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Guia Tecnica Patologia Inmunologia de Camarones Penaeidos-2
Guia Tecnica Patologia Inmunologia de Camarones Penaeidos-2
Guia Tecnica Patologia Inmunologia de Camarones Penaeidos-2
PATOLOGÍA E INMUNOLOGÍA
DE CAMARONES PENAEIDOS
Editores:
Vielka Morales Q.
Jorge Cuéllar-Anjel
Autores:
Jorge Cuéllar-Anjel
Carlos Pantoja
Donald V. Lightner
Alitiene Moura Lemos Pereira
Emiko Shinozaki Mendes,
Tereza Cristina Vasconcelos Gesteira
Verónica Arns Da Silva
Andreia Benedita Poletto
María Soledad Morales-Covarrubias
Bruno Gómez Gil R.
Margherita Anna Barracco
Luciane Maria Perazzolo
Rafael Diego Da Rosa
Ignacio De Blas Giral
Ana Muniesa Del Campo
Vielka Morales Q.
Cornelio Lara
Oscar García Suárez
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Esta publicación ha sido posible gracias al Organismo Regional Internacional de Sanidad Agropecuaria a través
de su Coordinación Regional de Inocuidad de Alimentos.
Todos los derechos reservados. Se autoriza la reproducción y difusión de material contenido en esta Guía
Técnica para fines educativos u otros fines no comerciales sin previa autorización escrita de los titulares de
los derechos de autor. Se prohíbe la reproducción de material contenido en esta Guía Técnica para reventa u
otros fines comerciales sin previa autorización escrita de los titulares de los derechos de autor y del Organismo
Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria.
Derechos reservados:
© 2014 Vielka Morales Q. y Jorge Cuéllar-Anjel
(507) 6747-2159 / (507) 6949-1976
vielkamorales2003@yahoo.com
jocuan@gmail.com
Panamá
Segunda edición en español • Octubre 2014
Tiraje: 1000 ejemplares • Distribución gratuita
Impreso en Guatemala por Publicidad & Diseño Gómez (correo: publicidadydiseno28@gmail.com)
ISBN versión impresa: 978-9962-8500-7-6
ISBN versión PDF: 978-9962-8500-8-3
Diseño:
New Concept Publications, Inc.
(507) 226-7694
Panamá
2
Agradecimientos
AGRADECIMIENTOS
3
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
4
Prólogo
PRÓLOGO
De acuerdo con la FAO (2014), la producción acuícola mundial alcanzó el máximo histórico
de 90.4 millones de toneladas en 2012, de las cuales 66.6 millones de toneladas corresponden a
pescado comestible, incluida la producción de camarón de cultivo que representó el 9.7% (6.4 mi-
llones de toneladas) y el 22.4% en valor, los cuales a su vez corresponden al 15% del valor total de
los productos pesqueros comercializados a nivel internacional.
En los países que conforman OIRSA, la evolución de los volúmenes de producción indica que
la camaronicultura tuvo un crecimiento ponderado del 214% entre 2000 y 2011. El sector presentó
una tendencia ascendente sostenida hasta 2008, cuando el aumento llegó hasta el 269% y desde
entonces presentó un comportamiento fluctuante (FAO FishStat, 2014).
Si bien los resultados de la producción de la acuicultura y en especial de los camarones cul-
tivados son de alta importancia, la industria se ha visto afectada en diferentes épocas por el apareci-
miento de enfermedades. Tal es el caso de Centroamérica, que en la década de los 90 fue fuertemente
impactada por la aparición de patologías como el Síndrome de Taura y el Síndrome de la Mancha
Blanca, causando significativas pérdidas en la producción, la generación de ingresos y empleos.
En 2012 y con mayor énfasis en 2013, se evidenció una disminución de los volúmenes en la
producción mundial de camarón cultivado, debido principalmente a problemas relacionados con
enfermedades como la Enfermedad de la Necrosis Aguda del Hepatopáncreas (AHPND o EMS) en
algunos países de Asia, así como otras patologías similares en ciertos países de América Latina, lo
cual incrementó los precios del camarón en todo el mundo y afectó el consumo en los mercados
tradicionales.
Debido al alto riesgo que representan las enfermedades tanto para las poblaciones en cultivo
como para los organismos silvestres, el sector acuícola se ha visto en la necesidad de implementar
nuevas tecnologías, de aplicar las “buenas prácticas de manejo” en sus cultivos y también de capaci-
tar de forma continua al personal técnico y de campo.
El Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OIRSA), como ente rector de
la sanidad agropecuaria en la región, tiene entre sus compromisos el facilitar el desarrollo econó-
mico y social de los países miembros mediante la producción agropecuaria sana y de calidad. Con
dicho propósito, OIRSA tiene el honor de presentar la Guía Técnica de Patología e Inmunología de
Camarones Penaeidos, la cual recoge las técnicas de identificación y características de las principales
enfermedades de los camarones y que le permitirá a la región contar con una camaronicultura que
cumpla los estándares de calidad y sea altamente productiva.
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
6
Introducción
INTRODUCCIÓN
ÍNDICE
Prólogo 5
Introducción 7
Reseña de los Editores y Autores 11
Capítulo 1 Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
(Jorge Cuéllar-Anjel) 21
1.1 Anamnesis 22
1.2 Examen clínico 23
1.3 Microscopía directa (análisis en fresco) 26
1.4 Montajes en fresco (María Soledad Morales-Covarrubias) 29
1.5 Bacteriología 48
1.6 Histología 52
1.7 Pruebas con anticuerpos 59
1.8 Métodos moleculares 64
1.9 Parámetros inmunológicos 78
1.10 Microscopía electrónica de transmisión 84
1.11 Bioensayos 87
1.12 Referencias bibliográficas 92
Capítulo 2 Enfermedades virales del camarón (Carlos R. Pantoja y Donald V. Lightner) 99
2.1 Principales enfermedades y métodos de diagnóstico. 100
2.2 Virus de la necrosis hipodérmica y hematopoyética infecciosa (Infectious
hypodermic and hematopietic necrosis virus, IHHNV). 103
2.3 Virus del Síndrome de la Mancha Blanca (White spot syndrome virus, WSSV) 111
2.4 Virus del Síndrome de Taura (Taura syndrome virus, TSV) 121
2.5 Virus del síndrome de la cabeza amarilla (Yellow head syndrome virus,
YHV) 130
2.6 Virus de la mionecrosis infecciosa (Infectious myonecrosis virus, IMNV) 135
2.7 Mionecrosis infecciosa viral – IMNV y sus implicaciones en el cultivo de
camarón brasileño (Alitiene Moura Lemos Pereira, Emiko Shinozaki Men-
des, Tereza Cristina Vasconcelos Gesteira, Veronica Arns da Silva, Andreia
Benedita Poletto) 139
2.8 Penaeus vannamei nodavirus (PvNV) 149
2.9 Referencias bibliográficas 152
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Índice de Contenido
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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Reseña de los Editores
RESEÑAS
DE LOS EDITORES
VIELKA MORALES Q.
Coordinadora Programa Regional de Sanidad Acuícola
vmorales@oirsa.org
JORGE CUÉLLAR-ANJEL
Director del Departamento de Patología e Investigación
Camaronera de Coclé S.A. (CAMACO)
Aguadulce, Coclé, República de Panamá
jocuan@gmail.com
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
DE LOS AUTORES
JORGE CUÉLLAR-ANJEL
Director del Departamento de Patología e Investigación
Camaronera de Coclé S.A. (CAMACO)
Aguadulce, Coclé, República de Panamá
jocuan@gmail.com
CARLOS PANTOJA
School of Animal and Comparative Biomedical Sciences
The University of Arizona
Tucson, Arizona, USA
cpantoja@email.arizona.edu
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Reseña de los Autores
DONALD V. LIGHTNER
School of Animal and Comparative Biomedical Sciences
The University of Arizona
Tucson, Arizona, USA
dvl@u.arizona.edu
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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Reseña de los Autores
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
CORNELIO LARA
Jefe del Programa de Sanidad Acuícola
Ministerio de Desarrollo Agropecuario
Panamá
corla5430@gmail.com
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Reseña de los Autores
VIELKA MORALES Q.
Coordinadora Programa Regional de Sanidad Acuícola
bajo la Coordinación Regional de Salud Animal del
Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria
OIRSA
vmorales@oirsa.org
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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Capítulo 1
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
Capítulo 1
Jorge Cuéllar-Anjel
Director del Departamento de Patología e Investigación
Camaronera de Coclé, S.A. (CAMACO)
Coordinador del Grupo ad hoc del OIRSA en Sanidad Acuícola
Panamá
Introducción
En este Capítulo se revisan y detallan los principales métodos que sirven como herramienta
para realizar el diagnóstico de enfermedades en camarones, con base en las técnicas recientes más
utilizadas para la detección de agentes patógenos. Aunque algunos de estos procedimientos pueden
ser realizados por los mismos productores en los laboratorios de maduración y/o larvicultura o en
las fincas camaroneras, la mayoría deben ser hechos por profesionales en sanidad acuícola o por
Médicos Veterinarios especialistas. Se debe recordar siempre que el diagnóstico no lo da una prueba
de laboratorio como tal, sino la interpretación que hace el especialista en Sanidad, con base en sus
conocimientos y en la información recopilada de las pruebas de campo y de laboratorio de cada caso
en particular. Se incluye dentro de este capítulo, la participación de María Soledad Morales-Covarru-
bias con la explicación del tema “Montajes en Fresco”.
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
◊ PCR, RT-PCR, PCR en tiempo real o LAMP para pruebas directas con muestras de tejido
fresco o con ADN o ARN extraído
• Parámetros inmunológicos (hemogramas y medición de perfiles inmunes)
• Microscopía electrónica de barrido o de transmisión
• Bioensayos con portadores sospechosos o subclínicos, utilizando hospederos altamente suscep-
tibles (estadios del animal o especies) como indicadores de la presencia del patógeno.
1.1 Anamnesis
En la medida de lo posible, el profesional en sanidad acuícola responsable de realizar el diag-
nóstico de una enfermedad en una población de camarones, debe incluir una visita a la instalación
afectada (maduración, larvicultura o finca de engorde).
Para poder llegar a un correcto diagnóstico confirmatorio que permita la toma de decisiones
acertadas, una de las actividades más importantes que el especialista en sanidad acuícola debe rea-
lizar durante su visita a la granja afectada, es una correcta anamnesis. Como concepto, la anamnesis
se refiere a la recopilación de datos clínicos relevantes y a información histórica que proporciona el
productor acerca del estanque afectado. Esta información se debe ordenar y analizar como parte de
los procedimientos para emitir un diagnóstico. Durante la visita, el especialista debe recopilar toda la
información relacionada con la aparición del brote de enfermedad. Para ello, deberá realizar pregun-
tas al productor, relacionadas al menos con los siguientes puntos (entre otros):
• Condición actual del estanque (¿qué le ocurre?, ¿desde cuándo?, ¿a qué cree que se debe?,
¿cuántos estanques tienen el problema?, ¿hay alguna granja vecina afectada?)
• Densidad de siembra
• Días de cultivo
• Procedencia de las postlarvas sembradas en el estanque
• Supervivencia actual estimada
• Crecimiento semanal
• Alimentación de los camarones
◊ Tipo de alimento
◊ Frecuencia y método de suministro del alimento
◊ Cambios recientes en el tipo, consumo o suministro del alimento
◊ Tiempo de almacenamiento del alimento en la finca
• Parámetros ambientales y físico-químicos del estanque afectado
• Tipos y procedimientos de fertilización del fondo y el agua
• Brotes similares que se han presentado anteriormente en esta u otras granjas vecinas
• Relato ordenado de los sucesos o problemas clínicos que ha presentado el estanque
• Descripción del productor en términos no técnicos, de los signos de enfermedad detectados, su
progresión en la población y la duración que han tenido
• Hacer preguntas al productor, le ayuda a recordar información que no creyó importante mencio-
nar, pero que puede ayudar a la hora del diagnóstico
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Si el examen clínico debe ser realizado en un lugar diferente al de la captura y los camarones
deben ser transportados hacia otra parte, la movilización debe hacerse en recipientes con agua del
mismo estanque, limpia (sin lodo ni trozos de vegetales), con adecuada aireación y teniendo una
densidad baja (para evitar el estrés). Si los camarones van a permanecer un período de tiempo en el
recipiente antes de ser examinados, deben tener buena aireación y, en lo posible, se debe bajar la
temperatura a 25-27ºC mediante la adición de bolsas con hielo (selladas).
En estudios de camarones presumiblemente enfermos, se deben seleccionar animales mori-
bundos, descoloridos, con comportamiento inusual o que presenten anormalidades macroscópicas
con las cuales se sospeche de una enfermedad (Fig. 1.2.2 y 1.2.3). Las principales observaciones que
se deben realizar en camarones enfermos durante una valoración clínica, son las siguientes:
• Color del animal
• Tamaño del cuerpo comparado con el resto de la población (“enanismo”)
• Expansión de cromatóforos
• Deformidades en rostro, abdomen o apéndices
• Flexión del músculo abdominal (calambre)
• Color de las branquias (amarillas, marrón o negras)
• Color de los apéndices (pereiópodos, pleópodos y urópodos)
• Color de las antenas
• Edema (presencia anormal de líquido) en apéndices u otras partes del cuerpo
• Transparencia de los músculos del abdomen y del cefalotórax
• Repleción intestinal (porcentaje del intestino que se encuentra lleno)
• Textura del exoesqueleto (duro o blando)
• Tono del músculo abdominal (firme o flácido)
• Presencia de moco sobre la cutícula (resbaloso o áspero al tacto)
• Manchas, laceraciones, heridas, zonas oscuras u opacas, “astillas”
• Color del esófago y estómago (anaranjado sugiere canibalismo por mortalidad)
En cuanto a manifestaciones de enfermedad en condiciones naturales en los tanques o es-
tanques, las siguientes son observaciones frecuentes en camarones enfermos:
• Nado errático (en círculo o en línea recta sin rumbo)
• Letargia y debilidad
• Pérdida del reflejo de huida (permiten ser capturados sin ejercer resistencia)
• Vulnerabilidad a predadores (aves)
• Nado superficial (“barbeo”)
• Susceptibilidad a la hipoxia
• Disminución en la alimentación
Cuando se realicen muestreos aleatorios intencionales para estimar la prevalencia de una en-
fermedad en una población, los camarones deben ser tomados al azar (no escogidos). El tamaño de
la muestra para estudios de enfermedades en camarones, es revisado en detalle por el Dr. Ignacio de
Blas en el capítulo 7 (Vigilancia epidemiológica).
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
Los detalles relacionados con la técnica de montajes en fresco, son estudiados a continuación
por la Dra. María Soledad Morales-Covarrubias.
Tabla 1. Función principal de los órganos y tejidos externos de los camarones peneidos
(Modificada de Brock y Main, 1992).
Órgano/tejido Función
Anténulas Quimiorreceptores
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Figura 1.4.1. Órganos y tejidos externos del camarón blanco (P. vannamei).
Internos
En la parte interna se encuentra el hepatopáncreas, principal órgano digestivo en camarones,
sus funciones incluyen la secreción y síntesis de enzimas digestivas, retención temporal o cíclica de
reservas y absorción de nutrientes. El hepatopáncreas es un conjunto de túbulos y cada túbulo posee
una red de fibras musculares que permiten los movimientos peristálticos, posee células especializa-
das que tienen funciones específicas y el intestino que se considera como un tubo interno dividido
en tres partes: estomodeo o intestino anterior, mesenterón o intestino medio y proctodeo o intestino
posterior (Fig. 1.4.2). El estomodeo y el proctodeo están cubiertos de quitina. El estomodeo es una
estructura con funciones digestivas mecánicas y extracelulares. El mesenterón regula los movimientos
de lo ingerido dentro del hepatopáncreas, donde la digestión tiene lugar, y los movimientos peristál-
ticos del proctodeo expulsan las heces.
Figura 1.4.2. Órganos y tejidos internos del camarón blanco (P. vannamei).
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
Muestreo aleatorio
Cuando solamente se quiere determinar el estado de salud o cuando se busca la presencia de
algunos patógenos, se colectarán los organismos al azar y deberán tomarse de cuatro áreas diferentes
del estanque (Fig. 1.4.3). El tamaño mínimo de la muestra o submuestra debe garantizar el 95% de
confianza que, de existir una infección, ésta se incluirá en la muestra; para la prevalencia, el mues-
treo dependerá de la presencia estimada del patógeno y del nivel de confianza elegido (Tabla 2). Los
camarones seleccionados se depositan en contenedores con aireación (debe procurarse crearles el
menor estrés posible) y se trasladan de inmediato al laboratorio para su análisis.
Figura 1.4.3. Estanque de cultivo de camarón donde se observan las cuatro áreas para
la selección de organismos en muestreo aleatorio.
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
50 50 35 20 10 7 5 2
100 75 45 23 11 9 7 6
250 110 50 25 10 9 8 7
500 130 55 26 10 9 8 7
1,000 140 55 27 10 9 9 8
1,500 140 55 27 10 9 9 8
2,000 145 60 27 10 9 9 8
4,000 145 60 27 10 9 9 8
10,000 145 60 27 10 9 9 8
*Prevalencia= Porcentaje de individuos de una especie de hospedero infectada con una especie particular de parásito/número de
hospederos examinados (Margolis et al., 1982)
Esta tabla servirá de referencia para otros capítulos en donde se hará mención de la misma.
Muestreo no aleatorio
Involucra solamente organismos enfermos. Este tipo de muestreo se realiza cuando se tiene
la sospecha de la presencia de alguna enfermedad o síndrome en el estanque. Se seleccionan por lo
menos 10 organismos que presenten señales clínicas, tales como: decoloración, melanización y ne-
crosis en la cutícula, así como anorexia (falta de apetito), letargia (reducción de la actividad normal),
coloración rojiza de los pleópodos y telson, o cualquier otra alteración evidente. Los organismos
con estas características generalmente se encuentran en la compuerta de salida y entrada de los
estanques (Fig. 1.4.4). Las muestras deberán procesarse inmediatamente, de acuerdo con los procedi-
mientos que se hayan elegido para la detección del agente causal de la enfermedad. Los organismos
habrán de ser preservados en las soluciones fijadoras adecuadas, congelados o enviados vivos a los
laboratorios de diagnóstico.
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
Otras muestras
Muchas enfermedades infecciosas (como las virales) de impacto significativo en la producción
de camarones, tienen un amplio rango de especies hospederas dentro de los crustáceos, por lo que
éstos deben ser considerados como portadores potenciales de los agentes etiológicos de dichas en-
fermedades (Fig. 1.4.5), a menos que se demuestre que son refractarios a ciertos patógenos, o que las
condiciones ambientales no son propicias para la transmisión/virulencia de los mismos.
Figura 1.4.5. Especie hospedera (camarón de agua dulce) de patógenos infecciosos que tienen
que incluirse en los muestreos.
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Transporte de organismos
Los organismos son depositados en cajas con bolsas de plástico con agua del mismo estanque
y aire para su transporte. Se debe de mantener la misma temperatura del agua del estanque durante
la movilización de los organismos, por lo que es necesario en algunos lugares adicionar hielo encima
de las bolsas con aire antes de cerrar las cajas (Fig. 1.4.6).
Figura 1.4.6. Caja con bolsa de plástico, organismos y agua del estanque para
transporte.
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Fecha:_________________________________________________________________________________________
Procedencia:___________________________________________________________________________________
Especie:_______________________________________________________________________________________
No. Estanque:_____________________________ Tamaño de la muestra:_________________________________
No. de muertos:___________________________ No. de examinados:____________________________________
Estado de vida:____________________________ Peso promedio:______________ Tamaño promedio:________
Melanización Color
Necrosis Microsporidios
Síndrome del
acalambramiento
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
Figura 1.4.8. Determinación del peso en una balanza (A) y medición de la longitud (B) de un camarón.
• Se toma una muestra de urópodos (Fig. 1.4.9) y se deposita en el portaobjetos con una gota de
solución salina para detectar estadío de muda (Fig. 1.4.10).
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Figura 1.4.10. Estadíos de muda generales: A: intermuda, se observa una pequeña separación entre la
cutícula vieja y la nueva; B, por histología se observa fragmentación de la cutícula vieja e hipertrofia
de la epidermis subyacente; C: premuda: formación completa de la nueva cutícula, separación mayor
entre la vieja y la nueva cutícula; D, histología, formación de exocutícula (nueva cutícula), alarga-
miento de la epidermis subyacente; E: muda; formación completa de la nueva cutícula, separación
total entre la vieja y la nueva cutícula; F, histología, formación completa de exocutícula y alargamien-
to de la epidermis subyacente; G: No se observa ninguna separación, ni formación de nueva cutícula;
H, histología, cutícula nueva con sus cuatro capas bien diferenciadas; la epicutícula, exocutícula,
endocutícula y la capa membranosa.
Se revisa el organismos para detectar cambios de su color normal blanco translúcido (Fig.
1.4.11) a las siguientes coloraciones: coloración amarillenta, opacidad muscular, transparencia (Fig.
1.4.12), coloración rojiza (Fig.1.4.13), melanización y necrosis (Fig. 1.4.14), así como también se
pueden observar edemas, cutícula delgada (o suave) y deformaciones en el rostrum y en abdomen.
Figura 1.4.11. Espécimen adulto de P. vannamei con coloración aparente normal (blan-
co translúcido).
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
Figura 1.4.12. Juveniles de P. vannamei con coloración amarillenta (A), opacidad muscular (B) y transparencia (C),
en cefalotórax y abdomen.
Figura 1.4.13. Juveniles de P. vannamei con coloración rojiza total en cefalotórax y abdomen (A), rojiza con erosio-
nes en abdomen (B) y rojiza en urópodos, telson y sexto segmento (C).
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Región oral
De la región oral (Fig. 1.4.15 y Fig. 1.4.16), con tijeras finas, se toma una pequeña porción y
se coloca en un portaobjetos, luego se vierten unas gotas de agua de mar y se deposita en el cubreob-
jetos para la búsqueda de bacterias filamentosas (Leucothrix mucor) Flexibacter sp., melanización y
detritus del fondo de los estanques.
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
Figura 1.4.16. Región oral de juvenil de P. vannamei con melanización y necrosis multifocal.
Branquias
Con las tijeras finas, se elimina el exoesqueleto que cubre las branquias, se toma una peque-
ña porción y se coloca en el portaobjetos (Fig. 1.4.17) para buscar: cambios en la coloración de los
filamentos branquiales (como: melanización, necrosis, áreas blanquecinas bien definidas), presencia
de protozoarios como: Zoothamnium sp., Epistylis sp., Acineta, Ascophris, Bodo sp. (Tablas 4 y 5),
bacterias filamentosas (Leucothrix mucor), Flexibacter sp., detritos del fondo de los estanques, restos
de microalgas, hongos, aglomerados de bacterias, melanizaciones y deformaciones. Para detectar
cuerpos de inclusión viral en las branquias por improntas, es necesario fijarlas en solución David-
son modificada (AFA, alcohol-formaldehído-ácido clorhídrico) si van a ser procesadas de manera
inmediata; si este no es el caso, se pueden fijar en la solución de Davidson (AFA, alcohol-formalde-
hído-ácido acético), que se utiliza para fijar organismos para histología.
Figura 1.4.17. Con tijeras finas, se elimina el exoesqueleto que cubre las branquias
de juvenil de P. vannamei (1), se toma una pequeña porción (2) y se coloca en el
portaobjetos (3) para buscar cambios en la coloración de los filamentos branquiales 41
(4).
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Hepatopáncreas
Eliminar todo el exoesqueleto del cefalotórax para descubrir el hepatopáncreas y el estómago.
Se observa la coloración, el tamaño del hepatopáncreas para decidir si hay atrofia (reducción de
tamaño) o hipertrofia (aumento de tamaño) del órgano. Con unas pinzas se retira la membrana que
cubre el hepatopáncreas y con un bisturí se parte por la mitad (longitudinalmente) para observar bajo
el microscopio la coloración del fluido, textura, melanización y necrosis tubular. Se toma una peque-
ña muestra y se coloca en un portaobjetos para buscar: Baculovirus penaei, Monodon baculovirus,
cúmulos de bacterias, deformación tubular, nódulos hemocíticos, encapsulación, melanización y
necrosis de los túbulos (Fig. 1.4.18). Para la realización de improntas e histología es necesario fijar los
órganos y tejidos conforme al diagnóstico elegido.
Figura 1.4.18. Juvenil de P. vannamei con hepatopáncreas expuesto (1), con pinzas se retira la
membrana que cubre para ver su coloración (2), se toma una pequeña muestra y se coloca en un
portaobjetos (3) para buscar cúmulos de bacterias, deformación tubular, nódulos hemocíticos y en-
capsulación (4).
Intestino
El abdomen se separa del cefalotórax, del telson y se retiran los urópodos para facilitar la
extracción del intestino. Por la parte posterior se localiza el intestino (que puede contener o no hilo
fecal); con ayuda de una pinza fina, se extrae con cuidado y se coloca en el portaobjetos, procu-
rando extenderlo. Luego se vierten unas gotas de agua de mar y se presiona ligeramente al poner el
cubreobjetos. Al observar la muestra en el microscopio, se buscarán: gregarinas (diferentes estadios,
distribución y porcentaje de adherencia en el intestino), inflamación (Fig. 1.4.19), nemátodos, cuer-
pos de oclusión de Monodon baculovirus y Baculovirus penaei.
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
Figura 1.4.19. Extracción del intestino (1) para colocarse en portaobjetos, procurando extenderlo (2)
para observar inflamación (3), gregarinas en sus diferentes estadios (4), distribución y porcentaje de
adherencia en el intestino (5).
Músculo y gónadas
Se toma una pequeña muestra de músculo y de las gónadas (especialmente, aquel tejido que
muestre opacidad de tipo lechoso). Se coloca en un portaobjetos y se presiona para facilitar la bús-
queda de microsporidios. Si estos tejidos fueron parasitados, se deben observar las esporas que de
acuerdo con su tamaño y forma indican el tipo de parásito que los está afectando.
También en músculo se debe hacer un corte transversal y ponerlo entre dos portaobjetos y
observar a 4X para buscar larvas de helmintos y nemátodos anisáquidos (hacen zoonosis en huma-
nos).
Revisión de muestras
Las muestras ya preparadas se analizan en el microscopio, iniciando con el objetivo de menor
aumento y finalizando con el de mayor. Debido a su rápida descomposición, la primera muestra que
se analiza es hepatopáncreas; después se estudian las branquias, región oral, intestino y finalmente
el músculo. En la hoja de reporte se anota todo lo que se observa. Luego se calcula el porcentaje de
prevalencia y se determina el grado de severidad (Tablas 6, 7, 8 y 9), que presente la muestra anali-
zada. Se finaliza con el diagnóstico y el reporte final.
45
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Tabla 6. Guía general para dar un valor numérico cualitativo del grado de severidad a la
infección, infestación y síndrome (Adaptado de Lightner, 1996).
Trazas Presencia de parásitos o epicomensales apenas por encima del límite de detección
Presencia muy baja del patógeno, parásito o epicomensal. En aquellos en los que
1 se tiene un número estándar permitido, éste se encuentra justo arriba del límite
normal. Se observan muy pocas lesiones características de la enfermedad.
Esta tabla servirá de referencia para otros capítulos en donde se hará mención de la misma.
Tabla 7. Guía para dar un valor numérico cualitativo del grado de severidad a la deformación
tubular en hepatopáncreas con análisis en fresco
(Tomado de Morales-Covarrubias 2013).
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
Tabla 8. Guía para dar un valor numérico cualitativo del grado de severidad a la infestación
por gregarinas utilizando análisis en fresco.
(Tomado de Morales-Covarrubias, 2013).
Tabla 9. Guía para dar un valor numérico cualitativo del grado de severidad a la infestación
por epicomensales en lamelas branquiales (Tomado de Lightner, 1996 y modificado por
Morales-Covarrubias, 2013)
47
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
1.5 Bacteriología
Objetivo. El objetivo de la bacteriología en camarones, es cuantificar la cantidad y el tipo de las bac-
terias presentes en la hemolinfa, otros tejidos o larvas y postlarvas, así como en agua para / de cultivo.
Descripción. La bacteriología es un conjunto de métodos que se utiliza como apoyo en el diag-
nóstico de enfermedades en camarones, cuando se sospecha que la causa de la enfermedad está
relacionada con presencia de bacterias patógenas en el agua de cultivo o dentro del organismo de los
animales. Consiste en la siembra de muestras en diferentes medios de cultivo, para determinar si hay
crecimiento o no de bacterias potencialmente patógenas.
Metodología. Después de definir qué poblaciones afectadas se van a examinar, se debe determinar el
tipo de muestreo con base en el objetivo del estudio. El tamaño de muestra dependerá de si la captura
es aleatoria o, de si se escogen sólo animales enfermos para la evaluación (ver Capítulo 7 “Vigilancia
Epidemiológica en camaroniculura” para más detalles sobre tipo y tamaño de muestreo). Los cama-
rones que se van a someter a pruebas de bacteriología, deben estar siempre vivos; no debe realizarse
ninguna prueba bacteriológica con camarones muertos, debido a que los resultados estarán sesgados
por los cambios autolíticos (post-mortem), con los cuales se alteran las poblaciones bacterianas pre-
sentes en los tejidos, así como su crecimiento.
Antes de iniciar cualquier procedimiento bacteriológico, se deben tener previamente esteri-
lizados todos estos elementos y hay que trabajar en una superficie esterilizada o en una cámara de
flujo laminar (Fig. 1.5.2). El material de vidrio se envuelve en papel kraft y se esteriliza por la técnica
de calor seco mediante un horno a una temperatura de 180o C durante un lapso de dos horas. El agua
destilada y los medios líquidos de cultivo como el agua peptonada deben ser esterilizados por vapor
húmedo mediante un autoclave a 15 libras de presión (121o C) durante quince minutos (Fig. 1.5.2). Las
asas de platino se esterilizan directamente por calor seco mediante la llama del mechero. El momento
en el cual el asa se encuentra estéril sucede cuando ésta se torna de un color rojo incandescente. El
colador con ojo de malla fino se debe desinfectar dejándolo inmerso en una solución de hipoclorito
de sodio concentrado por 5 minutos. Posteriormente se lava con agua estéril hasta que desaparezca
el olor producido por el hipoclorito.
La toma de muestra para análisis bacteriológico de agua de transporte (de nauplios) y de
nauplios, se debe realizar, si es posible, en el momento de recibir los animales y directamente en las
bolsas o cajas de transporte. La toma de muestra de agua en tanques de larvicultura, se debe realizar
al menos en 2 puntos: la entrada del tanque y en el centro del mismo.
En el caso de larvas o postlarvas, se debe tomar una cantidad conocida o estimada (lo más
confiable posible) de animales, con el fin de emitir los resultados en función de unidades formadoras
de colonia (UFC) por animal o por gramo de larvas/postlarvas. La muestra debe ser lavada con agua
de mar estéril utilizando una malla fina o un colador pequeño de cocina, previamente desinfectado
con yodo, formalina o etanol 70%. Las muestras deben ser luego maceradas en un recipiente este-
rilizado y agregando una cantidad conocida (en mL) de agua de mar estéril o solución salina estéril
para la dilución del macerado.
En el caso de camarones juveniles, subadultos o reproductores, se recomienda desinfectar el
área de punción (seno cardíaco –dorsal– o seno hemolinfático –ventral–) con trozos de algodón im-
pregnado con etanol 70%. Con una aguja de insulina (1 mL) nueva y estéril que tenga aguja hipodér-
mica (muy delgada), se extraen al menos 100 mL de hemolinfa. Es importante que si las posibilidades
del laboratorio lo permiten, se utilice algún anticoagulante (ej.: citrato de sodio 10% en relación 1:1),
cuyo volumen dentro de la jeringa se debe considerar antes de emitir los resultados de los conteos
bacterianos en UFC.
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
BACTERIOLOGÍA
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
1.6 Histología
Objetivo. La histología es la rama del saber científico que se ocupa del estudio de los rasgos morfoló-
gicos de los tejidos, por medio de instrumentos amplificantes. La histopatología es entonces la ciencia
que estudia las modificaciones patológicas de las células y tejidos. En camarones, es una herramienta
de diagnóstico que permite identificar cambios a nivel celular en cortes de tejidos que han sido so-
metidos a procesos físicos y tinciones rutinarias o especiales. Esta técnica permite detectar factores
de mortalidad, bajo crecimiento, alteraciones de comportamiento y otros aspectos durante el cultivo
en laboratorios de larvicultura, fincas de engorde e instalaciones de maduración de reproductores.
Descripción. La histopatología permite identificar en la mayoría de los casos, la etiología de la en-
fermedad de la población de camarones bajo estudio; se logra generalmente hacer el diagnóstico de
todas las enfermedades virales reportadas en camarones (por ejemplo las causadas por IHHNV, TSV,
WSSV, HPV, YHV, BP, IMNV y PvNV), necrosis hepatopancreática (NHP), necrosis aguda del hepa-
topáncreas (EMS/AHPND), bacteriosis crónicas, gregarinas, protozoarios epicomensales, nemátodos,
enteritis hemocítica y necrosis muscular idiopática, entre otras enfermedades. Para esto, se requiere
que las láminas histológicas sean perfectamente preparadas y examinadas bajo el microscopio por el
ojo de un patólogo entrenado.
La autolisis es un proceso post-mortem que se presenta en los crustáceos extremadamente
rápido y que consiste en la ruptura celular, salida de enzimas y componentes celulares, pérdida de la
arquitectura de los tejidos y destrucción de los órganos. Por esta razón, los camarones deben morir
por efecto de la inyección del fijador y por la inmersión en el mismo, el cual debe ofrecer una rápida
penetración en los tejidos. El hepatopáncreas es el órgano más susceptible a la autolisis. Durante la
fijación, la solución debe penetrar el órgano rápidamente o los cambios post-mortem conducirán a
la pérdida de estructuras tisulares, eliminando zonas de tejido importantes para el diagnóstico.
Si existe interés en estudiar problemas de morfología externa en camarones como es el caso
de deformidades en post-larvas o presencia de epibiontes (epicomensales) adheridos a las branquias,
también se obtienen buenos resultados si los animales son fijados vivos por inmersión en una solu-
ción de formalina al 10%.
Metodología. El fijador de Davidson (Humason, 1979) es el más utilizado y sugerido para los proce-
dimientos de rutina, cuando se van a preparar muestras de camarones para análisis histopatológico.
Además de ofrecer buen nivel de detalle en el núcleo de las células, el ácido acético del fijador des-
calcifica la cutícula, evitándose así pasos adicionales de descalcificación del exoesqueleto durante el
proceso histológico. La preparación del fijador de Davidson debe realizarse con base en la siguiente
fórmula:
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
es preservar el tejido lo más intacto posible y obtener láminas de óptima calidad, las cuales permitan
nitidez óptica en la organización celular de los tejidos, cuando sean estudiados bajo el microscopio.
Fijación. Corresponde a la preservación de los tejidos en las mismas condiciones estructurales y
morfológicas del momento de la muerte del camarón, lo cual como ya se mencionó debe ser a causa
de la inyección del fijador (Davidson). Los camarones deben ser fijados vivos o moribundos, nunca
muertos y el procedimiento se debe realizar en espacio abierto o utilizando una cabina de extracción
de gases (Fig. 1.6.2). La fijación pretende desnaturalizar los componentes proteicos de las células.
Durante la fijación, se debe inyectar abundante fijador de Davidson en el hepatopáncreas, resto del
cefalotórax y en el músculo (Fig. 1.6.1). Luego, el camarón se debe sumergir en el mismo fijador
en relación 1:10 (10 veces el volumen del fijador respecto al de la muestra). En el caso de pls, se
deben sumergir directamente en el fijador. Camarones con más de 12 g se deben someter a un corte
lateral y longitudinal de la cutícula para facilitar el ingreso del fijador. El tiempo óptimo de fijación
depende del tamaño del camarón, requiriéndose 12-24 horas para postlarvas y juveniles, 48 horas
para pre-adultos y 72 horas para reproductores. Luego de estos tiempos, el fijador debe ser sustituido
completamente por etanol 70%, el cual deberá reemplazarse a los 15 días si los camarones aún no
han sido procesados, para evitar la acidificación de los órganos y tejidos.
Deshidratación e inclusión en parafina. Consiste en eliminar la mayor parte del agua tisular y reem-
plazara con parafina líquida. Se realiza con un equipo automático y programable llamado “procesa-
dor de tejidos” (Fig. 1.6.3). Durante el proceso, los tejidos pasan por 12 recipientes estando 1 hora
en cada uno, los cuales contienen etanol 70% (2), etanol 80% (2), etanol 95% (2), etanol 100% (2),
aclarante (2) (Xilol o “Hemo-De”) y finalmente parafina líquida a temperatura controlada (2).
Bloqueo. Terminada la inclusión en parafina, los tejidos son ubicados en moldes (metálicos o plásti-
cos) para formar un bloque el cual al enfriarse se solidifica, conteniendo el tejido en su interior. En la
actualidad, existen “unidades de bloqueo” (Fig. 1.6.4) que consisten en equipos que manejan simul-
táneamente superficies con varias temperaturas diferentes, las cuales permiten tener parafina líquida,
superficies de trabajo calientes y planchas con escarcha (hielo pulverizado) para el enfriamiento
final de la parafina al terminar de hacerse el bloque. Los moldes plásticos disponibles para bloqueo,
permiten además servir como base para el montaje de los tejidos en la unidad de corte (micrótomo).
Corte. Esta es la parte del proceso histológico en la cual se utiliza un equipo altamente especializado
llamado “micrótomo” (Fig. 1.6.5), nombre dado debido a que permite realizar cortes de tejido con
un espesor de 1 a 15 micras. Luego de ajustar el grosor deseado en este equipo, se realizan los cortes
mediante giros de una manivela y cada vez que se le da una vuelta, el bloque de parafina avanza la
cantidad de micras programada, hacia una cuchilla con un filo y calidad especial para histotecnia.
Recuperación del corte. Las tiras de parafina que contienen el tejido cortado, son puestas sobre un
equipo llamado “baño de recuperación de tejidos” (Fig. 1.6.6), el cual contiene agua moderadamente
caliente con temperatura controlada (40-50ºC aprox.), y puede contener una pequeña concentración
de gelatina neutra. Las tiras se expanden al entrar en contacto con el agua caliente y así se elige la que
presente una estructura más completa del tejido en cuestión. Separada de los segmentos no deseados
mediante el uso de un pincel delgado, la porción seleccionada es recuperada con una lámina por-
taobjetos, en la cual quedará adherida de manera permanente y sobre la cual se hará la tinción final.
Tinción. En camarones, el método de tinción más frecuente es el de Hematoxilina de Mayer-Bennett
y Floxina/Eosina (H&E). Esta tinción involucra las siguientes soluciones y reactivos: Hemo De, etanol,
agua destilada, hematoxilina, agua corriente, Floxina/Eosina y medio de montaje (Fig. 1.6.7). Una vez
teñidas las láminas histológicas, se sellan utilizando una gota de medio de montaje sobre el tejido y
un cubreobjetos para proteger la muestra permanentemente (Fig. 1.6.8). Los tiempos para cada paso
pueden ser consultados en Lightner, 1996.
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
HISTOLOGÍA
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HISTOLOGÍA
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HISTOLOGÍA
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HISTOLOGÍA
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
ELISA
Objetivo. La prueba de ELISA (enzyme linked immunosorbant assay) es una prueba rápida de labo-
ratorio, en la cual un anticuerpo conocido se une a un antígeno (viral o bacteriano) presente en una
muestra de camarón, con el fin de detectar la presencia o no de dicho agente patógeno en la muestra.
Esta prueba que utiliza anticuerpos para el diagnóstico de enfermedades en camarones, se llama en
español “inmunoanálisis ligado a enzimas” o también “enzimoinmunoanálisis de adsorción” (EIA).
Descripción. La técnica de ELISA utiliza anticuerpos específicos para la identificación de antígenos
también específicos, los cuales son componentes estructurales (usualmente proteínas) de agentes
patógenos o, proteínas únicas producidas o inducidas por ellos.
Esta prueba provee una estrategia de diagnóstico la cual es potencialmente muy rápida (en algunos
casos sólo tarda 1 hora), de buena sensibilidad y adaptable a un gran número de muestras en un pe-
queño espacio tanto en laboratorio como en condiciones de campo. La prueba de ELISA puede ser
realizada con base en anticuerpos policlonales o monoclonales.
Metodología. La prueba de ELISA combina la especificidad de anticuerpos con la sensibilidad de
pruebas enzimáticas simples, usando anticuerpos o antígenos acoplados a una enzima fácilmente
detectable. La ELISA puede proporcionar un sistema útil para la medición de la concentración de un
antígeno o de un anticuerpo. Hay dos variaciones principales en este método: la ELISA puede usarse
para detectar la presencia de antígenos que son reconocidos por un anticuerpo o para detectar anti-
cuerpos que reconocen un antígeno.
Una prueba de ELISA es un procedimiento que involucra cinco pasos generales: 1) cobertura
de los pozos de la microplaca con el antígeno; 2) bloqueo de todos los sitios no cubiertos por el antí-
geno, para evitar resultados falsos positivos; 3) adición de anticuerpos a los pozos de la microplaca; 4)
adición de anticuerpos conjugados con una enzima; 5) reacción de un substrato con la enzima para
producir un producto coloreado, indicando así una reacción positiva. Hay muchos tipos diferentes de
ELISA. Uno de los tipos más comunes es la ELISA “sandwich”. La siguiente es la metodología general
para realizar una prueba de ELISA. Algunos pasos, reactivos y cantidades podrán cambiar según se
requiera para cada protocolo asociado con un antígeno en particular.
Una microplaca para ELISA se debe cubrir con el antígeno apropiado, llenando los pozos
con 100 mL del antígeno diluido. Se incuba toda la noche a 4ºC y se lava el antígeno no adherido en
la microplaca mediante golpes suaves. Luego se llenan los pozos con agua destilada y se vacían de
nuevo con un golpe suave; se repite esto 2 veces más utilizando con PBS-Tritón.
Se debe bloquear la unión no específica agregando 200 mL de BSA/PBS 1% y se incuba luego
por 30-60 minutos a temperatura ambiente. Se lava la microplaca como se mencionó anteriormente
y se agregan 100 mL de las muestras diluidas en los respectivos pozos de la microplaca. Hay que
asegurarse de incluir siempre controles positivo y negativo y, si es necesario, una curva estándar. Se
incuba por 1 hora a temperatura ambiente y se repite luego el paso del lavado.
Luego se prepara la dilución apropiada del segundo paso del anticuerpo conjugado con fos-
fatasa alcalina o con peroxidasa de rábano (los anticuerpos deben ser titulados para buscar obtener
una dilución óptima).
Se deben agregar luego 100 mL del anticuerpo del segundo paso a los pozos y se incuba por
1 hora. Hay que repetir nuevamente el paso del lavado. Se prepara la solución del substrato y se
agregan 100 mL a los pozos, incubando luego a temperatura ambiente por 60 minutos. Finalmente se
agrega la solución de parada en cantidad suficiente y se leen las microplacas en un lector de ELISA
(Fig. 1.7.1 a 1.7.3).
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
INMUNOCROMATOGRAFÍA
Es una técnica de detección basada en un inmunoensayo de flujo lateral de un solo paso, en
la cual los resultados se establecen visualmente y sin el uso de ningún tipo de instrumento. El sistema
emplea una prueba con anticuerpos monoclonales para identificar selectivamente el agente en cues-
tión, con un alto grado de sensibilidad y de especificidad. El principio se basa en una prueba de tipo
“sándwich”, montada en un dispositivo plástico con una membrana. Por el momento, sólo existe de
manera comercial para la detección del virus del síndrome de la mancha blanca (WSSV). Consiste en
un anticuerpo monoclonal conjugado anti-WSSV marcado con oro coloidal, ubicado sobre una al-
mohadilla en donde se coloca la muestra. La membrana está cubierta con un anticuerpo monoclonal
anti-WSSV diferente en la zona de “prueba” (T) y con un anticuerpo Inmunoglobulina-G (IgG) en la
zona “control” (C) (Fig. 1.7.7).
En ausencia de WSSV en la muestra de camarón, el anticuerpo conjugado con oro coloidal se
mueve con la muestra por capilaridad a lo largo de la membrana a través de la zona de T hasta llegar
a la zona C. En este punto, el anticuerpo conjugado con oro coloidal reacciona con el anticuerpo IgG
para producir una banda de color rosado visible. Cuando se forma sólo una banda de color rosado
en la zona C y no hay banda en la zona T, significa que el resultado es “no detectado” (negativo, para
efectos de campo).
Cuando el WSSV está presente en la muestra de camarón, el anticuerpo conjugado con oro
coloidal reacciona con el virus WSSV para producir un complejo antígeno-anticuerpo que se mueve
hasta la zona T. En este punto, el complejo reacciona con el anticuerpo monoclonal diferente an-
ti-WSSV para producir una banda de color rosado visible. Un remanente de anticuerpo conjugado
con oro coloidal en estado libre, pasa a través de la zona T hasta la zona C. En este punto, el anti-
cuerpo reacciona con el anticuerpo IgG para producir una banda de color rosado visible (Fig. 1.7.7).
Cuando la banda de color rosa aparece tanto en la zona T como en la zona C, significa “positivo”
(Fig. 1.7.4 a 1.7.7).
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
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INMUNOCROMATOGRAFÍA
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
Se incuban las muestras con la sonda y si esta encuentra regiones del ADN viral que sean
complementarias (guardando el concepto de complementariedad de los nucleótidos A-T y C-G), se
produce anillado o hibridación (unión entre la sonda y el ADN viral), que es una molécula estable de
ADN híbrida de doble cadena.
Luego de incubar, se realiza un lavado y se agregan anticuerpos anti-digoxigenina, que han
sido previamente marcados con la enzima fosfatasa alcalina. Si la sonda está presente en las mues-
tras, se formará un complejo “antígeno-anticuerpo” con la digoxigenina. Se hace un último lavado y
se agrega una solución reveladora (BCIP-NBT), la cual reacciona con la fosfatasa alcalina y produce
una reacción colorimétrica. La intensidad del color morado que se produce, es proporcional a la
cantidad de microorganismos presentes en la muestra (partículas virales de WSSV en el caso de este
ejemplo) (Fig. 1.8.1).
• Hibridación in situ (HIS)
Objetivo. Este método permite detectar el ADN o ARN problema en el interior de las células, permea-
bilizándolas de tal forma que se permita la entrada de una sonda. Entre las principales aplicaciones
de la HIS, está la detección de ARN o ADN de origen viral o, ADN de origen bacteriano, en tejidos
de camarones fijados y procesados mediante inclusión en parafina. Por lo tanto, también es útil para
realizar estudios retrospectivos en material de archivo fijado e incluido en parafina varios años atrás.
Los patógenos o enfermedades en camarones que pueden ser detectados en la actividad me-
diante HIS, son IHHNV, TSV, YHV, WSSV y NHP.
Descripción. Es un método histoquímico que emplea la biología molecular, de la misma manera que
la inmunohistoquímica utiliza los métodos de la inmunología. Al igual que en el caso de la hibrida-
ción dot blot, la especificidad de la HIS se basa en la unión recíproca de una sonda (secuencia de oli-
gonucleótidos), con un fragmento complementario de ARN o ADN dentro de una muestra de tejido.
A diferencia del dot blot, la HIS utiliza como matriz un corte histológico de un camarón pre-
viamente fijado y procesado mediante inclusión en parafina, el cual ha sido adherido (al igual que en
la histología) sobre una lámina portaobjetos, pero en este caso la lámina debe tener una carga positi-
va. En vez de realizar el proceso de tinción como en histología, se realiza la aplicación de la sonda y
los demás componentes para la detección genómica de un agente patógeno específico.
Metodología. El procedimiento de hibridación in situ en camarones, se inicia a partir de un bloque
de parafina con una muestra de camarón, igual al que es utilizado para histología de rutina. El bloque
es ubicado en un micrótomo y se corta una sección no mayor a 4 micras de espesor, la cual debe ser
recuperada por flotación en una lámina portaobjetos cargada positivamente.
La lámina con la muestra en parafina debe ser calentada para eliminar la parafina y poste-
riormente re-hidratada utilizando xilol (o algún substituto), etanol en concentraciones descendentes
(100%, 95%, 80% y 50%), agua destilada y buffer TNE.
La lámina se incuba luego con proteinasa K en una cámara húmeda, se sumerge luego en
formaldehído y se lava con un buffer. Se aplica entonces la solución de hibridación y se incuba en
cámara húmeda. Si el ADN o ARN del patógeno que se está buscando se encuentra presente en la
muestra, en este momento se realiza el anillado o hibridación que como ya se explicó en la técnica
de dot blot, es una unión entre la sonda y fragmentos del genoma viral o bacteriano, que forma así
una molécula estable.
Para los virus IHHNV, HPV y TSV, la sonda se diluye en la solución de hibridación y es puesta
directamente sobre la muestra. En el caso de BP, MVB, WSSV y NHP, se requiere de un calentamiento
previo de la muestra para desnaturalizar el ADN baculoviral de doble cadena (dsDNA). La muestra
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
se debe incubar en cámara húmeda toda la noche; para el caso de IHHNV y HPV a 37ºC, para BP,
MVB, WSSV, NHP y TSV a 42ºC.
Posteriormente las muestras deben ser sometidas a varios lavados con buffers distintos y luego
se aplican los anticuerpos anti-digoxigenina conjugados con fosfatasa alcalina. Se incuban y poste-
riormente se hacen nuevos lavados con soluciones buffer.
Se aplica la solución de desarrollo y se frena luego la reacción cuando sea ya necesario de
acuerdo con criterios colorimétricos, lavando con soluciones buffer y después con agua destilada. Las
muestras se someten luego a tinción con el colorante “Bismark Brown Y” y se deshidratan posterior-
mente utilizando etanoles ascendentes (95% y 100%) y xilol (o algún substituto).
Sin dejar secar la muestra en este momento (y en ninguno de los procesos anteriores), se pone
una gota de medio de montaje sobre el tejido y se cubre con una laminilla o lámina cubreobjetos. Se
deja secar y se observa luego en un microscopio de campo oscuro, para detectar depósitos intracelu-
lares de precipitado negro o azul oscuro y/o alguna citopatología específica que haya sido marcada
por la sonda (Fig. 1.8.2).
La interpretación de los resultados varía en cada muestra, según el patógeno que se está bus-
cando y, por consiguiente, las células de los tejidos “blanco” que se espera hayan sido infectados por
el agente viral o bacteriano.
En el caso del virus TSV, debe considerarse que una manipulación incorrecta antes de la
prueba, puede arrojar resultados falsos negativos. Adicionalmente, las muestras para TSV deben ser
manejadas en ambientes y con reactivos libres de RNAsas; el personal debe ser entrenado en el ma-
nejo de muestras con patógenos cuyo genoma es RNA y en este tipo de ambientes libres de RNAsas.
• Reacción en cadena de la polimerasa (PCR)
Objetivo. La reacción en cadena de la polimerasa (PCR por sus siglas en inglés - polymerase chain
reaction), es un método enzimático de amplificación de secuencias específicas de ADN, que permite
la síntesis in vitro de un fragmento de ADN de forma tal que, en cada ciclo del proceso, se duplica el
número de moléculas. De esta manera, se utiliza para la detección genómica de ciertos microorga-
nismos patógenos como virus (ADN y RNA) y bacterias, en muestras de camarones o de organismos
relacionados.
La PCR es utilizada en camarones para la detección de los virus WSSV, IHHNV, BP, MBV,
SMV, YHV (grupo), IMNV, TSV y PvNV, así como de las bacterias causantes de las enfermedades NHP
(Hepatobacter penaei) y EMS/AHPND (cepa de Vibrio parahaemolyticus).
Descripción. El principio de la PCR se basa en determinar la secuencia genómica de interés y utilizar
pequeños segmentos de nucleótidos llamados iniciadores o cebadores (“primers” en Inglés), comple-
mentarios con una pequeña porción de la secuencia de nucleótidos de los extremos opuestos de las
cadenas que flanquean a dicha secuencia en el genoma de nuestro patógeno de interés, a partir de
los cuales se inicia la elongación o síntesis de nuevas cadenas en el extremo 3’ de cada iniciador.
La PCR se realiza en forma de ciclos. Cada ciclo duplica la cantidad de ADN, por lo que
permite obtener hasta un millón de copias de un solo fragmento en pocas horas. Los elementos nece-
sarios para llevarla a cabo se comercializan en forma de kits.
En esta técnica se consideran importantes los siguientes parámetros: un suministro abundante
de iniciadores y de desoxinucleótidos trifosfatados (dNTPs); una fuente renovada de ADN polimerasa
(enzima encargada de la síntesis de las cadenas complementarias) y los ciclos periódicos de cambios
de temperatura. Estos últimos consisten en: desnaturalización del ADN a 100ºC, alineamiento de los
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
iniciadores con las secuencias de interés entre 50ºC y 60ºC y, síntesis del ADN a 72ºC. Estas tempe-
raturas pueden variar de acuerdo con las condiciones de la reacción.
El poder de la amplificación con PCR es tan alto que los más pequeños contaminantes pueden
dar resultados falsos positivos, por lo que el material y las soluciones a emplear deben ser muy cui-
dadosamente manipulados y almacenados.
Metodología. La reacción en cadena de la polimerasa imita el fenómeno de replicación del ADN
que ocurre de forma natural en las células vivas. El ADN es de doble cadena (es decir, cada cadena
de ADN está apareada con otra complementaria). La aplicación de muchas técnicas moleculares
para el estudio del genoma (ADN o ARN), depende grandemente de la habilidad para extraer dichos
ácidos nucléicos. Siendo la extracción de ADN más frecuente que la de ARN, se debe considerar que
la calidad y la pureza de los ácidos nucleicos son dos de los elementos más importantes en ese tipo
de análisis. Si se desea obtener ácidos nucleicos muy purificados y que no contengan contaminantes
inhibidores de la reacción de PCR, se deben aplicar métodos de extracción adecuados para tal fin.
Algunos de los inhibidores más frecuentes reportados en la literatura, son los siguientes: Dodecilsul-
fato sódico >0,005%, Fenol >0,2%, Etanol >1%, Isopropanol >1%, Acetato de sodio >5 mM, Cloruro
de sodio >25 mM, EDTA >0,5 mM, Hemoglobina >1 g/mL, Heparina >0,15 UI/mL, Urea >20 mM
y Mezcla de reacción >15%. También se ha considerado que los ojos de las postlarvas pequeñas de
camarón, contienen inhibidores de la PCR, por lo que se recomienda extraerlos mecánicamente antes
de someter dichos organismos a macerado para extracción de ADN o ARN.
Para extraer los ácidos nucleicos del material biológico, se debe provocar una lisis celular, in-
activar las nucleasas celulares y separar los ácidos nucleicos de los restos de las células. Un acertado
procedimiento de lisis debe ser lo suficientemente fuerte para romper el material inicial complejo
(tejidos, por ejemplo), pero los suficientemente suave como para preservar el ácido nucleico que
estamos buscando extraer. Los principales procedimientos de lisis incluyen: a) rotura mecánica (ma-
ceración, lisis hipotónica, b) tratamiento químico (detergentes, agentes caotrópicos, reducción con
tioles) y c) digestión enzimática (Proteinasa K, etc.).
Es posible romper la membrana celular e inactivar las nucleasas intracelulares al mismo tiem-
po, usando una solución que contenga detergentes que solubilicen las membranas celulares y sales
caotrópicas fuertes que inactiven las enzimas intracelulares. Luego de la lisis celular y de la inactiva-
ción de las nucleasas, los restos celulares se eliminan fácilmente mediante filtración o precipitación.
Para purificar los ácidos nucleicos se suelen aplicar combinaciones de varias de las siguientes
técnicas:
• Extracción/precipitación
• Cromatografía
• Centrifugación
• Separación por afinidad
Algunas veces se hace extracción con disolventes para eliminar los contaminantes de los áci-
dos nucleicos. Tal es el caso cuando se usa una combinación de fenol y cloroformo, con el objetivo
de eliminar las proteínas. Para concentrar los ácidos nucleicos suele hacerse una precipitación con
isopropanol o con etanol. Si la cantidad de ácido nucleico a extraerse es escasa, puede añadirse a
la mezcla un portador inerte como el glucógeno, lo cual ayudará a favorecer la precipitación; esta
última también puede realizarse de manera selectiva, con concentraciones salinas elevadas (precipi-
tación salina) o con precipitación de proteínas usando cambios de pH.
Teniendo el ácido nucleico extraído, se da inicio a la reacción de PCR. Durante la replicación,
las dos cadenas se separan y una enzima especializada llamada polimerasa, hace una copia de cada
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
una de las cadenas, utilizando la original como plantilla o modelo. Normalmente este proceso de
copia tiene lugar cuando la célula se divide y da lugar a la formación de un par de cadenas hijas.
La polimerasa necesita otros tres ingredientes para copiar ADN. El primero es una reserva de
los cuatro bloques básicos que constituyen la molécula de ADN, llamados nucleótidos o bases. El
segundo es una fibra corta de ADN copiado, que se llama cebador oligonucleotídico o primer, el cual
está formado por varios nucleótidos que inician la replicación. El tercero es el cofactor MgCl2, sin el
cual la enzima no puede funcionar. La PCR utiliza estos mismos ingredientes para copiar ADN en un
microtubo de ensayo (Fig. 1.8.3).
La reacción tiene lugar en tres fases. Durante la primera o desnaturalización, la plantilla o
fragmento original de ADN se calienta hasta una temperatura de 90°C a 95°C durante 30 segundos;
esto provoca la separación de las dos cadenas. En la segunda fase, llamada anillaje, la temperatura
de la mezcla se baja hasta 55°C durante 20 segundos para que los cebadores oligonucleotídicos se
enlacen con el ADN escindido. En la tercera fase o de polimerización, la temperatura de la mezcla se
eleva hasta 75°C para que la polimerasa copie rápidamente la molécula de ADN.
Estas tres fases tienen lugar en el mismo tubo de reacción y constituyen un ciclo completo de
PCR, que se realiza en menos de dos minutos (Fig. 1.8.5). Teóricamente, el ciclo de PCR se puede
repetir sin límite, pero la polimerasa, los nucleótidos y los cebadores, deben renovarse al cabo de
unos 30 ciclos. Estos 30 ciclos, que duran menos de tres horas, bastan para producir millones de
copias de ADN.
Cuando la muestra contiene un agente patógeno cuyo genoma es ARN, se debe utilizar antes
de la PCR un paso adicional. Consiste en adicionar a la muestra (ARN extraído) una enzima llamada
transcriptasa reversa, la cual transcribe el RNA en ADN complementario (cDNA), molécula que es
un ADN de doble cadena y, por consiguiente, susceptible de ser amplificada mediante una reacción
normal de PCR. Este proceso enzimático que se requiere para los virus ARN, ha hecho que la PCR
que lo utiliza se llame “PCR con transcriptasa reversa” (RT-PCR).
La polimerasa utilizada actualmente en una PCR tradicional, es termoestable, no se inactiva
por las elevadas temperaturas de la primera reacción y es llamada Taq, debido a que proviene de
Thermus aquaticus, una bacteria termófila. Debido a que la polimerasa Taq no resulta destruida por
las elevadas temperaturas a las que transcurre la PCR, basta con añadirla una vez, al principio de la
reacción. La polimerasa Taq se fabrica ahora con bacterias modificadas genéticamente.
El uso de la PCR exige mucho cuidado. Lo más importante es evitar la contaminación de la
mezcla reactiva. Es tan sensible, que permite multiplicar accidentalmente cantidades mínimas de
ADN contaminante. Se utilizan procedimientos especiales para evitar la contaminación (Fig. 1.8.3 y
1.8.4).
La electroforesis en gel (de agarosa o de poliacrilamida), es una técnica que se emplea para
separar los ácidos nucleicos luego del proceso de amplificación mediante la PCR. La separación de
las macromoléculas depende de dos variables: carga y masa. Cuando una muestra biológica como
el ADN se mezcla en una solución tampón y se aplica a un gel, esas dos variables actúan conjunta-
mente. La corriente eléctrica de un electrodo repele las moléculas, al tiempo que el otro electrodo las
atrae. La fuerza de fricción del material de gel actúa como «tamiz molecular», separando las molécu-
las en función de su tamaño (Fig. 1.8.6). Durante la electroforesis, las macromoléculas son empujadas
a través de los poros y su tasa de migración por el campo eléctrico depende de los siguientes factores:
• Fuerza del campo
• Tamaño y forma de las moléculas
• Hidrofobicidad relativa de las muestras
• Fuerza iónica y temperatura del tampón en que se desplazan las moléculas
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Estos productos resultantes del choque respiratorio, están relacionados con la actividad anti-
microbiana en el camarón y con la destrucción de los agentes infectantes.
La producción del anión superóxido puede ser medida a partir de una muestra de hemolinfa,
mediante la estimulación de los hemocitos y la capacidad de este anión para reducir el nitro blue te-
trazolium (NBT). Esta reacción produce un depósito de color azul que se puede cuantificar utilizando
un lector de microplacas, con un filtro que tenga una longitud de onda de 620 nm.
Actividad antibacteriana del plasma: existen en la hemolinfa del camarón diferentes péptidos con
efectos antimicrobianos. Entre mayor sea la concentración y tipo distinto de éstos en un camarón
cuando se presenta el ataque de bioagresores, mayores serán las posibilidades de defensa y, por ende,
de supervivencia. La prueba de la actividad antibacteriana del plasma permite medir la inhibición del
crecimiento bacteriano, por la acción de péptidos que poseen propiedades microbicidas y que están
presentes en la hemolinfa de los camarones.
Con base en lo anterior, medir la actividad antibacteriana del plasma/suero de camarones, per-
mite estimar la capacidad de respuesta frente a una eventual infección por bacterias. Para realizar la
evaluación, se deben tener cultivos de cepas bacterianas Gram positivas y negativas en pozos de una
microplaca y se hacen diluciones seriadas del plasma/suero de camarones frente a estas bacterias.
Se analiza la inhibición del crecimiento bacteriano causada por el plasma diluido seriadamente y se
calcula luego el título de inhibición. La medición se hace por medio de un método turbidimétrico,
cuyo principio está basado en la determinación espectrofotómetrica de la turbidez causada por las
suspensiones bacterianas; si la turbidez de la muestra de bacterias disminuye en presencia de plasma,
sugiere destrucción bacteriana por presencia de los péptidos antibacterianos. La cuantificación se
realiza mediante comparación espectrofotométrica del cultivo control (sin plasma/suero) y del cultivo
con la muestra de plasma/suero, utilizando un lector de microplacas.
Cuantificación de la α2 Macroglobulina plasmática: en invertebrados, se ha sugerido que esta enzima
regula la activación del sistema de la proPO, inhibiendo a la Enzima Activadora de la proPO (EApro-
PO), razón por la cual se le considera mediador del sistema inmune. Los inhibidores de las proteasas
no sólo participan en las acciones de protección contra microorganismos patógenos, sino que tam-
bién juegan un papel importante en otros procesos de defensa como la coagulación. La cuantifica-
ción de la α2Macroglobulina plasmática, se realiza basándose en que reacciona con las proteasas sin
bloquearles el sitio activo, siendo así protegidas las proteasas e impidiendo el acceso de substratos
(proteínas) grandes. Sin embargo, péptidos pequeños como BAPNA, sí pueden ser degradados por las
proteasas que han sido atrapadas. Esta degradación produce un compuesto de color amarillo, el cual
puede medirse con un lector de microplacas usando un filtro con una longitud de onda de 415 nm.
Cuantificación de BGBP en hemolinfa: La presencia de compuestos microbianos en el sistema in-
mune puede activar directamente las funciones celulares de defensa tales como fagocitosis, melani-
zación, encapsulación y coagulación; las proteínas reconocedoras presentes en el plasma, amplían
ese estímulo. La purificación de los componentes del sistema proPO de crustáceos, ha permitido
demostrar la presencia de dos proteínas directamente relacionadas con la comunicación celular en-
tre hemocitos. Una de ellas es la proteína de unión al β-1,3-Glucano (BGBP del inglés β-1,3-Glucan
Binding Protein) presente en el plasma. La BGBP es una PRP tal como las aglutininas, capaz de reco-
nocer componentes de la pared de los hongos. La BGBP fue identificada en el plasma del camarón
Penaeus californiensis por Vargas-Albores et al. (1996). Esta proteína reacciona con los β-glucanos y el
complejo glucano BGBP induce a la degranulación y activación del sistema proPO. La otra molécula
es la proteína de unión a los lipopolisacáridos de la pared de bacterias Gram negativas (LBP del inglés
Lipopolysaccharide Binding Protein), la cual es una PRP que reconoce LPS.
La proteína LBP ha sido descrita como aglutinina y se ha probado su capacidad para aglutinar
bacterias. Una vez reacciona con el LPS o con bacterias, la proteína se une a los hemocitos y estimula
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
la fagocitosis. La BGBP y la LBP estimulan las funciones celulares solamente después de reaccionar
con los β-glucanos y con los LPS, respectivamente. La cuantificación de estas PRPs plasmáticas del
camarón, se realiza con el método de la inhibición de ELISA, el cual permite eliminar las reacciones
inespecíficas observadas entre los inmuno-reactantes y la hemolinfa.
Los anticuerpos contra BGBP reaccionan de manera específica con sus respectivos antígenos.
Con base en esto, la prueba para su detección consiste en inmovilizar antígeno (dichas proteínas) en
una microplaca de poliestireno, agregando luego los anticuerpos e incubando para que éstos reac-
cionen. Después se usa un sustrato revelador para detectar y cuantificar las PRPs. Si se ha presentado
unión antígeno-anticuerpo, la aplicación del sustrato en presencia del anticuerpo producirá una re-
acción colorimétrica medible mediante espectrofotometría, utilizando un lector de microplacas con
una longitud de onda apropiada según el método.
Concentración de hemocianina en la hemolinfa: la hemocianina es una proteína presente en la
hemolinfa de los camarones, responsable del transporte de por lo menos el 90% del oxígeno hacia
los órganos y tejidos. Esta proteína también participa en las actividades inmunológicas del camarón,
ya que los hemocitos pueden convertir porciones de la hemocianina en una enzima similar a la fe-
noloxidasa. Adicionalmente, posee homología con varias proteínas del sistema inmune. Es posible
que estímulos antigénicos desencadenen reacciones donde la hemocianina genera varias moléculas
inmunorreactivas. La medición de esta proteína a partir de muestras de hemolinfa, permite estimar
las condiciones fisiológicas del camarón y, en parte, de su capacidad de respuesta inmune. La cuan-
tificación de la hemocianina se puede realizar a través de métodos de espectrofotometría, utilizando
un lector de microplacas.
Concentración de óxido nítrico sintasa: una nueva prueba reportada en 2006 por Hernández et al.,
hace referencia a la medición de óxido nítrico sintasa (NOS) como criterio para medir la actividad de
los hemocitos dentro de las acciones de defensa de un camarón. El óxido nítrico (NO) es el producto
de la oxidación del aminoácido L-arginina a L-citrulina mediado por la NOS. Este gas transmisor de
señales producido por una célula, penetra a través de la membrana celular y regula la función de
otras células. El NO es altamente inestable transformándose rápidamente en nitritos (NO2) y nitratos
(NO3). El NO es extremadamente tóxico y por lo tanto altamente microbicida. Su producción por
los hemocitos le otorga un papel de gran importancia en el control de infecciones. El NO puede ser
analizado por quimioluminescencia, aunque debe ser liberado de la muestra y la recuperación no
siempre es adecuada. Un método para detectar y cuantificar NO, se basa en la transformación del
NO a NO2 y NO3. Para medir la concentración total de nitratos y nitritos (NOx), se pueden usar dos
métodos: la reducción química con cadmio o la reducción enzimática utilizando nitrato reductasa.
Otra forma de detectar la presencia de NOS en muestras biológicas, es utilizando anticuerpos
contra la proteína. Para ello se utilizan anticuerpos de conejo anti-iNOS (NOS inducible presente en
los hemocitos), los cuales reconocen la NOS de camarón, pudiéndose así ser utilizados para imple-
mentar un método indirecto de ELISA. Se han probado diferentes diluciones de anti-NOS y combi-
naciones de conjugado anti-conejo, habiendo sido las mejores 1:1000 y 1:40000, respectivamente.
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
1.11 Bioensayos
Objetivo. Determinar si el agente causal de una enfermedad es de origen infeccioso (virus, bacterias,
hongos, etc.), tóxico (toxinas químicas o biológicas) o, descartando lo anterior, de origen ambiental
o por manejo. También se utilizan los bioensayos para evaluar la patogenicidad de una cepa viral o
bacteriana inyectada o suministrada vía oral a camarones libres de dichos agentes patógenos.
Descripción. Los bioensayos son estudios realizados con seres vivos, camarones en este caso, duran-
te los cuales se busca reproducir una enfermedad detectada en camarones de una población deter-
minada, utilizando como organismos “blanco” camarones sanos y susceptibles a dicha enfermedad.
Éstos pueden ser “libres de patógenos específicos” (SPF por su sigla en inglés) o simplemente libres
de la enfermedad que se pretende reproducir.
La susceptibilidad de los camarones que se utilizan en los bioensayos, hacen referencia a
la especie y talla de los animales. La manera de buscar su eventual infección es utilizando batido
(macerado) de camarones enfermos y los cuales presentaban manifestaciones de la enfermedad (sa-
crificados en fase aguda). La aparición de la enfermedad en los camarones susceptibles utilizados
en un bioensayo, deberá corresponder al tiempo estimado de aparición de los signos clínicos en los
camarones que se enferman en condiciones naturales.
Metodología. Los bioensayos son pruebas de desafío, en las cuales se utiliza tejido infectante para
realizar de manera experimental, una infección per os (vía oral) en camarones susceptibles. El ma-
terial infectante debe provenir de camarones vivos (enfermos avanzados o moribundos), que hayan
presentado los mismos signos clínicos de la enfermedad en cuestión y procedentes de una misma
población (edad y talla similar). La capacidad infectante de este batido de tejido de camarones en-
fermos, depende de la carga viral o bacteriana que tenga (cantidad de microorganismos por gramo
de aquellos que causan la enfermedad) y de la cantidad de tejido que se suministre a los camarones
“blanco”. Si existen pruebas moleculares disponibles para el agente etiológico del estudio, se puede
establecer de manera semi-cuantitativa (PCR con diluciones seriadas del ADN extraído) o cuantitativa
(PCR en tiempo real), la carga del patógeno presente en cada gramo de tejido infectante.
Los camarones que van a ser infectados experimentalmente per os, deben estar libres de la
enfermedad que se pretende reproducir. Para ello, deben proceder de una población libre de pató-
genos conocidos, SPF si es posible y que no hayan presentado o estén presentando signos clínicos
de ninguna enfermedad (completamente sanos). Si existen herramientas moleculares de diagnóstico
para la enfermedad en cuestión, se debe someter a prueba un grupo de camarones procedentes de
la población de donde se utilizarán los animales “blanco” para el estudio. Éstos, deben ser negativos
(“no detectado”) al patógeno del cual es objeto el bioensayo.
Cuando el objetivo del bioensayo incluye trabajar con un patógeno desconocido y para el cual
no existen en el momento pruebas de diagnóstico moleculares, los camarones “blanco” deben ser
SPF para que los resultados de la prueba sean concluyentes.
Los bioensayos deben realizarse en instalaciones cerradas, con condiciones controladas y con
parámetros físico-químicos estables (Fig. 1.11.1 a 1.11.3). Los principales factores que deben mante-
nerse bajo control durante un bioensayo, son los siguientes:
• Calidad del agua: filtrada, recambio constante o frecuente, uso de biofiltros, condiciones bacte-
riológicas apropiadas
◊ Temperatura: del agua y del aire de la sala de bioensayos
◊ Luminosidad
◊ Oxígeno disuelto
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◊ pH
◊ Salinidad
◊ Metabolitos potencialmente tóxicos: nitritos, nitratos, amonio y fósforo
◊ Materia orgánica: sedimentada y como partículas en suspensión
• Unidades experimentales (UE): acuarios, tinas o tanques (tamaño, forma, transparencia)
◊ Densidad experimental: camarones por L, sin exceder 2.8 g/L de biomasa
◊ Material de las UE: plástico, vidrio, acrílico, fibra de vidrio, concreto, etc.
◊ Volumen de las UE: capacidad de operación
◊ Cercanía a zonas con condiciones térmicas o lumínicas intensas (ventanas, calentadores,
congeladores o tragaluces)
• Fuente del agua de recambio: reservorio de tierra, tanque sin o con filtración, recirculación, etc.
Antes de realizar un bioensayo, debe tenerse un plan de trabajo bien definido, con el proto-
colo de operación claramente comprendido por la o las personas que participarán en la prueba y
definiendo los momentos para cada fase del estudio, tales como fecha de inicio, fecha de infección,
pruebas confirmatorias de diagnóstico para la enfermedad en estudio, criterios de decisión para esta-
blecer las conclusiones finales y fecha (o condiciones particulares) para dar por terminada la prueba
(ej.: luego de 2 días en los que se haya estabilizado la mortalidad).
Las cantidades de camarones de cada UE deben ser conocidas el día de la infección experimental,
ya que este valor será el 100% de la población de partida. Con base en estos datos, se podrá establecer al
finalizar la prueba, la supervivencia en porcentaje. Los datos de mortalidad diaria deben ser observados con
rigurosidad y registrados en un formato diseñado para tal fin. Éstos permitirán conocer la tasa de mortali-
dad diaria y el momento de mayor mortalidad de la prueba, entre otra información de interés.
BIOENSAYOS
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BIOENSAYOS
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Recomendación general
Es importante hacer una eliminación adecuada de todos los productos de desecho proceden-
tes de pruebas de diagnóstico, así como de camarones que han sido utilizados para extracción de
muestras o para bioensayos. Esto, para evitar la contaminación de entornos acuáticos comerciales o
silvestres y del propio ambiente.
Apéndice
Método WSSV IHHNV BP MBV BMN SMV YHV* TSV IMNV PvNV
Directa BF / LM /
++ - +++ +++ ++ - ++ + - -
PH / DF
Bioensayos ++ + + - + - + ++ + +
TEM / SEM + + + + + ++ + + + +
PCR / RT-PCR +++ +++ +++ + - +++ +++ +++ +++ +++
*Grupo YHV. La información sobre los virus IMNV y PvNV, fue suministrada por el Dr. Carlos Pantoja de la Universidad de
Arizona, USA (2008).
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Capítulo 1 - Métodos para el Diagnóstico de Enfermedades en Camarones Penaeidos
La información sobre los virus IMNV y PvNV, fue suministrada por el Dr. Carlos Pantoja de la Universidad de Arizona, USA (2008).
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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96
Capítulo 2
98
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
CAPÍTULO 2
Introducción
En poco menos de 40 años, la camaronicultura mundial se ha desarrollado desde sus inicios a
nivel experimental, hasta volverse una industria con ingresos de billones de dólares, proveyendo de
empleo, directa e indirectamente, a cientos de miles de personas.
En los años de 1970 a 1990, la industria dependía completamente de la captura de postlarva
silvestre o de postlarva producida a partir de reproductores capturados en el océano. La mayoría de
las veces, estos animales eran capturados cerca de la región en donde serían cultivados. Los sistemas
de cultivo eran relativamente simples, se usaban tasas muy altas de recambio de agua y las medidas
de bioseguridad eran mínimas o no existentes. En esa época se sabía de muy poco de las enfermeda-
des del camarón y todavía menos sobre los mecanismos de defensa humoral y celular especialmente
contra agentes virales. Había muy pocos especialistas en enfermedades de camarón y la capacidad
de diagnóstico era muy pequeña en la mayoría de las regiones. El uso de antibióticos y agentes quí-
micos era práctica común, tanto en los laboratorios de producción de postlarvas como en las granjas.
No fue sino hasta 1987, cuando el aumento explosivo de la industria camaronícola fue acompañado
de pandemias virales, que rápidamente se puso de manifiesto que las enfermedades ocasionadas por
virus eran una de las mayores amenazas para la industria. También, rápidamente se puso en evidencia
que la dispersión de esas enfermedades, fue el resultado del traslado sin control tanto de postlarvas
como de reproductores.
La industria camaronícola del presente ha sido transformada por la necesidad de un mejor
control de las enfermedades. Como resultado de los cambios rápidos que comenzaron a principios
de los 90’s, la dependencia de la industria sobre el suministro de postlarva silvestre, o de postlarva
derivada de reproductores silvestres, ha disminuido bastante. Desde hace algunos años hasta la fe-
cha, poblaciones domesticadas de Penaeus vannamei (también llamado Litopenaeus vannamei) han
reemplazado a P. monodon como la principal especie cultivada y se encuentran ya en progreso
varios programas para la domesticación de otras especies. Se han descrito ya muchas enfermedades
importantes y aunque se han desarrollado métodos para su diagnóstico, existen todavía algunos pro-
blemas relativos a su implementación y estandarización. Las medidas de bioseguridad aplicadas a los
sistemas intensivos de cultivo se vuelven más comunes cada día. El uso de probióticos se ha vuelto
también común tanto en los laboratorios de producción de postlarva como en granjas y se investi-
gan ya medidas sofisticadas de control biológico. Como resultado de esto, el uso de antibióticos ha
disminuido y se ha vuelto más responsable. Estudios de biología molecular están ayudando a lograr
un mejor entendimiento de la relación entre el camarón y los agentes patógenos que lo atacan. El
resultado de todos estos avances ha sido un incremento continuo de la producción mundial de ca-
marón cultivado.
99
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
En el futuro, se espera que la industria camaronícola mundial tenga fácil acceso a una varie-
dad de especies de camarón domesticadas, genéticamente mejoradas y libres de los patógenos más
importantes. Métodos para el diagnóstico de estas enfermedades, tanto en el laboratorio como en
el campo, estarán disponibles en el mercado en forma de kits y se mejorarán los mecanismos para
su estandarización. De la misma manera, se espera una mejora en los métodos de bioseguridad, los
cuales serán aplicados en todos los tipos de sistemas de cultivo, aunque aquellos con mayor control
(sistemas intensivos y súper-intensivos) serán más competitivos que los sistemas más tradicionales y
extensivos. En general, la eficiencia en la producción y el desarrollo de métodos intensivos de cultivo
se verán facilitados a través del mejor entendimiento del camarón, sus patógenos, la ecología micro-
biana, y el uso de agentes antibacterianos y antivirales ambientalmente seguros.
100
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
Fuente: Adaptado a partir de: Lightner D.V. 1996. A handbook of shrimp pathology and diagnostic procedures for diseases of
cultured penaeid shrimp. World Aquaculture Society, Baton Rouge, Lousiana, USA.
Síndrome de Zoea II
Fuente: Adaptado a partir de: Lightner D.V. 1996. A handbook of shrimp pathology and diagnostic procedures for diseases of
cultured penaeid shrimp. World Aquaculture Society, Baton Rouge, Lousiana, USA.
101
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Muestreo
Muestreo aleatorio
Cuando se requiera muestrear al azar a una población para determinar el estado de salud o
la presencia de algún patógeno, el número de camarones que será necesario colectar va a depender
de la prevalencia estimada de dicho patógeno y del nivel estadístico de confianza deseado. En este
aspecto, la Tabla de Selección de tamaño de muestras tomada de Lightner 1996, es usada con fre-
cuencia como una guía para determinar el tamaño muestral. (ver Tabla 2 en Capítulo 1, página 32 y
ver capítulo 7 de Vigilancia epidemiológica del Dr. Ignacio de Blas).
Muestreo no aleatorio
En situaciones en las que los camarones presentan claramente signos externos de la enferme-
dad, se deben seleccionar por lo menos 5-10 camarones que muestren signos característicos de la
enfermedad de la que se sospecha o bien alguna otra anormalidad.
Para asegurar un diagnóstico acertado, las muestras deben de ser procesadas de inmediato, o a
la brevedad posible, de acuerdo al procedimiento o procedimientos que se hayan seleccionado. Los
especímenes deberán ser preservados con solución fijadora adecuada o bien empacados en hielo o
congelados dentro de un contenedor estéril (por ejemplo, bolsas de plástico).
102
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
Grados de severidad
Una forma de documentar de manera semicuantitativa las observaciones que servirán para
alcanzar un diagnóstico, es a través de la asignación de grados de severidad. Dicha asignación puede
referirse a una lesión en particular o al proceso infeccioso en general. Ver referencia de la Tabla 6 del
Capítulo 1, página 46 (Lightner, 1996), donde se ilustra el criterio que se utiliza para la asignación de
los grados de severidad. El valor numérico asignado también es útil para determinar tendencias y para
la toma de decisiones de manejo tales como: cuándo aplicar un tratamiento, cuándo cosechar, etc.
Nombre de la enfermedad
Necrosis hipodérmica y hematopoyética infecciosa (enfermedad IHHN); síndrome de la defor-
midad y enanismo (“runt deformity syndrome” o RDS).
103
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Rango geográfico
• Ampliamente distribuido en instalaciones de cultivo en las Américas y Asia incluyendo:
◊ América: sureste de los Estados Unidos, México, América Central, Ecuador, Perú, Brasil y
numerosas islas del Caribe
◊ Pacífico Central: Hawái, Guam, Tahití y Nueva Caledonia
◊ Asia e Indo-Pacífico: Singapur, Filipinas, Tailandia, Malasia e Indonesia
• Se presume que IHHN es enzoótico en camarones penaeidos silvestres del Indo-Pacífico; ha sido
detectado también en camarones silvestres del Ecuador, la costa occidental de Panamá y la costa
occidental de México
• Se ha demostrado la existencia de diferencias a nivel de genoma entre cepas de IHHNV de dis-
tintas regiones geográficas (Tang, K.F.J., et al., 2003). Asimismo se ha reportado la existencia de
la integración de una porción del genoma de IHHNV al genoma de una población silvestre de
Penaeus monodon en África (Tang, K.F.J. & Lightner, 2006). Se desconoce hasta este momento
si este fenómeno de integración de una porción del genoma de IHHNV pudiera haber ocurrido
en otras poblaciones de P. monodon o en otras especies de camarones penaeidos. En el caso del
IHHNV integrado al genoma del camarón, la porción integrada no es infecciosa. Por lo tanto, ha
sido necesario desarrollar un método de PCR (Tang et al., 2007) para poder diferenciar camaro-
nes infectados con IHHNV (IHHNV infeccioso) y camarones no infectados por IHHNV (IHHNV
parcialmente integrado al genoma del camarón = No infeccioso).
Especies afectadas
• Se han observado infecciones naturales en: P. stylirostris, P. vannamei, P. occidentalis, P. califor-
niensis, P. monodon, P. semisulcatus y P. japonicus
• Debido a que otras especies de camarones penaeidos (P. setiferus, P. duorarum, y P. aztecus) han
podido ser infectadas en condiciones de laboratorio, es probable que también ocurran infeccio-
nes naturales en otras especies
• Especies tales como P. indicus y P. merguiensis parecen ser refractarias a IHHNV
• Aparentemente los miembros sobrevivientes de poblaciones que han sido infectadas por IHHNV
pueden volverse portadores del virus de por vida y transmitirlo a su progenie y a otras poblacio-
nes por medio de transmisión de tipo vertical y horizontal
104
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
P. stylirostris
IHHN es una enfermedad de tipo agudo que puede ocasionar altas mortandades en juveniles
de esta especie. Larvas y postlarvas infectadas verticalmente no se muestran enfermas sino hasta
alcanzar aproximadamente el estadío de PL35 o un poco después. Una vez alcanzada esta edad,
es posible observar signos externos, los cuales son seguidos por mortandades masivas. En animales
infectados horizontalmente, el período de incubación y la severidad de la infección dependen, hasta
cierto punto, del tamaño/edad, siendo los juveniles pequeños los más severamente afectados. Los
adultos raramente presentan signos de la enfermedad o mortandades.
Los signos externos de la enfermedad no son específicos de IHHN, pero en la etapa aguda
de la infección, los juveniles de P. stylirostris muestran una marcada reducción en el consumo de
alimento, lo cual es seguido por cambios en el comportamiento y la apariencia. Durante la fase
aguda, se ha observado que los camarones de esta especie nadan lentamente hacia la superficie en
donde se quedan completamente quietos, se voltean con el vientre hacia arriba, y luego se hunden
lentamente hasta el fondo del estanque. Se ha visto que los camarones que muestran esta conducta,
pueden hacerlo por horas hasta que se vuelven demasiado débiles para continuar o hasta que son
canibalizados por sus congéneres más sanos. En este estadío de la infección, P. stylirostris puede
llegar a exhibir una coloración blanquecina con manchas de color crema, lo cual le da al camarón
una apariencia moteada (Fig. 2.2.1) Este patrón moteado no es definitivo y tiende a desaparecer un
poco más adelante. También se ha observado frecuentemente que en P. stylirostris y en P. monodon
infectados por IHHNV, se tiende a adquirir una coloración azulosa bastante distintiva y una opacidad
de la musculatura abdominal.
Si la enfermedad progresa hasta alcanzar una fase crónica, P. stylirostris también puede sufrir
de lo que se conoce como síndrome de las deformaciones y el enanismo (RDS).
P. vannamei
En esta especie, IHHN es típicamente una enfermedad de tipo crónico. El síndrome de las
deformidades y el enanismo (“Runt Deformity Syndrome” o RDS) que afecta a esta especie ha sido
ligado a IHHNV (Fig. 2.2.2). Típicamente, los juveniles afectados por RDS exhiben rostros doblados
o deformes, antenas arrugadas, caparazón áspero o rugoso, y otras deformidades (Fig. 2.2.3). Las po-
blaciones de juveniles con RDS, exhiben típicamente una distribución de tallas relativamente amplia
con una proporción de tallas pequeñas (enanos) mucho mayor de lo normal. El coeficiente de varia-
ción (CV=La desviación estándar dividida entre el promedio de diferentes grupos de tallas dentro de
una población dada) de una población con RDS es típicamente mayor de 30% y puede incluso llegar
al 50%, mientras que en poblaciones de juveniles de P. vannamei libres de IHHNV (y por lo tanto sin
RDS) los CVs son de entre 10% y 30%.
Diagnóstico presuntivo
• Presencia de signos clínicos
• Historial de las instalaciones de cultivo, de las especies cultivadas, o de la región, que indique la
posibilidad de infección por IHHNV
105
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Diagnóstico definitivo
A través de los siguientes métodos es posible alcanzar un diagnóstico definitivo tanto a nivel
individual como a nivel de poblaciones:
• Histopatología directa
• Potenciamiento seguido por histopatología o pruebas de hibridación in situ
• Bioensayos utilizando P. stylirostris libre de patógenos específicos (“Specific Pathogen Free”/SPF)
como la especie indicadora
• Pruebas con sondas genéticas, u otras sondas adecuadas en los siguientes formatos:
◊ Hibridación en “Dot-Blot”
◊ Hibridación “in situ” (histología)
• El PCR también puede ser utilizado para la detección del virus en muestras de hemolinfa o de
tejidos tomadas de camarones sospechosos
106
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
Tales controles pueden ser: tejido de camarón SPF (control negativo); tejido de camarón IHHNV posi-
tivo (control positivo); y un grupo de muestras cuya condición IHHNV sea desconocida así como un
control negativo, y uno positivo sujetos a una prueba de hibridación sin sonda, únicamente expuestos
al anticuerpo y al substrato de revelado.
• Hibridación in situ
La prueba de hibridación in situ para la detección de IHHNV (en cualquier fase de la infección)
puede aplicarse sin ningún problema a especímenes de camarón fijados en formalina o solución de
Davidson (AFA) y bañados en parafina. Por medio de esta prueba, es posible observar la formación
de un precipitado azul-negro o púrpura en cualquier lugar del cuerpo del camarón en donde el ADN
del virus IHHN (y presumiblemente mARN) se encuentre presente (Fig.2.2.7).
En una prueba típica de hibridación in situ, las células con CAIs, muestran una intensa reac-
ción nuclear a la sonda, especialmente en la cromatina marginada o en la superficie interna de la
membrana nuclear. Mediante esta prueba se ha demostrado con frecuencia, que los núcleos picnó-
ticos y núcleos de células aparentemente normales también pueden contener ácidos nucleicos de
IHNNV.
Muchas células positivas para IHHNV también muestran acumulaciones citoplasmáticas den-
sas del virus. De la misma manera, se puede observar con frecuencia una reacción positiva a la sonda
asociada a los fragmentos de células necróticas, en el debris extracelular y en el contenido de los
fagolisosomas de los fagocitos del corazón, branquias y otros tejidos.
Comúnmente, la porción acelular de la cutícula del camarón (infectado por IHHNV o no)
toma una coloración azul debido a la reacción no específica de la sonda. Esta coloración azul es
debida a la presencia de la quitina, un polímero complejo de n-acetilglucosamina, el cual se adhiere
(tal vez electrostáticamente) al ADN de la sonda.
Muestra
La muestra consiste de un apéndice, tal como el segundo o tercer pleópodo, un proceso bran-
quial, o uno de los maxilípedos. Después de obtener el apéndice, este debe ser preservado ya sea por
congelación, en solución de Davidson o en alcohol etílico al 95% y finalmente procesado de acuerdo
al método de diagnóstico de preferencia.
Cuando se utiliza hemolinfa como tejido para muestreo, debe ser procesada ya sea inmedia-
tamente o preservada por congelación o fijación en alcohol al 95% y subsecuentemente procesada.
Pruebas de diagnóstico
Dos de las pruebas más apropiadas para examinar este tipo de biopsias son PCR e hibridación
in situ con la sonda genética BS4.5 específica para IHHNV (u otras sondas para IHHNV). Aunque
menos sensitiva, la hibridación en formato “Dot blot” también pueden utilizarse para analizar este
tipo de muestras.
107
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Histología de rutina
El diagnóstico de esta enfermedad está basado en la presencia de inclusiones intranucleares
patognomónicas (CAI). El corte histológico del apéndice es hecho en el plano longitudinal medio
para de esta manera proveer una panorámica tan amplia como sea posible de los tejidos presentes
(epidermis, subcutis y fibras nerviosas). El corte resultante es examinado para determinar la presencia
de inclusiones intranucleares tipo CAI (las cuales aparecen como cuerpos elongados en las células
de las fibras nerviosas). Mediante esta técnica es posible detectar muchos de los animales infectados
en una población, sin embargo, se desconoce la sensibilidad del procedimiento y por lo tanto no es
recomendable para certificar la condición SPF de una población.
108
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
109
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
110
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
2.3. Virus del Síndrome de la Mancha Blanca (White spot syndrome virus, WSSV)
Nueva distribución geográfica. Métodos moleculares (PCR) recomendados por OIE. Resisten-
cia significativa contra WSSV en líneas panameñas de P. vannamei.
Nombre de la enfermedad
Síndrome de la mancha blanca
Agente etiológico
Virus del Síndrome de la Mancha Blanca (WSSV)
En la literatura (principalmente la referente a los primeros reportes de esta enfermedad) se hace
mención a por lo menos tres “virus” dentro del complejo del síndrome de la mancha blanca (WSSV).
Hoy en día se sabe que todos son en realidad el mismo agente.
Agente
• HHNBV = “Hypodermal & hematopoietic necrosis baculovirus” (baculovirus de la necrosis he-
matopoyética e hipodérmica); SEED= “Shrimp Explosive Epidermic Disease” (enfermedad ex-
plosiva de la epidermis del camarón); “China virus disease” (enfermedad del virus de la China)
• RV-PJ = “Rod-shaped nuclear virus of Penaeus japonicus” (virus intranuclear cilíndrico de Pe-
naeus japonicus)
• SEMBV = “Systemic ectodermal and mesodermal baculovirus” (baculovirus sistémico del ecto-
dermo y del mesodermo); enfermedad roja; enfermedad de las manchas blancas
• WSBV = “White spot baculovirus” (baculovirus de la mancha blanca); síndrome de la mancha
blanca; enfermedad de la mancha blanca
Hoy en día también se sabe que no se trata realmente de un baculovirus sino de un virus com-
pletamente diferente, con características propias y para el cual el Comité Internacional de Taxonomía
de Virus (ICTV) ha asignado WSSV al género Whispovirus (género único) dentro de una nueva familia
111
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
que lleva el nombre de familia Nimaviridae. Aunque se han identificado un sinnúmero de cepas geo-
gráficas de WSSV con variabilidad genotípica, todas ellas están clasificadas como una única especie
dentro del género Whispovirus (Lo et al., 2012).
WSSV es un virus de doble cadena de ADN (bicatenario), presenta forma elíptica a cilíndrica,
membrana trilaminar y los viriones tienen un tamaño de 80-120 x 250-380 nm. En preparaciones
teñidas negativamente, es posible observar la presencia de un apéndice o “cola”. El genoma tiene
un tamaño aproximado de 290 kbp, lo cual lo hace uno de los virus más complejos que infectan al
camarón.
Rango geográfico
Después de su aparición en 1992-1993 en el noroeste de Asia, WSSV se dispersó rápidamente
a través de la mayoría de las regiones camaronícolas de Asia y del Indo Pacífico incluyendo China,
Japón, Corea, Tailandia, Indonesia, Taiwán, Vietnam, Malasia e India. Sin embargo, debido a que la
industria depende mucho del transporte regional e internacional de camarón vivo, la distribución de
éste y otros virus ha continuado su expansión.
En noviembre de 1995, ocurrió el primer caso confirmado de WSSV en el hemisferio occiden-
tal. En este caso, se trataba de camarones cultivados (P. setiferus) en una granja del sur del estado de
Texas. En la vecindad de la granja afectada se encontraba una planta procesadora de camarón, la cual
se sospecha pudo haber sido el foco de la infección, ya que era uno de los mayores importadores y
reprocesadores de camarón proveniente de zonas afectadas por WSSV en Asia.
Más adelante, a finales del año 1999, ocurrió el primer caso confirmado de WSSV en América
Central. Hoy en día, la enfermedad se ha dispersado a México, Nicaragua, Honduras, Costa Rica,
Panamá, Ecuador, Perú, Colombia y Brasil.
Más recientemente, se han confirmado por primera vez la presencia de brotes de WSSV en
Arabia Saudita (2010), Mozambique (2011) y en la costa oeste de Madagascar (2012) (Tang et al.,
2012, 2013).
Especies afectadas
Infecciones naturales. Se han observado infecciones naturales en las siguientes especies: Penaeus
monodon, P. japonicus, P. chinensis (=orientalis), P. indicus, P. merguiensis, P. setiferus, P. stylirostris
y P. vannamei.
Infecciones experimentales. En estudios de laboratorio, una cepa de virus originaria de Tailandia
resultó altamente patogénica para las siguientes especies: P. vannamei, P. stylirostris, P. aztecus, P.
duorarum y P. setiferus.
112
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
Existen muy pocos casos documentados que demuestren resistencia significativa a la infección
con WSSV. Una de las excepciones es la resistencia reportada en tres familias de P. vannamei origi-
narias de un programa de selección en Panamá (Cuéllar-Anjel et al., 2012). En este estudio, después
de 17 días de haber sido expuestos a WSSV por el método per os, estas tres familias resultaron con
sobrevivencias de 23%, 26% y 57%. No se detectó WSSV en los sobrevivientes al ser analizados por
medio de PCR.
Factores ambientales
Se ha reportado una marcada influencia de la temperatura del agua en la manifestación de
la enfermedad (Vidal et al., 2001, Granja C.B. et al., 2003). Las temperaturas medias situadas entre
los 18°C y los 30°C predisponen a los camarones a brotes de WSSV y a mortandades subsecuentes.
Diagnóstico presuntivo
• La presencia de signos clínicos tal y como se describió anteriormente
• Historial de las instalaciones de cultivo, de la especie cultivada, o de la región, que indique la
posibilidad de que haya una infección por WSSV (por ejemplo, la importación previa de cama-
rones penaeidos, ya sea PLs, reproductores, etc., desde una región en donde recientemente haya
habido un brote de WSSV)
• Demostración de núcleos hipertrofiados y vacuolizados, visibles en preparaciones o improntas
de tejido epitelial y tejido conectivo del estómago y/o de las branquias, en camarones que exhi-
ban signos clínicos de la enfermedad tal y como se describió anteriormente
Diagnóstico definitivo
Para llegar a un diagnóstico definitivo de WSSV, se pueden utilizar cualquiera de los siguientes
métodos:
113
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Materiales y equipo:
A continuación se proporciona una lista del material necesario:
• Microscopio compuesto
• Pipetas Pasteur o gotero
• Tijeras y navaja fina o bisturí
• Pinzas de punta fina
• Portaobjetos y cubreobjetos de vidrio
• Solución fijadora de Davidson
• Papel filtro o bolsas de té vacías (para envolver las piezas de tejido)
• Seis contenedores pequeños (25-100 ml de capacidad) o cajas de Petri
• etanol al 50 y 70%
• Hematoxilina (de Mayer/Bennett)
• Eosina “Y” al 2% (solución acuosa)
• Agua corriente
• Agua destilada
114
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
Selección de la muestra:
Para llevar a cabo esta prueba se deben de utilizar únicamente animales moribundos o que
muestren signos agudos de la infección (por ejemplo, letargia, coloración café obscura o rojiza, altas
tasas de mortandad, etc.). Al menos en el caso P. vannamei o P. stylirostris no es común observar las
manchas blancas que característicamente se observan de manera más conspicua en otras especies
tales como P. monodon.
Fijación:
Este protocolo ha sido diseñado para su uso con camarones o partes de camarón que han sido
previamente fijados con solución de Davidson AFA (4-24 horas) y luego transferidos a alcohol etílico
al 70%.
Procedimiento:
• Tome la muestra y fíjela con la solución de Davidson siguiendo el método usual
• Prepare seis contenedores con las siguientes soluciones:
a) etanol 70% d) hematoxilina
b) etanol 50% e) agua corriente
c) agua destilada f) eosina “Y” al 2%
(Para prevenir evaporación mantenga los contenedores cubiertos)
• Después de un período mínimo de fijación de 4 horas para postlarvas y juveniles pequeños (o
piezas de tejido) y de 24 horas para juveniles grandes y adultos, remueva el estómago y ambas
cubiertas de las branquias (la capa de cutícula que recubre a la cámara branquial). Envuelva
los tejidos en papel poroso o colóquelos dentro de una bolsa de té vacía para evitar perderlos
durante los lavados
• Sumerja el paquete de tejidos en el alcohol al 70% por un período de 1 hora y media. Haga un
cambio de alcohol fresco al 70% y deje los tejidos en el mismo por otra hora y media. Nota: no
deje que los paquetes se sequen durante ninguna de las fases de este procedimiento
• Escurra bien el paquete al sacarlo del alcohol al 70%, y transfiéralo aún húmedo al alcohol al
50%, en donde deberá de permanecer por 15 minutos
• Escurra el paquete y transfiéralo al contenedor con agua destilada por un período de tiempo de 5
minutos. Reemplace el agua 6 veces durante este lapso de tiempo. Escurra el exceso de agua del
paquete y transfiéralo a la hematoxilina por un período de tiempo de 25 minutos
• Escurra la hematoxilina y sumerja el paquete en agua corriente por un período de 25 minutos.
Reemplace el agua 6 veces durante este lapso de tiempo
• Escurra el exceso de agua y coloque el paquete en la solución de eosina al 2% por un período
de tiempo de 1-2 minutos
• Enjuague el paquete brevemente con agua destilada
• Coloque la muestra sobre una gota de agua destilada en un portaobjetos limpio. Examine por
separado los tejidos de un solo animal
• Con la ayuda de unas pinzas de punta fina, desprenda de la cutícula del estómago (o de la cu-
bierta de las branquias) la capa de epitelio y colóquela en el portaobjetos. Resulta un poco más
difícil desprender la capa de epitelio del estómago, pero éste es uno de los mejores órganos para
la detección de los cuerpos de inclusión de WSSV. Usando una navaja de rasurar, es posible
115
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
cortar el estómago en piezas pequeñas (en cuadros de 2-3 mm) las cuales son colocadas en el
portaobjetos y con pinzas finas se les puede desprender la capa de epitelio
• Una vez que se han obtenido los fragmentos de tejido epitelial, se agrega un poco de agua si es
necesario y se le coloca encima un cubreobjetos
• Examine los tejidos con la ayuda de un microscopio compuesto (con aumentos de 20 o 40X).
Los organismos infectados por WSSV presentan cuerpos de inclusión bastante prominentes, de
tinción variable (de eosinofílico a basofílico), los cuales son aproximadamente 2-3 veces más
grandes que el tamaño del núcleo y generalmente muy numerosos. Los cuerpos de inclusión
tempranos tienen un parecido muy grande a los cuerpos de inclusión tipo Cowdry A que apare-
cen a consecuencia de la infección por IHHNV. Los cuerpos de inclusión de WSSV más tardíos o
maduros tienden a aparecer más basofílicos (generalmente de color morado) y de forma variable
(de circular a irregular)
116
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
La OIE también considera aceptable el uso de kits comerciales de PCR para la detección de
WSSV siempre y cuando hayan sido validados de acuerdo a sus lineamientos. Para una lista de kits
certificados por la OIE para este fin se puede consultar el siguiente sitio web (http://www.oie.int/en/
our-scientific-expertise/certification-of-diagnostic-tests/the-register-of-diagnostic-tests/).
De acuerdo a la OIE el PCR anidado y la secuenciación son los dos métodos recomendados
para declarar la ausencia de la enfermedad. Esta prueba debe utilizarse únicamente con muestras
de juveniles y adultos. En estadíos más tempranos, tales como huevo, larva y postlarva, la infección
puede estar presente a niveles por debajo de los límites de detección del método, pudiendo resultar
en falsos negativos.
117
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
118
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
119
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
120
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
Nombre de la enfermedad
Síndrome de Taura (TS); enfermedad de Taura; enfermedad de la cola roja.
Agente etiológico
Virus del Síndrome de Taura (TSV)
Agente
El virus del síndrome de Taura (TSV) tiene una morfología icosahédrica, las partículas tienen
un diámetro promedio de 30-32 nanómetros, con una densidad de 1.337 g/ml, el tipo de replicación
es citoplásmico, los sitios de replicación son Feulgen negativos, contiene ARN monocatenario con
una longitud de aproximadamente 10 kb, y la cápside está compuesta de tres proteínas estructurales
principales (49, 36.8 y 23 kDa) y dos secundarias (51.5 y 52.5 kDa). El Comité Internacional de Ta-
xonomía de Virus (ICTV) en su 9° informe, ha asignado a TSV dentro del género Aparavirus, familia
Dicistroviridae.
Rango geográfico
• El síndrome de Taura fue reconocido por primera a vez como una enfermedad única en granjas
camaroneras en la cercanía de la boca del río Taura en Guayaquil, Ecuador, en junio de 1992
• Sin embargo, a través de un análisis retrospectivo de muestras de camarón tomadas en la región
de Taura en Ecuador en septiembre de 1991, se demostró que la enfermedad ya estaba presente
en esta región antes de 1992. De la misma manera, algunos granjeros de la región sospechan que
la enfermedad ya estaba presente a mediados de 1990, cuando se observaron pérdidas inexpli-
cables durante la fase de crianza de P. vannamei forzando a varios granjeros a abandonar el uso
de estanques de crianza y adoptando en su lugar la práctica de “siembra directa” de postlarvas a
densidades relativamente bajas en los estanques de engorda
• Análisis retrospectivos de muestras de P. vannamei tomadas en Colombia en febrero de 1990
también han revelado la presencia de lesiones similares a las observadas en casos de síndrome
de Taura (Laramore, 1995)
• A partir de 1992, el síndrome de Taura se ha dispersado a muchas de las regiones del continente
americano, en donde ha sido observado tanto en camarones silvestres como cultivados. Se ha
reportado la presencia de TSV prácticamente en todas las regiones camaronícolas de las Amé-
121
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
ricas, incluyendo Ecuador, Colombia, Perú, Brasil, El Salvador, Guatemala, Honduras, Belice,
México, Nicaragua, Panamá, Costa Rica, Venezuela y en los Estados Unidos (Carolina del Sur,
Florida, Hawái y Texas)
• A finales de la década de los 90s, TSV era considerado como un virus del hemisferio occidental,
hasta que en 1998 hizo su aparición en Taiwán y más recientemente en Tailandia, Myanmar,
China, Corea e Indonesia. Uno de los últimos brotes en una región nueva ha sido en Arabia
Saudita (Tang et al., 2012)
• Es posible que la distribución geográfica del síndrome de Taura continúe expandiéndose debido
a la tendencia de la industria a transportar camarones vivos (reproductores, postlarvas) tanto a
nivel regional como internacional
Especies afectadas
• El rango de especies afectadas no se conoce completamente
• Se han documentado infecciones en poblaciones silvestres de P. vannamei, P. stylirostris y P.
setiferus
• Se ha logrado infectar experimentalmente postlarvas y juveniles de P. setiferus, postlarvas de P.
aztecus y juveniles de P. chinensis
• En el estadío de postlarva (de ~PL-12 en adelante) y de juvenil de P. vannamei TSV causa infec-
ciones serias y altas mortandades en poblaciones de camarón cultivado
• Los estadíos de postlarva y de juvenil de P. aztecus y P. duorarum parecen ser resistentes a esta
enfermedad
122
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
Fase de recuperación: a este etapa se le conoce como de transición ya que comparte características
de la fase aguda y de la fase crónica. En condiciones experimentales, si el camarón sobrevive la fase
aguda, generalmente entra a la fase de transición aproximadamente a los 4 días después de haber
sido infectado. Es en la etapa de transición cuando es posible observar manchas melanizadas en
todo el cuerpo (Fig. 2.4.4). Las características histológicas de la etapa de transición se describen más
adelante.
Fase crónica: en esta etapa los camarones no presentan ninguna lesión externa evidente. Los cama-
rones en esta fase de la enfermedad puede o no que presenten cutícula blanda y expansión de los
cromatóforos rojos. Es posible observar a tales camarones comportándose y alimentándose normal-
mente.
Aunque una epizootia de síndrome de Taura puede resultar en mortandades acumuladas que van del
80% al 90% de la población en un estanque (en líneas de camarón susceptibles), los sobrevivientes
típicamente muestran sobrevivencias de 60% o más al tiempo de la cosecha.
Diagnóstico presuntivo
• La presencia de signos clínicos tal y como se describió anteriormente
• Un historial ya sea de las instalaciones de cultivo, de la especie cultivada o de la región, que in-
dique la posibilidad de infección por TSV (por ejemplo la importación de P. vannamei originario
de Ecuador o de otras regiones en donde se sabe que existe TSV)
• Preparaciones húmedas de apéndices (urópodos, escamas antenales, pleópodos, etc.) que mues-
tren necrosis multifocal del epitelio cuticular en animales juveniles durante la fase aguda de la
enfermedad.
123
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
◊ Los núcleos picnóticos y cariorrécticos dan una reacción positiva con la tinción de Feulgen
(para ADN), lo cual los distingue de las inclusiones citoplásmicas eosinófilas/basófilas páli-
das que no contienen ADN
◊ La ausencia de infiltración hemocítica, o de otro tipo de respuesta inflamatoria, distingue la
fase aguda de la fase de recuperación o crónica de la enfermedad
• La presencia de núcleos picnóticos y cariorrécticos así como de las inclusiones citoplásmicas
generalmente esféricas, le dan a las lesiones de la fase aguda/peraguda una apariencia aperdi-
gonada o apimentada, lo cual es considerado como una característica patognomónica de la
enfermedad (Fig. 2.4.6)
• Durante la fase de transición es posible observar algunas lesiones de tipo agudo, pero además se
comienzan a observar infiltrados hemocíticos en el epitelio acompañados de melanización. Estas
lesiones cuticulares se asemejan a aquellas ocasionadas por infección bacteriana del exoesque-
leto (“shell disease”) (ver figuras adjuntas)
◊ Estas lesiones pueden llegar a presentar erosión de la cutícula, colonización bacteriana
superficial e invasión de la cutícula por presuntas especies de Vibrio
◊ Una marcada infiltración hemocítica, la cual puede o no estar melanizada, se encuentra con
frecuencia en posición basal con respecto a las lesiones cuticulares melanizadas
• La fase crónica de la enfermedad se caracteriza por la ausencia de necrosis del epitelio (a como
se describió en la fase aguda). De la misma manera, las manchas melanizadas desaparecen. Es
común observar la presencia de estructuras dentro del órgano linfoide conocidas como “esferoi-
des” (Fig. 2.4.7). Se ha observado que en camarones durante la fase crónica de la enfermedad
estos esferoides son el único rastro de la infección, los cuales muestran una reacción positiva a
la sonda genética para la detección de TSV, sugiriendo una relación estrecha con el proceso de
la enfermedad.
124
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
• Problemas relacionados con la estabilidad del ARN monocatenario (el cual constituye el genoma
de TSV) durante la prueba de “dot blot” ha limitado el desarrollo y la aplicación de este tipo de
kits de campo basados en el uso de sondas cADN marcadas con DIG para la detección de este
agente
Método de RT-PCR (reacción en cadena de la polimerasa con transcripción inversa) para la detec-
ción de TSV
Uno de los métodos de RT-PCR recomendados por OIE es el publicado por Nunan et al., 1998.
Este método utiliza un par de iniciadores (9992F y 9195R) que amplifican un fragmento de 231 pares
de bases. A pesar de haber sido diseñado hace 16 años, este método sigue siendo uno de los mejores
debido a su alta sensibilidad y a que es capaz de detectar todas las variantes geográficas de TSV que
continúan apareciendo alrededor del mundo.
TSV provoca una infección de tipo sistémico en el camarón y por lo tanto las muestras idóneas
para el análisis por medio de RT-PCR pueden ser hemolinfa o tejido (p.ej. pleópodo, branquias, etc.).
No se recomienda el análisis de huevecillos, larvas, o postlarvas menores a PL10, utilizando el méto-
do de RT-PCR ya que durante esos estadíos, la infección puede estar presente a niveles por debajo del
límite de detección y existe el riesgo de obtenerse resultados falsos negativos.
De acuerdo a la OIE, el método de RT-PCR es el recomendado para la vigilancia dirigida y para
la declaración de la ausencia de la enfermedad.
126
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
2.5 Virus del síndrome de la cabeza amarilla (Yellow head syndrome virus, YHV)
Nombre de la enfermedad
Enfermedad de la cabeza amarilla, enfermedad (YH) o enfermedad de la cabeza amarilla de
P. monodon.
Agente etiológico
Virus de la cabeza amarilla (YHV).
Inicialmente algunos investigadores tailandeses reportaron que YHV era un baculovirus cito-
plásmico Tipo B (virus de la granulosis) o un virus similar a un baculovirus y le asignaron el nombre de
baculovirus de la cabeza amarilla o YHB. Sin embargo, al llevar a cabo una caracterización detallada
se encontró que se trataba de un virus completamente nuevo, para el cual hubo necesidad de crear
una nueva familia, conocida con el nombre de familia Roniviridae.
Agente
• YHV no es un baculovirus ya que no contiene cdADN (cadena doble de ADN) sino csARN (ca-
dena sencilla de ARN)
• El virus de la cabeza amarilla es un virus de ARN monocatenario (ssARN), tiene forma cilíndrica,
presenta una envoltura y es de replicación citoplásmica
• Los viriones tienen forma cilíndrica y varían en tamaño en un rango de 150 nm a 200 nm de
longitud por 40 nm a 50 nm de ancho. Las estructuras que posiblemente sean las nucleocápsi-
des (y/o formas aberrantes de nucleocápsides) miden aproximadamente 15 nm de diámetro con
longitudes variables de hasta aproximadamente 800 nm de largo
• YHV es realmente uno de los seis genotipos del grupo conocido como el complejo de virus de la
cabeza amarilla y se le conoce como el genotipo 1. Los otros genotipos se les ha encontrado en
P. monodon de la costa Este de África, en Asia y en Australia, en donde aparentemente no tienen
efecto dañino en el hospedero. El único genotipo que parece ser patogénico es el genotipo 1
Rango geográfico
Aparentemente YH es una enfermedad ampliamente distribuida en poblaciones de P. monodon.
Aunque hasta hace relativamente poco la enfermedad de la cabeza amarilla fue reconocida
y descrita por primera vez en camarones de Tailandia, es probable que YHV haya sido el mismo
síndrome que ha venido afectando a la industria del cultivo de P. monodon por casi una década. Es
posible que YHV haya sido responsable del hundimiento de la industria de Taiwán en 1986-1987, y
130
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
de epizootias más pequeñas, pero serias, en regiones de Indonesia, Malasia, China y Filipinas que
cultivan P. monodon.
Hace relativamente poco, se reportó la presencia de YHV en el continente americano (Loh et
al., 1998), sin embargo, el hallazgo nunca pudo ser confirmado y es probable que se haya tratado
más bien de un diagnóstico erróneo.
Especies afectadas
• YHD es una enfermedad importante en sistemas intensivos de cultivo de P. monodon en el su-
reste de Asia e India
• A través de bioensayos con P. monodon como especie indicadora, se encontró que camarones
de agua salobre de las especies Palaemon styliferus y Acetes sp. (presentes en los estanques de
camarón) son portadores de YHV (Flegel et al., 1995)
• Aunque resistentes a la enfermedad cuando se encuentran en los estanques, se ha observado que
P. merguiensis y Metapenaeus ensis pueden ser infectados experimentalmente durante pruebas
de reto (Flegel et al., 1995)
• Se ha demostrado experimentalmente que YHV puede infectar y causar infecciones serias en
los estadíos juveniles de los camarones penaeidos americanos de las especies P. vannamei, P.
stylirostris, P. setiferus, P. aztecus y P. duorarum. En estos mismos estudios, se observó que los
estadíos de postlarva de las mismas especies eran relativamente resistentes
131
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Diagnóstico definitivo
El diagnóstico definitivo se basa en el historial, la presencia de signos clínicos descritos ante-
riormente y la confirmación por medio de histopatología.
Histopatología
La histopatología se caracteriza por una necrosis generalizada, de multifocal a difusa, con pre-
sencia prominente de picnosis y cariorrexis. En los tejidos afectados es posible observar inclusiones
citoplasmáticas perinucleares basofílicas, generalmente esféricas. Entre los tipos de células o tejidos
afectados se incluyen los hemocitos, órgano linfoide, tejido hematopoyético, células pilar y epitelia-
les de las lamelas branquiales, tejido conectivo esponjoso del subcutis, músculo, intestino, glándula
antenal, gónadas, cordón y ganglios nerviosos, etc. (Fig. 2.5.2 y 2.5.3).
Entre los cambios celulares tempranos ocasionados por YHV se incluye la hipertrofia nuclear,
disminución y marginación de la cromatina y desplazamiento lateral del nucléolo.
Respuesta inflamatoria, en forma de infiltración hemocítica, agrupamiento, y encapsulación
puede llegar a ocurrir pero es más bien difusa y no muy conspicua, a menos de que al mismo tiempo
se presente una infección bacteriana secundaria.
Existe un tipo único de célula que se presenta con frecuencia en camarones infectados con
YHV y que puede servir como ayuda para el diagnóstico histológico de esta enfermedad. Este tipo de
célula se presenta en cantidades muy variables, pero no es del todo rara. Generalmente se le puede
observar en los espacios hemales existentes en varios tejidos tales como branquias, glándula antenal,
hepatopáncreas, corazón etc.; este tipo de célula es generalmente esférica, presenta citoplasma de
apariencia uniforme, pálidamente basofílico y con un núcleo esférico y central. Es probable que estas
células sean en realidad hemocitos inmaduros liberados prematuramente por los órganos hematopo-
yéticos en respuesta a la hemocitopenia causada por la infección de YHV.
Es importante tener en cuenta que infecciones severas de WSSV pueden llegar a ocasionar una
necrosis del órgano linfoide casi idéntica a la ocasionada por YHV (Pantoja y Lightner, 2001) (Fig.
2.5.4). Esta similitud puede ocasionar confusión y resultar en un diagnóstico erróneo de YHV. Sin
embargo, en el caso de WSSV dicha necrosis del órgano linfoide es acompañada por la presencia de
los cuerpos intranucleares característicos de WSSV. De cualquier manera, si hay razón para sospechar
la presencia de YHV en muestras de camarón procedentes de regiones afectadas por WSSV, se debe
recurrir a pruebas de hibridación in situ (con la sonda para YHV) y/o de RT-PCR para determinar el
estatus real de YHV en los animales en cuestión (Fig. 2.5.5).
132
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Nombre de la enfermedad
Mionecrosis infecciosa; Necrosis infecciosa del músculo.
Agente Etiológico
Virus de la mionecrosis infecciosa (IMNV)
Agente
IMNV es un virus tentativamente clasificado como un totivirus (Familia Totiviridae). Los vi-
riones son de forma icosahédrica, con un diámetro de aproximadamente 40 nm y una densidad de
1.366 en gradientes de cloruro de cesio. El genoma consiste de una sola molécula de ARN de doble
cadena (dsRNA). El genoma consiste de 7,560 pares de bases.
Tejidos/órganos afectados
Típicamente se incluyen el músculo esquelético (y el cardiaco con menor frecuencia), tejido
conectivo, hemocitos, y las células parenquimales del órgano linfoide.
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Procedimientos de diagnóstico
Diagnóstico presuntivo. Basado en historial del caso y signos clínicos descritos anteriormente.
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CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
2.7 mionecrosis infecciosa viral – IMNV y sus implicaciones en el cultivo de camarón brasileño
Alitiene Moura Lemos Pereira¹, Emiko Shinozaki Mendes², Tereza Cristina Vasconcelos Gesteira³,
Veronica Arns da Silva², Andreia Benedita Poletto4
¹Embrapa Meio-Norte, BR 343, km 35, C.P.341, Parnaíba, PI, Brasil, alitiene.pereira@embrapa.br
²Universidade Fed. Rural de Pernambuco, Av. Dom Manoel de Medeiros, s/n. Recife, PE, Brasil, esmendes@dmv.
ufrpe.br
³Universidade Fed. do Ceará, LABOMAR, Av. da Abolição, 3207, Fortaleza, CE, Brasil, gesteira@ufc.br
4
PNPD/CAPES, Embrapa Meio-Norte, BR 343, km 35, C.P.341, Parnaíba, PI, Brasil, andreiapol@yahoo.com.br
Traducido del Portugués al Español por: Roberto Chamorro, Interprete Público Autorizado Panamá.
Introducción
El cultivo de camarón brasileño concentró sus esfuerzos en el desarrollo de un sistema de
producción con la especie P. vannamei nativa del Océano Pacífico, luego de problemas de baja
productividad y adaptación al medio ambiente con especies nativas y exóticas en los años 90. Esta
especie ampliamente estudiada, demostraba un buen desempeño zootécnico, rusticidad y adapta-
bilidad, además de que ya se conocía su tecnología de producción y formulación para alimento
balanceado, con base en sus requerimientos nutricionales. El factor decisivo para la escogencia de
esta especie, fue el incremento exponencial de producción obtenido en Brasil, a partir del dominio
de la tecnología para producción en cautiverio, resultando en aumento de divisas para el sector pro-
ductivo. (Figura 2.7.1).
A pesar de las mejoras económicas y del crecimiento de la producción (70% al año), pasando
de 2.880 toneladas en 1996 a 25.000 toneladas en 2000, el sistema de cultivo utilizado con esta
nueva especie presentó fallas, debido a problemas de adaptación, ausencia de técnicas adecuadas de
cultivo y aumento de la intensificación del sistema de producción, lo cual no fue acompañado de un
aumento importante del área cultivada (MAPA, 2001).
139
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
El sistema intensivo de cultivo de camarón, fue empleado en muchos casos con instalaciones
inadecuadas, sin el monitoreo y conocimiento técnico necesarios. La inexistencia de medidas de
seguridad permitió el libre tránsito de larvas y reproductores entre los diversos estados, sin el mínimo
control sanitario para el transporte de camarones.
Considerando que las enfermedades infecciosas ocurren con frecuencia en los cultivos de
todo el mundo y nuevas epizootias de origen viral son identificadas a cada año, ya habían sido regis-
tradas enfermedades causadas por virus, bacterias y protozoarias en las fincas camaroneras brasile-
ñas, sin reportes de pérdidas importantes (Gesteira, 2006).
Sin embargo, la competencia con el aparecimiento de mionecrosis infecciosa viral (IMNV,
Infectious Myonecrosis Virus), problemas cambiantes ambientales observados en los años de 2005
hasta 2009, provocaron una caída de la producción, según la Asociación Brasileña de Criadores de
Camarón –ABCC, la camaronicultura brasileña presentó signos de crecimiento en 2010, cuando se
produjeron 75.000 toneladas (Rocha, 2013) (Fig. 2.7.1).
140
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
cultivados en Piauí y se hicieron los primeros registros de camarones enfermos en camaroneras del
estado de Ceará (Nunes et al., 2004).
Se hicieron cambios en la metodología de cultivo y en los tratamientos para la mionecrosis,
tales como incremento del recambio diario de agua (>20%), aplicación de cal en los estanques (150
a 300 kg/ha) y reducción de la densidad de cultivo. Sin embrago, la utilización de esas medidas, la
elevación de la salinidad por disminución de las lluvias, no logró eliminar la mionecrosis del país.
Según la Asociación Brasileña de Criadores de Camarón – ABCC, las pérdidas debido a IMNV fueron
estimadas en 20 millones de dólares sólo durante 2004.
Diseminación de la enfermedad
Varios profesionales y productores del Nordeste de Brasil, registraron las alteraciones más
comunes en los ambientes de cultivos y su relación con la evolución de la enfermedad. Sin embargo,
como se trataba de una nueva enfermedad, fue difícil su caracterización. A pesar de lo anterior, el
intercambio de información entre el sector científico y productivo del país fue mínimo y la mayoría
de los productores no sabía lo que estaba ocurriendo. Para agravar la situación, la ausencia de ba-
rreras sanitarias en la actividad acuícola del país, permitió la rápida diseminación de la enfermedad
entre las camaroneras de la Región Nordeste de Brasil, mucho antes de que se conociera la verdadera
dimensión del problema.
Con la diseminación de la enfermedad en ambientes adversos, el rango de los brotes se fue
ampliando llegando a afectar sistemas de producción con las siguientes condiciones:
• Fases de pre-cría con densidades de 35 a 120 Pls/l
• Fase de engorde con camarones de 3 g promedio
• En densidades de 15 a 80 camarones/m2
• Camarones procedentes de diferentes laboratorios de producción de post-larvas
• Cultivos que utilizan variadas marcas de alimentos comerciales
• En cultivos con la variables físicas y químicas aceptables para la especie
• La supervivencia promedio obtenida fue de 30 a 40% con un FCA (factor de conversión alimen-
ticia )> 2:1
Algunos productores cultivaron P. vannamei en agua dulce durante el período de gran inci-
dencia de mionecrosis y no reportaron problemas con la enfermedad. Pero el virus puede presentarse
también en animales cultivados en agua dulce y afectar todos los estadios de desarrollo.
Etiología
• Bioensayos realizados en laboratorio, por Graf et al. (2003), exponiendo individuos presumible-
mente saludables a tejidos de camarones con signos clínicos de mionecrosis, mostraron que el
mayor vector de transmisión de esa patología, fue la ingestión directa de los tejidos contamina-
dos, caracterizando por tanto, su transmisión horizontal.
• Después de la confirmación de la naturaleza infecciosa, a través de desafíos por inyecciones y
preparación de tejidos contaminados en individuos libres de patógenos conocidos (SPF, Spe-
cific Pathogen Free) el agente causante de IMN fue identificado como un virus perteneciente
a la Familia Totiviridae (Lightner & Pantoja, 2004). La purificación y caracterización del virus
denominado virus de la mionecrosis infecciosa, fueron efectuadas por Poulos et al. (2006). La
partícula viral tiene forma icosahédrica y mide 40 nm de diámetro. Su genoma está formado por
una molécula de RNA de doble cadena (dsRNA) de 7.560 bp.
141
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
• Silva et al (2014) señaló que machos y hembras sexualmente maduros después de desafiados con
IMNV en L. vannamei, presentaran el virus en ovario y espermatóforo, después de diagnóstico
por PCR, lo que indica una ruta vertical de la transmisión para la infección.
• Esta enfermedad conocida como IMNV (Necrosis Infecciosa Muscular o Mionecrosis Infecciosa
Viral), tuvo su primer registro en los estados del Nordeste de Brasil y más recientemente en P.
vannamei cultivado en Indonesia (Senapin et al., 2007). La detección fue hecha utilizando un kit
comercial de RT-PCR y análisis subsecuentes revelaron que la muestra del IMNV de Indonesia
tenía 99,6% de similitud con la secuencia del ácido nucleico del IMNV brasileño registrado en
GeneBank. Según algunos autores y como información extra oficial, hubo entrada irregular de
reproductores provenientes del Brasil, en la Isla de Java.
• Además del diagnóstico de la enfermedad en todas las fases de cultivo (post-larva, juvenil y adul-
to) de la especie P. vannamei, también se han mostrado susceptibles al virus IMNV, camarones de
las especies P. stylirostris y P. monodon, presentando signos clínicos y alteraciones en los tejidos
característicos de la enfermedad (Tang et al., 2005). Coelho et al. (2009) en especímenes de Far-
fantepenaeus subtilis sometidos a pruebas de desafío con el virus de IMNV por un período de 30
días, mostró susceptibilidad probada por análisis histopatológico y molecular.
Métodos de Diagnóstico
El diagnóstico puede ser presuntivo con base en la sintomatología observada macroscópi-
camente, siendo el foco principal la pérdida de transparencia del músculo abdominal. También se
puede detectar la enfermedad a través de estudios histopatológicos, cuando son investigadas posibles
alteraciones en los órganos internos y tejidos. La hibridación in situ fue desarrollada y optimizada
como una herramienta de diagnóstico por Tang et al. (2005). Otro método molecular para la detec-
ción del virus es la RT-PCR Andrade et al. (2007) mostraron que el RT-PCR usado con sondas TaqMan
resulta ser un método de diagnóstico de alta sensibilidad.
Puthawibool et al. (2009), sugirieron que un diagnóstico rápido y práctico del IMNV puede
realizarse a través de la técnica loop-mediated isotermic amplification (LAMP) del material genómi-
co, con alta especificidad y sensibilidad, garantizando un diagnóstico seguro y el monitoreo de las
enfermedades en las camaroneras. Los autores también demostraron que la combinación de la trans-
criptasa reversa y LAMP (RT-LAMP) seguida por la detección del ácido nucleico usando un “cromato-
graphic lateral flow dipstick” (LFD), permite un diagnóstico en un intervalo del tiempo de 75 minutos.
Sin embargo, estas técnicas son más sofisticadas y dependen de laboratorios y técnicos de alto nivel.
Signos Clínicos
En el inicio del brote de la IMNV, los camarones presentan opacidad focal o multifocal del
músculo del abdomen (Fig. 2.7.2) y en casos de mayor severidad, se tornaban rojizos, principalmente
en el último segmento (Fig. 2.7.3). Los individuos quedaban aletargados, presentando baja conver-
sión alimenticia, abdomen encalambrado (en algunos casos), expansión de los cromatóforos, reduc-
ción de la tasa de crecimiento y tiempo elevado de coagulación de la hemolinfa.
De acuerdo con lo reportado por Gesteira (2006), los grados de infección pueden cambiar y
presentar cuadros clínicos diversos:
• Leve a moderado – baja mortalidad y menos de 10% de los camarones cultivados presentan
signos clínicos.
• Aguda - elevada mortalidad, más de 10% de la población cultivada presenta signos clínicos con
nivel de severidad de medio a alto.
142
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
143
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Histopatología
Los exámenes histopatológicos muestran diferentes alteraciones en órganos y tejidos afecta-
dos por el IMNV, dependiendo del grado de severidad de la enfermedad. El aumento en la talla del
órgano linfoide es común y también es frecuente observar esferoides en este órgano (lymphoid organ
spheroids- LOS) (Fig. 2.7.5). Pueden ser encontrados LOS ectópicos en tejido conjuntivo, músculo
del corazón (Fig. 2.7.6 y 2.7.7) y próximos a los túbulos de las glándulas antenales. Las lesiones del
tejido muscular dependen del grado de severidad de la infección, pudiéndose presentar en la fase ini-
cial una infiltración hemocítica (Fig. 2.7.8 y 2.7.9). La fase aguda se caracteriza por ser una necrosis
de coagulación, con presencia de edema y un elevado daño en las fibras musculares, muchas veces
sustituidas por tejido conjuntivo (Fig. 2.7.10). En esta fase, se observan cuerpos de inclusión típicos de
enfermedades virales, detectados en células musculares, tejido conectivo y hemocitos con necrosis
de licuefacción (Fig. 2.7.11), con infiltración hemocítica en músculo afectado (inflamación) y fibrosis,
ocurre en camarones en fase crónica de la enfermedad, cuando los LOS ectópicos son más común-
mente visualizados (Fig. 2.7.12) (Lightner & Pantoja, 2004; Lightner et al., 2004; Gesteira, 2006).
144
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
145
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
146
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
Algunos camarones asintomáticos presentaron diagnóstico positivo por RT-PCR para IMNV,
sin lesiones en el abdomen, pero sí en la parte inferior del cefalotórax, con lesiones coagulativas
focales bien definidas (Fig. 2.7.13), caracterizando también como una fase crónica de la infección.
147
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Diagnóstico diferencial
La necrosis muscular en el abdomen de los camarones, es una lesión que puede ocurrir como
consecuencia de estrés, bajas de oxígeno, alta densidad de siembra, cambio brusco de temperatura o
salinidad (Lakshmi et al., 1978; Rigdom & Baxter, 1970) y también puede ser resultante de la acción
de un agente infeccioso, como el caso de la IMNV.
A pesar de la importancia de la histopatología como herramienta de diagnóstico confirmato-
rio, el uso de sondas geonómicas, como hibridación in situ o PCR, garantizan una mayor sensibilidad
y especificidad en el diagnóstico. Un ejemplo es la necrosis muscular detectada en camarones de la
especie P. vannamei procedentes de Belice. Segundo Tang et al, (2007), los individuos presentaban la
misma opacidad muscular en el abdomen, con características histopatológicas similares a aquellas
observadas en portadores de IMNV. Después del examen utilizando las técnicas de hibridación in
situ y RT-PCR, los resultados fueron negativos para IMNV, sugiriendo que la enfermedad era causada
probablemente por otro virus RNA. Los autores encontraron 69% de similitud de este virus de Belice
con el nodavirus del Macrobrachium rosenbergii, adoptando este nuevo virus la denominación de
PvNV (Penaeus vannamei nodavirus).
Además de agentes virales, las bacterias también pueden causar opacidad muscular que se
asemeja a la observada en IMNV (Lightner, 1996), como por ejemplo los vibrios y las pseudomonas.
La diferencia puede ser vista a través de histopatología (ausencia de cuerpos de inclusión) o mediante
pruebas moleculares como RT-PCR.
Consideraciones finales
Considerando las características del sistema inmune de los camarones, no existe un tratamien-
to específico para la IMNV. Como cualquier enfermedad, las medidas preventivas son las más econó-
micas y eficaces. Un buen manejo de los cultivos debe incluir la adopción de normas de bioseguridad
para evitar la entrada y establecimiento de nuevos patógenos y permitir una mejor supervivencia en
la presencia de enfermedades.
Actualmente, en muchas fincas camaroneras algunas de las prácticas de manejo de cultivos
fueron cambiadas principalmente por reducción de la densidad de siembra (10 a 40 camarones/m2),
tratamientos del suelo entre los cultivos, preparación y fertilización de los estanques y vaciado sani-
tario entre los ciclos de cultivo.
En algunos laboratorios productores de Pls, fueron implementados programas de mejoramien-
to genético, inclusive con importación de reproductores SPF y SPR (resistente a patógenos específi-
cos - Specific Pathogen Resistence) que podrían proporcionar Pls de buena calidad y con menores
posibilidades de enfermedad por IMNV. En otros laboratorios, a pesar de no tener implementada esas
prácticas, han sido cuidadosos con la bioseguridad y por ello, en cultivos que son bien manejados, no
se detecta una incidencia elevada de IMN. En la actualidad, a pesar de que en Brasil se pueden ob-
servar lesiones sugestivas de mionecrosis durante análisis presuntivos o confirmatorios en camarones,
la supervivencia promedio es de 70%, a proporcionar ingresos al sector productivo.
Todavía queda la pregunta: ¿El aumento de la supervivencia y la disminución de la severidad
de los signos clínicos son evidencia de acomodación viral o el resultado directo de la utilización de
las mejores prácticas de producción?
148
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
Nombre de la enfermedad
Enfermedad de la cola blanca.
Agente Etiológico
Penaeus vannamei nodavirus.
Agente
PvNV es un virus tentativamente asignado a la Familia Nodaviridae. Los viriones son de forma
icosahédrica, con un diámetro de aproximadamente 22 nm. El genoma consiste de dos moléculas de
ARN de cadena sencilla (ssRNA).
Tejidos/órganos afectados
Típicamente se incluyen el músculo esquelético, tejido conectivo, hemocitos, y las células
parenquimales del órgano linfoide.
149
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Procedimientos de diagnóstico
Diagnóstico presuntivo. Basado en historial del caso y signos clínicos descritos anteriormente.
Diagnóstico confirmatorio. Basado en uno o más de los siguientes métodos:
150
CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
Figura 2.8.2. Lesiones observadas a nivel histológico. A) Necrosis del músculo esquelético, acompañada de in-
filtración hemocítica. B) Cuerpos de inclusion intracitoplámicos, de tipo basofílico, en células del músculo es-
quelético. D) Cuerpos de inclusion intracitoplámicos, de tipo basofílico, en células del órgano linfoide. Tinción:
Hematoxilina/eosina-floxina de Mayer-Bennett. Barras= 25 µm.
151
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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CAPÍTULO 2 - Enfermedades virales del camarón
163
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
164
Capítulo 3
Enfermedades bacterianas de
camarones
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
166
Capítulo 3 - Enfermedades bacterianas de camarones
Capítulo 3
Introducción
Las fluctuaciones de temperatura, salinidad, oxígeno, pH, nutrientes orgánicos e inorgánicos,
influyen en las comunidades bacterianas presentes en los estanques de cultivo, dando como resulta-
do un aumento en el número o haciendo que proliferen patógenos nocivos provocando mortalidades
en los organismos cultivados. Los factores ambientales detonan la rápida multiplicación de las bacte-
rias oportunistas, localizadas sobre todo en el tracto digestivo, branquias y cutícula. El exoesqueleto
provee una barrera física efectiva para los patógenos que tratan de penetrar la superficie externa de
los crustáceos, así como el intestino en la región anterior y posterior. Sin embargo, Vibrio sp. está
entre las bacterias quitinoclásticas asociadas con la enfermedad del exoesqueleto y puede ingresar a
través de las heridas. Las branquias parecen ser susceptibles a la penetración de bacterias debido a
que están cubiertas por exoesqueleto delgado, pero éstas se limpian debido al constante movimiento
de las dendobranquias. El intestino medio que incluye a la glándula digestiva o hepatopáncreas no
está revestido por un exoesqueleto y, por consiguiente, parece ser el sitio probable de penetración de
patógenos presentes en el agua, alimento y sedimentos. Las enfermedades de origen bacteriano re-
portadas en los sistemas de cultivo son causadas principalmente por Vibrio harveyi, V. parahaemolyti-
cus, V. penaeicida, V. nigripulchritudo, V. campbellii, Micrococcus sp. y Streptococcus sp.
3.1. Síndrome de la Mortalidad Temprana (EMS) o Enfermedad de la Necrosis Aguda del Hepa-
topáncreas (AHPND) - Situación de México
Recientemente, ha sido reportada esta enfermedad en camarón, causada por algunas cepas
de V. parahaemolyticus, el cual produce una toxina capaz de destruir el tejido y provocar disfunción
en el hepatopáncreas. El agente presumiblemente se transmite por vía oral y coloniza el tracto gas-
trointestinal de los camarones causando mortalidad masiva durante los primeros 30 días de cultivo.
Fue reportada por primera vez a principios del 2009 cuando se detectaron, repentinamente, casos de
mortalidades masivas (60-80%) de camarones juveniles de cultivo en China. Como hasta ese momen-
to era desconocido el agente causal de esta enfermedad, se le asignó el nombre de Síndrome de Mor-
talidad Temprana (EMS por sus siglas en inglés). Posteriormente, durante 2010 y 2011, se registraron
mortalidades similares en Vietnam y Malasia; y estos nuevos casos compartían algunas características
con lo ocurrido en 2009. Durante el 2012, Tailandia también se vio afectada por la presencia de EMS
con mortalidades de camarón de cultivo de 20 a 30%. En América en agosto de 2013, el doctor Do-
nald Lightner confirmó, en la “Sexta Reunión del Comité Interamericano de Sanidad de los Animales
Acuáticos”, llevada a cabo en Yucatán, la presencia de la enfermedad en México desconociéndose
hasta la fecha la vía por la cual llegó al país causando mortalidades altas en producción de camarón
de cultivo.
167
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
A inicios de abril del 2013, en Nayarit México, se presentaron mortalidades masivas en cama-
rones cultivados en los primeros 20 días de sembrados en granjas de cultivo semi-intensivo e intensi-
vo. Casi de manera simultánea las mortalidades se presentaron por toda la región noroeste (Sinaloa,
Sonora y Nayarit), que comprende más del 90% de la producción de camarón cultivado en México.
Existe evidencia de que actualmente se presenta en cultivos en Chiapas, Colima, y Baja California
(valle de Mexicali), estos dos últimos cultivos en agua de muy baja sanilidad.
El diagnóstico de AHPND se realiza de manera presuntiva a nivel de hallazgos en el estanque
(signos clínicos) y de manera confirmatoria partir del estudio histopatológico en camarones afectados
de manera individual y por reacción en cadena de la polimerasa (PCR). Por histopatología presenta
una fase aguda, con desprendimiento progresivo de las células de los túbulos del hepatopáncreas,
que avanza de la parte interna (proximal al intestino), hacia la externa (distal), quedando libres en la
luz de los conductos tubulares, presentando infiltración hemocítica moderada, disfunción de las cé-
lulas R, B, F y E que conforman el epitelio tubular, notándose en éstas últimas cariomegalia (aumento
nuclear) y una disminución marcada en sus actividades de formación de nuevas células (mitosis).
En fase terminal, se observa encapsulación de células y túbulos, infiltración hemocítica se-
vera, presencia de aglomerados de bacterias en lumen de los túbulos, nódulos hemocíticos con y
sin melanización en las paredes de los túbulos melanizados y necróticos con infección bacteriana
secundaria severa.
Los organismos colectados durante los eventos de mortalidad presentaron signos clínicos y
daños severos en hepatopáncreas muy parecidos a los reportados para AHPND los cuales se descri-
ben a continuación:
Signos clínicos
Los organismos presentaron nado errático, encontrándose la mayoría en el fondo, con hepato-
páncreas de coloración pálida o blanquecina, debido a pérdida de la pigmentación de la membrana
que recubre al órgano (Fig. 3.1.1) y atrofia severa. Intestino con presencia entrecortada de alimento
y algunos sin alimento con una secreción blanquecina y el músculo abdominal opaco con exoes-
queleto suave.
Diagnóstico
Por análisis en fresco, la enfermedad presenta tres etapas de desarrollo (fases inicial, aguda y
terminal). La fase inicial, con hepatopáncreas de color normal con deformación tubular (Fig.3.1.2),
túbulos vacíos de la región apical los cuales van aumentando al entrar en fase aguda (Fig.3.1.3), en
esta etapa el hepatopáncreas es de color pálido o blanquecino y al realizar la disección longitudinal
la parte central del órgano esta licuefactivo y en fase terminal, el hepatopáncreas se observa co-
lor blanquecino, atrofiado (Fig.3.1.4) con túbulos melanizados, necrosis y presencia de cúmulos de
bacterias en los nódulos y encapsulaciones (Fig.3.1.5). El intestino se observa sin alimento con una
secreción blanquecina (Fig. 3.1.4).
168
Capítulo 3 - Enfermedades bacterianas de camarones
169
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Por histología, las muestras de camarones tomadas de estanques con mortalidad atípica
presentaron: fase inicial, células epiteliales elongadas hacia el lumen sin infiltración hemocítica
(Fig.3.1.6), con agregados de bacterias en las setas del molino gástrico (criba) (Fig.3.1.7), en fase
aguda, se presentó desprendimiento progresivo de las células de los túbulos del hepatopáncreas,
que avanza de la parte interna (proximal), hacia la externa (distal), quedando libres en la luz de
los conductos tubulares (Fig. 3.1.8) con infiltración hemocítica moderada, disfunción de las células
R, B, F y E que conforman el epitelio túbular, notándose en éstas últimas aumento nuclear. En fase
terminal, se observa encapsulación de células y túbulos, infiltración hemocítica severa, presencia
de aglomerados de bacterias en lumen de los túbulos, nódulos hemocíticos con y sin melanización,
en las paredes de los túbulos melanizados y necróticos con infección bacteriana secundaria severa.
170
Capítulo 3 - Enfermedades bacterianas de camarones
Nombre de la enfermedad
Necrosis hepatopancreática aguda; síndrome de la mortalidad temprana (Early mortality syn-
drome, EMS).
Agente Etiológico
Vibrio parahaemolyticus.
Agente
El agente causante de AHPND ha sido identificado como una cepa patógena de Vibrio parahae-
molyticus, un miembro del clade Vibrio harveyi. Hasta este momento no se ha publicado información
sobre las características del genoma de esta cepa, sin embargo, es posible que contenga genes especí-
ficos para la producción de una toxina hasta el momento no identificada y posiblemente diferente a las
ya conocidas. Aparentemente, el mecanismo de acción de esta bacteria es a través de la colonización
de las partes bucales, esófago y/o estómago, en donde al alcanzar un cierto número se desencadena
la producción de la toxina(s) que al llegar al hepatopáncreas resulta en la descamación severa de los
túbulos y la necrosis del órgano (Tran et al., 2013a).
De acuerdo a Tran et al. 2013(b), algunas cepas de V. parahaemolyticus producen dos toxinas
termoestables conocidas como TDH y TRH, las cuales pueden causar gastroenteritis en humanos al
consumir alimentos contaminados. Sin embargo, la cepa de V. parahaemolyticus causante de AHPND
no produce estas toxinas y no representa un riesgo para la salud humana.
Rango geográfico
La enfermedad fue reconocida por primera vez al sur de China en 2009. Posteriormente, se
ha confirmado su presencia en Vietnam (2010), Malasia (2011), Tailandia (2012) y más recientemente
en el Pacífico mexicano (2013). Como se ha observado en el caso de otras enfermedades infecciosas
de los camarones penaeidos, es posible que el rango siga extendiéndose debido a la tendencia de la
industria al transporte regional e internacional de camarones vivos con propósitos de reproducción.
Especies afectadas
Penaeus vannamei y Penaeus monodon.
172
Capítulo 3 - Enfermedades bacterianas de camarones
Diagnóstico presuntivo
Basado en un historial de la granja/región y la presencia de los signos clínicos mencionados
anteriormente.
Diagnóstico definitivo
Histopatología. La enfermedad presenta tres fases distintivas con las siguientes características histoló-
gicas, notablemente diferentes de un hepatopáncreas con estructura normal (Fig. 3.2.2):
Fase aguda: Pérdida de la función de las células que recubren los túbulos del hepatopáncreas
(células “R”, “B”, “F” y “E”); desprendimiento agudo severo de las células de los túbulos del hepato-
páncreas con distribución proximal a distal; es común observar células desprendidas con núcleos aun
intactos; ausencia de infección bacteriana (de cualquier tipo) dentro del hepatopáncreas; ausencia
de inflamación intertubular o bien inflamación muy leve. Estas lesiones se consideran diagnósticas
de AHPND y no se les ha observado en ningún otro tipo de infección bacteriana de camarones pe-
naeidos (Fig. 3.2.3).
Fase de transición: Inflamación intertubular; melanización de las áreas más afectadas, princi-
palmente en la región proximal de los túbulos (las áreas más cercanas al intestino medio). Se puede
observar los inicios de infección bacteriana. Continúa el desprendimiento de las células de los túbu-
los (Fig. 3.2.4).
Fase terminal: Inflamación intertubular muy marcada; melanización multifocal extensa de
los túbulos necrosados; infección bacteriana secundaria masiva por especies oportunistas de Vibrio
sp. En esta etapa, es muy difícil diferenciar entre una vibriosis entérica común severa y AHPND (Fig.
3.2.5).
173
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
174
Tabla 1. Histopatología de la enfermedad de la necrosis hepatopancreática aguda (AHPND). Diagnóstico diferencial para las Américas
ENFERMEDAD
NHP SHPN SHPN
TIPO DE LESION (Hepatopancreatitis (Necrosis (Necrosis
EMS necrotizante causada hepatopancreática hepatopancreática
(Síndrome de la mortalidad temprana) por Hepatobacter séptica, causada por séptica, causada por
penaei) Vibrio spp.) Vibrio spp.)
175
Capítulo 3 - Enfermedades bacterianas de camarones
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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Capítulo 3 - Enfermedades bacterianas de camarones
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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Capítulo 3 - Enfermedades bacterianas de camarones
Diagnóstico
Se realiza de manera presuntiva por análisis en fresco, la enfermedad presenta tres etapas de
desarrollo (fases inicial, aguda y terminal), con deformación tubular progresiva, gran cantidad de
hemocitos, cúmulos de bacterias, desprendimiento celular, nódulos hemocíticos (Fig.3.3.2) y túb-
ulos melanizados y necróticos. De manera confirmatoria por histopatología con tinción de hema-
toxilina-eosina, la mayoría de los túbulos normales (Fig.3.3.3) desaparecen y se observan secciones
del hepatopáncreas con infiltración de hemocitos, hipertrofia del lumen, desprendimiento celular,
nódulos hemocíticos, melanización, necrosis y atrofia de moderada a severa (Fig.3.3.4). La infil-
tración de hemocitos y la formación de nódulos hemocíticos con presencia de cúmulos de bacte-
rias, los cuales pueden o no estar melanizados, se aprecian también en corazón, branquias, órgano
linfoide, glándula antenal, tejido y cordón nervioso, tejido conectivo, telson, estómago, esófago,
apéndices, músculo y ciegos hepáticos. Por análisis de bacteriología es necesario aislar la bacteria en
especial de organismos moribundos que muestren una gran colonización de bacterias. El aislamiento
se realiza en agar TCBS sembrando el macerado de los organismos previamente desinfectados. Al ob-
tener los resultados en las placas se observa gran cantidad de colonias luminiscentes de color verde.
179
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
180
Capítulo 3 - Enfermedades bacterianas de camarones
Diagnóstico
Se realiza de manera presuntiva por análisis en fresco, la enfermedad presenta 4 etapas de
desarrollo (fases de infección, inicial, aguda y terminal), sin presencia de hemocitos en la etapa de in-
fección e inicial, en fase aguda se observa gran cantidad de hemocitos, deformación tubular, túbulos
vacíos, melanizados, necróticos y formación de cápsulas. De manera confirmatoria por histopatolo-
gía con tinción de hematoxilina-eosina, la mayoría de los túbulos normales desaparecen en la etapa
aguda y se observa desprendimiento celular severo, atrofia y melanización de los túbulos; formación
multifocal de cápsulas envolviendo a uno o más túbulos, las células epiteliales dentro de los túbulos
en algunos casos están hipertrofiadas conteniendo en el citoplasma cúmulos de bacterias (Fig.3.4.2).
Las células de los túbulos cercanos a los atrofiados y con presencia de cápsulas presentan atrofia,
con núcleos picnóticos, muy pocas vacuolas de lípidos (células R) y vacuolas secretoras (células B).
También es posible observar que el epitelio columnar de estos túbulos se ve afectado, pues la atrofia
de las células lo convierte en epitelio cuboidal.
Control
Debido a que es una enfermedad endémica en muchos países, sólo se puede evitar su disemi-
nación mediante medidas de bioseguridad impuestas por cada empresa cultivadora de camarones.
Esto implica evitar movilización de especímenes vivos infectados entre zonas de cultivo, realizar
muestreos semanales para detectar oportunamente casos sospechosos y realizar montajes en fresco
de hepatopáncreas para evaluar nivel de vacuolas lipídicas, presencia y severidad de túbulos mela-
nizados.
Las medidas terapéuticas sólo se deben utilizar cuando el patógeno haya revasado las medidas
profilácticas. Los antibióticos se utilizan para controlar la infección en casos de NHP.
Uso de alimentos medicados con Oxitetraciclina (2 a 5 Kg/Ton de alimento) y Florfenicol (1
a 1.5 Kg/Ton de alimento) por un periodo de 10 a 14 días, buscando concentraciones de 2,000 a
5,000 ppm y de 200 a 300 ppm, respectivamente, de principio activo. Para esto, hay que considerar
el tiempo de retiro (días sin el producto que se deben esperar antes de la cosecha).
Se deben desarrollar programas de reproductores libres de NHP, para evitar la posible transmi-
sión de la bacteria a las nuevas generaciones, lo cual conllevaría a la continuidad de la enfermedad
en estanques de cultivo.
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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Capítulo 3 - Enfermedades bacterianas de camarones
Diagnóstico
Se realiza mediante la elaboración de placas en fresco de Zoeas II, donde se observa hepato-
páncreas de tamaño normal con desprendimiento celular, atrofia del hepatopáncreas con despren-
dimiento celular o hepatocitos hipertrofiados y redondos llamados “bolitas blancas,” inflamación y
presencia de células del hepatopáncreas viajando a través del intestino (Fig.3.5.1). Se piensa que las
bolitas blancas son una reacción a la presencia de toxinas bacterianas (Vibrio sp.). En organismos con
la enfermedad de bolitas blancas, el diagnóstico por histología de rutina con tinción de hematoxili-
na-eosina se basa en la inspección del hepatopáncreas para buscar la presencia de células (bolitas
blancas) viajando por el lumen del túbulo del hepatopáncreas (Fig.3.5.2) y del intestino de la Zoea
II, hepatocitos hipertrofiados y, en algunos casos, infiltración hemocítica y formación de nódulos.
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Signos clínicos
Los organismos infectados con esta bacteria se observan con luminiscencia (Fig.3.6.1), letargo
(disminución de la actividad normal), nado errático, permanencia en el fondo del tanque y mortali-
dades masivas.
Diagnóstico
El diagnóstico por montaje en fresco, se realiza mediante la elaboración de placas en fresco
de larvas, donde se observa en fase inicial colonización masiva de las bacterias en los apéndices,
tracto digestivo y región oral. Pero conforme avanza la enfermedad y entra en la fase aguda se observa
colonización en el intestino medio y posterior y en hepatopáncreas hasta llegar a colonizar todos los
órganos y tejidos del organismo y tener una septicemia generalizada con mortalidades altas.
Por bacteriología es necesario aislar la bacteria en especial de organismos moribundos que
muestren una gran colonización de bacterias. El aislamiento se realiza en agar TCBS sembrando el
macerado de los organismos previamente desinfectados. Al obtener los resultados en las placas se ob-
serva gran cantidad de colonias luminiscentes de color verde (V. campbellii) o amarillas (V. harveyi).
En organismos con la enfermedad de luminiscencia se diagnostica por histopatología con
tinción de hematoxilina-eosina, y se busca la presencia de colonias de bacterias, infiltración de he-
mocitos, nódulos hemocíticos en apéndices, tracto digestivo, intestino y hepatopáncreas (Fig.3.6.2).
184
Capítulo 3 - Enfermedades bacterianas de camarones
Signos clínicos
Se observan en la cutícula manchas de color cafés o negras (Fig.3.7.1) en áreas que han sido
erosionadas por acción de bacterias quitinolíticas. Cuando la infección progresa se observa el mús-
culo melanizado, con secciones de necrosis y atrofia muscular.
Diagnóstico
Al realizarse el análisis en fresco de muestras de cutícula y músculo, se observan con clari-
dad las manchas rojas, cafés y negras, así como secciones del músculo con erosiones melanizadas
y hemocitos rodeando la lesión (Fig.3.7.2). En organismos con esta enfermedad por histopatología
con tinción de hematoxilina-eosina, se observa en algunas secciones de la cutícula y músculo, me-
lanización, necrosis con infiltración de hemocitos, atrofia de los paquetes musculares y presencia de
nódulos hemocíticos con cúmulos de bacterias (Fig.3.7.3).
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
186
Capítulo 3 - Enfermedades bacterianas de camarones
3.8. Estreptococosis
Es causada por Streptococus sp., relacionadas a S. uberis y S. parauberis, provocando altas
mortalidades en camarones de cultivo de Penaeus vannamei (80%). Existen muy pocos reportes de
infecciones por cocos gram positivos en crustáceos; solo se encuentran documentados la enfermedad
del músculo blanco en langostino Macrobrachium rosembergii causada por Lactococcus lactis y L. gar-
vieae que están incluidas en la familia Streptococcaceae. En México, en 2011 y 2012 se observaron
mortalidades altas juveniles de camarón blanco en cultivos en agua a baja salinidad, los organismos
presentaron desprendimiento celular severo de los túbulos del hepatopáncreas, atrofia tubular con
infiltración hemocítica severa causando mortalidades del 40%, la bacteria caracterizadas fue Strep-
tococcus sp.. Este brote presentó una prevalencia del 25% con 30 días de observación; período
durante el cual los organismos frenaron su tasa de crecimiento y se afectó la sobrevivencia. Se cree
que existió una aceleración en la dinámica del patógeno por la condición hipotónica del cultivo, la
elevada densidad y nitritos altos.
Signos clínicos
Los organismos infectados con esta bacteria se observan en fase inicial con músculo blanque-
cino y ciego hepático posterior opaco (Fig.3.8.1) y en fase aguda el organismos se encuentra total-
mente blanquecino con letargo (disminución de la actividad normal), nado errático, permanencia en
el fondo del tanque y mortalidades masivas.
Diagnóstico
Se realiza de manera presuntiva por análisis en fresco, en hepatopáncreas hay deformación
tubular progresiva (Fig.3.8.2), gran cantidad de hemocitos, cúmulos de bacterias, desprendimiento
celular, nódulos hemocíticos y túbulos melanizados y necróticos. De manera confirmatoria por his-
topatología con tinción de hematoxilina-eosina, la mayoría de los túbulos normales desaparecen y
se observan secciones del hepatopáncreas con infiltración de hemocitos, hipertrofia del lumen, des-
prendimiento celular, nódulos hemocíticos, melanización, necrosis y atrofia de moderada a severa.
También se observan numerosos cocos libres dentro de la hemolinfa y en mayor presencia en el lu-
men de los túbulos del órgano linfoide (Fig.3.8.3) en muestras histológicas teñidas con hematoxilina
eosina y Giemsa.
El aislamiento se realiza en agar sangre sembrando de macerado de hepatopáncreas. Al obte-
ner los resultados en las placas se observa gran cantidad de colonias en cadena de forma esférica (2
micrómetros de diámetro).
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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Capítulo 3 - Enfermedades bacterianas de camarones
Nombre de la enfermedad
Espiroplasmosis.
Agente Etiológico
Spiroplasma penaei.
Agente
Las bacterias incluidas dentro del género Spiroplasma (Clase Mollicutes) se caracterizan por
carecer de una pared celular y por tener una morfología helicoidal. Los espiroplasmas son motiles a
pesar de carecer de flagelos. Históricamente, los espiroplasmas han sido asociados a enfermedades
de plantas y de artrópodos, principalmente insectos y garrapatas, pero más recientemente se han
encontrado a miembros de este género infectando a algunas especies de cangrejos de agua dulce
(Eriocheir sinensi) y los camarones alvinocáridos de las chimeneas hidrotermales en el fondo del
océano (Rimicaris exoculata) en donde parece no causar enfermedad alguna, sino más bien, parece
ser parte de la microflora normal. Spiroplasma penaei es el primer espiroplasma patogénico que ha
sido aislado a partir de un crustáceo marino (Fig. 3.9.1).
Tejidos/órganos afectados
Típicamente se incluyen el cordón ventral nervioso, músculo esquelético, corazón, glándula
antenal, órgano linfoide, tejido conectivo fibroso dentro del hepatopáncreas, tejido conectivo espon-
joso perigástrico, filamentos branquiales y subcutis en el caparazón y apéndices corporales.
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Procedimientos de diagnóstico
Diagnóstico presuntivo. Basado en historial del caso y signos clínicos descritos anteriormente.
Diagnóstico confirmatorio. Basado en uno o más de los siguientes métodos:
Histopatología. Las lesiones causadas por este espiroplasma son las características de una enferme-
dad bacteriana de tipo sistémico. Utilizando técnicas de rutina con tinciones de hematoxilina-eosina
(H&E) los camarones moribundos presentan reacciones inflamatorias sistémicas multifocales, mod-
eradas a severas, en forma de congestión hemocítica, coagulación de hemocitos, formación de nód-
ulos hemocíticos (Fig.3.9.2), fagocitosis (algunas veces acompañada de melanización) y fibrosis. Los
órganos afectados incluyen (en orden de severidad): cordón ventral nervioso, músculo esquelético,
corazón, glándula antenal, órgano linfoide, tejido conectivo fibroso dentro del hepatopáncreas,
tejido conectivo esponjoso perigástrico, filamentos branquiales y subcutis. El desarrollo de las le-
siones parece ser como sigue: (1) Presencia de células necróticas con núcleos picnóticos. (2) Mi-
gración y congregación de células fagocíticas en el área necrosada. (3) Fagocitosis de las células
necrosadas y restos celulares y formación de nódulos hemocíticos. (4) Melanización de nódulos
hemocíticos. (5) Inflamación fibrocítica.
PCR. Utilizando los métodos descritos por Nunan et al., 2004. Debido a la gran similitud entre las
lesiones producidas por S. penaei y otras enfermedades bacterianas tales como vibriosis sistémi-
ca, es aconsejable combinar el análisis histológico con PCR, o con pruebas de hibridación in situ
(Fig.3.9.3), para poder obtener un diagnóstico confirmatorio confiable.
190
Capítulo 3 - Enfermedades bacterianas de camarones
ESPIROPLASMOSIS
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Capítulo 4 - Parásitos en camarones
Capítulo 4
Parásitos en camarones
195
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
196
Capítulo 4 - Parásitos en camarones
CAPÍTULO 4
Parásitos en camarones
Jorge Cuéllar-Anjel
Director del Departamento de Patología e Investigación
Camaronera de Coclé S.A. (CAMACO)
Coordinador del Grupo ad hoc del OIRSA en Sanidad Acuícola
Panamá
Introducción
Un parásito puede ser considerado como todo organismo vegetal o animal que vive a costa de
otro de distinta especie, alimentándose de las sustancias que este consume o elabora y pudiéndole
o no perjudicar, aunque sin llegar necesariamente a producirle la muerte. Los parásitos se clasifican
en endoparásitos y ectoparásitos, según si habitan en el interior o en el exterior de sus hospederos.
La afección de un animal por parásitos, es llamada parasitosis. Los principales parásitos de
camarones son gregarinas, epicomensales (protozoarios, algas y bacterias filamentosas), microspori-
dios, haplosporidios y metazoarios (nemátodos o tremátodos). Los protozoarios son los que más co-
múnmente afectan a los camarones, pudiendo ser observados en branquias, apéndices, exoesqueleto
y tracto digestivo (intestino medio y eventualmente hepatopáncreas).
4.1 Gregarinas
Nombre de la enfermedad
Gregarinas, parasitismo por gregarinas o enfermedad de gregarinas.
Etiología
Las gregarinas (Protozoa, Apicomplexa) son parásitos protozoarios de diversos tipos, amplia-
mente distribuidos en la naturaleza y comunes en muchos grupos de invertebrados, especialmente
artrópodos, anélidos y moluscos. En éstos, las gregarinas pueden aparecer ínter o intracelularmente y
aunque las células hospedero individuales son destruidas por el estadío intracelular, muchas especies
no son consideradas como de alta patogenicidad. Sin embargo, cada especie de gregarina suele ser
específica de una única especie de hospedero.
Las gregarinas pueden ser encontradas tanto en camarones silvestres, como en sistemas de
cultivo. Todos los camarones penaeidos son hospederos conocidos o potenciales de las gregarinas.
Por lo menos dos géneros, Nematopsis y Cephalolobus, cada uno con diversas especies, aparecen de
manera frecuente en los camarones penaeidos con una distribución geográfica mundial. Un tercer
género llamado Paraophioidina, se ha observado esporádicamente en postlarvas de P. vannamei bajo
condiciones de cultivo.
Debido a que se considera que existen múltiples especies de gregarinas con distribución geo-
gráfica aún sin definir en todo el mundo, es recomendable realizar monitoreos sanitarios cuando van
197
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
a ser movilizados camarones procedentes de regiones aisladas, ya que éstas pueden poseer poblacio-
nes nativas de estos parásitos.
Ciclo de vida
En los camarones, la ingestión de un hospedero intermediario que contenga esporas de gre-
garina, trae como consecuencia la infestación. Las esporas ingeridas “germinan” para llegar a ser
esporozoitos, los cuales se adhieren a la capa de quitina de las paredes y a los pliegues terminales del
filtro gástrico. También pueden invadir o unirse al intestino medio o a las células epiteliales del ciego
anterior, con su proceso especializado de epimeritos. Una vez adheridos, se desarrollan a trofozoitos
que se caracterizan por su epimerito especializado y consisten en la forma inicial del protomerito,
con un núcleo diferenciado y localizado centralmente (Fig. 4.1.2). De cada uno pueden generarse
al menos tres trofontes.
Los trofontes se separan de su unión al estómago o intestino medio, para convertirse en espora-
dio y pasar al intestino posterior, alojándose en sus pliegues. De cada célula individual de esporadio,
se desarrolla un gametocisto. Algunas de estas células darán paso a la fase sexual de la reproducción
del parásito, formando microgametos (gametos masculinos) y macrogametos (gametos femeninos).
Cuando hay ruptura de los gametocistos, los gametos se entrecruzan y fusionan para formar cigotos,
los cuales son liberados al medio externo.
Las zigosporas son consumidas por bivalvos y poliquetos. En el interior de estos segundos
hospederos, ocurre la esporogonia en las células del epitelio intestinal. Posteriormente, el camarón
ingiere los poliquetos o sus heces y se infesta. Dentro del tracto gastrointestinal del camarón, se libe-
ran los esporozoitos, ocupando el estómago posterior o el intestino medio, adhiriéndose a la cutícula
o penetrando las membranas de las células del hospedero. Los esporozoitos son desarrollados a tro-
fozoitos en el intestino medio, posterior o en el propio estómago (Fig. 4.1.1).
198
Capítulo 4 - Parásitos en camarones
Mecanismos de transmisión
Debido a la necesidad de varios hospederos dentro del ciclo de vida de las gregarinas, se cree
que la transmisión de un camarón a otro no es frecuente. Algunos ensayos de transmisión en acuarios
han mostrado que eliminando el segundo hospedero una vez están infestados los camarones, desa-
parecen los protozoarios del tracto intestinal en pocos días.
Aunque los moluscos bivalvos han sido implicados tradicionalmente como hospederos in-
termediarios de las gregarinas para camarones penaeidos, el poliqueto Polydora cirrhosa, anélido
muy común que vive en el fondo de las piscinas camaroneras, fue encontrado como un importante
hospedero intermediario para el Nematopsis sp. según estudios realizados en Ecuador, en estanques
de cultivo de P. vannamei.
Signos clínicos
Los camarones con infestaciones muy altas (más de 100 trofozoitos por cm de intestino me-
dio), pueden mostrar una coloración amarillenta del intestino medio. En los casos en los que la in-
festación es severa e involucra a una gran parte de la población de cultivo, se puede presentar bajo
crecimiento de los camarones y aumento en el factor de conversión alimenticia.
Los camarones con niveles bajos o moderados de infestación por gregarinas, pueden no pre-
sentar signos clínicos y tener una apariencia general equivalente a camarones aparentemente sanos.
Diagnóstico
Montaje en fresco: pueden ser observados esporozoitos, trofozoitos o gametocistos en heces de ca-
marones extraídas del intestino medio y examinadas bajo el microscopio, utilizando objetivos de
10x y 20x. No se requieren tinciones para la diferenciación del parásito. Su apariencia será pálida
cuando esté inmaduro y tendiente a color marrón oscuro entre más cercano esté de ser adulto. En
algunos casos se observan gregarinas con su extremo distal bifurcado en forma de “Y”. Cada “seg-
mento” (célula) que conforma el organismo, tiene su núcleo visible y de fácil diferenciación cuando
se usa el ajuste micrométrico de foco en el microscopio (Fig. 4.1.3 a 4.1.5).
Histopatología: se observan parásitos en el intestino medio y con frecuencia en la luz del ciego an-
terior, así como en los conductos primarios del hepatopáncreas; estómago anterior y porción inicial
del tracto digestivo anterior. Las lesiones significativas aparecen típicamente en infestaciones severas
y consisten en taponamiento mecánico del lumen intestinal, reducción del grosor de la mucosa del
intestino medio, hiperplasia del epitelio intestinal formando pliegues tipo “vellos” y, perforaciones de
la mucosa intestinal. Éstas, pueden proporcionar una ruta de entrada a Vibrio spp. u otras especies
de bacterias extracelulares, que son agentes potenciales causantes de bacteremia por oportunistas.
Medidas de control
Los aumentos en la intensificación de los sistemas de producción, han venido acompañados
por aumentos en la incidencia de gregarinas en las explotaciones de camarón. Con el fin de mantener
los niveles de gregarinas por debajo de los grados considerados como de riesgo para el crecimiento (y
eventualmente supervivencia), muchos productores realizan monitoreos periódicos para gregarinas y
han comenzado a incorporar anticoccidiales veterinarios en los alimentos balanceados, con las dosis
recomendadas para avicultura y ganadería bovina, teniendo resultados variables que son medidos a
través de muestreos de rutina. Sin embargo, se debe considerar que los ingredientes activos conocidos
como coccidiostáticos y según el Reglamento No. 37/2010 de la Comisión Europea, no están autori-
zados para especies acuáticas sino únicamente para las especies establecidas en dicho reglamento.
199
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Otras técnicas de control incluyen la eliminación del organismo hospedero (Polydora sp. y moluscos
bivalvos), mediante la adición de cal en niveles adecuados al fondo del estanque luego de la cosecha,
para destruir estos vectores potenciales del protozoario.
Figura 4.1.1. Ciclo de vida de las gregarinas en camarones. Adaptado de Johnson (1978). A. El camarón
ingiere las esporas con detritus orgánicos del fondo. B. Los esporozoitos emergen dentro del intestino
del camarón. C. Los esporozoitos se adhieren a la pared intestinal y crece en trofozoitos; algunos
trofozoitos no se adhieren a las paredes sino entre sí, formando estructuras inusuales. D. Estas formas
inusuales se desarrollan y se adhieren a la parte final del intestino (recto) para formar gametocistos. E.
Los gametocistos sufren múltiples divisiones para producir gimnosporas que quedan libres luego de la
ruptura del gametocisto. F. Las gimnosporas son engolfadas por células de la superficie del tejido blan-
do de las almejas. G. Dentro de las almejas, se desarrollan hasta formar esporas. H. Las esporas (con
esporozoitos en su interior) son luego liberadas por al almeja adheridas a masas de moco.
GREGARINAS
200
Capítulo 4 - Parásitos en camarones
201
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
4.2 Microsporidios
Nombre de la enfermedad
Microsporidiosis, enfermedad del camarón algodonoso, enfermedad del camarón lechoso o
enfermedad del Nosema (entre otras).
Etiología
Anteriormente se sostenía que la microsporidiosis era una enfermedad parasitaria produci-
da en camarones penaeidos por protozoarios intracelulares miotrópicos, pero ahora se sabe que
el agente causal de la enfermedad pertenece a los hongos, de acuerdo con estudios moleculares a
partir de secuenciación del RNA ribosomal. Los principales géneros son Agmasoma (anteriormente
Thelohania), (A. penaei y A. duorara), Ameson (anteriormente Nosema) (A. nelsoni) y Pleistophora
(anteriormente Plistophora) (P. penaei). Un nuevo género Tuzetia, fue reportado en 2002 e incluye
la especie T. weidneri. Las especies de microsporidios observadas en los tejidos de los camarones,
pueden ser diferenciadas según el tamaño de las esporas (1 a 8 µm), el número de esporas producidas
y el número de giros del túbulo polar.
Especies afectadas
Probablemente todas las especies de camarones penaeidos puedan ser infestadas por una o
más especies de microsporidios. Los tejidos afectados están típicamente inflamados. Las células que
son parasitadas, presentan hipertrofia tanto del citoplasma como del núcleo y poseen esporas del
protozoario que pueden verse esféricas o cilíndricas.
Estos parásitos protozoarios intracelulares afectan a artrópodos, peces y también al hombre.
Poseen reproducción sexual por esporogamia (en el hospedero) y asexual por fisión múltiple (esqui-
zogamia).
La enfermedad del camarón algodonoso en P. vannamei, se presenta cuando el músculo estria-
do es invadido por el protozoario Ameson sp. Los procesos de reproducción asexual culminan con
la producción de gran cantidad de esporas que se localizan dentro de las células en tejido muscular
del camarón.
202
Capítulo 4 - Parásitos en camarones
de reproductores. Sin embargo, se tienen reportes de un brote de la enfermedad que se dio en cama-
rones cultivados en tanques, los cuales fueron puestos en contacto con agua o sedimento de peces
que habían sido alimentados con camarones silvestres.
Figura 4.2.1. Adaptada y modificada después de Johnson 1978 por el Dr. Kenneth W. Hasson. Partes de
la figura fueron tomadas directamente de Canning y Lom 1986, Perkins 1991 y Putz y McLaughlin 1970.
Métodos de diagnóstico
El examen clínico permite detectar presencia de manchas blancas en cefalotórax, gónadas,
tracto digestivo y/o músculo esquelético en abdomen o cefalotórax, las cuales pueden sugerir in-
fección con el hongo (Fig. 4.2.2 a 4.2.4). Estos hallazgos también pueden estar acompañados por
opacidad u oscurecimiento generalizado del camarón.
El montaje en fresco a partir de tejido muscular afectado sin teñir o coloreado con la técnica
de Giemsa, permite observar las esporas del parásito bajo el microscopio (400x). Son características
las masas de esporas refringentes que de acuerdo con su tamaño y forma, indican el tipo de organis-
mo que se encuentra presente en los tejidos afectados (Fig. 4.2.5 y 4.2.6).
El análisis histológico realizando tinciones con H&E, Giemsa o ácido-alcohol resistente (“acid
fast”), permite visualizar las esporas de los microsporidios claramente dispuestas en colonias dentro
de los tejidos afectados (Fig. 4.2.7 y 4.2.8).
En la Tabla 1 se describen las características de las esporas de cada especie, según los nuevos
esquemas taxonómicos y mediante el uso de microscopía electrónica de transmisión (TEM):
203
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
204
Capítulo 4 - Parásitos en camarones
P. latisulcatus No reportado
P. merguiensis No reportado
P. semisulcatus No reportado
Vasos sanguíneos,
intestinos anterior
Agmasoma P. setiferus 2.0 x 5.0 y
y posterior, 8
(Thelohania) penaei P. vannamei 5.0 x 8.2
gónadas y
músculo
Vasos sanguíneos,
intestinos anterior
Agmasoma P. monodon
y posterior, 8 No reportado
(Thelohania) sp. P. merguiensis
gónadas y
músculo
Agmasoma (= P. duorarum Músculo 8 3.6 x 5.4
Thelohania) duorara
P. aztecus
P. brasiliensis
P. esculentus Músculo estriado 8 No reportado
Thelohania sp.
P. latisulcatus
P. merguiensis
P. semisulcatus
Músculo, corazón,
intestino anterior,
P. aztecus 16 to 40+ 2.1 x 2.6
branquias y
Pleistophora sp. hepatopáncreas
P. setiferus
P. stylirostris
P. duorarum
205
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Mecanismos de control
No se conocen tratamientos específicos para el control de la microsporidiosis en sistemas
de producción. Por esta razón, solamente se puede tratar de evitar el contacto entre los camarones
expuestos a riesgo de infestación (hospederos intermediarios), los peces requeridos como hospederos
definitivos para cerrar el ciclo y, el parásito en sí.
Por lo anterior, se hace evidente la importancia de realizar planes de exclusión de predadores
de camarones (peces), tanto de los estanques de cultivo, como de los canales de suministro de agua
(reservorios).
Los camarones afectados por el parásito, deben ser descartados durante el cultivo en estanques
y durante el momento de la cosecha. De igual manera, deben extremarse cuidados para evitar la dise-
minación de reproductores de P. vannamei infestados con alguna de las especies de microsporidios,
en regiones geográficas en donde el parásito no se encuentre o no haya sido reportado. No se deben
utilizar camarones infectados o sospechosos de microsporidiosis, en sistemas de maduración.
MICROSPORIDIOS
206
Capítulo 4 - Parásitos en camarones
207
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
208
Capítulo 4 - Parásitos en camarones
4.3 HAPLOSPORIDIOS
Nombre de la enfermedad
Haplosporidiosis hepatopancreática, infección por haplosporidios o haplosporidiosis.
Etiología
Se cree que las afecciones en camarones penaeidos son producidas por varios posibles ha-
plosporidios. Algunos de estos parásitos reportados en cultivos de camarón en Asia y México, no
han sido lo suficientemente estudiados y tampoco han sido demostradas esporas del parásito como
para poder ser ubicados taxonómicamente dentro del phylum Haplosporea. Para ello, se requerirán
estudios a partir de TEM con el fin de utilizar las características de su ultraestructura en una correcta
clasificación.
Sin embargo, recientemente ha sido propuesto (Painhealth Medical References) que los ha-
plosporidios sean clasificados en el orden sporozoa como protozoarios del phylum Ascetospora,
clase Stellatosporea, con reproducción asexual mediante esquisogonias y que producen esporas pero
no flagelos, pudiendo tener seudópodos.
Métodos de diagnóstico
Análisis histológico para de-
mostrar la presencia intracelular del
protozoario en las células epiteliales
de los túbulos del HP. En infecciones
típicas, el protozoario se aprecia api-
calmente o lateralmente al núcleo,
como si fuera un plasmodio multinu-
cleado que puede fragmentarse en es-
tadíos mononucleados. Estas células
mononucleadas pueden ser encontra-
das en el lumen de los túbulos del HP,
presumiblemente después de haber
Figura 4.3.1. Corte histológico de hepatopáncreas (HP) de un juvenil sido liberadas por células necróticas.
P. monodon infectado con haplosporidios. En la foto se ilustran los Los plasmodios pueden ser observa-
diferentes estadios de infección en las células epiteliales de los túbulos dos en cortes histológicos teñidos con
del HP (flechas). Tinción: Mayer-Bennett H&E. Magnificación: 1800X. hematoxilina y eosina o con Wol-
Foto cortesía del Lic. A. Varela, a partir de la colección histológica
del Laboratorio de Patología Acuática de la Universidad de Arizona bach’s Giemsa (Fig. 4.3.1).
(Tucson, EE.UU.).
209
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
En los casos de infecciones muy severas, los túbulos del HP con alta presencia de haplospo-
ridios se observan rodeados por masas de hemocitos, los cuales están encapsulando y melanizando
activamente las porciones afectadas de los túbulos.
Al realizar estudios mediante TEM a partir de células epiteliales de túbulos afectados del HP,
se observa la presencia de haplosporosomas dentro del parásito cuyo tamaño aproximado es de 29-
140 nm x 130-603 nm.
Signos clínicos
No han sido reportados signos de enfermedad en camarones penaeidos afectados por el pa-
rásito, que puedan ser asociados con presencia de haplosporidios en sus tejidos. Sin embargo, los
camarones afectados podrían presentar bajo crecimiento.
Estrategias de control
Los camarones infectados con haplosporidios deben ser removidos del sistema de producción
y eliminados adecuadamente para destruir el parásito. Las instalaciones de cultivo deben ser desin-
fectadas de manera cuidadosa y los camarones (en cualquier estadio) infectados o sospechosos, no
deben ser movilizados ni entre fincas, ni entre regiones geográficas.
4.4 EPICOMENSALES
Los camarones penaeidos cultivados en sistemas de producción semiintensivos, intensivos o
sobreintensivos, con altas densidades de siembra en los estanques o aguas de baja calidad, frecuente-
mente desarrollan formas de enfermedad causadas por microorganismos o agentes que se adhieren a
las branquias o a la superficie del animal. La mayoría de éstos, viven en estado libre en el agua y no
son patógenos verdaderos. Debido a que utilizan al camarón como un substrato para adherirse, son
llamados organismos epicomensales o epibiontes. En la mayor parte de los casos, estos organismos
no causan daños directos al camarón, aunque sí producen problemas indirectamente al adherirse a
las branquias (compitiendo por el oxígeno disuelto), o a las superficies cuticulares de apéndices y
otras partes del cuerpo.
Nombre de la enfermedad
Enfermedad de las branquias, enfermedad de branquias filamentosas, enfermedad bacteriana
de las branquias, branquias sucias, branquias negras, branquias cafés o, branquias con adherencias
de protozoarios.
Etiología
La enfermedad por adherencia de epicomensales en camarones, se presenta cuando se afec-
tan las funciones respiratorias, alimenticias o locomotoras de los animales, a causa de colonización
excesiva de la cutícula principalmente por bacterias filamentosas, bacterias con forma de bastón
(bacilos), protozoarios, diatomeas y algas filamentosas verde-azules. Los siguientes son los agentes
más comunes en camarones (Fig. 4.4.1 a la 4.4.9):
• Organismos tipo Leucothrix (Leucothrix like-organisms-LLO): Leucothrix mucor, Leucothrix spp.
y Thiothrix sp.
• Bacterias que forman muy pequeños filamentos (“small little filaments”-SLF): Vibrio sp., Fla-
vobacterium sp., Cytophaga sp. y Flexibacter sp. Existen posiblemente otras bacterias aún no
identificadas.
210
Capítulo 4 - Parásitos en camarones
• Protozoarios
• Perítricos ciliados con colonias: Zoothamnium sp., Epistylis sp. y Vorticella sp.
• Apostoma ciliados: Ascophrys spp. y otros
• Loricados ciliados: Lagenophrys spp. y Cothurnia spp.
• Suctorianos: Acineta spp., Ephelota spp. y otros
• Flagelados: flagelados tipo Bodo y Chrysidella sp.
• Algas
• Diatomeas (“pennales”): Nitzschia spp., Amphiprora spp. y Navicula spp.
• Algas verdes: Enteromorpha spp. y otras algas verdes filamentosas
• Algas filamentosas verde-azules: Spirulina subsala, Lyngbya spp. y Schizothrix spp.
• Agentes abióticos: sales de hierro
Diagnóstico
Las enfermedades por organismos epicomensales, son diagnosticadas mediante la observa-
ción de preparaciones en fresco de los microorganismos, tanto en larvas y postlarvas, como en sec-
ciones de branquias y apéndices orales de camarones juveniles o adultos afectados.
En sistemas intensivos y sobreintensivos, debe ser una práctica frecuente el monitoreo de
camarones y su examen bajo un microscopio, para determinar la prevalencia y severidad de la en-
fermedad. De esta manera, se proporciona información significativa sobre las condiciones sanitarias
de las branquias con base en la adherencia de epibiontes en los camarones. Las decisiones para
implementar sistemas de control en los casos de enfermedades por organismos epicomensales, están
basadas en los datos obtenidos a partir de estos monitoreos.
Los camarones para los análisis de rutina, no deben ser seleccionados aleatoriamente de una
población bajo estudio. El mejor procedimiento es seleccionar individuos que estén decaídos, con
las branquias manchadas o que tengan la musculatura opaca (sospechosos de hipoxia), ya que el
propósito principal de este examen es decidir si se necesita algún tipo de tratamiento y qué clase de
químico o manejo debe ser utilizado para salvar la población.
Normalmente, de cinco a diez camarones de un tanque o estanque, deben ser seleccionados
y sometidos a un examen microscópico.
Utilizando cortes histológicos en parafina teñidos con H&E, pueden detectarse y usualmente
identificarse organismos epicomensales del cuerpo, branquias y apéndices. Además, el grado de se-
veridad de la infestación por organismos epicomensales, es con frecuencia fácilmente determinado,
especialmente por cortes que proporcionan un panorama de las branquias.
211
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Signos clínicos
Las lamelas de las branquias son el lugar más frecuente para la infestación en juveniles y
camarones mayores. Por esta razón, el examen visual de camarones afectados mostrará cambio de
coloración de las branquias, constituyéndose así en un examen muy valioso para la detección de
enfermedad por epicomensales.
La presencia de coloración amarilla, café o negra en las branquias, está relacionada con colo-
nización de epicomensales y pueden ser debida a material detrítico o lodo atrapado por los microor-
ganismos que están adheridos a las lamelas.
Si se observa coloración verde o verdosa de las branquias, puede deberse a colonización de
las lamelas branquiales por una o varias especies de algas.
Algunos camarones pueden tomar una apariencia de “peluche”, algodonosos o como si estu-
vieran colonizados por hongos, lo cual corresponde en realidad a una fuerte colonización de orga-
nismos epicomensales sobre la superficie del animal.
212
Capítulo 4 - Parásitos en camarones
Una invasión desde moderada hasta alta, puede inhibir la respiración del animal. Los cama-
rones pueden aparecer exteriormente normales pero mueren rápidamente durante o inmediatamente
después del ejercicio, manipulación (muestreos o transferencias) o exposiciones a condiciones de
oxígeno bajo en el agua.
En infestaciones de larvas o postlarvas, con frecuencia se ven involucrados los apéndices na-
tatorios, ojos y algunas partes de la boca. Como se mencionó anteriormente, los animales afectados
pueden mostrar dificultades para moverse y alimentarse.
Cuando los camarones se encuentran severamente afectados por epicomensales, pueden mo-
rir durante la muda, encontrándose luego en el fondo con apariencia “limpia” del exoesqueleto, pero
con la cutícula suave. Teniendo las branquias fuertemente colonizadas por epibiontes, las condicio-
nes de oxígeno disuelto bajo durante las madrugadas pueden potencializar el ambiente hipóxico del
camarón que de por sí se está presentando por la enfermedad en las branquias.
Tanto los hallazgos mediante montajes en fresco como a través de análisis histológicos, deben
ser registrados para establecer la prevalencia y severidad del problema. Los grados de severidad pue-
den ser estimados en la escala de 0 a 4 de acuerdo con la Tabla propuesta por Lightner (1996), ver
Tabla 6 del capítulo 1 (pág. 46).
Vías de transmisión
Todos los agentes epicomensales son habitantes normales del medio acuático marino. Estos
organismos son parte de la flora natural asociada con la cutícula de los crustáceos marinos y de esta
manera, infestaciones menores causan pequeña o ninguna pérdida de las funciones o signos de en-
fermedad. Cuando las condiciones medioambientales son convenientes, puede desencadenarse la
adherencia de organismos epicomensales, los cuales generarán enfermedad por adherencias en los
camarones de cultivo. El hacinamiento en las piscinas y el aporte de nutrientes mediante el alimento
suministrado, contribuyen a las condiciones eutróficas en los tanques o estanques de cultivo de ca-
marón.
Estrategias de control
La prevención de enfermedades causadas por organismos epicomensales, requiere de condi-
ciones ambientales óptimas de cultivo, que permitan el sano crecimiento de los camarones. Sin em-
bargo, no existen lineamientos específicos disponibles, concernientes a los niveles de requerimientos
nutricionales mínimos, manipulación precisa del medioambiente y factores de manejo que alteren
los niveles de infestación. Por esta razón, los cambios en las condiciones que predisponen la presen-
cia de estas enfermedades, deben ser manejados hasta el momento, de manera intuitiva aunque con
fundamentos técnicos.
Los factores básicos que pueden ser alterados, incluyen el aumento en el recambio de agua,
mejoramiento de la circulación del cuerpo de agua, disminución en la densidad de cultivo o re-
ducción de la biomasa (raleo), uso de alimentos balanceados y fertilizar el terreno adecuadamente,
teniendo en cuenta la proporción P:N para evitar la acumulación de materia orgánica y proliferación
de protozoarios.
Si el control no puede mantenerse a través del manejo del agua y del alimento o del sanea-
miento del tanque o estanque, se ha reportado efectividad en el uso de Neomicina, realizando baños
durante la noche a 10 ppm en tanques de larvicultura. Para el caso de juveniles y adultos, se ha
utilizado sulfato de cobre (Cutrine plus: 0.2 - 0.5 ppm Cu, baños de 4 horas) y Formalina (50 - 100
ppm, baños de 1 hora).
213
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
EPICOMENSALES
214
Capítulo 4 - Parásitos en camarones
216
Capítulo 4 - Parásitos en camarones
4.5 Metazoarios
Agente causal
Las parasitosis producidas por metazoarios en los camarones, son causadas por larvas de
céstodos (gusanos planos como tenias), nemátodos (gusanos redondos) o tremátodos (platelmintos o
gusanos con forma de hoja). Estos organismos infestan de manera ocasional diferentes tipos de tejidos
en los camarones penaeidos. Rara vez se asocian con problemas de enfermedad o mortalidad masiva
en cultivos de camarones, debido a la dificultad en que se cierre el ciclo de vida dentro de los estan-
ques de producción y durante el tiempo de engorde de los camarones.
Céstodos. También llamados gusanos planos (como la tenia), están generalmente asociados con infes-
taciones en el hepatopáncreas. Se encuentran usualmente incorporados en el tejido de esta glándula
digestiva o cerca de ésta bajo su tejido capsular. En los camarones, los céstodos se encuentran bajo
formas inmaduras del parásito, mientras que las firmas adultas (maduras) se encuentran en las rayas.
Además de los géneros Prochristianella, Parachristianella y Renibulbus que son los más frecuentes en
camarones, también existe un gusano con forma de pera que se ubica en el intestino y pertenece al
grupo cyclophyllidea. Los gusanos planos se encuentran más comúnmente en camarones silvestres
que en camarones de cultivo. La diferenciación entre los grupos de los gusanos planos, se hace con
base en la forma general del cuerpo y en la armadura tentacular (Fig. 4.5.1).
Nemátodos. Los gusanos redondos se observan con más frecuencia en camarones silvestres que en
camarones bajo sistemas de cultivo. Esta diferencia en el grado de infestación, puede estar relacio-
nada con la ausencia de hospederos alternativos en los sistemas de cultivo. Cuando se presentan, las
infestaciones por nemátodos pueden darse dentro o alrededor de la mayoría de los órganos del ca-
marón así como en su tejido muscular. Los nemátodos más frecuentes en camarones son Spirocama-
llanus pereirai, Leptolaimus sp., Ascaropsis sp. e Hysterothylacium reliquens (Fig. 4.5.2, 4.5.4 y 4.5.6).
Tremátodos. Los platelmintos se encuentran presentes en los camarones bajo las formas inmaduras
llamadas metacercaria, enquistados en varios tejidos del animal. En instalaciones comerciales de
cultivo de camarón, se han reportado especies pertenecientes a las familias Opecoelidae, Micro-
phallidae y Echinostomatidae. Unas de las especies más frecuentes, son Opecoeloides fimbriatus,
Helicometrina nimia y Microphallus sp. (Fig. 4.5.3).
Ciclo de vida
En el medio natural, los camarones P. vannamei sirven como hospederos intermediarios para
muchos parásitos metazoarios incluyendo nemátodos y tremátodos. En el tejido del camarón, se de-
sarrolla un estadío intermediario de la larva como parte del ciclo de vida del organismo, requiriendo
de otro hospedero para completar su ciclo. Este hospedero final generalmente no está presente en los
estanques de cultivo de camarón y por lo tanto, no es frecuente observar larvas de metazoarios en
camarones de cultivo, siendo más fácil encontrarlos en tejidos de reproductores silvestres.
217
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Figura. 4.5.1. Ciclo de vida del céstodo Prochristianella penaei. El camarón se come un copépodo u otro pequeño
crustáceo infestado con la larva del parásito (A), la larva se desarrolla a un estado larval avanzado en los tejidos del
camarón (B), una raya ingiere a los camarones infestados (C), el tremátodo se convierte en adulto en el intestino
(válvula espiral) de la raya y comienza a liberar sus huevos (D), los huevos salen por las heces de la raya y son con-
sumidos por copépodos (E), los huevos eclosionan y las larvas del gusano se desarrollan dentro del cuerpo de los
copépodos (F). Adaptado de Johnson, 1995.
Figura 4.5.2. Ciclo de vida del nemátodo Hysterothylacium relinquens. El camarón se come un copépodo u otro
pequeño crustáceo infestado con larvas de estas lombrices intestinales (A), el nemátodo se desarrolla en etapa larval
avanzada en los tejidos del camarón (B), un pez tipo “pejesapo” ingiere los camarones infestados (C), el nemátodo
se desarrolla hasta hacerse adulto en el intestino del pez (D) y al liberarse en las heces (E) son comidos por los co-
pépodos (F). Adaptado de Johnson, 1995.
218
Capítulo 4 - Parásitos en camarones
Figura 4.5.3. Ciclo de vida del tremátodo (platelminto) Opecoeloides fimbriatus. La forma infecciosa o cercaria
ingresa al camarón (A), la cercaria migra hacia el tejido y se enquista hasta formar una etapa más avanzada llamada
metacercaria (B), los camarones infestados con metacercarias son comidos por peces (perca plateada, corvina, sargo
o varios otros) (C). El camarón es digerido dentro del pez y se libera así la metacercaria (D), la cual se desarrolla
dentro del mismo pez hasta alcanzar su estado adulto (E). Los huevos puestos por estos adultos salen en las heces
de los peces. Se libera entonces un estado infeccioso llamado miracidio, el cual ingresa a un caracol y se multiplica
dentro de esporocistos (F). Dentro de los esporocistos se desarrollan las cercarías y cuando estén completamente
desarrolladas, sale del esporocisto y del caracol y nadan en la búsqueda de un camarón (G). Si al poco tiempo logran
llegar hasta un camarón, se completa el ciclo del parásito. Adaptado de Johnson, 1995.
Signos clínicos
Aunque no se han reportado signos clínicos ocasionados por estos parásitos, es posible hallar
muchos de ellos en un solo camarón y tal vez podrían llegar a afectar la tasa de supervivencia de
poblaciones infestadas de camarones en cultivo. De igual manera, podrían disminuir la tasa repro-
ductiva en padrotes severamente parasitados.
Diagnóstico
El método más común y rápido para diagnosticar la presencia de metazoarios en camarones,
es mediante montajes en fresco de tejidos sospechosos, observando (luego de liberarlos de su cápsu-
la) los organismos muy activos en hepatopáncreas y en contenido intestinal.
En los parásitos se puede observar un tubo digestivo notorio, mediante movimientos con el
ajuste micrométrico del microscopio y en los nemátodos se nota un extremo anterior (curvo y romo)
y uno posterior (agudo).
Mediante histopatología, se pueden observar cortes longitudinales, sagitales y/o transversales
de parásitos, enquistados generalmente en tejido perigástrico, aunque también se observan los orga-
nismos o parte de ellos en hepatopáncreas y contenido intestinal.
Estrategias de control
Las medidas sanitarias más indicadas para el manejo de instalaciones en las que exista un ries-
go importante de padecer infestaciones por metazoarios, deben estar centradas en evitar la introduc-
ción de reproductores silvestres, si éstos se encuentran altamente infestados con larvas de parásitos.
En casos de infestaciones severas en estanques de producción en los cuales los metazoarios
estén causando problemas, además de excluir reproductores silvestres, debe determinarse cuáles son
los hospederos definitivos y eliminarlos del sistema de producción para cortar el ciclo del parásito.
219
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
METAZOARIOS
220
Capítulo 4 - Parásitos en camarones
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CAPÍTULO 5 - Enfermedades causadas por hongos
Capítulo 5
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
224
CAPÍTULO 5 - Enfermedades causadas por hongos
CAPÍTULO 5
Introducción
Prácticamente todos los estadíos de vida del camarón son susceptibles a enfermedades causa-
das por hongos. Independientemente de la especie de camarón de que se trate, los estadíos larvarios
son susceptibles a este tipo de infecciones y por lo tanto, es común y necesario el uso de tratamientos
profilácticos para poder controlarles. Se desconoce si las especies de hongos que afectan los estadíos
larvarios del camarón son todas de distribución mundial, pero la micosis larvaria es un problema que
se presenta tanto en el hemisferio oriental como el occidental. Por otro lado, los esdadíos de vida más
avanzados (postlarva, juvenil, adulto) también son susceptibles a enfermedades causadas por hongos,
siendo Fusarium solani la especie más común. F. solani es un patógeno oportunista y como tal se esta-
blece con mayor facilidad en camarones que se encuentran ya debilitados por otras(s) enfermedades,
o que se encuentran estresados por condiciones ambientales extremas, o por haber sido expuestos
a agentes químicos irritantes, o que han sufrido heridas por trauma físico (por ejemplo, heridas cau-
sadas por el rostrum de otros camarones). Una vez iniciada la infección por F. solani, las heridas
causadas en el camarón facilitan el ataque de otros patógenos oportunistas, tales como Vibrio spp.
5.1 MICOSIS
Nombre de la enfermedad
Micosis larvaria.
Agente Etiológico
Lagenidium spp., Sirolpidium spp.
Agente
La mayoría de los casos de micosis larvaria son debidos a hongos phycomycetos Lagenidium
spp. (L. callinectes es la especie más común) y Sirolpidium spp. Otras especies, tales como Phytium
spp., Leptolegnia marina y Haliphthoros milfordensis, se pueden llegar a presentar ocasionalmente
causando enfermedades.
225
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Tejidos/órganos afectados
Típicamente el micelio invade completamente el cuerpo del camarón reemplazando todos los
órganos y tejidos.
Procedimientos de diagnóstico
Diagnóstico presuntivo
Basado en historial del caso y signos clínicos descritos anteriormente.
Diagnóstico confirmatorio
Basado en uno o más de los siguientes métodos:
Preparaciones en fresco
Las larvas son examinadas en fresco utilizando un microscopio de luz con objetivos de por lo
menos 20X. Las larvas infectadas muestran la presencia de un micelio extensivo, sin septas y altamen-
te ramificado invadiendo el cuerpo y los apéndices de la larva. Las hifas reemplazan prácticamente
todos los tejidos y órganos de las larvas o postlarvas y son de una coloración pálida verde-amarillenta
y contienen numerosos inclusiones pequeñas que refractan la luz. Un tipo de hifa especializada
forma tubos de descarga, los cuales pueden o no presentar una vesícula terminal en su parte distal y
se les puede observar empujando hacia afuera a través de la cutícula. En el caso de Sirolpidium spp.,
226
CAPÍTULO 5 - Enfermedades causadas por hongos
las zoosporas mótiles pueden ser observadas al ser liberadas a través de los tubos de descarga (los
cuales son más cortos que los de Lagenidium spp.y no protruyen a través de la cutícula). En el caso
de Langenidium spp., las zoosporas se desarrollan dentro de la vesícula apical prominente en el ápice
de un túbulo de descarga relativamente largo.
Análisis histológico
El diagnóstico histológico se basa en la demostración de las hifas y los tubos de descarga que
protruyen conspicuamente (en el caso de Lagenidium spp.) o no (en el caso de Sirolpidium spp.) a
través de la cutícula (Fig. 5.1.1 y 5.1.2).
Información adicional
Debido a la implementación de medidas profilácticas a las cuales son sometidos tanto los
huevecillos como los nauplios, la frecuencia de casos de micosis larvaria ha tenido una tendencia a
disminuir en la camaronicultura moderna. Probablemente, entre estas medidas, las más efectivas han
sido la colecta de nauplios basada en la respuesta fototáctica positiva y el uso de tratamientos con
treflan durante las primeras fases del cultivo larvario.
MICOSIS LARVARIA
227
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
5.2 FUSARIOSIS
Nombre de la enfermedad
Fusariosis, enfermedad de las branquias negras (en P. japonicus).
Agente etiológico
Fusarium spp.
Agente
Hongo imperfecto Fusarium solani y posiblemente otras especies del mismo género, inclu-
yendo F. moniliforme. Los hongos phycomycetos Atkinsiella dubia y Haliphthoros spp., raramente
causan enfermedades en camarones penaeidos, pero se les ha encontrado asociados a lesiones en las
branquias o en la cutícula, las cuales son muy similares a las causadas por Fusarium.
228
CAPÍTULO 5 - Enfermedades causadas por hongos
Tejidos/órganos afectados
Cualquier parte externa del cuerpo, incluyendo branquias y cámara branquial. Fusarium tiene
tendencia a infectar la base coxal de los pereiópodos para posteriormente invadir el tejido branquial
adyacente causando melanización intensa. De la misma manera, tiene tendencia a invadir las por-
ciones basales de la cabeza y los apéndices de la cola, desde donde se dispersa a zonas adyacentes.
Procedimientos de diagnóstico
Diagnóstico presuntivo
Basado en historial del caso y signos clínicos descritos anteriormente.
Diagnóstico confirmatorio
Basado en uno o más de los siguientes métodos:
Preparaciones en fresco
Examen en fresco de raspados de lesiones melanizadas. El análisis microscópico a magnifica-
ciones de 100X o 200X revela la presencia de las hifas del hongo. Estas preparaciones son también
útiles en la demostración de las macroconidias, las cuales tienen una forma de canoa. La demostra-
ción de las macroconidias proporciona un diagnóstico definitivo (Fig. 5.2.2).
Análisis histológico
El análisis con tinciones de H&E revela la presencia de lesiones granulomatosas bastante pro-
minentes, acompañadas de una multitud de nódulos hemocíticos con centros melanizados. Tinciones
especiales (por ejemplo, PAS y tinciones de plata basadas en la técnica de PAS) demuestran clara-
mente la presencia de las hifas y de las macroconidias, las cuales se tiñen de color rosa o rojo (PAS)
o negro (tinciones de plata basadas en la técnica de PAS) (Fig. 5.2.3 y 5.2.4).
229
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Información adicional
Fusarium solani es un patógeno oportunista que ataca camarones debilitados por otras enfer-
medades, por exposición a agentes químicos irritantes o a ciertos metales pesados, o por amontona-
miento a densidades altas.
El principal mecanismo para el establecimiento de la infección es la presencia de lesiones (pe-
queñas o grandes) en la cutícula. La infección puede comenzar en varias partes del cuerpo al mismo
tiempo y pueden llegar a cubrir hasta un 10% de la superficie corporal.
Una vez hecha su aparición, la enfermad progresa con un porcentaje de recuperación de solo
un 30% aproximadamente. Las lesiones producidas por Fusarium también sirven como puerta de
entrada para otros patógenos oportunistas, tales como Vibrio spp.
230
CAPÍTULO 5 - Enfermedades causadas por hongos
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CAPÍTULO 5 - Enfermedades causadas por hongos
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
234
CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
Capítulo 6
235
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
Capítulo 6
Resumen
Los camarones poseen una relevancia especial dentro del grupo de los crustáceos, dada su
gran importancia económica en la acuicultura mundial. Sin embargo, el éxito de esta actividad vie-
ne sufriendo graves limitaciones, debido al constante surgimiento de nuevas enfermedades, prin-
cipalmente de origen viral, que causan mortalidades masivas y producen perjuicios económicos
incalculables. El siguiente capítulo ofrece una visión general y actualizada del sistema inmune de
los crustáceos, en especial de los camarones, con base en el progreso recientemente logrado en la
elucidación de los diferentes mecanismos de defensa de estos animales contra los patógenos. En
el capítulo son discutidas las reacciones celulares y humorales desencadenadas en respuesta a los
agentes infecciosos, los procesos de reconocimiento y los diferentes mecanismos inmunoefectores.
Se da un énfasis especial a las defensas antivirales, una vez que los virus constituyen los principales
agentes infecciosos que amenazan seriamente la sostenibilidad de la camaronicultura mundial. Fi-
nalmente, el capítulo discute además de la utilización y eficacia de compuestos inmunoestimulantes,
la utilización de inmunoparámetros como indicadores de las condiciones de salud de los camarones.
En esta nueva edición hubo una importante actualización de los temas relacionados a los péptidos
antimicrobianos, el papel de las lectinas en los mecanismos de reconocimiento y como moléculas
inmunoefectoras, la modulación de genes inmunológicos durante infecciones y principalmente los
diferentes mecanismos antivirales existentes en camarones, con relevancia especial en la vía del RNA
de interferencia (RNAi).
Principales abreviaturas: ALF: factor anti-liposacárido; AMPs: péptidos antimicrobianos; α2M:
α2-macroglobulina; BGBP: proteína que se une a los β-glucanos; CP: proteína de coagulación; CRD:
dominio para el reconocimiento de carbohidratos; CTLs: lectinas calcio-dependientes; DHC: conteo
diferencial de hemocitos; dsRNA: DNA doble cadena; Dscam: Down syndrome cell adhesion mo-
lecule (implicada en el reconocimiento); FREPs: lectinas con un dominio semejante al fibrinógeno;
GBP: proteína que se une a los β-glucanos; HGG: hemocito con gránulos grandes; HGP: hemocito
con gránulos pequeños; HH: hemocitos hialinos; hRNA: hairpin RNA de origen endógena; IFN: inter-
ferón; LGBP: proteína que se une a los β-glucanos y LPS; LPS: lipopolisacáridos; LTA: ácido lipotei-
coico; NLR: NOD-like receptor; NOS: óxido nítrico sintasa; miRNA: microRNA de origen endógena;
PAMPs: patrones moleculares presentes en los patógenos; PEN: penaeidina; PGNs: peptidoglicanos;
proPO/PO: pro-fenoloxidasa/fenoloxidasa; PRPs/PRRs: proteínas/receptores de reconocimiento pa-
trón; PS: polisacáridos sulfatados; RLR: RIG-I-like receptor; RNAi: RNA de interferencia; RNIs: radica-
les de nitrógeno; ROIs: radicales de oxígeno; siRNA: RNA de interferencia de cadena corta (short) de
237
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
origen viral; SOD: superóxido dismutasa; THC: conteo total de hemocitos; TLR: Toll-like proteins de
vertebrados; VP19 Y VP28: proteínas de la membrana del WSSV.
Introducción
Los crustáceos pertenecen a un antiguo y exitoso grupo zoológico, constituido por más de 65
mil especies vivientes, muchas de las cuales son muy apreciadas para consumo humano, como son
los camarones, langostas, langostinos de agua dulce, cangrejos y jaibas.
El cultivo de crustáceos, principalmente de camarones (camaronicultura), sobresale en este
contexto como una importante alternativa para la rápida producción y en gran escala, como alimento
para el consumo humano, contribuyendo además a la preservación de las poblaciones naturales de
una extracción excesiva. Actualmente, cerca del 50% de los camarones consumidos en el mundo son
provenientes del cultivo, siendo los penaeidos Penaeus (Litopenaeus) vannamei, Penaeus monodon
y Fenneropenaeus chinensis las especies marinas más cultivadas (FAO, 2010). Actualmente, la cama-
ronicultura es responsable de millones de empleos en países tropicales, siendo los cinco principales
productores mundiales, China, Tailandia, Vietnam, Indonesia e India. En las Américas los tres mayores
productores son Ecuador, México y Brasil (FAO, 2010).
Hoy en día, el principal factor limitante para el éxito de la camaronicultura mundial, consiste
en el control de las infecciones principalmente las de origen viral. Las altas densidades poblacionales
usualmente utilizadas en los cultivos, propician la rápida propagación de agentes infecciosos, resul-
tando generalmente en mortalidades masivas y consecuentemente, causando perjuicios económicos
incalculables. Actualmente, la profilaxis y el control de las enfermedades en los cultivos se limitan
básicamente al manejo adecuado y a la disminución de condiciones de estrés, considerando que los
factores que determinan el estado de salud de los camarones son todavía poco conocidos.
En este contexto, el estudio del sistema inmunológico de los crustáceos sobresale como una
estrategia novedosa y promisoria, pues permite conocer las bases de la susceptibilidad y de la resis-
tencia de estos animales a los microorganismos patógenos y parásitos, además de proporcionar apor-
tes valiosos para el establecimiento de parámetros de salud e inmunomarcadores para la selección
genética de animales más resistentes a las infecciones y al desarrollo de compuestos inmunoestimu-
lantes.
Los camarones están en constante contacto, en su ambiente natural, con una gran diversidad
de microorganismos, incluyendo múltiples virus, que pueden constituir una seria amenaza a su so-
brevivencia. No obstante, el evidente éxito de este grupo zoológico a lo largo de más de 500 millones
de años de su historia evolutiva, confirma la presencia de un sistema inmunológico eficiente y capaz
de protegerlos contra la invasión de los agentes causantes de enfermedades.
Los principales sistemas de defensa actualmente reconocidos en los crustáceos son: (1) re-
conocimiento del no-propio por proteínas de reconocimiento patrón y Dscam; (2) señalización y
activación de los hemocitos; (3) respuestas inmunocelulares (fagocitosis, formación de cápsulas y
nódulos, infiltración y trampas extracelulares de ácidos nucleicos); (4) producción de moléculas anti-
microbianas (especies reactivas de oxígeno y nitrógeno y péptidos antimicrobianos); (5) melanización
mediada por el sistema de activación de la pro-fenoloxidasa (proPO) y (6) defensas antivirales (citoci-
nas análogas a interferones, sistema RNA de interferencia, apoptosis y autofagia).
En esta nueva versión del capítulo, fueron actualizadas varias informaciones, en especial los
temas que se refieren a los péptidos antimicrobianos, a las lectinas y su papel como moléculas de
reconocimiento e inmunoefectoras, a la generación de diversidad del gene Dscam y su implicación
en el reconocimiento, a las vías de señalización celular (Toll, Imd y JAK/STAT), a la modulación de
238
CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
239
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
240
CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
determinadas en los camarones P. monodon (Yeh et al., 1999) y M. japonicus (Cheng et al., 2008),
siendo que el RNAm correspondiente es expresado en el hepatopáncreas y en varios otros tejidos (Yeh
et al., 2007; Cheng et al., 2008), con excepción de los hemocitos y de los músculos. Interesantemen-
te, el tejido epidérmico sub-cuticular de M. japonicus demostró ser el principal sitio de la síntesis de
la CP, justamente resaltando la importancia de la coagulación durante la muda del animal, cuando
eso se vuelve potencialmente más expuesto a las lesiones y ataques microbianos (Cheng et al., 2008).
Excepto por la similitud funcional, las CPs de los crustáceos no tienen ninguna característica
molecular en común con el fibrinógeno de los mamíferos, o con el coagulógeno de los limúlidos, lo
que sugiere que la CP de los crustáceos representa un tipo distinto de proteína formadora de coágu-
los. Curiosamente, las CPs de crustáceos pertenecen a la clase de las lipoproteínas de densidad muy
alta (VHDL) y están evolutivamente relacionadas con las vitelogeninas (VTG) (Jiravanichpaisal et al.,
2006; Cheng et al., 2008; Cerenius y Söderhäll, 2011). La VTG es la principal precursora de vitelo
en hembras ovíparas y no está relacionada con reacciones de coagulación. Sin embargo, tanto la CP
como la VTG, tienen una región similar en el dominio D del factor von Willebrand, implicado en la
coagulación de la sangre de los mamíferos (Sadler, 1991).
241
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
242
CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
243
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Figura 6.2.2: Mecanismos degradativos y microbicidas asociados a los hemocitos de crustáceos durante el proceso
de fagocitosis. AMPs: péptidos antimicrobianos; RNI: especies reactivas de nitrógeno; ROI: especies reactivas de
oxígeno.
terior destrucción (Fig. 6.2.1 H, I). La formación de nódulos, por otro lado, ocurre alrededor de una
gran cantidad de invasores (pequeños) como bacterias, que también son capturados dentro de agre-
gaciones celulares (Covarrubias, 2004) (Fig. 6.2.1 J), semejantes a las cápsulas. Esta reacción evita su
diseminación por todo el cuerpo del camarón y la producción de una septicemia.
En las regiones más centrales de los nódulos, es común observar la fagocitosis de microor-
ganismos por los hemocitos que están en contacto más próximo de los microorganismos (Bauchau,
1981; Hose et al., 1990; Jiravanichpaisal et al., 2006). Ambas reacciones, la de encapsulamiento y
la formación de nódulos, no solamente llevan al aprisionamiento de los patógenos, sino también
limitan y localizan las respuestas inmunológicas solamente en la región donde se encuentran los
agentes invasores. Esta respuesta inmune localizada, ayuda a proteger los tejidos del hospedero de los
daños causados por las moléculas tóxicas y degradativas producidas y liberadas durante el proceso
inflamatorio y que serán explicadas posteriormente. En general, las regiones más centrales de esas
agregaciones de hemocitos, se tornan fuertemente pigmentadas por una coloración oscura, conocida
como melanización, como resultado de la liberación de los compuestos inmunoefectores presentes
en los hemocitos que serán discutidos más adelante.
◆◆ Infiltración
El número de hemocitos libres en la hemolinfa puede disminuir drásticamente durante una
infección como resultado de su infiltración en los tejidos infectados y su utilización en la formación
de los nódulos y cápsulas. En la reciente grave enfermedad causada por la bacteria Vibrio parahae-
molyticus denominada inicialmente EMS (síndrome de mortalidad temprana) y después de AHNPS
(síndrome de la necrosis hepatopancreática aguda), los análisis histopatológicos en L. vannamei y P.
monodon mostraron lesiones características en el hepatopáncreas, causadas por las toxinas bacte-
rianas y con infiltraciones hemocíticas típicas del proceso inflamatorio en las regiones inter e intra
tubulares de la glándula (Tran et al., 2013).
244
CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
Figura 6.3.1: Respuestas inmunológicas inducidas en los hemocitos, después del reconocimiento de patógenos, vía
PRPs plasmáticas o celulares y subsecuente activación (1) desgranulación, con liberación de diferentes inmuno-
efectores e inmunoreguladores; (2) inducción y/o represión de genes inmunológicos; (3) activación de respuestas
celulares como fagocitosis y formación de nódulos y cápsulas.
Varias PRPs fueron identificadas y caracterizadas en la hemolinfa de los crustáceos, tales como
las que se unen a los LPS (LBP), β-1,3-glucanos (βGBP y GBP), LPS y β-1,3-glucanos (LGBP y proteí-
nas “mas-like”) y a diferentes azúcares presentes en la superficie de los microorganismos invasores
(varios tipos de lectinas) (Wang y Wang, 2013a). Además de esas, los camarones poseen también
PRPs de la familia de las Dscam, las cuales presentan un amplio espectro de reconocimiento debido
a mecanismos de recombinación somática (Armitage et al., 2014). No obstante, distintos de otros
invertebrados (Steiner, 2004), los crustáceos no poseen la clásica proteína de reconocimiento PGNs,
la PGRP (del inglés, peptidoglycan recognition proteins) (Wang y Wang, 2013). En el genoma com-
pleto de un crustáceo, el del braquiópodo Daphnia pulex, ningún gene codificado para PGRP fue
encontrado (McTaggart et al., 2009). Recientemente, fue demostrado que las proteínas QM (tumor
suppressor gene) y lectinas del tipo FREP son las responsables por el reconocimiento de PGNs en
camarones (Udompetcharaporn et al., 2014). Curiosamente el sistema de activación de la pro-feno-
loxidasa (proPO) del cangrejo de río P. leniusculus puede ser activado vía PGNs a través de la partici-
pación de dos proteínas homólogas a la serino-proteasa y una LGBP, pero no por la PGRP (Liu et al.,
2011), como ocurre en los insectos.
Algunas de las diferentes PRPs identificadas en los crustáceos se presentan en la Tabla 1.
246
CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
Nd = no determinada.
Las proteínas que reconocen exclusivamente los β-glucanos tienen la capacidad de unirse a
los componentes de la pared celular de los hongos y fueron caracterizadas en muchas especies ani-
males, denominándose de manera general como βGBP y GBP. En los crustáceos existen por lo menos
estas dos clases de proteínas que reconocen y se unen a los β-glucanos. La primera está representa-
da por una lipoproteína de alta densidad, la βGBP (Yepiz-Plascencia et al., 1998), sintetizada en el
hepatopáncreas (Romo-Figueroa et al., 2004) y constitutivamente presente en la hemolinfa de estos
animales. La segunda clase está compuesta por pequeñas proteínas, la GBP (Sritunyalucksana et al.,
2002) y la LGBP (Du et al., 2007; Liu et al., 2009a), sintetizadas por los hemocitos y/o el hepatopán-
creas de los crustáceos.
La βGBP fue inicialmente aislada/clonada y caracterizada en el cangrejo de río P. leniusculus
(Duvic y Söderhäll, 1990) y en seguida en varios otros crustáceos (Duvic y Söderhäll, 1993; Thör-
nqvist et al., 1994), incluyendo varias especies de camarones como F. californiensis (Vargas-Albo-
res et al., 1996), L. vannamei (Jiménez-Vega et al., 2002; Romo-Figueroa et al., 2004), L. stylirostris
(Vargas-Albores et al., 1997), F. chinensis (Lai et al., 2011) y más recientemente en F. paulensis y L.
schmitti (Gonçalves et al., 2012). Bioquímicamente, las βGBPs son glicolipoproteínas conteniendo en
su estructura oligosacáridos ricos en manosa y un alto porcentaje de lípidos (aproximadamente 50%),
siendo los fosfolípidos la clase lipídica predominante (Ruiz-Verdugo et al., 1997). Estas proteínas
contienen un motivo de adhesión celular RGD (arginina-glicina-aspartato) y/o RGE (arginina-glici-
na-glutamato) (Wang y Wang, 2013a).
Fue demostrado que la βGBP del cangrejo de río es idéntica a una lipoproteína de alta densi-
dad (LP1) presente en la hemolinfa de los machos y hembras del camarón Penaeus semisulcatus y que
estaba relacionada con el transporte de lípidos hacia el ovario, en el caso de las hembras (Lubzens
et al., 1997). También fue demostrado en camarones, que la βGBP y la HDL (del inglés, high density
lipoprotein) eran de hecho la misma proteína (Yepiz-Plascencia et al., 1998). Así, se considera que las
βGBPs de los crustáceos tienen una doble función: transportar lípidos como una HDL y participar en
el sistema inmune como una PRP.
247
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
PRPs que se unen a ambos, LPS y β-1,3-glucanos (LGBPs), fueron identificadas en crustáceos
e insectos y presentan un importante papel en las respuestas inmunes innatas. Las LGBPs de los crus-
táceos son proteínas pequeñas (36-46 kDa) producidas en los hemocitos (Liu et al., 2009a) y/o en el
hepatopáncreas de estos animales (Roux et al., 2002; Cheng et al., 2005). La primera LGBP aislada y
caracterizada en los crustáceos, fue en el cangrejo de río P. leniusculus (Lee et al., 2000). Esta LGBP
está presente en los hemocitos, pero ausente en el plasma y tiene la propiedad de unirse tanto a los
LPS como a los β-1,3-glucanos, pero no a los PGNs mostrando su especificidad para bacterias Gram-
negativas y hongos. Una vez unida a sus respectivos PAMPs, la LGBP así como la βGBP, lleva a la
activación del sistema proPO del cangrejo. En los camarones penaeidos, existen algunas referencias
sobre la clonación del gene de la LGBP: en L. stylirostris (Roux et al., 2002), L. vannamei (Cheng et
al., 2005) y F. chinensis (Du et al., 2007; Liu et al., 2009a).
Así como las PRPs descritas anteriormente, las LGBPs participan también en la activación del
sistema proPO del cangrejo de río (Lee et al., 2000) y de los camarones L. stylirostris (Roux et al.,
2002) y P. monodon (Amparyup et al., 2012). Sin embargo, la proteína del cangrejo de río debe estar
simultáneamente unida a los dos PAMPs para que ocurra una completa activación del sistema proPO
(Lee et al., 2000). El análisis de la expresión diferencial de la LGBP de L. stylirostris infectados con
WSSV, demostró que ocurre una súper expresión del gene en respuesta a la infección viral, sugiriendo
que la LGBP sea una proteína inducible de fase aguda, importante no solamente para las infecciones
bacterianas y de hongos, sino también en las infecciones virales (Roux et al., 2002).
A pesar de que las LGBP y GBP tienen dominios de adhesión celular (RGD) como la BGBP, es-
tas PRPs difieren de la BGBP por contener también sitios característicos semejantes a las β-glucanasas
(dominio GLU) bacterianas, lo que no ocurre en la βGBP (Wang y Wang, 2013a). El dominio GLU es
un sitio de fragmentación de ligaciones glucosídicas (β-1,3 e β-1,4). Debido a la presencia de este
dominio característico y común en la GBP y LGBP (así como en proteínas de insectos y otros inver-
tebrados) fue propuesto agrupar PRPs con sitios GLU en una clase especial, denominada BGRP (del
inglés, β-1,3-glucanase-related proteins) (Wang y Wang, 2013a) en la cual la BGBP no está incluida.
248
CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
◆◆ Proteínas “mas-like”
Las lectinas son proteínas sin actividad catalítica, con capacidad de unirse a carbohidratos
específicos de la superficie de diferentes células, incluyendo microorganismos, causando su agluti-
nación. Debido a esta característica, inicialmente se consideró que las lectinas de los invertebrados
eran análogas funcionales de las inmunoglobulinas de los vertebrados, pero hoy se sabe que son
estructural y funcionalmente distintas. Actualmente, las lectinas, tanto de vertebrados como de inver-
tebrados, son preferencialmente definidas como proteínas de reconocimiento o PRPs, una vez que
son capaces de reconocer y unirse a los azucares específicos de la superficie de patógenos y entonces
causar su aglutinación.
La propiedad de aglutinación deriva del hecho de que estas moléculas son por lo menos biva-
lentes, presentando dos o más sitios de unión con los carbohidratos específicos, denominados domi-
nios para el reconocimiento de carbohidratos o CRDs (del inglés, carbohydrate recognition domain)
(Marques y Barracco, 2000).
Usualmente la presencia de lectinas es investigada a través de pruebas de hemaglutinación,
razón por la cual estas proteínas son también conocidas por hemaglutininas o aglutininas. En estas
pruebas se utilizan eritrocitos de diferentes vertebrados, por presentar una variedad de azúcares es-
pecíficos en su superficie y sobre todo por tener coloración roja natural, lo que facilita la visualiza-
ción del fenómeno de aglutinación a simple vista. Sin embargo, en estas pruebas se pueden utilizar
también diferentes tipos de bacterias y/o levaduras, que también presentan azúcares específicos en
su superficie. Por otro lado, la reacción de aglutinación no es tan fácilmente observable como en el
caso de los eritrocitos.
249
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
250
CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
Fenneropenaeus chinensis
Bac (+) WSSV(+)
FcLec1 HP, St Man, LPS, PGN G+/G Sun et al., 2008
(AMP)
Gal, Man, PGN, V. ang. (+) Zhang et al.,
FcLec2 HP, St G+/G-
LPS, LIA WSSV(+) 2009a
V. ang. (+)
Wang et al.,
FcLec3 HP Man, PGN G+/G- WSSV(+)
2009a
(receptor de VP28 WSSV)
V. ang. (+)
Wang et al.,
FcLec4 HP, St, Br, Int PGN G+/G- (eliminación bac)
2009b
GalNAc,
LvL(#) nd GlucNAc, G- nd Sun et al., 2007
NeuAc, LPS
LvLT HP Man, Gal nd WSSV(-) Ma et al., 2007
WSSV(+) Zhao et al.,
LvCTL1 HP, ST Man nd
(se une al WSSV) 2009
Zhang et al.,
LvLec Hem Man E. coli nd
2009b
Penaeus monodon
WSSV(+)
PmAV Hp Man Luo et al., 2003
(antivirus)
Hp, Int, Hem,
PmLec Gal, LPS G+/G- V. harveyi (opsonina) Luo et al., 2006
St
WSSV(-)
PmLT Hp Man, Gal nd Ma et al., 2008
(encapsulación)
Marsupenaeus japonicus
nd Song et al.,
MjLecA Hep, Hem GlucNAC, LPS G+/G-
(se une al WSSV) 2010
Man, GlucNAC, nd Song et al.,
MjLecB Hep, Hem G+/G-
LPS (se une al WSSV) 2010
nd Song et al.,
MjLecC Hp GalNAC, LPS G+/G-
(se une al WSSV) 2010
Modula la expresión de
Wang et al.,
MjHeCL Hem nd nd péptidos antimicrobianos y
controla la microbiota 2014
*La aglutinación de eritrocitos fue omitida; Br: branquias; (#) lectina purificada bioquímicamente; AMP: péptido antimicrobiano;
Gal: galactosa; GalNAC: N-acetil galactosamina; GlucNAC: N-acetil glucosamina; G+: bacterias Gram positivas; G-; bacterias
Gram negativas; Hem: hemocitos; Hp: hepatopáncreas; Int: intestino; LIA: ácido lipoteicoico; LPS: lipopolisacáridos; Man:
manosa; NeuAC: ácido N-acetil neuramínico; nd: no descrito; PGN: peptidoglicanos; St: estómago; V. ang: Vibrio anguillarum;
(+): expresión aumentada; (-): expresión disminuida.
251
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
En L. vannamei también fueron detectadas y caracterizadas diferentes CTLs por abordaje bio-
química (aislamiento) y molecular (clonación). Una lectina con alta afinidad por azúcares N-acetila-
dos y con capacidad de unirse a LPS y aglutinar bacterias Gram negativas fue purificada del plasma
de L. vannamei (LVL) (Sun et al., 2007). Otra lectina denominada LvLT fue clonada a partir del hepa-
topáncreas de esta misma especie (Ma et al., 2007). La LvLT presenta dos CRDs distintos, uno para
manosa y otro para galactosa y su expresión es modulada durante infecciones con el WSSV. Posterior-
mente, Zhao et al., (2009) clonaron otra lectina también del hepatopáncreas, denominada LvCTL-1,
conteniendo un CRD con afinidad para manosa. Interesantemente, la LvCTL-1 tiene la capacidad de
unirse a diferentes proteínas de la envoltura del virus WSSV y fue mostrado que esta unión resultaba
en una disminución de la infección de los camarones por este virus. Estos resultados sugieren así,
que además de su función en el reconocimiento de lo no-propio, la LvCTL1 presenta también una
función antiviral (Zhao et al., 2009). Finalmente una nueva lectina con afinidad para manosa (LvLec)
fue clonada a partir de los hemocitos (y no del hepatopáncreas) de L. vannamei (Zhang et al., 2009b).
No obstante, esta lectina está expresada principalmente en el cerebro de los camarones y apenas de
forma moderada en los hemocitos y hepatopáncreas. La LvLec tiene actividad aglutinante contra E.
coli y parece estar implicada en reacciones de defensa contra bacterias Gram negativas.
En P. monodon fueron descritas tres CTLs. La primera, denominada PmAV fue clonada a partir
del hepatopáncreas de camarones resistentes a WSSV y contiene apenas un CRD para manosa (Luo
et al., 2003). Los autores refieren que la PmAV presenta una fuerte actividad antiviral y que esta acti-
vidad no deriva de la inhibición de la unión del virus a los receptores de la célula hospedera. Poste-
riormente, Luo et al., (2006) purificaron otra CTL del plasma de P. monodon (PmLec) con capacidad
de unirse específicamente a los LPS de bacterias Gram negativas (Luo et al., 2006). En consecuencia,
la PmLec tiene la propiedad de aglutinar fuertemente varias especies de bacterias Gram negativas y
funciona además como opsonina facilitando la fagocitosis de E. coli por los hemocitos. La PmLec fue
posteriormente clonada y caracterizada molecularmente, mostrando contener un CRD con afinidad
para galactosa (Luo et al., 2006). Una tercera CTL, conteniendo dos CRDs (manosa y galactosa) fue
también clonada a partir del hepatopáncreas de P. monodon y denominada PmLT (Ma et al., 2008).
La expresión de la PmLT es modulada durante las infecciones con WSSV, pero no con bacterias Gram
negativas. Interesantemente, la PmLT estimula fuertemente el encapsulamiento de cuerpos extraños
por los hemocitos, mostrando una vez más, que más allá de funcionar como molécula de reconoci-
miento, las lectinas presentan además otras funciones inmunológicas.
También en M. japonicus fueron caracterizadas, tres CTLs (MjLecA, MjLecB y MjLecC), todas
expresadas en el hepatopáncreas y conteniendo un único CRD, con capacidad de aglutinar algunas
especies de bacterias (Song et al., 2010). Las tres lectinas tienen afinidad por azúcares N-acetilados
(N-Acetil-glicosamina) y LPS, confirmando una vez más su función de PRP. Más allá de unirse a LPS,
las tres CTLs tienen además la capacidad de unirse a diferentes proteínas de la envoltura del WSSV,
debiendo por consiguiente estar también implicadas en la defensa antiviral (Song et al., 2010). Una
cuarta CTL, MjHeCL, producida por los hemocitos (y no por el hepatopáncreas) fue recientemente
identificada como molécula-llave en la regulación de la expresión de péptidos antimicrobianos en
la hemolinfa y en la manutención de la microbiota endobionte de M. japonicus (Wang et al., 2014).
Además de las lectinas descritas arriba, varias otras fueron caracterizadas en otros penaeidos
como en Fenneropenaeus merguiensis (Rittidach et al., 2007), F. californiensis (Vargas-Albores et al.,
1993) L. schmitti (Cominetti et al., 2002) y L. setiferus (Alpuche et al., 2005). Así como las otras lecti-
nas de crustáceos, la mayoría de estas CTLs asocian la función de PRP con otras funciones inmunoló-
gicas, confirmando su importante papel inmunoefector en la detección y eliminación de patógenos.
Aparte de las CTLs, otras clases de lectinas fueron también identificadas en crustáceos. Las
FREPs (del inglés, fibrinogen-related proteins), por ejemplo, son proteínas denominadas así por con-
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CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
En nuestra opinión, entre los descubrimientos más intrigantes y promisorios de estas últimas
décadas, en el campo de la Inmunología de Invertebrados está el que se refiere a la identificación del
gene/proteínas Dscam en insectos y crustáceos. Este gene (y sus productos) fue descubierto inicial-
mente en humanos (1998) y recibió esta denominación debido a su asociación con el Síndrome de
Down (del inglés: Down syndrome cell adhesion molecule). Poco tiempo después (2000), un gene
homólogo también fue identificado en D. melanogaster (ver revisión de Armitage et al., 2014).
El gen/proteínas Dscam pertenece a la superfamilia de las inmunoglobulinas (lgs) o anticuer-
pos y además de poseer varios dominios lg en su estructura molecular, posee además dominios FN
(fibronectina, molécula de adhesión celular). El gene Dscam es expresado en el sistema nervioso
de los mamíferos e insectos y asume un papel importante en la formación de circuitos neuronales
(Armitage et al., 2014). Además del sistema nervioso, el gene Dscam de Drosophila está también
expresado en las células de su sistema inmunológico (hemocitos) y el cuerpo graso (órgano principal
de la síntesis y almacenamientos de los insectos). Las proteínas Dscam ocurren en las membranas de
estas células, pero además son secretadas hacia la hemolinfa.
La gran sorpresa en relación a la Dscam es que este gene y sus productos combinan una am-
plia variabilidad, tanto a nivel genotípico, como somático, generando una diversidad de isoformas, a
través de splicing alternativo mutuamente excluyente, principalmente en la región extracelular de la
molécula (así como también en los dominios transmembranas), responsable por el reconocimiento.
Estas sorprendentes características se asemejan mucho al sistema inmune adaptativo de los vertebra-
dos, donde los linfocitos T/B generan variabilidad en sus anticuerpos y receptores altamente específi-
cos, a través de un proceso muy similar.
En Drosophila, por ejemplo, ya fueron referenciados más de 18,000 isoformas posibles de
Dscam, aunque este número puede ser muy superior (Sun et al., 2013; Armitage et al., 2014). Esta
diversidad no tiene precedentes en la historia de los invertebrados, donde es comúnmente acep-
tado, como se menciona arriba, que el reconocimiento de patógenos se da a través de PRPs, cuya
capacidad de reconocimiento es limitada apenas a patrones moleculares característicos de clases de
microorganismos/parásitos, pero sin posibilidad de distinguir patógenos relacionados. Es evidente
253
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
que la magnitud del número de isoformas generadas por la Dscam de Drosophila es muy inferior a lo
que ocurre con los receptores/anticuerpos de los vertebrados, pero ciertamente esa variabilidad ines-
perada representa una forma mucho más compleja y eficiente de reconocimiento del que se juzgaba
podría existir en este grupo zoológico.
Además de la alta diversidad, sorprende el hecho de que la expresión de Dscam puede ser
inducida por patógeno y las múltiples isoformas generadas por recombinación somática pueden
ligarse específicamente a su inductor. Además estas mismas isoformas tienen la capacidad de estimu-
lar la fagocitosis del microorganismo inductor, una vez que su silenciamiento génico, a través de la
técnica del RNA de interferencia (ver abajo), disminuye significativamente el proceso fagocítico (ver
revisiones de Wang y Wang, 2013a; Armitage et al.; 2014). Todas estas características representan una
revolución conceptual en el sistema inmune de los invertebrados, que pasa a ser actualmente consi-
derado como un sistema adaptativo alternativo (ver revisión de Armitage, 2014), en contraposición al
sistema adaptativo de los vertebrados.
Tal como se esperaba, proteínas Dscam también fueron identificadas en crustáceos, como
en los camarones L. vannamei (Chou et al., 2009), P. monodon (Chou et al., 2011),en el cangrejo
de río P. leniusculus (Watthanasurorot et al., 2011) y en el cladócero Daphnia (Brites et al., 2008).
La Dscam de L. vannamei (LvDscam) tiene la capacidad de producir por lo menos 9.000 isoformas
distintas y parece además estar implicada en la defensa antiviral contra el WSSV (Chou et al., 2009).
Por su parte la Dscam de P. leniusculus (PlDscam) puede generar más de 22.000 isoformas y su ex-
presión es inducida por la inyección de LPS, pero no por PGN o WSSV. De manera interesante, la
PlDscam produce isoformas con sitios de ligaciones capaces de reconocer específicamente diferentes
bacterias, además de promover su fagocitosis y eliminación del hospedero, en un mecanismo seme-
jante a la opsonización (Watthanasurorot et al., 2011). No obstante, todavía no fueron identificados
los receptores específicos para Dscam en las células fagocitarias de crustáceos/insectos, para validar
el evento de una opsonización verdadera.
Es importante señalar, sin embargo, que no siempre la Dsacm es expresada después de una ex-
posición a patógenos en las diferentes especies de insectos/crustáceos estudiados. Además, en algu-
nos casos puede ocurrir inducción de su expresión después del desafío con algunos microorganismos
y/o parásitos, pero no con otros. Por ejemplo, la exposición al WSSV lleva a un aumento de los nive-
les de Dscam en L. vannamei (Chiang et al., 2013) pero no ocurre en P. leniusculus (Watthanasurorot
et al., 2009). Como el descubrimiento de la Dscam es muy reciente, las evidencias disponibles son
todavía limitadas y no permiten generalizaciones definitivas. Futuros estudios llevarán ciertamente a
una comprensión mayor de este sistema y sus implicaciones prácticas en el control de infecciones en
crustáceos de importancia comercial.
Otro aspecto intrigante en relación a la Dscam se refiere a su envolvimiento con una posible
memoria inmunológica, o sea, con la capacidad del sistema inmune de almacenar y recordar infor-
maciones sobre un patógeno previamente encontrado, respondiendo a él de forma más rápida y
eficiente en una segunda infección. Este fenómeno, bien conocido en los vertebrados, es llamado
specific immune priming en los invertebrados. No obstante, evidencias del evento de un priming en
insectos/crustáceos son todavía muy iniciales y poco conclusivas. Aún no han sido realizados estudios
inequívocos probando la hipótesis del envolvimiento de la Dsam en la generación de una memoria
inmunológica altamente específica. Poco se sabe también a respecto del “tiempo” de duración de las
isoformas Dscam en la hemolinfa de los insectos/crustáceos después de un desafío inmunológico y si
existiría una posible expansión clonal de las células inmunológicas de respuesta como ocurre en los
vertebrados (Armitage et al., 2014).
254
CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
El evento de una memoria inmunológica de largo plazo en crustáceos, sería tal vez una de las
propiedades más deseables para el éxito de la camaronicultura, pues abriría la posibilidad de una
real vacunación de los animales, en el sentido clásico de la palabra. Esta perspectiva altamente pro-
misoria permitiría controlar efectivamente las infecciones de forma específica, eficiente y sobre todo
a largo plazo, lo cual todavía no se ha mostrado en la actividad camaronera.
Figura 6.3.2: Vías de señalización celular asociadas a la activación de las respuestas de defensa de camarones (adap-
tado de Tassanakajon et al., 2013).
255
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
◆◆ Vía Toll
Los receptores Toll son proteínas de la superficie de células que fueron primeramente identi-
ficados en la mosca de la fruta Drosophila melanogaster y revelaron inicialmente tener una impor-
tante función en la determinación del eje dorso-ventral en el desarrollo embrionario de este insecto
(Anderson y Nusslein-Volhard, 1984). Todavía, además de su importante papel en la embriogénesis,
los receptores Toll mostraron estar también crucialmente implicados en las respuestas inmunológicas
de esta mosca (Lemaitre et al., 1996). Más tarde, proteínas semejantes a los receptores Toll de D.
melanogaster fueron también identificadas en vertebrados y denominadas TLRs (del inglés, Toll-like
receptors). Los TLRs están implicados en el sistema inmune innato de los vertebrados y actúan de
forma esencial en el reconocimiento de PAMPs. Los receptores Toll y TLRs son glicoproteínas trans-
membranales (PRRs) caracterizadas por presentar un dominio extracelular rico en residuos de leucina
o LRR (del inglés, leucine-rich repeat) y por un dominio de señalización citoplasmático homólogo
al del receptor de interleucina 1, denominado de TIR (del inglés, Toll/interleucin-1 receptor domain)
(Yamamoto y Takeda, 2010).
Los TLRs de mamíferos tienen regiones de unión a los PAMPs en su dominio LRR y luego de
la activación, inducen a la expresión de citocinas inflamatorias importantes como los interferones y
otras moléculas activas de la respuesta inmune adaptativa (Akira, 2006; Yamamoto y Takeda, 2010).
En mamíferos, ya fueron identificados más de diez TLRs distintos, todos implicados en el reconoci-
miento directo de PAMPs, como LPS (TLR4), lipoproteínas (TLR2), dsRNA (TLR3), flagelina (TLR5),
DNA CpG (TLR9) y varios otros componentes virales (TLR7) (Akira, 2006; Yamamoto y Takeda, 2010).
La vía Toll de invertebrados es semejante a la vía TLR de mamíferos, pero a diferencia de
esa, el receptor responsable por la transducción de la señal (Toll) no reconoce directamente los
PAMPs, pero sí la citocina Spätzle. Esa citocina se encuentra en el plasma en una forma inactiva
que es procesada, vía una cascada proteolítica, en su forma activa después del reconocimiento de
bacterias Gram-positivas y/o hongos. Esos microorganismos son reconocidos a través de proteínas
que reconocen peptidoglicanos (PGRP-SA e PGRP-SD) y proteínas que se unen a bacterias Gram-
negativas (GNBP-1 y GNBP-3). La unión de Spätzle con el receptor Toll lleva al reclutamiento de las
proteínas intracelulares adaptadoras MyD88, Pelle y Tube, que activan la fosforilación y subsecuente
degradación de Cactus, el inhibidor de dos factores de transcripción de la familia de los NF-κB, Dif
y Dorsal. En la mosca de la fruta Drosophila melanogaster, después de la degradación de Cactus, los
NF-κB son translocados para el núcleo donde promueven la transcripción de los AMPs drosomicina
y metchnikovina (Leclerc & Reichhart, 2004; Tanji et al., 2007).
Respecto a los camarones, apenas recientemente fueron identificados receptores del tipo Toll
en las células de los penaeidos L. vannamei (lToll) (Yang et al., 2007), P. monodon (PmToll) (Arts et
al., 2007), M. japonicus (MjToll) (Mekata et al., 2008) y F. chinensis (FcToll) (Yang et al., 2008). Esos
receptores presentan una alta homología con los “Tolls” de D. melanogaster (dToll y dToll5) y de otros
insectos y limúlidos. A ejemplo de los Tolls y TLRs conocidos, los Tolls de camarones también tienen
dominios LRR y TIR conservados. Sin embargo, no contienen regiones de unión para los PAMPs en
el dominio LRR, como los TLRs de vertebrados, pareciéndose una vez más a los “Tolls” de Droso-
phila. Recientemente fue clonada la primera proteína Spätzle en camarones F. chinensis (Fc-Spz)
(Shi et al., 2009). Los autores mostraron que el dominio activo de la Fc-Spz (producido en sistema
recombinante) es capaz de inducir la expresión de una crustina en el cangrejo de río Procambarus
clarkii. La similitud de estos receptores de camarones con los “Tolls” de Drosophila, que inducen la
transcripción del AMP drosomicina (dToll), lleva a la suposición de que esas proteínas pueden estar
también implicadas en la inmunidad innata de los camarones penaeidos, inclusive en sus respuestas
antivirales como en Drosophila.
256
CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
Además de los receptores Toll y de su ligando Spätzle, otros componentes de esa vía también
fueron identificados en camarones, como las proteínas adaptadoras MyD88, Pelle y Tube, el activa-
dor TRAF6, el inhibidor de NF-κB (IκB) Cactus y el factor de transcripción NF-κB Dorsal (Li y Xiang,
2013). Estudios con la técnica de IRNA de interferencia o RNAi (ver abajo) mostraron que la activa-
ción de la vía Toll en camarones induce la expresión de péptidos antimicrobianos, así como ocurre en
insectos (Li et al., 2012). De manera interesante, 40 genes del virus WSSV poseen en sus promotores
sitios de vinculación de NF-κB, los cuales pueden ser activados por la vía Toll. Además de eso, existe
en el genoma de ese virus un homólogo de la proteína Tube de camarones, que consigue activar la
vía Toll y regular la expresión de genes virales (Wang et al., 2011).
Fue mostrado en L. vannamei, que el silenciamiento del IToll por la técnica del RNAi no afecta
la respuesta antiviral de este camarón contra WSSV, sugiriendo que el IToll no esté implicado en la
defensa antiviral de esta especie (Labreuche et al., 2009). Por otro lado, otros estudios mostraron
que la expresión del FcToll (Yang et al., 2008) y del IToll (=LvToll) (Han-Ching Wang et al., 2010) es
fuertemente inducida después del desafío con V. anguillarrum y V. harveyi, respectivamente. Corrobo-
rando estos resultados, fue referido que el silenciamiento del IToll (=LvToll) por la técnica del RNAi
resulta en un aumento significativo de la mortalidad de los camarones desafiados con V. harveyi, pero
no aquellos desafiados con WSSV, confirmando que el IToll está de hecho implicado en la defensa
antibacteriana y no en la antiviral (Wang et al., 2010).
◆◆ Vía Imd
Al contrario de la vía Toll, la vía lmd de insectos es activada a través del reconocimiento de
moléculas de PGN conteniendo ácido diaminopimélico (DAP-type PGN), que son encontrados sola-
mente en la pared celular de bacterias Gram-negativas. Las moléculas de DAP-type PGN son recono-
cidas por PGRPs que interactúan con la proteína intracelular lmd que al complejarse con la proteína
Fadd, activa la caspasa Dredd. Esa caspasa puede entonces actuar tanto en la activación del NF-κB
Relish como en la fragmentación del propio lmd (Paquette et al., 2010). Después de la fragmen-
tación, Imd puede asociarse con un complejo de ubiquitinación (Iap2, Bendless, Effete y Uev1a),
resultando en la activación de Tak1 (MAPKKK) y Tab2. La activación del complejo Tak1/Tab2 puede
llevar tanto a la activación de la vía JNK (MAPK envuelta en la activación del factor de transcripción
AP-1) como de la vía de degradación de Relish (NF-κB) (Silverman et al., 2003). Para la degradación
de Relish, el complejo Tak1/Tab2 necesita activar dos quinasas inhibidoras de κB (IKK), Ird5 (IKKβ) y
Kenny (IKKγ). Esas IKK fosforilan directamente Relish, que es fragmentado, liberando su región N-ter-
minal que contiene un dominio RHD. Al ser translocado para el núcleo, ese dominio es responsable
por la transcripción de los AMPs diptericina, cecropina y atacina (Marmaras y Lampropoulou, 2009).
Comparativamente a la vía Toll, poco ha sido descrito a respecto de la vía Imd de camarones.
Hasta el momento, fueron identificados el adaptador Imd, las quinasas IKKβ y IKKε y el factor de
transcripción NF-κB Relish (Li y Xiang, 2013; Wang et al., 2013). Estudios in vitro mostraron que la
vía Imd en camarones está envuelta en la modulación de la expresión de lisozimas, peneidinas y
crustinas (Wang et al., 2013).
◆◆ Vía JAK/STAT
La vía Jak/Stat (del inglés, Janus kinase/signal transducer and activator of transcription) está
asociada a la inducción de genes del citoesqueleto, algunos AMPs y de la TEP1 (del inglés, Thioester-
containing Protein 1), proteína responsable por la opsonización, ya que está envuelta en la fagocitosis
de microrganismos por los hemocitos. En D. melanogaster, esa vía puede ser inducida tanto por un
estímulo microbiano como por lesiones en los tejidos, que promueven la unión de la citocina Upd
(Unpaired) al receptor Domelles. Esa unión lleva a la dimerización de ese receptor que fosforila la JAK
tirosina quinasa Hopscotch (Hop). La fosforilación de Hop crea un sitio de unión para las proteínas
257
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
STAT que, al ser fosforiladas, dimerizan y son translocadas para el núcleo donde activan la transcrip-
ción de genes (Gupta et al., 2009).
En camarones, todavía se conoce poco a respecto de vía JAK/STAT y su implicación en la
modulación de genes asociados al sistema inmune. Fue demostrado que la proteína STAT es capaz
de inducir la expresión del gene ie1 (immediate-early gene) del virus WSSV (Liu et al., 2007) y que,
durante una infección, ocurre un aumento en la activación y translocación de la proteína STAT del
citoplasma para el núcleo (Chen et al., 2008).
(vitamina E), que pueden interactuar directamente con los radicales libres neutralizándolos (Abele y
Puntarulo, 2004). Es conveniente resaltar que los antioxidantes de origen exógeno, asumen especial
importancia en los cultivos de camarones, una vez que pueden ser adicionados a las dietas en dosis
apropiadas.
La producción in vitro de ROIs por los hemocitos inmunoestimulados por componentes micro-
bianos, ya fue descrita en varios camarones penaeidos, como en P. monodon (Song y Hsieh, 1994;
Sung et al., 1994), L. vannamei (Muñoz et al., 2000; Campa-Córdova et al., 2002a), Litopenaeus
setiferus (Rosas et al., 2004) y en las especies nativas brasileñas, F. paulensis y L. schmitti (Guertler et
al., 2010).
La cuantificación in vitro de la producción del anión superóxido por los fagocitos puede ser
realizada a través del método de reducción del NBT (del inglés, nitroblue tetrazolium), o por la técni-
ca de la quimioluminiscencia. Esta evaluación permite determinar el grado de estrés oxidativo de los
animales, como consecuencia de diferentes factores de estrés como infecciones, destacándose como
un valioso inmunoparámetro para la determinación del estado inmunológico de los camarones.
La producción del anión superóxido también viene siendo muy utilizada en los camarones
para evaluar el efecto de substancias consideradas inmunoestimulantes, como los β-glucanos de
hongos y los polisacáridos sulfatados (PS) de algas, que pueden ser adicionados a la dieta (Fu et al.,
2007; Cantelli, 2009), o en el agua a través de baños de inmersión (Campa-Córdova et al., 2002a y
b; Chang et al., 2003), o también administrados en forma de inyección (Hou y Chen, 2005; Cantelli,
2009). Un estudio del nuestro grupo, demostró que juveniles de L. vannamei alimentados por 1 mes
con balanceado adicionado con PS de alga Gracillaria birdiae podría aumentar la producción intrace-
lular del anión superóxido (O2-) y aumentar la tasa de sobrevivencia (11%) de camarones infectados
con una baja carga viral de WSSV (Cantelli, 2009).
Además de las ROIs, los hemocitos de los crustáceos pueden también producir intermediarios
reactivos de nitrógeno o RNIs, como el óxido nítrico (NO) y el radical peroxinitrito (ONOO-), com-
puestos altamente citotóxicos y microbicidas (Abele y Puntarulo, 2004; Palumbo, 2005; Gao, 2009).
La producción del gas NO tiene origen en la enzima óxido nítrico sintasa o NOS (del inglés, nitric
oxide synthase), presente en el citoplasma de varios tejidos animales, incluyendo las células del sis-
tema inmunológico. En estas últimas, la NOS es inducida por situaciones de estrés (iNOS) y produce
NO. En los otros tejidos, la NOS es expresada de forma constitutiva. La NOS es capaz de generar
NO a partir del aminoácido L-arginina y del oxígeno molecular. Una vez producido, el NO puede
reaccionar con el O2 originado durante el choque respiratorio y formar el peroxinitrito (ONOO-) que
también es altamente tóxico (Abele y Puntarulo, 2004; Gao, 2009) (Figura 6.4.1). En los vertebrados,
están bien documentadas las actividades antivirales, antibacterianas y antiparasitarias de las RNIs,
que igual que las ROIs causan daños al DNA, a varias enzimas y a las membranas de los patógenos,
directa o indirectamente (Palumbo, 2005; Gao, 2009).
En crustáceos existen todavía pocos estudios a este respecto, pero algunos trabajos más re-
cientes vienen apuntando al importante papel de los RNIs en la defensa antimicrobiana. Entre estos,
un trabajo que investigó la producción de NO en los hemocitos de camarones F. chinensis y M.
japonicus después del desafío con WSSV (Jiang et al., 2006). Los autores observaron que hubo un
aumento evidente de la producción de NO en los hemocitos de M. japonicus desafiados, pero no
en F. chinensis donde el aumento de la producción de NO fue mucho menos acentuado y de corta
duración. Además, camarones de la especie F. chinensis murieron mucho más rápidamente que los
de la especie M. japonicus después del desafío con WSSV. Los autores especularon que las diferen-
cias de susceptibilidad de ambos penaeidos a WSSV podría deberse a la diferencia de actividad de
las NOS de los hemocitos de ambas especies. Interesantemente, dos NOS fueron muy recientemente
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Figura 6.4.1: Producción de especies reactivas de oxígeno (ROIs) y nitrógeno (RNIs) por los hemocitos de crustáceos
durante el proceso de fagocitosis y otras reacciones celulares. CAT: catalasa; iNOS: óxido nítrico sintasa inducible;
SOD: superóxido dismutasa. Las especies reactivas tóxico-microbicidas están representadas en rojo.
clonadas a partir de los hemocitos de la langosta Panulirus argus (Rodríguez-Ramos et al., 2010) y de
las branquias de M. japonicus (Inada et al., 2010). La expresión de ambas enzimas fue inducida des-
pués de inyección con LPS (en los hemocitos de langosta) y con Vibrio penaeicida (en las branquias
de camarones), sugiriendo una vez más que esta enzima esté implicada en la defensa antimicrobiana
de crustáceos.
Es importante resaltar que la utilización de la producción de RNIs como inmunoparámetros
para evaluar el estado inmunológico de los camarones de cultivo, es una herramienta todavía muy
poco utilizada, a pesar de su potencial promisorio. Se espera que estos resultados recientes estimu-
len en un futuro próximo una mayor utilización de este parámetro como indicador de salud y/o de
inmunoestimulación.
260
CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
de los AMPs clásicos fueran también descritos, como péptidos aniónicos, proteínas mayores que 10
kDa y péptidos generados a partir de la hidrólisis de una proteína precursora multifunctional (Yount
et al., 2006).
El mecanismo de acción de los AMPs se manifiesta generalmente a nivel de la membrana del
microorganismo, provocando su desestabilización. Presentan en general una actividad detergente
o formadora de poros, a través de la interacción electrostática con los fosfolípidos aniónicos de la
membrana celular, llevando a un desequilibrio de sus funciones. Eso se debe a sus características
anfipáticas, presentando una región altamente catiónica y una región hidrofóbica, lo que facilita su
interacción e inserción en las membranas de los microorganismos. Es importante señalar que fosfolí-
pidos aniónicos son característicos de los microorganismos, en especial de las bacterias, y no son
comúnmente encontrados en la superficie de las células eucariotas normales y organismos plurice-
lulares. También pueden insertarse en la bicapa lipídica, formando grandes poros, lo que lleva a un
flujo descontrolado de solutos y extravasión del contenido citoplasmático, resultando en la muerte
del microorganismo (Bulet et al., 2004; Yount et al., 2006). Otras clases de AMPs pueden ser interio-
rizadas e interferir con diferentes vías metabólicas esenciales al ciclo de vida de los microorganismos
(Yount et al., 2006).
A la fecha, 15 distintas familias de AMPs fueran identificadas en crustáceos y fueron reciente-
mente clasificadas en cuatro diferentes grupos de acuerdo con sus características estructurales y com-
posición aminoacídica: (1) péptidos α-hélice linear anfipáticos y péptidos ricos en un tipo particular
de aminoácido, (2) péptidos contiendo uno o más puentes de cisteína, (3) péptidos con múltiplos
dominios moleculares y (4) péptidos non convencionales, incluyendo proteínas multifuncionales y
fragmentos peptídicos generados a partir de la hidrólisis de proteínas precursoras (Rosa y Barracco,
2010). Por cuestiones de interés económico, las tres familias de AMPs mejor conocidas en crustáceos
fueron principalmente caracterizadas en camarones penaeidos: peneidinas, crustinas y los factores
anti-lipopolisacáridos (ALFs) (Rosa y Barracco, 2010; Tassanakajon et al., 2010) (Tabla 3).
nd: no determinada
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Las peneidinas (5 a 8 kDa) son péptidos con múltiples dominios inicialmente aislados y ca-
racterizados a partir de la hemolinfa del camarón L. vannamei. Son moléculas altamente catiónicas,
compuestas por una región N-terminal rica en residuos de prolina y una región C-terminal con-
teniendo seis residuos de cisteína, unidos por tres puentes disulfídicos (Destoumieux et al., 1997;
Yang et al., 2003) (Tabla 3). Las peneidinas son AMPs exclusivos de camarones penaeidos y están
subdivididas en cuatro subgrupos (PEN2, PEN3, PEN4 y PEN5), siendo que cada una contiene varias
isoformas distintas (Cuthbertson et al., 2002; Gueguen et al., 2006; Kang et al., 2007). El subgrupo
PEN1, inicialmente aislado de la hemolinfa de L. vannamei (Destoumieux et al., 1997), fue posterior-
mente clasificado como una variante del subgrupo PEN2 (Cuthbertson et al., 2002). Interesantemente,
los subgrupos PEN2 y PEN4 fueron encontrados apenas en camarones occidentales mientras que lo
subgrupo PEN5 es exclusivo de camarones asiáticos (Tassanakajon et al., 2010). Las peneidinas son
expresadas constitutivamente en los hemocitos granulares y semigranulares donde son almacenadas
en sus gránulos (Destoumieux et al., 2000). Las peneidinas presentan una actividad potente contra
bacterias Gram-positivas y hongos filamentosos (Destoumieux et al., 1999). Además, los diferentes
subgrupos pueden presentar actividades antimicrobianas distintas (Cuthbertson et al., 2008). Algunas
isoformas de peneidina tienen todavía un motivo molecular de unión a la quitina en su región C-ter-
minal, que también es encontrado en algunas lectinas de plantas y en varios péptidos anti fúngicos
(Destoumieux et al., 2000).
Las crustinas (7 a 14 kDa) son también AMPs con múltiples dominios y fueron inicialmente
aisladas de los hemocitos granulares del cangrejo Carcinus maenas (Relf et al., 1999). Esas moléculas
antimicrobianas son constitutivamente expresadas en hemocitos y se caracterizan por la presencia de
un dominio WAP (del inglés, whey acidic protein) en su región C-terminal (Smith et al., 2008). “WAP”
es una familia general de proteínas normalmente encontradas en la leche de mamíferos con posible
función de inhibir a las proteasas (Ranganathan et al., 1999). Basado en sus características estructu-
rales, las crustinas fueron categorizadas en tres principales tipos (crustinas de Tipo I, II y III) (Smith et
al., 2008). Las crustinas de Tipo I son compuestas por una región rica en residuos de cisteína antes
del domino WAP y pueden ser encontradas en camarones (Dai et al., 2009; Sun et al., 2010), mas
son especialmente frecuentes en cangrejos y langostas (Smith et al., 2008; Rosa y Barracco, 2010).
Por otro lado, el Tipo II presenta además de esos dominios una región N-terminal rica en residuos de
glicinas y es más frecuente en camarones penaeidos (Tassanakajon et al., 2014). Las crustinas de Tipo
III, también conocidas como proteínas single-whey domain (SWD), presentan apenas una pequeña
región N-terminal rica en residuos de prolina/arginina y la región C-terminal contiendo el dominio
WAP. Esas crustinas son encontradas en camarones penaeidos y en el cangrejo del río (Smith et al.,
2008). La actividad antimicrobiana de los distintos tipos de crustinas abarca esencialmente bacterias
Gram-positivas, pero también algunos vibrios marinos (Smith et al., 2008; Rosa y Barracco, 2010).
Además de sus actividades antimicrobianas, las crustinas de Tipo III también mostraran una activi-
dad antiproteasa fuerte (Rosa y Barracco, 2010). Durante los procesos inflamatorios, esas moléculas
pueden ejercer un papel fundamental en la inactivación de las proteasas producidas por los microor-
ganismos invasores o en la regulación de cascadas proteolíticas endógenas del hospedero, como del
sistema proPO (ver abajo).
Los factores anti-lipopolisacáridos o ALFs (del inglés, anti-lipopolysaccharide factors) son mo-
léculas de aproximadamente 10 kDa, inicialmente aisladas de limúlidos (Tanaka et al., 1982). En
camarones, los ALFs fueron primeramente identificados por biología molecular (Gross et al., 2001;
Supungul et al., 2002) y mostraron contener dos residuos conservados de cisteína comprometidos en
la formación de una estructura terciaria en forma de grapa (β-hairpin) como en los ALFs de limúlidos
(Yang et al., 2009) (Tabla 3). Basado en sus características moleculares y estructurales, los ALFs de
camarones fueron categorizados en cuatro grupos: ALF Group A, B, C y D (Rosa et al., 2013). El ALF
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CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
Group B es el más catiónico, mientras que el ALF Group D es el más aniónico. De forma interesante,
los ALFs aniónicos son encontrados apenas en camarones occidentales mientras que los otros grupos
son encontrados en camarones occidentales y asiáticos (Rosa et al., 2013). Los ALFs son moléculas
constitutivamente expresadas en los hemocitos granulares y presentan una actividad antimicrobiana
potente y de amplio espectro, siendo activas contra bacterias Gram-positivas y Gram-negativas (in-
cluyendo patógenos de camarones), hongos filamentosos y también virus humanos envueltos (Tassa-
nakajon et al., 2014). Su actividad antimicrobiana está asociada a su propiedad de unirse al LPS y al
ácido lipoteicoico (LTA), componentes de la superficie de bacterias Gram-negativas y Gram-positivas,
respectivamente (Somboonwiwat et al., 2008). De forma interesante, los ALFs aniónicos no son ca-
paces de unirse al LPS y tampoco presentan actividad antimicrobiana (Rosa et al., 2013).
Además de estos tres principales AMPs, una nueva familia de AMPs, llamada stilicina (8,9
kDa), fue recientemente identificada en camarones penaeidos. En contraste a los otros AMPs, las
stilicinas son péptidos aniónicos compuestos por una región N-terminal rica en residuos de prolina/
arginina y una región C-terminal conteniendo trece residuos de cisteína (Rolland et al., 2010). Como
los otros péptidos de camarones, las stilicinas son expresadas constitutivamente en los hemocitos.
Esos AMPs presentan una actividad potente contra hongos filamentosos y la capacidad de unirse a
los LPS (Rolland et al., 2010).
En adición a las familias de AMPs constitutivamente producidas en los hemocitos, otros grupos
de moléculas antimicrobianas, como proteínas multifuncionales y péptidos originados a partir de la
hidrólisis de proteínas precursoras, también fueron encontrados en camarones. Entre éstos se desta-
can las histonas y sus fragmentos (Patat et al., 2004) y péptidos derivados de la proteína plasmática
hemocianina (Destoumieux-Garzón et al., 2001). Las diferentes histonas (y fragmentos relacionados)
presentan actividad contra bacterias Gram-positivas, mientras que los fragmentos de hemocianina (de
características aniónicas) presentan una actividad restringida a los hongos filamentosos.
La expresión de las peneidinas, crustinas y ALFs se inician en las primeras fases del desarrollo
ontogenético de los camarones (nauplios, zoea y mysis) (Muñoz et al., 2003; Jiravanichpaisal et al.,
2007; Tassanakajon et al., 2010). Además, en los hemocitos de adultos, esas moléculas se presentan
en grandes cantidades, cerca de 20% de todas las secuencias transcritas (Gross et al., 2001; Supungul
et al., 2002; Robalino et al., 2009). Durante infecciones causadas por diferentes tipos de patógenos,
ocurre la modulación de la expresión de diferentes familias de AMPs (Bachère et al., 2004; de la Vega
et al., 2007; Robalino et al., 2007a; Rosa y Barracco, 2010). En camarones desafiados con bacterias
Gram-negativas del género Vibrio, por ejemplo, ocurre una disminución significativa de los niveles
de expresión de peneidinas, crustinas y stilicinas en las primeras horas luego de la inyección. Esta
disminución es seguida por el retorno a los niveles basales de esas moléculas luego de 12 horas y por
un aumento significativo en los niveles de expresión luego de 72 horas de inyección, sugiriendo, una
inducción tardía de estas moléculas durante las infecciones (de Lorgeril et al., 2008). Sin embargo, en
camarones susceptibles a infecciones por el hongo Fusarium solani, la expresión de los AMPs dismi-
nuye fuertemente (Gonçalves et al., 2014).
Fue también demostrado, que en las primeras horas de la infección, cuando el nivel de expre-
sión de las peneidinas disminuye drásticamente, ocurre simultáneamente un aumento en sus con-
centraciones plasmáticas (Destoumieux et al., 2000). Se cree que este aumento sea proveniente de
la liberación de estos AMPs por los hemocitos que se encuentran próximos a los sitios de infección
(Bachère et al., 2004). Por otro lado, la expresión de ALFs parece mostrar una cinética contraria a las
otras dos familias de AMPs de crustáceos. En distintas especies de camarones, los niveles de expre-
sión de ALFs aumentan significativamente en las primeras horas luego de una infección con Vibrio y
vuelven a sus niveles basales cerca de 48 horas después del inicio del proceso inflamatorio (Supungul
et al., 2004; de Lorgeril et al., 2008).
263
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
El papel in vivo de algunos AMPs de camarones fue recientemente investigado vía el RNAi (ver
abajo). El silenciamiento de la crustina en el camarón L. vannamei resulta curiosamente en un au-
mento significativo de su susceptibilidad a infecciones con la bacteria Gram-negativa V. penaeicida,
pero no con el hongo F. oxysporum (Shockey et al., 2009). Por otro lado, en esa misma especie de
camarón, el ALF parece estar implicado en las defensas contras las dos enfermedades (de la Vega et
al., 2008). Es importante resaltar que la presencia de diferentes familias de AMPs en crustáceos, junto
a la ocurrencia de innumerables isoformas de un mismo subgrupo, probablemente con actividades
antimicrobianas distintas, sugiere una actuación sinérgica de estas diferentes moléculas inmunoefec-
toras, que pueden así eliminar un amplio espectro de agentes patógenos simultáneamente (Rosa y
Barracco, 2010).
y mantenida como un zimógeno (pro-ppA) en los hemocitos, siendo activada luego de su exocitosis,
como consecuencia de una lesión o infección microbiana. Su activación ocurre por un clivaje pro-
teolítico, por parte de una proteasa aún desconocida (Amparyup et al., 2013).
La forma activa PO es una óxido reductasa que cataliza dos reacciones sucesivas: la primera,
de hidroxilación de un monofenol a ο-difenol (actividad monofenoloxidásica) y, la segunda, de oxida-
ción del ο-difenol a ο-quinona (actividad difenoloxidásica) (Fig. 6.4.2). La producción de o-quinonas
resulta en la síntesis de la melanina a través de una cascada de reacciones químicas intermedias,
siendo la mayoría espontánea, no mediadas por enzimas (Fig. 6.4.3). La producción de quinonas
lleva también a la esclerotización de la cutícula de los crustáceos, fenómeno esencial en los períodos
de muda (Jiravanichpaisal et al., 2006; Vavricka et al., 2010).
Con relación al papel inmunológico del sistema proPO, se conoce que ésta vía genera transi-
toriamente moléculas altamente tóxicas, como las quinonas, hemiquinonas (Figura 6.4.3) y radicales
libres de oxígeno (ROIs), una vez que ocurre el consumo de oxígeno molecular, que llevan a una des-
trucción de los patógenos invasores, mas también pueden dañar los tejidos del hospedero. El pigmen-
to oscuro e insoluble o melanina parece tener una actividad fungistática (Cerenius y Söderhäll, 2004)
y puede todavía funcionar como “scavenger” de radicales libres (Nappi y Vass, 1993; Vavricka et al.,
2010), minimizando así los efectos deletéreos de estas moléculas altamente tóxicas para el organismo
del hospedero. Debe ser resaltado que la melanina, per se, no es la molécula inmunoefectora más
importante durante la activación del sistema proPO, siendo los compuestos citotóxicos intermedios
los más efectivos (Nappi y Vass, 1993; Vavricka et al., 2010). De esta manera, la melanización repre-
senta, más específicamente, el final de un potente proceso inmunoefector.
Figura 6.4.2: Liberación de diferentes efectores inmunológicos y moléculas inmunoreguladoras, después de la acti-
vación de los hemocitos por patógenos. Todavía no está confirmado si la TGase es liberada por hemocitos granulares
o hialinos.
265
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
266
CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
como ocurre en las proteínas C3 y C4 del sistema del complemento de los vertebrados y en la proPO
como fue mencionado arriba (Jiravanichpaisal et al., 2006; Amparyup et al., 2013).
La α2M de los crustáceos es una glicoproteína que fue aislada y caracterizada en los cama-
rones L. vannamei (Góllas-Galván et al., 2003) y F. paulensis (Perazzolo et al., 2011). La secuencia
codificante para la α2M de penaeidos fue determinada en M. japonicus, P. monodon, L. vannamei,
L. schmitti y F. paulensis (Rattanachai et al., 2004; Lin et al., 2007; 2008; Rosa et al., 2008). El papel
inmunomodulador de la α2M en los crustáceos, todavía no está bien establecido. Análisis de la ex-
presión génica de la α2M de crustáceos a través de la técnica de PCR en tiempo real, revelaron que su
expresión es aumentada durante infecciones por el virus de la mancha blanca (Tonganunt et al., 2005)
o por el hongo Fusarium solani (Perazzolo et al., 2011), y también después del tratamiento de los ani-
males con LPS (Vaseeharan et al., 2007) o PGNs bacterianos (Lin et al., 2007; 2008). Estos hallazgos
son relevantes, ya que sugieren que la α2M participa de las respuestas inmunológicas, siendo tal vez
capaz de inhibir proteasas de patógenos y/o regular la activación del sistema proPO y sus moléculas
tóxicas, minimizando así la agresión del patógeno y/o los daños causados a los tejidos del hospedero.
267
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
En los vertebrados, las infecciones virales inducen a varias respuestas inmunológicas, que en
última instancia buscan controlar la multiplicación y propagación de los virus y los daños celulares
causados por ellos. Entre estas respuestas se destacan, (1) la destrucción de las células infectadas
por los linfocitos NKs (del inglés, natural killer) y linfocitos T citotóxicos (CTLs), (2) la producción
de anticuerpos neutralizantes para virus y, (3) la inducción de proteínas del sistema interferón (IFN)
que generan un estado antiviral. Además de estos procesos íntimamente ligados al sistema inmune,
ocurren otros mecanismos de origen más fisiológico y evolutivamente más antiguos, que asumen gran
importancia en la defensa antiviral de los vertebrados y también de los invertebrados. Estos son: (4)
el silenciamiento de genes virales por la vía del RNA de interferencia (RNAi), (5) la apoptosis celular
y, (6) la autofagia.
Como ya se mencionó anteriormente, los crustáceos tienen apenas un sistema inmune innato,
y por lo tanto no pueden contar con los dos primeros mecanismos antivirales que son dependientes
de la línea celular linfocítica. Los demás mecanismos se indican más adelante (Fig. 6.5.1).
268
CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
Sistema interferón
◆◆ Vertebrados
En los vertebrados, los interferones (IFNs) son citocinas conocidas principalmente por su ca-
pacidad de interferir en la replicación viral y en inducir un estado antiviral en el hospedero. En la
realidad, los IFNs son más que simples proteínas antivirales y ejercen un amplio espectro de otras
funciones biológicas, siendo la mayoría relacionada con el sistema inmune. En vertebrados se co-
nocen tres tipos de interferones (Tipo I, II y III), pero solamente los interferones tipo I (IFN-α e IFN-β)
son realmente importantes para la defensa antiviral (Samuel, 2001; Donnelly y Kotenko, 2010). La
producción de IFN-α/β es inducida por las infecciones virales y estimulan la expresión de una serie
de genes participantes en las respuestas antivirales.
Durante las infecciones virales, las células del hospedero reconocen PAMPs específicos pro-
ducidos por los virus a través de cuatro principales tipos de PRPs o PRRs: los TLRs (ya comentados
anteriormente), los RLRs (del inglés, Retinoic acid-inducible gene o RIG-I-like receptors), los NLRs (del
inglés, nucleotide oligomerization domain NOD-like receptors) y los PKRs (del inglés, RNA-activated
protein kinase) (McAllister y Samuel, 2009; Takeuchi y Akira, 2009). Mientras que los TLRs son pro-
teínas transmembranas y detectan PAMPs en el espacio extracelular y en las vesículas intracelulares
denominadas endosomos, los NLRs, RLRs y PKRs son sensores citosólicos que detectan los PAMPs
virales presentes en el citoplasma de la célula hospedera.
Los TLRs, RLRs y PKRs son particularmente importantes en el desencadenamiento de la pro-
ducción de interferones IFN-α/β, de varias citocinas pro-inflamatorias y en la activación de la apopto-
sis (Takeuchi y Akira, 2009). Por su parte, los NLRs no inducen la producción de IFN-α/β, pero están
relacionados también al proceso inflamatorio y apoptosis (Kanneganti, 2010).
Como mencionamos anteriormente, los TLRs de mamíferos son homólogos a la proteína Toll
inicialmente identificada en Drosophila y que induce una respuesta inmunológica contra los hongos
y bacterias Gram-positivas. Entre los diferentes TLRs, algunos reconocen particularmente PAMPs de
virus, siendo el TLR3 uno de los más importantes por reconocer el dsRNA, producido durante la re-
plicación de muchos virus de RNA y DNA. Entre los RLRs se destacan las helicasas RIG-1 y MDA5
(del inglés, melanoma differentiation-associated gene 5). Mientras que la RIG-1 reconoce ssRNA 5’tri-
fosfatados y dsRNA de secuencias cortas (hasta 1 kb), el MDA5 reconoce dsRNAs de secuencia larga
(>2kb), generados durante la replicación viral (Takeuchi y Akira, 2009). Y finalmente, el reconoci-
miento de largos dsRNA también es realizado por los NLRs.
Luego de la internalización de los virus en la célula de un mamífero, sus ácidos nucleicos
son liberados por el sistema endósomo/fagolisósomo y reconocido por los diferentes TLRs. Los TLRs
activan una compleja cascada de señalización intracelular, induciendo la transcripción de una va-
riedad de genes, incluyendo los IFN-α/β (Uematsu y Akira, 2006; 2007). Por su parte, los IFN-α/β,
desencadenan la activación de múltiples vías intracelulares que interfieren con muchas de las etapas
del ciclo de vida de los virus, limitando la amplificación y la diseminación de los virus, atenuando así
el proceso infeccioso. Los IFNs secretados participan en la activación de la señalización intracelular
JAK/STAT, que resulta en la inducción de múltiples genes que codifican diversas proteínas implicadas
en las respuestas antivirales. Entre ellas se destacan la PKR (del inglés, serine/threonin protein kinase),
la OAS (del inglés, 2´-5´-oligoadenylate synthetase), la RNase L, la ADAR (del inglés, RNA-specific
adenosine desaminase) y la Mx (del inglés, myxovirus-resistance protein GTPase). Estas proteínas afec-
tan principalmente la multiplicación de los virus en la célula infectada, generando un estado antiviral
inespecífico en las células del hospedero (Samuel, 2001).
269
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
◆◆ Camarones
Hasta muy recientemente las proteínas del sistema IFN eran consideradas moléculas presentes
desde los cordados inferiores hasta los mamíferos, no encontrándose en los invertebrados, principal-
mente en el ramo de los protóstomos que incluye los crustáceos. Además, en los genomas comple-
tos disponibles de varios insectos, que están íntimamente ligados a los crustáceos, y del crustáceo
branquiópodo Daphnia pulex (McTaggart et al., 2009) no fueron encontradas secuencias génicas
homólogas para IFNs. Sin embargo, recientemente la expresión de una proteína homologa al IFN-α
de los mamíferos fue reportada por primera vez en un invertebrado, en los hemocitos del penaeido
M. japonicus (He et al., 2005). De forma interesante, esta proteína denominada IntlP (del inglés, in-
terferon-like protein; GenBank AY695938) sólo se expresa en camarones supervivientes a la infección
por WSSV y no en camarones sanos.
La identificación de este producto génico en 2005 provocó gran optimismo, una vez que
implicaba en la presencia de un sistema antiviral inespecífico en crustáceos basado en IFN, como
en los vertebrados. Los autores produjeron IntlP en un sistema recombinante y mostraron que esta
proteína tenía de hecho una actividad antiviral, una vez que confería protección celular contra los
efectos citopáticos causados por el virus del pez SGIV (del inglés, Singapore grouper iridovirus). Más
recientemente fue relatado que la forma recombinante de la IntlP de M. japonicus, además de una
actividad antiviral, también presentaba una actividad antibacteriana contra tres especies de vibrios
marinos (Mai et al., 2009).
Infelizmente, estos resultados parecen no corresponder a la realidad una vez que en los análi-
sis moleculares realizados en nuestro laboratorio fue demostrado que el IntlP corresponde de hecho
a una subunidad molecular del complejo proteico ATP sintetasa mitocondrial (cadena β de la porción
F0) de ocurrencia universal entre los organismos aeróbicos, y no a una proteína del sistema interfe-
rón. Se trata por consiguiente de una proteína expresada constitutivamente, independiente de la pre-
sencia de infecciones virales y bacterianas que fue detectada en varios penaeidos (Rosa y Barracco,
2008; Barracco y Rosa, 2009). Siendo así, sus actividades antivirales y antibacterianas parecen muy
dudosas.
Se debe resaltar, que a pesar de la aparente ausencia de moléculas homólogas a los IFNs
de mamíferos en penaeidos, la inducción de un estado antiviral inespecífico fue inequívocamente
mostrado en los camarones L. vannamei, un poco antes del reporte de la IntlP por He et al., (2005).
En 2004, Robalino et al., demostraron que la inyección de secuencias inespecíficas de dsRNA
en camarones, causaba un aumento significativo de su resistencia a la infección por dos virus no rela-
cionados, el TSV y el WSSV. Estos resultados mostraron, por primera vez en crustáceos, la inducción
de un estado antiviral inespecífico, independiente de la secuencia de dsRNA inyectada y por tanto
muy semejante al estado antiviral producido por los IFNs de mamíferos (Robalino et al., 2004). Poco
después, otros autores demostraron que también pequeños RNAs de doble cadena eran capaces de
inducir una protección antiviral inespecífica en camarones (Westenberg et al., 2005). Estos resulta-
dos, aliados a la reciente demostración de la presencia de receptores Toll en los hemocitos de varios
camarones penaeidos llevaron a la suposición natural de la existencia de citocinas semejantes a IFNs
en camarones (Harpeni, 2011).
Ante estos resultados, es razonable suponer que citocinas análogas y no homólogas a los IFNs
de vertebrados, deben de hecho existir en camarones (Figura 6.5.1). y serían las responsables por
la producción del estado antiviral inespecífico relatado por los autores citados. La identificación de
estas citocinas todavía no descritas en crustáceos, llevará ciertamente a una mayor comprensión de
los mecanismos antivirales de los camarones y podrá abrir nuevas perspectivas para la estimulación
270
CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
de un estado antiviral general en camarones de cultivo, buscando un mayor control de los brotes de
infecciones virales.
◆◆ Camarones
En lo que se refiere al papel antiviral del RNAi, la primera evidencia de la existencia de una
defensa antiviral específica en camarones fue demostrada por Robalino et al., (2005) en L. vannamei.
Los autores mostraron que después de inyectar secuencias específicas de dsRNA de proteínas virales
(WSSV o TSV) había una protección antiviral prácticamente completa contra infecciones por estos
virus (Robalino et al., 2005). De manera semejante, secuencias específicas de dsRNA fueron también
capaces de suprimir la replicación del virus YHV en células en cultivo de P. monodon (Tirasophon et
al., 2005). Con base en estos resultados, se volvió evidente que el mecanismo antiviral modulado por
RNAi ocurría efectivamente en camarones y su eficiencia y especificidad fueron claramente demos-
tradas. Mayores informaciones sobre la implicación del sistema RNAi en las respuestas antivirales en
los camarones se pueden obtener en la revisión de Labreuche y Warr (2013).
Muchos estudios han sido realizados para identificar los principales componentes de la vía
RNAi en camarones, siendo que algunos de los genes que codifican para proteínas-llave, como Dicer
y argonauta, ya fueron identificados y clonados en varios peneidos (ver revisión de Labreuche y Warr,
2013), como en P. monodon (Unajak et al., 2006; Dechklar et al., 2008; Su et al., 2008) y L. vannamei
(Labreuche et al., 2010; Yao et al., 2010; Chen et al., 2011). Es importante señalar que el trabajo de
Robalino et al., (2005) fue el primero en demostrar que la inducción del sistema RNAi en camarones
puede darse por vía sistémica, o sea, por la inyección de dsRNA.
La incorporación del dsRNA por las células y el fenómeno de propagación sistémica del silen-
ciamiento ya fue confirmado en C. elegans y D. melanogaster y parece estar ligado a dos mecanismos
distintos: (a) transferencia del dsRNA al citosol por un canal proteico transmembrana denominado
272
CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
SID-1 (del inglés, systemic interference defective) y (b) endocitosis del dsRNA, utilizando receptores
del tipo scavengers de reconocimiento patrón (Huvenne y Smagghe, 2010).
La propagación sistémica del efecto RNAi en camarones es todavía un fenómeno no com-
prendido. No obstante, muy recientemente, un homólogo del SID-1 fue identificado en L. vannamei
(Lv-Sid1) (Labreuche et al., 2010). De manera interesante, la expresión de este receptor aumenta
sustancialmente después de inyecciones de cualquier dsRNA (independientemente de su secuencia),
sugiriendo así que la captación de dsRNAs por las células del camarón debe ocurrir vía SID-1, a
ejemplo de otros invertebrados.
En estudio reciente en nuestro laboratorio, la inyección de juveniles L. vannamei con dsRNA-
VP28 (proteína de la envoltura del WSSV) antes de un desafío letal con WSSV (mortalidad de 100%
en 5 días) activó el sistema RNAi, mejoró las condiciones inmunológicas generales de los animales
y los llevó a una sobrevivencia de 73% de los animales desafiados, durante 30 días (Guertler et al.,
2013). Más interesante todavía es el hecho que 80% de esos animales sobrevivientes no presentaba
el virus en su organismo. En camarones tratados con dsRNA, el hemograma disminuyó hasta 6 horas
después del desafío, seguido por aumento y alcanzando su nivel normal en 72 horas. De esta forma,
el tratamiento con dsRNA-VP28 limitó la infección en los camarones por WSSV, restaurando sus
condiciones inmunológicas y promoviendo el “clearance” viral en la mayoría de los sobrevivientes.
Estos hallazgos son extremadamente relevantes, una vez que demuestran que el tratamiento previo de
camarones juveniles con dsRNA-VP28 puede llevar a la restitución de las buenas condiciones inmu-
nológicas de animales desafiados con WSSV, al control de la infección viral en su fase inicial, además
de promover una limpieza viral en la mayoría de los sobrevivientes. De esa forma, la utilización de
dsRNA-VP28 podría representar una potencial terapia antiviral de carácter preventivo contra el WSSV,
en camarones juveniles infectados con una carga viral alta.
Es importante destacar, que a pesar de que la tecnología del RNAi pudiera ser considerada
actualmente como la estrategia más promisoria contra las virosis de camarones, la necesidad de
inyectar los animales individualmente con dsRNA de secuencia-específica, asociada al alto costo de
la técnica, constituye todavía un factor limitante para su utilización en gran escala dentro de la cama-
ronicultura. Inyecciones con dsRNA/siRNA son inviables en granjas de camarones y la búsqueda de
vías alternativas de administración y de disminución de costos son urgentes e imperativas.
Uno de los métodos alternativos a ser evaluados sería la administración oral de bacterias pro-
ductoras de dsRNA de secuencia específica (bacterias transformadas, deficientes en RNAsa III, con-
teniendo un plásmido que sintetiza ambas cadenas del dsRNA), método ya bien establecido para C.
elegans (Timmons et al., 2001). Un primer estudio de este tipo fue realizado por Sarathi et al. (2008),
en P. monodon, utilizando dos formas diferentes de administración oral: (1) alimento cubierto con
bacterias (E. coli) transformadas con plásmidos productores de dsRNA-VP28 o, (2) nanopartículas de
quitosano conteniendo el dsRNA-VP28. Los autores encontraron tasas expresivas de sobrevivencia
de los camarones desafiados con WSSV después de un mes de tratamiento (70% y 40%, respectiva-
mente) (Sarathi et al., 2008).
Un punto relevante a ser considerado en ese abordaje es que la activación del sistema RNAi
depende de la entrada del dsRNA/siRNA en las células del hospedero y por tanto, la administración
oral debe garantizar que los dsRNA/siRNA atraviesan el tracto digestivo del camarón sin ser degra-
dados y alcancen los diferentes tejidos de los animales, incluyendo los potencialmente infectados.
Para eso, es imperativo tener una comprensión muy clara de la fisiología del tracto intestinal de
los camarones, que posibilite delinear metodologías eficaces de transferencia del dsRNA/siRNA del
intestino hacia los tejidos. Estudios de este tipo son todavía muy escasos o ausentes, a pesar de la
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
fuerte demanda de investigaciones en esta área para validar o no la vía de administración oral de
estas construcciones.
Otro método que parece muy promisorio y merece ser mejor investigado se refiere a la utili-
zación de vectores plasmidiales que expresen RNAs en forma de horquilla (hRNAs), que pueden ser
de secuencias largas (lhRNA:, del inglés, long-hairpin RNA) o cortas (shRNA:, del inglés, short-hairpin
RNA). La mayoría de las aplicaciones terapéuticas basadas en el RNAi introducen directamente en
el organismo el dsRNA/siRNA. Todavía los efectos de esas moléculas son transitorios, una vez que
ellas pueden ser degradadas en el organismo. Por otro lado, la inserción de un sistema de vectores
plasmidiales o virales expresando hRNAs, puede llevar a un silenciamiento específico y potente, una
vez que promueven la transcripción de los precursores de RNA doble cadena para ser procesado vía
RNAi. Cabe destacar que tales estrategias permiten una entrega continua del hRNA al organismo,
superando así la limitación de la acción transitoria de los siRNAs (Lambeth et al., 2010). Según Cas-
tanotto y Rossi (2009), la utilización de un promotor que induce la expresión de hRNAs o miRNAs
podría promover un silenciamiento de largo plazo, con apenas una única aplicación. Ese método ten-
dría ciertamente una fuerte función práctica para la acuicultura, una vez que dispensaría eventuales
refuerzos de inyección de los dsRNA/siRNA virales para proteger los animales.
El primer estudio en camarones, utilizando una construcción de DNA expresando lhRNA, fue
realizado por Krishnan et al., (2009). En ese estudio, construcciones plasmidiales expresando lhRNA-
VP28 o lhRNA-VP19 fueron producidas e inyectadas en P. monodon, en diferentes concentraciones.
Después del desafío con WSSV, los animales tratados con lhRNA-VP28 presentaron una alta tasa
de sobrevivencia (75%) después de un mes de la inyección (35 µg). Análisis de PCR en tiempo real
(qPCR) indicaron una disminución significativa en el número de copias virales en estos animales,
resultando que los autores atribuyeron a la biodisponibilidad continua y funcionalidad de la cons-
trucción, que fue detectada en varios tejidos del animal, hasta por un mes del tratamiento (Krishnan
et al., 2009). Mayores informaciones sobre la aplicación de la técnica de RNAi contra virus causando
enfermedades en animales acuáticos, pueden ser encontradas en la revisión de Reshi et al., (2014).
En conclusión, el uso de dsRNA para activar la inmunidad antiviral en camarones despunta en
el momento actual como una alternativa terapéutica de las más promisorias en el combate a las viro-
sis, una vez que ese patrón molecular induce simultáneamente respuestas secuencia-inespecíficas, a
través de un sistema interferon-like y secuencia-específicas, a través de la vía RNAi. Por otro lado, la
inducción del sistema RNAi por dsRNA/vectores expresando hRNA vía sistémica y eventualmente por
vía oral, implican una atrayente posibilidad de desarrollarse terapias antivirales, de forma compatible
con la camaronicultura.
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CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
sas (iniciadoras y ejecutoras). Éstas tienen un papel crucial en el proceso apoptótico, pues catalizan
muchos de los diferentes pasos en la muerte celular (Chowdhury et al., 2008).
Muchas proteínas y componentes virales perturban la fisiología celular y proporcionan señales
celulares que inducen la muerte celular por apoptosis. En mamíferos, ya fue demostrado que algunos
componentes de las vías pro-apoptóticas pueden ser activados por el dsRNA viral (Gantier y Williams,
2007). Luego, durante una infección viral, el dsRNA estaría implicado tanto en la señalización intra-
celular activando los sistemas de RNAi e interferón, como también estaría induciendo la apoptosis
celular (Fig. 6.5.2).
Figura 6.5.2: Apoptosis celular. Representación de la apoptosis de una célula, con la formación de cuerpos apop-
tóticos endocitados por una célula saludable (A). Núcleos apoptóticos (B) y no-apoptóticos (C) de hemocitos de L.
vannamei infectados con el virus de la mionecrosis infecciosa (IMNV), teñidos con bis-benzimida.
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
6.6. Inmunoestimulantes
El gran interés en compuestos inmunoestimulantes surgió de la necesidad de tratar el cáncer
en los humanos, buscando compuestos capaces de activar las células del sistema inmunológico (ma-
crófagos, células NKs, linfocitos B y T), para aumentar su capacidad de destruir los tumores. Por otro
lado, además de proporcionar una mayor protección contra los tumores, la activación de las células
inmunológicas lleva todavía a una mayor resistencia a las infecciones por diferentes microorganis-
mos, como virus, bacterias, hongos y otros parásitos.
Sustancias inmunoestimulantes son obtenidas a partir de varias fuentes naturales y también
por síntesis química con base en la estructura molecular de los propios productos naturales. Entre
estos compuestos, se encuentran muchos derivados de microorganismos o de algas, destacándose los
componentes de la pared celular de diferentes bacterias, hongos, micro algas y macro algas. Los prin-
cipales principios activos de estos componentes capaces de generar una inmunoestimulación son:
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Parámetro Determinación
Utilidad
hemato-inmunológico en campo*
Entre los parámetros citados, las alteraciones más evidentes en los animales (principalmente
camarones) infectados/estresados se refieren a la modulación del número total de hemocitos o THC
(del inglés, total hemocyte count) y la disminución de la capacidad coagulante de la hemolinfa.
Es bien conocido, en la práctica de los cultivos, el aumento en el tiempo de coagulación de la
hemolinfa en crustáceos sobre estrés fisiológico o durante infecciones (Song et al., 2003; Sarathi et al.,
2007; Balasubramanian et al., 2008). La técnica clásica para evaluar este parámetro, es la obtención
de la hemolinfa con un capilar de vidrio (Sarathi et al., 2007) y registrar el tiempo de gelificación de
la hemolinfa. Es una técnica muy simple y si se efectúa bien, puede generar información útil sobre el
estado de salud de los animales. Como se explicó anteriormente, el proceso de coagulación envuelve
varios factores: la proteína de coagulación (CP), la enzima hemocitaria TGasa y la concentración
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CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
plasmática de Ca2+. No se conoce claramente cuál de estos factores es el responsable por el aumento
en el tiempo de coagulación en animales estresados/infectados. Evidencias sugieren que hay una
interacción de todos estos factores. Camarones L. vannamei infectados con TSV tienen una capacidad
disminuida de coagulación y presentan una actividad significativamente reducida de TGasa en los
hemocitos, además de un decrecimiento en la concentración de calcio plasmático (Song et al., 2003).
Recientemente, fue demostrado que el silenciamiento pos-transcripcional tanto de la TGasa
como de la CP lleva a un aumento significativo en la tasa de mortalidad de M. japonicus infectados
con Vibrio penaecida o WSSV, indicando un fuerte envolvimiento de estas moléculas en la respuesta
inmune de estos animales contra infecciones bacterianas y virales (Maningas et al., 2008). En otro es-
tudio, se observó un agotamiento en la expresión de la TGasa (hasta 24 horas) después de un desafío
con WSSV, tanto en F. chinensis (Liu et al., 2007) como en L. vannamei (Guertler, 2010), pudiendo
haber un aumento en la expresión del gene para esta enzima más tardíamente (72 horas después del
desafío) (Guertler, 2010). Efectivamente, una disminución de la capacidad de coagulación es común-
mente observado en camarones severamente infectados por WSSV (Sahul Hameed et al., 2006; Sara-
thi et al., 2007), lo que es compatible con una expresión disminuida de TGasa y/o CP. Estos resultados
sugieren que ambas proteínas relacionadas al proceso de coagulación deben ser importantes en la
defensa de los crustáceos frente a las infecciones virales.
El conteo total de hemocitos circulantes (THC), de por sí es uno de los inmunoparámetros más
utilizados para expresar las condiciones de salud de los crustáceos, así como ocurre con los hemo-
gramas en los mamíferos. La modulación de la THC es utilizada en diferentes especies de camarones
sobre condiciones de estrés ambiental y/o fisiológico y durante las infecciones (Jiravanichpaisal et al.,
2006; Sarathi et al., 2007; Ai et al., 2009; Cantelli, 2009; Guertler, 2010). La THC puede aumentar o
disminuir sus valores, dependiendo del tipo y tiempo de exposición a los agentes causantes del estrés.
Es común que se observe una disminución de la THC, fenómeno conocido por hemocitopenia, du-
rante las primeras horas de un proceso infeccioso, que puede ser seguido por un aumento de hemoci-
tos en fases más tardías, pero solamente cuando se trata de infecciones moderadas. Esta disminución
inicial se debe probablemente a una migración y/o infiltración de los hemocitos en los tejidos infec-
tados o heridos, de una baja reposición de las células por el tejido hematopoyético (Jiravanichpaisal
et al., 2006) y/o hasta muerte celular por apoptosis celular (Sarathi et al., 2007). La mayoría de los
autores concuerda que un aumento en el THC debe proporcionar una mayor protección de los cama-
rones contra infecciones, una vez que los hemocitos son los principales responsables por las diferen-
tes reacciones inmunocelulares y son los sitios de expresión de las diferentes moléculas de defensa.
Curiosamente, la alteración en la proporción de los tipos de hemocitos o DHC en camarones,
no es muy observada durante situaciones de estrés o durante infecciones (Rodrı́guez y Le Moullac,
2000; Vogan y Rowley, 2002). Sin embargo, en algunos casos fue referida una variación en el por-
centaje de los tipos celulares, en especial de hemocitos granulares (HGP y HGG) bajo condiciones
de estrés y/o infecciones. En L. vannamei por ejemplo, mantenidos en bajas salinidades (15 ppt) e
infectados con V. alginolyticus fueron registradas disminuciones significativas en el número de HHs
(79%) y HGs (65%) (Li et al., 2010). También durante las infecciones virales, como por el WSSV, el
porcentaje de HGs puede alterarse ya en los primeros días/horas pos-infección (Maldonado et al.,
2003; Cantelli, 2009). Estos resultados no son sorprendentes, una vez que los HGs son las principales
células inmunocompetentes de los camarones, siendo selectivamente infectadas por el WSSV (Wang
et al., 2002), lo que explicaría la caída de esta población hemocitaria ya en los primeros días pos
infección.
La producción de ROIs por los hemocitos de crustáceos, medida principalmente por la pro-
ducción de aniones superóxido (O2-), se ha constituido en uno de los inmunoparámetros más utiliza-
dos para estimar el estado de inmunocompetencia de los camarones. La evaluación de la producción
283
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
intracelular de O2- por los hemocitos fagocitarios, es usualmente determinada por el método de
reducción del NBT, o por la técnica de la quimioluminiscencia, utilizando componentes de la super-
ficie de microorganismos, como LPS o β-1,3-glucanos (laminarina, zymosan, curdlan) para estimula-
ción de los hemocitos in vitro. Este inmunoparámetro es también muy utilizado para evaluar el efecto
de sustancias inmunoestimulantes en camarones (Maldonado et al., 2003; Yeh et al., 2006; Fu et al.,
2007; Balasubramanian et al., 2008; Cantelli, 2009). La primera referencia de producción de ROIs
en camarones fue publicada en P. monodon (Song y Hsieh, 1994), siendo realizados desde entonces
estudios con otras especies, cuyas metodologías fueron adaptadas. Existen sin embargo, diferencias
fundamentales entre los protocolos experimentales utilizados por los diferentes grupos que estudian
los crustáceos, lo que resulta frecuentemente en resultados conflictivos y poco comparables. Como
ejemplo, se puede citar el trabajo de Muñoz et al. (2000) en L. vannamei, que indica un porcentaje
muy bajo de estimulación de los hemocitos por el zymosan (30%), luego de 2 horas de incubación,
mientras que en nuestro laboratorio ocurre una alta estimulación hemocitaria (80%) en la misma
especie, en apenas 15 minutos de incubación con el mismo inductor (Guertler et al., 2010). En este
trabajo, nuestro grupo discute estas inconsistencias de metodologías y propone algunas estrategias
para uniformar la evaluación de la producción de ROIs en camarones.
Uno de los primeros estudios a evaluar la alteración de los ROIs en camarones infectados por
bacterias fue realizado en L. vannamei desafiados con diferentes especies de Vibrio (Muñoz et al.,
2000). Curiosamente, las especies V. alginolyticus y V. anguillarum fueron capaces de estimular la
producción del anión superóxido en camarón, mientras que el V. harveyi no causó ninguna alteración
en la producción de este radical lo que podría explicar su patogenicidad de esta bacteria para los
camarones.
Con relación a las infecciones causadas por virus, existen relatos de disminución significativa
en la producción de ROIs en L. vannamei infectados con WSSV, así como en la actividad fagocítica,
y actividad de la SOD (Chang et al., 2003). En contraste, se observó un aumento de la producción de
ROIs en camarones infectados con TSV (Song et al., 2003), WSSV y/o IHHNV (Sarathi et al., 2007;
Cantelli, 2009). Estos resultados parecen indicar que algunos parámetros hemato-inmunológicos pue-
den alterarse de modo distinto conforme la infección viral.
La actividad antimicrobiana de la hemolinfa de los crustáceos viene también siendo utilizada
como un inmunoparámetro durante las infecciones y otras situaciones de estrés (Song et al., 2003;
Costa et al., 2009). Variaciones en esta actividad en el plasma/suero de los camarones puede ser cor-
relacionada con la presencia de infecciones o a una inmunodepleción de los animales. En camarones
L. vannamei infectados con IMNV ocurre un aumento en la hemolinfa de la actividad antimicrobiana
contra la bacteria Gram positiva Micrococcus luteus, pero no contra la Gram negativa V. harveyi
(Costa et al., 2009). En contraste, actividad antimicrobiana contra V. harveyi aumenta en L. vannamei
infectados con TSV (Song et al., 2003).
En relación a la capacidad aglutinante de la hemolinfa, es conocido el hecho de que las infec-
ciones y otras situaciones de estrés, pueden resultar en la alteración de los títulos aglutinantes de la
hemolinfa de los crustáceos que usualmente son determinados por la aglutinación de eritrocitos de
mamíferos. Como ejemplo, podemos citar el aumento de actividad aglutinante del plasma de P. mo-
nodon infectado por Vibrio vulnificus (Ratanapo y Chulavatnatol, 1992), de Macrobrachium rosenber-
gii y P. monodon infectados por WSSV (Pais et al., 2007) y L. vannamei por el virus de la mionecrosis
infecciosa (IMNV) (Costa et al., 2009). Por otro lado, en hembras adultas de L. vannamei, sometidas
al proceso de ablación unilateral para la maduración ovariana, ocurre una reducción significativa del
título aglutinante de su hemolinfa, probablemente en respuesta a esta práctica mutiladora (Maggioni
et al., 2004). Es importante resaltar que los niveles de la actividad aglutinante no varían siempre de
forma significativa en respuestas a las infecciones o situaciones de estrés; por ejemplo, en F. paulensis
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CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
no hubo alteración de los títulos aglutinantes en animales mantenidos a bajas salinidades o luego
de la ablación (Perazzolo et al., 2002), así como en L. vannamei sometidos a una infección leve por
WSSV (Cantelli, 2009).
La concentración de proteínas totales del plasma de crustáceos es también un parámetro que
puede auxiliar en la evaluación del estado de salud de los camarones. A pesar de este parámetro po-
der ser afectado por factores ambientales y fisiológicos (Rosas et al., 2000; Sánchez et al., 2001), por
infecciones y lesiones (Perazzolo et al., 2002; Vogan y Rowley, 2002) o por la administración de PS
de algas (Yeh et al., 2010), el significado de esta variación necesita ser todavía mejor comprendido.
Debemos considerar que el pigmento respiratorio hemocianina representa cerca de 90-95% de las
proteínas totales del plasma de crustáceos (Rochu y Fine, 1978) y las fluctuaciones en su concentra-
ción se refleja directamente en este tipo de parámetro hematológico. A pesar de la hemocianina estar
relacionada con la inmunología de crustáceos, una vez que su clivaje pueda generar fragmentos con
función de PO o de péptido antimicrobiano, como se mencionó anteriormente, la utilización de los
niveles de esta proteína como inmunoparámetro debe ser todavía mejor investigada.
La modulación de la actividad de la PO representa tal vez el principal inmunoparámetro uti-
lizado actualmente para evaluar el estado de salud de los camarones y sería imposible citar en este
capítulo los innumerables trabajos que utilizan la actividad de esta enzima para expresar la condición
inmunológica de estos animales. Varios estudios demuestran la modulación de la actividad de la PO
durante un estrés ambiental y/o fisiológico (Perazzolo et al., 2002; Hsu y Chen, 2007; Li et al., 2010),
o durante infecciones y lesiones (Mathew et al., 2007; Sarathi et al., 2007; Li y Chen, 2008; Li et al.,
2010).
Recientemente, la utilización de técnicas de biología molecular ha auxiliado de forma crucial
la comprensión de las respuestas inmunológicas desencadenadas en crustáceos y los mecanismos
relacionados con la interacción patógeno-hospedero, todavía poco conocidos. Estas técnicas relacio-
nan básicamente la identificación y cuantificación de la expresión de diferentes moléculas inmunoló-
gicas e incluyen en especial: (1) la técnica de la reacción en cadena de la polimerasa en tiempo real,
(2) la SSH (del inglés, suppression subtractive hybridization), (3) la DD-PCR (del inglés, differential
display PCR) y (4) análisis de cDNA por microarrays.
La infección por WSSV, por ejemplo, parece modular la expresión de varios genes en camaro-
nes, incluyendo proteínas antimicrobianas y antivirales, transductores de señal intracelulares, compo-
nentes del sistema RNAi, factores de transcripción, reguladores de apoptosis, proteasas e inhibidores
de proteasas, proPO, proteínas de estrés oxidativo y moléculas de adhesión celular (Rojtinnakorn et
al., 2002; Roux et al., 2002; Tonganunt et al., 2005; Ai et al., 2009; Liu et al., 2009b; Guertler 2010).
Infecciones bacterianas y por hongos también modulan la expresión génica de moléculas
inmunológicas. Camarones P. monodon infectados con V. harveyi presentan un aumento en la ex-
presión de lisozima y ALF y una disminución de la expresión de serpinas (Somboonwiwat et al.,
2006). Por otro lado, en juveniles de L. vannamei inyectados con LPS, ocurre una disminución de la
expresión de varios AMPs (PEN2-4 y crustinas), siendo esta disminución dosis-dependiente (Okumu-
ra, 2007). Ya, en F. paulensis desafiado con el hongo filamentoso Fusarium solani fue observado el
aumento significativo en la expresión del inhibidor de proteasa α2M (Perazzolo et al., 2011).
En un trabajo interesante, se analizó la expresión diferencial de genes en camarones L. van-
namei seleccionados genéticamente, en cuanto a su susceptibilidad y resistencia a la infección por
WSSV (Zhao et al., 2007). Varios genes fueron expresados diferencialmente en el hepatopáncreas de
los camarones resistentes al WSSV. Hubo una mayor expresión constitutiva de hemocianina, lecti-
nas CTLs, lisozimas, proteínas apoptóticas, enzimas oxidativas, proteínas reguladoras de la ecdisis,
quitinasas, lacasas, catepsina L y zinco-proteinasas, en estos animales en relación a los camarones
285
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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CAPITULO 6 - Avances en la inmunología del camarón
los análisis de los parámetros hemato-inmunológicos en crustáceos. Uno de los principales factores
se refiere a las enormes diferencias en los valores fisiológicos considerados “normales” o de “refe-
rencia” para una determinada especie. Estas diferencias están posiblemente relacionadas al tipo de
ambiente en los que los animales se encuentran, la salinidad, temperatura, estado nutricional, edad,
maturación sexual y estados de muda.
Por otro lado, no existe todavía una estandarización de las técnicas utilizadas para evaluar
estos parámetros en crustáceos y esto también lleva a resultados muchas veces conflictivos lo que difi-
culta comparaciones dentro de la misma especie o entre especies. Sería de fundamental importancia,
buscar una padronización de estas técnicas entre los diferentes grupos de investigación que estudian
a los crustáceos, para que se obtengan resultados más homogéneos y comparables.
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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Capítulo 7 - Vigilancia epidemiológica en Camaronicultura
Capítulo 7
Vigilancia epidemiológica en
Camaronicultura
307
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
308
Capítulo 7 - Vigilancia epidemiológica en Camaronicultura
Capítulo 7
Introducción
La camaronicultura supone una de las producciones acuáticas más importantes a nivel mun-
dial, de forma que un foco de una enfermedad altamente contagiosa en una determinada región
podría ocasionar graves perjuicios económicos y sociales por las mortalidades registradas y por las
consecuencias que conllevaría el cierre del comercio internacional (FAO, 2014).
La intensificación de la producción camaronera, la generalización de los movimientos de ani-
males y alimentos a nivel local, regional e internacional y el cambio climático son factores que condi-
cionan la diseminación de las enfermedades conocidas y la aparición de patologías emergentes. Por
lo tanto, el control de las enfermedades que afectan a la acuicultura es de vital importancia y es nece-
sario contar con herramientas que permitan prevenir y controlar posibles brotes de enfermedad (OIE,
2013). La FAO en su publicación “Sistema de prevención de emergencia de plagas y enfermedades
transfronterizas de los animales y de las plantas” alerta sobre la importancia que tiene la prevención
de las patologías en la acuicultura, ya que la falta de control de los movimientos comerciales de los
animales acuáticos a nivel mundial está causando graves brotes de enfermedades, y una vez que se
introduce un agente patógeno y se establece en el ambiente natural es difícil tratarlo o erradicarlo.
De esta forma, el control de las enfermedades que afectan a las poblaciones acuáticas se con-
vierte en una tarea compleja que debe realizarse con criterios rigurosos, y en la que se debe optimizar
la detección precoz de las enfermedades de manera eficiente (Peeler et al., 2006). En un momento tan
delicado como en el que nos encontramos actualmente, es de vital importancia que se implementen
sistemas eficientes de vigilancia epidemiológica.
La Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) es la responsable de definir las directri-
ces para establecer programas de control, erradicación y vigilancia epidemiológica de una serie de
enfermedades relevantes en acuicultura en lo que respecta a aspectos sanitarios y económicos que
regulan el comercio internacional. Para ello publica y actualiza periódicamente dos documentos
fundamentales: el Código Sanitario para los Animales Acuáticos (OIE, 2013) y el Manual de Pruebas
de Diagnóstico para los Animales Acuáticos (OIE, 2014), más conocidos como el Código Acuático y
el Manual Acuático respectivamente.
La vigilancia epidemiológica en acuicultura tiene dos enfoques fundamentales: la detección
de la enfermedad (como parte clave en los programas de detección precoz y de erradicación) y el
cálculo de prevalencia (para evaluar la eficacia de los programas de control). Estas actividades se
llevan a cabo frecuentemente en las explotaciones acuícolas, pero desafortunadamente a nivel re-
gional o nacional son menos habituales debido a los altos costes económicos que conllevan y a su
complejidad.
309
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Finalidad
Los estudios epidemiológicos pueden tener múltiples objetivos: identificar las enfermedades
presentes en la población estudiada, determinar la extensión y localización de la enfermedad, esta-
blecer la importancia de las diferentes enfermedades que pueden afectar a una población, priorizar
la utilización de los recursos disponibles para implementar programas de control y/o erradicación,
diseñar planes de contingencia para hacer frente a la aparición de brotes de enfermedad y dispo-
ner de información veraz y actualizada para comunicar a organismos internacionales como la OIE
(Klaucke et al., 1988).
A nivel oficial se habla frecuentemente de vigilancia epidemiológica (surveillance), seguimien-
to o monitoreo (monitoring) y estudios epidemiológicos observacionales (survey). En todos los casos
se trata de técnicas de recogida sistemática de información epidemiológica que posteriormente es
analizada y utilizada para gestionar más eficazmente las enfermedades estudiadas en una determina-
da población (Cameron, 2002; Thrusfield, 2005). Así pues, se hace preciso definir claramente cada
uno de estos términos, aunque las bases metodológicas expuestas posteriormente sean válidas para
todos ellos y en todos los casos son sistemas basados en la recogida y análisis sistemático y conti-
nuado de información sanitaria en una población, difieren en los objetivos planteados (Subasinghe
et al., 2004).
El objetivo específico de la vigilancia epidemiológica es establecer que una población está
libre de una determinada infección o enfermedad, o detectar la introducción de una enfermedad
nueva u exótica con el objetivo de establecer rápidamente medidas de control y erradicación.
Los programas de seguimiento tienen como finalidad conocer el comportamiento y evolución
de una determinada infección o enfermedad que está presente, mediante la descripción y reporte de
brotes y la estimación de la prevalencia y/o la incidencia.
Los estudios observacionales tienen objetivos más amplios y buscan conocer mejor el com-
portamiento de la enfermedad y sus relaciones con otros factores dependientes del agente, del hos-
pedador o del ambiente.
310
Capítulo 7 - Vigilancia epidemiológica en Camaronicultura
Según los Centros de Control de Enfermedades de EE.UU. (CDC), un buen sistema de vigilan-
cia epidemiológica debería reunir las siguientes características: rapidez en la obtención de resultados
(toma de datos y posterior procesado), sensibilidad y especificidad, representatividad, aplicabilidad
de los resultados a la toma de decisiones, simplicidad y flexibilidad (Klaucke et al., 1988).
Nuevos enfoques
La aplicación de los sistemas de vigilancia clásicos en poblaciones acuáticas presenta nume-
rosas limitaciones relacionadas con la dinámica de poblaciones (movimientos comerciales y movi-
mientos migratorios de animales silvestres), la heterogeneidad de las poblaciones (condiciones de
producción, variabilidad en la susceptibilidad y relaciones ecológicas complejas), la exposición cam-
biante a un conjunto variable de factores de riesgo y la interacción entre patógenos. Por esas razones,
se hace necesario mejorar los sistemas de vigilancia epidemiológica y adaptarlos a cada situación.
311
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Entre los enfoques alternativos propuestos para aumentar la eficiencia, hay que destacar la vi-
gilancia epidemiológica basada en riesgo y la vigilancia sindrómica. Estos sistemas son complemen-
tarios a los sistemas existentes y no pretende sustituirlos, y buscan cubrir, en la medida de lo posible,
las lagunas que eventualmente quedan, tanto en vigilancia como en control.
Los sistemas de vigilancia basada en el riesgo (risk-based surveillance) tienen como finalidad
aumentar la vigilancia en aquellas explotaciones que tengan mayor riesgo sanitario.
Esta metodología fue propuesta por la OIE y su implementación ha supuesto un gran avance
en sanidad acuícola. El análisis de riesgo permite identificar los patógenos que pueden amenazar a
una población y analizar las probabilidades de que cada patógeno se introduzca en la población,
se establezca y se disemine, así como sus consecuencias. En función del nivel de riesgo se diseña
un programa de vigilancia específico para cada situación priorizando la utilización de los recursos
disponibles en los eventos más relevantes desde el punto de vista sanitario.
Según el Código Acuático (OIE, 2013), el análisis del riesgo comprende varias fases. En primer
lugar se debe identificar la amenaza o peligro (hazard), determinando las enfermedades que deben
ser objeto de vigilancia, así como sus consecuencias en la sanidad animal y la salud pública. A conti-
nuación, se procederá a la evaluación del riesgo estimando el riesgo asociado a cada amenaza. Una
evaluación cualitativa puede ser suficiente en la mayoría de los casos, pero como mínimo se deben
identificar y evaluar los distintos factores relacionados con los riesgos de entrada, establecimiento y
diseminación del patógeno así como con las consecuencias biológicas y económicas derivadas de la
enfermedad. En función del nivel de riesgo estimado para cada enfermedad se propondrán medidas
de gestión del riesgo, distribuyéndose los recursos disponibles de forma proporcional al riesgo de
cada enfermedad a vigilar, y se marcarán las pautas para seleccionar las poblaciones y los individuos
más adecuados (con mayor riesgo). El último elemento es la comunicación del riesgo entre todos los
posibles involucrados.
En general este tipo de sistemas mejoran notablemente la relación coste-beneficio, son muy
eficientes y son adecuados para la vigilancia de enfermedades emergentes y exóticas. Sin embargo,
en muchas ocasiones no se dispone de la información suficiente, y la metodología no está estanda-
rizada ni validada.
Otra limitación importante de los sistemas de vigilancia clásicos es la necesidad de diagnos-
ticar numerosas muestras, lo que supone un alto coste económico y requiere una importante infraes-
tructura de laboratorios diagnósticos. Por este motivo, para determinadas enfermedades se han esta-
blecido redes de alerta sanitaria basadas en sistemas de vigilancia sindrómica (también denominados
de sistemas de detección temprana de eventos), donde se pretende identificar la aparición de los
patógenos, y predecir su evolución, en función de variables relacionadas con el consumo de fárma-
cos, las consultas sanitarias o la productividad. Un ejemplo de este tipo de vigilancia es el Sistema de
Alerta Epidemiológico y de Manejo Acuícola (SAEMA) desarrollado en Ecuador (Bayot et al., 2008).
Un punto importante de estos sistemas es que la definición del caso es deliberadamente ines-
pecífica con el fin de aumentar la sensibilidad del sistema. Es decir, en la vigilancia sindrómica se
buscan síndromes en lugar de enfermedades diagnosticadas y confirmadas. Se basan en el registro
informatizado de datos que se analizan en tiempo real. Los sistemas informáticos en los que se alma-
cena la información detectan automáticamente cambios o aberraciones en la información acumulada
que desencadenen una alerta del sistema.
Por tanto, una adecuada implementación de estos sistemas permiten identificar la aparición
muy precoz de patógenos emergentes, predecir su evolución y optimizar recursos (personal, diag-
nóstico…).
312
Capítulo 7 - Vigilancia epidemiológica en Camaronicultura
Método de muestreo
Cuando las autoridades sanitarias son alertadas sobre un brote de enfermedad (manifestado
como un incremento anormal de la mortalidad o una disminución del crecimiento) se debe proceder
a realizar una investigación epidemiológica para establecer su etiología.
313
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Fiabilidad diagnóstica
Toda investigación epidemiológica requiere conocer el estado de salud o enfermedad (o de
infección) de los individuos de la población estudiada. Tradicionalmente la diferenciación de sanos
y enfermos se llevaba a cabo mediante la emisión de juicios clínicos basados en la observación de
síntomas y lesiones (diagnóstico clínico y anatomopatológico); sin embargo, en los últimos años ha
evolucionado hacia el estudio de la infección, es decir, la detección de individuos infectados por un
determinado agente (diagnóstico etiológico). A pesar de ello se continúa utilizando el término de
enfermedad, que la propia OIE define como “infección con o sin sintomatología clínica” (OIE, 2013).
Uno de los principales retos de la epidemiología moderna es asumir que los protocolos diag-
nósticos son imperfectos, y que debe evaluarse su fiabilidad. Los dos parámetros que determinan la
calidad del diagnóstico son la sensibilidad y la especificidad. La sensibilidad es la probabilidad de
detectar correctamente a un individuo enfermo (es decir, que no existan falsos negativos), y la espe-
cificidad es la probabilidad de detectar correctamente a un individuo sano (es decir, que no existan
falsos positivos).
Los expertos en diagnóstico de laboratorio también utilizan los términos de sensibilidad y
especificidad, pero haciendo referencia a conceptos distintos aunque relacionados. Normalmente
definen sensibilidad de una prueba diagnóstica, como el número de organismos patógenos que la
prueba es capaz de detectar por unidad de muestra, y en este caso sería más apropiado hablar de
nivel umbral de detección. De la misma forma, definen una prueba como específica cuando está
diseñada para un patógeno concreto, y que se ha evaluado frente a patógenos similares obteniéndose
resultados negativos. Efectivamente, esos ensayos dan idea de la especificidad de la prueba diagnós-
tica pero no cuantifican dicho valor, y además no suelen ser los suficientemente exhaustivos para ga-
rantizar que la prueba sea completamente específica para el patógeno estudiado (de Blas et al., 2007).
Otro factor a considerar es que habitualmente sólo se evalúa la fiabilidad diagnóstica de la téc-
nica laboratorial. Sin embargo, hay que valorar que se trata de un protocolo diagnóstico en el que las
muestras para realizar la investigación epidemiológica son recogidas en condiciones de campo y es
necesario tener en cuenta cómo influye el tipo de tejidos seleccionados, el transporte y conservación
del material patológico, así como la recepción y posterior procesado del mismo.
Por otra parte, una adecuada prueba diagnóstica debería reunir las siguientes propiedades:
reproductibilidad (que corresponde con el grado de repetibilidad y fiabilidad de los resultados obteni-
dos al aplicarse en situaciones similares), validez (que indica la exactitud y precisión obtenida al apli-
car la prueba), fiabilidad (es la capacidad de la prueba para predecir correctamente la situación del
314
Capítulo 7 - Vigilancia epidemiológica en Camaronicultura
individuo, es decir si el resultado se corresponde con el valor real) y aplicabilidad (es la posibilidad
de utilizar una prueba teniendo en cuenta una serie de criterios que permiten estimar su eficacia y
eficiencia como son la rapidez en la obtención de resultados, la sencillez de ejecución de la técnica,
el coste económico y la existencia de efectos secundarios) (Thrusfield, 2005).
Está claro que es inevitable la utilización de pruebas diagnósticas en una investigación epi-
demiológica, y como hemos indicado presentan el inconveniente de que son imperfectas. En conse-
cuencia, se deberá evaluar la fiabilidad de una determinada prueba y para ello necesitamos disponer
de una prueba de referencia con cual compararla, que denominamos prueba de oro (gold standard)
en la que todos los animales enfermos son diagnosticados como positivos, y todos los animales sanos
como negativos. Para el diagnóstico de algunas enfermedades de los camarones se ha considerado el
diagnóstico histopatológico como prueba de oro, a pesar de que sus resultados dependen del tiempo
invertido en buscar determinadas lesiones (por ejemplo cuerpos de inclusión para WSSV) y que la
ausencia de esas lesiones no implica necesariamente la ausencia de infección. En los últimos años la
reacción en cadena de la polimerasa (PCR) se ha convertido en la prueba de oro para el diagnóstico
de infección.
En algunos casos se puede reemplazar la prueba de oro, por un diseño experimental que nos
permita crear el grupo de animales enfermos mediante infección experimental, aplicando los pos-
tulados de Henle-Koch (mediante la exposición de animales susceptibles a altas concentraciones de
un determinado patógeno en las condiciones ambientales adecuadas) y el grupo de animales sanos
utilizando camarones SPF (Specific Pathogen Free).
Para validar o evaluar una determinada prueba diagnóstica, construiremos una tabla de contin-
gencia que resuma los resultados obtenidos al aplicar simultáneamente sobre un grupo de camarones
la prueba de oro y la prueba a evaluar (Tabla 1) (Thrusfield, 2005).
Prueba de oro
Positivos (enfermos) Negativos (sanos)
315
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Es evidente que una prueba muy sensible dará pocos falsos negativos y por tanto tendrá utili-
dad para descartar la presencia de enfermedad.
En el caso particular de la investigación de brotes de enfermedad no suelen presentarse pro-
blemas de sensibilidad, ya que se suelen seleccionar camarones enfermos en fase aguda, cuyos teji-
dos presentan elevadas concentraciones del patógeno.
La especificidad, es la probabilidad de detectar correctamente (diagnóstico negativo) a un
individuo sano y se calculará como el cociente entre el número de verdaderos negativos (sanos de-
tectados por la prueba evaluada) y el número total de sanos reales:
De forma análoga, una prueba muy específica tendrá pocos falsos positivos y por eso permitirá
confirmar la presencia de enfermedad.
En las poblaciones de animales acuáticos, incluidos los camarones, es habitual encontrar co-
infecciones por varios patógenos lo que puede afectar a la especificidad del diagnóstico.
A continuación planteamos como ejemplo un experimento diseñado para evaluar una nueva
prueba diagnóstica frente a un determinado patógeno. En primer lugar se infectaron experimental-
mente 100 camarones y tras un periodo de incubación de 7 días se tomaron muestras de todos ellos
resultando 85 positivos y el resto negativos. Adicionalmente se procesaron 200 camarones SPF obte-
niendo 10 resultados positivos y 190 negativos (Tabla 2).
Positivos 85 10
Prueba a evaluar
Negativos 15 190
En este ejemplo la sensibilidad será 85% (85 resultados positivos de 100 camarones enfermos)
y la especificidad será 95% (190 resultados negativos de 200 camarones sanos).
Para terminar este apartado, indicaremos que una estrategia frecuentemente utilizada en la
investigación de las enfermedades, es la combinación de varias pruebas diagnósticas con el objetivo
de incrementar la fiabilidad del diagnóstico final. Se pueden aplicar dos métodos para combinar los
diagnósticos: en serie y en paralelo (Thrusfield, 2005; de Blas et al., 2007).
El diagnóstico en serie tiene como objetivo reducir los falsos positivos con el consiguiente
aumento de la especificidad, lo que permite confirmar la enfermedad (un resultado positivo será una
evidencia muy concluyente de la presencia del patógeno ya que apenas existirán falsos positivos).
En esta estrategia, sólo se consideran positivos aquellos casos que resultaron positivos por ambas
técnicas y como negativos a todos los demás. Normalmente en este tipo de combinación, las pruebas
diagnósticas se aplican de forma secuencial: inicialmente se utiliza la prueba diagnóstica más eco-
316
Capítulo 7 - Vigilancia epidemiológica en Camaronicultura
nómica y/o rápida, y en segundo lugar se aplica la otra prueba diagnóstica (más costosa o laboriosa)
sólo a las muestras positivas. De esta forma, se logra una importante reducción de la carga de trabajo
laboratorial y de los costes económicos. Sin embargo, la sensibilidad se reducirá.
En el diagnóstico en paralelo se busca minimizar los falsos negativos de manera que se incre-
mente la sensibilidad, y en consecuencia se pueda descartar la enfermedad (un resultado negativo
permitirá afirmar con gran seguridad que se trata de un animal sano, ya que el número de falsos
negativos será muy bajo). En este caso, se clasifican como negativas todas las muestras que son ne-
gativas con las dos técnicas diagnósticas, mientras que el resto se consideran positivas. A diferencia
de la combinación en serie, la aplicación secuencial no aporta ninguna ventaja en la combinación
en paralelo, y es preferible aplicarlas de forma simultánea para reducir los tiempos de obtención de
resultados. Dada la urgencia existente en el diagnóstico de un brote de enfermedad, esta estrategia
sería de elección ya que se aumenta la sensibilidad y se obtienen resultados más rápidamente, a pesar
de que la especificidad empeora.
Objetivo
Todos los programas oficiales de sanidad acuícola deben constar de un sistema de detección
precoz de enfermedades que proporcione las evidencias necesarias para la adecuada certificación
de los movimientos de animales y sus productos, la notificación de enfermedades a organismos in-
ternacionales y la verificación del estatus de libre de enfermedades. Además, cualquier programa de
vigilancia epidemiológica debe estar respaldado por un plan de contingencia para saber cómo actuar
en caso de emergencia ante un brote o la detección de un patógeno (Subasinghe et al., 2004).
Con el fin de obtener el estatus de libre de enfermedad, y posteriormente mantenerlo, se debe
implementar un plan de vigilancia adecuado. Por una parte, se incluirán medidas de tipo pasivo ge-
neral para detectar las enfermedades emergentes y exóticas, así como, para monitorear los brotes de
las endémicas. Pero el componente fundamental en estos programas es la inclusión de acciones de
vigilancia activa y dirigida.
Método de muestreo
El objetivo de este tipo de programas de vigilancia epidemiológica es maximizar la posibilidad
de detectar la presencia de un determinado patógeno en los animales de la población en estudio,
y su eficacia dependerá de que se aplique un método de muestreo adecuado y se tome un número
suficiente de animales en las distintas poblaciones estudiadas (especialmente los nuevos lotes intro-
ducidos en la explotación).
Los métodos de muestreo que se deben utilizar serán de tipo no probabilístico, y se caracteri-
zan porque cada individuo de la población tiene una probabilidad desconocida y variable de formar
parte de la muestra, es decir, no hay intervención del azar en el proceso de selección que puede
estar dirigido por el investigador (Cameron, 2002). Este tipo de muestreos son de ejecución simple y
rápida, y no es preciso conocer el censo completo de los individuos de la población. Sin embargo,
las muestras obtenidas no suelen ser representativas ya que están fuertemente sesgadas y no permiten
describir adecuadamente la población estudiada.
Siempre que sea posible, se aplicará un muestreo basado en criterios objetivos relacionados
con características intrínsecas del animal (especie, sexo, edad…) o extrínsecas, tanto ambientales
(temperatura, salinidad, oxígeno disuelto…) como zootécnicas (densidad de animales, intensifica-
317
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
ción, crecimiento…). Además, habrá que tener en cuenta que podemos encontrar dos posibles situa-
ciones en función de la presencia o no de camarones con sintomatología clínica. En consecuencia,
primero deberemos seleccionar animales sospechosos con síntomas y lesiones externas compatibles
con la enfermedad estudiada, y en el caso de que no haya camarones sintomáticos seleccionaremos
los animales en función de la presencia de factores de riesgo asociados con la infección por el pató-
geno (ejemplos: muestrear cuando la temperatura del agua sea inferior a 28ºC para detectar WSSV o
seleccionar camarones de peso inferior a 3 g para la detección del Vibrio parahaemolyticus causante
del EMS/AHPND).
Otra práctica habitual es establecer cuotas de muestreo donde se selecciona un número de-
terminado de individuos perteneciente a unos estratos preestablecidos. Por ejemplo, cuando una
muestra de 150 camarones se selecciona sin tener en cuenta la población de cada estanque y se
toman 30 animales de 5 estanques diferentes. En este caso, se toma el mismo número de animales
en un estanque con 100.000 individuos que en uno con 300.000 individuos, por lo que la muestra
no es homogénea.
Además de los métodos de muestreo basado en criterios objetivos y por cuotas, existen otros
métodos no probabilísticos habitualmente utilizados en camaronicultura que están contraindicados
por distintos motivos. Uno de ellos es el muestreo de conveniencia en el que el investigador selec-
ciona a los individuos más accesibles, esto es lo que ocurre cuando se obtienen todos los camarones
mediante el lanzamiento de una atarraya en un mismo punto del estanque más accesible. Otro méto-
do es el muestreo de voluntarios, donde los individuos investigados deciden voluntariamente formar
parte del estudio. Un ejemplo clásico de este tipo de muestreos ocurre cuando se ofrece alimento a
los animales y se captura a los primeros que se acercan a comer. De esta forma aumentan las posibi-
lidades de seleccionar animales sanos, que es justo el objetivo contrario al deseado.
Planteamos un primer ejemplo en el que se desea determinar, con un 95% de nivel de confian-
za, si un tanque con 10.000 postlarvas está infectado con WSSV. Se establece una prevalencia míni-
ma del 2% (asumimos que el virus está presente en al menos el 2% de los animales de la población,
es decir, d=200). Si sustituimos esos datos en la fórmula, y asumiendo que el diagnóstico es perfecto
(S=1), será necesario tomar una muestra mínima de 148 postlarvas.
318
Capítulo 7 - Vigilancia epidemiológica en Camaronicultura
Fiabilidad diagnóstica
Otro factor importante que rara vez se tiene en cuenta al diseñar el muestreo de los programas
de vigilancia epidemiológica es la fiabilidad diagnóstica, especialmente la falta de sensibilidad. Sirva
como ejemplo la repercusión que tendría sobre el tamaño muestral en el caso anterior, la utilización
de una prueba diagnóstica con una sensibilidad del 90% donde el tamaño de muestra aumentaría a
164 (un incremento del 11%).
Tal y como hemos comentado anteriormente la fiabilidad de la prueba diagnóstica es un
factor determinante, ya que el objetivo es la detección del patógeno. En este caso seleccionaremos
la prueba que nos ofrezca el valor más alto de sensibilidad para minimizar el número de falsos ne-
gativos, y así evitar en lo posible el riesgo sanitario que conlleva no detectar un animal infectado en
la población estudiada.
Hay que tener en cuenta que determinadas prácticas diagnósticas influyen en los resultados
finales obtenidos, por ello, hay que insistir que se debe conocer las características del protocolo
diagnóstico completo (no sólo de la técnica diagnóstica llevada a cabo en el laboratorio) y valorar
determinadas prácticas generalizadas en el diagnóstico, como son la utilización de muestras combi-
nadas (pools).
La utilización de pools se ha convertido en una práctica habitual en el diagnóstico de enfer-
medades de camarones y otras especies acuáticas, e incluso está recomendada por la OIE (2014). Esta
estrategia permite aumentar el número de muestras procesadas para detectar un patógeno, disminu-
yendo notablemente el tiempo de procesado y los costes económicos.
Sin embargo, el principal problema de utilizar muestras diagnósticas constituidas por tejido
procedente de más de un animal, es la aparición del efecto dilución que puede disminuir la sensi-
bilidad de la prueba original cuando se aplica de forma individual. Este efecto puede manifestarse
cuando se trabaja con bajas prevalencias de enfermedad, cargas de patógeno reducidas (por ejemplo,
al tratarse de portadores asintomáticos) o excesivo número de muestras en un mismo pool (Muniesa
et al., 2014).
319
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
En este contexto las técnicas de diagnóstico molecular contribuyen a identificar los patóge-
nos de forma rápida y fiable, incluso cuando hay muy pocas copias del genoma del patógeno en
una muestra. A pesar del excelente nivel umbral de detección, hay que ser consciente de la posible
pérdida de sensibilidad debida al efecto dilución. En la Figura 1 se aprecia este efecto, y cómo para
una prueba diagnóstica con un nivel de detección de 104 organismos/g pueden generarse falsos
negativos al reducirse la concentración de patógenos por debajo de dicho nivel de detección, y en
consecuencia disminuir la sensibilidad (Corsin & de Blas, 2010). En el primer caso el resultado del
pool sería positivo, pero en el segundo caso sería negativo al ser la concentración final inferior a nivel
de detección.
105 0 0 0 0 0 0 0 0 0 = 104
104 0 0 0 0 0 0 0 0 0 = 103
Figura 1. Efecto de la dilución en la sensibilidad de una prueba diagnóstica en relación con el nivel
de detección.
Cálculo de resultados
En el caso de que todas las muestras de una población sean negativas, no se puede afirmar que
la enfermedad está ausente en dicha población. Se deberá calcular la máxima prevalencia aparente
posible a partir del máximo número de positivos (D) que pueden quedar en una población, utilizando
la siguiente fórmula (Thrusfield, 2005):
En esta ecuación n corresponde con el tamaño de la muestra seleccionado (todas ellas presen-
tando resultados negativos), NC es el nivel de confianza y N es el tamaño de la población.
Una vez obtenido el máximo número de positivos, lo dividiremos por el tamaño de la pobla-
ción para conocer la prevalencia máxima posible (Pmax). Como comentaremos en el siguiente aparta-
do se trata de una prevalencia aparente, y a partir de la misma se podría estimar la prevalencia real
conociendo la sensibilidad y especificidad de la prueba diagnóstica:
Por ejemplo, en un determinado estanque se han analizado tan sólo 20 camarones, ya que por
razones económicas no se ha podido realizar más pruebas diagnósticas. En todos los diagnósticos
se han obtenido resultados negativos de forma que al sustituir en la fórmula anterior, encontramos
que con un 95% de confianza la prevalencia máxima posible podría ser todavía de 13,9%, lo cual
es insuficiente para poder afirmar que el estanque está libre de enfermedad (a pesar de que los 20
camarones analizados eran negativos).
320
Capítulo 7 - Vigilancia epidemiológica en Camaronicultura
Objetivo
Una vez que un patógeno es detectado, se requiere establecer un programa de vigilancia es-
pecífico para definir la distribución espacial, la evolución temporal y la magnitud del problema, con
el fin de evaluar la viabilidad de las medidas de control disponibles y, donde se considere oportuno,
demostrar el éxito de los programas de control y erradicación (Subasinghe et al., 2004).
En el caso anterior, la finalidad de la vigilancia epidemiológica era detectar la enfermedad y
los resultados posibles eran sólo dos: presencia o ausencia. Sin embargo, en los sistemas de monito-
reo o seguimiento, el objetivo es describir la situación sanitaria de una población mediante el cálculo
de la probabilidad de que los individuos estén infectados.
Método de muestreo
Cuando se desea conocer la prevalencia de una determinada enfermedad en una población es
fundamental que la muestra sea representativa para que los resultados de la misma sean extrapolables
a toda la población. Esta representatividad implica que la muestra cumpla dos requisitos: homoge-
neidad y aleatoriedad.
Una muestra se considera homogénea con la población cuando las características de los in-
dividuos de la muestra no difieren de las que tiene la población. Es decir, si en nuestra población la
distribución por sexos es 50% machos y 50% hembras, se esperaría encontrar una proporción similar
de machos y hembras en la muestra obtenida. El otro requisito es que los individuos tienen que ser
seleccionados al azar, y por tanto todos los individuos de la población tendrán igual probabilidad de
formar parte de la muestra.
Por lo tanto, para obtener una muestra representativa tendremos que seleccionar un número
suficiente de unidades (dependiendo del objetivo del estudio) con un método de muestreo probabi-
lístico.
Básicamente hay dos métodos probabilísticos: el muestreo simple o aleatorio puro y el mues-
treo sistemático (Martin et al., 1990).
El muestreo simple consiste en la selección de las unidades de una población utilizando un
sistema de loterías (o tablas de número aleatorios) aplicado sobre el listado completo de las unidades
de la población (censo). Este método es difícil de aplicar en grandes poblaciones de animales ya que
supone tener identificados a priori e inequívocamente a todos los individuos (sólo ocurriría en algu-
nos casos con los reproductores), implica elevados costes económicos en la obtención de la muestra
(sobre todo con poblaciones muy dispersas) y no suele representar adecuadamente a los estratos
minoritarios de la población. Sin embargo, en camaronicultura este método sería el de elección para
seleccionar estanques en una explotación cuando la unidad muestral sea el estanque, por ejemplo
cuando se desea conocer la proporción de estanques infectados.
Como alternativa se puede utilizar el muestreo sistemático que se considera un método pro-
babilístico aunque no es propiamente un muestreo aleatorio puro. Se aplica cuando no se dispone
de sistema de identificación individual ni listados completos de la población, pero sin embargo, se
pueden ordenar los individuos (ejemplo, el orden en el que son capturados los camarones) y aplicar
un patrón periódico para seleccionar los individuos de la muestra.
El procedimiento a seguir es muy simple, en primer lugar se ordenan todos los individuos de
la población (N) y se determina el tamaño de muestra necesario (n). A continuación se calcula el
321
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
322
Capítulo 7 - Vigilancia epidemiológica en Camaronicultura
Como se puede deducir de esta fórmula el tamaño máximo de la muestra se obtendrá cuando
trabajemos con una proporción de 0.5 (50%). Además observamos que los tamaños de muestra para
proporciones complementarias (por ejemplo, 0.3 y 0.7) serán los mismos.
De esta forma, para calcular el número de camarones que hay que tomar de un estanque para
conocer la prevalencia de IHHNV (con una precisión de ± 5% y un nivel de confianza del 95%)
primero debemos establecer la prevalencia esperada de la enfermedad. Si ésta es desconocida uti-
lizaremos el valor del 50% (que ofrece el máximo tamaño de muestra) obtendremos un tamaño de
muestra de 385 camarones.
Si en nuestro ejemplo tenemos resultados preliminares que indican que esta prevalencia se
sitúa entre 15 y 28%, tomaremos el valor del intervalo más próximo a 50% (es decir, 28%) de forma
que el tamaño de muestra se reduce a 310.
El problema aparece cuando las prevalencias esperadas son muy bajas o muy altas, ya que ésta
fórmula asume que el intervalo de confianza se basa en una distribución normal, cuando realmente
se debería calcular en función de una distribución binomial. Vallejo et al. (2013) proponen un mé-
todo alternativo de cálculo del tamaño de muestra basado en el método Score de Wilson (1927) que
corrige la subestimación que se produce. Para estimar la prevalencia de la población, asumiendo una
prevalencia esperada del 10%, una precisión del 5% y un nivel de confianza del 95%, el tamaño de
muestra es de 139 individuos con el método tradicional, cuando realmente se deberían seleccionar
como mínimo 189 individuos.
Finalmente hay que indicar que cuando se trabaja con poblaciones pequeñas, puede ser que
el tamaño de muestra calculado sea superior al tamaño de la población, ya que las fórmulas asumen
muestreo con reemplazo, es decir, un mismo individuo puede ser seleccionado más de una vez en un
mismo estudio. Con el fin de ajustar el tamaño de muestra (na) en un muestreo sin reemplazo (que es
el que habitualmente se utiliza ya que ningún individuo es seleccionado más de una vez) se realiza
un ajuste siempre que la fracción de muestreo (n/N) sea superior al 5% (Daniel, 2000):
Cálculo de resultados
La presencia de enfermedades en una población pueden estimarse transversalmente (gene-
ralmente referida a un momento concreto del tiempo) o longitudinalmente (durante un periodo de
tiempo definido).
Las medidas transversales de la enfermedad que indican su importancia en una población son
la morbilidad, la mortalidad y la letalidad, y nos proporcionan una valiosa información de carácter
pronóstico (de Blas et al., 2007).
La morbilidad (también denominada prevalencia puntual) es la probabilidad de que los indi-
viduos de una población sean considerados un caso (estar enfermos o infectados) en un momento o
periodo de tiempo determinado. Se calcula dividiendo el número de casos por el número de indivi-
duos en riesgo de convertirse en caso en ese momento o periodo de tiempo:
323
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
La letalidad suele ser un parámetro constante para cada enfermedad, pudiéndose detectar
diferencias entre las letalidades específicas, es decir, según características intrínsecas (edad, sexo…)
o extrínsecas al individuo (estación del año, patogenicidad de la cepa...). Obviamente las enfermeda-
des con letalidad alta tienen un pronóstico peor.
Pongamos como ejemplo, un estanque con 20.000 camarones, donde a lo largo de una sema-
na se han detectado 2.000 enfermos, de los cuales han muerto 500. En este caso estamos ante una
enfermedad que cursa con una morbilidad semanal del 10% (= 2.000/20.000) una letalidad del 25%
semanal (=500/2.000) y una mortalidad semanal del 2,5% (=500/20.000).
Existe una relación entre estos tres parámetros, de forma que:
324
Capítulo 7 - Vigilancia epidemiológica en Camaronicultura
que determinará cuantos animales inicialmente sanos han adquirido la enfermedad (nuevos casos).
En sanidad acuícola, casi nunca se trabaja a nivel individual con incidencias, aunque su utilización
podría ser muy interesante para estudiar la aparición de brotes considerando la piscina camaronera
como unidad de estudio.
En este punto hay que hacer una consideración importante, como regla general los datos ob-
tenidos a partir de estudios dirigidos a la detección de enfermedad (diagnosticar al menos un animal
positivo) no pueden utilizarse para estimar la proporción de enfermedad (conocer el porcentaje de
animales enfermos), ya que el tamaño de la muestra suele ser insuficiente y se utilizan métodos de
muestreo no probabilísticos. Sin embargo, los estudios para conocer la prevalencia son válidos para
detectar la enfermedad, aunque son menos eficientes.
Otro aspecto importante a tener en cuenta es que las pruebas diagnósticas utilizadas son im-
perfectas. De forma que estamos calculando una prevalencia aparente, y lo que queríamos saber es
la prevalencia real (Thrusfield, 2005).
La prevalencia aparente, es el porcentaje de resultados positivos, o dicho de otra forma, la
probabilidad de ser diagnosticado positivo. En ocasiones se le denomina prevalencia estimada y se
calcula dividiendo número total de individuos positivos por el número total de individuos.
325
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Sin embargo, esta fórmula está basada en la distribución normal y tiende a sobrestimar el ta-
maño de muestra cuando la proporción esperada está próxima al 50% (0,5) y a subestimarlo cuando
los valores están próximos al 0 y al 100%. Por eso, es más adecuado calcular los intervalos de con-
fianza asumiendo una distribución binomial mediante el método Score de Wilson (1927):
326
Capítulo 7 - Vigilancia epidemiológica en Camaronicultura
permite estimar la prevalencia individual en la población, siempre y cuando se hayan utilizado pools
de igual tamaño (Kline et al., 1989).
En un estudio donde se han tomado 30 pools de 5 camarones (150 animales en total) para
hacer diagnóstico de WSSV por PCR, 4 pools han resultado positivos a WSSV, es decir, el 13,3% de
los pools son positivos. Al sustituir en la fórmula anterior, tendríamos que la prevalencia individual
sería 2,82%, es decir, estimamos que en la población estarán infectados casi el 3% de los individuos.
7.5. Conclusión
El diseño de planes de vigilancia epidemiológica a nivel regional puede llegar a ser una activi-
dad muy compleja debido a la multitud de factores que se deben considerar: estructura de la pobla-
ción, disponibilidad de datos censales de calidad, errores y sesgos en el muestreo y desconocimiento
de la fiabilidad diagnóstica.
Además, la información obtenida debe procesarse con las herramientas estadísticas y epide-
miológicas adecuadas a cada situación para conocer de forma fidedigna el estatus sanitario de las
poblaciones estudiadas y poder realizar una correcta toma de decisiones.
327
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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328
Capítulo 8
330
CAPÍTULO 8 - Buenas prácticas y bioseguridad para el cultivo del camarón blanco Penaeus (Litopenaeus) vannamei
CAPÍTULO 8
Introducción
La pesca y la acuicultura realizan contribuciones importantes al bienestar y la prosperidad de
los países que realizan estas actividades. En los últimos 50 años, el suministro de productos pesqueros
destinados al consumo humano ha superado el crecimiento de la población mundial; actualmente, el
pescado constituye una fuente esencial de alimentos nutritivos y proteínas animales para gran parte
de la población, además de proporcionar medios de vida e ingresos, tanto directa como indirecta-
mente.
La producción acuícola mundial ha seguido creciendo en el nuevo Milenio, aunque más
lentamente que en los decenios de 1980 y 1990. En el transcurso de medio siglo aproximadamente,
la acuicultura ha pasado de ser casi insignificante a equipararse totalmente a la producción de la
pesca de captura en cuanto a la alimentación de la población en el mundo. Este sector también ha
evolucionado respecto a la innovación tecnológica y la adaptación para satisfacer las necesidades
cambiantes (FAO, 2012).
El cultivo de camarón es el rubro de la acuicultura con más rápido crecimiento en Asia y La-
tinoamérica y recientemente en África. El 88% de los camarones (penaeidos) proviene de Asia y los
cinco mayores productores (China, Tailandia, Vietnam, Indonesia y la India) suministran el 81%. En
Centroamérica el cultivo del camarón marino corresponde a 12.8%, siendo con tilapia los de mayor
desarrollo en el sector acuícola. La captura de camarón fue estratégica para Centroamérica hasta
el 2000, pero cada año es menor debido a sobreexplotación de la pesquería, pese a las medidas
de ordenación implantadas. Es así que la producción se redujo de 15,017 TM en 2000 (3.8% de la
producción regional) a 8,775 TM en el 2007 (2% del total Regional), mientras que el cultivo de este
mismo recurso aumentó de 25,380 TM (5.73% de la producción) a 72,774 TM (16.4% del acumulado
regional) durante el mismo período; sin embargo, la producción disminuyó de 2007 al 2010 (71,188
TM) de 11.18% a un 10.93% (Tabla 1), por problemas de enfermedad, que se iniciaron en Asia desde
2009 (FAO, 2014).
331
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Año Belice * Costa Rica El Salvador Guatemala Honduras Nicaragua Panamá Totales
Gran Total 65,883 46,096 3,570 95,854 258,475 112,319 68,672 ---
FUENTE: FAO, 2014; * Departamento de Pesca de Belice, 2013 (entrevista personal con Claudia Beltrán-Consultora de FAO)
Las granjas de camarón deben cumplir con las regulaciones nacionales e internacionales res-
pecto al tema ambiental, sanitario, de inocuidad, social, laboral y de tenencia de tierras. Las Buenas
Prácticas no son procedimientos cuantitativos ni estáticos, no pueden ser codificados como una re-
gulación permanente y pretenden guiar la actividad camaronera para maximizar su eficiencia, garan-
tizar sostenibilidad y minimizar impactos ambientales y sociales, considerando siempre la inocuidad
del producto final para el consumo humano.
Aspectos sociales
El enfoque social de las empresas camaroneras, debe estar dirigido a desarrollar y operar gran-
jas en una forma responsable, que beneficie a la misma empresa, a las comunidades locales y al país,
contribuyendo de manera efectiva con el desarrollo rural y, particularmente, al alivio de la pobreza
en las áreas costeras, sin comprometer el ambiente.
Las granjas camaroneras están localizadas cerca de comunidades costeras por lo que no deben
negar el acceso a miembros de estas comunidades que se han dedicado por año a la extracción de
algunos recursos (moluscos, pesca artesanal, madera) y deben colaborar con las autoridades compe-
tentes, las cuales tienen la responsabilidad de regular el uso de los recursos hidrobiológicos y costeros
de estas áreas. Todo trabajador de la granja camaronera debe recibir como mínimo, el salario, seguros
laborales y médicos establecidos por ley. Deben recibir capacitación permanente y deben contar con
un programa de asistencia médica ocupacional, que incluya visita de médicos, odontólogos y tra-
bajadores sociales, dando la oportunidad al personal de ser atendido al menos una vez por año. No
deben existir prácticas discriminatorias, políticas o de exclusión para contratar personal, ni se deben
contratar menores de edad.
332
CAPÍTULO 8 - Buenas prácticas y bioseguridad para el cultivo del camarón blanco Penaeus (Litopenaeus) vannamei
Las granjas camaroneras deben brindar a sus trabajadores instalaciones básicas dignas y de-
centes, bien ventiladas y con buenas instalaciones de duchas, baños y servicios sanitarios (letrinas en
campo), así como poder brindarles alimentos balanceados y nutritivos, fuentes de agua potable, sis-
temas de comunicación a través de telefonía convencional o de radioteléfonos, transporte gratuito y
seguro desde y hasta los lugares de residencia. En cuanto a la Responsabilidad Social, las granjas de-
ben proyectar actividades dirigidas hacia la comunidad, involucrando a sus trabajadores en la identi-
ficación de problemas de índole social, ambiental, salud, educación, sanidad y comunicación, entre
otros. También, convertirlos en actores de la búsqueda de soluciones. La empresa debe involucrarse
en actividades sociales que desarrollan las comunidades y aportan al bienestar de sus empleados.
Aspectos ambientales
La camaronicultura sostenible debe estar enfocada hacia el desarrollo de sistemas de cultivo
en forma integrada, ordenada e incluyente, articulando las capacidades económicas, ambientales
y sociales con la tecnología, el conocimiento, los esfuerzos institucionales y el marco jurídico nor-
mativo. Las granjas tienen la responsabilidad en la implementación de la gestión ambiental definida
en el Estudio de Impacto Ambiental, desde la fase de construcción y durante su establecimiento y
operación. El sitio seleccionado para la ubicación de la granja, debe estar en una zona donde la
operación de la misma no cree conflictos ambientales ni sociales, de acuerdo con la planificación y
el marco legal y haciendo uso eficiente de los recursos agua y suelo. Se deben conservar la biodiver-
sidad, los hábitats ecológicamente sensibles y las funciones del ecosistema, así como reconocer otros
usos posibles del suelo y qué otras personas y especies dependen de estos mismos ecosistemas. Entre
los factores que se deben considerar a la hora de seleccionar un terreno adecuado para el cultivo de
camarón, están los siguientes: eficiencia costo-beneficio y la salud ambiental, valor del sitio donde
se va operar una granja de camarón en relación con el valor intrínseco previo (costo oportunidad),
efectos en la economía local y regional, cambios en el valor de otros sitios dentro del mismo ecosis-
tema como resultado del cultivo.
La calidad del agua es esencial para cubrir los requerimientos físico-químicos y biológicos de
la especie en cultivo y la selección del sitio debe contemplar los planes de desarrollo de la zona en
cuanto a crecimiento agrícola, industrial o turístico, entre otros. Mientras más lejos estén las granjas
de asentamientos humanos, más fácil será controlar la contaminación de patógenos que afecten la
inocuidad del producto final. La industria camaronera, gracias al avance de la tecnología, ha amplia-
do la posibilidad de utilizar no sólo las áreas de albinas, sino también áreas arenosas y tierras dulces
para la localización de las granjas. Ante estas posibilidades del uso de tierra, se deben tener en cuenta
los impactos ambientales, como consecuencia de la construcción y operación de las granjas.
El diseño debe incorporar elementos que protejan las estructuras de la granja de las inunda-
ciones y que, a la vez, eviten obstruir las corrientes naturales de agua que mantienen los hábitats
circunvecinos. Se recomienda construir estanques en áreas con mínima cobertura vegetal como son
las albinas (Fig. 8.1.1), pues los costos de construcción se reducen y la probabilidad de que el sitio
sea un área ambientalmente sensitiva es menor. Para el diseño de estructuras y de canales de agua se
debe tomar en cuenta las variaciones estacionales del clima e hidrología; en base a los estudios di-
mensionar las diferentes estructuras hidráulicas internas y externas de la granja. Los suelos potencial-
mente ácidos y con sulfatos deben ser excluidos en la selección para la construcción de camaroneras,
al igual que aquellos con contenido de materia orgánica. Sin embargo, los suelos moderadamente
ácidos pueden ser tratados para mejorar su pH, mediante el proceso de encalado con Carbonato de
calcio.
333
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
La textura del suelo deberá ser de composición apropiada y se debe encontrar a una pro-
fundidad de por lo menos 50 cm por debajo del fondo del estanque. Debe tener un alto contenido
de arcilla y limo, para reducir la pérdida de agua por infiltración y facilitar la compactación de los
muros, reduciendo la erosión. Los suelos arenosos pueden seleccionarse siempre y cuando se utilice
tecnología que impida la infiltración del agua (“liners”) (Fig. 8.1.2), considerando aspectos técnicos
apropiados. Se deben construir granjas en áreas que no han sido expuestas previamente a activida-
des agroindustriales, así como tampoco a desarrollos urbanos o que estén sujetas a la influencia de
drenajes agrícolas.
Las granjas de camarón cultivado no deben estar construidas dentro de los bosques de man-
glar, humedales o cualquier otro ecosistema frágil. Un buen conocimiento de los principios de di-
seño, construcción y tecnologías de cultivo, pueden ayudar con tres objetivos: protección de los
recursos naturales, eficiencia operativa y reducción de los costos de construcción. En cuanto a las
estructuras de bombeo de la granja deben ser compactas, tener seguridad en su diseño para soportar
y operar el equipo de bombeo y, facilitar la logística operativa y de mantenimiento; también deben ser
diseñadas bajo un enfoque ambiental, que evite el derrame de hidrocarburos y otros contaminante a
las aguas estuarinas.
La selección del tipo de bombas a utilizar, debe tomar en cuenta aspectos de eficiencia, costo,
durabilidad (vida útil) y riesgo ambiental asociado con su uso. Las bombas lubricadas por aceite, son
un riesgo potencial de contaminación de las aguas estuarinas, por lo que es preferible utilizar las que
son lubricadas por agua. En el caso de la selección de motores, debe considerarse la eficiencia en el
uso y tipo de energía requerida. En la planeación de la construcción de las granjas, los canales no
deberán crear barreras a las corrientes naturales de agua, ya que alterar los cursos hídricos naturales
puede impactar áreas sensibles. Por esta razón, los estudios topográficos del área y el estudio de su
hidrología antes de la construcción, permitirán detectar en dónde están los cursos naturales de agua
en riesgo.
Las vías de acceso deberán tener instaladas estructuras de tamaño adecuado para prevenir
el estancamiento de agua dulce y la alteración del flujo de agua salobre. A veces se hace necesario
contar con caminos altos en áreas donde se construyen estanques camaroneros. Un camino puede
actuar como una represa y causar inundaciones, a menos que se asegure su drenado mediante el uso
de estructuras del tamaño adecuado. En casos extremos, el camino corre el riesgo de ser barrido por
las aguas.
Figura 8.1.1. Proceso de construcción de estanque, en Figura 8.1.2. Estanques cubiertos con liners para evitar
zona de albina con alto contenido de arcilla y limo la filtración por efecto de la composición arenosa del
para la buena compactación de los muros. Foto corte- suelo. Foto cortesía del Ing. C. Lara.
sía del Dr. J. Cuéllar-Anjel.
334
CAPÍTULO 8 - Buenas prácticas y bioseguridad para el cultivo del camarón blanco Penaeus (Litopenaeus) vannamei
El diseño y construcción de los canales de abastecimiento de agua, deben ser con base en la
estimación de la demanda máxima diaria de agua de la granja, incluyendo las pérdidas por evapora-
ción, filtración y fugas. Debe ser estimada la carga de sedimento del agua entrante y las dimensiones
requeridas para un área de sedimentación o trampa de sedimento. Los canales de drenaje deben
tener en su diseño una sección hidráulica para el eficiente manejo de efluentes de la granja y aportes
hídricos naturales. Hay que contemplar la posibilidad de hacer estructuras de control para el drenaje
y aislamiento de la influencia de las mareas como una opción de bioseguridad, que podría reducir
los costos de operación. Todos los actores en las granjas deben asimilar y poner en práctica la ges-
tión ambiental y debe haber un enfoque hacia disminuir desechos en el proceso de construcción y
durante la producción.
El alimento balanceado requiere un adecuado manejo durante su almacenaje y distribución
en campo, debiendo estar protegido de la humedad, luz solar directa y del ataque de plagas.
La práctica de reducir, reutilizar y reciclar, debe ser una regla en la granja en función del am-
biente y de los costos. La granja debe contar con un sistema eficiente de control de entradas y salidas
de personal y equipo rodante con un sistema de desinfección para éstos, diseñado para que no pueda
ser obviado. Igualmente, la granja debe contemplar el diseño y construcción de infraestructura y se-
ñalización para la implementación de medidas de seguridad, higiene y bioseguridad.
335
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
336
CAPÍTULO 8 - Buenas prácticas y bioseguridad para el cultivo del camarón blanco Penaeus (Litopenaeus) vannamei
de camarón, el encalado es altamente efectivo para neutralizar los ácidos del suelo y se constituye
en una actividad de manejo útil y económicamente viable (Fig. 8.1.3 y 8.1.4). Es recomendable el
roturado (arado o volteado) del fondo de los estanques cada uno o dos años, según las condiciones
propias de cada estanque o de la empresa. Con esto, se logra dar mejores condiciones al suelo para
garantizar un ambiente apropiado para el engorde del camarón (aireación, mineralización, desinfec-
ción y oxidación).
Figura 8.1.3. Encalado manual de un estanque en forma Figura 8.1.4. Encalado mecánico de un estanque en for-
uniforme. Fotos cortesía del Ing. C. Lara. ma uniforme en menos tiempo y con mayor seguridad.
Foto cortesía del Ing. C. Lara.
Para lograr un resultado eficiente de la operación de roturación del suelo, este debe tener una
adecuada humedad ya que en suelos extremadamente húmedos o excesivamente secos, no se logra
un rendimiento adecuado del equipo, ni del proceso de roturación como tal. Se debe aprovechar la
faena de roturación de un estanque, para incorporar cal u otros insumos destinados al mejoramiento
de las características del suelo. Esta condición del suelo favorece la incorporación y acción de los
insumos que son aplicados durante la preparación; así también, ofrecerá un fondo que facilitará al-
gunas de las actividades fisiológicas del camarón (ej.: muda).
El proceso de llenado del estanque debe ser lento y con supervisión estricta, para garantizar
un filtrado puntual (limpieza de mallas y bolsos). Los filtros no deben ser removidos de las estructuras
de entrada y salida durante los primeros 30 días de cultivo, con el fin de evitar la fuga accidental de
las postlarvas. Se debe establecer un plan de manejo de filtros y bolsos, que contemple la reducción
de entrada de organismos no deseables al sistema de producción, los cuales afectan los rendimientos
por ser fuentes de depredación, competición y contaminación con patógenos. El buen manejo de los
filtros, evitará la necesidad de períodos cortos de remplazo por deterioro de los mismos, lo cual se
traduce en ahorro de materiales (principalmente madera) y mano de obra, así como reducción del
riesgo de ingreso de organismos silvestres al estanque o pérdida de camarones por fuga.
Durante el llenado se debe hacer un análisis de las condiciones físico-químicas del agua del
estanque, con base en lo cual se establece un programa de fertilización. Este permitirá promover
el desarrollo de fitoplancton (principalmente diatomeas) y por ende zooplancton, lo cual servirá
como alimento inicial a las postlarvas una vez sean sembradas. Con la fertilización del agua de los
estanques, se debe buscar un equilibrio iónico y bioquímico que favorezca el crecimiento de la pro-
ductividad natural (fitoplancton, fitobentos, zooplancton y zoobentos) y del camarón. Se recomienda
mantener una relación de N: P de 8: 1 (ej.: N= 0.56 ppm y P= 0.07 ppm); la relación de Ca:Mg:K que
sea de 1:3:1 (ej.: Ca= 400 ppm, Mg= 1,200 ppm y K= 400 ppm); el Sílice se debe mantener en 1.0
ppm y la alcalinidad en >80.0 mg/L.
337
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Antes de proceder con la siembra de las postlarvas, se debe realizar un análisis microbiológico
del agua del estanque, para determinar si es necesario aplicar melaza, probióticos u otros insumos
dirigidos a promover o corregir el crecimiento de microorganismos relacionados con el desempeño
de las postlarvas del camarón. De esta manera, promover un equilibrio microbiano en el estanque.
Tabla 3: Parámetros físico-químicos y biológicos del agua del estanque para la siembra
(Adaptado de Cuéllar-Anjel et al., 2010).
Bacterias
pH O.D. UFC/mL
Parámetro Alcalinidad Amonio Diatomeas
(a.m.) (a.m.)
TCBS TSA Lumi
La producción masiva de postlarvas de alta calidad y viabilidad, es la clave para una acuicul-
tura moderna de camarón. Se debe mantener un registro de la fuente y compra de postlarvas, cuántas
y dónde fueron sembradas. Es decir, mantener un registro de trazabilidad. Antes de sembrar, las post-
larvas deben ser examinadas para detectar signos de enfermedad, evaluar su calidad y establecer su
fortaleza durante pruebas de estrés.
Las granjas deben adquirir postlarvas solamente de establecimientos que tengan vigilancia
sanitaria por parte de la Autoridad Competente. Cuando éstas sean importadas, deben tener una
certificación sanitaria de su país de origen, que incluya por lo menos los principales agentes pató-
genos tales como: Virus del Síndrome de la Mancha Blanca (WSSV), Virus de la Necrosis Infecciosa
Hipodérmica y Hematopoyética (IHHNV), Virus del Síndrome de la Cabeza Amarilla (YHV), Virus del
Síndrome de Taura (TSV), Nodavirus del Penaeus vannamei (PvNV), Baculovirus penaei (BP) y Virus
de la Mionecrosis Infecciosa (IMNV) y, bacterias como el Hepatobacter penaei causante de la Hepa-
topancreatitis Necrotizante (NHP), el Vibrio penaeicida y la cepa de V. parahaemolyticus causante de
la enfermedad de la Necrosis Hepatopancreática Aguda (AHPND).
Las postlarvas de buena calidad, deben estar libres de organismos infecciosos (WSSV, IHHNV,
YHV, TSV, PvNV, BP, IMNV , NHP y AHPND) y presentar un buen estado de salud general. Además,
deben presentar un buen desarrollo branquial y tener un desarrollo morfológico acorde con su edad
(estadio vs. longitud en mm). Es necesario conocer la historia clínica de cada lote de postlarvas a
338
CAPÍTULO 8 - Buenas prácticas y bioseguridad para el cultivo del camarón blanco Penaeus (Litopenaeus) vannamei
comprar. Para esto se sugiere buscar el apoyo del técnico a cargo del cultivo larvario. El comprador
debe estar en contacto con los proveedores al menos 7 días antes de que se efectúe la compra de
postlarvas.
Para asegurar la calidad de las postlarvas, debe realizarse una evaluación microscópica y
molecular, así como una revisión macroscópica para determinar tamaño, presencia de deformida-
des, homogeneidad de tallas, actividad, contenido y movimiento intestinal, presencia de epibiontes,
opacidad muscular, desarrollo branquial, cambios de color y melanización de apéndices. (Fig.8.1.5
y 8.1.6).
De igual manera, se debe hacer una prueba de estrés y se recomienda observar las postlarvas
en la oscuridad, con el fin de detectar posible bioluminiscencia. Las variables más importantes a
monitorear durante el proceso de aclimatación de postlarvas de camarón, son salinidad, temperatura
y oxígeno disuelto. Durante la aclimatación se debe evitar el estrés por cambios ambientales rápidos.
La importación de nauplios y postlarvas deberá hacerse de acuerdo con la regulación nacio-
nal. En ausencia de una regulación apropiada, se deberán seguir los lineamientos internacionales de
la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) (Código Sanitario para los Animales Acuáticos).
Se debe evitar la introducción de enfermedades a través de animales vivos, muertos congelados o de
subproductos.
Las postlarvas de camarón constituyen uno de los insumos más costosos en la producción de
camarón de cultivo. La manipulación y manejo de las postlarvas incluyendo su cosecha, empaque en
el laboratorio, transporte, recepción en granja, aclimatación y siembra en los estanques, son suma-
mente críticos para su supervivencia. Durante el proceso de aclimatación, se debe reducir el estrés
para evitar la mortalidad de las postlarvas mientras se adaptan gradualmente a las nuevas condiciones
de calidad de agua de los estanques. Una aclimatación exitosa contribuye a asegurar el éxito econó-
mico del ciclo de cultivo.
Antes del inicio del proceso de siembra se debe garantizar que el estanque reúna una serie
de condiciones que favorezcan un buen desarrollo del cultivo. Éstas se enmarcan en un nivel hídrico
adecuado del estanque, buena concentración de fitoplancton (principalmente diatomeas) y paráme-
tros físico-químicos normales; esto no excluye monitorear dichos parámetros durante el proceso de
aclimatación y en el momento de la siembra. Es importante que en la medida de lo posible, la granja
tenga su propio historial bacteriológico para cada estanque (principalmente especies de los géneros
Vibrio, Pseudomonas, Aeromonas, Plesiomonas, Flavobacterium y Streptococcus), con lo cual tenga
establecido el rango de bacterias (unidades formadoras de colonia - UFC) frecuentes en cada estación
Figura 8.1.5. inspección macroscópica del estado de las Figura 8.1.6. inspección microscópica y registro de ha-
larvas para determinar su calidad y condiciones sanita- llazgos a partir de muestras de camarones enfermos. Foto
rias. Foto cortesía del Ing. H. Pérez. cortesía del Ing. C. Lara.
339
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
del año (seca y lluviosa). Con base en esto, se debe verificar la carga bacteriana de un estanque antes
de su siembra, para asegurar una buena calidad microbiológica del agua que no ponga en riesgo la
viabilidad de las postlarvas.
Idealmente, la siembra se debe realizar durante el período más fresco del día (6 a.m. – 8 a.m.,
o durante la noche), cuando se encuentran las menores temperaturas y, por consiguiente, se reduce
el estrés en las postlarvas y se podría hacer menor el tiempo de aclimatación. Se recomienda liberar
las postlarvas en los estanques tan pronto como sea posible. La determinación de una densidad de
siembra adecuada depende de la talla y edad proyectada para cosechar, calidad del agua, diseño del
estanque, tasas de recambio hídrico, posibilidad de aireación mecánica, experiencia del personal
y capacidad técnica general de la granja. Cada empresa camaronera debe establecer la biomasa
sostenible para cada estanque, de acuerdo con las condiciones propias, individuales y el historial de
producción. Bajo estas premisas y considerando el punto de equilibrio económico de la granja y las
condiciones de mercado, se puede definir la densidad de siembra óptima para el sistema de produc-
ción, sin afectar los beneficios económicos proyectados.
Definidas las densidades a utilizar de acuerdo con el sistema de cultivo establecido y finali-
zado el proceso de aclimatación, las postlarvas deben ser liberadas procurando hacerlo del lado del
estanque que está en favor del viento; de esta manera, las olas ayudarán a dispersar los animales des-
pués de la siembra evitando su agrupación en la orilla. Se recomienda monitorear la supervivencia
de las postlarvas sembradas a las 24 y 48 horas.
La implementación de infraestructuras de acondicionamiento de postlarvas en las granjas, es
una actividad importante para lograr un manejo adecuado de dichos camarones antes de su siembra
en los estanques. En estas estructuras, las postlarvas pueden ser manejadas y acondicionadas por un
período de tiempo prudencial, de acuerdo con los protocolos de la granja, mediante una buena nu-
trición, hasta alcanzar un tamaño apropiado para su buen desempeño en los estanques de engorde.
Este sistema también ayuda a reducir los ciclos de producción y al control de enfermedades.
340
CAPÍTULO 8 - Buenas prácticas y bioseguridad para el cultivo del camarón blanco Penaeus (Litopenaeus) vannamei
do esto su comparación con los valores suministrados por el fabricante. De cada lote de alimento
recibido en la granja, se debe retener en anaquel y refrigerar una muestra de 1 kg hasta que se haya
utilizado todo el lote, para ser usado en caso de reclamos o de análisis de laboratorio requeridos para
pruebas especiales de calidad.
Se recomienda que las granjas implementen un programa de depósitos cerca de los estanques,
con capacidad para abastecer la ración por un máximo de tres días. De esta manera, se libera la mano
de obra y la flota de vehículos, disminuyendo el deterioro de los caminos. Se debe considerar durante
los cálculos de las raciones diarias de alimento, que los camarones en estadios de pre-muda, muda
y post-muda, disminuyen notablemente el consumo y, por consiguiente, la dosis diaria debe estar
sujeta a la población que se encuentra en inter-muda, para evitar el desperdicio de parte de la ración.
En el cultivo semi-intensivo, las tasas de alimentación son usualmente bajas y la fertilización
por esta vía no debería ser un problema. La sobrealimentación, pueden llevar a niveles abundantes de
fitoplancton, zooplancton y microorganismos no benéficos y a una alta demanda de oxígeno disuelto
durante la noche.
El uso de tablas de alimentación ha sido uno de los métodos más utilizados para el control
del suministro de alimento, basado en muestreos de crecimiento y de supervivencia para determinar
la biomasa del estanque. El uso de bandejas de alimentación es una buena herramienta que sirve de
apoyo para estimar cuánto están consumiendo los camarones diariamente. Para ello, su “lectura” e
interpretación de los resultados, debe ser hecha con responsabilidad y conocimiento por personal
bien entrenado.
La alimentación debe realizarse cuando la temperatura no sea baja (mín. 26°C) y las con-
centraciones de oxígeno disuelto en el agua del estanque sean adecuadas (mín. 4.5 mg/L). Si las
concentraciones de oxígeno disuelto son bajas durante un tiempo prolongado (días o semanas), las
raciones diarias de alimentación son probablemente excesivas para la capacidad asimilativa de los
camarones en dicho estanque, por lo que es recomendable reducirlas o suspenderlas hasta normali-
zar la situación.
Como una medida prioritaria de las empresas cultivadoras de camarón, todo el personal invo-
lucrado en el proceso de clasificación, pesaje, distribución y suministro del alimento, debe ser super-
visado por técnicos responsables para asegurar que las raciones diarias sean debidamente calculadas
y aplicadas. De igual manera, el número de personas destinadas a estas labores, debe ser suficiente
para cumplir eficazmente con las jornadas diarias de alimentación.
341
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
342
CAPÍTULO 8 - Buenas prácticas y bioseguridad para el cultivo del camarón blanco Penaeus (Litopenaeus) vannamei
rario de encendido y apagado de aireadores debe estar sujeto a los requerimientos metabólicos de las
cepas bacterianas utilizadas, para mantener las condiciones óptimas dentro del estanque, aunque los
sistemas heterotróficos requieren generalmente aireación continua.
Es recomendable minimizar el recambio de agua sin afectar la producción y manteniendo
niveles aceptables de los parámetros físico-químicos que se manejan durante el cultivo. Se reco-
mienda hacer recambios de agua en un estanque, cuando las variables físico-químicas del agua se
encuentren por debajo de los niveles mínimos aceptables. La reducción en el volumen del recambio
en un estanque, ayudará a reducir costos en combustible, mantenimiento de los equipos de bombeo
y cantidad de nutrientes en los efluentes.
Durante el verano, se debe reponer el agua perdida por evaporación, para evitar que suba
demasiado la salinidad y que descienda drásticamente el nivel de operación de los estanques. Si
algún estanque de la granja presenta problemas de enfermedades, éste deberá ser manejado con cero
recambios agregando agua sólo para reponer niveles perdidos por evaporación.
La fertilización y manejo de la productividad debe ser utilizada bajo principios técnicos pro-
pios de cada producto y con conocimiento del tipo de nutriente y dosis que se requiere para cada
caso. Es importante que el tipo y dosis del fertilizante a usar en los estanques, este basado en un aná-
lisis de los niveles de nutrientes y que se busque mantener las relaciones requeridas entre ellos (ej.:
N:P:Si, Ca:Mg:K, C:N). Lo anterior, para obtener buena producción primaria, un apropiado equilibrio
microbiano, un balance iónico aceptable y un buen crecimiento de los camarones. La fertilización
contiene nutrientes que promueven el crecimiento del fitoplancton, y la misma debe estar dirigida
a promover el crecimiento de las algas de mayor beneficio para el cultivo, como son las diatomeas
(Fig. 8.1.8).
Cuando las poblaciones de fitoplancton son excesivas, la respiración del mismo causará baja
concentración de OD durante la noche. También, por complejas razones limnológicas, las pobla-
ciones densas de algas pueden morir rápidamente (“crash” de algas), causando un alto consumo de
oxígeno por su rápida descomposición. Este proceso reduce el oxígeno para los camarones y puede
causar mortalidades masivas por hipoxia prolongada. Ciertas especies de algas verde-azules pueden
ser tóxicas para el camarón y producir compuestos que dan olores y sabores no característicos o des-
agradables al producto, haciéndolo inaceptable para los consumidores (Fig. 8.1.9).
343
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
344
CAPÍTULO 8 - Buenas prácticas y bioseguridad para el cultivo del camarón blanco Penaeus (Litopenaeus) vannamei
naje; para lo cual es conveniente ubicar redes o filtros en las cajas de cosecha y utilizar bolsas de cap-
tura y conos de pesaje con redes nuevas o en buen estado. Hay que estar pendientes de su revisión
y reparación oportuna durante y después de cada cosecha. De la misma manera, se debe contar con
reemplazos de estos implementos de cosecha, para la sustitución inmediata en caso de ser necesario.
Uno de los mayores impactos ambientales potenciales durante la operación de una granja de cama-
rón, es la descarga del agua de un estanque con alta carga de nutrientes que podría producir eutroficación
del cuerpo de agua receptor. Algunas de las técnicas de manejo más recientes incluyen el reciclaje o recircu-
lación de agua a través de un sistema de estanques, el cual permite que el agua se depure y pueda volver a
ser usada; esta práctica de bioseguridad de la granja, permite reducir efluentes de los estanques, disminuir
la entrada de agua proveniente del estero (riesgo de introducción de predadores, camarón silvestre y po-
sibles enfermedades), bajar el costo de combustibles y evita la pérdida de la productividad natural de los
estanques. Se debe agregar agua sólo para reponer el nivel perdido por evaporación, infiltración o fugas.
Como un gesto de responsabilidad de los productores durante episodios patológicos, se debe
evitar la descarga de efluentes en el momento de su identificación, así como inmediatamente después
de una aplicación de insumos destinados al control de dicho problema sanitario. De igual manera,
no se debe hacer recambio justo cuando se hacen aplicaciones de productos tendientes a mejorar
la calidad del agua de los estanques. Con la implementación de un manejo técnico basado en un
protocolo definido, se tienen muchas posibilidades de mantener cerrados los estanques por mayor
tiempo durante el ciclo de producción y disminuir considerablemente los recambios de agua con la
consecuente disminución del volumen de efluentes. Así mismo, disminuye el consumo de hidrocar-
buros para el bombeo de los recambios y se reducen los impactos al ambiente.
345
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Hemolinfa Hepatopáncreas
Tipos de UFC (UFC/mL) (UFC/g)
En caso de cualquier infección causada por virus, bacterias, hongos, parásitos u otros pató-
genos, se debe activar el plan de manejo sanitario de la granja aplicado para cada enfermedad en
particular, principalmente la fijación de muestras para análisis de laboratorio, con lo cual se podrá
realizar histopatología, prueba de la Reacción en Cadena de Polimerasa (PCR) y análisis microbio-
lógicos. Esto ayudará a identificar las condiciones que facilitaron el surgimiento del brote. Sumado
a lo anterior, se deben tomar medidas inmediatas de bioseguridad tales como: a) notificación a la
autoridad competente, b) informar adecuadamente a las empresas vecinas, c) controlar la entrada y
salida de personal y de camarones a la empresa y d) minimizar el recambio hídrico y la consecuente
descarga de efluentes al ambiente. Las granjas de camarón deben contar con protocolos para el ma-
nejo de enfermedades, incluyendo planes de emergencia para enfermedades emergentes.
Se debe tener y poner en práctica un plan de manejo preventivo de las enfermedades, que
incluya monitoreos frecuentes de campo para evaluar el estado sanitario de las poblaciones, reduc-
ción de factores de estrés, manipulación cuidadosa, densidades de siembra según la capacidad de la
granja, manejo de la calidad del agua, manejo apropiado de los alimentos, higiene, control de plagas
y aves y, cualquier otra entidad potencialmente transmisora de enfermedades. En caso de sospecha de
una enfermedad transfronteriza, emergente o de declaración obligatoria de la OIE, se debe notificar
a la autoridad competente del país.
Es prioritario determinar la causa o agente patógeno de la enfermedad, así como su naturaleza
y extensión, para así definir una estrategia de manejo y un plan de acción, el cual permita a los téc-
nicos decidir sobre la mejor alternativa o solución para el problema. Se debe contar con laboratorios
de patología de organismos acuáticos nacionales, para que diagnostiquen las enfermedades de los
camarones, o, en caso necesario, laboratorios de referencia en el exterior.
De acuerdo con la OIE, los métodos para la confirmación de enfermedades que presentan
mayor sensibilidad y especificidad, incluyen la reacción en cadena de la polimerasa (PCR por sus
siglas en Inglés). En la actualidad, existen kits comerciales de PCR para la detección de las principales
enfermedades infecciosas en camarones. Si se detecta un brote, se debe activar el plan de emergencia
implementado por la autoridad competente e imponer de manera inmediata restricciones al movi-
miento de personas y animales hacia dentro y fuera del área afectada, mientras el contagio persista.
346
CAPÍTULO 8 - Buenas prácticas y bioseguridad para el cultivo del camarón blanco Penaeus (Litopenaeus) vannamei
los virus. En caso de confirmar una infección bacteriana secundaria, se pueden utilizar antimicro-
bianos para el control de dichas cepas, habiendo comprobado su susceptibilidad al producto y en la
medida en la que éstos sean aprobados para tal fin.
Algunos químicos pueden causar efectos adversos a la biota de los cuerpos de agua recep-
tores, tales como toxicidad o bio-acumulación. El uso cuidadoso de los químicos permitirá bajar
costos y prevenir efectos dañinos secundarios. El uso de medicamentos veterinarios y químicos como
fertilizantes, plaguicidas, etc., debe hacerse para fines específicos como el control de enfermedades
acertadamente diagnosticadas o para el manejo de la calidad del agua de los estanques. Además, las
concentraciones utilizadas no deben producir daños ambientales.
Se debe solicitar a los distribuidores de los productos químicos y biológicos utilizados en las
granjas, las respectivas fichas técnicas, hojas de seguridad y certificados de registro sanitario para
cada país. Así mismo, los productores deben seguir las recomendaciones en cuanto a dosis y manejo,
que el fabricante establece para cada presentación. Los mismos deben usarse sólo bajo prescripción
de un médico veterinario u otro profesional con competencias aprobadas (CAC/GL71-2009). Para
cada producto químico o biológico a utilizar, la granja debe contar con un plan de contingencia y
suministrar a los operarios los medios de protección recomendados en cada caso para evitar acci-
dentes. Esto debe ir acompañado siempre de un período de capacitación previo al uso del producto.
347
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Los criterios sobre los cuales se evalúan las medicinas veterinarias en la Comunidad Económi-
ca Europea (CEE) son los de calidad, eficacia y seguridad. Este mismo autor califica a la regulación
europea y la norteamericana como muy similares, señalando que probablemente la única diferencia
se observa en la rigidez como se establecen los límites máximos de residuos (LMR) por parte de la
CEE, contrastando con el enfoque de niveles tolerables que se les brinda en los EE.UU.
La EMEA establece que no podrá autorizarse la puesta en el mercado de un medicamento
veterinario, con excepción de los inmunológicos, para ser administrado a animales cuya carne o
productos sean destinados al consumo humano si no tiene establecido el correspondiente LMR (LMR:
contenido máximo de residuos resultante de la utilización de un medicamento veterinario autorizado
en la Comunidad como admisible en un producto alimenticio) tal y como está previsto en el Regla-
mento (UE) N0. 37/2010 de 22 de diciembre de 2009 relativo a las sustancias farmacológicamente
activas y clasificación por lo que se refiere a los límites máximos de residuos en los productos alimen-
ticios de origen animal. El nuevo Reglamento UE introduce varias novedades, como son:
• Se crean únicamente dos listas en lugar de los cuatro anexos anteriores: LMRs para sustancias
permitidas, y lista de sustancias prohibidas
• Se introduce información acerca de la clasificación terapéutica de las sustancias, así como posi-
bles condiciones o restricciones de su utilización.
En la tabla 5 se presentan las Sustancias farmacológicamente activas y su clasificación por lo
que se refiere a los límites máximos de residuos (LMR)
Sustancia
farmacoló- Residuo Otras disposiciones Reg. Clasificación
Especie animal LMR Tejidos diana
gicamente marcador 470/2009 Terapéutica
Activa
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CAPÍTULO 8 - Buenas prácticas y bioseguridad para el cultivo del camarón blanco Penaeus (Litopenaeus) vannamei
Sustancia
farmacoló- Residuo Otras disposiciones Reg. Clasificación
Especie animal LMR Tejidos diana
gicamente marcador 470/2009 Terapéutica
Activa
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Sustancia
farmacoló- Residuo Otras disposiciones Reg. Clasificación
Especie animal LMR Tejidos diana
gicamente marcador 470/2009 Terapéutica
Activa
350
CAPÍTULO 8 - Buenas prácticas y bioseguridad para el cultivo del camarón blanco Penaeus (Litopenaeus) vannamei
Sustancia
farmacoló- Residuo Otras disposiciones Reg. Clasificación
Especie animal LMR Tejidos diana
gicamente marcador 470/2009 Terapéutica
Activa
Músculo y piel
Antiinfecciosos/
Sarafloxacino Sarafloxacino Salmónidos 30 μg/kg en proporciones Nada
Antibióticos
naturales
Sulfonamidas Para los peces, el LMR en el
(todas las Todas las espe- 100 μg/kg Músculo músculo se refiere a «músculo y
Antiinfecciosos/
sustancias que Medicamentos cies destinadas 100 μg/kg Grasa piel en proporciones naturales».
Quimioterapéu-
pertenecen al base a la producción 100 μg/kg Hígado Los LMR en la grasa, el hígado
ticos
grupo de sulfo- de alimentos 100 μg/kg Riñón y el riñón no se aplican a los
namidas) peces.
Antiparasitarios/
Músculo y piel
Agentes activos
Teflubenzurón Teflubenzurón Salmónidos 500 μg/kg en proporciones Nada
frente a los ecto-
naturales
parásitos
Para los peces, el LMR en el
Todas las espe- músculo se refiere a «músculo y
Suma de medi- 100 μg/kg Músculo
cies destinadas piel en proporciones naturales». Antiinfecciosos/
Tetraciclina camento base y 300 μg/kg Hígado
a la producción Los LMR en la grasa, el hígado Antibióticos
su 4-epímero 600 μg/kg Riñón
de alimentos y el riñón no se aplican a los
peces.
Para los peces, el LMR en el
Todas las espe- 50 μg/kg Músculo músculo se refiere a «músculo y
cies destinadas 50 μg/kg Grasa piel en proporciones naturales». Antiinfecciosos/
Tianfenicol Tianfenicol
a la producción 50 μg/kg Hígado Los LMR en la grasa, el hígado Antibióticos
de alimentos 50 μg/kg Riñón y el riñón no se aplican a los
peces.
Para los peces, el LMR en el
Todas las espe- 50 μg/kg Músculo músculo se refiere a «músculo y
cies destinadas 50 μg/kg Grasa piel en proporciones naturales». Antiinfecciosos/
Tilmicosina Tilmicosina
a la producción 1000 μg/kg Hígado Los LMR en la grasa, el hígado Antibióticos
de alimentos 1000 μg/kg Riñón y el riñón no se aplican a los
peces.
Para los peces, el LMR en el
Todas las espe- 100 μg/kg Músculo músculo se refiere a «músculo y
cies destinadas 100 μg/kg Grasa piel en proporciones naturales». Antiinfecciosos/
Tilosina Tilosina A
a la producción 100 μg/kg Hígado Los LMR en la grasa, el hígado Antibióticos
de alimentos 100 μg/kg Riñón y el riñón no se aplican a los
peces.
Para los peces, el LMR en el
Todas las espe- 50 μg/kg Músculo músculo se refiere a «músculo y
Antiinfecciosos/
cies destinadas 50 μg/kg Grasa piel en proporciones naturales».
Trimetoprima Trimetoprima Quimioterapéu-
a la producción 50 μg/kg Hígado Los LMR en la grasa, el hígado
ticos
de alimentos 50 μg/kg Riñón y el riñón no se aplican a los
peces.
Esta normativa 37/2010 entró en vigor a partir del 12 de Enero de 2010, quedando prohibido
el uso de medicamentos veterinarios que contengan sustancias farmacológicamente activas mencio-
nadas en la siguiente tabla 6 en animales productores de alimentos. Esta misma normativa es aplica-
ble a los productos de acuicultura.
351
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Bagre de canal y
Florfenicol salmónidos criados en 1,0 ppm Músculo
agua dulce
Sulfadimetoxina/
Salmónidos y bagre 0.1 ppm por cada una Tejido comestible
ormetoprim combinación
Fuente: Guía de Peligros y Controles de Pescados y de Productos Pesqueros. FDA Cuarta Edición Abril 2011.
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CAPÍTULO 8 - Buenas prácticas y bioseguridad para el cultivo del camarón blanco Penaeus (Litopenaeus) vannamei
PRODUCTO NIVEL
353
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
gencias del mercado. Para lograr estas condiciones, se recomienda que antes de 15 días de la fecha de
cosecha, se realicen muestreos para determinar estas características, tomando acciones anticipadas
en caso de ser necesario.
Una situación que afecta la calidad del camarón, son las altas concentraciones de bacterias
y algas, principalmente las cianobacterias (Oscillatoria, Anabaena, Microcystis, entre otras) y actino-
bacterias (Actinomycetes, Streptomyces y Nocardia). Se recomienda retirar la alimentación entre 24
y 48 horas antes de la cosecha, para evitar que la repleción por alimento en descomposición dentro
del camarón luego de la cosecha, cause problemas en el hepatopáncreas durante el procesamiento.
Durante el proceso de cosecha, es de gran importancia tener personal con experiencia y entre-
nado para dirigir las acciones, que no presente condiciones de salud deteriorada (heridas, infecciones
respiratorias o digestivas y otras infectocontagiosas) y llevar registros adecuados por cada recipiente
de cosecha, con respecto a la cantidad de hielo, cantidad de camarón, tiempo de llenado, tiempo
de captura por cada alzada y cantidad de metabisulfito. Estos registros son parte de la trazabilidad y
permitirán hacer correcciones oportunas en caso de pérdida de la calidad del producto.
Los camarones cosechados deben ser enhielados de forma inmediata y en la medida en que
van saliendo del estanque, de manera que éstos mueran por choque térmico. Las dosis de metabisul-
fito de sodio deben estar basadas en los requerimientos de los mercados de destino. En cuanto a la
degradación del metabisulfito en el ambiente, los métodos para determinación de biodegradabilidad
no son aplicables para sustancias inorgánicas. Sin embargo, de acuerdo con la ficha técnica del
producto, no es de esperarse una bioacumulación en el ambiente, aunque puede tener un efecto
perjudicial sobre organismos acuáticos (Fig. 8.1.10).
Las soluciones con metabisulfito de sodio que han sido utilizadas en camarones así como las
que han quedado sin utilizarse, deben ser neutralizadas antes de su descarte. Para ello, se pueden
tratar con Carbonato de sodio como neutralizante, de acuerdo con las dosis de manejo que han sido
establecidas por el fabricante. También se puede neutralizar el metabisulfito de sodio utilizando 0.34
kg de carbonato de calcio (CaCO3) por cada kg de metabisulfito presente en la solución. Por otro
lado, se puede bajar a valores inferiores a 25% la concentración del metabisulfito de sodio antes de
descartarlo, mediante la dilución con agua en el recipiente con el producto.
El camarón cosechado se debe manejar de manera rápida y eficiente y que muera por choque
térmico para no afectar su calidad. Además, por ningún motivo se debe romper la cadena de frío
durante el transporte a las plantas de proceso o mercados. Todas las actividades o acciones que se
ejecuten durante la cosecha y post-cosecha de un estanque, deber estar debidamente registradas, así
como el pesaje del camarón, en un sistema de trazabilidad.
j. Bioseguridad
Figura 8.1.10. Proceso de enhielado inmediato durante una cosecha en una granja camaronera, produciendo la
muerte de los camarones por choque térmico e iniciando de esta manera la cadena de frío. Foto cortesía del Ing. C.
Lara.
354
CAPÍTULO 8 - Buenas prácticas y bioseguridad para el cultivo del camarón blanco Penaeus (Litopenaeus) vannamei
Las medidas de bioseguridad deben ser estrictamente aplicadas por todo el personal de la
granja, así como por personas ajenas a la granja que por alguna razón deban ingresar o pasar por
dentro de las instalaciones de la misma. Cada granja debe contar con programas de capacitación y
tener un responsable del cumplimiento de dichas medidas, quien mediante protocolos y registros
asegure su aplicación constante y sistemática.
Para disminuir el riesgo de introducción de enfermedades y facilitar la trazabilidad de un
problema de inocuidad, se debe contar con un sistema eficiente de control de entrada y salida de
personal y equipo rodante, así como un sistema de desinfección de los mismos diseñado de manera
que no pueda ser obviado en ninguna circunstancia. Se debe tener una única puerta de acceso, con
una caseta (garita) de control para a) el control de ingreso sólo para quienes estén autorizados, b)
registro de los datos de vehículos y personas que ingresan, c) desinfección de éstos antes del ingreso
a las instalaciones (rodiluvios y pediluvios) e) revisión respetuosa y ágil de vehículos y personas que
abandonen la empresa (para evitar el hurto de materiales, equipos o camarón) y f) registro manual de
éstos al salir de la granja. Las visitas deben ser dotadas de indumentaria de seguridad como botas de
caucho, gorra y bata (preferiblemente desechables), así como con un carnet de visitante que debe ser
portado en lugar visible y de manera permanente dentro de la granja.
La limpieza y desinfección de instalaciones de cultivo, conlleva la eliminación total de los
camarones vivos o refrigerados y la desinfección de toda la instalación. Antes de proceder con la
desinfección total de instalaciones, se deben tomar en cuenta lo siguientes aspectos:
• Coordinación de un plan de desinfección total de las instalaciones
• Se debe planificar un programa de cosechas, que permita que los camarones en cultivo alcancen
una talla comercial razonable y definir un período prudencial hasta las nuevas siembras de post-
larvas. Este lapso de tiempo entre cosecha y siembra, permitirá implementar un vacío sanitario
en el estanque para realizar su limpieza y desinfección
• Manejo apropiado de los camarones a desechar, que son aquellos animales vivos que quedan
enterrados o en charcos en los estanques de cultivo después de las cosechas. Los camarones
muertos que quedan tras la cosecha, deben ser recogidos totalmente y enterrados aplicando
capas de hidróxido de calcio (“cal apagada”) u óxido de calcio (“cal viva”)
Una vez que todos los camarones han sido eliminados de las unidades de cultivo, se debe
proceder a la desinfección, asumiendo que toda la granja está contaminada. Los siguientes desinfec-
tantes son de uso común en la limpieza de las instalaciones de cultivo de camarones: Cloro (como
hipoclorito de calcio o como hipoclorito de sodio). Este compuesto es altamente tóxico para orga-
nismos acuáticos; su concentración letal media (LC50) a 96 horas varía según la especie entre 0.04
y 0.5 mg/L-1; yodo usado en su forma estable para desinfectar equipo; cal (como óxido de calcio o
hidróxido de calcio); luz UV (ultravioleta), desecación (luz solar), detergentes o compuestos orgáni-
cos, entre otros.
El cloro y el yodo son muy tóxicos, se recomienda neutralizar estos productos con tiosulfato
de sodio (cinco moles de tiosulfato neutralizan cuatro moles de cloro). Las proporciones moleculares
son las mismas para el yodo. Por lo tanto, para inactivar el cloro, la cantidad de tiosulfato usada debe
ser 2.85 veces la cantidad de cloro (expresada en gramos): número de gramos de tiosulfato = 2.85 ×
número de gramos de cloro. Para el yodo, la cantidad de tiosulfato debe ser 0.78 veces la cantidad de
yodo expresada en gramos: Número de gramos de tiosulfato = 0.78 × número de gramos de yodo.
También es posible preparar una solución de tiosulfato al 1% por peso, en cuyo caso los volúmenes
son los siguientes (en mL): para el cloro: 28.5 × [número de litros de la solución desinfectante × con-
centración de mg/litro] / 100; para el yodo: hay que multiplicar por 7.8 en vez de por 28.5.
355
Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Para los estanques de tierra, el vacío sanitario es una medida de desinfección que permite
mediante condiciones naturales (sol y viento) y con ayuda de la cal, disminuir la carga de organismos
patógenos en el fondo de los estanques. Esta es una práctica eficiente y económica de desinfección,
para las granjas camaroneras. Se debe realizar un drenado completo del estanque y luego, mientras
el fondo aún mantiene cierta humedad, hay que cubrir toda la superficie del fondo con cal a razón
de 1,000 kg/ha (si se usa óxido de calcio) o 1,500 kg/ha (si se usa hidróxido de calcio). El estanque
debe dejarse reposar por varias semanas o al menos hasta que el fondo del estanque se haya secado
hasta el punto de presentar grietas de al menos 10 centímetros de profundidad. El estanque debe
permanecer seco hasta que la instalación entera ha sido totalmente desinfectada.
Durante la estación lluviosa, también es importante el proceso de desinfección de los estan-
ques, aunque por las condiciones de humedad, el mismo se dificulta y sólo se puede recurrir a un
drenado máximo posible y la posterior aplicación de cloro en los charcos, e hidróxido u óxido de
calcio sobre todo el fondo. Este mismo procedimiento de desinfección hay que aplicar a todos los
tanques de plástico, concreto o fibra de vidrio deben ser drenados y dejados secar. Después, todas
las superficies interiores y exteriores deben ser rociadas con una solución de cloro y dejadas así por
varias horas. Estas superficies deben cepillarse hasta dejarlas limpias de todo residuo adherido a sus
paredes. Los tanques deben llenarse totalmente con agua limpia, a la cual se debe agregar hipoclorito
de calcio hasta lograr una concentración mínima de 200 ppm de cloro libre residual por toda una
noche. El agua debe luego ser drenada en su totalidad y los tanques se deben enjuagar y dejar secar.
Los equipos pueden agruparse en dos categorías: desechables y no desechables. Se consideran
desechables los equipos y utensilios relativamente baratos y de fácil adquisición tales como mallas,
redes y mangueras aireadoras.
Todos los implementos que se puedan poner en remojo tales como tuberías removibles, piezas
plásticas de plomería, jaulas para transferencia, cajas de cosecha, mesas de cosecha, discos Secchi,
cristalería de laboratorio, etc., deben hacerlo en una solución de 200 ppm de cloro libre residual por
24-48 horas. El equipo usado en actividades de cultivo a campo abierto, también debe ser puesto en
remojo en una solución de 200 ppm de cloro libre residual y luego secado al sol. Los equipos eléc-
tricos y motorizados tales como tractores, camiones, herramientas eléctricas, deben ser desinfectados
con soluciones comerciales comunes; lavados previamente y después deben ser rociados con una
solución de 200 ppm de yodo. Equipos pequeños tales como balanzas, básculas, instrumentos de
medición y pequeñas herramientas eléctricas deben ser limpiados con una esponja impregnada con
yodo. Los equipos de medición electrónicos de alta precisión no deben ser expuestos al cloro ya que
la corrosión puede dañarlos.
Igualmente hay que considerar la desinfección de oficinas cuya contaminación comúnmente
ocurre a través del tráfico de personas desde áreas contaminadas hacia áreas administrativas. Todos
los pisos deben ser lavados con detergentes comunes y después enjuagados con una solución de 200
ppm de yodo, al igual que todos los mobiliarios presentes. Se deben desinfectar otras infraestructuras
de la finca, considerando limpieza previa con desinfectantes comunes, el siguiente paso consiste en
la cloración. La persona que aplique el cloro en forma de gas, debe usar un traje impermeable, más-
cara anti-gas para cloro y anteojos protectores; también debe asegurarse de sellar todas las paredes y
secciones del techo del edificio que pudieran permitir escapes de gas de cloro durante su aplicación.
Las superficies que no admitan limpieza con cloro, deben ser desinfectadas con una esponja impreg-
nada en yodo 200 ppm. Los pisos pueden ser inundados hasta una profundidad de 5 centímetros con
200 ppm de cloro libre residual, solución que deberá dejarse reposar por al menos 48 horas, para
después ser enjuagada con agua dulce limpia.
356
CAPÍTULO 8 - Buenas prácticas y bioseguridad para el cultivo del camarón blanco Penaeus (Litopenaeus) vannamei
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
8.6. Trazabilidad
Entre las normas de carácter horizontal, el Reglamento Nº178/2002, artículo 18 del Consejo
del Parlamento Europeo, sentó las bases para la puesta en marcha de métodos de trazabilidad por
parte de todos los operadores de la cadena alimentaria. Esta disposición entró en vigor en febrero de
2002 y el artículo fue aplicable a partir del 1 de enero de 2005.
La trazabilidad debe sustentarse en un proceso fiable de recopilación y gestión de los datos
generados en todas las actividades inherentes a la inocuidad del producto cosechado, que se desa-
rrollen en la granja. Este proceso puede basarse en registros impresos o informatizados. Su aplicación
presenta amplias ventajas tanto para el productor, como para los consumidores y la Autoridad Com-
petente.
La trazabilidad como herramienta para rastrear el origen del producto y sus insumos dentro
de la cadena de abastecimiento de alimentos, permite identificar y registrar cada producto desde
su origen hasta el final de la cadena de comercialización. Desde el punto de vista productivo, los
sistemas de trazabilidad mejoran la gestión de la unidad productiva (CPLs, granjas, plantas de proce-
samiento, transporte y distribución), al disponer de registros sistematizados y funcionales conforme a
las necesidades de cada unidad. Un buen sistema de trazabilidad en la cadena alimentaria, no sólo
juega un importante papel en la protección de los intereses del consumidor, sino que aporta grandes
beneficios para las empresas.
358
CAPÍTULO 8 - Buenas prácticas y bioseguridad para el cultivo del camarón blanco Penaeus (Litopenaeus) vannamei
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Abreviaturas
ABREVIATURAS
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Abreviaturas
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
Glosario
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Glosario
Bacterias Gam Las que se tiñen de rosa o rojo con la tinción de Gram (violeta de
negativas metilo-safranina).
Bacterias patógenas Las que causan enfermedades tanto a los animales, vegetales y al
hombre.
Bactericida Sustancia que tiene la propiedad de destruir las bacterias.
Bases (nitrogenadas) También conocidas como bases nucleicas o nucleobases, son com-
puestos orgánicos cíclicos con dos o más átomos de nitrógeno, que
constituyen la parte fundamental de los nucleótidos, nucleósidos y
ácidos nucleicos. Existen cinco bases nitrogenadas principales que
se clasifican en purínicas (derivadas de la estructura de la purina) y
pirimidínicas (derivadas de la estructura de la pirimidina). La adeni-
na (A) y la guanina (G) son purínicas, mientras que la timina (T), la
citosina (C) y el uracilo (U) son pirimidínicas. Las cuatro primeras se
encuentran en el ADN, mientras que en el ARN en lugar de timina
existe el uracilo.
Basofílico (basófilo) Coloración azul-morada (clara u oscura) que toman ciertas estructuras
ácidas de las células (ej.: el núcleo), luego de ser teñidas con coloran-
tes básicos como la Hematoxilina.
Bacteriemia Presencia de bacterias en la hemolinfa.
Bioacumulación Es la acumulación de metales pesados, hidrocarburos clorados u otras
sustaancias percistentes, en los órganos y tejidos de los organimsos
acuáticos u otros seres vivos. Estos elementos se pueden encontrar en
concentraciones muy altas dentro de los tejidos, a pesar de encontrar-
se extremadamente diluidos en el medio acuático circundante.
Bioensayo Experimento que se hace utilizando organismos vivos, bajo condicio-
nes y ambientes controlados.
Biopsia Toma y examen de una pequeña parte del tejido o liquido corporal del
organismo para completar un diagnóstico sobre su estado de salud.
Bioseguridad Según la FAO y la OIE, consiste en el estado ideal en el que se esta-
blecen medidas para prevenir la introducción y la propagación de la
enfermedad, o el enfoque o los principios utilizados para lograr esta
circunstancia. Las medidas de bioseguridad deben ser implementadas
para minimizar los riesgos del ingreso de enfermedades a las unida-
des de producción individual (bioexclusión), así como para evitar los
riesgos de transmisión hacia afuera (biocontención) y hacia adelante
a través de la cadena del mercado.
Biótico Organismos que comparten un mismo ambiente en un tiempo deter-
minado.
Biotipo Forma típica de organismos vivos que puede considerarse modelo de
su especie, variedad o raza.
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Glosario
Brote Aparición de dos o más casos de una misma enfermedad, en los que
se observa una relación con un agente etiológico común, establecién-
dose esta relación en términos de tiempo, lugar y tipo de organismos
afectados.
Calambre Proceso de fatiga muscular que implica una contracción rígida del
músculo esquelético, producida por un período de hipoxia prolon-
gado.
Calidad del agua Complejo de variables fisicoquímicas del agua relacionadas con la
acuicultura.
Camaronicultura Cultivo de camarones.
Cápside Estructura proteica formada por una serie de monómeros llamados
capsómeros. En el interior de esta cápside se encuentra siempre el
material genético del virus.
Cariorrexis Fragmentación de la cromatina y su distribución por el citoplasma
como resultado de la desintegración nuclear.
Cefalotórax “Cabeza” del camarón; estructura que contiene órganos y tejidos pro-
pios del tórax y de la cabeza.
Cepa En microbiología se puede definir como un conjunto de especies bac-
terianas que comparten al menos una característica.
Citopático Efecto dañino o destructivo que un tóxico químico o biológico ejerce
sobre las células.
Citoplasma Es la parte del protoplasma que en una célula eucariota, se encuentra
entre el núcleo celular y la membrana plasmática.
Citosol También llamado hialoplasma, es el gel acuoso que está en el interior
de la célula y que se encuentra fuera de las membranas internas cuan-
do estas existen. Corresponde a más de la mitad del volumen celular y
está presenta tanto en células procariotas como en eucariotas.
Coagulación Mecanismo fisiológico utilizado por los organismos para evitar per-
dida de sangre o hemolinfa, mediante la activación de factores que
detienen su salida a través de una herida.
Coalescer Es la posibilidad de que dos o más materiales se unan en un único
cuerpo.
Conspicuas Características o condiciones (patológicas en este caso) que son so-
bresalientes, llamativas o más frecuentemente visibles.
Contingencia Posibilidad de que algo suceda o no suceda.
Control Muestra que se excluye de un análisis experimental, para que sirva de
referencia en la evaluación de resultados de la parte analizada.
Control biológico Es un método de control de plagas, enfermedades que consiste en
utilizar organismos vivos con el objeto de controlar las poblaciones
de otro organismo.
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Metazoarios Animal formado por una gran cantidad de células (pluricelulares), al-
gunos de ellos microscópicos pero la gran mayoría se pueden obser-
var a simple vista, al menos en su estado adulto. Se distinguen entre
sí por su forma, estructura y función. Incluyen los platelmintos, nema-
telmintos y artrópodos, entre los que se encuentran los vertebrados,
moluscos, gusanos, etc. También se conocen como metazoos.
Micosis Enfermedad producida por algún tipo de hongo.
Microbiología Ciencia que estudia los microorganismos y su organización.
Microscópico Es un objeto que por su tamaño, es imposible verlo a simple vista, se
necesitan aparatos como microscopios para poder verlo o detectarlo.
Micrótomo Es un dispositivo mecánico que permite la elaboración de cortes finos
de muestras para su observación al microscopio.
Morbilidad Probabilidad de que un individuo de una población sea un caso en
un momento dado.
Mortalidad Probabilidad de que un individuo muera como consecuencia de cier-
ta enfermedad en un periodo de tiempo.
Muda Desprendimiento periódico de la cubierta externa, como el exoesque-
leto en Artrópodos (camarones, cangrejos, langostas), para permitir
el crecimiento (aumentar en tamaño) de los tejidos blandos internos.
Después de la muda, los especimenes son especialmente vulnerables
a la depredación.
Muestra Subconjunto representativo de la población estudiada que se selec-
ciona para obtener información.
Muestreo aleatorio o Método de selección donde cada individuo de la población tiene la
probabilístico misma probabilidad de formar parte de la muestra y esta probabilidad
es conocida.
Muestreo no Método de selección donde cada individuo de la población tiene una
probabilístico probabilidad desconocida y variable de formar parte de la muestra.
Mutación Es una modificación que se produce en los datos genéticos de un
organismo viviente. Dicha alteración, que puede resultar hereditaria,
implica una modificación de sus características.
Mysis Estado intermedio de larva pelágica entre la protozoea (zoea) y los
estados de postlarva.
Nauplio Primeros estados larvales de un crustáceo; exhibe el tipo más simple
de región anterior con tres pares de apéndices, primera antena unirra-
ma, segunda antena birrama y mandíbulas. Aunque la larva nauplius
es típica, no aparece en todos los crustáceos. Es común en las formas
inferiores, pero en muchas de las formas superiores ocurre durante el
desarrollo en el huevo, y los juveniles eclosionan ya diferenciados y
larvas más avanzadas.
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Glosario
Necrobiosis Muerte natural y fisiológico del los célula de un organismo, por enve-
jecimiento de las mismas.
Necrosis Es la muerte patológica de un conjunto de células o de cualquier
tejido del organismo, provocada por un agente nocivo que ha provo-
cado una lesión tan grave que no se puede reparar. Una vez que se ha
producido y desarrollado la necrosis, es irreversible.
Neutralizar Debilitar el efecto o hacer neutra una sustancia química, mediante la
adición de otra sustancia diferente u opuesta. Los ácidos se neutrali-
zan con sustancia alcalinas y viceversa.
Nivel de confianza Probabilidad de que el valor real de la población se encuentre dentro
de ciertos límites (intervalo de confianza).
Nivel de detección Sensibilidad de una prueba diagnóstica definida como el número de
patógenos que la prueba es capaz de detectar por unidad de muestra
patológica.
Nódulo Pequeña protuberancia situada en diversos tejidos.
Nucleocápside Material genético envuelto en su cápside. La cápsida o cápside ví-
rica es una estructura proteica formada por una serie de monóme-
ros llamados capsómeros. En el interior de esta cápside se encuentra
siempre el material genético del virus. Puede estar rodeada por una
envoltura. Cada capsómero puede estar constituido por una o varias
proteínas distintas.
Nucleótidos Monómeros de los ácidos nucleicos, integrado por la combinación
de una base nitrogenada (purina o pirimidina), un azúcar (ribosa o
desoxirribosa) y un grupo fosfato. Se obtiene como producto de la
hidrólisis de ácidos nucleicos por acción de nucleasas. Los nucleóti-
dos se conocen como ribonucleótidos cuando el azúcar es la ribosa,
o como desoxirribonucleótidos cuando el azúcar es la desoxirribosa.
Osmorregulación Capacidad de los seres vivos para mantener en sus tejidos y fluidos
corporales una determinada presión osmótica, mediante un proceso
fisiológico que regula el equilibrio del agua y los electrolitos.
Patogénesis Origen y evolución de una enfermedad con todos los factores que
están involucrados en ella.
Patogenicidad Capacidad de un agente patógeno, de causar daño en un hospedero
susceptible.
Patógeno Es toda aquella entidad biológica capaz de producir enfermedad o
daño en la biología de un hospedero (humano, animal, vegetal, etc.)
sensiblemente predispuesto. El mecanismo de la patogenicidad ha
sido muy estudiado y tiene varios factores, algunos de los cuales son
dependientes del agente patógeno y otros del hospedero.
Patognomónico Signo clínico que caracteriza y define una determinada enfermedad,
diferenciándolo del resto de patologías.
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Glosario
Urópodos Son la parte final del cuerpo de los crustáceos; están a continuación
del abdomen o pleon y normalmente son laminares o aplanados, pre-
sentando forma de abanico por lo que se le denomina abanico caudal.
Vacuolas lipídicas Glóbulos de grasas almacenados en el hepatopáncreas de crustáceos
y utilizados como reserva de energía.
Verdaderos negativos Animales sanos o no infectados detectados correctamente por la prue-
ba diagnóstica como negativos.
Verdaderos positivos Animales enfermos o infectados detectados correctamente por la
prueba diagnóstica como positivos.
Vibriosis Enfermedad bacteriana causada por especies del género Vibrio, que
afecta a los crustáceos y que es favorecida en condiciones de estrés.
Vigilancia Designa una serie de investigaciones que se llevan sistemáticamente
a cabo en una población de animales acuáticos determinada para
detectar, a efectos profilácticos, la presencia de enfermedades y que
pueden consistir en someter a prueba una población (Código Sanita-
rio para los Animales Acuáticos, OIE 2013).
Viremia Condición donde virus entran al torrente sanguíneo (hemolinfa) y lo-
gran así una fácil diseminación por todo el organismo.
Virión Partícula vírica morfológicamente completa e infecciosa. Virus com-
pleto.
Virulencia Designa el carácter patogénico, nocivo y violento de un microorga-
nismo, como una bacteria, hongo o virus, o en otras palabras, la ca-
pacidad de un microbio de causar enfermedad. Virulencia deriva del
latín virulentus que significa «lleno de veneno».
Virus Es una entidad biológica capaz de autorreplicarse utilizando la ma-
quinaria celular. Es un agente potencialmente patógeno compuesto
por una cápside (o cápsida) de proteínas que envuelve al ácido nu-
cléico, que puede ser ADN o ARN.
Zooplancton Es la fracción “animal” del plancton, constituida por seres que se ali-
mentan mediante ingestión, de materia orgánica ya elaborada. Inclu-
ye protistas, fagótrofos que engloban el alimento fagocitándolo, larvas
de esponjas, gusanos, equinodermos, moluscos, crustáceos y de otros
artrópodos acuáticos, así como pequeños alevines (peces jóvenes
muy pequeños).
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Guía Técnica - Patología e Inmunología de Camarones Penaeidos
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La Guía Técnica – Patología e Inmunología de Camarones Penaei-
dos, 1era edición, fue creada gracias al Programa Iberoamericano
de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo (CYTED) a través de su
RED VANNAMEI. La presente actualización y publicación de la 2da
edición de esta Guía Técnica, ha sido posible gracias al Organismo
Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OIRSA) con el
apoyo incondicional de los mismos autores de su primera edición y
la contribución de nuevos autores, logrando así un documento
actualizado, moderno y con nuevas enfermedades incorporadas,
como es el caso de la Enfermedad de la Necrosis Aguda del Hepa-
topáncreas (AHPND o EMS) en algunos países de Asia, así como
otras patologías similares en ciertos países de América Latina. Esta
Guía servirá como material básico de consulta para estudiantes,
profesores, profesionales acuícolas, investigadores, empresas
privadas o mixtas y entidades estatales, que se dediquen al cultivo
de camarones marinos.