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Después de pensarlo unos dias, Linda le aviso a Duque de la situacion en casa de Ariadna y Valentin. Al principio no queria hacerlo, pero, al fin y al cabo, él la habia abandonado. Sin embargo, llevaban cinco afios juntos y no pudo evitar contarselo todo. En realidad, tenia la esperanza de que él le pidiera que volviera, debido a la cantidad de anos juntos y porque, durante ese tiempo, habia sido la Unica que habia estado a su lado. Sin embargo, la llamada fue lo peor que le pudo pasar porque después.de que él hablara, ella oyd gritos ansiosos y jadeos al otro lado de la llamada antes de que pudiera responder. —jYalo entiendo!—grito ella. Se puso muy triste cuando-termino- la llamada, asi que se agacho y se abrazo las rodillas. En ese momento, Mariano abrio la puerta y entré con una gran bolsa de refrigerios. Cuando la vio agachada en el suelo, se apresuro a acercarse. —~Q-qué ocurre? Estas mal? —pregunto con cautela por miedo de que ella se enojara. Ella levanto despacio la cabeza al oir su voz. A él le dio pena verle el rostro con lagrimas, asi que extendio una mano, le puso con torpeza el pelo detras de las orejas y le seco las lagrimas con cuidado. —Linda, pase lo que pase, estoy aqui para ti. Tras decir esas palabras con inseguridad penso que a ella le disgustarfan, pero para su sorpresa, ella lo abrazo. No pudo evitar sentirse un poco nervioso, sinssaber si abrazarla 0 no. —iMe quieres? —le pregunto mientras lo abrazaba del cuello. Mariano asintio, ya que se habia enamorado perdidamente de ella en.cuanto la -vio-aquel dia. Cuando Linda lo vio asentir, lo abrazé del cuello y acerco sus labios a los de él, lo cual lo hizo perder el control. «Dios sabe cuantas veces habia pensado en esta sensacién desde aquella vez en el auto». Mariano la alzo con rapidez y se besaron mientras se desnudaban. Luego la puso sobre la cama y se puso arriba de ella. —Atn_estas a tiempo de cambiar de opinion —murmuro él mirandola a los ojos porque no queria que ella se arrepintiera después. Linda no dijo nada y le puso las manos detras de la cabeza y lo beso, asf que eso significaba que no se arrepentiria. Luego de eso, Mariano bajo la cabeza y la beso con mucho deseo. —Linda, équieres ser mi novia? —pregunto en voz baja luego de tener relaciones sexuales. No le importaba que hubiera estado con Duque. Lo unico que le importaba era si terminaria siendo su mujer. Ella se quedo en silencio, se levanto, prendi6 un-cigarrillo y se quedo junto a la ventana mirando la luna. El se puso-un-poco triste al.verla, asfque-agarro una bata de bajo, se levantd y se le acerc6 mientras se la colocaba por encima y la abrazo por detras. —Te trataré bien —murmuro en voz baja. —Mariano, deberias encontrar a alguien que te haga feliz... —dijo luego de darse vuelta para.mirarlo. —Solo te quiero a ti —interrumpi6 antes de que pudiera terminar la frase. «Si no es con ella, no quiero salir con nadie». —En serio? ~No te importa que haya estado con Duque cinco afios? —Al verlo asentir, apag6 el cigarrillo y lo miroé—. De acuerdo. A partir de ahora somos novios. En algun lugar, Tobias miraba al nifio con el cefio un poco fruncido. —jNorma! ¢Como es que tiene fiebre este nifo si lo tenfas que cuidar? —pregunto Tobias de mala manera mientras se daba vuelta con el cefio fruncido. Al oir que el nifio no estaba bien, Norma corto de inmediato el teléfono y le puso la mano en la frente. «Tiene mucha fiebre». —éSera que no es inteligente? ¢Por qué sigue sentado jugando con tanta fiebre? Ni siquiera ha llorado —comenté con el cefio fruncido mientras lo miraba. El profesor se confundié al ofr eso. «g~No es inteligente? El nifio esta bien. Yo mismo le hice las pruebas y-esta sano. Sera el-sujeto de experimentacion perfecto, pero obtendré resultados manipulados.si realizo-los experimentos ahora». —Es normal —resoplé Tobias—. Rapido, ve a buscar algun medicamento que le baje la fiebre. Tenia tanta fiebre que no habia otros métodos adecuados para reducirsela. Ademas, como alli no tenian medicamentos para nifios, tendrian que comprarlos en una farmacia y se notaba que Norma estaba disgustada por eso. «;Cdmo se atreve a hablarme asi? gAcaso no soy profesora también?». A pesar de su enojo, hizo lo que le pedia, ya que no se podia hacer otra cosa porque eran los Unicos que estaban alli. —Aqui solo estamos nosotros dos; no podemos arreglarnoslas solos. ;Qué tal si contratamos a mas médicos?,=sugirié a Tobias luego de volver de la farmacia y darle la medicacion al nifo. — Contratar mas médicos? —pregunto él con el cefio fruncido=.Eso no puede ser.

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