Somos herederos de una gran promesa

Propósito: En esta sesión de clase identificaremos los sucesos más importantes del llamado de
Dios a Abraham, Isaac y Jacob hasta la formación de las tribus de Israel descrita en la biblia.

Actividad: ¿Qué diferencias encuentras en los mellizos de Isaac?

Los mellizos de Isaac eran Esaú y Jacob12. Eran hijos de Isaac y Rebeca2. Esaú era el

primogénito, pero le vendió su derecho de primogenitura a Jacob por un plato de
lentejas1. Jacob también engañó a su padre para recibir la bendición que le
correspondía a Esaú Algunas diferencias entre ellos eran:

 Esaú era velludo y Jacob era liso.

 Esaú era cazador y Jacob era hombre quieto y habitaba en tiendas.
 Esaú era el preferido de Isaac y Jacob era el preferido de Rebeca.
 Esaú se casó con mujeres hititas que disgustaron a sus padres y Jacob se casó con
las hijas de Labán, su tío.

Respondemos: ¿Crees que los alumnos y alumnas tienen un ideal en su vida para
estudiar y prepararse con esmero de cara a su futuro?

Creo que algunos alumnos y alumnas sí tienen un ideal en su vida que los motiva a
estudiar y prepararse con esmero, pero otros quizás no lo tienen tan claro o no lo han
encontrado todavía

¿Qué puedes hacer para agradecer a Dios por tu historia personal en la familia, en
el colegio, con tus amigos?

Hay muchas formas de agradecer a Dios por tu historia personal en la familia, en el

colegio, con tus amigos. Algunas de ellas son:

 Orar con gratitud por todo lo que Dios ha hecho por ti y por las personas que te
rodean. Puedes orar en cualquier momento del día, pero especialmente al
despertar y al acostarte.
 Servir y generosidad hacia los demás, especialmente los más necesitados. Puedes
compartir tus talentos, tu tiempo y tus recursos con quienes lo necesitan, siguiendo
el ejemplo de Jesús.
 Reconocer las bendiciones que tienes y que eres en tu vida diaria. Puedes expresar
tu agradecimiento a Dios con palabras, con gestos o con acciones. También puedes
agradecer a las personas que Dios ha puesto en tu camino y que te han ayudado a
crecer.

¿Sirve de algo la oración, si no haces ningún esfuerzo para conseguir lo que le

estás pidiendo a Dios?

La oración es muy importante, pero no es suficiente por sí sola. La oración debe ir

acompañada de esfuerzo, de acción y de confianza en Dios.