Evidencia 2: Micro textos AA1

En los últimos años en el país se ha venido dando un ambiente propicio para el surgimiento
de diferentes alternativas de organizaciones prestadores de servicios de telecomunicación,
esto representa un baldado agua fresca para el mercado, pues son empresas que vienen al país
con políticas frescas y nociones ya claras de los principales problemas que adolece el usuario,
como la falta de valor agregado en los productos, la insatisfacción del cliente y las constantes
quejas de las partes interesadas, por lo que podrían prestar gran importancia a sus sistemas
de gestión y así tomar las acciones correctivas correspondientes. Por supuesto, el principal
beneficiado de esta mejora continua es el cliente. La buena recepción de estas compañías
sería difícil de pensar si tenemos en cuenta que Movistar, Claro y Tigo tienen acaparado casi
todo el mercado y cuentan con una amplia experiencia e infraestructura, que impone desde
un comienzo, grandes barreras de entrada y riesgos para los nuevos competidores.

Las organizaciones más grandes han sabido aprovechar estas ventajas y desde la alta
dirección han comenzado a implementar diferentes estrategias con el fin de mantener su
competitividad en el mercado en el marco de las tendencias mundiales. El cliente ahora es
mucho más exigente, quiere menos por más, quiere que su empresa sea ética, que lo
acompañe, quiere empoderamiento, que le dé la capacidad para sentir que tiene el poder de
decidir, que tiene el control, y la empresa que no cuente con las competencias para ofrecer
esta serie de requisitos, será fácilmente descartada. Es por esto por lo que las organizaciones
han comenzado a hacer principal énfasis en prestar servicios de calidad, llegando a hacer
parte de sus objetivos, misión y su cultura organizacional. Como consecuencia de esto, ahora
tenemos mayor diversidad de productos en el mercado, mejores precios, mejores procesos,
mejor calidad en el servicio y clientes más satisfechos. Prueba de esto, es que hace poco
TigoUne lanzó al mercado un paquete de internet ilimitado, lo cual dio mucho de qué hablar
y le valió un clima de bastante popularidad. Al ver la ventaja que había tomado la empresa,
Claro lanzó un producto similar en apenas unas dos semanas. Nuevamente, los clientes fueron
los que ganaron.