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MANUAL DE OPERACION Y MANTENIMIENTO DE LA

INFRAESTRUCTURA MENOR DE RIEGO PARA LOS VALLES DE


PALPA Y NASCA

I. INTRODUCCION

El Instituto Nacional de Recursos Naturales (INRENA) a través de la Intendencia de Recursos


Hídricos (antes DGAS) mediante diversos Convenios, hace varios años ha venido financiando
a nivel nacional diversos proyectos de Mejoramiento de la Infraestructura Menor de Riego en
los Distritos de Riego. Así tenemos que en el ámbito de la ATDR Palpa-Nasca se han
ejecutado por ejemplo los proyectos de Rehabilitación de Acueductos, y el de
Implementación de Estructuras de Medición y Control, los mismos que estuvieron orientados
a mejorar el aprovechamiento y el control de la distribución del recurso hídrico.

El presente Manual de Operación y Mantenimiento de la Infraestructura Menor de Riego en


los Distritos de Riego constituye una herramienta técnica a aplicarse dentro de los ámbitos de
las Comisiones de Regantes en las cuales se ejecutaron dichas obras, su utilización garantizará
que la infraestructura mejorada y/o rehabilitada se mantenga en óptimas condiciones
hidráulicas de funcionamiento, teniendo en cuenta que las Comisiones de Regantes
beneficiarias deberán encargarse de su conservación en el tiempo y cuya inversión en la
Operación y Mantenimiento se encuentra garantizada vía cobranza de la Tarifa de Agua, que
constituye una Norma Legal vigente.

Los alcances del presente Manual de Operación y Mantenimiento de Estructuras de medición


y Control de Caudales de riego son aplicables a las diferentes estructuras mejoradas y/o
rehabilitadas y aquellas que se encuentre en operatividad.

II. NORMATIVIDAD LEGAL

- D.L. N° 17752 “Ley General de Aguas”


- D.S. N° 003-90-AG “Reglamento de Tarifas y Cuotas”
- D.L. N° 653-91-AG “Ley de Promoción de las Inversiones en el Sector Agrario”
- D.S. N° 0048-91-AG “Reglamento de la Ley de Promoción de las Inversiones del
Sector Agrario”
- D.S. N° 057-2000-AG “Reglamento de Organización de Usuarios de Agua”.

El financiamiento de las actividades de operación, conservación y/o mejoramiento de la


infraestructura hidráulica, así como equipo, vehículos y maquinaria requerido para las
actividades anteriores deberán incluirse dentro de los presupuestos de las Organizaciones
de Usuarios (Comisiones de Regantes y Junta de Usuarios) y que forma parte del
Reglamento de Tarifas y Cuotas.

III. OBJETIVOS

- Garantizar que la infraestructura mejorada se mantenga en óptimas condiciones


hidráulicas de funcionamiento mediante la Operación y Mantenimiento por las
Comisiones de Regantes y/o Juntas de Usuarios beneficiarias en el tiempo.
- Delegar la responsabilidad a las Comisiones de Regantes y/o Juntas de Usuarios de la
Operación y Mantenimiento de la infraestructura hidráulica mejorada.
- Dar cumplimiento a lo establecido en el D.S. N°003-90-AG “Reglamento de Tarifas y
Cuotas”.
IV. ALCANCES

Los alcances del Manual de Operación y Mantenimiento de la Infraestructura Menor de


Riego a ser utilizadas por las Comisiones de Regantes y/o Juntas de Usuarios pueden
hacerse extensivos a las obras de riego que se encuentren en funcionamiento y que
requieren hacer uso con fines de conservación en el tiempo.

V. OPERACIÓN Y MANTENIMIENTO DE LA INFRAESTRUCTURA MENOR DE


RIEGO

La infraestructura menor de riego, considerada dentro los programas de mejoramiento por


la IRH (antes DGAS) se centralizó a la Rehabilitación y/o Mejoramiento de Canales,
Rehabilitación y/o Mejoramiento de Tomas y Construcción de Obras de Arte como
aforadores, que presentaban problemas en cuanto a su eficiencia de conducción y
distribución, como también a nivel de la captación y que no permitían regar en la cantidad
y oportunidad adecuadas y cuya ejecución inmediata permitirá poner operativos los
sistemas de riego, mas aún teniendo en cuenta que la Operación y Mantenimiento estará a
cargo de las Comisiones de Regantes, Organizaciones de Usuarios y/o Comunidades
Beneficiarias.

Los alcances del presente Manual de Operación y Mantenimiento son aplicables a las
diferentes estructuras mejoradas y/o rehabilitadas y aquellas que se encuentran operativas.

5.1 Objetivos Principales del Servicio de Operación.

El objetivo principal es la distribución oportuna del agua de riego para satisfacer la


demanda hídrica de los cultivos, para ello se debe tener en cuenta:

• Planificación de la Operación
• Distribución Física del Agua
• Control de la Operación

Planificación de la Operación

Esta se encuentra relacionada con los Planes de Cultivo y Riego o programación de


riego, para ello es recomendable tener en cuenta la estimación de la disponibilidad
de agua futura, demanda de agua de los cultivos y balance hídrico, por ello las
Juntas de Usuarios, comisiones de regantes, comités de riego deberán mantener una
permanente coordinación con la Administración Técnica del Distrito de Riego a fin
de formular planes coherentes durante las campañas agrícolas.

Distribución Física del Agua

Está relacionado a la ejecución del Plan, es decir al método de la distribución física


del agua. Es recomendable tener en cuenta que los métodos que utilicen las
comisiones de regantes deberán ser las que más se adecuen, y guardaran relación
directa al aporte económico (cuota o Tarifa de Agua), frecuencia de riego, rotación
de canales y sistema de turnos.

Control y Operación

Está referido a los controles que debe realizar la Junta de Usuarios, Comisión de
Regantes y/o Comités de Riego a nivel del sistema mejorado a través del personal
asignado, siendo recomendable comparar el sistema real con el planeado, verificar
su funcionamiento actual, debiéndose por lo menos elaborar los planes anuales de
riego e informe anual de temporada, referente a la distribución de agua en la
campaña.

Es recomendable que el aspecto de Control de la Operación del sistema en su


conjunto, se tenga en cuenta la actividad a realizar en función a la actividad
específica, por ejemplo la distribución del agua a cargo de los denominados
tomeros, acequieros, vigilantes de agua, etc., operadores de las estructuras
hidráulicas principales, personal encargado de la supervisión de los tomeros y
personal encargado del verificar el funcionamiento de todo el sistema.

5.2 Objetivos Principales del Servicio de Mantenimiento.

El buen mantenimiento y una buena cooperación entre los beneficiarios dentro de


las Comisiones de Regantes, pueden hacer que los sistemas de riego duren mucho
más tiempo para el cual fueron diseñados, así dentro de las funciones principales se
encuentran:

• Planificación de las actividades de mantenimiento.


• Ejecución de las actividades de mantenimiento previstas e imprevistas.
• Supervisión de trabajos.

Planificación de las actividades de mantenimiento

Estas deberán llevarse a cabo cada año, teniendo en cuenta la recaudación de la


tarifa de agua con fines agrarios.

Ejecución de las actividades de mantenimiento prevista e imprevistas

Estas deben desarrollarse dentro de la época donde se cuenta con mayor


disponibilidad de mano de obra.

Supervisión de trabajos

Estará a cargo de personal idóneo y efectuarse paralelo a la ejecución de


actividades.

VI. ACTIVIDADES DE LA OPERACIÓN Y MANTENIMIENTO DE LA


INFRAESTRUCTURA MENOR DE RIEGO

A continuación se mencionan las acciones más importantes en cuanto a la Operación y


Mantenimiento de pequeñas obras de infraestructura de riego.

6.1 De la Operación de la Infraestructura

Se detallan algunas funciones de la denominación más común del personal


asignado, que puede ser de utilidad para la mejor operación del sistema de riego.

- Repartidores de Agua.

Denominados tomeros o repartidores, son el nexo entre la administración del


sistema y el agricultor, las relaciones deben ser las más cordiales, las funciones
más importantes son las siguientes:
- Distribuir y controlar los caudales a nivel bocatoma, compuertas y/o
válvulas.

- Recoger las solicitudes de los usuarios y llevar un parte diario.

- Operadores de las Estructuras Hidráulicas.-

Para las estructuras principales, se debe contar con un operador especializado


que maneje el caudal, esta toma principal puede requerir uno o más operadores
y que depende de la complejidad y de horas de trabajo de la jornada.

Las acciones más importantes que debe realizar son:

- Lectura de niveles de agua.


- Manipulación de las compuertas y estructuras
- Recibir información de los tomeros.
- Informar al encargado de la zona, los desperfectos que pudieran
presentarse en las compuertas y/o estructuras y estado actual de la
estructura.

- Responsable de la Operación.-

Es la persona encargada de la inspección de todo la infraestructura que estará a


su cargo, supervisión de los aspectos referentes a la operación del sistema,
llevar el control de los infractores de las normas adoptadas en el manejo de
agua, contribuir a la elaboración del informe anual, así como en la formulación
del plan anual de riego.

6.2 Del Mantenimiento de Canales de Riego

Para el mantenimiento de canales se deberá tener en cuenta las siguientes


recomendaciones:

1. El reforzamiento y conformación de bordos, en tramos donde se han sufrido


daños causados por efecto de las lluvias, tránsito de animales, vientos,
roedores, peatones y/o vehículos, mantenimiento que deberá efectuarse por lo
menos 2 veces al año, de preferencia una transcurrido el período de lluvias.

2. La extracción de malezas y malas yerbas a nivel de bordos de los canales, con


la finalidad de evitar roturas en los canales, estos deberán realizarse por lo
menos cada 4 veces al año.

3. Efectuar el dragado de los canales, éste deberá realizarse por lo menos 2 veces
al año, de preferencia una vez transcurrido el período de lluvias, mediante el
uso de lampas y/o maquinaría pesada cuando los volúmenes de colmatación
son considerables, con el cuidado de no dañar el revestimiento de lozas y piso.

4. En tramos revestidos con concreto, es recomendable verificar si se producen


rajaduras, si éstos son pequeños limpiar con escobilla de fierro, rellenando el
mismo con brea caliente, tener en cuenta que deberá verificarse paulatinamente
y programar su resane posterior.

5. Cuando se presenten rajaduras mayores o considerables y/o que puedan


producir colapso del paño. Es recomendable rellenar con concreto.
6. Se debe verificar las juntas asfálticas, de presentarse paños en los cuales no
cuenta con el asfalto, se deberá rellenar con concreto pobre previa limpieza del
concreto y/o brea.

7. Es recomendable que las comisiones de regantes verifiquen la totalidad de la


infraestructura hidráulica a fin de poder identificar los diferentes tramos que
requieren su mantenimiento, debiendo hacer conocer a las diferentes a los
usuarios que su funcionamiento, operatividad y durabilidad en el tiempo
dependerá del mantenimiento oportuno que se le brinde.

6.3 Del Mantenimiento de Tomas

Los sistemas de captación y distribución requieren un mayor cuidado en cuanto al


mantenimiento, de ello depende que el recurso hídrico se capte y distribuya a nivel
de los canales principales, secundarios, terciarios, siendo recomendable que los
tomeros se familiaricen con este tipo de estructura en cuanto a su maniobrabilidad.

Una de las labores más saltantes que deberán tenerse en cuenta es la siguiente:

Para las Tomas Laterales se deberá considerar la limpieza entre el tramo de canal y
la estructura, verificar el estado actual de la compuerta (hoja, perfiles, vástago,
tornillos), la verificación se recomienda por lo menos 3 veces al año y la
lubricación correspondiente.

6.4 Del Mantenimiento de Obras de Arte

Las obras de arte como una parte del sistema de riego, cumplen funciones
específicas para las cuales fueron diseñadas. En cuanto al mantenimiento deberán
tenerse en cuenta entre otras las transiciones de entrada y salida, las cuales deben
mantenerse libres de obstáculos (yerbas, malezas, palos), que puedan impedir el
ingreso normal del agua al cuerpo de la estructura y que pueda ocasionar
obstrucción parcial y/o total de la misma.

Se requiere que estos trabajos se efectúen por lo menos 1 vez al mes, siendo
recomendable que durante la época de avenidas se verifique con una mayor
frecuencia.

En cuanto a la estructura de la obra de arte, si esta se encuentra en el cruce de


quebrada, inspeccionar si se producen socavación de la cimentación, de ser así
proteger mediante rellenos de piedra grande acomodada o de ser necesaria con
concreto ciclópeo.

En alcantarillas, cruces peatonales, verificar las estructuras de ingreso, la cual


deberá mantenerse libres de obstáculos (yerbas, malezas, palos), que puedan
impedir el flujo de agua.

Los caminos de acceso deberán estar en condiciones transitables.

5.1 OPERACIÓN Y MANTENIMIENTO DE LA INFRAESTRUCTURA DE


MEDICIÓN DE CAUDALES DE RIEGO - AFORADORES RBC

Objetivos principales del servicio de Operación.

El objetivo principal es la distribución eficiente y optima del agua de riego para


satisfacer la demanda hídrica de los cultivos, para lo cual se debe tener en cuenta:
• Planificación de Riego

• Distribución física del agua

• Control de la operación

En cuanto al la planificación de riego, esta se encuentra relacionada con los


llamados Planes de Cultivo o programación de riego, para ello es recomendable
tener en cuenta la estimación de la disponibilidad de agua futura, demanda de agua
de los cultivos así como el balance hídrico respectivo.

Para ello las Juntas de usuarios, comisiones de regantes, comités de riego deberán
mantener una permanente coordinación con el Administrador técnico del Distrito
de Riego a fin de formular planes coherentes durante las campañas agrícolas.

En relación a la Distribución Física del Agua, esta se relaciona a la ejecución de la


Planificación de Riego, es decir al método de la distribución física del agua. Es
recomendable tener en cuenta que los métodos que utilice las comisiones de
regantes deberá ser el que mas se adecue, y guardaran relación directa al aporte
económico (cuota o Tarifa de Agua), frecuencia de riego, rotación de canales y
sistemas de turnos.

En lo correspondiente al Control y Operación, esta referido a los controles que


debe realizar la Junta de Usuarios, Comisión de Regantes y/o comités de Riego a
nivel de sistema mejorado a través del personal asignado, siendo recomendable
comparar el sistema real con el planeado, verificar su funcionamiento actual,
debiéndose por lo menos elaborar los planes anuales de riego e informe anual de
temporada, referente a la distribución de agua en la campaña.

Es recomendable que el aspecto de Control de la Operación del sistema en su


conjunto, se tenga en cuenta la actividad a realizar en función a la actividad
específica, por ejemplo la distribución del agua a cargo de los denominados
tomeros, acequieros, vigilantes de agua etc, operadores de las estructuras
hidráulicas principales, personal encargado de la supervisión de los tomeros y
personal encargado del verificar el funcionamiento de todo el sistema.

Objetivos Principales del Servicio de Mantenimiento

El buen mantenimiento y una buena cooperación entre los beneficiarios dentro de


las comisiones de Regantes, pueden hacer que los sistemas de riego duren mucho
mas tiempo para el cual fueron diseñados, así dentro de las funciones principales
son:

• Planificar las actividades de mantenimiento

• Ejecutar las actividades de mantenimiento prevista e imprevistas.

• Supervisión de trabajos

En cuanto a la Planificación de las Actividades de Mantenimiento estas deberán


llevarse a cabo cada año, teniendo en cuenta la recaudación de la tarifa de agua.

En relación a la Ejecución de las Actividades de Mantenimiento previstas e


imprevistas, estas deben desarrollarse dentro de la época donde se cuenta con
mayor disponibilidad de mano de obra.

En lo correspondiente a la supervisión de trabajos, estará a cargo de personal


idóneo y efectuarse paralelo a la ejecución de actividades.
5.2 ACTIVIDADES DE LA OPERACIÓN Y MANTENIMIENTO DE LA
INFRAESTRUCTURA DE MEDICIÓN DE CONTROL Y DE CAUDALES
DE RIEGO.

A continuación se mencionan las acciones mas importantes en cuanto a la Operación


y Mantenimiento de las estructuras de Medición y Control de caudales de riego.

De la Operación de la Infraestructura

En la operación de las estructuras de medición y control de caudales de riego, se


deberá tener en cuenta el personal de servicio de la Comisión de Regantes y/o
Comités de Riego, el personal asignado a la misma deberá tener conocimiento básica
del área a regar, tipo de cultivo, frecuencia de riego a nivel de comisiones de
regantes y sectores de riego, etc.

Se detallan algunas funciones de la denominación más común del personal asignada,


que pueden ser de utilidad para la mejor operatividad del sistema de riego.

Vigilantes de agua.-

Denominados acequieros, tomeros, es el nexo entre la administración del sistema y


el agricultor, las relaciones deben ser las mas cordiales, las funciones mas
importantes son las siguientes:
• Distribuir y controlar los caudales, a nivel bocatoma, compuerta y/o válvulas.
• Recoger las solicitudes de los usuarios y llevar un parte diario.
Operadores de las estructuras hidráulicas.-

Para las estructuras principales, se debe contar con un operador especializado que
maneje el caudal, esta toma principal puede requerir uno o más operadores y que
depende de la complejidad y de horas de trabajo de la jornada.

Las acciones mas importantes que debe realizar son:


1. Lectura de niveles de agua.
2. Manipulación de la compuertas y estructuras
3. Recibir información de los tomeros.
4. Informar al encargado de la zona, los desperfectos que pudieran presentarse en
las compuertas y/o estructuras y estado actual de la estructura.
Capataces de riego.-

Son las personas encargadas de la supervisión de los tomeros y recibir las


solicitudes, como de mantener permanentemente informado al responsable de la
zona.

Responsable de la Operación.-

Es la persona encargada de la inspección de toda la infraestructura que estará a su


cargo, supervisón de los aspectos referentes a la operación del sistema, llevar el
control de los infractores de las normas adoptadas en el manejo de agua, contribuir a
la elaboración del informe anual, así como en la formulación del plan anual de riego.

Operación de Aforadores RBC

La operación del aforador RBC, muy sencilla, es un instrumento diseñado para leer
en forma directa el caudal que pasa por el, se recomienda tener los siguientes
cuidados:
1. Verificar que este libre de sedimentos la base del aforador.
2. Verificar si existe algún cuerpo que ocasione turbulencia al agua, recuerde que
el agua tiene que estar régimen modular.
3. Las paredes del aforador deben encontrarse libres sin presencia de algas.
4. La persona encargada, deberá posicionarse frente al limnimetro y realizar las
lecturas acercándose lo mas que se pueda al limnimetro.

Operación de Compuertas.

En la operación de las compuertas en los canales de riego, el personal de servicio de


la Comisión de Regantes y/o Comités de Riego, deberá tener en cuenta:
1. Conocimiento básica del área a regar

2. Tipo de cultivo

3. Frecuencia de riego a nivel de comisiones de regantes y sectores de riego

4. El turno de riego establecido.

Adjuntamos al presente ítem el cálculos hidráulicos para determinar el caudal que


pasa por una compuertas, dado el ancho, la altura de ventana y la altura de carga que
tiene.

Del Mantenimiento de la Infraestructura

La junta de Usuarios, Comisiones de Regantes y/o comités de Riego deberá formular


un programa de mantenimiento, debiendo coordinar a nivel de la administración
técnica del distrito de riego y el gerente técnico, los aspectos mas importantes son:
1. Efectuar un inventario de la infraestructura de riego existente y de las obras que
requieren su mantenimiento.
2. Determinar el volumen de trabajos de mantenimiento que se realizan cada año.
3. Establecer el ciclo o periodo optimo para la realización de estos trabajos.
4. Determinar las necesidades de mano de obra y/o maquinaria para llevar a cabo
estos trabajos.
5. Elaboración del presupuesto y establecimiento de las prioridades, el cual
guardara relación con la tarifa de agua con fines agrarios.

Del mantenimiento de Aforadores

Para el caso exclusivo del mantenimiento de los aforadores, se deberá tener en


cuenta las siguientes recomendaciones:
1. Deberán realizar limpieza de sedimentos del aforador, cada que este lo requiera,
el aforador deberá estar siempre libre de cuerpos flotantes o sedimentados para
una precisa lectura de caudal.
2. Dos veces al año, deberán programar la limpieza del canal, en el cual
procederán a eliminar sedimentos aguas arriba y abajo del aforador.
3. Verificar que el cero de la calibración del limnimetro coincida con la cresta del
aforador. Si por algún motivo no coincide, este se deberá poner al nivel que se
indica.
4. Verificar que la cresta del aforador se encuentre a nivel y no haya sufrido
cavitacion, o dañada por impactos, si esta se encuentra dañada, realizar una
reparación con cemento y aditivo apropiado.
5. Realizar el pintado del limmimetro cada año, especialmente las graduaciones y
números, para ello utilizar pintura epoxica de color apropiado
Del Mantenimiento de Compuertas

Las Compuertas como una parte del sistema de riego, cumplen funciones especificas
para las cuales fueron diseñadas. En cuanto al mantenimiento deberán tenerse en
cuenta entre otras:

Verificar las transiciones de entrada y salida, las cuales deben mantenerse libres de
obstáculos (yerbas, malezas, palos), que puedan impedir el ingreso normal del agua
al cuerpo de la estructura y que pueda ocasionar obstrucción parcial y/o total de la
misma.

Se requiere que estos trabajos se efectúe por lo menos una vez al mes, siendo
recomendable que durante la época de avenidas se verifique con una mayor
frecuencia.

En cuanto a la compuerta en si, se recomienda efectuar un repintado de la compuerta


por lo menos una vez a año con pintura epoxica o anticorrosiva.
La tuerca y el sistema de izaje, cada mes deberá ser lubricando utilizando grasa.

VII. PLANIFICACION DEL MANTENIMIENTO.

La Junta de Usuarios, Comisiones de Regantes y/o Comités de Riego deberán formular un


programa de mantenimiento, debiendo coordinar a nivel de la administración técnica de
distrito de riego y el gerente técnico, los aspectos más importantes son:

• Efectuar un inventario de infraestructura de riego existente y de las obras que requieren


su mantenimiento.
• Determinar el volumen de trabajos de mantenimiento que se realizarán cada año.
• Establecer el ciclo o período óptimo para la realización de estos trabajos.
• Determinar las necesidades de mano de obra y/o maquinaria para llevar a cabo estos
trabajos.
• Elaboración del presupuesto y el establecimiento de las prioridades, el cual guardará
relación con la tarifa de agua con fines agrarios.

Algunas recomendaciones en cuanto a la planificación a tenerse en cuenta son las


siguientes:

1. Para el inventario de obras deben realizarse con los formularios respectivos, por
ejemplo canales, bocatomas/tomas y obras de arte, cada una de ellas con sus
características geométricas, progresivas, hidráulicas y mantenimiento que requieren.

2. Debe elaborarse una lista detallada de los trabajos de mantenimiento a nivel de la red
de riego que permita determinar el volumen de trabajo.

3. El ciclo o período óptimo esta referido al tiempo que se realizará sin que falle o
perturbe su funcionamiento, por ello deberá tenerse en cuenta la época de siembra,
turnos de riego, frecuencia de riego, calidad de agua, clima.

4. En cuanto a las necesidades de mano de obra y/o maquinaria, estará en función al


volumen de trabajo identificado y optar por cual método a utilizar manual o mecánico,
limpieza de sedimentos, control de la vegetación de canales, mantenimiento de
caminos, limpieza de drenes etc.

5. El presupuesto y el establecimiento de las prioridades, deberán ser justificables técnica,


económica y socialmente.
El presente Manual de Operación y Mantenimiento de pequeñas obras de infraestructura
menor de riego, busca llegar a las Juntas de Usuarios, Comisiones de Regantes y/o Comités
de Riego en las cuales se rehabilitaron y/o mejoraron sistemas de riego, así como a los
usuarios que cuenten con obras de riego que requieren su operación y mantenimiento de tal
manera mejorar la distribución a nivel de canales los principales, secundarios, terciarios,
como a nivel de captación, teniendo en cuenta que su operación y mantenimiento estará a
cargo de los beneficiarios y normado en los dispositivos legales vigentes.

VIII. CONCEPTOS RELATIVOS A LA MEDICIÓN DE CAUDALES


La medición de caudales parte de conceptos basados en la hidráulica básica de canales
abiertos, como son:

Aptitud: Se define como: la cualidad que hace que un objeto sea apto, adecuado o
acomodado para cierto fin.

Apto se define como idóneo, hábil para hacer alguna cosa. Sin embargo desde el punto de
vista ingenieril y dentro de un marco de los sistemas de riego aptitud es la capacidad de
manejar, usar, mantener y además servir para propósitos bien definidos.

Vertedero: Es una escotadura de forma regular a través de la cual pasa el agua, incluye
esta definición a la estructura misma que contiene el dispositivo hidráulico. La altura de
agua por encima de la cresta del vertedero se relaciona con el caudal en una curva de
calibración.

Medición de caudales: La exigencia de los agricultores ha hecho que se confíen más en


estructuras fijas (permanentes) de medición de caudales, y la experiencia ha demostrado
que el método más adecuado para cada caso depende de tres factores importantes:
• La magnitud del caudal,
• La precisión buscada,
• Las condiciones que impone el medio.
Las estructuras más importantes de medición de caudales son:

a) Estructuras con vertederos de cresta delgada.


• Rectangular
• Triangular
• Trapezoidal (Cipolletti)
• Circular
b) Estructuras con vertederos de cresta ancha

• Aforadores RBC

c) Estructuras con conductos medidores a régimen crítico


• Aforadores Parshall
• Aforadores sin cuello.
• Aforadores de garganta larga

Curva de calibración H-Q: La curva de calibración o relación Altura de agua (H) Vs.
caudal (Q), es una curva característica de una sección de control, la cual se construye
realizando mediciones sucesivas de caudal y altura en una estación y luego se obtiene una
gráfica tal como se muestra en la para convertir registros de nivel de agua en caudales.
Curva Calibración H-Q

Altura de Carga (m)

Caudal en Lts/ Seg

Flujo modular: Se dice flujo modular cuando el flujo es libre, es decir cuando el flujo no
está influenciado por el nivel aguas abajo si la sección de control se encuentra aguas arriba.

Gama de caudales: El caudal en un canal abierto suele variar con el tiempo. Los límites
entre Qmax y Qmin, entre los que puede medirse el caudal, dependen de la naturaleza del
canal en el que se instala la obra de aforo. Los canales de riego, por ejemplo, necesitan un
margen de oscilación considerablemente menor que los cauces naturales. La amplitud de la
gama de variación de los caudales previsibles viene definida por la siguiente ecuación:

Q max
 =
Q min

Capacidad de eliminación de sedimentos: Casi todos los canales abiertos, además de


agua, transportan sedimentos que, ordinariamente, reciben denominaciones diversas, según
la forma o proceso de transporte o según sea su origen. Estos nombres aparecen ilustrados
en la Figura , y se definen como sigue:

Carga de Finos

Materiales en
Origen de los suspensión
sedimentos
trasportados
Material de Proceso de
arrastre de fondo trasporte de
sedimentos

Arrastre de
Fondos
Arrastre de fondo: Es el transporte de partículas de sedimento que se deslizan, ruedan o
rebotan sobre la solera del canal, o cerca de ella, generalmente en forma de lecho móvil,
semejante a las dunas y crestas de arena.

Arrastre de sólidos en suspensión: Por arrastres suspendidos se entiende el transporte de


partículas de fondo, cuando la fuerza de la gravedad está contrarrestada por otras fuerzas
ascendentes, debidas a la turbulencia de la corriente de agua. Esto supone que tales
partículas pueden dar rebotes más o menos grandes pero, siempre vuelven a caer a la solera
del canal, aunque en ese momento, sin embargo. otras partículas arrastradas puedan
encontrarse en suspensión.

Carga sólida total: Dado que no es posible hacer una separación estricta entre el arrastre
de fondo y los sólidos en suspensión, es frecuente calcular la carga sólida total como la
suma de los dos arrastres mencionados.

Carga de finos: La carga de finos está compuesta por partículas más pequeñas que el
grueso del material del fondo (generalmente menores de 50 m) y raras veces se
encuentran sobre la solera. El volumen de esta carga no se puede calcular y se determina
principalmente por las características climáticas y por las condiciones de erosión de toda la
cuenca receptora. Las cargas de finos son las responsables del color del agua.

El método más apropiado para impedir la deposición de sedimentos en el tramo del canal
de aguas arriba de la obra de aforo, es evitar un descenso del parámetro de corriente Y, el
cual se define como:

yS f
Y=
 r Da
Donde:
Y = Descenso del parámetro de corriente
 = Factor de rugosidad que depende de la forma de la solera del canal, varía entre
0.5 a 1.0.
y = Profundidad del agua en (m)
Sf = Gradiente hidráulico
r = Densidad relativa = (s-)/ = 1.65
s = Densidad de las partículas del sedimento
 = Densidad del agua
Da = Diámetro característico de las partículas (m)
Para evitar las sedimentaciones entre la sección de medida de la altura de agua y la sección
de control, la capacidad de evacuación de sedimentos del aforador debe ser mayor que la
capacidad de transporte del tramo de canal de aguas arriba.

El paso de cuerpos flotantes y en suspensión: Los canales abiertos, especialmente los que
atraviesan bosques o zonas urbanizadas, transportan toda clase de cuerpos flotantes o en
suspensión. Si estos cuerpos quedan retenidos por la obra de aforo, tanto el canal de
aproximación como la sección de control quedan obstruidos, lo cual reduce la posibilidad
de medición de caudales con la instalación y se producen desbordamientos del canal aguas
arriba.

En caso de instalar dos o más vertederos juntos, las pilas intermedias deberán tener al
menos, una anchura de 0,30 m, con su tajamar redondeado. Los tajamares afilados o las
pilas muy estrechas tienden a atrapar los cuerpos transportados por la corriente.
Exactitud necesaria en las medidas: La exactitud con la que es posible aforar un caudal
mediante una instalación dada está limitada por la precisión con la que se pueda efectuar
una medida. Si se construyen dos obras de medición idénticas e independientes y se hace
pasar por ellas dos corrientes que tengan exactamente la misma altura de carga con
respecto al nivel de sus resaltos, lo normal es que los dos caudales medidos sean diferentes.

Errores sistemáticos: Si, por ejemplo, la regla de medición de h1 está colocado demasiado
bajo, todos los valores medidos de h1 serán, sistemáticamente, mayores que los verdaderos,
en tanto no se verifique la posición del cero y se corrija la altura de la escala. Cualquier
error sistemático puede corregirse, si se llega a conocer.

Errores aleatorios: Si dos personas leen el valor de h1 en un limnímetro o en un gráfico


del registrador, con frecuencia leerán valores diferentes, e incluso una tercera persona
podría leer otro valor distinto. Algunos de estos valores leídos son superiores y otros
inferiores al verdadero de h1. Dicho de otro modo, los valores leídos se distribuyen al azar
en torno al verdadero valor de h1.

Errores por equivocación: Errores como estos invalidan la medida del caudal y se deben a
equivocaciones humanas, a defectos de funcionamiento de los limnígrafos automáticos o a
obstrucciones del curso normal del agua.

Los errores de medición de la altura de carga aguas arriba pueden provenir de múltiples
causas. Algunas de las más frecuentes son las siguientes:

Colocación del cero: además del error sistemático citado anteriormente, en la colocación
del cero de la regla, una cimentación inestable de toda la obra, o simplemente del
dispositivo de medida, pueden ser la causa de otro error, por desplazamiento de la posición
del cero. Si el terreno donde se construirá la obra de aforo, está sujeto a heladas o se mueve
con la humedad del suelo, podría modificar la posición del cero. Para reducir los efectos de
tales alteraciones, se recomienda comprobar su posición, al menos, dos veces al año, por
ejemplo, después de una época de grandes heladas, o después de la estación de las lluvias,
y antes de la temporada de riego. También puede alterar la posición del cero la presencia de
una capa de hielo sobre el agua.

Crecimiento de algas: Una fuente importante de errores sistemáticos en la determinación


de la altura de carga es la proliferación de algas sobre el fondo y sobre las paredes de la
sección de control. La cubierta de algas produce dos efectos: (1) el nivel de referencia del
resalto queda elevado por el espesor de la vegetación y origina un error en la altura de
carga, y (2) la capa de algas que recubre las paredes de la sección de control reduce la
superficie mojada. Para eliminar el error debido a las algas adheridas a la superficie de la
sección de control, deberá limpiarse periódicamente la sección de control con un cepillo o
escobón. Puede reducirse el desarrollo de las algas pintando la obra con algún producto
alguicida marino.

Error en la lectura de la altura de carga: En el error de lectura de la escala de la regla,


básicamente influyen la distancia entre ésta escala y el observador, el ángulo en el cual se
realiza la lectura, la turbulencia del agua y el tamaño de las divisiones de dicha regla. Una
escala sucia dificulta la lectura y puede ser causa de errores importantes, por lo que las
regletas deben instalarse en lugares en los que resulte fácil su limpieza por el observador.
El orden aproximado de magnitud de los errores de lectura en una regleta limnimétrica, con
graduación en centímetros, es el que aparece en el Cuadro.
Cuadro Errores de lectura (Fuente Bos (1986)
Escala colocada en Error Sistemático Error Aleatorio

Agua quieta 0 0 0.003 m

Canal con lámina de agua 0.005 m 0.005 m


tranquila

Canal con lámina de agua Mayor que una unidad Mayor que una unidad de graduación
turbulenta de (> 0.01 m)

graduación (> 0.01 m)

Esto demuestra que las lecturas de la escala, efectuadas con aguas turbulentas, son
inexactas. El error sistemático asignado al régimen turbulento se atribuye a la dificultad
general de los observadores para dar valores promedios de la fluctuación del agua. Por eso,
para obtener lecturas exactas en aguas turbulentas, se recomienda utilizar pocillos de
amortiguación.

Errores relacionados con la construcción: Las dimensiones de la construcción de las


obras de aforo deben ser lo más ajustadas posibles a las que se dan en los diseños.
Cualquier variación de estas dimensiones influirá sobre el error entre el verdadero caudal y
el que se señalan en el diseño.

8.1 QUE ES UN AFORADOR R.B.C.


Es una estructura de medición denominado a veces aforador de cresta ancha y sirve
para indicar cuanto de agua está pasando o se está usando, y están ubicados cerca a la
bocatoma, a la salida del reservorio, en las tomas laterales y en los partidores. Para
que el medidor funcione bien debe tenerse limpio el canal y la reglilla graduada.

Este tipo de aforador tiene ventajas importantes comparado con otros aforadores,
razón por la cual se encuentra cada vez más frecuente en canales abiertos en todo el
mundo. Actualmente, es utilizado en muchos canales de riego para la medición de
caudal y el manejo de agua.

En 1984 Bos, Reeploge y Clements han desarrollado el RBC, también llamado como
Longthroated Flume, que es hasta ahora uno de los mejores instrumentos para medir
caudales. Presenta las siguientes ventajas:
• Solamente requiere la lectura de una escala.
• Son las obras más económicas, para la medición exacta de caudales, su costo
representa aproximadamente un 30 % del costo del medidor Parshall.
• Este tipo de aforador es el más sencillo de construir permitiendo grandes
tolerancias en su proceso constructivo llegando a aceptar un error en las medidas
de mas o menos 10 % sin ningún efecto significativo, solo que la parte superior
del resalto este nivelada.
• Siempre que el régimen crítico se produzca en la garganta será posible calcular
unas tablas de caudales, para un error menor al 2 %.
• La pérdida de carga necesaria para que exista una relación única entre la carga de
aguas arriba del material referida al resalto y el caudal es mínima.
• El RBC, no se ajusta a medidas estandarizadas, la relación entre el caudal y la
altura de agua se define posterior a su construcción en base a sus medidas finales.

Las tolerancias admisibles en el aforador RBC son :


• La altura del resalto p1 es importante en la selección del aforador, ya que controla
la altura de la superficie del agua, y por lo tanto el límite modular; esta altura
puede variar hasta en un 10 % sin causar cambios de calibración notables.

• La longitud del resalto (TL) puede ajustarse con más o menos 10 % de tolerancia
sin causar efecto significativo.

• La longitud de la rampa (3p1) es también aproximada y su único objeto es el de


conducir suavemente el agua a la coronación del aforador por lo tanto debe ser
recta o ligeramente curvada en forma cóncava.

8.2 DISEÑO DE AFORADOR DE CRESTA ANCHA O RBC

Introducción

En este tópico se presentan los detalles del diseño y calibración del aforador de cresta
ancha, incluyendo las ecuaciones hidráulicas pertinentes. Esta parte representa una
referencia técnica para dar mayor entendimiento al diseño y aplicación del aforador.
El aforador de cresta ancha es una estructura para medir el caudal en canales abiertos,
combinando las características hidráulicas de vertederos y aforadores como el Parshall y el
aforador “sin cuello”

Como en otros aforadores parecidos, el aforador de cresta ancha tiene una sección aguas arriba
de convergencia del flujo, una garganta y una sección aguas abajo de divergencia del flujo

Las dos figuras abajo presentan vistas laterales de un aforador de cresta ancha sin la rampa al
lado aguas abajo. Las cuales muestran la nomenclatura usada en la descripción de las
ecuaciones técnicas. La figura superior representa a un aforador en un canal sin desnivel de la
plantilla, y la figura inferior representa a un aforador localizado en un desnivel.

Ventajas y Desventajas

Ventajas:
1. El diseño y la construcción del aforador es sencillo, y su instalación no cuesta caro.
2. Se puede hacer una calibración teórica basada en las dimensiones reales, después de
construir el aforador, con un error en el caudal real de menos de ±2%, siempre y
cuando esté bien diseñado, localizado y construido.
3. Como en otros aforadores que funcionan bajo condiciones de flujo modular, se puede
colocar un limnímetro aguas arriba, marcado con unidades de caudal, y obviando la
necesidad de cálculos y cuadros de números para determinar el caudal en el campo.
4. La pérdida de carga por la estructura es normalmente pequeña, así que se puede instalar
en canales con poca pendiente longitudinal sin afectar mucho al tirante hidráulico
(calado) aguas arriba
5. Objetos y basura flotando en el agua pueden pasar por encima de la estructura sin
acumularse

Desventajas
1. Cuando el agua en el canal contiene sedimentos y azolves, estos suelen depositarse
aguas arriba del aforador.
2. El tirante aguas arriba será algo más de lo que era sin la estructura para cualquier
caudal dado.
3. Agricultores y otros usuarios pueden oponerse a su instalación porque les parece que
impide el flujo del agua y reduce la capacidad del canal. Aunque esta percepción es
falsa, para un aforador bien diseñado y localizado, puede representar una desventaja
importante comparado con algunos otros tipos de aforadores.

Régimen del Flujo

Estos aforadores pueden ser calibrados para medir caudales bajo un régimen de flujo
sumergido, aunque se prefiere diseñar la estructura para que funcione en un régimen de
flujo libre

Al régimen de flujo libre también se le conoce como flujo “modular” y al de flujo


sumergido se le puede llamar “no modular”

Cuando opera bajo condiciones de flujo libre, el flujo crítico ocurre sobre la cresta en la
garganta de la estructura – en este caso el caudal se puede definir como una función única
del tirante aguas arriba, pues las condiciones aguas abajo no influyen en su medición
El aforador de cresta ancha se puede calibrar en el laboratorio o bien en el campo, pero una
ventaja importante de este tipo de aforador es que puede ser calibrado precisamente a
través de las ecuaciones teóricas pertinentes
Muchos otros tipos de aforadores se tienen que calibrar con datos de laboratorio o de
campo y en muchos casos es necesario usar sólo tamaños estándar para aprovechar los
datos de calibración publicados

Sumergencia de Transición

La sumergencia de transición es una definición del umbral entre flujo libre (modular) y
flujo sumergido (no modular)

Valores típicos de sumergencia de transición para flujo modular en tres tipos de aforador
son:
1. Parshall 58 a 80%
2. Aforador sin cuello 55 a 88%
3. Aforador de cresta ancha 70 a 95%
Una comparación de los valores presentados arriba indica que el aforador de cresta ancha
puede, en muchos casos, funcionar bajo condiciones de flujo modular con menos
incremento en el tirante aguas arriba.

Cuando menos se aumenta el tirante aguas arriba, menos se disminuye el bordo libre y
menos se disminuye la capacidad del canal

La definición exacta de la sumergencia se presenta en Diseñando para Flujo Modular

Criterios Básicos de Diseño

Una de las ventajas más importantes de los aforadores de cresta ancha es que pueden ser
calibrados según relaciones teóricas y empíricas.

Esto significa que no es necesario instalar aforadores con dimensiones “estándar”,


contando de calibraciones hechas en laboratorio.

La habilidad de calibrar el aforador a partir de ecuaciones en lugar de datos de laboratorio


se basa en la existencia de líneas de flujo rectas y paralelas sobre la cresta, donde ocurre
flujo crítico.

En muchos otros tipos de aforadores, las líneas del flujo no están rectas ni paralelas en la
sección de flujo crítico, necesitando modelos matemáticos muy complicados para generar
calibraciones teóricas.

Sin embargo, para el aforador de cresta ancha, su calibración teórica es relativamente


sencilla.

En el diseño del aforador, se debe procurar obtener condiciones de flujo modular para todo
el rango de caudales que se pretende medir.

Si se localiza el aforador donde hay un desnivel en el canal, la altura de la cresta puede ser
no importante para obtener flujo modular.

Sin embargo, las dimensiones relativas del aforador son importantes para crear condiciones
hidráulicas favorables, condiciones que no violen los límites de las ecuaciones que se
aplican a la calibración teórica.

Así que, la altura y la longitud de la cresta son dimensiones importantes con respecto al
tirante aguas arriba.

En cualquier caso, el diseño de esto aforadores es un proceso de tanteo y se facilita mucho


con el uso de un programa de computadora

Localización del Aforador

El tramo de canal aguas arriba del aforador debe ser bastante recto y de sección uniforme

El flujo en el tramo aguas arriba debe ser muy adentro del régimen de flujo subcrítico para
que la superficie del agua sea estable y libre de olas.

Por eso, el número de Froude, Fr2, en el tramo aguas arriba debe ser menor de
aproximadamente 0.50, siempre y cuando sea posible

Además, es mejor evitar sitios cerca de una compuerta u otra estructura en el canal debido
a que estas suelen causar turbulencia, impidiendo buenas lecturas del tirante en el aforador

Se puede instalar una estructura de amortiguación donde tomar lecturas de tirante aguas
arriba del aforador, pero esto involucra un costo adicional
Es mejor evitar sitios donde existe una compuerta u otra estructura a poca distancia aguas
abajo porque la operación de la compuerta puede causar un remanso y condiciones de flujo
sumergido sobre el aforador

Un buen sitio, si es que existe, para el aforador es al lado aguas arriba de un desnivel en la
plantilla del canal debido a que esto ayuda a asegurar condiciones de flujo modular

Otros factores que se deben tomar en cuenta en la localización del aforador son la
estabilidad de la plantilla, y los taludes del canal aguas arriba (cuando el canal es de tierra)
y la facilidad de acceso para tomar lecturas del limnímetro y para hacer mantenimiento

Si el tramo de canal aguas arriba no tiene una sección estable, la calibración del aforador
puede variar con el tiempo y los sedimentos pueden acumularse hasta afectar la calibración

Altura de la Cresta

Uno de los parámetros de diseño más importantes es la altura de la cresta sobre la plantilla
del canal aguas arriba

Esta altura debe ser suficiente para posibilitar el flujo modular, para todo el rango de
caudales que se quiere medir, pero no debe ser más allá de lo necesario porque reduce el
bordo libre aguas arriba en el canal

Uno de los objetivos principales del diseño es de determinar la altura de la cresta para
asegurar el flujo modular, sin exceder dicha altura mínima

Cuando la altura de la cresta es demasiado grande, el problema no es de calibración ni de


aforo, sino de alzar la superficie del agua más de lo necesario, hasta tal vez desbordar el
canal

En términos de construcción, el detalle más importante es que la superficie de la cresta sea


completamente horizontal y plana – si las otras dimensiones no corresponden exactamente
a las del diseño pues se puede recalibrar después de terminar la construcción

Rampas Aguas Arriba y Aguas Abajo

La rampa aguas arriba es donde el flujo comienza a converger y ésta debe tener una
pendiente de entre 2:1 y 3:1 (H:V)

Si la pendiente es menor que 3:1, la rampa es más larga que lo que se necesita y habrán
pérdidas hidráulicas adicionales que perjudican la precisión de la calibración

Si la pendiente es más de 2:1, habrá más turbulencia en el flujo, asimismo causando


pérdidas adicionales

La rampa aguas abajo es en la zona de divergencia del flujo y debe tener una pendiente de
entre 4:1 y 6:1 (H:V), o bien, debe ser cortada a una longitud de cero

En cualquier caso, la pendiente preferida para la rampa aguas abajo es 6:1, la misma que se
usa en otros tipos de medidores para canales abiertos y para tuberías debido a que esta
pendiente tiende a minimizar las pérdidas hidráulicas aguas abajo del aforador

Si la pendiente 6:1 corresponde a una rampa demasiada larga, se debe cortar bruscamente
en una pared vertical y no redondearla hasta la plantilla – de otra forma aumentan las
pérdidas

Muchos aforadores de cresta ancha no tienen rampa aguas abajo – la cresta simplemente
termina en una pared vertical
En muchos casos, la energía hidráulica que se puede “recuperar” con la instalación de una
rampa aguas abajo no es significativa

Los aforadores que tienen una altura de cresta mayor de como un metro son los que más
pueden aprovechar de una rampa aguas abajo

Contracción Lateral del Flujo

El talud en la garganta del aforador normalmente es el mismo que se tiene en la sección


aguas arriba, pero no necesariamente tiene que ser igual

En canales de tierra y los que cuentan con una sección muy ancha puede ser necesario
reducir el ancho de la garganta, y diseñar con un talud de cero (paredes verticales) en la
misma, creando una sección rectangular

Cuando se reduce el talud en la garganta es debido a que la contracción vertical del flujo
sobre el aforador no sería suficiente para crear un régimen de flujo modular; si es así, se
requiere también de contracción lateral

Razón de Tirante Aguas Arriba y Longitud de la Cresta

La relación de tirante aguas arriba (con la elevación de la cresta como cota) y la longitud de
la cresta debe tener un valor máximo de 0.75 y un mínimo de 0.075

El límite inferior (0.075) se impone para que la pérdida hidráulica sea poca, comparado con
la carga hidráulica (el tirante) aguas arriba

El límite superior (0.75) se establece para prevenir una distribución no hidroestática sobre
la cresta, es decir, prevenir mayores componentes verticales del flujo en la garganta

La calibración teórica del aforador es válida sólo para líneas de flujo rectas e horizontales
sobre la cresta, de otra manera el error en el aforo puede ser mucho más de ±2% del caudal
real

La razón de tirante aguas arriba (con la elevación de la cresta como cota) a la longitud de la
cresta es aproximadamente 0.5 para el caudal promedio en un aforador correctamente
diseñado

Limnímetro

El limnímetro se debe localizar a una distancia igual o mayor que el tirante máximo (el que
corresponde al caudal máximo), con la cota en la elevación de la cresta, aguas arriba del
inicio de la rampa de convergencia

Sin embargo, no debe ser colocado a una distancia mucho más allá de este valor aguas
arriba porque se tendría que tomar en cuenta más perdida entre el limnímetro y la sección
de flujo crítico sobre la cresta

Es muy importante que la lectura de cero en el limnímetro sea exactamente igual que la
elevación de la cresta del aforador, pues en esa elevación el caudal tiene que ser cero

Tubos de Drenaje

Se puede instalar uno o dos tubos de drenaje en la plantilla del canal, por debajo del
aforador, para prevenir que se estanque el agua cuando no se pasa agua por el canal

Dichos tubos sirven para prevenir el establecimiento de malas hierbas (malezas), algas y
musgos, además de controlar la procreación de mosquitos y zancudos
Se pueden instalar tapas en los tubos para que sólo pase agua cuando no hay flujo en el
canal, pero si el caudal que pasa por los tubos es menor de ±2% del caudal pues no es de
importancia

El caudal que pasa por los tubos se puede estimar con los datos de calibración del aforador
y una ecuación para el cálculo de pérdidas hidráulicas en tuberías

Diseñando para Flujo Modular

El límite modular se define como la razón de energía específica en las secciones aguas
abajo y aguas arriba (Eab/Ear) en el umbral entre los regímenes de flujo libre y flujo
sumergido

En este umbral, el caudal calculado por la ecuación de flujo libre, Ql, es exactamente igual
al caudal calculado por la ecuación de flujo sumergido, Qs

La magnitud numérica de la carga por velocidad suele ser mucho menor que la del tirante
en las secciones aguas arriba y aguas abajo, cuando esto sucede se puede aproximar dicha
razón utilizando la sumergencia, S = hab/har.

Igualmente, la sumergencia transicional, St, es la misma razón, pero para la condición


umbral donde Ql = Qs

Cuando hab/har es mayor que St, el régimen es sumergido y el flujo no es modular (caso
contrario, el flujo es libre, o modular)

Cuando el régimen es de flujo sumergido, la calibración teórica del aforador no es válida


porque en esta se asume que condiciones de flujo crítico ocurren en la garganta

Sí se puede calibrar el aforador para condiciones de flujo sumergido, pero requiere de datos
de laboratorio o de campo, la calibración es menos precisa y su aplicación como medidor
de caudal es menos conveniente

Determinación del Tirante Aguas Abajo

Es necesario determinar el tirante aguas abajo del aforador para conocer su régimen de
flujo para cualquier caudal dado, pues no se puede asumir que siempre funciona bajo
condiciones de flujo modular en todos los casos

Para canales con un tramo recto aguas abajo, sin compuertas ni reguladores, el valor de hab
se puede calcular para condiciones de flujo uniforme (e.g. aplicando la ecuación de
Manning o de Chezy)

En los casos de una estructura, como una compuerta, aguas abajo del aforador, puede haber
un remanso que depende del caudal y de la apertura de la compuerta, complicando la
determinación del régimen del flujo en el aforador

Por lo anterior, es preferible localizar el aforador aguas arriba de un desnivel en el canal, o


en un sitio donde el tramo aguas abajo es recto y sin ninguna compuerta cercana

Balance de Energía y Pérdidas

Dado un tirante aguas arriba y el caudal correspondiente (según la calibración teórica), la


energía específica aguas abajo, Eab, para el límite modular se calcula como la energía
específica aguas arriba menos las pérdidas

Existen ecuaciones para estimar dichas pérdidas, las cuales incluyen fricción y turbulencia
entre el limnímetro y la sección aguas abajo
Se pueden usar estas ecuaciones para calibrar un aforador de cresta ancha, pero en la gran
mayoría de los casos, las pérdidas por fricción son de poca magnitud. Por esto no es
importante la cuantificación precisa del factor de rugosidad.

La mayoría de las pérdidas hidráulicas ocurren en la sección aguas abajo del aforador,
donde diverge el flujo, con remolinos y turbulencia

Determinación del Límite Modular

El límite modular varía según el caudal para un aforador dado, pudiéndose calcular según
los siguientes pasos básicos:
1. Dado un tirante aguas arriba del aforador, la sección transversal del canal y la
calibración teórica del aforador mismo, se calcula el caudal (asumiendo condiciones de
flujo modular); luego se calcula la carga por velocidad, añadiendo el tirante para llegar
a un valor de Ear, el cual tiene la elevación de la cresta como cota;
2. Se calcula la sumatoria de las pérdidas hidráulicas por fricción en las secciones aguas
arriba y en la garganta, y las de turbulencia en la sección aguas abajo;
3. Se resta la pérdida total de Ear, dando el valor de Eab, el cual también se mide desde la
elevación de la cresta. Entonces, el límite modular es calculado como Eab/Ear;
4. Se determina el tirante aguas abajo para el caudal calculado en el punto uno, utilizando
la ecuación de Manning o de Chezy (u otra) para flujo uniforme, o bien, con
ecuaciones diferenciales si es que existe un remanso por causa de una compuerta u otra
estructura aguas abajo;
5. Finalmente, se compara el valor calculado del tirante aguas abajo (en el paso anterior)
con el valor de hab, el cual es igual a Eab menos la carga de velocidad aguas abajo. Si
el valor calculado del tirante aguas abajo es menor que hab (medido desde la elevación
de la cresta), el régimen será de flujo modular debido a que la pérdida real es mayor
que la que se requiere para flujo libre.

Calibración Sencilla: Balance de Energía

La calibración completa de un aforador de cresta ancha incluye cálculos de las pérdidas


hidráulicas. Sin embargo, su calibración se puede hacer asumiendo que no hay pérdidas
entre el limnímetro y el punto de flujo crítico en la garganta, con resultados similares a los
de una calibración completa.

Esto es debido a que las pérdidas en la sección aguas arriba y en la garganta son de poca
magnitud, comparado con la energía total aguas arriba.

El método que se presenta abajo es didáctico porque manifiesta los principios hidráulicos
de estos aforadores y además se puede aplicar fácilmente en el campo con la ayuda de una
calculadora programable.

Es importante tomar en cuenta que este método sencillo no incluye el cálculo del límite
modular, el cual se debe tomar en cuenta para asegurar condiciones de flujo libre para todo
el rango de caudales que se pretende medir.

Se puede igualar la energía específica en las secciones aguas arriba y en la garganta, donde
se supone que ocurre flujo crítico. En forma matemática, esta igualdad se expresa en la
siguiente fórmula:

V2 V
2
har + Z ar + = hc + Z ar + c (1)
2g 2g
donde, har es el tirante aguas arriba, con cota en la elevación de la cresta; Var es la
velocidad promedio del flujo en la sección aguas arriba; zar es la altura de la cresta sobre la
plantilla del canal aguas arriba; hc es el tirante sobre la cresta donde se asume que ocurre
flujo crítico; y Vc es la velocidad promedio del agua en la sección de flujo crítico.

El parámetro Zar se cancela de la ecuación (1).

Reconociendo que Q = VA, donde Q es el caudal y A es el área de la sección transversal, la


ecuación (1) se transforma en:

Qq Q2
hc − har + 2
− 2
=0 (2)
2 gAc 2 gAar
debido a que el caudal es el mismo en las dos secciones. Esta última ecuación se simplifica
a lo siguiente:

Q2  1 1 
hc − har +  2 − 2  = 0
2 g  Ac Aar  (3)

II. El flujo crítico sobre la cresta del aforador se define con la ecuación del número de
Froude. Este número es igual a 1.0 cuando el flujo es crítico, entonces, para la sección
de flujo crítico se puede definir el cuadrado del caudal así:

3
gA
Q2 = c
Bc (4)

donde Bc es el ancho de la superficie de agua sobre la cresta donde el régimen es de


flujo crítico. Ahora, las ecuaciones (3) y (4) se pueden combinar para resultar en:

Ac3  1 1 
hc − har +  2 − 2  = 0
 Ac Aar 
(5)
2 Bc
Se puede solucionar la ecuación (5) por tanteos, o bien, por algún método numérico
para la solución de ecuaciones algebraicas, pues no se puede despejar el valor de la
incógnita, hc. Se tienen que conocer los valores de los parámetros har, zar y la forma
de la geometría de las secciones transversales aguas arriba y en la garganta. En
muchos casos la sección es trapezoidal, pero en cualquier caso, el tipo de sección
define la relación entre har y Aar, hc y Ac.
III. El paso final es el cálculo del caudal que corresponde al valor de Ac, el cual se calcula
directamente de hc. Se puede aplicar la siguiente forma de la ecuación de Froude:

gAc3
Q=
Bc (6)
Este proceso se repite para varios valores diferentes de tirante aguas arriba, har, y así
generar un cuadro de pares de datos, har y Q, dando la calibración del aforador.
Según los resultados se construye un limnímetro con valores indicados en unidades de
caudal.
Basta recordar los siguientes puntos:

• Este proceso asume condiciones de flujo libre sin verificar la asumpción;

• en el diseño de estos aforadores es frecuentemente necesario considerar otros factores


que pueden limitar las dimensiones aceptables y que limitan las condiciones hidráulicas
para una calibración correcta

• para más detalles se puede consultar el libro “Flow Measurement Flumes for Open
Channel Systems”, 1984, por M.G. Bos, J.A. Replogle y A.J. Clemmens.

IX. TABLAS Y ANEXOS

OTRAS FORMAS DE AFORAR:

En el presente ítem se analizan los métodos para medir los caudales de escorrentía en los
canales, los arroyos y los ríos.

Métodos Volumétricos

La forma más sencilla de calcular los caudales pequeños es la medición directa del tiempo
que se tarda en llenar un recipiente de volumen conocido. La corriente se desvía hacia un
canal o cañería que descarga en un recipiente adecuado y el tiempo que demora su llenado
se mide por medio de un cronómetro. Para los caudales de más de 4 l/s, es adecuado un
recipiente de 10 litros de capacidad que se llenará en 2½ segundos. Para caudales mayores,
un recipiente de 200 litros puede servir para corrientes de hasta 50 1/s. El tiempo que se
tarda en llenarlo se medirá con precisión, especialmente cuando sea de sólo unos pocos
segundos. La variación entre diversas mediciones efectuadas sucesivamente dará una
indicación de la precisión de los resultados.

Si la corriente se puede desviar hacia una cañería de manera que descargue sometida a
presión, el caudal se puede calcular a partir de mediciones del chorro. Si la cañería se
puede colocar de manera que la descarga se efectúe verticalmente hacia arriba, la altura que
alcanza el chorro por encima del extremo de la tubería se puede medir y el caudal se
calcula a partir de una fórmula adecuada tal como se indica en la Figura 19. Es asimismo
posible efectuar estimaciones del caudal a partir de mediciones de la trayectoria desde
tuberías horizontales o en pendiente y desde tuberías parcialmente llenas, pero los
resultados son en este caso menos confiables (Scott y Houston 1959).

FIGURA 19 - Cálculo de la comente en cañerías a partir de la altura de un chorro


vertical (Bos 1976).

a) Napa de agua baja (altura de descarga baja)


Q = 5,47D1,25 H1,35 (1)
• Q en metros cúbicos por segundo; D y H en metros.

• Si H < 0,4 D utilícese la ecuación (1)

• Si H > 1,4 D utilícese la ecuación (2)

• Si 0,4D < H < 1,4D calcúlense ambas ecuaciones y tómese la media

b) Chorro

Q = 3,15D1,99 H0,53 (2)


Aforo de la descarga libre en tuberías, por el método de la trayectoria.

La descarga libre de una tubería horizontal o inclinada, fluyendo, llena o parcialmente,


puede ser conocida aplicando el método de la trayectoria, basado en el principio físico de la
caída libre de los cuerpos. Dicho principio establece que la proyección horizontal (x) del
chorro es proporcional a la velocidad de salida (v) y al tiempo (t) que tarda el agua en
alcanzar un punto definido sobre su trayectoria. En cambio la proyección vertical (y) es el
resultado de la aceleración que sufre el chorro en caída libre, por efecto de la gravedad,
como se indica en la fig.
Despreciando la resistencia ofrecida por el aire, la velocidad de salida esta dada por:

v=x
t
Donde, el tiempo expresado en función de la proyección vertical, será equivalente a:

t = 2y
g

y al sustituir esta expresión en la anterior, se llega a la siguiente ecuación para el calculo de


la velocidad de flujo que involucra las proyecciones en x y y :

x x
v= = 2.215 (ec 2)
2y y
g

Luego para conocer el gasto descargado (Q), se multiplica la velocidad de salida por el área
transversal de la tubería, perpendicular a la dirección de flujo, siguiendo el procedimiento
de calculo indicado a continuación:

Q = Av = 1  2 (2.215 x = k1 2 x (ec 3)


4 y y

Donde:
Q= Gasto aforado en (lt/seg)
K1= Constante igual a 1739.4 para obtener el gasto descargado en Lt/seg,
manejando , x y y en metros.
 = Diámetro interno de la tubería, a flujo completo.
En la práctica, generalmente se mide el diámetro de la tubería en pulgadas y las
proyecciones x y y en centímetros; se requiere, para este caso, una modificación en la
ecuación de gasto por la incorporación de un factor de conversión de unidades, como se
muestra en seguida:
−3
Q = K 2 2 x = K110 x
y 15 .5 2 y

O sea que:

Q = x
2
(ec 4)
8.911 y

Cuando la descarga de la tubería es parcial, la velocidad del chorro se sigue calculando a


partir de las proyecciones x y y, de acuerdo con la expresión

v= x
2y
g

pero el área parcialmente ocupada por la vena liquida, se determina mediante la siguiente
formula:

Ap = 1 ( − sen o ) 2 (ec 5)
8
Donde :

Ap = área parcialmente ocupada por la descarga de la tubería.

 . y o = Angulo formado en el centro de la tubería con respecto a los limites del espejo de
agua, contacto con las paredes internas del ducto, medido en radianes y grados,
respectivamente.

Para calcular el ángulo t se debe medir el borde libre (b) por encima del espejo del agua,
luego se debe establecer un par de triángulos con hipotenusa igual al radio interno de la
tubería (r), y cateto adyacente (r-b) conocido, cuya relación trigonométrica proporciona la
función coseno del ángulo; equivalente a la mitas del arco 360ª-, como se muestra en la
figura.

La circunferencia completa de la tubería tiene 360º= º+ 2 = 2 radianes, de donde


º=360º-2, estando el ángulo a en función del coseno definido por el triángulo rectángulo
de hipotenusa r y cateto (r-b), de acuerdo con:
r −b
cos = (ec 6)
r
lo cual implica que =arco coseno , y por tanto:

º=360º-2 arco coseno (ec 7)

Ejemplo de aforo método de la trayectoria. La secuencia de cálculos desarrollados durante


la determinación del gasto por el método de trayectoria, es mostrada paso a paso en el
siguiente ejercicio, donde se determina el gasto descargado por una tubería de 8” (in) f,
parcialmente llena, con 3” de borde libre y con proyecciones x = 60 cm y y =50 cm sobre la
trayectoria del chorro.

Para esta tubería parcialmente llena, primero se determina la velocidad del flujo, aplicando
la ecuación 4, esto es:

v = 2.215 x = 2.215(0.060) = 1.88m / seg


y 0.50

Luego se calculan los ángulos a y q, usando las ecuaciones 8 y 9, respectivamente; para


pasar en seguida al cálculo del área parcial (Ap), ocupada por el chorro, aplicando la
ecuación 7; o sea:

r −b 4−3
coseno = = = 0.2500 y
r 4
arco coseno  = 75.5º

2ª = 151º, lo que implica un ángulo

q = 360º - 151º = 209º = 3.65 radianes,

De donde:

Ap =1 / 8 ( – sen º) 2

O sea, Ap = 1 / 8(3.64695 + 0.48412) 20.322

Por tanto Ap = 213.2 cm2 = 213x10-4 m2

Después de conocer el área parcial. Ésta se multiplica por la velocidad de flujo para obtener
el gasto descargado por el tubo, que para este caso resulta de:

Qp = Ap v = 1.88x213.2x10-4

Qp = 0.04007 m3/seg

Esto es Qp = 40.07 lt/seg.

Otro procedimiento que pues ser empleado, consiste en determinar primero el gasto, como
si la tubería descargara a flujo completo y luego multiplicar el gasto, así obtenido, por la
proporción de área ocupada por el chorro; esto es:

Qp = Q (Ap/A), lo que implica que

Qp =  2 x y  Ap  por la ecuación 4
8.911  A
De donde

Qp= 64(60)/8.911 50

O sea Qp = 60.942(0.657) = 40.07 lt/seg.

La fracción de área (Ap/A) para una tubería parcialmente llena, puede, en consecuencia,
determinarse mediante la siguiente expresión:

Ap  − sen º
= (ecu 8)
A 2
Método Velocidad / Superficie

Este método depende de la medición de la velocidad media de la corriente y del área de la


sección transversal del canal, calculándose a partir de la fórmula:

Q(m³/s) = A(m2) x V(m/s)


La unidad métrica es m³/s. Como m³/s es una unidad grande, las corrientes menores se
miden en litros por segundo (1/s).

Una forma sencilla de calcular la velocidad consiste en medir el tiempo que tarda un objeto
flotante en recorrer, corriente abajo, una distancia conocida. La velocidad no es uniforme
en el canal ver figura 20.

FIGURA 20 - Variación de la velocidad en una corriente


Otro método consiste en verter en la corriente una cantidad de colorante muy intenso y
medir el tiempo en que recorre aguas abajo una distancia conocida. El colorante debe
añadirse rápidamente con un corte neto, para que se desplace aguas abajo como una nube
colorante. Se mide el tiempo que tarda el primer colorante y el último en llegar al punto de
medición aguas abajo, y se utiliza la media de los dos tiempos para calcular la velocidad
media.

En las corrientes turbulentas la nube colorante se dispersa rápidamente y no se puede


observar y medir; es posible usar otros indicadores, ya sean productos químicos o
radioisótopos; se conoce como el método de la dilución. Una solución del indicador de
densidad conocida se añade a la corriente a un ritmo constante medido y se toman muestras
en puntos situados aguas abajo. La concentración de la muestra tomada aguas abajo se
puede comparar con la concentración del indicador añadido y la dilución es una función del
caudal, la cual es posible calcular.

Una determinación más exacta de la velocidad se puede obtener utilizando un molinete. En


la Figura 21 se ilustran los dos principales tipos de molinete. El de tipo de taza cónica gira
sobre un eje vertical y el de tipo hélice gira sobre un eje horizontal. En ambos casos la
velocidad de rotación es proporcional a la velocidad de la corriente; se cuenta el número de
revoluciones en un tiempo dado, ya sea con un contador digital o como golpes oídos en los
auriculares que lleva el operador. En las corrientes superficiales se montan pequeños
molinetes sobre barras que sostienen operarios que caminan por el agua (Fotografía 23).
Cuando hay que medir caudales de una avenida en grandes ríos, las lecturas se toman desde
un puente o instalando un cable suspendido por encima del nivel máximo de la avenida; el
molinete se baja por medio de cables con pesas para retenerlo contra la corriente del río.

FIGURA 21 - Dos tipos de molinete

a) tipo taza cónica


b) tipo hélice

Un molinete mide la velocidad en un único punto y para calcular la corriente total hacen
falta varias mediciones. El procedimiento consiste en medir y en trazar sobre papel
cuadriculado la sección transversal de la corriente e imaginar que se divide en franjas de
igual ancho como se muestra en la Figura 22. La velocidad media correspondiente a cada
franja se calcula a partir de la media de la velocidad medida a 0,2 y 0,8 de la profundidad
en esa franja. Esta velocidad multiplicada por la superficie de la franja da el caudal de la
franja y el caudal total es la suma de las franjas. El Cuadro 2 muestra cómo se efectuarán
los cálculos con respecto a los datos indicados en la Figura 22. En la práctica, se utilizarían
más franjas que el número indicado en la Figura 22 y en el Cuadro 2. Para aguas poco
profundas se efectúa una única lectura a 0,6 de la profundidad en lugar de la media de las
lecturas a 0,2 y 0,8.

A veces la información necesaria con respecto a las corrientes es el caudal máximo y se


puede efectuar una estimación aproximada utilizando el método velocidad/superficie. La
profundidad máxima del caudal en una corriente se puede a veces deducir de la altura de
los residuos atrapados en la vegetación de los márgenes o de señales más elevadas de
socavación o de depósitos de sedimentos en la orilla. También es posible instalar algún
dispositivo para dejar un registro del nivel máximo. Para evitar lecturas falsas debidas a la
turbulencia de la corriente, se utilizan pozas de amortiguación, normalmente una tubería
con agujeros del lado aguas abajo. La profundidad máxima del agua se puede registrar
sobre una varilla pintada con una pintura soluble en agua, o a partir de las trazas dejadas en
el nivel superior de algún objeto flotante sobre la superficie del agua en la varilla. Entre
otros materiales utilizados cabe mencionar corcho molido, polvo de tiza o carbón molido.
Una vez que se conoce la profundidad máxima de la corriente, se puede medir el área de la
sección transversal correspondiente del canal y calcular la velocidad por alguno de los
métodos descritos, teniendo presente que la velocidad en un caudal elevado suele ser
superior a la de un caudal normal.

FIGURA 22 - Cálculo del caudal de una comente a partir de las mediciones efectuadas con un
molinete. Los cálculos correspondientes a este ejemplo figuran en el Cuadro 2
CUADRO 2 - Cálculo del caudal a partir de las lecturas en el molinete

1 2 3 4 5 6 7 8

Velocidad del caudal


(m/s) Área Caudal
Profundidad Ancho
Sección (m2) (m³/s)
(m) (m)
5x6 4x7
0,2D 0,8D Media

1 - - 0,5 1,3 2,0 2,6 1,30

2 0,8 0,6 0,7 1,7 1,0 1,7 1,19

3 0,9 0,6 0,75 2,0 1,0 2,0 1,50

4 1,1 0,7 0,9 2,2 1,0 2,2 1,98

5 1,0 0,6 0,8 1,8 1,0 1,8 1,44

6 0,9 0,6 0,75 1,4 1,0 1,4 1,05

7 - - 0,55 0,7 2,0 1,4 0,77

TOTAL 9,23

D es la profundidad de la corriente en el punto medio de cada sección.

Clasificación de una estación de aforo

Si se efectúan mediciones del caudal por el método del molinete cuando el río fluye a
profundidades diferentes, esas mediciones se pueden utilizar para trazar un gráfico del
caudal en comparación con la profundidad de la corriente tal como se muestra en la Figura
23. La profundidad del flujo de una corriente o de un río se denomina nivel de agua, y
cuando se ha obtenido una curva del caudal con relación al nivel de agua, la estación de
aforo se describe como calibrada. Las estimaciones posteriores del caudal se pueden
obtener midiendo el nivel en un punto de medición permanente y efectuando lecturas del
caudal a partir de la curva de calibrado. Si la sección transversal de la corriente se modifica
a causa de la erosión o de la acumulación de depósitos, se tendrá que trazar una nueva
curva de calibrado. Para trazar la curva, es necesario tomar mediciones a muchos niveles
diferentes del caudal, con inclusión de caudales poco frecuentes que producen
inundaciones. Es evidente que esto puede requerir mucho tiempo, particularmente si el
acceso al lugar es difícil, por lo que es preferible utilizar algún tipo de vertedero o aforador
que no necesite ser calibrado individualmente, como se analiza más adelante.

FIGURA 23 - Ejemplo de la curva de calibrado de una corriente o río

FIGURA 24 - Canales con un área idéntica de sección transversal pueden tener radios
hidráulicos diferentes

Formulas empíricas para calcular la velocidad

La velocidad del agua que se desliza en una corriente o en un canal abierto está
determinada por varios factores:

• El gradiente o la pendiente. Si todos los demás factores son iguales, la velocidad de la


corriente aumenta cuando la pendiente es más pronunciada.

• La rugosidad. El contacto entre el agua y los márgenes de la corriente causa una


resistencia (fricción) que depende de la suavidad o rugosidad del canal. En las
corrientes naturales la cantidad de vegetación influye en la rugosidad al igual que
cualquier irregularidad que cause turbulencias.
• Forma. Los canales pueden tener idénticas áreas de sección transversal, pendientes y
rugosidad, pero puede haber diferencias de velocidad de la corriente en función de su
forma. La razón es que el agua que está cerca de los lados y del fondo de una corriente
se desliza más lentamente a causa de la fricción; un canal con una menor superficie de
contacto con el agua tendrá menor resistencia fricción y, por lo tanto, una mayor
velocidad. El parámetro utilizado para medir el efecto de la forma del canal se
denomina radio hidráulico del canal. Se define como la superficie de la sección
transversal dividida por el perímetro mojado, o sea la longitud del lecho y los lados del
canal que están en contacto con el agua. El radio hidráulico tiene, por consiguiente,
una cierta longitud y se puede representar por las letras M o R. A veces se denomina
también radio medio hidráulico o profundidad media hidráulica. La Figura 24 muestra
cómo los canales pueden tener la misma superficie de sección transversal pero un
radio hidráulico diferente. Si todos los demás factores son constantes, cuanto menor es
el valor de R menor será la velocidad.

Todas estas variables que influyen en la velocidad de la corriente se han reunido en una
ecuación empírica conocida como la fórmula de Manning, tal como sigue:

Donde:

• V, es la velocidad media de la corriente en metros por segundo

• R, es el radio hidráulico en metros (la letra M se utiliza también para


designar al radio hidráulico, con el significado de profundidad hidráulica
media)

• S, es la pendiente media del canal en metros por metro (también se utiliza


la letra i para designar a la pendiente)

• N, es un coeficiente, conocido como n de Manning o coeficiente de


rugosidad de Manning. En el Cuadro 3 figuran algunos valores
correspondientes al flujo de canales.

En sentido estricto, el gradiente de la superficie del agua debería utilizarse en la fórmula de


Manning; es posible que no sea el mismo gradiente del lecho de la corriente cuando el agua
está subiendo o bajando. Sin embargo, no es fácil medir el nivel de la superficie con
precisión por lo que se suele calcular una media del gradiente del canal a partir de la
diferencia de elevación entre varios conjuntos de puntos situados a 100 metros de distancia
entre ellos. Se dispone de nomogramas para facilitar la solución de la fórmula de Manning,
como indica el ejemplo de la Figura 25.

Otra fórmula empírica sencilla para calcular la velocidad de la corriente es la fórmula de


zanjas colectoras de Elliot, que es la siguiente:

Donde
• V es la velocidad media de la corriente en metros por segundo
• m es el radio hidráulico en metros
• h es la pendiente del canal en metros por kilómetro
Esta fórmula parte del supuesto de un valor de n de Manning de 0,02 y, por consiguiente,
sólo es adecuada para caudales naturales de corriente libre con escasa rugosidad.
CUADRO 3 - Valores del coeficiente n de rugosidad de Manning

a) Canales sin vegetación

Sección transversal uniforme, alineación regular sin guijarros ni vegetación, en suelos 0,016
sedimentarios finos

Sección transversal uniforme, alineación regular, sin guijarros ni vegetación, con 0,018
suelos de arcilla duros u horizontes endurecidos

Sección transversal uniforme, alineación regular, con pocos guijarros, escasa 0,020
vegetación, en tierra franca arcillosa

Pequeñas variaciones en la sección transversal, alineación bastante regular, pocas 0,0225


piedras, hierba fina en las orillas, en suelos arenosos y arcillosos, y también en canales
recién limpiados y rastrillados

Alineación irregular, con ondulaciones en el fondo, en suelo de grava o esquistos 0,025


arcillosos, con orillas irregulares o vegetación

Sección transversal y alineación irregulares, rocas dispersas y grava suelta en el fondo, 0,030
o con considerable vegetación en los márgenes inclinados, o en un material de grava
de hasta 150 mm de diámetro

Canales irregulares erosionados, o canales abiertos en la roca 0,030

(b) Canales con vegetación

Gramíneas cortas (50-150 mm) 0,030-0,060

Gramíneas medias (150-250 mm) 0,030-0,085

Gramíneas largas (250-600 mm) 0,040-0,150

(c) Canales de corriente natural

Limpios y rectos 0,025-0,030

Sinuosos, con embalses y bajos 0,033-0,040

Con muchas hierbas altas, sinuosos 0,075-0,150

FIGURA 25 - Nomograma para resolver la fórmula de Manning. Si se conocen tres variables,


es posible encontrar la cuarta
Ejemplo: Dado R = 0,3 m, n= 0,03, pendiente = 2% o 0,02 m por m, encontrar la velocidad
V.

Solución: Únase R = 0,3 y n = 0,03 y proyéctese la línea de referencia. Únase el punto


situado en la línea de referencia con la pendiente = 0,02. La intersección de la escala de
velocidad da V =2,0 m/s.

Vertederos de aforo
La medición del caudal de las corrientes naturales nunca puede ser exacta debido a que el canal
suele ser irregular y por lo tanto es irregular la relación entre nivel y caudal. Los canales de
corrientes naturales están también sometidos a cambios debidos a erosión o depósitos. Se
pueden obtener cálculos más confiables cuando el caudal pasa a través de una sección
donde esos problemas se han limitado. Para ello se podría simplemente alisar el fondo y los
lados del canal, o recubrirlos con mampostería u hormigón o instalar una estructura
construida con ese fin. Existe una amplia variedad de esos dispositivos, la mayoría idóneos
para una aplicación particular. A continuación se describe una selección de los dispositivos
que son fáciles de instalar y de hacer funcionar con referencia a manuales adecuados para
estructuras más caras o complicadas.

En general las estructuras a través de la corriente que cambian el nivel de aguas arriba se
denominan vertederos y las estructuras de tipo canal se denominan aforadores, aunque esta
distinción no siempre se cumple. Una distinción más importante es entre dispositivos
estándar y no estándar.
Un vertedero o aforador estándar es el que se construye e instala siguiendo especificaciones
uniformes y cuando el caudal puede obtenerse directamente de la profundidad de la
corriente mediante el empleo de diagramas o tablas de aforo, es decir, cuando el aforador
ha sido previamente calibrado. Un vertedero o aforador no estándar es el que necesita ser
calibrado individualmente después de la instalación mediante el empleo del método
velocidad/superficie como cuando se establece el aforo de una corriente. Existe un
conjunto tan amplio de dispositivos estándar que es preferible evitar las estructuras no
normalizadas salvo para hacer cálculos aislados de los caudales de la corriente utilizando el
método velocidad/superficie en un puente o un vado o una alcantarilla. La mayor parte de
los vertederos están concebidos para una descarga libre sobre la sección crítica con el fin
de que el caudal sea proporcional a la profundidad de la corriente en el vertedero, pero
algunos vertederos pueden funcionar en una situación denominada sumergida o ahogada,
en el que el nivel de aguas abajo interfiere con la corriente sobre el vertedero. Algunos
tipos de vertederos se pueden corregir mediante la sumersión parcial, pero esto constituye
una complicación poco conveniente que requiere medidas adicionales y más cálculos, por
lo que se la debe evitar siempre que sea posible (Figura 26). Otra variación que también es
preferible evitar, es la del vertedero sin contracción, que es un vertedero instalado en un
canal del mismo ancho que la sección crítica (Figura 27).

Vertederos de pared aguda

Los dos tipos más comunes son el vertedero triangular (con escotadura en V) y el vertedero
rectangular como se muestra en la Figura 28. Debe haber una poza de amortiguación o un
canal de acceso aguas arriba para calmar cualquier turbulencia y lograr que el agua se
acerque al vertedero lenta y suavemente. Para tener mediciones precisas el ancho del canal
de acceso debe equivaler a ocho veces al ancho del vertedero y debe extenderse aguas
arriba 15 veces la profundidad de la corriente sobre el vertedero. El vertedero debe tener el
extremo agudo del lado aguas arriba para que la corriente fluya libremente tal como se
muestra en la Figura 29. A esto se denomina contracción final, necesaria para aplicar la
calibración normalizada.

Para determinar la profundidad de la corriente a través del vertedero, se instala un medidor


en la poza de amortiguación en un lugar en el que se pueda leer fácilmente. El cero del
medidor fija el nivel en el punto más bajo de la escotadura. El medidor debe instalarse
bastante detrás de la escotadura para que no se vea afectado por la curva de descenso del
agua a medida que el agua se acerca a la misma.

FIGURA 26 - Corriente libre y corriente sumergida sobre un vertedero de pared


aguda

CORRIENTE LIBRE

CORRIENTE SUMERGIDA
FIGURA 27 - Corriente libre con contracción final y corriente controlada con
contracción en el vertedero en un canal

FIGURA 28 - Medición del caudal con vertederos de pared aguda

(a) vertedero con escotadura en V de 90°


(b) vertedero con escotadura rectangular

FIGURA 29 - Los vertederos con pared aguda deben tener el extremo agudo aguas
arriba

Los vertederos con escotadura en V son portátiles y sencillos de instalar de manera


temporal o permanente. La forma en V significa que son más sensibles a un caudal
reducido, pero su ancho aumenta para ajustarse a caudales mayores. El ángulo de la
escotadura es casi siempre de 90°, pero se dispone de diagramas de calibración para otros
ángulos, 60°, 30° y 15°, cuando es necesario aumentar la sensibilidad. En el Cuadro 4
Figuran los valores del caudal a través de pequeños vertederos con escotadura en V de 90°.

Para caudales mayores el vertedero rectangular es más adecuado porque el ancho se puede
elegir para que pase el caudal previsto a una profundidad adecuada. En el Cuadro 5 se
indican los caudales por metro de longitud de la cresta, por lo que se puede aplicar a los
vertederos rectangulares de cualquier tamaño.
Otros vertederos con pared delgada

En algunos vertederos se combinan las características de la escotadura en V y de la


escotadura rectangular. El vertedero Cipolletti tiene una cresta horizontal como una
escotadura rectangular y lados en pendiente, sin embargo, para instalaciones sencillas, esto
no aporta ninguna ventaja con respecto a la escotadura rectangular (Figura 30).

El vertedero compuesto se utiliza a veces cuando hace falta una medición sensible de
caudales reducidos a través de la escotadura en V y se necesitan también mediciones de
caudales grandes a través de la escotadura rectangular. El diseño y la calibración más
complicados implican que este tipo de vertedero se limite a estudios hidrológicos
complejos (Figura 31).

Vertederos de pared ancha

En las corrientes o ríos con gradientes suaves, puede resultar difícil instalar vertederos con
pared aguda que requieren un rebose libre de aguas abajo. La otra posibilidad está
constituida por los vertederos que pueden funcionar parcialmente sumergidos. Sirva de
ejemplo el vertedero triangular del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos
representado en las Fotografías 24 y 25. Se trata de un vertedero casi normalizado en el
sentido de que se dispone de tablas de aforo (USDA 1979), pero el aforo está influido por
la velocidad de llegada y la calibración debe verificarse por medio de mediciones
efectuadas con un molinete. Otro ejemplo, que podría igualmente denominarse aforador o
vertedero, se indica en la Fotografía 26 y requiere igualmente la calibración con un
molinete.

CUADRO 4 - Caudales por encima de un vertedero de escotadura en V de 90° (de


USDI 1975)

Carga Caudal
(mm) (l/s)

40 0,441

50 0,731

60 1,21

70 1,79

80 2,49

90 3,34

100 4,36

110 5,54

120 6,91

130 8,41

140 10,2

150 12,0
160 14,1

170 16,4

180 18,9

190 21,7

200 24,7

210 27,9

220 31,3

230 35,1

240 38,9

250 43,1

260 47,6

270 52,3

280 57,3

CUADRO 5 - Caudales por encima de un vertedero rectangular con contracciones finales (de
USDI 1975)

Carga Caudal (l/s) por metro de longitud de cresta


(mm)

30 9,5

40 14,6

50 20,4

60 26,7

70 33,6

80 40,9

90 48,9

100 57,0
110 65,6

120 74,7

130 84,0

140 93,7

150 103,8

160 114,0

170 124,5

180 136,0

190 146,0

200 158,5

210 169,5

220 181,5

230 193,5

240 205,5

250 218,5

260 231,0

270 244,0

280 257,5

290 271,0

300 284,0

310 298,0

320 311,5

330 326,0
FIGURA 30 - Un vertedero Cipolletti

FIGURA 31 - Un vertedero compuesto

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