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Antologia Preplatonicos 2010
Antologia Preplatonicos 2010
1º cuatrimestre 2010
Prof. Dra. Graciela E. Marcos
PARTE A: PRESOCRÁTICOS
I. HERÁCLITO
DK 22B1
Aunque este mi discurso (lógos) existe siempre
los hombres se vuelven incapaces de comprenderlo
tanto antes de oírlo como una vez que lo han oído;
pues aun cuando todo sucede conforme a este discurso
parecen no tener experiencia de él, teniéndola sin embargo
de palabras y obras tales
como las que yo expongo
cuando distingo cada cosa según su naturaleza
y exhibo cómo es;
pero al resto de los hombres
les pasa inadvertido cuanto hacen despiertos,
de la misma manera que les pasa inadvertido cuanto hacen mientras duermen.
DK 22B2
Mientras este mi discurso es común, la mayoría vive como si tuviera una mente propia.
DK 22B12
Para los que entran en los mismos ríos,
aguas fluyen otras y otras.
DK 22B17
La mayoría no repara en aquellas cosas con las que se topa, ni las conoce aunque las haya
aprendido, pero así lo imagina.
DK 22B32
Uno, lo único sabio (sophón), quiere y no quiere ser llamado con el nombre de Zeus.
DK 22B34
Incapaces de comprender habiendo oído,
a sordos se asemejan;
de ellos da testimonio el proverbio
‘aunque presentes, están ausentes’.
DK 22B40
La polimathía no enseña a comprender;
lo habría enseñando, si no, a Hesíodo y a Pitágoras,
así como a Jenófanes y a Hecateo.
DK 22B41
Una sola cosa lo sabio: conocer el designio que gobierna todo a través de todo.
DK 22B50
No escuchándome a mí sino al discurso
es sabio convenir (homologeîn) que todas las cosas son una.
DK 22B51
No entienden cómo lo divergente converge consigo mismo: armonía de tensiones opuestas,
como la del arco y la lira.
DK 22B53
Guerra (pólemos)
de todos padre es, de todos rey;
a unos como dioses coloca, a otros, hombres,
a unos esclavos hace, a otros, libres.
DK 22B54
Armonía invisible, mejor que la visible.
DK 22B55
De cuantas cosas hay vista, audición, aprendizaje, a ellas prefiero (hóson ópsis akoé
máthesis, taûta egò protiméo).
DK 22B56
Se engañan los hombres acerca del conocimiento de las cosas visibles, de la misma manera
que Homero, que fue [considerado] el más sabio de todos los griegos. A él, en efecto, unos
niños que mataban piojos lo engañaron, diciéndole: ‘cuantos vimos y atrapamos, tantos
dejamos; cuantos ni vimos ni atrapamos, tantos llevamos’.
DK 22B57
Maestro de la mayoría, Hesíodo;
están seguros que éste sabe la mayor parte de las cosas,
quien no llegó a conocer el día y la noche:
en efecto, son una [sola cosa].
DK 22B61
Mar, agua purísima e impurísima;
para los peces, potable y saludable,
para los hombres, impotable y mortífera.
DK 22B67
El dios:
día noche, invierno verano,
guerra paz, saciedad hambre,
toma diferentes formas, al igual que el fuego,
que, cuando se mezcla con especias, es llamado según el aroma de cada una.
DK 22B80
Hay que saber
que la guerra es común,
y que la justicia es lucha,
y que todo sucede por lucha y necesidad.
DK 22B93
El señor de quien hay en Delfos el oráculo,
no dice ni oculta, sólo da signos”
DK 22B94
El sol no transgredirá sus medidas, si no, las Erinias, ayudantes de Díke, lo pondrán en
descubierto.
DK 22B101a
Los ojos son testigos más exactos que los oídos (ophthalmoì tôn óton akribestéroi
mártyres).
DK 22B102
Para el dios todas las cosas son bellas, buenas y justas; los hombres, en cambio, consideran
a unas injustas, a otras justas.
DK 22B107
Malos testigos son para los hombres los ojos y los oídos de los que tienen almas bárbaras
(kakoì mártyres anthrópoisin ophthalmoí kaì a barbárous psychàs echónton).
DK 22B108
De cuantos he escuchado los discursos,
ninguno llega al punto de comprender
que [lo sabio] es distinto de todas las cosas.
DK 22B114
Los que han de hablar con comprensión
es necesario que se afirmen en lo que es común a todos,
así como una ciudad en su ley,
y mucho más firmemente aún;
todas las leyes humanas, en efecto, se nutren
de una sola, la divina;
extiende ésta su poder tanto como quiere
y es suficiente para todas
y aún excede.
DK 22B123
La naturaleza (phýsis) ama ocultarse.
DK 22B125
También el ciceón se descompone si no se lo agita.
DK 22B129
Pitágoras, hijo de Mnesarco, cultivó la ciencia más que todos los otros hombres, y
haciendo una selección de tales tratados, forjó una sabiduría propia: polymathía, saber
equivocado.
II. PARMÉNIDES
DK 28B1
1 Las yeguas que me conducen hasta donde llega mi ánimo,
2 me impulsaron, pues, guiándome, me llevaron hacia el camino
3 de la diosa, lleno de signos, la cual, respecto de todo, conduce aquí al hombre
que sabe.
(...)
22 La diosa me recibió amablemente, tomó con su mano
23 mi mano derecha y, dirigiéndose a mí, pronunció estas palabras:
24 ¡Oh, joven, acompañado por guías inmortales y por l as yeguas
25 que te conducen llegando hasta mi morada,
26 salud! No es un destino funesto el que te ha empujado a tomar
27 este camino (que, en efecto, se encuentra fuera y separado del
sendero de los hombres),
28 sino Themis y Dike. Es necesario, entonces, que te informes de todo:
29 tanto del corazón imperturbable de la bien redondeada verdad,
30 como de las opiniones de los mortales, en las que no hay verdadera
convicción.
31 No obstante, también aprenderás esto: cómo hubiera sido necesario
32 que las opiniones existiesen realmente abarcando todo incesantemente
DK 28B2
1 Y bien, yo diré –y tú, que escuchas mi propuesta, acógela-
2 cuáles únicos caminos de investigación hay para pensar:
3 uno, que es y que no es posible no ser, es el camino de
4 Persuasión, pues acompaña la verdad;
5 el otro, que no es y que es necesario no ser. Te enuncio
6 que este sendero es completamente incognoscible, pues
7 no conocerás lo que no es (pues es imposible) ni lo
8 mencionarás.
DK 28B3
... pues lo mismo es pensar y ser.
DK 28B6
1 Es necesario decir y pensar que hay ser, pues es posible
2 ser, y la nada no es. Esto te ordeno que proclames;
3 pues <comenzarás> por este primer camino de investigación
4 y luego por aquel por el que deambulan los mortales que nada saben,
5 bicéfalos, pues la carencia de recursos
6 conduce en sus pechos al intelecto errante. Son llevados
7 como ciegos y sordos, estupefactos, gente sin capacidad de juzgar,
8 que considera que ser y no ser son lo mismo y no lo mismo.
9 El camino de todos ellos vuelve al punto de partida.
DK 28B7
1 Pues nunca dominará esto: que haya no ser. Aleja tú
2 el pensamiento de este camino de investigación,
3 y que la inveterada costumbre no te obligue, a lo largo
4 de este camino, a utilizar el ojo que no ve, el oído que
5 resuena, y la lengua; juzga con la razón la combativa
6 refutación que te he enunciado.
DK 28B8
1 Queda una sola propuesta de camino: que es. En el mismo hay muchas pruebas: lo
que es, es inengendrado e incorruptible, total, único, inconmovible y terminado.
5 Ni fue ni será, sino que es ahora, completamente homogéneo, uno, continuo. ¿Qué
génesis le buscarás? ¿Cómo y de dónde habría aumentado? No te permito que digas
ni que pienses que del no ser, pues no es decible ni pensable que haya no ser. ¿Qué
necesidad lo habría
10 impulsado a crecer antes o después, comenzando de la nada? De este modo, es
necesario ser absolutamente, o no; la fuerza de la convicción no permitirá que, a
partir del ser, nazca otra cosa a su lado, pues ni nacer ni morir le permite Dike,
aflojando las cadenas, sino que lo tiene.
15 El examen decisivo acerca de estas cosas reside en lo siguiente: es, o no es. Se ha
decidido, por necesidad, que uno sea impensable e innombrable (pues no es el
camino verdadero), y que el otro exista y sea auténtico.
19 ¿Cómo lo que es, podría ser después? ¿De qué forma podría nacer? Pues si nació, no
está presente, ni tampoco si alguna vez será. La génesis se extingue y las destrucción
es desconocida. Ni es divisible, pues es completamente homogéneo. No hay algo en
mayor grado, lo cual impediría su cohesión, ni algo en menor grado: está totalmente
colmado de lo que es
25 Es totalmente continuo: lo que es toca a lo que es. Inmóvil en los límites de grandes
cadenas, está presente sin comienzo y sin fin, pues la génesis y la destrucción están
muy alejadas: las rechazó la convicción verdadera.
29 Permaneciendo idéntico en lo mismo, está en sí mismo. Así, permanece indemne,
pues la poderosa Necesidad lo tiene en las cadenas del límite que lo clausura
alrededor, porque no es lícito que lo que es sea imperfecto.
33 En efecto: no tiene carencia alguna; si la tuviera, carecería de todo
34 Lo mismo es pensar y aquello por lo cual hay pensamiento; pues sin lo que es, en lo
que está expresado no encontrarás el pensar: no hay ni habrá nada aparte de lo que
es, pues la Moira lo obliga a permanecer total e inmóvil. Por eso son nombres todo
cuanto los mortales han establecido, en la creencia de que es verdadero: nacer y
morir, ser y no ser, cambiar de lugar y alterar el color exterior.
42 Pero como hay un límite supremo, es perfecto por doquier, semejante a la masa de
una esfera bien redondeada, completamente equidistante a partir del centro; pues no
es posible que exista en grado mayor o menor aquí o allá.
46 Pues lo que no es, que le impediría alcanzar la homogeneidad, no existe; y lo que es
no es de tal modo de tener aquí o allá mayor o menor cantidad de lo que es, porque
es completamente inviolable.
49 Igual por doquier a sí mismo, está homogéneamente en sus límites.
50 Acá termino para ti el razonamiento confiable y el pensamiento acerca de la verdad;
a partir de acá, aprende las opiniones de los mortales, escuchando la engañosa
ordenación de mis palabras.
53 Ellos establecieron dos puntos de vista para dar nombre a las apariencias externas,
con los cuales no han hecho una unidad -en esto se han equivocado-;
55 juzgaron la existencia de formas opuestas y de ellas ofrecieron pruebas separadas las
unas de las otras; por una parte, el etéreo fuego de la llama, suave y muy liviano,
completamente semejante a sí mismo, pero no semejante al otro; por otra parte, lo
que es en sí su contrario, la noche oscura, forma espesa y pesada.
60 Te expreso toda esta ordenación cósmica probable para impedir que se te llegue a
imponer algún punto de vista humano.
-- * --
III. PROTÁGORAS
Fuentes
Aristóteles, Metafísica, trad. de T. Calvo Martínez, Madrid, Gredos, 1994.
Heráclito: Traducción de Francisco J. Olivieri en Heráclito. Selección de textos y
fragmentos, Serie Cuadernos de filosofía antigua, 3, Buenos Aires, Biblos, 1979.
Parménides: Traducción de Néstor-Luis Cordero.
Platón, Eutidemo, trad. de C. Mársico y H. Inverso, Madrid, Losada, 2009.
Platón, Crátilo, trad. de C. Mársico, Buenos Aires, Losada, 2005.
Platón, Teeteto, trad. de N. L Cordero y M. D. Ligatto (en Cornford, F., La teoría platónica
del conocimiento. El Teeteto y el Sofista: traducción y comentario, Buenos Aires, Paidós,
1968).
Sexto Empírico, Esbozos pirrónicos, trad. de A. Gallego Cao y T. Muñoz Diego, Madrid,
Gredos, 1993.
Sexto Empírico, Contra los profesores, trad. de J. Bergua, Madrid, Gredos, 1997.