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LA CLASIFICACION DE LAS CONSTITUCIONES. : UNA PROPUESTA stmario: 1. Finalidad. 2, Los criterios tradicionales; A. James Bryce; B K. C, Wheare; ©. C. F. Strong; D. §. A. de Smith; E. Leslie Wolf- Phil- lips; F. Germdn J. Bidart Campos; G. Otros. 3. El criterio ontoldgico, Karl Loewenstein. 4. La utilidad de la clasificacién de las constituciones. 5. Una propuesta de clasificacién. 1. FINALIDAD Este ensayo tiene ej propésito de revisar Ja situacién actual que guarda la doctrina respecto a la clasificacién de las constituciones. Para ello se exa- minan en él algunas de las teorias tradicionles; es decir, quellas que basan el criterio clasificador tnicamente en los postulados del texto constitucio- nal, Gon las teorfas tradicionales que se glosan, se traen a colacién los prin cipales criterios, dentro de esta perspectiva, que los tratadistas han ex- puesto. Un paso hacia adelante en el conocimiento de esta cuestién lo estable- cié Karl Loewenstein, al proponer un criterio ontolégico consistente en comparar la norma con la realidad, el texto constitucional con su apli¢a- cién y, a partir de esta comparacién, intentar varias categorias. Al terminar el examen de esas teorias nos preguntamos por qué nos preocupa este tema, cual es ja utilidad de una clasificacién de las consti- tuciones, qué nos queda de la clasificacién tradicional, y qué méritos y qué deficiencias encontramos en las clasificaciones tradicionales y en las onto- légicas, y a nuestra vez con todos los elementos obtenidos de tal examen, nos atreveros a proponer un criterio de clasificacién de jas constituciones que se encuentra dentro de la perspectiva ontoldgica. 2. LOS CRITERIOS TRADICIONALES A. James Bryce encontré que se solia clasificar a las constituciones en es- critas 0 estatutarias y en no escritas 9 consuetudinarias. El calificé a esta clasificacién de anticuada, de torpemente expresada y de que se prestaba a confusiones, porque junto a toda constitucién escrita existen costumbres 359 360 JORGE CARPIZO y decisiones judiciales que la completan, ia amplian o 1a modifican y, a su vez, en las denominadas constituciones no escritas, se encuentran estatu- tos y dey En consecuencia, Bryce se dio a Ja tarea a tratar de encontrar un criterio certero para clasificar las constituciones, y se percaté de que las constitucio- nes modernas contienen el principio de que las normas constitucionales poseen ‘s constitucionales, una jerarquia superior a las leyes secundarias y, por tanto, no son refor- mables por el poder legislative sino sélo per un éryano y un procedimiento especiales. En cambio, existen otras constituciones para cuya re‘orma se sigue el mismo procedimiento que para cualesquiera normas ordinarias, Este autor afirmé que estuvo buscando denominaciones para distinguir estas diferentes clases de constitucin, A las del primer tipo pensé en Ia- marlas cambiantes y fluidas, y a las del segundo, estaticas, s6lidas 0 crista- pero, aunque no fuera perfecto, prefirié denominar: jlexibles a las del tipo mas antiguo, las que poseen elasticidad y se adaptan y alteran sin perder sus notas mas importantes, y rigidas a aquellas cuya estructura es dura y fija2 Bryce indicé que en Europa, en aquel entonces, todas las constituciones eran rigidas con la excepcién de las del Reino Unido, Hungria e Italia. Sin embargo, Bryce mismo se dio en la cuenta de que su clasificacién no establecia una linea precisa, sino que era sdlo un criterio que podia auxi- liar para poder clasificar Jas constituciones. Asi, sefialé que mientras desde la perspectiva jurdica, de iure, a la Constitucién de la Repiblica de Africa del Sur (Transvaal) se le podia tener por rigida, desde la perspectiva de facto siempre se le habia considerado como flexible. En cambio, la coustitucién inglesa, flexible en cuanto se modifica igual que cualquier norma ordinaria, contiene primordialmente las mismas ca- racteristicas en cuanto a su sistema de gobierno desde 1689 y 1701, € indi- 6 que las reformas ids importantes efectuadas a partir de ese dltime afia sdlo se lograron después de largas y dificiles controversia Las primeras constituciones rigidas fueron las cartas reales de las colo- nias briténicas en América del Norte, en el siglo xvi, ya que esas cartas eran inmodificables por las legislaturas coloniales; en esta forma se precisé que existia un instrumento superior a esas legislaturas. EI mérito de Bryce, y lo que subsiste de su pensamiento en este aspecto. reside en haberse percatado de que su clasificacién no era rigida, no con- sistia en una reyla matemética, sino que era s6lo un instrumento que po- dia ayudar para el conocimiento de diversas constituciones. 1 Bryce, James, Constituciones flexibles y constituciones rigidas, Madrid, Instituto de Estudios Politivos. 1952, pp. 25-26. = Buyce, James, of. cit., supra, p. 96. LA CLASIFICACION DE LAS GONSTITUCIONES 361 B. K. G. Wheare comenz6 por descartar, tal y como ya lo habia hecho Bryce, la clasificacién de las constituciones en escritas y en no-escritas, porque no hay ningiin pats, desde luego ni la Gran Bretafia, en que el sis- tema de gobierno esté Gmicamente precisado en normas escritas o sélo en normas no escritas, ya que tanto Jas unas como las otras se-armonizan para construirlo, Wheare, asimismo, criticé la clasificacién de las constituciones en rigidas y flexibles, porque una clasificacién que coloca a casi todas las constitucio- nes del mundo como rigidas y sélo a una o a dos como flexibles, tiene poco significado; ademas, se presta a confusiones porque pareceria que una constitucién que establece un 6rgano y procedimientos especiales para su reforma, se alteraria menos que una que no Jo hiciera. La afirmacién an- terior interpreta malamente lo que la original clasificacién de las constitu- ciones en rigidas y flexibles intentaba resaltar: la existencia o la ausencia de alyunos requisitos formales en el proceso juridico de reforma constitu- cional.* La frecuencia con que una constitucién se altera depende no sélo de los aspectos y de las previsiones juridicos, sino también de los grupos predo- minantes de caracter politico y social y el grado en que estén satisfechos © respetan la organizacién y distribucién del poder politico que aquélla es- tructura, Por lo anterior, Wheare sugirié que no se empleen los términos de rigido y flexible para indicar que existen 0 no un érgano y procedimicntos espe- ciales para la reforma de la norma constitucional, sino para denotar si la constitucién realmente se modifica 0 no con facilidad. Se debe resaltar que la critica que Wheare realiz6 a la clasificacién en constituciones rigidas y flexibles ya se encontraba en el propio Bryce, lo que el mismo Wheare acepté implicitamente. Ahora biesi, Wheare propuso cuatro criterios para clasificar las constitu- ciones: a) Supremas 0 no sobre ei organo legislativo, las primeras son aquellas constituciones que no pueden ser modificadas por el érgano legisla- tivo; en cambio, las segundas si pueden serlo, El propio Wheare ad- niitié que esta clasificacién esta estrechamente ligada a la de tigidas y flexibles como fue originariamente definida, b) Federales 0 unitarias, atendiendo al criterio de cémo las competen- cias estén distribuidas entre el gobierno central y los locales que ejer- cen autoridad sobre partes determinadas del pais: es decir, se basa 3 Wheare, K. G., Modern Constitutions, Londres, Oxford Paperbacks University Series, 1966, pp. 16-17. 362 JORGE GARPIZO sobre el principio de la distribucién de facultades en la constitucién, y mira si éstas estan centralizadas o descentralizadas, Es necesario, en. el examen de este criterio, no quedarnos con la sola letra de la constitucién sino examinar cémo opera en la realidad; asi, una constitucién unitaria puede funcionar casi como una federal; en cambio una constitucién federal puede operar en Ja prdctica como si se tratara de una unitaria; tales son los casos de las llamadas cons- tituciones federales de México, Venezuela, Brasil y Argentina.* En principio estamos de acuerdo con Wheare, slo que si examina. mos estas constituciones desde el dngulo de la realidad, veremos, es el caso de México, que este cuasifederalismo no funciona realmente como si fuera un sistema unitario, ya que la forma juridica influye y hace que en diversos aspectos si exista en México descentralizacién politica, o sea que en el anilisis de las realidades constitucionales tenemos que ser cuidadosos y no hacer afirmaciones rotundas que tampoco reflejen la realidad. c) Parlamentarias 0 presidenciales, de acuerdo con el grado en que acep- tan el principio de la separacién de poderes, ya que en principio en un sistema presidencial los poderes se encuentran mas indepen- dientes, “separados”, que en uno parlamentario,® aunque hay paises que combinan los dos sistemas, como en el caso del ejecutivo federal suizo.’ a) Republicanas y mondrquicas, clasificacién que anteriormente fue de primera importancia, pero que ahora la ha ido perdiendo. Aunque a la clasificacién de Wheare se Ie pueden realizar algunas exi- ticas, como lo haremos posteriormente, es en nuestra opinién la mejor de las tradicionales, tal y como lo asentaremos en e] inciso cuarto de este en- sayo. ‘Sin embargo, vamos a examinar otras clasificaciones tradicionales para tener un panorama més completo de los esfuerzes ¢ intentos para estable- cer criterios que ayuden a clasificar las constituciones. 4 Wheare, K. C., of. cit, supra, nota 2, p. 22. 8 Al respecto puede consultarse Carpizo, Jorge, “Sistema federal mexicano”, en Los sistemas federales del Continente Americano, México, UNAM y Fondo de Cul- tura Econémica, 1972, pp. 543-547. © Sobre las notas caracteristicas del sistema parlamentario y del presidencial, véase Carpizo, Jorge, El presidencialismo mexicano, México, Siglo XXI editores, 1979, . 13-15. PP; Hay que tener en cuenta que actualmente se esth cuestionando la diferencia entre sistema parlamentario y presidencial. Al respecto se puede consultar Giménez, Gilberto, “Tdeologia y derecho. Perspectivas para un andlisis sociolégico del discurso constitucional”, en Arte, Sociedad ¢ Ideologia, nim. 6, México, 1978, p. 99. . LA GLASIFICAGION DE LAS CONSTITUCIONES 363 G. G. F, Strong clasificé las constituciones en cinco grandes especies, de acuerdo a: a) la naturaleza del Estado en el cual se aplica, b) Ja natura- leza de la propia constitucién, c) la naturaleza del poder legislativo, d) la naturaleza del poder ejecutivo, y e) la naturaleza del poder judicial. Y aclaré que esta clasificacin no pretendia ser exhaustiva. a) De acuerdo con Ia naturaleza del Estado en el cual la constitucién se aplica, ella puede ser unitaria o federal. b) De acuerdo con la naturaleza de la propia constitucién, ésta puede ser flexible o rigida. c) De acuerdo con la naturaleza del poder legislative, las constituciones pueden indica Ia existencia de sufragio uni- la existencia de sufragio califi- versal, cado, = distrito uninominal, en que se — distrito plurinominal, en que se clige a uno o a lo maximo dos cligen a varios legisladores, legisladores, iit integracin de Ia segunda c4- ii- integracién de la segunda cama. mara por eleccién popular, ta por métodos no electives o iii existen procedimientos de go- parcialmente clectivos, bierno semidirecto, como el iii-no existen procedimientos de go- referendo, la iniciativa popu- bierno semidirecto. Jar, etcétera. d) De acuerdo con Ia naturaleza del poder ejecutivo, las constituciones pueden ser parlamentarias 0 presidenciales, e} De acuerdo con la naturaleza del poder judicial, las constituciones pueden ser de “estado de derecho” (Rule of law) o de derecho adminis- trativo. El autor consideré, en el primer caso, que los actos de los funcio- narios en cuanto tales estén sometidos a las reglas del derecho comtin, y que en el segundo caso dichos actos estén sometidos a reglas especiales de proteccién que son las del derecho administrative, Desde luego esta distin- cién estd superada en nuestros dias y no aporta ningtin elemento significa- tivo. D. S.A, de Smith clasificé a las constituciones en: a) escritas y no escritas; b) flexibles e inflexibles ; 5 Strong, . F, Modern Political Constitutions, Londres, Sidgwick and Jackson imited, 1970, pp. 59-79. 364 JORGE CARPIZO c) monrquicas y republicanas; 4) presidenciales y parlamentarias: ©) federales y unitarias. Sobre las categorias anteriores, De Smith realiz6 precisas consideraciones: pero realmente, aungue sus referencias al derecho comparado son intere- santes, constituyeron, como es natural, apreciaciones ya realizadas por Bryce © por Wheare: pero, ademas, De Smith agregé otras dos categorias: f) diarquicas y no didrquicas. Entendié que una constitucién didrquica es aquella en la cual existe una division de la competencia guberna- tiva entre dos o més autoridades, divisién que es ajena a la que se realiza de acuerdo con una base regional. Para que se comprendiera bien su concepto, otorgé un ejemplo: el procedimiento legislative puede encontrarse dividido entre el poder legislative y el ejecutivo. como es el caso cuando el primero puede legislar en una serie de determinadas materias y el segundo puede también legislar en las ma- terias que expresamente le sefiala la constitucién;* y g) de partido tinico y otras constituciones. En mi opinion, ésta es la ca- tegoria mas importante de las indicadas por De Smith, quien aclard que obviamente una constitucién que sélo admite la existencia de un partido opera en forma diferente a aquella en la cual Ja libertad de asociacién politica esta permitida, Una constitucién de partido tni- co es programitica, ideologizada, se parece a un manifiesto politico, y pone énfasis tanto en los deberes como en los derechos de los ciu- dadanos,*” Para mi, en el funcionamiento real del sistema de partidos politicos se encuentra, como posteriormente apuntamos, uno de los elementos impor- tantes para clasificar una constitucién y para conocer realmente qué es ella y cémo opera en la realidad, Ya en otra ocasién afirmé que: E] funcionamiento de los poderes, especificamente del ejecutivo y del Je- gislativo, asentado en la constitucién, sera de acuerdo o muy diferente del texto gramatical, segiin sea el sistema de partido o partidos politicos en esa sociedad. Es decir, el sistema de gobierno es una estructura en la cual se desarrolla un proceso politico que esté profundamente determi- minado por los partidos politicos. Asi, diferente funcionara ese sistema de gobierno, si hay bi o multipar- 8 Smith, S.A. de, Constitutional and administrative law, Londres, Longman, 1971, p. 36. 10 Smith, 8. A. de, of. cif. supra, p. 35. LA CLASIFICACION DE LAS GONSTITUCIONES 365 tidismo, un solo partido © un partido predominante ... hoy en dia, los principios que configuran la divisién de poderes y el sistema de gobier- no se alteran y funcionan, segiin sea la existencia del régimen de parti- dos politicos en esa sociedad. E. Leslie Wolf-Phillips presenté un modelo que posee trece categorias para la clasificacién de las constituciones; consideré que su modelo pretendia realizar un andlisis de los sistemas constitucionales que fuera més sutil, mas objetivo y mas detallade que otros* a saber: a) eseritas y no escritas, 0 codificadas y no codificadas; b) condicionales y no condicionales: de acuerdo a si la constitucién po- see o no procedimientos especiales para su reforma; ¢) superiores y subordinadas: de acuerdo a si la reforma constitucional la realiza un drgano especial o la puede realizar el poder legislativo. Es decir, la superioridad de Ja constitucién esta en relacién con el poder legislative; d) rigidas y flexibles: de acuerdo con la facilidad y frecuencia con que se reforman; €) autéctonas y externas: de acuerdo a si han sido “‘hechas en casa” o si han sido impuestas desde afuera o es sélo una imitacién de otra; f) manifiestas y latentes: de acuerdo con el nfimero de elementos fun- damentales del proceso politico que consignan o no. Asi, una serie de constituciones de las democracias liberales occidentales son omisas respecto a los partidos politicos, Es decir, en esta categoria lo que se tiene en cuenta es el grado de actividad politica vital que no est& especificada en el texto constitucional; presidenciales y parlamentarias; monarquicas y republicanas; bicamerales y unicamerales; competitivas y consolidativas: de acuerdo a si existe o hay ausencia de fuerzas competitivas en las propuestas juridicas o en la practica real del sistema constitucional;; k) programaticas y confirmatorias: de acuerdo con la existencia o la ausencia, o al cuanto de clausulas programaticas que contienen; 1) justiciables y nugatorias: de acuerdo con los procedimientos existen- tes para la defensa de la constitucién, es decir, dependiendo de Ja 11 Carpizo, Jorge, “Derecho constitucional”, en Las humanidades en el siglo XX, 1. El Derecho, México, UNAM, 1975, pp. 124-125, 1 Wolf-Phillips, Leslie, Comparative Constitutions, Londres, Macmillan Press, 1972, p. 48. 366 JORGE: CARPIZO “proteccién efectiva” que la propia ley fundamental tiene para sus preceptos, y m) federales y unitarias."* Wolf-Phillips se esforzé por superar algunos problemas que presentan otras clasificaciones. Se puede afirmar que el problema de la clasificacién de las constituciones ha oscilado entre dos vertientes: una, la estructurada por Bryce-Wheare y, la otra, la de Loewenstein, que vamos a exarninar pos- teriormente. Wolf-Phillips traté de armonizar esas dos vertientes ¢ incluir los mejores elementos de ambas, sélo que se perdié en su intento; propuso excesivas categorias, algunas innecesarias, y de su “mezcla” no quedé cla- ramente especificado en qué categorias se debe hacer énfasis al encontrar- nos ante el problema de Ia clasificacién de las constituciones. Debe resaltarse que en la exposicién de Wolf-Phillips esta claro que una misma constitucién puede comprender al mismo tiempo partes de la mis- ma categoria; es decir, una parte puede ser programatica y otra parte confirmatoria.”! F. Germdn J. Bidart Campos fue consciente de que su clasificacién no era exhaustiva, y mencioné a las siguientes clases de constituciones: a) Ja escrita, formal o codificada; b) la no escrita © dispersa; c) Ja for- mal, definida por la forma externa de la codificacién normatiya; d) la material, que es la vigente y real como modo de estructura y ordenacién de un régimen; e) la rigida; f) la flexible; g) la pétrea, que es aquella que, ademas de ser escrita y rigida, es declarada irreformable, aunque ge- neralmente s6lo algunas cldusulas son las no tocables: una constitucién sera pétrea en los periodos durante los cuales su reforma esta prohibida; h) la otorgada, aquella concedida o establecida unilateralmente por un Srgano estatal; i) la pactada, aquella. que es el resultado de un acuerdo, compromiso o transaccién entre un érgano estatal y la comunidad o un sector de ella, y j) Ja impuesta, que es la emanada del poder constituyen- te, que solo es el pueblo, y surge de un procedimiento que es expresién del ejercicio de ese poder constituyente.* G. Otros. 1. Para Pablo Lucas Verdi, las constituciones se pueden clasifi- car en: a) consuetudinarias y escritas; b) breves y extensas, lo que no es un criterio téenico-juridico sino una distincién empirica susceptible de efec- 13 Wolf-Phillips, Leslie, op. cit., supra, pp. 32-47. 14 Wolf-Phillips, Leslie, op. cit., supra, p. 39. 1 Bidart Campos, German J., Manual de derecho constitucional argentino, Bue- nos Aires, Ediar, 1975, pp. 31-32. LA CLASIFICACION DE LAS CONSTITUGIONES 367 tos prdcticos; c) otorgadas, pactadas e impuestas, y d) flexibles y rigidas.4* Lucas Verda asenté que desde el enfoque sociopolitico seguido por Loewenstein las constituciones pueden ser normativas, nominales y seman- ticas. IL. Para Tagle Ackdval, las constituciones se pueden clasificar en: a) escritas y consuetudinarias; b) rigidas y flexibles; c) formales y materiales (para él una constitucién formal es la expedida por el poder constituyen- te, y la material ¢s la que realmente vive el pais y que resuelve el orden de Ja organizacién de la comunidad}; y d) racional-normativa, historicis- ta y sociolégica. En esta tiltima categoria el autor cayé en una confusién, ya que esas emunciaciones no corresponden a una clasificacién sino a una tipologia de las constituciones; clasificacién y tipologia son dos cuestiones diferentes aunque, claro esté, relacionadas entre si27 : IIL Para Segundo Linares Quintana, las constituciones se pueden clasi- ficar en: a) codificadas y dispersas; b) rigidas, flexibles o con cldusulas pétreas, y c) constitucién, carta y pacto. La constitucién es el instrumento de gobierno que garantiza la libertad y la dignidad del hombre al cual se le reconocen derechos por el solo hecho de existir y, por tanto, se imponen limitaciones a los poderes publicos. La carta constitucional es la otorgada al pueblo por ef rey o principe, a titulo de liberalidad, para concederle algunas libertades. El pacto es el resultado de una transaccién entre el rey y el pueblo. Esta altima clasificacién de Linares Quintana coincide con la que he- mos expuesto de Bidart Campos al referirse a constituciones otorgadas, pactadas e impuestas,*® misma que es utilizada por diversos autores, “IV. Para Humberto Quiroga Lavié, las constituciones se pueden clasifi- car en: a) dispersas 0 codificadas (Sait) ; b) escritas y no escritas; c) ma- teriales y formales (la material es Ja totalidad, es decir, es tanto la norma como la normalidad —-usos y costumbres—; en cambio, la formal es la 1 Lucas Verdé, Pablo, Curso de derecho politico, Madrid,, Editorial Teenos, 1974, vol. II, pp. 432-436, 1 Achdval, Tagle, Derecho constitucional, Buenos Aires, Depalma, 1976, t. I, pp. 117-125, Para conocer una tipologia constitucional, puede verse entre otros, a Schmitt, Carlos, La teorla de la constitucién, México, Editora Nacional, 1961, pp. 13-26, 41- 42; Heller, Hermann, Teoria del Estado, México, Fondo de Cultura Econémica, 1963, pp. 267-290; Garcia-Pelayo, Manuel, Derecho constitucional comparado, Madrid, Ma- nuales de la Revista de Occidente, 1964, pp. 33-52; Kelsen, Hans, Teorfa pura del derecho, Buenos Aires, Eudeba, 1960, pp. 138-145, y Teorla general del Estado, Méxi- co, Editora Nacional, 1965, pp. 325-330. 48 Linares Quintana, Segundo V., Tratado de la ciencia del derecho constitucional argentino y comparado, Buenos Aires, Editorial Alfa, 1953, t. IL, pp. 94-115. El mismo autor realiza una exposicién de los cfiterios tradicionales y del ontolégico, y afina sus conceptos al respecto en la segunda edicién de su importante obra. Buenos Aires, Editorial Plus Ultra, 1978, t. IJ, pp. 111-171 368 JORGE caRPIZ0 creada de acuerdo con los procedimientes que permiten individualizarla) : a) rigidas y flexibles (Bryce): e) pétreas, que pueden serlo absoluta 0 parcialmente; f) originarias y derivadas {Loewenstein}; g) ideolégicas y utilitarias (Loewenstein) ; j) normativas, nominales y semAnticas (Loe- wenstein) : h) genéricas y analiticas (Vanossi) {la genérica es 1a concisa, la que deja al legislador la reglamentacion de Jos principios conforme a las circunstancias, la constitucién analitica es Ja que contiene miltiples normas reglamentarias, lo qué obliga a su reforma constante), e, i) definitivas y de transicién (Alberdi} (las primeras se crean en una etapa de consolida- cién, en cambio las segundas se crean en época de tensién, y es necesario esperar a que el proceso politico-social madure para poderse expedir Ja constitucién defintiva) 2° V. Imre Koudes y Bodo Dennewwit:, entre otros, han propuesto ideas pa- ra clasificar las constituciones. si, para Kovacs lo importante es distin- guir las constituciones segiin la estructura de clases del estado, y de acuer- do con este criterio sélo hay dos tipos de constitucién: las socialistas y las burguesas, A su vez, las socialistas se distinguen en: Ja soviética y las de las democracias populares, y éstas, a su vez pueden ser contempladas des- de diversos angulos. Hasta aqui con las clasificaciones tradicionales, vamos a continuacién a examinar la clasificacién ms tepresentativa de un nueva corriente: la cla- sificacién que resulta de la comparacién entre lo que dice Ja norma y el modo come se aplica esa norma en la realidad. 3. EL GRITERIO ONTOLOGICO Karl Loewenstein criticé las clesificaciones “tradicionales” o “anticuadas” y se refirié especificamente a las mas conocidas: escritas y no escritas, ri- gidas y flexibles, mondrquicas y republicanas, parlamentarias y_presiden- ciales, de sistema unicameral y bicameral, unitarias y federles. Loewenstein, después de haber descartado los criterios anteriores, se abo- cé a la tarea de presentar nuevos criterios “mas orientados a la sustancia y ala esencia de la Constitucién”, y asi nos hablé de: a) constituciones originarias y derivadas, y b) constituciones ideolégico-programaticas y utilitarias. +2 Quiega Lavié, Humberto, Derecho constitucional, Buenos Aires, Cooperadora de Derecho y Ciencias Sociales, 1978, pp. 35-41. 2° Wolf-Phillips, Leslie, of. cit., supra, nota 12, pp. 21-26. 2 Loewenstein, Karl, Teoria de ia constitucién, Barcelona, Ediciones Ariel, 1964, pp. 205-209. LA CLASIFICACION DE LAS CONSTITUCIONES 369 La constitucién originaria es aquella que crea un nuevo principio fun- cional para-el proceso del poder politico y para la formacién de la volun- tad estatal; es decir, es originaria en cuanto. no sigue principios funciona- les asentados © construidos por otras leyes fundamentales. Como ejemplos sefialé el parlamentarismo briténico, el presidencialismo norteamericano y las constituciones sovicticas. La constitucién derivada es aquella que adapta a su realidad y a sus ne- cesidades los principios funcionales de una constitucién originaria; es de- cir, que introduce, con sus propias peculiaridades, los principios del proce- so del poder politico y para la formacién de la voluntad estatal contenidos en otra constitucién a su normatividad constitucional. El propio Loewen- stein escribié que Ja decisién sobre si una constitucién es originaria o una » simple copia, a menudo implica un juicio de valor subjetive,? y en ello tiene toda Ia 1az6n, porque no siempre es facil precisar hasta dénde una constitucién es original y hasta dénde no. Asi, hay constituciones que cali- ficariamos como derivadas si tinicamente nos atuviéramos a los principios del proceso del poder politico y para Ja formacién de la voluntad estatal, pero que, desde otros angulos, podrian ser originarias como en el caso de la mexicana de 1917 con su declaracién de derechos sociales. La clasificacién de. las constituciones en ideolégico-programaticas y en utilitarias, responde al criterio de si la constitucién tiene un programa ideoldgico y si estd cargada ideolégicamente, o si s6lo presenta un cuadro utilitario con 1a finalidad de regular el mecanismo del proceso guberna- mental, Como ejemplos de constituciones utilitarias yefialé la Constitucién Fe- deral Alemana de 1871 y la francesa de 1875. Entre las ideolégicas enu- meré a Ja mexicana de 1917 y a la ley fundamental de Bonn de 1949. El propio Loewenstein acepté que las clasificaciones que habia propuesto tenian el mismo defecto del que adolecen las clasificaciones tradicionales, ya que no toman en cuenta la transformacién que ha sufrido Ja constitu- cin escrita en la realidad sociopolitica, al no lograr en muchas ocasiones su finalidad: institucionalizar la distribucién del ejercicio del poder poli- tico, siendo la constitucién escrita frecuentemente un cémodo disfraz de la concentracién del poder en unas solas manos. Por Jo anterior, Loewenstein se preocupé por encontrar una nueva cla- sificacién, y este andlisis, que denomind ontoldgico, consiste en estudiar y contrastar e] contenido de fa constitucién escrita con la realidad constitu- cional, 0 sea con la realidad del proceso del poder, Esta clasificacién par- te de la tesis de que una constitucién escrita no funciona por si misma, ® Loewenstein, Karl, of. cif., supra, pp. 209-211. 370 JORGE CARPIZO sino que serA Jo que los gobernantes y gobernados hacen de ella en la practica, Y conforme al criterio ontolégico que apunt6, clasificé a las cons- tituciones en normativas, nominales y semanticas. La constitucién normativa es aquelia en que la realidad del proceso po- litico se realiza de acuerdo con lo sefialado en la norma constitucional; existe adecuacién entre realidad y norma. Como ejemplo, destacé a Gran Bretafia, Suecia, Estados Unidos e Italia. La constitucién nominal es aquella en donde no existe una concordan- cia absoluta entre la realidad del proceso politico y las normas constitu- cionales, a causa de una serie de factores de indole social y econémica, como la falta de educacién en general, la inexistencia de uma clase media independiente; sin embargo, hay la esperanza de que esa concordancia se pueda dar tarde 0 temprano, debido a la buena voluntad de los detenta- dores y de los destinatarios del poder. La constitucién nominal tiene una funcién educativa y su meta es la de convertirse en una constitucién nor- mativa. Como ejemplos, destacé a México, Argentina, Uruguay y Costa Rica. La constitucién semantica es aquella en que el proceso del poder esta congelado en beneficio de quienes efectivamente detentan el poder. Es decir, no hay concordancia entre la realidad y la norma escrita, y si no existiese ninguna constitucién escrita el proceso real no seria muy diferen- te al que acontece, En estos casos, la constitucién més bien sirve para estabilizar y eternizar a los detentadores del poder que como un instru- mento para limitar al propio poder. Como ejemplos destacd casi a todos los estados islamicos.?* Loewenstein insistié en que para conocer si una constitucién es norma- tiva, nominal 0 semdntica, no nos podemos conformar con analizar la cons- titucién escrita, es preciso conocer la realidad del proceso del poder, ya que las constituciones nominales y semanticas presumen de ser normativas. Este distinguido autor indicé que su clasificacién ontolégica era un primer intento que tendria que ser matizado y precisado, pero que tenia el mé- rito de haber quebrado los criterios tradicionales, faltos de sentido realista y apartados de las experiencias constitucionales actuales. Estoy de acuerdo con Loewenstein, ya que en los estudios constituciona- les no es suficiente el andlisis del texto constitucional; hay que conocer la realidad, cémo opera el proceso de formacién del poder. Algunas de las clasificaciones tradicionales reportan cierta utilidad, pero es necesario ras- gar el velo que oculta la realidad constitucional, Hay que adentrarse en 26 Loewenstein, Karl, op cit, supra, pp. 213-222, LA CLASIFICACION DE LAS CONSTITUCIONES. 371 el conocimiento de cémo esté distribuido y limitado el poder y cémo ope- ran los grupos politicos, los factores que poseen poder. 4. LA UTILIDAD DE LA CLASIFICACION DE LAS CONSTITUGIONES Antes de pasar a proponer un criterio para la clasificacion de las consti- tuciones, podemos reiterar que existen dos Spticas para acercamnos a este problema: la tradicional que consiste en tratar de resaltar Ja o las caracte- risticas més relevantes de la constitucién escrita 0 codificada; es decir, circunscribir el andlisis a lo que expresa la constitucién escrita, De acuerdo con los diversos autores, estas caracteristicas 0 el énfasis puesto en ellas, cambian y no son las mismas. La segunda éptica es la ontolégica, que fue empleada por Loewenstein, y que consiste, tal y como lo’hemos afirmado, en hacer una comparacién entre la constitucién escrita 0 codificada y la realidad en que se aplica. Por qué este empefio en clasificar las constituciones? Primero, porque la clasificacién es Util al derecho comparado y sirve para comprender, a primera vista, las notas sobresalientes del sistema politico de un pais; se- gundo, porque tiene una importancia politica que nos eva de la mano a plantearnos el problema de qué tipo de constitucién es la mejor. Desde este punto de vista la primera clasificacion de las constituciones —identi- ficando aqui, aunque no es correcto, constitucién con gobierno—, Ja rea- liz6 Aristételes; y tercero, porque tiene un valor didactico, ya que es una forma de poder conocer, con tn método, una diversidad de constituciones. Las clasificaciones tradicionales presentan un problema y tienen un mé- rito, El problema estriba en que las simples notas sefialadas en la constitu- cién, pueden ser sélo literatura y no darnos una idea precisa del funciona- miento real de Ja estructura politica y del gobierno del pais en cuestién. Asi, por el hecho de que en la constitucién existan un érgano y procedimiento especiales para su reforma —constitucién rigida—, no podemos saber si esa constitucién se altera con frecuencia o no. La constitucién mexicana, que juridicamente es rigida, a partir de su promulgacién en 1917 se ha reformado en mas de doscientas cincuenta ocasiones.** En cambio, la cons- titucién inglesa —que se clasifica como flexible—, en los principios fun- damentales de su gobierno, ha cambiado poco en los tiltimos doscientos cincuenta aiios. Estados federales, como los latinoamericanos: Argentina, Brasil, México Véase Valadés, Diego, “La constitucién reformada” en Los Derechos del Pueblo Mexicano, México, Camara de Diputados, L. Legislawura, 1979, t. XII. 372 JORGE caRPizo y Venezuela2* se encuentran altamente centralizados; en cambio, paises unitarios como Italia poseen un alto grado de descentralizacién. Constituciones presidenciales, calcadas de la norteamericana, han funcio- nado como parlamentarias; por ejemplo, se puede sefialar la ley funda- mentai chilena durante el siglo xrx. Ademas, hay constituciones hibridas, que aceptan en su sistema de gobierno tanto principios parlamentarios como presidenciales; de esta manera es posible recordar la francesa de 1958. La clasificacién en constituciones mondrquicas © republicanas nos dice muy poco en nuestros dias, porque no se puede ya identificar la forma repu- blicana de gobierno con los principies democraticos. Algunos de los paises donde realmente se vive el sistema democrdtico son monarquicos, como la Gran Bretafia, Suecia, Noruega, Dinamarca y Holanda, y algunas de las peores dictaduras del siglo xx han adoptado la forma de repiiblica. Todo lo expresado en los parrafos anteriores ¢s cierto, y en ello estriba el problema de las clasificaciones tradicionales. Su valor es relative porque sus alirmaciones no siempre coinciden con la realidad constitucional, Las clasificaciones tradicionales se concretan al conecimiento de la norma cons- titucional. Sin embargo, estas clasificaciones tienen un mérito: nos indican criterios que pueden ser dtiles para aproximarnos, en el derecho compara- do, al conocimiento de las constituciones. Por ejemplo, tomemos la clasificacién de Wheare, que no es prolija, ya que las prolijas s¢ pierden en notas secundarias, y comparemos algunas constituciones. La constitucién norteamericana es suprema sobre el legislativo, federal, presidencial y republicana, La inglesa no es suprema sobre el legislativo, unitaria, parlamentaria y monarquica. A primera vista, podemos concluir que las constituciones norteamerica- na e inglesa son muy diferentes entre si, y estamos en posibilidad de esta- blecer la diferencia, manifestando qué implica una nota caracteristica res- pecto de la otra. La constitucién mexicana es suprema sobre el legislativo, federal, presi- dencial y republicana. La conclusién seria que es muy parecida a la norte- americana. La.constitucién australiana es suprema sobre el jegislativo, federal, par- 2 Al respecto se pueden consultar. Frondizi, Silvio, “El federalismo en la Repi- blica Argentina”, en Los sistemas federales de! Continente Americano, México, UNAM y Fondo de Cultura Econémica, 1972, pp. 11-115; Pinto Ferreira, Luiz, “Et sistema federal brasileio”, en la misma obra citada lineas arriba, pp. 117-216: La Roche, Humberto J., “El Federalismo en Venezuela”, en la misma obra citada Iineas arriba, ; Carpizo, Jorge. Federalisma en Latinoamérica, México, UNAM, 1973, LA CLASIFIGACION DE LAS CONSTITUCIONES 373 lamentaria y monarquica. La conclusién seria que se encuentra en un pun~ to medio entre Ja inglesa y la norteamericana y la mexicana. La italiana es suprema sobre el legislativo, unitaria, parlamentaria y re- publicana. La constitucién de la Repdblica Federal de Alemania es suprema sobre el legislativo, federal, parlamentaria y republicana. La conclusién seria que Jas constituciones alemana e italiana se parecen excepto en la forma de estado, Sin embargo, si vernos cémo operan esas constituciones en la realidad, tendriamos que concluir que la norteamericana y la inglesa se asemejan mas en el funcionamiento que la norteamericana y la mexicana: que la na no se encuentra en medio de Jas antes comparadas, sino esté mas cerea de la inglesa; que el funcionamiento de la constitucién alemana es diverso del de Ja italiana. De acuerdo con la clasificacion de Wheare, la constitucién de la Union de Reptiblicas Soviticas Socialistas es suprema sobre la legislatura, federal, parlamentaria y republicana. Es decir, coincide con las notas de la cons- titucién de la Repiblica Federal de Alemania, y en la realidad estos paises operan constitucionalmente en forma muy diferente. A pesar de lo anterior, el mérito de las clasificaciones tradicionales, des- de luego relativo, estriba en que da un primer paso, susceptible de ser pos- teriormente afinado, en el conocimiento de las constituciones y es un ins- trumento util en el derecho constitucional comparado. Y creemos que si a la clasificacién de Wheare le agregdramos un quinto criterio: la existencia del sistema de partidos politicos, seria todavia mas ‘itil, y ayudaria a explicar una nota esencial en el examen de las consti- tuciones de nuestros dias. Este criterio nos ayudaria a explicarnos por qué la constitucién norteamericana esté mas cerca de la inglesa que de la me- xicana, y la australiana de la inglesa; por qué la italiana opera en forma diversa de la alemana y por qué esta diltima es tan diferente de la sovié- tica; aunque, claro esta, el incluir el criterio de los partidos politicos pre- senta sus problemas: la existencia y funcionamiento del sistema de tales partidos no siempre se encuentra en la constitucién o en sus leyes regla~ mentarias, y ademas ese sistema no siempre opera de acuerdo a lo que establece la norma juridica. Sin embargo, creemos que este criterio es exen- cial en una clasificacién tradicional. Ahora bien, la clasificacién ontolégica de las constituciones también pre- senta un problema y contiene un mérito. El mérito, indudablemente, estriba en que nos acerca mas a la realidad constitucional, nos otorga una visién mas clara de qué es y c6mo opera una constitucién, rasga el velo que oculta al ser constitucional en las clasifica- 374 JORGE CARPIZO ciones tradicionales, nos indica que no nos podemos quedar en la sola forma, 2 pesar de la importancia de ésta. El problema que presenta la clasificacién ontolégica, se encuentra en que al comparar la norma con la realidad salimos del mundo seguro de la forma y estamos en un riesgo mayor de equivocarnos. Para poder realizar esa comparacién, necesitamos instrumentos de cardcter sociolégico, politi- co y econémico, y en el analisis pueden introducirse elementos ideoldgicos. A pesar del problema que representa la clasificacién ontolégica, ella es superior a Ja tradicional, y si slo nos quedardémos con una, sin lugar a du- das prefeririamos la ontoldgica. Empero, estas dos épticas no son antayé- nicas sino complementarias, y muy bien se puede contemplar una constitu- cidn con el criterio tradicional e inmediatamente después con el criterio ontolégico. No desechamos totalmente el criterio tradicional, porque nos aporta da- tos importantes; cierto es que un pais en cuya constitucién se sefiala al sistema federal como forma de gobierno puede estar fuertemente centrali- zado; pero aqui, como ya lo indicamos, no debe terminar el anilisis, sino es preciso examinar qué notas federales subsisten y contemplar cémo la de- claracién federal afecta a la realidad; en otras palabras, debemos pregun- tarnos: gsi esa constitucién estructurara un sistema unitario, funcionaria igual que con la declaracién federal? En miiltiples casos vemos que la for- ma constitucional influye para que exista un cierto grado de descentraliza- cién politica, como es el caso de México. Asimismo, los mecanismos del sistema de gobierno y las relaciones entre el ejecutivo y el legislative se ven afectados de acuerdo a si el sistema es presidencial o parlamentario, aunque en algunos aspectos estos sistemas se hayan ido acercando entre si. De este modo, situaciones que parecen su- peradas en un sistema, vuelven a presentarse segiin las circunstancias, Por ejemplo, desde 1924 un gobierno inglés no recibia, por el principio de dis- ciplina de partido, un voto de censura por parte de la cdmara de los co- munes. En 1979 el primer ministro, y con él ef gabinete, recibié un voto de censura que trajo como consecuencia la convocatoria a elecciones y la formacién de un nuevo gabinete por parte del partido opositor, el conser- vador. Por ello, creemos que las clasificaciones tradicionales cumplen atin algu- na utilidad. Son un primer paso para la comprensién y entendimiento de las constituciones, Nos sirven para establecer comparaciones y tratar de en- contrar las mejores instituciones Sin embargo, en las clasificaciones twadicionales es necesario para no perderse, que los criterios no sean muy numerosos. Por ello, considero que LA CLASIFICACION DE LAS GONSTITUCIONES 375 se puede utilizar la clasificacién de Wheare, agregdndole el criterio del sis- tema de partido politico. Pero como ya asenté, el solo enfoque tradicional es incompleto y puede deformar el andlisis constitucional al ocultarnos © decirnes poco respecto a la realidad constitucional, En consecuencia, indispensable es que después de emplear una clasificacién tradicional, utilicemos el criterio ontolégico para penetrar en el ser constitucional, para profundizar sobre la constitu- cién de un pais. Y el mejor examen ontoldgico lo ha realizado Locwen- stein, a pesar de no hacerlo en forma integra; porque gcon qué elementos vamos a saber si la constituciér escrita se cumple cabalmente, en forma regular, 0 no se cumple? Queda demasiado al juicio del analista la colo- cacién de una constitucién en los casilleros de normativa, nominal y se- méntica. Ademés, parece ser que en la‘ clasificacién de Loewenstein no se consideran a las constituciones del mundo socialista. El propio Loewenstein afirmé que su clasificacion en constituciones nor- mativas, nominales y semanticas era un primer intento que necesitaba ser matizado y precisado.*” Lo que voy a intentar és una clasificacién de Jas constituciones dentro del ambito ontolégico, tratando de precisar las pre- guntas que necesitamos hacernos para llegar a una conclusién. 5. UNA PROPUESTA DE CLASIFICAGION Para conocer el sistema constitucional o constitucién en sentido estricto de un pais, hay tres preguntas fundamentales: a) cémo estén establecidos y cémo operan en la realidad las garantias o derechos individuales, b} qué minimos econémicos y sociales se les aseguran a los individuos y cémo ope- ran en la realidad, y c) cual es la estructura del sistema politico; dentro de esta dltima pregunta, lo que hay que constatar en la norma y la xealidad es el principio de la separacién de poderes y el régimen de partidos politicos. Asi, para conocer qué es la constitucién de un pais, debemos abocarnos en primer lugar a contestar esas tres preguntas, y una vez que la constitucién nos haya dado la respuesta, es necesario todavia un ejercicio mas: investi- Qar cémo operan y se respetan esos principios en la realidad constitucional. Claro est4 que otros elementos ayudardn a matizar la concepcién que obtengamos al contestar esas tres preguntas; pero considero que éstas con- tienen los elementos primordiales para conocer y examinar una constitucién. Las garantias individuales indican la axiologia de toda Ja ley fundamental. El derecho es sélo un instrumento que construye el hombre para su servi- cio, para establecer reglas de juego, para hacer posible la conyivencia so- cial. Las garantias individuales son, desde muy diversos Angulos, la salvaguar- 26 Loewenstein, Karl, op. cit., supra, nota 21, p. 222, 376 yore CARPIZO dia de la propia naturaleza humana: la libertad, la igualdad y un minimo de seguridad, Los hombres construimos nuestro orden piiblico y estructura- mos los érganos de gobierno para que actien de acuerdo con la constitucién y ejerzan las finalidades que les asignamos. Las garantias individuales son el campo que sustraemos de la actividad de los érganos de gobierno. Los minimos econémicos y sociales que sefialan Jas constituciones son un aspecto complementario de las garantias individuales, ya que el solo asegu- ramiento de la libertad, la igualdad y el mfnimo de seguridad juridica no son suficientes para garantizar que el hombre leve una vida realmente huma- na; a fin de que pueda satisfacer, cuando menos, un minimo de nivel de ida, digno y decoroso para su naturaleza humana, y por ello se garantizan los mencionados miinimos econdmicos. La tercera pregunta responde a la idea de que nuestros representantes realmente sean sdlo servidores de la ley para el servicio de la comunidad; que ejerzan sus facultades conforme a la constitucién y en beneficio de Ja propia comunidad. La vieja idea de Locke y Montesquieu atin es operante en nuestros dias: que el poder no esté concentrado, porque entonces todo estA perdido: sdlo que este pensamiento necesita ser complementado: todo el sistema de gobierno se modifica de acuerdo con el sistema de partidos politicos, y opera el sistema politico de un pais muy diferente segim a si existe un partido tice, un partido hegeménico, un sistema bipartidista o un sistema multipartidista; desde luego, estas categorias admiten, a su vez. una serie de matices. Asi, para el problema de la clasificacién de las constituciones, para cono- cer realmente fa constitucién de un pais, hay que tener en cuenta estas pre- guntas: de acuerdo con la contestacién que se les dé, serd el resultado de Ja comparacién, de la compulsa entre el texto y la realidad constitucional. De conformidad con las ideas expuestas, podemos clasificar las constitu clones en: a} democrdticas, b) cuasi-democréticas, c) de democracia popu- lar y d) no democraticas, Para empezar, hay que admitir que Ia terminologia no es precisa porque la palabra deimocracia se presta a diversas interpretaciones, y ha ido per- diendo contenido para volverse un término de prestigio: todo régimen se autocalifiea de democracia. Dado que es un desprestigio ser considerado un régimen de dictadura, autocracia o tiranfa, estos regimenes también se os- tentan como deiocracias. Ello contribuye a la confusién que existe para poder determinar qué es una democracia, Sistemas tan diversos como los capitalistas y los socialistas, declaran que lo son, y asi se habla de las demo- cracias ocidentales y de las orientales. A pesar de esos problemas terminoldgicos, escogimos como base de nuestra clasificacién la palabra democracia porque ella es la finalidad de todo siste- LA CLASIFICACION DE LAS CONSTITUCIONES 377 ma constitacional; porque hasta ahora es el sistema de vida politico-juridico més acabado que conoce el hombre y el que mejor se adapta a su naturaleza, y porque al contestarse las preguntas se precisa el término clasificado y se esfuman las ambigiiedades que a la palabra democracia se le podrian atri- buir, Luego: una constitucién democrdtica es aquella que realmente: i) asegu- ra ampliamente al individuo sus garantias individuales; ii) Je garantiza un minimo digno de seguridad econémica; iii) no concentra el poder en una persona o grupo: es decir, que las funciones son ejercidas realmente por diversos érganos y el sistema de partidos acepta el principio del pluralismo ideolégico. Como ejemplo de constituciones democraticas, entre otras, podemos se- fialar a Gran Bretafia, Suecia, Noruega, Dinamarca, Holanda, Bélgica y Suiza. En estos paises hay respeto por Ios derechos humanos, se tiene reve- rencia por lo que es la persona humana, y la gran mayoria de los habitantes gozan de un nivel econémico que les permite no slo subsistir bien, sino tener lo suficiente para satisfacer necesidades culturales y recreativas a un cierto nivel. El principio de la separacién de poderes opera, cada érgano tiene sefialadas sus propias funciones y las realiza; su estructura politica per mite al ciudadano optar por alternativas politicas ya que el pluralismo es un modo de ser de la sociedad que se manifiesta en un sistema bi o multi- partidista, en posibilidades de decisién politica sobre el partido que debe gobernar al pais. La constitucién cuasi-democrdtica es aquella en que el individuo tiene constitucionalmente aseguradas toda una serie de garantias individuales y un digno minimo econémico, pero en la realidad, estos postulados, aunque no son simple letra sin contenido, no se cumplen bien, El respeto hacia Ja persona humana es incompleto. Son pafses cuya estabilidad politica no es muy firme, Ja situacién econémica no es muy préspera y las desigualdades sociales y econémicas son fuertes. En principio existe separacién de poderes, pero en la realidad uno de ellos tiene tal fuerza que se destruye el equilibrio que debe existir con los otros érganos del gobierno. Generalmente el ejecutivo tiene preponderancia especial, y respecto al pluralismo, éste se admite aunque en miltiples oca- siones existe un partido preponderante o hegeménico. Los paises con constituciones cuasi-democraticas son generalmente paises en vias de desarrollo con graves problemas econémicos, educativos, politi- cos y sociales, en donde atin la justicia no opera cabalmente, pero son paises que no son dictaduras ni tiranias, en Jos cuales se puede vivir y existe Ia posibilidad de que leguen a configurar una constitucién democritica; aun- que también la de que puedan retroceder a una no-democratica como, des- 378 JORGE. CARPIZ0 afortunadamente, ha acontecido en Chile y Uruguay durante Jos tltimos afios. Entre los paises con constituciones cuasi-democréticas podemos mencio- nar come ejemplos a México, La India y Tanzania. Glaro esta que estos paises no son iguales y hay diferencias entre ellos, pero creemos que también hay, en lineas generales, aspectos comunes que nos permiten agruparlos. Las constituciones de democracia popular se configuran primordialmente en los paises socialistas donde el énfasis no se encuentra puesto en la garan- tia de los derechos humanes, sino en el aseguramiento del minimo econémico digno, La persona humana tiene un valor diferente al que se le da en las constituciones democraticas, ya que en Ias de democracia popular la perso- na realmente se encuentra subordinada a los fines del estado. Una caracteris- tica suya es que generalmente sélo existe un partide politico, es decir, no hay pluralismo ideolégico, v en los paises donde se admite mas de un partido. los otros no tienen ninguna posibilidad de aleanzar el poder. La burocracia del partido lo es también del gobierno, dandose entre ellos una unién que hace que el peso especifico de las decisiones se encuentre en dicha burocra- cia, dejandose a los otros érganos de! gobierno sin efectivo poder real. Entre los paises que podemos sefialar que cuentan con una constitucién de democracia popular, se cuentan: Hungrfa, Checoslovaquia, China, Al- bania, Bulgaria y Rumania. Las constituciones no-democraticas son aquellas en que no se aseguran Jos derechos humanos ni los minimos econémicos, y el principio de separacién de poderes y del sistema de partidos politicos se resume en la voluntad de quien detenta el poder. Son sistemas en los cuales la concepcién democra- tica de la vida no opera. La voluntad de una o de varias personas determina la voluntad politica del pats. Tienen una constitucién no-democratica los paises Jatinoamericanos de ré- gimen militar como Chile, El Salvador y Paraguay, y dictaduras africanas como las de Uganda y el Imperio Central Africano. Se pueden resumir Jas ideas anteriores en un cuadro: Ahora bien, estos pensamientos necesitan ser matizados, porque induda- blemente hay constituciones que es dificil; a primera vista, colocar en una clasificacién, Sin embargo, el mérito que puede tener mi propuesta, que no es una formula matematica, estriba en tratar de desentrafiar cudles son los aspectos mas importantes pera conocer qué es realmente una constitucién, sin quedarnos slo con el texto constitucional y dndonos los instrumentos para poder colocar a determinada constitucién en uno de los casilleros. En otras palabras, trata de examinar cul es realmente la constitucién de un pafs. Claro esté que la clasificacién anterior puede prestarse a polémicas en Estructura del sistema politico: separacién de Constitucién — Garantias individuales Minimo econdmico poderes y sistema de partidos politicos TDemocritica —_Estdn bien aseguradas De acuerdo con la Pluralismo politico, Cada érgano del gobierno dignidad humana ejerce sus propias facultades Cuasi- En la realidad no siempre No es un minimo suficiente No siempre opera efectivamente el pluralismo democrética estén totalmente asegura- para grandes sectores de la politico. Hay concentracién de facultades en uno De democracia popular No. democraticas das En la realidad no siempre estan totalmente asegura- das No estan aseguradas poblacién De acuerdo con la dignidad humana No existe ese minimo econémico como regla general de los érganos No existe pluralismo politico, Hay concentracién de facultades en uno de los érganos. No existe pluralismo politico, Hay concentracién de facultades en uno de los érganos. ee 380 JORGE, CARPIZO y controversias, Cualquier clasificacin ontolégica se prestard a ello, y por esta raz6n es que asentamos que no descartamos totalmente la clasifica- cién tradicional de las constituciones, porque ain rinde alguna utilidad; solo que la ontolégica la viene a superar y a precisar; en cualquier clasifi- cacién de esta especie, lo que necesitamos determinar son las preguntas que debemos responder para poder colocar a las constituciones en los diversos casilleros establecidos. Esta cuestién de la clasificacién de las constituciones esta estrechamente vinculada a la concepcién que se tenga de ia vida constitucional y de To que debe ser una constitucién y las finalidades que debe perseguir, que para nosotros no pueden ser otras que asegurar al hombre una vida con Jibertad y con un minimo econémico digno, y que el gobierno no esté limitado y subordinado a la ley para que realmente se cumplan esas finalidades. Jorge Carrizo

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