Es la presión que ejerce una fuente de suministro de energía eléctrica o
fuerza electromotriz (FEM) sobre las cargas eléctricas o electrones en un circuito eléctrico cerrado, para que se establezca el flujo de una corriente eléctrica. El voltaje conduce la energía eléctrica con mayor o menor potencia.
A mayor diferencia de potencial o presión que ejerza una fuente de FEM
sobre las cargas eléctricas o electrones contenidos en un conductor, mayor será el voltaje o tensión existente en el circuito al que corresponda ese conductor.
En el Sistema Internacional de Unidades, dicha diferencia de potencial se
mide en voltios (V), y esto determina la categorización en “bajo” o “alto voltaje”. Algunos voltajes comunes son el de una neurona (75 mV), una batería o pila no recargable alcalina (1,5 V), una recargable de litio (3,75 V), un sistema eléctrico de automóvil (12 V), la electricidad en una vivienda (230 en Europa, Asia y África, 120 en Norteamérica y 220 algunos países de Sudamérica), el riel de un tren (600 a 700 V), una red de transporte de electricidad de alto voltaje (110 kV) y un relámpago (100 MV).