Professional Documents
Culture Documents
ISSN: 1132-0559
DOSSIER
RESUMEN
Estamos ante una de las formas de violencia más oculta, se trata de la inflingida a las
personas de edad avanzada, grupo de población sumamente vulnerable. Es un fenómeno
silenciado, desconocido, incomprendido y escasamente detectado. Los profesionales cono-
cen su existencia, no obstante, existen grandes dificultades para su abordaje. La realidad
es que no se le presta la necesaria atención, puesto que a menudo es más fácil creer que
no existen que haber de afrontar aquello que puede llegar a ser una realidad extremada-
mente impactante y sumamente compleja.
Los expertos auguran que el número de situaciones de malos tratos a los mayores irán
en aumento a causa del progresivo envejecimiento de la población, de la esperanza de
vida, del incremento de situaciones de dependencia física y psíquica y sobre todo por el
mayor y mejor reconocimiento de los derechos de las personas mayores. No olvidemos los
cambios sociales, culturales, los estereotipos negativos sobre el envejecimiento los cuales
fomentan la discriminación por la edad (edadismo)
Todos estos factores nos van indicando la presencia de importantes transformaciones
en nuestra sociedad las cuales es preciso abordarlas con una gran dosis de creatividad y
celeridad Ante esta emergencia surgen cuestionamientos sobre las normas y las condicio-
nes respecto a los cuidados familiares. Modificaciones en las pautas de las obligaciones
de los parientes (el sentido de la obligación) que cada vez más va dejando de ser vigente.
El cuidado a los ancianos no está claramente definido en normas sociales explícitas como
lo esta para los menores.
Se pretende hacer una llamada de atención a los profesionales y de forma especifica a
los psicólogos, educadores, trabajadores sociales y muchos otros, sobre la necesidad de
sensibilizar e informar, puesto que su ámbito de acción es privilegiado para poder prevenir,
detectar, diagnosticar e intervenir en estas situaciones.
* Treballadora social, Psicóloga, Máster en Gerontología Social/UB), Profesora titular de la Universitat de Barce-
lona, membre el Grup EIMA. ctabuena@ub.edu
PALABRAS CLAVE
Malos tratos a personas mayores, Vejez, Abordaje integral.
ABSTRACT
One of the most hidden forms of violence is the violence against older persons –a highly
vulnerable population. It is a phenomenon that has long been silenced, misunderstood and
hardly detected. Although professionals know this problem, great difficulties exist to
address it. Actually, not much attention has been paid to this problem. Sometimes it is
easier to deny events like these than to face them, even if they may become extremely
shocking.
Experts foretell an increasing number of ill-treatment events inflicted to aged persons
owing to the increasing ageing of the population, life expectancy, physical and psychologi-
cal dependence and the acknowledgement of old people’s rights. Social and cultural chan-
ges, along with negative stereotypes about ageing, favour age discrimination.
The aforementioned factors are an indication that important social changes are taking
place that need to be addressed quickly and creatively. As a result, current standards and
conditions concerning family care and patterns of family duties are questioned. Therefore,
older persons care is not clearly specified in social regulations, as is the case with chil-
dren.
This paper attempts to draw the attention of practitioners, especially psychologists,
pedagogues, social workers, etc. about the importance of their role and the need that they
get involved in prevention, detection, diagnosing and intervention to tackle this problem.
KEY WORDS
Ill-treatment in older persons, Ageing, Comprehensive approach.
India, Chile, Reino Unido y, Canadá, Hay tres elementos clave que explican
Gran Bretaña, Suecia, Noruega adqui- esta complejidad (Tabueña 1999b).
riendo así el tema relevancia mundial,
mediante artículos, encuestas y trabajos — La falta de consenso universal
diversos. En la ultima década Francia sobre la definición de abuso y mal-
destaca por su gran interés por interve- trato.
nir en este tema tan emergente de los
malos tratos a los ancianos.
— El abuso y el maltrato efectuado a
El hecho de considerar de una forma las personas mayores tiene menos
distinta el concepto social de anciano o relevancia que el efectuado a los
persona mayor hace dificultoso el hacer menores y a las mujeres. Hay una
comparaciones entre los estudios y los gran invisibilidad hacia las perso-
países. nas de edad avanzada.
Se puede detectar por: un estado de cuidados necesarios por parte del cuida-
agitación en el plano emocional; actitud dor, de una forma consciente. La pasiva
más distante de lo habitual o por la pro- se centra en el olvido y el abandono.
pia declaración de la persona objeto del
mismo.
6.- La autonegligencia
3.-Abuso sexual Es el comportamiento de una persona
mayor que amenaza la propia vida o su
Se produce cuando hay un contacto salud. Se excluye en esta tipología aque-
sexual con una persona anciana sin llas personas mayores competentes (con
tener el consentimiento, los atentados plena capacidad mental), que optan por
contra el pudor como los tocamientos y decisión propia a cometer actos que
la pornografía. Es la violación, la sodo- amenacen su seguridad.
mía, el desnudo forzado, la fotografía
sexual explícita. Es un concepto aplicable a una
amplia gama de comportamientos y no
sólo en situaciones extremas de falta de
4.- Explotación financiera o abuso recursos o habilidades para llevar a cabo
económico la actividades necesarias que garantizan
la propia salud o bienestar. Existe un
Se trata de la utilización abusiva o ile- debate abierto en si debe ser o no consi-
gal de los bienes e inmuebles propiedad derado maltrato en cuanto no existe una
de la persona mayor. persona que lo ocasione.
En la propia comunidad también las
personas mayores son objeto de este tipo 7.- Abandono
de explotación mediante practicas de
ventas fraudulentas y engañosas, estafas Se considera abandono cuando una
coyunturales, manipulación de docu- persona, que está encargada de prestar
mentos para fines totalmente ajenos a la cuidados y atención a una persona
voluntad de las personas (subastas y mayor o de asegurar su atención física,
otros). la abandona. Se trata de la claudicación
total.
5.- La negligencia
8.- La vulneración de los derechos
Es un comportamiento nocivo, inten-
cionado o no, por parte de una persona Incluye los derechos elementales que
que esta obligada a cuidar a la persona no están contemplados en el resto de
anciana. Según el National Center Elder tipologías puesto que en todos los tipos
Abuse, se entiende por negligencia, el de malos tratos a las personas mayores
rechazo o la omisión de proporcionar a la se da implícitamente una vulneración de
persona anciana las necesidades de la derechos.
vida, como el agua, los alimentos, el ves-
tir, la vivienda, la higiene personal, la Consiste pues en la agresión, priva-
medicación, la seguridad personal y los ción o no reconocimiento de los derechos
otros bienes esenciales. Puede ser activa fundamentales como: dignidad y respeto;
o pasiva. La activa se refiere a la falta de intimidad y confidencialidad; participa-
Así de esta forma, se puede encon- nos de resistencia para reconocer la rea-
trar que las personas mayores víctimas lidad de los malos tratos. ¿Por qué?
de malos tratos se manifiestan median-
te indicadores no específicos como: — Negación del problema por el
fugas, agitación, claudicación (autone- entorno.
gligencia), no ingesta de alimentos,
depresión. — Minimización del incidente en el
origen de la queja o denuncia.
A nivel de percepción — Temor a los conflictos y a las
de las propias víctimas represalias.
Las percepciones son elementos cog- — Sufrir una presión para la confor-
nitivos y/o emotivos que organizan la midad.
experiencia y la forma cómo evalúan las
víctimas su situación. He aquí algunas — Desconocimiento de la existencia
manifestaciones: de recursos de soporte.
— Ellas no se dan cuenta de la grave- — Creencia de la obligación de confi-
dad de la situación. dencialidad.
— Excusan y justifican los comporta-
mientos abusivos. A nivel de la revelación de la víctima
— Ignoran las posibilidades de ayuda Los sentimientos que surgen suelen
y los recursos. ser:
— Se sienten culpables e impotentes — La débil probabilidad que tiene la
de su situación de dependencia y víctima de ser creída.
por lo tanto de la necesidad de pre-
cisar ayuda. — El sentido que la víctima da a la
situación de abuso.
— Creen poder resolver por si solas el
problema. — La capacidad limitada de comuni-
car claramente los detalles de la
— Existe una indefensión aprendida. situación-problema.
Se percibe un sentimiento de ser
una carga para la familia y para el — La ausencia de una persona de
entorno. En ocasiones se sienten confianza en el entorno de la vícti-
culpables de los comportamientos ma.
de maltrato recibido (alguna cosa
habré hecho mal…) — La importancia de la relación afec-
tiva con el abusador
A nivel de actitudes del entorno
de la víctima El silencio de los cuidadores
La actitud del entorno es la reacción Cuando los profesionales de cualquier
previsible del medio ambiente en térmi- categoría laboral, que ejercen su activi-
que se produzcan malos tratos y también ellos. No obstante, existen autores que
que se reduzca el potencial, tanto de han dedicado su reflexión a teorizar y
detección como de prevención. buscar datos sobre el efecto de los malos
tratos en las personas que los padecen.
También es una realidad constatable,
en muchas ocasiones, el silencio de los Es relativamente fácil establecer una
organismos públicos estatales, autonó- relación directa entre una lesión física y
micos y municipales con responsabilida- sus secuelas posteriores, avaladas por el
des para intervenir en situaciones de vio- seguimiento médico, pero es mucho más
lencia, abuso y malos tratos dirigidos a complejo establecer esta relación cuando
los ancianos. Por este motivo se puede se trata de un daño psicológico. En este
afirmar su complicidad y participación caso, se plantea un modelo ecológico
en mantener cuidados inadecuados y el explicativo, en el que la personalidad de
maltrato a la población anciana expuesta la propia víctima, las relaciones con el
a estas situaciones. entorno y las experiencias sociales pre-
vias son los parámetros a tener en cuen-
Numerosas organizaciones alzan su ta para poder efectuar una evaluación.
voz y recomiendan que se definan accio-
nes dirigidas a la prevención, detección y En muchas ocasiones, en los informes
tratamiento de los malos tratos a las per- no aparece la descripción de las conse-
sonas mayores (OMS, Asamblea Mundial cuencias que han supuesto los abusos
sobre el Envejecimiento, Declaración de económicos, las humillaciones o las
Almería y otros), a las que en demasia- agresiones sexuales, es decir, el impacto
das ocasiones se les hace caso omiso. que los distintos tipos de malos tratos
hayan podido causar a la persona mayor,
Es necesario poder identificar los ries- sino que solamente se suele detallar la
gos previsibles para no exponer inútil- consecuencia más grave a titulo de resu-
mente a las personas mayores a un ries- men global. Las víctimas pueden sufrir
go de padecer una situación de maltrato. multitud de secuelas mucho más difíci-
les de apreciar, pero igualmente graves a
corto y largo plazo. A pesar de todo, se
apunta que la violencia y los malos tra-
CONSECUENCIAS PSICOLÓGICAS, tos a los mayores, tanto en el medio
SOCIALES Y DE SALUD DE LOS familiar como institucional, causan mor-
MALOS TRATOS A LAS PERSONAS bidad y mortalidad importantes. Lachs et
MAYORES al. (1998), afirman que el hecho de sufrir
malos tratos acorta la vida.
El proceso de envejecimiento entraña
la reducción de la capacidad de recupe- Si nos referimos a los trastornos psi-
ración, por lo que las personas de edad cológicos asociados a los malos tratos,
que han sido víctimas de malos tratos podemos relacionar la ansiedad, la
pueden no llegar a recobrarse nunca del depresión y la baja autoestima entre
todo, física o emocionalmente, de la otros, los cuales pueden producir disfun-
experiencia sufrida. ciones físicas en diversas áreas de la per-
sona y afectar al descanso, producir
La mayor parte de la literatura sobre mareos y dolor de cabeza o trastornos de
los malos tratos a las personas mayores la alimentación. También pueden produ-
está enfocada a cómo poder detectarlos y cir disfunciones psíquicas como angus-
la forma más idónea de intervenir en tia, irritabilidad, reducción de la capaci-
dad de memoria y de la expresión, aisla- edad son tres veces superiores a las de
miento social, alteración de la percepción otros grupos.
y de la valoración de lo que sucede y ten-
tativas autodestructivas como el suicidio. Estas, entre otras consecuencias, son
las que ponen en evidencia la gravedad del
Se cita también el estrés postraumáti- tema de los malos tratos a las personas de
co, el cual aparece en muchas de las víc- edad avanzada y también ponen de mani-
timas de violencia o de maltrato, las cua- fiesto la necesidad de aplicar actuaciones
les suelen sentirse responsables de su que vayan dirigidas, bien a la raíz del pro-
situación. Tienen sentimientos de ver- blema mediante acciones preventivas, bien
güenza y tienden a minimizar los efectos, a las fases iniciales del problema para una
por lo que no se conceden el derecho a detección precoz o bien a eficaces inter-
pedir ayuda. venciones multidisciplinares acompañadas
de los recursos idóneos y necesarios.
A titulo de ejemplo exponemos que la
hipotermia y la hipertermia también son
causas potenciales que precipitan la LA INTERVENCIÓN
muerte de las personas mayores, espe-
cialmente de las que padecen una disca-
pacidad y que en muchos casos, con un Toda intervención debe estar regida
buen seguimiento podría ser evitada. por unos principios fundamentales que
Respecto al estado nutricional y de permiten llevar a cabo una estrategia
hidratación, son también factores impor- que tiene como finalidad prevenir y evi-
tantes para la defensa del organismo tar los malos tratos, al mismo tiempo
hacia posibles enfermedades y ante la que se preservan los derechos y los inte-
respuesta inmunológica. La desnutrición reses de la persona mayor y sus relacio-
favorece la aparición de úlceras de decú- nes personales. Estos principios funda-
bito en los pacientes encamados, de la mentales son:
misma forma que la falta de higiene y la
inmovilización postural. A. Las personas tienen derecho a:
Son desconocidos los efectos de los — Tener las necesidades básicas
abusos sexuales en los hombres, por el cubiertas (alimento, vestido, vivien-
contrario sí se conocen algunos de los da...).
efectos en las mujeres, las cuales des-
arrollan conductas fóbicas y de evita- — Estar protegidas contra los malos
ción, así como miedo, ansiedad, estrés tratos.
postraumático, desintegración social res-
pecto de sus relaciones afectivas y de — A ejercer su autodeterminación y
ocio, entre otras. poder conducir su vida como crean
conveniente, siempre que no pon-
La Organización Mundial de la Salud gan en peligro o vulneren algún
(OMS - Informe Violencia y Salud, 2002) derecho a una tercera persona.
ha calificado a la violencia como un pro-
blema de salud pública y de derechos — Tomar parte en las decisiones que
humanos en todo el mundo y, a pesar de le afecten, teniendo en cuenta sus
que no hay estudios específicos sobre el capacidades.
suicidio en personas mayores, las cifras
globales de suicidio en este grupo de — Rehusar ayudas o prestaciones.
B. Cada caso debe ser analizado indi- — Exista una infracción del código
vidualmente para poder determinar penal.
los deseos de la persona mayor y el
grado de intervención que demanda. — La persona mayor represente un
peligro para una tercera persona.
— La intervención ha de ser propor-
cional a la medida del riesgo al — Se ha de informar al Juzgado en el
cual está expuesta la persona caso de que existan agresiones,
mayor. amenazas, robos y abandono. En
los otros supuestos las personas
— Los perjuicios y convicciones de los mayores pueden rehusar cualquier
profesionales pueden reflejarse en ayuda o intervención.
las decisiones que se tomen para
llevar a cabo la intervención. Cada F. Mantener la confidencialidad res-
profesional ha de reconocer sus pecto a la información de las situa-
responsabilidades y evitar privile- ciones de maltrato. Todos los profe-
giar o castigar comportamientos. sionales que intervienen en el caso,
psicólogos, trabajadores sociales,
C. La intervención tiene como finalidad médicos, abogados, se ven obliga-
acabar con el maltrato y por tanto dos a mantener confidencialidad y
proteger a la víctima, pero tam- a obtener el permiso de la persona
bién, la de mejorar la percepción mayor para pasar información de
del comportamiento propio, para lo un profesional a otro, a excepción
cual se precisa de empatía. de los casos en los que hay obliga-
toriedad de denunciar o comuni-
D. Las intervenciones deben aplicarse car.
con las medidas menos perturbado-
ras y restrictivas posibles para la G. Prestar el adecuado nivel de inter-
persona mayor. Se ha de elaborar vención.
un método de participación volun-
taria de todas las personas impli- Actualmente, el abordaje de una
cadas, teniendo en cuenta sus per- situación de maltrato a una persona
sonalidades y circunstancias, mayor se hace, generalmente, desde los
puesto que de otra forma se pue- servicios sociales o servicios de salud de
den generar reacciones negativas y atención primaria, actuando sobre situa-
como consecuencia, que la persona ciones de riesgo (prevención primaria),
mayor rehúse la ayuda. Se han de sobre situaciones confirmadas de mal-
clarificar las demandas de la vícti- trato (prevención secundaria), o bien
ma para determinar cual debe ser sobre las consecuencias del maltrato
la estrategia de trabajo del equipo (prevención terciaria).
de intervención.
Ante situaciones tan complejas y mul-
E. Se ha de comunicar al Ministerio tifactoriales como son los maltratos a las
Fiscal o al Juzgado e intervenir obli- personas mayores, su intervención debe
gatoriamente en caso de que: ser necesariamente diseñada y efectuada
por profesionales de diversas disciplinas.
— Se trate de una persona mayor
presuntamente incapacitada para Para poder intervenir integralmente
tomar decisiones. en estas situaciones de maltrato, es con-
cómo, quién y cuándo debe prote- Para evitar que las personas mayores
gerse a las personas mayores vícti- sean víctimas de maltrato es absoluta-
mas de esta situación, a pesar del mente necesario incidir en la conciencia-
libro blanco de la dependencia y de ción social. El camino es largo pero ya
la futura ley de dependencia. estamos dado los primeros pasos.
BIBLIOGRAFÍA
Burston, G.R. (1975).”Granny battering”. The Lee, S. (2003). Caring for grandchildren increa-
British Medical Journal, 3:592-596. ses women’s heart disease risk. American Journal
of Public Health, 93 (11),1939-44.
Coma, M., Muñoz, J., Orfila, F. y Tabueña, M.
(2005). Los malos tratos a los ancianos. Barcelona: Marin, N., Delgado, M., Aguilar, JL., Martinez,
Mason. MA., Diez, A. y Soto, JA. (1991). Síndrome de mal-
trato y abuso en el anciano. Revista Española de
Clark, A., Mankikar, G., y Gray, I. (1975). Dio- Geriatría y Gerontología, 26 (1),40-46.
genes Syndrome. Lancet, 15, 366-368.
Organización Mundial de la Salud. (2002).
Equipo Investigación Maltrato Ancianos (EIMA)
Informe Violencia y Salud. Ginebra: OMS.
2002. Barcelona.
Kessel, H., Marín, M., Maturana, N., Castañe- Ruiz, A., Altet, J., Porta, N., Duaso, P., Coma.
da, L., Pageo, M., y Larrión, J.L. (1996). Primera M., Requesens, N. (2001). Violencia doméstica:
Conferencia Nacional de Consenso sobre el ancia- prevalencia de sospecha de maltrato a ancianos.
no maltratado. Revista Española de Geriatría y Atención Primaria 27(5), 331-334.
Gerontología, 31 (6), 367-372.
Tabueña, M. (1999b). Activitats preventives per
Guijarro, A. (2001). El Síndrome de la Abuela a la gent gran. En Llibre Blanc . Barcelona: Gene-
Esclava Pandemia del Siglo XXI. Investigación Clí- ralitat de Catalunya. Departament de Sanitat i
nica, 4(4), 407-410. Seguretat Social.