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Figuras literarias 1

2.3. Figuras producidas por repetición de palabras


 Anáfora:
Repetición de una o varias palabras al comienzo de varias frases o versos. Como toda repetición, sirve
para crear ritmo y para resaltar lo que se dice, en este caso la palabra repetida.
Soy eco de algo;
lo estrechan mis brazos...
lo miran mis ojos,
lo besan mis labios.
 Anadiplosis o conduplicación:
La palabra final o palabras finales de un enunciado van al comienzo del que sigue:
Mi sien, florido balcón
de mis edades tempranas,
negra está, y mi corazón,
y mi corazón con canas.
El uso continuado de anadiplosis se denomina concatenación :
-...sobre el corazón un ancla,
y sobre el ancla una estrella,
y sobre la estrella el viento,
y sobre el viento la vela.
 Derivación:
Se combinan palabras que proceden de una misma raíz:
Pues mientras vive el vencido/ venciendo está el vencedor.
 Epanadiplosis:
La frase o el verso comienza y termina con la misma palabra:
Crece su furia y la tormenta crece.
 Polisíndeton:
Repetición de conjunciones que no son estrictamente necesarias. Da un tono solemne y lento.
Y yo me iré. Y se quedarán los pájaros
cantando;
y se quedará mi huerto con su verde árbol,
y con su pozo blanco.
 Retruécano:
Se repiten varias palabras, o una oración entera, con inversión del orden de sus elementos:

Sus vergonzosas noches de amor sin deseo / y de deseo sin amor. (Jaime Gil de Biedma)

2.4. Figuras producidas por combinación de palabras

 Calambur:
Se crea una frase en la que al unir las sílabas de otro modo se producen palabras con distinto
significado:
Oro parece, plata no es.

 Dilogía o equívoco (o juego de palabras o silepsis):


Utilización de palabras con doble sentido; se sirve de palabras que se pronuncian igual, o que se
escriben igual o son parónimos. Puede dar origen a pasajes de gran ingenio y es recurso de abundante
uso para la comicidad:
CLOTILDE. Discúlpeme. Estaba distraída.
EZEQUIEL. Celebro que mi conversación la distraiga.
(Enrique Jardiel Poncela)
Un día los hierros de tus balcones presenciarán a solas yerros mayores.

 Hipérbaton:
Consiste en la inversión del orden lógico o del orden gramatical de las palabras. Sirve para realzar
alguna palabra o concepto, como recurso de embellecimiento y elegancia o para buscar efectos rítmicos.
Del salón en el ángulo oscuro...
Figuras literarias 2

 Paralelismo: Repetición de estructuras sintácticas. Sirve para crear un ritmo muy marcado y
también para resaltar una idea o palabra.
¡Los suspiros son aire y van al aire!
¡Las lágrimas son agua y van al mar!
 Quiasmo: Especie de paralelismo en el que las estructuras repetidas invierten el orden en que se
repiten:
Ayer naciste y morirás mañana...

2.3 y 2.4 Ejercicios para las figuras producidas por repetición y por combinación de palabras

1. Destruye los hipérbatos, restableciendo el orden sintáctico normal de los siguientes fragmentos:

a) muy este fácil ejercicio es


b) En una de fregar cayó caldera.
c) Allí la blanca ola
bate de la amistad.
2. Vuelve a escribir estos fragmentos de un poema de Bécquer haciendo desaparecer los hipérbatos.
Volverán las oscuras golondrinas
de tu balcón sus nidos a colgar...
Volverán las tupidas madreselvas
de tu jardín las tapias a escalar...
Volverán del amor en tus oídos
las palabras ardientes a sonar...

3. Di qué figura literaria predomina en el siguiente texto:


La plaza tiene una torre,
La torre tiene un balcón,
El balcón tiene una dama,
La dama, una blanca flor.
Ha pasado un caballero
-¡quién sabe por qué pasó!-,
y se ha llevado la plaza,
con su torre y su balcón,
con su balcón y su dama,
su dama y su blanca flor.
Antonio Machado

4. Rellena los espacios en blanco para crear un retruécano.

Ø En este país no se ............................ porque no se escribe o no se............................... porque no se lee. (Larra).


Ø El ánimo crea la riqueza: es preferible un hombre sin ............................ que el dinero sin un ...........................
Ø Buena verdad es que ni la juventud sabe lo que puede, ni la vejez ......................................................................
Ø El que pretende pasar por ................................................. pasa por necio entre los sabios.

5. Explica la dilogía del siguiente texto.


Si el hombre quiere, imperfecto,
la perfección alcanzar,
el buen camino es el recto
¡y por él debe tomar!
Figuras literarias 3

6. Localiza todas las figuras por repetición o por combinación de palabras (excepto el retruécano) en los siguientes
fragmentos. Ten en cuenta que la mayoría de las figuras aparecen repetidas y que en un mismo texto puede haber
varias.
a) Y el rayo de Israel abrió su mano,
y los dejó y cayó en despeñadero g) Y la carne que tienta con sus frescos racimos,
el carro y el caballo y caballero. y la tumba que aguarda con sus fúnebres ramos.
(Fernando de Herrera) (Rubén Darío)
b) Yo vivo en paz con los hombres h) h) ¡Paraíso perdido!
Y en guerra con mis entrañas. Perdido por buscarte,
(Antonio Machado) yo, sin luz para siempre.
c) Vi el populoso mar, (Rafael Alberti)
vi el alba y la tarde,
vi las muchedumbres de América, i) Por casco sus cabellos, su pecho por coraza...
vi una plateada telaraña (Rubén Darío)
en el centro de una negra pirámide, j) Entre lirios y rosas,
vi un laberinto roto... Su Majestad escoja.
(Jorge Luis Borges) (Quevedo)

d) Del monte en la ladera k) Vienen de aquella sangre,


por mi mano plantado tengo un huerto... vienen de aquella selva,
(Fray Luis de León) vienen de la lujuria de una médula tierna.
e) El poeta murió, (José Luis Hidalgo)
el poeta fue enterrado,
el poeta se transformó en estiércol, k) Pues otra vez de la bárbara guerra
el estiércol abonó la avena, lejos retumba el profundo latir.
la avena se la comió el buey, (J.M. Heredia)
el buey fue sacrificado...
(León Felipe) l) Y la gente reñía a gritos y a palos, también a tiros
con la gente.(Camilo José Cela)
f) Había esperas de blancura en su rostro
blanquísimo y había que decirles palabras blancas
y darles besos blancos. m) Salió de la cárcel con tanta honra, que le
(Ramón Gómez de la Serna) acompañaron doscientos cardenales; salvo que a
ninguno llamaban eminencia. (F. de Quevedo)

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