Professional Documents
Culture Documents
BIENESTAR EMOCIONAL NnAm
BIENESTAR EMOCIONAL NnAm
Introducción
Capítulo 1 - ¿Qué es la ansiedad?
1.1 - Trastornos de la ansiedad
1.2 - Complicaciones en los trastornos clásicos de ansiedad
1.2.1 - Trastorno de ansiedad generalizada
1.2.2 - Los ataques de pánico
1.3 - La correlación entre la ansiedad y las fobias
1.3.1 - Fobias específicas
1.3.2 - Fobias sociales
1.3.3 – La agorafobia
1.4 - Cuando la ansiedad se convierte en una patología real: trastornos
obsesivo-compulsivos
1.4.1 - Trastornos de estrés postraumático
1.4.2 - Trastornos asociados: alcoholismo y tabaquismo
1.4.3 - Depresión y trastornos de la alimentación
Capítulo 2 - Cómo manejar la ansiedad
2.1 - Entender las razones que dieron lugar a la ansiedad
2.1.1 - Abordar el trauma y las fobias es el primer paso para superar la
ansiedad
2.2 - El aumento de la autoestima ayuda a controlar los trastornos de
ansiedad
2.3 - El pensamiento es la principal fuente de ansiedad
Capítulo 3 - Transformar la ansiedad en energía positiva
3.1 - La ansiedad puede ser útil
3.1.1 - Reír es bueno
3.2 - Deportes y danza como la terapia farmacológica más eficaz
3.3 – La fuerza de voluntad para contrarrestar los estados de ansiedad
3.3.1 - Cuando el amor es sinónimo de ansiedad
3.3.2 - Creencia en el futuro
3.4 - Tratamiento psicoterapéutico para superar estados de ansiedad
Conclusiones
DEPRESIÓN
Introducción
Capítulo 1 - ¿Qué es la depresión?
1.1 - Las razones por las que uno se deprime
1.1.1 - La visión distorsionada de la realidad
1.1.2 - Las ilusiones
1.2 - El proceso de puesta a tierra: ¿Qué es?
1.2.1 La depresión alternando con la exaltación
1.2.2 - Ejercicios de bioenergía
1.3 - ¿Cómo funciona la depresión?
1.3.1 – Estado depresivo
1.3.2 – El sentimiento se reprime cada vez más
1.3.3 – La negatividad puede conducir al suicidio
1.3.4 – Fatiga y apatía: dos síntomas de depresión
1.3.5 – El bipolarismo
Capítulo 2 – Depresión y psicoanálisis
2.1 – La pérdida de una persona o de un objeto y las reacciones humanas
2.2 – Engañar a los demás o engañarse a sí mismos
2.2.1 – El amor y la fe como remedio contra el engaño
2.2.2 – El papel de las mujeres en el engaño y el autoengaño
2.3 – El animismo y la energía
2.3.1 – Correlación entre depresión y falta de espiritualidad
Capítulo 3 – Tratamiento de la depresión: psicoterapias y terapias naturales
3.1 – Las psicoterapias
3.1.1 – Terapia cognitiva y conductual
3.1.2 – Psicoterapia interpersonal
3.2 – Tratamiento en grupo
3.2.1 – Ayuda terapéutica familiar
3.3 – La solución cognitiva
3.4 – Terapias naturales
3.4.1 – Mantenimiento de la alimentación
3.4.2 – La actividad deportiva es beneficiosa para el bienestar psicofísico
3.4.3 – Fitoterapia y homeopatía
Conclusiones
ESTRÉS
Introducción
Capítulo 1 – ¿Qué es el estrés?
1.1 – Estrés y sistema nervioso
1.1.1 – Hiperactividad de las estructuras nerviosas
1.1.2 – El sistema nervioso vegetativo
1.1.3 – El sistema simpático y el sistema parasimpático
1.2 – Fases del síndrome de estrés
1.2.1 – Alarmas iniciales
1.2.2 – Las llamadas fases de resistencia
1.2.3 – Agotamiento de las reservas de energía
1.3 – Reacciones corporales en las distintas fases y efectos biológicos
1.4 – Causas del estrés
1.4.1 – Asuntos directos
1.4.2 – Causas indirectas
Capítulo 2 – Principales síntomas causados por el estrés
2.1 – Insomnio
2.1.1 – Características del sueño y factores que influyen en el insomnio
2.2 – Trastornos del sistema digestivo
2.2.1 – Náuseas, estreñimiento y diarrea como síntomas principales
2.3 – Taquicardia y dolor de pecho
2.3.1 – El corazón como órgano más sensible al síndrome de estrés
2.4 – Dolor de cabeza y falta de energía
2.4.1 – Dolores musculares e influencias frecuentes
Capítulo 3 – Tratamiento del estrés
3.1 – Terapias naturales para el tratamiento del estrés
3.1.1 – Tratamiento físico
3.1.2 – Terapias químicas
3.1.3 – Psicoterapias
3.2 – La musicoterapia ayuda a afrontar los momentos difíciles de la vida
3.3 – El amor y la amistad: la unión hace la fuerza
Conclusiones
ANSIEDAD
Introducción
Los trastornos de ansiedad son sensaciones, a veces crónicas, que involucran
a millones de personas. Estos son estados de ánimo que afectan a todo el
cuerpo humano, tanto física como mentalmente, e incluso crean inhibición en
el desempeño de ciertas funciones. A menudo este tipo de trastorno está
vinculado a un acontecimiento, pasado, presente o futuro, que asume el
control del pensamiento del sujeto afectado y que altera la visión de la
realidad.
La ansiedad es provocada por eventos pasados, cuando tales eventos
representan un trauma en la vida de un individuo. El trauma puede estar
relacionado con una visión, con un sentimiento sentido o con una simple
percepción, pero crea una distorsión de la realidad, que a su vez genera
pensamientos angustiados y obsesivos. Sin embargo, si se vincula a
acontecimientos futuros, la ansiedad se alimenta de la inseguridad que posee
el sujeto. Estos eventos pueden ser representados por exámenes escolares,
citas románticas o competiciones deportivas. En este caso la persona ansiosa
no es capaz de planear el futuro objetivamente, porque la presencia de este
evento crea manifestaciones de ansiedad y preocupación. Por último, la
ansiedad puede ser causada por la intolerancia hacia las situaciones
cotidianas, que el sujeto se ve obligado a afrontar a pesar de no sentirse capaz
de hacerlo. La falta de fuerza y vigor son en realidad sólo el resultado de una
alteración cognitiva y por lo tanto es necesario reequilibrar la contribución de
energía dentro del organismo. Este tipo de ansiedad puede ser causada por
situaciones desagradables dentro de la familia, el lugar de trabajo o dentro del
entorno social estrecho, que implican a amigos y conocidos.
Otra causa capaz de desencadenar estados de ansiedad son las fobias. A
menudo este tipo de miedo extremo puede estar asociado con motivaciones
innatas, pero este no es siempre el caso. A veces, de hecho, los temores están
relacionados con el trauma de la infancia, tal vez suprimido dentro de la
memoria del sujeto afectado.
Capítulo 1 - ¿Qué es la ansiedad?
La ansiedad es un estado emocional que genera preocupación y malestar,
debido a situaciones particulares como el trauma o debido a una reacción del
sistema neuronal, amplificado con respecto a la realidad. Los sujetos que
sufren este estado de ansiedad encuentran difícil relacionarse normalmente
con otros individuos, razón por la cual la ansiedad afecta no sólo a quienes la
viven, sino también a las relaciones sociales del sujeto.
Cada ser humano ha vivido o vivirá en el curso de su vida una situación de
ansiedad, que provocará estados de nerviosismo, miedo, confusión, en los
casos más agudos también depresión y ataques de pánico. Desde la
adolescencia se siente esa sensación de malestar en el estómago debido al
primer amor cocinado, pero en la edad adulta la ansiedad se puede rastrear
también a situaciones laborales o familiares. Hay situaciones que generan una
ansiedad positiva, útil para tratar tales situaciones con mayor tenacidad, como
la ansiedad antes de un examen, antes de una importante reunión de trabajo.
El problema surge cuando un individuo sufre constantemente de trastornos de
ansiedad, en cada gesto de la vida, ya no siendo capaz de actuar con lucidez.
1.3.3 – La agorafobia
La agorafobia es el tercer tipo más común de fobia, y representa el miedo a
los espacios abiertos en los que no hay control de las situaciones. El término
"agorà" significa de hecho "plaza" y se utilizó para indicar la plaza como
lugar de reunión y agregación. Así la agorafobia también puede ser descrita
como el miedo de frecuentar lugares abarrotados desde los cuales uno no
puede ver una salida en caso de peligro o alerta. Por lo general, las personas
que sufren este trastorno también sufren de ansiedad y ataques de pánico, que
hacen que este miedo se desarrolle más fuertemente.
El sujeto agorafóbico tiende a evitar todas las situaciones que puedan
causarle pánico, como estar en un concierto o en una sala llena de gente,
conducir, subir a un autobús o avión, pasar por un puente o tomar el ascensor.
Todo esto tiende con el paso del tiempo a alterar la vida cotidiana y la calidad
de vida, con repercusiones tanto personales, como laborales y sociales.
La agorafobia puede estar relacionada con un trastorno de pánico o no estar
relacionada con otros tipos de trastornos. En ambos casos la terapia útil para
la curación es siempre la cognitiva-conductual, que tiene como objetivo
educar al sujeto para enfrentar las situaciones que podrían generar pánico y
estrés. La psicoterapia también puede ser crucial para el tratamiento de la
agorafobia, mientras que los medicamentos sólo son beneficiosos a corto
plazo.
1.4 - Cuando la ansiedad se convierte en una
patología real: trastornos obsesivo-compulsivos
Cuando la ansiedad se convierte en el amo de la vida de una persona, cada
situación puede ser experimentada con tal angustia que requiere una
preparación psicológica y mental real antes de enfrentarla. En estos casos se
puede hablar de trastorno obsesivo-compulsivo.
Los trastornos obsesivo-compulsivos causan niveles muy altos de ansiedad en
el sujeto afectado, que el sujeto trata de calmar con rituales específicos que
son en realidad insignificantes. Puede haber una variedad de situaciones que
son objeto de este problema, pero en general provocan asco y miedo excesivo
en los que lo sufren. Se habla de obsesiones y compulsiones, incluso si a
veces tales trastornos se llaman erróneamente delirios o fijaciones. Las
obsesiones se refieren a imágenes y pensamientos negativos que se repiten
continuamente en la mente del sujeto, mientras que las compulsiones
representan los rituales establecidos para derrotar tales pensamientos. Una de
las obsesiones más extendidas es la de la fobia a los gérmenes y bacterias,
que conduce al lavado continuo de las manos. Otro trastorno obsesivo se
puede identificar como la necesidad de verificar una determinada cosa
repetidamente, como comprobar si el gas está cerrado o la puerta cerrada. El
trastorno se diagnostica cuando estas actividades ocupan al menos una hora
durante el día, interfiriendo con la vida cotidiana. Los sujetos adultos que
sufren de este trastorno se dan cuenta de que sus acciones no tienen sentido y
no resolverán sus problemas, sin embargo, no pueden evitar lograrlos de
todos modos, los niños que sufren de esta enfermedad no se dan cuenta.
Incluso este tipo de trastorno puede ocurrir en cualquier etapa de la vida de
una persona, desde la infancia hasta la edad adulta, y afecta a alrededor del
2% de la población, en igual medida entre hombres y mujeres. El curso de los
problemas no es uniforme, sin embargo, puede variar de un tema a otro,
afecta en gran medida la predisposición familiar.
Los trastornos obsesivos-compulsivos también pueden ir acompañados de
otras complicaciones, como alcoholismo, tabaquismo, depresión y trastornos
alimenticios.
Conclusiones
Una vez que hayas identificado todas las causas que pueden causar trastornos
de ansiedad leves o de alta intensidad que afectan la psique de una persona,
puedes tratar de abordar estos síntomas con el fin de derrotarlos. En cierto
sentido es posible imaginar la ansiedad como un ánfora llena de energía
negativa. Cuando el sujeto entra en contacto con su propia fobia, con los
traumas sufridos durante el período de la infancia o cuando los
acontecimientos futuros que generan impaciencia y ansiedad tienden a
acercarse, el ánfora se vacía gradualmente y se liberan componentes
energéticos. Por lo tanto, el sujeto ansioso debe aprender a transformar la
ansiedad de un componente negativo en energía positiva.
De esta manera es posible explotar todos los componentes positivos que
derivan de una liberación repentina de energía para lograr sus objetivos: por
ejemplo, mediante la explotación de los trastornos de ansiedad es posible
lograr un aumento de uno mismo-estima, pero también superar el trauma y el
miedo, el ejercicio a niveles óptimos y especialmente reír.
Uno de los factores más importantes que afectan los trastornos de ansiedad es
la fuerza de voluntad. Gracias a ella es posible escapar del túnel creado de la
ansiedad y afrontarlo, gracias también a una conciencia en los propios medios
siempre mayor, que concuerde optimizar su bienestar diario. Una vez que
aprendas a combatir la ansiedad, también es posible planificar tu futuro
objetivamente y entender qué caminos realmente quieres tomar en tu vida.
Hay, en cualquier caso, tratamientos puestos en marcha por médicos
especializados en este campo, que te permiten abordar los trastornos de
ansiedad de la manera correcta. Gracias a estas terapias, que actúan
directamente a nivel psicológico, un sujeto intuye cómo la ansiedad opera a
nivel físico y psíquico y obtiene información importante sobre cómo lidiar
con ella, de tal manera que ya no tenga que sufrir las consecuencias que ha
causado.
DEPRESIÓN
Introducción
El principal problema relacionado con la depresión es su gran variedad en las
formas de insinuación dentro del ego de un individuo. En particular, esta
variedad depende de la inmensidad de las causas que pueden causarla y de la
infinita gama de consecuencias que puede crear.
Por esta razón es esencial entender en detalle qué es la depresión en realidad
y también entender cómo se expresa. La identificación de los síntomas es, de
hecho, el primer paso hacia la curación de un sujeto, pero debe ser capaz de
alcanzar la conciencia en relación con el problema que lo agarra. Sólo una
vez que el sujeto es consciente de lo que está enfrentando es posible
establecer la base para reactivar todas las funciones y conexiones biológicas
que la depresión inhibe progresivamente.
1.3.5 – El bipolarismo
La correlación entre depresión y bipolaridad es muy alta, de manera que el
trastorno bipolar se denomina a menudo depresión maníaca. Las principales
consecuencias de las formas más leves de bipolaridad son los continuos
cambios de humor, la reducción de los niveles de energía y los
comportamientos y pensamientos inadecuados para un sujeto sano.
Durante un ciclo bipolar la personalidad del sujeto cambia repentinamente y
se desencadenan las emociones suprimidas en la fase depresiva. Esta
explosión emocional, energética, hormonal y biológica puede llevar a
acciones sin sentido, como renunciar, gastar mucho dinero en cosas inútiles o
incluso quitarse la vida.
El cerebro del sujeto deprimido durante estas fases se enfrenta a un cambio
real, un desequilibrio, debido a cambios repentinos en las funciones de la
tiroides y de los neurotransmisores, y un trastorno en la actividad cardíaca, y
precisamente en la secreción hormonal.
En estos casos, la intervención del psiquiatra es fundamental y a veces
también es necesario el uso de medicamentos que mantengan alejada la
personalidad no propia del sujeto.
Capítulo 2 – Depresión y psicoanálisis
El enfoque del mundo del psicoanálisis sobre la depresión y sus
consecuencias se basa inicialmente en el intento de regularizar la respiración.
Como ya se ha mencionado, entre todas las formas de inhibición de los
impulsos que provocan el estado depresivo se incluye la inhibición de la
actividad respiratoria. Respirar, una acción que no debería requerir ningún
tipo de aplicación y fatiga, puede resultar muy agotadora, especialmente
cuando se carece de energía. Para intentar restablecer la toma regular de
oxígeno y desarrollar una respiración abdominal adecuada, es posible realizar
un ejercicio bioenergético con la ayuda de un caballete. Para estimular la
respiración, es necesario enrollar una pequeña toalla sobre sí misma y
colocarla por encima de un caballete que tenga una altura aproximada de 25
centímetros. El sujeto deberá posicionarse en estilo puente, arqueando la
espalda y extendiendo los brazos, mientras que los pies permanecerán
firmemente anclados al suelo; los brazos deberán permanecer tendidos sin
tender hacia el suelo. La posición, que debe mantenerse durante unos dos
minutos, ayudará a reactivar la respiración regular, sin que la misma
provoque una sensación de pesadez o fatiga.
Una vez finalizado este simple ejercicio, el sujeto deberá doblarse hacia
adelante y tocar con la punta de los dedos el suelo, con las rodillas
ligeramente flexionadas y espaciadas entre ellas. El objetivo de este ejercicio
es invertir el arco del ejercicio anterior, estimular la vibración de los tejidos
musculares y generar una sensación de relajación, que es la base sobre la que
actuar. La vibración actúa como un disparador de la vitalidad y crea una
sensación de placer que el sujeto ya no ha sido capaz de experimentar.
Sólo en este momento es oportuno implicar la parte emocional del paciente,
incitándolo a expresar lo que siente a través de la voz. Al principio, las
personas deprimidas que muestran una apertura al sarpullido sólo expresan
emociones negativas, pero es un primer paso hacia la total liberalización de la
mente y del cuerpo de la depresión. Una vez que el paciente, a través de su
voz, suscita sentimientos, se puede intentar liberar energía dentro de su
organismo: uno de los métodos más eficaces es tratar de producir un llanto o
gritos, que sirven de válvula para afrontar las hostilidades sufridas en el
pasado. De esta manera los dolores son aliviados y es posible traer al sujeto al
mundo real, arrancándolo, al menos temporalmente, del mundo ilusorio que
él mismo creó.
Se debe informar al paciente de que la depresión no sólo actúa sobre la
mente, sino que también desestabiliza el equilibrio de todo el organismo: Por
esta razón, es importante que el mismo sujeto se concentre en intentar
recuperar lo antes posible todas las funciones de su cuerpo.
A través del psicoanálisis, por lo tanto, es necesario restaurar el equilibrio y
el conocimiento en el sujeto deprimido. Es importante restablecer el estado
normal de todas las funciones para garantizar la energía necesaria para la
subsistencia y la supervivencia.
Capítulo 3 – Tratamiento de la
depresión: psicoterapias y terapias
naturales
Los datos estadísticos han confirmado que el número de personas con
trastornos depresivos ha aumentado considerablemente en las últimas
décadas. En concreto, solo en el continente europeo, unos 30 millones de
personas han sufrido o siguen sufriendo la “melancolía” freudiana. En apoyo
de estos datos se encuentran las estadísticas sobre el aumento de terapias
naturales para combatir la depresión sin el uso de psicofármacos. Estas
terapias tienen un impacto menos relevante en la psique de las personas
deprimidas, tienden a buscar un contacto cada vez más amplio con la realidad
y por lo tanto resultan muy eficaces. Por supuesto, la acción es eficaz en un
intervalo de tiempo medio a largo, pero la misma tiene por objeto recuperar
completamente al sujeto y no sedarlo mediante el uso de bombas
farmacéuticas. Esto no significa que no sea necesario confiar en un
especialista del campo, como un neurólogo o un psiquiatra.
Las psicoterapias, las terapias grupales y las terapias naturales representan,
por tanto, las modalidades de tratamiento menos invasivas que pueden
adoptar las personas deprimidas.
ESTRÉS
Introducción
El estrés es el síndrome que ha afectado a más personas que cualquier otra
enfermedad. Especialmente en la sociedad moderna la ansiedad, el estrés y la
depresión son trastornos bastante comunes, que pueden ser curados
rápidamente sin necesidad de consulta médica, debido a la fuerte reacción del
cuerpo, o que pueden perdurar durante un tiempo bastante largo asumiendo
un carácter crónico y provocando malestar adicional y consecuencias que
pueden conducir a problemas patológicos peores y graves.
Por este motivo, es importante no subestimar nunca el estrés y es
fundamental comprender cómo actúa y qué consecuencias tiene en el cuerpo
humano. En particular, es muy importante conocer cuáles son las causas más
comunes que pueden provocar un síndrome de estrés, de modo que se trate de
prevenir la formación de este trastorno.
Así que es necesario adivinar cuáles pueden ser las consecuencias, tanto las
más leves y comunes como las peores y más raras, para entender que un
trastorno psicológico, capaz de alterar las funciones del sistema nervioso
central y del sistema vegetativo, no es en absoluto subestimable.
2.1 – Insomnio
El insomnio es el trastorno del sueño por excelencia y es la incapacidad de
las personas para dormir regularmente, a pesar de que el organismo
demuestra su necesidad fisiológica. Las causas del insomnio son, además del
estrés, la fatiga y la irritabilidad, pero también pueden ocultar trastornos
patológicos que necesitan profundización.
Cada sujeto se atiene al llamado ciclo del sueño, es decir, un ciclo bio-
psicológico que permite la recuperación total o parcial de las energías
necesarias para afrontar la vida cotidiana y cuya duración coincide con la de
un día entero: el insomnio altera de forma natural este ciclo provocando una
acumulación de cansancio y la imposibilidad de recuperar las energías
necesarias para el día siguiente.
Según los expertos, el 35 % de la población en su conjunto padece trastornos
del sueño y el 20 % presenta el trastorno del insomnio, que ha progresado
hasta su crónica. En general, el trastorno afecta en mayor medida a las
mujeres y a las personas de edad avanzada, ya que son las que están más
expuestas a las preocupaciones. Esto significa que existe una clara
correlación científica entre el síndrome de estrés y los trastornos del sueño.
Para comprender la importancia del sueño es necesario comprender que el ser
humano pasa dos tercios de su vida durmiendo. Al mismo tiempo, sin
embargo, el hombre tiende a disminuir la importancia biológica del sueño,
entendiéndolo a menudo como una pérdida de tiempo.
Así pues, el insomnio no permite a un sujeto afrontar el día siguiente con la
energía y la vitalidad necesarias, modificando incluso su psique: los aspectos
negativos se exageran, mientras que los positivos son menospreciados y
subestimados. Esto no hace más que aumentar el número de factores que
pueden activar los sistemas de alarma previstos por el sistema nervioso
central. A largo plazo, esta situación conducirá a la total incapacidad de
realizar las tareas más sencillas que requiere la vida cotidiana.
En efecto, la función del sueño es desplazar la actividad biológica de los
órganos, y en particular de las vías respiratorias, cardiovasculares y
locomotoras, a los sistemas hormonales, enzimáticos y metabólicos. En
efecto, estos últimos sistemas permiten a todo el organismo recuperar en
cuestión de horas todas las energías, destinándolas de nuevo a los órganos y
al sistema musculoesquelético durante el día.
La regulación de todo el ciclo del sueño es gestionada por el sistema nervioso
vegetativo, es decir, por el mismo sistema que activa las reacciones y las
respuestas en caso de que un sujeto se sienta amenazado por una fuente de
estrés. Por lo tanto, un sueño regular induce una respuesta más rápida y eficaz
del cuerpo: en este sentido, el insomnio se convierte no sólo en consecuencia
del estrés sino también en fuente que lo hace enraizarse cada vez más en el
interior del sujeto.
Conclusiones
El estrés, por lo tanto, muestra varios aspectos negativos que sin embargo es
posible tratar sin excesivas dificultades. Sólo en los casos más graves, es
decir, cuando el estrés tiene consecuencias psicosomáticas, es necesario
recurrir a tratamientos que impliquen el consumo de medicamentos y una vía
terapéutica bien definida y bien definida.
La mayoría de las veces los trastornos causados por el síndrome de estrés se
tratan a través de terapias naturales. Se trata de terapias que no tienen ningún
efecto negativo y que están destinadas a alcanzar un solo objetivo: la
relajación total del cuerpo. Al mismo tiempo, estas terapias no deben inducir
a la excesiva relajación: la vida del ser humano sigue siendo frenética y
requiere una concentración constante y una gran reactividad.
Por esta razón es siempre muy útil tratar de no hacer frente al estrés
directamente con los psicofármacos que combaten fácilmente el estrés a nivel
nervioso pero que tienen muchísimas contraindicaciones.
Para lograr el mayor beneficio, es posible recurrir a las terapias físicas, como
la cinesiterapia y la actividad física, a las terapias químicas, como la
acupuntura, la fitoterapia y la homeopatía, y a la psicoterapia, que incluye
todas las actividades meditativas y las técnicas de relajación.
Por lo tanto, alcanzar la total relajación es el único método para tratar el
estrés de forma totalmente natural. Sin embargo, esto no siempre es fácil. A
veces, el estrés puede estar muy arraigado en el sistema nervioso central y en
el sistema vegetativo. En estos casos es posible seguir un camino, siempre sin
el uso de medicamentos, que no sólo permite curar del trastorno, pero que
lleva a profundizar en las técnicas útiles para enfrentar nuevamente la
problemática en el futuro y, sobre todo, a prevenirla.