es decir, al hecho de que la
sentencia vulneraría el principio de seguridad jurídica, debidamente reconocido en la
Constitución Política del Estado, pues considera que la estructura de la Sentencia debe
estar directamente relacionada con el contenido que satisfaga lo postulado en la demanda
y como en el caso de autos no fue una pretensión demandada que se levante las
inscripciones y que en ejecución de Sentencia se proceda recién a un avalúo de la masa
hereditaria y posterior repartición e inscripción de los bienes que componen la legítima,
sería una determinación que vulnera el debido proceso y la seguridad jurídica.
Como se advierte, el extremo denunciado en este último apartado, está abocado a acusar
una posible incongruencia omisiva, caso en el cual, como ya se dijo a lo largo de la
presente resolución, este Tribunal de casación se ve compelido a verificar si lo acusado
es o no evidente y de ser así si este es trascendente; bajo esa premisa, de la revisión de
los fundamentos en los cuales se sustenta el Auto de Vista Nº 297/2021 de 19 de agosto,
así como de los fundamentos inmersos en el numeral 1 y 2 del presente Considerando, a
los cuales nos remitimos, es que corresponde reiterar que el Tribunal de alzada no
incurrió en omisión alguna al momento de emitir la resolución que ahora es objeto de
casación, ya este se circunscribió a los puntos resueltos por el inferior y que fueron objeto
de apelación y fundamentación, exponiendo de manera clara las razones tanto de hecho
como de derecho, por las cuales la incongruencia acusada en el recurso de apelación no
vulnera ningún precepto normativo y, al contrario, las determinaciones asumidas por el
Juez de la causa y que fueron confirmadas en segunda instancia, tuvieron como único fin
que la controversia sea resuelta de manera definitiva, ya que el órgano jurisdiccional debe
procurar la solución más eficaz a dicho conflicto sin que esto implique una multiplicidad de
procesos; de ahí que la nulidad pretendida en apelación no resultó viable.
De esta manera, se colige que el presente reclamo al carecer de sustento y no ser
evidente deviene en infundado.
No obstante, se aclara a la recurrente, que si no estaba de acuerdo con la respuesta que
el Tribunal de alzada otorgó a los agravios denunciados en el recurso de apelación, esta
debió interponer recurso de casación en el fondo, los cuales hubiesen permitido a este
Tribunal de casación revisar si la determinación asumida por los jueces de instancia es o
no correcta, y no limitarse a cuestionar aspectos estrictamente formales, toda vez que el
análisis de fondo del Auto de vista procede ante causales expresamente detalladas en el
art. 271 del Código Procesal Civil.
En virtud a los fundamentos expuestos, corresponde a este Tribunal de casación, fallar en
la forma prevista por el art. 220.II del Código Procesal Civil.

2
POR TANTO: La Sala Civil del Tribunal Supremo de Justicia del Estado Plurinacional de
Bolivia, con la facultad conferida por el art. 42.I num.1) de la Ley del Órgano Judicial de 24
de junio de 2010, y en aplicación del art. 220.II del Código Procesal Civil,
declara INFUNDADO el recurso de casación cursante de fs. 809 a 815 interpuesto
por Inés Wendy Mercado Soliz por sí y en representación de sus hijos Andrews Enrique y
Génesis Dayra ambos Santos Mercado, contra el Auto de Vista Nº 297/2021 de 19 de
agosto, corriente en fs. 798 a 800 vta., pronunciado por la Sala Civil Quinta del Tribunal
Departamental de Justicia de La Paz. Con costas y costos.
Se regula los honorarios del abogado profesional que contestó al recurso de casación en
la suma de Bs. 1.000.-
Regístrese, comuníquese y devuélvase.
Relator: Mgdo. Juan Carlos Berrios Albizu.

CONCLUSIÓN DEL EXPEDIENTE


Se ha llegado a la conclusión de este expediente que ambas partes ya sea la parte
demandante como así la parte demandada contrademandan ya sea en el proceso
ordinario ante el Juez Publico en lo Civil y comercial como de igual manera muestra
ambas partes su disconformidad con relación a la parte demandada observa que el
Tribunal de alzada incumplió lo que establece el art 265 I del Código Procesal Civil que se
refiere a que el Auto de Vista deberá circunscribirse a los puntos resueltos.
También cabe mencionar que la citada demandada Inés Wendy Mercado Soliz en
representación de Andrews Enrique y Génesis Dayra ambos Santos Mercado y Giomar
Santos Mercado alego que al dictarse resolución recurrida se incumplió con lo
preceptuado por el art 265 I y III de la Ley 439 esto refiriéndose a la segunda y quinta
cuestión reclamada en apelación, en síntesis podemos resumir que la parte demandada
observa que el Tribunal de alzada incumple con los artículos de la ley 439 Código
Procesal Civil sino también incumple con el Auto Supremo 510/2021 de 10 de junio
En cambio, se establece que la parte demandante Encarnación Evelyn Soliz Acha
respondió al recurso de casación de la parte adversa señalando que el recurso de
casación no cumple con lo dispuesto en el art 274 del Código Procesal Civil que se refiere
a los requisitos del recurso
Además, indica que es una afirmación temeraria la que realiza la parte demandada
respecto a que el Tribunal de alzada solo habría considerado tres de las nueve cuestiones
reclamadas en apelación resumiendo podemos indicar que de igual manera el Tribunal de
alzada incumple con lo que establece el art 274 del Código Procesal Civil, también que el

2
Tribunal de alzada comete errores al tomar solo en cuenta tres de las nueve cuestiones
reclamadas en apelación

BIBLIOGRAFIA

https://www.iustel.com/diario_del_derecho/noticia.asp?ref_iustel=1136839
https://es.scribd.com/doc/52041389/El-Reintegro-de-la-legitima
http://ddigital.umss.edu.bo:8080/jspui/handle/123456789/17387

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