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Cees ee, métodos para la dositicaciou del concreto Presentacién La industria de la construccién es una de las ramas més dindmicas de cualquier pafs. Asimismo, esta actividad es fuente de trabajo que ocupa gran parte de la poblacién econémicamente activa, sin considerar las actividades conexas. Ejemplo de lo anterior son los multiples programas de construccién que existen en casi todos los paises del orbe, donde se contratan los servicios de los constructores, en sus diferentes niveles. Sin embargo, para que los constructores logren eficientes resultados en su profesién nece- sitan revisar constantemente las modificaciones cientificas en este campo. Una de esas innovaciones es presentada por el Ing. Vitervo O'Reilly Diaz, asesor del Ministerio de Construccién de la Repiblica de Cuba y encargado de la produccién del cemento que se consume en ese pais. El Ing. O'Reilly ha escrito una interesante tesis, cuyo objetivo fun- damental es demostrar las ventajas de los 4ridos en el consumo del cemento y las medidas para su ahorro. Los planteamientos que propone el Ing. O'Reilly en su obra, permiten al estudioso en esta rama, mane- jar un método para determinar las caracteristicas de forma de los Aridos y de relacién agua cemento para una adecuada resistencia. El contenido de los temas, orienta, al lector especializado, a obtener un gran ahorro en el cemento y en el disefio de mezclas de hormigén. La tesis del Ing. O’Reilly, que propone nuevos caminos en este im- portante renglén de la industria de la construccién, lo hace merecedor de una sincera felicitacién por parte de nuestra Universidad. Dr. Alejandro M. Montalvo Pétez Rector de la Universidad Aut6énoma del Estado de Morelos. Cuernavaca, Mor. Enero de 1993 Prélogo En un viaje a la Reptiblica de Cuba tuve contacto con el Ing. Vitervo O'Reilly Diaz quien se encarga de la produccién de todo el concreto (hormigén para los cubanos) que se consume en Cuba. O'Reilly es Asesor del Ministerio de Construccién de la Repiblica de Cuba y también de la produccién del cemento. En su tesis doctoral él investiga y obtiene un método de dosificacién de concreto a partir de la Ecuacién de Bolomey, que es empleada por muchos pafses, sobre todo curopeos, para dosificar concreto. Sin embargo, con su investigacién, no s6lo logré su tesis de grado cientifico de Doctor de Ciencias, sino que al Ievarla a la practica esta- blecié un método de dosificacién de concreto que ha ahorrado a su pais, durante varios afios, un promedio de 200 toncladas de cemento, anuales. Para un pais que tiene problemas de produccién de cemento, esto es tan significativo que ha sido condecorado por su pafs varias veces; al grado que el Presidente Fidel Castro ha dicho “Este hombre es una cementera”. El ahorro que el “METODO O’REILLY”, comparado con otros métodos (europeo, ACI), ahorra 14% de consumo de cemento por m? de concreto, Esto tiene una repercusién econémica muy importante en la industria de la construccién. En México, la produccién de concreto en forma industrializada es muy bajo comparado con Estados Unidos y Cuba, ya que del total del concreto consumido en Ja industria de la construccién; el 20% es pro- ducido por concreteras y el 80% es producido en la obra; cuando en E.U.A. y Cuba se producen 80% en concreteras y el 20% en obra, 95% en concreteras y 5% en obra, respectivamente. En los ultimos afios y a raiz del temblor de 1985 en las normas técnicas del reglamento de construccién del Distrito Federal, que sirve 7 de base para casi todos los reglamentos de construccién del pais, con ayuda de normas de otras dependencias oficiales, se establece que el concreto en el Distrito Federal se deber4 dosificar por peso y no por volumen. Esto genera que la produccién de concreto en obra pricticamente desaparezca 0 que las grandes empresas de Ja industria de la construc- cién empleen dosificadoras. Y ya que una de las inquietudes de la actual administracién de la Facultad de Arquitectura de la U.A.E.M., es la de estar en contacto con las tecnologias aplicadas que puedan aportar beneficio, tanto para sus alumnos, como a los profesionales de la construccién, se propuso ante la comisién editora de la U.A.E.M., la publicacién de este libro que serviré como texto del curso del “METODO O'REILLY”, que se impartiré en nuestra Facultad por el Dr. Ing. Vitervo O'Reilly Diaz con Io cual nuestra Facultad daria a conocer un método que puede traer beneficios para nuestro pais, en el momento que necesitamos alter- nativas, para poder afrontar el compromiso que el Tratado de Libre Comercio necesita. Agradezco al Ing. Vitervo O’Reilly por brindarnos la primicia de ser publicado su libro fuera de Cuba, asi como su amistad. Arq. Armando Lépez Gasca Coord. Area Tecnologia Facultad de Arquitectura de la U.A.E.M. Cuernavaca, Mor. Enero de 1993 Introduccién Los reglamentos y proyectos de normas vigentes en muchos paises para dosificar, el hormigén, recomiendan el empleo de la ecuacién de Bolo- mey, la cual tiene entre sus factores componentes, el coeficiente empiri- co K, cuyo valor caracteriza la calidad del arido seleccionado para confeccionar la mezcla de hormigén. La demostracién de que esta ecuacién y los valores dados para K no son validos para los dridos triturados, constituy6 parte del contenido de mi tesis para la obtencién del Grado Cientifico de Doctor en Ciencias. Pero lo més importante es la aplicacién de un nuevo método para do- sificar el hormigén, que requiere de la determinacién previa de las racteristicas de los aridos y en funcién de ellas, se disefia la mezcla; ademés, incluye la influencia de la plasticidad del hormigén en estado fresco, lo cual no se introduce en la mayoria de las ecuaciones de los autores contempordneos. También debemos sefialar que para los dridos de forma irregular, no es posible aplicar los métodos de la composicién éptima de las mez- clas de 4ridos basados en las relaciones directivas de las fracciones de ellos, tal como lo recomiendan, por ejemplo, las curvas granulométricas ideales. Tanto este tiltimo aspecto, como los anteriormente expresados, tienen una gran influencia en el consumo de cemento. El objetivo fundamental de la tesis fue demostrar la influencia cuan- titativa de la forma de los Aridos en el consumo de cemento y segiin las condiciones dadas, proponer medidas para su ahorro. Las nuevas relaciones para el cdlculo de la resistencia del hormigén a la compresién, posibilitan, en cada condicién dada, determinar con mayor exactitud los valores necesarios para el cAlculo de la composicién de las mezclas de hormigén, mediante una forma asequible para los técnicos medios que trabajan en las plantas de prefabricado o en las obras. En la primera parte de este libro se presenta un método facil para aplicar los resultados de la investigacién realizada. El resultado final de esta aplicacién depende sélo del rigor con que se realicen los ensayos para la determinacién de la caracteristica de forma de los dridos y de la cantidad de agua necesaria para una plasticidad exigida. En la bisqueda de cémo simplificar la determinacién de la carac- teristica de forma de los Aridos, logrames un método fisico-matematico que se expone en la segunda parte de este libro; con cste método, a partir de caracteristicas muy especificas de las particulas de los Aridos a estudiar, tales como la esfericidad esterecmétrica y la redondez de cada una de ellas, Ilegamos a una expresién que permite calcular con exactitud el valor de estas caracteristicas, sin que otros factores ajenos a ella puedan influencirala. Esto garantiza poder determinar la carac- teristica de forma de los 4ridos en muy corto tiempo, a diferencia de nuestro primer método, que require como minimo 28 dias. La tendencia mundial de emplear hormigones con alta consistencia es cada vez mayor, ya que representa, en el orden econémico, un gran ahorro de cemento y un mejoramiento en sus caracteristicas, Esta ten- dencia nos condujo al completamiento de los estudios de las dosifi- caciones del hormigén, por lo que en la primera parte de este libro exponemos un método para el disefio de mezclas de hormigén con baja consistencia y en la tercera parte, un método para el disefio de mezclas de hormigén con alta consistencia, a partir de los equipos de vibracién disponibles para su compactacién y en el que también se tienen en cuenta las caracteristicas de los Aridos a utilizar. Parte I Método para dosificar mezclas de hormigén con baja consistencia Antecedentes Las condiciones tecnolégicas de muchos paises ocasionan, en la pro- duccién de los hormigones, un consumo excesivo de cemento, lo que se manifiesta no sélo en la economia de la produccién, sino también en la afectacién de algunas propiedades mecdnicas de éstos. Ademés de otros factores, este estado desfavorable origina la forma irregular de los dridos gruesos, los cuales contienen una gran cantidad de particulas planas y alargadas, y desde el punto de vista de los reglamentos tecnol6gicos ge- nerales, podemos considerarlos como altamente inadecuados. De esta problemética no se han ocupado muchos autores, y sus trabajos resul- tan contradictorios en gran medida, a la vez que no posibilitan formular conclusiones univocas. Desde el punto de vista de la composicién éptima de los Aridos, no se le da toda la atencién a la influencia de la forma de las particulas y se parte s6lo de su composicién granulométrica. El trabajo realizado con los Aridos de las distintas provincias de Cuba, con contenidos de particulas irregulares entre 16 y 31%, demos- tré en todos los casos la influencia de la forma de los ridos en el por- centaje de vacio de la mezcla de ellos y en la laborabilidad de la mezcla de hormigén, si se mantiene una energia de compactacién y una con- sistencia constante, también influye en la resistencia del hormigén a la compresién y, eventualmente, en las dosis de cemento, si consideramos como constante la resistencia. iL En los 4ridos ensayados se manifest6 mas fuertemente el factor de la forma, que el de la granulometria, de manera que no se pueden re- comendar para la prdctica los métodos clasicos (hasta ahora utilizados), basados en las proporciones directivas de las fracciones de los 4ridos, los cuales, en la mayoria de los casos, dan resultados muy diferentes de los obtenidos experimentalmente. Esta verificacién posibilita una nueva forma de combinar los 4ridos para hormigén, la que, en la prdctica, representa un significative ahorro de cemento. Otra dificultad en el disefio de las mezclas de hormigén es que para la esfera de los hormigones utilizados en la produccién de los elementos prefabricados en Cuba (0 sea, con una relacién agua-cemento menor que 0,40) no es valida la relacién de Bolomey utilizada en general, como consecuencia del exceso de pasta de cemento (motivado, por una parte, por los 4ridos no convenientes y por otra, m&s importante, por la tecnologia de produccién, la cual utiliza en la mayorfa de los casos mez- clas fluidas) se produce, en comparacién con la relacién antes mencio- nada, un descenso de las resistencias a la compresién. Mediante experimentos se logré precisar la ecuacién de Bolomey y ampliarla con la determinacién de la caracteristica A de los aridos y la consistencia de las mezclas de hormigén, la cual, en el caso de las mezclas de baja relacién agua-cemento, se manifiesta significativamente y cuya influencia no est4 considerada en las ecuaciones hasta ahora utilizadas, © sélo de manera indirecta. El nuevo método esta elaborado de una forma asequible para los técnicos medios que trabajan en la produccién y por lo mismo posibi- lita en la practica el aprovechamiento de los resultados de este trabajo. En la actualidad existen en la literatura mundial muchos métodos analiticos, asi como otros de cardcter practico, para determinar la com- posicién de las mezclas de hormigén. El hecho de que un gran néimero de autores se haya ocupado de esta problemitica, esforzindose por ex- presar cada vez mas, mediante nuevas formas, las relaciones basicas que sirven para determinar la influencia que ejercen los distintos compo- nentes del hormigén en sus propiedades fisico-mecdnicas, nos demuestra que no se ha logrado todavia, obtener Ia ‘solucién definitiva de dicha problemética y que tampoco se ha alcanzado crear tales relaciones para. su posible generalizacién, al efecto de servir adecuadamente en la practi- ca técnica en todas las condiciones especificas. Asimismo, una serie de métodos, apoyados en experiencias obtenidas. por muchos afios y en una cantidad considerable de ensayos de labora~ torio, carecen, no obstante, de los datos precisos sobre las condiciones locales (bajo las cuales se desarrollaron los trabajos), y no permiten establecer una generalizacién de la aplicacién de sus cAlculos. 12 En Guba, por lo general, se utilizaba para el cdlculo de la resistencia del hormigén a compresién, la conocida relacién de Bolomey, la cual formaba parte, incluso, de la Norma Cubana “Método de dosificacién del hormigén”. Es evidente que dicha relacién tiene sus limitaciones y no puede aplicarse mecdnicamente y, en particular, en condiciones lo- cales donde, con preponderancia, se utilizan las mezclas de hormigén con el coeficiente de agua inferior a 0,40. Otro inconveniente de la mayoria de las ecuaciones para el célculo de la resistencia del hormigén empleadas actualmente, consiste en que no tienen en cuenta la influencia de la consistencia de la mezcla del hormig6n, cuando ésta es de gran importancia. Si se analizan las caracteristicas de los materiales de diversos paises, utilizados para la produccién del hormigén, la mayor diferencia de los requerimientos tecnolégicos, lo manifiesta el arido en cuanto a lo des- favorable de su forma. Como en muchos paises no existen dridos de forma conveniente, procedimos al estudio de su influencia en las propiedades fisico-mecdni- cas de las mezclas de hormigén y de los hormigones endurecidos. Hasta el presente, no muchos autores se han dedicado al estudio de esta problematica; al considerar las conclusiones de estos trabajos, re- salta que no hay una coincidencia comin. A las opiniones de Feret y Kaplan, que atribuyen a la forma de la grava (4rido grueso) una sin- gular importancia, se oponen los criterios de Walkers, Prudely, Gold- beck, Gordon, Berezin y Galaktinov, quienes no le confieren absoluta- mente ninguna influencia, o s6lo en una medida insignificante. La disparidad de opiniones de los distintos autores, es posible expli- carla por las influencias secundarias que cvidentemente no siempre se lograrcn climinar por diferentes criterios respecto a la conveniencia © inconveniencia de las gravas (Aridos gruesos), las condiciones locales, las cuales no se pueden generalizar o aplicar, y también por el enfoque peculiar hacia la problemética al formular las conclusiones. En resumen, se puede censtatar que de las opiniones sefialadas no es posible deducir una conclusién tinica, con efectiva aplicacién précti- ca. Esto nos indujo, a la realizacién de nuevas investigaciones con resul- tados concretos para su puesta en prdctica no sdlo en Cuba, sino en otras regiones con condiciones similares a nuestro pais. Con cl transcurso de un tiempo relativamente corto, se ha logrado alcanzar en nuestro pais un alto nivel de industrializacién en la cons- truccién, donde un papel significativo lo desempefia la produccién de elementos prefabricados. La industria de elementos prefabricados, por su magnitud, requiere una atencién especial, por el alto consumo de cemento. Esta situacién desfavorable es consecuencia de una serie de condiciones locales espe- i cificas, tales como: la forma inadecuada de los ridos, pero ante todo, Ia tecnologia utilizada en la produccién de los elementos, basada en la elaboracién de mezclas fluidas. Como no se utiliza con frecuencia la aceleracién del fraguado del hormigén por calentamiento, se suele em- plear comtnmente en la produccién de elementos prefabricados en el pais, hormigones de mayores resistencias para el desmolde rapido, que requieren dosis muy elevadas de cemento. En principio, la solucién para disminuir la dosis de cemento consiste en el cambio de la tecnologia de produccién. Sin embargo, dicho cambio indudablemente exigiria un costo de inversién considerable, si tomamos en cuenta la magnitud actual de la industria del prefabricado y las posibilidades de la economia na- cional, Es evidente que el proceso transformativo tendra que ser gradual y a largo plazo. Otro inconveniente, que en la practica se manifestaba significativa- mente, era el hecho de que no existia un método de célculo para la determinacién de la resistencia del hormigén a la compresién, que en las condiciones del pafs garantizara los resultados con la requerida pre- cisién y permitiera alcanzar un disefio econémico de la composicién de las mezclas del hormigén. Los procedimientos tecnolégicos, los ensayos de laboratorio y los re- querimientos de la calidad de los materiales basicos, se basaban, en su mayoria, en las normas norteamericanas, las cuales se est4n sustituyendo paulatinamente por las normas nacionales, ue parten, en muchos casos, de la informacién y experiencias extranjeras. Sin embargo, este proce- dimiento, sin estar verificado de forma directa en las condiciones locales, conduce con frecuencia al empleo poco econémico de los materiales bisicos y particularmente, el del cemento, que es deficitario. A partir de las circunstancias desfavorables descritas, los objetivos de nuestra in- vestigacién estuvieron encaminados en la siguiente direccién: a) Lograr el maximo ahorro de cemento con las condiciones tecno- légicas existentes, sin requerir nuevas inversiones 0 eventuales importaciones de aditivos quimicos para las mezclas de hormigén. b) Elaborar un método capaz de garantizar en la prdctica una mayor precisién del célculo de las dosis de cemento, fundamen- talmente para las mezclas de hormigé6n con propiedades reolégi- cas utilizadas en Cuba o en otros paises con condiciones similares. c) No elaborar principios de aplicacién general, sino realizar las investigaciones de forma que se tengan en cuenta las condiciones propias de cada pais y los recursos materiales de que disponen, para lograr los objetivos antes sefialados. 14 No obstante, sobre la marcha comprobamos que la experiencia pue- de hacerse extensiva no sélo a paises con caracteristicas climatolégicas, geolégicas y geogrdficas similares a las de Cuba, sino también a otros, que por escasez o carencia de grava de calidad, estan obligados a recurrir al empleo de materiales con requisites tecnolégicos que no cumplen es- pecificaciones convencionales y, ademas, emplean con frecuencia mezclas de hormigén con baja consistencia. Estudios e investigaciones A diferencia de estudios anteriores, no consideramos oportuno uti- lizar 4ridos con distintas proporciones de granos adecuados desde el punto de vista de su forma, lo que sin duda es el método exacto, que facilita extraer conclusiones més generalizadas, pero sin posibilidades de aplicacién practica, porque es imposible hacer una clasificacién exacta del drido. Por esto, trabajamos con materiales naturales con dis- tintas caracteristicas, de manera que las conclusiones pudieran tener aplicacién practica concreta. Para verificar las proporciones éptimas de arena y piedra, com- paramos los resultados de los métodos clasicos de Rothfuchs y el del Médulo de Finura, con el método de la determinacién experimental de vacios minimos, en mezclas de piedra. La comprobacién se llevé a cabo con todos los aridos de la provincia de La Habana, donde la propor- cién de granos alargados y planos en piedras gruesas, fluctda entre 16 y 319%. De acuerdo con la Norma Cubana, por alargados y planos se consideran aquellos granos cuya dimensién maxima es, por lo menos, cuatro veces mayor que la minima. La influencia del 4rido grueso inadecuado por su forma, en las pro- piedades de las mezclas de hormigén y del hormigén endurecido, se com- probé desde tres aspectos: laborabilidad de la mezcla, influencia en la resistencia a la compresién e influencia en el tratamiento superficial de os paneles. Observamos, asimismo, la influencia del coeficiente de cemento en la resistencia del hormigén a la compresién, sobre todo en el entorno, don- de, a causa del exceso de la pasta de cemento, disminuye la resistencia, en contraposicién. con lo expresado en la relacién de Bolomey. También quedé demostrada la influencia de la consistencia de la mezcla del hormigén en la resistencia a la compresién de éste, a los 28 dias, la cual no se habia definido hasta ahora como factor inde- pendiente. A pesar de la base tedrica de todas las pruebas comprobatorias y de verificacién, y de las dependencias de ellas deducidas, siempre se per- 15 siguié la posibilidad de la inmediata utilizacién practica de los resul- tados. Por ello fue necesario seleccionar los métodos experimentales de forma tal, que, por ejemplo, las mediciones de la laborabilidad de las mezclas, la resistencia del hormigén, etc., se correspondieran con las Nor- mas Cubanas vigentes. Por esta causa, para la medicién de la labora- bilidad se utiliz6 el método del asentamiento por el cono de Abrams, en lugar del mejor método, que es por el consistémetro VeBe, y se deter- miné la resistencia a la compresién en los cilindros de 15 cm de diametro con 30 cm de altura, en lugar de cubos. Otros procedimientos solamente complicarian y aplazarian el apro- vechamiento practico de los nuevos conocimientos. Nuevos conocimientos aportados por la investigacién Por medio de un gran niimero de pruebas y mediciones realizadas en los laboratorios de la Direccién de Investigaciones Aplicadas y pro- badas en Ja planta de prefabricado “José Marti”, en Rancho Boyeros, logramos comprobar, en primer lugar, que en las mezclas de piedra con una proporcién considerable de granos inadecuados (16 hasta 31% de peso), no puede determinarse la proporcién éptima de arena y gra- villa, basindonos en los métodos convencionales recomendados y em- pleados habitualmente. Las pruebas demostraron también, que la piedra que tiene una pro- porcién mayor de granos inadecuados por su forma, requiere, al com- pararlo con los métodos convencionales, una cantidad sustancialmente mayor de arena, a los efectos de llenar los espacios huecos minimos. Otra comprobacién fue la de que una serie de materiales —que por su gra- nulometria facilitaron, segiin los métodos convencionales, las proporcio- nes siempre més favorables entre los dridos fino y grueso, por ejemplo, 34:66—, arrojaron en los ensayos experimentales los resultados menos favorables, lo que se pudo comprobar en dependencia de la proporcién de granos inconvenientes, cuando se alcanzé la éptima, con las pro- porciones de 45:55 y 50:50. De estos ensayos se infiere que para, determinar la proporcién éptima entre la arena y el Arido grueso de formas inadecuadas, resulta decisivo el factor de la forma y que no ¢s correcto emplear el método de pro- porciones directivas de las diferentes fracciones de gravilla (la Hamada curva ideal granulométrica) que se utilizaba en nuestro pais y se emplea en muchos otros. En la consistencia constante de la mezcla de hormigén (asentamien- to de 7 hasta 8 cm) y en la solidificacién constante, se manifest6 la influencia de la mayor proporcién de granos de formas inadecuadas; 16 es decir, indirectamente en la laborabilidad de la mezcla de hormigén, donde sirvié de indicador la cantidad de agua necesaria para obtener la consistencia requerida de 214 hasta 240 I/m* y directamente en la resistencia del hormigén a la compresién. La elevacién de la proporcién de granos de formas inadecuadas de 16 a 31%, requirié aumentar la cantidad de agua en 26 1/m’, hecho que en la dosis constante de cemento significé el aumento del coefi- ciente de agua de 0,39 a 0,44 y el descenso de la resistencia a la com- presin a los 28 dias, de 40,9 a 34,7 MPa. Esta comprobacién facilité hacer una nueva clasificacién de las piedras, que desde el punto de vista de la composicién granulométrica habfan sido consideradas equivalentes, creando asi las premisas para un significativo ahorro anual de cemento en el pais. Por la definicién matemética del coeficiente de Bolomey, que ex- presa la influencia de la calidad de la piedra en la resistencia del hormigén, se comprob6 que el valor del referido coeficiente resulté practicamente igual para todos los tipos de piedras con diferentes pro- piedades, es decir, de 0,49 hasta 0,51, siendo el més frecuente 0,50. De esta forma se logré comprobar que para el coeficiente de agua inferior a 0,40, la relacién de Bolomey ya no es totalmente exacta, En este entorno se destacé de modo significativo, la influencia de la con- sisttencia de la mezcla del hormigén y para un valor constante de ella, la cantidad de pasta de cemento necesaria para lograr dicha consistencia. Estas influencias, que autores clésicos como Bolomey y otros no tomaron en consideracién en sus ecuaciones para el disefio de la com- posicién de la mezcla y para el cAlculo de la resistencia del hormigén, se contemplan en el nuevo disefio de la composicién de mezclas de hor- migén, que se basa en grandes proporciones de piedras inadecuadas por su forma, lo cual es necesario tomar en cuenta en las condiciones de nuestro pais. El nuevo disefio de la composicién para las mezclas de hormigén, parte de la ecuacién modificada de Bolomey: Ra R.- A+R _ (il) Ry: resistencia a la compresin a los 28 dias (MPa) Re: resistencia del cemento a los 28 dias (MPa) A: coeficiente que expresa la influencia de la calidad de la piedra R’: miembro que expresa la influencia del coeficiente de cemento y de la laborabilidad de la mezcla de hormigén. Los valores R- fueron determinados sobre la base de las normas; el valor de A se previé fuera de 0,50, acorde con los resultados anteriores. El valor del miembro R’ se determiné matematicamente del pro- medio de los resultados de la resistencia de 20 tipos de mezcla de hor- 17 migén de diferentes composiciones, con el coeficiente de cemento w™ igual a 1,5; 2,0; 2,5 y 3,0, y con las laborabilidades expresadas por el asentamiento en el cono de Abrams. As igual a 2, 6, 10 y 14 cm. Se comprobé que con los diferentes tipos de laborabilidad de las mezclas de hormigén, que cuentan con una cantidad excesiva de piedra de forma inadecuada, se altera el valor R’ para la resistencia a la com- presién después de los 28 dias, en dependencia del coeficiente de ce- mento, segtin la relacién: R’ = Rio + K log wt (1.2) R’: miembro de la ecuacién 1.1 que expresa a influencia del coefi- ciente de cemento y de la consistencia de la mezcla en la resis- tencia del hormigon R'o: valor del miembro R’ para el coeficiente de cemento w~ igual a 10 K: directriz de las lineas rectas en el sistema semilogaritmico que cortan los valores R’ de distintos coeficientes de cemento; su va- lor, que crece con la rigidez de la mezcla de hormigén, expresa Ja influencia de la consistencia en R’. Ademés, se deriva que en dependencia de la laborabilidad (consis- tencia) As, dada por el asentamiento del cono, cambia K de la manera siguiente: K=K,+q-As (1.3) K: influencia de la consistencia en R’ y Ry Ke: valor de K para As igual a cero centimetro q : directriz de la recta del cambio de K en dependencia de As y también el valor: Rio = In Ri) + + As (1.4) R’ro: valor R’,o para la consistencia As igual a cero centimetro 1: directriz de la recta del cambio R’;,) en el sistema semilo- garitmico Puesto que se logré derivar que la relacién vale: K 4,6259 — 0,0604 . As (13) Rigo = ghti25 + 0.0088. As (1.6) La nueva relacién bésica (1.1) para el cAlculo de la resistencia del hormigén, después de sustituir 1.5 y 1.6 y posteriormente también en 18 1.1, y simplificada para el empleo practico, se expresa de la manera siguiente: Ry = Re A (My « log wt» Me (1.7) donde los valores de M: y Mz, dependientes de la consistencia de la mez- cla del hormigén As, fueron calculados con fines practicos para los dis- tintos valores de As, los cuales se relacionan en la tabla 1; los valores del log w para diferentes w se muestran en la tabla 2. El nuevo procedimiento matematico permitié precisar notablemente Ja determinacién de las resistencias de hormigones de composiciones conocidas y disefiar nuevas composiciones de mezclas de hormig6n para las resistencias solicitadas, de tal manera, que a diferencia de las formas de empleo tradicionales, tomamos en consideraci6n la influencia de la laborabilidad (consistencia), es decir, indirectamente la cantidad de pasta de cemento. El nuevo procedimiento, segiin los célculos de verificacién y su apli- cacién, resulta mucho més confiable que las férmulas tradicionales y sus resultados coinciden con los alcanzados en Ia practica. Independientemente de la aplicacién en las condiciones especificas de Cuba, el método es posible utilizarlo en todos los lugares donde las condiciones obligan a utilizar Aridos, con una proporcién excesiva de granos inadecuados por su forma, o no tienen una granulometria éptima. También asegura, en cualquier caso, la determinacién exacta de la caracteristica de forma de los 4ridos disponibles y su mejor aprovecha- miento, asi como el empleo de la consistencia como factor independien- te, por su influencia en la resistencia a la compresién del hormigén. Conclusiones para la practica y el desarrollo ulterior de la ciencia La tematica de las investigaciones realizadas tuvo su origen en las necesidades urgentes del desarrollo econémico de Cuba, que exige un creciente volumen de edificaciones. Para lograrlo, la industria de la construccién y el prefabricado no tienen otra alternativa que utilizar los 4ridos disponibles en el pais y tratar de ahorrar al maximo el cemento, lo cual es valido para cualquier pais, Los resultados confirman el hecho de que ni las mejores experien- cias, cualquiera que sea su procedencia, deben Ievarse a su aplicacién sin un previo enfoque critico, que evite el peligro de alcanzar resultados negativos, lo cual es extensivo a los métodos de disefio de las mezclas de hormigones. La aplicacién de los resultados mundialmente reconocidos de Bo- lomey, a las condiciones especificas de Cuba y otros paises donde se 19 sugysardwios ey] & wrouasisax ns ua uoSfUNOY Jap EPUsIsISuOD ¥] 9p wIOUONgUT “T “By oe gz x4 gt 20 ufiliazh, no puede concretarse sin un anilisis profundo y una valoriza- cién de: ~ Las necesidades y posibilidades reales de cada pais. El dominio cientifico-técnico de la problematica estudiada. Por esta causa, ensayamos materiales, es decir, 4ridos y cemento, con los cuales cuenta nuestra industria de la construccién, sin que tuvieran que ser sometidos a un exigente tratamiento previo. De antemano ex- cluimos conscientemente las tendencias de alcanzar resultados ideales. Asimismo se buscaron soluciones que fueran facilmente asimilables, incluso para los técnicos medios que laboran tanto en las fabricas de elementos prefabricados, como en las propias obras de construccién. A partir de los aspectos tedricos y practicos, se ha logrado un proce- dimiento de significacién para la economia nacional. El ahorro de cemento que se alcanza es de 15% y en algunos casos ¢s mayor, en relacién con los consumos exigidos por los otros métodos, sin incluir el ahorro en divisas, que traeria aparejado la disminucién del consumo de petréleo en la fabri¢acién del cemento. Este significativo efecto econémico ha sido posible alcanzarlo por la razén de que, ni en Cuba ni en otros paises, se habia prestado una atencién especial al aprovechamiento de los 4ridos con granos de for- ma inadecuada para los fines de la produccién de hormigones; ademas, la mayorfa de las normas en todos los paises contemplan altas exigencias con respecto a la grava que no se puede utilizar en algunas zonas, sin generar excesivos costos de transportacién, etc. De esta forma, no son aplicables, sin previo reajuste, las ecuaciones de cAlculo que surgieron de las propiedades idealizadas de la grava. Todas estas circunstancias convergian en nuestro pais hacia la elaboracién de la composicién de mezclas de hormigén sobre bases no cientificas, que han tenido su origen en las relaciones clasicas actuales de Bolomey u otros autores. En realidad, los componentes de las mezclas de hormigén se han dosificado de acuerdo con las experiencias, por estimacién y utilizando siempre cantidades més elevadas de cemento. La mayoria de los técnicos de la construccién no se percatan de que las dosis excesivas de cemento no conducen a la mejoria del hormigén, sino al empeoramiento de las propiedades fisico-mecanicas de éste, lo que ocasiona retracciones, de- formaciones posteriores en las estructuras, etc. Esta situacién es més grave en Cuba por sus condiciones tropicales, donde se utilizan en gran medida, las construcciones y elementos pre- tensados, fabricados con mezclas de hormigén con un coeficiente de agua inferior a 0,40, es decir, al valor en el cual, al utilizar la piedra con granos de formas inadecuadas en cantidades que oscilan entre 16 21 y 31%, ya no es valida, segiin se comprobé por la relacién de Bolo- mey, y el exceso de las dosis de cemento no ocasiona el aumento, sino el descenso de Ia resistencia a la compresién del hormigén. ‘Ademéas de los beneficios de orden econémico y social, el nuevo método representa un modesto aporte al ulterior desarrollo de la rama cientifica en este campo, porque: 22 a) Se comprobé que al utilizar piedra de granos inadecuados, desde el punto de vista de la forma, en cantidad de 16 a 31% del peso total del lote (conservando constantes la laborabilidad de las mezclas, la energia de compactacién y las dosis de cemento), la influencia decisiva en la resistencia no la tiene la granulometria, sino las caracteristicas de las formas de los granos de la piedra. b) En las condiciones sefialadas en el punto a), con el requisito de la resistencia constante del hormigén, la caracteristica de la for- ma del grano de la piedra ejerce, sin embargo, una influencia mucho mayor en el consumo de cemento, que su granulometria. c Al utilizar 4ridos gruesos con una cantidad excesiva de granos con formas inadecuadas (tipo escama o aguja), no es posible, emplear los métodos clasicos granulométricos para la determi- nacién de la proporcién éptima entre la piedra y la arena, por- que éstas arrojan, en la mayoria de los casos, resultados comple- tamente diferentes a los experimentales. d) A partir de lo sefialado en los puntos a) y c), procedimos a la ejecucién de una clasificacién nueva de las piedras destinadas a la fabricacién del hormigén, sobre la base de los criterios de obtener la minima cantidad de vacio en la mezcla de ellas, des- pués de la solidificacién con una laborabilidad de la mezcla de 7 hasta 8 cm de asentamiento en el cono de Abrams, para lograr la m&xima resistencia y el minimo consumo de cemento. e No es dificil comprobar que la relacién de Bolomey y para el cAlculo de la resistencia a la compresién del hormigén y para el disefio de su composicién, que gencralmente se recomienda, no resulta econémica ni aplicable para las mezclas con el coeficien- te de agua inferior a 0,40, particularmente por la razén de que no expresa Ia influencia del exceso de la pasta de cemento, en caso de mezclas poco consistentes 0 liquidas, ya sea por el em- pleo de gravillas con granos inadecuados, o por utilizar un pro- ceso de compactacién poco eficiente. f Con la ejecucién de ensayos de 20 mezclas de hormigén de dife- rentes consistencias, con cuatro valores constantes del coeficiente de cemento, se hallaron nuevas regulaciones con respecto a la resistencia del hormigén, en dependencia de la laborabilidad de Jas mezclas. g) Sobre la base de las regularidades experimentales comprobadas segtin el punto jf), se propuso una nueva ecuacién para los célcu- los de las resistencias del hormigén y el disefio de su composicién, tomando en consideracién la influencia de la consistencia (ex- ceso de la pasta de cemento) en la resistenci: Las nuevas relaciones estan elaboradas de forma tal, que resultan comprensibles no solamente a los ingenieros, sino también a los técnicos de nivel medio que trabajan tanto en las plantas productoras de elemen- tos prefabricados, como en las obras de construccién. De esta manera, ha sido posible aplicar y aprovechar los resultados en la practica de la produccién. Los resultados de estos trabajos se han aplicado primeramente en Cuba, donde estén generando un efecto econémico considerable. Ade- mas, el nuevo método ha sido beneficioso al aplicarse en los paises donde las regulaciones técnicas y materiales son andlogas; por ejemplo, en algu- nos paises de América Latina y Africa. Método para el disefio de mezclas de hormigén basado en la determinacién correcta de las caracteristicas de los dridos Para determinar la composicién éptima de un hormigén hay que realizar ensayos de laboratorio, cuyos procedimientos son los siguientes: a) Determinar por el método experimental la relacién éptima de la mezcla de arena y dridos gruesos. b) Determinar la cantidad de agua necesaria para obtener la con- sistencia requerida de la mezcla de hormigén. c) Determinar la. caracteristica A de los Aridos. d) Determinar la cantidad de cemento. Determinacién de la relacién éptima de los ridos gruesos y finos Hemos comprobado que en nuestras condiciones, el factor de la forma de los dridos gruesos es decisive y més fuerte que el factor de la granulometria, por lo que no es posible determinar la relacién éptima 23 de los Aridos gruesos y finos por los métodos basados en la granulome- tria ideal. E] método més preciso es el experimental, que se basa en la deter- minacién del porcentaje de vacio de la mezcla de los ridos finos y gruesos. El porcentaje de vacio y la superficie especifica mfnimos de la mezcla de Aridos, sefialaré la composicién éptima, la cual requeriré una cantidad minima de cemento, Para determinar el porcentaje de vacio y la superficie especifica minimos, hay que ensayar Jas mezclas de los Aridos con las proporciones en peso de arena y gravilla siguientes: 35:65; 60:40; 45:55; 50:50; 55:45. Como primer paso, hay que determinar el peso unitario compactado de Ia mezcla de los Aridos (PUCm), de cada una de las mezclas anterior- mente expresadas. Los ensayos se realizaran por el mismo procedimiento que se emplea para determinar el peso unitario compactado de la arena o los Aridos gruesos. Sélo hay que tener en cuenta que es necesario trabajar con los materiales secos y bien mezclados. Después determinamos el peso espe- cifico corriente de la mezcla de los ridos. Para obtenerlo, tenemos que determinar el peso especifico de la arena y del 4rido grueso que estamos ensayando, El peso especifico corriente de la mezcla de los dridos, lo de- terminamos matematicamente por medio de la ecuacién: PEC, — PECs %A + FEC, + %G aa) donde: PEC: peso especifico corriente de la mezcla de los aridos PEC,: peso especifico corriente de la arena YA: porcentaje de la arena en la mezcla PEG,: peso especifico corriente de la gravilla %G: porcentaje de la gravilla en la mezcla, Ejemplo de cdlculo En nuestro caso, determinamos el peso especifico corriente de la arena, PECa = 2260 kg/m’ y el peso especifico corriente de la gra- villa, PEC, = 2640 kg/m’. El peso especifico corriente de la mezcla de los 4ridos, en proporciones de 35% de arena y 65% de gravillas, sera: PEC, = PEO: %A + PECs %G _ 100 12620 . 35 + 2640 - 65 : 2688 er 24 La misma mezcla de Aridos, en proporciones de 40% de arena y 60% de gravilla, tendré un peso especifico corriente de: 2620 - 40 + 2640 - 60 rac, = 0 2632 kg/m* Por este método calcularemos el PECm para todas las relaciones restantes de arena y gravilla (A:G = 45:55; 50:50 y 55:45). Sobre la base del peso especifico corriente de la mezcla de dridos y el peso unitario compactado de ella, podemos determinar el porcen- taje de vacio de la mezcla de los Aridos: PECm — PUCu je io = ———_——_—_ -- 100. 1.9) Porcentaje de vacfo PEG (19) Cuando determinemos el porcentaje de vacio para todas las combi- naciones de arena y dridos gruesos, elegimos la combinacién que tenga el porcentaje menor, como la éptima para la composicién del hormigén. En el caso de que se utilicen dos tipos de Aridos gruesos, por ejem- plo, gravilla (de 6,35 hasta 19 mm) y piedra (de 12,7 hasta 38 mm), hay que determinar primero el porcentaje de vacio minimo de la mezcla de los dos tipos de dridos gruesos a utilizar, y determinada la mezcla ép- tima de dichos dridos, ésta sera la que se mezclard con la arena en las cinco proporciones mencionadas, y después se halla el porcentaje mini- mo de vacio de la mezcla de los dridos gruesos y finos. Determinacién de la cantidad de agua necesaria para la consistencia requerida Para determinar la cantidad de agua necesaria, elaboramos una mezcla de hormigén con la laborabilidad que necesitamos, por ejemplo, con un asentamiento de 6 cm medido en el cono de Abrams. El disefio de la mezcla lo haremos de la forma siguiente: a) Proporcién entre los Arides gruesos y finos. La fijamos sobre la base de la composicién éptima, determinada segiin se explicé en el epigrafe anterior. b) Cantidad de cemento. La determinamos inicialmente sobre la base de las experiencias, de manera que esté relacionada, aproxi- madamente, con Ia resistencia requerida del hormigén. c) Cantidad de agua. La fijamos como elemento de referencia, tam- bién segiin la experiencia. y S Con estos datos calculamos la cantidad necesaria de los materiales para claborar seis probetas cilindricas. Para determinar exactamente la cantidad de agua, ponemos en la mezcladora una cantidad menor de agua que la prefijada; determina- mos su asentamiento (por ejemplo 2 cm), después hacemos una nueva mezcla con una mayor cantidad de agua y medimos nuevamente el asentamiento (por ejemplo 4 cm), y asi se repite el ensayo, auxiliados por el cono de Abrams, hasta que por aproximacién. determinamos la cantidad total de agua necesaria. Esta cantidad de agua debe ser corre- gida de acuerdo con la humedad superficial de la arena. Ademés de determinar la cantidad de agua necesaria para obtener Ia consistencia requerida, con esta misma mezcla elaboramos seis probe- tas y determinamos la resistencia a la compresin a los 7 y 28 dias. Como estos datos nos van a servir para la determinacién del coeficiente A de los ridos gruesos, tenemos que repetir el ensayo no menos de tres veces, para asegurar la exactitud de los resultados. En este caso, hay que tener en cuenta la alta precisién exigida en los trabajos de laboratorio, porque una vez determinada la caracteristica, A de los materiales, podemos disefiar todos los tipos de mezclas de hormig6n que utilizaremos, con ella. Es necesario y determinante hacerle todos los ensayos normalizados a los dridos y al cemento que se utilicen. Determinacién de la caracteristica A de los aridos Para determinar la caracteristica A de los Aridos, utilizamos los datos de los ensayos ya realizados, segtin los parrafos antecedentes; a saber, Ja resistencia a la compresién promedio del hormigén a los 28 dias, obtenida sobre la base de nueve probetas (tres ensayos), y la resistencia a la compresién a los 28 dias, del cemento empleado. La caracteristica de los aridos la determinamos por la ecuacién si- guiente: R Re (Mi - A= (1.10) + M2) donde: A: caracteristica de los dridos Ry: resistencia del cemento utilizado a la compresién, en MPa M, y Mz: valores dependientes de la consistencia del hormigén V: valor dependiente de la relacién agua-cemento, Los valores M1 y Mz se toman de la tabla 1, en relacién con el asen- tamiento de la mezcla del hormigén determinada en los ensayos. 26 El valor V se toma de la tabla 2, segiin la relacién agua-cemento (w), cuyo valor determinamos conforme con las cantidades de cemento y de agua que utilizamos en los ensayos. Determinacién de la cantidad de cemento En el caso de los ensayos explicados con anterioridad, se utilizé una cantidad de cemento aproximada, segiin la experiencia; ahora podemos determinarla exactamente por la ecuacién siguiente: = hae v= (1.11) donde: V: valor dependiente de la relacién agua-cemento Ra: resistencia del hormigén a la compresién que queremos ob- tener, en MPa Re: resistencia del cemento a la compresin, en MPa (el que estamos utilizando) Mi y Mz: valores dependientes de la consistencia del hormigén ‘A: caracteristica de los dridos utilizados. Los valores M: y Mz se toman de la tabla 1. La pareja de valores M: y M2 corresponden a un solo valor del asentamiento As, medido en centimetros, por el método del cono Abrams. Determinado el valor V, de la tabla 2 tomamos el valor de Ja rela- cién agua-cemento w, que le corresponda y sea la adecuada. Entonces, la cantidad de cemento se determina por la ecuacién: c= (1.12) donde: c: cantidad de cemento, en kilogramo cantidad de agua, en litro : relacién agua-cemento tomada de la tabla 2. Con los datos obtenidos —composiciin éptima de los aridos gruesos y finos, cantidad de agua para obtener la consistencia requerida, carac- teristica A de los aridos y cantidad de cemento para obtener la resis- tencia requerida del hormigén—, establecemos la composicién éptima de la mezcla del hormig6n y la comprobamos con seis probetas cilindri- 27 cas, y determinamos la resistencia del hormigén a la compresién a los 7 y 28 dias, que debe dar un valor muy aproximado al valor supuesto en la ecuacién 1.11. Recomendaciones Durante los ensayos, se recomienda trabajar siempre con los mismos tipos de ridos y mantenerlos todo el tiempo bien homogeneizados. Las variaciones de las propiedades de los Aridos, sobre todo el por- centaje de particulas planas y alargadas, pueden influir notablemente en la cantidad de agua necesaria para obtener la consistencia requerida de la mezcla del hormigén, lo que consecuentemente influye en la rela- cién agua-cemento y en Ia resistencia resultante del hormigén. La humedad de la arena tiene también una influencia notable (la cual puede ser positiva o negativa) y para los ensayos es necesario deter- minarla con precisién y hacer las correcciones correspondientes de la cantidad total de agua requerida. Para la determinacién de la relacién 6ptima de los dridos gruesos y finos, hay que trabajar con los Aridos secos. Con la arena himeda no se pueden obtener resultados correctos, porque cambia demasiado su volumen. Por ultimo, es necesario tener presente la notable influencia que en la resistencia resultante del hormigén, tiene la resistencia a la compresién del cemento, la cual debemos tener bien definida para obtener un valor exacto de la caracteristica A de los dridos y poder después comprobarla con la resistencia resultante de dicho hormigén, Por esta razén, hay que tomar la muestra de cemento para determinar su resistencia, el mismo. dia que se realiza la determinacién del agua necesaria para obtener la consistencia requerida. También el dia que se determina la caracteristi- ca A del drido, debemos utilizar en los cAlculos, la resistencia real del cemento empleado, obtenida de los ensayos de laboratorio. Es légico que en la practica, al no poder mantener constante la carac- teristica del cemento y no conocer todas sus propiedades en el momento de su empleo, obtengamos discrepancias mayores que en el laboratorio; sin embargo, para el trabajo de investigacién, cuyo objetivo es deter- minar la caracteristica A de los dridos, hay que mantener la ms alta precisin en los ensayos. Los valores de A que caracterizan las propiedades de los Aridos en el nuevo método de disefio de las mezclas de hormigén, hay que deter- minarlos para todos los tipos de 4ridos gruesos que se utilizan para ela- borar hormigones, lo que posibilitaré, a partir de sus resultados, un mejor aprovechamiento de los materiales y una consecuente economia de cemento. 28

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