You are on page 1of 24
NUEVA PARAFILIA DEL SIGLO XXI: CHAT-ESCATOFILIA. A NEW PARAPHILIA OF THE XXI CENTURY: CHAT-SCATOPHILIA NOUVELLE PARAPHILIE DU S. XXIEME : TCHATCHE- SCATOPHILIE, NOVA PARAFILIA DO S. XXI: CHAT-ESCATOFILIA Yolanda Navarro Abal* José Andrés Lorca Marin* Sara Rodriguez Snchez* RESUMEN El uso de las nuevas tecnologias en el presente siglo ha desarrollado una serie de habitos relacionados con este nuevo mundo virtual. Muchas de estas costumbres se encuentran asociadas al uso del ordenador como herramienta de trabajo, pero muchas otras, son fruto del uso de Internet como medio de relacionarse con otras personas, que se convierten, a veces, en la unica red interpersonal que presentan algunos sujetos. Todo ello ha llevado al desarrollo de nuevos trastornos asociados al uso de la informatica. Entre estos trastornos, nos encontramos con patologia on la sexualidad, como el objeto de nuestro estudio, una posible nueva parafilia, la char-escalofilia 0 excitacion a través del envio de mensajes de caracter obsceno. s relacionadas Palabras clave: Chat-escatofilia, parafilia, chat, internet. expresiones comportamentales de la sexualidad. Universidad de Huelva, Espana * Facultad de Ci a Educacion. Departamento de 81 Archivos Hispanoamericanos de Sexologia Vol. IX, No. 1, 2003 ABSTRACT The use of new technologies in the present century has developed a series of habits related to this new virtual world. Many of these customs are associated to the use of computers as working tools, but many others are the result of the use of internet as a means to relate to people. This kind of relationships is the only interpersonal network or social contact that some people have. All of this has contributed to the development of new disorders associated to the use of computers. Among these disorders, we find pathologies related to sexuality, as is the object of our study. a possibly new paraphilia, chat-scatofilia or the sexual arousal caused by the sending of obscene messages. Key words: Chat-scatophilia. paraphilia, chat, internet, behavioral expres- sions of sexuality. RESUME L'utilisation des nouvelles technologies au XXI éme siécle a développé une série de meeurs liés au monde virtuel. La plupart de ces habitudes ont un rap- port 4 Vutilisation de l’ ordinateur en tant qu'un outil de travail. Mais d’autres sont le produit de l’utilisation de I'Internet en tant que le moyen pour faire de rencontres, Et méme étant le seul réseau interpersonnelle de plusieurs personnes. Tout cela a provoqué l’apparition de nouveaux troubles associés a l'informatique. Parmi ceux-ci nous trouvons des pathologies liées 4 la sexualité, tels que I’ objet de notre recherche une possible nouvelle paraphilie, le tchatche voyeurisme ou lexcitation par l’envoie de messages obscénes. Mots elé: voyeurisme, paraphilie, internet, expressions de la sexualité Nueva parafilia del siglo XX1 Yolanda Navarro/José A. Lorea/Sara Rodriguez RESUMO O emprego das novas tecnologias no presente século tem originado uma série de habitos relacionados com este novo mundo virtual. Muitos destes costumes esto associados ao emprego do computador como ferramenta de trabalho, mas muitos outros sao frutos do uso da Internet como meio de se relacionar com outras pessoas que se converte, as vezes, na tinica rede interpessoal que alguns individuos possuem. Tudo isto tem levado ao desenvolvimento de novos transtornos associados ao uso da informatica. Entre estes transtornos constituem objeto de nosso estudo certas patologias relacionadas com a sexualidade como €o0caso de uma nova parafilia, a chat-escatofilia ou excitagao através do envio de mensagens de carater obsceno. Palavras chave: Chat-escatofilia, parafilia, chat, internet, expressoes comportamentais da sexualidade. INTRODUCCION El término “parafilia” (del griego para-alterado, anormal- y filia, 0 amor) fue empleado por primera vez por Karpman (1954). Sin embargo, es en el DSM-III (APA, 1980) cuando aparece como oficial el concepto de parafilia sustituyendo la etiqueta hasta entonces empleada de “Desviaci6n sexual”. Segtin el DSM-IV, la caracteristica esencial de la parafilia es la “presencia de fantasias sexualmente activantes, impulsos sexuales 0 conductas. intensas ) recurrentes que implican generalmente (1) objetos no humanos, (2) el sufrimiento 0 la humillacién de uno mismo o de la pareja 0 (3) nifios u otras personas que no consienten, y que se presentan durante un periodo de al menos 6 meses” (APA, 2000). Ademas, las fantasias, los impulsos sexuales o las conductas, tienen que provocar un “malestar clinicamente significativo” 0 un deterioro importante en una o mas areas del funcionamiento del individuo. Es importante aclarar que un individuo no se considerara que tiene una parafilia por el simple hecho de manifestar impulsos sexuales y por las actividades en si mismos que Ileve a cabo; es necesario que la persona exprese malestar hacia dichos impulsos Archivos Hispanoamericanos de Sexologia Vol. IX. No. 1. 2003 y sensaciones (McAnulty y Lohr, 1996; citado en Carrobles, 1991). E] DSM-IV incluye en su clasificacién ocho tipos principales de parafilias y una categoria genérica (“parafilias no especificadas”) que comprende otros siete tipos. Los ocho tipos principales de parafilias son impulsos y fantasias sexuales ante diferentes estimulos: Exhihicionismo (exposicién de los propios genitales a un/a desconocido/a), Voyeurismo (observar repetidamente a una persona que se esta desnudando o que esta inmersa en la actividad sexual y que no sabe que estd siendo observada), Froteurismo (comacto y el roce con una persona que no consiente), Paidofilia (actividad sexual con nifios preptiberes), Fetichismo (uso de objetos sin vida), ferichismo travestista (vestirse con ropa del sexo opuesto), sadismo sexual y masoquismo sexual (la experiencia de dolor y de humillacién asociado con la satisfaccién sexual). Dentro de la categoria genérica de “parafilias no especificadas” s encuentran: necrofilia (activacién sexual ante cadaveres), parcialismo (centro de atencién sexual exclusivo en una parte del cuerpo), zoofilia (activacion sexual ante animales), coprofilia (activacion sexual ante heces), clismafilia (enemas urofilia (orina) y escatologia telefonica (llamadas telefénicas obscenas). Se considera que las parafilias recogidas en el DSM-IV son una mues pequefia de las existentes en realidad. Asi, Money (1984, 1986) ha identificado mas de 30 tipos tales como la aga/matofilia (activacion sexual ante una estatua o un modelo desnudo), la formicofilia (contacto con caracoles, escarabajos, hormigas u otros insectos, que se arrastran y mordisquean las partes erdticas y genitales), geroniofilia (activacién sexual por personas de mas edad), hematofilia (excitacion por ver, probar o beber sangre, afinidad al vampirismo). etc. ra Etiologia Todavia se conoce poco sobre la etiopatogenia de las parafilias y los modelos explicativos existentes no permiten explicar de forma convincente el desarrollo y mantenimiento de estas conductas. Respecto a los factores bioldgicos, no existe evidencia empirica que avale la presencia de una causa de tipo biolégico que pueda identificarse como claramente implicada en el desarrollo de las parafilias: 84 Nueva paratilia del siglo XX1 Yolanda Navarro/José A. Lor a Rodriguez Una de las hipotesis desarrolladas hace referencia a la presencia de niveles anormales de andrégenos, dado que pueden contribuir a una excitacion sexual inapropiada. Pero, hasta el momento, no existen resultados convincentes con respecto a esta hipotesis (Aluja, Martinez de Osaba y Torrubia, 1989) Algunos autores como Kolarsky et al.(1967) partian de la hipotesis de la presencia de una alteracién del lobulo temporal en sujetos que presentaban una elevada incidencia de “desviaciones” sexuales. Sin embargo, revi recientes tampoco permiten confirmar estos hallazgos (Langevin, 1990) jiones mas Respecto a las causas psicolégicas: Las teorias conductuales resaltan la importancia del condicionamiento en la etiologia de las desviaciones sexuales. Quinsey y Earls (1990) parten de la hipotesis del aprendizaje de las conductas parafilicas en base a un proceso de condicionamiento clasico. Es posible que el aprendizaje de estos trastornos se produzca debido a que un estimulo atipico se haya asociado de forma acciden- tal a una sensacién de excitacién sexual. Posteriormente, el sujeto buscara la repeticién de dichas situaciones, reforzandose, de este modo, la asociacién experimentada anteriormente. A su vez, la persona incluira fantasias relacionadas con dicho estimulo durante la masturbacién, con lo cual también se fomenta el refuerzo de dicha asociacién (McGuire. Carlisle y Young 1965), Estos datos se encuentran avalados por evidencia experimental como la suministrada por Freund, Sher y Hucker (1983), quienes informan que mas del 60% de los exhibicionistas y solo el 20 % de los sujetos controles mostraron una respuesta de ereccidn peneana ante la descripein verbal de una situacién de exhibicion. siendo ésta una respuesta de ereccion tan intensa o mas que la que experimentaron ante la descripeién de un coito. Sin embargo, parece que el modelo de condicionamiento slo explica parcialmente los procesos de aprendizaje que median las conductas parafilicas. ya que sujetos normales informan de activacion ante fant pero no las llevan a cabo. Por ello, algunos autores han intentado generar hipdtesis alternativas que permitan explicar por qué se mantienen estos comportamientos una vez adquiridos En esta linea se enmarea la teoria de la terminacion conductual (behavior completation) propuesta por McConaghy (1980). Esta teoria parte de dos hechos: jas sexuales desviadas 0 Archivos Hispanoamericanos de Sexologia Vol. IX. No. 1, 2003 (1) el caracter compulsivo que tienen muchos de estos comportamientos parafilicos, pues los propios sujetos informan no poder contenerse de realizar estas conductas y (2) con frecuencia estos sujetos se quejan mas de una respuesta de activacion sexual ante este tipo de estimulos. La idea basica del modelo es que, en base a la activacién del mecanismo de terminacion conductual, el sujeto ante determinadas claves estimulares asociadas a conductas habituales. experimenta una intensa activacién general que le compele a no detenerse en la realizacién de la conducta y completarla, ya que de esta forma desaparece la activacién y el intenso malestar subjetivo asociado a ella. Herman (1990) propone una hipétesis alternativa basada también en la cualidad compulsiva de estas conductas, en la que considera que dichos comportamientos tienen un cardcter adictivo. Sin embargo, los datos clinicos y la evidencia empirica no parecen avalar esta hipotesis, existiendo pocas semejanzas entre le comportamiento de los sujetos con desviaciones sexuales y el de los sujetos con adicciones (McConaghy, 1993). Otros autores (Freund, 1990) conceptualizan, desde una perspectiva etioldgica, las desviaciones sexuales como irastornos del cortejo (courtship disorders). Freund (1990) cree que las conductas sexuales estan biolégicamente determinadas e identifica cuatro fases en la interacciones sexuales humane (1) localizacién y evaluacion de la pareja: (2) fase de interaccién pretactil (esto es, mirar, sonreir, hablar...), (3) fase de interaccién tactil y (4) fase de union genital. Segtn el autor, a cada una de las fases le corresponderia un patron determinado de activacién, y cada una de ellas prepara para la siguiente fase. siempre que las claves de cortejo dadas por la pareja asi lo indiquen. Freund explica que en las desviaciones sexuales, se producen anomalias en el patron de activacion de cada una de las fases, intensificandose dicho patrén, es decir, el autor asocia la aparicion de cada uno de los trastornos con la alteracin de una de las fases del cortejo. Asi, el voyeurismo se entenderia como una alteracion de la fase de localizacion y evaluacion, el exhibicionismo de la fase de interaccion pretactil, el frotteurismo de la fase de interaccién tactil y la violacién de la fase de uni6n genital. También se ha enfatizado el papel que juega la imitacién de modelos en el desarrollo de este tipo de conductas. La mayor parte de los autores encuentran relacion entre el ambiente familiar en que se ha desarrollado el sujeto durante la 86 Nueva parafilia del siglo XX1 Yolanda Navarro/José A. Lorca/Sara Rodriguez infancia y la aparicion sobre todo de ofensas sexuales y conductas de violencia. Marshall y Barbaree (1990), en su reciente revisién sobre ofensores sexuales sefialan que un porcentaje elevado de ello ha tenido una socializacién pobre durante la infancia; asi mismo, muchos de ellos informan haber presenciado de forma repetida escenas de violencia en el hogar. Todo ello parece facilitar el uso de la agresién como forma de interaccién, e impide el acceso, durante la adolescencia, a apropiadas relaciones sociales. Desde las perspectivas cognitivo-conductuales actuales, se intentan incluir en los problemas sexuales, las distorsiones cognitivas y otras deficiencias, como déficit en habilidades sociales. Barbaree, Marshall y Lanthier (1979) propusieron una hipétesis inhibitoria para la desviacién sexual. Estos autores postularon que los mecanismos inhibitorios y excitatorios determinan la activacién sexual ante situaciones especificas. Un estimulo puede perder su poder inhibidor debido a.una serie de acontecimientos perturbadores, incluyendo la ira, la culpa por parte de la victima, la intoxicacién por alcohol y la preexposicién a la pornografia (Barbaree, 1990). Una de las perspectivas tedricas mas prometedoras es la teoria integradora de Marshall y Barbaree (1990") sobre la conducta parafilica. Esta teoria tiene en cuenta factores conductuales, biolégicos y socioculturales de la conducta sexual desviada. Dicho modelo propone una interaccién de 1) un impulso bioldgico hacia la agresion sexual que puede exhacerbarse por disfunciones hormonales, con 2) tempranas experiencias de aprendizaje, escaso modelado 0 cuidado por parte de los padres y 3) creencias y actitudes patriarcales 0 socioculturales negativas. Estos autores plantean la importancia de dichos factores, no sdlo en la etiologia y en la evaluacién, sino también para el tratamiento. Marshall, Hudson y Hodkinson (1993) sugirieron que la incapacidad de desarrollar un apego seguro hacia los padres en la infancia tiene como consecuencia la baja confianza en uno mismo, el temor a la intimidad y déficits en habilidades sociales. Estos déficits hacen que el individuo experimente soledad emocional. Todo ello predispone a los adolescentes a desarrollar algun tipo de desviacién sexual (Marshall y Eccles, 1993). 87 Archivos Hispanoamericanos de Sevologia Vol. IX. No. 1, 2008 Epidemiologia Se desconoce el alcance numérico de estos trastornos, entre otras muchas razones, debido a que son pocos los sujetos que solicitan tratamiento, por lo que los datos referentes a casos tratados en clinica son escasos. Siguiendo a McAnulty y Lohr (1996; citado en Carrobles, 1996), las parafilias son poco frecuentes por varias razones: (1) al ser conductas censuradas por la sociedad se mantienen en secreto; ademas, algunas de ellas son consideradas de caracter delictivo por lo que los autores de las mismas lo mantienen oculto, (2) se consideran que no cumplen con las normas estipuladas socialmente, por lo que son consideradas desviaciones sexuales y (3) al i modificando constantemente las actitudes sexuales ante las conductas sexuales, los resultados de las encuestas también varian en cortos periodos de tiempo. Existe controversia sobre la posible existencia de varias parafilias a la vez, Segtin el DSM-IV, es frecuente que los individuos manifiesten parafilias miltiples. Por el contrario, Money (1984) afirma que es raro que una persona tenga mas de una parafilia 0 cambie de una a otra. Para McConaghy (1993) la mayoria de los parafilicos tienen una tinica desviacion preferida, aunque ocasionalmente pueden experimentar otras a la vez. Langevin (1983) manifiesta que es frecuente encontrar desviaciones multiples. Respecto a la prevalencia por sexos, las estadisticas indican que las desviaciones sexuales afectan con mucha mas frecuencia a hombres que a mujeres. Sdlo en el masoquismo se da un elevado ntmero de mujeres, pero incluso en este trastorno la raz6n es de 20 a 1 (APA; 1988) Farré (1991) plantea la existencia de varias hipétesis para explicar esta preponderancia del hombre en los trastornos parafilicos: (1) se alude a que, debido al mayor impulso sexual del hombre con respecto a la mujer, se facilita la atencién en una gama mas amplia de objetos sexuales; (2) relaciona las conductas violentas ligadas al sexo, como por ejemplo, la violacién, ya que el hombre posee un mayor componente agresivo. En esta linea, diversos estudios han tratado de establecer correlaciones entre niveles de testosterona y conductas sexuales violentas, aunque con resultados contradictorios y poco concluyentes. (Aluja, Martinez de Osaba y Torrubia, 1989) y (3) también se habla de la necesidad del hombre de explorar mayor diversidad de estimulos sexuales debido 88 Nueva paratilia de! siglo XX1 Yolanda Navarro/José A. Lorca/Sara Rodriguez a. una mayor indefinicion de la identidad sexual. En relacion con la edad de inicio, las desviaciones sexuales suelen comenzar en la adolescencia, estimandose que un 50% de estos sujetos comienza sus actividades antes de los 18 afios (Becker y Kavoussi, 1989). A finales del S.XX y principios del presente siglo se han fomentado el uso de las nuevas tecnologias, ya que, entre otras muchas funciones, ha pasado a ser una de las principales herramientas del mercado laboral. Internet es lugar de encuentro de cada vez mayor ntimero de personas de diferentes grupos de edades y ocupaciones, tendiendo a crear un nuevo tipo de “sociedad en red” con su propias normas, estilos de relacionarse y caracteristicas atin sin definir. Este medio ha dado lugar a relaciones humanas virtuales basadas en encuentros en salas de chat, listas de interés, foros de discusién y correo electrénico, el cual est4 definiendo nuevas maneras de relacionarse, asi como un espacio de encuentro valido para un numero creciente de personas. A la vez, vivimos en una sociedad limitada por el tiempo libre para dedicar a actividades de ocio, por lo que cada vez son mas las personas que obtienen sus tnicas relaciones interpersonales a través de la maquina. Todo esto, nos ha Ilevado al desarrollo de nuevos trastornos asociados al uso de la internatitica. Entre estos multiples trastornos, nos encontramos con patologias relacionadas con la sexualidad, como lo que es nuestro objeto de estudio, las parafilias, y mas especificamente, la chat-escatologia. Al ser internet una herramienta cuya implantacién se puede considerar de fecha muy reciente, se conoce poco sobre las patologias que implican. Se han hecho varios estudios sobre la adiccién al internet: desorden de adiccién a internet (Golbert, 1995), uso compulsivo de internet (Morahan-Martin y Shumacker, 1997), uso patoldgico de internet (Young y Rogers, 1998b). También existen estudios recientes sobres las nuevas relaciones interpersonales y romanticas que se establecen a través de la red (Manrique, 2003) Varios autores (Echeburta et al., 1998: Griffiths, 1998) han seiialado que internet podria ser un medio o lugar donde alimentar otras adicciones 0 trastornos (parafilias, ludopatias, etc), Cada vez mas internautas entran a salas de chat que estimulan las fantasias eréticas, como una divertida manera de expresar la sexualidad. 89 Archivos Hispanoamericanos de Sexologia Vol. No. 1, 2003 Los chats de encuentros sexuales ofrecidos por diversos sitios estan promoviendo nuevas expresiones de la sexualidad moderna: el sexo virtual. También Ilamado cybersexo, éste podria definirse como la btisqueda del placer usando la interactividad de internet o como una manera de desarrollar fantasias er6ticas intermediado por la web. Abarca desde el habito de navegar buscando fotografias pornograficas y de crear un clima agradable en el lugar donde esta el ordenador, hasta salas de chat, comenzar una charla picante y masturbarse. En este estudio se intenta describir una de las nuevas desviaciones sexuales que se ha manifestado a través del uso de este nuevo universo virtual. No existen antecedentes bibliograficos sobre poblaciones con chat-escatofilia. La parafilia mas parecida, y que nos sirve de referente es la escatologia telefonica. La realizacion de estudios de este tipo con trastornos de parafilia plantea serias dificultades, entre otras, la menor accesibilidad de los individuos y los problemas para controlar una gran diversidad de posibles variantes interferentes (diferencias en la distribucién por sexos en cada grupo de edad, otros tipos de trastornos psicopatologicos que presente el sujeto, etc.). Como un paso previo a la realizacién de un estudio que tenga toda la validez necesaria, se decidié llevar a cabo un trabajo exploratorio usando como herramienta el internet, El objetivo final es obtener una informacién introductoria en torno a la chat-escatofilia para, en la medida de lo posible, acercarnos a este trastorno y poder desarrollar apropiados programas de intervencidn. La estrategia de evaluacién presentada aqui fue desarrollada como una primera aproximacién al tema a tratar, por lo que no posee una validez univer- sal, se trata de una aproximacion a la nuevas parafilias y somos conscientes de la mejora que habré que realizarse, tanto en los procesos diagndsticos, como de evaluacién para, posteriormente, desarrollar unas buenas pautas de intervenci6n. METODO Sujetos Se obtuvo una muestra de 67 sujetos, de los cuales, 59 eran hombres y 8 mujeres, de edades comprendidas entre los rangos de edad de 0-20 aftos hasta mas de 55 afios. Los sujetos fueron seleccionados a través de un “messenger” de la web. 90 Nueva parafili del siglo XXI Yolanda Navarro/José A. Lorca/Sara Rodriguez PROCEDIMIENTO Para la realizacion de esta investigacién, los autores de la misma nos hicimos usuarios habituales durante 6 meses de una sala chat de habla latina. Dentro de esta sala de chat nos introdujimos en una sala en la cual existian foros de debate sobre temas de interés, ya que nos parecia de suma importancia detectar los lugares en donde se encontrarian las personas que tuvieran algiin trastorno como la chat-escatofilia y que ademas estuvieran interesados en obtener informacion sobre el tema, como es e] caso de muchos de los particiantes de salas de chat de temas de interés. En el trascurso de las visitas al chat se inform a los usuarios sobre la realizacién de nuestra investigacién. Se les facilitaba una direccion para acceder a una pagina web en donde encontrarjan informacién sobre la chat-escatofilia. En dicha pagina se invitaba a los visitantes que consideraran que padecian de este trastorno a rellenar un protocolo de recogida de datos. Para poder promover la divulgacién y facilitacién de obtencién de una muestra de sujetos con estas caracteristicas, se ofrecia una casilla para poder reenviar dicha pagina a otras personas que pudieran estar interesadas en el tema. A su vez, se les facilitaba un correo electrdnico por si necesitaban realizar una consulta individual INSTRUMENTO Se elaboré un protocolo de recogida de datos (Ver Anexo 1) para la obten de la muestra. Debido a lo peculiar de la recogida de la muestra, se consideré oportuno realizar preguntas con respuestas cerrada - Para la elaboracion de dicho protocolo, se realiz6 un analisis riguroso de aquellos estudios sobre trastornos parafilicos y los instrumentos utilizados para la medicién de los mismos. En dicha recogida de informacién se obtenian datos sobre variables de filiacion, miscelanea, asi como variables asociadas a las parafilias. Se dejé un espacio abierto, aunque limitado en extension, en donde el sujeto, si creia oportuno, podia enunciar algunos de los mensajes que enviaba a través de chat y que le provocaba excitacién sexual. ol Archivos Hispanoamericanos de Sexologia Vol. IX. No. 1. 2003 RESULTADOS Al realizar el analisis de los datos, se han establecido tres categorias que resumen el total de variables exploradas. para de esta forma, hacer un andlisis de los resultados de forma mas global. Se ha considerado las siguientes categorias * Variables de filiacidn (hacen referencia a los datos relacionados con la edad, sexo. estado civil, nivel cultural y orientacién sexual), - E138% de la muestra recogida eran sujetos comprendidos en el rango de edad de 0 a 20 aftos: el 34% de los sujetos tenian entre 20 y 35 aitos: el 19% de la muestra eran personas con edades comprendidas entre los 35-40 afios; el 6% de la poblacién tenia entre afios y finalmente, un 3% era mayor de 55 afios. (Ver diagrama 1) - Encuanto al sexo. el porcentaje mayor. 96%, eran hombres, mientras que el 3% eran mujeres. (Ver diagrama 2) - Elestado civil se distribuye de la siguiente manera: el 45% de los sujetos son solteros, sin pareja, seguido de un 22% que son personas que conviven con su pareja, casadas 0 simplemente conviviendo; el 18% son personas separadas 0 divoreiadas; el 15% son sujetos solteros con pareja y no aparece en la muestra ningiin sujeto viudo. (Ver diagrama 3). - El nivel cultural queda distribuido de la siguiente forma: el 44% de la muestra se clasifica con un nivel cultural alto; el 33% se clasifica como nivel cultural medio; un 13% con nivel cultural bajo y, finalmente, un 10% sin estudios. (Ver diagrama 4) - Laorientacion sexual prevalente es un 72% de heterosexualidad, seguida de un 18% de sujetos bisexuales y un 10% se clasifican como homosexuales. (Ver diagrama 5). * Misceldnea (describen la percepeién de la infancia, comunicacién con sus padres, educacion sexual recibida, relaciones interpersonales anteriores y actuales y relaciones afectivos-sexuales): - EI 36% de los sujetos de la muestra perciben haber tenido una infancia desagradable: el 24% consideran haber tenido una infancia muy desagradable; el 18% la perciben como agradable; el 12% manifiestan haber 92 la Navarro/Joxé A. Lorca/S tenido una infancia normal, mientras que el 10% consideran haber tenido una infancia agradable. (Ver diagrama 6). - Lacomunicacién con sus padres es considerada en un 38% de los casos en un 32% muy mala; en el 13% de los casos se considera una comunicacién buena; en el 10% de los casos normal, y, por ultimo, un 7% considera que ha sido muy buena. (Ver diagrama 7). - En cuanto a la educacion sexual recibida: el 38% manifiesta haber recibido una educacion sexual mala; el 32% consideran que ha sido muy mala; el 16% la ven como normal; el 10% ven la educaci6n sexual recibida como buena y el 4% como muy buena. (Ver diagrama 8). - Las relaciones interpersonales en la adolescencia se distribuyen de la siguiente forma: el 44% de los sujetos han tenido durante su adolescencia siempre problemas a la hora de establecer relaciones interpersonales: el 30% casi siempre han encontrado problemas; el 14% a veces; el 12% casi nunca, y, por tiltimo, ningiin sujeto considera no haber tenido nunca dificultades para el establecimiento de relaciones. (Ver diagrama 9). - En cuanto al establecimiento de relaciones interpersonales en la actualidad: el 33% dice tener siempre problemas a la hora de establecer relaciones interpersonales; el 29% afirma tener a veces problemas; el 26% casi siempre; el 12% siempre y no existe ningtin sujeto que considere que nunea tiene problemas a la hora de establecer relaciones interpersonales. (Ver diagrama 10). - Con relacidn al establecimiento de relaciones afectivo-sexuales; el 48% de los sujetos manifiestan tener siempre problemas a la hora de intimar con otras personas; el 27% afirman que a veces empre: el 4% casi nunca y, por ultimo, ningiin sujeto manifiesta no haber tenido nunca problemas a la hora de establecer relaciones afectivo-sexuales. (Ver diagrama 11) como mala: el 21% casi (se refieren * Comportamientos relacionados con las conductas parafilica a tiempo dedicado a chatear, envio de mensajes obscenos, masturbacién, fantasia: sexuales, tiempo de malestar, presencia de otras conductas sexuales, repercusi6n en otras areas de la vida y busqueda de ayuda profesional): Archivos Hispanoamericanos de Sexologia Vol. IX, No. 1, 2003 - Tiempo dedicado a chatear: el 44% de los sujetos de la muestra dedican entre 3-4 horas diarias a chatear; el 33% mis de 4 horas: el 15% entre 2-3 horas; el 7% dedican entre | y 2 horas al dia y, finalmente, sélo un 1% chatea menos de | hora al dia. (Ver diagrama 12). - Encuanto a la necesidad de enviar mensajes obscenos cuando chatea: se puede observar como el 87% de la muestra siente la necesidad de enviar mensajes obscenos cuando se pone a chatear; frente a un 13% que afirma no tener la necesidad de enviar mensajes obscenos cada vez que se pone a chatear. (Ver diagrama 13). = E152% creen necesario masturbarse siempre que se ponen a chatear; un 30% consideran que casi siempre sienten la necesidad; un 18% manifiestan que sélo a veces y no existe ningtin sujeto nunca que haya manifestado la necesidad de masturbarse. (Ver diagrama 14). - Encuanto a las fantasias sexuales sobre la chat-escatofilia: el 90% afirma tener fantasias sexuales pensando en chatear enviando mensajes obscenos; frente un 10% que dice no tener fantasias sexuales relacionadas con la chat-escatofilia. (Ver diagrama 15). - El 45% de la poblacién dice sentir a veces la necesidad de masturbarse mientras experimenta las fantasias sobre la conducta chat-escatofilica: el 30% dice tener que masturbarse casi siempre: y el 25% siente la necesidad s6lo a veces; no existe ningtin sujeto que nunca haya sentido la necesidad de masturbarse mientras fantasea. (Ver diagrama 16). - EI] 59% de los sujetos dicen sufrir malestar por no poder controlar la conducta chat-escatofifica, el 22% dicen sufrir malestar casi siempre; el 4% casi nunca: el 15% nunca deja de percibir el malestar. (Ver diagrama 17). - Enccuanto al tiempo que llevan con dicho malestar: el 43% afirma tener dicho malestar desde hace mas de 3 afios; el 22% de | afio a 2 aftos; otro 22% menos de 6 meses: un 7% se encuentra con este malestar entre 2. y 3 afios y el 6%, de 6 meses a 1 afio. (Ver diagrama 18). - Con relaciona la presencia de otras conductas sexuales: el 85% manifiesta la presencia de otras conductas sexuales que le crean malestar, frente al 15 % que dicen no presentar otras conductas sexuales que les creen malestar. (Ver diagrama 19). se ca 94 Nueva parafilia del siglo XX1 Yolanda Navarro/José A. Lorea/Sara Rodriguez - Con respecto a qué otras conductas causan malestar: El porcentaje mayor de conductas se encuentra recogido en el apartado de otras, siendo conductas no especificadas en el protocolo de recogida de datos; el 14% muestran conductas sddicas: el 13% son frotteuristas el 12% paidofilicos: el 11% se clasifican como voyeuristas; un 9% se consideran exhibicionistas; mientras que otro 9% se consideran fetichistas; un 4% se clasifican como masoquistas, frente a otro 4% que se clasifican como fetichista trasvestista, (Ver diagrama 20). - Encuanto a la repercusi6n en las distintas areas de la vida: el 81% dicen causarle consecuencias en distintas areas de su vida, frente al 19% que afirman no tener repercusiones en otras areas. (Ver diagrama 21). - En cuanto a las distintas areas afectadas: el 35% dice repercutirle la chat-escatofilia en el area laboral; el 28% a nivel de pareja: el 20% problemas a nivel familiar y el 17% dice tener problemas con los amigos. (Ver diagrama 22). - Con respecto a la busqueda de ayuda de un profesional: s6lo el 6% de los sujetos de la muestra han buscado ayuda de un profesional frente a un 94% que atin no lo ha hecho. (Ver diagrama 23). DISCUSION El objetivo del estudio era explorar la posible existencia de una nueva parafilia fruto del uso de nuevas tecnologias. Los resultados obtenidos sobre la chat- escatofilia son bastante coherentes con las caracteristicas existentes en la literatura sobre la definicion de conductas parafilicas conocidas hasta el momento, aunque somos conscientes de que esto es un preambulo de estudios en profundidad sobre dicho tema. Partiendo de la definicién ofrecida por el DSM-IV sobre las parafilias, asi como de los distintos estudios llevados a cabo con los distintos tipos de parafilias existentes, se ha intentado buscar las posibles semejanzas y diferencias con dichos trastornos exitentes, para de esa manera poder deallorrar un perfil de los sujetos con chat-escatofilia. 95 Archivos Hispanoamericanos de $ ologia Vol. IX. No. 1, 2003 La aparicion de la chat-escatofilia parece estar situada en el rango de edad entre 0-20 aiios, siendo su mayor prevalencia entre los 0-35 aiios. Estos datos son coincidentes con otras paralilias como el exhibicionismo (Blair y Langienton, 1981) 0 el frotteurismo (DSM-IV), en donde se instala el principio de las parafilias en la adolescencia, considerando que posteriormente existe un de- clive de las mismas. La prevalencia del sexo masculino sobre el femenino también es una caracteristica comin en casi todas las parafilias estudiadas, exceptuando el masoquismo, en donde prevalece la mujer, pero incluso en este trastorno la raz6n es de | a 20 (APA, 1988). En cuanto a los datos obtenidos sobre el nivel cultural, los distintos estudios existentes sobre parafilias no ponen en claro la prevalencia o no de la asociacion de los niveles culturales a un tipo u otro de parafilia. Los tinicos datos mas esclarecedores parecen encontrarse en la distincién entre paidofilia heterosexual y homosexual, siendo en la parafilia heterosexual, mas caracteristica los sujetos de clase social baja, habitualmente en el paro, mientras que en la paidofil homosexual prevalece en las personas acomodadas. Otros estudios relacionados con el exhibicionismo, nos identifican la inteligencia, el nivel cultural y los intereses laborales de los exhibicionistas como iguales a la poblacién en gen- eral (Blair y Lanyton, 1981). En este estudio se recoge un mayor ntimero de sujetos con nivel cultural alto o medio, dato que nos parece logico ya que la parafilia que se estudia requiere que el sujeto tenga cierta cualificacién en informatica, puesto que es necesario conocimientos, aunque sean minimos, para navegar en salas de chat a través de internet. Con relacion a la orientacion sexual, 57 sujetos de los 67 de la muestra son heterosexuales. Dichos datos son coincidentes con la mayor parte de las parafilias, si bien, se ha de considerar que si las parafilias son conductas ocultadas por considerarse una desviacién sexual, y atin en muchos casos, los sujetos homosexuales siguen sin manifestar su orientacidn sexual, por lo que es posible que no tengamos suficientes datos sobre personas homosexuales 0 bisexuales. ya que no forman parte habitual de las muestras de los multiples estudios llevados acabo. Con relacién al estado civil, los sujetos chat-escatofilicos presentes en nuestra muestra son solteros sin pareja, seguidos de un 37% que presentan 96 sarro/José A, Lorca/S Nueva parafilia del siglo XX1 Yolanda Na ra Rodriguez relaciones estables, conviviendo con la pareja o sin convivir. Con relacién a las otras parafilias, se puede observar cémo los estudios ponen de manifiesto que los voyeuristas, los paidofilicos heterosexuales, los frotteuristas, los sadicos y los sadomasoquistas son personas en su mayoria con parejas estables. Con relaci6n a los datos de percepcién de la infancia y de habilidades de comunicaci6n, también existen datos que corroborarian el parecido de los chat- escatofilicos con otras parafilias. Asi, los sujetos chat-escatofilicos se describen como personas con problemas para establecer relaciones interpersonales, tanto en su adolescencia, como en la actualidad. A la vez, dicen ser personas con problemas a la hora de establecer relaciones afectivo-sexuales con el otro sexo, © con el mismo en el caso de ser homosexuales. Con respecto a este apartado, los datos observados ponen de manifiesto la posible semejanza con relacion a otras parafilias conocidas. Asi, los estudios existentes sobre exhibicionismo hablan de personas con dificultades a la hora de establecer relaciones heterosociales (Hackett, 1971; Mohr etal., 1964), asi como estimulos estresantes interpersonales tales como la implicacién inicial al quedar con una persona del sexo opuesto o el matrimonio (Smukler y Shiebel, 1975). Igualmente, existen estudios como los de McConaghy (1993) que manifiestan que los voyeuristas son personas timidas con citas limitadas durante su adolescencia. Otros investigadores aluden que no existen hallazgos fiables que consideren a los sujetos paidofilicos como timidos, pocos asertivos y socialmente aislados (Okami y Golberg, 1992). Sin embargo, existe controversia al respecto ya que otros investigadores hablan de los paidofilicos como sujetos con problemas a la hora de establecer relaciones interpersonales (Bard et al., 1987; Langevin, 1983; Langevin et al., 1985). Con relaci6n a la percepcién de la infancia y la comunicacién con sus padres, un porcentaje elevado de sujetos evaluaba tanto la infancia como la comunicacién con sus padres como negativa. Segiin Langevin, Paitich y Russon (1985) son frecuentes las relaciones perturbadas con los padres durante la infancia en sujetos voyeuristas. Con relacién a la educacién sexual recibida, se ha creido interesante tener en cuenta esta variable, ya que se sabe que es importante a la hora del desarrollo de muchas disfunciones sexuales, y se ha considerado importante para el desarrollo de las parafilias, aunque existen escasos datos al respecto. 97 Archivos Hispanoamericanos de Sexologia Vol. 1X, No. 1. 2003 Respecto a la conducta misma de chatear, se puede observar en los datos obtenidos, cémo el 87% de los sujetos siente la necesidad de enviar mensajes obscenos cuando comienza a chatear; esta conducta podria explicarse a través de las teorias que abogan por una etiologia de caracter compulsivo, asi, existen estudios que avalan cémo el exhibicionismo o el voyeurismo presentan caractertisticas de caracter compulsivo (MacConaghy, 1993). Siguiendo con las teorias etiolégicas de las parafilias, es importante recordar aquellas que abogaban por el establecimiento y mantenimiento de dichas conductas como un proceso de condicionamiento operante. Esto se deja ver en el presente estudio al analizar los porcentajes que aparecen con conducta masturbatoria. Los sujetos chat-escatofilicos presentan en un porcentaje elevado la necesidad de masturbarse mientras envian los mensajes obscenos. A su vez. al igual que otras parafilias como el frotteurismo (Labrador, de la Puente y Crespo, 1994), o el voyeurismo (Money, 1986) el recuerdo de este tipo de situaciones va acompaiiado de una masturbacién. Es importante en la definicién de parafilia tener en cuenta e] malestar que provoca dicho trastorno, asi, en la hoja de protocolo se establecieron varias preguntas con relacién a dicho malestar y el tiempo que Hlevaban padeciéndolo La percepcién de malestar era considerada en un 81% como siempre o casi siempre. Es caracteristico y curioso observar como no hubo ningun sujeto que considerara que nunca habja tenido malestar subjetivo por la conducta de chatear enviando mensajes obscenos. Dicha percepcién de malestar coincide con uno de los criterios diagnésticos establecidos para considerarse una parafilia, que es el considerar el malestar que dicha conducta provoca en el sujeto. y ademas. con relacién al tiempo de percepcion de malestar. En este trabajo el mayor porcentaje lleva padeciendo este trastorno entre 6 meses y 1 afio, con lo que ateniéndonos a los criterios de clasificacién diagnéstica que nos habla de un tiempo mayor de manifestacién de 6 meses, nuestro trastorno se podria diagnosticar como parafilia En cuanto a la comorbilidad con otras parafilias, en nuestra introduccién hicimos referencia a la controversia existente con la aparicién de varias parafilias a la vez. Esta investigacién deja explicito la aparicién de otras conductas parafilicas junto con la chat-escatofilia. Asi, los sujetos dicen manifestar otro tipo de parafilias ademas de la que es objeto de estudio en un 85% de los casos. 98 Nueva parafilia del siglo XX1 Yolanda Navarro/José A, LorewSara Rodriguez La cormobilidad mayor se encontraria entre la chat-escatofilia y otras no especificadas, seguidas en su mayor prevalencia por el sadismo, el frotteurismo, la paidofilia y el voyeurismo. Existen muchos datos que hacen referencia a la cormobilidad de unas parafilias con otras; asi, segin Freund y Blanchard (1986) existe una alta morbilidad entre exhibicionismo y voyeurismo, entre fetichismo y sadomasoquismo (Gosselin y Wilson (1980) y entre el exhibicionismo, el voyeurismo y la paidofilia (Freund y Blanchard, 1986). Siguiendo las consideraciones diagnosticas de la parafilia una de las quedice que es necesario tener en cuenta el grado perturbador para el individuo: bien produciendo un malestar subjetivo, bien causando interferencias en areas importantes del funcionamiento, como el trabajo y la adaptacion interpersonal. Si son descubiertos. los intereses parafilicos provocan, a menudo, conflictos de pareja y pueden conducir a una persecucion delictiva que, frecuentemente, desemboca en otra serie de problemas, como el aislamiento social y la pérdida de empleo. Analizando los resultados podemos observar como el 81% dice sufrir deterioro en distintas areas de su vida, siendo las mas prevalentes las del trabajo y la pareja, aunque la distribucién con respecto a la amigo no equidistan mucho. Con relaci6n a la asistencia a consulta, coincidiendo con otras parafilias, son pocos los sujetos que se han decido a asistir a consulta. Como conclusién final y en funcién de los datos obtenidos, se podria decir que nos encontramos ante un nuevo tipo de parafilia, que variara mas 0 menos en algunas caracteristicas con las ya existentes, pero que tiene en comin la excitacion ante un estimulo, que en este caso es el envio de un mensaje obsceno via chat, Segiin esto, podriamos dar una primera definicidn de esta parafilia que nos facilitaré a todos los profesionales una orientacion hacia un posible intervencién sobre las personas que la padezca, la definicién que creemos retine todas las caracteristicas estudiada seria: “/a chat-escatofilia es un trastorno caracterizado por impulsos y fantasias sexuales intensos yrecurrentes que entraman el envio de mensajes obscenos a través del chat aun desconocido/a. Ademads, estos impulsos tienen que causar un malestar subjetivo 0 provocar un deterioro en éreas importantes de la vida del sujeto. Los chat-escatofilicos a veces se masturban mientras chatean 0 posteriormente cuando recuerdan el acto en sus fantasias”. areas de familia y 99 Archivos Hispanoamericanos de Sexologia Vol. IX. No. 1. 2003 REFERENCIAS Aluja, A.; Martinez de Osaba, M. J.. y Torrubia, R. (1989). Testosterone and personality in males: A study in incarcerated and non incarcerated sub- Presentado al IV ISSID Conference, Heidelberg. in Psychiatric Asociation (1987/1988). Manual de Diagnostico y Estadistico de Trastornos Mentales (DSM-IV). Masson: Barcelona. American Psychiatric Association (2000), Diagnostic and statistical manual of mental disorders (DSM-IV-TR) (4°ed. Rev.), Washington, DC: Autor. (Trad Castellano. Barcelona: Masson. 2002), Barbaree, H. E. (1990). Stimulus control of sexual arousal: Its role in sexual ault, en W. L. Marshall, D. R. Laws y H. E. Barbaree (dirs.), Handbook of sexual assault, Nueva York, Plenum. Barbaree, H. E.; Marshall, W. L., y Lanthier, R. D. (1979). Deviant sexual arousal in rapists, Behaviour Research and Therapy, 17, pp. 215-222 Bard, L. A.; Carter, D. L.; Ceree. ight. R. A.; Rosenberg, R., y Scheider, Sct and child molesters: Developmental, 203-220. Blair, C. D.. y Lanyton, R. 1. (1981). Exhibitionism: Etiology and treatment, Psychological Bulletin, 89, pp. 439-463. Bradford, J. M. (1990). The antiandrogen and hormonal treatement of sex of- fenders, en W. L. Marshall, D. R. Laws y H. E. Barbaree (dirs.). Handbook of sexual assault, Nueva York, Plenum. Becker, J. V.. y Kavoussi, R. J. (1989). Trastornos sexuales. En J. A. Talbott, R. E. Hales y 8. C. Yudofsky (Eds.), Tratado de psiquiatria (pp. 579-595). Barcelona: Ancora. (Publicacién original: 1988). Freund, K.. y Blanchard, R. (1986). The concept of courtship disorder. Archives al Behavior, 12, 369-379. y Wilson, G. (1980). Sexual variations. Londres: Faber and Faber. M. (1991). Parafilias: Psicopatologia y tratamiento. Cuadernos de Medicina Psicosomatica, 17, 28-41. Carrobles, J.-A. (1990). Biologia y psicofisiologia de la conducta sexual, Ma- drid, Fundacién Universidad-Empresa. 100 Nueva paratilia del siglo XX1 Yolanda Navarro/losé A. Lorea/Sara Rodriguez Echeburtia, E., Amor, P., y Cenea, R. (1998). Adicciones a internet: {una nueva Monografias de psiquiatria, 2, 38-44 Freund, K.: Scher, H., y Hucker, $. (1983), Long-term psycological correlates of childhood sexual abuse in two samples of college men. Child Abuse and Neglect, 13, 533-542. Golbert, |. (1995). Internet addiction disorder- Diagnostic criteria. (Documento www). Internet Addiction Support Group (ASG). Disponible en: http:// www. iucf.indiana.edu/brown/hyplan/addict.html. Griffiths, M. D. (1998). Internet addiction: Does it really exist?. En J. Gackenbach (Ed.), Psychology and the Internet: Intrapersonal, interpersonal and transpersonal implications, 61-67. New York: Academic Pres: Hackett, T. P. (1971). The psycotherapy of exhibitipnist in a court clinic setti Seminars in Psychiatry, 3, pp. 297-306. Herman, J. L. (1990). Sex offenders: A feminist perspective. D.R. Laws y H. E. Barbaree (Eds.), Handbook of York: Plenum Press. Kolarsky, A.; Freund, K.; Machek, J.,O. (1967). Male sexual desviation: Association with early temporal lobe damage. Archives of General Psychiatry, 17, 735-743 Labrador, F. J.; De La Puente, M®, L., y Crespo, M* (1994). Evaluacién de las disfunciones sexuales. En A. Roa (Ed.), Manual de evaluacion en psicologia clinica y de la salud. Madrid: CPC. Langevin, R. (1983), Sexual strands: Understanding and treating sexual anomalies in men, Hillasdale, NJ, Lawrence Erlbaum Associates. Langevin, R.; Hucker, S. J.; Ben-Aron, M. H.; Purins, J. E., y Hook, H. J. (1985). Why are pedophiles attracted to children? Further studies of erotic preference in heterosexual pedophilia, en R. Langevin (dir.), Erotic preference, gender identidy, and aggression in men: New research studies. Hillsdale, NJ. Lawrence Erlbaum. Langevin, R.; Paitich, D.. y Russon, A. E. (1985). Voyeurism: Does it predict sexual aggression or violence in general?, en R. Langevin (dir.), Erotic preference, gender identity, and aggression in men: New research studies. Hillsdale, NJ, Lawrence Erlbaum. Langevin, R. (1990). Sexual anomalies and brain. En G. D. Wilson (Ed.), Vari- ant sexuality: Research and theory. Londres. Croom Helm. in W. L. Marshall, al assault. Nueva 101 Archivos Hispanoamericanos de Sexologia Vol. IX. No. 1, 2003 Manrique, R. C. (2003). El romance a través de internet. (Documento www). Disponible en http://www.angelfire.com/pelactualidadpsi/romance/html. Marshall, W. L.. y Barbaree, H. E. (1990). An integrated theory of the etiology of sexual offending, en W. L. Marshall, D. R. Laws y H. E. Barbaree (dirs.). Handbook of sexual assault, Nueva York, Plenum. Marshall. W. L.. y Eccles, A. (1993), Pavlovian conditioning processes in adolescent sex offenders, en H. E. Barbaree, W. L. Marshall y S. M. Hudson (dirs. ). The juvenile sex offender, Nueva York, Guilford. Marshall, W. L.; Hudson, S. M., y Hodkinsond, S. (1993). The importance of attachment bonds in the development of juvenile sex offending, en H. E. Barbaree, W. L. Marshall y S. M. Hundson (dirs.), The juvenile sex of fender, Nueva York, Guilford. McConaghy. N. (1980). Behavior completation mechanism rather than primary drives maintain behavioral patterns. Activitas Nervosa Superior, 22, 138-151. McConaghy, N. (1993), Sexual behavior: Problems and management, Nueva York, Plenum. McGuire, R. J.; Carlisle, J. M.. y Young, B. G. (1965). Sexual deviations as conditioned behavior: A hypothesis, Behavior Research and Therapy. 2. pp. 185-190. Money, J. (1984). Paraphilias: Phenomenology and classification, American Journal of Psychotherapy, 38, pp. 164-179. Money, J. (1986), Lovemaps: Clinical concepts of sexual/erotic health and pathology, paraphilia, and gebder transposition in childhood, adolescence, and maturity, Nueva York, Irvington. Morahan-Martin, J.M. y Shumacker, P. (1997). Incidence and correlates of pathological internet use. Articulo presentado en la 105th Annual Convention of the American Psychological Association, Chicago, Illinois. Mohr, J. W.; Turner, R. E., y Jerry, M. B. (1964), Pedophilia and exhibitionism, Toronto, University of Toronto. Quinsey, V. L., y Earls, C. M. (1990). The modification of sexual preferences, en W. L. Marshall, D. R. Laws y H. C. Barbaree (dirs.), Handbook of sexual assault, Nueva York, Plenum. Okami, P., y Golberg, A. (1992). Personaly correlates of pedophilia: reliable indicators?, Journal of Sex Research, 29, pp. 297- Are they 102 Nueva paratilia del siglo XX1 Yolanda Navarro/José A. Lorea/Sara Rodriguez Smukler, A. J., y Shiebel, D. (1975). Personality characteristics of exhibitionists. Diases of the Nervous System, 36, pp. 600-603. Young, K.S. y Rodgers, R.C. (1998b). The relationships between depresion and Internet addiction. CyberPsychology and Behavior, I, 25-28. 103 Archivos Hispanoamericanos de Sexologia Vol. IX, No. 1, 2003 ANEXOI Protocolo de recogida de datos + cae AO Menos de 20ahos 1D Ente 208s IT Ente 588 og AT Erte 4855 aoe I TMS de SS aos SHlombee IDMeser + esado em ‘Saisoters.sin pars AASoteo, con pres ATCoewviendo cons parga ATSeparadoDvotendo AIViaso + Nivel cual “SB Ait (A parti de COU) Antedo (Racin ITs Graduada escolar Sin estados + Onenucisn seve Ticmoresiat WAsieeat AAHeeoseruat + Coma considera que bso sila SaNtay Agaibie, 2Tayradable JONcrmal IDDewpiadae SEIMuy deagradable Como perebe quetasdo a comarca con Su pacts? B5ptoy ens 2TBaera 2ONoval + (Cémo gonidera que so etucacon Sesal resin SOvy adecunds VAdecunds Normal AADesadecuads JOay deradecuads Consider qu loan desu adolecencah hs tendo problemas a hora de esablece elacones interpersonal co aos” Siempre FACasistomite DA veces AACasi nunca TNunca Consider que ao acualmente ene problemas aia hota de esablce telacionesnespesonales con anaes? “S3Siempre 2ACasi sempre ADA veces AACast munca SANs Consider qu’ engeoblemas aa ota de eater elsciones aetvo-senuales? “Disiempre FICas sempre AVA seses “Acasimanca Nemes + Tempe deicade x chte ‘TO stees det hora al dis AAD" | a2horae alia AIDE? aS hows ab din SaDe3 a thoes ata IMS de # hors at da enviar mensajes obeceno adh ez gues poe a ehten™ JOstay naa Siete a necesidad de mastrbarre cuando ena los mensajes obsceros” JA siempre cas sempre AOA vecer PICs wanes NOI Tiene fantasia enuaes sobre ln cndact de chats nviande remaje vce? 5s" J5N0 + GTine fn nevesdad de turbine cuando ene dha amas Seunte? ‘BOsemmre EICase sempre AIA veces ICase nunca EPNnca “Le provoce taletat gp poder coma a conduct de chatea erviando mensajes bscencs? BSiemore, LICase sempre AA veces ICA manea sTNunca Terps que leva pecbiendo este alsa TSsterosdet meses Tene meesy 13> JDe | ato 2 ator JDDe tats 23 aos IIMs de 3 aes | Manet ooas conduc sexanenguele crane ima masa?” ‘S35, SANs + Seales padece sigan dens condacas que apatecen continua ‘” PEttbronnume lanpliony fonau senuaesy tcatetes que enatan I expescion de os propion geass descomerdo) Noveunsme (observa sub 5 dren aur persona que tosh desnadando 0 que ests inmersa en Inacividad sees! {que none que ets send observed) 1 esteurno impale tants y conducts que plea el contacto 4 oe con une perions qe no consents) 1 Fetch (mpulon senate, amano conceals gue mpl e so de bytes si dn) 1. Fetuhamo tanveststampuos, mass o conducts que enafan vstive con ops de sexo cps) 3 a a Pvt antasas e plo sovila tensor recstertes ue enh actividad sexual con ks prepares) ‘Siisma eatntaceon seal a aves dein experienc de dole hea a prson) Masoqumo (stntacion seal a tanés de expenencias de umilacion une mist) ton trig cas Ha afezado ete grblena nets areas desu vids? Is) Ne Encasoafrmatve mhque en que areas lee que ha repercunco sy problems ‘Dares Fama 1OAmigos ACT Teabsy0 a asada consulta de un profesional ora ner soluconar su problema? “3s; SNe. EEmunce sts desu grado algane a os mensajes que habsualmente avin a tants de chal y quel prowocan mayor exeiaein 104

You might also like