TRIBUNALES DE FAMILIA Ley 19.

968

La ley 19.968 indica en su art. 1, que se crean

los juzgados de familia, encargados de conocer los
asuntos de que trata esta ley y los que les encomienden
otras leyes generales y especiales, de juzgarlos y hacer
ejecutar lo juzgado.
Estos juzgados formarán parte del Poder Judicial y
tendrán la estructura, organización y competencia que la
presente ley establece.
En lo no previsto en ella se regirán por las
disposiciones del Código Orgánico de Tribunales y las
leyes que lo complementan.

En cuanto a la conformación de estos tribunales, cada juzgado de

familia tendrá un número de jueces variable que la misma ley se
encarga de señalar.
Cuentan con un consejo técnico, un administrador y una planta de
empleados de secretaría y se organizan en unidades administrativas.
Art. 2.
Cada juez debe ejercer unipersonalmente la potestad jurisdiccional
respecto de los asuntos que las leyes les encomiendan a estos
juzgados. Art. 3

De lo expresado se puede concluir que se trata de tribunales que, en

razón de la materia, son de carácter especial, forman parte del poder
judicial como tribunales especiales y poseen jurisdicción para conocer
de asuntos civiles contenciosos y no contenciosos, juzgarlos y hacer
ejecutar lo juzgado.
Su estructura y composición es distinta a la de los juzgados civiles,
toda vez que cuentan con un consejo técnico interdisciplinario
integrado por diversos profesionales especializados en asuntos de
familia, un administrador y personal administrativo que se organiza en
unidades.
Su competencia es extensa y se regula en el art. 8 de la ley 19.968

Principios
Se encuentran regulados entre los art. 9 a 16 y son los siguientes:
- Oralidad: La regla general, es que todas las actuaciones en
estos tribunales son orales salvo excepciones indicadas en la
propia ley. Se lleva un registro de las actuaciones orales que
garantice su conservación y reproducción y que da fe de los
mismos.

- Concentración: El procedimiento se desarrolla en audiencias

continuas pudiendo prolongarse en sesiones sucesivas hasta
que éstas concluyan. La excepción a este principio, se encuentra
en la facultad del tribunal de reprogramar una audiencia hasta
por dos veces en todo el juicio en caso de no estar disponible
una prueba relevante decretada por el juez.

- Inmediación: Las audiencias y diligencias de prueba se realizan

siempre en la presencia del juez, quien se forma su convicción
sobre la base de las alegaciones y pruebas que personalmente
haya recibido.

- Actuación de oficio: Promovido el proceso, el juez debe adoptar

todas las medidas necesarias para llevarlo a término. Este
principio se observa especialmente tratándose de medidas
destinadas a otorgar protección y en los casos de violencia
intrafamiliar.

- Colaboración: Tanto en el procedimiento como en su resolución,

el juez debe buscar alternativas orientadas a mitigar la
confrontación entre las partes, privilegiando las soluciones que
las mismas partes acuerden.
- Publicidad: Tanto las actuaciones jurisdiccionales como las de
procedimientos administrativos son públicos. Excepcionalmente,
a petición de parte, puede obviar el juez este principio. Siempre
que exista peligro grave que afecte la privacidad de las partes,
especialmente de los niños, niñas y adolescentes.

- Interés superior de niño, niña o adolescente y derecho a ser

oído: Es el principio rector en esta materia, tendiente a garantizar
a todos las niñas, niños y adolescentes que se encuentren en el
territorio nacional, el ejercicio y goce pleno y efectivo de sus
derechos y garantías. Se considera niño o niña a todo ser
humano que no ha cumplido catorce años y adolescente desde
los catorce hasta que cumpla los dieciocho años.

Reglas generales
Se consagran entre los art. 17 a 27 de la ley y se refieren a las
siguientes materias:

Acumulación necesaria: Se conocerá en un solo proceso los

asuntos que una o más partes sometan a su consideración,
siempre que se sustancien con el mismo procedimiento. La
acumulación procede hasta el inicio de la audiencia preparatoria.

Comparecencia: La regla es que se debe comparecer

patrocinado y representado por mandatario judicial.
Excepciones: Casos excepcionales que por motivos fundados
los autorice el tribunal o que se trate de procedimiento del título
IV.

Representación: En los asuntos que aparezcan involucrados

intereses de niños, niñas, adolescentes o incapaces el juez debe
velar por que se encuentren debidamente representados.

Abandono del procedimiento: Si llegado el día de audiencia no

comparece ninguna de las partes y el demandante o solicitante
no pide una nueva citación, dentro de quinto día, el juez procede
a declarar el abandono del procedimiento.

Potestad cautelar: En cualquier etapa de juicio o incluso antes de

su inicio, el juez de oficio o a petición de parte puede decretar
medidas cautelares. Estas pueden llevarse a efecto aún antes de
notificar a la persona contra quien se dictan, siempre que haya
razones graves. En tal caso, transcurridos cinco días sin que se
notifiquen, quedarán sin valor.

Notificaciones: La primera notificación de la demanda se hace

personalmente por un funcionario del tribunal quien actuará
como ministro de fe. La notificación del art. 44 también se
practicará por ese ministro de fe.
Las restantes notificaciones se practican por el estado diario
electrónico, salvo las sentencias definitivas y las que ordenen
comparecencia personal de las partes al juicio y que no se hayan
dictado en la audiencia, las que se practican por carta
certificada.
Esto es sin perjuicio de la carga de los patrocinantes de indicar,
en la primera actuación, otra forma de notificación para sí.

Nulidad procesal: Sólo se puede declarar la nulidad procesal

cuando se invocare un vicio que origine un efectivo perjuicio a
quien lo solicita, entendiendo que lo hay cuando el vicio hubiere
impedido el ejercicio de los derechos al litigante que lo reclama.

Incidentes: La regla es que los incidentes son promovidos en las

audiencias en que se originen y se resuelven inmediatamente
por el tribunal, previo debate. El fallo de un incidente no es
susceptible de recurso alguno. Excepcionalmente, se pueden
interponer incidentes fuera de audiencia, los que se resuelven de
plano por el tribunal, a menos que deba oírse a las partes, caso
en el cual se cita a audiencia especial dentro de tercero día.

La prueba
Se regula entre los art. 28 a 54 de la ley 19.968
Este es un procedimiento en que hay libertad probatoria, por lo
que es admisible cualquier medio de prueba que resulte
pertinente para la resolución del conflicto. La prueba puede
ordenarse a petición de parte o de oficio por el tribunal y se debe
ofrecer en la audiencia preparatoria. La prueba se valora
conforme a las reglas de la sana crítica.