Además del acto en sí de feminicidio, existen otros aspectos preocupantes relacionados con

esta forma extrema de violencia de género, como es la impunidad que rodea a estos crímenes.
Con demasiada frecuencia, los perpetradores quedan sin castigo y las víctimas y sus familias no
obtienen justicia. Esta impunidad refuerza el ciclo de violencia y crea un clima de temor y
desconfianza en la sociedad. La tasa de feminicidios en el Perú es alarmante. De acuerdo con
un estudio realizado en el país, el 15.6% de las denuncias por violencia familiar provienen de
denuncias previas, mientras que el 82.2% de los casos de violencia doméstica no son
denunciados. Además, el Registro de Feminicidio del Observatorio de Criminalidad del
Ministerio Público registró 705 homicidios de mujeres en el Perú entre los años 2009 y 2011,
de los cuales el 34% fueron causados por sus parejas o ex parejas. Este porcentaje supera
significativamente el 1% de homicidios de varones causados por sus parejas o ex parejas
durante el mismo período. Algo no está funcionando bien en las políticas y leyes diseñadas
para combatir la violencia de género. No obstante “Algunos expertos en género y violencia
contra las mujeres argumentan que la promulgación de leyes penales más duras y la
modificación de la normativa en torno al feminicidio no son suficientes para prevenir este tipo
de violencia. Según estas perspectivas, la violencia de género es un problema estructural y más
complejo que involucra factores culturales, económicos, políticos y sociales. (Oliva, 2017). Ante
esta realidad, la erradicación de la violencia de género requiere de la movilización de toda la
sociedad, a través de un enfoque integral que incluya la educación, la cultura, la justicia y la
política. Es fundamental fomentar el diálogo y la participación activa de todas las personas,
incluyendo a las víctimas, y diseñar políticas y programas específicos que aborden las causas
profundas de la violencia contra las mujeres. Solo así se podrá construir una sociedad más
justa y equitativa para todas las personas en el Perú y erradicar el feminicidio.