Roman Gubern 1 a a ( mh NOS yf 5 pi) Ce Ad Nd em y apéndices de Joaquim Romaguera i RamioEl cine antes del cine La fantasia humana ha volado con frecuencia por delante de la realidad, y el cine, antes de existir parpadean- do sobre las pantallas, habia habitado como proyecto los suefios de muchos hombres. Desde las sombras chines- cas de la cultura oriental hasta la linterna mdgica de la cultura europea, la reproduccién de im4genes en mo- vimiento se habia revelado como una aspiracién permanente en los ensue- fios humanos. Pero este proyecto li- dico, emparentado al mito del espe- jo magico y al cartelén de ciego cami- nante con relatos ilustrados de crime- nes terribles o de milagros, no podia convertirse en auténtica realidad hasta que el progreso desbocado de la cien- cia en el siglo xix —de la quimica fo- tografica y de la mecdnica en parti- cular— proporcionase los utillajes ca- paces de convertir aquella aspiracién 1893 En USAy Alemania se fabrican los primeros automéviles. [ee] Claude Monet: La Catedral de Rouen. [Arte]36 Edvard Munch: El grito, [Arte] Sigmund Freud: Estudios sobre la histeria. {Lit.] CIEN ANOS DE CINE - VOLUMEN 1 de ribetes mdgicos en realidad tangi- ble y visible. En 1874, la fantasia humana vuela sobre las alas de Julio Verne en La isla misteriosa, que, publicada en ese afio, IlegarA a ser una de sus novelas mas populares. Pero en ese mismo afio el astrénomo francés Pierre-Jules- César Janssen idea el primer aparato para fotografiar un cuerpo en movi- miento y en fases sucesivas: el revdl- ver astronémico, Su artilugio fue con- cebido con la idea de registrar foto- graficamente, en el Japén, el paso de Venus ante el Sol. Para ello, Janssen disefié un tambor con una placa fo- tografica giratoria que se desplazaba detrés de un objetivo éptico merced a los disparos de un gatillo, de modo que podia impresionar fases sucesivas de un cuerpo en desplazamiento. El invento pionero de Janssen dio lugar al nacimiento de la cronofotografia, palabra pedante que en realidad des- cribia la sucesién de fotos instantaneas de un mévil en el curso de una trayec- toria. La cronofotografia se desarrollé en Europa y en América gracias a los trabajos de investigadores o de aficio- nados que vieron en la fotografia ins- tantanea un precioso instrumento para estudiar los movimientos corporales del hombre y de los animales. En San Francisco, y por encargo del millona- rio Leland Stanford, el fotégrafo in- glés Eadweard Muybridge, reputado por sus fotos hipicas, emprendié laUN SUENO HECHO IMAGEN tarea de averiguar, mediante la foto- grafia instantanea, si un caballo al ga- lope permanece en algin momento con sus cuatro cascos en el aire, sin tocar el suelo. Tras realizar con poco éxito ensayos muy laboriosos, por fin Muybridge consiguié su propésito uti- lizando un ingenioso recurso precursor del cine. A lo largo de una porcidn del hipddromo de Palo Alto instalé doce c4maras, cuyos disparadores eran accionados por cintas que cruzaban la pista y que eran pulsadas por las pa- tas del caballo en su galope. De este modo consiguié Muybridge las prime- ras series de instanténeas consecuti- vas de un animal corriendo. Es decir, habia conseguido el andlisis fotogrd- ‘ico del movimiento. el procedimiento de Muybridge, sus ventajas eran notorias: Muybridge ne cesitaba doce camaras consecutivas, 37 Muerte de José Zorrilla. Emil von Behring descubre el suero contra la difteria. [Cien.] Anton Dvorak: Sinfonia del «Nuevo Mundo». (Mis)38 Rudolf Diese! empieza a construir e! motor de aceite pesado que llevara su nombre, [Téc.] Empieza en Espafia el periodo de atentados anarquistas, [Hist] CIEN ANOS DE CINE - VOLUMEN I cada una con su placa fotogrdfica, mientras Marey operaba con un tni- co artefacto, en cuyo interior se im- presionaban doce poses sucesivas. La economia del ingenio era evidente. Los procedimientos hasta aqui des- critos eran procedimientos de anéali- sis o de descomposicién fotografica del movimiento, pero para que el cine fuese una realidad era menester dis- poner también de un sistema dptico para la posterior recomposicién o sin- tesis del movimiento previamente des- compuesto. A ello se aplicé Emile Reynaud, quien perfeccioné el juguete éptico infantil llamado zodtropo para crear su praxinoscopio (1876). Este apa- rato, sucesivamente perfeccionado por Reynaud, superé a los anticuados z0d- tropos (en los que las imagenes en mo- vimiento se contemplaban sobre una tira de papel deslizante y a través de una ranura) al conseguir proyectar sus im4genes dibujadas sobre una pantalla gracias al uso de espejos y a un obje- tivo de proyeccién. De este modo, de un juguete 6ptico infantil, Reynaud derivé un espectdculo para publico adulto, pues las imagenes proyectadas sobre pantalla podian ser, gracias a su tamafio, contempladas por bastan- tes personas a la vez. Reynaud pa- tenté su Teatro Optico en 1888 y utili- zando tiras dibujadas y coloreadas por él mismo lo exhibié en el famoso Musée Grévin de Paris, con el titulo de «Pantomimas Luminosas». Es de- cir, Reynaud asenté sobre su rudimen-UN SUENO HECHO IMAGEN tario invento una verdadera industria del espectdculo, precvrsora del cine, aunque unicamente en el campo de los dibujos animados. Efectivamente, Reynaud siempre trabajé con tiras exquisitamente di- bujadas, pero jamds proyecté foto- grafias en movimiento. En este punto existian una serie de problemas técni- cos importantes, cuya resolucién debe mucho al pintoresco Thomas Alva Edison, el mas caudaloso inventor de utilleria eléctrica que es hoy de uso doméstico, desde la bombilla eléctrica al tocadiscos. Edison, arquetipo ejem- plar del homo faber de la era tecnold- gica, se dedicé también a investigar la fotografia del movimiento, y a él se debié el invento de la pelicula de ce- luloide, con perforaciones laterales para su arrastre. Esta cinta, utiliza- da como soporte para las imagenes fotograficas, reunfa las condiciones de ser flexible, resistente y transparente (ademas de inflamable). Suministrada a los laboratorios de Edison por la casa Eastman Kodak a partir de 1889, los requisitos técnicos de esta pelicu- la la hacfan apta para circular entre una fuente de luz y una lente de au- mento, de modo que un observador podia contemplar la circulacién de las fotografias consecutivas. Utilizando este elemental principio, patenté Edi- son el kinetoscopio (1891), un apara- to de visién individual que invadié las ferias y las salas de juegos mecanicos y eléctricos en Estados Unidos, ofre- 39 1894 Alfred Dreyfus es condenado en Francia convicto de traicién. [ist] Nicolis Il, zar de Rusia. [Hist.1 Guerra chinojaponesa [Hist.)40 Empieza a Publicarse en Paris La Revue Blanche. {Lit.] Auguste Rodin: Los burgueses de Calais. (Arte) Beardsley: Salomé con la cabeza de san Juan Bautista, [Arte] Publicacion del tereer tomo de El Capital, de Karl Marx. [Lit] CIEN ANOS DE CINE - VOLUMEN I ciendo a los curiosos escenas breves en las que aparecian gimnastas, baila- rinas o acrébatas efectuando sus ejer- cicios. Probablemente Edison pensé que los beneficios econédmicos obte- nidos con su aparato de visién indivi- dual —en la tradicién picaresca del «mirén indiscreto»— serfan necesaria- mente mayores que los conseguidos mediante salas de proyeccién, al mo- do del espectdculo teatral, porque lo cierto es que este ingenioso y fecundo inventor no se interes6 en perfeccio- nar su sistema, para lograr la proyec- cién sobre pantalla, tal como otros investigadores estaban ensayando en Europa por aquellas mismas fechas. En efecto, William Friese-Greene en Inglaterra, Max Skladanowski en Ale- mania y otros cientificos europeos es- taban trabajando en la soledad de sus laboratorios para perfeccionar la per- cepcién de las imagenes fotogrdaficas en movimiento. Quienes primero lo consiguieron, o por lo menos dieron fe publica de haberlo conseguido, fueron los hermanos Lumiére, de Lyon. Louis y Auguste Lumiére, con su padre An- toine, dirigian en aquella ciudad una préspera industria fotogrdfica. Louis llevaba algun tiempo estudiando el problema de la proyeccién de pelicu- las, cuando una noche en que el dolor de muelas le condené al insomnio tuvo la feliz idea de aplicar el principio de las vulgares mAquinas de coser al arrastre de la pelicula en el proyec- tor, para obtener el arrastre intermi-UN SUENO HECHO IMAGEN tente de la cinta (es decir, la deten- cién momentdnea de los fotogramas sucesivos entre la fuente de luz y el objetivo, durante una fraccién de se- gundo, para permitir la proyeccién de sus imagenes sobre la pantalla). El 13 de febrero de 1895, los Lumiére pa- tentaron su cinematdégrafo (del griego kinema «movimiento», y grafein, «es- cribir») y el 22 de marzo lo exhibieron en los locales de la Sociedad para la Promocién de la Industria Nacional, en Paris, acompafiado de una confe- rencia de Louis Lumiére. La buena acogida obtenida por su todavia rudi- mentario aparato —que servia indis tintamente de cAmara tomavistas, de proyector y \para tirar copias— les incité a planear una explotacién publi- ca y comercial de su invento. 41 1895 Rudyard Kipling: El libro de la selva. {Lit] Claude Debussy: Preludio a la siesta de un fauno, inicio del impresionismo musical. {Mus.] George Bernard Shaw: La profesion de la sefiora Warren. (Teat.]La pantalla, espejo del mundo «De todos mis inventos, es el que menos me ha costado», solia afirmar, refiriéndose al cine, Louis Lumiére, empresario en quien el hombre de ciencia dominé siempre al hombre de negocios. Para los Lumiére el cine era ante todo y sobre todo un instru- mento cientifico, un aparato repro- ductor de la realidad por medio de la fotografia, un medio de conocimien- to visual. Para su publica presenta- cién en sociedad, el 28 de diciembre de 1895, no eligieron los Lumiére un teatro de renombre, sino el sdétano del Grand Café de Paris (que antafio habia sido sala de billar), ni prece- dieron su presentacién con una rui- dosa campafia publicitaria, sino que se limitaron a exhibir un anuncio ex- plicativo en los cristales exteriores del café; y su repertorio de peliculitas ofrecia prosaicas escenas cotidianas,UN SUENO HECHO IMAGEN como la legada de un tren a la es- tacién o la salida de los obreros de una fabrica... Tuvieron, no obstante, la buena idea de presentar su invento entre las Navidades y el Final de Afio, en una fecha en que el Boulevard des Capucines —en donde estaba situado el Grand Café— suele estar atestado de viandantes y compradores. Y, por otra parte, las reducidas dimensiones de la sala elegida para la proyeccién motivarian aglomeraciones y colas en caso de éxito, a la vez que disimularian el fracaso de una asistencia exigua. No obstante lo dicho, las perspecti- vas de la explotacién comercial del cine eran tan inciertas, que el dueiio del Grand Café —un italiano apelli- dado Volpini— rehusé participar en un porcentajegde las recaudaciones y estipulé un alquiler de treinta fran- cos diarios. La recaudacién de la pri- mera sesién fue, en efecto, muy mo- desta: los treinta y cinco francos ob- tenidos cubrian poco mas del monto del alquiler de una jornada. Sin em- bargo, aquellos primeros espectadores ocasionales de la exhibicibn de Lu- miére —entre quienes se hallaban al- gunos cronistas cientificos y empre- sarios teatrales expresamente invita- dos— salieron tan entusiasmados de la proyeccién que se convirtieron en sus primeros propagandistas y en agentes desencadenantes del formida- ble éxito ptiblico del Cinematégrafo Lumiére. Como antes sefialamos, el éxito pti- 43 Wilhelm C. Roentgen descubre los rayos X. [Cien} Alfred Nobel crea los premios que llevan su nombre. [Hist.]Otto Wagner publica Arquitectura ‘moderna, [Arte] Sidney Webb funda la «Escuela Londinense de Ciencias, Politicas y Econémicas». {Cien.] Victor Horta: Hotel Solvay de Bruselas. [Arte] CIEN ANOS DE CINE - VOLUMEN 1 blico del invento de Lumiére no guar- daba proporcién ni relacién con la tri- vial cotidianeidad de los temas docu- mentales elegidos para aquella sesién: Salida de los obreros de la fdbrica Lu- miére (Sortie de Vusine Lumiére & Lyon), Rifia de nifios (Querelle de bé- bés), Los fosos de las Tullerias (Bas- sin des Tuileries), La llegada del tren (L’Arrivée d’un train en gare de La Ciotat), El regimiento (Le Régiment), El herrero (Le Maréchal ferrant), Partida de naipes (Partie d’écarte), Destruccién de las malas hierbas (Mauvaises herbes), La demolicién de un muro (La Démolition d'un mur) y El mar (La Mer). El impacto psicol6- gico provocado por aquellas cintas breves y triviales no procedia desde luego de los acontecimientos represen- tados, sino de la abrumadora y con- vincente «impresién de realidad» sus- citada por las imagenes ofrecidas en tanto que perfecta duplicacién éptica del mundo real. Sobre esta «impresién de realidad» se basara justamente el edificio de la «verosimilitud cinemato- grafica» y la consiguiente fascinacién colectiva ejercida por el cine sobre millones de espectadores, quienes gra- cias al mecanismo psicolégico de la identificacién-proyeccién «viviran» las aventuras de sus héroes sobre la pan- talla. El mejor testimonio de esta fas- cinacién psicoldégica lo ofreciéd en aque- lla hora temprana el sorprendido cro- nista de Le Radical, quien en su pin-UN SUERO HECHO IMAGEN toresco articulo sobre el acontecimien- to sefialaba: «Cualquiera que sea la escena asi impresionada y por grande que sea el ntimero de personas sor- prendidas en los actos de su vida, us- tedes los vuelven a ver, en tamaiio natural, con los colores, la perspecti- va, los cielos lejanos, las casas, las calles, y toda la ilusién de la vida real.» Ndétense los colores que el ano- nadado periodista Ilegé a percibir en aquellas peliculitas en blanco y negro. Desde el punto de vista social, al- gunas de las peliculas ofrecidas por Lumiére resultaban involuntariamen- te significativas. La locomotora, uno de los grandes protagonistas de la re- volucién maquinista del siglo que con- cluye, es tema central de La Ilegada del tren, vehiculo cuyo dinamismo —el tren avanzando desde el fondo hacia la cAmara provocé no pocos sobresal- tos en los primeros espectadores— le convertira en pretexto reiterado del cine primitivo. La clase obrera, pro- tagonista de la sociedad industrial que ha cambiado la faz de Europa, esta presente en La demolicién de un muro, en Destruccién de las malas hierbas y, sobre todo, en Salida de tos obreros de la fédbrica Lumiére, pe- licula que, perdido hoy el caracter pu- blicitario que tuvo para su autor y el ptiblico de la época, permanece ante nosotros como una espléndida estam- pa laboralista del momento. Partida de naipes, interpretada por miembros de la familia Lumiére, ofrece en cam- 45 Stephen Crane: La roja insignia del valor. {Lit.] H. G. Wells: La méaquina del tiempo. Lit.)46 Adolphe Appia publica La mise en scéne du drame wagnérien. [Mas] Entrada de los italianos en Abisinia, transformando: el protectorado en colonia. (Hist. CIEN ANOS DE CINE - VOLUMEN I bio como reverso un testimonio nota- rial de las costumbres de la burguesfa finisecular. Y es que con las modestas cintas de Lumiére, el cine demostra- ba ya su eficacia como testimonio do- cumental, como acta éptica de la rea- lidad social expuesta ante su cd4mara, con mucha mayor fidelidad y convic- cién que la que pudieron alcanzar has- ta entonces la literatura o la pintura. Por esto Louis Lumiére vio en su invento un instrumento cientifico y testimonial, pese a que su mayor éxi- to econémico, orientador acerca de los deseos del puiblico, se lo proporcio- né una peliculita cémica y articulada en un leve argumento: El regador re- gado (L’Arroseur arrosé). En esta cin- ta, un nifio travieso pisaba la mangue- ra del jardinero y, cuando éste exa- minaba la boca de la manga extrafia- do, levantaba el pie y le ponfa calado hasta los huesos. Este chiste visual —un gag, en el argot futuro del cine— inauguré con jtibilo colectivo la histo- ria del cine cémico, pero pese a ello, Lumieére prefirié orientar el uso de su aparato al campo verista del documen- tal y de las actualidades. Para ello en- viéd Lumiére a sus operadores hacia otros paises, bautizando al cine como «el gran viajero». Sus operadores, que eran a la vez agentes comerciales con Ja misién de implantar sucursales de Lumiére en otras latitudes, exhibian peliculas de su repertorio ante espec- tadores siempre aténitos, a la vez queUN SUENO HECHO IMAGEN registraban imdgenes con destino a su central francesa. De esta expansién viajera nacié la primera pelicula de «actualidades», cuando la cAmara nd- mada de Francois Doublier rodé, en Rusia, La coronacién del zar de Mosct (Le Couronnement du tsar Nicolas II), haciendo del cine un verdadero «ojo de la historia», Posando ante las cA4maras, los vanidosos monarcas eu- ropeos ‘fueron los més eficaces pro- pagandistas de la magia blanca de Lu- miére. Promio, un operador de la em- presa que descubrié el efecto de tra- velling al pasear en g6éndola por el Gran Canal de Venecia, evocaria en sus Memorias el impacto que produjo su aparato en la corte espafiola: «En Madrid —escribirfa Promio— el cine- ma fue la causa indirecta de una pe- quefia revolucién en el Palacio Real. Habia pedido a la Reina Regente la ne- cesaria autorizacién para operar en los cuarteles o en los campos de ejercicios a fin de registrar escenas de caballe- ria, infanterfa, etc. Con la mayor ama- bilidad, la soberana accediéd a cuanto yo solicité. Cuando me ocupaba de la artilleria, y no queriendo limitarme a un desfile banal, expresé al oficial mi deseo de que funcionasen las piezas. Levanté los brazos al cielo y me dijo que se negaba a transmitir tal deman- da, afiadiendo que debia limitarme a lo que se me habia concedido. Insisti, sin embargo, y cuarenta y ocho horas Miguel de Unamuno: En torno al casticismo. [Lit] Juan Valera: Juanita la Larga. {Lit.] 4748 Inauguracion del canal que une los mares Norte y Baltico. {Hist J Kathe Kollwitz: La rebelin de los tejedores. [Arte] CIEN ANOS DE CINE - VOLUMEN I después recibi aviso de que la reina daba érdenes para que se preparasen seis cafiones, con gran asombro de los oficiales, que hubieron de confesar que el Cinematégrafo Lumiére tenia influencia enorme sobre los sobera- nos.» Con la complicidad de zares, reyes y notables, las cd4maras de Lumiére registraron, por lo tanto, im4genes en México, Turquia, Africa del Norte, Oriente Medio, India y hasta en la mis- teriosa China. El «gran viajero» de Lumiére, desdefiando Ja fabulacién y la invencién de ficciones, cumplié el propésito de convertir a las panta- las de cine en espejos del mundo. Pero a finales de 1896, no era Lumié- re el tinico industrial que estaba lan- zando peliculas al mercado. En Esta- dos Unidos, Inglaterra y Francia, como se vera, irrumpian nuevos productores de peliculas, planteando a Lumiére su competencia en un plano que intere- saba escasamente al industrial de Lyon: en el plano del espectdculo. Cientifico antes que showman, Lu- miére despidi6 en 1898 a casi todos sus operadores, pero siguidé trabajando en el perfeccionamiento técnico de su invento: en 1900 patenté un sistema de cine en relieve y en la Exposicién Universal de Paris exhibié una proyec- cién gigante, de 16x21 m; en 1902 inauguré su sistema de proyeccién cir- cular Photorama y en 1903 patenié elUN SUENO HECHO IMAGEN procedimiento de fotografia en color Autochrome Lumiére. Pero en esta fe- cha el cine estaba desarrollandose ya como industria y como espectaculo en manos de mercaderes, prestidigitado- res y aventureros guiados de intencio- nes muy diversas de las que motiva- ron a su inventor. 49 Karl Linde consigue la licuacion det aire. [(Cien.]Pagina anterior: e| fusil fotografico de Marey en accion. Arriba: Auguste y Louis Lumiére en 1895.“ 4 Véritable Maison Lume CREEE EN 16 8, Dpilavati, Sxtat Oars = PORTE STMARTIN Wo pas confodre cnet hs BuaUssvats silts, re portant poe Pondicstion sua VERITABLE MAISON LUMIERE Poem onto, tableaux, par Seance Izquierda: cartel publicitario de una exhibicién de Lumiére. Abajo: el praxinoscopio fue un juguete 6ptico derivado del zootropo.El zoétropo del inglés W. G. Horner (1834) permitia obtener la ilusién del movimiento de una figura dibujada que giraba, vista a través de una ranura.