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    Editorial Andrés Bello “Bartama dl sx de tea wa A meee F recy patel Fi aes 2 el ios PE! eld Ee nivee WO a Creer Ml ill | Darth Magnus Chilecomparte.cl ‘COMPARTIR NO TIENB LIMITES: UND! EL CLOSET 1 fants del casein de Nuon eo el sceto de E ‘ote telco to tabia vso por princi ver hac seine anc, congo eto colgani of vezi tei feloen cov’ de sv docntono, Uns ano Blanch, igo Retoparee,emorgie ce in nats yl tec unas bolas SeRtena’ Desputs apaeio uh bozo y ramet Rigo de'un Bowes alo Tend palias clnas, bigtes Ufa pequana bebe tonsa con ides y sc presents cond sabur Hany Vilas, exec pad, 8 doa Fela perdi elu cone, jamds 4 po, po fo Saco gue nunca se 10 do 7 ieopoio, arid, uae foe para que nos cxyer ace Al pole depo de apureer cl fanasms, Leopoldo rman den repenin pare cardiac. Fue ua tte en gue ban 2 Ira teato y ¢) cons sods ss comimbre, {Sti steno el cua de Peli en buses de um prague, ‘athur Honey Willams joy os» Flea que no habla tendo fda que ver enlace de mu rato y tae creyo desde enone farsa se tara tet gaan companay conus. juntos resivan ela tas 70.0 perm saguna pel pol eni et en tego de enviudr, dota Felicia 4 deicé por entero 4 alison que mio pudo dessrolar en vids de sop do in senste clpabe leer novelas deni rsaler ‘sano ister ce We piers or delat, Muy ats aba asin cOMDS ‘ ogumune nics aaa : se ado ol eo ee exon MH Ja del ndd y, por supueso, warien 36 ‘lanch da ne Ma caries. * “ oa oer vovelas ‘de misterio te estan convirtiendo- : va Bt Foie ayer te excuce babe 64 2 wea cade, Pele eat una a dees Cp oe a aan vee ot 2 me Ste mina on eva — mens so made tv, 8 ei os ps etc 8 IS, incor oes ony om a eon aus Cemdenss Bache er eae ae eves en ganas. ¥ Uk verde 6 Sy Po be ne corms ones ‘Een, ee 2 (ORY tailors cok cio, rami os a i eansols muled ea e ‘yisitaba en su casa? cand lui eave primot FL CASO DE LOS BILLETES EN EL JARRON Una tarde, cuando dona Felicia buscaba fen el dictionario un sinérimo de tres Tetras para una polubra de su crucigrama, uno de sus weeinos lego a buscarla. Venta fen un estado de gran agitacién: Han entrdo a robar jSe llevaron ml dinero! Por favor, vaya a ver a Lauria! a sefior Gonzilez sucht copfosamente. Dore Felicia sino un agradable cosquilleo bajb su piel. —Supongo que no han ocedo nada —exckims, con tos ojos balantes. i scabe Ge acode! Recitn espent demi sesay sme enone ton a srprest 5 Conzlin stad, lett sean la ene con un patios NO #8 Que Used Conve al iageton So imese, schon Gontiler, y elvan a Ceuta, Yo ir€ dentro de unos minutos. , \ sla Ha Goong dears, fe velo st segundo piso, Anhur Henry Willams ya estaba prepart- do eno ato de le cveaion foban tn sombrero Ue Pipe Momeantey una bulanda excoces. —No, Arthur, si as conmigo, tends que ser absolu tomente invisible! iO, qué contrartedad! —_——— TT pogusna nats 0AM ERAS tas prendas de were caeron al slo 12 PR 9 Vio ues tarde, dona Felicia cama por 6 ee ao derecho asad, como, aANED fo cal con $2, co, Cam bs pasion cons Y Ua PH cond de aia cme de los Gonzilez oh we Sova na Laut, echada en un sf, mirando con AM esta el rostro alterado de su espos0. Apenas cia! ge imagine Gora y una media en 90 C8 Y Ye Bom mordazé ¥ mic apunre cor we, se ass mesas y sila, ¥ abria cajones seg quedaron Las jarranes y os edomnes! "a, qué atropellol Ie ie an se aron desconcendos 7 snmeiete coronquects 35 08 ¥ excarb sn gst, que atop a Oh ealnente srando los Pa'tretna obserrS apr. Hifloreo den mest de 7 aetna aparecan boed, 29 de, Porcine, hue de la ctimencs Ta Ge crsal baradoe ¥ Gonutier en et dn Sica, que Meme techy haba wna ess eon, do Lala Y Ue da) aes compas dots Felice daou matimonio, 12s os Ge arrimo volcada Vor tenia un Jeve acento dona Felicia, de Pea. murmur Laurty of Hing no abana en 1 Sic estaba on in afonbra dns pare, 0s alomoe 2 radon sobre TOs a tes cenicrot Sees frouata de 10s os i sillas de ie faba dona Laur, weian sus, patas J que es tan orciene eeepo raises . Braun clvae! Reyte6 con fara, sin pled por los dbjtes fos, haxa encootar el inet que eaaba cn Ti jar ehino "el dedo de dof Laina Indic el enorme Finn az y dowd que parca exarsentado en ost "ped segura de geno se levaton algo mis en seein de aes peers Fee arusindo TS ahi eatin todos detej del sllon! A ese tipo, at proce, 60 le nortan for bites. PSS Que cool bind com tan yal. Be ce ene que haber sabido que Ustedes guaraban dinero en fa cast coment Peli, pense Soepecha ‘de alguien, dofia Laura? ee ae sehr Gonzee responds por el imc es rp capi ean sue rnnlwmomada desde ese dia e& que ia tease tanto por quebrar una copa. m= "END ao, Como rome tod lo que tcf he pro- bid anc on Tog oe gi spe a ode {ue cumple con ens —resporié su mae, ea. “app que eva mi no we guia ada i eas de 22 homive que lb wane 4 buscar por las tardes ones Reltoro, apg, exalado-t or eso es que auncs me fa gusto tence a una extaa viendo en i cass PBoon La ro nS on em as wo 2 para los hombres sempre resulta mds efoto, y tarsi, pesca Ge ls empleades Peo como es Una I Gj Nene que hacerlo odo el casa SS af ey peitom 2 dace ext Agu calor, pucs —se oy6 une vor eguda. Una joven cn dbl eco clo del ine enor ia cabeza los mio deste Excche todo lo qe a » peut wscass: manasa jer, y evando me paguen el sek que me dcben et ero rs aba su peravers de cOPe 1 gut modal asp alate eho Sun orn a2 Ag No sea inoleso una no iene cigricad? Acabo de cescusar lo que dijon de eacasenome de cg eon que cigs donde et endo Riidundo,Belsato COMED THs Bonde enor sep 2 es hors, Po planchande a bras ser Gonsiler— Voy a anata In plicia y con ellos vas a entendes Woy a lamar mento aparecio en la puerta un joven 0s ee ae enida deponiva y con und rages ves veins 08 nao; mit sorprendi el dl iia Laura! Qué paso? Ia sentora Gonvler Io mix6 nervioss. =No conocia a su sobrino, Lauria dijo Felicia, sontiendo con amabilidad al recién legado, Es hilo de mi hermana y vive en el sur. Ha venido 1a Santiago a buscar trabaio —respondlo dof Laur, mizindo al oven con ojos proxectores. "—Si, busca trabalo jugando tenis..—maseull6 Belisari. [El joven, impemiznto, sequia en muda concemplacion ‘RCQUEUNE RuLCHS- A MAA COADES —Relativamente —respondié ella, mirando de reojo Ja puerta de la cocina que se habia abieto ua poquito, En ese momento, Patricia se desprendia de au anillo y se lo pasaba a su fa, que coment algo sobre la delicade- Za de'su diset. “Todas se pusieron a comentar la joya y a hablar de brllantes, en un coxorren imposible de entender. El illo ps6 de mano en mano y de dedo en dedo, durante largos inulos, EI se acabo y los scomes ambien. Y cuzndo Te- tesa, con vo ldnguida, decia que el tiempo se habia pasado volando y que tenia una cita con su pololo, se scuché la vor timida de Patricia: mie podksfan pasar mi anill, por favor? Jas mujeres se miraron entre si. rae roa, a io no lo tengo! io tampaco! HYo te bo pase a wi Sir yoa elt —iPeto alguien debe tenerlo! —dijo Felicia, repenti: namento sera —i8e habri caido debajo de la mesa, busquenlo! 10 que es yo, me tengo que is; Jorge me espera ajo Teres- ‘8, ponigndose de pie En ee momento se escuch6 un elfct, hiego otto, y las dos pueitas.que daban al comedot se cerraron. ‘Teresita, {Que Ya estaba junto ala que condueta al Hing forcees 8 ‘manila y mird a la duena de casa con ineredul dad —jEst0 tiene llave! —mrurmuré. Felicia dio unas ripidas explicaciones que nadie en- tendio, para condluir con Frmeza —Con o sin lave, es preferible que nadie se mueva de aqui hasta que el anillo aparezcaY si no es ast, desde ete mismo tei¢fono —djo, indicando el anticaado aparato que ciabe sobre una mesi de arimo— llamat® al inspec {r Soto, que es muy amigo mio. Pero, Felicia, somos tus amigas, te has vuclto loca! —dijo Ana, con la harbila temblorosa —No dudo de que sean mis amigas, pero tampoco cudo de que el anillo Io tione una de ustedes replied terminante la anciana En ese momento Patricia, en cuatro pies, revisaba la alfornbra, bajo la mesa. Slevin, despeinada, y exclam6: —No est! ;Por favor, ses tina broma, ya’ha durado, mucho! TH alboroto de explicaciones crecié bajo los oidos atentos de la anciana —A mi me io pasé Felicia. Yo lo examing, me lo probé lun segundo y después te bo past at, Teresta —djo Anz. a cova aaicms- 2m a comaions Vo me lp probs y me flouba en todos los dedas —contessé Teresita, estizindo sus dedios finos y largos. “Tienes dedlos de fideo cabello de ‘ngel, chiquilla, [No como los mios, que parecen canutones, jcasl se me queda aaseado el’ anillo en cl menique! —dljo Dos siéndose para aliviar la tensidn. No percamos el hilo —interrumpi6 Felicia 2 ‘quiéa le pasaste ol anlio, Teresita? lo dejé sobre la mesa y lo volvi6 @ coger Ana —respondio és, con tono acusador. —Si, pero fue para eniregireclo a tu mami, hijita -—eontes's Ana, molesti—. Yo no soy especilsta en joyas ‘como para examinar tanto un ano. Solo me lo probé una Yo no #6 quién me lo peed —se defends Isadom—, Jo Gnico que sé es que lo devolvi répidamente. Me asusta tener cases de tanto valor entre las manos. iA quiéa s0 lo devolviste? —pregunt Felicia, muy “—Parece que se lo pase a Dorit... <0 seria 2 Ana, que Jo tom tanias veces? — No, tantas veces? zQué te pasa conmigo, Isadora? No querds acusarme para defender a alguien? —salt6 Ana, fonbunda ia, célmense! Pue 2 mi a quien se lo entregaste, salon —interrumpi6 Doriz—. Pero lo dejé de inmediato: cen lo ajeno reina la dosgracia. Por eso es que yo nunca ‘anejo utes ajencs ni me pruebo joyas que no son mizs “TY a quién ee lo pasiste ti? —insisi6 Felicia lo dele sobre Ik mess y me parece que lo toms ‘Teresia Zo? Para qué lo iba a tomar otra vee? —contest6 a muchacha, agresiva, =A mi me parece que vi cuando Dorita lo def junto 4 ta poner, Después sélo recusdo una mano que Io tolvid coger coments Parla, pens. sreuo, Con desstento—joalquers paso Naber sd Is panes sabe en el conto de ls antsy In mest es sceonce ‘sibamos tos la misma Ciance de la Se produjo an alencio y operon a doa Flic: pare cia cant habla sts, Chance te do oents de aoe Ik estaban mirando, se puso ripidamente de pie y alzando la Sorse dig a sm amigas ‘go de escucatas con stensin, he desubieno cuit de stses tee ch anf. 1 roego 4 xn persona gue o devaelva. 8 nto hace, amar = play fo que ‘Esi cho por pars cla Porgue, "quien mene dea, ‘stand tx dees ot —coechye con or de posts, indi abu6 a boca alse vio desu So. ube todat tenaae, Teresa sain Smo wea tage sob a ‘ane con ie faldode; ladon, eu made, con las {anos fntas sobre el rego, purcla la Imagen de ua tigen colle, Doria movie sontnuamente sue ules dita wuctas a su collar de eadensy Ann estaba muy fray ri a ban fc, ig Ge tw cg De pronto Isadora dio un grt y echo lal hacia sxe “hy ay iAlgo cay sobre mi pera Dont Fela se precipi hacia Teadom que eaaba ants verde que un eon tu, ments Pt, e elas chel elo aba “Mantle! iq cx ni anil! Bruno insane Is en 6 af conversion se ransdd en forma mks. o menos soa Pasta, a con i ayn en Ce, tans de stare important al hecho ¥ core ish silo se fe eno en el soa « cove ios. nau coms Le autora del molesto incidente sespi6 aliviada Pero unos minutos mas tarce, la culpable sinti6 que unos dedas muy frfos recorrian Su cuello. Sobresaltads, ‘mito hacia aus: no habla nadie 2 sus espaldas. Los dedos ‘aumentaron la presion y ella, ahogando Un grito, se desva- necis. Cuando valvié en si, ya todas las otras invitadas babfan partido, Sélo estaban a su lado dosia Felicia, que solicit le ofrecia una taza de (inglés, y Arthur Henry Willams, que umabe en pipa. Por supuesto que silo se velan la pipa y ‘el humo en el aire 1a mujer volvi6 a desmayarse Ingenioto lector 2Qué lieve esta ver a dofa Felicia a descubrir a la culpable? EL CASO DE LAS PISTAS EN VERSO ‘Macia una semana que dofia Felicia estaba fen Ta Serena, invitada por su hermano. Vivien en una antigua casona colonial de wes patios, varios papayos numerosas hubitaciones. A Antur Henry Wilaws le ‘encantata pasesrse por os comedores, tar los visilos de encajes de algunas vents- nas y sentarse en una butzca de cucio de la gran biblorce a contemplar el cuacro dela bsabuel, ue cra igual a dofia Felicia, pero vestida al estilo viewria: BI fenasma estaba cumpliendo @ la perfeecién Las brdenes de no hacerse notar que le habia dado su amiga, ese 2 que no le hacia mucha gracia que los tres sobrin hietos rocearan a la anclana todo el dia para escuchar sus aventuras detectivescas en las que 4 no era incluido, EL tenia que mantenesse al maryen de los comentarios ni siquiera podia imervenis cuando doa Felicia obviala su Importante partcipacion en los casos. Sin embargo, ese da hines a Anhut Henry Williams se le levant6 el Animo, 1a Municipalidad de La Serena habia organizado un concurs para jovenes detectives, con lun premio que consistia en una coleccién completa de las mejores novelas policaies de todos los tempos. Tia Feli, los equipos de nifios que se_presenten * {CQL FALEEUS AA Na ORAL tienen que llevar con ellos a uno o dos adultos, ya que Imabri que recorer toda Ia ciudad. Nosotros te elegimos a 1. cep’ —Germén hablaba sin pauszs y con los ojos muy abiestos. —Varnos por parte: qué hay que hacer? Porque si se ‘wata de una gymbana, Ta Fall, no hay que corres, ni andar en bickcleta Podemos ir en Su auto... siguio Rubén, ansioso. ‘Nos van a dr cinco pistas, escritas como adivioans zas. jimaginesc, tia Feli, con usted vamos a ganar! —arted josefa, tomando con fuerza la mano de la anciana ‘Josefa, culdado con mis huesos! —ri6 dona Felicia, ‘encantada con la perspectiva, Una bor mfs tard, el equipo formado por los wes sobrinos nietos, dofa Felicia y'clfantasme —que iba de Incogeivo— se feunian en la Municipalidad con la alcalde- s8 de La Serena. Habla quince equipos de ios, seomp- fados por padres 0 tos. Todos los adultos miraron con expresion de supenioriad y algo de risa al equipo encabe- ‘do por est daa bajta y armigac, gue bablaba fuerte y e-vez en cvando murmuraba sola y codeaba e! aie Tuego de que cad grupo recibiera un distinivo con las sigs del concurs, procedieron 2 leer la primera pista ae alae esrb enn pan prepara para atevento “DESDE ARRIDA EL SANTO TE LLAMA Y SUS VOCES RESUENAN CON POBREZA FRANCISCANA SSUBSCUCHAS SUI LLAMADO. ESTE GRUPO Sf QUE GANA. los ditintosequipos leyeron con atenc6n a primera pita slieron comendo 4 Gelber, Doha Fell su {obriaos se subieron al viejo Okismosile gris, estactonado cas! un metro de le concts, Y ments es, instalada fobre un oon se agaraba sl manubno como este ese tn salvavaas los tes nics se acalorsban dscatiend “Hay quc buscar un pobre que es piciendo —insiis Joset, con ls cobers fers de a ventana 1 MSDN, ronts, tena que ser un pole qe aindivira Totardo> jones que dice “dese atiba? a intemampss Ruben Tas un santo el que llama, no un pobre —se exahs earn, golpeanc las espadas Ge tin Faia la'ancana, que en eeos momentos se concentraba en dar Io wuela de" ura esquiag, esperd a bajar a reds ‘elacters derecha de le vere para responder os tes tienen mon, un santo quelle desde aba, Pero come puede llmemor desde arb in Sano? 2 de ue santo se tra? “No me digs que vted lo sabe, ta! —Deade el praner momect, Pero quiero que usedes tambien hagan treafe las ceulas ges, como dice mi amigo Herctles Poirot ON 98 ito Rubén: El anto de pobreza fan- coscana es Son Franck! Bien ajo fa anciana,frenando braxcament frente a un liz roja, oY de donde nos lama Son Francisca? *Tibesde el ciclo —prequnts joel, por deci 3g. En ode cas, dese sia.” dio Gennd aise co it Flic i,t! Osea, yl, taliny jie compansel got Raben, sakando en 8 sen: Dofa Felicia se entusiasmé, levant6 su mano, casi atropello aun cilsta y exclams- ™ poqimcunicis uate CORDES Rumbo ala ileia de San Francisco, queidos de- tected El Oldsmobile gris vols por as calles de La Serena, a sesenls Klometos por hors. be den, con gam chumide de renos frente i iglesia de San Franco, y los es hitos subleron al campanaro. Dose Flic, que estaba mal esacionada, fos exper al volante, en amena chara oa su fntaoma quo se quchiba defo tal despises No habian pasado cuatro minutos stand ya valvian, celorados ¥ con los ojos billantes, Geman aglaba ene ‘Ss manos un clegae pergamino, Doda Felkla, que toe pea con ol moro marys per see spresuae- ys un segundo grupo, preseido por unser de bigots, entabe aia ges Pe See, leel-ange dona Fel, [aver de Gein son gave a recta: “SU APELLIDO FS VIENTO (QUE DEL. NORTE VIENE, SU VOz CANTO AL HOMBRE YALA TIERRA PERTI: Rid CON LA VIDA FIMO CON LA MUERTE.” Ab, qué ffeil is un pocta! —exclams Rubén, i, Pablo Neruda! ayo la pequeia Josefa, palmo- teando 8 la ia en el hombro. = Peto, ta. jVamos 4 tener que ira Isla Negra! —se asusto Gemein “ = Josefa, no me golpees mas el hombro porque me ‘vas a hacer choca. 'Y'no sean starantados! Obviamente cs uun poeta, pero. jaienciOn! un poeta que tlene un apellide de viens —iDe viento? le vor de Josefa era de entaficza—. & qué apelldo de viento existe? i is na aes a aa Ftc Be area ee Sis Si, Se So jaar ee alta ens eo" a ete ee ee Serbian eae ies Se Se ary oan ati diego ph er Tete ee neh ae seater deer gan ars eta ae sept i mae doe. saat oe ee Se ea gas nies ni eee Se nae a le Reo er rp eres sores, oo ee peotteaeaens cacti mestere roc agce an ld te ois ae Phe ees ee SINCANSABLE ESPERA, INMOVIL VIGILA, [BARRIENDO TINIEELAS, SU UNICO 0}0 GUINA x” LACQUER ANAS. AMA aeabES ikta el foro de La Serena! Uegaron a € en cinco minutos y dof Policia espera ls nites eontemplendo el mar desde su. avio, mientras elk sublan comendo ls escalinass del lugar. Encontaron la nueva pasts pesada on papel engomado en una de sts paredes” Baron en ttopel'y se eunieron a deliberar con lat: —sSabe, ta Palick? Eaoy seguro de que el setor de bigotes ni siguiera se dio el tabajo de adivinar que habia aque venir al fro. Esloy seguro Ge. que nos iguton a Rosottod —Fodea y no podia ser —respondié la anciane— For las dudes, shore fos despistremas Garemos Un 10460 pare llegar a! proximo lugar. Ten, desplegando el Ano papel lado que imitaba tun pongamino, lever °ALA FLOR DRL. CALIZ Ca‘Do. TA ACLINA FL RUMOR DE LA GENTE, LA ALEGRA EL GRITO DEL NINO, YALA ORACION LA LLAMAN Al FRENTE” Baas que me la yd —marrmro Rubén —Se supane que et hecho art que tovos adivinen, 3 cou de pense hn poco ge enojo tis Felis ante fos fostos desalertados de ou nis. ¥ sfadio— “Que for tene ele ctor Teg cophuel gt Jose, pulreando et hombre Si, pero rena que exo en nore fos copt hues son del sur-respondis , scbindose el homie as compantat—extamé German, “lay camipanian en alin har plico de a Sere sa? —pregun la ancina,intresade Tenth co sen ead yo hs vi en ei bro de bouinca ~dijo Gemn, emo resis » —Entonces olvidense de las campanitas. Se supone que tiene que ser una flor que ustedes, los serenenses, ven todos ls dias, “Yo me doy por vencido —murmuré Genmén, —yAhhhl j¥ 58, yo sé! Hs esa fior que hay en casi todas Tas casas y que tiene un nombre como de flor y algo mis. —se entusiasmo Josefa. “Lor... y. Flosipoadios! ~grk6 Rubén, —ikso es! —aprob6 tia Felicia, dando un goipe al manubso—, ahora slo hay que saber en qué luger esté: “La acuna cl rumor de la gente, la alegra el grito del nifio y la llama la oracion del fente” iQUE buena memors, tat —se adm Josefa —Serd un colegio, con eso de los nimores y los gritos de nince —preguré Germin. —Prio, fiz... —murmur6 alguien con vor ronea. —Parove que me esti dando frio —cjo dona Felicia, szondi—. No creo que sea un colegio, a menos que. » egunnesatces Ata ata coms iconocen.algiin colegio que tenga una iglesia al frente, y ‘que tenga un Mlripandiot —Tibio, tibia. —Quien habié? —pregun’6 Rubén, sacando la cabeza por la ventana El grito de Germén libié a doiia Felicia de dar expli —ila plaza, la plaza! Bn fa plaza hay un floriponcio y ts catedral a fren. —iEn marcha..! —dijo a anciana, encendiendo el ‘motor. El auto dio un brineo y par, tesiendo, —iAcelere, tia, acclere! —grtaron los nities, micando hace ais, pots Renolets 3 haba puexo también on —Desviese hacia La Recova y después salimos por el cena, ty par despises, por st acts. —rcomends Rubén Ustedes me guian —les dijo la anckana, levantando la cabeza por sobre el manubric, El Oldsmobile lego humeando « la plaza, seauido Por ia Renoleta que, ante la desesperacién de los nifios, Ro se les despint© €a todo et camino pese al rodeo que habian hecho. Peto el Fiat rojo se has adelantado, —iNo te preceupen, ninos, esta ver pensairemos més ‘pido! los alent6 le tia, abriéndoles la plerta trascra os tes volarom al loripondio, mientras los ocupantes iat rojo regresaban al auto con su pista en la mano Josefa saco un papel pegedo ea el tronco y por el camino leye el -ANDA ALA BIBLIOTECA: 108 ASESINOS TE ESPERAN, SUAVEMENTE MATARAN PERO NO DEJARAN HUELLA” ean rena, e [No habia ninguna duda: habia que ira la biblioceca y répido, porque ol Flat ya doblaba la esquina Doha Felicia hundié el pie en el acelendor y el cincurGn de seguridad gue estaba a si lado se abrocho solo. Mientras Iz th se estacionaba, los altos bajaron @ la carer, Cuando iban entrando, la pesada puena de le biblioteca se abnio sola, como si fuera automitica. Se aba lanzaron sobre el meson, donde una mujer rubia y con unos atos en forma de flor los esperaba con una sonrisa de complicidad, —Vienen por el concurso de Ia Municipalidad? —Si, por favor, los Libros policiales... German hablo, sin aiento. —Tercer pasilo a la derecha, Ltercer pasillo estaba repleto de libros encuadernadas fen cuero negro con letris doradas. ‘Mistenos, Robos, Detectives, OVNIS, Ascsina "Acesinatos!j£s0! —susuro Ruben a Sus hermanos, atend de que los'ninos det Fat, que buscaban en la seccion Misteros, no lo oyeran, Lee los titulos ~-cuchiches Josefa Rubén ley6 en un susurro: EL CASO DHL COLLAR DE PERIAS, MUERTE CON GUICE- at, FE MISTERIO DEL TIGRE DE TERCIOPELO, CRUMEN CON GUANTES DE SEDA, ASESINATO 4 CINCO DEDOS, SIETE DIAS DE VENENO LENTO. PERFUME MORTAL PARA UNA JOVEN HERE- ERA, MUERTE VIOLENTA ENTIRE ALGODONES, EL ASESINO CON (GUANTE DE BESSBOL ver... lee de nuevo la pistal —pidio Rubén a Germén, enfrentado a la ealeccién de libros. enn eac6 el papel del botsllo, ¥ los tres nis se inchnaron a relecr la ultima clave ‘Ya se acoteaban los gnipos del Fiat y ef del sefior de ” ocuma Basa ala cntDes bigotes. Este ditimo, que los precedia, mostraba una sonri= side triao. Qué le pasar a a va Felicl que no llega? —se desespers Josefa, tironeando ef brazo de German. —iSe'me cérr6 la mente entre tanto tio! —gimis Rubén, mirindo una y otra vez los lomos negros con letras doradas. El sefior de bigotes y sus niios se inclinaban también a revisar los tzulos de la estanteria Asesinates, ¢ intercam- biaban opiniones entre elles. El sefor del Fiat, por 30 Parte, deliberaba con los suyos frente al rotulo Mistrios. Si no nos apresuramos, nos ganarin. ¥ Ia tia Felicia ya no lego... —susur, angustiada, Josefa En tn Ultimo y desesperado iatento, Rubén volvié a revisar los tiulos de le coleccién, y cuando extendia 1a ‘mano para coger CAIMEN 4 CINCO DEDOS, resbalé de la. es- tunteria oto libro de lt coleccion. Rubén de inmediato se inelind a recogerio, y en exo una vor murmurd a sus cspalcas Caliente, cation, como el agua andionte, H1nifo, sobresaltado, apreto cl Ubro entre sus mancs ¥y mito hacia atris: 20 habla nadie. Confundido, keyé el nombre de lz novela y, como si el mismo faro de La Serena le hubiers Uuminado la mente, se dio cuenta de gue ese era el libro del que hablaba'la clave. Lo abno| ipidamente, Adentro habia un papel: “USTEDES HAN GANADO. CON INGENIO Y DEDUGCION: EL QUE PIENSA SIEMORE OBTIENE LA PRIMERA UBICACION Fectban as flichactonas de a Iusive Mute dat de ta Seria, Et premio, consisionte en tna ‘qua rarrasin $ colectin de la mejores novelas pototales do toda lee tempos, les sard eniregado en coremonia publi eh price domingo Entre 10s abrazos, las felictaciones y' los gritos, @ Rubén se le olvidé el extrafo incidente gracias al cual habian ganado. Tia Felicia, que no habia Uegado a la final por tratar de convencer a’ un cerabinero del trinsito que ella habia confundido al grifo éon el perro que habia a ss lado, supo de boca de Arthur Henry Willams la noticia: —Séio les di una manio, xy dest. ‘Tres dias despues, mientras los cobrinos acomodaban I maleta de tia Felicia ‘en el vicjo Oldsmobile, ella se despedia dickzndoles: —Tn cuanto 2 esis voces que ustedes dicen haber escuchado durante la competencia, les confeseré que yo también Iss he ofdo. Pero no se preacupen, son maravillas que nos suceden a Ios nos y 2 algunos vieos. Fl auto se alej5, con sus toses caracierisicas. ¥ de la ventana, junto al conductor, un paauelo blanco se agito en el aire Los nos se miraron, intigados, y Josefa dijo entre carcajadas; —iSon cosas que vemos los nits y algunos vijos! sido lector: Cul era el culo que cadueta ta clave de Ia quinta pista EL CASO DEL ROBO EN EI. SUPERMERCADO Dota Felicia y Anhur Hency Williams ter rminaron de hacer la lista de compres del supermercado. SW —Anotastetéinglts? A /&\ — —Yes,y también tu famoso tabaco, Ar ~ thur Henry —contest6 lla, doblando el * papel con el fistado en eu cartera, * _—Bpiramo, Policia, dear. Iré contigo —te prometes componarte como un fantasma bien ‘educado? jNo quiero pasar vertuenzas, ni tener que dar cexplicaciones ridiculas a nadie! tomate y una mulls de papes que al omperse d66rodae su cameniso porel seta odo cecil fal —djo el cabalero—,Peritan- woe agin oe eel, con cl, pe cee Cia de detergent Ia jen djando eu cateracobre el car, comens6 « pessegur iss papas que rodaban pore clo, tl eballe fo canowo. devolno a jabon en polvo al cio Y doa Fells ce encamind fur los pros que se esparcan Peligrosimerte hacia Ia mitad det paso. Pero lege tnd hue momento, una sefior que estaba en Bus de ‘onservasrebulaba olentameste con un plano pegedo one sapato, palo Bde conseras y fut secue— oe ans fore nun genio. Una mui volomincss ya ene soc soles Cle scumaatue don poquetes Ge chokes 2ects, passe, nuects y una bos de Husain Dot Fel Gay indlineda 3 50 lo, le leant le aera, eties ‘una mano invisble —que en ta confision nadie nct6— sab na rsa pa rk ate Leal canezo pam a buscar ayaa “stmero ocho a palo Bs Numa ocho al pasilo —ana von teu por todas pares ‘les pace segunios apareceron un hombre con deta Blaneo ¥ otto com un vaso de agua. Un tcer frnpleado leg & rocoger las papas, tomate y planes $n diserinados pore! coredot Tentamene vu la cal Un cuuto de hora después, dota Felicia, con ls ompras de Is semaca ya fechas, mds un puqueve de Olt ‘rgish Tafee que no exabn en 2 lists, espertoa su tam> ppt pug en cp. el lego efor de ede ize qué casuiidad: nos reuninos todos de nuevo —comenté con una soar En efeco, ena cua dl do, el seRorcanoso exten un cheque; tes, ajovencta que ibis nica ol desea labro comenzaba 2 donuts erence sobre a ita transpotadora del mes6n Ta pewom delante de dofa Felicia se reid y a anctna, ayudada por el fantasma, #406 aus cosas del carr. “gue rapides,sehord “commento ls cae er «que as mercado volaban en le toano del ancena Dowa Fein semicon cars de cent Iba a respon der lg, evan se aewcho un gro en a caf el ad — ie roaron la blletera—a jovencia del caro de sede as Raza co deepen do Se Th cos instants ta cabera del ser canoso des tecia por la puerta del supermercado. ae 1 caer, con cara molest, agtaba Una boltaen sa snano y lamba al supers Habra que anular su compra, sefiotia —auspi6 Ja cajera, duigiéacose 2 la angusiads machacha que seguia {eajimando €l contenido desu bolo “ytiene que haber sido evando dejé mi camera sobre 1 carol {Cuando se eayerom todas las cosas! —gimi la Joven, mitando alrededor con impotencia, Sus ojos se po- ssron en dois Felicia y en la seRora de mofo, y Iss indke6 on el dedo-—: [Uxedes extaban conmigo en ese momento! 1a acuvidad de las cajas excurdantes se detuvo todas las miradas se eoncentraron en la muchacha, que comenvaba a ponerse hstrca: fills estaban conmigo! —insisa una y ota vez en tono agudo, ahora con les ojo lenos de legis. “ui Mabie Se NUEVA DE LAS CAS! Dobe ser el detective del supermercado! —comeni6 exctadi una sefiom gue, un poco més atris en lt fl, levantaba la cabeza para no perder dele {ia senior de verde al la vo2 por oncima del barilo. Ese ceior canoso que acaba de sais también estaba con nosotros. 7 yo ¥. como toeaba Su caren, Senos, Cando haya a Fecoger las cosas. “—iDeiengan a ese hombre! —gits la sere dela fila de ats, adelantindose a codazos. “Yan respeuble que ee via —loriqueé la muchacha «que habia sido robada, No se preocupe, sefiorta, pag6 con cheque y regs tramos su teéfono —alo la cara, para consoaa Confimaré los datos —ahadio el supervisor, con aire preoeupado—. No vaya a eer fabo el cheque, —¥ s¢ alejo,presuroso, hacia al telefono. iis cajas haba acniciado 8 aetuidad y done Felicia a pesar de haber ya pagado y guardado sas compris, Seguin de pic junto & la oven Ta sehiora del mono tate depostaba su morcadera 2 segue ato Asn wach oteaes fn el mecon, ment a cajera la os precios y marcabe nue tanto, volvo el auperisory anunci que & page el sell caroso estaba en orden y tambien su tektono icccion Se ict ubicrlo coment, ya tranqulo por et chesue En ese momento, la cafes conabe los taro de pale its para mavea el precio, Entonces rune el ceo Parece que aot hay na equvocacon, ls palitos valen dle veces ns ge donde cog esto soon? “ibe ls esate, pues! dio el, moles —Aqut hey ura eguvocscion., Los pales no vlen lo mis que ae ava “"Exhvocslon? ahora I clieta del mono se su- fr0—iQuedaban estos sels trror en el estate de me arth, 7 los seis esaban rarcados Con el misto preco! ‘Yo bs Saquejustamente porgue vio barato de pei, ne ace lerans 7 commen 8 ra ~eiscucaste egy dea) assert fatason A oido de doa Fela. Y apeG— Fl que tompose quest Soro mirada debe esonder anc asks 'uego tangled a la joven que atin suspiraba, y le dijo: ‘Prem s “Roce proces, hi, Ya wero ;Bpcamet ¥ se fue, cas correndo, en busca de superior. No petaron ni dos minutos coun estaba de yuck con ¥ ahora si con et detective del supermercado. Li senor del moto trae aun esabs alegendo cuando fue oiigade a dar vucla el contenido de ou carter. Y como ets de Supones ali estaba fa exes robe Fil leccor ft ambien habrias culpado a Ia sefiora del mofo tirante? Por que? EL CASO DEL BIZCOCHO “ARENA” GREER) ota Fea no tenia jos, pero sf mo Goo sins sue poten Se hs a mae cra fet orl cer esueaiatae pasar los dias comingo. Sis cos scbrinas Iayores,casadss y con vars hijo, v * ‘vian fuera de Santiago: una en el Nore en ta Serena y ott en el Sur en Valdivia Fl tobrino menor y su fans vivn en una parcel en Pade Hunado y doaa Folic, cuando tha a viskarlos, goraba preparando mermeladss con los frtos que entre todos ecolecaben, sta ver tba camino a Valdivia, 2 casa de Susana. 1a ana 3 haa prec de oir din sono df bus, porque habia convicado al farm, Fe'van a encarta los tents coment en vor muy bag cont Falls a insble Arthur Henry, inealaco jun a fa ventanil. Pero tendets que tener cuidado con Sunita quo, aunque encartador, e us minds del orden. (gud Contrariedad! Tendvé que culdar la conta de (ables tan fuerte, Arthur Henty. Ese sear gordo rme ha mirado tedo e} camino de reoje, debe penser que yo 0 Gl necesitamos un buen siquiara ° Oe En ese momento el bus ents6 en Valdivia Como siempre que ta Felicia Hegabs de vist, Susana habia inviado ass amigas a tomar el té a anclana esta ez oo ofrecis para hacer un bizcocho “arena, Sina cept6 reticent, pues se desesperaba por el desparsino ue éxa siempre depba en la cocina En realidad, tal como Felicia le habia dicho a Arthur Henry, Susan exageraba la nota en cuanto a orders todo tenia que estar impecable y, sobre todo, en ai lupin, egaba a tanto su alin cle limpiezs, que los das de ria sue eran bastante seguidos en el Sur— a pobre sutra de jaquecas de puro imaginar Guo 108 zapatos himedos Ie ammuinarian cl cncerado, Sus ies de asco —~cesde ba pala hasa el phimero— tenéin un manguito tGido a crochet borcado con ls inicisl correspondiente y colgacos ambien en su percha comresponclene ¥ como tampoco aceplaba un pelo fuera de su sito, {i tad Susans ego de seat une « uo fo cman ‘ue la anciana habia trad pars hacer el bzcocho, patio a la peluqueria, ® a ‘Ta Plicia, ayudada por los nics, puso la mess: un mantel de encajey el juego de t6, con onl teil y dorada, que alguna ver us6 su abucla, Ua anciana dei el bizcocho sobre la mesa del apart- ‘dor, en una bandefa de pata redone —adch a quodar para nosctcs, 1? —progunts Marga- rit, la rayor de sds Sobrina, Aunque quede, Wesés a regimen —e responds de inmediato Sebastiin, 1 menor. " per iSebasiiin, saa’ tus manos inmundes del manel —exchins Valentina, areglando las pequenes sewviletas bordadas, con la mista metculosidad des madi Seria bueno que fuezen a ordenar sus do-mnitorios, eunabo rosin 6 por st una de las amigcs de su mamé qulere subir —Ies Fecomends tha Felicia y agregé—: Nosctres varves 2 f, quiero decir voy a i, a comprar un sollo de peliculas para nuestro ‘de mafana a Niebla, ‘Dota Felicia murmurd algo entre dientes, se puso un sombrero de feltzo de als ancha y tomé su carter —Vuelvo a las cuatro, no toguen nada en. el come- dos, nifios —recomendio antes de cevrar ka puerta Tia Felicia esté ms rara que el ato pasado: ze han fiedo que anda hablando sola? —se 1d Dargaeka, abrien- do el refrigerador, "ifs a regimen! —e records exta vex Valentin, —}yo s¢ lo que hago! Haste culndo se meten en mi vidal —respondio Margarta, fusbunda Margarita tenia quince aos y aunque era mis bien alta, us sesenta y tes lalos se le notaban, Se escucharon los pasos de Sebastian que subia con estruendo la escalera, tal como era su costumbre. Woy a estudicr metemdticas, que nadie me molest! arto antes de cerrar la puersa. ‘Al poco ito se escucharon unos compases dle rap. Abajo, en la cocina, Valentina obligo « Margarita a lavar y secar bien el vaso que acababa de usar, y slo la ‘dej6 tranquila cuando Ja vio guardindolo en’ fa dima repisa del estate. A los pocos minutos seguia los pasos de ‘su hermano menor rurbo al segundo piso. ‘Cinco minutes més tarde, Margatka entraba tambien a ‘su dormitorio 5 we La hora que pas6 hasia que Susana volvié con un peinado de globo y una chasquilla en forma de ola a punto de revenar, transcurrié plicida. Los nifos se habian ‘encerrado cada uto en Su cuarto. En un momento, uno de tellos bajp en silencio ls excalenis y regress 2 su dormntio- rio casi al instante, Luego repitis la operacién. Lo primero que hizo Stsans a) volver de la peluque “ Mequemeancmss- an masa comes felis sian nancies Sagat volumen de la misica de Sebastién, 9 eee Se ee Poptean, aig ano ce en ep la Sees i sett sls er atid cao a tee aa Sac sa tec Yen eve momento soné el unbve Susans paldeco —itar vitae Por sete no eran las amiga, sino ta Felicia que volvia de sus compras. i” : i ‘ammno rasa ° Qué te pasa, Susana? —fue lo primero que dijo al cenfrentarse con la cara pilida y Ia chasquilla curva de si sobtina, itu bizcocho... mi bizcocho...¢! bizeocho! =O), the caker

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