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Caso 1: Periódico gratis

1. Te parece que la ética podría tener ciertos márgenes o algunas


extensiones para que algunas situaciones que no nos parecen tan
graves, puedan ser toleradas?
Si bien cada persona tiene un modo de ser, y por ende evalúa las situaciones
desde diferentes perspectivas, la convivencia con los demás implica aceptar
acuerdos y acatar directrices, por ende este comportamiento no puede ser
tolerado.
¿Qué dice tu docente?
Finalmente, la ética implica, basándonos en Cuenca (2015), aceptar acuerdos y
acatar directrices, consensuados, porque son importantes para el colectivo en
razón de que son valiosos e importantes para todos para la convivencia y el
desarrollo de la vida. Cuando no aceptamos esas directrices, y asumimos
conductas fuera de tales preceptos y mandatos de convivencia sana, como
aquellos que no pagan por un servicio o bien, y, además, argumentan y justifican
sus acciones, quebramos, rompemos gravemente las condiciones mínimas que
requerimos para convivir.

Caso 2: La lucha de Fiorella Sorroza


2. ¿Se justifican, de algún modo, las conductas que hemos visto en el
caso 2, o consideras que no hay justificación alguna?
Según la ley de oferta y demanda que existe, se podría llegar a un incremento en
algún escenario. Pero, dada la coyuntura en la época de coronavirus, era
impensable llegar a esos precios abusivos, somos seres humanos que convivimos
diariamente y esto nos une como personas. Nacemos en un contexto que nos va
formando, en nuestra realidad peruana se ve reflejado " el más vivo ", como
modo de ser, pero esto no implica que no podamos salir de éste y proyectarnos a
una mejor relación con los demás.
¿Qué dice tu docente?
Si pensamos en la pandemia y en los muchísimos casos atroces, muy penosos,
deplorables y lamentables, que nos mostró, como el que se mencionaba, de
inmediato nos damos cuenta que gran parte de la sociedad, que se supone, así
como refiere Cuenca (2105) forma parte de un mismo grupo, que tiene lugares
comunes, que parte de un mismo modo de ser y de ver las cosas, que se sitúa en
un contexto particular y toma distancia respecto de determinadas ideas y la
consecución de ciertos fines, que es lo que nos brinda y permite la ética, que
podrían ser la solidaridad, la empatía, el respeto de la vida y demás derechos,
incluso el amor hacia los demás, no estuvo signada ni guiada por este mismo
modo de ser y de ver las cosas, sino que se dejó de lado toda consideración que
no haya sido el beneficio propio, la ganancia y el lucro sórdido y manchados del
dolor de los demás, sin que esto importara en lo absoluto.

Caso 3: El Congresista Freddy Diaz


3. ¿Cómo es que la conducta de este congresista se aleja de las
nociones y sentido de la ética?
En el ámbito político la mayoría de representantes hacen alarde de ser
personajes éticos pero queda en palabras, y no hacen énfasis en las acciones del
ser humano ya que éstas fundan y sostienen la ética. Este congresista a perdido
el real sentido de convivencia humana, aprovechándose de personas que se
encuentran bajo su supervisión, valiéndose de poderes que le otorga el mismo
pueblo al que a decepcionado, no acata las normas que su puesto sugiere y las
directrices de respeto hacia los demás.
¿Qué dice tu docente?
Recordando las situaciones que presentamos anteriormente, podemos verificar
que vivir en sociedad debe entenderse más como un ‘con-vivir’ con los demás,
en términos de Cuenca (2015), y que resulta medular tener claro que las
costumbres, los hábitos y creencias (los valores y los principios que regulan
nuestra conducta, que nos determinan y marcan la pauta de nuestra vida) son
valiosos para el grupo y su ruptura genera daño, rompe la convivencia en
armonía y estabilidad. De allí que condenemos, no solo el delito de violación
sexual (al margen que la ley lo sanciona), sino que, además, reprochamos el uso
de las instalaciones públicas para actividades que no le corresponden, y la
conducta de las personas involucradas en esos hechos, por inadecuadas y
contrarias al deber.

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