Analice la sentencia y emita el juicio valorativo de ella

El juez superior de conformidad con el artículo 508 del Código de Procedimiento Civil y en
concordancia con la jurisprudencia de esta Sala, desechó los dichos de los testigos Ramón
Humberto Muñoz Agelvis, José Miguel Rugeles, Karina Manzulli de Márquez y Cheyla Yamery
Cacique, porque no le merecían fe ni confianza, desechó las deposiciones por considerar que fueron
contradictorias y no le merecían fe, por cuanto no daban certeza de tener un conocimiento directo
sobre la unión concubinaria sino referencial.

Por las razones antes expuestas, el Tribunal Supremo de Justicia de la República Bolivariana de
Venezuela, en Sala de Casación Civil, administrando justicia en nombre de la República y por
autoridad de la Ley, declaró SIN LUGAR el recurso de casación formalizado contra la sentencia de
fecha 2 de julio de 2003, dictada por el Juzgado Superior Tercero en lo Civil, Mercantil, del
Tránsito, del Trabajo y de Protección del Niño y del Adolescente de la Circunscripción Judicial del
estado Táchira en San Cristóbal.

Por haber resultado infructuoso el recurso formalizado, se condeno al recurrente al pago de las
costas.

Analizando esto según la decisión del caso se considera que hay un silencio de prueba enmarcadas
en las primera, segunda, cuarta y quinta por Infracción de Ley. En efecto, la ocurrencia de un vicio
por silencio de prueba debe denunciarse y ser analizado por esta Sala en el ámbito de un recurso
por defecto de actividad, ello de conformidad con la Constitución vigente y el Código adjetivo
civil que exigen una justicia completa y exhaustiva; no se lograría dicho fin si se omite algún
elemento clarificador del proceso asegún el rtículo 509 del Código de Procedimiento Civil, al
señalar que los Jueces deben analizar todas las pruebas producidas en el expediente y emitir su
opinión, así sea en forma breve y concreta, en un todo de conformidad con el ordinal 1º del artículo
313 eiusdem.