La última lección" es un libro inspirador escrito por Randy Pausch, un profesor
universitario que enfrentó la muerte con valentía y optimismo después de ser diagnosticado con una enfermedad terminal. En este libro, Pausch comparte las lecciones de vida que ha aprendido a lo largo de sus experiencias y reflexiona sobre las cosas que realmente importan en la vida. Desde la importancia de perseguir los sueños y de trabajar en equipo, hasta la necesidad de ser agradecido y de vivir el momento presente, Pausch ofrece consejos prácticos para ayudar a los lectores a enfrentar los desafíos de la vida con una actitud positiva. A través de su historia personal, Pausch deja una lección de esperanza y de cómo vivir cada día al máximo. En otra cuartilla del libro "La última lección", Randy Pausch habla sobre la importancia de ser agradecido y de valorar las relaciones interpersonales. Pausch cuenta su experiencia de trabajar con un estudiante que tenía dificultades para aprender, pero que estaba dispuesto a esforzarse y a aprender. Pausch se sintió agradecido por la oportunidad de trabajar con ese estudiante y de poder ayudarlo a crecer y desarrollarse. Pausch enfatiza la importancia de valorar las relaciones interpersonales y de ser agradecido por las oportunidades que se nos presentan en la vida. Muchos califican su libro como si fuera de autoayuda. Puede que sí, pero para mí, esté errada o no, no lo es. Es un libro de vida. De la vida de un hombre que la amaba pese a todo. Es su historia. Las enseñanzas de un padre a sus hijos. Que nos ayude o no, no es la intención. Es la magia del que llega a tocarnos el corazón. Del león herido que aún quiere rugir. Durante más de una hora y media; a lo largo de unas 230 páginas, Pausch nos cuenta de la manera más alegre y optimista posible, su vida, sus sueños, cómo los alcanzó, cómo alcanzarlos. Es un canto a la vida de un hombre que la perdía. Y todo empieza con una lista de deseos de cuando era pequeño