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Doctrina Judicial No33
Doctrina Judicial No33
DERECHO
DE LA NIÑEZ
Y LA
ADOLESCENCIA
EN LA DOCTRINA
DE LA SALA
CONSTITUCIONAL
(2000-2008)
KHW2921
Z94
DERECHO DE LA NIÑEZ
Y LA ADOLESCENCIA
EN LA DOCTRINA
DE LA SALA CONSTITUCIONAL
(2000-2008)
Dra. Luisa Estella Morales Lamuño Dra. Evelyn Margarita Marrero Ortiz
Presidenta del Tribunal Presidenta de la Sala
y Presidenta de la Sala Dra. Yolanda Jaimes Guerrero
Dr. Francisco Antonio Carrasquero López Vicepresidenta de la Sala
Vicepresidente de la Sala Dr. Levis Ignacio Zerpa
Dr. Jesús Eduardo Cabrera Romero Dr. Hadel Mostafá Paolini
Dr. Pedro Rafael Rondón Haaz Dr. Emiro Antonio García Rosas
Dr. Marcos Tulio Dugarte Padrón
Dra. Carmen Zuleta de Merchán
Dr. Arcadio Delgado Rosales
Dr. Luis Alfredo Sucre Cuba Dra. Yris Armenia Peña Espinoza
Segundo Vicepresidente del Tribunal Presidente de la Sala
y Presidente de la Sala Dra. Isbelia Josefina Pérez Velásquez
Dr. Luis Martínez Hernández Vicepresidenta de la Sala
Vicepresidente de la Sala Dr. Antonio Ramírez Jiménez
Dr. Rafael Arístides Rengifo Camacaro Dr. Carlos Oberto Vélez
Dr. Juan José Núñez Calderón Dr. Luis Antonio Ortiz Hernández
Dr. Fernando Ramón Vegas Torrealba
Palabras Preliminares
El Tribunal Supremo de Justicia que presido espera que esta nueva pu
blicación no sólo sea recibida con beneplácito por su destinataria, la
comunidad jurídica nacional, sino que sirva de ejemplo y estímulo para
la preparación de otras semejantes.
Contenido
Prólogo ................................................................................... 27
Índice de Artículos ............................................................. 41
Abreviaturas ......................................................................... 55
Contenido Temático ............................................................ 57
AÑO 2000
AÑO 2001
AÑO 2002
AÑO 2003
AÑO 2004
AÑO 2005
AÑO 2006
AÑO 2007
AÑO 2008
APÉNDICE
Esto era así en el mundo occidental hasta que se produjo una conver
sión notable en el pensamiento médico, y se pusieron de relieve ciertos
hechos sociales hasta entonces despreciados o tratados con discreción
como fueron los abortos voluntarios y la mortalidad de los lactantes, que
incidían gravemente sobre la despoblación y la baja natalidad, entonces
cambia la estrategia de las clases dominantes que había sido claramen
te malthusiana hasta la segunda mitad del siglo XIX. Hacia 1870 el mé
dico francés Dupéctieux llama la atención con los resultados de un estudio
comparativo de las tallas de los soldados del ejército francés y del ejér
cito inglés, advirtiendo que la talla de estos últimos era muy superior y
atribuía estos resultados a las inferiores condiciones de trabajo y salu
bridad de la población francesa. Razones de salud pública hicieron que
se les diera a la protección de los niños y las mujeres tratamiento de
“deber patriótico”.
II
ca, hicieron el resto. En el siglo XX, los análisis de Freud sobre la psi
quis femenina lo llevaron a sostener que una mala madre es una mala
mujer; y que además, estaría enferma. Aun así, a finales del siglo XX,
las mismas mujeres desmienten los dictámenes del psicoanálisis. En 1998,
en una muestra de 18.500 mujeres francesas; solamente el 23% creía
que la mujer debía tener hijos para sentirse realizada; las demás, lo con
sideraron accesorio.
III
IV
Índice de Artículos
CÓDIGO CIVIL
Artículo 1 ........................................................ 396
Artículo 18 ...................................................... 454
Artículo 162 .................................................... 489
Artículo 170 .................................................... 214
Artículo 173 .................................................... 214
Artículo 184 .................................................... 273
Artículo 185 .................................................... 195,420
Artículo 186 .................................................... 195
Artículo 197 .................................................... 273
Artículo 201 .................................................... 273, 500
Artículo 202 .................................................... 273
Artículo 204 .................................................... 273
Artículo 208 .................................................... 332
Artículo 232 .................................................... 197
Artículo 235 .................................................... 155, 273
Artículo 278 .................................................... 398
Artículo 279 .................................................... 398
Artículo 501 .................................................... 537
Artículo 748 .................................................... 177
Artículo 809 .................................................... 273
Artículo 1.264 ................................................. 273
42 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LAADOLESCENCIA
CÓDIGO DE COMERCIO
Artículo 127 .................................................... 199
Artículo 1.099 ................................................. 190
CÓDIGO PENAL
Artículo 432 .................................................... 89
Artículo 434 .................................................... 89
Artículo 435 .................................................... 89
Artículo 436 .................................................... 89
CONSTITUCIÓN DE LA REPÚBLICA
BOLIVARIANA DE VENEZUELA
Artículo 2 ........................................................ 243, 392, 489
Artículo 3 ........................................................ 102
Artículo 20 ...................................................... 273
44 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LAADOLESCENCIA
CONVENIO RELATIVO A LA
PROTECCIÓN DEL NIÑO Y A LA
COOPERACIÓN EN MATERIA DE
ADOPCIÓN INTERNACIONAL
Artículo 46 ......................................................
530
CONVENCIÓN SOBRE LA ELIMINACIÓN
DE TODAS LAS FORMAS DE
DISCRIMINACIÓN
Artículo 16.e .................................................. . 273
46 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LAADOLESCENCIA
DECLARACIÓN SOBRE LA
ELIMINACIÓN DE TODAS LAS
FORMAS DE INTOLERANCIA Y
DISCRIMINACIÓN FUNDADAS EN LA
RELIGIÓN O EN LAS CONVICCIONES
Artículo 5 ........................................................ 489
DECLARACIÓN UNIVERSAL DE
DERECHOS HUMANOS
Artículo 29 ...................................................... 273
LEY DE ABOGADOS
Artículo 4 ........................................................ 125
Artículo 22 ...................................................... 272
LEY DE ADOPCIÓN
Artículo 55 ...................................................... 224
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LAADOLESCENCIA 47
Abreviaturas
AÑO 2000
58 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 59
Tal negación de los principios procesales más elementales luce aún con
mayor claridad si se contrapone con el propio texto de la Convención,
del cual podemos extraer ciertos elementos que aseguran el respeto a
los derechos al debido proceso y a la defensa, como cuando se exige
que el país requerido deba “recurrir a los procedimientos de urgen-
cia” (artículo 2)1 –la urgencia no niega que se abra un debate, como
tampoco lo niega la sumariedad o la inmediatez con que deban condu
cirse los tribunales de acuerdo al caso–; “El convenio se aplicará a
todo menor que tuviera su residencia habitual en un Estado con-
tratante...” (artículo 4), de suerte que la convicción del juez requerido
acerca de si el menor tenía su residencia habitual en un Estado determi
nado, amerita la actividad probatoria de las partes.
1
Convención sobre los Aspectos Civiles de la Sustracción Internacional de Menores publicada en
Gaceta Oficial de la República de Venezuela N° 36.004, del 19 de julio de 1996.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 61
Por tanto, y visto que la decisión del Juzgado Superior Primero de Fami
lia y Menores de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de
Caracas y Nacional de Adopción Internacional apelada se pronunció
correctamente sobre la violación al debido proceso en que incurrió el
Juzgado Noveno de Primera Instancia de Familia y Menores de la Cir
cunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas, corresponde
a esta Sala confirmar, en lo que toca a este punto, la sentencia apelada,
y así se declara.
(…omissis…)
(…) estima esta Sala que, en razón del alegado principio del interés
superior del niño, tal solicitud clama por una respuesta, no sólo en
interés de las menores involucradas, sea cual fuere la decisión que se
tome, sino también por el deber que tiene el Estado venezolano de dar
curso y repudiar –en caso de llevar razón el solicitante– aquellos he
chos cometidos en perjuicio de los menores, como lo sería el aparta
miento ilícito de los menores o adolescentes del lado de las personas o
instituciones que tuvieren el deber de guardarlos.
(…) La Sala acordó realizar audiencia privada del menor Pedro Alejan
dro Lava Salas, luego de concluidas las intervenciones de las partes.
Hicieron éstas uso del derecho a réplica y contra réplica. El tercero
coadyuvante ejerció el derecho a la palabra que le fue conferido y con
signó evidencia documental en un (1) folio útil.
(…omissis…)
2
La Abreviatura “LOPNA” (2000) a utilizarse en lo sucesivo corresponde a la Ley Orgánica Para
la Protección del Niño y del Adolescente, y la abreviatura “LOPNNA” (2007) corresponderá a
la Reforma Parcial denominada Ley Orgánica Para la Protección del Niño, Niña y del Adolescen
te, publicada en Gaceta Oficial N° 5.859 Extraordinario el 10 de diciembre de 2007.
3
Tanto el artículo 8 como el artículo 27 se mantuvieron igual en la Reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 63
4
Ley Aprobatoria de la Convención Sobre los Derechos del Niño, publicada en Gaceta Oficial N°
35.541, del 29 de agosto de 1990.
64 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Sin embargo, estima importante este Máximo Tribunal destacar una vez
más la importancia de que todo menor sea escuchado en las causas que
les conciernen; en tal sentido, señaló esta Sala en decisión Nº 580 de
fecha 20 de junio de 2000, lo siguiente:
“La realización del referido acto es una obligación ineludible para cual
quier órgano o autoridad que se encuentre conociendo de procesos o
situaciones que de una u otra forma afecten o amenacen con afectar el
bienestar de menores, de acuerdo con la edad y condiciones de salud
mental en que éstos se encuentren. La garantía de tal derecho está
orientada a proporcionarles oportunidad para expresarse libremente en
audiencia especial, para que su manera de percibir las circunstancias
que fueren del caso y sus opiniones en general cuenten, como elemento
principalísimo, en el conjunto de factores que debe ponderar quien le
corresponda adoptar decisiones de cualquier naturaleza. Así se declara.
5
Tanto el artículo 8 como el artículo 27 se mantuvieron igual en la reforma LOPNNA.
66 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
6
El artículo 30 se mantuvo igual en la reforma LOPNNA.
68 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
AÑO 2001
70 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 71
7
Criterio ratificado posteriormente en fallo dictado por la Sala Constitucional bajo el número
1.461, del cuatro de junio de 2003. (Caso: Antonio Callaos Farra y Pila Olga Triana Gámez) y
fallo número 1.976, del veintiuno de julio de 2003. (Caso: Maylett Dolores Jiménez de Galárraga).
8
El artículo 12 se mantuvo igual en la reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 73
a) De orden público;
[...].
Ello es así, dada la labor que implica la protección integral que debe el
Estado a estos sujetos de derecho. Dicha labor se ve materializada a través
de los distintos órganos creados a tal fin, bien sean administrativos o judi
ciales, los cuales actúan en procura de su mejor bienestar y desarrollo.
Al respecto considera esta Sala que, dentro del litis consorcio activo a
que se refiere el juicio intentado se encuentran comprendidos cuatro
adolescentes, situación que justifica que su conocimiento se encuentre
asignado, en virtud del fuero de atracción personal, a los órganos juris
diccionales que tienen atribuida la competencia especialísima en mate
ria de protección al niño y al adolescente, ello además, implica que, en
principio, la normativa aplicable será la contenida en la Ley Especial
que rige la materia, tal razonamiento se desprende del espíritu, propósi
to y alcance de las disposiciones normativas contenidas en la Ley Orgá
nica para la Protección del Niño y del Adolescente y en su Exposición
de Motivos, muy especialmente en las normas insertas en los artículos
177 y 452 de dicho texto legal.
9
Los artículos 177 y 452 se modificaron en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 75
Los artículos 605 y 613 de la Ley Orgánica para la Protección del Niño
y del Adolescente, establecen:
10
Los artículos 605 y 613 se mantuvieron igual en la Reforma LOPNNA.
76 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
11
Criterio ratificado posteriormente en fallo dictado por la Sala Constitucional bajo el número
2.874, del diez de diciembre de 2004. (Caso: Noelia Margarita Barroso Arteaga).
12
Los artículos 270 y 380 se mantuvieron igual en la Reforma LOPNNA.
78 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
cidad. Sin embargo, cabe destacar que la norma dejó a salvo su aplica
ción cuando dispuso “a menos que se trate de violaciones que infrinjan
el orden público o las buenas costumbres”, caso en el cual no opera la
mencionada consecuencia jurídica.
Siendo ello así, considera esta Sala que la sentencia que se examina
debió considerar las infracciones alegadas, por estar involucrado en el
caso de autos una materia de orden público como es la institución fami
liar, sobre la cual recaían las violaciones denunciadas y no, con inadver
tencia absoluta del tema debatido, entrar a considerar, simplemente que,
en el caso que examinaba, había operado la caducidad de la acción
porque el tiempo que había transcurrido sin que el presunto agraviado
interpusiera la acción hacía presumir su consentimiento tácito a la posi
ble lesión producida, esto es, se insiste con prescindencia absoluta del
análisis que requería la infracción delatada y de la respectiva verifica
ción de la ocurrencia o no de la violación constitucional.
(...)
Pues bien, considera esta Sala que, si bien es cierto que en materia
penal, cuando la acción de amparo tenga por objeto la libertad y seguri
dad personales, será conocida por el Juez de Control, a tenor de los
artículos 60 del Código Orgánico Procesal Penal, 7, último aparte, y 40
84 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
13
Los artículos 582, 529, 530 y 531 se mantuvieron igual en la Reforma LOPNNA.
86 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
AÑO 2002
94 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 95
14
Criterio ratificado posteriormente en fallos dictado por la Sala Constitucional bajo el número
1.876, del doce de agosto de 2002. (Caso: Antonio María Leandro Villalba) y bajo el número
2.915, del veinte de noviembre de 2002 (Caso: Preescolar Asistencial Génesis y otros.)
15
El artículo 1° se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
Los artículos 177 y 453 se modificaron en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice.)
96 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
En tal sentido, la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Ado
lescente prescribe, en su artículo 177, la competencia de la Sala de
Juicio del Tribunal de Protección del Niño y del Adolescente –ante quien
se instauró el amparo originario–, para conocer de los asuntos de fami
lia, patrimoniales y del trabajo, de los provenientes de los Consejos de
Protección o de los Consejos de Derechos y de manera más general de
“otros asuntos”, y establece, en el parágrafo quinto, para culminar su
enunciado, la competencia de dicha Sala para conocer de la “acción de
protección contra hechos, actos u omisiones de particulares, órga-
nos e instituciones públicas o privadas que amenacen o violen de-
rechos colectivos o difusos de los niños y adolescentes”; no obstante,
en ningún caso, prevé una competencia distinta de la prescrita por la
Ley Orgánica de Amparo sobre Derechos y Garantías Constitucionales
que, en su artículo 4, determina que el amparo contra sentencias debe
interponerse por ante el Tribunal Superior que emitió el pronunciamien
to, quien decidirá en forma breve, sumaria y efectiva.
del Niño y del Adolescente, sin que esta Sala prejuzgue acerca de su
procedencia o no, por no ser objeto del debate, las medidas acordadas se
encuentran acordes con la naturaleza de los procesos de amparo consti
tucional, parece reducirse entonces a un problema de nominación o ter
minológico, que si bien conduce a errores no hace nugatoria la posibilidad
de su otorgamiento, de modo pues que, no por su calificación como medi
das de protección resultan improcedentes, antes bien como se ha expues
to el juez constitucional posee amplios poderes cautelares para restablecer
la situación jurídica infringida sin que sus providencias deban fundamen
tarse en una disposición legislativa.
16
El artículo 361 se modificó en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 99
Observa al respecto esta Sala que, el objeto del juicio principal estaba
constituido por una acción por incumplimiento de cesión, intentada con
tra el presunto agraviado, por la madre de sus hijos menores de edad, a
través de la cual se pretendía el cumplimiento de una prestación por el
obligado, consistente en el deber de proveer a sus hijos de una vivienda,
como parte del compromiso adquirido para el cumplimiento de la obliga
ción alimentaria en el momento de suscribir la separación de cuerpos y
bienes con su ex cónyuge; demanda en la cual el demandado resultó
vencido y, por tanto, condenado a su ejecución.
17
Los artículos 8 y 30 se mantuvieron igual en la Reforma LOPNNA.
10 0 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Pretende esta Sala con lo expuesto, además, dejar establecido que los
compromisos asumidos por los padres en relación a la obligación ali
mentaria deben ser de estricto cumplimiento y de interpretación favora
ble al interés superior del niño, cuyo respeto y vigencia el Estado debe
asumir, a través de sus órganos, sin que puedan los padres adquirir tales
10 2 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
18
El artículo 177 se modificó en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice)
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 10 3
Ahora bien, una vez establecida la competencia de esta Sala para cono
cer de la presente acción de amparo, procede a revisar si la misma cum
ple con los requisitos elementales para su admisión, establecidos en la
Ley Orgánica de Amparo sobre Derechos y Garantías Constitucionales.
19
El artículo 608 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
10 6 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
20
Los artículos 557 y 584 se mantuvieron sin modificación en la Reforma LOPNNA.
10 8 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Así las cosas, una vez que se ha decretado la flagrancia del delito por el
Tribunal de Control, y remitido la causa a un Tribunal de Juicio, debe
integrarse este último, como lo señala el artículo 584 de la Ley Orgáni
ca para la Protección del Niño y del Adolescente, que prevé:
Por tanto, visto que en el caso sub examine el Ministerio Público solici
tó en la acusación, la aplicación de la sanción de la medida de privación
judicial contra el adolescente, esta Sala colige que el juicio oral y priva
do convocado contra el accionante debe ser conocido y decidido por un
Tribunal de Juicio de la Sección de Adolescentes del Circuito Judicial
Penal del Estado Nueva Esparta, constituido con escabinos.
21
El artículo 537 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
11 0 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
22
Los artículos 528 y 531 se mantuvieron igual en la Reforma LOPNNA.
11 2 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Ahora bien, considera esta Sala que en el presente caso la Corte Su
perior de Apelaciones del Tribunal de Protección del Niño y del Ado
lescente de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de
Caracas y Nacional de Adopción Internacional, erró cuando declaró
terminado el procedimiento de amparo por la falta de asistencia de la
parte actora a la audiencia oral, por cuanto, en criterio de esta Sala,
23
El artículo 12 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 11 3
24
El artículo 126 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
El artículo 466 se modificó en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 11 5
25
El artículo 177 se modificó en la LOPNNA (Ver Apéndice).
11 6 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
AÑO 2003
11 8 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 11 9
26
Los artículos 137, 278 y 318 se modificaron en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
12 0 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
27
Los artículos 367 y 378 se mantuvieron sin modificación en la LOPNNA.
El artículo 366 se modificó en la LOPNNA (Ver Apéndice).
12 2 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
A juicio de esta Sala ello significa que es cierto que este conjunto de
elementos, que en principio no puede sustituir la prueba directa de la
filiación o la que resulte indirectamente establecida por sentencia firme
en aquellos casos en que la actitud del demandado inequívocamente
contenga un reconocimiento de la filiación o indicios suficientes de tal
reconocimiento, le permiten al Juez que llegue a la convicción de quién
es el padre o la madre del reclamante. Este parece ser el caso de autos
debido a las siguientes circunstancias:
Así las cosas, la Sala considera que todos los esfuerzos del pretensor de
amparo se concentraron, más que en el cuestionamiento de la filiación
que se declaró, en lo concerniente al monto de las pensiones alimenta
rias, a lo que él llamó las pensiones atrasadas, a la prescripción extintiva
de la obligación del pago de las mismas y a la ausencia de motivación de
la decisión que fue impugnada en los aspectos que se mencionaron.
Por otra parte, esta Sala considera necesario la formulación de las si
guientes consideraciones respecto de la prescripción en materia de ni
ños y adolescentes en relación con la obligación de pago de las pensiones
de alimentos.
28
Criterio ratificado posteriormente en fallo dictado por la Sala Constitucional bajo el número
550, del veintiuno de abril de 2005. (Caso: Rosa Lorena Navas Fajardo).
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 12 5
29
El artículo 484 se modificó en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
12 6 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Por otra parte, debe precisar esta Sala, que en los amparos que se ejer
zan en materia penal se deberá notificar al defensor público en el caso
de que el accionante comparezca a la audiencia constitucional sin abo
gado; igual situación se plantea en materia de menores donde se deberá
notificar a los órganos de asistencia jurídica del menor conforme a la
Ley Orgánica de Protección al Niño y al Adolescente.
Por ello, resulta imperioso para esta Sala resaltar que la no asisten
cia o representación de abogado por parte del accionante implica
una deficiencia irrefutable en lo que se refiere al manejo efectivo de
los parámetros y términos legales sobre los cuales se debe plantear
la defensa del interesado, que no puede ser sustituida por los conoci
mientos generales que de la aplicación del derecho pueda entender
el ciudadano común.
Siendo ello así, vista la necesidad que impera en los procesos judiciales
en razón de que las partes sean representadas ante el órgano jurisdic
cional por medio de un abogado que vele y proteja sus intereses, lo que
ha sido señalado expresamente por el artículo 4 de la Ley de Abogados,
esta Sala estima que lo más conveniente en el presente caso era diferir
la audiencia constitucional, no sin antes expresarle al actor la obligato
riedad de la asistencia legal en la nueva oportunidad en que se llevare a
cabo la audiencia correspondiente, lo cual fue realizado así por el Juz
gado Superior en lo Civil, Mercantil, del Tránsito, del Trabajo y de Me
nores de la Circunscripción Judicial del estado Nueva Esparta mediante
auto dictado el 6 de diciembre de 2001.
30
El artículo 12 se mantuvo sin modificación en la LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 12 9
En virtud del criterio que fue expuesto y, por cuanto de ser cierto lo
alegado por la parte actora se habría incurrido en una grave violación
del debido proceso de dos adolescentes al momento de la emisión de
la decisión objeto de amparo, esta Sala considera que los hechos que
se alegan involucran el orden público. En consecuencia, revoca la sen
tencia del a quo que declaró terminado el procedimiento y repone la
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 13 1
31
El artículo 366 se modificó en la LOPNNA (Ver Apéndice).
13 2 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Ahora bien, tales razones, que son correctas, produce como efecto en
el presente caso que se anule la decisión de la segunda instancia y se
ordene de nuevo a esa instancia decidir sobre la declaratoria de peren
ción, manteniéndose mientras tanto la medida preventiva decretada, la
cual cesará una vez decretada la perención.
Ante esa posibilidad, la Sala, a fin que los menores disfruten plena y
efectivamente de sus derechos y garantías, y debido al principio de sub
sistencia de la obligación alimentaria, que como efecto de la filiación
corresponde a los padres, así se haya privado o extinguido la patria
potestad (artículo 366 de la Ley Orgánica de Protección del Niño y del
Adolescente), y habiéndose fijado judicialmente una pensión provisoria,
tendría como medida preventiva y garantista de la prioridad absoluta
que la vigente Constitución (artículo 78) otorga a la protección integral
de los menores, mantener la medida sobre las prestaciones al menos
durante tres meses después que se decretase –si ello fuese así– la pe
rención de la instancia, de manera que si se incoase de nuevo la acción,
no se perjudicará a los menores.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 13 3
32
Los artículos 30 y 636 se mantuvieron sin modificación en la LOPNNA.
Los artículos 358, 512, 514, 516, 517 y 520 se modificaron en la LOPNNA (Ver Apéndice).
13 4 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
(…Omissis…)
33
El artículo 7 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
Los artículos 177 y 457 se modificaron en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 13 7
Por las razones expuestas, esta Sala considera que la competencia para
conocer acciones de amparo donde se ventilen derechos o intereses
difusos o colectivos son las Salas de Juicio de los Tribunales de Protec
ción del Niño y del Adolescente, con competencia por el territorio en la
residencia del menor cuando en lugar de la comisión de la supuesta
infracción constitucional coincida con su residencia, en una interpreta
ción armónica de las disposiciones contenidas en los artículos 7 de la
Ley Orgánica de Amparo sobre Derechos y Garantías Constituciona
les, 177 y 457 de la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del
Adolescente. Así se establece.
14 0 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Por otra parte, la pretensión de nulidad del permiso otorgado por la Juez
de Menores para la constitución de una hipoteca sobre el inmueble pro
piedad de la adolescente no se encuentra prevista como medio de impug
nación de una ejecución hipotecaria, pero la declaración de tal nulidad
podría conllevar a la nulidad de la hipoteca, por lo que ese juicio obraría
como una cuestión prejudicial oponible como cuestión previa en el proce
so de ejecución de hipoteca, lo que no alegaron los hoy accionantes.
34
El artículo 8 se mantuvo igual en la reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 14 1
35
Este fallo amplia el criterio señalado en la decisión número 926 del primero de junio de 2001
(Caso: María de los Ángeles Hernández Villadiego e hijos).
36
Los artículos 177, 452 y 489 se modificaron en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
El artículo 318 se modificó en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
14 6 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Por tanto, es forzoso para esta Sala concluir que la actuación impugna
da contenida en el auto dictado el 23 de mayo de 2001 por el juez agra
viante, lesiona el debido proceso y a la defensa de las partes, al haber
pretendido aplicar para el trámite del procedimiento de tacha ambas
legislaciones. Así se decide.
37
El artículo 294 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA
15 2 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Así las cosas, estima esta Sala que en el presente caso, la Corte Supe
rior del Tribunal del Niño y del Adolescente de la Circunscripción Judi
cial del Área Metropolitana de Caracas, actuó dentro de los límites de
su competencia al haber declarado con lugar el recurso de apelación
que ejerció la apoderada judicial del ciudadano Pedro Germán Pacheco,
en virtud que las apoderadas judiciales de la ciudadana Pietra Tripi Davi,
no demostraron en el referido juicio de revisión de la pensión alimenta
ria de sus hijos, la gran capacidad económica del demandado, puesto
que los estados de cuentas consignados en autos, se evidenciaba a cri
terio del a quo que el demandado ganaba y sufragaba gastos equivalen
tes a un nivel de vida medio alto y así se decide.
Así las cosas, esta Sala observa que aunado a las anteriores considera
ciones, la referida Corte Superior actuó conforme a derecho al haber
considerado las posibilidades económicas que tenía la ciudadana Pietra
Tripi Davi, para disminuir la pensión de alimentos establecida en la sen
tencia apelada, acatando el contenido del artículo 371 de la Ley Orgáni
38
El artículo 371 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 15 5
39
Actualmente recogido por el artículo 5.52 de la Ley Orgánica del Tribunal Supremos de Justicia.
15 6 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Luego, siendo que el artículo 235 del Código Civil no encaja en ninguno de
los supuestos mencionados, ya que se trata de un cuerpo normativo de
rango legal –por lo tanto inferior a la Constitución–, la Sala declara su
incompetencia para examinar la solicitud propuesta. Así se establece.
40
Los artículos 1°, 177, 453 se modificaron en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
15 8 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
existan elementos que permitan inferir que los intereses del niño pue-
dan verse afectados por alguna actuación de un particular, inclu-
yendo sus padres y de algún órgano administrativo o jurisdiccional”
(Sentencia 879/2001); por lo tanto, resulta aplicable lo siguiente:
(omissis)
41
El artículo 518 se modificó en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 16 5
En el caso de autos, el auto para mejor proveer dictado por la Sala II del
Tribunal de Protección del Niño y del Adolescente de la Circunscripción
Judicial del Área Metropolitana de Caracas, el 12 de marzo de 2002,
fue decretado dentro del último día del lapso de promoción y evacua
ción de pruebas.
42
El artículo 376 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
El artículo 523 se modificó en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 16 7
Artículo 294.
Sin embargo, debe la Sala advertir que, aun cuando la ley regula la
referida situación, la actuación del juez en tal sentido está condicionada
por el ejercicio de una acción que tenga por objeto la revisión de la
sentencia dictada con anterioridad al evento que la hace alterable; que
originará un proceso en el que debe alegarse y demostrarse tal circuns
tancia y, naturalmente, en el que debe ser llamado o llamada a juicio la
persona que ejerza la guarda, para que tenga oportunidad de conocer la
pretensión de revisión y tenga posibilidad de desvirtuarla.
Por otra parte, debe esta Sala advertir que esta acción de revisión de
pensión alimentaria prevista en el artículo 523 de la citada Ley Orgáni
ca no tiene como único titular al guardador, es decir, que la acción per
tenece igualmente al reclamado, quien puede ejercerla; por tanto, era él
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 16 9
Por los razonamientos expuestos, es forzoso para esta Sala, con la fina
lidad de tutelar a la solicitante en el disfrute de las garantías y derechos
contenidos en la Constitución, denunciados como violados, y hacer efec
tivo el respeto y vigencia de los mismos, declarar la nulidad de la deci
sión impugnada, en lo que respecta a la modificación del monto de la
pensión, dejando a salvo los derechos del reclamado para solicitar la
fijación de una nueva pensión que se adecue a sus nuevos ingresos, de
conformidad con lo dispuesto en el referido artículo 523 de la Ley Orgá
nica para la Protección del Niño y del Adolescente. Así se declara.
17 0 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
43
Los artículos 531, 537 y 641 se mantuvieron igual en la Reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 17 1
AÑO 2004
17 4 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 17 5
Para decidir, la Sala observa, que todo Juez de Menores debe velar no
solamente por cubrir las necesidades básicas de los menores cuyos jui
cios se ventilan ante su sede, sino además debe ser diligente en cuanto
a las actuaciones a seguir, especialmente por tratarse de menores de
edad. Limitarse a dar cobijo a los niños debidamente identificados en
autos y no ocuparse además de su bienestar sicológico, averiguar el
paradero de los padres de dichos menores, y las razones del abandono,
sancionar la conducta de quienes los abandonaron de ser el caso, o
mediante decisión judicial iniciar la colocación familiar o la adopción,
hubiese demostrado que efectivamente la Jueza hizo el seguimiento ade
cuado al proceso y su verdadera preocupación por la solución definitiva
del destino de los niños.
44
El artículo 5 se modificó en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
18 0 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
45
El artículo 515 se modificó en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 18 1
La Sala deja claro que uno de los objetivos de la Ley Orgánica en refe
rencia, ha sido la creación de mecanismos procesales y órganos espe
cializados para la protección, ante las instancias judiciales y
administrativas, de los derechos preceptuados en ella, siempre y cuando
existan elementos que permitan inferir que los intereses del niño puedan
verse afectados por alguna actuación de un particular, incluyendo sus
padres y de algún órgano administrativo o jurisdiccional. Por tanto, con
sidera esta Sala que tampoco sería competente este Tribunal para co
nocer de la presente acción de amparo constitucional, Así se decide.
46
Los artículos 127, 129 y 305 se mantuvieron sin modificación en la Reforma LOPNNA.
18 4 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Visto el criterio anterior, resulta necesario señalar que, si bien las dispo
siciones de la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adoles
cente relativas al interés superior del niño son de orden público, ello no
obsta para declarar terminado el procedimiento ante la falta de compa
recencia del accionante a la audiencia constitucional, con base en la
noción restringida de orden público expuesta supra, aun cuando esta
Sala reconoce que ha admitido solicitudes de amparo, excepcionalmen
te, en casos como el de autos. En este orden de ideas, se observa que la
decisión presuntamente lesiva no trasciende más allá de la esfera jurídi
ca del presunto agraviado y, por tanto, no está afectado el orden públi
co, en el sentido indicado, máxime cuando el tribunal accionado no negó
a la defensa técnica del adolescente acceder, ilimitadamente, al expe
diente contentivo de la causa que originó la decisión impugnada.
47
Esta decisión amplia el criterio establecido mediante fallo N° 3.260 dictado el trece de diciem
bre de 2002 por la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, he incluido en esta
selección jurisprudencial.
48
Los artículos 173, 383 y 386 se mantuvieron sin modificación en la Reforma LOPNNA.
Los artículos 177 y 384 se modificaron en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice)
18 8 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Ahora bien, las consideraciones anteriores la Sala las formula por cuan
to observó que las Salas de Juicio de los Tribunales de Protección del
Niño y del Adolescente y las Cortes Superiores interpretan de manera
indistinta la competencia para el conocimiento de la extensión de la obli
gación alimentaria una vez que se cumple la mayoría de edad. Así, los
tribunales de instancia señalan que los adolescentes que cumplan la
mayoría de edad y no soliciten la autorización para la extensión de la
pensión de alimentos el día antes de que cumpla los dieciocho años de
edad, esta obligación se extingue, por cuanto se trata de un lapso pre
clusivo, de acuerdo con lo que preceptúa el artículo 383 de la Ley.
(...)
Las normas que regulan esta institución familiar son claras y deben inter
pretarse de manera coherente y concatenada, para lo que debe tenerse
como norte la teleología de las mismas y el objeto de la protección espe
cial que persigue la institución familiar de la obligación alimentaria.
49
El artículo 466 se modificó en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 19 1
...omissis...
que siempre estará a cargo del juez constitucional. Ahora bien, observa
esta Sala que el propio constituyente dispuso en el numeral 3 del artícu
lo 49 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, dis
positivo que principalmente encuentra afectado el juzgado remitente,
que el derecho a ser oído sea determinado legalmente siempre y cuando
esa regulación esté orientada por el principio de la racionabilidad, moti
vo por el cual no encuentra esta Sala ningún tipo de violación constitu
cional si el legislador especial estimó conveniente el ejercicio del derecho
a la defensa a través de esa vía.
50
El artículo 466 tuvo modificación en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice) y el artículo 521 fue
numerado ahora con el 466B.
19 8 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
En tal sentido, observa esta Sala que, los juicios de inquisición de pater
nidad tienen sentencias mero declarativas, las cuales obedecen a que la
pretensión de dichas acciones siempre es el reconocimiento de la filia
ción con el hijo, por parte del padre demandado. Dichas acciones no
tienen carácter patrimonial, como si lo tienen las relativas a la obliga
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 19 9
51
El artículo 65 se modificó en la Reforma LOPNNA. (Ver Apéndice).
El artículo 379 no tuvo modificación en la Reforma LOPNNA.
20 0 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Sin embargo, resulta menester señalar el criterio sentado por esta Sala
en sentencia del 11 de febrero de 2004 (Caso: Roberto Devis Sánchez)
en el que se estableció:
(omissis)
(...)
52
El artículo 390 no se modificó en la Reforma LOPNNA.
20 4 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
En segundo lugar, observa esta Sala que el artículo 390 de la Ley Orgá
nica para la Protección del Niño y del Adolescente establece la obliga
ción de entrega del niño que se retenga indebidamente, pero la norma
no preceptúa un procedimiento para que se realice dicha entrega; sim
plemente señala que se conminará judicialmente a que se restituya el
niño a la persona que ejerce la guarda. En el caso bajo examen, la Juez
Unipersonal N° 11 de la Sala de Juicio del Tribunal de Protección del
Niño y del Adolescente de la Circunscripción Judicial del Área Metro
politana de Caracas dictó un auto en el que acordó la aplicación suple
toria del procedimiento que dispone el artículo 607 del Código de
Procedimiento Civil, para la resolución de la restitución de guarda, lo
cual contradice e impide la consecución del fin del artículo 390 de la
Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente, que es la
entrega inmediata del hijo que hubiere retenido indebidamente por el
padre que no ejerce la guarda.
Esta Sala hizo las consideraciones que preceden ya que ve con suma
preocupación que una institución como la restitución de guarda, que es
tan expedita (vid. artículo 390 de la Ley Orgánica para la Protección
del Niño y del Adolescente), en el caso de autos tenga una tramitación
de casi dos años. La materia de protección del niño y del adolescente,
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 20 5
53
Los artículos 51, 201 y 202 no se modificaron en la Reforma LOPNNA.
Los artículos 457 y 511 tuvieron modificación en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
20 6 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
En este contexto cabe traer a colación que la acción es una especie del
género de petición. Así, cuando un niño se encuentra en situación irre
gular generada, precisamente, por una de las personas responsables de
su guarda resultaría inhumano exigirle, con una visión estrecha el cum
plimiento de requisitos y formas que en su caso sólo conducen al resul
tado contrario al espíritu de la legislación constitucional y ordinaria, al
volver nugatorias las disposiciones encaminadas a favorecer y proteger
su integridad física y mental.
Estas limitantes podrían hacer pensar que los menores, al menos los de
doce (12) años, carecen de capacidad procesal en el amparo, ya que el
libre ejercicio de sus derechos se encuentra limitado por las restriccio
nes que pueden imponerles los guardadores, a su circulación y hasta el
acceso a los profesionales del Derecho que lo asistirán. Pero tales limi
tantes, que son fácticas, en teoría no impiden que puedan acudir a soli
citar por sí protección constitucional, máxime –como en el caso de autos–
si actúa asistido por abogados.
tida por falta de capacidad procesal, pues ello evidencia una negación
rotunda del derecho de acceso a la justicia, de allí que lo procedente es
ordenar a dicho Tribunal, se pronuncie nuevamente sobre la admisibili
dad del amparo propuesto, omitiendo pronunciamiento sobre la circuns
tancia antes examinada. Así se declara.
VOTO CONCURRENTE
De modo que, en amparos que versen sobre los intereses de los niños,
niñas y adolescentes –opina la concurrente– que la representación de
éstos debe ser controlada ab initio por el Juez, como rector del proce
so; tal y como lo establece el artículo 457 de la Ley Orgánica para la
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 20 9
54
Los artículos 564, 578, 594 y 654 no se modificaron en la Reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 21 1
Por otra parte, la Sala de Casación Penal del Tribunal Supremo de Jus
ticia, en reiterada jurisprudencia (ver, Caso: Víctor García y otros, del
28 de junio de 2001) ha señalado que:
Por otra parte, observa la Sala que la Juez del Juzgado Primero de Pri
mera Instancia en función de Juicio, Sección de Responsabilidad del
Adolescente, del Circuito Judicial Penal del Estado Miranda, en el acta
de juicio oral y reservado, manifestó expresamente que la víctima no
querellada no podría presentar conclusiones ni ejercer el derecho a ré
plica en abierta contradicción con lo que dispone el artículo 600 de la
Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente.
55
Los artículos 600 y 662 no se modificaron en la LOPNNA.
21 4 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Los hechos expuestos revisten aún mayor gravedad, por cuanto los cón
yuges Alejandro Ramírez Saavedra y Flor Ysaura Velásquez de Ramí
rez tienen dos hijas, menores de edad, cuyos intereses resultan afectados
por la situación descrita. Si bien ello no fue mencionado en el escrito de
amparo, por hecho notorio judicial, esta Sala debe advertir que en la
sentencia N° 239 del 20 de febrero de 2004, fue admitido el amparo
constitucional interpuesto por el hoy accionante, actuando en su propio
nombre y en representación de sus hijas, contra el fallo dictado, el 4 de
ese mismo mes y año, por el Juzgado Superior en lo Civil, Mercantil,
Tránsito, Bancario y de Protección del Niño y del Adolescente de la
Circunscripción Judicial del Estado Aragua, que decidió en segunda ins
tancia el juicio de guarda instaurado por el quejoso contra su cónyuge.
VOTO CONCURRENTE
AÑO 2005
22 0 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 22 1
Ello así, destaca esta Sala que la Ley de Protección del Niño y del
Adolescente señala que “Los derechos y garantías de los niños y
adolescentes reconocidos y consagrados en esta Ley son inheren-
tes a la persona humana, en consecuencia son: a) De orden públi-
co; b) Intransigibles; c) Irrenunciables; d) Interdependientes entre
sí; e) Indivisibles”, por lo que el Estado debe velar por el fiel cumpli
miento de la legislación vigente a fin de que se respeten las garantías
que nuestra Carta Fundamental reconoce a los niños y adolescentes, de
manera que, al resultar competente por la materia el Tribunal de Pro
tección del Niño y del Adolescente, la remisión realizada por el Juzgado
Segundo de Primera Instancia en lo Civil, Mercantil y del Tránsito de la
Circunscripción Judicial del Estado Táchira, se encuentra ajustada a la
legislación especial de menores, por lo que su actuación no resulta vio
latoria de derechos constitucionales.
(…omissis…)
56
Los artículos 425 y 426 no se modificaron en la Reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 22 5
57
Los artículos 1°, 361 y 512 se modificaron en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice)
El artículo 360 no se modificó en la Reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 22 7
58
Los artículos 522 y 523 se modificaron en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 22 9
59
Los artículos 359, 360, 363, 391, 392 y 393 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
Los artículos 5, 358 y 385 se modificaron en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice.)
23 0 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
El que los hijos no habiten con ambos padres, sino con uno de ellos o
bajo su dirección, crea una desigualdad, que si bien no hace cesar los
derechos y deberes de los padres, en cuanto a la guarda (uno de los
componentes de la patria potestad), sin embargo, con relación a los hijos
menores de siete años habidos en el matrimonio cuyo vínculo se rompió
por divorcio o nulidad, así como en los casos de separación de cuerpos,
o porque de hecho los padres tienen residencias separadas, el artículo
360 de la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente
señala: “Los hijos que tengan siete años o menores, deben perma-
necer con la madre, excepto en el caso que ésta no sea titular de la
patria potestad o que, por razones de salud o seguridad, resulta
conveniente que se separen temporal o indefinidamente de ella”.
Ello significa, a juicio de la Sala, que tal disposición del artículo 360 de la
Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente, debe in
terpretarse restrictivamente, ya que conforme al artículo 75 constitu
cional, las relaciones familiares se basan en la igualdad de derechos y
deberes, la solidaridad, el esfuerzo común, la comprensión mutua y el
respeto recíproco entre sus integrantes.
Esta accesibilidad significa que los padres puedan con normalidad, visi
tar a sus hijos y discutir lo relativo a la crianza, formación y educación
de ellos, dirimiéndose judicialmente los desacuerdos que existan.
Siendo este un Derecho del Niño, el Estado como garantía debe preser
var que los menores no pierdan el contacto directo y regular con los
padres, lo que sucedería si el menor es escondido, o llevado fuera del
país con el fin de que pierda su lengua, o se desnacionalice, o rompa el
contacto regular con el o los padres.
Esta decisión debe ser tomada, con base en los artículos 75 y 76 Cons
titucionales que marcan las pautas del interés superior del menor, y
que no sólo otorgan derechos a los menores, sino deberes irrenuncia
bles a los padres.
que incluye contradictorio y pruebas, por lo que hay que citar a la con
traparte del peticionante, ya que entre ambos existe una contención y
una oposición de derechos.
60
Los artículos 564, 569 y 628 no se modificaron en la Reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 24 1
Por otra parte, se evidencia igualmente de las actas del presente proce
so, que a la hoy accionante, una vez que se ordenó la continuación de la
audiencia preliminar y expuesta oralmente la acusación por el Fiscal del
Ministerio Público, no se le concedió de nuevo el derecho a ser oída a
fin de presentar los alegatos a su favor.
61
El artículo 582 no se modificó en la Reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 24 3
Ahora bien, esta Sala precisa que la decisión objetada, dictada por el
Tribunal de Municipio en funciones de Responsabilidad Penal del Ado
lescente, que ordenó el traslado de los mismos a un centro para que se
les aplique un tratamiento de rehabilitación, se corresponde con la me
dida cautelar establecida en la letra b del artículo 582 de la Ley Orgáni
ca para la Protección del Niño y del Adolescente, pero que, por sus
efectos, tiene similitud con la prisión preventiva, toda vez que se trata
del ingreso de los adolescente en un establecimiento, sin que pueda dis
frutar plenamente de su libertad.
62
Los artículos 581 y 582 no se modificaron en la Reforma LOPNNA.
24 4 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Ahora bien, en el caso sub examine se alegó que existía una imposibi
lidad material de solicitar otra medida cautelar, en virtud de que el pro
ceso penal incoado contra el adolescente se encontraba paralizado, por
haberse inhibido el juez que lo conocía y no existir un juez suplente.
Sin embargo, observa esta Sala que aun cuando en efecto el imputado
permanecía privado de su libertad, habiendo trascurrido más del tiempo
permitido por la Ley Orgánica de Protección del Niño y del Adolescen
te, la Corte Superior no puede acordar la libertad del imputado por la vía
del amparo, pues ello supondría, por parte del Juez Constitucional, la
usurpación de funciones reservadas por la ley al juez de mérito, con lo
que se desvía el propósito restitutorio del amparo; de modo que, consi
dera esta Sala, que el Tribunal a quo al otorgar, de igual manera, una
medida menos gravosa, se extralimitó en sus funciones y/o atribucio
nes; pues, lo procedente era ordenar la convocatoria inmediata de un
nuevo juez de juicio que conociera de la causa objeto de inhibición.
VOTO CONCURRENTE
(...)
Sobre esta doble visión del derecho a la libertad, según la cual éste se
encuentra referido tanto a la esfera particular del ciudadano como a la
colectividad, Alexi enseña:
Así, considera quien aquí disiente que la Sala debe ser consistente con
la protección constitucional de los derechos fundamentales de las per
sonas, así como con su restablecimiento en casos de vulneración y, más
aún, cuando se trata de un adolescente, porque en estos casos, además,
está involucrado el interés superior de éste. En consecuencia, el dere
cho a la libertad es considerado de orden público, tal como se señaló
supra, aun cuando afecta la esfera particular de los derechos subjeti
vos del demandante, por cuanto su falta de tutela causa un gravamen
irreparable al agraviado, razón por la cual el órgano jurisdiccional que
conozca de dicha violación está obligado a proveer, aun de oficio, la
inmediata restitución de la situación jurídica infringida.
63
El artículo 579 no se modificó en la Reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 25 1
indican cuáles son las decisiones que debe dictar el Juez una vez que se
culmine la audiencia preliminar, de la siguiente manera:
Artículo 579 de la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Ado
lescente:
64
Los artículos 389 y 454 fueron modificados con la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
El artículo 390 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
25 4 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
(…omissis…)
65
El artículo 573 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
25 6 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Situación ésta que, aun cuando no podía ser comprobada hasta tanto
estuvieran agregados a los autos los informes que solicitó el juez, así
como la información relativa al proceso por violencia familiar que igual
mente solicitó, exigía, en razón del interés superior del niño, mayor pru
dencia para resolver la solicitud en cuestión, por lo que debía esperar, al
menos, la información de la presunta comisión del delito.
26 0 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 26 1
AÑO 2006
26 2 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 26 3
66
El artículo 389 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
26 6 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
67
Los artículos 363 y 393 se mantuvieron igual en la Reforma LOPNNA.
El artículo 511 se modificó en la Reforma LOPNNA. (Ver Apéndice).
Los artículos 347, 348 y 349 se mantuvieron igual en la Reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 26 7
Deber que sólo se puede lograr de manera eficaz cuando existe acuerdo
entre ambos progenitores. Sin embargo, puede ocurrir que ello no siem
pre sea así, motivo por el cual la ley especial que desarrolla los postulados
constitucionales en esta materia procura, en interés del niño, lograr una
solución justa a situaciones que, con el transcurso del tiempo y los avan
ces y cambios de la sociedad, se presentan con más continuidad.
Una vez citado el obligado, el juez podrá acordar las medidas que juzgue
más convenientes, a su vez podrá de oficio o a solicitud de parte orde
nar un informe social, económico y psicológico, con el fin de conocer la
situación en la que se encuentra el menor respecto del grupo familiar
con el cual reside.
Al respecto, esta Sala aprecia que, de los hechos narrados por la parte
accionante, así como del análisis de las actas procesales, se evidencia
la existencia de una situación que amerita la utilización por parte de
esta Sala Constitucional de sus amplios poderes cautelares, como lo es
que la aplicación del fallo accionado significaría el traslado del niño de
la ciudad de Caracas al estado Nueva Esparta, la cual traería como
consecuencia un retardo o perjuicio en el período escolar actual, ya que
según constancia expedida por la Unidad Educativa Colegio Santa Rosa
de Lima, el mismo cursa cuarto grado de la segunda etapa de educación
básica, en dicha institución.
En primer lugar, que los tres derechos invocados están íntimamente rela
cionados, por cuanto son derechos inherentes a la persona humana, son
“derechos de la personalidad”; es decir, que “…posee toda persona
por su sola condición de tal. Estos derechos no dependen de ningu-
na conducta o adquisición especial del sujeto, sino que nacen con
éste porque implican la protección de la esfera moral y corporal del
ser” (Ensayos sobre Capacidad y Otros Temas de Derecho Civil.
Domínguez Guillén, María Candelaria. Tribunal Supremo de Justicia. Co
lección Nuevos Autores N° 1, CaracasVenezuela 2006, p. 506).
(…omissis…)
B) REPRODUCCIÓN ASISTIDA
En España, por ejemplo, ha sido aprobada este año una nueva Ley de
Reproducción Asistida (LEY 14/2006, de 26 de mayo, sobre técnicas de
reproducción humana asistida), la cual permite la selección genética de
embriones con fines terapéuticos para terceras personas, pero al mismo
tiempo prohíbe la clonación de seres humanos con fines reproductivos
(ver, artículo 1 numeral 3). Sobre el tema de la clonación, reseña el
diario El Universal de esta ciudad, en publicación del 7 de junio de
2006, que: “…Un equipo de investigadores de la Universidad de
Harvard anunció ayer que comenzará la clonación de embriones
humanos para obtener células madre, y que usarán fondos privados
para eludir las restricciones del Gobierno Federal”.
Este último supuesto trae muchas interrogantes, pues podría darse el caso
de intereses contrapuestos del donante en cuanto a su identidad, la cual
está en anonimato en los Bancos de Donación, con el derecho constitu
cional que tiene todo niño de conocer a sus padres. Ello, en la Ley 35/
1988, del 2211 sobre Técnicas de Reproducción Asistida, de España, se
resolvió en el artículo 5.5 previendo la posibilidad de obtener una informa
ción general sobre el donante que no incluya su identificación, para no
impedir la investigación del mismo; sin embargo, no se le conceden efec
tos legales; y sólo autoriza el desanonimato sobre la persona del donante
(artículo 8.3) cuando exista peligro comprobado para la vida del hijo o sea
prueba en un proceso penal, pero la misma no implicará en ningún caso,
publicidad de la identidad del donante. Estas disposiciones se repiten en la
nueva Ley española 14/2006, de 26 de mayo, sobre técnicas de reproduc
ción humana asistida (ver, artículos 5.5 y 8.3).
Sin embargo, a nivel del Código Civil venezolano, surge una dificultad
legal en este caso, para establecer la filiación paterna del hijo que pudiera
nacer, que no fue concebido durante el matrimonio (artículo 201 del Códi
go Civil), sino cuando el vínculo se había roto, aunque la esperma fue
recolectada durante el matrimonio. Se trata de una situación no prevista
en el Código Civil, pero que a juicio de la Sala, no puede convertirse en
una traba para que el producto de la inseminación post mortem, no goce
de sus derechos de conocer a sus padres, y llevar sus apellidos.
Por otra parte, llama también la atención de esta Sala el tema de las
madres de alquiler o gestantes subrogadas. Estas madres “…llevan a
cabo la gestación de un nasciturus y su alumbramiento, ante la
imposibilidad física de realizarlo por parte de una determinada mujer
que desea ser madre, de modo que una vez nacido tal hijo sea con-
siderado hijo de la mujer que desea tenerlo y que no puede tener-
lo. Así podría darse el caso de un niño con tres madres, una que
aporta el material genético, otra que lo gesta y lo da a luz y otra
que tiene la patria potestad. En este aspecto se podría producir un
dilema ético e incluso legal si llegado el caso una de las dos prime-
ras quisiera considerar el hijo como suyo pero en España la mater-
nidad viene determinada legalmente por el parto” (Laura Rosell
Roldán, Estudio Ético-Legal sobre la Reproducción Asistida, trabajo
publicado en la pág web www. uclm.es/ab/enfermeria).
(...omissis…)
Tomando en cuenta los hechos alegados por la parte actora como lesi
vos de los derechos constitucionales indicados supra, así como la tras
cendencia especial de las circunstancias que rodean a esta acción de
amparo constitucional, puesto que se originó con ocasión a la negativa
de una actividad médicocientífica que también la Sala ha estudiado, y
teniendo en consideración cada una de las pruebas cursantes en las
actas que conforman el presente expediente, la Sala avocada al conoci
miento de la presente acción de amparo constitucional, la cual fue de
clarada en una primera instancia sin lugar, decide –de manera expresa,
positiva y precisa– dicha acción con fundamento en las siguientes razo
nes de hecho y de derecho:
Está demostrada en autos que dicha muestra seminal fue tomada por la
parte accionada, y que aun la preserva –según informó a esta Sala en
fecha reciente bajo el proceso de “criopreservación” o “crioconserva
ción” (técnica de conservación donde se utiliza nitrógeno líquido a 196
grados centígrados tanto para el semen como para embriones).
Ello así, por ser dicho ente, especializado en la materia y ajeno a esta
controversia, a los fines de preservar la objetividad en la realización del
estudio, y a expensas de la parte actora, y no del ente accionado como
ésta lo pidió, pues de la voluntad e interés de la actora depende que el
mismo se efectúe.
VOTO SALVADO
(…)
que la quejosa de autos volviera dentro de, por ejemplo, dos años, a
plantear su pretensión de tener más hijos.
3.3 Por otra parte, preocupa mucho la alusión, como argumento de au
toridad, a información que ofrecen sitios web de cuya credibilidad nada
se indica; recuérdese que en el cyberespacio tiene cabida, sin regula
ción ni límite alguno, todo lo que cualquiera desee agregar. Es por
demás evidente que no tiene el mismo valor la información que proven
ga de la Universidad Central de Venezuela o Harvard o la Sorbona o de
la Clínica Mayo, p.e., que la de un blog cuyo autor podría ser, literal
mente, se insiste, cualquiera.
Sin embargo, véase la cita que se hizo de un caso francés (la informa
ción se obtuvo, según la mayoría, de una página web cuya dirección
es www.12.brinkster.com, a la que quien salva su voto no logró acce
der); el Tribunal de Gran Instancia de Créteil, en Francia, en 1984,
ordenó la entrega, a una viuda, del semen de su marido que había sido
criopreservado. Así, independientemente de que se desconoce la cre
30 4 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
El artículo 809 del Código Civil determina que son incapaces de suceder
“los que en el momento de la apertura de la sucesión no estén to-
davía concebidos”. El salvante disiente expresamente de la afirma
ción de la mayoría según la cual el artículo 809 del Código Civil “debe
ceder” cuando la persona haya autorizado en vida la reproducción asis
tida post mortem.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 30 7
En primer lugar, para que una norma legal “ceda” debe ser desaplicada
o interpretada para el caso concreto por las vías legales y constitucio
nales para ello (control difuso, art. 4 del Código Civil), no basta que ello,
simplemente, se afirme. En segundo lugar, no es posible concordar con
que el derecho constitucional a conocer la identidad de los padres de
una persona (Artículo 56. Toda persona tiene derecho a un nombre pro
pio, al apellido del padre y al de la madre, y a conocer la identidad de los
mismos. El Estado garantizará el derecho a investigar la maternidad y la
paternidad. /Toda persona tienen derecho a ser inscrita gratuitamente
en el registro civil después de su nacimiento y a obtener documentos
públicos que comprueben su identidad biológica, de conformidad con la
ley. Éstos no contendrán mención alguna que califique la filiación) in
cluya el de sucederlos, lo cual, en todo caso, no se razona en la senten
cia; al respecto, resulta ininteligible la frase con la que culmina, después
de la coma, el fragmento de la decisión que se transcribió recién.
Fecha ut retro.
30 8 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
68
Los artículos 177, 350 y 453 se modificaron en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 30 9
Ahora bien, debe esta Sala precisar que de acuerdo con las aludidas
disposiciones jurídicas la patria potestad corresponde al padre y a la
madre, siempre y cuando la filiación se establezca simultáneamente
respecto de ambos, en cuyo caso corresponde conjuntamente. Sin em
bargo, la regla aplicable para los hijos nacidos fuera del matrimonio,
cuya filiación no se establece conjuntamente, es distinta a la general,
antes anotada.
Ahora bien, observa esta Sala que el presente caso surge como conse
cuencia de un conflicto entre los padres derivado del ejercicio de la
guarda del hijo de ambos. En este sentido, debe destacarse que en jui
cios como el de autos, en los que se discute acerca de instituciones
familiares, como el régimen de visitas, la obligación alimentaria, patria
potestad o cuestiones relativas a la guarda, etcétera, existe una confu
sión en la titularidad de los derechos que se discuten, es decir, la madre
o el padre exigen ante el juez de protección del niño y del adolescente
su derecho, por ejemplo, a que se establezca un régimen de visitas para
sí, sino también en beneficio del propio niño o adolescente –a quien
además representa–, esto es, en defensa de los derechos e intereses de
éstos, a los fines de mantener una saludable y adecuada relación pater
nofilial. Asimismo, cuando el otro progenitor se resiste a alguna preten
sión planteada en el contexto de un juicio relativo a una de esas
instituciones familiares, no necesaria o únicamente lo hace en defensa
de sus derechos sino también en interés del niño o adolescente de que
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 31 1
se trate, ello por cuanto dada la incapacidad jurídica de los niños y ado
lescentes su representación recae en sus padres, de tal manera que
coinciden en una misma persona los derechos de ambos. De la misma
forma, cuando uno de los progenitores ante un conflicto con el otro,
otorga un poder a un abogado no es fácil excluir la explicada coinciden
cia, es decir, escindir los derechos o intereses que se pretenden hacer
valer, si son propios o corresponden a su hijo, a quien en definitiva re
presenta, o son derechos e intereses de ambos.
En todo caso, la Sala no desconoce la carga que pesa sobre los padres
de mostrar a los Notarios o funcionarios ante quienes se otorgan pode
31 2 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
VOTO SALVADO
En criterio de la Sala:
Fecha ut retro.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 31 5
Dicho lo anterior, esta Sala observa que la acción de amparo fue in
terpuesta por el ciudadano Jesús Enrique Jaspe Laya, actuando en su
condición de tutor interino de la ciudadana Berta Margarita Laya de
Jaspe, por cuanto se evidencia de las actas del expediente que a la
mencionada ciudadana le fue decretada interdicción provisional, por
el Juzgado Primero de Primera Instancia en lo Civil, Mercantil, Trán
sito y Bancario de la Circunscripción Judicial del estado Apure, el 22
de diciembre de 2004.
VOTO CONCURRENTE
VOTO SALVADO
Fecha ut retro.
69
El artículo 583 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
32 0 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
VOTO CONCURRENTE
rebaja de pena que establece el artículo 376 del Código Orgánico Pro
cesal Penal, cuando el reo se sentiría urgido a la admisión, en dicha
oportunidad procesal, de unos cargos que debió admitir mucho antes, en
beneficio de la economía y celeridad procesales. Ahora bien, se puede
afirmar que, también en el procedimiento abreviado por flagrancia, el
procesado podría preferir esperar hasta el Juicio Oral y, bajo la persua
sión de que las mayores probabilidades son de una sentencia condena
toria, opte por esperar hasta la oportunidad inmediata anterior al debate
público, para su manifestación de voluntad de admisión de los hechos y
su consiguiente solicitud de inmediata imposición de la pena, lo cual
sería contrario a los fines de economía procesal que, entre otros, se
persigue a través de dicho procedimiento especial. Como quiera que en
este último no existe la fase intermedia, el legislador permitió el proce
dimiento por admisión de los hechos hasta ‘antes del debate’, lo cual
significa que, desde la audiencia en la cual fueron calificados como fla
grantes los hechos punibles en cuya comisión se atribuyó participación
al imputado, éste contaría con hasta quince días (tomando en cuenta el
lapso legal máximo para la convocatoria al Juicio Oral) para que hiciera
la predicha manifestación de voluntad. Si se toma en consideración que
existe la posibilidad, legalmente permitida, de diferimientos para la cele
bración del antes señalado acto procesal –estadísticamente hablando,
se puede afirmar que la regla es la de diferimientos sucesivos–, ello
significa que, en el caso de flagrancia, el acusado mantendrá plenamen
te preservada su potestad para la admisión de los hechos, cualquiera
sea la oportunidad en la cual se celebre, en definitiva, el Juicio Oral,
hasta la oportunidad inmediatamente anterior a la realización de dicho
acto procesal. En cambio, si la persona es juzgada a través del procedi
miento ordinario o de alguno especial que no sea el de flagrancia, tal
potestad se extinguirá en la Audiencia Preliminar, cualquiera sea la ex
tensión de la demora para que se dé, en efecto, el Juicio Oral. Los
anteriores planteamientos conducen a dos conclusiones:
4.2.1. Así, se advierte que la admisión de los hechos debe ser una mani
festación de voluntad cuya expresión sólo debe ser dable luego de la
admisión de la acusación, tal como acertadamente lo reguló el legisla
dor, en el caso del procedimiento ordinario; ello, porque es claro que el
imputado tiene que saber, con certeza, cuáles son los hechos y cuál la
calificación jurídica de los mismos, por los cuales habrá de ser juzgado.
Ahora bien, la acertada solución legislativa que se acaba de referir no
fue extendida al procedimiento abreviado por flagrancia, porque, en el
mismo, la admisión de los hechos es legalmente oportuna una vez pre
sentada la acusación y hasta antes del debate, en el cual, necesaria
mente, habrá de incluir la discusión que se genere entre las partes a
propósito de la admisión de la acusación, lo cual supone que la referida
manifestación de voluntad puede ser presentada aun antes de dicha
admisión. Este tratamiento legal es objetable no sólo porque permite la
actualización de la referida forma de autocomposición procesal en una
etapa cuando el acusado aún no tiene certeza de los hechos por los
cuales será juzgado, sino por la evidente e injusta desigualdad que, en
términos temporales, se establece en perjuicio del encausado a través
del procedimiento ordinario. Las anteriores consideraciones conducen
a la conclusión de que, en salvaguarda de derechos fundamentales como
los atinentes a la igualdad, la tutela judicial eficaz, el debido proceso y la
particular manifestación de este último: la defensa, que establecen los
artículos 21, 26, 49 de la Constitución, se debe, en primer lugar, enten
der que es conforme a derecho la extensión, en el procedimiento ordi
nario, hasta antes del debate público, de la potestad para la manifestación,
por parte del acusado, de su admisión de los hechos punibles que le
hayan sido imputados; y, en segundo término, que, dentro del procedi
miento abreviado, tal forma de autocomposición procesal sólo será ad
misible posteriormente a la admisión de la acusación, pronunciamiento
previo que, de conformidad con el artículo 373 del Código Orgánico
Procesal Penal, deberá producirse luego del correspondiente debate,
dentro de la audiencia que corresponde al Juicio Oral.
Fecha ut retro.
32 8 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Tal obligación forma parte del deber de los padres de proveer a sus
hijos menores de edad de alimentos, vivienda, medicinas, educación,
etcétera. En este sentido, el artículo 75 establece:
70
Los artículos 30, 76, 336 y 365 se mantuvieron igual en la Reforma LOPNNA.
33 0 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Así las cosas, esta Sala encuentra que la niña, hija menor de edad de los
solicitantes, al no estar vinculada de algún modo con el proceso judicial,
y en consecuencia con la sentencia cuya revisión se solicita, carece de
legitimación ad causam para incoar la presente solicitud, no así sus
padres quienes señalaron actuar también en nombre propio. En conse
cuencia, se desestima la pretensión planteada con respecto a la niña,
por carecer de legitimación. Así se decide.
71
Los artículos 450 y 461 se modificaron en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 33 3
(…omissis…)
En tal sentido, cabe preguntarse ¿cuáles son los derechos que deben
garantizarse en una defensoría? Ellos son: a) opinar y a ser oído; b)
derecho a participar; c) derecho a reunión; d) derecho a petición; e)
derecho a defender sus derechos; y f) derecho a la defensa y al debido
proceso. Claro está que deberá matizarse razonablemente el alcance de
la participación del niño en los procedimientos, con el fin de lograr la
protección efectiva de su interés superior, objetivo último de la normati
va del derecho Internacional de los Derechos Humanos (Oswaldo Al
fredo Gozaíni El debido proceso, RubinzalCulzoni, Editores, p. 173).
Aprecia esta Sala, que existe una sentencia a favor de los accionantes
dictada en el curso del proceso que por prestaciones sociales intentó
la ciudadana Beila Columba Pereira, actuando en representación de
su hijo y del ciudadano Obdulio Sánchez (padre del niño), que hasta el
momento no ha podido ser ejecutada a pesar de encontrarse definiti
vamente firme, de allí que esta Sala Constitucional estime necesario
darle el trámite constitucional a la presente acción de amparo, a los
fines que en el curso de la audiencia pública constitucional se aclaren
las dudas sobre la existencia o no de algún tipo de injuria constitucio
nal. Así se decide.
VOTO CONCURRENTE
Así, tal como lo señaló la Fiscal Segunda del Ministerio Público ante las
Salas Constitucional y de Casación, la Corte agraviante debió analizar
todos los argumentos que esgrimió el peticionario del amparo, ya sea
para admitirlos o desecharlos, “declararlos impertinentes, innecesa-
rios, inútiles o ilegales”, en fin debió pronunciarse sobre los mismos,
de manera que el acto jurisdiccional no se vicie de inmotivación y resul
te nula, de conformidad con lo que preceptúa el artículo 244 del Código
de Procedimiento Civil.
Por otra parte, observa este disidente que, en la transcripción del acto
decisorio objeto de impugnación se señaló que el niño fue oído por esa
Corte Superior y, con base en su manifestación, la Corte decidió revo
carle la guarda provisional a su padre y otorgársela a la madre. No
obstante, la parte actora señaló, en la audiencia correspondiente que se
produjo una “reunión informal” con la asistencia del padre, la madre y
el niño, con la Juez Presidenta de la Corte Superior Primera del Tribunal
de Protección del Niño y del Adolescente de la Circunscripción Judicial
del Área Metropolitana de Caracas y Nacional de Adopción Internacio
nal, sin la presencia de las otras jueces integrantes de ese cuerpo cole
giado. En consecuencia, lo que se manifestó en esa reunión no debió
utilizarse como fundamento de la decisión, por cuanto no estaban pre
sentes todos los integrantes de ese órgano jurisdiccional colegiado.
Fecha ut retro.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 34 3
AÑO 2007
34 4 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 34 5
72
Los artículos 573 y 583 se mantuvieron en la Reforma LOPNNA.
34 6 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
VOTO SALVADO
Así, se advierte que la admisión de los hechos debe ser una manifesta
ción de voluntad cuya expresión sólo debe ser dable luego de la admi
sión de la acusación, tal como, acertadamente, lo reguló el legislador, en
el caso del procedimiento ordinario; ello, porque es claro que el imputa
do tiene que saber, con certeza, cuáles son los hechos y cuál la califica
ción jurídica de los mismos, por los cuales habrá de ser juzgado. Ahora
bien, la acertada solución legislativa que se acaba de referir no fue ex
tendida al procedimiento abreviado por flagrancia, porque, en el mismo,
la admisión de los hechos es legalmente oportuna una vez presentada la
acusación y hasta antes del debate, en el cual, necesariamente, habrá
de incluir la discusión que se genere entre las partes a propósito de la
admisión de la acusación, lo cual supone que la referida manifestación
de voluntad puede ser presentada aun antes de dicha admisión. Este
tratamiento legal es objetable no sólo porque permite la actualización de
la referida forma de autocomposición procesal en una etapa cuando el
acusado aún no tiene certeza de los hechos por los cuales será juzgado,
sino por la evidente e injusta desigualdad que, en términos temporales,
se establece en perjuicio del encausado a través del procedimiento ordi
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 35 1
Fecha ut retro.
73
El artículo 177 se modificó en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
35 4 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Por eso la intención del Legislador no pudo ser la de excluir del ámbito
de competencia de los Tribunales de Protección del Niño y del Ado
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 35 5
Cabe destacar, que entre los derechos que protege dicho siste
ma, se encuentra el de petición de justicia, según el cual todos
los niños, niñas y adolescentes tienen derecho de acudir ante
un tribunal competente, independiente e imparcial, para la de
fensa de sus derechos e intereses y a que éste decida sobre su
petición dentro de los lapsos legales; y lógicamente es de su
poner que entre los órganos judiciales a través de los cuales
opera el sistema de protección integral de los derechos y ga
rantías de los niños, niñas y adolescentes que se encuentren en
el territorio nacional, están los Tribunales de Protección del
Niño y del Adolescente.
74
Los artículos 270 y 380 se mantuvieron igual en la Reforma LOPNNA.
35 8 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
superior del niño o del adolescente. En este sentido, esta Sala, en caso
similar al presente, y siguiendo doctrina de la misma Sala, determinó:
75
El artículo 466 se modificó en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
36 0 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Cabe destacar que las medidas cautelares pueden ser revocadas o sus
pendidas cuando cambian las circunstancias que las originaron o se ha
perdido su propósito; de forma tal, que este hecho no encuadra en la
causal de inadmisibilidad prevista en el cardinal 3 del artículo 6 de la
Ley Orgánica de Amparo, como pretendió el a quo.
Por otro lado, estima la Sala que el medio idóneo para impugnar la deci
sión que acordó la medida cautelar de prohibición de salida del país del
niño referido en el presente caso, es la apelación y no la oposición como
lo señaló el a quo en la sentencia apelada, de conformidad con el ar
tículo 466 de la Ley Orgánica de Protección del Niño y del Adolescente
en su parte in fine, que prevé “la resolución que decreta o deniega
una medida cautelar será apelable en un solo efecto”, por lo que no
es correcto el criterio del a quo establecido en la sentencia apelada.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 36 1
76
Los artículos 119 y 454 se modificaron en la Reforma LOPNNA. (Ver Apéndice).
Los artículos 272, 360 y 390 se mantuvieron igual en la Reforma LOPNNA.
36 2 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
(…omissis…)
(…omissis…)
Ello ha dado lugar a que esta misma Sala en un caso en que una Sala de
Juicio del Tribunal de Protección del Niño y del Adolescente desconoció
el trámite para el restablecimiento de una guarda, y acumuló una solici
tud de guarda a una que tenía por objeto el restablecerla, señalara con
preocupación lo siguiente:
En segundo lugar, observa esta Sala que el artículo 390 de la Ley Orgá
nica para la Protección del Niño y del Adolescente establece la obliga
ción de entrega del niño que se retenga indebidamente, pero la norma
no preceptúa un procedimiento para que se realice dicha entrega; sim
plemente señala que se conminará judicialmente a que se restituya el
niño a la persona que ejerce la guarda. En el caso bajo examen, la Juez
Unipersonal N° 11 de la Sala de Juicio del Tribunal de Protección del
Niño y del Adolescente de la Circunscripción Judicial del Área Metro
politana de Caracas dictó un auto en el que acordó la aplicación suple
toria del procedimiento que dispone el artículo 607 del Código de
Procedimiento Civil, para la resolución de la restitución de guarda, lo
cual contradice e impide la consecución del fin del artículo 390 de la
Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente, que es la
entrega inmediata del hijo que hubiere retenido indebidamente por el
padre que no ejerce la guarda.
Esta Sala hizo las consideraciones que preceden, ya que ve con suma
preocupación que una institución como la restitución de guarda, que es
tan expedita (Vid. artículo 390 de la Ley Orgánica para la Protección
del Niño y del Adolescente), en el caso de autos tenga una tramitación
de casi dos años. La materia de protección del niño y del adolescente es
intensamente delicada, porque en ella se debaten instituciones familia
res, tales como en el caso de autos –la guarda–, en la cual los jueces
deben tener un amplio conocimiento sobre el significado, contenido y
procedimientos aplicables. En el futuro se deben evitar los graves erro
res en los que se incurrió en esta causa para que no ocurran dilaciones
que entorpezcan la estabilidad y contraríen el interés superior de los
niños que están involucrados en estos juicios”. (Sentencia número 2.609
del 17 de noviembre de 2004, caso: Maoly García).
Así las cosas, estima esta Sala conveniente determinar con precisión
cuál es la actividad judicial que debe desplegarse, cuando se incoa una
solicitud de restitución de guarda ante el juez competente. En este sen
tido, esta Sala considera adecuada la doctrina elaborada a este respecto
por la Corte Superior del Tribunal de Protección del Niño y del Adoles
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 36 9
En tal sentido, es importante dejar sentado que los supuestos para que
proceda la Restitución de Guarda, son los siguientes:
Nótese que la Corte Superior sostiene que “de ser necesario” se abre la
articulación, es decir, sólo si de los argumentos y elementos particulares
del caso se desprende que es imperioso contar con un lapso de prueba
para demostrar algún hecho, situación o circunstancia. Pero no necesa
riamente hay que hacerlo, de manera que, debe considerarse como ex
cepcional el que se ordene la apertura de aquélla, lo que, en todo caso,
amerita –estima esta Sala– un auto motivado.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 37 1
(…omissis…)
Para tal fin, considera esta Sala que, conforme a los principios constitu
cionales del interés superior del niño y de su protección integral, así
como de acuerdo con los principios procesales de competencia y de
independencia, lo conveniente es que los mismos Tribunales de Protec
ción del Niño y del Adolescente, practiquen este tipo de decisiones, que
ordenan una restitución, o cualesquiera otra de la misma índole, con el
auxilio, preferiblemente con la ayuda de los auxiliares de justicia espe
cializados que considere pertinente o de los órganos del sistema de pro
37 6 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Estima la Sala que los jueces y demás órganos del sistema de protec
ción del niño y del adolescente se encuentran formados en la doctrina
de la protección integral del niño y o adolescente y, por tanto, son los
funcionarios más aptos e idóneos para el cumplimiento de la restitución
de la guarda, producto de un fallo que la ordene. Y dentro de éstos,
considera la Sala que específicamente y en principio, debe ser el mismo
juez de la causa, esto es, la Sala de Juicio que ha dado la orden de
restitución, la que practique dicha ejecución, siempre que las circuns
tancias territoriales lo permitan.
artículo 119 de la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Ado
lescente, e incluso en presencia del otro progenitor y con el auxilio de la
fuerza pública, de ser necesario. Asimismo, quedan autorizadas, con
forme al mismo Código, para exhortar a otro juzgado de la misma cate
goría la práctica de la medida si hubiere lugar a ello. Así se establece.
Ahora bien, examinados los alegatos de autos y revisadas las actas pro
cesales del expediente, considera esta Sala conforme a derecho la deci
sión del a quo que desestimó la pretensión de amparo planteada por la
apoderada del accionante, sobre la base de que la actuación impugnada
fue “proferida por un Juzgado con competencia en la materia que
le es afín, y haciendo uso de sus facultades jurisdiccionales, con-
secuencia de lo cual actuó en ejercicio legítimo de sus atribucio-
nes legalmente conferidas”, por lo que consideró que la Jueza denunciada
no incurrió en abuso de poder ni usurpación de funciones.
Quiere además dejar sentado esta Sala que el ciudadano Douglas Ra
fael Rodríguez Marjal tenía el deber ineludible de cumplir con la senten
cia dictada por la Sala de Juicio N° 1 del Tribunal de Protección del
Niño y del Adolescente de la Circunscripción Judicial del estado Anzoá
tegui, que ordenó la restitución de las niñas a su progenitora y que su
actitud lo que persigue es desconocer una sentencia judicial que debía
ser ejecutada inmediatamente y con la cual es manifiesto su desacuer
do. Advierte la Sala, una vez más, y con ello coincide con el fallo apela
do que la acción de amparo no es un medio de ataque que los justiciables
puedan usar para evadirse de los efectos de un fallo.
De manera que por cuanto las actuaciones del Tribunal recurrido estu
vieron enmarcadas dentro de un procedimiento razonable, para lo cual
la ley no establece de modo claro un método, siendo que al juez le está
vedado absolver la instancia, considera esta Sala procedente su actua
ción y en modo alguno estima que con el mismo se haya violentado el
derecho constitucional a la defensa y al debido proceso de la parte ac
cionante. Así se decide.
Por último, considera esta Sala temeraria la presente acción, pues aun
cuando las garantías procesales y el debido proceso deben gobernar en
todo estado y grado del proceso, el presunto agraviado tenía la obliga
ción ineludible de cumplir con la decisión judicial que le ordenaba la
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 37 9
77
Los artículos 573 y 583 se modificaron en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
38 0 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Por otra parte, estima esta Sala preciso acotar que la constitucionalidad
del artículo 583 de la Ley Orgánica de Protección del Niño y del Ado
lescente, ha sido –en diversas oportunidades– objeto de revisión por
parte de esta Sala. Así, entre otras, en sentencia número 1799 del 20 de
octubre de 2005, esta Sala señaló al respecto, lo siguiente:
admitida ésta, bien sea de forma parcial o total por parte del
Juez de Control, instruirá al imputado respecto al procedimien
to por admisión de los hechos, informándole que dicha admi
sión debe efectuarse de modo simple y claro, sin condición
alguna que desvirtúe la aplicación del referido procedimiento
especial, a fin de evitar confusiones.
Tal omisión, no puede ser entendida como una especie de control difuso
“tácito”, pues no puede reputarse como sobreentendida la inconstitu
cionalidad de una norma legal que –en principio– goza de una presun
ción de legitimidad. Por el contrario, el ejercicio judicial del mecanismo
de protección de la Constitución en comentario, debe contener un aná
lisis expreso que justifique la desaplicación para el caso concreto de
una norma legal que pretende ser cuestionada.
Por último, no puede esta Sala pasar por alto la actuación de los distin
tos Jueces de Juicio del Sistema de Responsabilidad Penal de Adoles
centes del Circuito Judicial Penal del estado Lara, quienes, no obstante,
la nulidad decretada por esta Sala de las sentencias en las que –en su
oportunidad– desaplicaron por control de la constitucionalidad el tantas
veces señalado artículo 583 de la Ley Orgánica para la Protección del
Niño y del Adolescente, han continuado desaplicando dicha norma.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 39 1
Actuaciones como las descritas, son las que desdicen del sistema de
justicia y atentan contra el Estado social de Derecho y de Justicia pro
clamado en el artículo 2 de la Constitución. En un Estado social de
Derecho y de Justicia no puede relajarse el orden jerárquico jurisdiccio
nal, el que un tribunal de inferior jerarquía no acate la doctrina de esta
Sala –por demás vinculante por tratarse de la constitucionalidad de nor
mas jurídicas– aun cuando lo sea con base en la autonomía de la cual
goza para juzgar, quebranta el ejercicio de la función jurisdiccional,
máxime cuando dicho incumplimiento constituye un desacato a dicha
doctrina vinculante. En razón de lo cual, esta Sala ordena remitir copia
certificada del presente fallo a la Inspectoría General de Tribunales, a
fin de que dé inicio a la correspondiente causa disciplinaria contra los
Jueces de Juicio del Sistema de Responsabilidad Penal de Adolescentes
del Circuito Judicial Penal del estado Lara, que dictaron las sentencias
precedentemente referidas, y así se declara.
VOTO SALVADO
Fecha ut retro.
78
El artículo 177 se modificó en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 39 3
79
El artículo 583 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 39 5
Es por ello, que esta Sala Constitucional debe anular la decisión dictada
el 23 de enero de 2007, por el referido Tribunal de Juicio Sección de
Adolescentes del Circuito Judicial Penal del estado Lara, extensión
Barquisimeto, en la que por desaplicación del artículo 583 de la Ley
Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente sancionó –por
admisión de los hechos– al imputado, hoy adulto, Jorge Eliécer Pérez
Puerta; en consecuencia, se ordena al prenombrado Tribunal la conti
nuación del referido juicio, con sujeción a lo dispuesto en el presente
fallo, lo cual no implica en forma alguna la libertad inmediata del referi
do imputado. Así se decide.
Finalmente, la Sala no puede dejar pasar por alto el actuar del a quo
que contraría, sin lugar a dudas, la doctrina sentada, con carácter vincu
lante, por esta Sala Constitucional, por lo que se ve obligada a rechazar
actuaciones como las señaladas y, al efecto, ordena la remisión de copia
certificada del presente fallo a la Inspectoría General de Tribunales, a
los fines disciplinarios correspondientes. Así se decide.
39 6 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Ello así, los proyectos de ley escapan a los controles de amparo, por
cuanto no existen en el mundo jurídico y no han adquirido eficacia, efec
to que produce luego que, conforme lo indica el artículo 1° del Código
Civil, sean publicados en la Gaceta Oficial. De manera que, tratándose
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 39 7
80
Los artículos 8 y 353 se mantuvieron iguales en la Reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 39 9
(…)
Así, es evidente para esta Sala que los jueces deben ceñirse a la legali
dad en todas sus actuaciones; por tanto, deben respetar las formalida
des que las leyes procesales disponen, pero cuando aquéllas no sean
esenciales, podrán omitirse como garantía de la justicia.
(…omissis…)
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 40 1
VOTO SALVADO
2. Ante tales consideraciones, quien suscribe disiente del fallo que
antecede, por cuanto considera que es precisamente conforme al aludi
do interés superior del menor que el legislador limitó la legitimación ac
tiva para demandar la privación de la patria potestad. En efecto, no se
trata de un formalismo no esencial la exigencia de considerar parte in
teresada o no a los presuntos abuelos paternos del menor, pues ello
tiene verdaderas implicaciones en el juicio.
La Presidenta de la Sala,
VOTO SALVADO
Código Civil, la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adoles
cente establece un control previo a cargo del Ministerio Público, similar a
lo que ocurre con el antejuicio de mérito, esquema con el que esta disi
dente concuerda, a los fines de evitar que aquel contra quien obre la
acción de privación de patria potestad se vea perturbado en su ejercicio,
de manera infundada, por familiares en cuyas actuaciones podrían privar
cuestiones afectivas, rencores, odio, reproches, etcétera; pero además,
dicha legitimación calificada por parte del Ministerio Público es cónsona
con los postulados de la Constitución de la República Bolivariana de Ve
nezuela que consagra el derecho de los niños, niñas y adolescentes a vivir,
ser criados o criadas y a desarrollarse en el seno de su familia de origen
(artículo 75 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela),
y el deber compartido e irrenunciable del padre y la madre de criar, for
mar, educar, mantener y asistir a sus hijos e hijas (artículo 76 de la Cons
titución de la República Bolivariana de Venezuela).
…omissis…
Fecha ut supra.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 40 9
81
Los artículos 537 y 584 se mantuvieron igual en la Reforma LOPNNA.
41 2 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Ahora bien, esta Sala ha analizado el artículo 164 del Código Orgánico
Procesal Penal en diferentes oportunidades. Hizo una primera interpre
tación en la sentencia N° 3744 del 22 de diciembre de 2003 (caso: Raúl
Mathison), la cual fue abandonada posteriormente, con la única excep
ción del contenido del fallo N° 2598 del 16 de noviembre de 2004 (caso:
Luis Arias), que señaló que “cuando el tribunal con escabinos no
puede constituirse después de dos convocatorias correspondientes
y que, ante esa situación, el juez profesional que dirigirá el juicio,
debe asumir totalmente el poder jurisdiccional sobre la causa, por
lo que deberá llevar adelante el juicio prescindiendo de los esca-
binos”. El referido cambio de criterio operó mediante decisiones núme
ros 397 del 19 de marzo de 2004 (caso: Abel Rodney Alvarado
Rodríguez y otros), 1284 del 9 de julio de 2004 (caso: José Alfonso
Osorio); 1116 del 6 de octubre de 2004 (caso: Douglas José Narváez
Bernal), donde se estableció:
Esta última interpretación del artículo 164 del Código Orgánico Proce
sal Penal fue, asimismo, ratificada por esta Sala Constitucional median
te sentencia, de reciente data, como la N° 2684 del 12 de agosto de
2005 (caso: Jorge Luis López), con ponencia de la Magistrada Luisa
Estella Morales Lamuño, en la cual se estableció:
Ahora bien, esta Sala observa de los recaudos cursantes en autos que,
ciertamente, la decisión del Juzgado Sexto de Primera Instancia en Fun
ción de Juicio del Circuito Judicial Penal del estado Carabobo, señaló
que “(…) por cuanto no ha sido posible la integración del Tribunal
(…), ocasionándose así retardo procesal que atenta contra los de-
rechos de las partes (…) prescinde de los ciudadanos escabinos y
declara constituido el tribunal unipersonal”, sin que dejara cons
tancia de la opinión del imputado al respecto, así como de la asistencia
de algunos escabinos a las convocatorias realizadas.
celebrará –tal como lo indica el quejoso–, por cuanto los jueces como
directores del proceso cuentan con mecanismos legales dispuestos para
garantizar la celebración del juicio con escabinos; en consecuencia, no se
verifica la violación aludida por el quejoso al respecto, y así se decide.
Advierte esta Sala que no se pretende una confusión entre la figura del
jurado y el escabino, lo que se intenta es la aclaratoria de que la partici
pación de los ciudadanos en la administración de justicia es conveniente
para que se ejerza una contraloría social eficaz.
82
Los artículos 1°, 5, 26 y 358 se modificaron en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
Los artículos 4, 8, 28, 32 y 270 se mantuvieron iguales en la Reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 42 1
Así las cosas, estima la Sala que, una vez que el juzgado supuesto agra
viante expidió sus actos jurisdiccionales el 17 y 25 de julio y 15 de agos
to de 2006, la quejosa contaba con un medio procesal al cual podía acudir
antes que al amparo constitucional, para el logro la reparación de la
situación jurídica (supuestamente) infringida.
Niño y del Adolescente, para que fuese el tribunal superior quien reme
diara la situación jurídica cuya lesión alegó la quejosa.
(…omissis…)
Por otra parte, como bien lo señaló el Consejo de Protección del Niño y
del Adolescente del municipio Baruta en su respuesta al recurso de re
consideración, se tomaron las medidas pertinentes en protección de los
adolescentes, por lo que las supuestas agresiones contra la madre se
deben considerar como violencia contra la mujer, debiendo acudir ante
los órganos competentes a los fines de acordar las medidas cautelares y
de protección correspondiente a su género sexual y que no son ni el
Consejo de Protección del Niño y del Adolescentes ni los tribunales de
Niños y Adolescentes, sino que son aquéllos a los que se refiere la Ley
Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violen
cia (Vid. artículos 1, 5, 14, 15, 70, 71, 72, 87, 88, 89, 90, 91 y 92).
VOTO SALVADO
83
El artículo 126 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
El artículo 450 se modificó en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 43 1
84
El artículo 387 se modificó en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
El artículo 388 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 43 3
Debe señalarse que la Sala ha establecido “que las visitas a los ni-
ños o adolescentes constituye una institución familiar, cuya tute-
la contempla la Ley Orgánica de Protección del Niño y del
Adolescente, como un derecho tanto de aquéllos como de sus pa-
rientes por consanguinidad o afinidad. De tal suerte que a los
abuelos les asiste el derecho de visitar a sus nietos, conforme lo
prevé el artículo 388 de la referida ley y, en caso de resistencia
del guardador (obligado) a hacer efectivo el ejercicio de dicho
derecho, puede su titular exigir judicialmente su fijación”. (N°
338 del 22 de febrero de 2006). Y, en este mismo orden de ideas, en el
Preámbulo de la Convención sobre los Derechos del Niño al preser
varse la institución familiar cuando establece “Convencidos de que
la familia, como grupo fundamental de la sociedad y medio natu-
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 43 5
Es por ello que dicha Convención reconoce que el niño, para el pleno y
armonioso desarrollo de su personalidad, debe crecer en el seno de la
familia, en un ambiente de felicidad, amor y comprensión, lo que sin
duda se logra estableciendo los debidos lazos con toda su familia, inclu
yendo la materna (abuela, tíos, primos, etcétera), a pesar de la muerte
de la madre; aserto que no sólo constituye un derecho del que es titular
la niña, sino que es una obligación a cargo del Estado, conforme al ar
tículo 8 del mencionado instrumento normativo, que dispone: “Los Esta-
dos Partes se comprometen a respetar el derecho del niño a preservar
su identidad, incluidos la nacionalidad, el nombre y las relaciones
familiares de conformidad con la ley sin injerencias ilícitas”.
85
Los artículos 65 y 337 se modificaron en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 43 7
86
El artículo 583 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
43 8 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Así las cosas, estima esta Sala que el quejoso no puede pretender la sus
titución, con el amparo, de los medios o recursos instituidos por el ordena
miento procesal especial para la corrección de los vicios o errores que
cometan los órganos jurisdiccionales en su función decisoria, pues ellos
constituyen la vía idónea para la garantía de la tutela judicial eficaz, y sólo
cuando no obtenga una respuesta o haya una dilación procesal indebida,
el interesado puede acudir a la acción de amparo en restitución de los
derechos constitucionales que considera violados. La admisión de ampa
ros sin limitaciones llevaría a la desaparición de las vías judiciales ordina
rias que dispuso el legislador para el aseguramiento de los derechos e
intereses de las partes dentro de un determinado proceso.
87
Los artículos 29 y 32 se mantuvieron igual en la Reforma LOPNNA.
El artículo 65 se modificó en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
44 0 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Asimismo, estima esta Sala oportuno mencionar que, tal como se dejó
sentado en capítulo precedente, relativo a los antecedentes del caso,
que esta Sala en la oportunidad de pronunciarse anteriormente, en fallo
del 21 de mayo de 2007, respecto a la consulta de una decisión que
había recaído en este mismo caso, que declaró inadmisible la presente
acción, señaló que era menester la corrección del libelo por adolecer de
muchas deficiencias que hacían imposible pronunciarse acerca de la
admisión de la acción. En virtud de ello, precisó en aquella oportunidad
(sentencia N° 941), que la Corte debía “retrotraer el procedimiento al
momento de que dicha Corte ordene la referida corrección antes
de pronunciarse respecto a la admisibilidad de la acción de ampa-
ro propuesta, para continuar de esa manera con el correspondien-
te procedimiento de amparo, reiterando lo dispuesto por esta Sala
mediante sentencia No 7/2000 (caso: José Amando Mejías), a me-
nos que existan otras causales de inadmisibilidad del mismo que
pondere el juez de la primera instancia”.
Observa la Sala que, una vez que la Corte Superior Segunda del Tri
bunal de Protección del Niño y del Adolescente recibió el expediente
y ordenó hacer la aludida corrección, luego de corregido por el accio
nante el escrito libelar, en los términos requeridos por el Tribunal, di
cho órgano, actuando como primera instancia, debió necesariamente
volver a pronunciarse; ahora sí, previo el examen de un escrito ya
depurado y subsanado, acerca de las causales de inadmisibilidad de la
acción de amparo propuesta; sin embargo, no cumplió con lo ordena
do, pues sin análisis alguno procedió a admitir la demanda, por auto
del 23 de marzo de 2007 (cuya copia certificada riela al folio 255 del
expediente), como si se tratara de una demanda de derecho común
que debía tramitarse por el procedimiento ordinario, con prescinden
cia absoluta del análisis acerca de las causales de inadmisibilidad como
era menester en derecho.
Declarado lo anterior, debe esta Sala señalar que no desconoce las difi
cultades que hubo para constituir la Corte Superior, empero ello no la
libraba de su obligación de revisar exhaustivamente las actas procesa
les y advertir la muy evidente inadmisibilidad, en la que se encontraba
incursa la acción que se admitía, según se ha expuesto.
En virtud de los errores referidos, esta Sala exhorta a dicha Corte para
que se conduzca con mayor diligencia en sus funciones, vistos los gra
ves perjuicios que su actuación ha producido.
Preocupa a esta Sala la suerte que pueden correr los niños, niñas y
adolescentes en los juicios de guarda, cuando los órganos judiciales que
conocen de sus causas acuerdan y revocan ésta, sin detenerse a anali
zar que inciden en circunstancias de modo, tiempo y lugar que derivan
del ejercicio fáctico de esta institución, con las graves consecuencias
que su constante y no bien ponderada alteración puede causar a los
niños y adolescentes dentro de un proceso judicial.
ordenarse trasladar de un lado para otro, sin mediar y ponderar las trans
formaciones de vida que ello implica.
Por ello, es forzoso para esta Sala ordenar que la niña, cuyo nombre se
omite de conformidad con lo dispuesto en el artículo 65 de la Ley Orgá
nica para la Protección del Niño y del Adolescente, se mantenga con la
madre según lo establecido en el referido fallo del 8 de septiembre de
2003, dictado por la Sala de Juicio IX del Tribunal de Protección del
Niño y del Adolescente de la Circunscripción Judicial del Área Metro
politana de Caracas y, en caso de que la tenga en su poder el padre, se
ordena al Juez de la causa, esto es, de la referida Sala, realizar la entre
ga respectiva, conforme la doctrina de esta Sala, establecida en su fallo
número 766 del 27 de abril de 2007. Así se ordena
88
Los artículos 328, 452 y 489 se modificaron en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
44 6 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
tículo 328 de la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adoles
cente, el cual está referido al Procedimiento Judicial de Protección. Sin
embargo, el procedimiento pertinente en estos casos, en el cual se per
sigue determinar la filiación de un niño, prevé una disposición similar en
cuanto se refiere a la necesidad de formalizar la apelación. En efecto,
el artículo 489 eiusdem, relativo al procedimiento contencioso en asun
tos de familia y patrimoniales establece que:
En virtud de lo anterior, esta Sala estima que por orden público constitu
cional se debe anular todo lo actuado en el presente caso, lo cual no
debe entenderse como una sanción, sino como una garantía y un medio
de preservación de la integridad objetiva de nuestro ordenamiento jurí
dico; en consecuencia, se suspende la medida cautelar dictada por esta
Sala Constitucional el 23 de julio de 2007. Así se decide.
44 8 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
VOTO CONCURRENTE
VOTO CONCURRENTE
En consecuencia, aprecia quien suscribe que la Sala debió ser más pre
cisa en la parte motiva y dispositiva del fallo en lo que se refiere a las
derivaciones jurídicas de la nulidad que fue declarada.
Fecha retro.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 45 1
AÑO 2008
45 2 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 45 3
En efecto, debe esta Sala destacar que, de acuerdo con nuestro ordena
miento jurídico, la mayoridad de la persona se alcanza a la edad de
dieciocho (18) años (Vid. artículo 18 del Código Civil), y desde entonces
la persona deja de estar bajo la potestad de sus padres y adquiere el
libre gobierno de su persona al presumirse civilmente capaz.
VOTO SALVADO
2.2 Por otra parte, tampoco puede afirmarse que, para la apreciación
de la admisibilidad de la pretensión de amparo, tenga primacía el ar
tículo 19 de la Ley Orgánica del Tribunal Supremo de Justicia, sobre
las equivalentes de la también Ley Orgánica de Amparo, que anterior
mente se nombró, no sólo por razón de que la antinomia entre tales
normas de estas leyes de igual jerarquía debió resolverse sobre la base
del principio de especialidad normativa, sino, porque, además, la apli
cación del citado artículo 19 de la antes mencionada ley que regula a
este Supremo Tribunal (la cual fue creada para “establecer el régi
men, organización y funcionamiento del Tribunal Supremo de Justi
cia”), como fundamento de la declaración de inadmisión de las
demandas de amparo, sólo sería posible contra las que sean presenta
das ante el Máximo Tribunal de la República, pero no ante los tribuna
les de instancia que conozcan en primer grado de jurisdicción, porque,
en éstos, la admisión o no de la pretensión de tutela tiene que ser
decidida, en principio, con afincamiento en la Ley Orgánica de Ampa
ro sobre Derechos y Garantías Constitucionales, razón por la cual la
aplicación, en el particular que se analiza, de la referida norma de la
Ley Orgánica del Tribunal Supremo de Justicia, en el juicio de ampa
ro, crea un desfase en el tratamiento de la tutela, cuando de la misma
deba conocerse, en primera instancia, por los juzgados ordinarios y
cuando dicho conocimiento sea de la competencia del Tribunal Supre
mo de Justicia. Más aún, si, por ejemplo, la Sala Constitucional actúa
como órgano de alzada, dicho órgano jurisdiccional deberá resolver un
innecesario dilema sobre la ley aplicable: la Ley Orgánica de Amparo
sobre Derechos y Garantías Constitucionales o la del Tribunal Supre
mo de Justicia, para la valoración del pronunciamiento que, sobre ad
misibilidad de la pretensión de tutela, hubiera expedido el a quo,
conforme a la Ley de Amparo y el Código de Procedimiento Civil. Así
las cosas, ¿deberá esta segunda instancia revocar la decisión del a
quo mediante la cual se admitió un amparo porque se estimó que el
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 45 9
4. Como conclusión, quien suscribe estima que debió tramitarse el pro
ceso de amparo bajo análisis y, en todo caso, la admisibilidad del ampa
ro de autos no debió ser valorada según el artículo 19 de la Ley Orgánica
del Tribunal Supremo de Justicia sino según las normas que, como se
afirmó anteriormente, son las aplicables para el particular en examen.
Fecha retro.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 46 1
Ahora bien, del estudio del expediente esta Sala observa que en el pre
sente caso, el demandante intentó –como se señaló anteriormente– la
demanda de divorcio y a su vez solicitó se le otorgara de manera exclu*
89
Los artículos 348, 351 y 360 se mantuvieron igual en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice)
46 2 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
siva la guarda de sus menores hijos (tal como consta al folio 32 del
presente expediente).
Ello así, observa esta Sala que, en el caso bajo examen, no existe acto
de aplicación del precepto legal que se cuestiona, por cuanto el mismo
no ha iniciado su vigencia; en consecuencia, no existe una situación
jurídica concreta en la esfera de los accionantes que los legitime para la
defensa de los derechos y garantías constitucionales que se delataron
como amenazados de violación, puesto que no existe ningún vínculo entre
la norma y sus esferas jurídicas particulares.
90
El artículo 1° se modificó en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
Los artículos 4, 8, 27 y 80 se mantuvieron igual en la Reforma LOPNNA.
46 8 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Artículo 12.-
de los motivos que tenía para prescindir de una actuación que de suyo
es primordial.
(…omissis…)
(..omissis…)
cia, tal como lo hizo el a quo constitucional, que las mimas fueron dic
tadas con extralimitación de funciones, por cuanto desbordaron el poder
cautelar que tiene el juez, toda vez que las cautelas se producen en un
juicio de divorcio entre los ciudadanos Eduardo Krulig y Sara Gelman,
pero obraron contra personas naturales y jurídicas que no son parte en
dicho juicio. Además, de manera arbitraria, dejó sin efecto mandatos
que habían sido legalmente conferidos por sus poderdantes.
91
El artículo 80 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
El artículo 488 se modificó en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 47 9
Así las cosas, siendo que el Juzgado Superior en lo Civil, Mercantil, del
Tránsito, de Protección del Niño y del Adolescente y Bancario de la
Circunscripción Judicial del estado Monagas, no requirió la presencia
de los hijos de la accionante para que le rindieran su opinión sobre el
régimen de convivencia familiar que fue solicitado por su abuela pater
na (tercera interesada), lesionó su derecho constitucional a ser oídos.
Así se declara.
92
El artículo 270 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 48 3
procesal, de conformidad con los artículos 191 y 195 del Código Orgáni
co Procesal Penal, con los efectos extensivos que preceptúa el encabe
zamiento del artículo 196 eiusdem. Así se declara. Como consecuencia
del pronunciamiento que antecede, estima esta Sala que la causa penal
que se le sigue al quejoso de autos debe ser repuesta al estado de nueva
celebración de la Audiencia Preliminar, con corrección de los vicios que,
en esta sentencia, fueron señalados y con observancia de los antes in
vocados criterios doctrinales que la Sala ha establecido al respecto. Así
también se declara.
VOTO SALVADO
En este sentido, cabe destacar que el delito por el que se juzgó a dicho
ciudadano está regulado en la Ley Orgánica para la Protección del Niño
y del Adolescente, actualmente Ley Orgánica para la Protección de
Niños, Niñas y Adolescentes, y tiene como propósito, entre otros, ga
rantizar a través de la imposición de sanciones el respeto y vigencia de
las decisiones dictadas por las autoridades competentes en materia de
niños, niñas y adolescentes.
Quedan de este modo expresadas las razones del presente voto salvado.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 48 9
93
Los artículos 35, 42, 80, 85 y 86 se mantuvieron igual en la Reforma LOPNNA.
49 0 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
En todo caso, visto que cada vez son más los cuadros clínicos en los que
es posible respetar las creencias fundamentales de los Testigos de Je
hová sin irrespetar el derecho a la vida y el mejor interés del paciente,
es por lo que la Sala estipula, en reconocimiento del derecho de libertad
de conciencia de los ciudadanos y ciudadanas que profesan dicha reli
gión, que el médico tratante está en el deber de informar debida-
mente al paciente sobre las posibilidades reales existentes en el
país de optar por tales tratamientos médicos alternativos y de
transferirlo a otro médico cuando no esté en capacidad de efec-
tuar el tratamiento médico sin uso de hemoderivados; pero ello
se insiste sólo será así cuando no peligra la vida, esto es, cuando no es
posible la vigencia simultánea de ambos derechos fundamentales.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 49 3
entre las personas afectadas por el tema que nos ocupa– tanto en la
Compilación del Derecho Civil de Aragón (aplicable en cuanto tuvieran
la vecindad civil en dicho territorio foral) como, en su caso, en el Código
Civil. Así, los actos relativos a los derechos de la personalidad (entre los
que se halla precisamente el de integridad física), de los que queda ex
cluida la facultad de representación legal que tienen los padres en cuan
to titulares de la patria potestad, según explícitamente proclama el art.
162.1 del Código Civil (precepto sin correlato expreso en la Compila
ción); tal exclusión, por otra parte, no alcanza al deber de velar y cuidar
del menor y sus intereses. También cabe señalar diversos actos condu
centes a la creación de efectos jurídicos o a la formalización de deter
minados actos jurídicos, como son, entre otros, los relativos a la capacidad
para contraer matrimonio, para testar, para testificar, para ser oído a fin
de otorgar su guarda o custodia a uno de los progenitores. Y asimismo,
en el ámbito penal, para la tipificación de determinados delitos.
94
En este párrafo se refieren a la Ley para Protección de las Familias, la Maternidad y la
Paternidad, publicada en Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela N° 38.733, el
20 de septiembre de 2007.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 50 1
VOTO SALVADO
11. Todos los jueces deben velar por la protección de los dere-
chos y garantías establecidas en la Ley Orgánica para la
Protección del Niño, Niña y del Adolescente, sin importar
si pertenecen a esta materia especial
95
El artículo 177 se modificó en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 50 7
(…omissis…)
96
El artículo 8 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 51 1
Bajo las anteriores premisas, esta Sala estima que, además de los su
puestos fijados por el numeral 10 del artículo 336 constitucional y por
los numerales 4 y 16 del artículo 5 de la Ley Orgánica del Tribunal
Supremo de Justicia, así como de los delimitados por la Sala en su sen
tencia N° 93 del 6 de febrero de 2001, caso: “Corpoturismo”, también
51 2 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Así las cosas, entiende la Sala que el objeto de la decisión del Juzgado
Superior en lo Civil, Mercantil, Tránsito y Protección del Niño y del
Adolescente de la Circunscripción Judicial del estado Miranda, es la
protección de los hijos menores de edad de los reclusos de los referidos
centros penitenciarios ante la falta de condiciones de higiene y seguri
dad, acordando para ello que lo más prudente es prohibir su ingreso
hasta tanto estén dadas las condiciones, ello en detrimento de su dere
cho a interrelacionarse con sus padres.
Ante tal diatriba, el juez debe realizar una minuciosa ponderación de los
intereses en conflicto y siempre acordar una decisión, no sólo en aras
del interés superior del niño sino que permita el cabal desarrollo de es
tos derechos, lo implica que las medidas acordadas deben ser propor
cionales al fin que se persigue.
Por ello, considera la Sala que no basta que al dictarse una decisión judi
cial se pretenda justificar la misma, aduciendo el interés superior del niño,
sin tomar en cuenta los perjuicios que ello podría ocasionar sobre el resto
del cúmulo de derechos y garantías que conforma su esfera jurídica.
Ahora bien, a fin de resguardar el interés superior del niño, lo cual impli
ca garantizar no sólo su derecho a interrelacionarse con sus padres sino
también su integridad física, la Sala autoriza el ingreso de menores de
edad a los centros penitenciarios Rodeo I y Rodeo II una vez cada
quince días, para lo cual acuerda las siguientes medidas hasta tanto las
instalaciones se encuentren debidamente acondicionadas para recibir la
visita de los mismos.
Por último, se exhorta al Ministerio del Poder Popular para las Relacio
nes Interiores y Justicia, tome las medidas necesarias a fin de acondi
cionar las instalaciones de los Centros Penitenciarios Rodeo I y Rodeo
II, para que los mismos se encuentren en condiciones de seguridad y
salubridad suficientes que garanticen la integridad física tanto de los
visitantes como de los reclusos de los mismos; por tanto, las medidas
aquí acordadas se mantendrán hasta tanto se hayan acondicionado ade
cuadamente dichos centros penitenciarios, por lo que una vez efectua
dos los trabajos pertinentes deberá dicho ministerio informar a esta Sala.
Así se decide.
VOTO SALVADO
Fecha retro.
51 8 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
cativas del estado Trujillo, así como contra los miembros de las comuni
dades educativas de cada plantel de dicha entidad estadal.
Ahora bien, esta Sala estima menester precisar otro aspecto que debió
ser considerado por la instancia de protección de niños y adolescentes:
los hechos que sirvieron de basamento a la acción de protección no sólo
afectaban la continuidad del derecho a la educación de niños, niñas y
adolescentes en el ámbito territorial del estado Trujillo, sino que, como
hecho notorio comunicacional, los efectos del denominado “paro na-
cional” se extendió a la totalidad del territorio nacional. Esta nota de
indeterminación, y la expansión subjetiva de los efectos de cualquier
decisión judicial que recayera sobre el caso, conlleva a la Sala a reexa
minar la competencia del Juzgado Superior Accidental Civil, Mercantil,
de Tránsito y de Menores de la Circunscripción Judicial del estado Tru
jillo para dictar medidas cautelares dirigidas a autoridades nacionales,
sobre la base de la correcta determinación de los hechos.
97
Los artículos 128, 131, 396 y 405 se mantuvieron igual en la Reforma LOPNNA.
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 52 7
más pruebas de autos; decisión ésta que fue dictada dentro del ámbito
de una de las competencias que legalmente tiene atribuidas el Juzgado
señalado como agraviante (Protección de Niños, Niñas y Adolescen
tes), cuya Jueza titular consideró –en el ejercicio de su autonomía de
juzgamiento– que lo más conveniente para el niño era que permanecie
ra temporalmente con la ciudadana Nancy Omaira Espinoza S., quien
fuera la que le dispensó cuidados de crianza desde los quince días de
haber nacido.
(…omissis…)
(…omissis…)
(…omissis…)
tiene el Juez para velar por la protección integral de niños, niñas y ado
lescentes de conformidad con lo establecido en el artículo 78 constitu
cional. Así se decide.
98
Los artículos 407 y 681 se modificaron en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 53 1
Así las cosas, considera esta Sala que el hecho de que la decisión dicta
da el 11 de febrero de 2008, por la jueza unipersonal de la Sala N° 5 del
Tribunal de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes de la Circuns
cripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas, haya desaplicado
erróneamente el artículo 444 de la derogada Ley Orgánica para la Pro
tección del Niño y del Adolescente cuando dicho precepto no colidía
con el Texto Fundamental, es determinante para que esta Sala revise la
sentencia; sin embargo, ante el hecho sobrevenido de que para la fecha
de emisión del presente fallo, el Convenio referido ya ha sido ratificado
por los Estados Unidos de América, reponer la causa al estado de que
se dicte una nueva decisión, constituiría una reposición inútil; en conse
cuencia, no se anula el fallo revisado, y al efecto se confirma la adop
ción internacional plena y conjunta, decretada en el referido fallo.
99
El artículo 401 se mantuvo igual en la Reforma LOPNNA.
Los artículos 511 y 516 se modificaron en la Reforma LOPNNA (Ver Apéndice).
53 8 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
Así las cosas, tenemos que si bien el Código Civil, vigente desde el 26
de julio de 1982, dispone en el referido artículo 501, lo siguiente:
Las razones expuestas determinan que esta Sala anule la sentencia ob
jeto de revisión y, en consecuencia, ordene emitir un nuevo pronuncia
miento; sin embargo, observa la Sala que en la parte dispositiva del fallo
que se revisa se ordenó continuar el procedimiento de “Rectificación
de Partida intentado por la ciudadana MARTHA TERESA EPIEYU,
en beneficio del niño (…), de conformidad con lo previsto en el
artículo 773 del Código de Procedimiento Civil, por las razones
expuestas en la parte motiva de esta sentencia”, y que en virtud de
esa orden, el Juez Unipersonal Nº 1, de la Sala de Juicio, del Tribunal de
Protección de Niños, Niñas y Adolescentes de la Circunscripción Judi
cial del estado Zulia, dio continuidad al curso de la causa principal y
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 54 1
Apéndice
54 4 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 54 5
responsabilidades, y para
que el padre y la madre
asuman, en igualdad de
condiciones, sus debe
res, responsabilidades y
derechos. Asimismo, ga
rantizará protección a la
madre, al padre o a quie
nes ejerzan la jefatura de
la familia.
Artículo 26° Derecho a ser Artículo 26. Derecho a ser Se incluyó en el ar
Criado en una Familia. Criado en una familia. tículo 26 de la LOPN
Todos los niños y adoles Todos los niños, niñas y NA el deber de la familia
centes tienen derecho a adolescentes tienen dere de “ofrecer un ambien-
vivir, ser criados y desa cho a vivir, ser criados o te de afecto, seguridad,
rrollarse en el seno de su criadas y a desarrollarse solidaridad, esfuerzo
familia de origen. Excep en el seno de su familia de común, comprensión
cionalmente, en los casos origen. Excepcionalmente, mutua y respeto recí-
en que ello sea imposible en los casos en que ello proco que permita el
o contrario a su interés sea imposible o contrario desarrollo integral de
superior, tendrán derecho a su interés superior, ten los niños, niñas y ado-
lescentes”.
55 0 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
a vivir, ser criados y desa drán derecho a vivir, ser En el parágrafo se
rrollarse en una familia criados o criadas y desa gundo del artículo se
sustituta, de conformidad rrollarse en una familia previó que la separa
con la Ley. sustituta, de conformidad ción del seno familiar
Parágrafo Primero: Los con la ley. La familia debe sólo se hará mediante
niños y adolescentes sólo ofrecer un ambiente de medida de protección
podrán ser separados de afecto, seguridad, solida y con apego a los li
la familia en los casos en ridad, esfuerzo común, neamientos creados
que sea estrictamente ne comprensión mutua y res en esta ley para otor
cesario para preservar su peto recíproco que permi garlas. En el parágra
interés superior, de confor ta el desarrollo integral de fo tercero se dispuso
midad con los requisitos los niños, niñas y adoles la prohibición de los
y procedimientos previs centes. Niños, Niñas o Ado
tos en la Ley. Parágrafo Primero: Los lescente de su familia
Parágrafo Segundo: En niños, niñas y adolescen de origen por razones
cualquier caso, la familia tes sólo podrán ser sepa de pobreza, así como
debe ofrecer un ambiente rados o separadas de su la prohibición de se
de afecto y seguridad, familia de origen cuando paración entre herma
que permita el desarrollo sea estrictamente necesa nos en virtud de
integral de los niños y rio para preservar su inte colocación familiar,
adolescentes. rés superior. En estos salvo las excepciones
Parágrafo Tercero: El Es casos, la separación sólo establecidas en el
tado, con la activa partici procede mediante la apli este artículo.
pación de la sociedad, cación de una medida de
debe garantizar programas protección aplicada por la
y medidas de protección autoridad competente y
especiales para los niños de conformidad con los re
y adolescentes privados quisitos y procedimientos
temporal o permanente previstos en la ley. Estas
mente de la familia. medidas de protección
tendrán carácter excepcio
nal, de último recurso y, en
la medida en que sea pro
cedente, deben durar el
tiempo más breve posible.
Parágrafo Segundo: No
procede la separación de
los niños, niñas y adoles
centes de su familia de ori
gen por motivos de
pobreza u otros supuestos
de exclusión social. Cuan
do la medida de abrigo,
DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA 55 1
Consejos Municipales de
Derechos de Niños, Ni
ñas y Adolescentes o los
Consejos de Protección
de Niños, Niñas y Ado
lescentes;
c) Abstención de los
Consejos Municipales de
Derechos de Niños, Ni
ñas y Adolescentes o de
los Consejos de Protec
ción de Niños, Niñas y
Adolescentes;
d) Aplicación de sancio
nes a particulares, insti
tucio nes públicas o
privadas, excepto las
previstas en la Sección
Cuarta del Capítulo IX de
este Título;
e) Cualquier otra de natu
raleza afín que deba resol
verse judicialmente o que
esté prevista en la ley.
Parágrafo Cuarto. Asun
tos patrimoniales, del tra
bajo y otros asuntos:
a) Demandas patrimoniales
en las cuales los niños, ni
ñas y adolescentes sean
legitimados activos o pa
sivos en el procedimiento;
b) Demandas laborales en
las cuales los niños, niñas
y adolescentes sean legi
timados activos o pasivos
en el procedimiento;
c) Demandas y solicitudes
no patrimoniales en las
cuales los niños, niñas y
adolescentes sean legiti
mados activos o pasivos
en el proceso;
57 4 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
d) Demandas y solicitudes
en las cuales personas ju
rídicas constituidas exclu
sivamente por niños, niñas
y adolescentes sean legiti
mados activos o pasivos
en el procedimiento;
e) Cualquier otro de natu
raleza afín que deba resol
verse judicialmente, en el
cual los niños, niñas o
adolescentes sean legiti
mados activos o pasivos
en el proceso.
Parágrafo Quinto. Acción
judicial de protección de
niños, niñas y adolescen
tes contra hechos, actos
u omisiones de particula
res, órganos e institucio
nes públicas o privadas
que amenacen o violen
derechos colectivos o di
fusos, de niños, niñas y
adolescentes.
asociaciones, fundacio
nes, organizaciones socia
les o por cualquier otra
forma de participación ciu
dadana. El Estado deberá
adoptar las medidas nece
sarias para fortalecer las
Defensorías de Niños, Ni
ñas y Adolescentes crea
das por la sociedad. Las
Defensorías de Niños, Ni
ñas y Adolescentes tienen
como objeto promover y
defender los derechos y
garantías de los niños, ni
ñas y adolescentes. Cada
Defensoría tendrá un res
ponsable a los efectos de
esta Ley.
previos los informes téc vencia Familiar, quien de de convivencia fami
nicos que considere con cidirá atendiendo al inte liar provisional. Se in
venientes y oída la rés superior de los hijos e cluye el régimen de
opinión de quien ejerzan hijas. La decisión podrá convivencia familiar
la guarda del niño o ado ser revisada a solicitud de provisional supervisa
lescente, dispondrá el ré parte, cada vez que el bien do cuando existan in
gimen de visitas que estar del niño, niña o ado dicio de amenazas o
considere más adecuado. lescente lo justifique. Al violaciones en contra
Dicho régimen puede ser admitir la solicitud, el juez del derecho a la vida,
revisado, a solicitud de o jueza apreciando la gra la salud o la integridad
vedad y urgencia de la si
parte, cada vez que el personal del niño,
tuación podrá fijar el
bienestar y seguridad del Régimen de Convivencia niña o adolescente.
niño o adolescente lo jus Familiar provisional que
tifique, para lo cual le se juzgue conveniente para
guirá el procedimiento garantizar este derecho y
aquí previsto. tomar todas las medidas
necesarias para su cumpli
miento inmediato. En la au
diencia preliminar el juez o
jueza deberá fijar un Régi
men de Convivencia Fami
liar provisional, salvo que
existan fundados indicios
de amenazas o violaciones
en contra del derecho a la
vida, la salud o la integri
dad personal del niño, niña
o adolescente, caso en el
cual fijará un Régimen de
Convivencia Familiar pro
visional supervisado. Ex
cepcionalmente, cuando
estas amenazas o violacio
nes sean graves y existan
pruebas suficientes en el
procedimiento, el juez o jue
za no fijará el Régimen de
Convivencia Familiar pro
visional. El Régimen de
Convivencia Familiar su
pervisado será establecido
fuera de la sede del Tribu
nal de Protección de Ni
ños, Niñas y Adolescentes.
60 0 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
permanecer en la sala de
audiencias. El juez o jueza
debe pronunciar su sen
tencia oralmente, expre
sando el dispositivo de
fallo y una síntesis preci
sa y lacónica de los moti
vos de hecho y de
derecho, la cual reducirá
de inmediato, en cuanto a
su dispositiva, a forma es
crita. Si el juez o jueza no
decide la causa inmediata
mente, después de con
cluido el debate oral, éste
deberá repetirse de nuevo,
para lo cual se fijará nue
va oportunidad. En casos
excepcionales, por la com
plejidad del asunto deba
tido, por causas ajenas a
su voluntad o de fuerza
mayor, el juez o jueza pue
de diferir, por una sola vez,
la oportunidad para dictar
sentencia, por un lapso no
mayor de cinco días, des
pués de evacuadas las
pruebas. En todo caso,
deberá, por auto expreso,
determinar el día y hora
para el cual difirió el acto
para sentenciar, a los fines
de la comparecencia obli
gatoria de las partes a este
acto. Dentro del lapso de
cinco días siguientes al
pronunciamiento oral de
la sentencia, el juez o jue
za debe, en su publica
ción, reproducir el fallo
completo, el cual se agre
gará a las actas, dejando
61 4 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
constancia el secretario o
secretaria, del día y hora
de la consignación. El fa
llo será redactado en tér
minos claros, precisos y
lacónicos, sin necesidad
de narrativa, ni transcrip
ciones de actas, ni docu
mentos que consten en el
expediente; pero conten
drá la identificación de las
partes y sus apoderados
y apoderadas, los motivos
de hecho y derecho de la
decisión, así como la de
terminación del objeto o la
cosa sobre la cual recaiga
su decisión, pudiendo or
denar, si fuere necesario,
experticia complementaria
del objeto, con único pe
rito, el cual será designa
do por el juez o jueza. Los
niños, niñas y adolescen
tes no serán condenados
o condenadas en costas.
Constituye causal de des
titución el hecho de que
el juez o jueza no decida la
causa dentro de la opor
tunidad establecida en
esta Ley.
Familiar, Obligación de
Manutención y Respon
sabilidad de Crianza, se
admitirá apelación única
mente en el efecto devo
lutivo. Si la sentencia
definitiva es sobre estable
cimiento de un nuevo acto
del estado civil no tendrá
apelación, a menos que
haya habido oposición,
caso en el cual la senten
cia será apelable. Al pro
ponerse la apelación
contra la sentencia que
puso fin al juicio, quedan
comprendidas en ella las
interlocutorias que hubie
ren producido un grava
men no reparado en la
misma. De la sentencia in
terlocutoria que ponga fin
a la controversia, se oirá
apelación en ambos efec
tos. La apelación se inter
pondrá en forma escrita
ante el Tribunal de Protec
ción de Niños, Niñas y
Adolescentes que dictó la
sentencia dentro de los
cinco días siguientes a la
publicación de la senten
cia en forma escrita, el cual
la admitirá o negará el día
siguiente al vencimiento
de aquel lapso. Admitida
la apelación se remitirá al
día siguiente el expedien
te o las copias certificadas
correspondientes, según
sea el caso, al Tribunal
Superior de Protección.
Las partes podrán apelar,
61 6 DERECHO DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA
experticia complementaria
del objeto, con único pe
rito, el cual será designa
do por el juez o jueza. Los
niños, niñas y adolescen
tes no serán condenados
o condenadas en costas.
Constituye causal de des
titución el hecho de que
el juez o jueza no decida la
causa dentro de la opor
tunidad establecida en
esta Ley.