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Música y Danza: un puente hacia la validación de las emociones

Guadalupe García Silviano

“Las expresiones más auténticas de la gente

están en su baile y en su música.

El cuerpo nunca miente”

Agnes de Mille.

Desde tiempo inmemoriales la música y la danza han sido considerada unas de las
expresiones que con mayor frecuencia vemos en las diversas culturas de nuestro mundo,
desde África con sus danzas tribales hasta nuestro país con sus bailes prehispánicos,
muchas veces hemos visto en películas a las tribus bailando alrededor del fuego o
solicitando a alguna deidad algún favor, pero revisando el presente, si cerramos por un
instante nuestros ojos y recordamos el sonido de la lluvia esta emite un sonido que nos
despierta una emoción, sensación o recuerdo, como dice la frase con la que inicio este
artículo “las expresiones más auténticas” aquí es donde damos inicio a estas dos
maravillosas áreas artísticas música y danza y su relación en Arte terapia.

Comenzaremos por la musicoterapia, para la cual daré una breve introducción sobre el
impacto de la música en el ser humano:

Entre los primeros sonidos que percibimos cuando estamos siendo gestados esta el sonido
del corazón, ese sonido binario que de alguna forma queda impregnado en nosotros, otro
sonido que se nos hace familiar y nos relaja es el del agua, en ocasiones se venden
melodías musicales con efectos de sonidos de caída de agua o las olas del mar, pero ¿qué
tiene que ver el agua?, pues ese hermoso líquido amniótico en el que vivimos por 9 meses
(algunos menos) pero de igual forma queda grabada en nosotros. Recuerdo que hace
algunos años asistí a un curso de Musicoterapia estilo Benenzon el cual es un modelo
psicoanalista, realizamos un ejercicio en el cual teníamos que contar nuestra historia de
vida con los instrumentos que estaban en el setting, fue impresionante cuando conocí la
clepsidra, para quien no la conoce es un instrumento realizado con dos botellones de
agua, en esa ocasión fueron de 10 L, las cuales están unidas por el orificio de salida, están
contienen agua, aproximadamente 2 terceras partes, al moverlas y hacer musica con ellas
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Guadalupe García Silviano

me transportó hacia otra dimensión, el Djembe, que es un tambor africano, también me


conectó con recuerdos de mi infancia que no venían a mi memoria desde muchos años
atrás, el escuchar esos golpes sobre su superficie, la intensidad que utilice para reproducir
esos sonidos que despertaban en mi algo que no sabía que existía, pero ¿Qué es lo que
pasa en nuestro cerebro para que nos lleve a lugares tan profundos y casi olvidados de
nuestra memoria?

Facundo Manes quien es neurólogo y científico presidente de la World Federation of


Neurology Reseach Grouop on Aphasia, Dementia and Cognitive Desorders y profesor de
Neurología y Neurociencias Cognitivas en la Universidad Favaloro en Argentina en su
artículo ¿Qué le hace la música a nuestro cerebro? Explica que los seremos humanos
convivimos con la música en todo momento. Escuchamos música desde la cuna o, incluso
desde el periodo de gestación, en los primeros meses de vida, tiene la capacidad de
responder a melodías antes que a una comunicación verbal de sus padres.

La música está considerada entre los elementos que causan más placer en la vida. Libera
dopamina en el cerebro como también lo hacen la comida, el sexo y las drogas. Todos
ellos son estímulos que dependen de un circuito cerebral subcortical en el sistema límbico,
es decir, aquel sistema formado por estructuras cerebrales que gestionan respuestas
fisiológicas ante estímulos emocionales; particularmente, el núcleo caudado y el núcleo
accumbens y sus conexiones con el área pre-frontal. Los estudios que muestran activación
ante los estímulos mencionados revelan un importante solapamiento entre las áreas, lo
que sugiere que todos activan un sistema en común.

Uno de los fundadores del laboratorio de investigación Brain, Music and Sound [cerebro,
música y sonido], en Canadá, el científico Robert Zatorre describe así los mecanismos
neuronales de percepción musical: una vez que los sonidos impactan en el oído, se
transmiten al tronco cerebral y de ahí a la corteza auditiva primaria; estos impulsos viajan
a redes distribuidas del cerebro importantes para la percepción musical, pero también
para el almacenamiento de la música ya escuchada; la respuesta cerebral a los sonidos
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Guadalupe García Silviano

está condicionada por lo que se ha escuchado anteriormente, dado que el cerebro tiene
una base de datos almacenada y proporcionada por todas las melodías conocidas.

Y es aquí donde comienza el maravillo mundo de como es que la música se transforma en


un recurso terapéutico. La musicoterapia no es algo nuevo, ha sido utilizada como tal
desde tiempo atrás, hagamos un recorrido por la historia:

No es necesaria para la supervivencia, pero ha existido en todas las culturas, por lo que se
considera lenguaje universal. Sociedades nómadas, desarrollaron costumbres y rituales,
creían en el poder curativo de la música, que influenciaba en el estado físico y mental.
Creían que conectaba con seres sobrenaturales y la utilizaban para pedir y suplicar. Es
importante la figura del médico−curandero que determinaba la enfermedad y el
tratamiento para eliminar al espíritu maligno.

Antigüedad:

 EGIPTO: Curanderos musicales disfrutaban de privilegios por su estrecha relación


con los líderes. Música como medicina del alma, a menudo incluían terapias de
canto.
 GRECIA: Música como fuerza especial sobre el pensamiento, emoción y salud física,
recetándose a personas con trastornos emocionales. La medicina pasó a ser
empírica por la teoría de Polybus, por lo que la buena salud era el resultado de un
equilibrio entre los cuatro humores (sangre, flema, bilis amarilla y bilis negra).
 EDAD MEDIA: El Cristianismo influencia, conceptualizándose la música como un
vehículo para la emoción sagrada, mientras que para los filósofos (Aristóteles) era
un tipo potente de catarsis.
 RENACIMIENTO: Enfoque científico de la medicina. Hay escritos (Zarlino y Vesalius)
interrelacionando música y medicina.
 BARROCO: Se usa para tratar enfermedades mentales y emocionales.
 SIGLO XVIII: Sólo para tratamientos especiales o multiterapeuticos.
 SIGLO XIX y XX: Crecimiento en EEUU y desarrollo de la musicoterapia, en centros
educativos, sociales y sanitarios.
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Guadalupe García Silviano

Pero con la música es inevitable que surja el ritmo el cual es el organizador e impulsor de energía,
este es el elemento fundamental de la música de todas las culturas, es necesario, ya que la
organiza y le proporciona energía, esta energía puede ser visualizada a través del movimiento del
cuerpo, es decir la danza terapia. Esto es muy distinto a danzar una coreografía, se preguntarán
¿por qué? En danza terapia no se trata de mover el cuerpo para bailar o interpretar alguna
melodía, va mas alla de eso, para lo cual me gustaría compartirles mi experiencia personal,
durante los últimos años he practicado danzas árabes, cuando preparamos una melodía hay una
secuencia de pasos que van acorde a la música es decir hay algo más estructurado, aunque había
observado cambios a nivel emocional con la práctica de las danzas aun me faltaba vivir y sentir
este recurso de danza terapia, en uno de los módulos del curso de Arteterapia nos solicitaron
realizar un ejercicios relacionado a esto, me di cuenta que algo mas profundo estaba pasando en
mi en el momento en que sabía que danzaría con la única finalidad de explorar en mí, interior, es
como descubrir partes nuevas en el jardín de tu casa en la cual has vivido durante muchos años,
imagínense que están limpiado su casa y descubren un pasadizo secreto que jamás hubieran
pensado que existía, tal vez al principio les daría miedo abrir, pasar hacia adentro y explorar pero
al final descubren que hay una habitación que al verla les produce una sensación de paz y
bienestar, lo que sea que descubras te llena de gran satisfacción, pero ¿Qué es lo que hace que la
danza terapia produzca esto? A que el movimiento es la llave para la integración de expresión
física y emocional, unificando el cuerpo y la mente, estableciendo un equilibrio entre las
demandas que provienen del mundo interno y externo de la personalidad integrando aspectos
subjetivos y objetivos. Es decir, se abre un puente y un traductor que conecta las ideas con las
emociones utilizando como medio de expresión al cuerpo el cual es llevado por el ritmo de la
música a explorar, así como a validar esas sensaciones y emociones.

La validación es darnos permiso de que nuestras emociones sean aceptadas sin ningún tipo de
juicio de valor, esos juicios que tal vez de niños no nos permitieron movernos a placer o necesidad
nuestra, un ejemplo es como cuando esta un pequeño muy enojado entonces siente la gran
necesidad de mover sus manos porque ahí siente mas el enojo y aún desconoce a nivel cognitivo
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Guadalupe García Silviano

que es, pero el cuerpo si lo sabe y quiere hablarlo pero entonces es regañado o castigado verbal o
físicamente, ahora lo tiene que callarlo, el cuerpo y la mente han aprendido a esconderlo en lo
mas profundo de su ser para no ser lastimados.

“La danza es una metáfora de la existencia del cuerpo que expresa la emoción de la vida”.

En Danzaterapia lo que se busca es la exteriorización de las emociones a través del despertar del
cuerpo: por esto por lo que durante las sesiones se trabajan las tensiones musculares, se regula la
respiración a través de ejercicios específicos, se corrige la postura, se da valor al cuerpo en el
espacio encontrando, de esta manera, una nueva vía de comunicación.

Es justamente a través del movimiento que se pueden generar los cambios, no sólo a nivel físicos,
sino que trabajando activa y contemporáneamente el cuerpo interior. Aquel cuerpo que no es
visible y que, por lo tanto, muchas veces se queda en el olvido y que puede ser la causa de
sucesivos problemas tanto sensoriales como psíquicos.

En el momento en que reconocemos estos sentimientos dentro de nosotros, podemos exorcizarlo


trayéndolos al exterior a través de nuestro mismo cuerpo, para que, una vez visualizados,
podamos comprenderlos, transformarlos e integrarlos.

En Danzaterapia no es importante la interpretación final de nuestra danza, sino que el proceso que
nos lleva hasta esta danza. La Danzaterapia no es solo el cuerpo y sus movimientos. La
interacción entre música, espacio, cuerpo movimiento se hace más estrecha si se le añaden
nuevos elementos que motiven las emociones a salir a la luz.

Si en tu historia de vida no te permitieron explorar, expresar ni validaron tus emociones o


reacciones la musicoterapia y danzaterapia pueden ser ese puente hacia el descubrimiento de un
territorio desconocido para ser explorado y conquistado.

Referencias

“Danzaterapia: orígenes y fundamentos” por Lic. Diana Fischman, ADTR (2001) recuperado de:
file:///C:/Users/tonat/Documents/ARTETERAPIA/MODULO%20IV/DANZATERAPIA%20ORIGENES
%20Y%20FUNDAMENTOS.pdf

Danzaterapia Por Artemisabcn De Enrica Tifatino recuperado de:


https://www.saludterapia.com/glosario/d/18-danzoterapia.html
Música y Danza: un puente hacia la validación de las emociones
Guadalupe García Silviano

Musicoterapia, recuperado de:


file:///C:/Users/tonat/Documents/ARTETERAPIA/MODULO%20V/musicoterapia_material%20de
%20apoyo.pdf

¿Qué le hace la música a nuestro cerebro? Facundo Manes, recuperado de:


https://facundomanes.com/2015/09/14/que-le-hace-la-musica-a-nuestro-cerebro/

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