TEORÍA EDUCACIÓN FÍSICA 1º BACHILLERATO 1ª EVALUACIÓN

1. BENEFICIOS DE LA PRÁCTICA DE ACTIVIDAD FÍSICA REGULAR

El ejercicio físico habitual, la adecuada nutrición y los hábitos saludables son las
actividades más importantes a lo largo de la vida para favorecer el correcto
funcionamiento del organismo.

Los beneficios para la salud del ejercicio físico son consecuencia del proceso de
adaptación de los aparatos y sistemas corporales al esfuerzo.

El ejercicio físico practicado habitualmente mejora la obtención y el almacenamiento

de energía, elimina grasas y permite la realización prolongada de esfuerzos.

Las adaptaciones cardiovasculares al ejercicio físico producen una mejora del

rendimiento del músculo esquelético al utilizar más eficazmente el oxígeno.

La mejora en el funcionamiento del corazón se debe al aumento del volumen sistólico,

el aumento de las cavidades y el fortalecimiento del miocardio.

El aumento de la superficie alveolar y del tamaño de los pulmones facilita el

intercambio gaseoso con un aprovechamiento mayor del oxígeno.

El incremento de la fuerza y la resistencia de la musculatura implicada en la respiración

hace más efectiva y pausada la respiración en reposo, y puede realizar esfuerzos de
mayor intensidad durante más tiempo.

El aparato locomotor ve mejorado sus funciones de sostén y movimiento del cuerpo,

al mejorar sus condiciones mecánicas y hacer más eficaz el metabolismo muscular.

El fortalecimiento de las articulaciones, los tendones y los ligamentos mejoran la

eficacia y la seguridad en los movimientos, por lo que reducen los riesgos de lesiones.

El ejercicio físico ocasiona una mejora de las funciones de percepción, decisión y

ejecución del sistema nervioso, lo que favorece la activación y la precisión de los
movimientos.

2. CAPACIDADES FÍSICAS

La condición física orientada hacia la salud tiene que ver con el bienestar del propio
sujeto, de tal forma que satisfaga tanto la necesidad de movimiento, como la de
mantener en buenas condiciones los órganos y sistemas corporales.

La resistencia cardio-respiratoria, la fuerza y resistencia muscular, la flexibilidad y la

composición corporal son los parámetros de la condición física orientada hacia la salud.
La Teoría del Estrés dice que ante una situación que rompe el equilibrio del organismo,
el cuerpo reacciona con una serie de ajustes fisiológicos para restablecer el equilibrio.

La reacción del organismo en el descanso tras el esfuerzo es la de restituir las pérdidas

ocasionadas por el agente estresante, pero de forma ampliada con respecto a los niveles
iniciales, fenómeno conocido como restitución ampliada.

A mayor esfuerzo, mayor tiempo de recuperación, y, por tanto, mayor el tiempo de

restitución ampliada del organismo. Un plan de entrenamiento bien diseñado tendrá
que poner los nuevos estímulos en la fase de restitución ampliada.

De la ley de Selye se deduce que es tan importante el entrenamiento como la

recuperación, que los esfuerzos hay que aplicarlos en los momentos oportunos, y que el
desgaste orgánico y la restitución ampliada son proporcionales al estímulo.

La ley de Schultz o Teoría del Umbral indica que cada persona tiene distinto nivel de
excitación ante un estímulo, y que para que se produzca adaptación, el estímulo debe
poseer la intensidad adecuada.

Los estímulos por debajo del umbral no entrenan.

Los estímulos fuertes producen fenómenos de adaptación y entrenan, y los estímulos

extremos son perjudiciales y producen fenómenos de sobreentrenamiento.

3. ACONDICIONAMIENTO FÍSICO

La resistencia cardio respiratoria, la flexibilidad, la fuerza y la resistencia muscular son

las capacidades físicas vinculadas a la condición física orientada hacia la salud.

Al desarrollo intencionado de estas capacidades le llamamos acondicionamiento

físico, que dará como resultado un determinado nivel de condición física, y a la forma
de organizar el acondicionamiento le llamamos entrenamiento.

Los elementos variables que determinan las características particulares de cada

entrenamiento son, el volumen o parámetro cuantitativo, y la intensidad o parámetro
cualitativo.

Las variaciones de los factores del entrenamiento que se realizarán estarán en función
del sistema que se use y la capacidad física a desarrollar.

Planificar un entrenamiento es el proceso por el cual, siguiendo las leyes y principios

del entrenamiento, organizamos y relacionamos las actividades, tareas y ejercicios para
la mejora de la condición física.

La planificación es un proceso abierto, en el que los objetivos se formularán de nuevo,

cuando la valoración de lo que se ha hecho indica que se alcanzaron los objetivos
 iniciales, y por tanto, hay que organizar nuevas actividades para alcanzar nuevas
mejoras.

Los objetivos de la planificación serán los referentes que mantendrán la constancia en

la práctica, debiendo formularse objetivos a corto y medio plazo que sean medibles.

Hay que valorar el nivel de condición física inicial, para determinar cuáles son las
mejoras necesarias.

Se elegirán los sistemas de entrenamiento para cada capacidad, cuidando de empezar

por los más sencillos para posteriormente variar en función de la mejora.

La valoración de los resultados servirá para observar el grado de cumplimiento de los

objetivos planteados inicialmente, y marcar nuevos objetivos que permitan alcanzar la
mejora de las capacidades físicas.

4. PRINCIPIOS DEL ENTRENAMIENTO FÍSICO-DEPORTIVO

Existen una serie de fundamentos para el diseño del entrenamiento físico-deportivo,

que nos invitan a establecer objetivos y a definir los principios que deben regir el diseño
y desarrollo de un plan de entrenamiento teniendo en cuenta los procesos biológicos de
adaptación del organismo a la actividad física:

Fundamentos
--------- Principio
Objetivos

Ante un mismo estímulo, el organismo de cada persona

responde de forma diferente.

Individualización
Atender las necesidades individuales para asegurar la
eficacia del entrenamiento y evitar consecuencias negativas
por la aplicación indebida de ejercicios.

En el organismo, los estímulos provocan adaptación y

mejora de las funciones orgánicas si, siguiendo la ley de Continuidad
Selye, se aplican en el momento adecuado.
 Someter al organismo a estímulos, de tal forma que
teniendo en cuenta la frecuencia produzca adaptación.

El incremento de la intensidad del estímulo provoca una

respuesta orgánica de adaptación progresiva a nuevos
esfuerzos.
Progresión
Provocar una respuesta adaptativa al progresivo
incremento del esfuerzo, a partir de tareas que
incrementan la intensidad de trabajo.

Los estímulos provocan adaptación y mejora de las

funciones orgánicas. Si se tiene en cuenta el umbral de
excitación, son de naturaleza adecuada.
Sobrecarga
Aplicar la intensidad adecuada en el entrenamiento para
que haya una mejora, a partir de un nivel de esfuerzo que
produzca efecto en el organismo.

Para que se dé una respuesta adaptativa del organismo, es

necesario tener en cuenta las fases de estimulación y
descanso o restitución.
Alternancia
Facilitar al organismo los periodos adecuados de descanso
tras el esfuerzo para que se cumpla la función de mejora
orgánica.

Otros principios a tener en cuenta para el diseño y la organización de las actividades del
entrenamiento surgen de consideraciones relacionadas con el funcionamiento del
organismo como unidad funcional, o bien de las necesidades y objetivos específicos para
los que se ha diseñado el entrenamiento:
• Multilateralidad: se debe considerar el cuerpo humano como una unidad morfo-
funcional, para la que debe establecerse un desarrollo inicial de todos sus segmentos y
de todas sus capacidades físicas y motoras.

• Especificidad: en función de objetivos concretos, se propicia un desarrollo de

capacidades concretas (físicas, motoras y técnico-tácticas) que requiera la práctica físico
deportiva que se pretende mejorar.

• Transferencia: se debe propiciar la asimilación de patrones motores comunes (físicos,

técnicos, tácticos...) a diversas actividades, para facilitar la riqueza y eficacia de los
movimientos.

• Eficacia: la actividad física abocada al desarrollo y mejora de la condición física debe

considerar la rentabilidad, tanto para la mejora del rendimiento, como para el beneficio
de la salud física, psicológica y social de la persona.
5. HÁBITOS DE VIDA SALUDABLE, HIGIENE POSTURAL Y NUTRICIÓN.