Lee un fragmento del libro

Extracto especial autorizado del contenido del libro

Ante ti se despliegan las primeras palabras de un viaje escrito. Uno
que nos invita a recorrer senderos de conversación espiritual y
discernimiento, no como ideas abstractas, sino como rutas de
encuentro. Al pasar cada página, es como si Juan Antonio Guerrero
Alves, SJ, y Óscar Martín López te invitan a sentarte junto a compartir
esas experiencias que surgen del corazón y que hablan de un Dios
siempre presente.

Vivimos en tiempos donde las pantallas a menudo eclipsan los

rostros, y las prisas nos impiden escuchar las melodías del alma.
Pero aquí, en este libro, hay una invitación a detenerse, a escuchar, a
sentir cómo la brisa del Espíritu Santo nos susurra secretos de
comunión y sinodalidad.

Te invitamos a zambullirte en estas líneas, no como quien lee un

manual, sino como quien se sumerge en un manantial de
experiencias, en historias tejidas con hilos de fe y esperanza. Cada
página es un paso más en este camino sinodal que, juntos, estamos
llamados a recorrer.
 Juan Antonio Guerrero Alves, SJ
Óscar Martín López, SJ

la
yo
Lo
Conversación espiritual,
ión
ac
discernimiento y sinodalidad
ic
un
om
eC

Prólogo del papa Francisco

od
rup
-G
ae
err
lT
Sa
 © Editorial Sal Terrae, 2023
Grupo de Comunicación Loyola
Polígono de Raos, Parcela 14-I
39600 Maliaño (Cantabria) – España
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yo
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ión
ic
Imprimatur:
ac
un
X Manuel Sánchez Monge
om

Obispo de Santander
21-7-2023
eC

Diseño de cubierta:
od

Félix Cuadrado Basas (Sinclair)

rup

Fotocomposición:
-G

Marín Creación, S. C. – Burgos / www.marincreacion.com

ae

Impreso en España. Printed in Spain:

err

ISBN: 978-84-293-3178-3
lT

Depósito legal: BI-935-2023

Sa

Impresión y encuadernación:
Gráficas Fernan – Bilbao (Vizcaya) / graficasfernan.com
Índice

la
yo
Oración al Espíritu Santo: Adsumus Sancte

Lo
Spiritus ................................................................. 7

ión
ic ac
Prólogo del papa Francisco ................................. 9
un

Introducción ......................................................... 13
om
eC

1. De la conversación a la conversación espiri-

od

tual .................................................................. 23
rup

2. Al servicio de la sinodalidad .......................... 39

-G

3. Un ejemplo: la deliberación de los primeros

ae

jesuitas en 1539 .............................................. 49

err

4. Un modo de compartir y escuchar para acoger

lT

el Espíritu ....................................................... 61
Sa

5. Disposiciones interiores ................................. 71

6. Notas teológicas ............................................. 93
7. La realización de la conversación en el
Espíritu ........................................................... 111

ÍNDICE 5
Apéndices. Modelos de esquemas de conversación
en el Espíritu para el discernimiento ............. 129
Pautas para la conversación en el Espíritu en
un grupo (después de haber hecho la ora-
ción personal) ............................................ 132
Método general de discernimiento en común .. 136
Esquema breve del método general de discer-
nimiento en común ................................... 141

la
Método particular para la toma de una deci-

yo
Lo
sión ........................................................... 143

ión
Algunos textos bíblicos que pueden ayudar a
ic ac
profundizar en los trabajos de grupos ....... 146
un
Bibliografía citada ............................................... 151
om

Índice general ...................................................... 157

eC
od
rup
-G
ae
err
lT
Sa

6 CONVERSACIÓN ESPIRITUAL, DISCERNIMIENTO Y SINODALIDAD

Adsumus Sancte Spiritus

la
yo
Estamos ante ti, Espíritu Santo,

Lo
reunidos en tu nombre.

ión
Tú que eres nuestro verdadero consejero:
ven a nosotros,
apóyanos,
ic ac
un
entra en nuestros corazones.
om

Enséñanos el camino,
eC

muéstranos cómo alcanzar la meta.

Impide que perdamos
od

el rumbo como personas

rup

débiles y pecadoras.
-G

No permitas que
la ignorancia nos lleve por falsos caminos.
ae

Concédenos el don del discernimiento,

err

para que no dejemos que nuestras acciones se guíen

lT

por perjuicios y falsas consideraciones.

Sa

Condúcenos a la unidad en ti,

para que no nos desviemos del camino de la verdad
y la justicia,
sino que en nuestro peregrinaje terrenal
nos esforcemos por alcanzar la vida eterna.

ORACIÓN AL ESPÍRITU SANTO: ADSUMUS SANCTE SPIRITUS 7

Esto te lo pedimos a ti,
que obras en todo tiempo y lugar,
en comunión con el Padre y el Hijo
por los siglos de los siglos. Amén1.

la
yo
Lo
ión
ic ac
un
om
eC
od
rup
-G
ae
err
lT
Sa

1
Oración de invocación al Espíritu Santo para una asamblea
eclesial de gobierno o discernimiento, es decir, sinodal (https://
bit.ly/44sRXkj). Cada sesión del Concilio Vaticano II comenzó
con la oración Adsumus Sancte Spiritus, las primeras palabras del
original latino que significan: «Estamos ante ti, Espíritu Santo»,
que se ha utilizado históricamente en Concilios, Sínodos y otras
reuniones de la Iglesia durante cientos de años, siendo atribuida a
san Isidoro de Sevilla (560-636).

8 CONVERSACIÓN ESPIRITUAL, DISCERNIMIENTO Y SINODALIDAD

Prólogo

Vaticano, 21 de julio de 2023

la
Queridos hermanos:

yo
Les agradezco que hayan compartido conmigo este

Lo
libro antes de su publicación. Tal como cuentan en la

ión
introducción la historia del libro, veo que Óscar ha lo-
ac
grado arrancar a su compañero del mundo de la econo-
ic
mía en el que lo habíamos atrapado en esta casa, para
un

devolverlo a temas más espirituales. Es bonito que de

om

la conversación espiritual de sus autores haya nacido un

eC

libro sobre la conversación en el Espíritu.

od

Aunque en el libro tratan sobre todo de la conversa-

rup

ción en el Espíritu, que es la metodología adoptada en

el camino sinodal, aprecio mucho que no se queden
-G

en el método y su funcionamiento. Veo con satisfacción

ae

que ofrecen suficientes referencias históricas para que

err

el lector pueda captar la profundidad y todo lo que pone

lT

en juego este método, para convertirse realmente en una

Sa

experiencia de escucha del Espíritu. Ponen de relieve

que el método sinodal es una experiencia espiritual, en
la que el hablar y el escuchar buscan que el Espíritu
Santo sea el verdadero protagonista. Según se sigue el
hilo del libro, vamos sintiendo que el camino sinodal
que hemos emprendido como Iglesia constituye una
experiencia espiritual personal, comunitaria y eclesial,

PRÓLOGO DEL PAPA FRANCISCO 9

y requiere, por tanto, el trabajo individual de cada uno
en su interior.
La idea de la conversación como «verter en un mismo
cauce común» merecería mayor desarrollo. Comprender
así la conversación permite aportar los diferentes puntos
de vista para enriquecer el cauce común. ¡Cuánto bien
nos haría una mayor dosis de conversación en la vida
ciudadana y en la vida eclesial! En la conversación en el
Espíritu encontramos una vía de participación orientada

la
a la comunión y renovación de la misión, que alienta

yo
la participación de todos y acoge en la comunión y en la

Lo
unidad la gran diversidad que somos.

ión
La conversación en el Espíritu, el discernimiento y
ic ac
la sinodalidad consisten, más que nada, en escuchar. El
camino sinodal emprendido por la Iglesia es un cami-
un

no de escucha en profundidad. Es fundamental y muy

om

necesaria la idea que sugieren de una «escucha abierta

eC

y vulnerable» que permite que el Espíritu nos mueva y

od

nos cambie, nos haga elegir y nos lleve a concretar. Si

cada uno permanece afincado en las posiciones adopta-
rup

das previamente, no se dará verdadera conversación, ni

-G

verdadera escucha del Espíritu. No encontrará nada que

ae

pueda aprender o asimilar de los demás. Y tendrá mie-

err

do de toda elección que implique cambios. Porque solo

lT

cuando de verdad nos escuchamos salimos enriquecidos

Sa

y profundizamos en la comunión y en la misión.

Me ha parecido particularmente esencial el capítulo
sobre las disposiciones interiores. Como he dicho en más
de una ocasión, no pretendemos convocar un parlamen-
to ni tratamos de hacer un sondeo de opinión. Queremos
caminar juntos como hermanas y hermanos, escuchan-
do al Espíritu Santo. Él es el verdadero protagonista del

10 CONVERSACIÓN ESPIRITUAL, DISCERNIMIENTO Y SINODALIDAD

Sínodo. La escucha del Espíritu requiere una actitud inte-
rior determinada. La conversación en el Espíritu, el dis-
cernimiento y la sinodalidad solo pueden ir adelante si
buscamos vaciarnos de nosotros mismos para llenarnos
del Espíritu; si nuestra libertad se va liberando de amarres
materiales, ideológicos y afectivos, para permitir que sea
el Espíritu quien nos dirija más eficazmente; si cultiva-
mos en nuestro interior actitudes de humildad, hospitali-
dad y acogida, a la vez que desterramos la autosuficiencia
y la autorreferencialidad. Solo así se verán fortalecidas

la
yo
nuestra comunión y nuestra misión.

Lo
Dedican su último capítulo al modo concreto de lle-

ión
var a cabo la conversación en el Espíritu. En él explican
el método, el modo como se lleva adelante, los aspectos
ac
a los que hay que prestar especial atención. Este capítulo
ic
un
no se debe leer como si fuera la culminación del libro.
om

Todo método es medio para un fin, no es el fin. El mismo

Instrumentum laboris se refiere a la necesidad de adaptar
eC

el método a las diversas situaciones para que sirva ver-

od

daderamente de ayuda. La importancia de los anteriores

rup

capítulos reside, precisamente, en que permiten preparar

y aplicar bien la metodología.
-G

El Instrumentum laboris señalaba la necesidad de

ae

formación para la conversación en el Espíritu. Me pa-

err

rece que el libro que presentan ustedes proporciona

lT

valiosos materiales para este fin. Agradezco mucho su

Sa

esfuerzo y estoy seguro de que va a constituir una exce-

lente ayuda en muchos ambientes eclesiales.
Que Jesús les bendiga y la Virgen les cuide y, por
favor, no se olviden de rezar por mí.

PRÓLOGO DEL PAPA FRANCISCO 11

Introducción

En octubre de 2021 el papa Francisco dio apertura al

proceso sinodal1. Una invitación a «caminar juntos»

la
guiados por el Espíritu Santo en una Iglesia que afron-

yo
ta, en las distintas partes del planeta, desafíos muy di-

Lo
versos, y no pocos universales y comunes2. Cada Igle-

ión
sia particular tiene su propio contexto. Pero si hay un
ac
elemento común a la mayor parte de los contextos en
ic
que vive la Iglesia, este es la polarización de nuestras
un

sociedades. En ellas encontramos divisiones cada vez

om

más agudas, que parecen hacer imposible remar juntos

eC

en una misma dirección buscando un bien común. Los

od

vínculos de la amistad social se debilitan, la reconcilia-

rup

ción entre los polos se hace difícil, conversar buscan-

do el bien común parece una meta lejana e imposible.
-G

Hay muchas discusiones y debates abiertos en nuestras

ae

sociedades, que a veces aparecen como irreconciliables

err
lT

1
Papa Francisco, «Discurso con ocasión del momento de re-
Sa

flexión para el inicio del recorrido sinodal» (aula nueva del Sínodo,
9 de octubre de 2021), https://bit.ly/3XT1T4i
2
El Vademécum hace una breve descripción de algunos ele-
mentos comunes y dificultades que enfrenta la Iglesia hoy. Cf.
Secretaría del Sínodo de Obispos, Por una Iglesia sinodal: co-
munión, participación y misión. Vademécum para el Sínodo sobre
la Sinodalidad (aquí, p.8). En adelante Vademécum. https://bit.
ly/3XNRerw

INTRODUCCIÓN 13
para llegar a soluciones compartidas. Se echa a faltar
una conversación sobre los temas importantes, en la que
cada uno aporte su perspectiva para enriquecer el mun-
do común que compartimos.
En el proceso sinodal hay tres palabras clave: comu-
nión, participación y misión. Es precisamente la con-
versación en el Espíritu –este siempre crea armonía y
protege de la polarización– el instrumento que ha co-
menzado a ser usado en el Sínodo para que la participa-
ción de todos contribuya a la comunión y a la misión.

la
yo
Como apunta el Vademécum del Sínodo, «este camino

Lo
recorrido juntos no solo nos une más profundamente los

ión
unos a los otros como Pueblo de Dios, sino que también
nos envía a llevar adelante nuestra misión como testi-
ic ac
monio profético que abarca a toda la familia humana,
un
junto con nuestras denominaciones cristianas y otras
om

tradiciones de fe»3.
eC

El pasado mes de junio de 2023 se hizo público el

Instrumentum laboris, la hoja de ruta para la primera
od

sesión de la XVI Asamblea General Ordinaria del Síno-

rup

do de los Obispos de octubre de 2023. Una de las sec-

-G

ciones del documento (nn. 32-42) desarrolla lo que de-

nomina «la conversación en el Espíritu», definida como
ae

«una oración compartida con vistas a un discernimien-

err

to en común para el que los participantes se preparan

lT

mediante la reflexión y la meditación personales»4.

Sa

De hecho, la conversación en el Espíritu se ha reve-

lado un instrumento muy apropiado en el desarrollo de
3
Ibid.
4
Secretaría del Sínodo de Obispos, Instrumentum laboris de
la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos,
20.06.2023, n. 37, en: https://bit.ly/3pUhy6B (en adelante IL).

14 CONVERSACIÓN ESPIRITUAL, DISCERNIMIENTO Y SINODALIDAD

las distintas etapas del proceso sinodal: «Atraviesa todos
los continentes el reconocimiento de lo fructífero que ha
sido el método aquí llamado “conversación en el Espíri-
tu”, adoptado durante la primera fase y denominado en
algunos documentos “conversación espiritual” o “méto-
do sinodal”»5. Las tres expresiones se refieren a lo mismo
y pueden ser usadas, y las usaremos, indistintamente.
Estamos ante una metodología que facilita la parti-
cipación de todos al servicio de la comunión en la Igle-

la
sia y de la misión de la misma, que se ha mostrado de

yo
gran ayuda para abrir canales de comunicación y dis-

Lo
cernimiento al interior de la Iglesia. Una metodología

ión
que ha permitido que un mayor número de creyentes
ic ac
aporte lo que el Espíritu ofrece a la Iglesia a través de
ellos. En la conversación espiritual despunta el deseo
un

de un encuentro en la Iglesia marcado por el dinamis-

om

mo del Espíritu Santo; una forma de intercambio y de

eC

discernimiento que busca la verdad en el amor y que

od

escucha con atención a las diferentes voces que se dan

en del Pueblo de Dios. De este modo, ha facilitado una
rup

mayor apertura a diversas realidades y desafíos y ha

-G

sido de gran ayuda para impulsar procesos de discer-

ae

nimiento que han conducido al reconocimiento de la

err

necesidad de reformas en diferentes ámbitos de la vida

lT

eclesial.
Sa

El Intrumentum laboris subraya la importancia de

formarse en la metodología de la conversación en el Es-
píritu, como prioridad en todos los niveles de la Iglesia.
Y lo señala afirmando que «la formación para la con-
versación en el Espíritu es la formación para ser una

5
Ibid., n. 32.

INTRODUCCIÓN 15
Iglesia sinodal»6. De ahí que apele a la corresponsabili-
dad de formarse de todos los bautizados, las diferentes
vocaciones eclesiales y, de modo especial, de los minis-
tros ordenados. En estas páginas queremos ayudar a la
comprensión y aplicación de este método, así como a
profundizar en las disposiciones espirituales que buscan
que sea el Espíritu el verdadero protagonista de la con-
versación en el Espíritu o método sinodal.
Los autores de este libro somos jesuitas y, como

la
tales, más familiarizados con la tradición ignaciana, a

yo
la que recurriremos con más frecuencia para introducir

Lo
al lector en la conversación en el Espíritu. Pero somos

ión
muy conscientes de que en otras tradiciones espiritua-
ic
modos parecidos o que cumplen la misma función de
ac
les, anteriores y posteriores a san Ignacio, se encuentran
un

facilitar la participación para construir la comunión y

om

definir la misión. El discernimiento y la conversación

eC

en el Espíritu forman parte de la tradición espiritual de

od

la Iglesia desde sus primeros siglos. Al tratarse de un

instrumento para ser usado por distintas personas, en los
rup

distintos espacios y ambientes eclesiales, con buen sen-

-G

tido, el Instrumentum laboris nos pide que no seamos

ae

rígidos en la aplicación del esquema metodológico de la

err

conversación en el Espíritu; que hay que tener la capa-

lT

cidad de adaptarlo a las diferentes circunstancias y ne-

Sa

cesidades de los grupos y de las comunidades; y que en

ocasiones será necesario dar más énfasis o priorizar una
ronda más que otra. Pero que aun teniendo en cuenta las
adaptaciones que haya que hacer en algunas ocasiones,
«la intención y el dinamismo que unen los tres pasajes

6
Ibid., n. 42.

16 CONVERSACIÓN ESPIRITUAL, DISCERNIMIENTO Y SINODALIDAD

son y siguen siendo característicos del modo de proce-
der de una Iglesia sinodal»7.
Además de los aspectos metodológicos, son impor-
tantes las preguntas que nos dejaba el papa Francisco
en la homilía de la eucaristía celebrada en el lanza-
miento del Sínodo. Dichas preguntas apuntan a la sus-
tancia del proceso en que estamos, que no solo mira
hacia el interior de la Iglesia sino también hacia la
misión de la misma. Para el Santo Padre, el Sínodo

la
sobre sinodalidad tiene como finalidad el encuentro,

yo
la escucha, el discernimiento, la transformación inte-

Lo
rior, a todos los niveles de la Iglesia. «Muchas veces

ión
los Evangelios nos presentan a Jesús “en camino”,
ac
acompañando al hombre en su marcha y escuchando
ic
las preguntas que pueblan e inquietan su corazón. De
un

este modo, él nos revela que Dios no habita en luga-

om

res asépticos, en lugares tranquilos, lejos de la rea-

eC

lidad, sino que camina a nuestro lado y nos alcanza

od

allí donde estemos, en las rutas a veces ásperas de la

rup

vida». Desde esa constatación el Santo Padre nos cues-

tionaba: «¿Encarnamos el estilo de Dios, que camina
-G

en la historia y comparte las vicisitudes de la humani-

ae

dad? ¿Estamos dispuestos a la aventura del camino o,

err

temerosos ante lo incierto, preferimos refugiarnos en

lT

las excusas del “no hace falta” o del “siempre se ha

Sa

hecho así”?»8.
La sinodalidad no es un acontecimiento o un eslo-
gan. Se trata de un estilo y una forma de ser con la que
7
Ibid., n. 41.
8
Papa Francisco, «Homilía en la Basílica de san Pedro», 10
de octubre de 2021, en: https://bit.ly/3XWhSi0

INTRODUCCIÓN 17
la Iglesia quiere vivir su misión en el mundo. Es todo el
Pueblo de Dios quien la debe llevar adelante y no una
parte de él. Es a todos los miembros del cuerpo eclesial
a quienes corresponde ponerse en camino, cada uno y
cada una con sus dones y carismas, desempeñando los
diferentes servicios, unidos unos a otros como un solo
cuerpo. Es decir, que una Iglesia sinodal es aquella que
camina en comunión en pos de una misión común por
medio de la participación de todos sus miembros. En

la
estas páginas se encontrarán ayudas para que esta con-

yo
tribución de todos pueda ser desde unas disposiciones

Lo
interiores que permitan acoger lo que el Espíritu dice a

ión
la Iglesia.
ic
caminan más rápido y otros más lento. Como Juan y
ac
Cuando el pueblo de Dios se pone en camino, unos
un

Pedro cuando se dirigían al sepulcro del Señor. Juan

om

llega primero, pero espera a Pedro (Cf. Jn 20,4-8). En

eC

nuestro proceso sinodal, en que toda la Iglesia se pone

od

en camino, hay diferentes ritmos. Unos, urgidos por las

llamadas que experimentan y las necesidades que ven a
rup

su alrededor, quieren avanzar más rápido. Otros, con el

-G

deseo de hacerlo todo correctamente, quieren avanzar

ae

más seguros y más despacio. Cuando somos muchos los

err

que avanzamos juntos, como el pueblo que caminaba

lT

en el desierto, son particularmente deseables ambas ac-

Sa

titudes, la de Juan, que espera y la de Pedro, que acele-

ra el paso. Será importante mantener la «disciplina de
éxodo», de modo que, aunque el pueblo se estire no se
rompa.

La historia de este libro es la siguiente: Óscar Martín

forma parte de un equipo nombrado por la Conferencia

18 CONVERSACIÓN ESPIRITUAL, DISCERNIMIENTO Y SINODALIDAD

Episcopal Paraguaya para animar y acompañar el proce-
so sinodal en las diócesis de este país. En este acompa-
ñamiento ha utilizado frecuentemente, como se recomen-
daba, el método de la conversación espiritual para ayudar
a compartir y discernir construyendo la comunión. En
el acompañamiento del proceso de la fase continental del
Cono Sur en Brasilia, algunos obispos le insistieron en
que debía escribir un libro sobre la conversación espiri-
tual, pues se estaba mostrando muy fecunda en el proceso

la
sinodal y podría ayudar a sus comunidades y sus dióce-

yo
sis. Coincidió que, en esos meses, Juan Antonio Guerrero

Lo
compartía comunidad con Óscar en el Centro de Espiri-

ión
tualidad «Santos Mártires» en Asunción, mientras dedi-
ic ac
caba un tiempo a la oración y al estudio, focalizado es-
pecialmente en temas espirituales. Las conversaciones
un

espirituales que tuvieron lugar a lo largo de esos meses

om

lograron que la petición que se había hecho a Óscar fuese

eC

acogida por los dos, y que compartieran mucho del conte-

od

nido de este libro que decidieron escribir juntos.

Al presentar la conversación espiritual, nos aden-
rup

traremos en ella siguiendo siete momentos: en el pri-

-G

mer capítulo, distinguiremos la acción de conversar de

ae

otros modos de comunicación e introduciremos una

err

pequeña reflexión sobre la importancia de la conver-

lT

sación en la vida cívica, cuya ausencia está llevando

Sa

a nuestras sociedades por derroteros de gran polariza-

ción y desorientación en la búsqueda de la verdad y del
bien común. Trataremos, en segundo lugar, de poner
en relación la conversación espiritual con la sinoda-
lidad a la que somos convocados. Posteriormente, en
un tercer momento, la vincularemos a los procesos de
discernimiento o deliberación en común, a través de la

INTRODUCCIÓN 19
presentación de la deliberación que realizaron los pri-
meros jesuitas el año 1539. Este nos parece un ejemplo
paradigmático de conversación en el Espíritu orienta-
da a un discernimiento en común. En el paso cuarto,
nos detendremos a describir el modo de compartir y
de escuchar propios de la conversación en el Espíritu.
El quinto capítulo lo dedicaremos a las disposiciones
espirituales previas de los participantes, que son con-
dición sine qua non de la comunión y el discernimien-

la
to en común. A continuación, un apartado más reflexi-

yo
vo, ofrece unas notas teológicas sobre la conversación

Lo
en el Espíritu, el discernimiento y la sinodalidad. El

ión
séptimo y último capítulo está dedicado al modo de
ic ac
preparar una correcta conversación espiritual, sea o no
orientada a un discernimiento y una decisión; el méto-
un

do que debe seguir y el papel que ha de tener el/la fa-

om

cilitador/a, de modo que pueda ser espacio de escucha

eC

del Espíritu para fortalecer la comunión e iluminar la

od

misión. Acabamos con un apéndice en que propone-

mos unos guiones prácticos para llevar adelante una
rup

conversación espiritual, un proceso de discernimiento

-G

en común y algunas citas bíblicas que pueden iluminar

ae

momentos de la conversación en el Espíritu.

err

Agradecemos especialmente al Centro de Espiritua-

lT

lidad «Santos Mártires» de Asunción y a su comunidad

Sa

jesuita, que nos acogió y nos brindó su apoyo para co-

menzar este libro. Al subdirector del Centro de Espi-
ritualidad San Ignacio de Salamanca, al secretario de
la revista Manresa, a John Dardis y al equipo de Dis-
cerning Leadership, que desde el otro lado del Atlán-
tico nos facilitaron materiales fundamentales para su
elaboración. A Graciela Amo, Rafaelle Lanzilli, Luis

20 CONVERSACIÓN ESPIRITUAL, DISCERNIMIENTO Y SINODALIDAD

López-Yarto, José de Pablo y Gabino Uríbarri, que le-
yeron el manuscrito o partes de él, por sus pertinentes
observaciones. Al Grupo de Comunicación Loyola, en
la persona de Ramón Alfonso Díez Aragón, que nos ha
brindado todas las facilidades para la edición.

la
yo
Lo
ión
ic ac
un
om
eC
od
rup
-G
ae
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lT
Sa

INTRODUCCIÓN 21
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