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5. Gobernar Los medios de comunicacién siempre han tenido una relacién ambigua con la politica. Por una parte, mu chos usos de los medios de comunicacién han puesto en entredicho al poder consolidado, desde el panfleto hasta la emisora de radio comunitaria, pasando por un valiente alertador contemporines come es Edward Snowden. Desde esta perspectiva, es frecuente presen: tar a los medios de comunicacién como garantes de la libertad, como lo contrario de la censura y la represién, Por otra parte, sin embargo, los gobiernos siempre han tratado de ejercer un control sobre los medios de co- municacién de manera sti ncdiendo en cémodichos medios los representan y en cémo representan en gene: ral el mundo, En este capitulo fina, vamos 1 centesones de nuevo en esta segunda cara del debate y nos vamos a reguntar en qué consiste el papel de los medios de co: ‘municaci6n de cara a garantizar -o quizis entorpecer- la gobernabilidad de grandes sociedades. n6 eS EX'S’? quiere decir econversacién»,) Sin esa dialéctica-sin la continua «con versacién» entre las fuerzas de la libertad y las fuerzas lel control. los medios de comunicacin y el poder po- Iitico se descompensatian, Aqui plantea un argumento crucial el economista del de sarrollo Amartya Sen, Sin la capacidad que los medios de ‘comunicacién tienen de difundir noticias sobre los desas. {tes o las crisis que se ciemen, los gobieros se limitarian a actuar en su propio interés ignorarian o encubririan pro- 3. Gobernar blemas tales como el suministro de alimentos o la seq (En opinisn de Sen, esa suele ser-y no una verdadera falta dle alimentos—larazén de las hambrunas,) La presién que 4a atencién de los medios de comunicacién ejerce puerle Producir un cortocircuito en esa tendencia natural de los sobiemos a esconder sus fracasos; puede proporcionan Por tanto, un canal mediante el cual sea posible encontrar soluciones antes cle que, por seguir con el mismo ejemplo, se produzca una crisis alimentaria, Por este motivo, afitma Sen, unas instituciones informativas sanas son un prerre ‘quisito esencial del desarrollo humano, eA qué estadio de esta dialéctica entre los medios de co ‘municacién y los gobiernos hemos llegado a comienzos de latercera década del siglo xx1? Durante un siglo o més, en los paises de «Occidente» ha habido una respuesta estan lar: que unas instituciones informativas libres ~a menudo llamadas, por simplificar, la «prensa libre» y la vida so cial en la que dicha prensa libre se sustenta son condicie. nes suficientes para garantizar la libertad de los ciudad nos de las sociedades democriticas, Pero equé pasa sila libertad de las instituciones infor ‘ativas ha dejado de set la garante dela libertad social? ¢Qué pasa sila primera de ambas libertades empieza air en detrimento de la segunda? ¢Pudiera ser-como los ea pitulos precedentes sugerfan que la extraordinaria ex Pansién de la conexién social que proporcionan los me dios de comunicacién —incluyendo, pero no limitandose a las redes sociales~ haya brindado nuevas oportunida des a los Estados -y, de paso, a las corporaciones. de cara a gobernar a las sociedades de una forma més pro funda, mas intima y més dificil de evidenciar? 135 Matin cl omnia, Por qué porta Esta noes, ciertamente, la primera vez en lahistoria que ‘gobiernos poderosos suefian con sinergias entre as tecno- Togias de los medios de comunicacién y las posibilidades de un mayor control de la poblaci6n, En los primeros dias del cine yla radio, el gobierno nazi de Alemania utlizé cs. tos medios de comunicacién nacionales para adoctrinar a tuna vasta poblacién en nuevos modos de viviry obedecer. Joseph Goebbels, el ministro nazi para la Propaganda, usaba la cobertura de los enormes mitines de Adolf Hitler la entonces reciente posibilidad de retransmit a voz del lider alemén de modo que llegase hasta todos los hogares dl pais- como una forma de inculcar a a poblacién una agenda de cambio social dristico. El miedo a levantat la voz contra aquella nueva politica llevé a una sociéloga de laépoca ainventar un nuevo concepto: el de espiral del si lencio. En una espiral del silencio, mis incentivos para le- ‘vantar la voz contra lo que todo el mundo a mi alrededor esti diciendo no dejan de disminuir hasta legs al punto en el que, simplemente, no digo nada’ Esta dialéctica libertad -gobiemo de los medios de co- municacién hoy se encuentra en un punto de inflexién ‘muy interesante. Pensemos en las situaciones tan distintas Pero que en parte también se solapan— de los medios de ‘comunicacin en los Estados Unidos y en China. El auge de Ia inteligencia artificial, asi como un sistema de cone. xi6n social basado en sofisticadas plataformas digtales, para el gobierno chino suponen «una mejora mercantil del orden social y econémico»*, La expresi6n esta saca- da del documento del gobierno chino en el que se detalla Ia propuesta de un «sistema de crédito social» tendente a evaluar a todos los ciudadanos chinos con arteglo a su 124 5. Gobernar ‘comportamiento social, monitorizindolos en linea y re: compensindolos 0 castigandolos segiin sea ‘mejor o peor su comportamiento. China se ha marcado oficialmente el objetivo de ser, para 2030, el lider planctario en inteligen- cia artificial. Cosa que, vista bien, no es de extraiar, e- niendo en cuenta que el mencionado sistema de control dependeri de algoritmos que procesen los datos relatives al comportamicnto de la gente. Entre tanto, el presidente delos Estados Unidos de América, supuestamente el polo ‘opuesto de China en términos de libertad politica, caifica por sistema a los medios de comunicacién de «el enemigo del pueblo», si bien atin no ha intentado tomar medidas. contra las libertades de las intituciones informativas’. Cuil de estas relaciones entre el Estado y los medios dle comunicacién apunta al futuro? EI solapamiento en- tre ambas resulta, cuando menos, inquietante.

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