DERECI
|OY HUMANIDADES 9 (20012-2003),
El “cédigo” de Hanmurapi:
Sentido politico, forma cientifica y aporte juridico
BeNimin Toro Icaza!
Profesor del Departamento de Ciencias Histbrieas
Facultad de Filosofia y Humanidades
Universidad de Chile
“Que la ‘ley y el orden’ cesan de existir
Que las ciudades son destrnidas, que las casas son arrasadas,
Que Jos rios [de Stimer] fluye agua amarga
Que la madre no cuiida de sus hijos
Que el monarca es alejado del pais.
Texto sumerio del ITI nilenio a. C.
I. Problemiatica
Una de las tareas cotidianas de los historiadores ha sido el constante trabajo por derribar
ciertas creencias preconcebidas del comin de la gente, que tienden a ser vistas como verdades
eternas ¢ invariables. No nos atreveriamos a hablar de ciertos “mitos” cotidianos, porque el
alcance de dicha palabra es muy extenso y la expresién “derribar mitos” no parece ser la mis
adecuada al llevar a cabo esta prictica historiografica. Lo cierto es que la Historia se escribe
de una forma u otra, hasta que el peso de las circunstancias obliga a replantearse el pasado y
escribirlo de una nueva forma.
Partamos con cierta “informacién” historica entregada a nuestras mentes escolares: en el
curso de la primera mitad del IIT milenio a. C., los pueblos del Antiguo Préximo Oriente
crearon el primer cédigo de leyes, el famoso “Cédigo de Hammurabi”, especificamente en la
Mesopotamia, y en la antigua ciudad de Babilonia, capital del imperio creado por el rey
Hammurabi. Sin exagerar, también podria decirse que dicho dato pareciera resumir lo més
importante que se recuerda, o que debe recordarse, con respecto a toda la antigua Mesopotami
Quizis aqui encontramos diferentes elementos que constituyen uno de estos mal Iama-
dos “mitos” contemporineos, Ahora, tendriamos que ver si efectivamente existen los datos
necesarios para poder “derribar el mito” del famoso “Cédigo de Hammurabi”, atacando las
bases que lo sostienen. Para empezar, partamos por el mis elemental: el nombre correcto de
Licenciado en Historia, Universidad de Chile; Estudios de Postgrad en el Institto Retbengy en el institato de Arquso-
Joga, Universidad Hebeea de Jerunlén Profvor de Histor Antigua dl Primo Oriente, Universidad de Chil
xBENJAMIN TORO ICAZA
este personaje histérico no es “Hammurabi” sino “Hammunapi, por cuanto la primera oleada
de pueblos semitas invasores provenientes del Occidente “los amorreos- fueron quienes hicie~
ron de la ciudad de Babilonia (Babili o Bab-ilani: “la puerta de] dios” o “la puerta de los
dioses”) una capital con cierto renombre.“Hammurapi”, en este caso particular, es un nombre
amorreo”.
Hammurapi fae la figura mas sobresaliente de principios del Il milenio a. C, Gobernd
entre los aiios 1792 y 1750 a. C. Fue un lider paciente, ambicioso, cauto y resuelto, que loge
crear un imperio que transformé la perspectiva histérica de la antigua Mesopotamia. Con
ello, Babilonia se convirtié en un centro politico, cultural y religioso de gran renombre. Du-
rante veinte afios, Hamurapi se dedicé a construir templos y canales. Posteriormente, fue
capaz de vencer una coalicién enemiga compuesta por los reinos de Elam, Gutium, Eshaunna
y Malgium. En el afio 1763 a. C. conquistd Larsa y Eshinunna. Dos aitos después derroté a Mari
y la destruyé en el 1757 a. C. Con ello, consolidé su posicién y la de su ciudad, Pese a todo,su
estela con el famoso cédigo constituye su obra mis recordada.
Ahora
nes necesario hacer justicia a las fuentes de la Mesopotamia y reconocer que el
llamado “cddigo” de Hammurapi no fue ni el