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SEMINARIO TEOLÓGICO “HAGIAZO”

CARRERA DE TEOLOGÍA

El ministerio de Samuel

DOCENTE: Pr. Iván Mamani Fernández

MATERIA: Libros Históricos

ESTUDIANTE: Víctor Hugo Janco Gómez

POTOSÍ - BOLIVIA
ÍNDICE
1. NACIMIENTO Y PRIMEROS AÑOS DE SAMUEL.........................................................................5

1.1. FAMILIA DE ANA...............................................................................................................5

1.2. EL VOTO PIADOSO DE ANA (1 Samuel 1:8-11).................................................................6

1.3. EL NACIMIENTO Y LA DEDICACIÓN DE SAMUEL...............................................................8

1.4. CÁNTICO DE GRATITUD DE ANA.......................................................................................9

2. UN SACERDOCIO CORROMPIDO Y SUS CONSECUENCIAS........................................................9

2.1. LOS HIJOS DE ELI HACÍAN LO MALO ANTE LOS OJOS DE DIOS.........................................9

2.2. LA REACCIÓN DE ELI ANTE LAS ACCIONES MALAS DE SUS HIJOS...................................10

2.3. PROFECÍA DEL JUICIO DE DIOS SOBRE LA FAMILIA DE ELI..............................................11

3. DIOS MANTIENE EL SACERDOCIO EN MEDIO DE LA MALDAD...............................................12

3.1. SAMUEL OBEDECE AL LLAMADO DE DIOS......................................................................12

3.2. DIOS LLAMA A SAMUEL..................................................................................................13

4. CUMPLIMIENTO DEL JUICIO DE DIOS SOBRE ISRAEL.............................................................14

4.1. DERROTA ANTE LOS FILISTEOS.......................................................................................14

4.2. CUMPLIMIENTO DEL JUICIO DE DIOS.............................................................................16

5. SINSABORES DE LOS FILISTEOS CON EL ARCA.......................................................................17

6. MINISTERIOS DE SAMUEL......................................................................................................18

6.1. ESTABLECIMIENTO DE LA MONARQUÍA.........................................................................19

6.1.1. ISRAEL PIDE REY......................................................................................................19

6.1.2. SAMUEL UNGE AL PRIMER MONARCA DE ISRAEL...................................................20

7. LA DESPEDIDA DE SAMUEL....................................................................................................22

8. CONCLUSIONES:.................................................................................................................... 23
INTRODUCCIÓN:

Los libros de Samuel forman un solo libro en los antiguos manuscritos hebreos. No fueron
divididos en dos libros hasta que el Antiguo Testamento fue traducido al griego. En hebreo, se
les conoce como: Shmuel Alef (Samuel A) y Shmuel Bet (Samuel B). Estos dos libros siguen la
historia cronológica del pueblo de Dios que viene desde Génesis hasta Jueces. Según la tradición
hebrea, los libros de Samuel son incluidos entre los libros proféticos (heb. Neviim), al igual que
Josué y Jueces. Aunque son libros históricos, el propósito principal no es sólo dar un vistazo al
pasado sino proyectar las lecciones al futuro, porque la historia se puede repetir. El apóstol
Pablo habla de esto, diciendo que la historia de Israel anotada en la Biblia fue escrita para
enseñar a las siguientes generaciones lecciones importantes sobre la vida espiritual. Romanos
15:4 “Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se escribieron, a fin de
que, por la paciencia y la consolación de las Escrituras, tengamos esperanza”.

Al parecer los libros de Samuel fueron escritos después de la división del reino de Israel, es
probable que fueran escritos por un profeta desconocido (quien empleo material escrito con
anterioridad 1 Crónicas 29:29, incluso escritos de Samuel y de los cronistas y escribas de David 1
Samuel 10:25; 2 Samuel 8:16, 17). Estos libros llevan el nombre de Samuel, debido a que fue el
personaje principal en la primera parte de estos libros, pero también fue quien inauguró la
monarquía ungiendo a los dos primeros reyes, Saúl y David, una buena parte del libro toma
lugar después de su muerte en (1 Samuel 25).

La relación que tiene el libro de los Jueces con el de 1 Samuel, es que se trata del tiempo crucial
de transición, el cambio de gobierno de los jueces a la monarquía. El termino juez 1 tiene
diferentes connotaciones de acuerdo al contexto. En este contexto los "jueces" (hebreo
safetim), fueron suscitados por Dios en momentos difíciles para librar a su pueblo de sus
opresores. Eran instrumento de juicio para las naciones paganas Jueces 2:16 “libertadores”. No
administraban justicia entre particulares y por lo tanto fueron más libertadores y gobernadores
(persona que desempeñaba funciones como gobernador y líder militar en tiempos de crisis,
además de presidir las audiencias para administrar justicia en el período anterior a la creación

1
Juez (heb. pelilim [del verbo palal, “juzgar”, “decidir”, “opinar”]; shofet [participio activo del verbo shafat,
“juzgar”], “el que juzga”; gr. dikastes, krites). La palabra shofet (Exo 2:14; 18:13-26; Deu 16:18) fue tomada por los
hebreos de los cananeos, y designa a alguien que dirime una cuestión según la justicia. Es alguien que emite un
juicio en un asunto determinado..
de una monarquía) Josué 2:18. En el tiempo de la monarquía los jueces cesarían sus funciones
ahora ya no serían los caudillos del pueblo de Israel. En este caso los profetas serían los
guardianes de la monarquía constitucional y tendrían el derecho y deber de reprender a los
reyes en situaciones que justifican tal acción.

El libro inicia con cierto varón, viviendo en cierta época en Israel. Este fue un tiempo crítico en la
historia de Israel debido al creciente poder de los Filisteos, que se iban volviendo más y más
fuertes gracias a su más moderna tecnología militar griega. Israel podía competir en más
igualdad de condiciones con Moab y Amón, pero el equipo militar griego (cascos, escudos, cotas
de malla, espadas y lanzas) hizo de los Filisteos un enemigo mucho más formidable. Los Filisteos
eran un pueblo inmigrante de la aristocracia militar de la Isla de Creta (Amós 9:7). Hubo
pequeños grupos de Filisteos en la tierra en el tiempo de Abraham; pero solo tomó fuerza poco
después de que Israel llegara a Canaán de Egipto. Ellos estaban organizados en cinco ciudades
estado. Los arqueólogos nos dicen dos otras cosas sobre los Filisteos: Eran fuertes bebedores, y
fueron los primeros en la región en hacer uso eficaz del hierro, y le sacaron provecho, redujeron
rápidamente a Israel a una condición de pueblo sometido.
1. NACIMIENTO Y PRIMEROS AÑOS DE SAMUEL
1.1. FAMILIA DE ANA
Ana era la esposa de un levita llamado Elcana, el problema es que ella no había podido tener
hijos; y, probablemente por esta razón, Elcana se casó con una segunda mujer (Penina), quien sí
le dio hijos (1 Samuel 1:1-2). Elcana era un descendiente de Zuf, y su línea familiar muestra que
él era un levita (1 Crónicas 6:16-30). Él es llamado Efrateo aquí porque su familia vivía en una
ciudad Levítica en los límites de Efraín, no porque fuera de la tribu de Efraín. Tenía dos esposas,
la poligamia era algo natural en toda aquella parte del mundo antiguo. Sin embargo, la biblia
nunca puso la poligamia bajo una luz favorable; luchas y conflictos siempre caracterizan a las
familias polígamas en la Biblia.

Elcana era levita, él debía ir por lo menos una vez al año a servir en el Tabernáculo como
también cumplir con las fiestas anuales entregando sus sacrificios, debido a la devoción que
sentía al Dios Altísimo. En una de esas ocasiones, Ana aprovechó para ir al Tabernáculo para
orar y derramar su corazón ante el Señor (1 Samuel 1:9-10). Eli oficiaba como sumo sacerdote
en el tabernáculo. Según la Ley de Moisés, los israelitas no pudieron adorar a Dios a través del
sacrificio en el momento y de la forma que ellos quisieran. Debían traer sus sacrificios al
tabernáculo de Dios, y a los sacerdotes de Dios, los cuales en este momento se encontraron en
Silo. La ciudad de Silo fue la principal de Israel, el centro religioso, por casi cuatrocientos años. El
tabernáculo la majestuosa carpa que Dios le instruyó a Moisés construir cuando salió de Egipto,
fue erigida ahí, y en ella yacía el Arca del Pacto 2. En el Arca, una vez al año, el sumo Sacerdote
hacía expiación por los pecados de la nación. Aunque estaba oculta, era una parte importante
de la vida religiosa de Israel.

En este tiempo los hijos de Eli, Ofni y Finees oficiaban como sacerdotes, eran reconocidos entre
Israel como sacerdotes notoriamente retorcidos (como se muestran en 1 Samuel 2:17-24). Se
mencionan aquí para mostrar lo piadoso que era Elcana aunque los sacerdotes eran malvados,
aún ofreció sacrificios al Señor, conociendo la maldad de los sacerdotes no hizo inválido su
propio servicio al Señor.

2
El Arca de la Alianza era una especie de cofre rectangular hecho de madera de acacia cubierto de oro por dentro y
por fuera. El Arca de la Alianza medía aproximadamente 1,10 m x 70 cm x 70 cm. Y en cada una de sus
extremidades inferiores había un aro de oro. En estos anillos se insertaban una vara de madera de acacia
recubiertas de oro que servían como instrumento para transportar el Arca, la cual solamente podían tocar los
descendientes de Coat de la tribu de Leví.
Cada año, cuando Elcana traía a su familia al tabernáculo para el sacrificio, él comía una comida
ceremonial, dando porciones a sus esposas y a sus hijos. El mostró amor y favor a su esposa
Ana, convirtiendo una parte escogida. Los sacrificios que fueron hechos probablemente eran
sacrificios de paz, en los cuales la sangre era derramada sobre los pies del altar; la grosura era
quemada en el fuego; el pecho y el hombro derecho eran la porción del sacerdote; y el resto
pertenecía al que presentó la ofrenda; de esto, se alimentaban él y su familia, cada uno
recibiendo su parte.

Sin embargo, debido al conflicto entre las dos esposas, Ana no podía disfrutar del amor y el
favor que le mostró Elcana: por lo cual Ana lloraba, y no comía. “La esterilidad en los tiempos
antiguos era la máxima tragedia para una mujer casada, ya que las esperanzas y sueños de su
esposo dependían de que ella le diera un hijo para perpetuar su nombre y heredar sus
propiedades.”

1.2. EL VOTO PIADOSO DE ANA (1 Samuel 1:8-11)


Ana, ¿por qué lloras? ¿No te soy yo mejor que diez hijos? En la respuesta de Elcana a la tristeza
de Ana, vemos que realmente la ama. Sin embargo, es de alguna forma insensible con ella. No
reconoció que ella tenía necesidades que él no podía llenar (como el deseo de ser madre). Ana
tenía amargura de alma; sin embargo, hizo lo correcto. Ana tomo esos sentimientos amargos y
se los llevó a Dios en oración.

Ana inicia su oración invocando a Jehová de los ejércitos. El título Jehová de los ejércitos es
utilizado alrededor de 260 veces en el Antiguo Testamento, y lleva la idea de “Señor de los
poderosos ejércitos.” Ana se siente atacada por su rival, ¡y llama al SEÑOR de los Poderosos
Ejércitos para que sea su protector!

Ana prometió dedicar a su hijo al servicio del SEÑOR, prometiendo que él sería un Nazareo
desde su nacimiento (lo dedicaré a Jehová todos los días de su vida, y no pasará navaja sobre su
cabeza). Según Números capítulo 6, el voto de un Nazareo 3contemplaba los siguientes
aspectos:

 Abstinencia de cualquier producto de la uva, una distancia significativa de todos los


placeres carnales.
3
La palabra Hebrea para Nazareo es nazir, ryz'n, que significa separar. Este era un voto especial de separación para
Adonai. Un Nazareo era alguien que había tomado un voto especial de separación para el Santo.
 No tomar parte de ningún luto por los muertos, ni acercarse a un cadáver, porque los
muertos muestran la corrupción y el fruto del pecado.
 Nunca pasar navaja sobre su cabeza, porque era una señal pública, y visible para otros
del voto.
 Normalmente, el voto del Nazareo era tomado por un período de tiempo establecido y
más bien corto. Samuel y Sansón (Jueces 13:5) fueron únicos, porque fueron Nazareos
de nacimiento.

El niño que naciera sería un sacerdote y serviría toda su vida en el templo del Señor, debido a
que partencia a la tribu de Levi, recordemos que Dios separo a esa tribu como su posesión
especial. Pero el tiempo de la dedicación especial para el servicio de los Levitas al Señor era a
partir de los 30 años y estos servían hasta cumplir los 50 años (Números 4:2-3). Como
explicamos el caso de Samuel aquí, Ana estaba tomando algo que ya le pertenecía al Señor en
cierto sentido, y se lo dedicaba otra vez al Señor en una manera más grande para toda la vida, y
en la dedicación de un Nazareo, lo cual era una consagración más grande que la de un levita. Es
difícil, incluso imposible entender todas las razones y dinámicas detrás del plan de Dios; pero
una cosa es cierta, si Dios quería que este pequeño niño fuera dedicado a Él en esta forma
especial, tenía que permitir que Ana llegara a esta posición de desesperación “Cuando la Biblia
dice que el Señor concederá los deseos de nuestro corazón, no es que Él va a cumplir nuestros
gustos y caprichos, sino que Él va a poner Sus deseos en mi corazón. Y cuando el deseo de Dios
conecta con el deseo del hombre, ocurren milagros como en el caso de Ana”.

Mientras Ana oraba largamente quiere decir literalmente, “mientras ella se multiplicaba para
orar.” este pasaje muestra que la oración que realiza es con gemidos indecibles (originalmente
lleva el significado literal de «sin palabras»; hace referencia a gemidos impronunciables que
constituyen códigos imposibles de descifrar por palabras o sonidos humanos). El hecho de que
Elí asumiera que ella estaba ebria, y la conducta inadecuada de los hijos de éste, prueban que
en ese tiempo la religión estaba en un punto muy bajo en Silo; porque parece que mujeres
ebrias se presentaban en el lugar, y pudieron ser encontradas ahí mujeres lujuriosas. (1 Samuel
1:12-14).

Ana respondió a Eli con mucho temor y respeto, lo haría recordando que él es su sumo
sacerdote, he derramado mi alma delante de Jehová “Ana elevó secretamente a Dios una
plegaria de manera continua, y fervorosa, depositando toda su fe en Dios”. Eli ora por Ana y
profiere palabra de lo alto, El Dios de Israel te otorgue la petición que le ha hecho, el cambio en
el semblante de Ana muestra que ella recibió la promesa con fe (1 Samuel 1:15-18).

1.3. EL NACIMIENTO Y LA DEDICACIÓN DE SAMUEL


Ana podía alabar genuinamente al Señor en fe, mientras la promesa todavía no se cumplía,
Jehová se acordó de ella: Usar el término se acordó de ella es un antropomorfismo 4, una
manera de explicar las acciones de Dios en términos humanos que nosotros podemos entender,
incluso si no describe a la perfección la acción de Dios “No es como si Dios hubiera olvidado
alguna vez a Ana”.

Al cumplirse el tiempo después de haber concebido, lo que significa es que, aunque su esposo
llegó a ella a su regreso, y Dios se acercó a ella, y tenía la intención de en su tiempo darle su
bendición, ella no concibió a la primera, sino días o un tiempo después. Ana criaría al niño hasta
que fuera destetado en la cultura hebrea, un niño no era destetado hasta los dos años de edad,
o algunas veces hasta los tres. Solamente que cumpla Jehová su palabra (1 Samuel 1:23) este es
un consejo maravilloso de Elcana, él está diciendo, “haz todo en obediencia a Dios para que
podamos ver su palabra cumplida entre nosotros.”

El hecho de que 1 Samuel 1:24 menciona tres becerros traídos a Silo, pero 1 Samuel 1:25
menciona que sólo se sacrificó uno (con algo de la carne disponible para la comida de
compañerismo) hace énfasis en que uno de los becerros fue ofrecido especialmente como una
ofrenda quemada para la purificación del pequeño Samuel.

La magnitud del sacrificio de Elcana cuando Samuel fue dedicado al Señor, al ofrendar un
becerro completo muestra que se hizo una ofrenda de personas mayores de edad por el pecado
para su dedicación “en la cultura hebrea se considera a una persona mayor de edad y
responsables de sus actos, a partir de los 12 años para los varones y 13 años para las mujeres” a
pesar de que Samuel tenía solamente tres años. Esta es una referencia sutil a la naturaleza
heredada de nuestra pecaminosidad, Aunque Samuel había pecado como un adulto, aun así, era

4
Siendo Dios un espíritu (no tiene materia) en la Biblia se le atribuyen frecuentemente cualidades humanas
constituyendo así un antropomorfismo. Así, Dios aparece representado como un ser dotado de características
físicas y emociones humanas: el brazo de Dios (Job 40:9)
un pecador culpable, porque había heredado una naturaleza pecaminosa de sus padres, tal
como todos lo hemos hecho.

Lo dedico también a Jehová pudiera entenderse literalmente como, “Y me hice pedirlo para el
Señor.” La idea no es que Ana “es dueña” del niño y se lo está “prestando” al Señor. Al
contrario, la idea es que el niño es su “oración”, o el cumplimiento de su oración al Señor. El
nombre Samuel significa “Dios oyó” pero Ana como era común entre los hebreos jugó con las
palabras al decir que ella lo había “pedido al Señor por él.” Y adoró allí a Jehová (1 Samuel 1:3,
19, 28).

1.4. CÁNTICO DE GRATITUD DE ANA


El Cántico de Ana es una oración que se convirtió en un canto. Es una alabanza que surgió del
agradecimiento a Dios por contestar su oración. Lo interesante es que este canto viene después
de haberse desprendido de Samuel, dejándolo al cuidado de Eli, el sumo sacerdote.

Al inicio del cántico Ana realiza una oración de agradecimiento (1 Samuel 2:1-2) reconoce que
Dios es justo y Él está en control de todas las cosas (1 Samuel 2:3-9) Al final del cántico, Ana deja
un mensaje profético que habla del Mesías “heb. Mashiaj, que literalmente significa: ungido” (1
Samuel 2:10).

Después de dejar a Samuel con Eli, Ana y Elcana regresaron a su casa, y siguieron su vida
normal, pero Samuel comenzó su vida extraordinaria. Podríamos pensar que Ana salió
perdiendo, ya que dejó ir a su hijo tan deseado; sin embargo, la realidad es que Dios tenía un
propósito en todo esto: a Ana le fue quitada la mancha de la esterilidad, y luego fue premiada
con más hijos; en cuanto a Samuel, él vivió para Dios (1 Sam. 2:18-21). La nación de Israel
tendría a su servicio a un hombre temeroso de Dios, alguien que cambiaría la historia de Israel;
Samuel, sería el juez, profeta y sacerdote que ungiría a los dos primeros reyes de Israel.

2. UN SACERDOCIO CORROMPIDO Y SUS CONSECUENCIAS


2.1. LOS HIJOS DE ELI HACÍAN LO MALO ANTE LOS OJOS DE DIOS
En ese tiempo, Eli era el Sumo Sacerdote. Pero él estaba viejo y cansado, por lo tanto, quienes
realmente manejaban los asuntos del tabernáculo eran sus hijos. Y la Biblia describe a los hijos
de Elí como hombres impíos, que no tenían conocimiento de Jehová (1 Samuel 2:12). La
descripción de “hombres impíos” suena muy suave en comparación al original; en hebreo se les
llama: Bnei Belial, que literalmente se traduce como: “Bnei”: hijos; “Belial”: sin valor, buenos
para nada, malignos, destructores.

La Biblia dice que los hijos de Eli “no tenían conocimiento de Jehová”. Esto no quiere decir que
no conocieran “acerca” de Dios, sino que no tenían una relación personal con el Señor. En
teoría, ellos estaban dedicados a servir a Dios, siendo sacerdotes; pero en la práctica no les
interesaba conocerle ni obedecerle. Eran hombres corruptos, y lo único que buscaban era su
propio beneficio, tal como lo refleja los siguientes versículos (1 Samuel 2:13-15).

Los levitas y sacerdotes tenían derecho a cierta parte de los sacrificios (la espaldilla, las quijadas
y el cuajar Deut. 18:1-5) pero no todo, como lo tomaban los hijos de Eli. La grasa era para Dios
(Lev. 7:29-36), pero ellos la arrebataban. Por lo demás, ellos no debían comer la carne cruda, ya
que todavía tiene sangre (Lev. 3:16-17). Pero todo esto no les importa a los hijos de Eli porque
no respetaban a Dios ni al pueblo. Todo lo que buscaban era su propia satisfacción y placer.
Ellos “hacían lo que querían”, tal como el pueblo en la época de los jueces (Jue. 21:25). Ellos
querían servir a Dios “a su manera”. Por lo cual vemos que los hijos de Eli no hacían esto por
“ignorancia”, pues como sacerdotes ellos eran los encargados de enseñar las leyes al pueblo. Y
cuando alguien los corregía, ellos simplemente lo desestimaban, y hacían lo que querían (1
Samuel 2:16-17)

Ellos faltaban el respeto a Dios, y también al pueblo no sólo a los que llevaban sus ofrendas, sino
también a las mujeres que llegaban al Tabernáculo. (1 Samuel 2:22) Pero Elí era muy viejo; y oía
de todo lo que sus hijos hacían con todo Israel, y cómo dormían con las mujeres que velaban a
la puerta del tabernáculo de reunión “estas mujeres venían a la puerta del tabernáculo por
piedad y terminaban siendo aprovechadas sexualmente por sacerdotes impíos”. Esta actuación
sólo ofendía a Dios y denigraba el sacerdocio.

2.2. LA REACCIÓN DE ELI ANTE LAS ACCIONES MALAS DE SUS HIJOS


A Eli le llegaban quejas del mal comportamiento de sus hijos, pero no hizo nada al respecto.
Aparentemente Eli sí era un hombre temeroso de Dios, pero su debilidad eran sus hijos. Él era
muy permisivo con sus hijos, y cuando los corregía lo hacía de una forma muy débil y sin
consecuencias. (1 Samuel 2:23-24) Y les dijo: ¿Por qué hacéis cosas semejantes? Porque yo oigo
de todo este pueblo vuestros malos procederes. No, hijos míos, porque no es buena fama la que
yo oigo; pues hacéis pecar al pueblo de Jehová.

Ya que Eli no ponía límites a sus hijos ni les señalaba las consecuencias de sus malos actos,
entonces lo haría Dios mismo. Eli lo sabía, y por eso dijo: (1 Samuel 2:25) Si pecare el hombre
contra el hombre, los jueces le juzgarán; mas si alguno pecare contra Jehová, ¿quién rogará por
él? Pero ellos no oyeron la voz de su padre, porque Jehová había resuelto hacerlos morir.

Dios sabía que los hijos de Eli nunca iban a arrepentirse, y por eso los entregó a la dureza de sus
corazones (como sucedió con el Faraón). Eli no disciplinó a sus hijos, y eso los llevó a su propia
destrucción. Ahora en cierto sentido, Eli también expresó su carnalidad, porque prefirió
mantener el favor de sus hijos que el favor del Señor. Eli falló en dos cosas: Nunca disciplinó a
sus hijos y les permitió seguir como sacerdotes, a pesar de su comportamiento.

Debido al pecado de los hijos de Eli el pueblo menospreciaba las ofrendas a Jehová, y hacían
que pecaran contra Jehová volviendo a los israelitas contra el culto de Jehová, defenestrando
así el sacerdocio impuesto por Dios. A causa de la tolerancia de los pecados de sus hijos Eli se
volvió cómplice de ellos.

2.3. PROFECÍA DEL JUICIO DE DIOS SOBRE LA FAMILIA DE ELI


Antes de traer juicio sobre los hijos de Eli, Dios todavía les dio una oportunidad para
arrepentirse, enviando a un profeta con el último llamado de atención 1 Samuel 2:27-29 “Y vino
un varón de Dios a Elí, y le dijo: Así ha dicho Jehová: ¿No me manifesté yo claramente a la casa
de tu padre, cuando estaban en Egipto en casa de Faraón? Y yo le escogí por mi sacerdote entre
todas las tribus de Israel, para que ofreciese sobre mi altar, y quemase incienso, y llevase efod
delante de mí; y di a la casa de tu padre todas las ofrendas de los hijos de Israel. ¿Por qué habéis
hollado mis sacrificios y mis ofrendas, que yo mandé ofrecer en el tabernáculo, y has honrado a
tus hijos más que a mí, engordándoos de lo principal de todas las ofrendas de mi pueblo Israel?”

El mensaje era para Eli, quien es el principal responsable de lo que sucede en el Tabernáculo, y
además es la autoridad en su casa. Si Eli hubiera disciplinado a sus hijos, o los hubiera sacado de
su servicio santo a causa de su mal comportamiento, eventualmente todo hubiera caído en
orden. Pero Dios le llamó la atención diciendo que la raíz de todo el mal era que Eli honraba más
a sus hijos que a Dios.
A continuación, el profeta delineó las consecuencias del pecado de Eli y sus hijos (1 Samuel
2:30-33). El castigo del Señor no sólo seria para los hijos de Eli, sino para toda su descendencia,
la cual sería cortada del sacerdocio por deshonrar a Dios. La palabra para “brazo” en hebreo es:
Zeroa, que representa la fuerza y el poder de un hombre “es el miembro que realiza el trabajo”.

El inicio del juicio de Dios será la muerte de los dos hijos de Eli, a quienes menciona por nombre
en esta ocasión: 1 Samuel 2:34 “Y te será por señal esto que acontecerá a tus dos hijos, Ofni y
Finees: ambos morirán en un día”. Estos dos hijos eran los herederos 5 del puesto de sumo
sacerdote. Pero el hecho que mueran lo hijos de Eli no significaba que el sacerdocio en Israel
acabaría. Eventualmente Dios levantaría otros sacerdotes que horarian a Dios. 1 Samuel 2:35 “Y
yo me suscitaré un sacerdote fiel, que haga conforme a mi corazón y a mi alma; y yo le edificaré
casa firme, y andará delante de mí ungido todos los días”. En cuanto a los descendientes de Eli,
quedarán sin trabajo y sin recursos. 1 Samuel 2:36 “Y el que hubiere quedado en tu casa vendrá
a postrarse delante de él por una moneda de plata y un bocado de pan, diciéndole: Te ruego que
me agregues a alguno de los ministerios, para que pueda comer un bocado de pan”.

3. DIOS MANTIENE EL SACERDOCIO EN MEDIO DE LA MALDAD


3.1. SAMUEL OBEDECE AL LLAMADO DE DIOS
Cuando Samuel llegó a la casa de Eli, él era un niño pequeño, que apenas había dejado de
mamar (posiblemente de 3 años de edad). En el capítulo tres, encontramos que Samuel ha
crecido un poco, pues la Biblia ya no lo llama “niño” (heb. Yeled), sino “joven” (heb. Naar), tal
vez un adolescente. Según el historiador Josefo, Samuel tenía 12 años en este punto de la
historia. Samuel probablemente tenía la edad del “bar mitzva” (lit. hijo del mandamiento), que
en la tradición hebrea es la edad cuando se considera a un joven responsable ante Dios de
cumplir los mandamientos.

La descripción que la Biblia hace de Samuel en el primer versículo del capítulo tres, nos hace
pensar que Samuel servía a Eli, y esa era su forma de servir a Dios. (1 Samuel 3:1) El joven
Samuel ministraba a Jehová en presencia de Elí; y la palabra de Jehová escaseaba en aquellos
días; no había visión con frecuencia. La Biblia nos da una perspectiva acerca de la situación

5
Un heredero es aquel que tiene derecho a heredar de un progenitor o de parte de otros, propiedad, títulos u otros
beneficios. Pero herederos, en un sentido eterno, abarca más que una herencia y deben ser designados basándose
en la rectitud y en la obediencia a la ley divina
espiritual de ese tiempo: había religión, pero no relación con Dios. Literalmente dice que no era
común que las personas oyeran la voz de Dios o recibieran visiones o revelaciones proféticas.

En cuanto al liderazgo espiritual, vemos a un sumo sacerdote que está ya viejo y ciego (lo cual
parece ser también una afección espiritual, y no sólo física 1 Sam. 2:22-25). La palabra de Dios
nos menciona este hecho en 1 Sam. 3:2 “Y aconteció un día, que estando Elí acostado en su
aposento, cuando sus ojos comenzaban a oscurecerse de modo que no podía ver”, Y si Eli
estaba en una mala condición espiritual, sus hijos estaban aún peor, tal como mencionamos en
los párrafos anteriores, donde son descritos como hombres inicuos que no conocían a Dios ni
tenían temor de Él (1 Sam. 2:12). En medio de ese ambiente negativo fue criado Samuel, pero
fue protegido por Dios. Durante su niñez y juventud, Samuel vivió con Eli en los aposentos del
Tabernáculo en Silo.

3.2. DIOS LLAMA A SAMUEL


Cuando Samuel dejó de ser un niño para convertirse en un “bar mitzva” (lit. hijo del
mandamiento) un joven responsable ante Dios de cumplir los mandamientos, él recibió un
llamado personal de Dios 1 Samuel 3:4 “Jehová llamó a Samuel; y él respondió: Heme aquí”. Fue
Dios quien llamó a Samuel, pero el joven creyó que era Eli quien lo llamaba. Posiblemente
Samuel pensó que había oído la voz en sus sueños. Pero pronto se dio cuenta que la voz era
real, ya que la volvió a oír. De nuevo pensó que Eli lo había llamado, pero no era así.

Y Jehová volvió a llamar otra vez a Samuel, estaba oyendo la voz de Dios, pero no la reconocía
porque nunca antes la había escuchado. 1 Samuel 3:7 “Y Samuel no había conocido aún a
Jehová, ni la palabra de Jehová le había sido revelada”.

Por tercera vez Samuel oyó una voz que le llamaba, y de nuevo fue con Eli. En esta ocasión, Elí
sospechó que era Dios quien quería hablar con Samuel, y le sugirió hacer lo siguiente: 1 Samuel
3:9 “Y dijo Elí a Samuel: Ve y acuéstate; y si te llamare, dirás: Habla, Jehová, porque tu siervo
oye. Así se fue Samuel, y se acostó en su lugar”. Es probable que Dios provocó todo esto con Eli,
para que él supiera que Dios tenía un mensaje para él. Samuel siguió las instrucciones de Eli, y
respondió al llamado de Dios: Esta fue la primera palabra profética que recibió Samuel. Y el
mensaje no era para él mismo, sino para Elí:
1 Samuel 3:11-14 Y Jehová dijo a Samuel: He aquí haré yo una cosa en Israel, que a quien la
oyere, le retiñirán ambos oídos. Aquel día yo cumpliré contra Elí todas las cosas que he dicho
sobre su casa, desde el principio hasta el fin. Y le mostraré que yo juzgaré su casa para siempre,
por la iniquidad que él sabe; porque sus hijos han blasfemado a Dios, y él no los ha estorbado.
Por tanto, yo he jurado a la casa de Elí que la iniquidad de la casa de Elí no será expiada jamás,
ni con sacrificios ni con ofrendas.

La Palabra que Samuel recibió era la confirmación de la palabra dada por el otro profeta (cap.
2:27-36). Esta era una palabra muy dura, y por eso Samuel no la dijo de inmediato. Pero ya
sabiendo Elí que Dios le había hablado a Samuel, le preguntó directamente, y en cierta manera
lo obligó a decírselo: 1 Samuel 3:16-17 “Llamando, pues, Elí a Samuel, le dijo: Hijo mío, Samuel.
Y él respondió: Heme aquí. Y Elí dijo: ¿Qué es la palabra que te habló? Te ruego que no me la
encubras; así te haga Dios y aun te añada, si me encubrieres palabra de todo lo que habló
contigo”.

Ante eso, Samuel le contó todo. 1 Samuel 3:18 “Y Samuel se lo manifestó todo, sin encubrirle
nada. Entonces él dijo: Jehová es; haga lo que bien le pareciere”. La respuesta de Elí es
conflictiva, ya que por un lado da la apariencia de humildad, aceptado el dictamen de Dios; pero
por el otro lado, se hace evidente que no quiso arrepentirse, porque todavía tenía la
oportunidad de poner en orden a sus hijos. Como veremos más adelante, Elí no los corrigió, y ni
siquiera los sacó del sacerdocio, porque seguirán en sus puestos deshonrando a Dios por un
tiempo más.

La diferencia entre los hijos de Elí y Samuel era que los hijos de Eli no conocían a Jehová por lo
cual hicieron lo malo ante sus ojos, en cambio Samuel conoció a Jehová por que se le manifestó
esto lo llevo a servir a Jehová con temor (1 Samuel 3:19-21).

4. CUMPLIMIENTO DEL JUICIO DE DIOS SOBRE ISRAEL


4.1. DERROTA ANTE LOS FILISTEOS
En el tiempo de Sansón y Samuel, los filisteos se levantaron a pelear en contra de los israelitas.
La palabra “Filisteos” en hebreo es: Pilshti que significa “inmigrantes”. Era una nación que se
cree que provenía de la isla de Creta. Era un pueblo marítimo y comerciante, que se había
establecido en la costa de Canaán. Sin embargo, comenzaron a avanzar tierra adentro, en
territorio israelita. Ante eso, los israelitas salieron a su encuentro.

En el primer enfrentamiento militar con los filisteos, no les fue bien a los israelitas. Ante la
derrota, los israelitas se preguntaron por qué razón Dios permitió tal cosa. La pregunta que
hicieron era correcta, pero llegaron a una conclusión errada. Era bueno preguntarse la razón de
la derrota. Sólo tenían que ir a la Palabra de Dios para descubrir la razón. En Deuteronomio
encontramos la respuesta: (Deut. 28:15 - 25) El pueblo de Israel se alejó de los caminos de Dios,
eran irreverentes a las cosas sagradas a causa de los hijos de Eli.

En lugar de preguntarse qué hicieron mal para traer esas consecuencias sobre sí, ellos
prefirieron una salida fácil, buscaron algo que trajera “buena suerte”. Por eso, se les ocurrió
llevar el arca del pacto al terreno de batalla utilizando como amuleto, pensaron que Dios podía
ser obligado a favorecerlos. La idea de llevar el Arca a la batalla probablemente surgió de la
experiencia de Israel en el desierto. Cuando los israelitas iban en camino hacia la Tierra
Prometida, el Arca iba delante de ellos guiándolos (Núm. 10:33-34). Cuando Dios indicaba que
debían moverse o acampar, Moisés lo anunciaba al pueblo (Núm. 10:35-36) “Este mensaje era
importante para los israelitas, ya que les hacía saber que Dios iba delante de ellos y les ayudaría
a vencer a los enemigos que enfrentarían en la Tierra Prometida.” El poder para vencer no venía
del Arca en sí, sino de lo que representa. Dios había prometido que les daría victoria sobre sus
enemigos, bajo el entendido que los israelitas obedecerían Su Voz y guardarían el Pacto (Éxodo
23:20-23).

El pueblo escogió el camino fácil, y fueron a buscar el Arca de Dios, que se encontraba en el
Tabernáculo en Silo. Quien estaba a cargo del Tabernáculo en ese tiempo era Eli, pero él no
aparece. Quienes toman protagonismo son los hijos Eli, quienes se prestaron para el plan del
pueblo (1 Samuel 4:4). El Arca del Pacto estaba guardada en el Lugar Santísimo, y nadie podía
entrar allí más que el Sumo Sacerdote, sólo en el Día de Expiación (heb. Yom Kipur). Pero a los
hijos de Eli no les importó eso, pues no respetaban las cosas santas del Tabernáculo.
Simplemente entraron y se llevaron el Arca. El hecho que los sacerdotes no hayan muerto al
entrar al Lugar Santísimo nos revela que la presencia de Dios ya había abandonado ese lugar, lo
cual quedara confirmado al final del capítulo.
Los hijos de Eli llevaron el Arca hasta el campamento militar. Cuando llegaron, hubo una gran
conmoción. 1 Sam. 4:5 “Aconteció que cuando el arca del pacto de Jehová llegó al campamento,
todo Israel gritó con tan gran júbilo que la tierra tembló”. Tal fue la conmoción, que llegó a
oídos de los filisteos, quienes estaban acampados cerca. Irónicamente, los filisteos tuvieron más
temor de Jehová que los propios israelitas. A pesar que ya habían pasado más de cuatrocientos
años desde que los israelitas habían salido de Egipto, los filisteos aún recordaban las historias de
lo que Dios hizo por Israel. Tuvieron miedo porque creían que les esperaba el mismo fin (1
Samuel 4:8-9).

Los filisteos tenían miedo del Dios de Israel, pero no al punto de someterse a Él. En ese tiempo,
cuando dos pueblos entraban en guerra, el pueblo que perdía quedaba como siervo del
vencedor ya sea que eran esclavizados o quedaban pagando impuestos. Los israelitas fueron
derrotados por segunda vez A pesar que el Arca los acompañaba 1 Samuel 4:10 “Pelearon, pues,
los filisteos, e Israel fue vencido, y huyeron cada cual a sus tiendas; y fue hecha muy grande
mortandad, pues cayeron de Israel treinta mil hombres de a pie”.

En la primera batalla murieron 4 mil israelitas; y en la segunda batalla les fue mucho peor,
falleciendo 30 mil. Israel no sólo perdió la batalla, sino que también perdieron el arca del pacto
y fueron muertos los hijos de Eli, Ofni y Finees (1 Samuel 4:11).

4.2. CUMPLIMIENTO DEL JUICIO DE DIOS


Las malas noticias no tardaron en llegar a Silo. Todo el pueblo estaba esperando noticias, sobre
todo Eli, quien se había quedado muy preocupado porque se habían llevado el Arca del Pacto.
La Biblia cuenta que Eli tenía en ese entonces 98 años, y estaba ciego cuando recibió la noticia
(1 Sam. 4:15) de parte de un hombre que escapo de la batalla 1 Sam. 4:16-18 “Dijo, pues, aquel
hombre a Elí: Yo vengo de la batalla, he escapado hoy del combate. Y Elí dijo: ¿Qué ha
acontecido, hijo mío? Y el mensajero respondió diciendo: Israel huyó delante de los filisteos, y
también fue hecha gran mortandad en el pueblo; y también tus dos hijos, Ofni y Finees, fueron
muertos, y el arca de Dios ha sido tomada”.

El día en que los hijos de Eli profanaron el Lugar Santísimo e hicieron mal uso del Arca del Pacto,
ese fue el día final de la Casa de Eli. En un solo día murió el sumo sacerdote y sus dos posibles
sucesores. Pero estas no fueron las únicas tragedias de ese día. Finees era uno de los hijos de Eli
que murió ese día. La Biblia cuenta que la esposa de Finees estaba esperando un hijo. Pero el
susto de la muerte de su esposo, su cuñado y suegro, provocó que la mujer diera a luz
prematuramente y esta se desangrara hasta el punto de morir (1 Samuel 4:19-21), Antes de
morir, ella profirió unas palabras proféticas: (1 Samuel 4:21-22) Y llamó al niño Icabod, diciendo:
¡Traspasada es la gloria de Israel! por haber sido tomada el arca de Dios, y por la muerte de su
suegro y de su marido. Dijo, pues: Traspasada es la gloria de Israel; porque ha sido tomada el
arca de Dios.

Icabod significa literalmente: “sin gloria”. La mujer relacionó la gloria de Israel con el Arca del
Pacto. La palabra que se traduce como “traspasada”, en hebreo es: Galá, que está relacionada
con “Galut”: exilio. El arca fue raptada, y en forma simbólica se fue al exilio. Este hijo representa
el fruto de las obras de los Hijos de Eli. Los Hijos de Eli representan un sistema religioso que
habla de Dios, pero no lo conoce. El último sacerdote del linaje de Eli fue Aviatar, a quien
Salomón les quitará su liderazgo por haberse aliado con Adonías (1 Reyes 2:26-27).

Con la muerte de Eli y sus hijos, todo el sistema religioso se vio afectado. El Tabernáculo quedó
sin sus principales sacerdotes, y sin el Arca del Pacto. Lo más significativo es que la Presencia de
Dios había abandonado el lugar (Salmo 78:60). El Tabernáculo caído en Silo se quedó como un
adagio que usado posteriormente como advertencias de juicio si el pueblo no se arrepentía (Jer.
7:11-12; Jer. 26:4-9).

5. SINSABORES DE LOS FILISTEOS CON EL ARCA


Los filisteos pensaron que Dagón, el dios cananeo del trigo, les había dado la victoria. Colocaron
el arca en su templo como un trofeo de guerra. Pero Jehová no es un dios al que se le pueda
inmovilizar fuera de su territorio; al día siguiente, los filisteos encontraron a su dios tendido en
el suelo besando el polvo. Al otro día, de Dagón 6 no quedaba más que el tronco. Tuvieron que
cambiar el arca de un lugar a otro, y cada vez los castigos sobre los ídolos y sus adoradores
fueron más penosos y humillantes. La forma de expiación, los ratones de oro o ratas, muchos
teólogos sugieren que los tumores fueron consecuencia de la peste bubónica que propagaban
estos animales

6
Dagón era el principal dios de los filisteos, cuya figura era mitad pez, mitad hombre. (en hebreo, Dag significa: pez)
Los filisteos decidieron finalmente devolver el arca. La prueba concluyente de que la plaga fue
acción de Jehová, fue que las vacas que nunca habían llevado yugo y que estaban criando,
marcharon directamente hacia la tierra de Israel tirando la carreta con el arca. Era obvio que un
ser invisible las arrastraba. El gozo de los hebreos en Bet-semes, al ver el arca, se tornó en
consternación cuando Dios castigó su curiosidad irreverente; tenían que aprender que Jehová es
santo y no permite que personas no santificadas se le acerquen. La Versión de los Setenta
reduce los 50.070 muertos a 70, cifra que armoniza mejor con lo que parece ser la realidad. Se
guardó el arca en Quiriat-jearim, ciudad gabaonita situada en los confines de Judá y Benjamín.
Se quedó allí hasta los días de David, unos 70 años después.

6. MINISTERIOS DE SAMUEL
La captura del arca fue en realidad una bendición disfrazada. En vez de significar la caída de
Israel, como había temido Elí, preparó el camino para efectuar un cambio espiritual. "Toda la
casa de Israel lamentaba en pos de Jehová"~ dándose cuenta de que la ubicación del arca en
una casa particular señalaba qué mal andaba el estado espiritual de la nación. El autor inspirado
no nos proporciona detalles de este período en que no hubo caudillo hasta que Samuel llegara a
la edad de tomar de lleno las riendas de Israel. Terminado el período de 20 años de silencio,
aparece Samuel instando a los israelitas a dejar sus ídolos y a volverse al único Dios verdadero.
Era plenamente reconocido como sacerdote, profeta, juez, y hombre poderoso en la oración, y
llegó a ser el restaurador de Israel.

Se produjo un gran avivamiento en toda la nación. El paciente ministerio del profeta rindió
frutos. Samuel convocó a una gran asamblea en Mizpa para volver decisivamente a Israel a Dios.
Cuando el pueblo de Dios se congrega unánime en Un lugar, le da a Dios la oportunidad de
bendecir en una forma que es imposible de otra manera. El arrepentimiento fue expresado con
el derramamiento de agua ante Jehová (símbolo solemne del corazón y la vida derramados en
dolor por el pecado y en consagración), con el ayuno y con la confesión pública de los pecados.

Los filisteos, alarmados por las noticias de la asamblea, lanzaron un ataque. ¿Por qué Dios les
permitió amenazar a Israel durante esta época de arrepentimiento y bendición? Dios siempre
ha puesto a prueba a su pueblo. Quería demostrarles que creían en algo real y enseñarles lo que
haría por su pueblo ya arrepentido, que confiaba, en El. Samuel animó a los israelitas a que
tuviesen fe, luego ofreció un sacrificio y oró fervientemente. Dios contestó desencadenando
una terrible tempestad con truenos y relámpagos. Los filisteos se espantaron y huyeron de los
israelitas. Schultz comenta: "Evidentemente el efecto de los truenos adquirió un carácter
portentoso en su significado para los filisteos, ya que nunca más intentaron comprometer a los
israelitas en una batalla mientras que Samuel estuvo al mando de las tribus7.

Como juez, Samuel recorría anualmente un circuito, ejerciendo sus funciones en muchas
poblaciones, tales como Bet-et Gilgal y Mizpa. Ponía sus servicios al alcance de todos. Por
primera vez en muchas generaciones, Israel tenía un dirigente realmente preocupado por su
estado espiritual. También edificó un altar en Ramá. Era honrado en todas sus acciones y podía
desafiar a todo el mundo a señalar un solo caso en que hubiera pervertido la justicia o se
hubiera comportado incorrectamente.

En esos años, Samuel también formó una compañía de profetas, discípulos suyos que vivían en
pequeños grupos comunales y profetizaban en éxtasis al son de la música (1 Samuel 10:5).
Aunque a veces los hijos de los profetas poseían conocimientos sobrenaturales del futuro (2
Reyes 2:3,5), por regla general profetizaban en el sentido de dar gracias y alabar a Jehová, como
en el caso de los levitas en la época de David (1 Crónicas 25:1-3). No deben ser considerados al
nivel de los grandes profetas. Probablemente realizaran cultos al aire libre, predicaran,
danzaran dando glorias· a Dios, y ayudaran a los profetas a cultivar la vida espiritual de Israel.
Subsistieron largo tiempo en la historia hebrea, siendo famosas las comunidades de profetas
sobre las cuales presidía Eliseo.

la mayor contribución que el profeta Samuel tuvo fue el de unir a las doce tribus, fue el primer
hombre desde Josué, a quien Dios pudo emplear para provocar un avivamiento espiritual en
medio del pueblo, y que trajo victoria a toda la nación hebrea.

6.1. ESTABLECIMIENTO DE LA MONARQUÍA


6.1.1. ISRAEL PIDE REY
La petición de los ancianos de Israel para que Samuel les diera un rey, tenía corno pretexto la
vejez del profeta y la venialidad de sus hijos nombrados jueces en Beerseba. Detrás de su
solicitud estaba la inquietud de la amenaza filistea. Los belicosos filisteos, a pesar de su derrota

7
Grupo humano de naturaleza homogénea en raza y ascendencia, que mantiene afinidades sociales, culturales,
religiosas y ordinariamente se mantiene unida por vínculos familiares en régimen de patriarcado. El pueblo de
Israel se presentó en doce tribus o conjuntos sociales, con diversidad de familias dentro de la tribu.
en Mizpa, mantenían el control de gran parte del territorio israelita. Tenían el monopolio del
hierro y habían expulsado a los herreros hebreos. No había herrero ni aun para arreglar las
herramientas de labranza, mucho menos para fabricar armas (13:19-21). También los amonitas,
gente nómada del desierto situado al oriente de Transjordania, amenazaban la nación. Urgía
cada día más la necesidad de un fuerte gobierno central para unir a las tribus, que gozaban de
gran autonomía.

Hasta ese momento, el gobierno de Israel había sido una teocracia, es decir, Jehová era su rey
(Éxodo 15:18). Este concepto fue expresado por Gedeón (Jueces 8:23). De tiempo en tiempo
Dios había levantado jueces para gobernar. Sin embargo, los jueces no dejaban sucesores, y
eran largos los lapsos entre uno y otro; mientras tanto, la nación no tenía cabeza para guiarla ni
caudillo para defenderla. A menudo reinaba el caos, y la nación apostataba cada vez más.
Samuel fue el único juez que logró unificar todas las tribus. Los israelitas veían alrededor de
ellos ejemplos de fuertes monarquías y querían tener un gobierno central y un defensor que
fuera su rey.

Por otra parte, parece que no se dieron cuenta de que las derrotas de Israel habían sido
causadas por su infidelidad y de que Dios los había liberado cada vez que se arrepentían. Tal vez
pensaron que una monarquía estable evitaría los altibajos del pasado.6 Además, el motivo por
el que querían tener rey era para ser como las otras naciones (8:5), algo diametralmente
contrario al elevado llamamiento divino de Israel. La seguridad de Israel y su felicidad dependían
del hecho de que era diferente a las otras naciones (Éxodo 8:23; 19:5, 6; Levítico 20:6;
Deuteronomio 7:6). Tenía que ser una nación apartada y diferente a las demás. Dios había
predicho que Israel tendría rey a su debido tiempo (Génesis 17:6; Números 24:17;
Deuteronomio 17:15), pero no le agradó el motivo principal de los ancianos; era un rechazo al
gobierno divino (8:7). Se querían adelantar a Jehová.

El rechazo al gobierno de Samuel por parte del pueblo, produjo la mayor desilusión de la vida
del profeta; pero consultó a Dios, el cual concedió su permiso sin dar su aprobación. Samuel les
advirtió en cuanto a los inconvenientes de la monarquía, pintando el sombrío cuadro de un
típico rey oriental, que reclutaría personal para que estuviera a su servicio y contribuyera a la
pompa real del palacio. Habría trabajos forzados y elevados impuestos; desaparecerían la
libertad y la igualdad entre el pueblo. Sin embargo, los ancianos persistieron en su petición.
Samuel es uno de los pocos grandes hombres de la historia que estuvieron dispuestos a
terminar un sistema que les parecía bueno, y con toda su fuerza y anhelo inaugurar otra forma
más popular. No siguió sus propias ideas, porque era un simple instrumento de Dios y siervo de
su pueblo.

6.1.2. SAMUEL UNGE AL PRIMER MONARCA DE ISRAEL


En cuanto al rey, Dios le dio a Israel algo más de lo que la nación merecía. No había nada de
segunda categoría en Saúl. Tenía un imponente aspecto físico: alto, fornido y de buen parecer.
Jehová le mudó el corazón, dando al agricultor rústico un corazón de un monarca; le dotó de los
dones y las potencias necesarias para cumplir con el llamado a la realeza. Al principio de su vida
pública, se mostró humilde, generoso y valiente. Logró de golpe la unidad de las tribus y su
apoyo, los cuales se mantuvieron durante todo su reinado. Además, tenía el apoyo y consejo de
un gran varón de Dios, Samuel, el hombre con más influencia en su país. Sin embargo, no supo
vivir de acuerdo con su gran oportunidad, y llegó a ser uno de los más trágicos personajes de la
historia sagrada.

La búsqueda de las asnas de su padre trajo a Saúl a la vecindad de la casa donde vivía Samuel.
No fue por simple coincidencia, aunque Saúl no se dio cuenta de que la mano de Dios le guiaba.
Había vivido aislado en su vida de campo y no había conocido nunca a Samuel. Se emplea un
antiguo término para denominar al profeta, "el vidente" (el que ve lo que está oculto, el que
posee una visión sobrenatural). Jehová le hizo saber a Samuel que aquél que sería el rey de
Israel vendría a él. También le reveló su gran propósito al elegir a Saúl: éste sería el libertador de
Israel, pues El había oído el clamor de su pueblo a causa de la opresión filistea (9:16). En aquel
momento, Israel necesitaba más que cualquier otra cosa un dirigente militar que lo condujera a
la victoria sobre sus enemigos. Así se reunieron en Saúl las cualidades de gran guerrero y de
libertador, sobre todo.

La unción de Saúl tuvo profundo significado religioso; era símbolo de que Dios lo había escogido
para gobernar a su pueblo, y de su consagración al oficio. La acción de derramar aceite sobre la
cabeza también simbolizaba la efusión del Espíritu, la cual acompañó a su unción poco después.
De allí en adelante, Saúl debía depender del Espíritu en 10 que respecta a la sabiduría y a la
fortaleza para gobernar. El rey era el "ungido de Jehová", una persona sagrada, y por 10 tanto
inviolable; David no se atrevía a poner las manos sobre Saúl (ver 1 SamueI24:6, 7; 26:9-11), y
mandó ejecutar al que cometió tal crimen (2 Samuel 1:14-16).

Tres señales le fueron dadas a Saúl por Samuel para confirmar que su elección como rey
provenía de Dios. Después, el profeta convocó a una asamblea nacional y presidió sobre una
elección tribal llevada a cabo echando suertes. Así se pondría de manifiesto que Jehová había
elegido a Saúl y se evitaría toda sospecha de que Samuel hubiera elegido rey al que le había
parecido. No es de extrañarse que algunos israelitas se mantuvieran alejados, pero la acción
militar contra Amón encabezada por Saúl unificó a la nación y sirvió para conseguir el apoyo de
todos.

Al ser elegido rey, Saúl actuó con prudencia, puesto que no tuvo el apoyo de todo Israel. No
mostró presteza indebida para asumir la autoridad y las responsabilidades de su nuevo puesto,
sino que volvió a su antigua vida de agricultor y esperó una oportunidad de manifestarse
ventajosamente ante los ojos de la nación. La amenaza de los amonitas le dio tal oportunidad, y
la gran victoria sobre ellos le dio el prestigio que necesitaba. Se vio aquí que Saúl había sido
ungido por el Espíritu para liberar a Israel a la manera de los jueces primitivos. Además, su
actitud perdonadora hacia los que le habían rechazado, le ayudó a lograr la estima de todos.
Entonces Samuel dispuso una nueva ceremonia en Gilgal para ratificar la institución de la
monarquía y aclamar públicamente a Saúl como rey.

Es interesante notar que Samuel preparó una especie de constitución que probablemente
explicara de qué manera el rey y el pueblo podían vivir bajo la dirección de Jehová (10:25). El
libro incluiría Deuteronomio 17:14-20, el pasaje que da instrucciones referentes a los reyes.
Jehová permitió que Israel tuviese rey, pero no tenía intención de que hombre alguno
gobernara sobre su pueblo como déspota arbitrario y monarca absoluto. Dice Ross: "El rey
humano habría de ser únicamente un virrey nombrado por Dios para gobernar en su nombre y
habría de ser responsable ante EI."7 Los profetas serían los guardianes de la monarquía
constitucional y tendrían el derecho y el deber de reprender a los reyes en situaciones que
justificaban tal acción. Es decir, estaban por encima del rey como representantes de Dios.
7. LA DESPEDIDA DE SAMUEL
Samuel comprendió que su ocaso había llegado. Por lo tanto, renunció a su cargo de gobierno
para dar lugar a otro hombre que sería soberano de la nación. Sin embargo, no abandonaría su
cargo profético ni dejaría de interceder por el bien de la nación (este caso Samuel se constituiría
en guardián de la monarquía constitucional y tendrían el derecho y deber de reprender al rey en
situaciones que justifican tal acción). En su discurso de despedida, apeló a la historia de Israel
para indicar que Jehová siempre se había revelado como el verdadero rey de Israel, y había
tratado con el pueblo de acuerdo con su actitud ante la Ley. La historia de Israel era una
repetición de pecado, servidumbre, dolor y salvación.

Afirmó que la monarquía por sí misma no los salvaría de los altibajos del pasado; por el
contrario, la institución de la monarquía era un paso contra el ideal de que sólo Jehová era el
rey de la nación, y si Jehová dejara de ser rey, perecerían tanto la nación como su monarca
visible. Sin embargo, Dios no desampararía a su pueblo, sino que, por amor de su gran nombre,
cumpliría su pacto a condición de que éste fuera fiel en lo sucesivo. El propósito de sus palabras
era provocar el arrepentimiento de Israel y la lealtad al rey invisible. Dios confirmó la profecía
de Samuel desatando una tempestad en los días de la siega (mayo-junio), fenómeno que no se
da en Palestina durante aquella época.

Aunque este discurso parecía una despedida, Samuel iba a seguir sirviendo como profeta,
hablando la palabra de Dios y enseñando la palabra al pueblo. Pero, a partir de este momento,
él iba a tomar un segundo plano en el liderazgo de Israel. Ahora Saúl sería el rey entre sus
hermanos, pero Samuel les hizo ver que la verdadera y máxima autoridad de Israel es Jehová su
Dios.

8. CONCLUSIONES:
Samuel fue un siervo de Dios integro en todos sus caminos, cuando revisamos su historia vemos
el cumplimiento de los propósitos de Jehová, utilizando las circunstancias más desfavorables
que podamos considerar. La madre de Samuel tuvo que pasar un tiempo de gran aflicción para
que pudiera comprender cual era el propósito de Dios. Asociados a Eli en el servicio del
santuario de Silo, estaban sus hijos, Ofni y Finees, igualmente sacerdotes; pero “los hijos de Eli
eran hombres impíos, que no tenían conocimiento de El Señor”.
La institución de la monarquía se presenta como una concesión de Dios a este deseo popular,
pero en ningún modo significa que el renunciara a ejercer la autoridad ultima sobre Israel, del
cual es el verdadero y definitivo Rey. Samuel seguía amando al pueblo de Israel a pesar de la
mala decisión que habían tomado muestra de aquello es que seguía intercediendo a Dios por su
pueblo, es tal que más adelante después que Saul se aparto de los caminos de Dios nuevamente
es el profeta que unge al futuro rey que en este caso llegaría a ser David de la tribu de Juda.

El resto del libro de Segunda Samuel está enteramente dedicado a los hechos ocurridos durante
el reinado de David y a las circunstancias en que este se desarrolló: la recuperación del Arca del
pacto, los aciertos y desaciertos del monarca, sus campañas militares y las sublevaciones que
hubo de reprimir.

A través de los escritos de Samuel sabemos que Dios se agrada de la obediencia y El aborrece la
rebelión y la obstinación los considera como quien practica adivinación y la idolatría. También
que El será y es la máxima autoridad y esta sobre todo reino terrenal.

Bibliografía:

 Los Libros Historicos - Pablo-Hoff


 Reina Valera 1960 - Casiodoro de Reina y Cipriano de Valera
 https://www.blueletterbible.org/Comm/guzik_david/spanish/StudyGuide_1Sa/
1Sa_01.cfm
 http://estudiobiblia.blogspot.com/2018/02/i-samuel-212-36-hijos-de-eli.html

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