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Segunda parte: Reparaciones En la primera parte del libro hemos visto operaciones necesarias para mantener nuestra moto o scooter en un buen estado, con algunas propuestas para mejorar lo que nos ofrecen los fabricantes de serie. A pesar de nuestros cuidados, sin embargo, la mecanica tiene su desgaste y necesita de reparaciones 0 cambios periddicos; en esta segunda parte trataremos, precisamente, como detectar que necesitamos realizar una de estas operaciones y como hacerlo para realizarlo nosotros mismos o para entender lo que debera hacer nuestro mecanico de confianza. SEGUNDA PARTE: eee Chere ta Cmts orton tb CUE A CC) NO CesT Ce TEN ee ete Pte ane Oe que realmente Som PEpfaraciones ya que implican Oe uu jets one niéntos par Mlevai Beret ile personas dejan en manos profesionales Sorta ste en ene ety EARS ea SES SSN Cr eek Peete ee eee ee tees del motor 0 el liquido refrigerante. va tat pourames aja remarhate con sass torus beraniete 9) Yen cages aod erage ne munsra eine (a) Yass hoe qeeaar ecevacrrectament (ams doped tri mete CADENA SECUNDARIA Ya vimos en el capitulo 4 cémo verificar el estado de la cadena de nuestra moto, y lo importante que es ocupamos de su mantenimiento si quere- mos que nos dure muchos kilémetros y afios. Pero aunque seamos muy cuidadosos con ella y con nuestra conduccién (las brusquedades acortan su vida), tarde o temprano llegaré el momento de cambiarla, asi como también el pifién de salida del cambio y la corona de la rueda trasera: estas tres piezas conforman lo que conocemos con el nombre de «kit de transmisiém». Existen dos tipos de cadenas, las remachadas o cerradas y las desmonta- bles. Normalmente, las motos nuevas llevan cadenas remachadas de serie, mientras que lo habitual seri que en nuestra tienda favorita de acceso- rios s6lo vendan cadenas desmontables: esto no supondré un problema en motos de} la cadena sin remachada, 4 ‘mos desmon} importante se mueve la} rozar con all provocar un De todas f das ya que¢ cién de log remache de para remacl nuestra isi quere- Esmonta- ide seri acceso- yblema en motos de mediana Ja cadena sin remachar nos dard tan buen servicio y seguridad como la remachada, ademas de ser mucho més facil de desmontar (incluso podre- ‘mos desmontarla alguna vez para hacer una limpieza més profunda). Sera importante montar el clip de fijacién en el sentido de la marcha (tal como se mueve la cadena, con las patas abiertas hacia atrds) para evitar que, de rozar con algo, salte dejando la cadena con la posibilidad de perderse 0 provocar un problema serio si se quedara atascada. De todas formas, nuestro consejo es utilizar siempre cadenas remacha- das ya que existe una herramienta de coste relativamente bajo (una frac jén de lo que vale la cadena nueva) que nos servira tanto para eliminar el remache de la cadena vieja y asi poderla desmontar sin problema, como para remachar el eslabén suelto de la cadena nueva y conseguir un mon- CAPITULO 6 taje de méxima seguridad. Una alternativa seria, con una cadena cerrada, desmontar el basculante para poderla manipular sin abrir, aunque como deciamos, esa herramienta es eficaz, accesible e idéntica a la que se usa para cadenas de bicicletas, aunque més reforzada. El acceso al piftén en el eje de salida del cambio suele exigir despejar la zona (carenado) y desmontar la tapa, que en ocasiones incorpora algin ‘mando ya sea del propio cambio o del embrague. Tendremos cuidado con ello fijandonos bien en la posici6n de las piezas de cara al montaje poste- rior. El pifién en si puede estar fijo por una tuerea roseada en el eje del cambio que suele tener una rosca fina (habri que prestar atencién al rea- pretar el pifién nuevo), o més frecuentemente por una chapa de seguridad fijada por un par de tomillos. En cual- quier caso, sacar el usado y montar el nuevo no tendré mayor complicacién, Por otra parte, deberemos desmontar Ja rueda trasera de la moto para poder cambiar la corona, Normalmente ésta ir atornillada sobre una pieza que se aco- plaré a la lanta por medio de unas go- mas 0 silent-blocks que actian como amortiguadores de la transmisién y evi- tan golpes secos al reducir, por ejemplo, castigando menos la cadena y el cam- bio. Para sacar la rueda deberemos liberar en parte los tensores de la ca~ dena, soltar la tuerca que fija el eje y extraer el eje en si. Antes de sacarla abriremos de forma manual las pastillas del freno trasero (si fuera de tam~ bor, soltaremos el mando correspondiente). Con la corona nueva montada sobre el amortiguador de transmisién podremos volver a colocar la rueda en su sitio (véase, en este capitulo, el apartado dedicado a los discos de freno que trata de cémo soltar los tornillos que fijan la corona en caso de que no consigamos retirarlos ficilmente), El cambio de la cadena en si no tiene complicaciones, sobre todo si con- tamos con un tronchacadenas, tal como se ha comentado anteriormente. Abriremos la cadena vieja partiendo uno de sus remaches, la sacaremos y colocaremos la nueva. En motos con pasos complicados (guardacadenas grandes y estrechos, protector del pifién dificil de retirar y que ya hayamos lta PON A PUNTO TU MOTO Tipos de cadena y desarrollos hablar 520 y otras cifras que medida, Existen dos parémetros para definir una cadena, que son el paso (distancia decir ancho del rodilio interior). Los pasos mis habituales en motos son 1 40 (motos pequefias y alguna median) y 50 (motos de mediana a gran cilindrada), mientras que 530 (9,52 mm de ancho). La cadena es pesada, y forma parte del grupo Propulsor: una mas ligera permitiré mejorar las pérdidas por rozamiento, Y por eso se tienden a usar cadenas algo mas finas (S20 en lugar de 830) ‘cuando se usan motos las competicions wvisiones son frecuentes aunque se hhagan pocos kilémetros. Por otra parte, cuando ‘cambiemos el pifién y la corona, podemos hacerlo por un motivo diferente de nuestra moto, Veamos dos ejemplos opuestas: primero, una deportiva con la que visitamos frecuentemente el circuito © carreteras de curvas, y cuyo desarrollo impide us © dos tltimas marchas en esas condiciones porque so quedan demasiado larga fen este caso, nos inter acortar el desarrollo, bi menos (habra que ver lo que hay disponible y qué s posible montar en la marcha para desahogar el motor (gastaré menos combustible y desgastara menos); en este caso, montariamos un pliién de un diente més, ‘una corona de dos 0 tres, dientes menos, CADENA, FRENOS ¥ Ligue ALIS, vuelto a montar) ser una buena idea, tras partir la cadena vieja, usarla de guia para la nueva, uniendo temporalmente el final de la vieja al inicio de ia nueva y dejandola pasar por todo su recorrido, Finalmente, remachare- mos o uniremos con el clip correspondiente la cadena y procederemos @ comprobar su tensién para dejarla lista para su uso. Tras cambiar la cadena y tensarla, y a pesar de los indicadores que nos ayudan a mantener el paralelismo de Hlanta trasera y basculante, compro- baremos que tenemos bien alineadas las ruedas con la ayuda de un hilo PASTILLAS DE FRENO Cada vez que accionamos nuestros frenos, las pastillas rozan con el disco para convertir la energia cinética de la moto en calor, lo que genera u desgaste y provoca que las pastillas tengan una vida limitada. Normal mente, el ferodo (parte abrasiva que roza con el disco) tiene unas ranuras que, ademas de eliminar el polvillo o agua durante la frenada, sirven para indicarnos el desgaste: cuando la pastilla ha perdido tanto material como que las ranuras desaparezcan, estamos al final de su vida itil. ando unas pastillas de freno que hayan llegado a ese punto de hecho, el consejo es cambiarlas bastante antes, cuando hayamos de: gastado aproximadamente Ia mitad del material que traian de origen (un buen truco es hacerles una marca visible, como un corte, por ejemplo). Existen varios motivos para esto: a medida que la pastilla se gasta, los pistones van saliendo de sus alojamientos en las pinzas dejando mas liqu do en éstas y provocando que la maneta pierda recorrido itil si no relle- namos el depésito. El ferodo de las pastillas es bastante aislante del calor, pero como estén gastadas hay menos material en el punto de contacto entre pastilla y disco (muy caliente) y el liquido de frenos (tras el pist6 que empuja la pastilla), de forma que el liquido aleanzard con mas facili- dad temperaturas elevadas que cuando las pastillas son nuevas; a su vez, provocaran un tacto esponjoso debido a los latiguillos y eventuales bur- bujas en su interior. Por iltimo, otro motivo para no apurar las pastillas de CAPITULO 6 freno es que el material de fric- ccién se degrada con la temperatue ra y a medida que la pastilla se cerosiona y envejece, no s6lo pier de eficacia de frenado, sino que al necesitar frenar mas fuerte estare- ‘mos castigando mis al disco, que también sufre su desgaste: si in- sistimos en apurar al limite las pastillas, los discos nos duraran mucho menos (y son bastante més caros que las pastillas). El cambio de éstas es sencillisi- ‘mo, en algunas motos, y en otras implica desmontar las pinzas de su alo- jJamiento porque no existe otro acceso posible. En todos los casos, reco- ‘mendamos limpiar previamente la zona, preferentemente con agua peto, sino es posible, con aire a presién, en la zona de verificacidn de presiones de una estacién de servicio, por ejemplo, y evitando respirar el polvo que saldra despedido. EI siguiente paso consistira en abrir las pastillas empujando con una mano la pinza y sujetando el disco con la contraria, a lado y lado, para que: los pistones vuelvan a sus alojamientos tanto como sea posible. De esta forma, podremos sacar ficilmente las pastillas viejas y habremos dejado espacio para las nuevas (obviamente de mayor espesor). ‘Normalmente existird algin mecanismo de seguridad que mantendr las pastillasfijas en la pinza, por ejemplo un eje con presillas que deberemos: retirar, y también habra algin tipo de sistema para evitar ruidos por vi- bracién de las pastillas en la pinza, normalmente una chapa metilica que las mantenga ligeramente presionadas y que se liberara al soltar el siste- ma de retencién. Algunas pinzas sujetan las pastillas dentro, y la unica forma de sacarlas es desmontando las pinzas: en general recomendamos. desmontar siempre la pinza para acceder con mayor facilidad a todas sus. partes; ademds, una vez hayamos sacado las pastillas viejas, podremos aprovechar para limpiar por dentro esa pinza, en particular, la zona de los pistones y sus retenes. Una pinza limpia ofrece una frenada precisa y evita que las pastillas tengan demasiado rozamiento con el disco cuando WS PON A PUNTO Tu MOTO no estamos accionando los frenos, alargando asf la vida de las pastillas y evitando que la moto se quede frenada en caso extremo. Mientras las pinzas estén desmontadas o sin pastillas, evitaremos alguien toque la maneta o pedal de freno correspondiente, ya que si apli- cdramos presién en ese momento, los pistones podrian salirse de sus alo- jamientos, la pinza echaria liqitido de frenos, que es muy corrosivo, y tendriamos que montarlo todo y sangrar el sistema, Por este motivo, no debemos desatender una moto si tiene las pinzas desmontadas. Una vez colocadas las pastillas nuevas, montaremos las pinzas (si ha s smontarlas previamente) y bombearemos unas cuantas veces con la maneta o pedal hasta encontrar resistencia, tras lo cual comprobaremos que el nivel de liquido es correcto. Los primeros kilé- metros que recorramos servirdn para rodar las pastillas y para que éstas se adapten a la superficie del disco (tardardn més cuanto mas viejo sea éste y més irregular su superficie), aunque ser mejor realizar frenadas de mediana fuerza, cortas y seguidas, que fuertes y prolongadas. Un CAPITULO 6 ‘Stamens te iter pedemes ‘amteinoe (ilan atc eerie ‘ecaeae. paseo tranquilo por la ciudad es la mejor manera de rodar unas pastillas dadas las condiciones del tréfico urbano. Es recomendable revisar el sangrado del sistema a la semana 0 dos semanas del cambio por si la conduccién hubiera formado o movido alguna burbuja. DISCOS DE FRENO Un disco de freno puede necesitar reemplazo porque esté en mal estado 0 porque queramos montar otro con otras caracteristicas, como en el caso de las pastillas, los hay mejores y peores. La primera razén puede debe: al desgaste (habra perdido mucho material y seré demasiado delgado) © a otro problema, como que esté alabeado ya sea debido a un golpe 0 por exceso de temperatura (y mal material). Para cambiar el disco, primero deberemos desmontar la rueda en cuya PON A PUNTO TU MOTO anta esta anclado, y ésa serd realmente la parte mas compleja de esta operacién ya que necesitaremos un caballete extra si la moto sélo dis- pone de pata lateral, Una vez la rueda quede libre, veremos qué tipo de tornillos se han utilizado para fijar el disco a la lanta, aunque lo mas habi- tual seré que sean de cabeza allen o torx: es muy importante utilizar una herramienta de buena calidad con estos tornillos, ya que suelen tener un apriete fuerte y, ademds, contar con producto fijador, una combinacién que en caso de usar una he- rramienta inadecuada nos dejara con unos tornillos con la cabeza pasada y, por lo tanto, con un problema, Si al aflojar estos tornillos notamos una resistencia notable, antes de que la cosa acabe mal, conven- dra intentarlo con un des- torgolpe: un destornillador que gira al golpearlo con un martillo y que es la so- lucién para tornillos rebel- des y dificiles. Si pasamos las cabezas y no hay forma de mover los tornillos, sera util aplicar la Hama de un soplete ~con cuidado~ para calentar la Ilanta: ademas de liberar el producto fijador usado en la ros- a, la aleacién ligera de la Hanta cuenta con un coeficiente de dilatacién mayor que el acero de los tornillos y, al aumentar de tamaio, los liberara y podremos extraerlos. Si el disco nuevo es original no hay gran cosa que comprobar, pero si es uno opcional debemos asegurarnos no sélo de que el didmetro sea el apropiado (salvo que tengamos previsto un aumento y ya dispongamos de los adaptadores correspondientes para las pinzas), sino también de que el bombeo coincida; el bombeo es la distancia del plano de la Hanta al plano del disco, distancia normalmente compensada por el buje del disco (en aleacién ligera en discos flotantes). De no ser asi nos encontra- riamos con un problema, ya que los discos no coincidirfan con las aber- turas de las pinzas al colocar la rueda. Montar los discos no tiene mayor CAPITULO & complicacién, pero usaremos fijador en las roscas de los tornillos dada la importancia que tienen estas piezas en cuanto a seguridad se refiere. LATIGUILLOS Como ya vimos en el apartado correspondiente a la seccién de manteni- ‘miento, los latiguillos originales, de goma y por lo tanto elasticos, acaban degradandose y provocando una pérdida de eficacia y de resistencia en los frenos; la presién que ejerzamos en la maneta no se convertira en su tota- lidad en potencia de frenado, sino que, en parte, se perdera hinchando di era mena Ie aigaion unvon Lect {iampe'yneceat pone PON A PUNTO Tu MOTO cchos latiguillos. La situacién empeoraré tras varias frenadas fuertes y con el liquido a mayor temperatura hasta el punto de ofrecer un tacto tan esponjoso que la frenada carezca del mordiente adecuado. Si queremos una frenada més radical y resistente, como, cn el caso de practicar una conduccién deportiva en circuito donde haremos un uso muy intensivo de los latiguillos, con- vendré cambiarlos por unos inextensibles: un tubo interior de teficn con un recubrimiento rigido de malla metilica co- nocidos con el nombre de «latiguillos metalicoso. Con éstos la presién sobre la maneta se traduce integramente en potencia de frenada, y resisten temperaturas de liquido muy altas por lo que no desfallecen, aunque conviene saber que ofrecen un tacto més brusco al frenar, cosa que habra que tener en cuenta si usamos la moto a diario, y en particular cuando acabemos de salir, con los neu- maticos frios y con mal tiempo, ya que seré mis facil provocar un bloqueo de rueda. Para cambiar los latiguillos, el primer paso es va- ciar el liquido del sistema: pondremos un tubito en cada uno de los tomnillos de sangrado, como vimos nel capitulo referido al mantenimiento de frenos, los abriremos y bombearemos hasta que no salga liquido, que recogeremos en algin envase para ti rarlo (nunca debe reutilizarse pues se contamina muy facilmente). Luego soltaremos los banjos 0 acores que unen los latiguillos a la bomba y a la pinza, alguna eventual pieza intermedia que suje- te o guic cl latiguillo, y retiraremos de la moto el latiguillo antiguo u original. Tras este paso, slo es cuestién de colocar el nuevo (planteando antes su recorrido para estudiar bien por dénde lo pasa- remos), fijar sus racores a la pinza y a la bomba, y proceder a Ilenar el circuito: podemos hacerlo vertiendo liquido en la bomba, bombeando y re- enando 0, mucho més rapido, inyectindolo con una jeringa grande o recipiente flexible desde los tornillos de sangrado, de las pinzas hacia arriba. Esto titimo ayudaré no s6lo a que el llenado sea mas rapido sino también a que sea mucho més sen- cillo conseguir el sangrado dptimo del circuito una vez leno. Para este timo, sera de gran utilidad consultar el apartado dedicado al mantenimien- to de los frenos: se trata de dar presién, abrir ligeramente el tornillo para expulsar burbujas, cerrarlo, bombear de nuevo, y asi sucesivamente hasta que sélo salga liquido sin burbujas, y a la vez afiadir liquido nuevo a la bomba a medida que sea necesario. Una vez tengamos un tacto duro en la j maneta y no salgan burbujas, daremos por coneluida la operacién, aunque | deberemos repasar el sangrado después de haber usado la moto unos dias para aseguramos de que tenemos el sistema sangrado de forma impecable y al maximo rendimiento. FRENOS DE TAMBOR: ZAPATAS Los frenos de tambor, actualmente limitados al freno tr motos econémicas y scooter, y mas ra sero en algunas amente en algin freno delante- ro, también necesitan mantenimiento. En funcién del uso, necesitaremos ! tensar su cable o varilla de mando, sobre todo en el primero (cable) puesto que éste se va estirando con el uso; de esta forma afiadiremos holgura a la que coja el sistema por desgaste de sus partes internas. Si en un freno de disco el funcionamiento esté a la vista, de forma que las pastillas muerden el disco frendndolo, en un freno de tambor es precisamente un tambor (cilindro) el solidario a la rueda, y las pastillas son las zapatas que estén en su interior, que cuando accionamos ese freno se expanden por medio de un mecanismo me (en los coches es hidréulico). Las zapatas tienen por fuera el material de friccién que muerde al tambor por dentro, frenandolo. Este sistema fue el utilizado durante muchos afios en coches y motos hasta la aparicién de los frenos de disco, y si bien tiene la ventaja de ser un mecanismo més limpio porque est cerrado, realmente tiene muchos incon- venientes: el mayor de ellos es, precisamente, la falta de refrigeracién por estar cerrado; a fin de cuentas, los frenos convierten la energia cinética de la moto en calor, y si su refrigeracién es limitada, también lo sera su capacidad de frenada. Los tambores se calientan en seguida y no expulsan tan bien el calor como un disco, por eso las motos de carre- ras antiguas llevaban frenos de tambor con acanaladuras e incluso entradas de aire para paliar ese problema. Con los discos el avance fue definitivo y hoy en dia es raro ver un freno de tambor en un vehiculo que no sea muy econémico, ya que es mis barato tirar un cable o varilla que fabricar una bomba, latiguillos y pinzas hidrdulicas A medida que las zapatas se desgasten, tendremos que ir compensando la holgura tensando el cable de mando, pero legara un punto en que las zapatas, como ocurre con las pastillas de un disco, Heguen a su limite de desgaste: esto suele indicarse con una flecha en la leva de accionamien- to, en el propio tambor. Si legamos a ese punto, tendremos que abrir el tambor y reemplazar las zapatas. El desmontaje de un freno de tambor suele ser mucho més engorroso que el de un disco y, de hecho, el cambio de pastillas puede ser muy ripido en la mayoria de modelos. El primer paso serd desmontar la rueda; en ocasiones eso ya dejara al descubierto el mecanismo interno con las zapatas, y en otras, deberemos extraer esa nico CAPITULO 6 ctonecon pectoris inert salaetoreder sare mo ‘Sarton pees Siete eet ‘motor topee parte central de la rueda desmontada. Llegado ese punto, deberemos tener cuidado con los muelles que mantienen las zapatas unidas mientras no frenamos, pues hemos de retirarlos para dejar sueltas, y poder extraer, las zapatas. Légicamente, dada la magnitud del desmontaje, deberemos tener preparadas las zapatas nuevas que se adecuen a nuestro modelo. Posterior- ‘mente, repasaremos con lija el interior del tambor, ya que se desgasta de la ‘misma forma que un disco y puede sufrir tos mismos problemas (desgaste irregular con acanaladuras, alabeo en caso extremo); e! lijado sélo serviré para preparar la superficie para el rodaje (mis largo que el de las pastillas, aunque las zapatas también duran muchos més kilémetros). Naturalmente, i hubiera problemas mas graves (el alabeo se apreciaria como con discos, ado de la superficie y un CABLES DE MANDO Hay varios componentes de la moto que pueden utilizar un mando por cable mecénico, también conocido como cable Bowden, consistente en un cable metilico flexible pero inextensible que se mueve dentro de una funda también flexible € inextensible. Asi son los cables de los frenos de una bicieleta, por ejemplo, y en las motos se usa mucho para el acelerador (pricticamente todas las motos de! mercado), el embrague (en aquellas gue no lo llevan con mando hidraulico) o el freno trasero cuando es de tambor (bastante usual en los scooter). Estos cables apenas suelen necesitar engrase ni ajuste y su tensién no varia apenas puesto que s6lo transmiten movimientos débiles, salvo en el caso del de los frenos, donde si trabajan con mas fuerza y contra un tope. Si nuestro cable de em- brague o gas se ha vuelto duro al tacto, primero comprobaremos que en toda su longitud no exista algiin problema (que esté enganchado entre otras partes, por ejemplo, el depésito de combustible y el chasis, forzindolo) ya que ésa es, en la mayoria de casos, la causa. Si no es asi, puede haberse colado suciedad y necesitar un engrase: la mejor forma de remediarlo es utilizando, por cada extremo, un pulverizador de aceite ligero (tipo wd40 0 3 en 1) y una cénula dirigida hacia el cable, sujetando la unién con un trapo viejo para cerrarla de forma que la tnica salida del aceite sea, precisamente, el interior del cable y su funda, Sera suficiente con realizar dos o tres pulverizaciones y movimientos posterio- res para dejar penetrar el aceite fluido. Aunque no realizan mucha fuerza, sera necesario tensar los cables de vez en cuando: el embrague cuenta con un tensor en la maneta, y el acelerador con el suyo | _enuno de tos cables (suelen ser de ida y vuel- ta, desde el puito hacia la mariposa de gases). En el embrague mantendremos siempre unos milimetros libres de holgura al final del reco- rrido de la maneta, para no dejar la moto par- cialmente desembragada y gastar répidamente sus discos de embrague, pero no tanta holgura como para que al llevar la maneta hasta el puiio no esté del todo desembragado (lo que provocaria dureza en el cambio de marchas, al no estar del todo desenganchado el cambio de! motor). Esto tltimo es algo que se debe observar pues es bastante habitual en personas de manos pequefias 0 poco fuertes con motos de embra- gues algo duros, que acaban soltando tanto la maneta que siempre estén cambiando a medio embrague, castigando innecesariamente el cambio de marchas (y su pie, porque la palanea estar mas dura). En el acele- rador deberemos dejar unos milimetros de recorrido libre para poder tener juego de mufieca al frenar. Es muy importante que asi sea para no acelerar ligeramente cuando vayamos a frenar; ademds deberemos comprobar que, con el motor en marcha, éste no se acelera girando de tope a tope (lado a lado) e! manillar, algo que ocurriria con demasiada poca holgura, al retorcerse el cable de mando. En caso de rotura, algo que no sucede habitualmente, las marcas suelen vender el cable integro para favorecer el cambio y, en ese caso, tras el ajuste inicial, deberemos repasar las holguras tras unos dias 0 semanas de uso, cuando el cable y su funda se hayan acomodado. ADENA oe CAPITULO 6 ACEITE DE MOTOR Y FILTRO ‘Ya comentamos en el capitulo sobre mantenimiento que los aceites moder- nos de motor, de base sintética y aditivos muy estudiados, pueden resistir decenas de miles de kilémetros de uso sin ver mermadas sus propiedades lubricantes, detergentes y refrigerantes. En realidad, no queda tan lejos el dia en que los motores estén sellados y s6lo haya cambios de aceite tras mu- chos miles de kilémetros, tal vez s6lo una 0 dos veces a lo largo de la vida del vehiculo, entre otras cosas para generar menos residuos perjudiciales para el medio ambiente, Sin embargo, la (inica forma de mantener limpio tun motor por dentro e8, precisamente, reemplazando el aceite que circula por su interior y arrastrando con éste particulas metilicas, restos de carboni- Ila, eteétera, El filtro de aceite recoge parte de esta suciedad (aquellas parti- culas de mayor tamafio), pero otra se mantiene flotando en suspensién en el aceite y es al cambiarlo cuando el motor se desprende de dicha suciedad. Precisamente por este motivo recomendamos reemplazar siempre el fil- tro con el aceite, aunque algunos fabricantes aconsejan hacer un cambio de filtro cada dos o tres de aceite. En cuanto a los intervalos, en principio, seguiremos las recomendaciones del fabricante, pero somos partidarios de hacerlo interpretando esas instrucciones: en los scooter, por ejemplo, los fabricantes recomiendan visitas muy regulares al taller (en algunos casos tan frecuentes como cada 2 000 kilémetros) para asegurarse de que el cliente no deja el motor sin aceite, ya que con la escasa capacidad de sus cdrteres eso seria posible; a veces esta visita sélo sirve para verificar el nivel o rellenar en el caso de que sea necesario y eso lo podemos hacer nosotros perfectamente. PON A PUNTO Tu MOTO Si controlamos con frecuencia el nivel de aceite en nuestro motor, usamos aceite de calidad correcta (calificacién API SJ) y no necesita- mos que nos sellen el libro de revisiones porque nuestra moto ya no est en garantia, podemos espaciar los cambios de aceite de un motor de scooter (capacidad del cérter entre 1 y 2 litros) a los $000 0 6 000 kilémetros, y en caso de motores con mas aceite (scooter grandes que contengan entre 2 y 3 litros de aceite, y motores de marchas de 4 o mas litros de capacidad) perfectamente hasta los 10 000 o 12 000 kilémetros. La capacidad del cdrter esta siempre indicada en éste, cerca del tapén de rellenado. EI mayor problema de un cambio de aceite es qué hacer con el usado y sucio: deberemos recogerlo en un contenedor y llevarlo a un centro de recogida o reciclaje (cualquier taller), y lo mismo se aplica al filtro (légi- camente lo sacaremos Ileno de aceite usado). Por lo demas, esta operacion no reviste mayor dificultad: en el extremo inferior del carter estara el tomillo de vaciado que suele montar una arandela deformable (de cobre © latén, metales blandos) que convendra tener nueva para después de! vaciado y asegurar de esta forma el perfecto sellado. En motos con care- nado completo posiblemente tengamos que abrir la parte inferior de éste, pero aparte de esto, de colocar un recipiente para recoger el aceite viejo, y de retirar el tapén de Ilenado para que el aceite salga libremente, no habré mayor problema. Si lo hacemos con el motor caliente (pero no muy caliente) el vaciado sera mejor, pero deberemos usar guantes para evitar posibles quemaduras y tendremos cuidado en dénde vertemos el aceite. El vaciado nunca debera hacerse después de rodar con la moto bastante tiempo porque la temperatura del lubricante podria ser superior a los 100 °C y pocos plas- ticos aguantarian. REFRIGERANTE De igual forma que el cambio de aceite es la tinica forma de limpiar el motor por den- tro, hay partes de éste a las que el aceite no Mega pero por las que circula otto liquido: el reftigerante. No son partes tan delicadas, sino el interior de las paredes de los cilindros CADENA, FRENOS ¥ Liguin SS CAPITULO 6 y la culata, a través de las cuales el liquido absorbe el exceso de calor procedente de las combustiones y la friccién interna. Con el tiempo estas paredes acumulan suciedad y éxido, y pierden su capacidad de evacuar calor, lo que puede llegar a ser un problema en motores delicados o de grandes prestaciones. La jinica forma de limpiar ese sistema es vacidn- dolo y echando liquido nuevo; el vaciado también debera llevarse a cabo cuando tengamos que realizar alguna operacién mecénica de importancia que implique desmontar el motor, como levantar la culata El tornillo de vaciado est en un punto bajo el circuito que, precisamen- te, es donde esta la bomba de agua (movida por el cigiiefial, habitualmente por medio de un engranaje y en uno de los laterales delanteros del carter). Como con el aceite, desmontaremos aquellas partes del carenado que sea necesario y prepararemos un recipiente adecuado debajo de la moto antes de aflojar el tornillo y abrir el tapén del radiador o vaso de expansién. En este caso es importante hacerlo en frio, ya que este sistema esta bajo pre~ sin en caliente. Cuando queramos rellenar, bastara colocar ese torillo de vaciado y echar liquido nuevo por arriba hasta tener un nivel correcto cn el vaso de expansién; a continuacién accionaremos el motor de arran- {que unos segundos (con el encendido desconectado para no arrancar, s6lo queremos mover un poco la bomba) y comprobaremos de nuevo el nivel afladiendo el liquido que sea necesario. 128 PON A PUNTO TU MOTO Que hemos aprendido Una cadena con un buen mantenimiento puede durar mucho, pero en mal estado puede provocar un accidente: no la estiraremos y montaremos una remachada por seguridad. © Siempre que reemplacemos la cadena debemos cambiar el pifin y la corona: los viejos acelerarian el desgaste de una cadena nueva. ¢ Cambiar las pastillas de freno es sencillo y no debemos apurarlas si no queremos dafiar los discos (mucho mas caros y complejos de cambiar). * Con frenos de tambor es necesaria una revision frecuente de la tensién del cable de mando, aunque aguantan mas kilémetros sin otro mantenimiento. Al primer sintoma de mal estado, cambiaremos los latiguillos de goma: unos inextensibles daran una frenada resistente y eficaz, aunque algo mds brusca. ¢ El aceite del motor tarda mucho en degradarse, pero la Unica forma de eliminar la suciedad interna en la mecanica es cambiandolo. ¢ Tras la garantia, y con el motor ya rodado, podremos espaciar mas los cambios de aceite, sobre todo en los scooter, a condicion de vigilar su nivel. CADENA, FRENOS ¥ LigummO c Crete toe ce Cel Seguimos con otro capitulo dedicado a reparaciones que forman parte del mantenimiento de nuestra moto 0 nuestro scooter. En este aso aprovecharemos para comentar como mejorar alguna de sus caracteristicas o prestaciones. ‘Trataremos, como en el capitulo anterior, algunas operaciones ‘que muchos prefieren dejar en manos de profesionales pero que, como veremos, podemos evar a cabo nosotros mismos con un minimo de conocimientos, precauciones y herramientas. En este capitulo veremos cémo revisar o reemplazar el yembrague automiticos) de un scooter, y el aceite dela horquilla y sus retenes, ademas de los mportantes y olvidados rodamientos de la direct CAPITULO 7 El accese al emtrage pape eemontar tpn acarmes al acale dl matey desengancharomes I) al mande ol xt ns Deni pe nt ergue (a ocec eis on ale od) snes de peta (2) le erion ge an svete. au rater inte) ‘evs eejane shtoniicnomes le rin oe clean ot mucie, aie de dnmetario swe eadate EMBRAGUE Para no tener que arrancar el motor cada vez que nos ponemos en mar- cha y pararlo en cada detencién, es necesario un mecanismo que separe el motor en si (giro del cigieftal) de la transmisién: ésa es la funcién del embrague. Todos los embragues funcionan por friccién, como los frenos, de forma que uno o mas discos que giran solidarios con el cigtiefial del motor arrastran (por friccién) a uno 0 més discos que moveran el cambio. La transmisién que mueve el embrague a partir del cigiefial (generalmen- te un engranaje, aunque algunas veces una cadena o correa dentada) es la «transmisién primariay, y el eje del cambio movido por el embrague es el «

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