Psicología de la vejez

Erik Erikson – 8° estadio

8° estadio: Integridad versus desesperación.

Erikson reconoce haberlo conceptualizado en su mediana edad, cuando todavía no lo había

protagonizado. Reconoce también que la esperanza de vida en ese momento era mucho
menor.

Va a definir la integridad como “sentimiento de coherencia y totalidad” que madura

gradualmente. Es “la coincidencia de un solo ciclo vital con un solo segmento de la historia”.

Fuerza que lo mueve: La sabiduría, el adulto reconoce y sabe aceptar las limitaciones,
cuando aceptar el cambio, y cuando oponerse al mismo, cuando llamarse a silencio y
cuando luchar.

Contracara: El desdén, que se expresa en el desprecio hacia los más jóvenes y la idealización
de “los tiempos pasados”.

Peligro: El dogmatismo, la inflexibilidad, “en mis tiempos”.

Para Erikson, el paso a la tercera edad no pone fin a la generatividad; cada vez más las
personas mayores permanecen implicadas en los asuntos del mundo durante más tiempo.
Las personas mayores protagonizan períodos productivos y creativos más extensos y esto
es cada vez menos excepcional.

Destaca que los adultos en este estadio buscan lograr un sentido de integridad, coherencia
y totalidad de la vida, en vez de dar vía a la desesperación sobre la incapacidad para volver
a vivirla de manera diferente.

Joan Erikson – 9° estadio

Ya fallecido Erikson, Joan se da cuenta que al cumplir noventa años, “se despertaron en
tierra extraña”. A este estadio lo denominó gerotrascendencia. El concepto fue
simultáneamente planteado por el gerontólogo sueco Tornstam.

La gerotrascendencia es “un cambio en la metaperspectiva de una visión materialista y

racional a una más cósmica y trascendente, acompañada por lo general de un incremento

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de la satisfacción vital”. Hay debilitamiento, una cierta pérdida de autonomía. Puede o no
tener connotación religiosa.

En la gerotrascendencia, el individuo experimenta una redefinición del yo. Puede

eventualmente experimentar una pérdida de interés por cosas materiales y una mayor
necesidad de meditación solitaria. Por ejemplo: para personas de más de 90 años, el tiempo
puede circunscribirse a ahora o a la semana que viene y llevar a perspectivas diferenciadas.

La psicogerontología argentina: los aportes de Leopoldo Salvarezza

Salvarezza va a señalar la existencia de un prejuicio en nuestra sociedad hacia las personas
mayores. Tomando la denominación ageism, que acuñara Robert Butler en 1973, Salvarezza
lo traduce por viejismo. Va a definirlo como el conjunto de afirmaciones, estereotipos y
discriminaciones que se aplican a los viejos, simplemente en función de su edad.

Van a encontrar en algunos textos la referencia a este prejuicio como “edadismo”,

traducción literal de ageism. Sin embargo, edadismo en castellano debería reservarse al
prejuicio por la edad, cualquiera sea (mocoso, chiquilín, irresponsable, inexperto,
principiante). Señala el daño que implica homologar vejez con enfermedad.

Recalca también que este viejismo puede transformarse en gerontofobia, miedo irracional
a entrar en contacto con personas mayores.

Teorías psicosociales en gerontología

Salvarezza va a focalizarse en dos teorías que son las que más impacto han tenido.

La teoría, mal llamada, del desapego. La traducción correcta es descompromiso de los años
50, proviene de la sociología funcionalista estadounidense. Fue muy criticada y dio origen a
la idea de residencias geriátricas alejadas de los centros urbanos, al “merecido descanso”,
al retiro, a la pasividad y a la invisibilización de la población mayor.

La teoría de la actividad de los años 70 dio origen a la creación de centros sociorecreativos

para adultos mayores en los barrios, para generar “nuevos roles para las personas mayores”
y la reubicación de las residencias, también en lugares de fácil acceso, para favorecer la
inserción en la comunidad. Salvarezza propone en vez de llamar a esta teoría “del apego”,
denominarla “de la actividad”, tal como la pensaron sus creadores, y reservar apego para la
teoría de Bowlby.

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Son muchas las teorías explicativas de los aspectos psicosociales del envejecimiento. Las
mencionadas son las más conocidas.

Hoy usamos la teoría de Paul Baltes, del potencial humano, continuidad del énfasis en las
ganancias a lo largo de toda la vida. Esto nos lleva a la sabiduría, como un estadio del
desarrollo humano que caracteriza a la vejez. Consiste en “la convergencia de medios y fines
para alcanzar el más alto bien personal y el del conjunto de la sociedad”.

Se adquiere a través del SOC, modelo que describe las estrategias para lograr un manejo
eficiente de la vida y consiste en:

S. de Selección: se eligen las metas, se seleccionan los objetivos.

O de Optimización: se refinan y perfeccionan solo las metas seleccionadas, llevándolas al

máximo nivel.

C de Compensación: se utilizan medios alternativos que sustituyan eventuales pérdidas.

Se logra así el desarrollo del potencial que hace necesario un aprendizaje a lo largo de toda
la vida.

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