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El ser y la nada

El ser de la nada
Con sus infinitos ojos
ojos más invisibles meditativos
que la fuerza mas imponente de lo universal

El pensamiento de Dios
Vomita al uróboro
para que inicie la existencia

En ese sin tiempo

el ser de la nada
inmóvil, inerte,
en su inexistencia comienza
las causas infinitas

Al final de la existencia

infinitos años Brahma


no son tiempo
en el latido de su corazon

en ese eterno sin final


solo es un inmortal mortal
entre todas las direcciones
eternas divinas de la totalidad
que emerge solo del pensamiento de Dios

Cementerio cósmico

Dios sobre los dioses


muere Por misericordia

Guerra

La totalidad enfrentándose a la muerte


¡Dioses en tormentos!

Primero lo eterno de lo eterno


Transmutándose

¡Negación absoluta!

Sobre el trono

¡La negación absoluta!


Pirámide

Erupciones sobre el vientre


Sentenciado de vírgenes diáfanas

con rebeldía emerge la oscuridad infernal

La serpiente endemoniada
desgarra su centro

Pero su sangre divina


Exculpe rostros
Sobre los ojos
cerebrales de videntes
Enviados por cielos
Que cubren la túnica
sepulcral triangular
Que levita sobre
infinitos corazones

Sobre sus lágrimas emerge


Un manantial sagrado de luz
Para encadenarte
Creadora de un caos imparable

Pero en su meollo de luz infinita


Habrá salvación
Que romperá sus muros
renacentistas de breva ardiente

Oración

Opera infernal
Engendras cadenas
He incineras mi ser

Muero existiendo

Terremotos en mi cuerpo
En sanscrito me transmite
vació cadavérico

con un rayo
Sangra las nebulosas alas

Angeles mueren
Mientras su Destino divino
Escrito por videntes cargan
venas infinitas
Y temblantes en mis ojos
ataúdes cerebral
ataúdes cerebrales…

Cráneos en arena
profundiza el trance

Mientras destruye
el meollo en mi ser

Voces momificadas

Surgen de mi centro
nervios
asfixiándome
con su filo
hace sangrar al viento
con su arpegio disminuido
sin final, veloz y asesino

Abre las cicatrices

mis nervios asesinos


ahorcando a mis huesos

el ataúd del viento


lugar sagrado
sangra
en su océano desértico
naufraga solitaria

glándula pineal

que observa desde su pirámide


los orificios blancos
del manto de la noche

rompen el velo
monje superior
rompe el velo
del cráneo de mi aura
sacrificando al fuego
enfermamente pálido

sonora espada
con espíritus momificados

¡Vivo muerto!

Fósil

Perdido laberinto cerebral


guiando el destino
de aquella surgente levitación

Busca mi frente para degollar


leones encadenados con fósiles resonantes
absorbe mi silencio de ausencias de almas
que al sufrir intensos dolores
por beber la sangre de los dioses

Sufrimiento
de una vagabunda alma
sin el tiempo cargador del espacio

Recorre el destino de su oscuridad


hasta romper la faz del abismo de mi ser

Dios sede su trono

Fuego azul
caes sin piedad
caes con intensidad dodecafónica

abres las puertas

Una espada
en la tierra creadora
enviada de los cielos densos

Orificios ciegos
en mi visión dramática
tragedia del tántrico eclipse
observador de la profundidad
del misterio más elevado

Cerebro temblando
Carcome con rebeldía
su oro hecha muerte
por aquella libertad
es sentenciado

Ser que te sumerges


hasta el extremo último
En las balanzas del juez
que mata a cada paso

Tiempo que Existe


mientras sangra el río
Donde beben los arquetipos
de la psique

Dios sede su trono


para descansar
por la eternidad de la eternidad

Frecuencia destructora

Me eleve ante el ruido


sonoro exótico de lamentos
de un feedback
entre mi cerebro y sentir

Frecuencia que destruyó


la vital visión
para ahogar esa neblina eléctrica
derretida en oro
por aquellos jinetes de la muerte

Que su viento traspasa mi carne


para llevarse mi espíritu
En aquel segundo
En aquel sin tiempo
me atraviesa una guerra infinita

Sucede en esa luz sin ser

Cerebro

Descomposición sobre el manto


en los labios destructores

metamorfosis de vísceras visiones


rompe mi fractal sombra
triangular horizontal
hasta fragmentarla

iluminado ser cubre mi cráneo


cicatriz en mi invisible símbolo abstracto

Cuevas en sombras
saturación vibrante
costras en mis alas
sintiendo al fin

la sangre del blanco lienzo muriente


en la cima del cerro expresionista
mi intensa convulsión
de laberíntica electricidad

holocausto oscuro trono


entre columnas de maderas de la cruz

En el cuello mutilado
por donde es libre el onírico caos
crea el génesis de salvación
que revivieron a mi cerebro

Cruz irreal

muriendo con la garganta paranoica


superficial renacer en blasfemia
degeneración del blanco que cubre sentenciado
la visión que azota la sombra gris

suspiro frío como los ojos


de aquel desierto nocturno

Muriente fuego que carga con sus vísceras

Saturada de gritos ardientes


en la lejanía hay más oscuridad
como un fuerte transcurso por el puente
de los extremos de la totalidad
se sangra dimensiones

Las manos del creador


sus manos de ardientes
donde la herida se agranda
hacia la profundidad
que se ruega para dar muerte
entre la psique perforada
exorciza con cruces murientes su forma de ver lo real

Cofre incendiado

Solitario tórax
llévate el cofre
guardado en nubes verdes

Mi precaria razón
arrodillada para rezar
no para elevarse
sino para no ser salvado

Mi ser muere por terminar


con todas sus agonizantes almas

sensibilidad que traspasó


las paredes de la realidad
sin un silencio de paz
que calme el incendio
de la reina boca
que se purifica

Paraíso sentenciado al abandono


Las cuevas en mis ojos

Caí a un pozo de víboras falsas


que son los dedos de algún azul espectro

luz carbón que alimenta la llama ardiente


del frío humeante sobre el lago
que cae de mi tercer ojo
ese que se oculta entre el cerebro
de cada capa real que le incorpora

Sangre y su presión oceánica de amar


Azote encantado transformador sin realidad

Un juez supremo de los cielos sentencia


todas mis verdades por la ausencia de mi cráneo
atado en el centro de los muros de aquel templo
esta sentado al Salvador
que lee el destino de las cuevas góticas
de mi trágico corazón

Ultimo segundo

Ultimo sonido que percibiré


Ultima idea que generare
Últimos respiros
Ultimas lagrimas
Ultima tensión nerviosa

Adiós ser mutilado por lo que existe y no


Al final mi ser expreso
En verdad esto es morir

Tensión oscura

Siento esta terrorífica tensión aguda


Hasta perforar el éter en grave herida
hecha rey del trono de frecuencias
en caos robótico que ponle el fin al libro
de mi destino que es castigo divino

El peso de ver , oír y sentir el mundo


de donde proviene lo desconocido
como un reflejo en mi forma vital
de darle existencia condenada
a no conocer lo infinito, el fin o la nada

Sinfónica

Quiebra mi columna
con el poder futurista de tu llanto
que busca refugio de enormes esculturas

Un vidente sagrado en perfiles


con filosa acaricia que besa
como la totalidad mi cuello cadavérico
mientras la sangre se vuele arte

Sinfónicos lamentos al final


de aquella espada sonora
que perfora el cerebro y corazón
hasta sentir aquella muerte perceptiva
llena del negro mas infernal

Lienzos

Oscuras manchas en lagrimas sobre lienzos


engendrando el fractal cráter de lluvias

escultura simbólica que grita una opera


con el viento absorbido por la presión

los orificios en la ultima entrada


hacia la Catedral donde explota la feroz fe

Perdido en aquella obra del artista


de expresión cromática sangrienta

oscuridad que cae con lo sesos de mis alas


que cortan con el filo de sus oraciones
purificando el negro aire
que deja su primitiva imagen
entre las paredes de mi carne
que es vientre para los raros espectros
con apariciones de venas murientes
Sangra mi ser

He experimentado toda mi sangre


entre las toxicas rocas esculpidas
que rezando en trance bajo
las púas de los huesos
de las ofrendas para calmar
la furia de los cielos

aplastando desde los templos


cada roja agonía para forjar
la profunda visión de los espectros
que derriten lo existente

para terminar la mortal puerta del ser


que absorbía el ritual en el caos volcánico
del cerebro creador hasta de las invisibles
lluvias que parecen eternas bajo los ojos
de un virgen acido que inunda mi razón

genera un temblor del cual me asfixia


mortal delirio destruye mi templo
para que mi alma mate a su mortal carne
levitando sobre lo desconocido

Silencio caótico

Ahórcame silencio
desgarradoramente caótico
sentencia el brujo oscuro poder
de mi existencia atonal

destruye el manto del espacio


que es la piel del vidente mas elevado
haz morir a mi corazón
que no tiene fin al sentir la negatividad
que crea agujeros por donde se escapa
la luz del sol de mi interior

un paisaje como el de las guerras


el viento es cortado
por la energía de los pensamientos
su sangre purifica
las heridas de las apariciones

el horizonte se pierde con las almas que arrastra


por el sendero de las afueras de la realidad
porque los dioses han cerrado las puertas del cielo
la oscuridad es lo único que nos espera
es lo mínimo que los dioses pudieron hacer por los mortales
darnos oscuridad en vez de nada
Visión moribunda

La arena del bilis


es el cáliz del féretro engendro
que surge de las cuevas
del leproso puñal que atraviesa
la realidad cadavérica del tórax
que cubre la soledad de este ataúd

mutilado por comer


la invalida carne de los dioses
que alumbra el terremoto del
templo de las rocas mortales volcánicas
que saborean con placer su moribundo momento

Carcomido por la ritual invocación


de un brujo en los montes de los símbolos divinos
Que refleja a dios en
la limitada capacidad humana de ver el todo
que se pierde en el infinito

con una corona de espinas que perfora el cráneo


entre el rio de sangre donde
cada uno de sus átomos son reflejos
de un sin final de universos
de cada capa de las apariciones de la inmortal realidad

Alma condenada

Caos existencial que destroza ferozmente


en infinitos fragmentos todo mi ser
hambrientas de todas mis almas
pasadas y futuras

el cadáver que me incorpora


gruje un silencio resonante
fúnebre y atonal visceral

Ardo en la faz de la totalidad de mi ser y no ser


El demonio que llevo el alma pecadora de Judas
ese demonio me asecha
pero no para llevarme al infierno

Me llevara a la estructura antes del inicio


de la primera causa que me hizo transcender lo inexistente
a lo que existe antes de que la self
se tornara como ser

o quizás, aun peor, a lo que existe después


de todas las dimensiones de lo realidad
para luego sentenciar con sangre
densamente oscura mi psique y self
convirtiéndome en la degradación de lo divino,
pero todo esto niego, porque la tumba roja
en donde mi alma vagabunda descansa
Se hace huesos

los entes me transportaran a la máxima


profundidad de lo existente

Secuelas mentales de sobrevivir a la muerte

Sentí el final pero no pude atravesarlo


con la espada del sepulcro de mi espíritu

pero hice sangrar con la lanza de los gritos de mi tragedia


aquella infinita verdad de los cielos

pude sentir el ultimo trance del fuego divino


absorbido por el silencio infernal
de los clavos que atravesando el espíritu y la carne
refleja el destino perfecto de dios en la tierra
por la libertad de los corazones
ocultados en aquellas sombras del otro plano
que se ve reflejada en el espejismo del agua
de la faz del abismo

confusa palabra rota del brillo


de aquella luz secuestradora
entre las cuevas volcánicas
llena de cada ojo
que puede ver una verdad

los cerebros encerrados


por siglos en el sepulcro de cristo
ilusiones materiales
en donde caerá la arena de la sequia
de la cruz de mis alas

saboreando tu beso sobre mi ataúd


aun late la herida nublada
de aquella historia escrita con sangre

mientras lucifer saca de sus venas el veneno de dios


para destruir el velo de la energía superior
quedándose en lo que existe
tras la muerte de la creación suprema

Inerte convulsión

Incendiaria agresividad cromática


de fosa cadavérica y funesta,
fenómeno del ruido podrido
del viento macilento de la muerte frecuencial irreal

mientras alumbra el treno silencioso


de la invisible inmanifestacion
que absorbe el mortal virus para trascender
del pasado inerte que asediado
por la consciencia surgente
de la inhóspita enigma

que es asediada por la tragedia


y negatividad del espíritu
mientras la degradación y materialización
del pensamiento divino
arde en las fauces de la nada

que no es más que una ilusión


producida por las distintas
etapas de la trascendencia
de lo que existe antes
de que el self de la totalidad rompa
las barreras de la abstracción de lo intangible

mientras Dios controla la realidad


hasta antes y después de su existencia
infinito en todo sentido pero sentenciado a lo finito

Sobreviví nuevamente

En el Ritual del denso azote del pecado oscuro


yace la tumba de huesos , hecha humo
esta el cadáver que es hermandad de almas

profanadas en mi blasfemo etéreo


del agujero negro de mi cerebro
carcomido por los virus del hacha
de la muerte que ronda en las venas
de mis pupilas putrefactas

en la noche carmesí , donde el cementerio


es sesos de las astillas de la cruz divina
a traviesa tu lengua venenosa víbora
maligna hecha lanza , toca mi corazón
con tus manos de hierro

hasta someterme a la esclavitud


de crucificarme con mi propia psique
que es tapada con la corona
que florece con pétalos sangrientos

donde mi cráneo destruido


por la magia negra de aquellos
incendios de las profundidades del infierno
mientras las almas están en el océano
esperando el final del tiempo que jamás llegara

del vacío de mis vísceras que engendra


el inicio de otra fatal existencia
sepulta las cenizas de mi corazón
bajo los pies de la nada
donde la luz es devorada por la oscuridad

el silencio grita hasta explotar


los astros del viento que susurra
a las afueras del universo

puedo sentir y ver lentamente aquel


segundo donde las balas sagradas de plata
atraviesan mi espíritu creador
de la materia que palpita en los temblores
de mi vomito final por la intoxicación
de emociones gobernadora de mi vacía razón

del infinito abismo que cuando


llegue a su final, dejare de existir
unificándome con la eterna
que es padre y madre de la luz
que emerge de su vientre
las guerras santas entre mi alma
y mi materia no tienen fin

mientras las muertes son arrastradas


tras el sendero profundo de la ultima dimensión
que son los huecos de los clavos de algún
vidente sagrado que engendra
la tortura del vacío cósmico

Mis cruces

Acida y destructiva tormenta de cruz sangrienta


invoca al lúgubre fuego verdugo
que inicia el ritual sonoro en mi sien

mientras la muerte entra por el agujero


llena en soledad eterna el ataúd que naufraga cegada
entre las venas negras de mis ojos

mientras veo el ultimo suspiro de la luz creadora


del sendero laberintico del self putrefacto que me incorpora
es azotado por espectros negativos
que devoran las vísceras, mis sesos , mi corazón

luego los restos mortales que quedaron esparcidos


en la escalera hacia el templo del tiempo
son violados por misteriosas sombras de infinitos ojos

mientras sentado en su trono esta el vidente


con una corona de huesos y vestimenta de piel humana
me sentencia a no morir jamás

con el corazón en la mano y el cerebro abierto


le suplico que me deje descansar en paz
el ríe intensamente y niega darme el descanso eterno.
Han pasado eternos evos y sigo sentenciado a existir

Vomito de intoxicación

Vomito mi cerebro
en el enésimo laser de sangre y fluidos
vinculo de los reflejos
en todos los horizontes del prisma

Nut en su infinito mortal


compone la pared abstracta del fin
el ataúd ciego en mi cráneo
aborta otro cerebro de almas errantes
que por billonésima vez son atravesadas
por las espadas de la reencarnación

que ferozmente grita


por la brea ardientemente
destructora de los huesos
en toda forma vital y de luz

creando agujeros negativos


por donde cae mi existencia
rodeando de oro y pólvora
mi alucinógena putrefacta depresión

Siguen cayendo mis vísceras


por la misma cicatriz de mi alma
un dolor desgarradoramente intenso
corre por mis venas
destrozando mis nervios
haciendo retorcer mis huesos

El fuego invisible que no me mata


pero puedo sentir ese desesperante ardor
absorber todo mi cuerpo

Estoy asfixiándome en el tórax


del creador océano acido
en donde alguna vez surgí en mi vida pasada
En los finales del laberinto de la existencia
misteriosos espectros arrastran la verdad
ese instantánea verdad de estar apunto de morir
mientras soy sometido por todas esas ideas y emociones

ese instante de tan oscura realidad es confusa


ese sentimiento de estar a un paso a morir
es inexplicable

Amada inmortal

Amada inmortal, me elevas a través de mi destrucción


y en el delirio del trance puedo ver morir el tiempo.
Me transmuto en fúnebre agonía

mi alma grita
y arde encadenada en las profundidades
expandiéndose en todo mi ser el fuego que me atormenta
como cada noche

pierdo la conciencia en diáfanos recuerdos.


Mi mente y mi corazón sangra
mientras la densa
oscuridad absorbe todo rastro de luz
me veo perdido en la faz del abismo
Mientras agonizante exclamo al cielo
que con la muerte detenga mi sufrimiento

Mis pensamientos más ácidos pulverizan mi existencia


mis huesos , que crujen en las fauces de la bestia
que custodia la puerta que conduce a mi libertad

Ahora soy el viento de un cielo ensangrentado


Mi alma bebe el veneno sin temor
porque prefiere ser nada
prefiere ir al infierno para ser torturada eternamente
para ser atormentada

por que sabe que en la eternidad


al final de este infierno
encontrará tus ojos infinitos
en donde he de perderme
hasta que mi tiempo no tenga más tiempo
hasta que mi espacio no tenga más espacio
hasta que mi vida no tenga más vida.

Voces suicidas

Gruje el arma escondida en la tierra de la niebla


de las espadas flameantes que se ocultan
en los oscuros laberintos del tiempo
donde el fuego consume a los espíritus de la nada

Sumergido en el agujero negro


que es el mundo detrás del universo de las balas
que atraviesan mi conciencia
hasta hacerla perder
toda forma de vida

para caer en el mundo de los muertos


que es el cuadro abstracto de mi sangre
cuadro que veo explotar lentamente en el trance
mientras caigo en las profundidades del abismo

que es el mar ácido de mis noches que se suicidan


ante la verdad que pulveriza a los leones
que son la ansiedad que me arde en las venas

La existencia se convierte en un caos mental


que hace caer granizo de mis ojos y que me hacen ver
como las sombras del mal
están cada vez más cerca de mi corazón
convirtiéndolo en cenizas que renacerán en otro espacio

hasta que mi alma quede perdida en el silencio


de la soga que me asfixia que me atormenta
hasta hacerme caer
con la mente enloquecida

El suelo se abre y caigo


en las profundidades de la inexistencia
en donde el poder de Dios no ha llegado en los millares
de eternidades que han pasado

Ardo en el medio del tornado


que me devora las vísceras
mientras vomito mi cerebro
y emerge lava del cráter que es mi espalda
cubriendo de ardiente arena
mi cadáver que se pierde en el infinito

y en el misterio que es la única verdad que existe


en la oscuridad del vacío que me absorbe

Las bestias que custodian las puertas


del no cielo y del no infierno
me devoran convirtiéndome

condenándome a seguir existiendo


cargando la cruz en medio de los gritos y lamentos
del sendero infinito que guarda los cadáveres
que eliminan todo rastro de vida

Vació

La nada
tomada como negatividad pura
absorbió cada dimensión
de la totalidad de mi ser
a gobernado sin parar
infinitamente
todas mis expresiones

Sangre lo suficiente
morí mas veces de lo pensado

Soy un testigo existente


de la profundidad de la locura
que es un tornado que destroza
toda percepción de la realidad

hasta que no quede mas ser


por consumir llegando entonces
a la estructura final del abismo
que se encuentra en el meollo de mi existencia

Al Descubrir que llegue


a la faz del abismo de mi ser
Simplemente
este se destrozo pasando a otro plano

Al llegar al final del otro abismo


este se volvió a destrozar

Entonces descubrí que este es infinito


por mas que toque el fondo
este se encuentra en su curso infinito
y solamente me queda seguir descubriendo
Oscuridades cada vez mas densas
mientras mi ser seguirá cayendo por la eternidad .

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