You are on page 1of 3

¿Cuál es el propósito?

El propó sito de esta lectura es el conocimiento sobre los criterios que se deben utilizar
para evaluar la promoció n de la salud y la prevenció n de la enfermedad, esta lectura
nos instruye sobre las diferencias y estrechas relaciones que existen entre estos dos
pilares de la salud pú blica, a cerca de los criterios que pueden ser convenientes para el
diseñ o de sistemas de evaluació n de la promoció n de la salud y la prevenció n de la
enfermedad y por ultimo sobre los aspectos de la prevenció n de la enfermedad y
promoció n de la salud que pueden ser ú tiles como indicadores.

¿Cuáles son los supuestos del autor?

El autor comenta que hoy en día existe una gran confusió n en lo que a Prevenció n en
salud y en enfermedad respecta, es por esto que el autor trata de definir los criterios
que las diferencian y que aplicació n tiene cada uno de dichos criterios en la teoría y
prá ctica médica, pues el no hacerlo, conllevaría a sistemas de salud mucho menos
eficientes y con desordenes en sus distintos niveles de atenció n.

¿Qué teoría o modelos maneja?


La prevenció n de la enfermedad maneja el modelo diná mico de Leavell y Clark, el cual
explica la aparició n y el comportamiento de las enfermedades, proponían que la
enfermedad no era un hecho aislado, sino que era resultado de un proceso y este no se
terminaba cuando aparecían los signos y síntomas clínicos, pues suelen derivar en
consecuencias posteriores como la secuela, la invalidez o la muerte temprana

Su modelo supone que los seres humanos nacemos con una susceptibilidad variable
para responder desfavorablemente, a lo largo de la vida, a ciertos estímulos
potencialmente dañ inos denominados noxas.

Este modelo consta de unas divisiones:

 Prevenció n primaria: Es un nivel de intervenció n del proceso pató geno


constituido por todas aquellas acciones que se realicen en una població n sana
con la intenció n de evitar que los sujetos se expongan a una noxa o factor de
riesgo.

 Prevenció n secundaria: Es el nivel de intervenció n constituido por todas


aquellas acciones realizadas en poblaciones que han estado expuestas ya a una
noxa o que está comenzando a desarrollar el dañ o, con la intenció n de impedir
la aparició n de las manifestaciones clínicas, reducir su duració n o evitar sus
complicaciones

 Prevenció n terciaria: Es el nivel de intervenció n constituido por todas aquellas


acciones realizadas entre los enfermos que han presentado complicaciones,
con el fin de evitar la invalidez o la muerte temprana y rehabilitarlos.
La promoció n de la salud se rige por las conclusiones dadas en la primera conferencia
internacional sobre la promoció n de la salud, las cuales se plasmaron en la Carta De
Ottawa en la cual concluyeron que la estrategia para una buena promoció n de la salud
es el empoderamiento de la gente sobre los determinantes que afectan su salud y sus
fines, asegurar la igualdad de oportunidades y proporcionar los medios que permitan
a toda la població n desarrollar al má ximo su salud potencial.

Ademá s destaca ciertas condiciones consideradas como requisitos fundamentales


para la salud y en las que la estrategia de promoció n de la salud debía hacer énfasis, a
saber: la paz, la educación, la vivienda, la alimentación, el ingreso, un ecosistema
estable, la conservación de los recursos, la justicia social y la equidad.

Definió también cuatro á mbitos que consideró claves para la promoció n de la salud:

 El fortalecimiento de las habilidades y capacidades de los individuos.


 El mejoramiento de las condiciones sociales.
 El mejoramiento de las condiciones ambientales.
 El mejoramiento de las condiciones econó micas.

Igualmente, definió cinco á reas operativas para instrumentar la promoció n de la


salud:

 Construir una política pú blica de promoció n de la salud en el marco del


desarrollo social.
 Crear ambientes de soporte social que favorezcan la salud.
 Fortalecer la acció n comunitaria en la toma de decisiones que afectan su salud.
 Desarrollar las habilidades del personal para controlar la propia salud y los
factores ambientales que la afectan.
 Reorientar los servicios de salud no solo hacia el perfil epidemioló gico, sino
también hacia los condicionantes del desarrollo social, para que puedan dar
una respuesta má s integral a las necesidades de la gente.

Se han desarrollado varias propuestas afines, como la del movimiento de las ciudades
saludables, iniciado por otro canadiense, Trevor Hancock, y adelantado en América
Latina como municipios saludables.

La má s nueva evolució n del movimiento de promoció n de salud es la preocupació n


por un futuro saludable.
¿Cuáles son las implicaciones de esta lectura?

Yo diría que el definir y saber diferenciar los conceptos de PE y PS, mejorarían los
manejos y procesos de los distintos sistemas de salud de la actualidad y que má s bien,
dichos procesos deben ser tanto integrales para toda una població n e individuales
para una porció n de dicha població n que está frente a un riesgo específico.

You might also like