Professional Documents
Culture Documents
Modulo4leccion1 220717 134512
Modulo4leccion1 220717 134512
Parte I:
Hubo un tiempo en el que saber qué querías, qué te movía, qué te inspiraba, qué hacía
arder tu alma, no resultaba una tarea complicada. Cuando somos niños, la única brújula
con la que contamos es nuestra propia intuición. Aún no vemos el mundo a través de los
cristales de las creencias, ideas y heridas que vamos adquiriendo a medida que crecemos.
Es cuando más cerca de nuestra esencia estamos. Y es por ello que reconectar con ese
niño que una vez fuimos y que aún habita en nosotros es una actividad que toma mucha
relevancia cuando estamos en el proceso de construir o reconectar con nuestro propósito.
Es probable que cuando aún eras pequeño tenías pasiones e intereses que quizá se fueron
desvaneciendo con el paso del tiempo. Actividades que disfrutabas sólo porque sí y que
fuiste empaquetando y relegando al olvido porque no eran tan útiles, tan importantes,
porque pensaste no te llevarían a ningún lado o cualquier otra idea que hayas adoptado.
Y aunque quizá tengas años sin conectar con ellas, siguen allí.
El objetivo de esta lección es que las desempolves y te des la oportunidad de descubrir si
aún recargan tu energía, si siguen brindándote esa sensación de plenitud y, de ser así,
cómo puedes integrarlas en tu vida.
Quizá puedan servirte como fuente de inspiración, como actividad para tus rutinas de
autocuidado o tal vez, conectes con ellas un estudio, ocupación o profesión. Estaremos
creando un puente que te permita reencontrar y reconectar tu versión actual y tu niño
interior.
Recuerda que eres la unión de todas las piezas de tu rompecabezas… cada pieza puede
ser una versión distinta de ti, versiones que se han quedado grabadas en tu memoria, que
hoy son recuerdos, pero que no han dejado de existir.
El niño interior se refiere al lugar psíquico en el que se albergan tus primeros recuerdos y
experiencias. Es tu esencia en su estado más puro y auténtico. No hay que pensarlo como
una parte separada de tu ser, sino más bien como la representación de todas las memorias
que llevas contigo.
Se asocia con nuestro lado creativo, espontáneo e inocente, y suele salir a la luz en
esos momentos en los que simplemente te pierdes en la diversión, cuando juegas con niños
o mascotas, cuando miras fotos viejas o vuelves a ver una película que te transporta a tu
infancia.
Puede que sensaciones intensas aparezcan cuando prestes atención a esos lugares
emocionales que no visitabas desde hace tanto tiempo. Sin embargo, a través de este
proceso podrás obtener una mejor comprensión de quién eres hoy y en quién te gustaría
convertirte. Tener presente a tu niño interior puede ayudarte no solo a conocerte, sino a
avanzar.
Reflexiona y responde:
Parte II