AANTHROPOS

NTHROPOS
117.2022:
113.2018: 177–186
395  – 422

The
Pensamiento, Diverse
Ley Facesy of
de Origen Toda Religion
construcción de pueblo en los
pueblos Kogui y Kankuamo de R.
Anthony la Walker
Sierra Nevada de Santa Marta,
Colombia
Jeannette Plaza Zúñiga y Catalina Campuzano

Abstract. – The once more-or-less exclusively pastoral Todas of Ayan (Ö·n) to protect them after death. The To-
the Nilgiri Mountains in South India still retain vibrant beliefs in das do not observe idol worship. Todas worship
gods and goddesses they say once lived among them but there- light, fire, mountains, trees, rivers, sky, sun, and
after became mountains; they tell also of ancestors who were moon, which are believed to be the major creations
Abstract. – This article presents the results
once living Todas but subsequently became divinities. Beyond of inquiries carried Ijka ofy their
Wiwa comparten su origen, cosmovisión y
Goddess Thekershi.2
out with
such the Kankuamo
indigenous and Todas
convictions, Koguihave peoples from Sierra
absorbed Nevada
a plethora of formas de ver el mundo, lo cual se remonta al
de Santa
Hindu Marta,
beliefs andColombia, specifically
ritual practices. Christianabout their conceptions
ideology has been
of education
propagated and communication
among in the symbolic
Todas, with foreign-led Christian field. In this pueblo Tayrona pueblo primigenio y a la Sierra
missionar-
framework,
ies succeededthe descriptionsa of
in establishing three categorical
breakaway com-1) como territorio de carácter ancestral (Uribe Tobón
findings:
Toda Christian
thoughtBut
munity. as notwithstanding
a link of the available
the manyelements
divergentof synchronously
sources of Toda
1 1993:
Introduction
334). La llamada Línea Negra es el trazado
in sacred contexts. 2) law of origin, understood
religious ideology, the predominant and most public display of as extrahu‐ que une sitios sagrados delimitando este territorio
man ritual
Toda narrative,
activity which
(aparthasfromfoundational
among Christian character.
Todas)3)still cen- Inocupado
“people his recent porbook
los “Religion.
Kogui en la Anzona
Anthropological
alta de la es‐
construction,”
tres on their unique as asacred
cultural interpretation
dairying of conceptions
cult, despite of cit‐ Perspective” (2015: ​9), Professor Homayun S
the rapid decline ­ idky,
izenship determined by forms of interaction
in the importance of buffaloes in the community’s modern-day and identity. The tribación montañosa, en el centro y norte de la
methodology
economic life. used
This, to this study
together withapplies elements of
their exclusively Todamulti-sited
deities
mySierra. En el costado suroriental se asienta Ohio
much esteemed former PhD student at The el pue‐
and culture
and critical heroes
ethnography,
seems to and its analysis
suggest a unique is carried out high‐ State
ethnic religion, University,
blo Ijka claims:en“no
o Arhuaco, single con
cercanía definition has
la Serranía
lighting community
frequently categorizedtestimonies, givingBut
as “non-Hindu.” voice Indic been
to the perception
demonstrably able to capture the entire picture”
de los Motilones al oriente. El sector nororiental of the reli-
of the actors.
(therefore, [Colombia,
if only Kankuamo,
loosely, “Hindu”) Kogui, education,
principles permeate Toda com‐ gious phenomenon. “For this reason”, Sidky writes,
munication,
ritual activity.cultural identity,are
Most notable lawtheofconcepts
origin] of hierarchy and “some está ocupado por el pueblo Wiwa, en contacto con
el puebloargueWayúu
that religion
de la is best thought
península de laofGuajira,
as a
purity and those of prescribed ritual avoidance coupled with re-
quired ritualPlaza
cooperation.
multifaceted phenomenon with many
ubicándose entre estos dos últimos el pueblo Kan‐interpenetrat-
Jeannette Zúñiga,InDoctora
sum, Toda religion – like the
en Comunicación, Toda
Magister
community
en Investigaciónitself –(Pontificia
is at once unique and, at Javeriana)
Universidad the same time, thor- ing
y Licenci‐ dimensions as opposed to being viewed as a uni-
kuamo, en constante interrelación con poblaciones
oughly
ada en Indic.
Educación[SouthUniversidad
India, Nilgiri deMountains,
La Sabana.Toda] Profesora, inves‐ tary occurrence.” This indeed is my interpretation
mestizas de la sociedad colombiana.
tigadora y creadora senior de la Especialización en Comuni‐ of religion as understood and practised by the once
Anthony Walker, de
cación Educativa an UNIMINUTO
Oxford-trainedColombia.
social anthropologist, re- more-or-less El antropólogo Gerardo Reichel-Dolmatoff es‐
exclusively pastoral Toda community
tired as Professor
E-mail: of Anthropology at the University of Brunei
jplazazuniga@gmail.com tuvo en la Sierra Nevada de Santa Marta hacia la
Darussalam in 2011 and now lives in Kandy, Sri Lanka. His peri- mitad del siglo pasado, viajando repetidas veces a
patetic
Catalinacareer has includedDoctora
Campuzano, teaching enpositions at the Science
Comunicación Uni-   1
(Universi‐ este
The territorio
orthographyrealizando estudios
of Toda in this de tipo
essay follows etnográ‐
that of Mur-
versity
dad deof LaMalaysia in Penang, Magister
Plata, Argentina), the National University of
en Educación Singa-
y Licenci‐ ray Emeneau (1957: ​19; 1984: ​
5–49), except that I have add-as‐
pore, The Ohio State University, and the University of theProfeso‐
South fico que le permitieron entender algunos de los
ada en Lenguas Modernas (Universidad de La Salle). ed hyphenation where I feel this might assist non-specialists
Pacific in Suva, Fiji. –
ra, investigadora He begandel
y creadora his,Programa
still-ongoing, field studies
de Comunicación
pectos más relevantes de la cosmovisión y formas
with pronunciation, hence my To·r-θas and Töw-fił̣ y, where
with
Socialthe- Periodismo
Todas in 1962 de and has also conducted
UNIMINUTO Colombia. long-term field particulares
Emeneau has de interacción
To·rθas con
and Töwfił̣ y. el medio
(Note, however,ambiente,
that I do
research (since 1966) on the Tibeto-Burman speaking Lahu peo-
E-mail: ccampuzanno@gmail.com ennotuna intensa relación
add hyphenation con when
to Toda words la tierra entendida
quoting directly – y
ples of the Yunnan-Indochina borderlands. – For his major pub-
lications on the Todas see References Cited.
as I do frequently –
sentida como unafrom Emeneau’s
gran Madrevarious works.
la cual Further
hace parte
del assistance with the pronunciation of Toda words rendered in
equilibrio cósmico necesario para el manteni‐
Emeneau’s transcription can be had from Tarun Chhabra’s “A
miento dethelaTransliteration
Guide for vida. Gaulchóvang, la2015
of Toda” in his madrebookuniver‐
“The
I. Breve contexto Histórico y Cultural Sierra salToda
dioLandscape,”
a luz enpp. xxxvii–xliii.
los tiempos de la cosmogénesis
The Todas believe in their Goddess Thekershi (Tö·-   2 From the pen of Pöḷ-xe·n, son of Mut-iŝky – his name angli-
Nevada de Santa Marta a los nueve mundos o planos de la existencia, así
kisy1). They worship Goddess Thekershi for pro- cized as Pellican hermanos
(n. d.) – a member of Ka·shermanas
patriclan, first
tection during their eternal (perhaps “mortal” was como a nueve y a nueve que
president of the Nilgiri Toda Uplift Society, high school grad-
Los cuatro pueblos indígenas que viven en
intended) existence and they also worship Godla Sie‐ son las primeras entidades vivientes.
uate and literate both in Tamil and English. Luego apare‐
rra Nevada de Santa Marta, Kogui, Kankuamo, cieron los bosques, los animales, los seres huma‐

Anthropos 117.2022
178
nos, así como las montañas, lagunas, los páramos,
y las entidades protectoras de cada una de estas
entidades denominados Dueños, quienes tienen a
su cargo el cuidado de las relaciones entre los
seres vivos, los espíritus y la tierra para conservar
el equilibrio de la vida (Reichel Dolmatoff 1985:
17s.).
La manera en que el universo se materializa se
entiende por medio de la denominación de aluna,
como una forma de entender al pensamiento direc‐
tamente relacionado con la acción, con la palabra,
la expresión y el sentir como parte de un todo
correlacionado. Así, cada acción y palabra tiene
una reacción e impacto en la realidad material,
aportando o no en el equilibrio del cosmos. Para
ello la concepción de yuluka apela a la necesidad
de un acuerdo entre lo que se dice, se piensa, se
siente y se hace, pues los principios que rigen la
vida y el equilibrio necesitan de este acuerdo entre
las distintas dimensiones del actuar para mantener
la relación armónica entre esas diferentes expre‐
siones del cosmos (p. 94s.). En este sentido es
muy importante todo aquello que suceda en el es‐
pacio tiempo de la Sierra, pues los cuatro pueblos
conciben a este territorio como el centro o corazón
del mundo, punto de gran importancia espiritual
pues es una especie de portal y nodo que enlaza a
la tierra con el universo y sus múltiples dimensio‐
nes, así como la conexión con la Madre Universal
y a las entidades que de ella se desprenden (Uribe
Tobón 1993: 337).
Con el surgir del mundo y de los padres y ma‐
dres de todas las cosas, nacieron los diez mamos
buenos y los diez mamos malos. Ellos son las
fuerzas de la creación y de la destrucción que de
manera opuesta y complementaria se enfrentan pa‐
ra que la vida y la muerte puedan interactuar como
parte de dicho equilibrio cósmico. Sus jerarquías
corresponden a que representan las fuerzas de la
naturaleza como parte de un principio ordenador
de la realidad y del universo (Reichel Dolmatoff
1985: 23). Hoy en día el mamo es la persona en la
cual descansa la autoridad y liderazgo tanto espiri‐
tual como moral de las comunidades de la Sierra,
en donde el actuar y el pensar deben tener una
corresponsabilidad con lo sagrado para que los
pueblos puedan mantener y promulgar por el equi‐
librio de la vida, como guía para que los pueblos
aporten desde su actuar en la armonía cósmica
siguiendo los principios legados por los ancestros
(Plaza 2019: 55s.).
Volviendo al importante concepto de la Línea
Negra, su trascendencia radica en que delimita un
territorio desde una convergencia que geométrica‐
mente vincula a las montañas, los valles y el mar
Jeannette Plaza Zúñiga y Catalina Campuzano
con el pico más alto de a Sierra llamado el monte
Gonawindwa. Esta concepción del territorio hace
parte de una tarea que reivindica a la vida como
centro de todo. En este espacio tiempo de lo sagra‐
do la relación con el entorno y el medio ambiente
va más allá de la visión de los recursos naturales
hacia un entendimiento de que no hay propiedad
privada como tal, sino que se establece una rela‐
ción de respeto con la tierra mediante acuerdos
que buscan mantener la armonía y el equilibrio
como fin (Duque 2009: 235).
II. Historia Reciente de Colombia y de la
Sierra Nevada de Santa Marta
Colombia ha sido catalogada como uno de los
países más violentos del mundo, con altísimas ta‐
sas de homicidios por encima de otros países co‐
mo México Brasil, Venezuela y Perú (Oppdh-DIH
2008). Entre otros factores, el conflicto armado
vivido a partir de la década de los 50 llevó a
que una multiplicidad de actores armados tuvieran
presencia en las zonas urbanas y rurales del país,
con graves afectaciones a los Derechos Humanos.
Entre los años 1985 y 2008 fueron desplazadas
4.628.882 personas como resultado del conflicto.
Entre otros aspectos, el tráfico de drogas ha acen‐
tuado esta crisis humanitaria en la que el campesi‐
nado se ha vuelto objetivo militar para los grupos
armados, pues los territorios rurales y la geografía
han sido agentes facilitadores para el cultivo, pro‐
cesamiento y exportación de alcaloides como la
cocaína y la marihuana moviendo intereses de dis‐
tintos sectores del poder económico. De esta situa‐
ción no se han escapado los pueblos originarios,
quienes en la defensa de sus territorios ancestrales
han sido objeto del acoso de los grupos armados
por la búsqueda del control territorial que les per‐
mita tener los corredores de transporte de droga
así como los espacios para su cultivo y procesa‐
miento. La violencia política contra las organiza‐
ciones y movimientos sociales han afectado a los
pueblos indígenas de tal modo que en las últimas
décadas se ha dado un incremento que ha desem‐
bocado en procesos de paz infructuosos como el
dado con la guerrilla de las FARC, en el fortale‐
cimiento de grupos de narcotraficantes locales y
con control regional asociados al paramilitarismo.
Uno de las regiones donde se ha concentrado el
conflicto ha sido la Sierra Nevada de Santa Marta,
donde la presencia paramilitar y su pugna territo‐
rial con organizaciones guerrilleras han llevado a
que se hayan dado tan solo en el pueblo Kankua‐
mo al menos 228 personas asesinadas, motivando
Anthropos 117.2022
Pensamiento, Ley de Origen y construcción de pueblo en los pueblos Kogui y Kankuamo de la Sierra Nevada de Santa Marta 179
el desplazamiento forzado de cientos de personas
a municipios fuera de sus territorios como los son
Valledupar, Santa Marta y otros más al interior del
país (Plaza 2019: 44).
Se documentó de la misma manera que a lo lar‐
go del siglo XX los Kankuamo fueron transitando
paulatinamente hacia el mestizaje en cuanto a que
su cercanía con la sociedad colombiana, principal‐
mente la ciudad de Valledupar, fue llevando a que
varios de sus pobladores se integraran al mercado
laboral como mano de obra para oficios varios y
lo que empujó a la gradual pérdida de la lengua y
algunos usos y costumbres de modo significativo
(Reichel Dolmatoff y Dussán de Reichel 1961:
46). Investigaciones más recientes han permitido
ver que se gestó una resistencia desde este proceso
de mestizaje en el que se detuvo el avance del
hombre blanco a la Sierra. Los mamos Kankuamo
fueron transmitiendo el conocimiento y saberes
legados por los ancestros a sus pares del pueblo
Kogui para que ellos fuesen sus guardianes, de
manera que la relación de negociación entre los
Kankuamo y los agentes de la cultura intrusiva,
aunque resultara en la pérdida de los valores y
costumbres propias, permitiría proteger y mante‐
ner el legado de los antiguos en la parte alta de la
Sierra (Pumarejo y Morales 2003: 57).
En este sentido el pueblo Kogui mantiene prác‐
ticas de los ancestros Tayrona como lo son las
ceremonias con las cuales se realizan los paga‐
mentos, que son ofrendas que se realizan a la Ma‐
dre Universal en distintos sitios sagrados cuyo fin
es el de mantener el equilibrio en la naturaleza.
También mantienen prácticas propias como lo son
la vestimenta propia, el cultivo de los alimentos
prescritos por los ancestros y de la misma manera
se conserva el uso de la lengua nativa como parte
fundamental de su posición como pueblo ante el
mundo (Campuzano 2019: 46).
III. Metodología
La investigación fue realizada bajo la perspectiva
del estudio de caso con el fin de poder generar
nuevos aportes de tipo teórico a partir de una
comprensión de las dinámicas que se analizaron
(Eisenhardt 1991). Este tipo de enfoque responde
a la necesidad de abordar fenómenos en los que
hay poca teoría al respecto, entendiendo el cómo y
el porqué de los mismos para ahondar en el tema
de estudio hacia la interpretación de nuevos datos
emergentes. De esta manera se analizaron las in‐
formaciones que los mismos actores expresaban
dándoles voz e importancia como fuente primaria
Anthropos 117.2022
y desde la cual parte el entendimiento de las situa‐
ciones y circunstancias.
Los talleres pedagógicos como estrategia me‐
todológica permitieron generar un ambiente en
el que el investigador se puede sumergir en si‐
tuaciones, objetos o eventos como parte de un
estudio determinado (Echavarría y Vasco 2006;
Echavarría et al. 2008). Con esta orientación se
implementó el taller pedagógico como un grupo
de actividades varias que buscaban dar respuesta
a preguntas de investigación como: ¿Quiénes so‐
mos? ¿Quién pertenece a los Kankuamos? ¿Qué
lugar ocupamos en la sociedad? ¿Qué queremos
conseguir? ¿Qué hacemos? ¿Qué planteamos?
¿Qué queremos conseguir? ¿Quiénes son nuestros
enemigos? Estas preguntas planteadas por Van
Dijk (1999, 2003) fueron respondidas desde las
narrativas propias de los participantes.
A través de estos cuestionamientos se pudo lle‐
gar a aspectos profundos de la cultura de la Sierra
y se definieron algunos de los criterios que permi‐
tirían entender las categorías propias de interpre‐
tación de su realidad. Los encuentros realizados
contaron con la participación de actores nativos de
la Sierra y quienes hicieron aportes desde su pers‐
pectiva particular. Su percepción de los hechos y
situaciones fue la guía que permitió ir enlazando
los temas de la investigación que según iba avan‐
zando, los colaboradores iban profundizando en
las categorías propias a partir de su memoria y
experiencia. Se presentan varios de los enunciados
y afirmaciones de los participantes de esta investi‐
gación entre paréntesis y con la codificación rela‐
tiva a los archivos que registran la información
recolectada en terreno. Las letras y números ha‐
cen referencia a los distintos momentos en que
se registraron los relatos en los talleres, dejando
los nombres de los participantes fuera de la publi‐
cación por motivo de salvaguardar su seguridad
personal.
IV. Resultados de la investigación
Tres ejes categoriales son de vital importancia en
esta aproximación a la forma de ver y entender
el mundo por parte de los pueblos Kogui y Kan‐
kuamo: el pensamiento, la Ley de Origen y la
Construcción de Pueblo. Cada uno de ellos está
entrelazado con el otro y se reflejan entre sí como
referentes de realidad desde lo ancestral hasta el
presente. Sobre todo porque en medio de los fac‐
tores e influencias actuales, permanecen muchas
de las prácticas, vivencias y sentires legados por
siglos a través de la tradición no como aspectos
180
estáticos de la cultura sino como agentes vivos
de cambio que prevalecen en la relación armónica
con la Madre Universal en ésta tarea incansable de
promulgar por el equilibrio.
-El pensamiento
Al mencionar la noción de pensamiento tenemos
que remitirnos ineludiblemente a aluna y yuluka.
Pues el pensamiento no está aislado sino que es
parte vital de la acción, el sentir, la intención y
la palabra. Así, construye nuevas formas de vida
para la comunidad, crea formas de vida individua‐
les, protege o modifica la realidad en sí desde un
actuar tanto individual como colectivo. Se concibe
la realidad como un todo conectado con la Madre
Universal desde el pensamiento pues este es a
su vez acción. Algunos relatos permiten que nos
acerquemos a esta experiencia con lo sagrado.
El primero habla de un mamo que trabaja por
la recuperación de la cultura de los desplazados de
Bogotá, por lo menos un siglo antes de su ocurren‐
cia. Haciendo tal trabajo, el mamo inicialmente
invoca ayuda a su mujer espiritual para saber qué
hacer ante la visualización de una serie de sueños,
sobre masacres perpetradas al pueblo kankuamo
y como consecuencia el desplazamiento vigente
hoy en la Sábana de Bogotá. El mamo finalmente
entiende que lo que tiene que hacer es construir
con el pensamiento ese futuro en el que los despla‐
zados en Bogotá vuelven a trabajar en la recupera‐
ción de su cultura (Maestre Villazón 2007). Hay
un camino o trasegar en la senda entre la visión
sobre el futuro vista en el presente y la llegada
a un punto concluyente: a partir del pensamiento
se forja la respuesta a la crisis expuesta en los
sueños. Se hace refleja una noción del tiempo co‐
mo circular desde la experiencia del mamo, entre
el pasado del relato, el futuro que se proyecta en
él y como se teje en el presente la acción que se
debe ejecutar ante lo visto que va a suceder. Es un
camino que en el tiempo circular hace que se inte‐
gre desde el pensamiento a la persona -el mamo
y su mujer espiritual- con lo sagrado de la Madre
Universal para poder ver lo que va a pasar y lo
que se tiene que hacer. Desarrollar el pensamiento
es parte de hacer el camino “…para ir creando
otras formas de vida para uno mismo a partir de
la investigación de lo propio” (Documentación del
trabajo de campo [I: T2. p13]).1
1 A lo largo del documento, el lector encontrará fragmentos
textuales de la información primaria recogida durante los
trabajos de campo. Por motivos de ética y seguridad, los
códigos que aparecen después de cada uno de ellos, y que
Jeannette Plaza Zúñiga y Catalina Campuzano
La experiencia da una respuesta a un problema
como parte de una misión que se debe cumplir,
es el equilibrio el que se debe mantener en la
acción. Hay una intención de promulgar por el
mantenimiento de la vida en ese camino. Otro
relato cuenta cómo se mueve el pensamiento para
proteger sitios sagrados. Recordaba José Gabriel,
que ocurrió hace pocos meses, con un lugar sagra‐
do que estaba en la mira de las multinacionales:
allí se planeaba construir una represa en la laguna
de Besotes – entre otras obras como dos represas
en otras dos lagunas de la Sierra, un teleférico a
Ciudad Perdida y un plan de estandarización de
servicio al turista, entre otros –, todo era parte
del macroproyecto de ecoturismo para la región de
Santa Marta. Después del movimiento del pensa‐
miento, se cambió el sitio previsto para la represa
(JG: T5).
También, el pensamiento se mueve para modifi‐
car protecciones o aseguranzas. Luego de intentar
levantar varias veces la iglesia actual de Atánquez,
ante los derrumbes reiterativos que se presentaban
en la obra, los capuchinos pidieron apoyo a los
mamos quienes con el movimiento del pensamien‐
to pidieron permiso al mamo Tutaka, de quien
yacían los restos en tal lugar, para poder hacer la
construcción (S:T1, G:T1, VII: T6). Tras esto la
asistencia de las personas a la iglesia era un pre‐
texto para visitar la tumba del mamo. Se mantuvo
el vínculo espiritual con el mamo Tutaka conser‐
vando el carácter de sagrado del lugar donde se
construyó la iglesia. Es un camino de resistencias
ante la imposición en este caso de los capuchinos,
en las que se negocia y sede para lograr llegar a
esa meta o fin de conservar el lugar como sitio de
culto.
El pensamiento parte del legado de los ances‐
tros en el tiempo pasado y nos lleva al presente a
tomar decisiones frente al actuar y responder a una
situación específica. Parte del mamo Tutaka como
ancestro y como guía espiritual, con quien se man‐
tiene el vínculo y por medio de él con la Madre
Universal. Es el punto de partida que imprime una
intención al pensamiento para desembocar en la
acción con un resultado necesario para mantener
el equilibrio y conservar el espacio de la iglesia
como propio para los habitantes de Atanquez. No
fueron construidos por medio de letras y números que co‐
rresponden a momentos diversos de talleres, encuentros, en‐
trevistas, grupos focales y demás, se mantendrán solamente
con la inicial de la persona que hizo la narración, la inicial
del espacio de trabajo y la ubicación en el archivo original
de las investigadoras. Se trata de una codificación consen‐
suada con el grupo de investigación para unificar criterios de
conformación de archivo.
Anthropos 117.2022
Pensamiento, Ley de Origen y construcción de pueblo en los pueblos Kogui y Kankuamo de la Sierra Nevada de Santa Marta 181
es solo la fuerza de la cultura, es también la fuerza
espiritual la que se sobrepone a la imposición del
foráneo resistiendo y negociando.
El camino que recorre el pensamiento desde
su inicio hasta su final es parte vital de la cons‐
trucción de la realidad entre la gestación de la
intención, el trabajo que se requiere para poder
entender y a materializar aquello que se necesita
para mantener la conexión con la Madre Universal
en su diferentes manifestaciones como las lagunas,
las montañas y los ríos. Es un recorrido temporal
en cuanto a que parte del pasado desde el legado
de los ancestros, pasa por el presente en el que se
toma la decisión de cómo actuar y cuyos resulta‐
dos son a futuro, momento en que se enlazan estos
tres espacios-tiempo.
- Ley de Origen
“La Ley de Origen o Ley de Sé es el orden esta‐
blecido en la naturaleza por los padres espiritua‐
les. Es invariable en el tiempo. Es Ley de equili‐
brio y de permanencia” (Arlantt et al. 2006: 86),
es el mundo espiritual, es construir con el pensa‐
miento. A cada uno de los cuatro pueblos de la
Sierra le fue entregada una parte de la Ley, no “a
uno solo porque se volvería malo y maltrataría a
los otros” (p. 91) y se les encargó a los mamos su
cuidado. Sus principios son espiritualidad, equili‐
brio, orden, pagamento, territorialidad, respeto y
valoración de lo propio (PEK 2008).
Encontrar todo lo relativo a la Ley de Origen
en términos de la cosmovisión de los pueblos de
la Sierra Nevada de Santa Marta en Colombia,
es una búsqueda sin concluir, al igual que ocurre
con cada acercamiento al Pueblo Kankuamo. Todo
se debe ganar con el trabajo, bien sea “porque
todo lo que se obtiene genera un desequilibrio”
(Arlantt et al. 2006); o porque se perdió igual que
la lengua, desde la llegada de los españoles. En
cualquiera de los casos el trabajo de recuperación
cultural no es técnico, no tiene que ver con el uso
de herramientas arqueológicas que permitan obte‐
ner materiales para clasificar y establecer fechas,
según explican los mamos. Así no se entienden los
hallazgos en su complejidad, con los significados
y sus imbricadas relaciones con el universo (VII:
T4). La Ley de Sé, la ley propia es parte de tal
ritmo vital: “por eso el primer paso es recuperar la
Ley de Sé” (Arlantt et al. 2006: 16).
Los mitos existen en la cultura de la Sierra
como relatos que actualizan la memoria. No son
cuentos o leyendas fantásticas, ni elaboraciones
teóricas fundamentadas en una esfera meramente
Anthropos 117.2022
intelectual en la que se impone una jerga técnico-
científica, como imposición de la ideología del
más fuerte sobre el más débil para transmitir su
cultura sin cuestionamientos. Por lo contrario los
Kankuamo comparten la palabra y conocimientos
sobre hechos ocurridos y que son trasmitidos oral‐
mente de generación a generación. En la escuela
enmarcada en la cultura occidental se encierra a
los estudiantes en un aula “a aprender a mirar lo
que otro escribió... ¿Quién carajos dijo que eso es
cierto? … que va (…) ¡que la gente solo piense
como lo que piensa la cabeza y el resto haga lo
que ellos dicen y listo!” (I: T2. p13). El carácter
relativo a la Ley de Sé parte de una concepción de
lo mágico inmerso en la realidad, existiendo exas‐
perantes contradicciones lógicas en medio de las
búsquedas y hallazgos inciertos. Nos es posible
presentar un avance frente a esa compleja concep‐
ción a partir de tres dimensiones: lo cósmico, la
identidad individual y la construcción de pueblo-
ciudadanía desde un enfoque intercultural- articu‐
ladas con su estilo de educación en lo que se po‐
dría denominar como una metodología propia: ha‐
cer el camino.
2.1. Ley de Origen y cosmos
Al ingresar a la kankurúa, casa ceremonial de las
comunidades de la Sierra y representación del uni‐
verso, se percibe lo sagrado, el silencio respetuoso
hacia el cosmos o la irrupción de la música sacra,
la palabra mensaje de la madre tierra; se siente
el deseo del encuentro consigo mismo, con el ser
interno. Con sus dos puertas, una hacia el oriente
y la otra hacia el occidente, representa los ciclos
vitales y la conexión con el sol, componiendo una
armonía maravillosa. Allí la comunidad comparte
la palabra, mueve el pensamiento para decidir pos‐
turas y acciones comprendiendo la realidad como
un todo. Lo sagrado como secreto de nuestro pre‐
sente, se encuentra en los orígenes, en la kanku‐
rúa.
Los mamos hacen sus trabajos de sanación en
lugares específicos. “Las teoraricas2 son la repre‐
sentación del universo, del mundo, de toda la crea‐
ción (…) a la primera se le llama Gonawindúa”
(PEK 2008). El vínculo con el cosmos es perma‐
nente desde lo espiritual, lo afectivo y lo físico
con la tierra, en lo íntimo y lo privado, con la
montaña como lugar de enlace con lo sagrado. Re‐
cientemente se descubrió un filo de la Cordillera
2 Kankurúa, Teorarica y Cansamaría son formas ancestrales
de nombrar las casas ceremoniales, a veces también denomi‐
nadas casas de pensamiento.
182
de los Andes, ubicado en el Parque Entre Nubes
en zona rural de Bogotá, que sigue la dirección del
camino recorrido por el sol durante el solsticio de
verano. El husmear por la historia de la vegetación
y el maravillarse con preciosas orquídeas en mi‐
niatura (G: T8) permite anotar inclusive con iro‐
nía: “En octubre en ese mismo punto tu miras al
sol y te da un ángulo de 35°, no da más…, eso tie‐
ne que dar, y no está porque lo dijo Américo Ves‐
pucio, eso viene desde hace muchos años” (G: T2.
p3).
En la esfera de lo público la relación cósmica se
observa cuando los Muisca3 recurren a los mamos
de la Sierra para asesorarse en el camino de reesta‐
blecer su vínculo con la madre tierra. A su vez los
mamos se trasladan desde la Sierra hasta Bogotá
para hacer pagamentos en Monserrate4 y en las
Piedras del Tunjo5 (E: T3. p95). Como parte de
este intercambio y asesoría se puede hallar la ca‐
sa ceremonial muisca ubicada en el municipio de
Cota, La Chunzúa. Tiene su construcción y estilo
arquitectónicos de igual manera a las kankurúas
de la Sierra Nevada de Santa Marta. Allí habita el
Mamo Luca con su esposa y otros cuatro origina‐
rios wiwa y kogi (ML: T8) quienes han asumido la
tarea de realizar el trabajo espiritual necesario para
que desde este sitio se pueda aportar al equilibrio
del universo.
Las comunidades de la Sierra tienen por manda‐
to de la Ley de Origen el cuidado de su territorio y
de los sitios sagrados que son de vital importancia
para mantener el equilibrio del universo, motivo
por el cual se desplazan hasta Bogotá. Desde la
Sierra, concebida como corazón del mundo, se
realiza un acto de resistencia y oposición a las
imposiciones de occidente considerando que todo
perjuicio a su cultura “construye el hueco en el
corazón de la tierra…” (G:T2. p3) que nos lleva
como especie a la destrucción.
De la misma manera el poder opresivo de la
cultura occidental sobre las culturas de la Sierra
se entiende como un perjuicio para la tierra: “la
memoria es opacada por la contaminación que
existe en el planeta… hace perder cosas, mirar
3 Pueblo indígena en proceso de recuperación de sus tradicio‐
nes y que ancestralmente ocupaba la sabana de Bogotá y el
Altiplano Cundiboyacense.
4 Cerro ubicado al oriente de Bogotá donde se realizaban
ceremonias y ofrendas en tiempos prehispánicos y donde
actualmente hay un templo católico objeto de peregrinación
por parte de personas de diversos lugares de la región.
5 Sitio arqueológico ubicado en el municipio de Facatativá, a
una hora al occidente de Bogotá, asociado a las actividades
propias del pueblo Muisca en tiempos prehispánicos y que
se conserva como un parque abierto al público.
Jeannette Plaza Zúñiga y Catalina Campuzano
cosas diferentes por los espacios en donde estamos
ubicados” y lo cual remite a su vez a la situación
de desplazamiento forzado en la que se encuentran
muchos de los habitantes de la Sierra producto del
conflicto armado que se vive en Colombia.
2.2. Ley de Origen e identidad
Desde la perspectiva de los Kankuamo y Kogui,
en occidente es imposible armonizar con la tierra
debido a la poca importancia que se le da, se le‐
vantan edificios que separan a las personas de ella:
“(…) Yo se supone que todo el tiempo debo estar
tocándola dejando que ella me acaricie” (I: T2.
p25). Se olvida el equivalente a la alegría que da
sentir la caricia de la mamá, se opta por la conta‐
minación, el ruido, no se tiene ni tranquilidad para
descansar. La kankurúa, además de ser el espacio
de integración con lo sagrado también tiene una
función educativa: “en esa casa ceremonial, se en‐
seña toda la realidad, en ese cosmos es donde uno
aprende la realidad de la vida, toda la verdad” (G:
T2. p5). Lo educativo tiene origen, nicho y ritual
sagrado a la vez que es vínculo comprometido con
el sí mismo, con la comunidad y con el cosmos.
Los conocimientos tradicionales y saberes an‐
cestrales están en el pensamiento, desde antes de
que el hombre o la mujer sean engendrados, y
son comprendidos con ayuda de los padres y con
la orientación de los mamos. Tienen puesta en
sí la fortaleza del corazón ante el peligro y son
fuertes en el sacrificio para hacer de su existencia
el cumplimiento de la Ley de Sé para mantener
el equilibrio de la tierra. Aunque un habitante de
la Sierra haya sido desplazado por motivos de la
violencia política y no tenga contacto permanente
con su cultura es capaz de afirmar: “…yo siento
que nosotros como Kankuamos vinimos a cumplir
una tarea específica aquí6” (S: T3. p45).
También se afirma que “… en la Sabana hay
algo muy importante, lo que pasa es que … todos
los días estamos buscando cosas y cosas y cosas,
pero entonces para llegar a lo que uno tiene que
… relacionar, ha sido un poco difícil” (S: T10). El
camino que se debe andar incluso desde el despla‐
zamiento forzado está lleno de senderos donde se
busca recuperar la memoria como parte del proce‐
so de poder cumplir con ese cometido que define
la Ley de Origen.
El aprendizaje de lo cultural, lo tradicional, lo
ancestral es un mandato que se cumple de forma
individual, para lograr ubicarse en el mundo y
responder a las preguntas: ¿quién soy, qué quiero,
6 Se refiere a la Sabana.
Anthropos 117.2022
Pensamiento, Ley de Origen y construcción de pueblo en los pueblos Kogui y Kankuamo de la Sierra Nevada de Santa Marta 183
por qué estoy aquí? Muestra cómo comprenderse
no es fácil: es a costa de sacrificios. Según lo
fuerte que sea la persona puede querer o no querer,
meterse de lleno o irse por las ramas: “…siempre
nos toca pasar una, dos, tres y hasta más noches
sin dormir, día y noche sin dormir porque así es la
tradición… y así es que uno empieza después de
tantos sacrificios a entender quién soy, que quiero,
porque estoy aquí” (I: T2. p33). Esta fortaleza
está vinculada con la decisión de continuar en el
aprendizaje.
Asumen el ser víctimas con fortaleza de corazón.
Advierten que su resistencia a la cultura occiden‐
tal no es agresiva, pero es fuerte desde el amor:
“Como aquel árbol que crece grandote bien grueso
pero no echa fruto que sirva, o llega un viento y
lo derriba porque no lo aguantó… aquel árbol que
es pequeño, que su corazón es fuerte no lo derri‐
ba nada, así mismo somos nosotros… de corazón
fuerte… no para las peleas… fuerte en el sentido
de que no puede ser débil cuando haya peligro”
(I: T2. p10). Esta fortaleza tiene su vínculo con el
amor, tal vez como lo vivieran los primeros cris‐
tianos que no se dejaban derribar, no contestaban
la agresión con venganza, sino que vivían el amor
indiscriminado.
Con base en lo anterior se puede visualizar en la
Gráfica 2. Un bosquejo de la identidad kankuama,
generada por la memoria ancestral y trabajada en
la kankurúa a partir de reflexiones profundas y
personales, para aprender la realidad y construir el
ser interior con fortaleza de corazón.
En este contexto la identidad para los pueblos
de la Sierra es voltear los ojos hacia adentro, cen‐
trarse en sí mismos, sin la necesidad de someterse
al juicio abrumador de otros sobre el accionar pro‐
pio, que entorpece y acalla la mirada profunda
de un yo sin disfraces; comprendido, evaluado y
aprendido, en un enfrentamiento solitario y com‐
plejo. Tal esfuerzo requiere de una fortaleza que
lleva consigo la certeza de que “las cosas no pasan
porque sí, hay que prestarle mucha atención a las
enfermedades del cuerpo porque eso tiene que ver
Anthropos 117.2022
mucho con el alma, el espíritu, con muchas cosas
que pasan a diario” (S:T3.p20). Hay un latente
peligro en el sentido de que no seguir con los prin‐
cipios de la Ley de Origen en el nivel individual
pueden llevar a la enfermedad, así como la huma‐
nidad, que no sigue los principios legados por los
pueblos ancestrales y se encamina a una enferme‐
dad colectiva que le empuja a la destrucción y al
desequilibrio.
oConstrucción de Pueblo
Cuando se habla de ciudadanía se refiere a una vi‐
sión marcadamente occidental. Se presupone que
por derecho, la persona que nace en un territorio
determinado adquiere la ciudadanía accediendo a
un conjunto de garantías para que puede vivir de
manera digna y con acceso a oportunidades en
igualdad de condiciones que los demás ciudada‐
nos. Como se ha referido aquí es muy difícil que
los habitantes de los pueblos originarios puedan
enmarcarse en esta condición, por las dificultades
que en el contexto colombiano y de la Sierra se
viven y no permiten ni siquiera el poder habitar el
terruño natal en muchos de los casos.
Para los Kogui y los Kankuamo los principios
de la Ley de Origen -espiritualidad, orden, respeto
al todo y a las partes que lo componen- llevan
a la ayuda mutua, a no hacerse daño entre sí; a
sentirse hermanos desde la humildad, a ser amigos
con todos los habitantes de la Sierra y a construir
pueblo, desde la familia y con el pensamiento de
todos. El otro hace parte del conjunto, del cual
cada uno también forma parte. Cuando alguien
hace daño, daña a todos, el que quiere sobresalir
desequilibra y afecta a toda la comunidad. Esta es
una concepción de la relaciones sociales distinta
a la propuesta desde la cultura occidental: “(…)
y nadie piensa hacerle daño a nadie, porque que
tal… que alguno diga: no, yo quiero llegar allá
arriba y si no me dejan, me voy, se aparta ¿qué
pasa? la casa se desequilibra y se cae” (G: T2. p6).
La construcción de pueblo parte de la vivencia
en familia, donde la mujer tiene un papel muy im‐
portante. La mujer cuando teje la mochila, cuan‐
do cocina, construye pueblo. El hombre dirige la
construcción cuando poporea7 “(…) y la mujer
construye desde la comida, transmite amor desde
la comida, porque cuando la mujer da una comida
7 Acto ceremonial en la que los hombres mezclan cal con
hoja de coca pulverizada en un recipiente hecho de calabazo,
como medio para tejer el pensamiento y a su vez construir
desde el mismo la armonía necesaria para estar en yuluka,
en acuerdo con el cosmos.
184
con alegría a sus hijos ahí se está transmitiendo
esa alegría para toda la familia (…) para que un
pueblo este bien formado construye a partir de una
construcción de familia” (G: T2. p23).
Al momento de preguntar sobre ciudadanía a
los Kankuamo ellos le interpretan a su manera y a
través de lo que su experiencia les dicta: “nosotros
construimos pueblo (…) el amor no existe como
algo suelto, el único amor que hay es el de la
madre con los hijos equiparable al de la madre
tierra con todos nosotros. Así como le hacemos y
hacemos cosas: la rompemos, le sacamos cosas, le
hacemos daño y ella siempre sigue allí dándonos
de comer, de todo… y al final no importa como
haya sido, siempre nos recibe en sus brazos. Así
es la madre con su amor en la cocina, prepara los
nutrientes que al consumirlos la familia, ésta se
llena de lo necesario para salir a construir mundo
y eso es lo que la niña empieza a aprender desde
que se desarrolla” (G: T1. p2).
Es un ejercicio de humildad. Se aprende y es sen‐
tir al otro como hermano, hacer resistencia desde
la humildad, es camino para ser uno solo: “Y hu‐
milde, porque tenemos que estar todos juntos …
y sentir que si a un hermano le pasa algo tengo
que sentirlo como si fuera mío, por eso nosotros
decimos que somos hermanos, que somos uno so‐
lo, pero tenemos que ser coherentes con lo que
decimos y entrar a ese aprendizaje le da a uno
muchas herramientas, porque ya uno empieza a
mirar las cosas de otra forma y empieza a entender
el mundo como se debe entender” (I: T2 p11).
La soledad del desplazamiento forzado lleva a la
humildad que se requiere para sentir al otro como
hermano. No les interesa ser más que los demás
pues con ello crearían desequilibrio. La resistencia
desde la humildad es camino y trasegar hacia la
hermandad. Hacer el camino para ser hermanos les
da herramientas para ver la realidad de otra mane‐
ra y entender al mundo como lo deben entender.
Y no se entiende la construcción de pueblo sin la
alegría y el amor de la mamá, que es la expresión
de la madre tierra, que es a su vez vínculo con el
Jeannette Plaza Zúñiga y Catalina Campuzano
cosmos, descubrimiento de la identidad y aprendi‐
zaje de la hermandad.
Se construye pueblo con el pensamiento de to‐
dos, desde “los sitios sagrados, sitios especiales…
desde allí es que empezamos a tratar de pensar
juntos a tratar de pensar igual (…) desde fortalecer
la alimentación, la forma de vestir, el contacto con
la tierra; desde allí se empieza como que a hacer
la base para construir” (I: T2 p24). El pensamiento
como acción colectiva fortalece los lazos de las
personas entre sí gracias al territorio habitado in‐
cluso si ya no se está allí.
La construcción de pueblo sigue haciendo parte
de sus vidas a pesar de estar desplazados, a pesar
de las agresiones cometidas contra la comunidad.
“Podemos estar todos regados, pero ahí estamos,
todos, todos somos uno solo, es decir el pueblo
Kankuamo; no los que estamos acá en Bogotá des‐
plazados, los que están en Valledupar, sino todos
los del territorio, los de Bogotá, los de Valledu‐
par, incluso de esa forma empieza a construir (…)
porque también se construye pueblo con el pensa‐
miento de todos, incluye pueblo con la armonía
de todos” (I: T2. p11). A pesar de las circunstan‐
cias adversas el pueblo construye la armonía de‐
fendiendo sus raíces, defendiendo espiritualmente
a su gente, lo que quieren ser y lo que van logran‐
do en materia de recuperación cultural. Mientras
que la cultura occidental busca el desarrollo, el
progreso individual, los Kankuamo, Kogui, Ijka y
Wiwa demuestran que la armonía de un pueblo
está en su gente y su forma de convivir entre sí y
con la madre tierra de manera armónica.
V. Conclusiones
La concepción de construcción de pueblo es una
composición enraizada en la Ley de Sé que danza
entre cosmos, identidad y hermandad. La bondad
de espíritu parte de entenderse como centro del
cosmos para cuidarlo, la búsqueda del equilibrio
es perenne. Cuidar la tierra es sin dudar parte de
cuidar al otro, es garantizar la armonía para no
dañarse mutuamente. Desde la memoria ancestral,
mantenida y en recuperación, como resistencia po‐
lítica al ataque del blanco, se construye y mueve
el pensamiento colectivo para la reparación de los
daños de manera concertada. Diseña y crea otras
formas de vida individuales y de grupo, para ellos
y para todo el que se les acerca. Puesto que desa‐
rrollan el pensamiento haciendo el camino, cada
encuentro con la naturaleza, siendo íntimo, se ex‐
tiende a lo público cuando el maravillarse trasfor‐
ma las proporciones de las urgencias para ordenar
los sistemas mentales con los intercambios.
Anthropos 117.2022
Pensamiento, Ley de Origen y construcción de pueblo en los pueblos Kogui y Kankuamo de la Sierra Nevada de Santa Marta 185
Cuando Voltean los ojos hacia adentro constru‐
yen su identidad, aunque se saben víctimas, se
hacen de un corazón fuerte frente a los peligros,
afrontan la realidad con toda conciencia. Parecie‐
ran haber leído a Hannah Arendt quien afirma,
frente a la situación judía de la post guerra, que
no se trata de mirar la historia como sucesión de
lugares comunes, para deducir precedentes inexis‐
tentes. Es comprenderla examinándola para mane‐
jar lo afrentoso, para soportar conscientemente la
carga, ni negar, ni someterse mansamente (Arendt
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