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“Año del Bicentenario del Perú: 200 años de Independencia"

UNIVERSIDAD PRIVADA SAN JUAN BAUTISTA


FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD
ESCUELA PROFESIONAL DE ESTOMATOLOGÍA

TRONCO ENCEFÁLICO - PARTES


MESENCÉFALO, PUENTE DE VAROLIO, BULBO RAQUÍDEO
CARACTERÍSTICAS ANATÓMICAS

DOCENTE : ENRIQUE YARASCA BERROCAL


CURSO : ANATOMÍA APLICADA
CICLO : III
ESTUDIANTE: MARÍA FERNANDA
CHOQUE CIPRIÁN
TRONCO
ENCEFÁLICO

El tronco del encéfalo, tronco cerebral o tallo cerebral está formado por el:

mesencéfalo, la protuberancia anular (o puente troncoencefálico) y el bulbo raquídeo (también


llamado médula oblongada).
Es la mayor ruta de comunicación del cerebro, la médula espinal y los nervios periféricos.

El tronco encefálico o tronco del encéfalo es una de las regiones más importantes del
cerebro humano y una de las regiones más vitales para la supervivencia de nuestro
cuerpo. Forma la conexión entre el cerebro y la médula espinal, mantiene el control vital
del corazón y los pulmones y coordina muchos reflejos importantes.
Anatomía
Es una masa tubular de tejido nervioso de poco más de 8 cm de
longitud. Se encuentra en la base del cerebro, superior a la
médula espinal e inferior al cerebro.

El exterior del tallo cerebral se compone de sustancia blanca, que conduce las señales nerviosas
dentro del tallo cerebral y hacia la médula espinal y otras regiones del cerebro. Las masas de
sustancia gris, conocidas como núcleos, desempeñan el papel de procesamiento del tronco
encefálico. La formación reticular, una red mixta de materia gris y blanca, se extiende por todo
el interior del tronco encefálico y desempeña un papel importante en la estimulación del cerebro
y los músculos del cuerpo.
La superficie ventral o anterior del
tronco del encéfalo tiene los
siguientes componentes:
Los nervios craneales
Alrededor del tronco del encéfalo no encontramos nervios craneales, que son los nervios periféricos del encéfalo.

Los nervios craneales son parte del sistema nervioso y consisten en fibras motoras eferentes que surgen de núcleos en el tronco encefálico y
fibras sensoriales aferentes que se originan en los ganglios periféricos. Los núcleos motores de los nervios craneales reciben impulsos de la
corteza cerebral a través de los tractos corticonucleares.

Hay doce pares de nervios craneales:

Diez de los doce pares craneales salen del tronco.


Uno de los pares craneales, el nervio olfatorio, sale del bulbo olfatorio (telencéfalo).
Uno de los pares craneales, el nervio óptico, sale del quiasmo óptico (diencéfalo).
Visión ventral del
encéfalo en la que se
destacan los nervios
craneales
A diferencia de los nervios espinales que son mixtos, motores y sensoriales, los nervios craneales pueden ser
exclusivamente sensoriales, motores o mixtos (combinan funciones motoras y sensoriales).

Los pares craneales se originan o


finalizan en una serie de núcleos
que se encuentran en el interior
del tronco del encéfalo. Se pueden
distinguir núcleos de los pares
craneales motores y núcleos de los
pares craneales sensoriales.
Núcleos sensoriales de los nervios craneales
Son las zonas donde finalizan las fibras de las ramas sensoriales de los nervios craneales. Las neuronas sensoriales que llevan información
fuera del SNC sinaptan en estos núcleos y tienen su suma fuera del tronco, en ganglios situados a ambos lados del tronco.

En el bulbo se encuentran muchos de los núcleos de los pares craneales, algunos de estos con funciones vitales. Por ello, la lesión del bulbo
es muy peligrosa, ya que puede causar la muerte del individuo.

Núcleos motores de los nervios craneales


Son los lugares donde se originan las fibras que forman las ramas motoras de los nervios craneales.

El núcleo dorsal (X) es el origen de las fibras más importantes (con funciones vitales) que inervan en nervio vago. Así, las lesiones del nervio craneal
van desde aquellas que causan déficits sutiles hasta lesiones que causan la muerte
Mesencéfalo
El mesencéfalo (Mesencephalon en latín) es la porción superior del tronco del encéfalo que une el puente troncoencefálico y el cerebelo con el diencéfalo. Su
eje longitudinal se inclina ventralmente conforme asciende.
El mesencéfalo está atravesado por el acueducto cerebral que conecta el tercer y cuarto ventrículo como parte del circuito de transporte del líquido
cefalorraquídeo.​Contiene fibras sensitivas ascendentes desde el tronco del encéfalo a la corteza y fibras motoras desde la corteza motora hacía la médula
espinal y núcleos motores para los pares craneales en el tronco del encéfalo.
Es la parte del tronco del encéfalo más cercana al centro del
cerebro, mientras que la protuberancia y el bulbo raquídeo están
más orientados hacia la médula espinal.

Además, el mesencéfalo está atravesado por un estrecho canal


llamado acueducto de Silvio, por el que fluye el líquido
cefalorraquídeo desde el tercer ventrículo hacia el cuarto. Este
líquido tiene la función de aislar y de proteger varias estructuras del
sistema nervioso.
SU ANATOMÍA

La forma del mesencéfalo es la de un trapecio, con una base más estrecha que su parte superior, y con el acueducto de Silvio (un pequeño canal por el que circula líquido
cefalorraquídeo) atravesándolo de arriba abajo.

La frontera entre el mesencéfalo y el diencéfalo está marcada por las cintillas ópticas (la continuación de las fibras nerviosas de los nervios ópticos), mientras que su
límite inferior, que lo separa del puente de Varolio, es señalado por el surco pontomesencefálico.

Además, en su cara anterior (cercana al rostro) se puede distinguir una hendidura vertical llamada fosa interpeduncular, que divide dos cuerpos de fibras nerviosas que
suben hasta el cerebro, llamadas pedúnculos cerebrales.

Partes del mesencéfalo


Las dos estructuras fundamentales que forman el mesencéfalo son el téctum y el tegmentum.
Está situado en la zona dorsal del mesencéfalo, orientado hacia la nuca, y etimológicamente significa
“techo”. Sus funciones están relacionadas con las reacciones automáticas ante estímulos auditivos y
Téctum sonoros.

Está formado por dos pares de bultos, uno situado encima del otro. Estos bultos son llamados colículos,
o tubérculos cuadrigéminos, y los superiores juegan un papel en la visión y en la orientación de los ojos
hacia los estímulos visuales, mientras que los de abajo se involucran en las reacciones involuntarias
ante sonidos.

Tegmentum

En la zona ventral del mesencéfalo se encuentra el tegmentum.


Contiene tres regiones principales, cada una asociada a un
color: la sustancia negra, la sustancia gris periacueductal y el
núcleo rojo.
La sustancia negra está ubicada en la zona superior del mesencéfalo, y
La sustancia
está repartida a ambos lados de esta estructura, siguiendo la división
negra
de los hemisferios cerebrales. Tiene muchas funciones asociadas,
vinculadas especialmente a los movimientos y al tono muscular.

Es otro de los importantes elementos del sistema


Núcleo rojo motriz. Su función está relacionada con la
coordinación de movimientos.

La sustancia gris periacueductal, que tal y como su


Sustancia gris
nombre indica está situada alrededor del acueducto de
periacueductal
Silvio, interviene en la habituación al dolor y en los
procesos analgésicos en general.
Funciones del mesencéfalo

La ubicación del mesencéfalo hace que las principales funciones de esta estructura tengan que ver con la integración entre
distintos tipos de informaciones. Por un lado, recoge impulsos nerviosos vinculados a órdenes motoras que tienen que ser
ejecutadas por músculos, y por el otro recibe datos sensoriales.

Del mismo modo, los tubérculos cuadrigéminos ubicados en el téctum se encargan de coordinar entre sí esta clase de
informaciones para que puedan dar lugar a secuencias de acción ajustadas a lo que van registrando los sentidos en tiempo
real.

Por otro lado, ciertas regiones del mesencéfalo están asociadas a procesos de regulación de la consciencia y del sueño, al
estar atravesadas por la formación reticular. El mesencéfalo también interviene en funciones homeostáticas orientadas a
mantener el organismo en un buen equilibrio, y por eso, por ejemplo, tiene un papel en la regulación de la temperatura
corporal.

Así pues, el mesencéfalo se encarga de realizar procesos de importancia vital para que el orgganismo siga funcionando,
hasta el punto de que la actividad en esta estructura del sistema nervioso es lo que señala de un modo más claro si hay
muerte cerebral o no la hay.
Enfermedades y lesiones
asociadas

Cualquier lesión que afecte a las zonas más bajas del encéfalo puede llegar a alcanzar el mesencéfalo. Las consecuencias de esta clase
de accidentes casi siempre son muy graves, produciendo el coma o la muerte.

El motivo está en que el mesencéfalo es una sección del sistema nervioso cuya importancia es crucial para lograr coordinar funciones
fisiológicas básicas del organismo, y además sirve para que varios tipos de impulsos nerviosos alcancen los grupos de neuronas
superiores. Como el mesencéfalo actúa como nexo de unión entre muchas áreas, la presencia de anomalías en esta zona afecta a
muchas otras.

Por lo que respecta a las enfermedades que afectan a estas estructura del cerebro, las más comunes son la enfermedad del Alzheimer
y la del Parkinson. Ambos son desórdenes neurológicos que interfieren en el funcionamiento de amplias zonas del sistema nervioso,
mesencéfalo incluido, y pueden llegar a producir problemas de movilidad y de cognición.
Al nivel del techo o tectum: Síndrome dorsal
del mesencéfalo o de PARINAUD
Al nivel del tegmento: Síndrome
mesencefálico paramediano o de Benedikt
PUENTE DE VAROLIO

El puente troncoenfefálico es la parte más abultada del tronco del encéfalo, motivo por el cual también recibe el nombre de protuberancia anular. Está situado
entre las otras dos estructuras anatómicas principales de esta porción del encéfalo; por su parte superior, limita con el mesencéfalo, mientras que su borde inferior
está en contacto con el bulbo raquídeo.

El límite que separa la protuberancia anular del bulbo raquídeo es el surco protuberancial, mientras que su frontera con el mesencéfalo es el surco
pontomesoencefálico.
ANATOMÍA DE LA PROTUBERANCIA
ANULAR

En esta región del encéfalo cobran especial importancia los fajos de axones que van verticalmente desde el cerebro hasta la médula espinal hasta el cerebro
y viceversa. Es decir, que la protuberancia anular actúa en parte como vía de comunicación entre dos grandes porciones del sistema nervioso central.

Sin embargo, el puente de Varolio también contiene fajos de neuronas que se distribuyen proyectándose hacia los lados, formando los inicios de los
pedúnculos cerebelosos medios, que son dos de las zonas por las que el tronco del encéfalo se conecta con el cerebelo.

Otra de las características anatómicas del puente de Varolio más notables es que su cara frontal, la más cercana a nuestro rostro, es convexa, abultada hacia
afuera, lo cual hace que destaque mucho sobre las otras dos estructuras principales del tronco del encéfalo.

Dentro del puente de Varolio se encuentra el surco basilar, un pequeño espacio por el que cruza la arteria basilar, una de las principales responsables de
mantener con vida las células de amplias zonas del cerebro.

Además, la protuberancia forma el inicio del nervio trigémino, uno de los pares craneales más importantes.
Partes del puente
troncoencefálico
La protuberancia anular está formada por un conjunto de núcleos, consistentes en grupos de neuronas asociadas que se
encargan de funciones similares. Son los siguientes.

Núcleo motor somático abductor Un núcleo de neuronas vinculado al par craneal conocido como nervio
abducens, encargado del movimiento de la abducción del ojo.

Núcleo motor especial del Las funciones de este núcleo tienen que ver con el nervio
trigémino trigémino, y consisten básicamente en movimientos viscerales.

Núcleo motor especial del facial Al igual que el anterior, este se encarga de ciertos movimientos viscerales.

Núcleo salivatorio superior Las funciones de este núcleo son vegetativas, y por tanto automáticas.
Sus funciones

Las funciones del puente de Varolio son diversas, aunque casi todas son de gran importancia para la supervivencia.

La protuberancia anular hace de puente entre grupos de neuronas que, de no pasar por esta estructura, quedarían
1. Nexo de comunicación
incomunicadas entre sí. Permite que la información fluya desde dentro del cráneo hacia afuera y viceversa.

El puente de Varolio trabaja conjuntamente con el cerebelo y otras estructuras, como los ganglios basales, para
2. Coordinación motora
permitir la coordinación automática e inconsciente de grupos de músculos. Esto hace que nos sea posible mantener
el equilibrio en posición erguida.

3. Regulación La protuberancia anular juega un papel esencial en funciones como la regulación de la


homeostática temperatura y otros procesos fisiológicos básicos, como los latidos del corazón.

Regulación de la consciencia
Esta región del tronco del encéfalo está atravesada por la formación reticular, y por ese motivo juega un papel en la regulación de los estados de conciencia.
Interviene en los ciclos circadianos de sueño y vigilia, y también hace que la consciencia, en sí misma, sea algo posible.
LESIONES Y
ENFERMEDADES
ASOCIADAS
La destrucción o la alteración del funcionamiento normal del puente de Varolio tiene consecuencias muy graves, ya que afecta a procesos muy
básicos y necesarios para mantenerse con vida.

Esto es así porque un fallo en esta región del encéfalo puede provocar que no llegue la suficiente sangre u oxígeno al cerebro, produciéndose la
muerte por hipoxia.

Las enfermedades que pueden afectar a esta estructura son varias, pero destacan la enfermedad del Alzheimer y la del Parkinson, ya que
ambas dañan amplias regiones del sistema nervioso central e impiden el funcionamiento normal de las redes de neuronas.
BULBO RAQUÍDEO

También llamado mielencéfalo, el bulbo raquídeo es una estructura subcortical situada en la parte baja del tronco del encéfalo. Con una forma semejante a un
cono, se trata de la estructura del sistema nervioso que conecta el encéfalo y la médula espinal (de ahí otro de sus nombres, médula oblongada), limitando con
la decusación de los haces piramidales y la protuberancia.

En el bulbo raquídeo se pueden encontrar conexiones nerviosas tanto


motoras como sensoriales, pasando a través de él los diferentes tractos
nerviosos. Se trata de un núcleo neurovegetativo, encargándose del
mantenimiento y funcionamiento de los órganos de forma
automatizada y ajena a la consciencia. Mantiene asimismo las
constantes vitales, por lo que los problemas que comprometen su
funcionamiento llevan a la muerte cerebral. Se trata pues de una zona
de gran importancia para la supervivencia del ser humano.
Partes y configuración anatómica

Al hablar del bulbo raquídeo estamos hablando de una estructura que no es homogénea en su composición y función. Al contrario, esta estructura está
conformada por diferentes núcleos, empezando en ellos algunos de los tractos nerviosos más conocidos, y estas partes del bulbo raquídeo tienen funciones
distintas.

Denominadas así por su forma, en las pirámides del bulbo raquídeo se localizan los
1. Pirámides bulbares y haces de fibras nerviosas que conectan la corteza con el bulbo y la espina dorsal.
decusación piramidal Así pues, es en esta zona donde se conecta el cerebro con el resto del organismo,
enviando información motora hacia fibras musculares repartidas por todo el
organismo.

En la decusación piramidal, las fibras nerviosas de las pirámides decusan, es decir


en su mayoría cambian de lado, estando las fibras de la pirámide izquierda en la
derecha y viceversa. Concretamente, en esta zona decusan especialmente las vías
motoras.
Los lemniscos son haces de fibras nerviosas cuya función, igual que en el caso de las pirámides, es la de transmitir la
2. Lemniscos y información entre encéfalo, concretamente el tálamo, y médula espinal. En esta caso, sin embargo, la información que llevan es
decusación lemniscal principalmente de tipo sensorial.

Al igual que en el caso de la decusación de las pirámides, los haces de fibras de los lemniscos decusan, siguiendo el mismo
proceso en este caso para la información sensorial.

El complejo olivar es una estructura situada en el tronco del encéfalo, estando parte en la protuberancia y parte en el bulbo
3. Complejo olivar raquídeo. La región presente en el bulbo conecta con el cerebelo, estando vinculada al control de la motricidad. También se ha
vinculado con la visión
¿En qué participa? Funciones del
bulbo raquídeo

El correcto funcionamiento del bulbo raquídeo es vital para los seres humanos. Literalmente, dado que la destrucción o cese del funcionamiento de este área
provoca la muerte.

Para comprender el porqué de tanta importancia es necesario que consideremos algunas de las principales funciones tiene esta estructura, así como tener en
cuenta que al encontrarse en la base del cerebro, una gran parte de las redes neuronales de disposición vertical pasan por esta estructura del sistema nervioso
central.

TRANSMITE LA Siendo la parte del sistema nervioso que conecta encéfalo y médula espinal, una
INFORMACIÓN DE LA de las principales funciones del bulbo raquídeo es la de servir de enlace entre

MÉDULA ESPINAL AL
ENCÉFALO Y VICEVERSA
cerebro y/o cerebelo y médula. Así, se encarga de transmitir la información
nerviosa tanto sensorial como motora del resto del cuerpo.
CONTROL DEL

El bulbo raquídeo nos mantiene con vida, ya que tiene la importante función de
RITMO CARDÍACO Y controlar elementos vitales e inconscientes tales como los latidos del corazón y

LA TENSIÓN
ARTERIAL
la tensión arterial. Así, se encarga de mantener el ritmo cardíaco y regular la
vasoconstricción.

Se trata de un proceso que justamente por su importancia no puede depender de

nuestra capacidad para gestionar el foco de atención, lo cual se plasma por ejemplo en
REGULACIÓN DE LA el hecho de que nunca nos olvidamos de respirar, por compleja que sea la tarea que

RESPIRACIÓN estemos realizando, o incluso aunque durmamos. En general, el bulbo raquídeo es útil
justamente por esa jerarquización de tareas que permite establecer y gracias a la cual
hacemos un uso más óptimo de los recursos del sistema nervioso.

El control de los músculos involuntarios, como los que empujan la comida a través del tubo

PARTICIPA EN LA
NUTRICIÓN Y
digestivo cuando comemos, depende de un parte del complejo bulbar. Además del control
muscular, el funcionamiento del sistema digestivo también está vinculado al bulbo raquídeo

DIGESTIÓN al regular éste la emisión de los flujos gástricos. Esto significa que es una estructura del
encéfalo que contribuye a mantener los equilibrios químicos ideales en el cuerpo.
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C I A
G R A

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