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10 errores de las

Asociaciones Civiles
al constituirse y operar
1. No asesorarse correctamente. Crear un Asociación Civil
de forma correcta requiere de asesoría de expertos.

Acércate a quien ya tenga tiempo trabajando en o con la sociedad civil y que


pueda brindarte un panorama completo de lo que estás a punto de realizar.
Esta retroalimentación sobre la planificación aclarará dudas y te transmitirá
mucha experiencia para el resto del proceso.

Para solicitar asesoría puedes acudir a una Asociación Civil como CECANI
Latinoamérica; al SAT; o a privados como con un notario particular que tenga
experiencia en la constitución de asociaciones civiles. Será más sencillo si
llegas con una lista de preguntas concretas a tratar con dichas organizaciones
entorno a su origen, funcionamiento, administración y sustentabilidad.

Un notario te orientará y acompañará para efectuar varios trámites, su ayuda


es indispensable y dependiendo del acuerdo que establezcas con él, realizará
gran parte de los trámites que requieres para constituir tu organización. Así
mismo, el notario te indicará el mejor camino para lograr con éxito tus
objetivos dentro del marco que permitan la legalidad civil, mercantil,
administrativa y fiscal.
2. No tener una planeación estratégica

El acto de planificar está inmerso en la vida cotidiana en forma consciente o


inconsciente en la mayoría de las decisiones que tomamos a lo largo de nuestra
vida. Esta acción cobra significado al plantearse con qué objetivo elegimos un
curso de acción entre el abanico de posibilidades y con qué fin tomamos la
decisión de seguirlo. Llevado esto al ámbito de las organizaciones, que son
estructuras sociales gestionadas por personas, esta acción naturalmente se
repite y adquiere un aspecto medular al estar ligada la planificación a la razón
de ser institucional y a la generación de una serie de procesos que contribuyen
al logro de los objetivos que sustentan su existencia.

Es así como conocemos organizaciones exitosas que logran incidir en políticas,


marcan rumbos de acción o contribuyen con innovaciones y otras cuya
existencia han pasado completamente desapercibidas.
2. No tener una planeación estratégica

Cabe el análisis de preguntarse: ¿Por qué? ¿Dónde radica la diferencia? Sería


muy simplista reducir el éxito de las organizaciones solo a la acción de planear,
pero es conveniente resaltar que este es uno de los pasos de la gestión que
comprende el análisis, la planificación, la ejecución y la evaluación dentro de un
proceso continúo emprendido por la organización, entendida esta como un
organismo vivo.

Por lo anterior, la Planeación estratégica representa una poderosa herramienta


de análisis, reflexión y toma de decisiones colectivas sobre el quehacer actual y
el camino que deben recorrer las comunidades, organizaciones e instituciones.
No solo para responder ante los cambios y las demandas que les impone el
entorno y lograr así el máximo de eficiencia y calidad en las intervenciones, sino
también para proponer y concretar las transformaciones que requiere el
entorno.
3. Pensar en el dinero antes que en la causa social

La asociación civil es una persona jurídica que tiene como objetivo


promover diversas actividades para el bien común de la sociedad, sin tener
necesariamente como finalidad el lucro económico, aunque muchas veces
se confunde y se visualiza a la Asociación Civil como una fuente para
generar ingresos para sus socios y aquí donde se cae en un error, ya que la
organización se pierde y por ende no cumple con su objetivo principal,
atender problemas de interés común.
4. No tener un equipo o consejo directivo y un equipo
operativo claramente definido.

El Consejo Directivo de una Asociación Civil es un grupo de ciudadanos, electos


o nombrados, que supervisan los programas sociales de la organización, ejerce
responsabilidad fiscal y supervisa al Director Ejecutivo. Su importancia
estratégica deriva de 2 factores: permite a la organización contar con un equipo
de expertos en la causa social y, si se integra siguiendo el marco legal, permitirá
a la organización el acceder a fondos de instituciones donantes de diversos
países.
5. No ser donataria autorizada para acceder a fondos privados e internacionales.

El proceso que permite a una organización civil contar con la autorización de


donataria puede llegar a ser complicado y demasiado tardado. Que una
Asociación Civil cuente con la autorización de donataria significa que puede
expedir recibos deducibles de impuestos gracias a sus donantes, por lo que su
carga fiscal disminuye. Esta autorización determina el proceso de sobrevivencia
de la Asociación, ya que, al no contar con el carácter de donatarias, las
organizaciones tienen menores posibilidades de diversificar sus fuentes de
financiamiento y pagan montos mayores de impuesto sobre la renta, lo que
implica disminución de sus recursos para operar efectivamente causando el
incumplimiento de sus objetivos sociales y el inicio de su desaparición.

Ser una Asociación con donataria autorizada no significa que no esté interesada
en resolver problemas sociales, ni que su objetivo se reduzca a recibir donativos
libres de impuestos. Por el contrario, les brinda la oportunidad de allegarse de
recursos a través de los donativos, ya sea en efectivo o en especie, de
residentes nacionales o en el extranjero.
6. No tener un proyecto social debidamente estructurado

Las asociaciones civiles juegan un papel importante en nuestro país, por su


compromiso con las diversas causas sociales y su eficacia en la acción, una
importante cantidad de recursos llega año con año a sus manos, proveniente tanto
de instituciones públicas como de agencias de cooperación internacionales y de
gran cantidad de particulares que confían en su capacidad de gestión y su sentido
de misión.

Las asociaciones civiles, tienen la tarea de elaborar y presentar proyectos sociales


que indiquen con todo detalle y claridad la necesidad que se intenta resolver, el
grupo al que dirigirá las acciones y estrategias de intervención. Un proyecto social
constituye una estructura de actuación puesta en marcha a partir de un problema,
adquiere la forma de un ciclo articulado y progresivo desde la identificación del
problema que justifica la intervención. Para esto se debe tener un proyecto social
con un objetivo claro y definido, estar dirigido a un grupo determinado, proponer
soluciones a los problemas y mejorar la situación, tener un límite temporal y
espacial y sobre todo, transformar la realidad en la que se ejecutará.
De no contarse con un proyecto social bien estructurado, se corre el riesgo de que
la Asociación no cumpla con sus objetivos planteados y no pueda intervenir en la
causa o causas para las que se constituyó.
7. No tener presencia en internet y redes sociales.
Si no estás aquí, simplemente no existes en la nueva era.

El trabajo de las Asociaciones civiles es de gran importancia para el desarrollo de


la sociedad, la generación de oportunidades, la aportación de soluciones a
problemas sociales y la atención a diversas causas sociales, por lo tanto, surge la
importancia de tener presencia en los medios digitales.

Si una Asociación Civil no tiene presencia en internet y redes sociales, no existe,


ya que es en las redes sociales donde se encuentra la mayoría de las veces, al
público objetivo de una A.C., incluyendo seguidores y posibles aliados.

Actualmente las Asociaciones Civiles enfrentan una realidad inevitable y es que


han perdido apoyo y donantes con el paso de los años, debido a que sus métodos
son obsoletos y sus mensajes no llegan a las nuevas generaciones. Es por ello la
importancia del uso de un sitio web y redes sociales que brinden un espacio para
fomentar el diálogo, compartiendo información con audiencias de diferentes
edades.
8. Pensar que las Asociaciones Civiles sólo pueden recibir fondos del
gobierno.

Desde una perspectiva general se dice que las organizaciones no lucrativas tienen
una alta dependencia financiera de la Administración Pública ya que más de la
mitad de sus ingresos procede del sector público.

Esta afirmación es cierta. Cuando las organizaciones no lucrativas se convierten


en gestoras de la Administración Pública, gestionando servicios de
responsabilidad pública o tutelados por la misma, entonces el porcentaje de los
ingresos públicos se convierte en la principal fuente financiera de la organización
llegando a ser casi la única fuente de ingresos.

Por el contrario, las grandes organizaciones y las fundaciones no parecen ser tan
dependientes de los ingresos del sector público ya que disponen de otras fuentes
complementarias (rendimientos del patrimonio, actividades comerciales, fondos
privados nacionales, fondos internacionales etc.) que les permite diversificar la
estructura financiera.
9. No hacer alianzas con otras organizaciones, con empresas,
universidades, consultores, organismos nacionales e internacionales.

Las organizaciones de todo tipo y en todas partes del mundo han formado
alianzas estratégicas, sociedades o redes para complementar sus propias
iniciativas. Las Asociaciones civiles no son la excepción, ya que pueden hacerla
con otras organizaciones civiles, con empresas, universidades y organismos
nacionales e internacionales haciendo sinergia entre ellas para adquirir
habilidades, recursos, experiencias y capacidades competitivas diversas y amplias
de lo que pueden manejar ellas solas.
10. Hacer una Asociación de corto plazo

No tener una visión a futuro y constituir una A.C por un interés


momentáneo es uno de los errores más grandes, eso indica que la
causa no fue la razón de crearla.
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